EL TERRENO COMO CONDICIONANTE DE LA SEGURIDAD EN LA PRESA 1, CONSIDERACIONES PREVIAS El terreno que, en general, es un condicionante para la elecucién de todo tipo de obras cobra una importancia singular en el caso de las presas. Y ello es asi porque incide de forma decisiva en dos aspectos fundamentates: la seguridad y a economia de ia obra. De las estadisticas sobre tas causas que hari determi: nado’ la rotura de las presas, se deduce que una elevada proporcién de los desastres registrados procede de fallos del terreno. En cuanto al aspecto econémico puede afirmarse que ‘et no conocer suficientemente les caracteristicas del te- treno puede provocar retrasos importantes en la ejecucién de la obra o dar lugar a cambios sustanciales en el pro- yeeto inicial. Todo ello, como es natural, daré como re- sultado un aumento considerable en el costo final de ta obra, La infiuencia relativa del terreno sobre la seguridad de las presas creemos que aumentara notablemente por las siguientes causas: a) Porque hasta la fecha se han utilizado, en general los emplazamientos més favorables desde un punto de vis~ ta geotécnico. b) Porque, tanto en la técnica de fabricacion y puesta fen obra de hormigones como en la construccién de pre- sas de materiales eueltos, se ha avanzado de forma ex- traordinaria, Actualmente los métodos para seleccién de materiales, fabricacién, compactacién, control de calidad, etcétera estan Io suficientemente avanzados como para afirmar que los cierres artficiales (es decir, las. presas) olrecen garantia suficiente, Nos encontramos, por consiguiente, ante Ia situacion de tener que utiizar emplazamientos de peores caracte- risticas geotécnicas y con unos avances técnicos que nos ofrecen una elevada garantia sobre las caracteristicas ‘de (a obra artificial. Es indudable que ello requlere_una reconsideractén constante de Ios conceptos que nos permitan tener of me- jor conocimiento sobre el comportamianto previsible del terreno, Debe, por otra parte, admitirse que las Investigaciones del terreno por muy importantes que sean nunca permi- tirén conocer sus caracteristicas de forma tan completa ‘come en el caso de una obra artifical MAYO 1970 br. ng. €.¢.?. M, GOMEZ DE PABLOS 2, LOS EMBALSES Greemos que los embalses constituyen pieza funda- mental en el desarrollo de la politica hidraulica de un pais, y su importancia es mayor, si cabe, en Espana de- bido al régimen enormemente irregular de nuestros ios, Es bien sabide que un embalse est& constituldo por la cerrada y el vaso ‘Al considerar el conjunto cerrada-vaso hay que tener en cuenta los condicionantes debidos al terreno. Estos pueden agruparse en tres aspectos fundamentales: — Resistencia. — Estabilidad — Permeabilidad. Respecto al primero, es necesario conocer las cargas de hundimiento del terreno o aquelias que sobrepasadas producen la desorganizacién total de la estructura y que Vienen prefiguradas, en forma genersl, por la naturaleza del terreno y su distribucién en profundidad. Intimamente ligado con este aspecto estan los médulos de deformacion. del terreno que deben imponer unos asientos cuya com- paatibilidad con la estructura hay que exeminar detenida- mente, También en relacién con este tema de la resisten- la deben considersrse todos aquellos accidentes del-te- reno. actives © no, cuyas Capacidades resistentes pueden venir afectadas por el tipo de la estructura e incluso acti- varse-con el agua embalsada, Por lo-que se reliere a la estebilidad hay que consi- ‘derar que, en general, la presa ha de embutirse en las lox deras, en valles que las sobropasan, Los movimientos de estos valles producidos bien naturslmente © como conse- cuencia de la carga general impuesta en la zona al crear- se el embalse pueden provocar deslizamientos, tanto en la zona cercana a la presa como en el vaso dando lugar ‘2 corrlmiontas de laderas que incluso pueden provocar ‘perturbaciones muy importantes. Recuérdese a este res- ‘pecto lo ocurrido en la presa de Vajont. No debe olvidarse tampoco a este respecto el proceso, erosivo que con’el paso dol tiempo sufre cualquier zona afectada por obras del hombre y por la propia naturaleza, En cuanto a la permeabilidad es necesario recordar que la presa tiene como funcién fundamental contener y relener el agua para poder regular unos caudales, Por tanto, el terreno debe ser impermeable desde 1a panoré- mica técnico-econémica adoptada. 