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Sous la direction de Delphine D1az, Jeanne Mosanp, Romy Sancrtez. & Juan Luis Sima EXILS ENTRE LES DEUX MONDES MIGRATIONS ET ESPACES POLITIQUES ATLANTIQUES AU XIX® SIECLE LES PERSEIDES EDITIONS Gabriel Entin Gonicet-Centro de Historia Intelectual Universidad Nacional de Quilmes Los desterrados de la Republica. Revolucionarios del Rio de la Plata en los Estados Unidos (1816-1817) De uso infrecuente, el exilio formaba parte del vocabulario politico de los revolucionarios hispanicos. E] Diccionario de la Real Academia de 1732, al igual que el editado en 1780, definia al exilio como « lo mismo aque destiero, es vor latina y de raro uso». Y ejemplificaba : «Dado en exilio del Pueblo Romano's, En la Roma antigua el exilium no era una forma legal de pena sino tuna acci6n voluntaria para evadir una sencencia de muerte’. El exilio constcuia asi un privlegio de los ciudadanos romanos. Por esta ra26n, son escaas las jecuciones de ciudadanos en la replica (la mas célebre, la de los participantes en la conjuracién de Catlina en el 63 ac. por la que seria exiliado Cicerén durante 18 meses, en el 58 a.c., acusado de haber ordenado, cuando era cénsul, la pena capital a ciudadanos de la repiiblica sin juicio previo). El exilio implicaba la pérdida de ciudadania: la exclusién de la comunidad. Una vez abandonado el tersitorioromano,el Concilinm plebis promulgaba un edicto para impedir que el exiliado retomase ala patra. Se traaba de un mecanismo de diferenciacion con vista a preservar aparente unidad y concordia ena replica. El exiliado seconvertiaen un proscripto: su sola existencia amenazaba a la comunidad. El proscripto se asimilaba entonces a un enemigo piblico, es decir, a ur Bost. 1 Raat Acaneaa Estat, Dionrl del dgua calla, Madrid, Rel ‘Academia Espo, 1732, p. 83. 2 Vease en partclar KELLY Gordoo P, A Hitar of Bile in sh Roman Republic ‘Cambridge, Cambridge University Pres, 2006 3 bid 62 + GaBmieL ENTIN No es casual que en Roma la figura del enemigo (hosts) se identificara con la del extranjero (peregrinum). En De Offics, Cicerén explicaba que los sentidos de las palabras «extranjero» y «enemigo se hhabian convertido en sinénimos, creando una confusién: «el que por propio nombre fuera beligerante (perduelli), ée era llamado hoste (host), mitigada por la lenidad de la palabra la wistera de la cosa. Pues hoste era dicho, entre nuestros mayores, ese a quien ahora decimos peregiino (peregrinum)*», Desde la Antigtiedad romana en adelante se puede distinguir en los lenguajes sobre la repiiblica una asociacién seméntica entre a eiliado y las figuras de enemigo y extranjero. En 1521, el fraile triniteio espafiol Alonso de Castrillo citaria en latin la frase de Cicerén, cambiando el sentido en su tradueci6n: «Donde hablando Marco Tulio del oficio del peregrino [...]. afirma que antiguamente todo peregtino se llamaba hosts, que en nuestra lengua quiere decir enemigo...». En su Tructado de Repiblica, Castillo identificaba alos «moros inficles» como los peregrinos extranjeros que causaban la «perdicién de toda epublica» En la replica el exlio constituye un acontecimiento politico. Por tun lado, en Roma la accién de exiliarse era voluntaria. Por otro lado, csta accién no se basaba en una voluntad libre: la negativa a exiliarse implicaba la muerte. El exlio representa de este modo un mecanismo institucional de exclusién politica en la cual el ciudadano permanece Iejos desu patria contra su propio deseo. Este mecanismo puede también conceptualizarse como «destierro», «deportacién, wextrafamiento» © sexpatriaciéns, sinénimos de sexilior de uso mis frecuente en los vocabularios politics del mundo hispainico hasta el siglo XX. En este articulo nos proponemos analizar la experiencia del cxilio durante la revolucién del Rio de la Plata a principios del siglo XIX. Para ello, estudiaremos un caso particular, poco abordado en la historiografia de la revolucién: la expulsién a Estados Unidos de ocho revolucionarios que el Director Juan Martin de Pueyrredén decreté a fines de 1816 y a principios de 1817*, En primer lugar, reconsteuiremos 41 Creanbs, Acros de orders, versin de Rubén. Boniir Nufo, México DI, UNAM, 2008 ibe I, ap. XI, p17 Sf Atoxso ot Castano, Tactade de Republics, Madrid, Instcuo de Escudios Polos, (15211, 1958, pp. 3,89. 61 Bn genera ls referencias este tema som fragmentary estén includ em bio- ‘ale indivkuales de alunos de lo exlads. Vee por ejemplo Bows Charles H.Je,« VientePszos and the Amelia island allie, 1817 », he Foida Hasoicad LOS DESTERRADOS DE LA REPUBLICA + 63 l contexto politico en que Pueyrredén adopt la expatiacion contra sus coposivores como medida excepcional de la revolucién, En segundo lugas, nulizaremos las respuestas al gobierno que los desterados formularon desde los Estados Unidos. Estas respuestas se insribieron en un registro republicano de la revolucién y tuvieron como referencia principal a la conjuracién de Catilina en la antigua Roma. Por iiltimo, sefalaremos la experiencia de algunos de los exiliados en aquellas comunidades de revolucianarios atlénticas que constitufan la ciudades de la costa este de los Estados Unidos, como Baltimore y Filadelfia. La expatriacién de opositores politicos ‘en el Directorio de Pueyrredén Durante 1a primera década de la revolucién en ef Rio de la Plata, la ciudadania constitula més un criterio de disincién ~ entre los americanos y los espafioles, y entre los espaiioles favorables a la revolucién y los opositores ~, que un criterio de reconocimiento, a través de la abstraccion, de la igualdad politica entie los individuos. Se trataba de una ciudadania indeterminada gue convertia al patriotismo americano en la principal condicién de reconocimiento de los desechos de la comunidad en construecién. En 1812, el Segundo Triunvirato auto-instcuido en Buenos Aires a nombre de Fernando Vik cieé al titulo de «ciudadano americano del Estado con «todas las distinciones y presrogativas» para quienes reconocieran la soberania del pueblo y defendicran wla caust sama de la libertad del pueblo americano». Para acceder a la condicién de ciudadano, los espatioles europeos debian probar su patriotismo ameri- cano a través de la adhesin al nuevo sistema, a su gobierno, ¢ incluso Quarery LN, 3, 1975, pp.273.295; Bown Charles H. Jy Vicente Pzos agent forthe Amin sand Blibusers, 1818», The Frid ioral Quetry«Lll 34, pel 1975, pp. 428-442; Proctaas Ricard, « Manvel Moreno, cl Expatiado de Balkimores, Uhiberide, sparta del n° 6, 1965, pp. 15:31; Qemca Maria, ‘Manuel Moreno, Buenos Ars, Eudeba, 1972: Det CARR, Boslfcio, I desi de Dregs. 