Sei sulla pagina 1di 25

LA ALEGRÍA DEL EVANGELIO —La contemplatio resulta difícil de expresar y de explicar.

Se
trata de demorarse con amor en el texto; más aun, de pasar
Carlo María Martini SJ del texto y de su mensaje a la contemplación de Aquel que
EE. Por radio habla a través de cada página de la Biblia: Jesús, Hijo del
Padre, dador del Espíritu. La contemplatio es adoración,
alabanza, silencio ante Aquel que es el objeto último de mi
1. LA PRÁCTICA DE LA «LECTIO DIVINA oración, el Cristo Señor vencedor de la muerte, revelador del
Padre, mediador absoluto de la salvación, dador de la alegría
En la carta pastoral a la diócesis para el bienio 1987-1989, con del Evangelio.
el título Dios educa a su pueblo, escribí que el Espíritu En la práctica, los tres momentos no son rigurosamente
Santo—el que «habló por los profetas» e inspiró la Escritura distintos, pero la subdivisión es útil para los que necesitan
— nos sigue hablando hoy a nosotros. Y añadí que la comenzar o reanudar esta práctica. Nuestra oración es como
educación en la escucha del Maestro interior tiene que pasar un hilo que va enlazando nuestras jornadas una tras otra, y
por el ejercicio de la meditación orante sobre la Palabra de puede suceder que, sobre un mismo texto de la Escritura, un
Dios, por la práctica de la lectio divina. Me gustarle ahora, día nos detengamos especialmente en la meditatio, mientras
como introducción, exponer el método de la lectio divina que que al día siguiente pasamos en seguida a la contemplatio.
propuse en los Ejercicios a los jóvenes para leer el relato de Sin embargo, esta triple distinción sólo expresa bastante
Caná del evangelio de Juan. Luego intentaré captar sus rudimentariamente el dinamismo de la lectio divina, que en
relaciones con el método clásico de oración que utiliza la algún otro libro he explicado en toda su amplitud. Una
triple fórmula: memoria, entendimiento, voluntad. amplitud que, de hecho, prevé ocho pasos progresivos: lectio,
La lectio divina es un acercamiento gradual al texto bíblico y meditatio, oratio, contemplatio, consolatio, discretio,
se remonta al antiguo método de los Padres, que a su vez son deliberatio, actio. Creo que será oportuno una breve alusión a
herederos del uso rabínico. cada uno de ellos:
La subdivisión clásica en memoria, entendimiento y voluntad —La oratio es la primera plegaria que nace de la meditación: ¡
es muy antigua y la desarrolló especialmente san Agustín en Señor ¡Hazme comprender qué valores permanentes dc este
lo que respecta al tema de la memoria. Más tarde esta triada texto me faltan! ¡Hazme comprender cuál es tu mensaje para
pasó a ser sinónimo de un proceso meditativo sobre la mi Vida!
Escritura o sobre una verdad de fe. Y en un momento determinado, esta plegaria se concentra en
Recordaré también, brevemente, el método de la adoración y en contemplación del misterio de Jesús, del
«contemplación evangélica», término que se emplea Rostro de Dios. La oratio puede expresarse también en
ordinariamente para indicar el modo de meditar una página petición de perdón y de luz o en ofrecimiento.
del evangelio; tenemos un ejemplo significativo en el librito de —La consolatio es muy importante para nuestro camino de
Los Ejercicios Espirituales de Ignacio de Loyola, que a partir oración, y san Ignacio de Loyola habla muchas veces de ella
de la Segunda Semana habla de «contemplación», ya que el en su libro de los Ejercicios Espirituales. Sin este elemento la
trabajo del entendimiento va dejando sitio, prevalentemente, a oración pierde sal, gusto. La consolatio es el gozo de orar, es
la implicación existencial y orante en la escena evangélica. el sentir íntimamente el gusto de Dios, de las cosas de Cristo.
Todo esto nos resultará útil para comprender mejor cual es la Es un don que ordinariamente se produce en el ámbito de la
característica específica de la oración cristiana. lectio divina, aunque evidentemente el Espíritu Santo es libre
La «lectio divina» de concederlo cuando quiera.
El método patrístico de la lectio divina es simplicísimo y se lo Sólo de la consolatio brotan las opciones valientes de pobreza,
recomiendo siempre a los jóvenes para entrar en la oración. castidad, obediencia, fidelidad, perdón, porque es el lugar y la
Fundamentalmente comprende tres grandes pasos o atmósfera propia de las grandes opciones interiores. Lo que
momentos sucesivos: no viene de este don del Espíritu dura poco, y fácilmente es
—La lectio consiste en leer y releer la página de la Escritura, fruto de un moralismo que nos imponemos a nosotros
poniendo de relieve sus elementos fundamentales. Para ello mismos.
aconsejo leer con la pluma en la mano, subrayando las —La discretio manifiesta con mayor claridad aún la vitalidad
palabras que me impresionan o bien marcando con signos de la consolatio. En efecto, mediante el gusto del Evangelio,
gráficos los verbos, las acciones, los sujetos, los sentimientos mediante una especie de olfato espiritual para las cosas de
expresados o la palabra clave. Cristo, nos hacemos sensibles a todo lo que es evangélico y a
De esta forma se estimula nuestra atención y se ponen en lo que no lo es. Se trata, por tanto, de un discernimiento
movimiento la inteligencia, la fantasía y la sensibilidad, importante, porque no estamos llamados tan sólo a observar
haciendo que un trozo, considerado quizá como archiconocido, los mandamientos en general, sino a seguir a Jesucristo. Y el
se nos muestre como nuevo. Después de llevar muchos años seguimiento no conlleva una evidencia inmediata en las
leyendo el evangelio, me sucede, por ejemplo, que, al volver opciones de cada día si no hemos entrado, por así decirlo, en la
sobre él, siempre descubro cosas nuevas, precisamente mente de Jesús, si no hemos saboreado su pobreza, su cruz, la
mediante el método de la lectio. humildad de su nacimiento, su perdón.
Este primer trabajo puede ocupar bastante tiempo si estamos Esta capacidad de discernir en las emociones ordinarias y en
abiertos al Espíritu: se coloca el relato leído en el contexto los movimientos del corazón la marca evangélica es un don
más amplio, bien sea de los trozos próximos a él, bien del tan grande que san Pablo lo pedía para todos los fieles: «Que
conjunto de un libro, bien de toda la Biblia, para comprender recibáis abundancia de sensibilidad—páse aisthései, en
qué es lo que quiere decir. griego—para que podáis distinguir siempre lo mejor, lo que
—La meditatio es la reflexión sobre los valores perennes del agrada a Dios y lo que es perfecto» (cf. /Flp/01/09-10;
texto. Mientras que en la lectio asumo las coordenadas /Rm/12/02). Hoy la Iglesia tiene una enorme necesidad de la
históricas, geográficas y hasta culturales del pasaje, ahora se discretio, ya que sus opciones decisivas no se refieren tanto al
plantea la pregunta: ¿Qué me dice a mi? ¿Qué mensaje, bien o al mal (no matar, no robar), sino a lo que es mejor para
referido al aquí y ahora, propone este pasaje con la autoridad el camino de la Iglesia, para el mundo, para el bien de la
que le da el ser Palabra del Dios vivo? ¿De qué modo me gente, para los jóvenes, para los niños.
provocan los valores permanentes que subyacen a las —La deliberatio es un paso sucesivo. De la experiencia
acciones, las palabras, los temas…? interior de la consolación o de la desolación aprendemos a
discernir y, a continuación, a decidir según Dios. Si método patrístico y sobre la subdivisión clásica, con una
analizamos atentamente las opciones vocacionales, nos damos mayor insistencia en el aspecto oración-contemplación que
cuenta de que siguen, aunque sea insconscientemente, este surge a medida que avanza la capacidad y el camino de la
proceso. La vocación es, efectivamente, una decisión tomada a oración
partir de lo que Dios ha hecho sentir y de la experiencia que Poco a poco, pasan rápidamente las preguntas de la lectio y de
de ello se ha tenido según los cánones evangélicos. la meditatio, casi de corrida, mientras que crece la exigencia
También la deliberatio, como la discretio, se cultiva de manera de estar ante el misterio, alabando y adorando, de saborear la
especial mediante el dinamismo de la lectio divina. presencia de Cristo
—Finalmente, la actio es el fruto maduro de todo el camino. Ignacio habla de «ver», «oír», «tocar», «gustar. y «oler»,
Por eso la lectio y la actio, la lectura bíblica y la acción, no son dejándose envolver en la contemplación incluso con los
ni mucho menos dos vías paralelas. ¡No leemos la Escritura sentidos espirituales (cf Ejercicios Espirituales, un 122-125)
para conseguir la fuerza que nos permita realizar lo que El dinamismo universal del conocimiento
hemos decidido! Mas bien leemos y meditamos para que Una última indicación Los métodos de la oración que hemos
broten las debidas decisiones y para que de consolación del considerado se corresponden entre si, porque representan el
Espíritu nos ayude a ponerlas en práctica. dinamismo universal del conocimiento En efecto, el hombre
No se trata, como muchas voces pensamos, de orar más para parte de la experiencia, de la toma de contacto con las cosas; y
obrar mejor, sino de orar más para comprender lo que debo la lectio, como la memoria, es experiencia de Cristo que
hacer y para poder hacerlo a partir de una opción interior. fundamenta y contiene todas las realidades.
Relación con la memoria, el entendimiento y la voluntad Luego, en el camino del conocimiento humano, nace de la
Examinando los términos de la metodología patrística de la experiencia la intuición o la hipótesis interpretativa, la
lectio divina, vemos que guardan una perfecta comprensión de los datos acumulados; es el momento de la
correspondencia con los términos agustinianos de memoria, meditatio, del entendimiento.
entendimiento y voluntad. El acto cognoscitivo tiende, pues, a desembocar en una
—En efecto, la memoria consiste en recordar, en el caso de la opción, en un compromiso del corazón, en una entrega; es la
meditación bíblica, un trozo de la Escritura o un episodio o un contemplatio, la voluntad, con todo lo que de ella se deriva.
versículo de un salmo. Se habla de memoria, y no de lectio, Me parece interesante subrayar que la oración no hace más
por el simple motivo de que en otros tiempos no abundaban que reproducir, en la dinámica de las relaciones con la Palabra
los libros y, una vez escuchado un texto, había que recordarlo. de Dios, la dinámica de fondo del obrar humano.
El trabajo de memorización, entre otras cosas, pone en Carácter específico de la oración cristiana
contacto con la multiplicidad del texto en sus mil Naturalmente, el Espíritu guía nuestra oración de maneras
ramificaciones. Así pues, la verdadera memoria, rectamente distintas, y cada cual tiene que buscar la suya; tiene que
entendida, no sólo reflexiona sobre los elementos básicos de la buscar, sobre todo, la manera que mejor corresponda a lo que
página bíblica, sino que recuerda otras relacionadas con ella. está viviendo.
Pues bien, para quien conoce la Biblia—y al menos un poco La rica terminología patrística y clásica subraya, sin embargo,
deberían conocerla todos los cristianos—no hay palabra que una experiencia fundamental común a todos los siglos
no esté relacionada con otras. Reflexionamos sobre los cristianos y tiene unas características bastante precisas.
hechos, sobre las palabras de Jesús, sobre las páginas de los Por eso no podemos confundirla con la meditación hindú,
profetas, sobre los versículos de un salmo, ensanchando con la budista o trascendental; ni debemos confundirla con los
memoria la exploración de todas sus afinidades. Para hacerlo, variados métodos de oración que hoy se nos proponen, ya que
hoy utilizamos las concordancias. En realidad, se trata de un en su base está la lectio o la memoria, o sea, el hecho de
verdadero ejercicio de memoria, y es otro modo de expresar el Cristo. Nuestra oración es oración cristiana, porque parte de
momento de la lectio; si queréis, se trata de dar vueltas a los Cristo. En algunos momentos podrá alcanzar formas casi
acontecimientos con el corazón, como lo hacia María El atemáticas: Cristo resucitado está presente sin que yo tenga
término memoria nos invita a comprender mejor que lectio que contemplarlo con los ojos de la fantasía. Pero
significa no sólo recordar otros hechos bíblicos parecidos al fundamentalmente—y lo subrayo—la meditación cristiana
pasaje que estamos leyendo, sino además recordar otros está movida por el Espíritu y está siempre vinculada a
hechos de la vida. Jesucristo; más aún, es participación de la oración de Jesús al
—El entendimiento corresponde a la meditatio; se trata de Padre.
intentar comprender el sentido de los acontecimientos. No Aquí se plantea el problema tan interesante de las relaciones
basta con la memoria; se necesita la comprensión. «¿No entre la oración, por así llamarla, crística y la de las otras
entendéis, no comprendéis todavía?—dice Jesús—… ¿Y no os religiones.
acordáis, cuando repartí los cinco panes entre cinco mil Existen, sin duda, formas de oración auténticas, de las que
personas, cuántas cestas llenas de trozos sobraron?.. ¿No podemos aprender; pero es muy difícil comprenderlas
comprendéis todavía?» (Mc 8,17-21). mientras no se haya recorrido un camino serio y profundo de
Jesús invita a recordar, invita a tener memoria, a la lectio, y oración cristiana, mientras no se haya descubierto la perla
luego invita a tener la inteligencia de los hechos, a preciosa que es el misterio de Jesús.
comprender su significado. En cambio, quienquiera que (mediante el ejercicio asiduo y,
—La voluntad designa todo lo que en el hombre es don de si sobre todo, la gracia del Señor—pues no en vano la oración es
mismo, amor y, por tanto, también la oración como expresión don—) haya realizado esta experiencia, podrá captar cuanto
de afecto, de impulso, de deseo La voluntad es, en otro modulo hay de justo y de verdadero en la oración de otras religiones.
cultural, la oratio y la contemplatio, con lo que de ellas se «A quien tiene, se le dará; pero al que no tiene, hasta lo que
sigue. Por consiguiente, el método clásico de la oración es una tiene se le quitará» (Lc 19,26) A quien tiene el verdadero
forma distinta de considerar el dinamismo de la lectio divina, sentido de la oración crística, se le dará comprender las otras
considerándola menos como lectio y mas como hechos formas de oración; a quien no lo tenga, se le quitará incluso
objetivos y dichos que se recuerdan. ese poco de oración que tiene, porque lo confundirá con una
La contemplación evangélica especie de tranquilidad interior que transforma tan
La contemplación evangélica, de la que habla san Ignacio de escasamente la vida que existe el peligro de que no sea más
Loyola en la Segunda Semana de los Ejercicios Espirituales, que culto a los propios ídolos, culto a si mismo.
es simplemente un resumen de cuanto hemos dicho sobre el
Recuerdo a un viejo monje budista, de más de ochenta años, triste de Belfast, de dos soldados linchados por la gente, por
que me decía, durante una visita que hice a un monasterio de ejemplo—, por problemas de la comunidad.
Hong-Koog: «Nosotros buscamos la nada; el objetivo de ¡Señor ¿Cómo quieres infundirnos tu fuerza, tu gracia, para
nuestra vida es la nada». que sirvamos a la alegría y a la paz de los hombres?
¿Qué quería decir? ¿Es la suya verdadera oración? Y, si lo es, 3. El tercer motivo por el que os pedí la asistencia a estos
¿qué relación tiene con la nuestra? Ejercicios es mi convicción profunda de que todos
Si conocemos con claridad el dinamismo activo de la oración necesitamos un mayor arraigo contemplativo. Tenemos
cristiana, puede ser importante, como Iglesia, establecer el necesidad de entrar más en nosotros mismos, de escuchar en
valor de la meditación sin objeto, el significado del encuentro el corazón la Palabra de Dios, de revisar con valentía las
con la nada. heridas interiores que perturban nuestra alegría y de
La oración crística es entrega, actio, es estar crucificados con exponerlas a la medicina de la Palabra del Señor. Tenemos
Cristo, entregados a los más pobres. necesidad de hacer sitio al Espíritu Santo dentro de nosotros,
Cuando estamos privados de la luz de Cristo, las formas de para un obrar más constante, más perseverante, para ser
oración de las otras religiones, por muy bellas que sean, son constructores de paz, para superar nuestras inquietudes y las
peligrosas y corren el riesgo de convertirse en de nuestras comunidades, las rencillas, los temores, los
autojustificación mental, en encastillamiento en las propias prejuicios.
opciones, en autelegitimación. Y no hay nada tan terrible en el Hoy, en este momento particular de la Iglesia, tenemos
camino ascético o en el camino, entre comillas, «espiritual» necesidad, sin duda, de un mayor arraigo contemplativo.
como el repliegue en la satisfacción de uno mismo. Se habla con frecuencia de la fragilidad actual de los jóvenes;
Pienso aquí en las personas que rezan, que rezan mucho y que, pero queremos confesar que todos, jóvenes y menos jóvenes,
sin embargo, se las arreglan para hacer siempre lo que quieren somos frágiles, y lo somos tanto mas cuanto menos arraigados
y para legitimar sus propias opiniones, sin entrar nunca en un estamos en la fe. Y estamos poco arraigados en la fe porque no
clima de Iglesia y de verdad. Quizá no se las ha ayudado a perseveramos suficientemente en la escucha silenciosa de la
ejercitarse de veras en la lectio divina y a pasar, de la Palabra.
experiencia de la reflexión meditativa, a la contemplación y a Así pues, ¿qué nos pide el Señor a cada uno en estas tardes?
sus sucesivas etapas que, por el poder del Espíritu Santo, Me parece que nos pide, sobre todo, cuatro actitudes:
transforman la Palabra de Dios en vida vivida, en acción — El silencio, que tendrá su culminación en los diez
evangélica. •MARTINI-6. Págs. 13-23 minutos de silencio que seguirán a mi exposición de la
Palabra. Procurad vivirlos como el momento más precioso y
2. LA ALEGRÍA DEL EVANGELIO rico de toda la sesión. No será un tiempo vacío si nace del
asombro y del respeto ante la venida del Espíritu Santo que
¿Por qué estos Ejercicios? quiere invadir nuestro corazón.
Saludo cordialmente a todos los presentes y a los que, a través — La escucha de la Palabra de Dios proclamada en el
de la radio, me están escuchando en las diversas iglesias de la evangelio; la escucha de mis reflexiones sobre el texto y del
diócesis. Es un gran don del Señor, a la vez que un pensamiento final de don Bosco (Cada tarde, un padre
compromiso para los que estamos aquí, el vivir una comunión salesiano concluía la reunión actualizando para el día de hoy
de oración aunque estemos físicamente distantes. una enseñanza de san Juan Bosco).
Son tres, fundamentalmente, los motivos que me han — La perseverancia contra el cansancio, ya que el ejercicio
impulsado a proponeros cinco tardes seguidas de reflexión y que queremos hacer es fatigoso y requiere una victoria sobre
meditación: nosotros mismos, aun a pesar del frío, el sueño, la inquietud,
1. En primer lugar, el centenario de san Juan Bosco, el amigo el nerviosismo y la ansiedad.
de los jóvenes. Al principio se pensó en traer a esta catedral — Finalmente, el Señor nos pide que recemos a partir de la
los restos mortales del santo, como para escuchar su mensaje Palabra escuchada, que hablemos con El y con María, nuestra
reunidos en torno a su cuerpo. Madre, que nos dirijamos al Padre hablándole de nosotros, de
De todas formas, don Bosco está espiritualmente presente, la sociedad en que vivimos, de nuestra poca alegría, de lo que
especialmente con su mensaje de alegría: «Laetari et bene nos falta, de lo que nos gustaría tener…
facere»: estad alegres y haced el bien. Pidamos al Señor, por
su intercesión, el don de acoger este mensaje de alegría que el
santo supo llevar de forma tan eficaz a tantos jóvenes de su EL RELATO DE CANÁ
tiempo y que sigue llevando hoy a todo el mundo. El evangelista Juan tiene una habilidad especial para
El segundo motivo es la preparación para la Jornada mundial concentrar en unas pocas líneas un montón de símbolos y de
de la Juventud, que se celebrará el próximo domingo y que significados, resumiendo en un solo texto la sustancia de
anticiparemos en la vigilia del sábado con la Traditio Symboli. todos los demás. Desde este punto de vista, si aprendemos a
Queremos unirnos a las intenciones del Papa; por eso el título penetrar en un solo episodio, podremos penetrar en todo el
de los Ejercicios repite la invitación que él propuso para la resto del cuarto evangelio y de la historia de la salvación.
Jornada de la Juventud: «Haced lo que El os diga. (Jn 2,5) Empecemos a releer, muy sencillamente, el episodio de Caná
Esta expresión, como sabéis, está tomada del episodio de Caná que habéis escuchado, a fin de comprenderlo en su globalidad,
que nos narra el evangelista Juan. En este relato, María actúa como si nos pusiéramos en lo alto de un monte para
para la alegría de los convidados, para la alegría de los contemplar un panorama.
esposos, para la alegría de la gente; y Jesús actúa para la Ante todo, hemos de considerar que el relato es mucho más
alegría de los hombres. amplio de lo que cabria esperar. Si lo hubiese referido Marcos,
Así pues, nuestros Ejercicios tendrán como tema fundamental por ejemplo, se habría limitado a decir lo siguiente: «Estando
la pregunta que nos planteamos ya en esta primera Jesús en un banquete de bodas, sucedió que escaseaba el vino,
meditación, pero que recogeremos las otras tardes: ¿Qué le y Jesús transformó en vino el agua que allí había, y todos
falta a mi alegría? ¿Y qué aumento de alegría quiere darme el bebieron hasta hartarse». Estas pocas palabras son suficientes
Señor para la vida a que me ha destinado? para dar el meollo del episodio.
La pregunta tendrá que brotar de nuestro corazón. Mi alegría Pero, si Juan prefirió detenerse en tantos detalles concretos,
se ve perturbada por muchos problemas personales, por como veremos, significa que nos quiere decir muchas más
muchos acontecimientos sociales—pienso en el hecho tan cosas que la simple narración de un hecho. Por tanto,
conviene profundizar en la lectura para poner de manifiesto Señor por invitación de Juan Bautista, y luego Simón, con el
las intenciones del evangelista. que ya se había encontrado Jesús, Felipe y Natanael.
Preguntémonos, entonces, quiénes son los personajes que Cinco hombres que, tímidamente, le acompañan y que al
actúan; cuáles son los símbolos que Juan pone de relieve; principio no se dan mucha cuenta de lo que acontece, pero
cuales los valores que evoca. después sienten un estremecimiento y a sus ojos se revela la
El texto dice: gloria de Jesús.
