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GOBERNADOR DEL ESTADO DE NUEVO LEÓN

Fernando de Jesús Canales Clariond

SECRETARIO GENERAL DE GOBIERNO


José Luis Coindreau García

SUBSECRETARIO DE ATENCIÓN AL CIUDADANO


Jorge Maldonado Montemayor

DIRECTORA DEL ARCHIVO GENERAL DEL ESTADO


Leticia Martínez Cárdenas

Primera Edición, septiembre / 2000


Derechos reservados conforme a la ley
Gobierno de Nuevo León

Archivo General del Estado


Juan I. Ramón y Zaragoza

Correo Electrónico:
agenl@mail.nl.gob.mx

017
L433lp
Leal Ríos, Armando (comp.)
Linares: Cruce de Guerra. Correspondencia Santiago
Vidaurri – Guillermo Morales 1855 – 1864 / Armando Leal
Ríos. Compilador. —Monterrey, N.L.: A.G.E.N.L. 2000.
150p. (Serie: Archivo Santiago Vidaurri 4)
LINARES:
CRUCE DE GUERRA

Correspondencia
Santiago Vidaurri – Guillermo Morales
1855 –1864

Armando Leal Ríos


Compilación
Monterrey, N.L., Julio /2000
Serie: Archivo Santiago Vidaurri
4
ÍNDICE GENERAL

Adverten-
cia…..……….…………………………….…I

Presenta-
ción..…………….………………………….III

Conteni-
do….………………..………………….….…..1

Índice Onomástico……………..…………..……..141

Índice Geográfi-
co………………………………….145

Bibliogra-
fía………………………………………….149
ADVERTENCIA

Sobre los dilatados horizontes del sur de Nuevo León y


del seno mexicano, durante los años del dominio político
que ejerció el general Santiago Vidaurri en las antiguas
Provincias de Oriente, se escribieron páginas que trascien-
den los tiempos.

Para comprender esa época hecha de heroicidad y hom-


bría, se precisa conocer las pequeñas historias de los
pueblos donde se produjeron los hechos narrados en la
interesante correspondencia cursada entre el propio Vidau-
rri y don Guillermo Morales.

Asimismo dar una semblanza de los personajes principales


que participan en los movimientos bélicos donde se gesta la
derrota política y militar del dictador Antonio López de San-
ta Ana, así como el marco social que hace posible el
Congreso Constituyente de 1857, y el preludio de la gran gue-
rra que vivirá México durante la intervención de Francia, que
permite el efímero Imperio Mexicano de Maximiliano de
Habsburgo.

Acompañan en este espacio geográfico y de tiempo a don San-


tiago Vidaurri y al que fuera su hombre de confianza en el sur
de Nuevo León: don Guillermo Morales, muchos otros per-
sonajes que cabalgan al filo de angustia ante los cambios
sociales, políticos y económicos que está sufriendo la joven
república mexicana en esos años que define su perfil.

Quedan al final de este trabajo esas pequeñas síntesis geográ-


ficas de muchos de esos pueblos, especialmente de Nuevo
León y de Tamulipas donde se desarrollan los hechos; igual-
mente mínimas biografías de los protagonistas que se
conocerán a través de la lectura de la correspondencia en-
tre el gobernador de Nuevo León y Coahuila y de quien fuera
el prefecto político del sur del Estado, con sede en Linares
durante varios años, don Guillermo Morales.

Además es recomendable leer los libros: Monterrey en


Guerra. Hombres de armas tomar: Correspondencia de
Santiago Vidaurri – Julián Quiroga 1858-1865 de César
Morado Macías, y Para efectos de la Guerra. Correspon-
dencia de Santiago Vidaurri –Pedro Hinojosa 1855-1864 de
Leticia Martínez Cárdenas. Con ambas lecturas se comple-
menta este trabajo.

