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Ulises y sus compaeros no se dan por vencidos. No en vano, han logrado esquivar el peligro de las
sirenas (aunque Odiseo admiti a sus hombres que hubiera sacrificado con gusto su vida por el encanto
de sus voces).
Pero no todo iba a ser fcil: los dioses vuelven a poner a prueba al hroe. En su camino hacia taca tenan
que atravesar un peligroso canal entre dos imponentes acantilados, dominados por un lado por Escila y
por otro por Caribdis. Se dice que esa zona es el actual estrecho de Messina, dominado por fuertes
mareas y vientos que hacen muy peligrosa la navegacin...
Quines eran estos monstruos? Escila era un monstruo con rostro y pecho de mujer, seis cabezas de
perro y doce patas de can en la cintura, mientras que Caribdis era un peligroso torbellino de agua que se
tragaba todo lo que se le pasaba por delante varias veces al da, devolvindolo todo despus de tres das
en forma de naufragio.
La roca de Escila, adems, atraa mgicamente a las naves. Astillndolas y lanzndolas a su compaero
Caribdis... Era como estar entre la espada y la pared. Ulises se lo vio venir e hizo virar rpidamente su
barco para no chocar, pero entonces se acerc demasiado al torbellino y en el fragor de la tormenta, el
ruido de las olas y el remolino de aguas de Caribdis. No pudo evitarlo: la proa del barco se inclin
peligrosamente y durante minutos pareci que todo estaba perdido.
Menos mal que Ulises le caa bien a algunos dioses: Atenea, apiadada (o, seguramente, temiendo que si
Ulises y los suyos moran en esta aventura, ella no tendra con qu entretenerse), ayud a los hroes,
impulsando mgicamente la nave, de forma que Caribdis slo pudo tragarse a seis hombres de la
tripulacin.
Penlope est cansada de esperar tanto y les ofrece una prueba a los pretendientes.
Inventa una competencia de fortaleza fsica y declara que se casar con el ganador.
Los pretendientes tienen que encordar el arco de Ulises y lanzar una flecha por los cabezales
de doce hachas.
Muchos pretendientes lo intentan y no tienen xito, hasta que el mendigo (es decir, Ulises
disfrazado) pide la oportunidad de intentarlo.
Tiene xito, se quita el disfraz y, con la ayuda de Telmaco, unos sirvientes leales y la
proteccin de Atenea, mata a todos los pretendientes ms de 100 en una masacre
sangrienta.