«Tres días después se celebraba una boda en Caná de Galilea — Los sirvientes son también personajes destacados: tienen
y estaba allí la madre de Jesús. Fue invitado también a la boda la valentía de creer en la palabra de María; tienen la valentía
Jesús con sus discípulos. Y, como faltara vino, le dice a Jesús de ejecutar, sin plantearse muchos problemas, las órdenes de
su madre: ‘No tienen vino’. Jesús le responde: ‘¿Qué tengo yo Jesús, y de esta forma se convierten en los que saben lo que ha
contigo, mujer? Todavía no ha llegado mi hora’ Dice su pasado. Son de las poquísimas personas que comprenden el
madre a los sirvientes: ‘Haced lo que él os diga’. Había allí seis hecho.
tinajas de piedra, puestas para las purificaciones de los judíos, — El maestresala es otro personaje del relato. Representa
de dos o tres medidas cada una. Les dice Jesús: ‘Llenad las un papel algo mezquino, ya que no cae en la cuenta de que
tinajas de agua’. Y las llenaron hasta arriba. ‘Sacadlo ahora, falta el vino, y luego, al encontrarse frente a la novedad, no
les dice, y llevadlo al maestresala’. Ellos lo llevaron. Cuando sabe cómo explicarla e inventa una ocurrencia graciosa para
el maestresala probó el agua convertida en vino, como reprochar al esposo.
ignoraba de dónde era (los sirvientes, los que habían sacado el El maestresala no se da cuenta de que ha habido una
agua, si que lo sabían), llama el maestresala al novio y le dice: manifestación de Dios. Representa al hombre rodeado por
‘Todo el mundo sirve primero el vino bueno y, cuando ya algo superior a él, pero que cree poder dominar la situación,
están bebidos, el inferior. Pero tú has guardado el vino bueno siendo así que en realidad se queda al margen.
hasta ahora’. Así, en Caná de Galilea, dio comienzo Jesús a sus — El esposo es el último personaje del relato; es una figura
señales. Y manifestó su gloria, y creyeron en él sus discípulos. apenas esbozada, evanescente, que permanece en el fondo de
Después bajó a Cafarnaún con su madre y los hermanos, pero la escena. Beneficiario de un gran don del poder divino, no cae
no se quedaron allí muchos días. (/Jn/02/01-12). en la cuenta de ello.
Una serie de personas muy diversas: María, Jesús, los
apóstoles, los sirvientes, el maestresala, el esposo y,
LOS PERSONAJES
naturalmente, la gente. Hombres y mujeres, con sus
— La madre de Jesús es el primer personaje que se menciona. capacidades e incapacidades, con sus problemas, con sus
No se dice su nombre en todo el evangelio de Juan. preocupaciones cotidianas, pueblan este episodio. Podemos
En nuestro texto se habla varias veces de ella: la madre de decir que es una pequeña multitud sorprendida en un
Jesús estaba en las bodas; al faltar el vino, la madre se lo momento típico de la vida cotidiana—la fiesta, la alegría, el
indica al Hijo; luego Jesús interpela a su madre con el nombre banquete—y que aprovecha Jesús para su intervención de
de mujer y, a pesar de su respuesta, la madre dice a los amor y de alegría.
sirvientes que hagan lo que El les diga. Los símbolos
Al final del episodio se menciona de nuevo a la madre, que El pasaje es también rico en símbolos: indicaciones de tiempo
bajó con Jesús y los demás a Cafarnaún. y de situaciones que, a la luz de toda la Escritura, asumen un
El relato de Caná está, ante todo, bajo el signo de la madre de significado de realidades más altas.
Jesús. El Papa lo comenta ampliamente en la encíclica — Los esponsales son esa realidad humana en la que se lee
Redemptoris Mater, que ha dirigido a toda la Iglesia para el el misterio de Cristo y de la Iglesia. Como sabemos por la
Año Mariano. Escritura, son el símbolo de la alianza, del amor de Dios con
María es llamada por Jesús «mujer»; ese mismo título volverá el hombre.
a aparecer en el evangelio de Juan solamente en el momento — «Tres días después» es la frase con que comienza el
de la cruz, es decir, cuando Jesús le presenta al evangelista relato. Para el Nuevo Testamento tiene un sentido muy
diciéndole: «Mujer, he ahí a tu hijo» (Jn 19,26). Esto significa concreto: en efecto, el tercer día es el de la Resurrección. Con
que Caná tiene que leerse en relación con el episodio de la esta mención misteriosa, Juan nos lleva al tema determinante,
cruz, y que en este episodio de las bodas se nos anuncia decisivo: la Pascua de Jesús. Es interesante el versículo que
veladamente el misterio de la Redención. sigue inmediatamente al episodio, porque dice: «Se acercaba la
— El segundo personaje destacado es Jesús; invitado a la Pascua de los judíos, y Jesús subió a Jerusalén. (Jn 2,13). No es
boda, llega con sus discípulos, escucha a la madre que le invita posible dejar de leer nuestro pasaje a la luz de la Pascua.
a poner remedio, le responde primero con unas palabras que Más aún. El capítulo primero del evangelio de Juan está
suenan como un rechazo; luego da órdenes por dos veces a los plagado de indicaciones cronológicas: «al día siguiente» (Jn
sirvientes. 1,26) Juan Bautista ve venir a Jesús; «al día siguiente» (Jn
Su presencia vuelve a recordarse al final del episodio: «Así dio 1,3S) Juan Bautista se encontraba con dos de sus discípulos;
comienzo Jesús a sus señales y manifestó su gloria». Es un «al día siguiente» (Jn 1,43) Jesús partió para Galilea.
pasaje cristológico muy importante: aquí Jesús manifiesta su Sumando todos estos días, comprobamos que el evangelista ha
gloria. construido el arco—llamémoslo así—de la primera semana
Recordáis cómo, en el prólogo, el evangelista Juan resume del ministerio de Jesús, que culmina en la manifestación de
todo el misterio de la encarnación en la expresión: «Hemos Caná. Pero también la ultima semana del ministerio de Jesús
visto su gloria» (Jn 1,14) Por tanto, subrayar que Jesús la culminará en la manifestación definitiva del Señor, del vino
manifiesta en Caná sugiere un misterio grande. nuevo, de la alegría nupcial, de la humanidad renovada; es
— El tercer personaje está representado por una categoría decir, culminará en la Resurrección.
de personas: los discípulos, que son invitados a la boda, En Caná tenemos, por así decirlo, el primer síntoma de que
presencian el hecho y «creyeron» en Jesús. Evidentemente, es Jesús ha venido a renovar la alegría del hombre, enturbiada
un momento muy importante también para el camino de los por las dificultades y contratiempos cotidianos.
discípulos. Los discípulos no son los Doce, como se nos — «Todavía no ha llegado mi hora» es otra mención
ocurriría pensar a primera vista. En este momento del cronológica rica en símbolos. Desde el principio, Jesús nos
evangelio de Juan son solamente los dos primeros discípulos invita a mirar hacia su hora, aquella en la que, «sabiendo que
(el propio evangelista Juan y Andrés) que habían seguido al había llegado la hora de pasar de este mundo al Padre…, se
levanta de la mesa, se quita el manto y, tomando una toalla, se revelación, de la riqueza de las Escrituras, con la que quieres
la ciñó… y se puso a lavar los pies de los discípulos. (cf. Jn alimentarnos todos los días de esta semana. Concédenos
13,1-5). penetrar en algunos momentos fundamentales y en algunas
El milagro de Caná anticipa la hora definitiva de la muerte de enseñanzas
Jesús, de su resurrección, de su manifestación a la humanidad decisivas de este pasaje evangélico, que es como una síntesis
— El vino es un elemento simbólico muy importante para la de tu misterio de amor, de redención, de gracia, de atención al
Escritura. Está en el centro del episodio: primero, porque hombre, de ofrecimiento de alegría a tu Iglesia».
falta; luego, porque se constata su falta; más tarde, porque se Intentad plantearos, con paz y serenidad, las dos preguntas
intenta remediar dicha falta; y, finalmente, porque la falta es que hicimos al principio:
suplida por la abundancia. —Señor, ¿qué le falta a mi alegría?; ¿qué turba mi alegría?;
El vino, como meditaremos mañana por la tarde, es una ¿qué le falta a nuestra alegría, como grupo, como Iglesia,
imagen bíblica fundamental: «Tú has dado a mi corazón más como sociedad?
alegría que cuando abundan el trigo y el vino nuevo., canta el —Señor, ¿qué aumento de alegría quieres darnos?; ¿qué
salmista (Sal 4,8). El vino es el símbolo de la alegría de Dios, alegría tienes reservada para mi, para hacerme participar de
del entusiasmo, de una vitalidad exuberante. Por tanto, el esta fiesta, para sacarme de mis apuros y de mi aridez, de mi
vino es lo que se opone a la tristeza, a la monotonía cotidiana, religiosidad quizá un tanto cansina, fatigosa, estancada, de la
a la repetitividad, al aburrimiento. Es el salto alegre del religiosidad de nuestro grupo que gira un poco en torno a si
hombre que abandona las precauciones, los temores, los misma, de nuestra pesantez de Iglesia?
reparos, las reservas, y se lanza… «¡Señor! Creo en Ti, espero en Ti, cuento contigo, porque Tú,
Es un tema simbólico fundamental para comprender el a través de la escucha de tu Palabra evangélica, nos quieres
significado del relato. llenar del vino nuevo de tu Espíritu. Y tú, María, causa de
— Las seis tinajas de piedra son descritas cuidadosamente nuestra alegría, ayúdanos a entrar en esta Palabra y a
por Juan. Tinajas de piedra vacías, incapaces de dar lo que prepararnos a meditar las enseñanzas y exigencias que
deberían dar; deberían contener aceite o vino para el contiene para cada uno de nosotros».
banquete; pero, al estar vacías, constituyen una realidad
pesada, molesta, un estorbo. Son símbolo de una religiosidad 3. NO TIENEN VINO NO TIENEN VINO
seca, vacía, sin contenido, formalista, de una religiosidad que
Jesús viene a transformar. «Señor, queremos ponernos a la escucha de tu Palabra, fuente
— Así, el agua vertida con abundancia en las tinajas, capaz inagotable de vida; a la escucha de María, que nos dice: ¡No
de convertirse en una realidad nueva, es símbolo de la riqueza tienen vino! Concédenos, María, que comprendamos lo que
y la abundancia de la vida del Espíritu, evocada precisamente quieres sugerirnos, porque sabemos que tú pronunciaste esa
en el agua que una fuente inagotable derrama sobre la tierra. palabra en una situación determinada y que nos la repites a
Como veis, son muchos los signos y los símbolos de esta nosotros en el hoy de nuestra Iglesia».
página de Caná que recuerdan otras páginas de la Escritura y En su mensaje para la Jornada mundial de la Juventud, que
que convierten el relato en una verdadera mina de enseñanzas celebraremos el próximo Domingo de Ramos, Juan Pablo II
para quien lo medita con amor, en un condensado de los escribe que María expresó, en las palabras pronunciadas en
misterios divinos. Caná, «el secreto más profundo de su vida».
Los valores Por consiguiente, es muy importante para nosotros conocer
Especialmente en la última parte del relato, el evangelista también a la Virgen a través de su afirmación llena de
Juan subraya expresamente algunos valores: preocupación: No tienen vino. Ya hemos visto cómo el texto
— «Jesús dio comienzo a sus señales», de san Juan que estamos meditando es una fuente profunda en
— «Jesús manifestó su gloria», la que podemos distinguir tres niveles distintos: primero, el
— «Creyeron en El sus discípulos» nivel de los sucesos que se narran, es decir, el de las personas,
Como ya hemos recordado, las señales o milagros, la gloria, la los grupos, las situaciones, los símbolos que nos presenta el
fe, la Pascua, son los valores de gran significado teológico que evangelista en la realidad histórica del episodio. Está luego el
están presentes en nuestro episodio. Os invito a meditar, nivel de la profecía eclesial: Juan y la Iglesia primitiva
durante unos minutos de silencio, en todo lo que hemos dicho, reflexionaron sobre el texto, sintiéndolo como profecía sobre
dejando que empiecen a entrar en vosotros todos los la Iglesia. Y el tercer nivel es el de la profecía cósmica, en el
personajes, las situaciones, los símbolos… sentido de que este trozo es profecía sobre el mundo, sobre la
En efecto, meditar bíblicamente significa masticar bien el historia considerada desde la perspectiva del Dios que salva.
texto hasta que consigamos saborearlo en toda su profundidad Esta tarde deseamos comprender qué significa la falta de vino
y sentir que el Espíritu Santo de Dios—que nos presenta en a nivel de nuestra experiencia de Iglesia y de sociedad. El
Jesús la fuerza de su acción histórica—está en nosotros. versículo del Salmo: «Tú has dado a mi corazón más alegría
Conclusión que cuando abundan el trigo y el vino nuevo» (/Sal/004/08),
Hemos visto así las diversas realidades de las personas que habla de la alegría del trigo, que es la alegría de todas las
nos ha presentado el evangelista. Se nos ha presentado la realidades necesarias para sobrevivir. Todavía
humanidad, no sólo en sus situaciones personales, sino podemos hoy comprender esto si miramos a algunos países
también en las colectivas; los grupos (sirvientes, discípulos) y del tercero y del cuarto mundo, sobre todo a los países
las grandes instituciones que la componen. Las instituciones sometidos a la sequía y a las grandes calamidades naturales;
naturales—el matrimonio, la fiesta, el banquete—y las en Bangladesh, que visité hace algunas semanas, podemos
instituciones religiosas: una religiosidad seca, vacía, llamarlo «la alegría del arroz», que es el alimento base de la
petrificada, gris, incapaz de saciar al hombre, y una región. Cuando la estación es buena y se cosecha cierta
religiosidad nueva, traída por Jesús: la atención de María, las cantidad de arroz, la alegría de la gente es enorme, ya que el
ganas de hacer el bien a los demás, la capacidad de llenar de espectro del hambre desaparece para algunos meses, a no ser
alegría el corazón del hombre. que sobrevenga un aluvión o un tifón. Así pues, para aquellas
«Concédenos, Señor, contemplar la riqueza de tu revelación poblaciones significa que Alá les ha asegurado el puñado
en estas sencillas palabras del evangelista. Concédenos diario de arroz, y estalla la alegría.
dejarnos invitar a las bodas de tu Palabra, para que podamos ¿Pero en que consiste la alegría del vino? Es algo todavía
gustar abundantemente el vino del Espíritu y llenarnos de la mayor; no solamente la alegría de sobrevivir, sino la alegría
de la fiesta, de la amistad, del banquete, de las bodas, del proclamo el Evangelio, si tienen ya los instrumentos de la
amor, de la vida nueva, de la victoria. salvación, aunque sean imperfectos?
La alegría del vino es señal del entusiasmo, de la sencillez, de Por subrayar unilateralmente importantes y valosisimas
la agilidad interior; es símbolo de la superación de las conclusiones del Concilio, se puede llegar a una especie de
inhibiciones, de los temores que impiden la comunicación vergüenza del Evangelio.
mutua. En la Biblia, como por otra parte en la historia de las 3. La tercera situación, análoga a la anterior, viene
culturas, el vino es símbolo de la vida que se desborda, que se determinada por la atención a los grandes valores humanos.
expande libremente, que se expresa. En cambio, la falta de Con toda justicia, la Constitución conciliar Gaudium et Spes
vino, en la simbología cultural y bíblica, es todo lo que cierra, reconoce que pueden darse en todas partes fragmentos de
lo que endurece, lo que crea sospechas, tristeza, valores cristianos, incluso en sistemas de pensamiento muy
susceptibilidad, irritabilidad, malhumor, pesimismo, critica alejados del cristianismo.
corrosiva, envidia. Pero en el deseo de encontrarlos corremos el peligro de
Una cierta vergüenza del Evangelio relativizar nuestra fe y de no saber ya muy bien lo que
En la Carta a los Romanos (1,16) san Pablo se expresa en significa «anunciar el Evangelio». De ahí la tristeza, la
estos términos: «No me avergüenzo del Evangelio, que es una incertidumbre, la timidez en el anuncio, la confusión de ideas -
fuerza de Dios para la salvación». Son palabras que pueden ¡Verdaderos retos a nuestra conciencia contemporánea!-. De
ayudarnos a comprender la apurada afirmación de María: «No ahí la falta de alegría: falta el vino del Evangelio, porque ha
tienen vino». Preguntemos, pues, al apóstol: ¿Qué motivo sido aguado, silenciado, puesto entre paréntesis. El reto es de
podrías tener para avergonzarte del Evangelio? ¿Por qué tal categoría que entran ganas de renunciar al diálogo, de no
dices: «No me avergüenzo», en vez de decir: «Estoy orgulloso aceptar los valores de las otras religiones, de exorcizar todo
del Evangelio; doy la vida por el Evangelio»? ¿Qué es esa valor humano existente fuera del cristianismo, por miedo a
vergüenza del Evangelio que alejas decididamente de ti? perder ese tesoro tan precioso que es la alegría del Evangelio.
¿Quizá con tu negación nos quieres dar a entender que No podemos negar que en nuestra apoca la falta del vino del
nosotros podríamos avergonzarnos? ¿Qué significa hoy Evangelio se nota abiertamente; nunca se ha hablado tanto de
avergonzarse del Evangelio? Creo que debería aplicarse no evangelización y, al mismo tiempo, nunca ha habido tan poco
sólo al renegar de Jesús, como le ocurrió a Pedro, sino coraje para evangelizar. Entre nosotros, en el mismo mundo
también a ciertas formas sutiles de vergüenza que a veces se misionero, se advierte el cansancio que provocan estos
dan en nuestra existencia contemporánea, incluso de Iglesia. razonamientos, estos interrogantes: ¿Que es hoy la misión?
Pienso concretamente en tres situaciones: ¿Qué sentido tiene hoy misionar? Ved cómo adquiere
1. La primera se refiere al llamado diálogo. Pablo VI, en su entonces significado la frase de María: «No tienen vino», les
primera encíclica, Ecclesiam suam, escrita en 1964, después de falta la alegría del Evangelio. No tienen vino o están a punto
un año de pontificado, es decir, después de una larga de agotarlo. Cuando en un banquete llega a faltar algo,
meditación, habló de forma maravillosa del diálogo, e enseguida hay alguien que corre a buscarlo a otra mesa; la
introdujo en la Iglesia este tema, que el Concilio recogió gente se irrita, se pone nerviosa, se enfada, y al final se dan
convirtiéndolo desde entonces en un tema clásico. Sabemos cuenta de que, en realidad, a todos les falta algo. Entonces
cuales son las condiciones del diálogo: que se aprecie el empiezan a decir: ¿Quién es el culpable? ¿Quién ha organizado
parecer del otro, que se considere que hay algo bueno en las esta fiesta o esta excursión y cómo no ha preparado suficiente
posiciones de cada uno, que se acepte como posible no sólo para todos? ¿Por qué hemos malgastado lo que teníamos y
enriquecer a los demás, sino también ser enriquecido por ahora no tenemos lo que necesitamos?
ellos. Sin embargo, ¿qué puede nacer del ejercicio del diálogo Surgen discusiones parecidas a las del relato de las vírgenes
hecho en condiciones no del todo correctas? Puede nacer una necias y las vírgenes prudentes: al llegar el esposo, nos
especie de incertidumbre sobre las propias opiniones, una falta preguntamos quién ha sido tan poco previsor que ha dejado
de seguridad en sí mismo, porque, si el otro tiene razón, quizá que falte el vino de la alegría del Evangelio
yo esté equivocado. Embarcándome en el diálogo, puedo Acusamos entonces a ciertas teorías, a ciertas teologías que
llegar a perder mi identidad, a confundirla, a mezclarla. De ese han creado esa situación de falta de alegría, de entusiasmo, de
modo puede ocurrir que yo sienta vergüenza del Evangelio. coraje. Buscamos al culpable y hacemos un proceso a la
Recuerdo que en una conferencia de prensa, hace algunas historia; nos preguntamos quién ha escondido el vino, quién lo
semanas, con representantes de las Iglesias cristianas ha desperdiciado, quién ha dejado caer por distracción alguna
europeas (ortodoxas, protestantes y católicas), reunidos en botella al llevarlo a la despensa, quién ha actuado
Milán, una periodista nos habló de una experiencia que había indebidamente.
tenido en un encuentro ecuménico. Decía, entre otras cosas: La fuerza incisiva de las palabras de María, «¡Pobrecillos, no
eran todos tan amables, de tal manera intentaban todos decir tienen vino!», fotografía con toda exactitud nuestra situación
lo que podía agradar a los demás, que al final ya no se sabia contemporánea.
exactamente cual era la posición de cada uno. Vivir la alegría del Evangelio
Este es el riesgo del dialogo: en un momento determinado, sin «María, Tú que diste alegría abundante a la familia de Caná,
quererlo, me encuentro avergonzándome un poco del da también a nuestra familia el vino del Evangelio y, sobre
Evangelio, de mi certeza, de mi convicción profunda, e todo, haznos comprender en qué consiste esta abundancia de
intento—aunque sólo sea tácticamente—prescindir de él. alegría».
2. La segunda situación se refiere a la valoración de las otras Hay dos parábolas muy útiles en este sentido: «El Reino de
religiones. En todas las religiones hay valores, y el Concilio lo los cielos es semejante a un tesoro escondido en un campo
afirmó vigorosamente en la declaración Nostra Aetate sobre que, al encontrarlo un hombre, lo vuelve a esconder y, por la
las relaciones con las religiones no cristianas. Es verdad que alegría que le da, va, vende todo lo que tiene y compra el
todas las religiones pueden ayudar a los hombres a buscar a campo aquel. También es semejante el Reino de los cielos a un
Dios. Pero puede plantearse de nuevo el problema de la mercader que anda buscando perlas finas, y que al encontrar
timidez en el anuncio. A veces he oído a los misioneros una de gran valor, va, vende todo lo que tiene y la compra»
plantearse la pregunta: si esas personas tienen sus valores (/Mt/13/44-46). La alegría del Evangelio es como la alegría
religiosos, ¿por qué voy a perturbarlas? Quizá pueda de aquel que, habiendo encontrado un tesoro, se vuelve loco
ayudarlas a comprenderse mejor, pero ¿con qué derecho de alegría, vuelve a casa y vende todos sus bienes, incluso los
malvende, para poder comprar el campo en cuestión. Los
vecinos piensan que se ha vuelto loco, sospechan que quizá Cuando nos falta agilidad, cuando estamos asustados, cuando
está siendo chantajeado por alguien y necesita dinero, o que somos perezosos, recelosos, agobiados por el futuro de la
tal vez lo haya perdido todo en una casa de juego. Pero aquel Iglesia y de nuestra comunidad, significa que no tenemos la
hombre sabe muy bien adónde quiere llegar, y no le importa alegría del Evangelio, sino sólo una sombra, cierto eco lejano,
lo que digan de él. No le impresionan las palabras ni los intelectual, abstracto, del Evangelio. Porque —subraya san
juicios de los demás, porque sabe que el tesoro que ha Pablo—el Evangelio no es doctrina, teoría, sino «fuerza de
encontrado vale más que todo cuanto tenía. Dios para la salvación de todo el que cree». Acoger el
También el mercader que ha encontrado la perla preciosa lo Evangelio es acoger su fuerza.
vende todo, y la gente piensa que quiere cambiar de oficio o Así pues, María nos invitar a acoger la fuerza del Evangelio, a
que no está en sus cabales. Pero él sabe que, cuando tenga la examinarnos sobre la alegría, a aspirar a ella; nos invita a
perla preciosa, tendrá un bien mucho mayor que todas las confiar en Cristo crucificado que quiere llenarnos de su
demás perlas juntas y que, si quiere, podrá incluso volver a alegría.
comprarlas todas. Preguntas para la meditación
La alegría del Evangelio es propia de aquel que, habiendo Para concluir, me gustaría proponer algunas reflexiones
encontrado la plenitud de la vida, se ve libre, sin ataduras, prácticas para el tiempo de silencio que, como he dicho, es la
desenvuelto, sin temores, sin trabas. Ahora bien, ¿creéis, perla de toda nuestra actividad. Aunque nos resulte fatigoso,
acaso, que quien ha encontrado la perla preciosa va a ponerse estoy seguro de que experimentaremos un gran beneficio para
a despreciar todas las demás? nuestra vida. Preparémonos para eso con las siguientes
¡Ni mucho menos! El que ha encontrado la perla preciosa se preguntas:
hace capaz de colocar todas las demás en una escala justa de 1. ¿Tengo dentro de mi la alegría del Evangelio? ¿He probado
valores, de relativizarlas, de juzgarlas en relación con la perla de veras alguna vez esta alegría? ¿Qué es y cómo se
más hermosa. Y lo hace con extrema simplicidad, porque, al manifiesta en mi? ¿Cómo es una alegría que supera a todas las
tener como piedra de comparación la perla preciosa, sabe demás y no reniega de ellas, sino que las valora, las
comprender mejor el valor de todas las demás. comprende, las acoge, las juzga, las reordena?
