Junio 2010

Internacional

La Comunidad de Cristo produce la edición del HERALDO para uso en clases, lectura personal,
compartir información, testificar y comunicación. Es manera de proveer noticias significantes,
políticas, declaraciones de fe y creencias, y compartir el evangelio con miembros y amigos de la
iglesia que viven por todo el mundo.

EN ESTA EDICION:
• Compartimos una Visión—Stephen M. Veazey
• Vivir la Bendición de la Comunidad—Mareva Arnaud-Tchong
• Sección 164 y Acciones de la Conferencia

“Compartimos una Visión”

Sermón de la Conferencia Mundial 2010
Stephen M. Veazey, Presidente de la Iglesia

¡Vamos a celebrar! La celebración construye una comunidad saludable.

¡Así que vamos a celebrar algunos aniversarios!

Hace veinticinco años las mujeres fueron ordenadas al sacerdocio. Hoy las mujeres
sirven en todas las áreas ministeriales y de liderazgo de la iglesia. Esta divina
revelación logró conmovernos. ¡Sin embargo, respondimos al llamado del
Espíritu! Como resultado, la iglesia en todo el mundo ha sido bendecida con dones ministeriales que de
otro modo se habrían perdido. Estamos creciendo en una expresión de los Principios Duraderos de la
Restauración: “todos son llamados de acuerdo a sus dones”. Si, necesitamos más entendimiento acerca de
dones, llamado y ministerio. ¡Sin embargo, nos dirigimos en dirección correcta!

Hace treinta años los líderes de la iglesia empezaron Alcance Internacional (AI). Empezando con los
esfuerzos en las Filipinas, AI fue creado para reducir la pobreza cruel vista por líderes de la iglesia,
cuando comenzaron a viajar extensamente por todo el mundo. AI se ha convertido en una destacada
organización humanitaria mundial que se especializa en "desarrollo humano participativo." Este enfoque
es una de las maneras más eficaces para crear "sostenimiento duradero" en las comunidades
empobrecidas, evitando la dependencia a largo plazo. ¡Esta noche celebramos con AI-nuestros socios en
la misión-en sus 30 años!

¡Y, eso no es todo! En esta Conferencia Mundial celebramos el 150 aniversario de la conferencia donde
José Smith Tercero aceptó su llamado al liderazgo profético de la iglesia. ¡Un movimiento profético
encuentra un profeta, y un profeta encuentra un movimiento profético!

Tenemos mucho que celebrar! Si la persona de al lado no ha mostrado ningún signo de gratitud, alegría o
celebración, o incluso una sonrisa, en este punto, compruebe a ver si tiene pulso!
Volvamos ahora hacia el futuro: ¿Qué tipo de iglesia Dios quiere que seamos?

Doctrina y Pactos 164 trata de responder este asunto. Para mí, el parrafo cinco llega al corazón. Sobre los
asuntos que tenemos ante nosotros esta semana tal vez se resuelva con éxito si nos abrimos al significado
de estas palabras:

Es imperativo que entiendan que cuando verdaderamente se bautizan en Cristo se vuelven

parte de una nueva creación. Al asumir la vida y mente de Cristo, cada vez más se ven a sí
mismos y a otros desde una perspectiva transformada. Las antiguas maneras de definir a la
gente por posición económica, clase social, sexo o etnicidad ya no son fundamentales. A
través del evangelio de Cristo una nueva comunidad de tolerancia, reconciliación, unidad en la
diversidad y amor está naciendo como una señal visible de la venida del reino de Dios.

Queremos tener derecho a resolver problemas específicos. Pero el Espíritu dice que tenemos que revisar y
dominar los aspectos básicos del discipulado primero! Doctrina y Pactos 164:5 describe la iglesia que nos
convertiremos cuando discernamos acerca del significado del bautismo en Cristo. Se enfatiza en el
Evangelio no sólo acerca de ti y de mí, se trata de nosotros, todos nosotros!-Y cómo podemos vivir en
comunidad si el espíritu de Cristo vive en nosotros plenamente.

¿Realmente entendemos el significado de estas palabras? Cuando bautizados en Cristo abrazamos una
nueva identidad que trasciende todas las otras identidades y lealtades que ya nos definen. Ya no somos
hombres o mujeres primero. No somos esencialmente una determinada clase social o económica. Ya no
somos de una etnia o nacionalidad en primer lugar. Somos, ante todo, "¡uno en Cristo!"

