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Furia en la carretera es un auténtico catálogo de instrucciones para montar tu propio carro de combate. Aquí van algunas piezas con las que estoy construyendo yo el mío, todas extraídas de esta magnífica ópera apocalíptica.
Titolo originale
Instrucciones para montar tu propio carro de combate (Notas sobre Mad Max: Furia en la carretera)
Furia en la carretera es un auténtico catálogo de instrucciones para montar tu propio carro de combate. Aquí van algunas piezas con las que estoy construyendo yo el mío, todas extraídas de esta magnífica ópera apocalíptica.
Furia en la carretera es un auténtico catálogo de instrucciones para montar tu propio carro de combate. Aquí van algunas piezas con las que estoy construyendo yo el mío, todas extraídas de esta magnífica ópera apocalíptica.
Si todava no has visto el reboot de MAD MAX, ve a verla
ahora mismo. Lo digo en serio. Tanto si eres hombre como mujer, tanto si te gustan las pelculas de accin como si no, deja todo lo que ests haciendo y ve a verla cuanto antes. Es importante. En apenas dos horas (que te parecern media), vas a entender de qu est hecha la realidad que te rodea, ese oscuro motor que mueve el mundo todos los das en la direccin equivocada. Cuando te levantes de la butaca, sabrs cmo y por qu el capitalismo se ha hecho uno con la vida; y con la muerte. Y lo sabrs sin necesidad de que nadie te lo cuente, sin tener que tragarte ninguno de esos discursos pseudointelectuales que tanto abundan por las salas de cine ltimamente. Aqu no hay discursos. De hecho, aqu no hay apenas palabras. Esta pelcula parte de la idea de que todo est ya muy dicho. El director y guionista George Miller manda al carajo toda regla acadmica de construccin de una historia y realiza una especie de escena final continua que es tanto una amalgama de imgenes encadenadas a toda velocidad como una clase magistral de cmo enfrentarnos al sistema que nos domina en cuerpo y alma. Furia en la carretera es un autntico catlogo de instrucciones para montar tu propio carro de combate. Aqu van algunas piezas con las que estoy montando yo el mo, todas extradas de esta magnfica pera apocalptica. Pieza n 1: El mundo ha muerto El mundo que se presenta en Mad Max es de sobra conocido. Un mundo completamente devastado en el que, contra todo pronstico, todava persiste la vida. Destruccin, desastre, devastacin. No hay futuro, y el pasado no es ms que un almacn de trastos desordenados que no sirven para nada, un lugar donde nadie recuerda nada, donde nadie puede olvidar
nada. El tiempo aqu transcurre sin direccin, mera
acumulacin de presentes dolorosos. Aqu duele todo, dice Imperator Furiosa, la protagonista del film. En este mundo la vida no es ms que un proyecto inconcluso, algo que, no se sabe por qu, no termina de morir. Y quin mat el mundo?, se preguntan una y otra vez las cinco mujeres que luchan a su lado. Y la pregunta se retuerce en tu cuerpo como un alambre invisible. Cada da gira un poco ms. Una vuelta ms. Las guerras del petrleo y del agua terminaron por provocar el colapso de la civilizacin. Un brusco cambio climtico. Lo poco que qued tras la catstrofe es ahora propiedad de aquellos que se hicieron con el poder. Son pocos, apenas representan un 1% de la poblacin, pero lo tienen todo. Tipos como Immortan Joe, terrateniente y gobernador de la Ciudadella; o como el Come-hombres, dueo y seor de la Ciudad del Gas. Autnticos gobernantes de la vida y de la muerte. Propietarios de cualquier cosa que pueda servir como recurso para la supervivencia, desde las ltimas reservas de agua y de petrleo hasta los cuerpos de aquellas mujeres que todava son capaces de reproducir vida humana sana. Esta red de gobiernos dementes impone la privatizacin hasta lo ms profundo del Ser. teros, leche materna, todo es de su propiedad. Propiedad privada custodiada bajo un nico mandato: obtener el mximo beneficio de la poca vida que todava queda en el planeta. Bajo este gobierno de la privatizacin absoluta, lo comn desaparece por completo y la poblacin pasa a ser una masa de produccin y de reproduccin que se administra meticulosamente. La poltica de un gobierno as es la biopoltica de Foucault en todo su esplendor: la gestin calculada de la vida; de toda la vida. En este entramado, las personas corrientes como Max o como t pasan a convertirse en la materia prima de la que hay que explotar hasta la ltima gota.