El que ha encontrado el tesoro no desprecia lo demás, no teme Concédeme, Señor, la alegría del Evangelio, porque no hay
entrar en tratos con los que tienen otros tesoros, puesto que tesoro mayor que ella, no hay nada que se le pueda comparar,
él está ahora en condiciones de atribuir a cada cosa su valor y vale la pena venderlo todo para alcanzarla.
exacto. 2. ¿Qué paso hacia adelante tengo que dar para abrirme a la
También resulta a propósito aquella palabra evangélica: «A alegría del Evangelio, para saborear ese poco o ese mucho que
quien tiene se le dará; pero al que no tiene, incluso lo que tiene ya tengo?
se le quitará» (/Lc/19/26) A quien tiene la alegría del Porque la alegría del Evangelio no es sólo como una perla; es
Evangelio, a quien tiene la perla preciosa, el tesoro, se le verdad que Jesús la compara con ella, pero también la
concederá el discernimiento de todos los otros valores, de los compara con el agua que brota a borbotones y que, por tanto,
valores de las otras religiones, de los valores humanos no es algo que pueda conservarse en el frigorífico. La alegría
existentes fuera del cristianismo; se le dará la capacidad de del Evangelio o actúa o desaparece; o despunta como un
dialogar sin timidez, sin tristeza, sin reticencias, incluso con retoño o se marchita. A menudo se nos da, pero nosotros no la
alegría, precisamente porque conocerá el valor de todas las secundamos enseguida, no damos los pequeños pasos que nos
demás cosas. Al que tiene la alegría del Evangelio se le dará la sugiere, y entonces desaparece del corazón.
intuición del sentido de la verdad que puede haber en otras ¿Qué paso quiero dar, Señor, para hacer sitio a esta alegría?
religiones. El primer paso es el que estamos dando en estos Ejercicios,
Por el contrario, al que no tenga se le quitará aun lo poco que mediante el sacrificio, la voluntad y la perseverancia con que
tenga. Al que posee poca alegría del Evangelio se le irá de las los hacemos. Señor, te damos todo esto con alegría. Gracias,
manos la capacidad de diálogo y se obstinará en la defensa a Señor, por habernos llamado a hacer este gesto. Pensemos
ultranza de lo poco que posee, se cerrará dentro de sí mismo, luego, en nuestro corazón, en algún otro paso que tengamos
entrará en liza con los demás por temor a perder lo poco que que dar: pensémoslo ahora, no mañana. Porque los pasos se
tiene. Este es nuestro drama, el drama de nuestra sociedad. La dan, ante todo, en el corazón y, si esta tarde tomamos una
poca alegría del Evangelio es causa de mezquindad y de decisión, la alegría comenzará ya ahora a florecer. Me permito
tristeza en todos los terrenos de la vida eclesiástica y social, haceros una sugerencia. Todos vivimos en nuestro entorno—
produce corazones encogidos y es causa de absurdas en casa, en la escuela, en el trabajo, con los compañeros, con
discusiones sobre auténticas nimiedades. las personas que deberían ser nuestros amigos—tal o cual
Es la Virgen la que nos dice: si no tenéis la alegría del situación de malestar. Una situación que nos pesa, una
Evangelio, moriréis en vuestra tristeza. persona que no acabamos de aceptar, un hecho que nos
«María, tú que haces el diagnóstico de nuestra sociedad y de disgusta. Pongámonos delante de esa situación diciendo:
lo que a veces nos aflige como cristianos, advirtiendo Señor, te doy gracias porque, a través de esa situación que me
desconsolada a tu Hijo: ‘No tienen vino’ concédenos abrir resulta un tanto hostil, incómoda o difícil, Tú me das una
nuestros corazones a la verdadera alegría del Evangelio. ocasión providencial para vivir el Evangelio de la amistad, del
Concédenos, Madre, comprender lo que vale de verdad, ya que perdón, de la resignación, del sacrificio, de la renuncia, de la
la alegría del Evangelio es, precisamente, del Evangelio, no paz Si damos este paso, si tomamos la decisión de orar de esta
una alegría cualquiera, sino la que viene de la acogida sin manera, atraeremos sobre nosotros la alegría del Evangelio, y
limites de la iniciativa divina de amor por nosotros, en Jesús la alegría del Crucificado invadirá nuestra vida
crucificado». «¡María! Abre nuestro corazón para que no seamos sordos a
El que busca la alegría en seguridades humanas, en ideologías esta palabra tuya: ¡No tienen vino! Abre nuestro corazón para
o en extravagancias no puede encontrar esta alegría. La que nos dejemos amonestar por ti como merecemos, y
alegría del Evangelio es Jesús crucificado, que llena nuestra podamos de este modo obtener el don de la reconciliación y de
vida, perdonando nuestros pecados, dándonos la señal de su la alegría que Jesús prepara para nosotros». •MARTINI-6.
amor infinito, llenándonos noche y día de su profunda alegría. Págs. 37-47
La alegría de Caná es María, que invade nuestro corazón con
su ternura, con su bondad, con su compasión, con su
misericordia.
4. «MANIFESTÓ SU GLORIA» «MANIFESTÓ SU GLORIA» vernos realmente iluminados sobre ese carácter central del
misterio de la cruz, sobre la identidad entre la cruz y la gloria
Esta tarde vamos a contemplar el misterio de la cruz a partir Al meditar las palabras de Juan: «Manifestó su gloria»,
de las palabras que se encuentran al final del relato de Caná: pidámosle a María que nos disponga a recibir este don.
«Así, en Caná de Galilea, dio Jesús comienzo a sus señales. Y La gloria de Dios
manifestó su gloria y creyeron en él sus discípulos» (Jn 2,11). La afirmación del evangelista—como he dicho—nos
María, que estuvo al pie de la cruz del Señor, nos obtenga la sorprende, porque nos parece desproporcionada en relación a
gracia de conocer el corazón de este misterio y comprender la modestia del suceso, que, por otra parte, no recuerdan los
cómo Jesús manifestó su gloria con el milagro del agua Sinópticos, por lo que podemos suponer que el hecho pasó un
transformada en vino. tanto desapercibido para la tradición.
En efecto, al leer este trozo, observamos a primera vista una Pero nos sorprendemos más aún cuando, al proseguir la
cierta desproporción entre ese pequeño hecho doméstico, lectura del cuarto evangelio, nos damos cuenta de que en el
conocido solamente por unas pocas personas, y la capítulo 7 Juan indica: «Todavía Jesús no había sido
interpretación del evangelista que afirma: «Manifestó su glorificado» (Jn 7,39). Sólo a partir del capítulo 12 se empieza
gloria». a hablar de la glorificación de Jesús: «Ha llegado la hora—
La alegría de la cruz dice el Señor—de que sea glorificado el Hijo del hombre» (Jn
Ayer tarde intentamos explicar la palabra de María: «No 12,23); y después del lavatorio de los pies, cuando se anuncia
tienen vino». La la traición de Judas, y éste sale del cenáculo para realizar su
Virgen—decíamos—lanza este grito de alarma, indicándonos delito, Jesús exclama: «Ahora ha sido glorificado el Hijo del
que el vino es la alegría del Evangelio y que nos falta con hombre» (Jn 13,31). Finalmente, en la última oración durante
excesiva frecuencia. Falta en muchos bautizados que viven la cena, Jesús reza diciendo: «Padre, glorifica a tu Hijo» (Jn
arrastrándose pesadamente, renqueando bajo el peso de la 17,1).
vida, con más amarguras que satisfacciones. Así pues, esta gloria de Jesús se manifestó al final de su vida:
Falta la alegría en la gestión eclesiástica ordinaria del culto y en la traición, en la muerte, en la cruz. Así lo entiende el
de la pastoral, y nuestras asambleas y comunidades denuncian mismo prólogo del evangelio de Juan: «El Verbo se hizo carne
a veces esa escasez de alegría. Falta también la alegría en no y puso su tienda entre nosotros—se vino a vivir con nosotros,
pocos grupos y realidades, como me ha escrito uno de en nuestras pobres tiendas de campaña, para hacerse
vosotros después de la reflexión de ayer: «Falta en nosotros, accesible—, y hemos visto su gloria, gloria que recibe del
los cristianos de un Occidente en tantos aspectos cansado, Padre como Hijo único, lleno de gracia y de verdad» (Jn 1, 14)
débil y desilusionado, la locura del enamorado, la alegría del Juan vio esta gloria en el momento en que Jesús, clavado en la
justo. Aumenta así la sospecha, resucita la caza de brujas, se cruz, después de haber gustado el vinagre, dijo: «Todo está
multiplican palabras y reuniones, mientras disminuyen la cumplido»; en el momento en que uno de los soldados le
pasión y el compromiso». traspasó el corazón con la lanza y salió de él sangre y agua (cf.
La Virgen sabe todo esto y está cerca de nosotros 19,30-37).
Sin embargo, de una conversación que hoy he tenido me ha Solamente podemos comprender la manifestación de la gloria
quedado la duda de que quizá no todos los que han seguido la de Jesús en Caná a partir de la contemplación del crucificado
meditación—en particular los que la han seguido por radio, traspasado, a partir de su muerte dolorosa en la cruz.
fuera de la atmósfera de oración que estamos viviendo—han La gloria, de la que tantas veces habla la Escritura, es el
comprendido de veras lo que significa la alegría del esplendor de Dios, el desbordamiento de su poder, la riqueza,
Evangelio. No es la alegría de leer las palabras de la Escritura, la bondad, la ternura de Dios, que invade la historia. Esto es
aun cuando al leerlas podamos experimentar cierta alegría. la gloria: el esplendor divino que invade la historia y se hace
La alegría del Evangelio, que Pablo define como «fuerza de visible.
Dios para la salvación de todos los creyentes» (Rm 1,16), es la En el Antiguo Testamento, la gloria divina es percibida por el
alegría de saber que Dios se me comunica. Porque Tú, Dios hombre en grandiosas manifestaciones de la naturaleza:
mío, me amas a pesar de todo; porque amas a esta humanidad; pensemos en los truenos, los relámpagos, la tempestad, el
porque la redimes; porque nos amas dándonos a tu Hijo; terremoto y el fuego del Sinaí.
porque no nos abandonas; porque eres para mi un Padre y te ¿Cómo es posible que la plenitud desbordante de Dios se haya
comunicas conmigo en una ininterrumpida cascada de gracias. concentrado toda ella en Jesús y en su cruz? ¿En qué sentido
La alegría del Evangelio es la alegría por la buena noticia de su muerte se manifiesta como gloria? ¿Por qué llamamos
que Dios ama a los pecadores, a los desesperados, a los «gloria» al fluir de la sangre y el agua del costado de Jesús
dispersos, a los extraviados, y nos vuelve a conducir a su después del último golpe con que se ensañan en su cuerpo
intimidad. Y esta alegría del Evangelio, misteriosamente, torturado? ¿No es, más bien, una ignominia, una crueldad, una
tiene su culmen en la cruz. injusticia o, todo lo más, el silencio de Dios sobre la historia?
No es casual el que esta tarde contemplemos la cruz mirando Nosotros comprenderemos el misterio de la gloria del Señor
también la reliquia ante la cual rezaron san Carlos Borromeo partiendo del episodio de Caná y releyendo todo el evangelio
y todos nuestros padres en la fe. como una sucesión de pequeños signos de la gran gloria de
La buena noticia de que Dios se comunica conmigo con amor Dios en el Calvario.
indefectible y misericordioso tiene su culmen en la cruz. La manifestación de la gloria en Caná
Naturalmente, pueden pasar muchos años antes de que, en el En Caná, Jesús, gratuitamente, multiplica el vino para alegría
camino cristiano, se comprenda de verdad la relación que de los hombres Y poco después cura al paralítico, multiplica
existe entre el Evangelio y la cruz, aunque lo proclamemos los panes, cura a un enfermo, devuelve la vista al ciego de
desde el comienzo de la vida de fe. El propio Apóstol comenzó nacimiento, resucita a Lázaro.
la predicación afirmando la cruz, pero necesitó años de Así pues, la gloria de Dios consiste en que el hombre viva, en
experiencia y desilusiones para llegar a la intuición existencial que no muera, en que goce, en que no sufra ni esté triste. La
de su carácter central. gloria de Dios es la alegría del hombre. Dios es Aquel que se
También para nosotros pueden transcurrir muchos años de compromete hasta el fondo por nuestra alegría; es el que se
vida cristiana, y hasta de vida sacerdotal o religiosa, antes de entrega por completo para rescatarnos de nuestra tristeza, el
que toma sobre si nuestros dolores, el que carga con ellos, el
que no pone limites a la manifestación de su amor por Señor, Tú nos llamas a dejarnos educar por la gloria de la
nosotros, por cada uno de nosotros. cruz, a través de los pequeños gestos de Caná, para que
Por eso podemos intuir algo del misterio de la gloria reeduquemos a una sociedad enferma de tensiones, de
contemplando a Jesús que muere en la cruz. El momento agresividad y de guerra, mediante la descontaminación y la
culminante de la gloria de Dios, el momento en que su gloria desinfección que los gestos de paz, de no violencia, producen
se revela de manera luminosa, insuperable, es cuando Jesús en la vida cotidiana.
acepta voluntariamente la muerte por amor al hombre, para Cada renuncia a la agresividad, al deseo de venganza, a la
comunicarle el Espíritu, para salvarlo del pecado, para susceptibilidad exasperada, a la honrilla vana, es quitarle
devolverle la vida y la paz. Ahora ya no podemos dudar de hierro a la violencia, es una victoria de la cruz de Jesús, es
que Dios nos ama hasta el fin. La cruz es el signo supremo de educar seria y progresivamente a la humanidad para la gloria
la ternura de Dios y, por tanto, de su gloria. de la paz
«Concédenos, Señor, comprender que precisamente en la cruz, «María, reina de la paz, purifica nuestros corazones de todas
en la derrota, en la humillación, se manifiesta tu gloria de las agresividades que los ofuscan y concédenos que realicemos
amor gratuito al hombre, se manifiesta tu naturaleza más cada día gestos de perdón».
íntima. Porque Tú eres el que se da sin limites, y tu entrega Y en el momento de silencio, que será a la vez tiempo de
no se muestra en el trueno, en el viento, en la tempestad, en la adoración de la cruz, oremos diciendo:
victoria sobre los enemigos. Se insinúa ya en la curación de la «Señor, haz que comprendamos el misterio de tu alegría, de tu
enfermedad, en el vino de Cana y en el paralítico que vuelve a gloria y de tu cruz. Haz que pueda comprender cuánto hay en
caminar. Pero, sobre todo, aparece cuando Tú, Señor, lo das mi de agresividad, de resistencia a los otros, de desconfianza,
todo hasta el fondo, cuando no tienes ya nada que no hayas de miedo. Líbrame, Señor, depura en mí todo cuanto me
dado por mi. enfrenta a los demás y hazme caminar por el sendero de tu
Esta es tu gloria, aunque no logremos expresarla con palabras paz». •MARTINI-6. Págs. 49-56
adecuadas».
La gloria de Dios se manifiesta en toda la actividad de Jesús 5. «HACED LO QUE ÉL OS DIGA»
como dador de vida, pero alcanza su máxima expresión en la
cruz. He recibido la carta de una joven que participa en estos
Caná es el primer anuncio; efectivamente, allí se percibe la Ejercicios y que me ha señalado un paralelismo entre su
atención del Señor por el hombre, su ternura, su acogida experiencia de oración y el atletismo que practica. Es un
benigna de la invitación de María, aun cuando no había escrito muy sabroso; os voy a citar algunas líneas para que os
llegado todavía la hora de la cruz. animéis a vivir bien nuestro itinerario:
Caná es manifestación de la gloria, porque es amor de Dios al «El comienzo del atletismo. Alguien me dijo que debería
hombre. ponerme a hacer deporte. No es que tuviera especiales
La gloria de Dios se manifiesta en las cosas grandes, aunque cualidades, pero podría servirme de ayuda en el futuro.
no sean deslumbrantes a los ojos del mundo, evidenciando un También me dijo alguien que la oración es una experiencia
superávit de amor y de gratuidad. Un superávit increíble, maravillosa, que podría ayudarme a crecer.
insuperable, de amor y de gratuidad, que consiste en su saber Los primeros pasos. Cuando empecé a hacer deporte, fue
perderlo todo por nosotros, en su saber perdonarlo todo en el bastante duro. El cuerpo no siempre respondía a lo que le
momento de la muerte de su Hijo en la cruz. pedía; parecía que no me aportaba nada; sólo algún dolor
La gloria de Dios se manifiesta también en las cosas pequeñas, muscular. Cuando empecé a hacer oración, también fue duro:
en los hechos cotidianos, en Caná. Es la misma gloria la que el orar me resultaba fatigoso. Me cansaba físicamente estar
aparece en la cruz y la que vive el momento cotidiano de allí concentrándome, guardando silencio, recogiendo mis
entrega gratuita. pensamientos en Dios. Parecía tiempo perdido; me parecía que
Por eso cada uno de nuestros pequeños gestos de gratuidad no recibía nada. Después de cierto tiempo, tras un periodo de
manifiesta la gloria del Señor. Y lo mismo que tu, Jesús, al entrenamiento, el cuerpo empieza a reaccionar, se cansa
manifestar tu gloria en Caná obtuviste que los discípulos menos, consigue ponerse mejor en movimiento, resistir el
creyeran en ti, así también nosotros nos hacemos creíbles cada cansancio. Las exigencias de antes parecen ahora fáciles.
vez que manifestamos con alegría tu gloria en actos de Quizás es posible aumentar un poco más el esfuerzo. La
entrega gratuita y auténtica. oración: después de cierto tiempo ya no cansa estar allí,
En nuestro modo de orar esta tarde, en nuestro modo de sentada, encontrándote contigo misma, dialogando con Dios.
saludar a una persona y estrecharle la mano, en nuestro modo Ahora sientes que alguien habla dentro de ti, consigues estar
de interesarnos por otro y de prestarle atención, de no pasar más rato; el tiempo pasa aprisa; parece poco lo que ya tienes».
distraídamente frente a las necesidades de los hermanos, Me detengo aquí, deseando que al final de nuestros Ejercicios
manifestamos la gloria de Dios. os parezca que el tiempo pasa deprisa, incluso en los
Poco a poco nos haremos capaces de manifestarla en pruebas momentos de silencio, y que en todo caso cada uno de
particulares, en momentos graves de nuestra existencia, nosotros tenga la constancia de perseverar en el ejercicio del
porque ya desde el principio, en las cosas pequeñas de cada espíritu, lo mismo que tenemos la constancia y el afán de
DIA, hemos escuchado, como Jesús, la sugerencia de María. perseverar en los ejercicios corporales, aunque resulte
El sendero de la paz fatigoso.
Para concluir, me gustaría sacar una última consecuencia de la Vamos a reflexionar ahora en aquellas palabras de María que
meditación sobre Jesús que en Caná manifiesta su gloria. Esta figuran como título en el Mensaje del Papa para la Jornada
gloria se manifiesta hoy de una manera especial, en nuestra mundial de la Juventud: «Haced lo que El os diga» (Jn 2,5)
sociedad eficacista, predicando la paz. Ayer por la tarde intenté mostrar que la gloria de Jesús que se
El reconocimiento de la gloria de Jesús en la cruz, acogido en manifestó en Caná es la que brilla en la cruz, y que de ella se
el corazón del hombre, produce realmente una práctica de no derivan consecuencias decisivas sobre el sentido de la vida y
violencia activa y generosa que trae al mundo la victoria de la de las pequeñas cosas de cada día, sobre el modo de situarnos
cruz. La no violencia cristiana evangelice es una traducción de en la sociedad. Me hubiera gustado detenerme más despacio
la gloria de la cruz en medio del eficacismo y la tensión sobre el vino de nuestra alegría, que derrama en los corazones
producida por el miedo en nuestra sociedad. el amor de Jesús crucificado por el hombre, amor que brilla
soberanamente en la cruz. Paradójicamente, la alegría del
hombre nace de la cruz de Jesús y, al contemplar al En la encíclica Redemptoris Mater el Papa indica varias veces
Crucificado, se nos ofrece la alegría del Evangelio, la alegría que la Virgen se vio probada en su fe.
de sentirnos amados de Dios. 2. En segundo lugar, la invitación a los sirvientes nace de una
Me doy cuenta de que no he logrado expresar todo el montón inclinación profunda del corazón de María. Sus palabras
de pensamientos que me bullían por dentro. Esta tarde traducen el «sí» primordial de la Anunciación. «Tras de estas
volveremos sobre el tema desde otro punto de vista; en palabras está toda ella. Su vida fue realmente un gran ‘sí’ al
concreto, desde las palabras tan sencillas que dirigió la Virgen Señor, un ‘sí’ lleno de alegría y de confianza. María, llena de
a los sirvientes del banquete de Caná. gracia, Virgen Inmaculada, vivió toda su vida en una apertura
¿De dónde nacen las palabras de María? total a Dios, incluso en los momentos más difíciles, que
El Papa escribe: «‘Haced lo que El os diga’. Con estas palabras alcanzaron su apogeo en la cima del monte Calvario, a los pies
expresó María, sobre todo, el secreto profundo de su misma de la cruz. No retira nunca su ‘sí’» (cf. Mensaje del Papa para
vida. Tras de estas palabras está toda ella» (cf Mensaje para la la Tercera Jornada mundial de la Juventud, n. 2).
III Jornada mundial de la Juventud, n. 2). Aquí, en Caná, el «sí» de María se traduce con la frase: Estad
¿En qué sentido, María, expresaste el secreto más profundo de también vosotros dispuestos a hacer lo que El os pida, todo lo
tu vida en esta invitación a los sirvientes de Caná? que Dios os diga, ya que el hombre encuentra su verdadero
¿De qué profundidad de experiencia brotan tus palabras? bien en hacer la voluntad de Dios.
