QUE ES EL EVANGELIO
25/07/95
INTRODUCCION:
"Más si aún nosotros, o un ángel del cielo, os anunciare
otro evangelio diferente del que os hemos anunciado, sea
anatema" (Gálatas 1:6-9)
¿Será el Evangelio una cultura heredada? ¿Una serie de
prácticas?: "Aprender a aprender"? ¿O será un cambio
interior? Acordémonos que el que escribió la carta a los
Gálatas, era un fariseo (Pablo), que estaba acostumbrado a
aprender a que lo obligaran a vivir una vida, que según los
maestros que tuviera, era de tal o cual manera. O sea que él
estaba acostumbrado a que le dijeran que tenía qué hacer y
qué no tenía que hacer (ese era el fariseísmo), le decían:
"Hay que circuncidarse, hay que guardar el sábado, hay que
hacer estas cosas, hay que hacer estas otras"; entonces vivía
él en ese desasosiego. Pablo creía (por las lecturas de su
vida en las epístolas) que era un fariseo perfecto
"Circuncidado al octavo día, del linaje de Israel, de la
tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la ley
fariseo" (Filipenses 3:4-6); cumplía lo que él creía que tenía
que cumplir y les decía: "En cuanto a la justicia que es en
la ley, irreprensible", sin embargo, no estaba tranquilo, tenía
un vacío; y él llegó a entender en el camino de Damasco, que
el vacío se lo llenó la revelación interior de Jesucristo.
DESARROLLO:
Los otros apóstoles tuvieron la revelación exterior de Jesús;
ellos vieron a Jesús, platicaron, durmieron, y vivieron con El;
pero Pablo ni lo conoció así, sino que él tuvo una revelación
adentro (aparte que lo vio), por eso dice: "Pero cuando
agradó a Dios, que me apartó desde el vientre de mi
madre, y me llamó por su gracia, revelar a su Hijo en mí,
para que yo le predicase entre los gentiles" (Gal. 1:15-16).
Entonces el evangelio no es una cultura aprendida, es una
revelación de una vida interior, para predicarla a los que están
afuera. ¿Entonces esa manera de vivir, será a base de
preceptos? Será que le van a decir a uno (como hace la
sociedad): "No escupir en el suelo", "No fumar aquí" etc.
(aunque en algo lo cogen a uno). ¿Será eso? No es eso!.
Entonces Pablo venía de un mundo lleno de órdenes, porque
cuando se encuentra en el camino de Damasco tirado y le
dice al Señor: ¿Quién eres Señor? y le contesta: "Yo soy
Jesús a quien tu persigues, dura cosa te es dar coces
contra el aguijón", luego Pablo le pregunta: "Señor que
quieres que yo haga?" (Hechos 9:4-6). Si él sabía lo que
tenía que hacer en la ley! ¿Qué está diciendo? "Entonces
quiere decir que ahora tengo que hacer otra cosa?" "No será
Señor que ahora ya no vale lo que yo sabía?" "No, no vale,
échalo a la basura!, y le dice el Señor: "Levántate y entra en
la ciudad, y se te dirá lo que debes hacer" (Hechos 9:6).
Notemos que si no entendemos ésto aquí, no lo vamos a
entender nunca.
La revelación de Jesucristo adentro de uno, tiene que darle
las instrucciones; o sería otro paquete a aprender nada más,
porque si aprendimos ésto, no nos sirvió, y luego aprendemos
otra cosa a ver si nos sirve (ésto no sería cambio). El cambió
radicó en lo que se le dijo a Pablo: "Se te dirá que hacer"
(ésto fue lo que extasió a Pablo). ¿Entonces vamos a tener a
alguien que nos va a ir diciendo y nos va a ir dictando de
adentro? ¿Pero cómo? Pues nos debemos ir a Damasco
(hablando espiritualmente) y vamos a empezar en que va a
llegar un Ananías a imponernos las manos. Y entonces va a
venir la plenitud del Espíritu Santo sobre tí y en tí. Eso ya no
es la ley. La ley desapareció, porque en la ley nunca nadie
recibió al Espíritu Santo (esa es una novedad para Pablo);
con razón se admira que Ananías llegue a imponerle manos.
Lo interesante es que en el aoristo (verbo griego), no es: "Se
te dirá lo que tienes que hacer", sino que es: "Se te irá
diciendo". Pablo pidió todo el programa de una vez, porque
le dice al Señor: "¿Qué quieres que yo haga?" Estaba
temblando y estaba ciego y asustado y diciendo que iba a
hacer, pero lo envían a Damasco para darle instrucciones
porque ahora tenía otro "jefe" (pero lo tiene adentro). Eso
rompe con la imposición de normas.
No se pueden juntar dos pactos a la vez, o es el Sinaí, o el
Monte Sión; pero si juntamos los dos, sería como decir:
"Obliguénme, pero no me obliguen a cumplir"; o sería como
decir: "Perdónenme, pero fusílenme"; sería como decir
también: "Pagaron, pero tengo que pagar". Le dice el Señor a
Pablo cuando le da las revelaciones: "Ya pagué por tí Pablo"
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Pablo estaba acostumbrado a pagar, porque él era ley y era
bien entendido (sabio en la ley) y ahora tenía que servirle
voluntariamente, o sea que ni el servicio es obligado ahora.
