EJERCICIO CUARTA LECTURA

Mdulo de culto y liturgia. Profesor: Jhair Alberto Catao Castro

Estudiante: Juan Manuel Barrera. Cdigo 21010695.

Lutero y la reforma litrgica. V Asamblea general del concejo latinoamericano de iglesias (CLAI).
2007. Ams Lpez.

RENOVACIN LITRGICA

La idea central del autor en este artculo consiste en aceptar el desafo de estar abiertos a la
renovacin constante de la iglesia en la manera en cmo se presenta al mundo, ms
especficamente en su tradicin litrgica. Aunque en estos tiempos el pluralismo y el
posmodernismo imperan en el pensamiento contemporneo y algunas iglesias han adoptado dicho
sistema, no debemos reprimirnos para hacer contraposicin como algunos proponen. No es
incorrecto transmitir una imagen coherente con la cultura en la que vivimos siempre y cuando no
se comprometa la teologa bblica. De hecho, es por medio de un fuerte apego a las Escrituras y en
un desarrollo de una teologa cristocntrica apasionada que haremos las reformas correctas en todo
mbito, incluida la liturgia.

El ejemplo que nos dan los reformadores en la renovacin litrgica no es para que adoptemos sus
maneras de realizar el culto, sino para que traigamos la misma motivacin a nuestros tiempos y a
nuestra localidad. Como pueblo latino no debiramos conformarnos a una liturgia europea
caracterizada por su recato y compostura, sino que haramos bien en ser el pueblo que le traiga
alegra y festejo a la liturgia porque el gozo del Seor es nuestra fortaleza. Vale la pena aclarar que
dichas renovaciones no nacen de una valoracin de la cultura antes que de una valoracin teolgica,
sino que es al contrario. La reforma debe ser primero que todo teolgica, y en esa medida pueda y
deba ser adornada por una valoracin adecuada de la cultura.

El autor concluye su artculo animndonos a echar mano de las riquezas de esta herencia que nos
dej la iglesia reformada del siglo XVI con el fin de que logremos tres cosas.

1. Reformar la liturgia por medio de una reforma teolgica.

2. Reformar la liturgia de una manera contextualizada con nuestra cultura.
3. Reformar la liturgia de modo que el cuerpo de Cristo participe integralmente.

El desafo es a romper nuestros propios paradigmas por medio de una sana teologa. Para glorificar
a Jesucristo y tener una sana, santa, y alegre comunidad de fe.