Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Aun as, no debemos confundirnos y decir que solo organizaciones por nuestra
iglesia y asociacin estn encargados de realizar el evangelio, es aqu donde se
resalta una vez ms que somos nosotros embajadores de nuestro Dios, puesto
que hasta el esfuerzo ms humilde de amor abnegado ser coronada con su
bendicin y recibir su gran recompensa, y si somos dadivosos con lo poco,
seremos engrandecidos en lo mucho.
Es por eso que se hace un llamado, para que no desistamos en nuestra labor
como embajadores de nuestro Dios, debemos fortalecernos en ms en nuestra
comunin con nuestro padre, llevando as cada da un fruto a nuestro padre
Celestial.
CAPITULO 2
Que dicha ms grande, para cada uno de los jvenes, el recibir el mandato de ser
embajadores de nuestro Padre Celestial. Ser partcipes en nuestros centros de
adoracin hacia nuestro Dios, organizados y preparados para proclamar el
mensaje de nuestro Dios a todo aquel que abra el corazn y desee escuchar la
vos de Dios.
Dentro de nuestro espritu misionero en cada uno de nosotros tenemos una gran
debilidad, es as que cuando pase el tiempo seremos ms deficientes una nuestra
labor de evangelizar, y que al realizar nuestra labor lo haremos por conseguir un
beneficio a cambio de nuestras acciones engandonos a nosotros mismos. Al
realizar nuestra labor.
Dios llama a los que estn dispuestos a ser sus dirigentes para su espritu santo.