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REVISTA ICONO 14, 2010, Año 8, Vol. 2, pp. 371-382. ISSN 1697-8293.

Madrid (España)
Gabriel Galdón López: Algunos criterios éticos para una adecuada comunicación interna en las
organizaciones
Recibido: 05/02/2010 – Aceptado: 28/03/2010

A8/V2 – REVISTA DE COMUNICACIÓN Y NUEVAS TECNOLOGÍAS – ISSN: 1697 - 8293

Palabras clave
ALGUNOS CRITERIOS Ética, comunicación, organizaciones,
criterios, virtudes

ÉTICOS PARA UNA ADECUADA Key Words


Ethics, communication, organisations,
criteria, virtues
COMUNICACIÓN INTERNA EN
LAS ORGANIZACIONES Abstract
There are only a few studies about
ethical principles on the internal
Gabriel Galdón López communication in organizations. And
it is necessary to analyze them from a
humanistic point of view. This paper
Catedrático de Periodismo is aimed at proposing four criteria:
Facultad de Humanidades y Ciencias de la Comunicación. Univer- humanity, truthfulness, prudence and
sidad CEU San Pablo, Madrid. Julián Romea, 23, 28003 Madrid human coexistence.
(España) – Tlfn.: (+34) 913027285 - Email: galdonlo@ceu.es

Resumen
Ante la escasez y falta de sistematización de los estudios específicos
sobre ética de la comunicación interna en las organizaciones, y tenien-
do en cuenta la necesidad de fundamentar en principios sólidos, esta-
bles y humanos toda institución, se propone una serie de criterios
éticos en éste ámbito, tales como el personalista, el de veracidad, el
prudencial y el convivencial. Criterios que remiten a unas virtudes y se
desarrollan en varios niveles de operatividad.

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C/ Salud, 15 5º dcha. 28013 – Madrid | CIF: G - 84075977 | www.icono14.net
Gabriel Galdón López: Algunos criterios éticos para una adecuada comunicación
interna en las organizaciones

Introducción. Objetivos y metodología


Por un lado, consideramos que hace falta eficiencia, sin que se ponga de relieve
estar ciego, o cegado, o no querer ver, para explícitamente, y de un modo profundo,
no darse cuenta de que la crisis económica sistemático y sintético, la fundamentación y
y social en la que nos hallamos tiene una de finalidad éticas. Y en los pocos que sí lo
sus causas fundamentales en el olvido de los hacen, y en los varios estudios específicos
principios y valores éticos, o en su sustitu- sobre este tema concreto, si bien tienen un
ción por reduccionismos teórico-prácticos, gran valor y utilidad para mostrar, por
expresados eufemísticamente, pero que en ejemplo, que la ética es indispensable para
muchos casos encubren un cinismo des- el buen funcionamiento de cualquier orga-
tructor. Por lo que si se quiere que las nización, y que la comunicación interna
organizaciones vuelvan a ser humanas y tiene una impronta ética insoslayable, y que
rentables, hay que volver a la consideración ésta comunicación debe favorecer, a su
verdaderamente ética de la organización, vez, el comportamiento ético de todos las
en la que la comunicación verdadera y la personas que componen la organización,
verdadera comunicación juegan un papel sus perspectivas de análisis son mayorita-
fundamental. riamente descriptivas de situaciones y pro-
Por otro lado, consideramos que, tras positivas de marcos y modos de mejora
hacer un balance bastante exhaustivo de las desde pautas y criterios operativos. Falta,
aportaciones científicas sobre el funciona- de nuevo, la síntesis desde los criterios
miento, gobierno, gestión u operatividad fundantes desde los cuales hay que deducir
de las empresas y otras organizaciones, los criterios operativos.
puede observarse con claridad meridiana Estas dos consideraciones avalan fehacien-
que uno de los aspectos menos tratados es temente la necesidad de realizar este breve
el de la comunicación interna. El énfasis se estudio, en el que procuraremos explicar
pone en la comunicación institucional, en con la mayor claridad posible los criterios
el marketing…Y en la mayoría de aquellos éticos, fundantes y operativos a la vez, que
estudios que sí tratan la comunicación conduzcan a una comunicación interna
interna, los aspectos que se analizan son, adecuada dentro de las organizaciones.
sobre todo, los de una adecuada gestión Comenzaremos por el criterio fundante, el
funcional y modal en aras de la eficacia y la personalista.

