LA BECA DEL GUERRILLERO.
-+-Se ve pues
que ciertos juegos de mano
producen algtin cosquilleo
debajo del sobaco
y otros
mucho mucho dolor
entre el higado y el alma
:total que diga yo lo que dijere
porque las balas fueron de él
antes de que él fuese de las balas.
y el dfa de su muerte
fue el mds grande
de sus propios
dias sin él mismo
mas asi ha sido siempre
—es casi una profecia desde circulos concéntricos—
: Ciro invdlido
ti muerto
yo perdido
y las demds piezas movibles todavia
sobre la mesa de ajedrez
no obstante
lo fregado de estos accidentes controlados que vivi-
(mos
pero qué vaina!durante toda la oracién del poeta
Dios estuvo ocupadfsimo perdonando pecados
si
hoy
hay que devolver a los ojos sus aguas
alas manos: esa antigua facilidad de convertirse en
(pufio
pues la situacién es bastante huesodélica
vy
ninguno somos robots
y aqui de donde escribo
sélo hay dos clases de gente:
“los muertos
y los que vamos a
morir"
Carlos Rigby