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1
Oh! glorioso San Pio de Pietrelcina, tu que desde la infancia amaste el recogimiento y la oracin, tanto as
que no te era nunca suficiente el tiempo para orar, despierta nuestra alma dormida en la tibieza mundana y
concdenos la belleza y el gusto del coloquio con Dios.
2
Oh! hijo humildsimo del Pobre de Ass, que el Seor te hizo rico con tantos dones, y nunca te consideraste
superior a los dems, ensanos a saber vivir tambin en la humildad, para ser un da exaltados en la
Santsima Trinidad.
3
Oh! Santo de las estigmas y rico en piedad, que siempre te conmoviste por la miseria humana, socorre a
nuestros hermanos enfermos hacindoles gustar el aroma de tu presencia.
4
Oh! gua y maestro de tantas almas, tu que durante la vida terrena tuviste siempre el cuidado de conducir las
almas hacia Dios, indcanos ahora el camino de la santidad, ayudndonos a cumplir la voluntad de Dios.
5
Oh! primer sacerdote estigmatizado, tu que por tantos aos fuiste la imagen viviente del Crucificado,
ensanos el amor a la Cruz, haz que sepamos superar la prueba cotidiana y a reparar, como el Cirineo,
tantas ingratitudes que se cometen contra Dios.
6
Oh! gran apstol del confesionario y profundo escrutador del corazn, que has arrebatado tantas almas de
las manos de satans, recondcenos a la fuente del perdn y la gracia.
7
Oh! amante apasionado de Jess Eucarista, que cada da adoraste al Divino Maestro en la Santa Hostia, tu
nica fortaleza y sostn durante los das de enfermedad, haz que nosotros tambin nos alimentemos
dignamente y con frecuencia del Pan Divino, para obtener el premio de la vida eterna.
8
Oh! tierno hijo de la ms tierna de las Madres, tantas veces tu Madrecita te asisti en el camino terrenal y
siempre te acompa al altar para la celebracin de la Santa Misa, haz que tambin nosotros, con el rezo del
Rosario, honoremos a la Virgen Santsima para despus, como t, contemplarla en el Paraso.
9
Oh! gran Santo de todos los continentes, que tienes mundialmente una gran cantidad de hijos y de devotos,
habla ahora al corazn de Dios, presntale todas nuestras necesidades y has que nuestras peticiones sean
escuchadas y acogidas.
Edizioni Padre Pio da Pietrelcina Convento Santa Maria delle Grazie, San Giovanni Rotondo, (FG) Italia