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ISRAEL 1948-1998 Simon Peres EL OCASO DE UN PADRE DE LA PATRIA Texto: M. A, BASTENIER Su vida, su destino, su pasién, es Israel. Con 11 afios Ilego a Pales- tina dejando Polonia atras. Era 1934. Con 21 ocupo su primer car- «tds ls hombres de Estado de al el dcano-muy Diss deen saver dadero filésofo-rey aunque hoy sin corona-, es Simén Pe tes, Nacido Peretsky en la Polonia emanada de la I Guerra, funda- dor del Estado, dseipulo predilecto del padre de todos aquellos 4gue hoy se aman israeles ~Ben Gi ‘pero con algo de amargura, en este aniversario del primer medio si plo del Estado hebreo. Hay otofo, pero se niega a ser patriarca Peres, tan s6lo diputado laborista en la Kneset, ex primer mi nist y en repetidasocasiones titular de Defensa y Exteriores s un “optimista no retérico”, como se define él, un tanto sombrio, como lo encuentro yo, en excelente forma fisica de color bronce soleado, como lo perciben todos, que a los 74 aftos se dria que acarcia la idea, pese a sus insistentes protestas en contrat, de que aiin no ha jon-, mira hacia ats sin ira, go. Ya nunca abandonaria la politica. Durante décadas fue ministro. Vivid y dirigid cinco guerras. Hoy, el viejo politico apuesta fuerte por vivir en paz. dicho la tltima palabra sobre la gobemacién del Estado de Israel Al fin y al cabo sélo tiene la edad de Paul Newman. Con el actual primer ministro, el nacionalderechista Benjamin Netanyahu, “Israel ha perdido su lugar en el mando cuando mis falta hacia defenderlo, Dos cosas basicas han cambiado. La prime- ra es que hemos ganado todas las gueras, por lo que la guerra ya no define nuestzas vidas y la prioridad ahora es pensar la paz. La se- gunda es que ya no hay Unin Sovitica que respalde alos drabes, y en el mundo lo que cuenta ya no son las armas, sino la ciencia y Ia tecnologia, con lo que ya no tiene ningin sentido hablar de pro- fandidad estratégica. El terrorismo, que es lo tinico que nos ame- raza, no entiende de profundidades estratéxica. Eso son los misi- les, y ya no hay misles que apunten a Israel’ Netanyahu “es un hombre del pasado, como tantos otros israe- lies, incluso laborisas, que estinciegos y sordos alo que nos rodea, porque el futuro seré siempre el tertorio ce una minorfa, mientras aque el pasado lo es de la mayoria. La gente prefireresdiren el re ‘cucrdo a pensar el futuro. Y yo no tengo ningin respeto por el pa- sado, ni por la historia antigua”. Reivindica la iniciativa del acuerdo con el pueblo palestin: “Pusimos el primer huevo de la paz. Corrimos el riesgo de hablar con Arafat; de legitimar a la OLP como interlocutor, de darle una ‘Administacin; un teritorio, Jered y Gaza, y una polica”. Ni una ‘vez nombra a Isaac Rabin, el primer ministro asesinado al que su- suraba al oldo la tentadora oferta de pasar la historia Un Estado palestino independiente? Aunque jamés se lo habia cdo nadie decit en piblico, Peres afirma ahora que ya habia acon- sejado a Arafat hace dos afios que proclamara la independencia, Porque “para seguir siendo un Estado judo, nosotros necesitamos tun Estado palestino junto al nuestro; si no, nos convertriamos en tun Estado binacional. La eleccidn es bien sencilla: 0 un Estado para cada uno o uno de nadie, porque no hay forma de separarterito- rialmente a los dos pueblos. Si Netanyahu dice que él puede ha- cerlo, sth contando cuentos. Los palestinos s6lo nos proporcio- narda. una seguridad completa cuando les demos un Estado com- pleto”. &¥ dénde queda Jerusalén en ese ateglo? Peres no reconoce rectficaciones de si mismo, ni adaptaciones progresivas a la historia. En esta