3773, EL CONOCIMIENTO DEL TERRENO ‘Ala vista de lo expuesto anteriormente, se comprende que es necesarlo tener cada vez un mejor conocimiento de las caracteristicas generales del terreno bajo todos los aspectos que os interesan. Pero no debe quedarse este conocimiento en una serie de consideraciones generales, sino que es preciso des cender @ las particularidades precisas del area de cons- ‘truoclén futura y dar unas conclusiones précticas sobre la Para este mejor conocimiento de las caracteristicas del terreno, es preciso establecer la oportuna sistematica con fa utllizacién de las técnicas necesarias del campo, laboratorio y gabinete, Empezando con una visién de conjunto del problema, remonténdose a una geologia amplia y de tipo regional, ‘es necesario descender al conocimiento preciso y detella- do de los accidentes del terreno que afecten a la zona donde debe emplazarse Ia obra. En la figura siguiente se representa en un cuadro la sistomética que ! Servicio Geolégico de Obras Publicas, de la Direccién General de Obras Hidraulicas, utiliza para ‘estudio geotécnico de un embalse. En dicho cuadro fi- guran, en lineas generales, todas las técnicas auxiliares ecesarias para llevar a cabo un estudio de esta natura~ feza. ESTUDIO GEOTECNICO OE UN EBALSE | eee fae es Seen weasreNcia . 378 REVISTA DE OBRAS PUBLICAS4, EL TERRENO Y LA ESTRUCTURA Debe partirse de la realidad de que el terreno esta en su sitio y tiene unas determinadas caracteristicas. Por consiguiente, la estructura debe ajustarse conveniente- mente a los condicionantes que imponga el terreno en to- da su poblemética, Es decir, en la unidad obracterreno os el terreno el quo determina cémo debe ser la estructura mas adecuada para los fines que se persiguen, Un aspecto a considerar detenidamente es el que se reflere al cocficiente de seguridad de a unidad obra-te- rreno, Es probable que los criterios que empleamos para juzgar sobre |a seguridad de las presas, en particular tas, de fébrica, ne vayan acordes con la realidad ni con el es- tado actual. de los conocimientos. La excesiva importancia concedida a la Mecénica Eldstica en los estudios de Ingenieria de la primera mitad de este siglo, ha determinado una preocupacién por conocer €l estado tensional de las obras, suponiendo que su conti nuidad se mantiene. En consecuencis, una de las precau- ciones para asegurar la establlidad de una presa de {é- brica ha sido exigir que las tonsiones a que se supone solicitado el material no sobrepasen una proporcién redu- cida de su carga de rotura, Frecuentemente, los coeficientes de seguridad que se aplican al hormigén, cuyas caracteristicas pueden contro- large hasta un grado importante, son superiores a los que 88 aceptan para el terreno en gran parte desconocido y desde luego més heterogéneo. Esté no deja de ser para- dojico. En presas de hormigén son frecuentes las gristas que rompen el monolitisma de los bloques sin que ello tenga consecuencias Indeseables para la estabilidad de la presa que, en general, esta cimentada sobre terrenos fractura: dos por litoclasas, cuyas. direcciones no se han podido seleccionar. En las presas de materiales suelios pueden admitirse desplazamientos importantes y discontinuidades sin detri- mento de su seguridad y cumpliendo perfectamente la mi- sion prevista, Pudiera pensarse en revisar el concepto de seguridad de la unidad obra-terreno teniendo en cuenta: ‘a) Los movimientos de la presa y el terreno deben ir acordes con las hipétesis previstas. 