Permítanme decirlo de esta manera. Si son verdaderamente bautizados en Cristo, todo lo que sucede a las
hermanas o hermanos en Cristo-bueno o malo-le sucede a usted y su familia. Nos pasa a mí y mi familia!
Si un terremoto sacude Haití o Chile, no es sólo una noticia de peso, sino que nos está sucediendo a
todos! Si a las personas se les niega la seguridad, los derechos humanos y las oportunidades por razones
de género, edad, nacionalidad, orientación sexual o condición económica, esto nos pasa a mí, a ti y a
nuestros niños. ¡Eso es lo que significa ser uno en Cristo!

Cuando la iglesia se llena de discípulos-en especial las comunidades de discípulos que están viviendo lo
mejor de esta visión en su capacidad, la nueva creación nacida por la cual Cristo dio su vida será cada vez
más visible. La restauración es acerca de cómo recuperar el corazón de la visión cristiana primitiva, la fe,
el testimonio y comunión amorosa. Esa visión de restauración e impulso espiritual se encuentran en el
corazón de lo que significa ser la Comunidad de Cristo.

Nuestras acciones en la Conferencia Mundial de 2010 nos acercan o nos alejan de ser ese tipo de iglesia.
Si nos acercamos, las cuestiones que tenemos ante nosotros, como condiciones de membrecía y
comportamiento moral serán transformadas. Nos acercaran con un nuevo espíritu y perspectiva. Alguien
describió una vez esta transformación:

Una vez que la forma de pensar ... se ha establecido, los viejos problemas se desvanecen, de
hecho se convierten en difíciles de recuperar, los que van con nuestra forma de expresarnos, y si
nos vestimos de una forma nueva de expresión, los viejos problemas se descartan junto con la
ropa vieja.

Como una frase interesante: “…Si nos vestimos de una nueva forma de expresión….” En Gálatas leemos
la verdad expresada más específicamente en el bautismo de Cristo:
 Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Ya no hay
judíos ni griegos; no hay esclavos ni libres; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois
uno en Cristo.
—Gálatas 3:27–29

Tal vez las preguntas difíciles están en nuestra agenda para obligarnos a ir más profundo en nuestra
comprensión de lo que significa ser Comunidad de Cristo “uno en Cristo”. Tal vez el Espíritu nos está
incitando a ir mas allá de lo que pensamos, que los problemas son para discernir lo que realmente
necesitamos explorar.

¿Debería nuestra discusión acerca de condiciones de membresía ser acerca de si protege la “corrección”
doctrinal de nuestra iglesia? ¿O debe ser sobre si nuestros sacramentos hechos en el nombre y el espíritu
de Cristo crean más reconciliación, bendición, y unidad en el mundo? ¿Debería nuestra discusión ser
acerca de si nuestro sacerdocio tiene la única autoridad divina para bautizar a la gente? ¿O debe ser acerca
de cómo el Espíritu Santo está llevando a los cristianos bautizados a tratar de incorporarse a la iglesia y a
lo que eso significa? He experimentado la belleza y el poder de la autoridad de bautismo expresada a
través del sacerdocio de la Comunidad de Cristo en el sacramento del bautismo. También he visto los
frutos evidentes de bautismo en personas que se convirtieron al cristianismo y fueron bautizadas mucho
antes de que se presentaran a la comunidad de Cristo. ¿Puede ser verdad?

No hace mucho visité un señor mayor de Asia, que me contó cómo se enteró de Cristo y de cómo
respondió. Fue bautizado en una piscina en una cueva donde los cristianos se reunion para evitar la
detección. Habló de la persecución que él y otros experimentaron por ser cristianos. Le dijo a su pastor
como fue encarcelado por muchos años, sin embargo, nunca se retracto de su testimonio de Cristo.
Describió como caminaba descalzo por la noche para evitar ser detectado por adorar con otros cristianos.
Al finalizar su testimonio, dijo, "He encontrado en la Comunidad de Cristo la mejor expresión de Jesús
que ya conozco. Quiero ser parte de su iglesia y no sólo un amigo".