1816, Bucnos Air, Emecé, 1986 Para uh ans de rsyectonas ind \idusles de exladashispanosmcicanos en Estados Unidos a partrde 1820 desde tuna pespectiva de hisoria intel, wake Rojas Rail, Lar mpl de aire Uap y desencants en la revalacin bippanoameicana Bos Altes, aur, 2010 Tart un abordse global dl problem del ealio en Amica Latina ome reciisne . E19 de mayo de 1817 arribaron en la Hero al puerw de Savannah, «en los Estados Unidos, los siete expatriados del Rio de la Plata, luego de estar dos veces al borde del naufragio™. Desde ali, se trasladarian el mismo mes a Baltimore, donde permanecia Dorrego. «La Patria del hombre expulsado de su pais nativo es el mundo entero», sefalaba el Baltimore Paoriot & Mercanuile Advertiser cuando informaba sobre la llegada de los desterrados. El periédico advertia sobre dos excepciona- lidades del destierro: el traslado en un buque inglés de ocho ciudadanos que no habfan jurado obediencia a las eyes de Inglaterra y la «estupidez del actual gobierno de Buenos Aires, en considerarse suficientemente autorizado, « condenar, y trasplantar sus ciudadanos precisamente a los Estados Unidos, donde su autoridad no se extiende, y donde ellos no Los «sumarios» no constituian un 421 Sauver0, Comracon de Catlin, versién de Agustin Millses Calo, México DP, UNAM, 1991, ep. XXXVI, p28, 43 Gace de Buenos Aires, 07, 152-1817, pp. 33-35. ‘44 Boman Charles Hr, « Amelia land and Vices sans of Upp Pes Nacional», Buenos Ars, octubre de 1817, en ibid, pp 175-18, 78 + Gapnret ENTIN quienes separaba del resto de los desterrados ~ como «ener ‘autores de una conjuracién que, con el pretexto de fa invasién de Portugal, buscaban «entronizar la anarquia». Criticando el rol de cada uno de ellos durante la revolucién, el periddico comparaba su supuesta conjuracidn con «una revolucién como la de Catilina» en donde, de haberse realizado, hubiesen perecido «los principales patricios» y nadado «cen sangre la reptiblica. De esta forma, los conjurados hubiesen podido « borrar la memora de su infamia, y satisfacer sus ambiciosos designios» Al Avizador Patviota basaba la legalidad del decreto de Pueyrredén en la ‘sinminencia del riesgo que corria la eanquilidad publics», El panfleto Didloga entre un americana del norte y un cisdedano de las Provincias- Unidas de las Provincias Unidas de Su América sobre el belo publicado en Baltimore por los prscripas Agreio, Moreno, y Pasos, publicado en 1818, desarrollaba también citicas a los tres desterrados y los comparaba con scespartanos con mejor titulo que Antonio 0 Augusto en uno de sus cdicros». Los desterrados, continuaba el panfleto, habian provocado un «odio tan universal ...] que cada hombre ha marcado la expasriacién de «305 monstruos, como el cese de una calamidad®». El destierro en los Estados Unidos Desde los inicios de las revoluciones en Hispanoamérica, los Estados Unidos se habian convertido junto con la revolucién francesa y Ja monarquia constitucional inglesa en una de las principales referencias de los republicanos hispanoamericanos. Para los exliados del Rio de la Plata y para sus opositores, Estados Unidos representaba el pais «més libre del mundo», La misma Buenos Aires, como capital comercial de Sudamérica, era catacterizada en 818 en ua periédico local como «la (G21 Al Avner Patron y Mercantil de Baliimore. Un cindadane de Buesr Ayres, 1817, pp 1-858 3, 6-9-1817, p, 183194, 29-1817. pp. 25.2. Sein D. Galvin Moreno, el auror deste peri fue Joe Flicino Cats (Gazviss Mo ino C. El peredions agening, Anpl y Dncumevade Hiara Dede sa Orgees Hare Preente, Buenos Air, Editorial Qhsidad, 1944, p. 68). {6531 Dialego entre un americana del norte yun ciudadeno de las Provinia- Unidas de lay Provincia Unda SudAérica sore oie publindo en Balimore por les proriptos Apel, Mornay Pas, Bacto Ares, Impreats dela Independencia 1818, p05. (64f Cara de Pugs, adel, 3-7-1817, Dumont del Museo Mire. Al 18.2639 y Dialog entre tn americans del note cindadane de las Provincia Unita, Bence ‘Airs, Lnpeena del Independencia 3. LOS DESTERRADOS DE LA