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1 Los consignatarios del guano y el problema de la "burguesia nacional” en el Pert ENTRE 1862 y 1868 se crisaliza y se desarrolla un proceso de primera importancia para la historia social del Peri, Hasta 1862 Ta explotacién y venta del guano estuvieron confiadas a varias ‘casas comerciales extranjeras, como la de Anthony Gibbs. Esta firma inglesa era Ia dominante, dado el monopolio de venta que ella ejereia sobre el mercado britdnica, Al expitar en 1862 su contrato firmada una década antes, Ia Casa Gibbs no pudo ‘obtener la renovacién del mismo, El gobiemo del Mariscal Castilla prefirid, no sin rticencias, entregar esta consignacién a tun grupo de comerciantes peruanos, asociados bajo el nombre de Compaiiia de Consignatarios Nacionales. Es asi como estos, ccomereantes pasaron a tener el control de la venta del guano en el mercado inglés, hasta que Pigrola, en 1869, es arrebaté esta concesién para entregarla al francés Auguste Dreyfus Hasta aqui los hechos. Pero su enunciado tan escueto no trasluce la importancia que tuvieron en el desarrollo histérico y en la configuracién del Peri contempordneo. Porque la Aescripcién anterior esboza un dable problema, cuyo andliss es, capital, El primero se refiere a las bases historicas del poder de la clase dirigente en Ia segunda mitad del siglo XIX. El segundo, mucho més 18 Guano y burguesiaen el Pest importante, se refiere a la naturaleza de esta clase y a las razanes por las cuales no pudo convertise en una genuina clase burguesa, capaz, por consiguiente, de erradicar las bases ccoloniales de Ia economia peruane. Al entregar Castilla a este ‘grupo de comerciantes peruanos la consignacién del guano, puso virtualmente en manos de éstos el instrumento mis adecuado para multiplicar sus fortunas. Este grupo habia sido seriamente sacudido por las etisis de fines del siglo XVII, hhabia recibido duros golpes como consecuencia de los conflicts armados durante la etapa de Ia Emancipacién, pero desde comienzos de la década de 1850 habia comenzado a econsteuirse material y politicamente, En 1862, con la pposesién casi exclusiva de la consignacién del guano podia fortalecer, aim més, como en efecto lo hizo, este proceso de recuperacién, Pero el problema, como mencion6 hace un ‘momento, es justamente por qué esta masa monetaria no pudo Cconvertrse en capital y por qué este grupo en lugar de utilizar estos recursos en la transformacién de la economia peruana ‘opté por su conversién en una clase rentista, En otras palabras, To que ‘rato de explicar en este ensayo son las razones que ‘mpidieron la constitueién de una clase burguesa en el Pert de la segunda mitad del siglo XIX. Problema ocioso, din algunos. Ciertamente que es tal vez mas importante el estudio de los origenes de la burguesia y no el porqué esta clase no pudo nacer en un determinado ‘momento de la historia, Pero una aproximacién como la que sugiero tiene por lo menos una doble justificacién. Primero, Porque el examen de las condiciones negativas para la temergencia de un proceso permite, altemativamente, un mejor conocimiento del porgué y del cémo cuando éste, el hecho 0 el proceso, efectivamente se da. Segundo, y aqui la historia de este problems se confunde con el problema de le Historia, 1/ Consignstaros y "burguesia nacional” porque he deseado, con mis medios y mis limitaciones, examinar més de cerca aquellas tesis que postulan la matriz capitalista de América Latina y del Pert desde ef alba misma de Ja Conquista. Si bien Ia imagen de un Francisco Pizarro capitalista y un Manco Inca proletario es poco convincente, Ia, exploracién del cardeter de le economia peruana del siglo XIX requiere mucho més ewidado, El rigor en el andlisis, la responsabilidad en la caracterizacidn no son s6lo exigencias en todo abajo académico, En el caso del Peri, ademds, ccomprometen el destino del combate de sus clases populares, Pero volvamos al caso de los consignatarios nacionsles. {Quignes eran estas comerciantes nacionales y cual fue el proceso de su enriquecimiento? Para soliciter la consignacién Gel guano, en efecto, era indispensable contar con la sufciente ‘masa de capital para hacer frente a los gastos de explotacién y e transporte. Recordemas, a este respecto, que la debilidad de Ja Alte econdmica peruana facilité que las primeras consignaciones de ventas fuesen entregadas a casas comerciales, britnieas y francesas que disponian de los capitales para hacer frente a los gastos que la explotacién del guano exigia. Este problema, es decir la precariedad econémica, subsistia todavia en 1850, cuando el Gobierno peruano firm un contrato por diez aRo$ con un conjunto de Comerciantes nacionales, para la venta del guano en Espaia, Francia, China, las Antillas. y Estados Unidos 1, Estos comerciantes crearon la Sociedad Consignataria del Guano y trataron de obtener los capitales para la explotacién a través de la emisién de acciones, El resultado fue sin embargo negativo, Un afio més tarde, ellos se vieron obligados a restingit su accién al solo mercado 1 Dancuart, Emilio (4) Anales dela Haclenda Piblica dt Pe Lima, tomo V, pags. 23-25. (En adelante esta fuente serd mencionada come Anale). 20 Guano y burgusiaen el Per de los Estados Unidos y a limitar la duracién de sus contratos a s6l0 cinco aos 2 La imposiblidad de reunie los capitales nevesarios para finaneiar la explotacién del guano constituye un indicio de la 4ébil situacién en que todavia se encontraba el grupo native de terratenientes y comerciantes. Esta debilidad era el resultado de la persistente postracién de la agricultura y de la minerla, asi como del despojo del control del comercio exterior por parte de los comerciantes extranjeros. Los ingresos producidos por la venta del guano hasta 1850, por otra parte, todavia no flulan sino a las areas fiscales y sirvieron, fundamentalmente, al fortalecimiento del aparato buroeritica y al mantenimiento de las fuereas armadas. Pero desde 1850 un cambio sustancial empieza a sanunciarse, Durante el primer gobiemo de Castilla, el 16 de ‘marzo de 18503, se aprobé la ley llamada de consolidacién de Ja deuda interna, Basicamente esta ley implicaba cl arreglo y Ia conversién de la deuda interna. En suma, una vasta operacién financiera consistente en el pago de las deudas acumuladas ‘contra cl Estado peruano desde los inicios de la Repiilica y a favor de los prestatarios nacionales. La decisién de llegar a un arreglo de la deuda interna, tomada exactamente un aio después de los acuerdos de Londres con los tenedores de bonos de la deuda extema, representaba sin duda una concesién importante a los acreedores nacionales. Para estos dltimos, en efecto, era inadmisible que Ta mitad de las rentas del guano siviese solamente para amortzar los dividendos y los inteeses de la douda extema, mientras que se relegaba a los acreedores dela deuda interna, 2. Bid, pigs. 27-28, 3. Dancuart, Emilio (ed) Anales, tomo V, p. 45. Constitayen nmediatos precedentesa est ley as disposiciones del 15 de setiembre 4e 1847, 20 de diciembre del mismo ato y 10 de marzo de 1848, todos ellos igualmente votados durante el gobiero de Castilla. 1 /Consignatarios y “burguesianacion™ a Ahora bien, de acuerdo a la ley aludida, se reconocian como eréditos contra el Estado, todos los préstamos, voluntarios © forzados, en dinero © en especies, levantados desde 1820 por cualquier autoridad del Gobierno. En virtud de esta decisidn, por ejemplo, fueron declarados con derecho a indemnizaciéa los dues de esclavos enrolados en el ejército, los propictarios de ganado y sementeras que sirvieron para sostener a las tropas, los plantadores de azicar, productores de chancaca y aquellos productos destraidos © confiscados en Deneficio de la causa de la Independencia, asi como los propietarios de fundos risticos y bienes urbanos a os que se infligi6 daios 4, Esta ley comprendié también "todo lo gastado en el sostenimiento de las tropas patriotas; sueldos, descuentos, Pensiones, asignaciones, créditos liquidos, artendamientos, alcances "de cuentas, gratificaciones, billetes, cédulas,, reconocimientos, parte de press, acciones pendientes, cargos por contrata, lbramientos no cubiertos por la Tesoreria y capitales que gravaban tanto el Ramo de Arbitrios como las ‘Aduanas y la Casa de Moneda" 5, Como se observa, la ley otorgaba una intorprotacién muy generosa de To que consttuia la deuda intema. En la préctica, como lo veremos luego, esta situacién se agravé ain mas. Al terminar Castilla su primer gobierno, 1851, la deuda intema consolidada ascendia ya a 4'879,607.7 pesos6, El monto ‘otal de la deuda, segimn el propio Castilla, 4.C£ Basadve, Jorge: Historia de a Repibica del Peri, Lima, 1961, 5*edieion, vol. 0, p. 1011 5. ford p. 1013, 6. Anales, vol. VI, p. 5. La composici6n de este monto total era el Ee etes 1"228.637.1 pesos Clas 31200718" Tetras do Ancash 738135 CCedulas de Reforma asroase 4879,607.7, 2 Guano y burguesia en el Pex no podria sobrepasar a mis de seis o siete millones de pesos. Pero on 1858, bajo el gobiemo de Echenique, la deuda reconocida legaba a 23°21 400 pesos 7. El informe de 1856 de la Caja de Consolidacién, en efecto, sefislaba que los eréditos reconocides durante el gobiemo de Echenique ascendian a 19°154.200 pesos8. La multiplicacién por seis det monto iniciel de Ia deuda reconocide fue posible por a venalidad y la corrupeién de los funcionarios peruanos, Todos los testimonios contemporineos ‘concuerdan en sefalar la profunda crisis moral del régimen y la ‘gran imaginacién desplegads por los acreedores para adulterar el monto de la deuda inicial, a través de la falsificacién de firmas y documentos. Fueron precisamente estos abusos los que suministraron uno de los pretextos para el estallido de la rebelién de Castilla en 1854. La comisién investigadora, instalada el afo siguiente deelaré que més de 12 millones de pesos en bonos de la deuda consolidada eran fraudulentos 9. No voy a detenerme demasiado en Ia deseripcién 7. CE. Echenique, José Rx Memorias para la Historia del Peri (1808-1878), plage de Jorge Basadre, nots de Félix Denege Lua, Lima, 1952, vo. Ilpp. 