OPINION SOBRE EL BATOBUS

¡¡¡¡Aleluya!!!! ¡¡¡por fin ciao me ha dado de alta un producto para el que llevaba esperando quince días!!!! Y es que a
este paso me voy a quedar sin ideas sobre las que escribir, porque me paso días y días esperando que se acuerden
de mí y me dejen escribir sobre ellas. Pero bueno, menos lamentaciones y más acciones, aprovecharemos que ya
han dado de alta (por fin) el producto y hablaremos de él, que a eso hemos venido…
Hace un par de semanas tuve la maravillosa oportunidad de volver a París para pasar el weekend (¿a que queda
pijo-chic? Ya sé que no me pega nada). Vamos, que durante un finde de dos días tuvimos la oportunidad de visitar la
ciudad del Sena, y a mí que me gusta más un viaje que a un niño un caramelo, soy de las que piensan que cualquier
viaje es bienvenido, y en el caso de París, más si cabe. Hacía además tres años que no me perdía en la ciudad de la
Torre Eiffel y con la super oferta que encontramos con el hotel (del que ya os he hablado en una opinión anterior), no
podíamos dejar la oportunidad. Así que en plan low cost a bordo de easyjet y con ofertaza de hotel incluida, pero con
muchísimas ganas de recorrer París y pasar un finde estupendo, nos fuimos a la ciudad del Sena. Ya sé que la época
no era la mejor posible ya que el invierno es cruento y en París más aún, pero aún así tuvimos mucha suerte el
viernes y el sábado, aunque el domingo nos llovió demasiado, pero disfrutamos igualmente de París y sus grandes
monumentos.
PARÍS Y EL SENA.
París es la ciudad de la Luz, la ciudad de la Torre Eiffel, pero también la ciudad del Sena. En mis visitas anteriores,
nunca había recorrido el río Sena a bordo de un barquito, o en parisino “bateaux”. Sí que lo había hecho
anteriormente en otras ciudades como Amsterdam o Brujas (de cuyas experiencias ya os he hablado en opiniones
anteriores), pero en París no lo había hecho nunca, así que tenía ya ganas de recorrer el Sena y captar las
sensaciones de la ciudad desde el río. Por ello, uno de los propósitos o de las cosas para hacer en este fin de
semana era precisamente pasear por el Sena a bordo de un bateaux. Y dicho y hecho, una de las cosas que hicimos
en París ese fin de semana fue precisamente eso.
No tenía prácticamente ni idea sobre qué barco coger o cómo, así que aprovechando que nuestro hotel estaba detrás
de la torre Eiffel (entre los Campos de Marte y Montparnasse), fuimos andando hasta allí y justo en el embarcadero
que hay enfrente existen varias empresas de bateaux que se dedican a hacer recorridos por el río Sena. Como no
teníamos mucha idea escogimos uno (luego os contaré cómo y por qué), ya que nuestra intención era hacernos una
idea sobre cómo se ve y se siente París desde el Sena y ya de paso desplazarnos hasta Notre Dame viendo el
maravilloso espectáculo que brinda la capital francesa, sin dejarnos las suelas y las fuerzas en la caminata ni hacer el
traslado bajo tierra y no enterarte de nada. Así lo hicimos, con más bien mala que buena fortuna, pero París desde el
Sena tiene una visión distinta, merece la pena el paseo.
BATOBUS, UNA DE LAS EMPRESAS PARA RECORRER EL SENA.
Curiosamente, barco en francés se escribe bateaux y se pronuncia bató, por lo que batobus es la transcripción
directa de barco-bus en francés. Como os dije antes, elegir esta empresa fue fruto en cierta medida de la casualidad,
