Design thinking’ es un método que sitúa en el centro a los clientes con la finalidad de
conseguir resultados innovadores, centrándose en el diseño y no en el resultado final.
Así, se detectan las necesidades de las personas y se hayan soluciones innovadoras. La clave está en sensibilidad del diseñador y su método para satisfacer las necesidades de las personas, dando con soluciones tecnológicamente factibles y viables.
¿Y si aplicamos este método en la nueva gestión de personas? Situamos a los
empleados en el centro y buscamos nuevas formas de abordar los problemas en el departamento de recursos humanos. Pero, ¿cuáles son las características de este ‘Human Design Thinking’?
Innovar desde la necesidad de los empleados.
Proceso antropocéntrico que sitúa el ser humano en centro. Y hablamos de
‘ser humano’, no cliente o empleado. Reflexionar a partir de estas bases en el diseño del programa de Recursos Humanos.
Orientar a los empleados en aplicar el ‘Design Thinking’ en sus procesos. Que
estudien al cliente en profundidad, detecten sus necesidades y hallen soluciones innovadoras a sus problemas.
Diseñar un programa de Recursos Humanos que vele por una cultura
corporativa ejemplar en la empresa y un buen clima laboral.
Crear un sistema de ascensos, extras y aumentos. Incentivar y premiar a los
empleados ante un trabajo bien hecho y, así, conservar el talento.
Enfoque creativo y multidisciplinar. Arriesgar y pensar ‘outside the box’. Las
nuevas formas de pensar requieren nuevas formas de crear.
Aumentar el vínculo emocional, ‘engagement’, de los empleados hacia la
empresa y sus clientes.
Diseñar nuevos modelos de relación de los empleados con los directivos. No
sólo se trata de innovar en los procesos, también es cuestión de actitud.
Dotar de una mayor libertad al empleado. Apostando por la flexibilidad y
la conciliación laboral y familiar.
Proyección futura, es decir, ser capaz de adelantarnos a las necesidades de
las personas en una organización. Estudiar su comportamiento y detectar qué necesitan para un mejor funcionamiento de la empresa.
La empatía como herramienta clave en el ‘Human Design Thinking’. Buscar lo
que de verdad motiva a nuestros empleados. Un empleado contento es un empleado productivo. Todas estas características pueden aplicarse a cualquier empresa, independientemente de su dimensión. Se trata de adaptarlas o, incluso, crear nuevas, acordes a su filosofía y cultura. Ante todo se trata de diseñar un programa creativo e innovador, con el objetivo de satisfacer y motivar al engranaje de las empresas: sus empleados.