REPUBLICA + 79 Filadelfia del Sud», En las nuevas repiblicas que buscaban constituirse 1 través de constituciones que quedarian supeditadas ala dinémica de la ‘guerra, América del Norte también constituia un modelo de federacién, tun concepto que planteaba equivocos porque los mismos revolucionatios concebian a los Estados Unidos como una confederaciin, omitiendo los debates entre federalistas y anti-ederalistas sobre la constitucién yy su ratificacidn'. Una vez instalados, los expatriados manifestaian la sorpresa que les provocaba aquel pais admirado: ehay buques muy grandes, sin palos ni velas que solamente el Fuego los hace caminae [..]+ otros hay que caminan con caballos, por maquinas que no puedo expli- cirtelas, ¢s cosa muy osada y hermosa, principalmente para nosotros {que hemos sido criados en la obscuridad., escribia Pagola en una cara, sorprendiéndose ademas de «la maquina que da agua a toda a ciudad» Luego de la restauracién mondrquica, Estados Unidos representa tuna experiencia de «internacionalismo» 0 «cosmopolitismo® republi cano. Varios de los principales tebricos y actores de las revoluciones hispanoamericanas como el neogranadino nacido en Espafa Manuel ‘Torres, los venezolanos Juan Germén Roscio y Pedro Gual, el cubano José Alvarez de Toledo, el mexicano Servando Teresa de Mier, 9 el navarro Francisco Xavier Mina, se instalarian en Baltimore y Filadelfia. Desde estas ciudades, centros para el abastecimiento clandestino de arma- ‘mentos y buques, se proyectarian expediciones y planes de gobierno en dlfensa de la independencia americana y conira el dominio expat, sostenidos por un dispositivo de publicaciones impresas por exiliados (65 I Independiente del Sud. Pari Pac, Literary Mercantil 8 3, 18-4 18 (6 Véae, Cunt, Carole Ll « Delos muchos, une: El ederaemo ene espacio iberoamericano , en Javier Funinuz Seaasuin (ie), Dicomario polis ysl ‘dl mundo ibesamerians. La er de lt rslucoes, 1750-1850 (econo, Madrid, Centro de Estudios Pollicos y Consieuconales, 2009, pp. 425-450, Replies y Federalism en Anssica del utente Ia Monazgula hispinicey ls rvluciones de Independencia» en Antonino Dr FRANCtsCo, Ligh Mascnat Mictzons, Raffele Nocera (cose), Ene Meditorineay Asin CGeuacones, cmesioney mired, 1756-186", Satago de Chile, Fonds de Cau Eeandmiea 2014, pp. 363-392, (671 Care de Pago, Fadel 12-6-1817, Document dl Maceo Mitre, AL n° 2056, (68 Soma Ja Las, Engradas Epa yo el itermaconal, 1814-1834, Madd, Cento de Estudios Palins y Consttucionsls, 2012; Moncey Vanesa, « Les vagabonds de la épublique : es tvalitonnaire européens aux Amie, 1780- 1820 », en Federiea Monstas, Clement Thmatio & Genesitve Vexbo (ie) Let Empires aoniques des Lames an Brie (1765-1865), Rennes, Presses Univer- ‘sates de Rennes, 2009 80 + GaunieL eNTIN hispano-americanos en Norteamérica que citcularfan por todo continente®. Baltimore, situada en el estado de Maryland, era una ciudad mayoritariamente catdlica (sede del primer obispado en Estados Unidos) que por sus astilleros y ubicacién geografica (cerca de Washingtoa y ‘sobre la salid2 2 le Baia Chesapeake con acceso a rios interiores), se habia consolidado como el principal puerto de venta de mercaderias y reaprovisionamiento de barcos corsarios. Varios de ellos actuaban con patentes otorgadas por los gobiernos de Buenos Ales y de la Provincia Oriental, concebidas como un «instrumento legitimo de guetray ‘contra Espatia y Portugal (en el caso de la Provincia Oriental)”, Ante la invasién portuguesa, Artigas concrofaba una minima parte del trritorio de la Banda Oriental