Recordamos que una frase parecida a la tuya aparece en el 3. Pero la Virgen no sabe lo que Jesús piensa decir a los
libro del Génesis, cuando los egipcios, al encontrarse sin sirvientes; no sabe si realizará un milagro o si les mandará a
comida debido a la carestía que sufrían, se dirigen al Faraón, comprar vino; no sabe nada. En efecto, en el texto griego la
que les responde: «Id a José; haced lo que él os diga» palabra suena de forma muy indeterminada: «Haced cualquier
(/Gn/41/55). Son, pues, palabras que tienen ya toda una cosa que os diga»; Dios no abandona a sus hijos que se
historia de providencia en tiempos especialmente difíciles y encuentran en apuros, aunque se trate de un apuro de poca
duros. monta.
1. En María nacen, ante todo, de una situación de prueba. No En el corazón de María que pronuncia estas palabras anida la
habla a partir de un momento de entusiasmo, de euforia, sino certeza de que hay que fiarse de Dios, habita la gran
de un momento de dolor, aunque encubierto. esperanza que no engaña, porque Jesús es la solución de las
Porque María, mientras presenta la invitación con toda situaciones aparentemente cerradas de la historia.
tranquilidad, esconde un sufrimiento análogo al sufrimiento Así pues, también de la esperanza nace la invitación de María
de la mujer siro-fenicia de que nos habla el evangelio según a los sirvientes.
Mateo. Jesús se había dirigido hacia la región de Tiro y Sidón, 4. Finalmente, la frase «Haced lo que El os diga» nace de un
y la mujer, natural de aquel país, pidió a Jesús la curación de espíritu muy práctico.
su hija. El Señor, después de que los discípulos le pidieran que María no pide a los sirvientes que consideren atentamente el
la atendiese, respondió: «No he sido enviado más que a las problema, que busquen las causas y que traten de averiguar
ovejas perdidas de la casa de Israel». En este momento la quién tiene la culpa de que falte vino, sino que dice
pobre madre le dijo: «También los perrillos se alimentan de simplemente: Haced, obrad.
las migajas que caen de la mesa de sus amos» (cf Mt 15,21- Ella sabe que no son los que dicen: «Señor, Señor», sino los
28). La mujer había experimentado, ciertamente, una que hacen la voluntad de Dios, los que entrarán en el reino de
sensación de malestar, de sufrimiento; se había sentido los cielos; el que escucha las palabras y las pone en práctica se
rechazada. Pero, a pesar de ello, había tenido una enorme parece a un hombre prudente que construye su casa sobre
confianza en Jesús También el centurión había acudido a Jesús piedra (cf. Mt 7,21-27).
para suplicarle que curase al siervo gravemente enfermo, y María sabe muy bien que son «bienaventurados los que
Jesús le respondió con unas palabras que podemos leer de escuchan la palabra de Dios y la guardan» (Lc 11,28), no los
forma interrogativa: «¿Acaso voy a ir yo a tu casa?», que la estudian o discuten de ella en mesas redondas: «Haced
haciéndole ver que un judío no entraba en casa de un pagano. lo que El os diga».
Pero el hombre tuvo coraje para decir: «Yo no soy digno de Las palabras de María nos interpelan
que vengas a mi casa; pero di tan sólo una palabra y mi siervo Ahora propongo que retomemos los cuatro motivos
quedará sano» (cf. Mt 8,5-13). profundos de donde nacen las palabras de la Virgen, a modo
Otra situación nos recuerda también la de María. Se trata del de meditación (el segundo escalón de la lectio divina), es decir,
episodio del funcionario real; Jesús había ido de nuevo a Caná poniéndonos en lugar de María y preguntándonos: ¿Vivimos
de Galilea, y el funcionario, que tenía un hijo enfermo, le nosotros esta actitud? ¿Nos habríamos expresado en su
apremia para que vaya a curarlo. Jesús le dice: «Si no veis situación del mismo modo que se expresó ella?
signos y prodigios, no creéis». El hombre, dolorido, insiste: 1. La prueba del silencio de Dios. Ante todo, nos preguntamos
«Señor, baja antes de que mi niño muera» (Jn 4,46-54). si somos capaces de superar la prueba de una aparente
Pues bien, María había escuchado esta respuesta de su hijo: negativa de Jesús. Vivimos a veces momentos en que
«¿Qué tengo yo contigo, mujer? Todavía no ha llegado mi advertirmos el silencio de Dios, en que parece que no nos
hora» (Jn 2,4). Los exegetas interpretan de diversas maneras responde, o nos responde negándonos lo que le habíamos
estas palabras de Jesús, las cuales, sin embargo, en ningún pedido. ¿Qué sentimientos nos asaltan en tales situaciones?
caso reflejan una aceptación entusiasta de la propuesta de la Nace en nosotros la tristeza y la desconfianza en Dios. No
madre, y ésta podría haberse echado atrás. Muchas veces sólo a nivel personal, sino también a nivel social: las
nosotros, en ocasiones semejantes, nos sentimos despechados amarguras, las injusticias, las crueldades de la situación social
y decidimos lavarnos las manos y dejar que las cosas sigan su de la humanidad—pienso, por ejemplo, en las que describe la
curso. Pero María sabe que se trata de una prueba: la prueba última encíclica del Papa, Sollicitudo rei socialis— llevan a
de la fe. muchos hombres a la conclusión de que Dios no existe, o de
Ella no se siente despechada ni se disgusta, sino que persevera que ha abandonado al mundo.
y dice a Jesús: A pesar de las apariencias, yo me fío Esta prueba del silencio de Dios roe el espíritu moderno y lo
plenamente de ti, hijo mío, e invito a los demás a que te hace suspicaz: ¿Querrá Dios de veras nuestro bien?
obedezcan sin vacilar. Se trata de una tentación muy sutil del hombre
Así pues, sus palabras manifiestan la superación de una contemporáneo, que no sabe reconocer la prueba de la fe, que
situación de prueba, de silencio de Dios. se atrinchera en el silencio de Dios como si fuera definitivo.
¡Qué distinta es el alma de María, que supera la prueba Dios, abrazando hasta el fondo el proyecto del Padre, el de
inmediatamente, sabiendo que Dios no engaña, que tiene el querer todo el bien para cada uno de los hombres y el de
corazón más grande que el suyo rescatar de todo mal a todo el hombre; el de amar a la
¡Qué distinta es el alma bíblica, tal como se expresa, por humanidad sin echarse nunca para atrás. Yo podría—dice
ejemplo, en el libro de las Lamentaciones de Jeremías, que he Jesús—llamar a doce legiones de ángeles, pero entonces no
releído precisamente en estos días, porque me parece rico en seria fiel al mandato del Padre.
indicaciones respecto de algunos de los grandes sufrimientos Así pues, Jesús identifica su bien con el querer del Padre e
de la Iglesia y de la sociedad! Las Lamentaciones contienen identifica mi bien con el suyo. El se identificó, por amor, con
frases muy fuertes, que a primera vista suenan como mi bien. Se trata de un proceso admirable de identificación
blasfemias y recuerdan las protestas de Job: «Ha quebrado mis amorosa, de transfert podríamos llamarlo, por el que mi bien
dientes con guijarros, me ha revolcado en la ceniza. Mi alma es el suyo, y morir por mi es su bien, ya que se identificó con
está alejada de la paz, he olvidado la dicha. Dije: ¡Han fenecido mi bien, de manera que yo sepa identificarme con su voluntad,
mi vigor y la esperanza que venían de Yahvéh!. (Lm 3,16-18). con lo que El sabe que es un bien para mi.
De este modo, el hombre se siente perdido frente al silencio de La frase de María, «Haced lo que El os diga», Tú eres mi
Dios, como cantamos en el salmo 66: «Tu nos probaste, oh proyecto, toca a la concepción fundamental de la vida,
Dios, nos purgaste como se purga la plata; nos prendiste en la entiende la vida como don, como tarea, como entrega de si.
red, pusiste carga en nuestros lomos; dejaste que un María tiene una confianza substancial en la vida en todos sus
cualquiera a nuestra cabeza cabalgara, por el fuego y el agua momentos, incluidos los más dramáticos, los más obscuros.
atravesamos» (vv. 10-12). Aun cuando nos viéramos afectados por una enfermedad
Pero el libro de las Lamentaciones continúa: «Esto (estas mortal, podríamos seguir diciendo: «Tú eres mi proyecto».
pruebas, estas humillaciones, esta soledad) lo daré vueltas en Porque Jesús, golpeado por la condena a muerte, dijo esa
mi corazón: quiero recobrar la esperanza. Que el amor de misma palabra al Padre por mi, y murió por identificarse con
Yahvéh no se ha acabado, ni se ha agotado su ternura; cada mi bien.
mañana se renuevan: ¡grande es su fidelidad… Bueno es ¡Qué consecuencias tan formidables tienen estas palabras!
Yahvéh para el que en El espera, para el alma que le busca. ¡Jesús, acércalas a nuestra vida, porque nuestra vida cambia
Bueno es esperar en silencio la salvación de Yahvéh» (La». cuando nos sentimos de esa forma identificados contigo, en tu
3,21-23 25-26). entrega en la cruz!
Preguntémonos: mi reacción ante la prueba, ante el silencio de 3 Nuestros desasosiegos En el corazón de María hay una
Dios, ante el cielo cerrado sobre mi, ¿se asemeja a la reacción tercera actitud: la gran esperanza de que Dios nunca engaña.
de María o a la reacción del hombre bíblico? «Haced lo que El os diga» indica la certeza de que Dios
2. La actitud del corazón humano. Hemos dicho que la frase acabará diciendo algo, de que Dios nunca nos deja sin salida.
«Haced lo que El os diga» nace de una inclinación profunda En realidad, nosotros perdemos a menudo la esperanza de
del corazón de María a hacer lo que Dios quiere, con la encontrar una salida; basta con dos o tres sucesos
convicción de que en eso consiste el bien del hombre. desgraciados para que nos desalentemos, para que nos
En realidad, el hombre contemporáneo—como, por lo demás sintamos metidos en una trampa. La percepción de haberse
el hombre de siempre cuando está encadenado a su propia equivocado o de haber entrado en una situación sin salida es
mundanidad—tiene la actitud espontánea totalmente opuesta: una de las más amargas de la vida. Quizás está equivocada la
yo sé dónde está mi bien, mi ganancia, mi provecho; el tiempo opción de vida que he hecho, o bien me equivoqué en ciertos
es mío, el vientre es mío; mi bien no es lo que Dios quiere de gestos que me comprometieron y me siento ahora como
mi. maniatado por los demás; de todas formas, me parece que ya
El hombre cree, incluso, que puede comprar su bien: ¡Te pago no hay una salida para mí.
y eres mío! La frase de María es todo lo contrario: Haced lo que El os
El «sí» de María es, por tanto, un programa revolucionario: diga, porque hay una salida Hay una solución para todas y
«Hágase en mi según tu palabra»; tu bien es el mío; mi bien es cada una de nuestras situaciones, para el mundo que a
el tuyo. Ella «respondió con todo su ‘sí’ humano, femenino, y nosotros nos parece condenado a la guerra, al hambre, al
su respuesta de fe incluía una perfecta cooperación con la desastre ecológico.
gracia de Dios que previene y socorre y una perfecta De esta certeza nacen las energías de renovación. Por eso la
disponibilidad a la acción del Espíritu Santo» (Redemptoris gran asamblea de todos los cristianos de Europa—ortodoxos,
Mater, n. 13, citada en el Mensaje para la Tercera Jornada protestantes, católicos—, que estamos preparando para el
mundial de la Juventud). 1990 y que tratará el tema «Paz, justicia, salvaguardia de la
Intentemos, en el tiempo de silencio que tendremos dentro de creación», será una formidable proclamación del hecho de que,
poco, ponernos en sintonía con la palabra de María diciendo: siguiendo la voluntad de Dios, se puede salir de la amenaza
«Señor, Tú eres mi proyecto» atómica, nuclear, bélica; se puede salir del hambre y del
Y preguntémonos: ¿Qué suscitan en mi estas palabras? Quizá subdesarrollo.
me den miedo, porque no acabo de fiarme hasta el fondo del La reciente carta de Juan Pablo II sobre el Milenio del
Señor. bautismo de Rusia está llena de esta esperanza: hay una vía de
Pero el miedo es natural, porque estas palabras sólo puedo solución a las divisiones entre las Iglesias y a las divisiones
decirlas por la gracia, por don de Dios. Es un don suyo el que entre los grandes bloques. La Virgen, a la que invocamos en el
pueda confiar en El; y, sin embargo, sólo así me encontraré a milenio del bautismo de Rusia, tiene para nosotros esa vía de
mi mismo. Porque la expresión «Tú, Señor, eres mi proyecto; solución.
¡hágase en mí según tu voluntad!» representa la convicción de 4 El espíritu discursivo. Hemos dicho, finalmente, que la
que el bien es querido por Dios, de que Dios no puede querer invitación de María a los sirvientes subraya su espíritu
más que mi bien. práctico
¿En qué consiste, por otra parte, el pecado original? En Sus palabras van orientadas a la praxis: Haced (no dice:
pensar que tal vez Dios no quiera nuestro bien, que quizá nos pensad, cavilad o reflexionad), y contrastan con el espíritu
manda cosas que no son útiles para nosotros. excesivamente teórico y discursivo que a veces encontramos
«Tú eres mi proyecto» es exactamente todo lo contrario de la en la Iglesia. El espíritu de los que piensan que los problemas
duda. Y ésa es la palabra de Jesús en la cruz. El recibe sobre no están nunca suficientemente claros, que es menester
sus hombros el árbol de la cruz para cumplir el mandato de ahondar cada vez más en el problema antes de ponerse a
actuar, que es preciso examinar las cosas de nuevo, programar Con el deseo de comprender mejor por qué escogió el símbolo
mesas redondas, reuniones, asambleas. del vino, que de suyo no representa lo puramente necesario,
Evidentemente, es importante la reflexión, la meditación sino que es algo que centellea, chisporrotea, destellea, da
como actitud contemplativa; pero se convierte en simple entusiasmo, dijimos que no se trata de la mera fe, de la fe
coartada cuando se emplea para diferir indefinidamente la necesaria para salvarse. El vino no es la mera gracia, en el
acción. sentido de que nos libre de morir en pecado grave e ir al
El verdadero espíritu mariano contemplativo es el espíritu infierno. Es mas bien la alegría de la fe, el entusiasmo de la fe,
que, a través de una contemplación afectiva y práctica, tiende la vivacidad, la vida cristiana en cuanto que es alegría y
a la compasión, a la ternura, al gesto inmediato del buen vivacidad.
samaritano, el que ella realiza en Caná y nosotros Vimos entonces que a la Iglesia de hoy le falta el vino, le falta
contemplamos en estos Ejercicios. la alegría del Evangelio. Hay ciertamente embriones de vida
«Concédenos, María, que participemos de tu compasión cristiana, intentos de vida comunitaria; pero falta el aliento, el
práctica, fruto del espíritu contemplativo. Concédenos entusiasmo. Y luego fijamos nuestras miradas en ese don
también que participemos de tu fuerza en la prueba, de tu preciosísimo, en esa perla, en ese tesoro que es la alegría del
obediencia a la voluntad de Dios, de tu confianza en el Señor y Evangelio.
en la vida. Concédenos que adoremos ahora a tu Hijo en la —La tercera tarde nos preguntamos de dónde venia esa
Eucaristía, para poder escuchar su palabra y hacer lo que El alegría; por qué no se la compra en el mercado, por qué no se
nos diga». •MARTINI-6. Págs. 57-68 la encuentra leyendo libros o asistiendo a un cursillo de
verano, ni siquiera participando en unos Ejercicios
6. LA VIRGEN MISIONERA espirituales.
Recuerdo a este propósito una frase muy hermosa de Pascal:
«Ave, por ti la gloria resplandece; «Reconozco, Dios mío, que mi corazón está tan endurecido y
Ave, por ti el dolor se extingue… tan lleno de ideas, preocupaciones, inquietudes y apegos a este
Ave, tú eres la guía hacia el celestial consejo; mundo, que ni la enfermedad, ni la salud, ni los discursos, ni
Ave, tú eres la prueba del arcano misterio». los libros, ni tus Escrituras, ni tu Evangelio, ni tus más santos
Estas y otras palabras del maravilloso himno bizantino misterios, ni los milagros, ni los sacramentos, ni el sacrificio
Akathistos que hemos cantado, nos acompañarán en la fiesta de tu cuerpo, ni todos mis esfuerzos, ni los del mundo entero,
de la Anunciación, la primera de las fiestas marianas, el pueden absolutamente nada para dar comienzo a mi
comienzo de todas las solemnidades litúrgicas en su honor; la conversión, si Tú no acompañas todas estas cosas con una
que nos recuerda ese Año Mariano que el Papa quiso asistencia extraordinaria de tu gracia».
comenzar hace un año; finalmente, la que pone fin a nuestros En nuestra meditación hemos comprendido que la alegría del
Ejercicios, durante los cuales hemos rezado juntos meditando Evangelio viene de la gloria de Dios que se derrama sobre
en el misterio de María y de Jesús en las bodas de Caná. nosotros, y no de la lectura de los evangelios ni de estar
El itinerario recorrido mucho tiempo de rodillas ni de nuestros esfuerzos.
Antes de reflexionar en el carácter misionero que María El origen de la alegría del Evangelio es Dios mismo en cuanto
quiere enseñar a la Iglesia en el misterio de Caná, me gustaría que se comunica y se manifiesta como amor, vida, vitalidad; es
resumir brevemente lo que hemos vivido hasta ahora. La su gloria. Gloria que Jesús manifiesta en el misterio de Caná,
elección de un texto del evangelio de Juan ha sido ciertamente fuerza de Dios comunicada al hombre. Podemos decir
un poco atrevida. En efecto, el cuarto evangelio es el libro del también: la fuente de nuestra alegría es el Espíritu Santo, que
cristiano maduro, del cristiano contemplativo; supone, por es la gloria de Dios irradiada sobre la humanidad.
tanto, el conocimiento práctico y el camino recorrido según Si nos falta la alegría, es inútil buscarla en los libros o por la
las etapas de los otros evangelios—de Marcos, Mateo y calle. Hemos de abrir el corazón a la plenitud del don de Dios
Lucas—. En Juan se contempla todo en su unidad, y cada uno que nos atrae hacia Sí, que nos une a la gloria de Cristo, que
de los episodios, en cierto modo, apela a todos los demás hace de nosotros una sola cosa con Jesús comunicándonos el
episodios evangélicos, recuerda el misterio completo de Dios, Espíritu en abundancia
esto es, al Padre que revela al Hijo, al Hijo que da su vida en ¿Cómo y a través de qué medios se nos comunica el Espíritu,
la cruz, a la Iglesia que nace de la cruz de Jesús, a la la gloria de Dios, la alegría del Evangelio? No mediante un
humanidad salvada. simple contacto místico con lo divino, no por una especie de
Por eso, para meditar el episodio de Caná hemos tenido que compenetración del misterio de Dios con la pobreza de
referirnos al prólogo, a la pasión, al costado abierto de Jesús, a nuestra vida, sino a través de la cruz. La cruz es el camino
María al pie de la cruz del Hijo que muere por amor. preciso y concreto a través del cual nos da Dios la alegría del
—El evangelio de Juan nos obliga a una mirada contemplativa Evangelio. Porque la gloria de Dios se manifiesta y estalla en
y global, como intenté subrayar la primera tarde, al presentar la historia—por así decirlo—, en la muerte de Jesús en la
el conjunto del relato y exponer la multiplicidad de las cruz. En la cruz se nos comunica como don, como vida, lo
personas, de los signos, de los símbolos, de las realidades mismo que la sangre y el agua que brotan del costado de Jesús
evocadas, para disponernos con la mente y el corazón abiertos crucificado empapan el mundo entero.
ante la riqueza de revelación expresada en unas pocas líneas. El vino de la alegría del Evangelio pasa necesariamente y tan
Si Juan no nos hubiera transmitido el episodio de Caná, nos sólo a través del amor del Crucificado, que nos amó hasta el
habría privado de una de las páginas más bellas de la fin y resucitó por nosotros. Por tanto, es ahí donde podemos
Escritura. alcanzarla. Cuando decimos que Jesús resuelve todos nuestros
—La segunda tarde nos centramos en un símbolo particular, problemas, que El es nuestra vida, tenemos que entender
pero central, de este episodio: el vino. El vino que llega a siempre a Jesús crucificado y resucitado. Las palabras «Yo soy
faltar, el vino que María se da cuenta que escasea, el vino que el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por
después abunda. mi» (Jn 14,6) las refiere Jesús a Si mismo, que murió por
Nos preguntamos cuál era el significado simbólico del vino nosotros, que nos salva desde la cruz, que en este increíble
según Juan, y respondimos que era la alegría del Evangelio. misterio de debilidad, de pobreza, de ignominia, manifiesta el
Podríamos haber respondido también que era la fe, que era la poder, la gracia, la misericordia infinita del Padre. Esa es la
gracia del Nuevo Testamento. Todo esto significa el vino. gloria de la cruz de la que la Iglesia recibe la alegría del
Evangelio.
—La cuarta tarde nos preguntamos cómo actúa en nosotros, esa alegría. Todo el que ha recibido una buena noticia, un
concretamente, esta gloria de la cruz. Y comprendimos por las hecho que lo llena de entusiasmo, siente el deseo de hacer
palabras de María, «Haced lo que El os diga», que actúa a participes de él a los demás.
través de la obediencia a Jesús, a través de la aceptación del Pero si uno no tiene esta buena noticia, no tiene nada que
proyecto de Dios sobre nosotros. decir a los hermanos. La primera raíz de una Iglesia
Cuando consigo decirle a Jesús crucificado, resucitado, misionera, de una comunidad misionera, es, por consiguiente,
glorioso: «Tú eres mi proyecto», entonces la gloria de la cruz estar, como María, llena del Espíritu Santo, llena de la alegría
entra en nosotros y la alegría nos transforma, nos vivifica, del Evangelio. Una Iglesia que prepara el camino
vivifica a nuestras comunidades, a nuestra Iglesia, a la La Virgen, cuando advierte que falta el vino, la alegría, y se da
humanidad. Después de haber intentado contemplar, poco a cuenta de que va a explotar la tristeza, se dirige a Jesús: «No
poco, este admirable fresco de la Redención que es el suceso tienen vino». No se pone ella en el centro, sino que hace
misterioso de Caná, nos queda por comprender de qué modo intervenir a Jesús, instintivamente. Igualmente, no es la
se difunde la gloria de la cruz, que a través de la aceptación Iglesia la que da la salvación. Tampoco yo me hago misionero
del proyecto del Crucificado sobre nosotros se convierte en empeñándome en pensar por mi mismo. Hemos de pedir a
alegría del Evangelio, en alegría de nuestro corazón. Es decir, Jesús que intervenga; hemos de poner a los otros en contacto
de qué modo la Iglesia se hace misionera. con El.
