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COMPORTAMIENTO PSICRIOLOGIA “HASITOS Al descifrar los mecanismos neurales que subyacen a nuestros rituales diarios, los investigadores comienzan a comprender el modo en que adquirimos los habitos y por qué nos cuesta tanto desterrarlos Ann M. Graybiel y Kyle S. Smith Alrepetir una conduct, eta 2 aca finds en Sinembarg, loneccrtzaseencrcadsypervier Conocer msjrelfunconanienta de esta estrus reuts expects de bites que imoucan al lhc Simedane se eae tras cerebrales pct contribu desarrolo de ‘esti del cerebo.Talescreutestratanlarutina are del cerebro en ree uevosfrmacos, teri de conduct o simples ‘coma in nia de athe storie rterumpir unhabtoointerleirensufomacin. _trucosque osayudenacontelarnustoshabites, Agosto 201, ImetiaconyCieneaes 17 ie por una ruta habitua ‘A pesar de que los hébitos constituyen una parte importante de nuestra vida, averiguar cOmo el cerebro convierte una nueva condueta en rutina ha entrafiado una enorme dificultad. Sineste eonocinniento, los especialistas lo han tenido complicado a la Jhora de ayudar a las personas a abandonar sus malos habites, ‘yasea mediante tratamiento farmacol6gico o de otto tipo. ‘Las nuevas téenieas estin permitiendo descifrar por fin Ios ‘mecanismos neurales que sc allan en la base de nuestros ritua- Jes. Se han identificadoastl0s lamadbs eieultos de hits esto «5, las regiones cerebrales ylas conexiones responsables de crear ‘y mantener las rutinas. El conocimiento aportado por esta linea ‘de investigacion esta ayudando a comprender emo constraye el cerebro buenos habitos y por qué nos cuesta abendonar no solo, Jos de menor importanela, sino tambien Tos que el méieo 0 Tas, personas queridas nos piden que interrumpamos. Los estudios sugieren que si eondicionamos de forma deliberada nuestro eere> ‘bro, podriamos llegar a controlarlos nabitos, tanto ls positivos, como los negatives, Podemos albergar esta esperanza gracias a tun hallazgo sorprendente: ineluso cuando parece que actuamos de forma automstien, una parte del cerebro esti supervisando rauestra condueta. ZQUE ES UN HABITO? Ls habitos parecen un tipo peeullar de accion, pero desde un punto de vista neurolégico pertenecen al amplio espectro de la ‘eonducia humana, En una parte del espectro hallamos comportamientos que pueden realizarse con el suficiente automatismo como para de- jamos espacio cerebral para otros propésitos. Otros, en cambio, ‘exigen dedicarles tiempo y enersia, Los hibitos se forman de ‘modo esponténeo a medida que exploramos el medio fisico y social y nuestro mundo interno, Ponemos & praeba las con- ductas en situaciones eoneretas, descubrimos cusles parecen, Deneficiosas y no muy costosas, las seleccionamos y pasamos a Integrarlas en nuestra rutina. Este proceso, que comienza en la infancla, viene con una contrapartida, Cuanto més rutinaria se vuelve una conducta, ‘menos conseientes de ella nos volvemos. ZApagué la estufa an- ‘tes de salir de casa? éCerré la puerta? Esta falta de supervision ag solo puede interferir con nuestro funeionamiento diario, tambien puede favorecer Ia apariciOn de malos habits. Muchas personas que han engordado uno o dos kilos en poeo tiempo 16 INVESTIOACIONY CIENCIA asos0 2014 ‘Ann M Grabil es pres del suo de Tex de Macachisers investiga! sau McGovern praal fsudio del Cerebro deese ets le. Sites roisor depsiclegia yYnerocerea els rivers determosh “TODOS LLEVAMOS A CABO UN SORPRENDENTE NEMERO DE RUTINAS. MUCHAS DE ELLAS, COMO CEFILLARNOS LOS DIENTES nos permiten realizar clertas tareas de forma automtica. Bvitamos ast la sobre- sj nos concentraramos en cada pasada del cepillo 0 en los incontables pequefios el rumbo. Otras costumbres, como salir a correr, contribuyen a mantenernos idad golosinas seguramente no nos ayudaré. Y los hébitos que entran en el 61a adicci6n, como la sobreingesta o fumar, pueden poner en riesgo nuestra existencia.. se dan cuenta de repente de que han estado comiendo més, ‘chucherias de lo habitual sin ser consclentes de ello. Esta pérdida gradual en la vigilancia de mvestras acciones ‘también implica que los habitos pueden compartir rasgos comu- ‘nes can las adicciones. Piénsese en los juegos de ordenador, las, _apuestas en la Red o los mensajes electrnicoso tuts constantes, ‘ademas, por supuesto, del consumo excesivo de alcohol u otras,

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