199 8. Anales, vol. VI, p. 6, Esta sums comprendin los rubros siguientes Billets 38.300 pesos Cedalas 71303300, (Cédulas de Reforma 248,200 Tetras de Ancash 000, Expedientes [9154200 9. Cf Anales, vl. Vp. 46. El plazo final para el reconocimiento e los eréitor de la devda interna 30 vencia en octubre de 1852, ‘oponiéndose Echenique a su reapertura pues, segin sus palabras: “un trav mal ere, ao por [oe reconocimientos que pudiean hecerse & feausa do pocos reclamos que en justcia an podianinterponerse que no se hicieron por incuria, desatendiendo la. preseripcién de le ley; ino por los abusos que se preparaben, hasta el grado de juzparse texpedientes con Ta flsfcacion de Ia firma de San Marin y otras autoridades" (Echenigue,J.R., op. eit, p. 203) 1 /Consigntaros y "burguesia nacional” 2 de este proceso que pertenece més bien a los anales judiciales de la Repiblica. Basta sefialar el rol de la corrupcion y la estafa, fen esta primera centralizacién del capital. Interesa, mis bien, discutir el significado econdmico de esta consolidacién de la douda interna, Este proceso puso, pues, en manos de los acreedores nacionales bonos reconocidos por un valor de més de 23 rillones de pesos, es decir cerca de cinco millones de libras esterlinas. Pero estos bonos, pese al alto interés que ganaban (6% anwal), en realidad se cotizaban a precios muy bajos en el mercado peruano, Sus precios oscilaban entre el 25, 30 y 32%, {de manera que los 23 millones reconocidos venian a epresentar solamente 7°370.000 pesos efectivos 10. Pata los tenedores era indispensable, en consecuencia, levantar los valores de estos bbonos y ponerlos al abrigo de un repudio eventual de cualquier gobierno posterior. Ambos objetivos se consiguieron por la conversin de titulos de la deuda interna por un valor total de 13 millones en bonos de Ia douds exterior. Esta operacion financiera se efectué a través de un doble contrato: 1. con la casa J.J. Urribarren de Londres por neve millones de pesos; 2. con Ta casa consignataria francesa Montané, por cuatro millones de pesos. Ambas firmas recogieron y cancelaron los ‘bonos de la deuda interna a través de la Caja de Consolidacién ¥ recibieron en cambio nuevos titulos de la deuda externa. El Servicio de estos Gltimos debia realizarse en Europa con los productos del guano 11 EI contrato con Ia casa Urribarren fue celebrado por el Ministro de Hacienda Manuel de Mendiburu, el mismo que habia firmado con la casa C, de Murrieta y C. J, Hambro, en febrero de 1853, un contrato de empréstito y redencin de la deuds inglesa de 1849. Como se ver mis 10. Basadre J. 9p at, vol Ih p 1027 ICE Anales, vol. VI, pigs. 59 4 ‘Guano y burguesia en el Per adelante, el fondo de amortizacién del contrato de 1853 fue fijado en un 2%; un ao mis tarde este fondo subié a 4%, para aleanzar en 1858 el 8 % anual. La asignacién de una tasa de amortizacién tan alta fue el resultado del incremento de los ingresos obtenidos por la venta del guano y, probablemente, de Ia presign ejercida por el comité de tenedores de bonos britinicos. Esta presién guarda estrecha relacién con la conversin de la deuda interna. Vearnos ebmo. La primera reaccién de los tenedores briténicos de bonos pperuanos ante la negociacién seereta Hevada a cabo por Mendiburu con la casa Urribarren fue desfavorable, En el informe de 1855, en efecto, puede leerse "Dos tercios de Ia deuda intema del Peri fueron creados en una forma irregular, y a través de medios fraudulentos, por los favoritos del Presidente actual; estos hechos, siendo conocides, como también Ia causa principal de la actual Guerra Civil, sera (Ia deuda) sin duda rechazada por cualquier administracién” 12 Los tenedores objetaban la iregularidad del proceso, el peligroso precedente y tenian una posterior anulacién, Pero, al ‘mismo tiempo, estos tenedores - bondholders-temian también la eventualidad de una pronta extincién de los depésitos de guano. Este temor los llevé a exigir al Estado peruano una ripida eancelacién de la deuda exterior, a través de un incromento sensible de la tasa de amortizacién, El Gobierno peruano al ceder frente a esta exigencia, aumentado a un 8% el fondo de amortizacién, pudo superar la oposicién de los tenedores a la conversiGn de la deuda interna 13, 12, Second Report of the Commitee of Anglo-Peruvian Bond holders, Londres, 1855. 13. CE Second Report of the Commitee of Anglo Peruvian Bondholders, London, 1855. 1 /Consigntaros y “burguesia nacional” 25 Sinteticemos los resultados de esta operacién financiers, or una parte, trece millones de pesos fueron entregados a los ‘screedores nacionales. No existe hasta ahora un estudio preciso sobre Ia identidad de estos favorecidos. Pero, ‘considerando el origen de sus eréditos contra el fisco, se puede inferir, sin mucho riesgo @ equivovarse, que en sus filas se encontraron terratenientes, comerciantes, militares dela revolucién, y personajes con el suficiente poder e influencia ‘como para haber intervenido en los turbios negocios de falsifcacién de documentos. Por otra, diez millones de pesos cconsolidadas, pero no convertidos, posibilitaron a sus tenedores fuertes ganancias por concepto de amortizacién intereses, dados los altos ingresos que percbia el fisco por la venta del guano en la década del $0, Estos bons, antes de su redencién, al ingresar al circuito monetario como papel ‘moneda, desataron un proceso inflacionario de los precios, afectando, por consiguiente, el poder adquisitivo de las clases populares 14. Empobrecimiento y enriquecimiento, como procesos sociales opuestos, acentuaron asi Ia polarizacion de la sociedad peruana Esta masa de capital-dinero puesta en manos de la capa de terratenientes y comerciantes debia permitirles, en Ia opiniGn del presidente Echenique, evar a cabo el renacimiento econdmico del Peri, Como lo sefiala un estudioso de la ‘economia peruana del siglo pasado 15, la consolidacién de la deuda interna responde a la peculiar concepcion de este dirigente acerea del rol del Estado en la sociedad peruana y de las causas del atvaso evonémico, Para el viejo eaudillo militar, Ia inicitiva del desarrollo econémico del Per en la Segunda smitad del siglo XIX no 14, CE Dats e iformes sobre lar eausas que han producldo el alza de las precios de los artieulas de primera necesidad que se ‘onsumen en la Capita, Lima, 1870, 1S, Maiguashea, J A:reimerpretation of the guano age 1840- 1880, Oxford, 1967, ess doctoral india), pp. 53-34 es {Guano y burgesiaenel Pent podia venir de los grupos privados sino del Estado; y esto, no porque el Estado peruano hubiera probado su capacidad en la ‘gestién econdmica, sino por el simple hecho de ser propietaria del guano. De la misma manera como Castilla durante su ‘gobiemo (1845-1851) uilizd los recursos del guano en el forsalecimiento del orden interno dol Peri, a través del jneremento de la fuerza armada y de Ia creacién de una ‘mumerosa clientela personal, Echenique, inmediatamente después, traté de utilizar estos recursas para conseguir el ‘progreso material" del pals. A este "progreso" se oponia, en la opinion de Echenique, prineipalmente la escasez de capitales, la dobilidad demogréfica del Peri y la ausencia de vias de comunicacién. La consolidacién permitiris, pues, superar al ‘menos el primer obstéculo, ero la concepcién de Echenique, como el desarrollo histérico posterior del Perit ha de probatlo, era demasiado ‘optimista ¢ idealista. No basta, en efecto, la presencia de una ‘masa monetaria para dar nacimiento al capitalismo 0 para desarrollar una economie. La formacién de un sélido mercado interno, condicin esencil, y la emergencia de un grupo social completamente nuevo, no son el resultado de una mera inyeccién monetaria, Echenique, sin embargo, al justificar Ia, ‘operacién de ls consolidacién diré mis tarde fue entonces que empezaron a impulsarse y @ rehacerse los fundos risticos y a entrar en reparacién las propiedades urbanas; fue entonces que se vio engrandecer el comervio y dar vida a la industria; fue entonces que salieron de la miseria mil familias empobrecidas con las exacciones de la guerra; fue entonces que, por consecuencia de esa consolidacién, tan maldecida por los envidiosos y por los que la tomaron por pretexto para llenar sus fines de ambicién ¥¥ de codicia, y merced alas providencias que realicé en Hacienda, se vio de un lado, 1 Consignatario y"burguesia nacional 27 ‘un desahoge en el Tesoro como no lo ha habido antes ni despuds, con sobrantes en sus rentas y hecha la riqueza_piblic, con vida barata para todos y facilidades para'todo negocio; fue entonces que se extinguié a usura en el pais ponignéose el dinero al 6% al aio pudiéndose acudir a aguel mucho. para procurarse fondos; fae entonees, enfin, que impulsado el comercio y estando en nuesto favor Ta balanza de A, por el gren producto que nas dabs el guano y otras, aportaciones que se hacian, el numerario no salia det pais y se vio por el contrati, venir de Inglaterra pastas de oro para ser acufadas en nuestra Casa de Moneds, contrbuyendo mucho a la primero la economia con que se hacfan los gastos no s6lo con estricta sujecién al Presupuesto, haciéndose mis bien ahoros de los decretados" 16, La situacién real no correspondia, empero, a esta imagen Pero también es cierto que, sin la consolidacién, comerciantes, y terratenientes no hubiesen dispuesto de los recursos necesarios como para poder asumir de manera directa Ia explotacién dol guano. El probleme es que esta forma de utilizacion de fos capitales provenientes de la consolidscién, en el negocio del guano, no tuvo ningin impacto verdaderamente significative dentro de la economia pervana; ‘mds bien, permitio Ia conversi6n de los beneficiarios, al alentar la especulacién, en una clase rentista y parasitaria, Pero el enriquecimiento de este grupo fue un proceso simulténeo al empabrecimiento de las clases populares. Se sefal6 anteriormente que los bonos no convertibles & Ja deuda externa, que sumaban un total de diez millones 16. Echenique, J. Rp. cit, pigs. 200-201. Echenique, ademés, jstteaba ta conversion dela detda jntera en extera por fa rebaia del interés de fos bonos del 6% al 