ya que no disponíamos de referencias anteriores. La diferencia fundamental entre esta empresa de barcos y el resto
(al menos las que nosotros vimos) es que en las otras se cobraba un precio por un único trayecto, mientras que en
batobus, aunque el precio es algo superior, te dan la posibilidad de subirte y bajarte cuantas veces quieras al barco a
lo largo de un día. Es por ello un tipo de bus turístico pero por agua, por lo que el nombre de batobus he de reconocer
que está muy acertado, le viene como de anillo al dedo.
Cuando volví a España, por esa curiosidad que siempre me persigue, me metí en el maravilloso mundo de internet
para comprobar sin batobus disponía de página web, y efectivamente la tiene. La dirección es
http://www.batobus.com/, así que ya sabéis, si pincháis directamente podréis conseguir mucha información
interesante relativa a esta empresa. Eso sí, teóricamente la web dispone de traducción a cinco idiomas: el propio
francés, inglés, español, italiano y japonés, pero en realidad no es así, resulta bastante engañoso. Si clicáis sobre las
diferentes banderitas que identifican estos idiomas os saldrá una nueva ventanita informando de los horarios y tarifas
en cada uno de los cinco idiomas. Pero el contenido total de la web solamente está en francés, por lo que no vayáis
buscando el español. Eso sí, la web es bastante completa ya que nos da buena información relativa al paseo por el
Sena. En ella podréis encontrar los horarios, las tarifas, los recorridos, las paradas donde podréis acceder al batobus,
fotos de los mejores lugares durante el recorrido, notas de prensa, contacto, enlaces a otras webs de interés turístico,
puntos de venta y ofertas especiales. En general, creo que es una web muy completa en la que podréis encontrar
toda la información que necesitáis al respecto del batobus, con la excepción del idioma, que puede llegar a ser un
problema, porque por mucha información que contenga, si no las entendemos, no sirve de nada.
EL RECORRIDO POR EL SENA.
Como os contaba, lo mejor de esta empresa de bateaux en contraposición con otras es que pagando el precio de los
diferentes pases (desde un día hasta todo un año), podréis subiros y bajaros del batobus cuantas veces queráis y a
lo largo de las diferentes paradas que existen en el recorrido. Os indico todas las paradas de las que dispone para
que os hagáis una idea:
1. TORRE EIFFEL. Precisamente ésta es la que nosotros utilizamos para iniciar nuestra navegación por el Sena, ya
que era la más próxima a nuestro hotel, y justo en ella sacamos los billetes para un día.
2. MUSEO D’ORSAY. En esta ocasión no visité este museo, pero siguiendo por la Rive Gauche lo encontráis no
demasiado lejos de la Torre Eiffel. Es la primera de las paradas y una maravillosa opción para conocer uno de los
grandes museos de la capital francesa.
3. SAN GERMAIN DE PRES. Es uno de los barrios más emblemáticos de la capital francesa, una de los barrios de
artistas e intelectuales junto a Montparnasse y Montmatre.
4. NOTRE DAME. De un icono a otro, de la Torre Eiffel a Notre Dame. Ése era nuestro destino y el recorrido
planteado a bordo del batobus, para bajarnos en la gran isla de París y perdernos entre maravillas como la propia
Catedral de Notre Dame o la Saint Chapelle.