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interna en las organizaciones

1. La dignidad de la persona como


fundamento de toda acción organizacional
En su Teoría de la acción humana en las orga- ras veces son conscientes de ello” (Pérez
nizaciones, el profesor Pérez López cita una López, 1991, 17-18).
reflexión de Chester I. Barnard en la que el De ahí que la primera consideración que
famoso autor de The Functions of the Executi- debemos hacernos es qué respuesta damos
ve escribe: a esta cuestión. Y si esa respuesta es verda-
“Me ha sido imposible avanzar en el estudio dera o no, ya que como indiqué en su
de las organizaciones, o en el de la actua- momento para otro tipo de comunicación
ción de las personas en el seno de una orga- “es la verdad sobre el hombre la refe-
nización, sin enfrentarme con algunas cues- rencia concreta y permanente que
tiones de fondo como las siguientes: ¿Qué es dota de sentido y permite vertebrar
un individuo? ¿Qué queremos decir al utili- adecuadamente todas y cada una de
zar la palabra persona? ¿Hasta qué punto las distintas acciones comunicativas
tienen las personas el poder de elección o li- e informativas, en diversos grados y ma-
bertad de elegir? La tentación es evitar ese neras según sea la naturaleza concreta de la
tipo de cuestiones tan difíciles de contestar, acción” (Galdón, 1994, 216)
dejando que sigan tratando con ellas los
El problema estriba en saber cual es esa
filósofos y los científicos, que aún siguen sin
verdad o, mejor dicho, ese conjunto de
ponerse de acuerdo después de siglos de dis-
verdades. Pues bien, a mi parecer, la res-
cusión. Se da uno cuenta rápidamente, sin
puesta está en que el hombre no es ni un
embargo, de que, aunque tratemos de evitar
mero “elemento del conjunto de relaciones
dar una respuesta definitiva a tales pregun-
sociales de producción”; ni un mero “indi-
tas, no podemos evitar enfrentarnos con
viduo”; ni un “recurso”; ni mera “mano de
ellas. Las estamos contestando siempre, aun-
obra”; ni sólo un “empleado de la sección
que sea de modo implícito, al formular cual-
X”… Ni, en otro orden de cosas, un mero
quier aseveración sobre la actuación de las
votante, receptor pasivo, etc. Sino una
personas. Y, lo que es más importante, todo
persona. Así lo entienden, entre otros,
el mundo –y especialmente los líderes, direc-
Ferreiro y Alcázar en un libro titulado
tores y ejecutivos- actúan sobre la base de
significativamente Gobierno de personas en la
supuestos o actitudes fundamentales que im-
empresa frente a tantos otros que desgracia-
plican, a su vez, que ya se ha dado una res-
damente prefieren referirse a la “gestión de
puesta a aquellas cuestiones, aunque sólo ra-
los recursos humanos”, cosificando indebi-

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damente la naturaleza y la acción de los llamado a ser y a afirmarse como tal, en