4.12%, disminucién que aborraba al ‘sco unos 150,000 pesos al af. (Ti). * {Guano y burgesia ene Peri e pesos, fueron aceptados en calidad de papel moneds, La inyeceién de este circulante monetario desencaden6 una brusca y prolongada inflacién de los precios, Esta situacién se agravé en 1854 como consecuencia de dos medidas, socialmente anzadss, dictadas por Castilla: [a abolicion de la esclavitud y Ia supresin del tibuto indigena, La primera produjo una mayor puncién monetaria a través, segin el mismo Castilla, de enerosas indemnizaciones otorgadas a los propietarios de esclavos 17. Los esclavistas recibieron trescientos pesos por cada esclavo liberto, La abolicién de teibuto, por otra pats, contribuyé a una contraccién de la produccién para el mercado, con la consiguiente subida de precios, pues en un gran niimero de provincias el tributo representaba uns especie de mediacién entre Ia economia de subsistencia y la economia de cambio 18. Esta fctuacién desfavorable de los precios afect6 de manera sds aguda a las clases populares urbanas, alos rentistas y a los bburécratas. El deterioro material de las condiciones de vida ggener6, hacia fines de Ia década del 50, movilizaciones de protesta de los artesanos de Limal9, asi como el ineremento de [a criminelidad urbana, Este ineremento fue de tal naturaleza que obligé al Parlamento a discutir la restituciOn de le pena de muerte, abolida desde 185620. Ademés, y de manera paralela, renacié el adio social de las masas populares alos comerciantes extranjeros, quienes préeticamente tenian en sus manos todo el control de la actividad 17.CE Mensajes de las Presidents del Peri pub, por Evs- gusts San Catal y Petro Uparece, Lima, 1419451 18, American Consulor Reports, 1887, p. 222, cit poe Male sguashea, op. ct, pp. 73-74 19, F.0. 61/181 Jemingham wo Malesbury, Lima, 26 de diciembre de 1858, 20. F. 0, 61/180, Jemingham te Malesbury, Lime, 12 de agosto de 1888 y FO. 61/195. Jemingham to Malesbury, Lima, 29 de agosto de 16, 1/ Consigateros y "burgucsia nacional” 2» econémica de las ciudades 21. En el quinquenio de 1860-1865 se llega a una situacién mucho mis critica, como efecto de tres Ihechos @ los que brevemente pasamos revista. Primero, la guerra civil norteamericana, al causar un descenso en a produccién del algodén, provocé un alza en los precios de los textiles britinicos, los cuales consttuian el primer articulo de importacién y de consumo de las masas populares 22. Segundo el blogueo impuesto a las costas chilenas por la armada espafiola, durante Ia guerra con Espafa, detuvo la exportacion de bienes de consumo al Peri, es decir otto de los grandes rubros de las importaciones 23, Finalmente, la conversi6n de la ‘moneda boliviana de baja ley, decretada por el ministro Novoa cn 1864, significé para las clases populares un nuevo deterioro de su condicién al amputarse al antiguo peso boliviano, en el proceso de cambio, un quinto de su valor 24. Los comerciantes ‘pudieron recuperar esta pérdida del 20 % aumentando el precio de venta de las mercancias 25, lo cual elevé aiin mas el nivel de los precios, 21. FO. 61/186, Jemingham to Malesbury, Lima, 12 de enero de 1889 y F. 0. 61/193, eringham to Russell Liha, 10 de diciembre de 1860, 22. FO. 61/244, Wilthew to Foreign Office, Londres 3 de mayo ae isa 23.” Ministerio degli Affari Ester, allan | Diplamaric Correspondence, Castell to Minister of Foreign Orie, Lima, 13 de octubre de 1865, ct por Maiguashea, op cit, p14, 24, F. 0. 61/217, Jemingham t6 Russell, Lima, 27 de enero de 1864 25, %.. la deprecacién del dolar boliviano de su valor nominal coldcado por varios decretos del Estado, ha sido previta por el cuerpo comercial y ellos, con Tos ojos abieios han fenamente subido el precio. de sls mereanclas, pare no. ser los perdedores en esta Soprociacién de Ta monede Volviena sienten as! que no han sido perdedores, ‘Sélo los que se consideran con derecho a una indemnizacion son personas que han importado capital al pals cuando el dolar boliviano Yala mucho mis que ahora (42, 43, 44 penigues), pero si estas Detsonas estuvieron tabsjando este cepital en negocio britéicos Extanjeros y han vendido arculos de 30 (Guano burguesiaen el Pet Los efectos de este proceso inflacionario fueron ain mas nnegativos por la reduccién del valor nominal de tos salarios, Por ejemplo, la revuelta encabezada por el coronel Prado contra Pezet, durante la guerra con Espa, fue principalmente sufragads por los sectores populares y medios de las provineias del sur peruano 26. Mis tarde, pata hacer frente a los gastos de la guerra con Espatia, el mismo coronel Prado solicit6 que los empleados del servicio piblico, los de la fuerza armada y Tos ‘itulares de pensiones cediesen un porcentaje de sus haberes27, Todas estas medidas afectaron pues seriamente la condici6 material de las clases populares y de los grupos medios. Uns descripein elocuente de esta situacién la encontramos en cast todos los testimonios de los abservadores extranjeros. Cedamos a ellos la palabra: EI Dictador, dice el c6nsul italiano refiriéndose a Prado, en la inauguracién del Congreso dijo... que csiaba trayendo gloria, riquezas y honor al pais, pero sia ilusién se esfumé cuando el nuevo Ministro de Finanzas present6 su presupuesto, Esto mostraba que. cn las provincias del norte los empleados del gobierno rng habian recibido aumento de salario en més de 30 ‘meses; que en las provincias del sur también se debia ssurnas considerables a muchos empleados, cuyos sueldos no habian sido pagados en mucho tiempo y que el Gobiemo Jmportacion extanjerasegin fa gradual subida de precios que ha sido Jmpuesta para cubrir Ia depreciacién monetaria, no. pueden ser considerados perdedores, a no ser que su capital seguia igual evando fue Jmputado y n0 tocado, Los ue parecen tener més derecho a alguns indemnizecén serian Jos empleados del Estado, cayos sueldos no estén erablecidos 8 un cambio’ fjo de tantos délares "pesos" que han estado recibiendo del Tesoro en moneda boliviana,(F.0, 61/217, Jemingham to Russll, Lima, De febrero de 1864) 26. Cf, Patliamonlary Papers, London, 1866, vol. LXX, p. 288. 27,F, 0.61233, Batton to Clarendon, Lims. 12 de abril de 1866 1/Consignataros y"burguesia nacional” at s6lo cumplia con sus obligaciones mensuales en Lima y s6lo con las fuerzas armadas" 2, ‘Un mes mis tarde el mismo cénsul escribe: tuacin del Ministerio de Finanzas es muy mala y hha Megado a un punto en que el tinico regalo del Gobierno a sus empleados es la pobreza. Les daré un ejemplo. EI Presidente de la Corte Suprema de Cajamarca se queja de no tener suficiente dinero para comprar zapatos. Se puede decir que solamente la capital (Lima) vive y esto gracias a Ia Aduana del Callao que envia diariamente unos eientos de soles que son tragados inmediatamente por Its tropas que ocupan Ia ciudad y sus alrededores..."29 ‘Una semana més tarde Ferningham informa: “Hay una queja general en Lima porgue Ta gente nunca estuvo tan pobre como en la actualidad y los informes ue recibimos del interior sobre la escasez del comercio ¥ dinero provocan conmiseracién" 30. Este empobrecimiento fue el fulminante que hizo estallar fa revuelta de las clases populares urbanas y de aquellas masas rurales que tuvieron mayor contacto con la economia mercantil, ‘Veamos algunos ejemplos El consul britinico Jerningham, en la segunda mitad de ta écada del 60, desde Lima, recoge el eco de sangrientas, revueltas en el interior del Peri. Jemingharm habla incluso de ‘una gigantesca "guerra de 28, Cavaleini to Minister of Foreign Affairs, Lima, 27 de marzo de 1867, Teallan Diplomatic Comespondence, p. 243, citada por Maignashea, op eit p 162. 9. Cavalchin to Minister of Foreign Affairs, Lima, 27 de marzo de 1861, Lealian Diplomatic Correspondence, p. 243, citada por Maiguashea, op i, p, 162. 30. F- 0, B1/I4i, Terningham to Stanley, Lima, 26 de agosto de 1867 2 Guano y burguesiaen cl Peri castes" que oponeria # Ta poblacién mestiza y a la poblaciéa india. {Las causas? Para 61 se. @ no ser que alguna fuerza revolucionaria esté actuando, estas dificultades han surgido de las noticias, no populares de que le poblacién india deberia pagar contribuciones. Por varios aflos, desde la Conquista, hhubo un impuesto personal sobre os indios del interior, pero fue suprimido hace varios afos bajo el gobicmna del General Castilla. La poblacién indigen, segin los periddicos, est todavia extorsionada en varias maneras por autoridades menores y muchas veces por la violencia, Sea como fuere, le revuelta reciente parece originarse en la captacién de las contribuciones por la fuerza" 31. ‘La conttibucién a la que alude el cénsul inglés como etonador de la revuelta, formé parte de un programa tibutario més vasto elaborado por el ministro Manuel Pardo. Pero, el ‘mismo cénsul no dejar de observatlo, en realidad esto no fue sino el pretexto, La tentativa de reinttoducir la tibutacién no hacia sino colmar la paciencia de una masa sobreexplotada. Explotada a través de la persisteneia secular de todo tipo de servidumbre gratuita, explotada a través de la imposicién, por parte de comerciantes extranjeros y natives -y de ahi la referencia a la guerra de castas - de una escala de precios abusivamente baja y arbitraria en la compra de las lanas de alpaca y de oveja. En uno y otro caso, ademés, la desartculacién del espacio peruano favorecié 1a hegemonia regional de cacique y caudillos 32. Es extrafio -dird con laconismo el inglés Jeraingham = que en un pais cuya Constitueién presente 31. F, 0, 617239, Jemingham to Stanley, Lima, 21 de mayo de 1867 "32 Para una descripein ms completa de Ia condicgn campesins ease” FO. 61/253, Jemingham to Clarendon, Lima, 12 de abil de 1869 y F. 0. 61/240; Jerningham to Stanley, Lima, 16 de setiembre de 1867. 