5. JARDINS DES PLANTES. Aquí es donde el batobus gira, alrededor de la isla de Notre Dame y encara la otra parte
del río en dirección del ayuntamiento.

6. HOTEL DE VILLE. Este impresionante edifico alberga el Ayuntamiento de la ciudad de París, en pleno barrio de
Marais, que sin duda merece una visita a pie.

7. LOUVRE. Si el museo D’Orsay es una parada obligatoria en los museos parisinos, el Louvre no te lo puedes
perder. Si no puedes visitarlo por dentro por falta de tiempo, paséate al menos entre sus edificios monumentales.
8. CAMPOS ELISEOS. Una visita a París no puede terminar sin la visita a la gran avenida parisina por excelencia, los
Campos Eliseos, que desembocan en el magnífico Arco de Triunfo.
En total son ocho paradas en los puntos fundamentales de París que rodean el Sena. Bajar hasta dichas paradas en
el río resulta muy fácil ya que son muy accesibles y están bien indicadas, aunque tendréis que fijaros bien, ya que al
haber infinidad de empresas que recorren el Sena a bordo de los bateaux, las paradas suelen estar cercanas unas de
otras y a veces puede llevar a confusión. Lo ideal es que os haga buen tiempo y podáis subir y bajar cuantas veces
queráis a lo largo el recorrido, pararse en cualquiera de los barrios que rodean el Sena, recorrerlos a pie y luego
regresar a esa parada o la siguiente y continuar viaje en barquito. Ésa era nuestra idea, aunque luego no nos salió
exactamente cómo lo planeamos, pero ya os lo iré contando a lo largo de la opinión.
PRECIOS.
Como os decía antes, cuando llegamos al embarcadero frente a la Torre Eiffel, no teníamos mucha idea de qué barco
coger, ya que había por lo menos diez tipos distintos. Nos fijamos en que un solo viaje en muchas de las empresas
costaba 9€, mientras que en el batobus por 12€ podías subir y bajar cuantas veces quisieras a lo largo del día.
Además, si lo deseabas podías comprar un pase de dos, tres o hasta cinco días en lugar de un solo, y te salía mucho
más económico. Ésa fue la razón por la que nos decantamos por esta empresa. Os dejo las tarifas actuales de sus
trayectos, que también podréis consultar en su web www.batobus.com

PASE DE 1 DÍA: 12€ para adultos, 6€ para menores de 16 años y 8€ para precios especiales (luego os indico qué es
esto).

PASE DE 2 DÍAS: 16€ para adultos, 8€ para menores de 16 años y 11€ para precios especiales.

PASE DE 5 DÍAS. 19€ Para adultos, 9€ para niños menores de 16 años, 13€ para precios especiales.

PASE DE TEMPORADA: 55€ para adultos, 35€ para menores de 16 años. En este caso no hay precios especiales.
Los precios especiales se refieren a descuentos con ciertas tarjetas, casi todas ellas francesas. Te hacen este
descuento si posees el carnet de estudiante, tarjetas Imagine R, Orange, Integrale, Amethyste y Emeurade. La
verdad es que desconozco la mayoría de ellas, pero os las dejo aquí porque a veces esta información puede venir
bien para gente que va de Erasmus a París o que por la razón que sea vaya a pasar allí una larga temporada. El
pase para todo el año viene muy bien, es como si tuvieses aquí el Bonoparques o algo similar. Quizá hasta exista
gente que vaya en batobus a trabajar, yo de hecho tengo una amiga que vive en Londres y que cuando por el verano
la ciudad se llena de turistas siempre iba en barco al trabajo a lo largo del Thamesis.
La verdad es que entre el precio del pase de un día y el de dos, te compensa cogerte los dos días. Nosotros no lo
hicimos porque íbamos a estar únicamente dos días en París, el sábado completo y parte del domingo. El domingo
planeamos irnos a pasar la mañana en Montmatre y además nos diluvió, así que no gozamos de lo que se dice
precisamente un buen día. Luego a mediodía tuvimos que volver al hotel a recoger las maletas ya que nuestro vuelo
salía a media tarde, y llegar hasta Charles de Gaulle desde la Torre Eiffel te lleva más de una hora.
HORARIOS.
¡Ojo con los horarios!, quien avisa no es traidor… Lo digo porque nosotros no tuvimos ese ojo y nos encontramos con
una sorpresa no demasiado agradable. La idea inicial que yo tenía en mente era coger el barquito, irnos a Notre
Dame, comer por el Barrio Latino, recorrer el barrio del Marais y a media tarde regresar en barco al hotel. Pero sobre
todo, me encantaba la idea de volver a coger el barco por la tarde-noche y visitar París iluminado desde el Sena.
Craso error, ya que al ir en invierno el horario del batobus era muy limitado y desde luego no funcionaba por la noche,
pero ¿para qué íbamos a leerlo?. Fuimos cuatro personas, pues bueno… nadie lo leyó y luego nos pasó lo que nos
pasó. Hasta Notre Dame perfecto, pero después de ir a comer al Barrio Latino tranquilamente y en horario español y
de recorrer el Marais a pie, a eso de las seis y algo decidimos acercarnos a coger el Batobus en la parada del Hotel
de Ville. Y claro, el horario del batobus ya había terminado, por lo que al final pagamos 12€ cada uno por un único
trayecto de tres paradas… En fin…
Os dejo los horarios. Si tenéis pensado ir a París mirarlos bien sobre las fechas en que haréis vuestro viaje, y de
todas formas os recomiendo que visitéis la web www.batobus.com por si se han producido cambios.
Empezamos por advertir que el Batobus no funciona todo el año, sino que únicamente está en funcionamiento desde
el 6 de febrero hasta el 30 de noviembre, por lo menos en cuanto a lo que respecta a este año 2009. Por ello si vais
en diciembre, enero o hasta el 5 de febrero, no lo encontraréis.
El horario será desde las 10.30 horas hasta las 16.30 horas en fechas incluidas entre el 6 de febrero y el 19 de
marzo, y desde el 5 hasta el 29 de noviembre. Nosotros cogimos el batobus el 7 de marzo, por lo que cerraba a las
16.30 pero como no lo leímos…
Este horario se amplía de 10 a 19 horas (un horario más amplio al menos y mejor) en fechas incluidas entre el 20 de
marzo y el 28 de mayo, y desde el 31 de agosto hasta el 4 de noviembre.

