LA GUERRA DE POSICIONES

Esta fase de la guerra es conocida también como “Guerra de trincheras” por

la forma en que se desarrollaron las operaciones militares. Abarcó los años 1915 y
1916. Fue consecuencia del fracaso de la guerra relámpago iniciada por los alemanes
en 1914.
Supuso un cambio de estrategia respecto a la fase precedente y abrió paso a
la guerra de frentes estables que inmovilizó a los ejércitos en líneas de trincheras que
se extendieron a lo largo cientos de kilómetros, desde el Mar del Norte hasta Suiza.

Caracteres de la guerra

a) Es una guerra total. En los países implicados se hace necesaria, una

colaboración total de personas y recursos. Hay una movilización masiva de
hombres, mujeres y niños, además todas las actividades quedan supeditadas
a la guerra. La industria se transforma en función de las necesidades de la
guerra.

b) Es una guerra mundial. La entrada de nuevos beligerantes da a la guerra

europea una dimensión mundial. El banco aliado se ve muy incrementado.

c) Las fuerzas están muy equilibradas lo que hace que a la guerra no se le vea el
fin.

d) Es una guerra de trincheras. Los soldados de uno y otro bando quedarán

“enterrados” en las trincheras para poder resistir. Los problemas que
conllevaba son fáciles de imaginar: insalubridad, enfermedades, condiciones
infrahumanas y junto a ello el riesgo de salir, de cruzar entre líneas. Las
trincheras se convirtieron en nidos de ametralladoras contra las que los medios
ofensivos son inoperantes.

Los sufrimientos de los soldados son tremendos. La guerra ha dejado de tener

sentido incluso para aquellos que acudieron a ella alegremente. Ahora la guerra está
en un plano de irracionalidad absoluta.

Se convierte en una:

- guerra tecnológica donde se perfeccionó al arte del camuflaje de las personas y de

las piezas de artillería, fabricándose artilugios como postes de imitación que en
realidad eran telescopios o raíles de camuflaje para despistar a los observadores
aéreos, e incluso cadáveres de imitación.

- guerra química donde los gases asfixiante como “el gas mostaza” hacía que los
hombres murieran como chinches. Al principio se protegían poniéndose un trapo
húmedo en la cara después vendrían las máscaras antigas.

- guerra psicológica en la que la propaganda por parte de la prensa tiene un gran

poder sobre todo en campañas de desprestigio hacia la parte contraria.

También aparecieron los lanzallamas, los tanques y los carros de asalto, así como las
granadas que destruían trincheras enteras.

Operaciones
 Los Estados Mayores, obsesionados por la idea de romper el frente enemigo,
lanzaron ofensivas mediante grandes bombardeos y gran aparato de artillería, pero sin
lograr resultados.

a) La guerra de posiciones en el Frente Oriental.

En mayo de 1515 Alemania decidió atacar el frente ruso centrándose en la

región de Galitzia.
La entrada de Italia en la guerra (23 mayo 1915) al lado de los aliados obliga a
Alemania a desplazarse hacia el sur y llevar tropas para apoyar a los austrohúngaros.
Además la entrada de Bulgaria el lado de los Centrales en octubre de 1915 ayudó a
conquistar la Polonia rusa, Lituania y Serbia y recuperar Galitzia. Fue la victoria más
espectacular de toda la guerra.
Otro buen trabajo de los alemanes fue conseguir que el imperio Turco se
aliara con ellos, pues de esta forma se ampliaba el campo de operaciones más hacia
el S.E.

La Batalla en la Península de Gallipoli

Los aliados decidieron atacar Turquía, para así poder dominar el estrecho de
Dardanelos. Para tal fin los británicos enviaron a Gallipoli, un ejército procedente de
sus colonias de Australia y Nueva Zelanda, pero la acción quedó resuelta a favor de
los turcos al aparecer un submarino alemán que hundió dos acorazados británicos.
Murieron 145.000 hombres y puso de manifiesto la importancia operatoria del
submarino.

b) La guerra de posiciones en el Frente Occidental.