Es una pregunta que con frecuencia me hacen los jóvenes, El espíritu misionero pone a otros en contacto con la fuente
cuando me encuentro con ellos en las parroquias: ¿Cómo que primero le ha llenado a uno de alegría. Quiero hacerte
puede hacerse misionero nuestro grupo? Y a veces los jóvenes participar de la amistad que llena mi vida, que transformó en
añaden: Nos sentimos un poco cerrados, parece que nos gusta alegría mi tristeza, que me reveló el Amor.
dar vueltas sobre nosotros mismos, ser prisioneros de Observemos otro hecho curioso en el relato de Caná. Jesús
nuestros problemas, pero nos gustaría ser más misioneros, está ya allí, invitado a la boda, pero hasta aquel momento es
mas expansivos. como si no estuviese; es uno de tantos, un desconocido; su
Y nosotros le hacemos a la Virgen esta pregunta: ¿Cómo eres poder divino no brilla, no es utilizado, pero está presente. La
tú, María, misionera de la alegría de Cristo crucificado, de la Iglesia se hace misionera no introduciendo a la fuerza el
gloria, del don del Espíritu Santo que alegra el corazón del mensaje evangélico en el corazón del hombre, porque Jesús ya
hombre? está allí, se ha invitado El mismo a la jornada de cada uno, a la
La Virgen nos presenta, precisamente en el episodio de Caná, fiesta de la vida, al banquete cotidiano. Jesús está allí como
el modelo de una Iglesia misionera, de una Iglesia llena de esperanza y como promesa, como germen, como gracia actual.
atención a la falta de fe y de alegría que aflige a gran parte de Espera que alguien lo mueva, como hizo María; que alguien le
la humanidad. haga sentir presente, le deje sitio.
La primera raíz de la Iglesia misionera La Iglesia es misionera en la medida en que descubre que
«Y, como faltara vino, le dice a Jesús su madre: ‘No tienen Jesús está ya esperando en el corazón de cada hombre, de cada
vino’» (Jn 2,3). Me gustaría que comprendierais que el relato mujer, de cada niño que nace; y le permite obrar y actuar
evangélico es realmente extraño e improbable. Nosotros, haciendo que se le deje sitio, despertando a su presencia.
siguiendo la probabilidad de lo ocurrido, lo habríamos A menudo la vida misionera de nuestras comunidades es
compuesto de esta manera: Durante un banquete, sucedió que pesada, incapaz de moverse, porque queremos hacerlo todo
faltó vino; los sirvientes se dieron cuenta de ello y avisaron nosotros; creemos que se nos pide quién sabe qué, siendo así
preocupados al maestresala. Este fue a hablar con el esposo, y que es Jesús el que cambia el agua en vino, el que da la alegría
ambos se dijeron: ¿Qué vamos a hacer? Y dándose cuenta de del banquete. La Iglesia, como María, es la que urge, la que
la presencia de Jesús, que al parecer era un gran profeta, sin empuja, la que habla con los sirvientes, la que prepara el
atreverse a pedirle directamente ayuda, fueron a María y le camino. Jesús está ya realmente allí, y su fuerza está ya
dijeron: Intercede por nosotros, para que tu hijo nos saque del dispuesta.
apuro. Una Iglesia que sabe comprometer
En realidad, la descripción del evangelista es muy diferente. Para poner en movimiento el poder de Jesús, María se dirige a
Nadie se da cuenta de que el vino escasea: ni los sirvientes, ni los sirvientes. En el texto griego la palabra es «diáconos»; es
el maestresala, ni los invitados, y mucho menos el esposo. una palabra muy hermosa: «La madre dice a los diáconos:
Cosa extraña. Sólo una persona, María; sólo ella. Haced lo que El os diga».
¿Por qué te das cuenta, María, de que va a faltar la alegría en Estos diáconos ponen manos a la obra: llenan de agua las
el banquete? ¿Por qué te das cuenta de que en nosotros, en el tinajas, luego sacan de su contenido y se lo llevan al
mundo, falta la alegría del Evangelio? Simplemente, porque la maestresala.
Virgen tiene esa alegría. Y al tenerla en sí misma, tiene una Podría haber ido la Virgen a buscar agua. Pero no; ella suscita
sensibilidad instintiva para captar dónde falta. Llena de colaboradores, suscita la actividad de la gente, la mueve, de
Espíritu Santo, advierte instintivamente cuándo y dónde le forma que todos entren lo más posible en ese movimiento en
falta al hombre la alegría del Espíritu ¿Qué conclusión el que Jesús da el vino de la gracia, de la alegría, de la
podemos sacar para la Iglesia? Que cuando la Iglesia está plenitud. El secreto de una Iglesia misionera, de una Iglesia
llena de la alegría evangélica, se siente inmediatamente misionera también en medio de nosotros, donde muchos sólo
movida hacia quien no la tiene. Este es el secreto del espíritu tienen una gota del vino del Evangelio y están a punto de
misionero. No sirve preocuparse mucho de los demás y quizá agotar lo poco que queda en su jarra y morirán luego de sed o
no saben luego qué es lo que hay que darles, y preguntarse: de inanición, es multiplicar los colaboradores, hacer que cada
¿Qué hemos de hacer para llevar el Evangelio? uno de nosotros se encuentre con algunos de ellos. Pobre de
Es fundamental tomar conciencia de la alegría que nos falta, aquella parroquia cuyo párroco dijese: «¿Cómo voy a ser
de la alegría de la fe, y pedírsela a Dios por intercesión de misionero con todo el trabajo que tengo? ¡Es imposible»
María: Señor, dame de ese vino; Señor, dame la plenitud de tu A veces me preguntan: ¿Cómo consigue llevar el peso de los
Espíritu. cinco millones de personas que viven en Milán? ¿Qué hace
Pero también hemos de tomar conciencia de la alegría que con todos los que no van a la iglesia? Pero sería absurdo y
tenemos por gracia de Dios, porque cuando la sintamos en blasfemo pensar que el Señor nos carga con tal peso. Tampoco
nosotros, instintivamente nos daremos cuenta de dónde falta, María llevó ella sola el peso de aquellos pocos invitados de
y surge entonces en nosotros el deseo de ayudar, de transmitir Caná, porque buscó colaboradores, personas a las que
involucrar. Y entonces, de uno nacen cinco, de cinco nacen En realidad, derramar sobre otros la alegría del Evangelio es,
veinticinco y, a través de las personas de buena voluntad, se simplemente, el desbordamiento de la alegría que hay dentro
multiplica la actividad misionera de la Iglesia. de nosotros.
Jesús empezó exactamente así, no haciéndolo El todo, sino Por eso mismo deseo que otros muchos puedan realizar como
llamando a los Doce, que a su vez involucraron y vosotros, en nuestra Iglesia, la experiencia del contacto
comprometieron luego a otros. silencioso, adorante, con el misterio de Jesús, con el misterio
Iglesia misionera es la que sabe comprometer; a menudo de María, para saborear aunque sólo sea una pizca de la
nuestras comunidades no son misioneras, porque ponen todo alegría evangélica, que se convierte en el motor, el fermento,
el trabajo en manos de unos cuantos que se atribuyen todas la semilla, el germen que rompe la piedra, que florece en todas
las prerrogativas, todo el peso, todo el heroísmo. partes, que no teme los diversos climas, que pasa a cualquier
«Haced lo que El os diga»: María tiene el secreto de hacer que ambiente, que sabe emigrar a cualquier realidad, porque la
cada uno haga algo. Es poco ir a buscar agua; pero el Señor vivifica desde dentro, con la fuerza misma que viene de la
hará lo demás. gloria de Cristo, del amor del Padre, del sacrificio do Hijo, de
Así pues, la Virgen nos ofrece realmente un camino para la la energía del Espíritu Santo. Energía que llenó, ante todo, el
apertura misionera, evangelizadora, que el Papa nos recuerda corazón de María con aquella alegría, con aquella grandeza,
tantas veces afirmando la necesidad de una nueva con aquel esplendor que ahora nos disponemos a cantar,
evangelización en Europa. No la realizaremos por el esfuerzo honrando en Ella el primer gran prodigio de la gloria de Dios.
heroico de unos pocos, sino que hemos de comprometernos en •MARTINI-6. Págs. 69-80
un movimiento gradual, simple, cotidiano, cada uno en su
propia realidad, en el lugar donde vive, en su propio ambiente, 7. ESTAR CON JESÚS
ayudándonos unos a otros y haciendo con sencillez esos
gestos auténticos que consisten en dejar que desborde la «Abre, Señor, nuestro corazón a la escucha de tu Palabra, y
alegría del Evangelio, en colaborar para dejar sitio a Jesús que haz que nos liberemos para ello de nuestra agitación interior y
ya está presente. nos dejemos invadir, en cambio, por el deseo de conocerte
El buen vino por sí solo se recomienda como Tú nos conoces.
De esta página del evangelio se deduce una última Concédenos, por la gracia de tu Espíritu, que dejemos brotar
característica misionera, cuando se dice que el maestresala, las preguntas verdaderas que Tú mismo nos pones en el
después de probar el vino, llamó al esposo y le dijo: «Todo el corazón».
mundo sirve primero el vino bueno y, cuando ya están La Escuela de la Palabra es un ejercicio para aprender a orar
bebidos, el inferior. Pero tú has guardado el vino bueno, hasta personalmente a partir de la Sagrada Escritura. No es, por
ahora». (Jn 2,10). ¿Qué me sugiere este detalle, casi consiguiente, sólo una introducción a la lectura o la
humorístico, del relato? comprensión de la Biblia, sino una introducción a la
Me sugiere que el vino bueno se recomienda a sí mismo; no contemplación de Jesús, que nos habla a través de las páginas
porque tenga etiquetas polvorientas ni señales de marca, ni inspiradas por Dios, y a la contemplación del Padre en Jesús,
porque proceda de colinas privilegiadas. Se recomienda a sí que está presente aquí y está haciendo algo por nuestra vida,
mismo porque es bueno; es bueno hasta el punto de que todos por la vida de cada uno de nosotros.
lo saborean con agrado. En los encuentros de este año estáis siguiendo la lectura del
Nosotros, en nuestra vida misionera, no somos personas que evangelio según Marcos a través de algunos pasajes que
tengan que malvender, con temor, un material deteriorado, ponen de relieve los momentos decisivos, los saltos
rogando tímidamente a los clientes que tengan paciencia y cualitativos en el camino educativo cristiano. En efecto, la
que lo acepten hasta que haya otra cosa mejor. acción educativa de Dios avanza también a través de
El vino bueno se recomienda por sí mismo; la alegría del momentos de ruptura, el principal de los cuales es la
Evangelio es buena para todos, tiene un sabor inconfundible, conversión cristiana.
y quien lo gusta no pregunta de qué fábrica viene, de qué Esta conversión se nos vuelve a proponer en diversas edades
grupo, de qué realidad. Es sabroso por sí mismo, si es la de la vida y en diversas situaciones de nuestro itinerario
verdadera alegría del Evangelio. Y nuestra misión—sobre humano personal.
todo la misión del obispo—es difundir el gusto de esa alegría Los textos del evangelio que se han elegido presentan
que no es privilegio de nadie, ni de esta o aquella realidad, ni claramente todo esto en el camino de los apóstoles que siguen
de este grupo; es igual para todos; es el mismo vino a Jesús.
evangélico, y lo importante es que sea auténtico, genuino. En el anterior encuentro reflexionasteis sobre el deseo de
Entonces todos pueden involucrarse, todos y cada uno pueden cambiar como condición fundamental para la educación en la
tener su propia parte. Luego cada uno lo difundirá según sus fe, a partir del capítulo 1 de Marcos (vv. 14-20). Esta tarde
carismas, sus dones, pero no como producto propio, como proponemos una página del capítulo 3, y nos preguntaremos:
etiqueta reservada, porque es la alegría de Jesús, una alegría ¿Qué profundización en la conversión expresa para los
que pertenece a toda la Iglesia, a todos los grupos, a todas las apóstoles? ¿Qué arduo desfiladero exige pasar?
latitudes. Alegría de Jesús, en la que me encuentro con un Intentaré ayudaros a responder a estas preguntas con el
cristiano en China, en Corea, en Méjico, y me doy cuenta, al ejercicio de los tres escalones de la lectio divina: la lectura; la
rezar juntos, que tiene la misma calidad, el mismo sabor, la meditación y reflexión; y la oración o contemplación
misma fuerza, la misma capacidad de entusiasmarnos a mi y a —La lectura estimula nuestra atención a las palabras escritas,
él. para captar con una mirada global lo que se nos dice en el
Lo que le importa, sobre todo, a la Virgen, a la Iglesia, al pasaje; qué otros episodios del evangelio nos recuerda este
obispo, es, por tanto, que la alegría auténtica del Evangelio texto; qué circunstancias de lugar y de tiempo aparecen en él;
nos llene el corazón y la vida con toda su verdad. De lo cuál es la acción fundamental del relato.
contrario, seríamos como los que venden un producto sin —La meditación es el segundo escalón y consiste en
conocerlo bien, sin apreciarlo; seríamos como los que intentan preguntarnos: ¿Qué fue lo que ocurrió aquí con los Doce que
«colar» algo casi a traición, porque ellos no lo han gustado y ocupan el centro del episodio? ¿Y qué supone esto para mi?,
valorado primero. ¿qué me dice a mi?
—La contemplación u oración la haremos en silencio, con la
ayuda de tres breves preguntas que os sugeriré. Esta oración
podría profundizarse luego, para el que así lo desee, en el arduo desfiladero que obliga Jesús a pasar a los que le siguen,
sacramento de la Penitencia. el salto cualitativo que les exige dar?
En el capítulo 1 se trataba de dejar las redes y de seguir con
confianza al Señor, con la esperanza un tanto vaga de hacerse
EL SALTO QUE JESÚS OBLIGA A DAR: LECTURA DE
pescadores de hombres.
/MC/03/13-21 Pero es necesario que el primer entusiasmo se solidifique. De
Leemos el texto: «Subió al monte y llamó a los que El quiso; y hecho, el texto evangélico dice que Jesús instituyó a los Doce.
se fueron donde El. Instituyó Doce, para que estuvieran con Les dio un modo de ser estable, haciéndoles participes de lo
El y para enviarlos a predicar con poder de expulsar los que El hacía; los instituyó para que estuvieran con El, para
demonios. Instituyó a los Doce: Simón, a quien dio el nombre enviarlos a predicar, para que tuviesen el poder de echar los
de Pedro; Santiago el de Zebedeo y Juan, hermano de demonios
Santiago, a quienes puso por nombre Boanerges, es decir, —Esta es precisamente la acción fundamental de este pasaje.
hijos del trueno; Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Jesús hace posible el salto cualitativo en la fe, instituyendo a
Santiago el de Alfeo, Tadeo, Simón el Cananeo y Judas los Doce para que estuvieran con El y también para que
Iscariote, el mismo que le entregó. De vuelta a casa, se fuesen a predicar y tuvieran el poder de echar los demonios
aglomeró de nuevo tanta gente que no le dejaban ni comer. Al Los Doce se deciden por una opción, por una responsabilidad
enterarse sus parientes, fueron a echarle mano, pues decían estable frente a los demás, por una nueva experiencia de
que no estaba en sus cabales»s. madurez cristiana.
—En su globalidad, el pasaje consta de dos escenas que Si el primer acercamiento a Jesús podía tener todavía el
contrastan entre si. La primera, del versículo 13 al 19, refleja carácter de intento, de búsqueda, quizá de un poco de
un acercamiento a Jesús, un movimiento hacia El: Jesús llama curiosidad, de una cierta prueba (¡vamos a ver qué pasa!),
a algunas personas, las cuales van y se quedan con él. ahora se trata de una auténtica opción de fondo.
La segunda, versículos 20 y 21, presenta un movimiento de —Veamos finalmente, las circunstancias de la narración.
distanciamiento, de alejamiento de Jesús, que es considerado Subrayo los tres lugares que ya he recordado: LAGO-
como fuera de sí y de la realidad, fuera de la racionalidad MONTE-CASA
humana. El lago donde Jesús estaba predicando, en medio de una gran
Mientras que en el centro de la primera escena destaca la muchedumbre de gente venida de toda Palestina. Jesús se ve
importancia del estar con Jesús, en el centro de la segunda obligado a subir a la barca.
encontramos la exclamación: No conseguimos entenderlo. El monte, al que—según el relato paralelo del capítulo 6 del
Ahora bien, ¿qué es la conversión cristiana?; ¿en qué consiste evangelio de Lucas—se había retirado a pasar la noche en
el salto cualitativo expresado en este punto del camino? oración, antes de llamar a los Doce.
Es la diferencia entre el primero y el segundo modo de La casa, que hace suponer que Jesús volvió al lago, lugar
relacionarse con Jesús. Fijaos en que en ambos casos se trata habitual de vida de la gente.
de personas amigas, de personas que quieren a Estos tres lugares son particularmente significativos.
Jesús; los Doce, que lo seguirán durante toda la vida; y los En efecto, el lago indica el lugar de la predicación y de la
«suyos», o sea, sus parientes, sus hermanos, que no son caridad (Jesús curó junto al lago a muchos enfermos); el
ciertamente adversarios suyos. monte indica el lugar de la oración, de la opción, de las
Pero, mientras que los primeros dicen: «Estamos contigo», grandes decisiones; la casa es el lugar de la vida cotidiana.
los segundos concluyen: «No te comprendemos». El Señor pasa del uno al otro; podríamos decir: del púlpito al
El paso del no entender al Señor, del no comprender qué es lo altar y a la vida de cada DIA; del momento de la escucha de la
que quiere decir, a la expresión: «Queremos estar contigo», Palabra al momento de la oración profunda, de la Eucaristía;
constituye el salto especifico de la conversión cristiana que de la oración al momento de la decisión de cada DIA. Pasa de
aquí se hace visible. una a otra de estas realidades santificándolas, encontrándose
En el evangelio de Marcos hay, sin embargo, una escena con la gente, dejándose provocar por las dramáticas
anterior que conviene tener presente. Al comienzo del situaciones humanas que se le presentan y provocándolas, a su
capítulo 3, Jesús se ve tan estrujado por la muchedumbre que vez, él mismo. Podemos decírselo en la oración:
tiene necesidad de subir a una barca para que no lo aplasten «Señor, ¡provócanos también a nosotros! Pasa por en medio
(v. 9). Tras la escena del lago viene la del monte, que de nosotros, estemos donde estemos: ya sea que nos
constituye la primera parte de nuestro pasaje, donde Jesús encontremos entre la gente, o en el lugar de oración, o en las
llama a los Doce. Viene finalmente la escena en casa (v. 20), realidades de la vida cotidiana. Haz que no haya diferencias
con el alejamiento de El. entre unas cosas y otras, que no reneguemos en la vida
En el centro de los tres episodios (el lago, el monte, la casa) se cotidiana de Aquel a quien hemos querido conocer en el
recoge la lista de los Doce: desde Simón hasta Judas Iscariote. monte. Haz que haya unidad entre los diversos momentos de
Es una lista sagrada, antiquísima, porque la Iglesia está nuestra existencia».
fundada sobre los Apóstoles y, de hecho, nosotros repetimos
sus nombres en el canon de la Misa para afirmar nuestra ENAMORARSE DE JESÚS: PUNTOS PARA LA MEDITACIÓN
comunión con ellos.
En la meditación del mes pasado conocisteis y meditasteis en Hemos dicho que la meditación consiste propiamente en
la figura de Simón y de su hermano Andrés—los dos primeros hacerle preguntas al texto. Podemos interrogar a los Doce,
llamados—, y luego en la de Santiago y la de Juan. Por tanto, podemos preguntar a Pedro o a Juan: ¿Qué significó para ti
ya conocéis, mientras que los otros se mencionan por primera aquel paso? ¿Qué supuso en tu vida y qué puede suponer para
vez en este párrafo la MIA? Creo que los apóstoles nos responderían: para
—Después de esta mirada global, nos preguntarnos si esta nosotros significó ponernos definitivamente de parte de Jesús,
página nos recuerda otras. Ciertamente recordamos el desafiando incluso la incomprensión de quienes no lo
capítulo 1, donde se describe la llamada de Simón y de su comprendían, a pesar de quererlo. Para vosotros podría
hermano Andrés, la de Santiago el de Zebedeo y su hermano equivaler a salir un poco fuera de vosotros mismos, de vuestra
Juan. ¿Qué diferencia hay entre las dos llamadas? ¿En qué forma de concebir la vida y de planear vuestra existencia, y
consiste la «novedad» de la llamada de los Doce? ¿Cuál es el asumir una tarea eclesial, una tarea de servicio a la
comunidad, una tarea de compromiso para toda la vida.
Si quisiéramos interrogarles un poco más cordialmente, Podemos decir que la escena de la tempestad calmada por
pidiéndoles que trataran de describirnos la experiencia que les Jesús es una parábola «en acción», que hace visible la
hizo estremecerse por dentro, creo que insistirían en la experiencia que nos describe la parábola del sembrador (Mc
experiencia de salir de si, incluso de perder el juicio, y lo 4,1 ss.), en la que se habla de la semilla que cae en terreno
explicarían como un enamoramiento, como un sentirse pedregoso, o sea, de los que acogen la palabra «con gozo, pero
irresistiblemente atraído por alguien. Antes teníamos cierta no tienen raíces, son inconstantes, y por eso, cuando llega
estima de Jesús y lo veíamos con cierta curiosidad; ahora alguna tribulación o persecución por causa de la palabra,
estamos con El, de su parte, sentimos que lo amamos, que ha enseguida sucumben» (v. 17).
conquistado nuestro corazón. «El enamoramiento —dicen los Ahora los apóstoles, que quizá creían «tener hondas raíces»,
apóstoles—, estrictamente hablando, no es algo que se decide, sienten miedo y comprenden que, si no se supera este umbral,
sino que ocurre, sucede, acontece…; al menos, este fue nuestro no se entra de veras en el camino cristiano. El tema central de
caso, porque fuimos elegidos, sin decidirlo nosotros. Sin nuestro pasaje es, por tanto, la superación del miedo. En
embargo, tuvimos la sensación de ir libremente detrás de términos más laicos, podría decirse: el problema de la timidez.
Jesús, de caminar con libertad y alegría, movidos por el amor. ¿Por qué nunca tomamos ciertas decisiones que, sin embargo,
La experiencia que viven los apóstoles, el nuevo salto son importantes? ¿Por qué, después incluso de haberlas
cualitativo, es el que va del seguimiento respetuoso al tomado, nos asalta la angustia y nos echamos atrás? ¿Que es
enamoramiento, a la dedicación, al dejarse tomar, al dejarse lo que hay dentro de nosotros y qué es lo que tiene que vencer
agarrar sin condiciones. Jesús para proponernos que nos libremos de ese miedo?
El miedo a fiarse: lectura de /Mc/04/35-41
En la relectura de un episodio es importante saber dividir
PREGUNTAS PARA LA ORACIÓN PERSONAL
mentalmente los momentos de la acción.
Para vuestra contemplación silenciosa, os sugiero yo también En este episodio hay tres momentos:
tres preguntas, a partir de la experiencia de Pedro, de Juan y — el momento preparatorio, en el que se señalan las
de los otros: condiciones de tiempo y de lugar en que sucede el hecho;
1. - ¿Acepto, deseo dejarme agarrar de ese modo? Si, delante — el momento central, el hecho mismo: la tempestad, la
del Señor, El me preguntase: «¿Quieres dejarte agarrar por mi reacción de Jesús y de los discípulos;
amor?», ¿cómo le respondería yo? Tratad de ver lo que sentís — el momento final, la conclusión del relato.
en vuestro interior y de qué modo respondéis a la pregunta. Considerémoslos pormenorizadamente.
