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Este verano ha sido diferente, nunca haba tenido un verano as, casi
siempre mis veranos eran rutinarios, estudiar, trabajar, viajar, ftbol y
amigos, algo aburrido como lo he sido gran parte de mi vida. Pero
despus de muchos aos ha llegado una chica diferente a mi vida, tiene
poco menos de dos meses que la conozco y creo que ha cambiado
muchas cosas en m aunque ella no se haya dado cuenta.
La conoc una tarde de junio digamos que el 10 para dar una fecha
aproximada , estaba sentando comiendo solo como ocasionalmente lo
hago en la cafetera para alejarme un poco del ruido de las mesas y la
gente; mientras esperaba mi comida en aquella mesa sucia y vaca,
miraba mi celular para pasar el tiempo, y de repente una chica delgada,
de tez blanca, cabello lacio, ojos de miel y de una sonrisa risuea se me
acerc y dijo- puedo sentarme , le contest- claro, toma asiento,
cruzamos mirada y volv a poner atencin a mi celular, no era una chica
diferente, pareca algo normal y distrada a la vez, intercambiamos un
par de palabras y le di la clave de internet, en ese momento nunca
imagin que un encuentro casual y si ninguna relevancia, sera en inicio
de algo inesperado.
Pasaron los das y quiz un par de semanas para que volviera
intercambiar un par de palabras con aquella chica risuea, era un
viernes por la tarde y yo no tena mucho trabajo, as que bajaba cada
vez que poda a platicar con los guardias, hasta que de repente Ella se
acerca a saludarme, en ese momento a pesar de que fue una pltica de
lo ms montona y casual tuvo una relevancia en m, desde ese
momento supe que ella tena magia en la mirada, que aunque ella
sonrea y pestaeaba a cada momento, no poda dejar de mirarla y
escuchar cada palabra. Esa chica se llama Z, le digo as para que los
dems se imaginen a que me refiero y la chica de esta historia dude si
realmente esto fue para ella.
Despus de cada salida con ella, me di cuenta que es una chica
especial, capaz de cambiar las normas de cualquier normalidad, ella era
una loca, poda hacer que me perdiera en su mirada con cada
ocurrencia, con cada enojo, con cada rechazo, ella a veces hablaba muy
rpido que no poda entenderla, otras veces no me prestaba la ms
mnima atencin porque siempre estaba perdida en su mundo; ella era
una de esas chicas de verano que llegan a tu vida de una manera fugaz
y te dejan encantado con esa mezcla de sonrisa risuea, ternura y que