1 / Consignataros y "burguesia nacional” 3 ¥y pasada declara no existr esclavos, haya costumbres {que requieren mucho cuidado y determinacién para cerradicarlas. En algunos distrtos los indios han estado y probablemente ain estin obligados. a pagar contribuciones en una forma u otra, levar mensajes y trabajar sin remuneracién. No se puede dudar de que han sido y posiblemente ain son reclutados al ejéeito por la fuerza; todos os muchachos y muchachas han sido separados del cuidado de los padres y entregados a ‘personas en Lima y ottos sitios como sirvientes* 33. Sin duda fue la dureza de esta situacién, asi como las violentas manifestaciones de los indios del sur peruano, las que ‘motivaron que un grupo de "personas de nota", al igual que jenerales y Gobernadores de Provincias" 34, ereasen bajo la iniciativa del coronel Bustamante, "el viajero", la Sociedad de Amigos de los Indios, en wn conmovedor pero vano intento de impedir una mayor explotacién de la poblacién carpesina, Es sobre este fondo de miseria y de desolacién que con un nuevo vigor renace la nativa clase terrateniente comercial Hasta mediados del siglo XIX, como hemos visto, el grupo de poder tradicional no pudo restablecerse econémicamente. La epresién de dos décadas finales del siglo XVII, las gucrras de la Independencia y los subsecuentes disturbios entre los, caudillos militares, al parecer habian sellado definitivamente su suerte, Esta clase no disponia ni de los capitales ni habia captada la fuerza de trabajo necesaria para operar sa restablecimiento. Pero, de repente, las operaciones financieras, de la consolidacion y 33. F. 0. 61/240, Jemingham to Stanley, Lima, 16 de setiembre be 1867, 101.99, 34. iid p98, ial Guano y burguesiaen el Pert de la conversion de la deuda interna en externa, pusieron en sus _manos una gran masa de dinero en efectivo, Dispusieron de los ‘medios necesarios para fortalecer su situaciOn, a través de la inversion productiva de esos capitales. Pero ellos escogieron un camino distinto. ‘Toda la nueva fuerza econdmica de este grupo estuvo més bien orientada reemplazat a las casas extranjeras en la ‘comercializacién del guano. Para los miembros de esta clase, su conversion en consignatarios les aseguraba una posicion excepcional de dominio y de control sobre un Estado en permanente déficit monotario, Ellos, al asumir 1a vente del ‘guano, podian ademis actuar como prestamistas de un Estado fen permanente hamruna monetaria, para lo cual bastaba convertise en agentes financieras’ del Gobiemo en el levantamiento de nuevos empréstitos extranjeros. Ells cstimaban, en sum, que la inversién de sus capitales en préstamos sl Estado, constituia una operacién mucho més Iucrativa que la inversion de éstos eapitales en la agricultura o en Is mineria. Los altos intereses pagados por el Estado sobre estos préstamos y, sobre todo, la preciosa hipoteca del guano, Jes inspraba esta confianza ero aqui surge un problema. {Era sélo necesario adquirir tuna fuerza econémica para tentar desplazar exitosamente a las ‘casas comerciales extranjeras y, particularmente, a la poderosa Casa Gibbs? Desde 1860, dos afos antes de que se venciera el contrato de consignacién de esta iltima casa, el Congreso discutia ya la posbilidad de entregar la venta del guano a los ccomerciantes nacionales, pero se temia que éstos no pudiesen competit con Ia casa’ inglesa en lo concerniente a las condiciones de venta y de préstamos 35, En el mes de octubre decese aio, sin 35. El Congreso ha empezado su trabajo y ya han tocado el punto referente 2 las consignaciones del guano. Este asunto serk probablemente muy disutido ysin lugar duda se rataré | /Consignatarios y “burguesa nacional” 38 cembargo, el gobierno de Castilla entregaba la concesion de venta de guano para BE. UU. ¢ Inglaterra ala casa peruana de Zaracéndegui, quien, a cambio, habia ofrecido al Gobiemo un adelento de tres millones de pesos al 4% de interés, en mensualidades de 150,000 pesos, por la consignacién a Inglaterra; por la consignacién a Estados Unidos, por otra parte, se comprometié a entregar 1.500.000 pesos en tres, ‘mensualidades. El jefe de esta casa, informa Jerningham, "esti respaldado por varios adinerados de Lima como Ugarte, Barreda, Oyague y el gran capitalisia chileno Candamo, el Rothschild de Chile y Peri!” 36, Las propuestas de la Casa Gibbs para renovar su contrato fueron en cambio desechadas, porque “... sus clfusulas no son tan ventajosas como las de Zaracéndegui". Lo escueto de estos comentarios y la ausencia de otras fuentes més detalladas nos impiden conocer con mis, precision las razones por las cuales el Gobierno peruano pudo liberarse tan ficilmente de la Casa Gibbs. ;Por qué, en efecto, Ja preferencia a los “nacionales"? Provisoriamente, tal ver ddebamos contentamos con las informaciones explicativas de un observador contemporino: "He sabido que el Presidente estaba dispucsto. a continuar el contrato de guano con esta Empresa (Gibbs), pero fue derrotado por otros que lo asustaron iciendo de que si no lo entrogaba a una compatiia nacional habria una revolucién" 38, todo lo posible de cambiar of sistoma actual y ssearlo de manos exranjeras, pero queda por ver 3} el Gobiemo estara de acuerdo, porque no ‘hay ‘compass -nacionales que. puedan asumir las onsignaciones de este artcul en términos tan faverables al Gobierno ‘peruano como lo podian hacer los capitalists ingleses"(. 0. 61/193, Jemingham to Russell, Lima, 13 de octubre de 1860), 36. F-O. 61/193, Jemingharn to Russell, Lima, 13 de octubre de 1860 37. Ibid 38 Ibid 36 Guano y burguesia enol Pec La primera victoria econémica y politica del grupo de terratenientes y comerciantes, se consigue, si ereemos 8 Jerningham, a través de la utilizacién del ejérito en el logro de sus fines. A mi conocimiento, es el primer antecedente de tuna alianza tradicional y hasta hace poco perdurable. Por otra parte, la resigeacién de Anthony Gibbs frente a esta decisién se explica por el declive de sus beneficios en la negociacién del guano39, El contrato firmado en octubre de 1850 fue modificado all ao siguiente. Al no aprobar los consignatarios nacionales estos cambios, se procedié a una nueva lictacién, Estos ‘mismos consignstaros, el 28 de enero de 1862, obtuvieron de nuevo la consignacin del guano a Gran Bretafa, Irlanda y sus colonias por un petiado de ocho ato. Bajo los términos de este contratod0, los contratistas se ‘obligaron a adelantar al Gobierno peruano un millén de pesos con un interés anual del 5% 41, y éste les oforgaba, en calidad de comisin y de corretaje de venta, un 3% del total bruto de las ventas del guano a Gran Brotaia 42; ademés, todas las sumas gastadas por los consignatarios en la explotacién ‘gozaban de un interés del 5% anual. En este contrato, ademds, se impone a los consignatarios la obligacién de emitir bonos hhasta por dos millones de pesos, a fin de ensanchar la participacién de los capitalistas peruanos en los beneticios de Ta explotacién del guano ‘Al asumir do esta manera el control de a consignacién del guano hacia la Gran Bretaha, este grupo disponia del instrumento mis eficaz para continuar su enriquecimiento. No solamente a través de su participacién en las comisiones de venta y en los beneficios generales por el pago 39. Cf, Mathew, Wiliam Mc: Anglo Peruvian Commercial and Pinanctal Relation 1820-1863, Londres, 1964, (sis doctoral ini). “40: Ch Anafes, vol Vl, p. 33. SL Are 1s 4D Are 25, 1/ Consignaarios y "burpuesia nacional” 7 de imtereses, sno también a través de los diversos préstamos al Estado peruano, He aqui algunos de estos préstamos: un millon. de pesos en mayo de 1864, con ocasin de la guerza con Espatia, ¥y en 1868 otros tres millones de pesos 43. Las tasas de interés Jmpuestas no solamente fueron usurarias, sino que muchas de las cliusulas de estos contratos de préstamos constiwian verdaderas extorsiones fiscales44 Asi, pues, las rentas del Estado peruano, su rol como ccomerciantes intermediarios entre el Estado y los consumidores ultramarinos, la especulacién yas —_inescrupulosas ranipulaciones financieras, estuvieron en la base misma de su reconstitucién econémica como clase. Pero es aqut donde emerge una de las cucstiones mis controvertidas: se puede considerar a estos comerciantes nacionales, que habian logrado suprimir a las casas extranjeres ‘en el comercio del guano con el mercado mis importante, como ‘una burguesia, primero, y en caso afiemativo, podria ser califeada de "nacional"? La respuesta obvia es no. Por una parte, porque burguesia, proletariado y capitalismo constituyen ‘una totalidad hist6rica, dialéeticamente articulada, La burguesia 8 aquella elase que funda su dominio en la apropiacion de la plusvalia generada por los trabajadores. Y no de cualquier tipo de “trabajador", sino, especificamente, de aquel cuya fuerza de trabajo se ha convertide ya en una mercancia, por consiguiente que es susceptible de una trensaceién dentro de un mercado libre de la mano de obra, En otras palabras, la consolidacin de Ja burguesia supone la proletarizacién de una fraccién importante de los productores directos a través de Ia pérdida de sus medias de produccién, Este no fue el caso con los consignatarios nacionales. 