2. - ¿Me dan miedo las consecuencias de dejarme agarrar? Es 1. El momento preparatorio: «Ese DIA, al atardecer, les dice
fácil imaginar enseguida algunas consecuencias de este tipo: si (Jesús): ‘Pasemos a la otra orilla’. Despiden a la gente y lo
de verdad me dejo agarrar, quién sabe las opciones que llevan en la barca, como estaba; e iban otras barcas con él» (vv
tendría que tomar. Quizás hacerme sacerdote, religiosa… 35-36).
Estoy bastante asustado. ¿Adónde me llevarías, Señor? Creo La circunstancia de tiempo se describe con la expresión «Ese
que el Señor responderá: Te llevaré a ser cristiano, a estar DIA». ¿Qué DIA? El de las parábolas, en que Jesús había
conmigo. De hecho, ser cristiano es, simplemente, estar con hablado de ciertas realidades que ahora hace experimentar a
Cristo. Lo demás es fácil; lo demás vendrá según las llamadas los discípulos.
concretas que cada cual reciba. «Al atardecer»: la tarde es el momento de la soledad, de la
Lo que yo quiero—dice el Señor—es que tú aceptes, que no Palabra. Recordad a los dos discípulos de Emaús, que dirán a
tengas miedo a las consecuencias de dejarte agarrar de ese Jesús: «Quédate con nosotros, Señor, que atardece» (Lc
modo, de dejarte invadir por dentro. 24,29).
3. - ¿Has probado alguna vez algo parecido? ¿Has intentado La tarde es el momento en que a uno le gusta quedarse
alguna vez estar con Jesús? Quizá nos demos cuenta de que ya tranquilo, en la intimidad y en la paz.
hemos sido agarrados por él, aunque no nos demos cuenta de Pero Jesús les dice: «Pasemos a la otra orilla». Mientras que a
las consecuencias afectivas globales que esto supone; pero los discípulos les habría gustado dormirse en los laureles, sin
otras veces sí nos damos cuenta, y son entonces los momentos tener que tomar decisiones comprometedoras, el Señor les
de la alegría desbordante. obliga a cambiar de lugar.
El evangelista añade: «Lo llevan en la barca, como estaba».
No es fácil comprender lo que quiere decir. Quizá pretende
DEJEMOS QUE ESTA EXPERIENCIA NOS INUNDE. indicar que Jesús estaba cansado. Según la descripción del
¿He intentado alguna vez estar con Jesús? ¿Quiero intentarlo mismo capítulo 4, v. 1, había subido a la barca al comienzo de
ahora? La experiencia que Jesús te pide que hagas es que estés la jornada, había hecho que lo alejaran un poco de la orilla y se
con él ahora. Jesús quiere que lo mires (releyendo el pasaje habla puesto hablar a la gente. Al atardecer, por tanto, estaba
evangélico), que escuches sus palabras que llaman (¿y si entre agotado y quería marcharse como estaba, sin tener que volver
los Doce nombres estuviera el tuyo?), que reflexiones sobre lo a casa. Dejan una situación tranquila, de un cierto prestigio
que puedes hacer en tu vida para estar más con él. conquistado ante la gente, y se van. Quizá los discípulos
«Te doy gracias, Señor, porque me llamas ahora; porque la pensaran que se trataba de una rareza de Jesús; de todas
llamada bautismal es para estar contigo; porque tú, a través de formas, lo toman y se lo llevan consigo.
la vida de la Iglesia, con el Concilio, con el Sínodo de los Señor, también yo te acojo tal como eres, porque también yo
laicos, me llamas a dejarme agarrar por ti. estoy muchas veces cansado, rendido, y puedo comprenderte.
¿De qué tengo miedo aún, Señor? ¿Qué deseo? ¿Qué debo 2. El momento central. «En esto, se levantó una fuerte
superar?¿Cuáles son las dificultades que me asustan? borrasca y las olas irrumpían en la barca, de suerte que ésta se
Concédeme, Señor, el gusto de estar en silencio contigo». anegaba» (v. 37).
•MARTINI-6. Págs. 83-91 El hecho central es descrito, ante todo, como una tempestad.
Luego el evangelista nos dice de qué modo lo vive Jesús: «El
8. SUPERAR EL MIEDO Y FIARSE DE JESÚS estaba en popa, durmiendo sobre un cabezal» (v. 38a).
Y, finalmente, cómo lo viven los apóstoles: «Le despiertan y le
El evangelista Marcos nos presenta esta tarde el relato de la dicen: ‘Maestro, ¿no te importa que perezcamos?’» (v. 38b).
tempestad calmada (Mc 4, 35-41), que viene inmediatamente a Examinemos cada una de estas palabras: la «borrasca» indica
continuación del discurso en parábolas. un vendaval, un temporal, un torbellino tormentoso que
sacude las aguas. Si lo hemos experimentado alguna vez, del libro del Apocalipsis, donde, ante la gloria de la Jerusalén
podemos pensar en lo que se siente cuando el mar está agitado celeste, se dice a modo de contraste: «Pero los tímidos
o cuando, en el avión, se entra en un torbellino de viento que (traducido generalmente por «cobardes», que es también una
hace que todo vibre y se estremezca. En cualquier caso, no es traducción exacta), los incrédulos, los abominables, los
difícil imaginar el miedo que debieron experimentar los asesinos, los impuros, los hechiceros, los idólatras y todos los
discípulos: la barquilla se ve sacudida por las olas, entra el embusteros tendrán su parte en el lago que arde con fuego y
agua, intentan achicar con las manos para no hundirse, les azufre. Esta es la segunda muerte» (Ap 21,8).
tiemblan las rodillas, cunde el pánico, la tragedia es Esta dramática descripción recuerda el infierno del Dante: en
inminente… Por eso se atreven a despertar a Jesús. el primer circulo de los condenados están los pusilánimes, los
Pero ocurre algo extraño: ¿por qué duerme Jesús? La barca cobardes «ni agradables a Dios ni a sus enemigos. (cf. Divina
debía de tener una especie de cubierta en popa, y él se había Comedia, Infierno, III, 60ss.). Entre ellos ve el Poeta la
acurrucado allí dentro, donde no se sienten las olas; duerme sombra de «aquel que por villanía cometió el gran rechazo»,
sobre un cabezal, porque está rendido de cansancio y no se da el que tuvo miedo de pronunciarse (quizá Celestino V, o tal
cuenta de nada. La figura de Jesús durmiendo nos recuerda el vez Pilato). Un miedo, el suyo, que no fue un episodio
episodio bíblico de Jonás, sumido en el sueño durante la marginal de su vida, sino algo decisivo para su no-realización.
tempestad, en la bodega del barco. Pero Jonás estaba en la Por eso el pasaje del Apocalipsis pone a los tímidos con los
bodega para ocultarse, para huir de Dios. Jesús, por el incrédulos, con los impuros, con los homicidas, con los
contrario, es la presencia misma de Dios, es la ausencia de inmorales, con los idólatras, con los mentirosos. Y observad
temor incluso en el ojo del huracán. Sin embargo, los cómo encontramos también en Jesús la misma relación del
discípulos todavía no comprenden nada de esto e incluso se Apocalipsis entre los tímidos y los incrédulos: «¿Todavía no
irritan, como nos irritamos a veces nosotros cuando vemos a tenéis fe?».
alguien bromear y sonreír ante el peligro. Lo que hemos de comprender esta tarde es que el miedo de los
Y los discípulos lo despiertan con una frase de reproche: discípulos no es sólo miedo físico, timidez, sino el miedo a
«Maestro, ¿no te importa que perezcamos?». La expresión es fiarse de Jesús.
muy dura y nos recuerda aquella queja de Marta a Jesús: «¿No Los discípulos tienen miedo de fiarse hasta el fondo, y vuelven
te importa que mi hermana me deje sola con todo el trabajo?» a contar con sólo sus propias fuerzas; pero en seguida
(Lc 10,40). Los apóstoles parecen decir: «No sólo no te constatan que eso no basta, y les invade el miedo. Hasta
comprendemos, sino que no podemos entender cómo tú, en entonces no lo habían experimentado: habían dicho «sí» al
esta situación sigues durmiendo». No piden tan sólo un apoyo Señor, poniéndose entre sus oyentes, cuando estaban con el
moral, sino que les eche una mano, que se ponga también él a Bautista; luego le dieron otro «sí» a Jesús cuando éste les
achicar agua. propuso: «Venid conmigo. Seguidme».
Hemos llegado al momento cumbre del episodio: «El, Sin embargo, en este momento de su vida, se ven sometidos a
habiéndose despertado, increpó al viento y dijo al mar: ‘ Calla, prueba, y una prueba seria. Su «sí» no tenía raíces profundas,
enmudecer’. El viento se calmó y sobrevino una gran y era preciso que se viera sacudido y pasado por el tamiz de la
bonanza» (v. 39). tribulación. Porque cada «sí» de la vida, cada «sí». que quiere
«Despertarse», en el texto griego, es el verbo que recuerda la ser serio (sí a Jesús, sí a un amigo, sí a una mujer, sí a un
resurrección, el resurgir, el alzarse de Jesús del sueño. hombre, sí a un compromiso exigente), tiene que pasar a
Increpa al viento como si realizara un exorcismo contra un través de la prueba, a pesar del cansancio, la burla, el desdén,
poder maligno al que hay que hacer frente directamente. la soledad o el rechazo de los demás.
Le dice al mar, sacudido por el viento, que se calle, que se Tenemos que saber entrar en la turbulencia del miedo;
calme. «El viento se calmó y sobrevino una gran bonanza»: tenemos que saber que llega un momento en que las propias
vienen a la mente algunos salmos que hablan del poder de fuerzas no bastan. Decir: «no me bastan mis propias fuerzas»,
Dios: Dios amenaza al mar Rojo, lo sacude (Sal 106,9); Dios es una actitud mucho más grave de lo que nos parece, y tanto
hace callar el estruendo del mar, aplaca el tumulto de los más grave cuanto más cierto parece ser. Si me detengo y
pueblos (Sal 65,8); Dios domina el orgullo del mar (Sal 89,10); vuelvo a casa, ya he caído. Si me olvido de la confianza que
Dios reduce la tempestad a la calma y callan las olas del mar puse en Jesús; si me olvido del misterioso atractivo que me
(Sal 107,29) En este instante en que Jesús se enfrenta con el llevó a escoger un compromiso, una persona, una amistad, o
viento y el mar, debemos tratar de verlo, a la luz de la que me movió a hacer una promesa; si olvido que la vida
Escritura, enfrentado a todo lo que es poder enemigo del depende de que me fíe o no me fíe, entonces estoy perdido.
hombre. El mar es enemigo del hombre, porque crea Esta situación de miedo, si se cultiva y acepta, va unida a la
asechanzas, muerte, angustia, cuando es agitado por el viento. incredulidad—cuando se trata de Jesús y de las realidades
Jesús vence a todas las fuerzas del mal y su capacidad de serias de la vida relativas a las decisiones existenciales—,
hundir al hombre en la desesperación. Jesús sale al encuentro porque la fe, por su propia naturaleza, ahuyenta el miedo.
del hombre que grita: «¡Ya no puedo más!». Es el Cristo El miedo y la confianza no van juntos
resucitado el que sale a nuestro encuentro, metidos como La timidez es signo de poca fe, y proviene del repliegue en
estamos en el torbellino de la historia. nuestra naturaleza calculadora y desconfiada, del agazaparse
Pero Jesús se dirige a los discípulos: «¿Por qué estáis con en sí mismo; por eso hace abortar el movimiento de confianza
tanto miedo? ¿Todavía no tenéis fe?» (v. 40). Literalmente, el con que se había dicho «sí».
texto griego dice: «¿Por qué sois tímidos? ¿todavía no tenéis Es un momento peligroso, de paso, aunque necesario, en el
fe?». que conviene que tengamos muy claro que, si no superamos
La pregunta nos parece extraña. ¡La verdad es que hay ese miedo y nos fiamos, entonces retrocederemos y no
motivos para temblar ante la tempestad! Además, la pregunta seremos ya capaces de tomar ni esta ni, tal vez, otras grandes
equivale a un reproche: «¿Por qué sois tan tímidos?». decisiones de la vida. Si queremos ahondar más en el
Evidentemente, algo debe haber tras este vocablo, que significado de las palabras de Jesús: «¿Por qué estáis con
significa miedo, timidez, cobardía, y que a nosotros nos tanto miedo? ¿Cómo no tenéis fe?», podemos decir que la
parece, todo lo más, una debilidad, una reacción natural. incredulidad es la comprensión inadecuada de la historia
¿Cómo reprocha Jesús tan enérgicamente este miedo, escondida del Reino de Dios: la que nos describen las
relacionándolo incluso con la fe?. La palabra «tímidos» sólo parábolas. El Reino de Dios está ahí, pero no se ve; Jesús
aparece otra vez en el Nuevo Testamento: en el pasaje final duerme, pero está ahí, y no hay por qué temer si uno confía en
él. Quien no comprende esta historia escondida del Reino de 9. AFRONTAR LA CONTESTACIÓN
Dios, tampoco comprenderá el camino de Jesús hacia la cruz,
como le ocurrió a Pedro. No comprenderá que Dios está «Se marchó de allí (Jesús) y vino a su tierra, y sus discípulos le
presente con nosotros en todos los momentos misteriosos, acompañaban. Cuando llegó el sábado, se puso a enseñar en la
difíciles y escondidos de nuestra existencia. sinagoga. La multitud, al oírle, quedaba maravillada, y decía:
Se trata, por tanto, de comprender o de no comprender el ‘¿De dónde le viene esto y qué sabiduría es ésta que le ha sido
modo de la presencia de Jesús en nuestra historia. dada? ¿Y esos milagros hechos por sus manos? ¿No es éste el
3. El momento de la conclusión. «Ellos se llenaron de gran carpintero, el hijo de María y hermano de Santiago, José,
temor y se decían unos a otros: ‘Pues, ¿quién es este que hasta Judas y Simón? ¿Y no están sus hermanas aquí entre
el viento y el mar le obedecen?’. (v. 41). Estamos de nuevo en nosotros?’ Y se escandalizaban a causa de él. Jesús les dijo:
el temor, pero ya no es el miedo; en efecto, la palabra griega es ‘Un profeta, sólo en su tierra, entre sus parientes y en su casa,
totalmente distinta. Antes era «tímidos», ahora es «temor carece de prestigio’. Y no pudo hacer allí ningún milagro, a
grande», es decir, temor reverencial, religioso, temor que cae excepción de unos pocos enfermos a quienes curó
en la cuenta de hallarse ante un misterio. Por una parte, se imponiéndoles las manos Y se maravilló de su falta de fe.
experimenta este «respeto» y, por otra, la plenitud de Y recorría los pueblos del contorno enseñando. Y llamó a los
confianza ante la ternura de Dios. Doce y comenzó a enviarlos de dos en dos, dándoles poder
Lo contrario a la timidez —nos advierte la palabra sobre los espíritus inmundos. Les ordenó que nada tomasen
evangélica—no es ni la presunción, ni la desfachatez, ni la para el camino, fuera de un bastón: ni pan, ni alforja, ni dinero
temeridad, sino el temor reverencial ante el gran cariño con en la faja; tan sólo un par de sandalias, y una sola túnica. Y les
que Dios está cerca de nosotros y que, debidamente dijo: ‘Cuando entréis en una casa, quedaos en ella hasta
experimentado, ahuyenta la timidez y el miedo, produciendo marchar de allí. Si en algún lugar no os reciben y no os
paz, calma, serenidad, alegría. Se siente que alguien está escuchan, marchaos de allí sacudiendo el polvo de vuestras
presente y que es mucho mayor que nosotros; que las sandalias en testimonio contra ellos’» (Mc 6,1-11).
pequeñas cosas que estamos viviendo nos llevan realmente Introducción
mucho mas allá de nuestra experiencia, hacia la degustación La página del evangelio según Marcos que proponemos para
de una presencia santa, tierna, afectuosa, capaz de no nuestra meditación necesita una introducción.
abandonarnos jamás. Todos estamos condicionados por el juicio de los demás, y a
veces estos condicionamientos son tan fuertes que se
HACIA LA MEDITACIÓN Y LA CONTEMPLACIÓN convierten en respeto humano. Es un fenómeno grave, porque
pone en crisis la autenticidad del camino de conversión. Por
Me gustaría sugeriros, llegados a este punto, una pregunta eso, en el itinerario cristiano es esencial el coraje de afrontar
que puede serviros para vuestra meditación, para una la contestación por la fe. ¡Cuántas veces he escuchado a chicos
reflexión más especifica sobre vuestra vida. ¿Cómo y cuándo y chicas hablarme de sus dificultades para vivir como
se manifiesta en mí ese miedo? ¿Lo advierto alguna vez en mi cristianos en el ambiente de la escuela o del trabajo, y de sus
camino de fe? ¿Cómo y cuando se manifestó en mis acciones, dificultades para seguir participando en grupos de vida
tal y como las veían y juzgaban los demás, de forma que llegó cristiana, debido a las opiniones de sus compañeros sobre la fe
a impedirme quizá realizar alguna cosa que yo consideraba y la práctica cristiana!
justa? ¿Cómo y cuándo se manifestó ese miedo en mi corazón, De ahí nace, pues, la pregunta que sirve de base a la reflexión
allí donde yo sólo puedo ser juez, de forma que llegué a de este encuentro: ¿Cómo afrontaste Tú, Jesús, el
sentirme mal por haberme dejado vencer por él? Esta condicionamiento de los juicios negativos de los demás?
pregunta fundamental tiene que convertirse luego en ¿Cómo nos enseñas a que lo afrontemos nosotros? ¿Cómo
contemplación; tiene que transformarse en un simple hablar educas a los apóstoles y a nosotros mismos para superar estos
con Jesús. Mirar a Jesús desde la perspectiva de los discípulos, obstáculos? ¿Cómo nos educas para una nueva conversión al
desde mi propio punto de vista personal, desde el punto de coraje y a la intrepidez en la fe?
vista del mismo Jesús. Y decir: Me gustaría observar que también Jesús es sensible a todo lo
«Señor, a través de la contemplación de Ti, que, que se dice de él. En Cesarea de Filipo, por ejemplo,
despertándote del sueño y resucitando de la muerte, me das preguntará a sus discípulos: «¿Quién dice la gente que soy
confianza, te pido que disipes mis temores, mi miedo, mis yo?», y luego preguntará de nuevo: «Y vosotros ¿quién decís
indecisiones, mis bloqueos en las opciones importantes, en las que soy yo?» (cf. Mc 8,27-30 y paralelos).
amistades, en el perdón, en las relaciones con los demás, en Por lo demás, no es socialmente posible prescindir de lo que
los actos de coraje para manifestar mi fe. ¡Rompe mis bloqueos los demás dicen de nosotros. Para hacerlo, tendríamos que
y ataduras, Señor!». encerrarnos en una cartuja, y aun entonces también nos
Os invito a continuar todo el mes esta reflexión, dedicando a acompañarían los juicios de la gente sobre nuestro
ella algunos momentos, ya sea personalmente o en los grupos comportamiento. Por tanto, el problema no es cómo no recibir
parroquiales. Os invito a que sigáis ejercitándoos en la ningún condicionamiento del juicio de los demás, sino cómo
contemplación que hemos introducido, poniéndoos a mirar a no ser esclavos de ellos.
Jesús, guardando silencio delante de él o intercambiándoos las Jesús se nos muestra en este episodio influido profundamente
reflexiones que él mismo os sugiera. y de forma negativa por las reacciones de la gente; se da
Podéis pensar también en realizar algún gesto de coraje a cuenta de que sus palabras y sus gestos no son comprendidos,
partir de la fe. No un gesto de desfachatez, de arrogancia, sino de que lo rechazan; y siente estupor por ello, sufre, se extraña.
un gesto, personal o grupal, que nazca de la certeza de que Se dice, incluso, que Jesús «no pudo hacer allí ningún
Jesús libera el corazón y hace espontáneo y gozoso el acto de milagro» (v. 5), dando así la impresión de que hasta su poder
coraje en la fe. taumatúrgico se veía afectado por la mala acogida de la gente.
La Virgen María—que no tuvo miedo y se fió de Dios Algo por el estilo nos ocurre también a nosotros. Por ejemplo,
diciendo: «Señor, que se haga en mí tu Palabra»—nos conceda si hablamos en público y notamos cierta hostilidad o
participar, en todo momento de nuestra vida, en la alegría de indiferencia, a las palabras les cuesta salir, perdemos incluso el
su fe sin condiciones. •MARTINI-6. Págs. 93-102 hilo del discurso y decae nuestro ánimo. Jesús, cuya fuerza
prodigiosa de curar se vio en aquellos momentos como
bloqueada, nos comprende, y podemos dirigirnos a él dentro; las palabras que se dicen no son fruto de una lectura,
diciendo: Jesús, Tú que nos comprendes en nuestros de un sermón que se ha oído, sino palabras vividas, palabras
condicionamientos respecto al juicio de los otros sobre que hemos escuchado antes, pero que se han hecho nuestras a
nuestra conducta, ayúdanos a leer el pasaje de esta tarde, para través de la fe.
que podamos sentirnos iluminados por la forma en que Tú Esta primera característica del coraje cristiano hace que
actuaste. nuestro testimonio sea realmente nuestro, que nos brote del
La reacción de Jesús ante las críticas: corazón como una fuente en la montaña, como un manantial
Lectura de /Mc/06/01-11 de agua viva. Por eso el salto cualitativo anteriormente
En el texto de Marcos distingo cuatro momentos sucesivos: requerido era el de estar con Jesús, meditar su palabra,
— Jesús enseña; escucharla, contemplarle a él, a fin de que arraigue en
— la gente se asombra; nosotros como la semilla en la tierra. Entonces el coraje de la
— Jesús reacciona; fe despunta automáticamente, ya que de esa semilla, cuando
— consecuencias que tiene para los apóstoles la actuación de está bien arraigada en la tierra, nace irresistiblemente el
Jesús. brote.
Repasemos cada uno de estos momentos, que más tarde Es fundamental estar con Jesús, contemplar en silencio su
recogeremos en el silencio de la meditación y de la adoración Evangelio, fiarse de él, venciendo los propios miedos,
eucarística. realizando pequeños actos de confianza en él. También de mí
1. Jesús enseña. Escribe el evangelista: «Se marchó (Jesús) de se podrá decir: ¿De dónde le vienen estas cosas? ¿Cómo es que
allí y vino a su tierra» (v. 1). saca de su interior esa fuerza, esa sencillez, esa sabiduría?