hombres. Pues bien, estos autores escriben toda su dignidad. Con la cual vive de
que “cada persona es, evidentemente, mu- acuerdo cuando se abre al tu del otro, del
cho más que un voto, un consumidor, un prójimo, mediante la actitud de servicio y
caso clínico, carne de cañón o simple mano de entrega, y no se enquista en una inde-
de obra. Si no lo pensamos así, es posible pendencia desligada de la verdad y del
que terminemos diciendo como Sartre que bien, ni busca la propia afirmación por la
el infierno son los otros, o como Nietzche que vía del poder o del tener, que le hace per-
la mujer es el solaz del guerrero. Además, der de vista el Ser y su ser e instrumentali-
seremos incapaces de entender lo que zar a los demás.
pasa en las organizaciones.” (Ferreiro y La persona es un ser singular e irrepetible.
Alcázar 2001, 23). Con derechos y deberes inalienables, sea
Y, además, si no lo pensamos así, estare- cual sea su condición social, sexo, raza,
mos volviendo a las cavernas, eso sí, a una apellido, lengua o religión, desde el mis-
caverna globalizada y súper tecnológica, mo instante de su concepción y hasta el
como se describe, por ejemplo, en el film momento de su muerte natural.
La isla, que protagoniza Scarlett Johanson. Esta consideración es el fundamento de la
Por tanto, repetimos, si queremos lograr acción justa de cada uno y la base de toda
unas organizaciones verdaderamente sociedad democrática y pacífica. Y es tam-
humanas y, por ende, una ética de la co- bién, por ello, la referencia y el referente
municación interna en ellas, hay que volver de las diversas acciones libres que constitu-
a pensar en ese entretejimiento de la con- yen cada organización y, dentro de ella, la
cepción judeo-cristiana y la concepción necesaria comunicación.
clásica greco-latina en el pensamiento fi- El sentido personalista nos llevará a saber y
losófico y jurídico de Occidente que dio entender que, en palabras de Pascua,
lugar a la concepción del hombre como
"el hombre es la cima del mundo visible y el
persona. Y partir de esa concepción para
límite del mundo invisible. En él se unen la
desarrollar los diversos criterios operativos
tierra y el cielo, lo sensible y lo inteligible,
y funcionales.
la inteligencia y la voluntad, la carne y el
Esa concepción verdadera y profunda que espíritu, hasta el punto de que San Agustín
ha dado lugar al desarrollo moral y cultural ha podido afirmar que si no se es espiritual
de la civilización occidental dice, en primer hasta en la carne, se acaba por ser carnal
lugar, que en virtud de su origen, naturale- hasta en el espíritu. La unidad del hombre es
za y fin, el hombre es ante todo persona. compuesta pero indivisible. Esta es la razón
Un ser que es él mismo, que se autoposee, por la cual la triple dimensión física, psíqui-
que es responsable de sus actos. Un ser

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ca y espiritual del hombre le permite avan- actitud de servicio que es, en la persona, el
zar interiormente hacia una unidad siempre horizonte y la expresión de su propia dig-
más integrada” (Pascua, 1991, 170) nidad. Esta interacción ha sido también
Por otro lado, la persona, desde su concep- expresada con acierto por el filósofo
ción, es un ser completo en cuanto a su alemán Robert Spaemann:
esencia y dignidad, pero es un ser depen- "El hombre es aquel ser que puede desconsi-
diente, inacabado, incompleto, en conti- derarse a sí mismo y relativizarse. Puede -
nuo crecimiento hacia su perfección y como se expresa en el lenguaje cristiano-
plenitud en el equilibrio y la armonía de sus 'morir a sí mismo'. Dicho de otra manera:
potencialidades físicas, psíquicas y espiri- puede presentar sus propios intereses en un
tuales. Y para conseguir esa plenitud se discurso de justificación cuyo resultado esté
desarrolla en la familia, en el estudio o en abierto, porque puede en principio reconocer
el trabajo, en la cultura y en el ocio, en el como igualmente dignos de consideración los
arte y en la religión. En su relación con las intereses de todos los demás, según su rango
demás personas y en su búsqueda del bien y peso. El hombre no remite necesariamente
propio y ajeno y del entero bien común. Lo todo el entorno a sí mismo; puede caer en la
cual es el origen de toda comunidad, de cuenta de que él mismo es también entorno
toda organización. para otros. Precisamente en esta relativiza-
Pero para dar de sí, de lo que se es, al no ción del propio yo finito, de los propios dese-
poderse dar lo que no se tiene, hay necesa- os, intereses y objetivos, se dilata la persona
riamente que ser. De ahí que el sentido y se hace algo absoluto. Se hace inconmensu-
personalista conduzca a cada persona, en rable. Puede ponerse a sí mismo en servicio
primer lugar, a respetar, cuidar y fomentar de algo distinto de sí, hasta el sacrificio de sí
su propia dignidad personal. A respetar la mismo. Es capaz del amor Dei usque ad
de los demás y a contribuir, desde su fun- contemptum sui, por decirlo con Agustín.
ción en toda comunidad u organización (en Y precisamente sobre la base de esta posibili-
la que de modo natural o cultural o profe- dad, la persona -no como ser natural, sino
sional esté inserto) a que se respete la dig- como ser potencialmente moral- se convierte
nidad de todos. Respeto que abarca tanto la en un fin absoluto. Debido a que puede rela-
libertad exterior -de expresión- como la tivizar sus propios intereses, puede pretender
personal libertad interior, que es una con- que se respete su status absoluto de sujeto.
quista diaria y que está reñida frontalmente Debido a que puede asumir libremente obli-
con cualquier tipo de abuso de poder, por gaciones, nadie tiene derecho a hacerle es-
un lado, o, por otro, de servilismo. clavo, pues -como vio Kant correctamente- el
esclavo no puede tener ninguna obligación
Y no hay nada más opuesto al ejercicio
frente a su señor. Porque el hombre es, como
arbitrario del poder y al servilismo que la