y desde su campamento en Purificacién, sobre 1 Rio Uruguay, otorgaria entre 1816 y 1820 patentes de corso con el objetivo de obstaculizar el cometcio maritimo de Portugal”. Desde enconces, emprendedores de Buenos Aires se asocatian a empresatios navales norteamericanos para equipar los cors0s, que se construrian © reacondicionarian principalmente en los puertas de la costa este de Exados Unidos, como por ejemplo, la goleta Congress, fabricada en Baltimore. En aquella ciudad, Pagola informaba que en julio de 1817 hhabian Megado tres corsarios «con la bandera de la patria de Buenos Ales y que su comandante planeaba seguir +azotando a los godos”». Como explica Lauren Benton, la actividad de los corsaios se relaciona con la reconfiguracién de la soberania en Hispanoamérica y con el reconocimiento legal de las repablicas recientemente creadas al depender de autoridades soberanas, los corsarios wanunciaban la cexistencia de las nuevas entidades politicas» y promovian su integracién cen el régimen legal atlintico. A diferencia de los piratas, el corso 4quedaba amparado por ls leyes det Estado que ororgaba la patente y en el derecho maritimo de guerra basado en el ins gercium, que seria {69/ Hex Monica, « Les premites publications evoluionnates ds xis hspano- amen aux Etat Unie Temestentica (En line, julio de 2006, URL + bell teansantin eres ong LNG. 70! Bestow Lauren,» Uns soberanis extra: Ia Provincia Orlenal en ol mun do alintico os en 20/10. El mundo ality y de maderidadiberamercand 0° 1 noviembre 2012 p. 106 71 fbi, y Beeaza Agustin, Las conaros de Artigen, Montoro, Cento de Ee dios Histticos Naval y Maines, 1973. 721 Carta de Pago iladla 1-7-1817, Document del Museo Mit, AL x0 2096, 731 Bercton, op. ct pp. 89-107 LOS DESTERRADOS DE LA REPUBLICA + BI administrado por las cortes de presa, creadas para dirimir conflictos ssurgidos de las capruras”. Por un lado, el corso arruinaba el comercio de Espafia y de Portugal. Por otto lado, bajo el amparo de las patentes sudamericanas, comerciaban por su propia iniciativa con los bienes incautados, evitando segiin su conveniencia las cortes de presa. «Que dolor paisano que la bandera de nuestra pobre y desgraciada patria estésitviendo de refugio a las naciones, y de alcahueta a los extranjeros para que roben, asesinen y hagan un corso como unos Piratas, pot los malditos procedimientos del Gobiemo», afirmaba Pagola sobre el corso {que habia visto en Baltimore. «Es una vergtienza, no podemos decir que somos de Buenos Aires», se quejaba”™. Delos ocho revolucionarios exiliades en Estados Unidos, la mayoria intentard regresar répidamente al Rio de la Plata. En sus caras, Pagola se mostraba impaciente: «yo me irfa en cualquier buque, pero resulta ‘que tendria que andar 0 vivir escondido», escribié en julio de 1817 desde Filadelfia advirtiendo que si en ocho meses no hubiese un cambio, volveria disfrazado «de marinero o gaucho”*». En noviembre le sefilaba 4 su. amigo, el militar José Rondeau: «no espero sino un buque que me Hleve con seguridad a desembarcarme en la Colonia (Del Sacramento) ‘6 en otro cualgaier puerto de la costa». El coronel ~ que permanecia ‘en Baltimore junto a Dorrego ~ continuaba: «venga primero la misma muerte para no vivir desesperado” », En su cortespondencia — triplicada por los temores a que el gobierno la interceptara ~ Pagola demandaria dinero a su familia, amigos y amante para fetar un buque y enviar tablazén de pino al Rio de la Plata: « Este es un pais libre y dentro de 741 Vow Gaarunsrens Gans Johann, « Pasina y pista en un rettrio