Esta indicación es importante, porque muchas veces es más Pero en el episodio de Marcos la gente pasa enseguida de la
difícil el coraje de la fe en donde uno es muy conocido y la admiración a la critica y a la desconfianza: «¿No es éste el
gente, por así decirlo, lo ha encasillado con un juicio ya carpintero, el hijo de María y hermano de Santiago, José,
cerrado, haciéndole sentirse menos libre. Pienso en los grupos Judas y Simón? ¿Y no están sus hermanas aquí entre
de jóvenes que no logran crecer, debido a cierto nosotros?» (v. 3). La gente se ha hecho ya un juicio sobre
enrarecimiento del ambiente en torno a ellos que los Jesús: es un pobre hombre como los demás, ha llevado la
condiciona. Por el contrario, en un ambiente extraño somos misma vida que los demás, no puede salir de él nada nuevo. Si
más desenvueltos, más libres. Jesús nos da ejemplo, fuese un gran profeta que viniera de Jerusalén, si hubiera
precisamente, en un problema que se le presenta en su patria, estudiado en las escuelas de la capital, sería distinto; pero,
en medio de los suyos, en su país. Y el texto añade que «sus siendo uno del pueblo, es inútil escucharle.
discípulos le acompañaban». También ellos se ven afectados y Jesús ya ha sido pesado y encapsulado en un juicio obtuso,
perturbados por lo que ocurre. mezquino, que le ofende, que no lo comprende, que lo
«Cuando llegó el sábado, se puso a enseñar en la sinagoga» (v menosprecia, que cierra los ojos ante la verdad. Aparece aquí
2a). Jesús se atiene al programa de unirse a la tradición del la estupidez de los juicios pronunciados con la presunción de
pueblo, según la cual el día del sábado todos tenían que criticar nuestra fe o nuestro compromiso cristiano,
reunirse en la sinagoga. Sin ningún tipo de ruptura y ningún encapsulando nuestra autenticidad e impidiéndonos crecer.
gesto llamativo, va, se sienta en el suelo con la gente y Finalmente, el relato evangélico dice: «Y se escandalizaban a
escucha en silencio la lectura de Isaías, hecha con gran causa de El». Palabras muy fuertes, puesto que el escándalo es
solemnidad (cf. Lc 4,16 ss.). Luego, una vez enrollado el lo que bloquea el camino moral y el camino de fe. Jesús se
pergamino el jefe de la sinagoga, dándose cuenta de la convierte incluso en un obstáculo, porque la gente no se
presencia de Jesús, que había asistido a la escuela de Juan arriesga a creer que Dios, grande e inmenso como es, actúe
Bautista, le pide que dirija unas palabras de exhortación. El se con instrumentos débiles y pobres. Es éste el gran escándalo
levanta y empieza con el sermón que conocemos por el que se achaca al Evangelio: Dios no puede actuar mediante los
evangelio de Lucas: «Hoy se ha cumplido esta Escritura que pobres, los humildes, los sencillos, los hombres sin apariencia.
habéis oído» (Lc 4,21). El obrar de Dios debe ser forzosamente distinto. En los
2. La gente se asombra. Estamos en el segundo momento del juicios de la gente se revela, por tanto, la ignorancia de Dios;
episodio. se revela un ateísmo de fondo: el no comprender quién es Dios
«La multitud, al oírle, quedaba maravillada» (v. 2b). El verbo y el querer reducirlo a la propia medida. Los juicios que
griego significa sentirse impresionado por algo grande, tienden a asustar, a meter miedo, a condicionar, a encerrar,
inesperado. Se usa, por ejemplo, para describir el asombro de son toda una serie de falsedades, de interpretaciones
María y de José cuando encontraron a Jesús en el templo: equivocadas que, si se toman en serio, nos hacen correr el
«¿Cómo has hecho esto? ¡No nos lo esperábamos!» (cf. Lc 2,41 peligro de confundirnos, de encogernos, de enjaularnos, de no
ss.). dejar que surja la verdad de nosotros mismos.
Así pues, la gente se asombra y expresa su admiración con 3. Jesús reacciona. Ya indicamos al principio cómo Jesús se
exclamaciones, aunque de ordinario se guardaba silencio en la enfrenta con la contestación. Volvemos ahora sobre ello,
sinagoga «¿De dónde le viene esto y qué sabiduría es ésta que comentando las palabras del relato evangélico a partir del
le ha sido dada?» Intentemos examinar las palabras que versículo: «(Jesús) se maravilló de su falta de fe» (v 6a). Ante
susurra la gente, mientras que la atmósfera, antes tranquila, todo, Jesús reacciona con un asombro dolorido, con una
empieza a alterarse, y Jesús se da cuenta de ello. admiración llena de pena; en efecto, se encuentra ante la
Evidentemente, había hablado de una forma sencilla, porque actitud más terrible que se puede imaginar, es decir, la
todos lo habían comprendido, pero al mismo tiempo de un incapacidad de fiarse de Dios, de creer que Dios puede hacer
modo tan original, tan fresco, tan espontáneo, tan nuevo, tan algo grande en nuestras realidades pequeñas, que Dios se
poco repetitivo de ideas ajenas, que la gente se preguntaba manifiesta incluso en las humildes circunstancias de cada día.
dónde había aprendido lo que enseñaba, de quién lo había Jesús se encuentra con esa tremenda frustración existencial
oído. que es la raíz de los juicios negativos sobre aquellos que, por
Podemos hacer enseguida una reflexión. Es muy hermoso otra parte, creen y se fían de él.
preguntarse sobre Jesús: Después de la admiración, experimenta una especie de
«¿De dónde le vienen estas cosas?». En efecto, la primera bloqueo: su amor, su deseo de curar, de sanar, se ve impedido.
característica del coraje cristiano, la característica de expresar Debió ser un sufrimiento terrible para El.
libremente en público la propia fe, viene de que se tiene algo
Por eso precisamente busca una razón: «Les dijo: ‘Un profeta juicios y las criticas que los demás hacen de nuestras
sólo en su tierra, entre sus parientes y en su casa, carece de actuaciones.
prestigio’» (v. 4). La razón que se da Jesús es la misma que — ¿Cómo solemos reaccionar en estos casos? ¿Me encierro
hemos intentado captar al oír a la gente: la mezquindad de los dentro de mi, me irrito, me indigno, me callo? ¿O bien me
corazones y del ambiente. Los corazones y los ambientes asusto, dejo de hacer lo que quería hacer, cambio mi
cerrados a la verdadera actuación de Dios, que no es la que programa? ¿Actúo como Jesús?
pretende el hombre falsamente religioso que sólo ve actuar a — ¿Cómo valoro ahora, en oración ante la Eucaristía, mis
Dios en los grandes hechos, en los grandes fenómenos, en las reacciones a la luz de las de Jesús en el pasaje del evangelio
cosas llamativas y estrepitosas. La verdadera actuación de que hemos leído?
Dios se manifiesta también en la sencillez, en la pobreza, en la — Señor, ¿qué me gustaría hacer en la próxima ocasión?
humildad, en la apariencia sencilla y amable de Jesús de ¿Qué me sugieres para que en la próxima ocasión pueda
Nazaret comportarme como deseo?
Dándose una razón de aquella actitud, Jesús da su verdadera
dimensión a los juicios negativos, se desvincula de ellos, se 10. AFRONTAR Y ACOGER EL DISCURSO DE LA CRUZ
libera de ellos.
Finalmente, continúa actuando como antes y más aún que Esta tarde vamos a reflexionar sobre una página central del
antes: «Recorría los pueblos del contorno enseñando» (v. 6b). evangelista Marcos, que podemos compendiar en las palabras:
La contestación, lejos de obligarle a cambiar su programa, de afrontar y acoger el discurso de la cruz.
sugerirle que se presentase de otro modo y que buscase Después de haber dicho sí al seguimiento de Jesús, después de
formas más pomposas y solemnes para dar a entender a la haber pasado con él algunas pruebas y haber superado el
gente que venía de arriba, le hace continuar como antes. Sigue miedo, tiene lugar una concreción del camino, que no se
adelante con su manera evangélica, apostólica, sencilla, identifica necesariamente con la vocación en sentido estricto,
profundamente seguro de su misión. y que suele llegar a todos los que se han comprometido, por el
Jesús reacciona, pasando así por cuatro momentos: la bautismo, en la vida de fe.
admiración, el sufrimiento de sentirse bloqueado en su amor Afrontar y acoger el discurso de la cruz significa afrontar el
al hombre, la búsqueda de una razón que da su verdadera discurso de Jesús sobre el Reino de Dios y acogerlo como
dimensión a los juicios, la certeza de tener que seguir lógica divina, no simplemente como un mero hecho.
enseñando como siempre lo había hecho. Por eso es tan importante el pasaje de Marcos que
4. Las consecuencias del obrar de Jesús para los discípulos. La encontramos en el capítulo 8, vv. 27-33. Y me gustaría
contestación no sólo lleva a Jesús a proseguir en su recordar, además, lo que escribe san Pablo a los Corintios:
enseñanza, sino que le estimula también a enviar a los Doce, «La predicación de la cruz es una necedad para los que se
porque ha aumentado su coraje. pierden; mas para los que se salvan—para nosotros—es fuerza
Empieza a enviar a los discípulos de dos en dos, dándoles de Dios» (/1Co/01/18). Se trata, por tanto, de un discurso
poder sobre los espíritus inmundos (cf. v. 7). Los manda a capaz de dividir a la gente, de hacer que algunos se encojan de
hacer el bien y quiere que actúen como él, sin apariencia, sin hombros y lo rechacen, mientras que otros terminan por
boato, sin mucho aparato «Les ordenó que nada tomasen para afirmar: «Aquí está actuando Dios».
el camino, fuera de un bastón: ni pan, ni alforja, ni dinero en la En nuestro texto, al comienzo Pedro es de los que se encogen
faja» (v. 8). de hombros; no acepta el discurso de Jesús; pero más tarde sí
Pobremente y con gran libertad de corazón: «Si en algún lo acogerá, convirtiéndose en apóstol, en mártir, en santo, en
lugar no os reciben y no os escuchan, marchaos de allí piedra de la Iglesia. La dificultad que experimentó Pedro es
sacudiendo el polvo de vuestras sandalias, en testimonio símbolo de todas nuestras dificultades ante el discurso de la
contra ellos» (v. 11). cruz. Dificultades que también experimentó el propio san
Jesús, ante las criticas, no se encerró en si mismo, sino que Pablo: cuando comenzó a predicar, se limitaba a hablar de
multiplicó su capacidad de actuación. Jesús como de un hombre extraordinario, que hacía el bien a
Sería bueno, a este propósito, recordar los testimonios de la todos, dejando de lado el discurso de la crucifixión.
Iglesia sufriente y perseguida que escuchamos en el último Efectivamente, en Atenas, lugar de cultura refinada, se
Sínodo de los obispos. Allí pudimos intuir cuán grande es la expresa de forma erudita, filosófica, sin mencionar nunca la
fuerza que le viene a la Iglesia y a los fieles de la contestación cruz. Pero su discurso fue un fracaso, y el apóstol tuvo que
y del martirio. La alegría de los testimonios llegados de los dejar Atenas y dirigirse a Corinto con el corazón triste y
obispos de Iglesias en donde los cristianos viven con desilusionado, diciendo:¿Qué pasa? ¿Cómo es posible?
dificultad, contagió a todos los demás obispos y constituyó Entonces se da cuenta de que se ha equivocado al dejar de
uno de los momentos más hermosos de la comunión católica lado el discurso de la cruz y escribe, bajo esta impresión, la
vivida en la Asamblea Sinodal. primera carta a los Corintios, que es un himno espléndido a la
sabiduría de la cruz.
El salto cualitativo: el camino de la cruz (/Mc/08/27-33)
PREGUNTAS PARA LA MEDITACIÓN Y LA «Salió Jesús con sus discípulos hacia los pueblos de Cesarea de
CONTEMPLACIÓN Filipo, y por el camino hizo esta pregunta a sus discípulos:
‘¿Quién dicen los hambres que soy yo?’. Ellos le dijeron:
Después de la relectura que hemos hecho de este episodio,
‘Unos, que Juan el Bautista; otros, que Elías; otros, que uno de
comienza el tiempo de la meditación y de la contemplación de
los profetas’. El, entonces, les preguntó: ‘Y vosotros, ¿quién
Jesús en la Eucaristía, el momento de preguntarle a partir de
decís que soy yo?’. Pedro le contestó: ‘Tu eres el Cristo’. Jesús
la página evangélica, dejando que resuene su mensaje para
les mandó enérgicamente que a nadie hablaran acerca de él. Y
cada uno de nosotros. Para ayudaros, os sugiero cuatro
comenzó a enseñarles que el Hijo del hombre debía sufrir
sencillas preguntas, útiles para un examen de conciencia y
mucho y ser reprobado por los ancianos, los sumos sacerdotes
para la oración:
y los escribas, ser condenado a muerte y resucitar a los tres
— ¿Dónde y cuándo me siento condicionado por lo que dicen
días. Hablaba de esto abiertamente. Entonces Pedro,
de mi por causa de mi fe? Podemos recordar los lugares y las
tomándolo aparte, se puso a reprenderle. Pero él, volviéndose
situaciones en que nos sentimos más condicionados por los
y mirando a sus discípulos, reprendió a Pedro, diciéndole:
‘¡Quitate de mi vista, Satanás! porque tus pensamientos no son tragedias históricas en la glorificación de la obra divina (cf.
los de Dios, sino los de los hombres’. (Mc 8,27-33). Dn 7,13-14).
El episodio se divide claramente en dos partes: la primera Pero, según Jesús, este Hijo del hombre «debe sufrir mucho».
comprende las preguntas de Jesús a los discípulos; la segunda, La expresión es dura, aunque sea un tanto vaga, y evoca
el discurso de la cruz que hace Jesús y la reacción negativa de dolor; el Cristo no tiene, ante todo, un destino de éxito, de
Pedro. capacidad de trastocarlo todo en su favor.
Vamos, antes que nada, a analizar los diversos momentos del Y a continuación se especifica este sufrimiento: sufrirá en el
episodio, releyendo el texto. sentido de que será reprobado. Es duro para un hombre
Luego sugeriré algunos puntos para la meditación, intentando sentirse rechazado; podemos tener enfermedades dolorosas,
comprender qué significa para nosotros el discurso de la cruz. pero los demás están a nuestro lado, nos aceptan. El
Finalmente, haré algunas preguntas que os ayuden en vuestra sufrimiento de Jesús es más doloroso, porque se trata de
oración. experimentar la división, el ostracismo, el rechazo de la gente.
El objetivo de la Escuela de la Palabra—lo subrayo una vez Un rechazo, no de parte de los pecadores, de personas
más—es hacer que cada uno entre en contacto vivo con la distraídas que no conocen a Dios, sino de parte de tres
persona de Jesús, que nos sigue hablando hoy a nosotros a categorías de hombres: los ancianos, los sumos sacerdotes, los
través de las páginas evangélicas y que está presente entre escribas. O sea, en términos comprensibles para nosotros: de
nosotros mientras escuchamos su Palabra. parte del poder político, religioso, intelectual y cultural. Será
— El contexto geográfico del pasaje lo describe Marcos reprobado por todo lo que representa el prestigio, la
rápidamente: Jesús parte con sus discípulos hacia las aldeas responsabilidad pública y civil.
que rodean a Cesarea de Filipo. Una zona que no se nombra Se trata, por tanto, de palabras que turban profundamente a
en otros lugares de los evangelios y que, al parecer, está los apóstoles.
poblada por paganos. Y «luego, ser condenado a muerte». No es sólo un contraste
Jesús no es conocido en aquellos parajes, y nadie se preocupa parecido al del profeta Jeremías, que luego fue rehabilitado,
de El. Por eso puede ocuparse tranquilamente de sus tenido en consideración. Jesús llega a ser eliminado y su
discípulos, dedicándose a su formación. misión se cierra con la muerte.
— La pregunta. Jesús los forma no sólo a través de sus «Y resucitar a los tres días». Ahora el discurso es más difícil
enseñanzas, sino con ejercicios prácticos, haciendo surgir de todavía y va más allá de todas las experiencias posibles. ¿Por
cada uno de los apóstoles algo importante. Aquí les hace una qué sufrir tanto para resucitar luego? ¿Qué significa
pregunta decisiva: «¿Quién dice la gente que soy yo?» (v. 27). resucitar?
— La respuesta se da evocando algunas figuras de hombres — Jesús «habla de esto abiertamente» (v. 32). Las palabras
de Dios, de personas que hablaron en nombre del Señor, como que Jesús ha vertido en los corazones desconcertados de los
por ejemplo Juan Bautista, Elías y los demás profetas La discípulos, les dan a entender que quizás el Maestro había
gente interpreta correctamente a Jesús, según una categoría aludido ya antes veladamente al tema. Empiezan a
religiosa y profética: es un hombre que está entre nosotros en comprender, por ejemplo, las parábolas anteriores: el Reino de
nombre de Dios. Dios es como una semilla que es pisoteada por la gente,
— La réplica. Jesús, sin embargo, insiste: «Pero vosotros ahogada por las espinas, picoteada por los pájaros. Jesús
¿quién decís que soy yo?» (v. 29). Es decir, ¿hasta dónde llega hablaba de la Palabra, pero hablaba también de sí, de su
el conocimiento que tenéis de mi? Podemos pensar que a esta camino hacia la cruz. El Reino de los cielos es como un grano
nueva pregunta siguió un silencio embarazoso, temeroso, por de mostaza, en el que nadie se fija, que quizá se tiene en nada,
parte de los discípulos. Pero en un momento determinado pero que de pronto empieza a crecer, inesperadamente. Jesús
llega el fogonazo de Pedro: «Tú eres el Cristo» Los otros son hablaba de sí (cf. Mc 4,1-7.30-32).
profetas parciales, mediadores en determinados momentos El discurso del Reino de Dios empieza a aclararse: es el
pasajeros de la historia; Tú eres el mediador absoluto, Tú eres discurso del Cristo, Mesías, Señor, Salvador, que pasa a través
la clave de la historia; Tú eres quien resume en Si toda la de la pobreza y de la insignificancia interpretadas en relación
historia anterior y explica la que ha de venir. con el Reino.
La respuesta de Pedro es muy elevada, es un gran acto de fe. Jesús repetirá continuamente, en el resto de su vida, este
Pero Jesús no se queda satisfecho. No niega la afirmación, tema, y lo volverá a tratar después de su muerte,
pero quiere que no se hable de El antes de aclarar especialmente en el evangelio de Lucas, cuando hable con los
debidamente qué debe entenderse al decir «el Cristo». Viene a discípulos de Emaús: «¡Insensatos y tardos de corazón para
la mente el sermón de la Montaña: «No todo el que me diga: creer todo lo que dijeron los profetas! ¿No era necesario que el
Señor, Señor, entrara en el Reino de los cielos, sino el que Cristo padeciera esto y entrara así en su gloria? Y empezando
haga la voluntad de mi Padre del cielo» (Mt 7,21). El que me por Moisés y continuando por todos los profetas, les explicó
proclama como Cristo, que no piense por ello estar a salvo si lo que había sobre él en todas las Escrituras» (/Lc/24/25-27).
no comprende el significado de esa palabra. Así pues, no es un discurso de pocas palabras: sufrir, ser
— Comenzó a enseñar. Entramos en la segunda parte del rechazado, ser condenado a muerte, resucitar. Es una síntesis,
episodio, que queremos meditar más atentamente. Jesús y se puede prolongar recordando la enseñanza de Moisés y de
comienza una nueva enseñanza que jamás se había oído, una los profetas. Es el discurso cristiano por excelencia: leer toda
enseñanza que continuará después. Pronuncia este discurso en la Biblia como resumida en Jesús crucificado y resucitado.
el capítulo 8 de Marcos, lo recogerá en el capítulo 9 y, con «Estas son las palabras que os hablé cuando todavía estaba
palabras casi idénticas, lo repetirá en el capítulo 10. De otras con vosotros: ‘Es necesario que se cumpla todo lo que está
maneras volverá sobre este tema cuando vaya a Jerusalén y se escrito en la Ley de Moisés, en los Profetas y en los Salmos
acerque el tiempo de la pasión. acerca de mi’. Y entonces abrió sus inteligencias para que
— «Comenzó a enseñarles que el Hijo del hombre debía comprendieran las Escrituras y dijo: ‘Así está escrito que el
sufrir mucho» (v. 31). Cristo padeciera y resucitara de entre los muertos al tercer
El corazón de los apóstoles se siente desconcertado, ya que DIA’. (/Lc/24/44-46). Esta es la manera en que las escrituras
«Hijo del hombre» es un título sacado de una famosa página presentan a Jesús. Esto es lo que significan las palabras
del profeta Daniel, en la que el Hijo del hombre aparecería «Hablaba de esto abiertamente.
viniendo de las nubes del cielo, como el término glorioso del La Iglesia primitiva recogerá este tema, Pablo lo repetirá, y
camino del pueblo de Dios, como la resolución de todas las constituye la afirmación central del Credo: «Por nosotros bajó
del cielo, se hizo hombre, padeció bajo el poder de Poncio Dios se identifica con la figura del Crucificado resucitado, no
Pilato, murió, fue sepultado, resucitó según las Escrituras». con ninguna especie de ídolo victorioso, con ninguna especie
Cuando decimos: Jesús es la solución de todos los problemas de símbolo del bienestar, con ninguna especie de promesa
humanos, quizá no lo comprendamos de verdad. Jesús seudo-mesiánica. Dios se identifica sólo con Jesús crucificado,
resuelve los problemas humanos mediante su sufrimiento, su muerto y resucitado.
muerte, su resurrección, y sólo si lo seguimos por este camino El Resucitado es el victorioso, el que ha superado todas las
con confiada entrega podemos decir esa expresión con toda pruebas, el que ha vencido de veras la batalla de la vida
verdad. mediante su pasión y su muerte.
— «Pedro, tomándolo aparte se puso a reprenderle». Que Puntos para la meditación: el discurso cristiano fundamental
Jesús sea reprochado por un apóstol es un caso único en los Después de releer la página de Marcos, os sugiero algunos
evangelios. Un episodio parecido ocurre también en la casa de pensamientos para vuestra meditación personal.
Betania, cuando Marta se queja al Maestro de que su hermana ¿Qué es este discurso sobre la cruz, que Jesús considera tan
no la ayude; pero Marta, en aquellos momentos, está nerviosa, importante y en el que no cede ni un milímetro, ni siquiera
irritada, y dice lo primero que le viene a la boca. Pedro, en para complacer a Pedro, al que quiere tanto?
cambio, no; Pedro ha hecho una confesión de fe muy clara… Es el discurso a través del cual pasa nuestra felicidad, nuestra
Pero no hasta ese punto. alegría.
¿Qué le diría Pedro a Jesús en aquel aparte? Pienso en los Jesús quiere nuestra felicidad, y Dios hace todo lo posible para
argumentos que podemos encontrar, por ejemplo, en el libro que seamos felices. Por tanto, el discurso de la cruz no tiene
de Job: «¿Por que me sacaste del seno materno? ¡Ojalá hubiera que identificarse con algo que ponga en primer plano
muerto y ningún ojo me hubiera visto jamás!» (Job 10,18). O simplemente la mortificación, la renuncia, el fracaso como tal,
bien, en las palabras de los discípulos de Emaús: Esperábamos la humillación, la derrota como una mística del perder.
que seria él el que iba a librar a Israel, el que iba a dar la Todo parte del amor que Dios nos tiene, del hecho de que
victoria, el triunfo, el éxito; pero no ha ocurrido nada de eso… Dios quiere para nosotros el camino de la vida y nos quiere
(cf. Lc 24,21). llenar de sus bienes. Pero el camino de la vida se ve
Pedro le diría a Jesús que estaba perdiendo amigos, que amenazado por el camino de la muerte, el camino del pecado,
hablando de esa forma jamás se daría a conocer, que estaba el de Caín asesino de Abel, el de la torre de Babel, el camino
presentando una imagen de Dios y de sí mismo que los que separa al hombre de Dios y del prójimo; el camino de la
apóstoles no podrían aceptar. Dios, decía Pedro, es el Dios de muerte destruye la sociedad, amenaza con la degradación y el
la gloria, el Dios de la capacidad de derribar a los enemigos, hundimiento colectivo del hombre, tal como se nos describe
mientras que Tú hablas de ser rechazado, de perder. en los primeros capítulos del libro del Génesis.