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ser moral, una representación de lo absoluto, riamente la igualdad sustancial y la diversi-


por eso y sólo por eso, le corresponde aquello dad accidental de cada persona en todas las
que llamamos 'dignidad humana'” (Spae- acciones de una organización. Por ejemplo,
mann, 1989, 104-105). ese es el fundamento de que, a igualdad de
Esa consideración de la dignidad humana funciones, es absolutamente injusto que a
no sólo conduce a tener en cuenta siempre una mujer se le pague menos que a un
la igualdad sustancial de todos los seres hombre, o de que no se valore social y
humanos, en cuanto personas, lo que re- económicamente el trabajo de la mujer en
presenta la semejanza que hace posible, su hogar. Y que, al mismo tiempo, sea
entre otras cosas, la amistad; sino también igual de injusto despedir a una mujer por-
las diferencias de sexo, edad, conocimien- que se quede embarazada, o exigirles el
tos, carácter, aptitud, función, circunstan- mismo horario a todas las personas en la
ciales, etc., de cada sujeto que, por ser empresa independientemente de sus condi-
persona es, al mismo tiempo, igual a todos ciones y circunstancias específicas.
los demás y distinto a todos los demás. En Los ejemplos podrían multiplicarse, ya que
este sentido, y por decirlo con expresión la vuelta generalizada a la consideración
guittoniana, “Dios sólo sabe contar de uno personalista de las organizaciones generaría
en uno”. De ahí que siga teniendo plena un sinfín de criterios operativos que su-
vigencia la definición de justicia de Ulpia- pondrían un avance espectacular hacia una
no: “justitia est constans et perpetua volun- civilización más justa, pacífica y armónica.
tas suum unicuique tribuendi”. Esa cons- Pero tenemos que ceñirnos a los que se
tante y perpetua voluntad de dar a cada uno refieren a la adecuada comunicación inter-
lo suyo tiene que tener en cuenta necesa- na…

2. Criterios para una adecuada


comunicación interna
El criterio fundamental y fontal, natural- conditio sine qua non para el desarrollo de su
mente, es que la persona, en cuanto ser personalidad.
relacional es un ser comunicativo y comu- Por otro lado, la comunicación es el ele-
nicacional. Pertenece tanto a su esencia mento conectivo necesario de toda organi-
como al desarrollo de su personalidad zación, sin la cual no podría ni constituirse
comunicarse con los demás. Es, por un ni desarrollarse.
lado, una necesidad necesaria y, por otro,
De ahí que cuando me propusieron escribir
el prólogo para un libro colectivo, en el