1b). La postbilidad de rotura de la presa, en caso de producitse solicitaciones extraordinarias 0 reduccién de las caracteristicas resistentes de los materiales, debe ser muy remota. 5 MAYO 1970 c) Las condiciones de seguridad de ta presa deben referirse no solo a la época de su terminacién, sino que deben mantenerse a lo largo de toda su vida stil, cuidan- do que los gastos de conservacién no sobrepasen un cier- to limite, En patticular, debe buscarse que !a unidad obra-terr ho reparta las cargas en paralelo, es decir, hacer que el Conjunto trabaje como un “cable”, de forma que si falla un elemento los demas puedan absorber su falta, en lugar de hacerlo trabajar como una “cadena”, en cuyo caso la rotura de un elemento acartea la ruina del conjunto. La técnica moderna apunta por esto, cada vez més, et csstablecimiento de modelos geomecénicos para estudiar las deformaciones, incluso hasia rotura. Es evidente también que debe potenciarse al méximo la experiencia y eapacidad intultiva del proyectista. 5. PLANIFICAION EN LOS ESTUDIOS Espafia cuenta actualmente con unas 510 presas cons truidas con unes 35.000 millones de metros cubicos de embalse. Teniendo en cuenta los criterios convencionales de re- Gulacién calculamos que podran construirse ain unas 500 resas que permitirin embalsar otros 90.000 millones de metros cdbicos. De éstas hay actualmente en construccién 80 presas, En las cifras anteriores no hemos tenido en cuenta las posibilidades que pueden abrirse ante nosotros aplicando las técnicas de grandes bombeos. Por lo general, como hemos indicado anteriormente, se han construido las presas en aquellos sitios que pre- sentaban menores problemas geotécnices, por lo que los huevos embalses requieren estudios cada vez més deta- lados. Es necesario que estos estudios fundamentales y ne- ‘cesariamente largos se hagan con antelacién suficiente para que no se produzca el menor retraso en 10s planes del desarrollo hidréutice del futuro. Todo ello obliga @ planificar convenientemente este as- pecto de los estudios. Hay que tener en cuenta, asimismo, que los estudios pueden hacerse.con la anticipacién que se desee, porque al terreno permanece. Por otra parte, su costo es reducido fen comparacién con la inversién de la obra. Consciente de esta situacién, {a Direccién General de Obras Hidréulicas ha encomendado al Servicio Geolégico de Obras Publicas la elaboracién de un Plan Nacional de Reconocimiento de Embalses, que tiene por objetivo co- 379nocer las caracteristicas geotécnicas fundamentales de to- dos los embalses que quedan por construir en nuestra pals. Desde muy antiguo las normas espafolas en materia de presas han concedido una importancia primordial al estudio de las caracteristicas del terreno, Podemos citar 2 este respecto la instruccién para re- dactar Jos proyectos de pantanos promulgada en 1903 por la Comision Central de Trabajos Hidraulicos. En el capitulo Ill de esta Instruccién se abordan los siguientes temas: — Estudio Mineralégico y Geoldgico de tos terrenos del vaso. — Impermeabilidad del vaso, 380 — Sondeos, — Cimiento y empotramiento. Si pensamos que esta Instruccién fue redaptada hace cerca de setenta aos sorprende comprobar la vision que ya entonces se tenia sobre la importancia de ia cimenta- cién de las presas y la problematica que debia abarcar su estudio. En nuestro pais est vigente Ia instruccién para pro- yecto, construccién y explotacién de grandes presas pro- mulgada por la Direccién General de Obras Hidravlicas. En esta Instruccién hay 8 articulos referentes todos ellos @ problemas del terreno y de la cimentacién de la ppresa indicando la forma mas conveniente de estudiarlos y las medidas que deben adoptarse en cada caso y en cada tipo de presa. REVISTA DE OBRAS PUBLICAS