Bolsas de sangre con patas, los llaman en la pelcula. Te
resulta familiar algo de lo que te estoy contando? Pieza n 2: Nosotros, los que vagamos por esta tierra Para imponer una gobernabilidad as, es imprescindible destruir todo tipo de vnculo social. Erosionar cualquier vestigio de comunidad hasta hacerlo polvo, arena del desierto. Slo entonces es cuando una persona se convierte en un superviviente, alguien dispuesto a competir por todo y en todo momento. Te has sentido t tambin un superviviente alguna vez? Si es as, presta atencin porque esta pelcula nos ensea un par de cosas interesantes acerca de los supervivientes. La primera es que un superviviente es alguien demasiado muerto para vivir y demasiado vivo para morir. De hecho, los War Boys, el ejercito de soldados que acta bajo las rdenes de Immortan Joe, se denominan a s mismos medio-vivos. Hace mucho que estn muertos, slo los mueve el instinto de supervivencia. La segunda cosa que aprenders acerca de los supervivientes es que estn condenados a buscarse la vida en todo momento, por siempre jams. La vida de los medio-vivos no conoce el reposo. Y la tuya? Lo que pone todo en movimiento en esta road movie es la guerra, una guerra que se libra a diario y en todas partes: la guerra de todos contra todos por sobrevivir. Esta competencia generalizada es, precisamente, lo que hace posible el dominio absoluto, tanto en el mundo de Mad Max como en el nuestro. Para los War Boys, por ejemplo, morir en la guerra significa libertad. Es la nica manera que tienen de poner punto y final a una realidad que no les deja vivir. Libertad y obediencia se hacen as una misma cosa, amo y esclavo se funden entre s. Y es justamente ah, en ese entramado indivisible e imposible de habitar, donde los protagonistas del filme entran en contacto y hacen posible lo imposible: habitarlo. Por eso insisto
tanto en que veas esta pelcula, porque nos ensea cmo
habitar lo inhabitable. Pieza n3: La esperanza es un error Durante todo el tiempo en que Furiosa sigue empeada en encontrar el Paraje verde (Green Place), la realidad no cede ni un pice. Todo sigue apareciendo ante sus ojos como un desierto infinito sin posibilidad alguna para la existencia. Slo cuando acepta que no hay Paraje verde alguno y deja de prometerse a s misma una vida nueva, es cuando empieza a poder habitarla. La esperanza es un error, le dice Max mirndole a los ojos, y sus palabras abren la posibilidad de confiar el uno en el otro. De esa confianza nace la nueva energa capaz de transformar el modo en el que viven. No te parece esto una buena pista para aplicar tambin a nuestra vida? Pinsalo: intercambiar esperanza por confianza hasta entablar un vnculo afectivo con los dems. Un vnculo tan fuerte que abra una nueva potencia (poltica y colectiva) capaz de enfrentarse a este horrible mundo. No suena nada mal, a que no? Esta idea sugiere que la liberacin de la condena de lo privado parte de una potencia que crece cuanto ms se comparte. Max, Furiosa, las 5 esposas rebeldes, Nux (el chico de la guerra reconvertido), las ancianas Vuvalini, todos ellos empiezan a ser libres cuando se vinculan entre s. Cuando entablan una relacin. As es como logran derrotar a Inmortan Joe: hacindose comunidad. Una comunidad en movimiento que lucha por la vida enfrentndose a la subordinacin de lo privado, confiando el uno en el otro y dejando la esperanza atrs. As es como empiezan a habitar lo inhabitable, as comienza su revolucin, una revolucin que, por otra parte, no se hace en nombre de nada ni de nadie. Su lucha no es una lucha por la gente, ni por el pueblo; no representan a nadie, no pretenden conquistar ningn derecho, tampoco buscan
arrebatarle el poder a sus enemigos ni constituir un nuevo
Estado. Esta comunidad no tiene ningn cielo que alcanzar. Ellos y ellas luchan porque es nicamente ah, en la lucha misma, donde se abre la posibilidad de existir, de coexistir, de habitar lo inhabitable. Su libertad es la de una flecha en pleno vuelo: ya ha sido lanzada, todava no se ha clavado en ningn sitio. Pieza 4: Un viaje sin movernos del lugar Furia en la carretera es una road movie curiosa. Una pelcula de carreteras que, por mucho que circula, no se mueve del lugar. Un viaje que comienza y termina en el mismo sitio, sin detenerse ni un momento. Aqu, todo camino, todo pasadizo, todo umbral conduce siempre al mismo lugar: el lugar donde ya ests. Esta bella metfora poltica nos habla de un mundo que no necesita ocuparse porque ya est ocupado; ocupado por todos nosotros en todo momento y en todas partes. En cuanto los personajes de la pelcula se percatan de este hecho, comprenden inmediatamente que la sensacin de vaco que les acompaa a diario, no es ms que un reflejo del aislamiento compartido en el que viven, en el que vivimos. Por eso deciden dejar de alejarse y regresar al lugar que ocupaban antes de salir: para romper con el sentimiento de impotencia colectivo que sentimos todos. Imagnate que tambin a nosotros nos da por hacer eso mismo. Que esta tarde, sin ir ms lejos, nos vinculamos los unos con los otros y empezamos a golpear juntos los cristales de esta enorme pecera vaca en la que hemos ido a parar. Para poder hacer algo as lo primero que debemos entender es que cada uno de nosotros es un lugar por el que pasan infinidad de ideas, de historias, de afectos y, que cambiar nuestra manera de percibir el mundo, significa conectarlas entre s. se es el comienzo para dejar de ver el mundo como el absurdo campo
