Dada la diversidad de fuentes y literatura se ha dicho mucho sobre la vida y obra de George

Ivnovich Gurdjieff. Algunos fijan su fecha de nacimiento en 1866 y otros discrepan colocndola
entre 1872/73 o 1877. Lo que s es consensuado, es que naci en el barrio griego de la ciudad de
Alexndropol, Armenia. Nacido y crecido en una zona de diversidad y contacto de lenguas, desde
muy joven fue capaz de comprender y expresarse en turco, ruso, griego y armenio y entr en
contacto con diferentes manifestaciones culturales y espirituales de aquellas naciones.

Despus de un periodo, en donde todo lo que se dice sobre su vida no es una certeza, Gurdjieff
comenz un esfuerzo notable y complejo: comenz a capturar y provocar el inters de diversos
grupos de personas de todo tipo, algunos fascinados por su personalidad, sus ideas y otros, tratando
de encontrar un camino propio. Rusia, Francia y despus Nueva York, fueron cedes de centros y
escuelas que practicaron sus enseanzas y las de sus discpulos, demostrando que ante la inmutable
permanencia del cambio, los grupos, escuelas y personas van y vienen, y slo unos cuantos
afortunados tienen la dicha de permanecer en el banquete que denominamos Trabajo (Carlos de
la Garza).

Reconocido como uno de los primeros maestros introductores a Occidente del conocimiento y
sabiduras antiguas, Gurdjieff ha sido reconocido como el encargado de formular un camino de
autoconocimiento y liberacin capaz de transformar la vida de quienes estn dispuestos a asumir la
tarea ms compleja y difcil: transformarse activamente mediante el autoconocimiento, el
sufrimiento voluntario y el trabajo con y en uno mismo.

El Cuarto Camino, se ha descrito como una doctrina, un sistema, una filosofa, una prctica, etc. no
obstante, es difcil etiquetarlo una vez que se entra en contacto con sus principales ideas y
postulados. Ms all de los caminos del abandono, el martirio y la entrega emocional, el Cuarto
Camino plantea un plan de trabajo nico para cada persona dispuesta a observarse a s mismo y
enfrentarse con aquello a lo que siempre se ha indultado de sus propias formas de ser.