43, Anales, vol. Vit p. 53. ‘44. Cf Russo, Daniel: Las consignatarios del guano y muy especialmente los tuladas nacionales sen su propia confesion cent los contratas de présiamos y prévrogas, Lima, 1870, p. 38 38 ‘Guano y buguesiaen el Pens Ellos fundamentalmente se dedicaron al mero comercio especulativo y cuando colocaron parte de sus capitales en la agricultura, para produc algodén o para producir azicar, fue para devenis en una clase rentista que se apropié del excedente ‘enerado por una mano de obra asalariada no capitalists, y para someterse a las exigencias de un mercado intemacional que escapaba a todo su control. Pero estos mercaderes no sélo no eran burgueses; eran slo nominativamente "nacionales" y en la prictica profundamente dependientes. Esto ultimo és una consecuencia de las condiciones mismas de la realizacion de la venta del guano y de la emisién de los empréstitos. Toda la pujanza que esta clase estaba adguiriendo no era todavia ‘uficiente como para permitile asumir por ella sola Ia venta del guano en mercados cuyas reglas escapaban a su control y a su comprensién. Tampoco su fuerza econémica era tan grande como para no recutrir més al concurso del mereado monetario de Londres. En uno y otro caso ellos requirieron el auxilio de un aliado mis poderoso: la casa Inglesa de Thompson Bonar. A ella estuvieron asociados desde el comienzo de sus actividades, actuando en la prictica com sus socios subalterns. "Hemos recibido -eseribiré a esta ase uno de Tos socios de Ia Compatia, Nacional Consignataria el 23 de mayo de 1862- igualmente en ppaquete separado, el convenio celebrado por ustedes con ‘nuestro amigo apoderado el Exemo, Sr. Dn. J. J. de Osms para ls agencia del guano en la Gran Bretafa" 45 Lamentablemente no hemos podido encontrar haste ahora las fuentes adecuadas que nos permitan deseribir con precisién [a naturaleza de la relacign establecida entre los consignatarios nacionales y Ia Casa Thompson 45. Comespondencia de, los signatavios del contrato. de consignacién para la venta del guano en la Gran Bretaha y sus colons drigdo por SS. Thompson T. Bonar y Cia, Lima, 1877, vol. 1p. 5 1/ Consigntarios y "burguesia nacional" » Bonar 46, Pero existen evidencias suficientes que indican la dependencia de los consignatarios nacionales respecto a la firma extranjera 47. En realidad, el dominio del capital Dritinico se ejercia ya no sélo directamente, a través de sus propios agentes, sino también a través de sus socias peruanos 48. Pero, incluso en su situacion de socios menores, el acceso a Ja consignaci6n del guano a la Gran Bretafa les permitié la facumulacién de una colosal fortuna, Aqué exists pues la posbilidad historica de financiar el desarrollo econémico del Peri. Pero como este desarrollo no se produjo, es necesario preguntarse qué fue lo que impidié la transformacién de la acumulacién primitiva del capital-dinero en acumulacién primitiva del capital industrial, La respuesta es necesariamente tentativa, pues no se dispone hasta ahora de las evidencias suficientes que permitan un examen adecuado de esta cuestién. Las indicios establecen, sin embargo, que estos capitales no sirvieron para renovarintegralmente la estructura del pats. 46, Los pocos documentos accesibles a ete respect sn los cuatro votimenes‘pubicados por la Comision de Delegados Ficales, "ombradoe pars inveniga los sto dolosos comelios conta eS, tn laventt del guano, por la Casa Bonar y los consignalaron Scones, “7, Léa, por ejemplo, a doslarcin siguiente de Mansel Vilas, dela Compile de Consigencion del Gaano: "Los Sres- J. Thompson Bonar y Cia que son muesror aoreedores por parte de lar sumar tenvegadae ei Gabino, conscendo qu, desde aie aneona el Revo Ermpesto, no haba sobrantes que poder aplca al reitegro de fos Sdelantos, nor exigen a caneleion del saga desu cuenta con tal ‘premio qu an nda, quest aribo dea nguons malo en teres oe veran en la neocsdad™ de etrr del. producto, del rmpestto lo sucinte para ear dich slda”, Ross, D. op. cts Syl sbrayado es del te) Ss. Sobre ol olde los *colaboradores®o "grupos mediadores™ on Js domincin impriaisia,vease dl profesor Ronald Robinson "Non ucopean Foundations of European Imperial: Skesh ofa Theory {of Collaboration” en Sadi ute Theory of Imperialism ead pot ven, Roger Sule, Bob, Londres, 1972, pp. 16-185, 40 ‘Guano y burguesiaen el Per En un primer momento, ellos concurrieron a la ereacién de instiruciones bancarias. Ast aperecen entre 1862 y 1869 los cinco primeros Bancos en el Peri: Banco de Ja Providencia (1862), Banco del Peri (1863), Banco de Londres, Méjico y Sudamérica (1863), Banco de Crédito Hipotecatio (1866) y Banco de Lima (1869), todos ellos, con excepcién del Banco de Crédito Hiipotecatio fueron Bancos de emisién y descuento. Para medir el alcance real de esiafiebre bancaria, es nccesario tener en cuenta que hasta 1862 todas las operaciones de erédito ¥y de descuento eran realizadas exclusivamente por las casas ‘comerciales o por las compafias consignatarias. La constitucién de los primeros directorios y sobre todo la ‘nmediata suseripeién de las acciones emitidas, no hubiera sido posible sin el control, por los capitalistas nacionales, de una {gran parte de los ingresos praducidos por la venta del guano. Se produce, de esta manera, una estrecha ¢ indisociable fusién enlre el capital comercial y el capital financiero, Veamos algunos ejemplos. EI Banco de le Providencia comenz6 a corganizarse en setiembre de 1862, con un capital de 500,000 pesos, divididos en 10.000 accioncs de $0 pesos cada una, suseritas en menos de tres meses 49, Sus operaciones principales fueron de emisién, depésito y descuento. Entre sus fundadores figuraron: Francisco Watteau, ol goneral José Miguel Medina, Francisco Quiroz, Francisco Rey, Juan Farmer, Manuel Amunétegui, José V. Oyague, Francisco José Canevaro, Enrique Higginson, Joaquin Soroa 50. El Banco del Pent fue creado en mayo de 1863 con un capital de un millén de pesos, en diez acciones de cien mil pesos cada una, Las ‘operaciones principales fueron de descuento, préstamos, epSsitos y emisién 51. Es este Banco el que muestra una més neta vinculacién coa la Compatiia 49, Campribi, Cerlos: Historia de los Bancas del Peri. Lima, 1957, vol 1, pgs. 38-40. 30. Ibid. 39, nota 72. 511d pigs. 40-42," 1 /Consignatarios y "burguesa nacional" 41 Nacional del Guano, pues sus accionistas integraban a la vez la Compaiia Consignataria. Bran ellos: Felipe Barreda y Aguiar, ‘Nicolés Rodrigo, José Canevaro, Felipe Gordillo, José Sevilla, Manuel Pardo, Miceno Espantoso, Emilio Althaus, Thomas Lachambre y Pedro Denegri 52, Igualmente, el Banco de Lima, constituide en marzo de 1869, con un capital de 3'200,000 soles, cuenta entre sus accionistas a connotados hombres de fortuna del momento: Manuel Argumaniz, Juan Renner, Enrique Wit, Valentino Gil, Juan de Ugarte, Francisco Sagastobeyiu, Juan de Dios Calderén, Gustavo Heudebert, Manuel Ortiz de Villate, Juan Muro, José Antonio Castillo, Federico Lembcke y Juliin ZaracéndeguiS3. Sus operaciones, fueron también de emisién y de descuento, El Banco de Londres, Méjico y Sudamérica, en cambio, se crea en el Peri como agencia dei banco inglés London South American Bank Limited, proviniendo los capitales de su matriz londinense y dedicindose, la agencia peruana, a operaciones tales. como: escuentos, préstamos, depésitos, cuentas _correntes, negociacionesS4, Por otra parte, el Banco de Crédito Hipotecario, creado en 1866 con un capital inicial de | '500.000, pesos, se dedic6 fundamentalmente a la emision de eréditos hipotecarios y a efectuar préstamos a largo plazo sobre bienes riisticos y urbanosSS, Entre los miembros del Consejo Ditectivo se encontraban: Dionisio Ortiz de Villate, José D. Castafieda, José Barron, Carlos Delgado y Pedro Denegri, ‘actuando como gerente José de la Riva Agucro56. 52, Camprub Carlos Historia de fos Bancos del Per Lim, 1957, vol 40, n0%8 79. ‘33. id 85, mora 160. ‘54. Ibid. op. ct p. 4; sobre la London, Mexico and South ‘American Bank. véase Joslin David: A Century of Banking in ‘Latin America, Londtes, 1963, 35. Jb. pp. 61-64 136. Sega Camprubi, de quien hemes tomado todas ests referencias, para asf micmbro ‘del Consejo se requeia tener le propiedad de 40 acciones por lo menos, es decir el equivalent de 40,000 pesos. Ibid, p 63 nota 123, a ‘Guano y burgusia en el Pers La ereacién de todos estos bancos eiertamente respondia a una exigencia de la economia peruana, que hasta entonces estaba enfrentada © muchos problemas derivados de la falta de adecuados instrumentos de crédito. Se instalaba asi el dispositive esencial que pudo financiar, como en Europa, el Aesarrollo econsmico del Peri. Pero aqui, ni el financiamiento ni el desarrollo tuvieron lugar efectivamente si exceptuamos cl caso del Crédito Hipotecario. Por el contrario, en su creacién estos bancos fueron concebides como fines en si y no como simples medios. ;Por qué? Las razones no se encuentran ni en ‘una menor "propensién a la inversién", ni tampoco en una mayor reticencia utilizar el exédito bancario. Como se ha sefialado anteriormente, las razones de esta inversion improductiva de los capitales se deben la peculiar conformacién de la estructura econémica, social y politica del Perit En efecto la apertura del crecimiento econémico exigia la ‘modificaciéa sustancial de una estructura de eanicter colonial que, en el caso del Peri, ain guardaba toda su vigencia. ‘Ademés, es necesario reiterado, el défict estructural del Estado ‘Peruano no podia sino estimular el cardcter especulativo de las, inversiones realizadas. A ello se afaden las excelentes perspectivas de ganancias, dada la alta tasa de interés de los préstamos bancarios que lleguba hasta el 15% anualS7. En otro nivel, significa esto enfonces que el impacto de! guano dentro de Ja economia peruana siguié siendo nulo? Recordemos que hasta 1860 los ingresos percibidos por la venta de este abono sirvieron, principalmente a: 1. la amortizacién de la deuda externa ¢ intema; 2. el equilibria, bastante precario por cierto, del presupuesto; 3. el fortalecimiento militar y 4, el desarrollo de una sorprendente burocracia civil y militar. Por otra pate, Jas ganancias obtenidas por los comerciantes extranjeros, como intermediarios en la venta 57, Camprubl, C. op. lt, p. 84 1 Consignataris y "burguesia nacional 4a del abono entre el Estado peruano y los agricultores europeos, fueron casi en si integridad exportadas al exterior. Con el faseenso de los comerciantes nacionales, el patron de inversiones no se modified de manera sensible. El Estado peruano siguié dedicando parte de sus ingresos a ccubrir las mistnas necesidades internas. Una gran parte de las ganancias de los consignatarios nacionales, por otra parte, fluia hhacia el Estado bajo la forma de empréstitos de todo tipo, mientras que el saldo servia para pagar la importacin de bienes de consumo ostentoso. Peco entonces, jeémo explicar el relative desarrollo agrario 4ellitoral peruano durante la década de 1860, expresado sobre todo a través del incremento de la produccién algodonera y azucarera? La explicacién no es muy diffeil de encontrar, Fl incremento de la produccién del elgodén y del azicar obedecié enteramente a un estimulo extemo: las haciendes costefas se levantaron de su letargo al abrigo de una coyuntura extema altamente favorable. Sin la elevacién de los precios intemacionales del algodén y del azicar, como efecto de la