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que veintitrés profesores expertos de sen- cer cauces, instrumentos, servicios,


das universidades españolas y extranjeras etc., que la hagan posible; y personas
trataron sobre la Gestión de la comunicación prudentes y con preparación específica
en las organizaciones, sinteticé brevemente que lideren y hagan factible esa comu-
mi pensamiento en las siguientes cinco nicación.
afirmaciones: 4. Todos esos cauces, instrumentos, servi-
1. “La comunicación en las organizaciones, cios, etc., pueden y deben servirse de
como en cualquier relación humana, las tecnologías adecuadas, pero nunca
comenzando por la familiar, es un ele- deben eliminar, sino favorecer la co-
mento decisivo, básico y fundante que, municación interpersonal directa. Esa
como se sabe, tiene varias dimensio- comunicación de la mirada noble y
nes. Unas ad intra, otras ad extra. Todas franca, del consejo acertado bajo el
ellas tienen en común el sustento en la aroma de un café, del diálogo de las in-
verdad. En efecto, como afirman Polo y teligencias, los corazones y los gestos.
Llano siguiendo a Tomás de Aquino, 5. Por todas estas razones, y porque ac-
“sin veracidad la sociedad es imposible, por- tualmente la incomunicación, el exceso
que su gran conectivo es el diálogo, la co- de información, la desinformación, la
municación, y si se atenta contra la verdad, manipulación, el relativismo y el utilita-
se produce la incomunicación y la sociedad rismo se están enseñoreando de la so-
se pulveriza. Una sociedad de personas que ciedad por diversas vías y bajo distintas
no viven la veracidad, que prescinden de la formas, una de las tareas más importan-
comunicación como conectivo social, no pue- tes que deben hacerse desde la Univer-
de funcionar, se desmorona.” (Polo y Lla- sidad y desde diversas instancias de la
no, 1997, 67) Sociedad Civil es el fomento de una
2. Pero no basta con que la comunicación comunicación adecuada e idónea que
sea verdadera, sino que también debe vuelva a restablecer la confianza y la le-
ser enriquecedora, útil en el sentido altad, necesarias para la convivencia so-
más noble de la palabra. Esto es, que lo cial respetuosa y libre”. (Galdón, en
que se comunica no sólo debe ser ver- Losada 2004, 27-28)
dadero, sino bueno para las personas, Cabe ahora explanar algo más el contenido
para la organización, y para la entera de estos puntos, tanto desde las mejores
sociedad. aportaciones de autores de reconocido
3. Para que eso sea posible hace falta bue- prestigio científico en este ámbito como
na voluntad. Pero no basta la buena vo- desde la propia experiencia y reflexión.
luntad. Es necesaria también una ges-
tión eficaz. Por lo que hay que estable-

