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8. El concepto de fronterizo Marco conceptual para la comprensién de los pacientes fronterizos ‘Sin embargo, hay cosas que el Otro no puede ver. Palabras de Charlotte, en A. Morgenstern, Bxperien- ces within a Borderline Syndrome Sil histérico era el paciente tipico de Ia época de Freud. el fronterizo.es el paciente problema de nucs- {ro tiempo, segin observ® Knight (1958) hace més de ‘einte aos. Pademos cuestionar la opinién de Knight fobre los pacientes ce Freud, porque ya no se los pue ‘de comprender simplemente dentro de los limites de Su neurosis histrlea (Deutsch, 1957), Pero existen po- fas dudas en cvaanto a los pacientes fronterizos v a ‘nuestro tiempo, ¥ aun el caso de Freud del Hombre {de los Lobos (Freud, 1918b) puede servir de paradig ‘ma para muchas de nuestras preocupaciones actua feseen la teora yel tratamiento psicoanaliticos. El pro- fotipo mitica del paciente de nuestro tempo ya no es Ealpo sino Hamlet. ‘Desde las primeras descripciones clinicas del pa- ciente fronterizo hace casi medio sigo (Stern, 1995) tn la bibliografa patoosnalitica se ha acumulado una masa eniorme de trabajos sobre datos elintcos,varian {es tGenieas, constructos ledricos. Creemos estar lis. tos para una decisiva confrontacion de nuestras ideas ‘radicionales eon una comprensién nueva. Si nos Ii- Initamos a los datos elintcos, poems estar seguros {Ge que descubriremos extensos dominios de experlen tia comdn, Pero i discutimos téenicas, es més proba ble que estemos en desacuerdo, St hablamos de tco- ra, e5 cast seguro que nuestros caminos divergiran. 88 En resumen, podemos compartir nucstras percepclo- hes pero na muestras concepeiones, lal vez porque ali Imentamos preconcepios diferentes. fin lo que sige examinaré lo fronterizo como con: ‘cepto porque ereo que (ra la rbrica descripiva exis- teen electo un concepte tnico, Repasaré después al idunos de los modelos empleados par los que mds han Eontribuido a nuestro conccimiento presente de la pa {blogia fronterizs, por timo propondré mi propla ‘coneeptualizacion y larastrearé en los descubrimien {os elinicos y modelos conceptuales de otros. No pro tmeto resolver el problema, porque intentarlo me ha- fa caer tal ver en la simplifleacion excesiva y la es- {uematizacion, Olrezco mi punto de vista personal en Glintento de obedecer al mandamlento de tnteligil ‘lad sin sacrifcar Ia completidad del concept Definieion del término Bl término fronterizo, empleado para definir cle ta categoria de pacientes, no pertenece al vocabulario fe a paiqulatria tradicional tala terminologia clabo: fada por el psicoandliss, Freud identified algunas en- fidades clintoas nuevas, que-desde entonces han sido ‘ceptadas por psiquiatras no analistas, pero no defl- ‘id una eategoria de pacientes fronterizos como tal ‘Si buscamos ayuda en el Oxford English Dictionary (Burchfield, 1972), no podemos menos que decepcto- harnos: ronteriza [borderline] es una linea de demar- acon, Pero encontramos este agregado: caso fron terizo (esp. pete) es el que linda con Ia insaniae (pag. ‘829), Asi nace una contradicelon, Nuestra experien: ‘ia clintea nos dice que la frontera de la insania no e5 {ma nea sino, mas bien. un vasto teritorio que no ofre- fe una divisién neta: una tierra de nadie entre fa sa Id y ta insania. "Freud ino propone tna categoria de pactentes fron terizos, pero destaca la oposicion entre las obligacio- hnesde la conceptualizaciOn abstractay la realidad cli- nica, En Analisi terminable e interminable, escribe 69 [ -Sabemos que el primer paso haa el dominioiniclee- thal del mando eireundante en que vivimos es hallar tuniversalidades, elas, leyes, que pongen orden en el aos, Mediante ese trabajo simpliiearnos el mundo de tos fendmenos, pero no podemos evita el falsearto tam bien, en particular cuando oe rata de provesos de de Sarvolloy tasmudacion, Nos interesa asir un earnbio ‘cualitativo, y para hacerlo solemos desculdar, el me hos en un principio, un factor cuantitativo. Bn la rex Tidad objeiva, Ins tranaiciones y las etapas interme Glas son mustio mde frecuentes que los estadoe opus fs por eeparaciones tajentess (1987c. pig. 228 [psa ‘2301, Bate es nuestro desalfo. Cuando nos vemos con {tansicioneso eon etapas descripavasintermedias, 2n0 Gebemos tratar de ir més alla, eruzar la frontera de lo enamenol6gica alo lbriea? {Toda generalizacion teé- ‘en tena que wer necesariamente enlazada con ks dos igrandes dominios de la pstcopatologia, Ia neurosis y {a peicoss, como algo intermedia? , debemos acor- dag al caso fronterizo una Identidad propia? ‘St aliora nos volvemoe a niaestros diccionario es- pecializados, nos encontramos con una diversidad de €enfogues, Laplanche y Pontalis (1973) dan esta defini ‘lon de fronterizo:«Término empleado cas siempre pa- ‘a designar perturbaciones psicopatolgieas que estan. situadas en la frontera entre neurosis ¥ psicosis. sobre {odo aquellas esquizofrenia latentes que presentan un ‘conjunto de sintomas aparentemente neuréticos. Los ‘autores ponen de relieve la vaguedad del dominio abar- ado por semejante definicién, que ipcluye personalt- fades pstcéticas, perversas y delineuentes ellos pare ‘een inclinarse por ligar el termino més esirechamente ‘con la vesquizofrenta seudo neurética. Hay aqul dos ‘conceptos implleitos: lo fronteriz0 como canjunto de ‘sintomas neurétices es una facia. y lo fronterizo co- ‘mo conjunto de sintomas psicbticos es esquizofrenia. ‘Moore y Fie dan la siguiente defini en su glo sari Un smino descripivo que designa un grupo {econaliciones que manifiestan fenémenos tanto nett rtloos como paleéticos sin entrar de manera inequi- ‘yeca en ninguna de esas doe categoras dlagnesticas: (1967, pag. 19). No parece diferente de la definteién 20 francesa, Pero en realidad este glosarionorteameriea- ro supone una diferencia. Aungue los Comentarios que fagregan estos autores destacan la naturalera defers! va de los sintomas neurotices del ronterizo, enewen- {ro importante para me invesigacson que, segin sua de fintcion de lo ronterizo, nl los sintomas neurOUcos ni Jos psledtieos se corresponden con la concepeién ia diclonal de neurosis © pstcoss, Rycroft (1968) es menos equivoco. Observa que el caso fronterizo desafla todo intento de clasifeacién. Pe To considera el problema desde el punto de vista de Ja picts solamente, y apunta que en la estructura de personalidad Ironteriza Ia defensa es de ipo psi tied, no ast Ta conducta de la persona. Entre pardnte sis, Rycroft rechaza la idea de que neurosis y psiosis se excluyan una a otra. Coma la consulta de diccionarios no nos ha sido de gran ayuda, me detengo un momento pregunto: fatten o qué os fronteriza? La importante en esta pre iganta es el distingo entre tener algo Tronteriz0 y ser {ronterizo. Puedo ser eiudadano o sin patria, pero ser Sronterizo, he ah algo que me resulta aifiell oncebi. ‘Los dicclonarios especializados me ensenan esto: Jas fronteras gon aituadas en gare diferentes por dis: tintos autores. Me volveré entonces a mi experiencia personal. .Cudles sn mis roiteras?Lo-que se-mepre= Senta inmiediatamente es la envoltura o el continente 4e piel. Pero por definido e importante que me pueda /arecer, mi continente de piel es discontinuo. El tet ode la carne es interrumpido por otros leidoa,o pre ‘entaorficios que actian como puerias. Podemos le malas aduanas o inapectores: ojos, orejas, nari, ba: 2, ano, uretra, vagina. Boca, ano, érgancs sexuales las lamadas zonas erdgenas— son importantes por- {que funclonan de dos maneras, hacla adentro y hacia afiera. Dos problemas se me plantean en consecue ‘indole o estructura dela frontera: fLsegundo, a