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2. Estructura literaria
- los doce para estar con el. Estar y vivir con Jess, seguirle en su camino tan
distinto de los caminos humanos, es la condicin fundamental de toda
experiencia autnticamente cristiana.
- La adhesin a Cristo solo puede hacerse escuchando y haciendo propio el
evangelio de Cristo. La eucarstica tambin es fundamental. Compartir el pan y
el vino da fuerzas para compartir igualmente su disposicin al servicio del
amor llevado hasta la muerte, que introducir en el reino de Dios, cuando el
maestro y el discpulo se encuentren de nuevo en el banquete: En verdad os
digo, que no beber mas el fruto de la vid hasta que lo beba de nuevo en el
reino de Dios.
- El reino de Dios se manifestara, pero necesitamos paciencia, es Dios el que har
crecer la semilla del Reino.
- El discpulo necesita constancia, estar en continua vigilancia. No caer en la
doble tentacin de los entusiastas que consideran como ya inminente el
retorno del seor y pretenden que el reino consiste en grandes prodigios; ni
como aquellos laxistas que se instalan cmodamente en el mundo, pensando
que la venida del hijo del hombre aun esta lejos.
- El tiempo que se les da a los cristianos se cualifica como espera del Seor en la
vigilancia contra las tentaciones del mundo y en la actividad del amor como
respuesta a la presencia viva del Reino.
- El camino recorrido por Jess, que marcha hacia la cruz pero que se abre luego
a la resurreccin, le permite al cristiano, en el seguimiento y en el discipulado,
negarse a si mismo, tomar su cruz, hacer fructificar en si mismo la semilla del
Reino y vivir en la esperanza activa del Hijo del hombre. Mientras participa en
la cena del Seor bajo los smbolos del pan y del vino, espera y suea en el
futuro banquete del reino definitivo del Padre, en donde se pondr de
manifiesto el misterio de amor vivido en la vida diaria, en paciente y vigilante
espera, es decir, en el servicio de amor humilde y sacrificado, en el seguimiento
y la compaa de su Seor, que siempre le precede y le espera.