El Espíritu me aseguró que su bautismo se había producido por la gracia y la autoridad de Jesucristo.
También me aseguró que la gracia de Dios le había alcanzado en circunstancias únicas de su vida y que su
bautismo debe ser respetado. Tuve esta experiencia en mi corazón mientras seguía estudiando orando por
las condiciones de membresía. Durante varios meses el Espíritu armonizó la unión de la visión bíblica, la
experiencia personal, y el testimonio de la iglesia para dar forma a las palabras de Doctrina y Pactos 164.
Todos los detalles de la política aún no están claros debido a la complejidad en todo el mundo. La iglesia
tendrá todavía una práctica habitual de bautismo por inmersión de las personas con menos 8 años de edad
sin negar o menospreciar las experiencias de bautismo de los demás cristianos. Creo que esta es la
dirección correcta para la iglesia hoy.

Ahora pasemos a otro tema de Doctrina y Pactos 164: el comportamiento moral. La iglesia está luchando
con problemas complejos en muchas naciones. Podemos ver estos temas como grandes problemas. O
podemos recibir mayores bendiciones al tener que luchar con ellos. La manera de recibir la mayor
bendición es preguntar: "¿Qué está tratando de hacer el Espíritu con nosotros?" Tal vez el Espíritu nos
está presionando para que comprendamos mejor cómo usamos las Escrituras. A veces surgen grandes
interrogantes que no encuentran una respuesta fácil para nosotros al ver la insuficiencia de nuestros
puntos de vista y los planteamientos actuales. Algunos maestros, una vez escribieron:

Cuando la gente crece demasiado acomodado en su comprensión de la] Escritura [, surgen nuevos
acontecimientos que llaman a la gente de fe a luchar. Como Jacob, podemos salir cojeando, pero
con una bendición.
Entonces, ¿qué tenemos que aprender sobre las escrituras en este punto de nuestro viaje? Un profesor del
Nuevo Testamento conto la siguiente historia:

José comprometido con María, descubre que ella está embarazada, y sabe que el no es el padre.
¿Qué debe hacer? Corre donde algunos amigos que le dicen, “Haz lo que dice la Biblia”. Bien,
aquí esta lo que le dice la Biblia a José. En Deuteronomio 22: Ella debe ser sacada y apedreada
hasta la muerte delante del pueblo.

José es un hombre bueno y alcanza un lugar que es notable para su epoca. Él ama y conoce su
Biblia ... Pero lee su Biblia a través de un cierto tipo de lente, la lente del carácter y la naturaleza
de Dios que es amoroso y amable. Por lo tanto, dice, "No voy a hacerle daño, no voy a abusar de
ella, a exponerla, avergonzarla, ridiculizarla, o degradar su valor o su dignidad. La voy a proteger.
"¿Dónde dice que, José? En su Biblia? Te diré donde dice eso. Se dice que en la propia naturaleza
y carácter de Dios.

Estoy absolutamente sorprendido de que José es la primera persona en el Nuevo Testamento que
aprendió a leer su Biblia. Al igual que José, vamos a leerlo a través de los espectáculos de la
gracia, la bondad y el amor de Dios. Si en la lectura de la Biblia se encuentra justificación para
abusar, humillar, deshonrar, hacer daño o lastimar, sobre todo si te hace sentir mejor consigo
mismo, está absolutamente equivocado. La Biblia debe leerse a la luz del carácter de Dios.

¿Es eso lo que el Espíritu Santo está tratando de hacer con nosotros? ¿Está el Espíritu tratando de
liberarnos de la cultura religiosa polarizada y secular de nuestros días? La cultura de hoy en día a veces se
aplica a las Escrituras de manera indiscriminada y, literalmente, sin ninguna comprensión de su marco o
en el otro extremo, se descarta la escritura como irrelevante para las cuestiones de hoy. Tal vez el Espíritu
nos empuja a tomar más en serio las Escrituras y aprender a usarla de manera más responsable. Preguntas
difíciles pueden obligarnos a hacerlo. Tal vez, al poner preguntas desconcertantes en nuestro camino, el
Espíritu nos ayuda a ver cómo nuestras propias actitudes de juicios y prejuicios nos impiden ser la
comunidad de Cristo

Jesús habló directamente de esto a todo humano, la tendencia de condenar el “pecado” de otros mientras
excusamos rápidamente nuestras propias faltas cuando afirmo:

No juzguéis, para que no seáis juzgados. Porque con el juicio con juzgáis, seréis juzgados, y con
la medida con que medís, os será medido. ¿Por qué miras la paja que está en el ojo de tu
hermano, y no hechas de ver la viga que esta en tu propio ojo?
—Mateo 7:1–4

Jesús hizo hincapié en que debemos ser muy lento para juzgar a los demás porque nuestros pecados
pueden ser tan grande o mayor.