Esa es la pura gracia. Entonces queda claro, que por la ley
(por las prácticas legales), nadie se va a justificar. La razón
básica es que nadie las va a cumplir. Entonces sería que al
final uno ya sabe que va a perder el examen, pero entra. Por
eso el Señor le dijo a Pablo "Si vas a infringir uno de los diez
mandamientos, lo infringes todo". Por eso dijo Pablo: Y otra
vez testifico a todo hombre que se circuncida, que está
obligado a guardar toda la ley" (Gal. 5:3); entonces de que
le sirvió la circuncisión! Nota: Estoy tratando de imprimir con
Pablo la inutilidad de la Ley externa. Porque podemos poner
a toda nuestra familia y a uno mismo, a recitar todo lo del
decálogo y solo nos estamos acusando! Porque creemos
que el Señor aún en la ley les dice: "Y estas palabras que
yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón. Y las atarás
como una señal en tu mano, y estarán como frontales
entre tus ojos, y las escribirás en los postes de tu casa, y
en tus puertas" (Deut. 6:6-9). ¿Por qué no dijo "Metánseles
por la boca o por los oídos, por los ojos"? No les dijo así!
Sino que se los dijo para que sean enseñados; porque ellos
necesitaban ser señalados (la Ley señala), pero no tiene uno
la fuerza para cumplirla.
Bueno, ¿De qué te sirve la ley? ¿De qué te sirven los
rótulos? Te sirven para acusarte, y mientras mas rótulos
pongas, más te acusas. Por eso Pablo decía: "Porque yo
por la ley soy muerto para la ley, a fin de vivir para Dios"
(Gal. 2:19); no que la ley sea mala, pero la ley tiene el papel
únicamente de conducir, no se enseña a cumplir. Cuando el
Señor dijo (la nueva ley, la del Espíritu): "Vayan por todo el
mundo y enseñen a guardar", “No obliguen a guardar";
porque entonces se traen otra ley. Y entonces la gente que
no puede cumplirla de nuevo (sólo órdenes externas);
esconde sus fallas. Cuando una Iglesia es legalista, sólo está
fabricando fariseos, porque antes no había una ley normativa
(se pecaba por ignorancia o por necedad, pero no se notaba).
Pero estando ya la ley puesta, se notan las faltas. Entonces
aquel que dice " Ya fallé en esto", lo esconde y sigue
victorioso (canta y hasta danza). Es una regresión fatal
querer volver a las leyes, en donde haya legalismo, hay fallas.
Porque cuando me mostraron el Apocalipsis, me dijeron: "Los
dos últimos enemigos que vas a tener en el camino, van a
ser: El legalismo y el ecumenismo".
Ahora, definamos en que consiste el legalismo y el
ecumenismo: Los dos son de la misma naturaleza, porque el
uno lleva al otro y el otro lleva al uno. El legalismo es:
humanismo y el humanismo es: “Culto a la personalidad” y el
culto a la personalidad es idolatría y la idolatría es la peor
ofensa a Dios. ¿Que es legalismo? "Legalismo es querer
pagar nosotros las cuentas por nosotros mismos" y que
Dios nos diga: "Te ganaste el cielo, pasa adelante". Pero
todo el que va a llegar para entrar en el reino eterno, va a
llegar pensando que no lo merece y no va a llegar arrogante,
sino va a llegar como el hijo pródigo. Porque él no pidió
"Hazme hijo", sino le dijo a su padre: "Hazme jornalero":
Lucas 15:19 Ya no soy digno de ser llamado tu hijo;
hazme como a uno de tus jornaleros. Pero, por supuesto,
que no lo dejó de jornalero, lo vistió mejor que antes, porque
si en alguna parte no hubo Legalismo, fue allí. O sea que
salvar al hombre, no es un sistema de prácticas legalistas (de
imponer). Por eso no es bueno cuando la gente está
obligando a otra, en el vestir, en el hablar, en el vivir; porque
el mismo que está obligando al otro, tampoco lo hace. Por
eso, les dice el Señor a los fariseos: "Porque atan cargas
pesadas y difíciles de llevar, y las ponen sobre los
hombros de los hombres; pero ellos ni con un dedo
quieren moverlas." (Mateo 23:4), y ni siquiera se acercan
para dar una ayuda. Quiere decir que el legalista, no es nada
más, que un capataz que quiere que cumplan los demás,
pero él no cumple.
El evangelio no puede ser una lista de cosas que hacer, y
cosas que no hacer. Por ejemplo: ¿El evangelio será la
manera de vestirse? no y sí. No que no hay un patrón de
vestimenta, entonces no puede decirle a fulano o fulanita:
"Vístase así, porque esa es la vestidura del santo". Porque
¿Cómo será la vestidura de santa en Africa? ¿Y cómo es la
vestidura de santa en Israel o aquí en el occidente? No hay
patrón, ni tampoco figurín; el parámetro sería: "Decencia", o
sea honestidad y no ostentación (son los únicos parámetros
del Nuevo Testamento). ¿Qué es la ostentación? Es muy
relativa (depende), porque usted puede con un vestido
sencillo que no puede comprar en la Limonada (nombre de un
lugar pobre), llegar a la Limonada y ser ostentoso, pero con
un vestido ostentoso aquí, llega a París, allá no es ostentoso;
pero viene aquí y sí es ostentoso: 1 Timoteo 2:9 Asimismo
también las mujeres, ataviándose en hábito honesto, con
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vergüenza y modestia; no con cabellos encrespados, u
oro, o perlas, o vestidos costosos. Entonces es relativo.
Veamos como se vistió Jesús cuando vino a la tierra: Igual
que todos. Porque hay un detalle que me da la pauta, cuando
dice que Judas tuvo que besarlo para identificarlo, porque le
dijeron : ¿Cómo vamos a hacer para identificarlo? Y Judas
les dijo : "Al que yo besare, ése es; prendedle" (Mateo
26:48)".