Aunque los alemanes (fuerzas centrales) habían avanzando en la zona oriental

y causado importantes pérdidas a los rusos haciendo desaparecer Serbia, Alemania
seguía cercada. Los suministros procedentes del exterior empezaban a escasear y
tuvieron que limitarse a sus propios recursos. El racionamiento se hizo más estricto y
la mujer tuvo que incorporase a fabricar industria bélica.

Los submarinos seguían siendo muy importantes. Más que como arma
ofensiva sirvió para cortar el suministro a los contrarios, torpedeando barcos
mercantes y transatlánticos. El más grave fue el hundimiento del buque británico de
pasajeros Lusitania en mayo de 1915 en el que murieron más de mil pasajeros. Hubo
tal conmoción que Estados Unidos amenaza con una intervención armada.

Por otro lado Alemania también intentó recurrir a la flota de superficie atacando
a la flota británica, ambas se enfrentaron en la batalla de Jutlandia (mar del Norte),
que fue el mayor combate naval que tuvo lugar en todo el conflicto. La superioridad
naval de los británicos obligó a los alemanes a retirarse (31 de mayo y 1 de junio de
1915)

Al año siguiente (1916) los alemanes temerosos de un progresivo aumento de

las fuerzas aliadas deciden iniciar una guerra de desgaste. Su objetivo es Verdún,
(plaza mítica defendida por Pétain) pero no tomarla sino asediarla hasta acabar con el
ejército francés.
El asedio duró cuatro meses de verdadero infierno y entre los franceses sólo
había una consigna: resistir. Esta batalla constituyó una gran prueba nacional por la
escasa participación de tropas no francesas. Según la opinión pública fue una gran
victoria moral francesa, aunque el resultado no fue claro. Las víctimas fueron
similares en los dos bandos (alrededor de 350.000).

Al mismo tiempo (julio-septiembre) tiene lugar la batalla de Somme, por

iniciativa francesa y de características similares, es decir “de desgaste”. El material
artillero empleado por los aliados fue impresionante. Sin embargo, el resultado fue
desastroso. No se logra romper las filas enemigas y las pérdidas humanas en ambos
bandos son cuantiosas (más de un millón doscientas mil víctimas).

Esta batalla desarrollada en el norte de Francia (al norte y al sur del río
Somme) fue una de las más largas y sangrientas. Su propósito era distraer a las
tropas alemanas de la batalla de Verdún y sin embargo las bajas terminaron siendo
muy superiores.

El 27 de agosto de 1916 entra en la Guerra, Rumanía (al lado de Rusia) con la

esperanza de recuperar la Transilvania. Esto permite prolongar el frente oriental hasta
el mar Negro. Pero al final del año (diciembre) caerá en manos de los alemanes.

La crisis de 1917

En el año 1917 la situación bélica, a la que no se le ve el final, ha hecho crisis.

La reacción ante este hecho fue el desengaño y la desconfianza. Comenzaron las
deserciones en los ejércitos y los motines. Todos se preguntaban para qué había que
proseguir una lucha tan cruel e inútil. Las propuestas de paz empezaron a no parecer
tan absurdas.

El presidente Wilson propondrá la concordia una “paz sin victoria”. El Papa

Benedicto XV hará también un llamamiento a la paz. Pero no prosperaron.

Este año de 1917, por el contrario se piensa en la guerra a ultranza, (a muerte)

como única forma de poner fin al conflicto. La entrada de los Estados Unidos en el
conflicto va a mundializarlo. Además la revolución bolchevique (movimiento político
ruso que desplazó al zar Nicolás II para intentar instalar en su lugar una república
liberal) también afectó al transcurso de la Gran Guerra. Rusia abandona la guerra en
1917, pues según afirmaba Lenin: la paz resultaba imprescindible para la
consolidación y desarrollo del socialismo.