Y el horario ya es definitivamente muy amplio desde el 29 de mayo hasta el 30 de agosto (época plenamente estival)
con horario de 10 de la mañana a 21.30 de la noche.
Por ello, salvo que vayas en invierno sí que te compensa coger el batobus, porque a lo largo del día podrás subir y
bajar unas cuantas veces. La pega que le veo es que salvo en días muy concretos, es difícil que veas París de noche
ya que por el verano es de día hasta muy tarde y cuando es invierno el batobus cierra muy pronto, aunque
probablemente en algunas fechas como finales de octubre sí que puedas ver París iluminado por la noche desde el
Sena.
LOS BATEAUX QUE RECORREN EL SENA.
El batobus es un tipo de barquito de los más normales que recorren el Sena. El recorrido de todos ellos es
prácticamente igual, o cuanto menos muy similar, pero existen grandes diferencias entre los tipos de barcos. La
fundamental es la que distingue entre grandes barcos con comida e incluso baile y los barcos normales. Los barcos
en que se sirven comidas no tienen bancos, sino mesas con mantel y camareros, donde podréis degustar una comida
o una cena mientras recorréis el Sena e incluso por las noches hay baile en cubierta. No recuerdo exactamente cuál
era el precio de estos servicios, quizá alrededor de 50€ pero teniendo en cuenta que esto es París y como capricho
de viaje, la verdad es que no me resultó tan caro. El menú no era nada del otro jueves, pero en general estaba bien.
Yo tenía la idea de que serían carísimos, pero la verdad es que están al alcance de prácticamente cualquier bolsillo.
Los barcos más normalitos, del estilo del batobus, recorren igualmente el Sena por la misma ruta pero sin cena ni
baile. Poseen una parte central cerrada y acristalada con multitud de asientos orientados en todas las
direcciones para que podamos apreciar la gran belleza de París desde el Sena. Al final del barco existe igualmente
una zona abierta en la que puedes ir mientras te da la brisa (o el terrible frío, depende de la época, que París posee
temperaturas muy traicioneras) y verlo todo directamente, no a través de un cristal. Multitud de turistas eligen el
batobus o cualquiera de los barcos de similares características para recorrer el Sena como otra más de las
actividades o visitas a realizar en la ciudad de la Luz.
PUNTOS DE VENTA DE BILLETES.