crisis. americana y de Ia crisis del Caribe respectivamente, ¢8 posible que este desarrollo no se hubiese producido, Fue en respuesta a esta incitacién momentinea que los capitales fluyeron hacia la agricultura, Es ficil comprender la inestabilidad de un desarrollo de este tipo, con la produccién intema, atrapada por las vieistudes del mercado internacional. En consecuencia, es posible sostener que en la década del 60, parte de los ingresos producidos por el guano, en poder de los capitalstas nacionsles, impacté indirectamente en la economia peruana, principalmente en el sector agricola. Estos cepitales, al permitir el equipamiento de las haciendas, las pusieron nuevamente en marcha. Pero, y es esto lo esencial, el cstimulo y la razén del desarrollo agratio, como en cl caso del éxito del guano en tanto mercancia, “ Guano y burguesia enol Per residen en el rol complementario de la economia peruana respecto de las potencies europess; las inversiones responden a las necesidades de las economias de la Europa Occidental, razén por I eual se centraron necesariamente en la produccién de materis primas. Un desarrollo de estas caracteristicas no podia conducir demasiado lejos. Para eliminar los obsticulos institucionales que se oponian a un crecimiento econémico real, se necesitaba no solamente la disponibilidad de capitales sino, también, la demolicién de todo el orden social existente, es decir, In desintegracion de Ia economia naturel, la ‘generalizacién de la produccién mercantil, a creacién de un sélido mercado intermo y Ia emergencia de una clase, teramente nueva, que se realizara come clase al asumir estas ‘areas 58, En el Per esto no fue asi. Bl grupo econémico que se roconsiriye renuncia a su misidn, y en lugar de transformar la estructura interna de la produccién, s6lo se limita a modernizar In estructura del transporte, adormeciéndose con los humos del ferrocanil Se ha visto en las péginas anteriores como la clase terrateniente comercial se levanta de su postrscién econémica ‘gracias, primero, alas especulaciones financieras representadas ppor la consolidacién y la conversién de la deuda intema y, despuss, por el seceso a la consignacién del guano para Gran Bretafla, asi como por los beneficios obtenides con el renacimiento de la produccién del algodén y del azicar. Todo este proceso se gesté entre 1850 y 1860. A su término, esta clase estuvo Tista para retomar el poder politico, perdido en los albores de la Independencia, Hasta 1872 los caudillos de la [Emancipacién y sus sucesores habfan ejercido de manera auténoma el poder politico de la nacién, favorecidos pot el ‘enorme vacssum que se crea desde 1821 y por la extrema fragilidad de la élite econdmica 58. CE Mandel, Emest*L' dustiltation di Tiers Monde", en: £m partat de "Capial” Paris, 1968, 145-168, 1/ Consignataros y “burguesia nacional” 4 Pero los procesos descrtos otorgan a un grupo de esta clase Ia robustez econémica necesaria como para decidirse « tomar las riendas del poder por su propia cuenta, Este ser4 el sentido final de la vietora eivilist, con Manuel Pardo en 1872. Pero en la medida en que se fortalecia el poder econémico de esta clase, una fraccién de ella empezé a peteibir con mucha claridad I nevesidad de barrer con los obstéculos que se foponian al crecimiento de la economia peruana, como condicién para el afianzamiento de su dominio en tanto clase. Esta fraccin consider6 que habia cirtos limites previsos en el censanchamiento de su podetio econémico a través de la sola, cespeculacién financiera, No obstante, esta clase, por sus propios ‘medios, no podia todavia conducir esta transformacién ni tenia tampoco el poder politico como para utilizar al Estado en el, ccumplimiento de sus propios fines. ‘Tenian a su frente a los caudills militares que controlaban las riendas del Gobiemo y que, por lo mismo, eran los administradores de una prodigiosa renta fiscal: el guano. Era imprescindible, entonces, obtener que los recursos producidos ‘por este abono se uilizaran, por lo menos, en la creacion de un terreno mis propicio para un desarrollo posterior. Dada su ebilidad como clase, sus miembros delegaron al Estado peruano aquellas tareas que estaban en Ia imposibilidad de cecumplit. {Como percibid esta clase las barreras a su propio crecimiento y al crecimiento del pals? {De qué medios dispuso en esta Inbor de "convencimiento’ y de "presién® hacia los caudillos militares? Se ha visto que en 1872 esta clase conquista plenamente el poder politico, a través de la victoria electoral de Manuel Pardo. Pero ya desde 1860 sus representantes ideoldgicos, como Ignacio Novos, Toribio Pacheco, José Tejada, Francisco Garcia Calderén, Felipe Masias, José Casimiro Ulloa, Narciso Alayza, Manuel Nicolés “ {Guano y burgesiaen el Pra Comancho, Carlos Augusto Salaverry, Ricardo Palma y Francisco Lazo, fueron ministros o secretarios de los gobieros, nilitares anteriores @ Pardo. Fueron ellos los que vehicularon las ideas esenciales acerca de la naturaleza de los obsticulos que impedian ef crecimiento ceonémico del Peri y de los emedios més adecuados para su superacién, De manera sesgada y segmentada, entonces, un grupo de civiles, aquellos ligados por su posicién y por su ideotogia 2 la fiaccién mis modema de este élite emergente, fueron los encargados de hacer permeables alos caudillos militares frente a estas nuevas exigencias, Este no es un fenémeno tinico en la historia del Pert ¥y todo estudio de los mecanismos de decisién politica, en una perspectiva historia, debieratenerlo en cuenta. Poco a poco, y durante toda esta década y media, germinan ast las normas directrices que inspirarin més tarde la politica econémica de esta clase. ‘Antes de examinar estas tesis es necesario recordar may brevemente los antecedentes de la utlizacién del guano. Bajo el primer gobierno de Castilla gran parte de estas rentas fueron invertdas en el sostenimiento de une dense burocracia civil y ‘militar, como un medio, segin Castille, de lograr el “orden” y ia estabilidad politica. Durante su segundo gobierno, 1854-1862, Jas rentas del guano fueron utlizades para suftegar las ‘operaciones punitivas externas y las revueltas infernas. La "revolucién" de 1854, por ejemplo, implied un desemibolso de ‘rece millones de pesos 59; la de 1856, 41 millones de pesos 60, ‘mientras que Ia expedicién contra el Ecuador absorbi6 mas de 50 millones de pesos. Si se considera que durante este segundo periodo de Castilla el ingreso del guano alcanzé alrededor de 100 millones de pesos 61, se puede 59, Cf Divalos y Lisson, La Primera Centura, Lima, vo. WN, p. 8a 60, F. ©. 61/182, Withew to Clarendon, Isley, 22 de marzo 1858, G61. Maiguashea J, op. ci, p. 71 1/ Consignatarios y "burguesia nacional” 0 de constatar que la totalidad de estas sumas fue absorbida por los gastos de guctra. Ademis, fos costos de la abolicién de la esclavitud y del tributo de los indios, al ser asumidos directamente por el Gobierno, erearon nuevas obligaciones fiscales que debieron en adelante hacerse frente con los ingresos del guano, EI mismo Castilla sostendré a este respecto: "Hasta ahor nosotros ya habriamos avanzado un largo trecho en la ruta hacia €l progreso, si acontecimientos fatales no hubiesen distraido muestra atencién, paralizado nuestros esfuerzos, multiplicado nuestras dificultades y, sobre todo absorbido nuestro tiempo y dinero" 62 El cambio de este deplorable despilfarro de los recursos del ‘guano constituyé una de las primeras reivindicaciones de la clase terrateniente-comercial. Sélo el gobiemo de Echenique, entre los das periodos de Castilla, les habia permitido participar de estos beneficios, a través de las operaciones financieras de consolidacién y conversién. Pero a comienzos de la década de 1860 no era posible volver a utilizar los mismos medios para ue los capitales producidos por el guano pasaran a poder de Tos miembros de esta clase, Si bien una fraccién de ella comenzé a participar en los beneficios de la venta, era necesario conseguir que las sumas percibidas por el fiseo fuesen utilizadas de manera mis provechosa para los intereses, del conjunto de Ia clase comercial-terrateniente. Es, pues, la lucha por la ufilizacién productiva de los recursos del guano lo que constituye la primera etapa en la ‘uniformizacién de los intereses de esta clase. El anélisis de este contficto permite pereibir toda la peculiar concepeién que two esta clase sobre las vias mis adecuadas para emprender el desarrollo econdmico del Peri y sobre las harreras que la cobstaculizaban. La argumentacién en 62,, Mentales de las Presidents del Per, tomo yp. 337, it. por Maiguashea, Id 4s Guano y burguesia en el Pert uno y otto sentido posibilita una primera caracterizacion de este poderoso grupo comercial-terrateniente. El cuctpo de sus principales ideas econdmicas y politicas fue formulado en los nimeros sucesivos de la Revista de Lima Este peri6dico aparece por primera vez en junio de 1859 y seguiré editindose hasta 1863. Su creacién se debié a la iniciativa de un grupo de escritores como: José Casimiro Ulloa, ‘José Antonio de Lavalle y Ricardo Palma 63, con el objeto de ‘continuar la tradicién cultural iniiada por el Mercurio Peruano desde fines de la época colonial, Esta revista se constituye muy ‘pronto en el mejor érgano cultural del momento, publicindase fen sus piginas aniculos sobre geografia, literatura, historia, ‘economia, politica, medicina, ete. Lo que se debe notar es que ‘gran parte de la redaccién de esta revista, 0 de sus ccolaboradores ms asiduos, desempefiaba en la década del 60 y del 70 los mis altos cargos de la administracién publica, ‘Manuel Pardo, jefe del partido civilista, ministro de Hacienda de Prado y presidente del Peri era su principal colaborador. Las ideas de este discipulo del economista Michel Chevalier, en 1 Colegio de Francia, expresadas a través de varios articulos 664, pueden set consideradas como las sepresentativas de su propia clase. El, y més tarde Luis Benjamin Cisneros, son los principales inspiradores de la politica econémica de le ‘emergente dite evonémica, 63. Basadre, J: op. ct, tomo IM, p. 1374 (64. Brite los