circulacion hacia adentro y hacia afue #3 ss pura Ara ben. ules sn es ont ‘ot ns purse nefits pqueas? Que ree ne ere a puertas? Dos tines de leves acuden en este punto a mi, Espiritu, dos leyes que operan aunadas el principio de placer dlepiavery el principio de realidad. Este altima ede particular importaneia para mi investigacion x ‘ane # la existenicia ono existencia de objeto: por lo tanto, al self, “ ‘Diversos tipos de fronteras encontramios en la na- turaleza:lineas 0 sperfices, con o sin citeulacién a {raves de fa frontera, 0 wna membrana osmotica que faeilta la comunieacign, con una seleccion adecuad fe lo que se deja pasar o se deja afuera o, en caso de perturbaeion, de lo que hay que rechazar, lo que © Inolesto adentzo: por fn. una division borrasa en cir to estado de intersecei6n, una frontera que semeja el encuentro de dos nubes. sn caso de peligro, ana fron tera osmdiiea se puede abrir para descargar los est tmulos perturbadores del dentro. Pero otros recurso® Son posibles, por ejemplo, la inutlizacion de Ia linea tuna eepecie de mortfeacién, 0 el descibujamiento de la ffontera, remplazada ahora por un lite frégi, una tierra de nadie, Ser un fronterizo da a entender que luna trontera protege al self de pasar al ot lado © de ber cruzado, de set Invadido, con lo eual uno Mega a Ser una frontera mbrl (no dig fener. sino ser esa tro tera). Esto, an vez, aupone una pérdida de distineién centre espacto y tempo. ‘Es bien evidente que aun definiciones de lo fronte- zo que parecen comunes contienen matices que de Jan tasluetr diferentes puntos de vista. En mi opinién, hho se debe tratar de comprender Ios sintomas del pa Cente fronteriza en términos de psiosis. Tampoco hay ‘que identifica la condicion psicotica del fonterizo con ‘cquizofrenia, Por atime, cuestionaria Ia idea ge- neralmente aveptada de que los sintomas neuraticos {denen una funeién precisa. Pero antes de claborar rat punto de vista propongo que examinemos algunos ‘tras modelos. 92 Esquemas conceptuales y modelos de estados fronterizos INo.es mi intencign resenar la vasta biliograia 5 bre la materia, En consecuencia, me ceiré a la obra J'tas opiniones de los que han tatado casos fronter- os dentro dela stuacton petooanalties, Propongo cla ‘ibear estas contribuctones en funcidn de tres linea Se pensamiento:{reudiana, Weiniana y winnicottans. Fin la obra del propio Freud, son pocas las indica ciones que nos ayuden a entender los casos fronte Flaos. Afirma en -Neurosis y pelcosiy vel yo tendra Ta postblidad de evitar Ia ruptura hacia cualqutera de tos lados delormandase a st mismo, consintiendo me- poscabos a si untcidad y eventualmente segmentar- ose y partiendoge, Las inconsecuencias, extravagan- Clas y ocuras de fos hombres eparecerian asi bajo wns fur semejante a la de eus perversiones sexuales: en tfector acepténdolas, ellos se ahorran represtones. “Para coneluir, cabe apunar un problema: ;Cual sera el mecaniemo, andlogo a una represién, por cuyo Intermedio el yo se desase del mundo exterior? Picn- so que sin nuevas indagaciones no puede darse una Tesputsta, ero si contenido deberia ser, como el de la represion, un débito de la investidura enviada por el yor Freud, 1924, pigs. 1525 [pégs. 158-9. "Varios puntos son pertinentes para lo que venimos tratando; fa evitalon de la ruptura por el yo, presu- infblemente de sus fronteras, -hacia cualquiera de los Tdoerel yo se aviene a menoscaboas (hay tal vez d= amos intrusiones). el meeaniamo de defensa del yo Consistente en secgmentarse y partrse (donde hoy blariamos de escisiOn); ef supuesto de que nos hace falta erear un modelo clinteo para la deformacion del {yo,anlogo al de las perversiones sexuales:y. por il itt, la hipotesis de que la escisién del yo supone un Sebito de favestidura, lo que la convertiria en un me- ‘eanismo psicotco. Freud tetoma en otro trabajo sus rflesiones sobre ta naturaleva de las patosis. Sostiene: sa neurosis no Seamiente la realidad, se limita a no queter saber na dade ella: la psicoais la desmiente y procura susttulr- 93 1a (1924e, pg, 188 (pag. 195). Evidentemente €lcon- ‘opto de desmentida es diferente del de represion: la primera es un mecantamo pstedico que afecta a la ea {idad exterior, mientras que la neurosis y la represién. ‘operan con la realidad interior. Freud abunda sobre ste punto; «En la pslcosis, el remodelarento de la fealidad tone lugar en los sedimentos petquicos de los ‘inculos que hasta entonces se mantuvieron con cl sea en las huellas mnemicns, las Fepresentaciones ‘los juicios que se habian obtenido de ella hasta ese momento y por los cuales era subrogada en el interior de In vila animicas (bi. pag. 185 (pag. 195): las bas. tardillas eon mias). Freud indica el papel decisive que cna psicosladesempenan la cognicién y la eapacidad fe elaborar no solo pulsiones sino tambien ideas y Ju os. El enuneiad de Freud realza la importancia del ‘concepto de Bion (1962) sobre K {conocimiento} y su tnslstencia en los procesos de pensamiento en Is psi- tosis. La ereacion de una neo-realidad en la psicosis fs andloga al mundo de fantasia neurbtico, un émbi to que en su momento fue segregado det mundo exte tot real por I instauraci6n del principio de realidad (read, ibid, pag. 187 [pag. 197). Las titimas lineas dl acticulo de Freud ponen el acento en la diferencia ‘entre psicosts y neurosis en el uso de la fantasia, con Jo cual antcipa los trabajos de Winnicott sobre el ue ffory los de Klein, Segal, Khan, y yo mismo, entre otros, Sobre elsimbolismosy los estas fronterizs: «Pero el ‘nuevo mundo exterior, fantastico, dela pslosis quere remplazar a la realidad exterior, en earmbio, el de Ia ‘neurosis gusta de apuntalarse, tal como el juego de Tos nities, en tun fragmento de la realidad —diverso de faquel contra el cual fe preciso defenderse—, le pres: talun significado particular y un sentido seereto. que. de manera no siempre del todo acertada. lamamos ‘simbolico, Asi, para ambas neurosis y psiccsis—, no ‘élo cuenta el problema de la pérdida de realidad. i- fol de un sustituto de realidad ibid. pg. 187 [pg 187), ‘La busqueda de una respuesta para el problema de la psicosis condujoa Freud hasta la dinarnica del pen samienta fronterl2o, que describe en sit articulo La 4 negactén: (1925h), Br mi opinion, et par de opuestos Je'Freud, sion, coexisten con una estructura men- Gintatnieno, que, con respecto ala realidad, encuen- {a expresion en la sensacidn de que el objeto sy m0 GGreal, ode que el abjeto nies eeal nies no real (fanta- seado) ‘Potiemos esquematizar ast las ideas de Preus! wy | Res mor | la Primero, una frontera vertieal separa la realidad psi {quia ‘bucna> (Rl de la Fealidad externa mala (RE). {2 divison cofnoide con la separacion entre ix (acer tio) y nor (afuera), con arregio al principio de placer- (Usplacer, Un segundo desarrollo esl representado por fa fontera horizontal, que separa lo placentero y fo dis placentero adentro, Pero a. causa de la represton, lori fro que corresponde alo displacentero en lo conetente- Dreconclente corresponde a lo placentero en Jo repr- Inido, Las linea verlcales y horizoniales indican. en fonces, la separacién entre realidad psiquica (RI, ala iaquierda, y realidad exterior (RE), ala derecha. En fa realidad peiquica, tenemos el proceso secundario {Pr} en el nivel coneiente, eon afeetos placenteros (P) ¥ displacenteros (DP), igados a un sistema de sto-n0 into), que se corresponde eon el proceso secundario {Pra} del mundo exterior. De aqui una similtud entre To conciente y lo real. Por el otro lado. en la realidad ‘pequica tenemos también lo reprimido, 0 sea, el siste ade una oposiion, que esta invertida de los afectns placenterasdisplacenteros fantagonistas de los afectos toncientes correspondientes) ¥ un sistema del julcio fen que es impensable el no, Deahiun conflicts entre fo conciente y lo Inconciente y, a su vez, entre 10 in- Conciente y el mundo exterior. Pero podemos suponet {que lo inconciente se encuentra en cierta correspon encia con lo ignoto (2) del mundo exterior. 95 aac Este conjunto de proposcionesresuena en «Ande sis grminable e interminable (1997), fuente Inago- fable de Ideas para psicoanalistas en orden ala teoria Ya la practica, Aqut una ver més, Freud cetera su ccna en a importaneia de ls traumas tempranos G de las tempranee dstoreiones del yo con Hijactones Simecanismes de defensa primitvos. Adora eso.con fermulacionesaoerea de fctoresconatitucionales¥ Pe Cullaridades de a ibid (neria, viscosidad,Nuldee y movida cncemas de las investiduras),factores que purece dar por aupestos. pero que de hecho reque: Fen una exhaustiva invesigacion desu significado y ‘rlgen. Ades, aun a no fodos nosotros aceptamon {a concepeion de Freud de los instintos de muerte, po {os pondramosen eda la smportaneia decisiva dela ‘gresion —aivereamente comprendia y conceptual wate: esccrlow en ln eiologia dela paeosis de los tai ronterizcs. ‘Situarfa la obra de Bergerct (1974) en esta tne de desarrollo tebrico, Sa vast conocimiento de fa D- ‘Biogratae ernie aleancar una bueria SEES DES _g tbe dos tips de traumas desorgantzadres. Unt {ima dela primers ifancia, con frustracone Fila amenaza de perdida de objet. que lleva Zo latencia precor, Ese tipo de trauma desorgansza= dor da razon de un ronco comin de estados roneri- ‘on une organizacion provisional del yo.Un.se {Rando tipo de tatima desorganizador puede ocurri: Ena adolesceneia (ada co protongacin dela ado- {escenela misma mas alli dest trmino normal. Este “aun, que se acompaadeentados de angustia.con= “octonantes, tiene por resultado la reorganizacién del ‘eprops aes, ea Jaleoats 0 regresion pslcosomatica, Otros dos m0 teumite pueden ser deseubtertos por el o.asedia. “Ae perversion trastommo del carder Sega Leorta del desarrollo que en To esenclalprolon- sgatalina feudiana esa de Kernberg (1978), Sus or {ulaclones vienen sustentadas no solo por su propia “aperencla clinica sino por su ampllo conociento ‘Geis iblografla que ene autor reinterpretae integra. de manera original imaginativa 96 Pucsio que los eseritos de Kernberg sobre la perso nalidad fronteriza son bien conocidos, me Limitare a fu marco general de referencia. Kernberg emplea un Thodelo de dos vertlentes: una estructural y tra geneéico ‘indmiea, El punto de vista estructural esté referido 41) ua modelo topico, como el elaborado por Freud: 2) ta palcologia del yo de Hartmann. y 3) los derivados festructurales de las relaciones de objeto. Los estados Ffonterizos, segtin Kemnberg ae caracterizan por I) ma pifestaciones inespecficas de debilidad del yo; 2) un Gesplazamiento hacia el pensamatento de proceso pr mario, y 3) operaciones defensivas especificas. que {bora desde la perspectiva de las relaciones de obje to tnternalizadas. "Rernberg destaca la importancia de la escsion en tre autoimagenes y objetos inernos -buenoss ¥ «ms: Jos Cree que la falla principal en el desarrollo de la patologia fronteriza se sltia en la ineapacidad del in ividuo para sintetlzar las introyecetones e identifica clones poeitivas y negativas. Notese que Kernberg.no considera la organizacion de la personalidad fronter ‘Za como fluctwant 0 jail sino como un tipo caracte Fistico de estructura, ‘Desde el punto de vista genético-dinamico, Kern: berg destnea la importancia de las hjaciones orales. Su ‘conceptualizaion en este respecto es distinta del punto fe vista kleiniano, que el eritica, Pero, con Klein, cree {que una agresion pregenital induce un desarrollo pre- {nature de porfias edipieas. "En conclusion, defnir la teoria de Kernberg como fronteria: se sittia en la Frontera entre la psicologia del yo y et punto de vista kleintano ‘Ahora podemos pasar a la obra de Melante Klein yy sas diseipulos, Me referié a uno soo de los trabajos {e Klein, ‘Notes on some schizoid mechanisms (1946), {que me parece particularmente pertinente para los {astornos fronterizos. Lo mas importante es su supo- sion de que laa relaciones de objeto existen desde el ‘comiesizo dela vida, Pone el acento. ademas, en el po ‘enclal destructive de a mente infantil y en sus defen ‘se primitivas, que son la eselsidn, la iealizacion y Ta Identifieacion proyectiva, Reconoce la importancia °7 de ta naturaleza narclsista de ae relaciones de objeto fesquizaides, y describe la conexién entre fendmenos oquizoides y manlaco-depreaivos. Segal y Rosenteld, entre otro dseipulos, han elaborado y desarollado las Ideas de Klein con referencia a pacientes (ronterizos adultos. ‘MlenciGn espectal merece la obra de Bion. Aunque casi todas sus contribuciones se centran en los pro blemas de la psicoais, trabajo de 1957, -Diferentia: tion ofthe peyehotie fram the non-psychotic persons. lites, un aporte importante a la bibliopafa de los trastornosfronterizos. La riqueza y originalidad de las ‘eas de Bion resiten la sintesis. Sus aportes se sin fularizan por canfrontar las ideas de Freud aceres del Aparato psiquico, sobre todo en lo que conciemne alos, procesos de pensarsiento, con la conceptualizacion de Kein sobre las relaciones de objeto, en particular sus {esis sobre la identifieackin proyectiva como mecanis- tno de defensa bésico, Bion seaala el desarrollo men tal precoz 0 »precipitacions de los individuos pstcdtt cosy sostiene que la defensa no se debe concedir co- ‘mo regreslén sino como -antcipacién répida: esto es flgo que dafia el desarrollo del aparato psiquico para fl pensamiento de proceso secundario. Su descubr ‘lento de funciones depresivas en los provesos de len fuaje es también sina Contribuctdn original e impor- {ante. Bn lugar de un empleo maduracional de los re cursos Hingdisticos existe, segun Bion, una actin a ‘ideogramas, que estorba la evolucin de Jos proce- ‘os de pensamiento hacia una estructura mental de- pendlente del pensamiento verbal {En a ilima obra (1962), Bion supone Is existen- cia de tres factores: L Gove, amor|y H (hate oto). sen ‘49 K tknowiedge, conocimiento) un eoncepto prima: Fo de igual importaneia para el amor y el odio, Post la también las rlaciones O ~ K, donde O representa clobjeto incognoscibie y el estado de lo incognoscible (divinidad, verdad absoluta lo infinite), que lleva aun festado de conoeimlento acerca de lo reconoeibe. Por fltimo, su analils de la relacion entre seontinentes “contenido: ofrece vallosas indicaciones para el esti- ‘io de las estructsras psiquicas. 98 eto es sobre todo Winnicott (1965, 197 1, 19718, 1975}, en mi opinion, el analista de lo fronteriza. So {stile inimitable y su conceptualizacion original nose prestat al resumen esquematico. La aparente caridad fe Winnicott es engatisa y no es raro leer a autores {nepiradas en sus sportes que no hacen justicls a sutll yes complelidad de sus ideas. Su insistencia enelsamblentefacihiador. [a preocupacién materna primaria ye solding- ha prodacido wn desplazarnier {ode a atencién del objeto interno en general al papel {el objeto exierno, Pero en realidad Winnicot se inte- tesa mucho més por el juego reciproce de lo externo {Fils tnterne, Dirige nuestra atencién precisamente al {Brea de lo Intermediario, ye fracaso en crearla. Nos proporciona un modelo conjunto de encuadte clinico Jy de funcionamiento psiquica. Describe el destina de la slmbotiracién y el deterlaro del valor funcional del ‘campo tansicional, ast como fenémenos transiciona- Jes.en cares fronterizoe insiatiendo en el hecho de que para estos pacientes el encuadre y el analista no re presentan a la madre: son la madre. Su conceptuall- Zacién del vselffalso. esta referida a una adaptacion emasiade exigente al objeto que prover alas neces ddades, ‘Mlicho menos aterciin se ha prestado a os poste ores eonceptos de Winntcott de sno comunieacions, ‘aioe ysvapledads, Su tooria del shnteoo Ia impos Dilidad de crear desde él otra forma de eunién eon el ‘objeto en la construccion del espacio potenciale abre hhorizontes nuevos de comprension e induce al analis- ta ensayar nuevas maneras de ver su propia reac ‘lon come un instrumento para comprender las para- Alojas de lo sistemas fronterizos de pensamniento. En lo que ¢l ama el costado negative de las relaciones, ‘Winnicott (1971b) nos proporciona indicios fecundos para entender rasgos clinics del individuo Fronterizo, fen el que predomina una sensacién de falta y un sen tmiento de nulldad, De esta manera, la contratrasfe- rencla se convierte en el Instrumento privlegiado del lanalista para el trabajo con estos pacientes, Bl analis tadebe prestar atencion no solo alo que esté presente sino también a los eslabones fltantes, que no estan 29 ‘cults sino que se experimentan como huecos, que Son lo nico real para el pacientefronterizo, La eserr Sir det pensamiento de Winnicott se contiene en las ftimas ineas de Playing and Reality (19715), en 10 (que el mismo caracteriea como su picza final Alli de- fine la conceptualizacion (el feicionamtento psiquico ‘or el eual es creado ch objeto subjetivo) y 18 percep- ibn fel abjeto peresbido objetivamente, ¥seniala wn Saradoja itrinseca que debemos aceptar ¥ que no ad nite resolucions ‘La obra de Winnicott ha infuido sobre el desarro- tio tebreo de Khan (1974) y de alitaer (1968). Khao. ‘hos ha propuesio el eoneepto del trauma scumulati- Vor: describe la neurosis Infantil como una organiza ‘lon de selffaleer y senala el papel del juego reciproco ‘Gels sentidos del analsta en la apreciacton de manic {cotaciones tasferenciaes, La necesidad de establecer tuna distancia contractual previene que el analista se doje llevar a regresiones fusionales o haga intrusion fn a secret del espacio potenclale del paciente. Cor ‘to Winnicott Khan es conctente dela importancia de Ta vivacidad de Ia situaclon anabiica. ‘Milner ha flustrado destacadamente tas moses clones que requiere el trabajo analitico con pacientes {ronterizos. Su contribucion principal es el reconock Inlento de la necesidad de tolerarestados desorgani- Zados en la mente del analista, de Jos que brotan el Zieclmiento 7 la ereatividad. El aporte de esta autora Sin dinamica del stmbolismo. y su critica de la con ‘eptualizacion del proceso peimarto como forma inf lor de actividad paiguiea, constituyen la base de una ficjor comprension del pensamiento de proceso prl- {nario en los tastornds fronterizos. Me gustaria agre [gar aqui que en el pensamiento fronterizo tenemos el Ffeullado de una perversion destructiva del pensar {ntento de proceso primario, més que una expresién denuina de la que se supone que el proceso primario ‘es la infancla. le hecho una sola referencia ala bibliogratia fran- cea, pero, como me ha influido mucho, creo que no ‘Gabo terminar esta secetén sin menconar algunas con- {sbuciones importantes, aunque indirectas, al pst 100 copatotoiaronteriza, obra de mis coleges compat cet ge Bouvet (1067) de las esac a oe een parbela, de lanes de dee eral aro ae trabajos de us ick nlc, panne de pcos (Mar), Pa eid an caigurcto srs con Fain na ronterz, Los concepos de Bouvet de presi dee Gites pute han sido Oto de eer acto al tatamento decane dices culandon ce (1000) sobre picts, en particu ae tase emarecer as nociones freudlanas de Jar intent og sorchoion (Ververfung)¥ scl pose ane concep ene en tora del Fae a om eaiaante, prs que tos Nom conten sea en alto grado cusstiona Ey "ara concur ent resea parcial dea bibllogrsa, co punts au teresa pare esr st Sa lye cl elf el marcsismo, con ls erro lesatos tempranos dela Glscinion ecm so copsecunols a desinveatidura aa clon proyective: 2) la uneson dela la. aie entigyeto con cepevalaencion ala agreion an deol nao bre los procesos de pens regent) 9 0 rt de una anguatia pede ¥ 8 io 8 Peg foo lgadara de fos procescs Pt Impete ooaoceenln para pensar verbal Sie Co reacon de un espacio asconal, 2 en da covets Ge rnc de pl on. fag de reali, ¥ ua pata de rela Ser ae taco, 9) lcondensactn de metas pre ree top genta Toe parte scada ina de clas genial nca, ave a ete automaticarmente Un do aera de ia relcion complemen are ite anaitico, donde a contratraste tara en el ence un veculo def comunicacn del rencia pa ue un obstaculo para comprendero,y actent mds ancl igus. nccesatia ara Dana de comuniccion 9 a intrusion. sor | La tuncion del uit ve etabece poo a poco. Ba cctv, eran or chaarto plc sere vn pasa de est proceso gradual como una saree clinporeante para que se extableaes ol eo saa ii ene examen de realidad La principal Se ea gegan eb rene e i coniatencia de de ae dos eto coleranca dovsombras, dda fermion Yo apacidad para decir entre cst el aetateate yl no existent Imaginacion¥ rato oi eHow can necesaria a una pa a fF Ue {© ra io de una te eles pejudiarh 18 end aun deteior glbel del functonamiento toental mir maletar en a cultura, Freud examina ch es aio eet de as ronterae snimias ave se pro er eran novnaesy fo relation 0 eT seen mental infant deren. due ‘ere ie por um wemtimiento oreo» Conli- seat icganton a ese resultado: semejante conser Te jot feos tn eatin anterioes just a fo act ca slo eo pote en 1 aii, ¥ 0 e8ta0o ma ai meade obtener una imagen inte 0 e5¢ foc (19800, pag. 7 (p86. 72 Fea de nuevo Fred quiere emplesr meti- foramen, suaqueconoce sa insutleenci. EL mo- a tpumicnclon por imagenes, en a tora 0 2 ea Sonamfent mental, dene una fone transi- SUNS ts tos dv prinipaies rages del com align man afectos, que en eseeia no 808 Te ‘eShuaeshigratmentey pensaento que cons: Fate ndcpendtente de lon terninoe que PORE we koun, a eotsion 2, eneonseeuenet un Do ca ee i que nus posta produce comenicacn craigs afectes yo proceses de pensariento, en wetbalmente incomunteables. Ba este sent SR Sn rw desaparece manca sino que expert es gastormaciones com ia ayuda de un obeto de “TStualey lain tempor] dpimas, sostener ca deeeger Range a escson puede separa, la scpara- ‘epee cocompleta, Esta valetamblen, en un sen- ee ncn, para ia eaisign dl yo en el proceso de- eget iodo ean to Indi Freud en un aba 104 de pubitcacton pésturma, donde interviene una vez mas tl conceplo de desmentida “En un trabajo dela misma época, Freud expone la Importaneia de la eaeision en las psicosis. Aun en el pacente aquejado de confusion aluclnatoria grave, el Somormal no esta absorbido por completo en a cond ‘ion regresivas menos todavia, en casos no tan seve fos. Freud lo explica as Se forman dos posturas psi- ‘guicas en vez de tuna postura dic: la que toma en ‘enta la realidad objetiva, a normal, y otra que bajo Glinfujo de lo pulsional desase et yo de la realidad. {fas dos coexisten sna unto la otra. El desenlace de ppende de i fuerza relativa de ambasy (19403, pg. 202 Ings. 203-40. ‘uieroterminar esta seceiin mostrando que no s6lo son variables Ins fronteras entre el yo y la realidad, fo que aun la platen, como Freud la concebia, expe ‘menita variaciones analogas en su funcionamento in- {rinseeo. Segin lo que explica Freud, ola "pulsion” nos parece como un concepto franterizo entre lo animico y To somstico, como un representante psiquico de Jos «st fulos que provienen del interior del cuerpo y alean- ‘an elalma, como una medida de la exigencia de tra Bajo que es impuesta alo antmico a consecuencia de fu trabazSn con lo corporal (1018e, pgs. 121-2 [pd Ti: las bastardillas son mis), ate enunciado de Freud, de ehgariosa simplicidad, aque tan a menudo se cita, puede ser fuente de una re- legion interminable. Por mai parte, lo entlende del si- gulente modo: 1. La pulsign (Trib) es un concept. 2. Este concepto se sitia en la frontera entre dos dominios. '3. Freud opone una palabra unica, «alma» (See), ‘en tanto funcion de lo psiquieo (psyehfsch), a dos pa labres que expresan la misma idea: Io womtico s0- _matisc), 0 el sorganisinar,y el cuerpo: UKorper). Uno Puede plantear esta cuestion: zse tala de sindnimos Empleados para evitar sna repeticién fastidiosa, 0 en ‘Yerdad las dos palabras denotan distinciones seman- eas? 105 ‘4, La pulsion es un representante psiquico de est mos, Este representante pslquico no se debe confur {di con el represenlanterepresentacton, que, junto Con fa cuota de afecto, integra las representantes pulsto- rales en la psique ‘fa pulston es definida como un proceso, una pro- gesidn que supone presion o energla, que solo se pue Ge aentr y comprender como la medida de una ext- fgencia de trabajo sobre el alma. En mi opinion, es cla- Sivgue ia medida de esa exigencia de trabajo es de fuetea variable y que las Fonterss entre el organismo yy su alma no se deslindan de manera tajante, Aa de Ub ue ent concepinfronteriz (Grenzbegrf). uno pue ‘Se pensar tambien estados Ironterizos entre lo soma tea y lo mental o psiquico, entre el cuerpo y el alma fobre la cual opera un proceso de trasformactén. ‘en conelusién, podemos dectr que en ninguna parte ‘existe una eocision completa: ni dentro de [as pulsio- heat ni entre cuerpo ¥ alma: ni en el interior del yo Jiaus interrelaciones con el ello, el supery6 y la realt- Jar. En consecuencia, tenemos que conseraro tron {erleo como una frontera movil fluctuante, tanto en qe normatidad como en la afeccion grave, y como el ‘concepto fundamental en palcoanalisi, que no se puc- fde comprender en términos figurales (representacio- hes) sino que e tlene que concebir en funcion de pro {esos de asformacion de energia y de simbolizacién (fuerza y sentido) “Ademés. una funciin basica de la psique es porflar por la separacidn para promover la acaptacton. i in ‘ividuacton y laautonomia, Pero estas metas no se al- tcanzardn a menos que el proceso dsjuntivo se acom- ppate de un proceso canjuntivo, cuya meta sea resi: Dever, hasta donde se pueda, la comunicactén con los tlementos segregados. Este es el trabajo de simboliza- id. que requlere la esclsion de dos elementos y st. ‘Conjaneson para crear un tereer elemento, que © com pone de los Gos elementos segregados, cada uno de los Phles sigue steno el mismo pero se vuelve diferente fen Ia reunion. 108 Hipétests 0 marco conceptual acerca de log pacientes fronterizos Como to indigué antes, el caso fontertz ¢s me ros el de una frontera que el de una tierra de nadie, tun entero domtaio cuyos limites son vagos. Su pobla: {Eos iene que ser selecctonada. 8 intento de Grinker (1977) es clasficatria en este sentido. Pero nos estan {allando catdlogos no sélo de sintomas 0 de euadros ‘ing tambien de conceptos ardinales. Para elle propon- fo un marco conceptual seqtin lo fulmos esbozando Eh la seccion anterior, extratdo de la situacion analit fa. Quiero sefalar que los casos fronterizos mas pro- Simos a la neurosis scien ofrecernos la mayor opor- Tnidad de aprehender la indole del problema porque te presian a ia indagacion patcoanalitca profunda. Un fateral astral tal vez comunique al lector la im preston de que el paciente es neurdtco, pero el analis- aeabe que trata con wn caso fronterizo. Este cone imiento oe basa en la cualidad afectiva de la eomuni ‘acin del pacente yen I respuesta interior que suscita fn el analista, y que es elit! poner por escto salvo {que uno eseriba poesia. En este contexto, debo men: ones le funcion de la contratrasferenela. que puede Servir como un instrumente muy preciso en la com- prension de paeentes fronterizos. Para empezar, hay que trazar ls limites hipotet- cos del campo psiguico, Son dos, de naturaleza dife: fente: soma y actuacion. En mi andlisis de la defi ign de pulsion (Trieb) que Freud nos ofrece. senalé ta diversdad de térmings atribuidos ala esfera soms- tica y me pregunt si se trataba de sinonimia 0 de di ferencia semantles, Aqui razaré un distingo entre lo somatieo, que relaciono con el organismo (una enti dad biologics), ¥cleuerpo, que relaciono con la ives tidura Mbidinal, Suponemos que la meta de una pul- blon se aleanza por medio de lo que Freud Nama vac- ‘in especifica, que puede trasformar una situaeién Ge desvatimiento en una experiencia satifactoria (a Eliracaso del curplimiento alucinatorio de deseo. Sa ‘bemos que pasafe al acto es el opuesto de la accion ‘especies (en el sentido de Freud). La principal fun- 107 cn del pasae al acto —o conducta reactiva— conss- Teen puraro hacer parada. Plenso en la palabra fran (Gesa parer, que sigaiiea enfrentar,contrarrestar, pro (Sfetee, evita defenderse. Aqut la meta es preeipitar dTorgantamo a la aceién a fin de sortear la realidad paiqulea, De este modo se podria decir que el earmpo eign esta delinead por los dos aspectos de a pul- Elon: au fuente (eamatiea) y su meta (a accion), Bs dl- flelasignar una funcion bésiea al campo pstquico, por- (gue parece tener més de una. Pero, para ackarar mi ‘Bea ya rieogo de simplifica las coses, propondré una hspoiesis, Freutd supuso que la faneton bisica del campo psi- {quico ra disminutr na tension dsplacentera. La pst Ghogia del yo de Hartmann considera que la funcién ‘dai ee i adaptacion, aserto este no contradictorio Con el de Freud. pero que implica un cambio de acens fo. ba escuela fnglesa sostiene que el crecimiento es ‘Sia funcion baste, Por mi parte, propongo que Ia re- Dresentacion lo es. Se Io debe entender en tn sentido Gaay amplio, que incluye la representacion del mun- fo externo tanto como del interno. Supone también in modo pluralisa de representacion, no s6lo por me lo de un contenida ideacional sino de actos, afectos, tstados corporates, lengua, ideas y pensarnientos. Co {mo lo senala Castoriadis-Avlagnier (1979), es como si toda actividad del aparato psiqutco tuviera la funcion. (ds eaificer la representacion de lo que en cada caso hha de ser representado, y también la representacion fel functonamiento del aparatopsiqulco mismo. EI do {minio peiquico esta bajo una doble influencia la pre ‘lun dela pulsion que esfuerza hacia la realizacion de Ta acelon expecifica,y el impacto del objeto satisfactor de la necesidad a través de la representacton Freud no ces0 de destacar Ia importancia del exa- sen de realidad para distinguir entre representacton, {gue obedece al principio de placer. v percepcion, que ta bajo el mperto del principio de realidad. La meta {fe la pulsion requlere, sobre todo al comlenzo, una per Sona dedicada que obre como objeto satisfactor de la ‘Revesidad y, al mismo empo, como sustituto del yo fmbrional del nino, Ambas funciones se unen y se en- 108 ‘camnan en el pecho materno, 0 sea, en el euldado ma: {emo Bl yo del nino actoa individuslmente cuando por fin se produce la separaoion entre pecho y aio. Este proceso gradual se acompana, evidentemente, de fa Bes pentticas de reunion con cl objeto: en ells, ia fa- Se anterior se restablece de hecho, ¥ de fases peri eas en las que elnino trata de restablece,eolo,e} pa faiso perdido de la fusion con el objeto materno pecho! Pero las frustraciones y Jos desengafos ine [ibtes de proceso de crecimiento lo compelen 3 tole~ {Br junto al sentimiento de bienestar. la disconformt ‘bay la tra que estan Rjadas en formas arcatcas de {epresentacion para la cuales Bion (1997) ha propues. {ore concepto de sdeogramar. EI intento de separar Jo sbueno de lo -maloy lo placentero de lo displace toro. laobligacion de aleangar una separacién en K+ gar de engendrar el distingo entre set y objeto (aden {roy afvera, somatico y psiquico, fantasia y realidad, ‘Sueno y malo) dan hgar a una escsion en los fron {erlzoe, Bn un conjunto de terminos complementaris, ‘cada termino separado admite el comple- ‘mento simétrieo, por ejemplo, la sombra de su luz. 8 spectro mis que su fantasia. Pero, Inevtablemente, Ge volverd.a reunir en algan otro campo del espacio petquic, En los casoa de perturbacion grave, el esul- {ado eo uma exclusion radical: esesion, Ein alguna medida, Ia escision es indispensable pa- ral trabajo del aparato psiquico, que no debe ver re- tcargado o avasallad por a tension y, para sobrevivit, {lene que redeseubrielacuaiidad de bienestar. Por oto lado, tina eveision radical deja de lado y elimina facto- Fes tndispensables para el trabajo de representacion, En estos casos, en lugar de hacer las veees de una t+ tnitaelén convenient, la escsion produce una ampu {heion del yo. Bn efecto, en el tipo de escision al que ime reflero aes no solo son segregatdas las represen: {aciones pulsionales destructivas sino también. en el Imo procs, partes importantes 30 (Bln, 182 1963). ‘La causa de la escisién se concibe diversamente, segtin el marco conceptual aplicado, Para Freud, Ia es: ‘isién de que (rato aqui es una expreston de la pul 109 sion de muerte, en tanta opuesta a la acto unifica ‘ora de Eros. Para Melanie Klein es tambien el rest tho de les operaciones de ia puisién de muerte pero tanto se relaciona con el miedo de aniguilacioo Sratrige hacia el objeto. La pulsion de muerte es Freud ce Aint hucrea separadora que opera primeramente ex TDinterno, en el nivel efular, sin que por fwerza se la tercfba como destructiva: mas blen se la ve como dis: Pinta. Bn la teoria de Klein, Yo que interviene es el Miboto y no la idea de destruccion. Para Winnicott, e& aiSiou) dlsociacidn se relaeionan tambien con la des {uccion, pero con importantes diferencias, En primer Jager, Wigaicots eupone que experienciasdestrictivas qelupranas no pueden ver sentidas como tales n cas seeiamadurer del yo: por falta de integracién. elias Ef deemejan mas unas agoniaseimpensables. Bn se fund ger, in actitd del ambiente externo es eX Bena mportancia para el contenimiento de e808 & lados desintegrades, ‘Gn tol opinion, la escisin difeiimente se coneibe sin ou terming complementario: la confusion. La ese Sidedel ning es una reacciOn muy basica a ja acttud Ger Ubjeto, que puede ser doble: 1) una falta de fusion {Jor parte dela madre, con laconsecuencia de que aut pivtas experiencias reales de encuentro el nino oe er Gente con un peeho en blanco: 2) 1m exeeso de fusion, Shin madre es ineapaz de renunciar. en aras del ree Siento de su hijo. a la dicha paradisiaca recuperad ft través de la experiencia de embarazo. Ta separacion nihepecho depende de un doble con sentimiento, un cantrato de dos partes que relaeion Saree hijo con referencia aun fercero potencial —el ‘aurea que est presente desde el comienzo en Ia pst Pe do ln madre. El resultado paradésico de la fusion Miia caso es que a) algo sera excluido, segregedo ppurla defensa, desmentido y de hecho se volver ne- Fmtorabte'o impensable, yb} los términos segregados fan andlogamente a como retorna lo reprimi- Tacon la diferencia de que tendrén wna cualidad s0- fraaiva, persecutoria, por via de identfieactén proyec Uva. En otras palabras. la escision en este caso dese ‘boca en la polaridad »pérdida-intrusione, 110 ‘Seria enteramente erréneo pensar que la eseision se produce solo 0 sobre todo durante la separacion de 6 Bterno reapecto de Io tnterno, De hecho. también Rabreviene eseision tal vez hasta predominantemen- oeestre paique y soma y, en consetuenis, entre sen we Soca corporates j afectos, Esta disociacldn puede ‘Sfoptar formas outils, como en el proceso aslador que isjunta afecto, representacion y pensamiento. inne: ai tes deci que ls accion motora misma puede ser Segregada del mundo psiquico. Lo que deseo destacar SeatrEs que Ias dos fronteras establecidas por la esc ia separa lo somdtico y el cuerpo ibidinal, por una Sorte realidad psiquiea y relidad externa. que in Bluye el cuerpo Ibidinal y la accton, parla otra ‘Como consecuencia, podemes suponer que cl $0 ‘ma segregato bard intrusion en la es{era psiquca en Ta forma de sfatornas Paicosomaticos, histeria o hipo Condrlasia. a siferencia entre sintomas psicosomat Seee histeria de conversion es que mientras que 10> ‘Shrtomas de conversien se edifican de manera simbo- flea y se relacionan con el euerpo libidinal, ios sinto thus paicosomatioos no son de naturaleza simbelica. ‘Son manifestaciones somaticas cargadas ée una ngre Sion pura refinada, En cuanto a los sintomas hipo Sondtlacos, son representaciones penosas de érganos SSndticos lenos de una lbido narcsista, de=ubsdint- vada y destructva, c ‘i Sonsideramos la segunda frontera, podemes st- poner que existe la misma falta de simbolizactn en Br wasaje al actor, En la medida en que se tata de un Sintoma, el pasaje al acto puede tener un signiicado “Smbolco para el analista, pero ninguno desde el pun fode vista det paciente. Bs una mera descarga, clego 1S Saclente para su poste significado. No se enlaza ‘Son nada que no sea su contenido maniiiesto, racio: Stalizado, Aqui reside la diferencia entre actuacion y eto alld, que es algo desprovisto de significado pe qo que rapidamente Io adquiere por medio de las aso ‘Clationes consiguientes a su relato. En sintesis, pode Sos decir que reaceiones somaticas ( pstcosomaticas) 7 pasajes al acto tienen [a misma funeion: una descar i defensiva frente a la realidad psiquica ‘Ahora podemos entender Ia diferencia entre esc sign y repreaion. En la represion, Ia energla psiquica std ligada, Los nexos permanecen Intactos ¥ se re- ‘combinan con otras representaciones o afectos, der ‘vados det ello, Los términos originales dentro del ne- {xo asoctativa son remplazadios por ottos, pero la fun: ‘lon conectiva es slo rasformada. no alterada. En la ‘ecisin, los nexas son destruldos 0 se deterloran ten te que a6lo wn Intenso eafuerz0 permite al analisa con Jeturar lo que pudleron ser. Esto me lleva @ objetar fuertemente la dea de que los pacientes fronterizos se cnregan a un pensamiento de proceso primarto. ‘Son importantisimas las conseeuencias de esta di ferenciacion entre represion y escision. Bl retomo de lo reprimide da origen ala sefal de angustia, El retor- rig de los elementos segregados se acompana de sen Saciones de grave amenara, de sdesvalimientos(iIN0- Slgkeites el termino de Freud), saniquilaeia (Klein, 1946), serror sin nombre: (Bion, 1970), sdesintegra. tons osagonias (Winnicott, 1958). En os casos en que on amenazadas sobre todo las investiduras narcisis- tas, la experiencia se earanteriza por lo blanco (Green, 19690). Consideremos ahora los conceptos que define la esfera psiqulca: en efecto, hasta ahora slo hemos exa- ‘minado los elementos rechazados de laesfera psiqui+ fa, Son los mismos: esision y represion. Sila repre siin es un mecanismo diigide hacla adeatro, la esc sin en este caso acta sobre su Indo interno. Aclararé Te que quiero decir. 1a idea de una eseision dentro de Ia esfera psigui- ‘caes problematica. Es evidente que la eseision en las pperturbaciones fronterizas no es lo mismo que la re- resin en las neurosis o la escision en las psicosis, He senalado que la represign en la neurosis se acom- pana de una simbolizacion interna atestiguada por el {etorno de lo reprimido, En comparacton con la pico sls, podemos decir que se trata aqui de una eseision en detalle, como lo han observado Klein y sus partida Fos, Ademe a eseiston del fronterizo tampoco se re- duce simplemente al clivaje que se produce en la de presign, si bien la depresion ¥ el colapso mental son resgos constantes en las perturbaciones fronterizas. En ti opinidn, la especiicidad del fronterizo esta en fue Ia eacision se desarrola en dos nlveles:eselton, Entre to patqulee y lo no peiqulco (soma y mundo ex- {eon y escsion dentro dela esfera petquica. La esct sign entre eladentro y el afuera esta determinada por fa eonstitucton de un contenedor yolco, ¥ un sostén. pS envoltura del yo, euyos limites estan bien delines fos pero mo funcionan como edseare protectora. Bn realidad, las fonterae del yo son en buen medida els ticas. No obstante, esta exibilidad no conduce a wna conducta adaptativa: ms blen opera como una fue fuseion de expansion, deretraccion, ode ambas, para ‘enfrentar la angustia de separacion (de pérdida) la sn- (gustia de intrusidn (de tmpiosién), 0 ambas. Esta va- Fabilidad de las fronteras yolcas no se pereibe como lun enriquectmiento de experiencia sino como una per {ida de control, como el timo recurso defensivo frente {la implosion, Ia desintegracién ola pérdida. Esta cn- Joltura yotca, esta edscara inefiaz, protege al yo vale perable, que cs rgido, ala ver que earece de cohesion {Eaeseiston interna revela que el yo se compone de {erentes nticleas que no ae comunican. Bstos nitclcos del yo puieden recibir la designacidn de archipiclagos. Gon esta metifora intento describ clertas carac teristicas singulares de estas eptructaras psiquicas. En Itigar de una miriada de (sas rodeadas por el oveano, podriames pensar en Ionjas asladas de tierra delinea fas por un espacio vacio, Estas islas no tienen Ia post- bilidad de conectarse entre ellas. Hay falta de cohe: sin falta de unidad y, sobre todo, falta de coherencia yy una impresign de contradictorios haces de relacior thes dicho aproximativament: la coexistencia de pen ‘amlentos, fects, fantasias contradictoris, pero ade- ‘mas de subpreductos contradictori del principio de placer, del principio de realidad o de ambos. Esta falta, ‘eintegraci6n comunica al observador una sensacion fe frialdad, tina ausencia de vitalidad, como si esas {slas de yoos separados (relaciones sel-objeto) no lle: igaran a formar un ser todividual. En mi opinién, es. {as islas de ndcleos yoices son menos importantes que ‘lespacio que las rodea, que he definide como vacio, ns Futildad, falta dela pereatacion de presencia, contac to limitado, son otras tantas expresiones de la misma waciedad béslen que caracteriza ls experiencia de ia pervona froateriea, Otra Vez. con Bion insisto en aim Sortaneia de la fncign coneetva o, para no salirme fel marco conceptual de Freud, dela funcion igadora Se Eros El diseurso del fronteri2o no es una cadena fe palabras: repreaentaciones o afectos sino mas bien. Jomo un collar de perlas que no tuviera cuerda— de palabras, representaciones y afectos contigues en el ‘Hempoy el espacio pero no en su sentido, Toca al ob Servador establecer, con su proplo aparato psiquleo Joe nexoe fltantes He indicado que el mecantsmo dela escistn opera siguiendo una modalidad que se define mejor como de presion primaria. En mi opinion, codos los demas me ‘enismos de la defensa pstquica(idenificacion proyec: fivae introyectiva, desmentida, omnipoteneia, ete) son fonseewenciae del mecanismo basico de fa escisién, {que es.uno de los dos mecanismos polares del aparato paiqulco, La otra polaridad esa depresion. Por depre Elon no cntiendo fo que se suele deseribir con ese te ‘ino sino, mae blen, sna desinvestidura radieal que Engendea estados animicos en blanco sin componen- {esafectivos, sin dolor, sin sufrimiento. Los rasgos ci- hicos asociados a este mecanismo gon ana serie de fe rnémenos de que se quejan los pacientes fronterizos: ‘ificultad para la representacion mental, mala concen= tracibn, imposibilidad de pensar. todos los cuales ya hhan sido presentados como palcoss blanca (Donnet ¥ Green, 1973) Este es el nbcleo paicético. La deprestén. primavia puede conducir a una reinvestidura al azar fon enerzia pulsional (predominantemente agresién) Jia un refuerzo de Ia escision, oa sentimientos de no “Enxistenciay de iealidad de imagenes de self y obj fo. En los casos en que se produ ulterior maduracton, Inpostcion depresiva normal Hega a ser un refugto re- igresivo para esta depresién primaria. Como defensa frente ala amenaza de Ia depreston primaria se esta: blecen precipitadas y prematuras relaciones de obje toy la adolescencia se prolonga desmedidamente, La Imposibiidad de hacer duelo y de tolerar sentimlen- a4 = tos de culpa son rang sallentes reaponsables de ac lactones palcopéttons 0 de conductas de personalidad ‘omosi, de perversiones polimorfas,drogadiceién yal tohoisino. Estos dos mecantsmos basicos, la escision. ‘Va depresion primaria, e produeen dentro de la rea iidad interior del self Ya senalé fa lasticidad de las fronteras yoicas como un modo de reaccion a la an dosti de perdida, ala anguatia de separacién o de it~ ‘fusion, 0 a ambas. En m{opiniin, es preciso conslderar dos reas fron terizas dentzo del aparato psiquico. En primer lugar, fun drea que es intermediaria entze lo inconciente ¥ 10 Conciente preconeiente; su manifestacion es el sueno, En segundo lugar, el drea de juego 0 de iusion (elves acto potencial de Winnicoti). Las pacientes fronteri= Zos se caracterlzan por el fracaso en crear subproduc: {os fanctonsles del espacio potencial en lugar de ma nifestar fenémengs transicionales,creansintomas que ‘esempenan la funcion de fenémenos transicionales. ‘Can esto no qulero decir que sean Incapaces de erear ‘objetoso fendmenos transicionales. Afirmarlo impor- {aria deseuldar el hecho de que muchos artistas son onterieas. Solo se puede sastener que, fesde el punto de vista del aparato psiquico de estos {ndividus, los abjetes ofendmenos transteionales 20 tlenen, como en otras personas, valor funcional. ‘Segan lo han comprobado muchos de los que tra bajan en este campo, el andisis de suesios es, por re fla general, infecundo en el trataratento del fonteri- bo. La razon parece ser que los sueos del paciente ftonterizo no expresan un cumplimiento de deseo si ro que sirven a una funcién de evacuacién. Como lo hha sefalado Bion (1963), la sbarrera del suenoves una, fancién importante del aparato psiquico. Parece que ten los casos fronterizos la barrera del sueno es eflcaz, pero el propaito del sueo no consiste en reelaborar etofios pulaionales sino en deseargar el aparato {gulco deestimulos penoaos.o, con un términe de Bion. ‘desu racreciom. Los suenos de los pacientes fronteri ‘208 no se earacierizan por la condensacién sino por la concretizaciin. Se pueden observar también frac sos nizieos en esios pacientes: despertarse para no 30- ns asics har o encontrarse rodeados por una atmésfera extra- ‘ha, inguietante, que consttuye un estado ontrieo tran Stelonal semejante a una pesadilla, En ejemplos més fogradon los suefios con aetualizaciones del sef en el fspacio onirica, intentos de reformular experiencias (rauméticas (Khan, 1974). Bn estos ejemplos, Io més, ‘ignificative para el andlisis noes el contenido latente fde suenos sino la experiencia del sofante. Pasemos ahora a otro aspecto del problema, El con- tenide de lo inconeiente esta compuesto por relaco nes de objeto que incluyen eea objetos parciales, sea bjetos totales (personas). La historia de las relaciones de objeto esta Compuesta por Ajaciones pregentiales yy regresiones dentro de una secuencia mas 0 menos Dredecible de faaes preedipicas y edipicas del desarro fio. En nuestra deseripetin de la pstcosisblancar, he- ‘mos proptesto con Donnet (1973) el concepto de i hangulacion ode relacionestr-dldicas. En este tipo ‘decomplejo semejante al de Bdipo, existe una relacion friangular en que los dos personajes parentales se eX: perimentan camo opuestes polares afectives, ‘Una persona normal alienta sentimientos ambiva- Tentes. postive y negatives, hacia cada uno de los pro enitores, Pero en las personas fronteriza existe una. tstisién entre los dos padres segiin las nociones de lo, ‘alos y lo ‘bueno lo spersecutorio:y 0 videalizados: tuno de los progenttores se percibe como totalmente Imalow y el otro, come statalmente bueno». Dentro de {sla relacion, el objeto parental -bueno: se pereibe co- fo debi e inefiear y la sobrevaloracion dela idealiza- ion sbueno- no deflende de Ia smaldad» omnipotente {del otro progenitor. El miedo de que ser abandonado por el objeto parental intrusivo »malov no leve a otra parte que aun desierto, y de que el objeto buenos idea Iieado sea nalcanzable. demasiado distante y poco con fiable, pone al paciente fronterizo en un dilema inso- Tuble, Shapiro y aus colaboradores (1975) han descr!- {oel modo en que el fronterizo puede ver elreceptaculo fe padres perturbados de manera complementaria,ca- ‘da uno de los cuales proyecta sobre el hijo la parte des- ‘mentida de su personalidad enferma. Ahora bien, ne ‘division de bueno y malo en sendos objetos pone en fescublerto la division de un objeto con des lades. ‘Winnicot, con su concepto de self also», nos pro- ‘eur6 un earsino para comprender la functén de los ras gos narcisetas en pacientes [ronterizos. Como el self {also no we construe sobre las experiencias reales del ‘pacer sino sobre la complacencia con la imagen que Temadre ene de au hijo, te organizacion del wel fal {:estd mids al servicio del nareaismo del objeto que ‘Sel narcsismo del self de aqu! la paradja de que ext tan racgos narcsisiasy la sensacion de que estos son Ge indole diferente de las rasgos usuales de las llama: Ges personalldades narcsistas, La respuesta a esta con {radietora evaluacin c= que el coll falsos es provisto por un narcisiamo prestado, et narcisiamo del objeto En consecueneia, el funcionamiento mental del ana lista perplejo se presenta como el doble del funciona: rmiente mental y de as relaciones de objeto del pacien- te: simétrico, complementario u opuesto. Cabe senatar que las impasses con que se enfrenta cl pacientefronterizo no eon experimentadas po € 0- Jen la reactivactén traferencial de su funcionamiento mental y de sus relaciones de objeto, sino en su vida ‘ral Lo fuerzan a maverse constantemente de un Ii {Gara oo, a alejars para escapar det objeto malo y [lcanzar el -bueno en algin eantuario ideal, colo para ‘ser reeaplurado por alguna figura sustituta del objeto “maloy, agin maldito agente del objeto malo, enviax do para stormentarlo y para devolverlo a su nido de- testado. ‘Acerca del funcionamiento mental del fronteriz0, se puede observar un modo paradojico de elaboracien Yalhe abundado sobre el papel de la excision. Puedo agregar que los diferentes componentes del aparato Driquico estan enteramente confundidos. No existe dis tinelén clara entre pensamientos, representaciones y afectos. El pensamiento racional es dificil porque los procesos de pensamiento estin cargados con cantida- des masivas de afectos, y no pueden ser desasidos de Jas pulsiones salvo por via de escisién intensa, acom- patada a veces de creencias magieas y de wna omni potencia de investidura narcisista, Ademas, sl consi- a7 “| deramos las representaciones mentales del fronteriza, Dpademos ver que la eonglomeracion de afectos y re Dresentaclones es tal que de hecho los afectos operan Come representaciones,y estas, como afectos. Por aia Sidura ve puede deo que la actuacton (en tanto se opo dhe a i action especifical es el genuine modelo antti- Co en estos casos, se dirja hacia adentro, con produc- ‘ion de sintomas pelcosomaticos. o hacia afuera, por Via de pasaje al acto. La actuacion no se circunseribe acclones fantasia, suenos, palabras, toman Ia fan {ibn dela aceién. La actuacién Hlena el espacio y no permite la suspension de la experiencia. La razdn de sta itoleranesa a la suspension de la experiencia es facreencia de que de ella no pueden emerger creacion ‘i eonocimiento algunos. La suepension es asimilada fla inereia 0, como lo presenté Khan (1974). a una ependencia rremedlable. La conftanizabasica es fur ‘Samental para aceptar la pasividad. La pasividad es pefelbida siempre como la amenaza suprema, abierta 8 toda clase de peligros en manos del objeto maloeom- nipotente "He de proponer ahora una bipétests Anal con res- pecto al jucio y el examen de realidad del fronterizo Gon arreglo al prinesplo de realidad, el aparato psiqut to tene que decidir si el objeto esta o no esta resem {ers nos, Con arregloal principio de placer, y pues- to que la negacidn no existe en el proceso primario de To inconciente, existe sdlo el ssh. Winnicott ha desert to la condicion del objeto transicional, que combina {lose elonce, como el transiconal es: y no-es-cL-pecho. ‘Descubrimos precursores de las observaciones de Win- plcott en la deseripeion que hace Freud del juego del tarvet! (1920g1y en su deseripldn del Fetiche (19270). Perocreo que existe otra manera de abordar esta cues: lian de deeiir si el objeto es 0.no es. La ejemplilca eljuicio del pacientefronteriz; existe una cuarta res" puesta posible: nf sh nino». Es una alternativa al re- Husamlento de decidt- El objeto transicional es unre: Ihusamiento positiva; es 0 4n sie 0 un sno», Los sin- tomas del fronterizo, que hacen las veces de objetos transicionales, offecen un rehusamiento negativo de decides pi sk 94 no», Podvlames expresar la misma 118 ‘elaciOn en términos vivenciales preguntando: Esta objeto muerto (perdido) 0 vivo (Gescublerto? 02 {oy muerto 0 siv0% Jo eual el puede responder Vi ‘Un concepto ain que puede resutar fecundo para nuestra discusion es el de atisenciar de Lacan (1966). Como yo lo entiendo, este concepto no se reflere ni a fa perdida nia a muerte, La «ausenciae de Lacan © Jecondicién intermediaria porque se situa a mitad de famino entre intrusion y perdida. Un exceso de pre Sencia es intrusion, un enceso de ausencia es pérdida $i par presencia-ausencia no se puede disociar Los dos {cemines estin interrelacionads, como Jo estan per ‘cepeion y representacién. Pero hace falta un enorme efucrzo para tolerar la auseneta, para difeenciarla de fa pérdida y para otorgar al mundo de las represents tones su pleno papel en la imaginacion y el pensa- Intento, Slo la atiseneia del objeto puede servir de es {Grmulo sta fmaginacion y al pensamiento; con otras palabras: la ereatividad y la vitalidad psiquicas JReuden a mi memoria en este punto los conceptos de fa capacidad de estar solo en presencia de la madre Ge Winnleot (1968) y dela capacidad negstiva de Bion. (1970) Para conclu, quero ofrecer una hipétests mis. Es tase efiere ala nocion de proceso tereiari, no mate- alizadlo pero hecho de mecanismos conjuntives y dis Jumtivoe para actuar como intermediario entre proce- fo primario y proceso secundario, Ks el modo mas ‘licaz de establecer un equilibrio mental Nexsble y el fnstrumento mas rico para la creatividad, que pone 3 resguardo de la nocividad de la escision, cuyos exce- Soe conducen ala muerte pslquica. Noobstante a es Cision es esencial en tanto provee una via para ibrar te dela confusion, Bs el no del vasallaje del ser ut matto este de servira dos contrarios amos: separacién ¥¥ reuntan; @ uno o al otro, 0a ambos. 1s

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