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El Programa Escuelas de Tiempo Completo (PETC) es una iniciativa Presidencial que atiende
diversas necesidades sociales y educativas entre las que destacan:
1. Los cambios en la organización de las familias: familias uniparentales, familias en las que
padres y madres trabajan.
El PETC considera las observaciones de la UNESCO (2001), que reconoce tres puntos de
referencia importantes para el mejoramiento de la calidad educativa:
¿Qué se espera y con qué cuenta el colectivo docente para operar el Programa?
El PETC promueve que directivos y maestros cuenten con tiempo específico para trabajo
individual y en colectivo destinado a la planeación, evaluación de las actividades, interacción
con las familias de los alumnos, reflexión sobre la práctica, entre otras. Este espacio es de
cinco horas a la semana que pueden organizarse de acuerdo con las características y
necesidades de la escuela, para planear las actividades didácticas, el seguimiento y
evaluación de los resultados.
Uno de los desafíos que enfrentan los directivos y docentes que trabajan en una Escuela de
Tiempo Completo, es la planeación y organización articulada de toda la jornada escolar
incorporando las actividades derivadas de las líneas de trabajo para asegurar que se
atiendan las necesidades educativas de los alumnos, conjuntamente con una alimentación
saludable, y la seguridad e higiene de los alumnos.
En las Escuelas de Tiempo Completo, la ampliación de la jornada escolar significa una re-
organización y re-distribución del tiempo escolar para la realización de las diversas
actividades, así como de las funciones, responsabilidades y actuación de toda la comunidad
escolar.
¿Qué debe considerarse para organizar el trabajo en una Escuela de Tiempo Completo?
• Diagnóstico
Para el trabajo que se desarrolla, es necesario contar con un diagnóstico que aporte
elementos para elaborar la planeación escolar considerando los siguientes ámbitos:
académico, de gestión interna y externa (gobierno institucional), administrativo, recursos
humanos y servicios; además de tener presentes los objetivos, recursos, estructura,
tecnología, cultura y entorno en que está inserta la escuela. (Antúnez, S., 2004)
Es importante también, incluir no sólo datos cuantitativos, sino rescatar el conocimiento que
los maestros y familias de la comunidad tienen, con el fin de lograr un diagnóstico de corte
más cualitativo, pero sistematizado y articulado.
Estos elementos ofrecerán tanto al director como a los docentes y demás actores que
participen en las Escuelas de Tiempo Completo tener mayor conocimiento de su escuela
para el desarrollo de las actividades educativas.
• Planeación escolar
La planeación es una herramienta organizativa necesaria y debe estar presente en todas las
escuelas. La naturaleza del PETC hace que la planeación adquiera especial relevancia, ya
que se trata del instrumento de gestión para organizar y distribuir las tareas escolares en
relación con el uso efectivo del tiempo y la extensión del horario. Por tanto, la planeación en
las Escuelas de Tiempo Completo se debe caracterizar por ser abierta, pertinente, flexible,
práctica, contextualizada, incluyente y articuladora, además de constituir un referente para
la evaluación interna de la escuela. La planeación en este sentido implica que maestros y
directivos construyan acuerdos de manera anticipada y que utilicen los instrumentos con que
ya cuentan para la planeación escolar para el óptimo aprovechamiento de la jornada escolar.
La ampliación del horario ofrece a las escuelas la posibilidad para que los maestros, el
director y las familias analicen y discutan, de manera sistemática, sobre lo que hacen, cómo
lo hacen y qué logran cotidianamente en todos los ámbitos donde participan así como
identificar los problemas que enfrentan y las alternativas para solucionarlos.
• Evaluación y seguimiento
Es importante revisar el diseño y, la planeación del trabajo escolar, a la vez que se observa
la continuidad, secuencia y resultados de las actividades que se desarrollen. En este sentido,
cada actor educativo será responsable desde su ámbito de acción de realizar el seguimiento
y la evaluación correspondiente.