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Así, Ferreiro y Alcázar nos recuerdan a) (Rico y Lorente, en Losada, cit., 303-316).
que “comunicar no es simplemente distri- Además, y como condición previa, la elec-
buir información; comunicar es intercam- ción de las personas para las distintas fun-
biar conocimientos con otras personas y es, ciones en la organización, sobre todo si se
por lo tanto, un proceso de doble sentido. trata de cargos directivos, de asesoramien-
Su finalidad es que las otras personas ad- to y comunicativos, debe tener en cuenta
quieran un conocimiento que no tienen su conocimiento acendrado de las materias
pero necesitan para actuar bien y libremen- específicas y su interés por seguir estudian-
te”; b) que esta comunicación debe ade- do y actualizando sus conocimientos. Y no
cuarse a la realidad, esto es, ser verdadera, ser elegidos por amiguismos o apellidos,
y que su pretensión es “facilitar que todas sin que posean la cualificación necesaria.
las personas que componen la organización La mentira es aún más grave. Como es-
anden en la verdad; c) y que “no basta con criben Ferreiro y Alcázar, la mentira “in-
conocer la verdad. Otras dos condiciones troduce confusión y desorden en la comu-
son necesarias en las personas de la organi- nicación y afecta gravemente a la unidad de
zación: la veracidad, es decir, la co- la organización y a su continuidad en el
herencia entre lo que se piensa y lo tiempo. Es uno de los mayores obstáculos
que se dice y la lealtad que implica al desarrollo y la cohesión social”. (Ferreiro
acción coherente con la palabra da- y Alcázar, cit., 190). Pero además, como
da”. (Ferreiro y Alcázar, cit., 186-187) vimos en la cita de Santo Tomás, genera
A continuación, estos autores se refieren a desconfianza, sin la cual es imposible la
las amenazas fundamentales a la comunica- convivencia.
ción que, lógicamente, no pueden ser otras Estas mentiras se pueden dar en diferentes
que la falsedad, la mentira y la desleal- planos y situaciones. De modo aislado y
tad. disperso, producto de personas mentirosas
En efecto, es obvio que si lo que se comu- en los distintos niveles de la organización,
nica es falso, o incompleto, o parcial, por lo cual, amén del deterioro moral de esas
falta involuntaria de conocimiento real, personas, produce un detrimento grave de
cierto y profundo de los hechos o situacio- la convivencia, de la unidad, ya que la
nes, conduciría a errores prácticos muy mentira distancia a las personas entre sí y
contraproducentes para las personas y para los aparta de la realidad.
la organización. De ahí que, en el prólogo Pero la mentira también puede ser sistemá-
antes citado me refiriera al valor de la do- tica y organizada desde determinadas ins-
cumentación en toda organización y que en tancias de poder en la organización, en
ese mismo libro haya un capítulo dedicado lucha contra otras instancias, mediante
a la Documentación en la Comunicación Interna cauces o productos aparentemente infor-

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mativos y construidos con verosimilitud. con el gesto torcido, aquello de “del dicho
En este caso, estaremos ante el peor esce- al hecho…
nario posible el de la manipulación, que, Por tanto, resumimos, que tras el criterio
además de institucionalizar la mentira, personalista, el fundamento de la ética
conlleva una violencia a la realidad y a las de la comunicación interna en las organiza-
personas, si bien es una violencia moral y ciones es el criterio de veracidad, al que
espiritual, silenciosa e inadvertida, que se oponen la falsedad, la mentira, la
convierte en esclavos a quienes la padecen manipulación y la incoherencia.
e imposibilita cualquier convivencia en
Pero hasta ahora, y siguiendo la perspectiva
libertad. Cuanto he escrito sobre este tema
de Ferreiro y Alcázar, nos hemos limitado a
referido a la comunicación social es aplica-
la comunicación como intercambio verda-
ble mutatis mutandis a la comunicación in-
dero de conocimientos, por lo que el “des-
terna en las organizaciones (cfr. Galdón,
tinatario inmediato de la comunicación es
2001 y 2007).
la inteligencia de las personas” (Ferreiro
Otra forma de mentir, como ya hemos y Alcázar, cit, 186). Y ya hemos apuntado
apuntado, es la incoherencia entre las pala- más arriba que, por un lado, también hay
bras y los hechos. Entre el “discurso insti- una comunicación de valores, de actitudes,
tucional”, precioso, emotivo, bien estruc- de afectos, una comunicación no sólo de
turado, con palabras que llegan a la mente inteligencia a inteligencia sino de corazón a
y al corazón… Y la cruda realidad cotidiana corazón pues, parafraseando a Pascal, el
donde no se observa por ningún lado el corazón tiene razones que la cabeza no
cumplimiento de tales promesas y excelen- entiende; que, por otro, la comunicación
tes intenciones declaradas o, incluso peor, forma también parte del proceso de parti-
se constata una contradicción flagrante. cipación en la cultura y el gobierno de la
Este factor negativo se traduce en una organización ya que toda comunicación
irremediable pérdida de autoridad por personalista y verdadera deviene en comu-
parte de la institución y de sus líderes, así nión y comunidad; y, por último, que hay
como en una irremisible pérdida de con- que utilizar prudencialmente el cauce y la
fianza en la institución y en sus líderes por forma comunicativa o informativa adecuada
parte de los demás miembros de la organi- al contenido y a la circunstancia de la que
zación, que se ven abocados a la crítica se trate en cada momento.
disgregadora, fruto de su malestar. Cuán-
Como ya hiciéramos respecto al criterio
tos no han evocado, ante determinados
anterior, también ahora podemos desarro-
discursos institucionales, el célebre lamen-
llar una explicación sensu contrario, esto es,
to de Hamlet (“Words, words, words”) o,
de los obstáculos, impedimentos y peligros
para que exista y se desarrolle una comuni-