en Aispara, 1810-1819 = Revise Elena Thorthie, ao Ul, n° 1, enero-mairo 2000, E18 de novembre de 1816, Pueyriedn decree velamenco de concesion de patents de corso conta cualquier embaraciin de bandera paso. Los ep lantes dl coo ~fueran 0 a0 extanjeros~ ge convertian de hecho en cindadanos smercanos del Rio del Plata. Por los bienescapeuadom sl cone dis tbutar an porcentsje l Fado, Ea cao de que se tatase de armaments cl gobierno oben tina opctin de compra con un descento del 10. Sa rata de exclu spot para le gueva(hombses de 12a 40 afos inclusive), on debian ser enviados los puertos dl fo de fa Pata a cambio de 50 pesos que papas el gobierno por cada tino de ellos (el resto de los eapeurados no podiian ser vendidas como exclave ‘Vee « Reglament del cone» Buenos Altes 1811-1816, en Gaeta de Buenos Aires, 0° 82, 23-11-1816, pp 688-689 751 Cara de Pago, lala, 3-7-1817, Docimeno del Meo Mire, At 2099, 761 Cara de Pals, Fildes 126-1817, Douce del Mua te, AL 2096 771 Cara de Pago, Baltimore, 20-11-1817, Documents del Mio Mine, AL 1° 2100, 82 + GaBnIes ENTIN un par de afios empezando con un principatito corto, haria un caudal También se quejaria por no recibir cartas de ellos. Finalmente Pagols regresarig al Rio de la Plata en abril de 1818 junto a Chiclana, French y Agrelo”. Valdencgro murié en 1818 en Filadelfia por una caida en Jax nieve que agudizaria «una antigua afeccién pulmonar», segin informaba Moreno”. Dorrego tetorné a Buenos Aires en 1820, fuego de la caida del Directorio de Pueyrredén, e 1819. Manuel Moreno y Vicente Pazos Kanki prolongacian sus estancias, Moreno escribia a su madre, con quien mantendria una cortes- pondencia periddica e intima durante su estancia en Estados Unidos: «Ala distancia en que me encuentro, sin relaciones y sin negocios como verdadero desterrado, estoy siempre midiendo los instantes. contando los barcos y calculando los vientos para recibir nuevas de usted» El abogado habia recién llegado a Bakimore y, para financiarse, demandarta a Fray Cayetano Rodriguez «dos patentes de corso en blanco" Iniciaimente, Moreno buscar regresat al Rio de la Plata : en febrero de 1818 pagé un pasaje en el bergantin inglés Deverson pero desist porque en el mismo navio se embarcaban Chiclana y Pagola : «se podia sospechar que habia agin complot 0 proyecto, pues nos prendieron juntos, cuando ni entoneces ni antes he cenido relacign alguna con estos sujetos»,explicaba en sus eartas®. Finalmente, permanecerfa cinco afios, en Estados Unidos. ‘Su inglés y su experiencia como enviado diplomético en Londres le sievieron a Moreno para posicionarse entre los ciudadanos de Baltimore: «Mi espitcu etd mis sosegado, pues todo calma con el siempo; aqut sgozo de muchas estimaciones; soy querido y favorecido de exttanjeros, cuando he sido perseguide y maltratado por mis paisanos», sefalaba cn diciembre de 1818". También se contaeté con los miembros. de {a comisién estadounidense al Rio de la Plata que patid, en la goleta 781 Pape aparcceeinconporad 3a its dt tito en date de corone de inf teria de ines 20 e gon ce 1619 y asia ala batalla de Cepeda cl | de bC0 1861820 (Paro, op. p- 19) 791 Cad en Qua ps P85. 0) Thi, p82. «La cares me parece conta una conversaciin pecan», conesaba (bid. p 86) Las eas inkas de Manuel Moseno asu madre foeron patcalmente "ansctipas por Marcial 1. Qultoga quien, eg informa el aor arabeuvo en el schivo de un descendent, Manvel Moreno Olsihat. 81 Bid, p. 82. 821 Bid. 84 851 bid, 8. LOS DESTERRADOS DE LA REPUBLICA + 83

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