de batalla donde libramos a diario la guerra de todos contra
todos. Para iniciar este cambio de percepcin no es necesario esperar a ninguna revolucin, algo as no pasa por tomar el poder, ni tan siquiera por tomar las calles. Empezar a ver el mundo de manera compartida pasa por volver la realidad capitalista contra s misma, tal y como hace Nux antes de morir. Nux, como el resto de los chicos de la guerra, ha sido educado para morir conduciendo uno de los oscuros vehculos que protegen a Inmortan Joe. Todos y cada uno de los War Boys aceptan su muerte como un regalo del jefe, un privilegio reservado a unos pocos, por eso gritan aquello de Sed testigos! (Witness!) cuando estn a punto de morir, porque es entonces cuando creen alcanzar el mayor de los logros posibles. Eso mismo es lo que hace Nux tambin, la diferencia est en que lo hace tras haber conocido el amor y la amistad, tras haber vinculado sus sentimientos, sus afectos y sus emociones con Furiosa y el resto de compaeros. Este hecho diferencial es lo que hace que su muerte signifique algo completamente distinto, aunque suceda de la manera esperada, haciendo lo mismo de siempre, conduciendo el mismo carro de combate de siempre. Sin embargo, su muerte, lejos de favorecer la victoria de Inmortan Joe, supone el principio de su derrota. Y sus ltimas palabras (Sed testigos!) an siendo como son las mismas que hemos escuchado decir a los otros chicos de la guerra cada vez que mueren en combate, dejan de hablar el lenguaje del poder. Ahora interpelan a todo aqul dispuesto a descubrir la potencia colectiva sepultada en todos los lugares que habitamos a diario. Porque ms all de ah, como dice Max, no encontrars ms que desierto Pieza n5: Con lo mejor de nosotros mismos
Hay algo que lleva mucho tiempo en el fondo de tu
pensamiento esperando el momento propicio para aflorar a la superficie. Y lo sabes. Son semillas de lo mejor de ti impacientes por crecer en una tierra comn. Cosas como la compasin, que en latn significa literalmente sufriendo juntos, o como la igualdad, que no es otra cosa que el reconocimiento de las capacidades de todos. Esto ltimo es muy importante. La emancipacin de Furiosa y de los suyos comienza, precisamente, cuando los hombres y las mujeres, los esclavos y las esposas, las Vuvalini y los War Boys, se perciben como iguales. Esto no quiere decir que las mujeres dejen de ser mujeres, o que los hombres dejen de ser hombres, ni mucho menos. Para ser iguales no es necesario dejar de ser diferentes, lo dice Ranciere: el proceso de la igualdad es siempre el de la diferencia, y esta comunidad es el mejor ejemplo de ello. Es un grupo de guerreras diferentes entre s que logran hacerse iguales mediante los cuidados que se dan las unas a las otras. Somos distintas pero iguales!, ste parece ser su grito de guerra, as es como suena el pistoletazo de salida hacia su emancipacin. As es como debera sonar tambin el nuestro. Lo pens mientras vea correr los crditos de la pelcula en la pantalla: librarse de la lgica del todos contra todos pasa por unir las piezas de este carro de combate. Un carro de combate capaz de protegernos mientras en su interior compartimos nuestros sentimientos, nuestros sufrimientos, los objetivos que todos llevamos dentro. Ser siempre un carro de combate inconcluso e imperfecto, parecido al que conducen los personajes del filme, se con el que algunos logran sobrevivir al final de la pelcula. Un carro que por mucho que pueda tomar la Ciudadella por asalto, jams se detendr all. Ni all ni en ningn otro sitio, porque un verdadero carro de combate slo lo es mientras se mueve. En cuanto a un carro de combate le falta movimiento, se convierte en chatarra.
Pieza final: No hay pieza final.
Por eso, a diferencia de algunos anlisis del filme publicados estos das, yo no entiendo la llegada de Furiosa y las esposas rebeldes (ahora mujeres libres) como la constitucin de un nuevo poder ms justo y femenino. Para m, la toma de la Ciudadela no es si no la continuidad de aquello que han aprendido durante el viaje, lo que les ha hecho fuertes: la comunidad. O, dicho de otro modo: el vnculo de lo mejor de nosotros entre nosotros. sa es la nica transformacin social posible. Una transformacin que ni se detiene ni se constituye en ningn lugar; una transformacin que hoy est aqu ocupando la plaza de Sol o Wall Street y maana est en tu lugar de trabajo, en tu casa, en tu cama. Una transformacin, en definitiva, que sabe que por mucho que Immortan Joe muera, la batalla no termina jams. Los ocupantes de este carro (Max, Furiosa, t, yo) sabemos que no existe paraso alguno; ni aqu ni en el cielo, y sabemos tambin que de nada sirven los lamentos ni las reclamaciones. Para nosotros tan slo hay carretera. Fury road. Ah es donde estamos, ah es donde debemos permanecer, demostrndonos que nos tenemos los unos a los otros. Witness!