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cación interna adecuada en cada organiza- puedan comunicarse con otras personas y
ción. departamentos; etc., etc.
A mi entender, estas negaciones e imper- Sin embargo, al mismo tiempo, se está
fecciones son, además de la falsedad, la desarrollando un proceso de incomunica-
mentira, la manipulación y la deslealtad o ción interpersonal en todos los niveles:
incoherencia: la carencia de comunicación descendente, ascendente y lateral, con lo
personalizada y convivencial, la carencia de que se reduce a mínimos el necesario diá-
información necesaria y la transferencia de logo; se suprime la comunicación de valo-
información inútil, la unidireccionalidad res y afectos; se produce el aislamiento
descendente, la burocratización, y la inade- individual, contrario a la necesaria convi-
cuación formal o modal. Veámoslas bre- vencia que constituye la comunidad. Y,
vemente, si bien mezclando en el texto lo además, en bastantes casos, en vez de dis-
que en la realidad también va junto. minuir, aumentan significativamente los
Es evidente que las nuevas tecnologías de la rumores y las situaciones de incertidum-
información ofrecen un sinfín de facilidades bre.
y posibilidades en todos los ámbitos, in- Hay determinadas cuestiones que requieren
cluidos, lógicamente, el de la comunica- el contacto personal, donde la comunica-
ción interna en las organizaciones. Así lo ha ción no verbal (una sonrisa, una mirada
puesto de relieve sintética y magistralmen- franca y directa, un gesto de apoyo, una
te el profesor Castillo en su estudio Nuevas palmada en la espalda, un apretón de ma-
tecnología y comunicación: análisis de la intra- nos) complementa el contenido comunica-
net como soporte de comunicación interna (Cas- tivo o, incluso, es su esencia. Y hay deter-
tillo, en Losada, cit, 271-288). Teoría que minados temas cuya comunicación requiere
ya se ha hecho realidad en la mayor parte ser efectuada no por el gabinete de comu-
de las organizaciones, donde se ha hecho un nicación a través de un mail conjunto, sino
esfuerzo ímprobo por parte de la dirección por el jefe o por el mejor amigo, en el
y gestión para aumentar el número de lugar adecuado y privadamente. Y no pue-
personas especializadas y los recursos tec- den sustituirse todas las reuniones con las
nológicos imprescindibles en los gabinetes vídeo-conferencias… Muchas veces, por
de comunicación para que todos los miem- último, la comunicación y la información
bros de la institución tengan cumplida necesaria y personal se sustituyen por in-
información on-line sobre multitud de formación innecesaria e inútil.
temas y aspectos concernientes a la “cultura De ahí que hoy más que nunca haya que
corporativa” y a la marcha de la entidad; implementar en la comunicación de cada
reciban por e-mail noticias y directrices; organización, fruto de un criterio perso-
nalista, y además del criterio de veraci-

8/2 REVISTA ICONO 14 – A8/V2 – pp. 371/382 | 07/2010 | REVISTA DE COMUNICACIÓN Y NUEVAS TECNOLOGÍAS | ISSN: 1697–8293 1-380
C/ Salud, 15 5º dcha. 28013 – Madrid | CIF: G - 84075977 | www.icono14.net
Gabriel Galdón López: Algunos criterios éticos para una adecuada comunicación
interna en las organizaciones

dad, un criterio prudencial y un criterio 5. Se procure siempre verificar o compro-