quinta vez en que hablamos desde 1986, asegura recordar lo que dijo hace mis de una década en su despicho de primer ministo, y hoy repite que no es cierto que se haya convencido en estos dos afos que lleva alejado del poder de la necesidad de reconocer la independencia de ese Estado, sino que ya entonces proponia'“a formacién de una entidad politica pales tina, slo que federada éon Jordania. Eso no pudo ser en aquel mo- ‘mento por una serie de razones, y ahora los palestinos ni quieren ‘oirhablar de ello. Por e0 estoy totalmente a favor de un Estado pa- lestino independiente”. Sobre Jerusalén, veremos Es vox pipulen los temitorios ocupados que el presidente Ara- fat piensa proclamar sv Estado en mayo del ao préximo, cuando ‘ya deberia haber concluido la retirada de Ise, si, como es previsi- ble, no ha habido progresos en la negociacién con el Gobierno sio- risa. Pero Arafat parece hoy agotado, acosado:por un mal sin de- nominacin de origen, responsable de una pésima gestién econd- ica y politica, y, aparentemente, entregado a que un Clinton lesa- ue, inverosimil, las castafas del fuego. 1948-1998 "problema de Ar gp a kar dew serait» kien poh Rola k coeaata hemes aaa cién, sino la de que no gobiema, sino que dirige a un pueblo. No se fije tanto en su fragilidad fisica. El labio siempre le ha temblado. Y sigue send el mayor lider que ha edo ac plsina. Yo fe profeso una enorme admiracin y respeto personales". rs empha habla eon igor de quien pace que Fen wlatdaart ie apeaenien as ar es poke op ae ian de pega ps he etc pg dc so brota mas del sistema digestivo que de la memoria. No piensa. ibe Cuande legs el ecase “ano lesobs tempo irae pra quedar bien, aunque no parces que eo hen tnporbdo gun com ancient, “Cuando Europa tenga un ejército para meter en cintura a Sadam Hosein qe mes Te puerta Pore momento, su pape slo pur ASserel de nani levfaestoctua palestine Europa tiene que oglnr ee courant ux elem gps wea hoe ps Bie tha el sdemin de ona tooporunded La primera quale a sentar las bases de ese Esta- “ do. La segunda se agota en Netanyahu sc prea de manor pe pen aca es, como Hiiy ina Giga inquisay TO econoca ene gt Hat otros israelies, 78 2 ses un hombre ‘esa del Minisode Be fensa mis joven que pudiera balla, tan adecuadamente preparado, en el pais. Hoy se ‘mueve animado por la sereni- dad de una misién que, a to das luces, considera no siem- del pasado, ciego a lo que nos rodea” pre compendia. pee que ofc ad cuando Rabin y Peres formaban la pareja mejor conjuntada de r- vales que haya conocido Oriente Préximo era ala vez una conce- sién, una tampa y una apuesta. Concesién de teritori al pales no trampa para regular un acuerdo fina, ajustindolo a las con ciones més duras que parecieran aceptables para el oie, y apuesta de que, pese a ello, se estuviera faguando una paz para los sglos. Pero hoy contempla Peres, seguramente satisfecho, todo lo co- rrido desde 1948; entonces, Ben Gurion no habia tenido mas re- ‘medio que aceptar un Israel de apenas 15.000 kilémetros cuadra- dos; ahora, en cambio, sucesivas guerras, hasta cinco, permiten discuticpalmo a palmo la ttularidad de Cisjordania y Gaza y, al menos, callar sobre la Jerusalén drabe. Lo que se argumenta no es yaa continuidad del Estado de Israel, sino cuénto derecho pales- tino y no judio hay a un territorio que le arebataron al pueblo guersller por la fuerza. Desde esa atalaya, con la adusta manera que le es propia, Peres blande una generosidad no ilimitada. Cae la tarde sobre Jerusalén Una vida al servicio de una causa. Si, inicamente, Israel todavia comprendiera. 0

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