atculos més importantes de Pardo se encuentran: “Estudios sobre la provincia de Jaujl, "Sociedad de Beneficencia de Lima’, "El Pada de Sata o Lambayeque en e siglo pasado", “Inmigrecién vercongad, "Medidas esonémicas del Congreso dé 1860. Ley General sobre Ferrocaries', "El Crédit Hipotecario cen Francia y Chile en 1859 y 1860", “Algo sobre el Proyecto del ‘Codigo Penal apart de sus mensajes como ministro de Hacienda Y presidente del Peri, Todos ellos pueden ser consltados en ‘Manuel Pardo, por Jacinto Lopez, Lima, 1947, pigs. 215-504 | Consignatrios y *burgeesia nacional” No pretendo examinar aqui la totalidad del pensamiento econémico de Pardo. Vaya limiterme a resaltar lo referente al problema que nos preocupa, es decir la utlizacin de las rentas del guano y fos obsticulos al desarrollo del Peri. La claridad y la elocuencia de Ia argumentacion de Pardo me han levado a citarlo directamente: "Lejos de nosotros -comenzaré diciendo Pardo- ta intencién de pasar en revista los quince alos transcurridos desde el descubrimiento de la utilizaci6n del guano del Peri: tal revista es innecesaria, porque esos quince afios ain los tiene grabados en su corwzén todo peruano; ni de emprender un andlisis sobre el empleo que han tenido los 150 millones que el guano ha pproducido en ese tiempo, porque si de su anilisis reportaria la historia algin provecho, el honor del Pert tiene muy poco que reportar.."65 "..Pero el remedio no es abatirse ni desalentarse; no porque hayamos perdido el tiempo que ha pasado debemos también perder lo que nos queda de guano; no por haber derrochado eaudales, ingentes debemos coneretamos a lamentar su pérdida y dejar convertrse en humo los caudales que en ese ‘momento nos estén Hloviendo del cielo. Muy por el conttario: el tiempo pasado nos debe servir de escarmiento y de saludable estimulo para et porvenir. Hemos perdido quince afios de guano, pero nos quedan diez 0 doce todavia, Hemos derrochado 150 millones ‘pero quizis nos quedan otros tantos. Abramos pues los ojos: no malgastemos, no derrochemos como locos. No pretendemos que se cambie totalmente de conducta es0 serla mucho pretender, pero salvemos algo del naufragio: salveros tres 0 cuatro millones del temporal ‘que corremos y con tres o cuatro millones 65, Pardo, Mane: "Estudios sobre a provincia de Jauie", en Jacinto Lopez, Manuel Pardo, Lia, 1947, p.233, 50 Guano y burguesia en el Per solamente durante un decenio podré responderse de la prosperidad eterna del Peri” 66 Pero qué hacer con estos tres o cuatro millones. ;Cémo invertidos para que ellos constituyan la fuente de la “prosperidad etema del Peni"? y, en iltima instancia, jousl es esa fuente? La respuesta de Pardo es tajantey directa: “Crear retornos que suplan el guano, crear rentas fiscales que reemplacen las del guano: he aqui el problema. Fomentar la produccién nacional; he aqui la resolueién: ella nos dari retonos para el comercio; ella nos dari rentas para el Estado. En la produccién nacional, en la rigueza piiblica sera donde encontremos las entradas para ‘nuestro Tesoro, cuando la actual senta desaparezca, El ‘aumento de valores en todas las ramas de la actividad ‘nacional permitiré el aumento de las contribuciones sobre la tierra que sélo pueden pagarse cuando Ia terra produce, sobre la industria que solo se obtiene cuando la industia florece, sobre la propiedad urbana, consecuencia del ‘aumento de la poblacién y por iltime y més que todo de las contribuciones indirectas, como las de aduanas que ceecen sélo donde hay ‘movimiento industrial y ‘comercial"67, Pero el levantamiento de la produccién constituia el objetivo final. En la opinién de Pardo, aqui se encontraba la clave del bienestar nacional y, en consecuencia, la solucién de la bancarrota fiseal. {Con qué medios podia conseguitse este objetivo? En su respuesta Pardo establece Ia mediacién entre guano y crecimiento, desde la perspectiva de lo intereses de su propio grupo. Escuchémoslo: 66. Pardo Manuel, op. ct, p. 234. (67 Pardo, Manuel: op ett.'p. 258, 1 /Consignataries y "burguesia nacional” s "Y qué medio més ficil, mis ripido y mis poderoso de aumentar con la produccién nacional 2 un mismo tiempo la riqueza de los particulares y del Estado {Qué medio més expedite y més sencillo que las vias de comunicacién? 68. Ye hemos dicho: si en las naciones ceuropeas el papel de un camina de hierro se reduce a facilitar y activar las comunicaciones entre dos puntos del tertitorio, en el Pert su misién es de crear esas relaciones que no existen entre lugares que estin incomunicados unos de otros; en Europa ellos faciliten cl trifico y el comercio, fomenten asi Ie industria y dan ‘mayor valor a la propiedad; en el Peri lo erearén todo: ‘comercio, industria y hasta Ia propiedad, porque darin valor a lo que hoy no tiene" 69 En el pensamiento de Pardo, ademas, los ferrocarrites al inaugurar ¢] progreso material, traerian al mismo tiempo la ‘mejora moral y espiritual del pueblo peruano: “De otra parte el sumento de riqueza material que los ferrocuriles producen se traduce también en un verdadero aumento de eivilizacién, en la mejora moral ¢ infelectual de ta nacién cuyos terttorios han sido enriquecidos sibitamente por la locomotiva. El aumento de riquezas de un territorio aumenta cl bienestar de sus pobladores y es principio reconocido ‘cuanto contribuye en el hombre el bienestar a realizar sus sentimientos morales elevando el primero y padre de todos ellos: el de la dignidad personal. Las escuclas ¥ los eatecismos politicos podrin hacer a nuestros indios pedantes: dificilmente ciudadanos. Slo ‘mejorando su situacién material puede drseles esos principios de dignidad e independencia personal sin los {que jamis 668 Pardo, Manuel: op. cit, p 259, (69. Led, p. 260. 32 ‘Guano y burguesia enol Pex pueden ser otra cosa que ilotas miserables, pecheros adictos a fa tierra e instramentos ciegos de todo el que alce un palo para mandarlos. Mejorando la condicién, ‘material de nuestros pueblos opondremos Ia valla més, cficaz contra los avances de latirania de una parte y de Ia otra contra los esfuerzos de los anarguistas. He aqui el segundo modo como los ferrocerrles deben ejercer su influencia moral sobre las poblaciones" 70, ‘Todavie mis enfiticamente: ““{Quign niega que los ferrocariles son hoy los ‘misioneros de la civilizacién? {Quin niega que el Peri: necesita urgentemente de semejantes misioneros? Sin ferrocariles no puede hoy haber verdadero progreso ‘material, y aunque patezea mucho decir, sin progreso ‘material no puede hoy haber tampoco en las masas progreso moral, porque el progreso material proporciona hoy a los pucblos bienestar y el bienestar Jos saca del embrutecimiento y de la miseria; tanto vale decir pues que sin ferrocariles tiene que marchar a pasos muy lentos ta civilizacién" 71 He aqui, finalmente, las proposiciones para instrumentalizar estos medios: “o- aunque dotado el Peri de todos los elementos que tuna nacién necesita para subir al pinéculo de la prosperidad material, presenta en su posicién geogrifica, en sus continuos disturbios y en el poco crédito administrativo y fiscal de su Gobierno fuertes bsticulos y grandes desventajas que hay que nutralizar halagando al capital europeo con sondmnicas del Congreso de 1860. Ley General de Ferrocariles, en Jacinto Lépez, Manuel Pardo, Lima, 1947, pags 299-300. 11 Consignatarios y "burguesi nacional” 8 un interés mis elevado o mas s6lidsmente garantizado que el 6% que la ley del Congreso ha sefialado y que como tenemos visto el capital puede encontrar facilmente en otros paises a que acudiré de seguro antes. que el nuestro. Sélo un 7 % garantizado por Ia ley con. cl producto del guano que se expende en el mercado donde se toma el capital necesario para una obra, enarla las esperanzas generosas que Tos autores de la ley general sobre ferrocariles, el Congreso de 1860 y todos tos hombres que piensan en el porvenir del Peri than ciffado en este gran paso dado en la marcha adasinistrtiva del Peri" 72 En suma, la construccién de los ferrocariles, en la opiniGn de Pardo y de sus seguidores, aparece asf como el arma estratégicn para preparar el desarrollo econémico del pais. El recurso a los espitales extranjeros, con la sélida garantia de ta hipoteca del guano, debia consttuir el medio para realizar este proyecto. Esto significaba liquidar, por parte de! Gobierno, el espilfarro de las rentas producidas por el guano, a fin de liberarlos para una utilizacién més racional, Pardo tuvo ta ‘oportunidad de poner en prdctica estas idees como ministro de Hacienda del gobiemo de Prado. Recuérdese las medidas, ‘tomadas por él para equilibrar el presupuesto y para liberar las rentas del guano: Ia disminucién del aparato burocritico, la reduccién de los salar de los funcionarios, la supresin de un, vasto nlimero de pensionistas del gobierno 73, la imposicién de tasas de exportacin a la produccién nacional74, y sobre todo e! restablecimiento del programa tributario 75. fanuel:"Medidas econdmieas...", p. 310. 73, Maigiashea 1: opt, p.123, 34, CEF-O. 61/234, Lima, 20 de junio de 1866, Bs. 38-42. 