Tal vez el Espíritu nos desafía con preguntas difíciles, así que llegaremos a ser más dependiente de la
dirección de Dios en lugar de nuestro propio pensamiento y emociones. Tal vez necesitamos humildad.
Para resolver las cuestiones que tenemos ante nosotros tenemos que confiar humildemente más en un
poder superior que en nuestra inteligencia y sentimientos.

Durante mis devociones de mañana, el otro día leí el Salmo 25:9: "Encaminara a los humildes por lo
justo ...." Mientras reflexionaba sobre ese versículo, también leí Doctrina y Pactos 10:06: "Pon tu
confianza en ese Espíritu que induce a hacer el bien; sí, a hacer justicia, a andar humildemente, y a juzgar
con rectitud; y este es mi Espíritu”. Creo que la secuencia de las frases es importante. Tenemos que
aprender a "hacer justicia" y "caminar humildemente" antes de que podamos "juzgar rectamente". Ser
competente en justicia―la bondad de Dios de reconciliar y restablecer la justicia― y la humildad debe
preceder para decidir acerca de cuestiones morales difíciles.

¿Qué está haciendo el Espíritu con nosotros? Tal vez, el Espíritu nos está ayudando a encontrar mejores
maneras de tomar decisiones como una iglesia internacional y a todos los niveles de vida de la iglesia.
Creo que la iglesia está siendo formada para hacer una importante contribución a la sanidad de las
comunidades que están destrozando a las personas debido a los desacuerdos sobre cuestiones morales,
teológicas y políticas. ¿Podría ser que el Espíritu nos empuja a ser una “comunidad ejemplar" para
mostrar cómo hablar civilizadamente acerca de los problemas bochornosos y encontrar resoluciones que
no destruyan a las personas? ¿Es esta la bendición que se encuentra en nuestros intentos de crear unidad
en la diversidad? Puedes escuchar este consejo divino:

Es para fines divinos que se les ha dado la lucha así como también los disfrutes de la diversidad.
Asi tendrá que ser siempre en el reino apacible.
—Doctrinas y Pacto 162:4b

¿Es posible que nuestras luchas relacionadas con la diversidad humana fueran dadas a nosotros para
propósitos divinos? Afortunadamente, la revelación continua ofrece una brújula para navegar por las
corrientes arremolinadas ante nosotros. Las respuestas que buscamos y las bendiciones que necesitamos
se encuentran a medida que avanzamos.

Sorprendentemente, la dirección dada en Doctrina y Pactos 164 es que primero debemos recordar el
significado de nuestro bautismo! ¿Realmente creen que cuando somos bautizados morimos a nuestra
antigua vida y alcanzamos a una nueva vida en Cristo? ¿Creemos que a través del bautismo somos
incorporados al Cuerpo de Cristo, qué es la nueva creación de Dios, una nueva creación que brota y
florece como comunidad sagrada en el que las diferencias humanas se abrazan y la gente se afirman sobre
todo como hijos de Dios? Una vez que aceptamos la visión necesitamos llegar a un consenso sobre el
significado de ciertos principios fundamentales teológicos y espirituales antes de crear políticas más
específicas sobre el comportamiento moral en las diversas culturas de todo el mundo.

El documento titulado "Compartimos" se refiere a la visión y a la misión de la iglesia, a los Principios

Duraderos y a las creencias básicas. Estos principios no nos llevarán por mal camino. Si encarnamos estos
principios vamos a crecer en la visión de Cristo para la iglesia. "Compartimos" debe ser un objetivo
básico del liderazgo de la iglesia y de la educación para la membresía en todas partes.

Doctrina y Pactos 164 da una visión más clara los principios fundamentales de la conducta moral y las
relaciones. La sección 164 señala el valor y los dones de todas las personas, la protección de los más
vulnerables, un énfasis de cómo es el amor de Cristo, el respeto mutuo, la responsabilidad, la justicia, el
pacto y la fidelidad. Estos principios señalan a la verdadera naturaleza y carácter de Dios. Ese es el
objetivo que tenemos para discernir, en cuanto a la dirección y hacer política. La comprensión de estos
principios y siempre que puedan utilizarse en entornos particulares es el reto y la oportunidad que
tenemos ante nosotros.