convivencial. bar que la comunicación se ha efectuado
Como se sabe, la prudencia es esa disposi- eficazmente, esto es, que haya sido en-
ción o virtud que, partiendo del conoci- tendida en sus justos términos y com-
miento verdadero de la realidad, y aten- partida en aras del bien común;
diendo a los fines que se persiguen y al bien 6. Se corrijan los fallos comunicativos e
de las personas y de la entera comunidad, informativos (rumores, falsedades,
elije en cada caso y circunstancia concreta mentiras, situaciones de incertidumbre)
la acción y el medio más adecuado para su con la autoridad y presteza oportu-
cumplimiento cabal. nas…
En referencia a lo que aquí estamos tratan- Y esto debe ser así, por último, porque el
do, este criterio determina entre otras criterio personalista de la comunicación
concreciones que: invoca necesariamente también, como
1. Se conozca y se escuche a todas las plenitud teleológica, el criterio convi-
personas que componen la organiza- vencial.
ción, estableciendo diferentes cauces de Toda organización debe tender a convertir-
diálogo, participación y decisión, y se en una comunidad de personas que satis-
aplicando cada uno de ellos teniendo en facen sus necesidades físicas, morales y
cuenta el tema y la circunstancia especí- espirituales, ejercitan sus derechos y cum-
ficas; plen sus obligaciones contribuyendo, me-
2. Se parta siempre de comunicar la ver- diante el desarrollo de sus cualidades y
dad que cada persona necesita para su habilidades a los fines específicos de la
desarrollo personal y profesional en el institución. Pues bien, el que esto sea así, y
mejor cumplimiento de su función de- el que se cumpla mejor o peor, tiene
ntro de la organización; muchísimo que ver con el estado de la
convivencia en el seno de la organización.
3. En los temas que así lo requieran, se
Con que si ésta es armónica y enriquecedo-
comunique o se informe por la persona
ra, o, por el contrario, si está deteriorada y
adecuada en cada caso y no por una sis-
produce malestar y desafección. Y esta
tema burocrático-tecnológico imperso-
convivencia deseable no se consigue sin una
nal;
adecuada comunicación en todos los niveles
4. No se sustituya la comunicación perso- y sin que ésta, a su vez, no tenga como fin
nal en los diferentes niveles, por una lograr esa convivencia. De ahí que la co-
mera transferencia informativa fría; municación no sólo tenga que ser verdade-
ra, sino selectiva y oportuna; que no divida
sino que aúne voluntades; que no fomente

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las envidias sino la concordia; que no aísle a de esperanza ante el futuro, consiguiendo
nadie sino que haga participe a todos los que todos se sientan importantes y útiles,
miembros de la organización de las tristezas iguales en dignidad, sea cual fuere su fun-
y alegrías de los demás para que se compar- ción, y con la mirada puesta en un mismo
tan solidariamente; que fomente una cultu- horizonte.
ra del servicio, de la alegría ante la vida, y

Referencias
FERREIRO, P. y ALCÁZAR, M. (2001) Gobierno de PASCUA, H. (1991) Verdad y opinión. Madrid.
las personas en la empresa. Lima.
PÉREZ LÓPEZ, J.A. (1991) Teoría de la acción
GALDÓN, G. (2001) Desinformación. Método, aspectos humana en las organizaciones. La acción personal.
y soluciones. Pamplona 1994 (1ª edición); Introducción Madrid.
a la Comunicación y a la Información. Barcelona; La
violencia a la realidad o la violencia silenciosa. POLO, L. y LLANO, C. (1997) Antropología de la
Desinformación y Manipulación en los medios de acción directiva. Madrid.
comunicación. En Escuela Abierta, nº 10, 2007. SPAEMANN, R. (1989) Lo natural y lo racional.
LOSADA, J.C. (coord.) (2004) Gestión de la Ensayos sobre antropología. Madrid.
comunicación en las organizaciones. Barcelona.

Cita de este artículo


GALDÓN LÓPEZ, G. (2010) Algunos criterios éticos pa-
ra una adecuada comunicación interna en las organiza-
ciones. Revista Icono14 [en línea] 1 de Julio de 2010, Año
8, Vol. 2. pp. 371-382. Recuperado (Fecha de acceso), de
http://www.icono14.net

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