Superado por la imagen de altos vuelos geomtricos, el hombre se
asom por la rendija y constat el jardn. Sinti opresin. Molesto, tom el instrumento y suspir. Comenz a remover la hierba que contrastaba con la imagen. Dos, tres zarpazos, robustos y llenos de energa. El cuarto fue tan violento, que el filo de la hoz perfor el hombro a la mitad. Un hombre que se invalid por su culto al platonismo.