La Conferencia Mundial de 2010 fue verdaderamente una conferencia mundial con la comprensión de
todo el mundo, no una conferencia dominada por los temas y perspectivas en algunos países. Al centrarse
en los principios universales y permitir conferencias nacionales o de campo donde sea necesario para
satisfacer las aplicaciones más específicas, podemos involucrar a muchas más personas para decidir cómo
los principios comunes se vivirán en diversos lugares que muchos de nosotros simplemente no lo
entendemos. En este proceso, daremos más pasos para llegar a ser un pueblo profético que son llamados
"para discernir la voluntad divina en su propio tiempo y en los lugares que sirven." (Doctrina y Pactos
162:2 c)
Justo cuando la Conferencia Mundial de 2010 comenzó, pude ver más allá de los asuntos actuales,
perplejidades y ansiedades. Encontramos nuestra mejor naturaleza, al movernos a través de este tiempo, y
lo derivado espiritualmente a partir de este. Vamos a salir como una comunidad de fe mundial en mejores
condiciones para hacer frente a serios cuestionamientos que surgen en la intersección dinámica del
Evangelio y la vida humana. Veo en un futuro no muy lejano, cuando los problemas que enfrentan en la
actualidad se resolverán en su mayoría. Seguro que habrán otras cuestiones-tal vez más-difíciles, pero
vamos a tener más experiencia y las herramientas necesarias para lidiar con ellas.

¡Más importante, será poder dedicar mucho más de nuestro esfuerzo y recursos para nuestra misión
principal de proclamar a Jesucristo y la restauración de las personas en las comunidades de paz! El mayor
peligro que enfrentamos es permitir que las diferencias sobre las cuestiones en esta Conferencia nos
aparten de nuestra misión! Doctrina y Pactos 164 termina con esto: "La misión de Jesucristo es lo más
importante!" La misión de Cristo es expandir el reino de salvación y paz de Dios en las vidas de muchas
más personas y naciones. Si bien estamos debatiendo cuestiones internas de la iglesia, la gente se muere
de bienestar físico, espiritual, relacional y de hambre! Están muriendo al lado de nuestras congregaciones
y en el otro lado del mundo. Nos preocupa a todos, porque Dios está preocupado por todos ellos!

¿Vamos a seguir adelante en esta gran visión y misión? ¿O vamos a dar marcha atrás a la seguridad y la
garantía de otros tiempos y acuerdos? Avanzar o retroceder? Es su decisión ahora.

Vivir la Bendición de la Comunidad

Por Mareva Arnaud-Tchong
Presidente del Centro de Misión Polinesia Francesa

Acabábamos de terminar una clase sacerdotal cuando fui contactada. Ahora, con un pequeño grupo
de adultos jóvenes de la congregación, que se están movilizando para ayudar a una familia a punto de ser
expulsado de su casa. Con la seguridad y la motivación para servir, vamos en camino en varios vehiculos
hacia la casa.

Conozco bien a cada miembro de la familia. Aunque soy más vieja,

Me crié en las mismas playas que Michel, el padre. ¡A Veronique,
por supuesto, la conozco! Pasamos juntos todos los domingos, uno
cerca de los otros, amigos, cantando en el coro, riendo y
llorando por todo y por nada. Sus niños están cerca de nuestros
niños, y todos participan en las actividades de la misma congregación.
A menudo los invitamos a nuestra casa.

Esta maravillosa familia me ha apoyado personalmente y siempre ha estado presente para mi familia.
¡Los verdaderos amigos que conocemos tan bien! Por supuesto, queremos ayudarlos. Llegamos a su casa.
Los niños corren hacia mí diciendo: "Estamos cansados de tener que movernos". "Sí, lo entiendo", les
digo.

Entro en la casa para ayudar. Con asombro veo parte del piso que es sólo suciedad. Las ventanas no
tienen cristales, solo tela simple. Las hojas sirven de paredes. Una pequeña parte de la casa es donde esta
familia que tanto amaba vivía y había encontrado descanso.

Conmoción, sorpresa, ira y culpa me abrume.

 Esta es parte de mi familia. ¿Cómo, después de tantos años, tantas horas que pasamos juntos, ¿no
sabía que ni siquiera tenían un lugar seguro y confortable para vivir? En comparación, voy todas las
noches a una casa, cómoda sin perder nada.

¡Nunca se quejaron! Nunca se perdieron un servicio de nuestra iglesia, o cualquier actividad de la iglesia.
Nunca pidieron nada. Cada vez que nos veíamos, eran felices, siempre sonrientes y positivos, desde los
padres hasta el hijo menor. Siempre asistieron a todo. Nunca les pregunté si me necesitaban o necesitaban
algo

Esa noche, mi vida cambia. De rodillas con mis hijas y mi marido, lloramos y oramos, dimos gracias
a Dios por esa familia. Una familia que nos ama incondicionalmente, sin preguntas o deseos.