15, "El extableeimicnto de la eontibuciones, dice Pardo en una cara del T8 de diciembre de 1865, es una necesiad independiente ss Gano y burguesie ene! Pert La conversién del guano en ferrocarriles, virtual mot ordre de la lite modemizante, fue incorporada en el plan de ‘gobiemo del coronel José Balta y fue durante su gestion administrative (1868-1872) que se emprendié la construcci6n de las mas importantes Iineas ferroviarias. Las ideas inicialmente esbozadas por el grupo de la Revista de Lima se cconvierten en dominantes durante la década del 60 y parte del 70, Cuando la Revista desaparece en 1863, es Luis Benjamin Cisneros quien retorna en sus escritos los argumentos de Pardo 76 ¢ insite en la necesidad dol establecimiento de un plan de (ributaciones, en la construccién de lineas férreas, cn un programa de irigacién y de proteccién a Ta industria peruana 77. Como ha sefalado con justeza Maiguashea, las proposiciones de Cisneros incluso inspiran el posterior proyecto de Pigrola respecto al monopolio del guano 78. Todo lo anterior muestra la unided y Ia continuidad de wna linea de _pensamiento @ propdsito de Ta politica econdmica que deberian seguir los sueesivos gobieras. Este programa, antes que Pardo asumiera la presidencia, habla comenzado ya a ser puesto en prictica durante las gobiemos de Prado y, sobre todo, de Balta del estado actual de muestra hacienda, aunque ese estado hava sido ‘cain de que estvitramosseramenie en és necesidad: Sel ert debe tener tna vid propia © independent, es necsaro que n0 viva Svicamente de un producto que se encentra en medio de ls mares, tue puede depreciarsey che d ein es precco que oven on recursos no sujet a sr arebatadon,seguros durderos yest fecursoe propios que cubran sus neceidadesordina pueden tr otros! que las consibucones)creriat em Faflcinte pare atendr a uestas necesidads realex, epatias con justia y reeaudala sn exacciny con economia tl es el problema Que el Gobieno de S. E. (Prado) debe resolver’. En Ancles de fa Bietadure, Lies, 186, pigs. L442 “6, Ciera, LB. Obras Compleis, tomo Up. 3, 77. Veasepracpalmente: Cisnerom, -B Ensayo sobre varias ‘uestionesecondmica del Per, Le Havre, 1868p 150. 48 Meaiguashea, op. cit p. 202-203. 1 / Consignatariosy "burguesia nacional 55 Pero es nocesario plantear aqui algunas cuestiones esenciales, La idea subyacente en la exigencia del establecimiento de lineas ferroviarias 79 era que los ferrocarriles removerian los obsticulos esenciales al crecimiento del Peré y fomentarian la produccién nacional. UEra esto correcto? Sin pretender levaniar un proceso a las ‘ideas do Pardo, es indispensable recurrir a la observacién historica para examinar los fundamentos de esta tesis La construecién de los ferracartiles no es buena o mala en sf; ol problema, y es aqui donde el pensamiento de Pardo se equivoos, es que la construccién de los ferrocantiles no precede al nacimiento del capitalismo industrial sino que, para que su rol sea decisivo, responde a Ia demanda de una economia ya en ‘movimiento 80. En ef caso del Peri, como mencioné en otro trabajo, 81 estos ferrocarrles no se articularon a la estructura interna de la economia peruana, sino que més bien fueron los vehiculos de desintegracién de la economia campesina y los ‘canales através de los cuales se reforz6 a dependencia exterior ‘del Pert, Lo que Pardo y su clase no pudieron comprender era la imposibilidad de wn desarrollo sutEntico en el interior de un espacio dominado por el capitalismo —_europeo. Parad6jicamente, el Estado peruano, al construir con sus ‘propios capitales estos ferrocariles, preparé, a corto plazo, una nueva y definitiva bancarrota financiera y, a largo plazo, el reforzamiento de su dependencia 79, Las tes Hineas propuesas deblan uric los siguientes puntos: Islay- Arequipa, Lima-lauj ye tral con Cajamarca 0, Cuande una economia inicia su expansin no slo incorpora tecnologia sino que, inversamente, puede aleanza el mismo resultado con teenologss allemativas. Véase a este reapecto, el provocative libro de Robert W. Fogel, Railroads and American Economle Growth, Baltimore, 1964 831, Bonilla, Heraclo: "El impacto de los ferocariles: algunas proposiciones" en Hisoria y Cultura, Lima, 1973, N"6, pigs. 93-120. 56 Guano y burguesia en ol Peri Pero, después de todo, ;por qué fue esto asi? EL razonamiento de Pardo era sin duda correcto al afiemar que la construccién de lineas modemas de comunicacién, es decir fecrocariles, contribuiria grandemente a incentivar la produccién, Efectivamente, el abaratamiento de los costos de transporte podie permitir ahorrar una masa de capital que después se destinaria a elevar la productividad de la economia Pero el aumento de la produccién intema a través de un rmecanisme de este tipo, en lugar de fortalecer Ia economia intema, contribuye mis bien a su distorsion y debilitamiento, en Ja medida que es una produecién totalmente dependiente de las oscilaciones del mercado exterior. En efecto, basta observar el tuazado de las lineas féreas para descubrir su funcién: la extraccién mis barata y eficiente de aquellas materias primas més solictadas por las economias dominantes extemas. Otro hubiera sido el destino y la funcién de estos ferrocariles si la economia peruana hubiese contado en esa época con polos intemnos de crecimiento Por el contario, desarrolar Ia economia sobre bases menos aleatorias supone por definicién desarrollar el mercado interno. YY para esto hace falta algo mis que simples lineas férreas, tanto mas que el mercado interno del Pert, débil y fragmentado, era desde la primera década posterior a a Independencia cada vez ‘menos nacional. Este mercado servia sobre todo para Ia venta de las mercancias brtinicas y europeas, El desarrollo de un s6lido mercado interno hubiera exigido, en definitiva el ineremento de Ja division social del trabajo, el fortalecimiento del sistema econémico, la elevacién de la productividad de los sectores econémicos. Pero todo esto, a su vez, exigia erradicar las bases coloniales de la economia peruana del siglo XIX, emancipar a los siervos, romper el poder politico de los grupos seforiales tradicionales y cortar los nexos de una aniculacién asimétrica de Ia economia peruana con el mercado internacional. De ‘manera conseiente, Pardo 1 / Consignatarios y Yburguesia nacional 3” ro podia asumir un programa de esta naturaleza, por los graves riesgos que implicaba para el mantenimiento de la propia dominacién de su clase. Pero este no era todo el problema Sabemos desde hace mucho tiempo que la historia no es necesariamente Ia expresién y el desarrollo de las intenciones conscientes de los hombres. Mis bien, es al revés. La opacidad en ls planteamientos de Pardo deriva y se nutren de su posicién de clase. La visign de este hombre singular, de hecho tuvo un alcance mucho mayor que la de muchos otros de su propia clase pero, pese a ello, el mismo Pardo no pudo escapar a las doterminaciones y alas ilusiones de su tempo y de su clase Los ferrocarrles se construyeron, pero su silbido contrariamente a lo esperado, no logré despertar de su letargo a las masas indias. Pardo llegé a ser presidente, pero sdlo para ser ol testigo impotente de una de las mayores debacles financieras del Estado peruano. Décadas més tarde, efectivamente, el ferrocarril_contribuiri grandemente a la expansién de la ‘economia interna del Perd, pero con ello, y no por paradoje ni casualidad, la burguesia que se constituye seri cada vez nocesariamente menos nacional. Para que siga siendo una clase Durguesa necesitaré depender del capital imperialist. La lite econémica modemizante al no poder asumir por su propia cuenta Is tarea de transformacién integral del pais, se Timitarh a lo largo de la segunda mitad del siglo XIX @ participar en el proceso productivo en calidad de asociada de los capitalistas britnicos, extrayendo de esta situaci6n parte de sus beneficios. Ademés, y es esto lo fundamental, los ‘obsticulos institucionales que he sefalado y la persistencia de los rasgos sefioriales en Ia mentalidad de esta nueva clase, fos hicieron reticentes a toda inversién productiva. Sus miembros cescogerin el amplio y cémodo camino de la especulacién, favorecides grandemente por las necesidades financieras del Gobierno. 38 Guano y burguesiaen el Pert De una clase que traiciona su destino, @ su casi inmediata conversién en rentista y parasitaria, el camino era corto y directo y fue ripidamente reeorrido, La consignacién del guano que los comerciantes nacionales ‘obtuvieron del Gobierno en 1862 les permitié tener al Estado peruano. priclicamente a su merced. Las arcas fiscales se ‘convirtieron en la fuente principal de sus ganancias: a través de préstamos, de intereses usuarios, etc.82. Un ejemplo. Entre 1865 y 1866 ellos efectuaron nueve préstamos al Gobierno por tun valor total de 35'762,000 soles, suma que les report6 un beneficio aproximado del 30%, es decir 104485.220 soles, por concepio de intereses, comisiones y cambios83 Es asi que @ fines de la déceda de 1860 esta clase se restablece econémicamente, gracias al control de la venta del ‘guano, al fraude, a las especulaciones fiscales. Frente a ella cexistia una masa urbana y rural, cuya situacion se deterioraba dia a dia, Esta polarizacin de Ia sociedad, generé la eclosién de los primeros movimientos populares, con un caricter ‘marcadamente social, aunque carecfan todavia de la coherencia organizativa e ideolégica. Los consignatarios estaban en el ‘centro del odio popular. En la cima, finalmente, controlando el poder politico, continuaben todavia los caudillos militares. Pero cra un control cada vez mas vacilante. Ya no podian hacer uso como en la primera mitad del siglo XIX de los mismos ‘mecenismos tradicionales para la formacién de sus clientelas personales 84. Ademis, como hemos visto, en su programa de gobierno estaban ya incorporadas las reivindicaciones mis esenciales de Ia Clase emergente. En 1872 las miembros 82. Cisneros, L. B: Obras Completa, tomo Il, pégs 213-231 83. Maiguashea, J, op ci, p. 222. 84. Wolt, Ere Ry Hansen, Edward, "Cauillo Polis Structural Analysis" en Comparatves Studies in Society and History, Oxford, 1967, vol. IX,N°2. 1/ Consignatarios y "burguesia nacional 9 de la clase comercial-terrateniente consideraron que habla legedo el momento de asumir directamente el contral politico del pais, Ellos habian adquirido, al fin, la fuerza necesaria, Sin ‘embargo, entre 1869 y 1872, un acontecimiento, de hondas repercusiones para las finanzas y Ia economia peruana, resta significado a este triunfo politic. De esta manera cuando Manuel Pardo asume en 1872 el control politico del Estado no es sino para convertirse en el personaje impotente y entrampado de dos procesos opuestos. pero convergentes: la mis aguéa crisis moderna del captalismo interacional y la debacle de su propio grupo de sustento. El que estavo en el centro de este doble movimiento fue Nicolés de Piérola, un hombre de 30 afos, quien arrebata a los comerciantes nacionales la consignacién del guano, es decir la fuente principal de sus riquezas, para ponerla en manos de un ‘oscuro comerciante franeés: Auguste Dreyfus.

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