Estamos en el momento dramático del discurso de la cruz, El camino de la vida es el de Jesús frente a los caminos
porque el hombre, incluso el hombre eclesiástico como Pedro, desviados del pecado, del hambre, de la injusticia, de la
quiere un Dios que sea sólo éxito, triunfo; y no acepta la degradación social y política; y se transforma en el camino de
semilla que cae en tierra y muere, no acepta el fermento en la la fe, de la conversión, de la cruz: fiarse de Jesús con los ojos
masa, no acepta el grano de mostaza. cerrados, fiarse de su plan de salvación, creer que él murió
— «Pero Jesús, volviéndose y mirando a sus discípulos, porque ama al hombre hasta el fondo, para hacer incontestable
reprendió a Pedro, diciéndole: ¡Quítate de mi vista, Satanás!» el amor salvífico que Dios nos tiene. Fiarse de Jesús que,
(v. 33). queriéndonos cerca de él, capaces de caminar con él, nos hace
Es inaudito que en los evangelios el Señor llame a alguien participar un poco de su cruz, que es en realidad el camino de
Satanás. Nunca lo había hecho, ni siquiera con los más la vida.
grandes pecadores, ni siquiera con los escribas y los fariseos. El camino de la cruz no reniega de la razón para entrar en los
Dice una palabra increíble, tajante. meros sentimientos o en lo absurdo; es el camino de la vida de
¿Qué quiere decir? Quiere decir que Pedro, al rechazar el Dios, que Jesús nos ayuda a recorrer a través de los senderos
discurso de la cruz, se niega a abrir a la humanidad los de una humanidad injusta, fragmentada, dividida; por los
caminos de la vida. Lo mismo que Satanás, que no quiere el meandros de una cultura decadente y de una sociedad
bien de los hombres, porque desde el principio es homicida, corrompida.
envidioso, el que abre al hombre los caminos de la muerte. El camino de la cruz es el camino de la salvación en medio de
Más aún: tú, Pedro—continúa Jesús—crees que interpretas a esta sociedad; es el camino de salida de la esclavitud de
Dios; pero mi Dios, mi Padre, ama al hombre hasta dar a su Egipto, es el camino de Abrahán, el camino del pueblo que
Hijo en la muerte. Dios Padre ama tanto al hombre que vuelve del desierto.
entrega a su Hijo, aunque el hombre lo rechace; ama tanto al Es el camino de la felicidad de seguir a Cristo hasta el fondo,
hombre que le ofrece también el perdón. en las circunstancias, a menudo dramáticas, del vivir de cada
Aquí está en juego la imagen misma de Dios; una imagen que día; es el camino que no teme fracasos, dificultades,
en Pedro está aún un poco falseada, caricaturizada, confusa, y marginaciones, soledades, porque llena el corazón del hombre
que también en nosotros, de hecho, está un poco falseada y a de la plenitud de Jesús.
menudo nos lleva a conclusiones equivocadas sobre la vida. Es el camino de la paz, de la alegría, de la serenidad, del
Nosotros, que profesamos en el Credo: «Dios, Padre dominio de sí mismo. El único que lleva a la humanidad hacia
todopoderoso, creador del cielo y de la tierra», no tendremos la justicia.
la verdadera imagen de Dios mientras no hayamos dado ese Cuando lo asumimos conscientemente, nos permite ser
paso cristiano-evangélico de la acogida del camino de la cruz realmente cristianos, encontrarnos con todos los mensajes de
— «Porque tus pensamientos no son los de Dios, sino los de vida que, a pesar de la oscuridad del mundo, resuenan en la
los hombres». Se recogen aquí las grandes palabras de Isaías: historia, y fundirlos entre si, creando un río inmenso de paz y
«Mis pensamientos no son vuestros pensamientos, vuestros de justicia que alegra a la ciudad de Dios.
caminos no son mis caminos» (Is 55,8). Este es, pues, el discurso fundamental de la vida cristiana, que
Pedro quiere alterar los caminos de Dios; le dice cómo tiene reconstruye el cuadro de la existencia haciéndonos pasar
que ser, cómo se espera que sea Dios. Pero es Dios el que se ilesos a través del fuego y de las llamas de la corrupción y de
revela al hombre: Yo soy para ti, yo soy contigo; yo soy Jesús la persecución. Es el discurso cristiano único, esencial, y la
crucificado y resucitado. Iglesia lo repite continuamente en la Eucaristía, que
constituye el centro del Año Litúrgico, junto con la Pascua.
Iniciación al silencio contemplativo sus manos, y aunque beban veneno no les hará daño;
Terminamos con tres preguntas que pueden ayudaros para impondrán las manos sobre los enfermos y se curarán’.
reflexionar en silencio ante el Señor. Con esto, el Señor Jesús, después de hablarles, fue elevado al
1. - ¿Se dan en mí signos de escasa comprensión del discurso cielo y se sentó a la diestra de Dios. Ellos salieron a predicar
de la cruz? Es decir, ¿me siento algo así como Pedro que no por todas partes, colaborando el Señor con ellos y
acepta, que no puede comprender? ¿Cuáles son estos signos? confirmando la Palabra con las señales que le acompañaban».
No sólo, como es lógico, los de escasa comprensión No es difícil observar que esta larga narración se compone de
intelectual, ya que lo importante es comprender con el tres partes:
corazón, fiarse de Dios. Pienso más bien en esos estados de — la primera presenta un sumario de las apariciones de Jesús
ánimo característicos que podemos encontrar en nuestra vida; después de su muerte y resurrección: a María de Magdalena, a
por ejemplo, el descontento difuso de mí mismo y de los dos discípulos, a los once;
demás; el pesimismo general sobre la existencia; la — la segunda refiere las palabras del mandato del Señor, la
irritabilidad fácil. Son signos de que no hemos aceptado el misión y los signos de la misión. Esta parte es el punto central
discurso de la cruz. de todo el pasaje, especialmente el mandato: «Proclamad la
2. - ¿Advierto en mí signos de comprensión del discurso de la Buena Nueva»;
cruz? Esos signos son: la paz a pesar de las dificultades; la — la tercera describe los acontecimientos conclusivos.
alegría a pesar de la soledad; la disposición para mortificarse; Estamos, como decía, ante un pequeño catecismo de la
la alegría en renunciar a algo sin miedo a perder. En una Resurrección que remite a otros relatos más amplios, por
palabra, la capacidad de entrar en el camino de la cruz como ejemplo el final de los evangelios según Lucas y Juan.
camino de la vida, de la felicidad. ¿Predominan en mi estos Pensemos en las apariciones de Jesús a María Magdalena (Jn
signos? 20,11-18); en el episodio de los dos discípulos de Emaús (Lc
3. - ¿Qué signo, qué renuncia queremos proponernos para 24,13-35); en la aparición del Señor a los apóstoles (Lc
afirmar que acogemos el camino de la cruz de Jesús? 24,36ss.).
El haber venido aquí a orar y a reflexionar en silencio indica También las palabras de Jesús tienen un paralelo en el
ya que estéis siguiendo el camino de la cruz, que queréis vivir evangelio de Mateo: «Id, pues, y haced discípulos de todas las
bien la Cuaresma. gentes, bautizándoles en el Nombre del Padre y del Hijo y del
«Concédenos, Señor, comprender qué otros signos nos pides Espíritu Santo, y enseñándoles a guardar todo lo que yo os he
en nuestra vida para no ser, como Pedro, reacios a tu Palabra, mandado» (Mt 28,19-20)
sino para convertirnos, al igual que Juan, en oyentes deseosos Así pues, nuestra página nos recuerda otras muchas y es una
de seguirte, por el sendero de la cruz, hasta el camino de la síntesis de las palabras de Jesús que todavía hoy constituyen a
Pascua». •MARTINI-6. Págs. 113-125 la Iglesia en estado de misión. Jesús, como Señor definitivo de
la historia, señala aquí su camino y su dirección
11. «Y CONFIRMABA LA PALABRA» Las tres apariciones
Pasemos a considerar ahora más específicamente cada una de
Me alegra ver cómo, para el último encuentro de la Escuela de las partes de este párrafo, intentando comprenderlas mejor,
la Palabra de este año pastoral, habéis venido aquí, a la haciéndonos preguntas sobre ellas.
Catedral, todos los jóvenes que en los primeros jueves de los Las tres apariciones siguen el mismo proceso: el Resucitado se
meses anteriores habéis meditado en el camino educativo que aparece a María Magdalena, pero, cuando ésta se lo anuncia a
Jesús, según el evangelio de Marcos, hace recorrer a sus los discípulos, ellos no quieren creer; se aparece a dos de ellos,
discípulos. y tampoco les quieren creer; se aparece a los once y les
Pues bien, todos juntos vamos a contemplar el final de reprocha su incredulidad.
Marcos. Propiamente hablando, este final no se le puede Se condena su tardanza en creer, su no creer.
atribuir al mismo evangelista, sino que fue redactado por la ¿Por qué el evangelista, que intenta narrar a todas las
primera comunidad cristiana con el deseo de ofrecer un generaciones de la Iglesia algunas de las principales
compendio catequístico de la Pascua y también de la Iglesia de apariciones del Resucitado, indica en cada una de ellas que los
entonces y de la Iglesia de todos los tiempos seguidores de Jesús no creyeron, y sólo en la última su
Este pasaje nos interesa de una forma especial. En efecto, incredulidad se ve sacudida por un fuerte reproche del Señor?
mientras que las otras páginas del evangelio se refieren a ¿De qué incredulidad se trata?
sucesos del pasado, ésta describe la historia de la Iglesia de «Les reprochó su incredulidad y su terquedad, por no haber
siempre a partir de la resurrección de Jesús. creído a quienes le habían visto resucitado» (v. 14).
Lectura de Marcos 16,9-20 /Mc/16/09-20 Es la incredulidad propia de un corazón duro, esclerótico,
Ante todo, leamos el texto, dividiéndolo en sus partes rígido. Lo contrario a esta incredulidad es el corazón dócil,
fundamentales disponible, atento a los signos de Dios; el corazón que
«Jesús resucitó en la madrugada del primer día de la semana, alimenta una gran atención de amor a lo que Dios está
y se apareció primero a María Magdalena, de la que había realizando en la historia. En otras palabras, es la prontitud
echado siete demonios. Ella fue a comunicar la noticia a los para fiarse, la certera intima de que el Señor nos ama y se nos
que habían vivido con él, que estaban tristes y llorosos. Ellos, manifestará. Es la prontitud interior para comprender los
al oír que vivía y que había sido visto por ella, no creyeron. designios del Padre en el camino de Jesús.
Después de esto, se apareció, bajo otra figura, a dos de ellos Al joven rico que, a pesar de haber sido mirado con
cuando iban de camino a una aldea. Ellos volvieron a complacencia y amado por Jesús, se había ido entristecido por
comunicárselo a los demás; pero tampoco creyeron a éstos. sus palabras, porque tenia muchos bienes (cf. Mc 10,1722), le
Por último, estando a la mesa los once discípulos, se les faltaba esa prontitud. Deseaba saber y, sin embargo, estaba
apareció y les echó en cara su incredulidad y su terquedad, por privado de docilidad, de atención amorosa, de confianza en
no haber creído a quienes le habían visto resucitado. que Jesús se le había manifestado a él de la mejor manera.
Y les dijo: ‘Id por todo el mundo y proclamad la Buena Nueva Se subraya aquí positivamente la importancia de la aceptación
a toda la creación. El que crea y sea bautizado, se salvará; el de todo lo que el Señor nos dice y nos propone; la importancia
que no crea, se condenará’. Estas son las señales que de la disponibilidad a fiarse del misterio de Dios. Sin esta
acompañarán a los que crean: en mi nombre expulsarán confianza por anticipado, nuestro acto de fe será frágil e
demonios, hablarán lenguas nuevas, tomarán serpientes en inoperante en la vida.
¿Pero dónde se alimenta la disponibilidad del corazón para verifica el «tomarán serpientes en sus manos», no tendrán
poder apreciar la presencia de Dios en nuestra vida, en la de la miedo en situaciones que, de suyo, pueden asustar a
Iglesia, en la historia? Se alimenta en la oración, en la lectio cualquiera.
divina, en la capacidad de gratitud. Los signos que «acompañarán a los que crean» no son
Así, ante la triple repetición de esta primera parte del párrafo directamente religiosos (ir a la iglesia, rezar), sino signos
(«no creyeron…, tampoco creyeron a éstos…,.les echó en cara civiles, humanos, sociales, que se refieren al conjunto de la
su incredulidad»), podemos preguntarnos: vida como opción no violenta. Expresan la capacidad de
«¿ Y nosotros, Señor? No tenemos miedo de decirte que a enfrentarse a realidades adversas, no superándolas de forma
veces nos pasa como a tus primeros discípulos. Nuestra fe va ofensiva o polémica, sino en la totalidad de la paz, en la
ciertamente acompañada, muchas veces, de poca indefensión de la paz.
disponibilidad, de dureza de corazón, de rigidez, de Por eso son un signo formidable de nuestro tiempo las
incapacidad para comprenderte. ¡Repróchanos, Señor, para vocaciones a ser agentes de paz, a escoger la mansedumbre
que nuestro corazón te acoja! Haz que no nos asustemos de evangélica, a no devolver mal por mal, a no ofender a quien
nuestra dureza de corazón, sino que, perseverando en la nos ofende o pudiera ofendernos. Es la vida nueva en Cristo,
oración, lleguemos a captar los signos de tu presencia». el testimonio de que Jesús es Señor de la historia y produce
En el silencio y en la meditación orante, queremos pedirle a una generación de hombres y de mujeres nuevos, cuya
Jesús el don de no resistirnos a su manifestación en nosotros y característica es la paz, la capacidad de perdonar empezando
en la historia. por las más pequeñas circunstancias de la vida; no la
agresividad y la polémica. Son los signos de la profecía de paz,
de un obrar que neutraliza las guerras; son los signos de la
EL MANDATO DE JESÚS Y LOS SIGNOS DEL CREYENTE
profecía del desarme, que demuestra la inutilidad de las armas;
1. Estamos en la parte central del pasaje: «Jesús les dijo: ‘Id son los signos de la confianza en la fuerza de la verdad
por todo el mundo y proclamad la Buena Nueva a toda la pacificadora, no belicosa; de la curación de los corazones
creación’» (v. 15). envenenados por la violencia. Así pues, nosotros, aun
Estas palabras nos impresionan, porque en las vigilias reconociendo que no sabemos tomar en la mano las serpientes
misioneras las hemos oído dirigidas a muchos amigos o que no tenemos el coraje de beber veneno, sabemos que nos
nuestros que hoy se encuentran en diversas partes del mundo. hemos hecho fuertes por la indefensión de Cristo, por la
Son todas las personas que han recibido en depósito el fuerza de su cruz. Por eso podemos preguntarnos sobre los
Crucifijo y que, atendiendo al mandato de Jesús, han dejado signos que acompañan a los que creen en Jesús:
nuestra diócesis y han marchado a tierras lejanas. — ¿Devuelvo mal por mal, ofensa por ofensa, crítica por
Dentro de pocos días, el Señor repetirá su mandato a cuarenta crítica? ¿Soy antipático para quienes lo son conmigo?; ¿soy
y seis jóvenes diáconos que consagraré como sacerdotes, y a agresivo por temor a que me ataquen primero los otros?; ¿me
algunos de ellos como sacerdotes misioneros. Ellos lo esfuerzo en lograr una posición para no verme superado por
acogerán de forma solemne por la imposición de mis manos, y los demás?
os pido que recéis intensamente por ellos. — O bien, ¿voy por el mundo confiando en la fuerza del
/Mc/16/15: «Predicad el Evangelio» es el anuncio amor, del perdón, de la paz, de la misericordia, de la
fundamental de Jesús, que quizá no convenga traducir con el mansedumbre evangélica, de la compasión de Dios por el
verbo «predicar», que tiene sabor a sacristía. De hecho, su hombre? ¿Soy capaz de curar en torno mío —imponiendo las
sentido real es el de «gritar el Evangelio, proclamarlo». No manos del amor, de la caridad, del servicio— las heridas de la
gritar una simple fórmula, sino el señorío de Cristo, su fuerza, violencia que causan estragos en nuestra sociedad, creando
como muerto y resucitado, sobre el mundo de hoy y sobre mi generaciones de personas frustradas, amargadas, agresivas
vida: gritar la fuerza que Jesús tiene de transformar el unas contra otras? ¿Soy capaz de llevar la paz, de imponer mis
universo entero. manos a estos enfermos y devolverles la salud?
Es el mandato que el Señor nos confió a cada uno y que Si podemos reconocer que, a pesar de nuestra debilidad y
requiere silencio, atención amorosa, capacidad de acogida. fragilidad, se nos ha dado algo de estos signos, hemos de
«Concédeme, Señor, escuchar estas palabras tuyas y decir:
proclamar tu señorío sobre mi vida, sobre el mundo y sobre «Señor, Tú reinas en nosotros y nos das la gracia de
todas las realidades». proclamar tu Evangelio, de predicar tu gloria».
2. El señorío de Jesús sobre el mundo se expresa por medio de «Y confirmaba la palabra».
cinco signos, que a primera vista nos parecen extraños, un Finalmente, meditemos unos momentos en los hechos
tanto peregrinos: «En mi nombre expulsarán demonios, conclusivos que se describen en la tercera parte del pasaje:
hablarán lenguas nuevas, tomarán serpientes en sus manos, y «Con esto, el Señor Jesús, después de hablarles, fue elevado al
aunque beban veneno no les hará daño; impondrán las manos cielo y se sentó a la diestra de Dios. Ellos salieron a predicar
sobre los enfermos y se curarán» (w 17-18) por todas partes, colaborando el Señor con ellos y
Cuando yo era un muchacho y escuchaba este pasaje del confirmando la Palabra con las señales que la acompañaban.
evangelio, me sentía interiormente asustado, porque me decía: (vv 19-20).
«Puesto que no soy capaz de hacer estas cosas, es que no Se sintetiza aquí todo lo que la Iglesia primitiva vivió y lo que
tengo fe». leemos más ampliamente en el libro de los Hechos de los
Todavía hoy, al escucharlo, siento cierto temor, pero ha apóstoles. Naturalmente, se sintetiza también lo que nosotros,
crecido mi confianza, porque he aprendido a ver que los como continuadores de aquella Iglesia, seguimos viviendo y
signos prometidos por Jesús se realizan en nosotros los realizando: predicar por todas partes, a todos los ambientes,
creyentes, en vosotros, en muchos jóvenes que tengo el gozo en todas las situaciones, sin considerar a nadie perdido ni
de conocer. En efecto, la capacidad de soportar dificultades, olvidado de Dios, la certeza de que el Señor actúa con
contrastes, criticas e incluso burlas, y soportarlas con paz y nosotros y confirma la palabra con los prodigios. No ya los
coraje, es una traducción de aquellas palabras: Aunque beban prodigios del sol, de la luna, de las estrellas, sino los prodigios
veneno, no les hará daño». de nuestra vida humilde, de nuestra capacidad de amar, de
Y la capacidad de enfrentarse a la complejidad social y perdonar, de hacernos constructores de paz.
cultural de hoy sin asustarse, sin sentimientos de inferioridad, Es la vida de la Iglesia que tenemos el don de poder
sino con la certeza de que Dios está siempre con nosotros, contemplar y a la que somos llamados al final de nuestros
encuentros de la Escuela de la Palabra; terminamos, pues, con
este mandato y con esta certeza de que el Señor está con
nosotros. Y también con un recordatorio del camino que
hemos recorrido hasta aquí:

CONCLUSIÓN SOBRE EL CAMINO RECORRIDO


Os voy a proponer dos preguntas que considero de especial
importancia:
1. ¿He aprendido a leer el evangelio?
En las reuniones de la Escuela de la Palabra ¿he aprendido a
hacer la lectio de los párrafos del evangelio, sin esperar a que
el predicador me lo diga todo, sino sacándolo yo mismo de las
santas palabras evangélicas, que nos traen la gracia del
Espíritu Santo, la palabra de Jesús, de los apóstoles y de los
profetas de la Iglesia primitiva?
Si puedo responder con sinceridad afirmativamente, le daré
gracias al Señor. Por el contrario, si creo que todavía he
aprendido poco, puedo pedirle que me dé la sobreabundancia
del Espíritu, para que se me abra el conocimiento de las
Escrituras.
«Tú, Señor resucitado, que abriste la mente a tus discípulos
para conocer las Escrituras, ábrenosla también a nosotros
como fruto de la perseverancia en esta Escuela de la Palabra».
2. ¿He aprendido a interrogar al evangelio a partir del
análisis de mi situación, de la reflexión sobre mi propia vida?
A lo largo de estos encuentros habéis tratado de ver, leyendo
los pasajes de Marcos, el camino educativo que el Señor nos
hace recorrer y los saltos cualitativos que conlleva, las
conversiones que el Señor nos pide y los momentos de
desgarro que nos ha propuesto y nos propone. Hemos intuido
que sólo mediante ciertos saltos cualitativos valientes,
mediante desgarrones sucesivos, llegamos a captar la fuerza
de su misión y a recibirla de la Iglesia primitiva para
ofrecérsela a nuestro tiempo.
¿Qué es lo que Jesús me pide en estos momentos?
Tendremos oportunidad de comprenderlo, incluso
simbólicamente, porque, dentro de poco, algunos jóvenes de
diecinueve años que han seguido durante el año un animoso
itinerario, realizarán la «redditio symboli»1 ante nosotros,
mientras todos proclamamos que Jesús es el Señor. Así pues,
su gesto nos ayudará a preguntarnos: Señor, ¿qué hago por Ti
y por tu Iglesia? ¿Qué desgarrón exiges de mi para que pueda
ser constructor de paz y estar dispuesto a creer en tu
presencia en mi vida?
«Concédenos, Jesús, vivir estos momentos de silencio en
estrecha comunión entre nosotros y Contigo, volviendo una y
otra vez sobre tus palabras, recorriéndolas, interrogándote,
invocando la luz por intercesión de María, virgen de la fe.
Concédenos, Señor, vivir este último momento recogiendo de
tu Evangelio la alegría de vivir la fe, que Tú has querido
enseñarnos este año a través de nuestro camino de la Escuela
de la Palabra».
(1) El gesto de la redditio symboli se realizó, en esta ocasión,
mediante la entrega al Arzobispo de una carta personal con la
regla de vida espiritual de cada joven.

Potrebbero piacerti anche