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Observación:
De entrada, se anuncia que el acto ataca
indirectamente a los financieros (sostenedores) y a los
intelectuales (reproductores) del orden establecido (paz
social).
Se precisa el ataque, apuntando a los toques de queda
impuestos en varias ciudades del país como consecuencia de
los actos de vandalismo perpetrados luego del terremoto del
27/02/2010, exprezando el temor a la institucionalización de un
estado policial (normalidad necesaria) por la repetición de
actos de represión (allanamientos, constante vigilancia). Se
omite decir que sólo se declararon en las ciudades víctimas del
vandalismo (Santiago no, por ejemplo).
Viene en seguida una afirmación sobre la innecesariedad
de la Ley, centrando su justificación en el mero sustento de la
propiedad de esos mismos financieros a los que beneficiará la
reconstrucción post-terremoto. Reducción simplista: La Ley es un
concepto muy anterior a la propiedad, y negarla sin poner una
ética en su lugar, sólo es idealismo y caos, y ambos sirven el
Orden absoluto, lo justifican, y negar la Ley es por ende
contraproducente. No se ataca el orden con el desorden, sino con
organización y perspectivas superiores...
La desobediencia civil como ejercicio cotidiano es ciega,
si no lleva consigo una disciplina férrea que sustituya una nueva
ética y proyecto a aquel sistema injusto, antiético e inmoral que
cubre la ley urbana. Concordamos en que el hacerse cargo de
nuestra existencia es lo principal, pero esto sólo se logra con la
Intergración personal aplicada a objetivos cotidianos como por
ejemplo: saliéndonos individualmente del sistema crediticio, la
deuda siendo una hipoteca del futuro personal, logramos
prácticamente así hacer retroceder al enemigo en uno de los
aspectos esenciales de nuestra vida: la economía individual y
familiar, algo más eficiente y menos contaminante que el cóctel
Molotov...
Por otro lado, educar al resentido social en lo absurdamente
imbécil e inmoral del vandalismo post desgracia, es una tarea
menos cómoda y más urgente que el atacar la sola respuesta que
tiene el sistema: su represión...
No decimos que la violencia sea un camino inevitable frente a un
orden corrupto que sólo se sostiene por el Orden aparente,
mientras por debajo ocurren las más crudas manipulaciones y
abusos. Pero Pensar otro mundo es la primer violencia a realizar,
una violencia psicológica que subvierte íntima-mente creando un
camino en lo Imposible: El Cambio Interno...
Observación:
Siguen consignas sentimentales sin otro peso más que emocional,
y que no precisan de qué secuestrados hablan, si los presos
políticos, los criminales comunes o los financieros. Luego, se rinde
memoria a hermanos de lucha asesinados en dictadura y
democracia, dejando claro que ambos sistemas son igualmente
criminales, -cosa observable con el trato democrático dado a la
Etnia Mapuche, por ejemplo- concluyendo con un lema: venganza
y complicidad. O sea, que el combate contra las finanzas y el
Estado se reduce ahora a un mero acto vengativo, exento de la
frialdad necesaria en este tipo de combates, en donde sólo se pide
complicidad, y no participación activa de la comunidad, dejando
planear una cierta duda sobre lo legítimo del acto mismo, del que
sólo se pudiera ser cómplice, como de un delito intrínsecamente
reconocido...
CONCLUSIÓN: