Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
por parte de un arcipreste, ficional o no, que suelen acabar en fracaso. Sus
nos informa sobre los peligros del loco amor, y avisa de las ventajas del buen
amor.
como una obra abierta a la interpretación libre del lector, pues cada uno de
ambigua.
Se deduce pues que los esfuerzos de dar una única explicación del
Libro son estériles debido a que dejan múltiples cuestiones con más sombras
los debates consagrados, sino que estos son empleados como evidencia de
la temática propuesta: ¿El Libro de buen amor como obra que encierra un
1
Joset, Jaques. Juan Ruiz, Arcipreste de Hita Libro de buen amor, Altea, Taurus, Alfaguara, S.A, 1990.
p.28
2
Ibid. p.28
conflicto interior del hombre de la Edad media, la dicotomía conflictiva entre
3
la fe (religión) y el deseo mundano (líbido) propio de la relajación de
rebeldía frente a los valores antiguos por medio de las pasiones mundanas.
hace perder el loco amor del mundo al alma y al cuerpo, y los muchos
generación asociativa del loco amor con el mundo que corrompe el alma y
puerta a la esperanza para aquellos que decidan seguir el buen amor: Y así
amando a Dios...5
3
Serrano Segura, José Antonio, http://jaserrano.com/LBA/ apartado octavo: La intención (sexto
párrafo)
4
Serrano Segura, José Antonio, Juan Ruiz Arcipreste de Hita: Libro de buen amor, prólogo en prosa,
version modernizada del prólogo tomado de http://jaserrano.com/LBA/
5
Ibid.
Poetas lamentativos que llevaron al extremo la concepción de amor
4
platónico. (Diagram 1) El poeta se encuentra, al igual que el arcipreste en
Diagrama 1
La muerte es un tabú social, en este caso minada por la moral católica; Juan
simboliza las dos etapas marcadas del mismo: su juventud, dónde, desde su
hecho, dos de las catorce aventuras de loco amor acaban topandose con la
primera parte del libro hasta una actitud de meditación y reflexión a cerca de
Humor empleado como elemento innovador para anestesiar el dolor; así, por
mismo tiempo de los peligros del loco amor (amor mundano, pecadores),
6
Brey Mariño, María. Arcipreste de Hita Libro de buen amor, Editorial Castalia S.A, 1995, p. 15
Como digo, la muerte es uno de los tabúes de siempre en la sociedad,
6
es escondida y relegada a la oscuridad del trastero moral, en lugar de
refleja los variados enfoques medievales sobre la muerte al tiempo que trata
copla, 1520.
creencias.
7
Ibid. p.255
8
Ibid. p.255
9
Ibid. p.257
Además del pesimismo expresado por la muerte, siempre que no se 7
10
Lida de Malkiel, María Rosa. Juan Ruiz, Selección del Libro de buen amor y estudios críticos,
Editorial Universitaria de Buenos Aires, 1973. p.230
11
Lida de Malkiel, María Rosa. Juan Ruiz, Selección del Libro de buen amor y estudios críticos,
Editorial Universitaria de Buenos Aires, 1973. p. 231-232
12
Ibid. p. 249
13
Ibid. p. 249
escapar por la debilidad humana, pero contra el que hay que oponer
8
resistencia desde el amor a Dios, el buen amor que te guiará hacia una
actual de amor, concebido como algo positivo. Así pues, este es también una
Todo esto es posible debido a una concepción del mundo como algo
transitorio y fugaz, donde el cuerpo es cárcel del espíritu14, unos grilletes que
expresión del loco amor, sirvan de ejemplo las próximas citas que recorren
todo el texto:
(173)
14
Esta concepción del cuerpo como cárcel o prisión proviene de una larga tradición discursiva, más
concretamente de una dualidad que surge del desconocimiento real de un hecho histórico: fue material
la prisión del arcipreste o tan solo metafórica:
Dámaso Alonso se inclina con bastante decisión hacia la idea de ver el encarcelamiento del Arcipreste
como suceso real (<<tres poetas en desamparo>>, artículo recogido en el volumen De los siglos
oscuros al oro, Madrid, 1958).También manifiesta el mismo criterio en <<La cárcel del Arcipreste>>
(cuadernos hispanoamericanos, num. 86, febrero 1957, p.165-177). Pero al término de sus
razonamientos, advierte, cauteloso, que por sostener tal tesis <<no pondría la mano en el fuego>>
María Rosa Lida prefiere considerar como espiritual la prisión discutida, pero concluye: <<ni he
excluido, ni excluyo la posibilidad de que el poeta haya expresado una situación concreta en estilo
devoto convencional>>. (Nuevas notas sobre el Libro de Buen Amor>> XIII, 1-2 p. 17-82
15
Brey Mariño, María. Arcipreste de Hita Libro de buen amor, Editorial Castalia S.A, 1995, p. 13
Yo no perderé a Dios ni al bello paraíso
por pecado fugaz como sombre de aliso; 9
que no soy tan sin seso para tal compromiso,
quien toma ha de dar algo, díselo el sabio aviso.16
(218)
De todos los pecados es raíz la codicia
es tu hija mayor; mayordoma es la ambicia
y tu alférez también, la que tu casa oficia;
ella destruye al mundo, soborna a la justicia.17
(318)
Nunca estás inactivo: a quien una vez atas
haces pensar engaños y muchas malbaratas;
deléitase en pecados, el seso y le arrebatas;
con tus malos oficios almas y cuerpos matas.18
(1501)
Aunque sea pecado contra nuestro señor
diríjase a una monja en galanteador,
¡Ay Dios!, ¡Ojalá fuera yo mismo el pecador!
¡Ya haría penitencia, consumado el error!19
(1604)
Todos los demás pecados, mortales y veniales,
De estos tres nacen, cual ríos de las fuentes perenales;
en los tres está el comienzo y suma de todos los males.
Dios nos proteja de padre, de hijos y nietos tales.20
perdón a los pecados. Muestra evidente del conflicto interior que nos toca
(1727-1728)
16
Ibid. p. 69
17
Ibid. p. 75
18
Ibid. p. 89
19
Ibid. p. 252
20
Ibid. p. 267
en que los pobres rogamos
por quien nos dio que comamos 10
y por el que darlo quiso.
Dios, que padeció sumiso
Os dé el Santo Paraíso.21
ancho del Libro, asociada al pecado como hemos visto, llega a su punto
directa también el pecado del que forma parte de forma innata; por lo que
ambos sostuvieron:
(182)
medio de iras y enfados, que no tiene regla fija por lo que es confuso, y
con nada, sino que por el contrario, lo humilla y hace que se sienta asustado.
(183-186)
21
Ibid. p. 290
22
Ibid. p. 70
Con engaños, linojas y sutiles mentiras
emponzoñas las lenguas, envenenas tus viras, 11
hiere a quien más te sirve tu flecha cuando tiras;
separas de las damas a los hombre, por iras.
salvación a través del buen amor. Dios nos dio una segunda oportunidad tras
Con ello, Juan Ruiz predica desde su prólogo en prosa el comienzo del
resurrección.
23
Ibid. p. 70-71
24
Lida de Malkiel, María Rosa. Juan Ruiz, Selección del Libro de buen amor y estudios críticos,
Editorial Universitaria de Buenos Aires, 1973 P. 229
25
Serrano Segura, José Antonio, Juan Ruiz Arcipreste de Hita: Libro de buen amor, prólogo en prosa,
version modernizada del prólogo tomado de http://jaserrano.com/LBA/
Por si esto no evidenciara el mensaje, nuestro escritor reincide
12
posteriormente en términos semejantes apelando al buen entendimiento de
Y así este mi libro bien puede decir a cada hombre o mujer, al cuerdo
y al no cuerdo, tanto al que entienda el bien, elija la salvación y obre el
bien amando a Dios, como al que prefiera el loco amor en el camino
que recorra: te daré entendimiento. 26
de Dios. Pues nuestro Dios entiende de las tentaciones con que el hombre es
fruto de la debilidad que nos cararcteriza. Sin entrar en contradicción por ello
26
Ibid.
27
28
De hecho el mismo arcipreste incurre en el pecado terrenal y al mismo
13
tiempo, por ejemplo, reprocha a don amor. Y, si se considera autobiográfico,
una y otra vez la agonía del sufrimiento y su conflicto hasta el final del Libro.
otros valores. Pero, aún pecando, su fe en Dios como amor puro se mantiene
29
Ruiz por medio del Libro de buen amor, un amor firme e incondicional que se
14
verá recompensado con el amor eterno del padre de los hombres.
nosotros con el poder de su gracia. Y, por otro, Juan Ruiz nos comunica que
por ello que el dar una única explicación, afirmando o negando el valor del
religiosa.
Bibliografía
15
Brey Mariño, María. Arcipreste de Hita Libro de Buen amor, Editorial Castalia
S.A, 1995
Lida de Malkiel, María Rosa. Juan Ruiz, Selección del Libro de buen amor y
estudios críticos, Editorial Universitaria de Buenos Aires, 1973
María Rosa Linda, Nuevas notas sobre el Libro de Buen Amor XIII, 1-2 p. 17-
82
Serrano Segura, José Antonio, Juan Ruiz Arcipreste de Hita: Libro de buen
amor, prólogo en prosa, version modernizada del prólogo tomado de
http://jaserrano.com/LBA/