En la web www.batobus.com también se indica los lugares dónde podéis adquirir los billetes para el Batobus.
Además de en las propias paradas del batobus que dispongan de cabinas, también las podéis adquirir en el
aeropuerto Charles de Gaulle (en el Orly al parecer no), en las principales estaciones de ferrocarril: Gare de Lyon,
Gare du Nord, Gare d l’Est y Anvers, en el espacio de turismo frente el Louvre y en el de Disneyland París, así como
en el Sindicato de Iniciativa de Montmatre.
FRECUENCIA DE LOS BATEAUX.
Teóricamente en su página web indican que pasan cada quince minutos y no dudo de que sea así, pero desde luego
no en invierno. Cuando nosotros fuimos pasaban cada media hora, pero también es cierto que la afluencia de turistas
era muchísimo menor. Supongo que en el verano sí que pasarán cada quince minutos o incluso menos, pero los
turistas se multiplican, por lo que supongo que las colas serán mayores. Aún así, se trata sólo de meras suposiciones
personales, porque yo de lo que puedo hablaros en primera persona es de mi experiencia con el batobus a fecha 7
de marzo de esta año.
Creo que con esto ya os he contado toda la información práctica que os puede ser de utilidad, pero en cualquier
caso, os recomiendo que consultéis la página antes de ir, así como comparéis con otras empresas que hacen el
mismo recorrido, porque quizá ofrezcan un servicio igual o mejor que el batobus.
MI EXPERIENCIA.
He dudado entre si ponerle a este producto tres o cuatro estrellas, y al final me voy a decantar por las cuatro estrellas
por el axioma de “in dubio, pro reo”. Mi experiencia personal ha sido de tres estrellas o incluso quizá menos, pero
tengo que entonar el mea culpa, ya que gran parte de la responsabilidad recae en nosotros mismos, no en la
organización del batobus. La experiencia fue agridulce porque nuestra idea era realizar al menos tres o cuatro viajes
con el batobus a lo largo de ese día, pero debido a que estábamos en invierno, el horario era muy reducido y no lo
leímos (si lo hubiésemos leído, probablemente hubiese sido otra cosa), pues nos llevamos la sorpresa de que a la
vuelta, a las seis de la tarde, ya no había batobus. Personalmente creo que el horario de invierno resulta demasiado
reducido, y de haberlo leído, no habría cogido esta empresa. Pero entre las prisas, que se iba el barco (que luego
encima lo perdimos y tuvimos que esperar media hora al siguiente) y demás, nadie reparó en ese dato que tenía
tanta importancia. En primavera el horario se amplía y resulta mucho mejor y en verano no hay queja, se trata de un
horario realmente amplio.
Otra de las pegas que le pongo es que a mí personalmente me hubiese gustado recorrer el Sena de noche y ver
París iluminado, y no fue posible. Con los diferentes horarios del batobus a lo largo del año, dudo que lo sea, salvo
pequeñas excepciones de escasos días. Por ello, si vuestra idea es ésta, quizá tendríais que buscar otra de las
empresas de bateaux del Sena que hagan ese recorrido por la noche. Es una espinita que me queda pendiente para
nuestro próximo viaje a París, que no tiene fecha, pero que espero que pueda ser en los próximos años, ya que es
una ciudad a la que siempre es bonito regresar.
Creo en cambio que el recorrido está realmente bien y que las paradas están muy bien organizadas, muy cercanas a
muchos puntos de interés. Resulta muy fácil subir y bajar de cada una de ellas y además las anuncian por megafonía
dentro del barco en varios idiomas, incluido el español. Indicaros que en otros tours en barco que he hecho por otras
ciudades por megafonía dan explicaciones de los lugares por los que vamos pasando, aunque raramente esas
explicaciones las dan en español. En el caso del batobus, simplemente no las dan, ni en español ni en ningún otro
idioma. Aún así, si vais a París y especialmente si tenéis pensado ir varios días, os recomiendo que os cojáis los
pases de varios días, ya que salen más económicos y podréis subir y bajar cuantas veces queráis. En invierno, sigo
dudando que resulte rentable ya que cerrar a las 4.30 de la tarde me parece una barbaridad, sobre todo para el
horario español, ya que a esa hora, creo que estábamos por Saint Michelle y que hacía poco que habíamos
terminado de comer. Pero en primavera y verano, con horarios más amplios, creo que compensa.
En definitiva, me parece una actividad muy divertida e interesante para captar una visión diferentes de París, desde
las aguas de su Sena que parte su alma en dos. Por ello, os recomiendo que si vais a la capital francesa y tenéis
tiempo, os subáis a bordo de alguno de los bateaux que recorren el Sena, bien el batobus o cualquier otro. Quizá en
nuestro próximo viaje nos planteemos coger uno de los bateaux con cena y baile, una noche de verano tiene que ser
una idea espléndida. Quizá… ya veremos qué nos depara el futuro….
.