Oramos, pidiendo el perdón de Dios. Pedimos que se mueva de nuestra comodidad. Rogamos para oír
el llanto silencioso de los que no piden nada, pero que merecen tanto. Dios me toca de mi certeza, en mi
dignidad como mujer cristiana.

No es suficiente vivir con ellos, debemos vivir para ellos. No es suficiente para mí estar en
comunidad, sino vivo de la gracia de la comunidad.

Jesucristo se expresa mejor en mi vida cuando "creía que sabía", y cuando menos lo esperaba. Él nos
llama a ser vulnerables a la gracia de Dios y uno por el otro. Y entonces todos vivirán las bendiciones de
la comunidad.

Sección 164 y Acciones de la Conferencia

El Espíritu Santo se movió en medio de nosotros durante la Conferencia Mundial. A pesar de las
discusiones de la Conferencia se puso de manifiesto una amplia expansión de la comprensión y la
creencia entre los delegados, había un espíritu de bondad amable y el respeto de unos a otros. El Espíritu
estaba presente, que nos une en nuestra diversidad y nos muestra cómo podemos caminar juntos hacia el
futuro con Dios.

Sección 164
Los delegados votaron abrumadoramente para que el Consejo a la Iglesia, dado el 17 de enero, pueda ser
autorizado para su inclusión en la Doctrina y Pactos como la Sección 164. En esta sección se nos llama a
profundizar en nuestro discipulado de cómo vivimos el significado de nuestro bautismo todos los días y
"plenamente inmerso en la vida de servicio de Cristo."

Además, Sección 164

• Reconoce el pacto bautismal de los que fueron bautizados en Cristo en otras denominaciones,
dándoles la oportunidad de vivir su discipulado en la Comunidad de Cristo mediante el
sacramento de la confirmación. Más información será proporcionada por líderes de la iglesia
relativa a las políticas que surgirán a medida que comprendan mejor el párrafo dos.

• Proporciona una oportunidad para que las conferencias nacionales examinen las cuestiones
prioritarias específicas para las naciones y culturas. Como resultado, toda la legislación de la
Conferencia Mundial relacionados con la sexualidad humana no se consideró.
 • Se nos pide que vivamos en comunidad sagrada como nueva la creación de Cristo y no tener
miedo de la transformación espiritual y relacional que "necesita dedicar toda la vida de
mayordomía para ampliar la restauración de los ministerios de la iglesia."

• Somos llamados a dar la vida a la misión de Jesucristo, que es lo que más importa para el
viaje por delante.

Resoluciones de la Conferencia Mundial

Los delegados votaron para aprobar cinco resoluciones. RCM1294 Solicitud de Actualización Periódica
de la Información que requiere que la Primera Presidencia provea a la Iglesia una actualización anual
sobre los avances y resultados de sus consultas sobre la sexualidad humana a través del Herald y otras
comunicaciones pertinentes. RCM1295 Trata del Trafico Humano pide a los miembros que investiguen
los recursos para ayudar a combatir la esclavitud, la asistencia a las víctimas, y participar en esas
actividades. Incluye actividades sugeridas y organizaciones que participan en esto. RCM1295 también
encomienda al Equipo de Derechos Humanos a recomendar recursos, apoyar las congregaciones y centros
de misión en esta causa, y trabajar con el Obispado Presidente para determinar la forma de apoyar
financieramente los esfuerzos para abolir la esclavitud.

RCM1296 Enmiendas a las Ordenanzas crea opciones para la celebración de conferencias nacionales, de
campo y de área cultural. RCM1297 fija la fecha de la próxima Conferencia Mundial el 13-20 abril, 2013.
RCM1298 Un equipo de desarrollo de recursos comenzará a estudiar la viabilidad de la elaboración de
materiales específicos con sensibilidad cultural y el idioma de enseñanza. Se tratará de crear directrices
prácticas para ayudar a los miembros a desarrollar actitudes y prácticas saludables en la creación,
aumento, y la acumulación de material abundante.

Los ítems legislativos sobre Abolición de Armas Nucleares y establecer un Día de Intercambio Mundial
fueron referidos por los delegados al Equipo de Paz y Justicia. Un ítem de Apoyo Estructural para los
Ministerios Holísticos fue referido al Obispado Presidente.

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