Morales Urrutia, Guillermo ( 1800 - 1877 ) Nació en Li-


nares, Nuevo León. Político. Estudió Leyes y figuró
como militar importante en la guardia civil de Linares
para enfrentar la invasión de indios bárbaros y partici-
pó a favor de la causa nacional durante la intervención
norteamericana fué alcalde primero de Linares varias
veces, prefecto político del distrito sur, primer vocal de
la junta de gobierno del Estado en 1856 . Sirvió con
lealtad a la causa liberal bajo las órdenes del goberna-
dor de Nuevo León general Santiago Vidaurri.

II
PRESENTACIÓN

Alcalde primero de Linares en el año de 1854, Guillermo Mo-


rales intuyo la importancia de las comunicaciones, por lo que
convocó a los lugareños a una colecta para establecer los
servicios del telégrafo electromagnético entre el municipio
que gobernaba y el centro del poder político del estado de
Nuevo León, que estaba en la ciudad de Monterrey.

Diez años antes entre Washington, D. C. y Baltimore, Mary-


land, en los Estados Unidos de América, el 24 de mayo de
1844, Samuel Morse había trasmitido el primer telegrama para
inaugurar el servicio al público por dicha línea de 64 km., la
frontera norte de México estuvo influida por esa transforma-
ción científica que revolucionaba el mundo de la información.

Linares fue centro importante en el encuentro violento de


las dos naciones durante la guerra de intervención nortea-
mericana, inclusive en octubre de 1847, fue capital de
Nuevo León por las mismas razones.

Los hombres del sur del Estado, tenían ya amargas experien-


cias por la invasión de los grupos indígenas desplazados por
la colonización de Texas. Desde entonces la necesidad de
saber y conocer el movimiento de comanches y lipanes era
vital, para prevenir los peligros de sus acometidas y estar
preparados para enfrentarlos.
El capitán de la guardia civil Guillermo Morales, conoció
desde entonces la necesidad de contar con buenos puntos de
comunicación y más aún, tener los elementos apropiados
para que en buenos caballos, pudieran informar al momento
cualesquier atisbo de amenaza violenta.

Esa experiencia acumulada en el arte de comunicación opor-


tuna serviría después, cuando Linares se convierte en
CRUCE DE GUERRA, durante los acontecimientos que die-
ron fin a la dictadura de Santa Anna y desataron los
demonios de la guerra civil que flageló el suelo mexicano
desde 1854 a 1864, en que se da la relación epistolar entre don
Santiago Vidaurri y Guillermo Morales.

Los últimos reductos de la dictadura santanista en Nuevo


León cayeron el 25 de mayo de 1855 , cuando Vidaurri
proclama en Monterrey el Plan Restaurador de la Liber-
tad y a partir del primero de junio de ese mismo año, se
inicia una intensa relación política entre el caudillo nor-
teño y quien en ese tiempo era el alcalde primero de
Linares, don Guillermo Morales el cual en forma particu-
lar le manifiesta las dificultades para recaudar fondos
debido a la suma escasez de numerario, asimismo los
preparativos que se hacen para enfrentar las circunstan-
cias que enfrenta el Estado.

Las frecuencias de la información epistolar que hace el


alcalde linarense se intensifican dado el estado de inquie-
tud política que se vive en Tamaulipas, donde su
gobernador licenciado Juan José de la Garza amenazan
las acciones de gobierno de Santiago Vidaurri.

Morales alerta de las incontables situaciones que pueden


perjudicar al señor gobernador y general en jefe: Yo de-
seara que en Tamaulipas se propagara la causa en el
mismo orden que en Nuevo León, pero no es fácil ob-
tener ésta de pueblos que jamás han disfrutado del
bien local y que divididos por enemigos personales,

IV
los mismos habitantes no conspiran sino a la distrac-
ción de los otros, sirviendo de protesta la causa pública y
en su conducta no se observa sino una inmensa canti-
dad de ambición, inmoralidad y debilidad y puede ser
que esto dé lugar a alguna desavenencia escandalosa
entre algunas personas de los que figuran como jefes
de Tamaulipas. Guillermo Morales no escatima franqueza
en sus comunicados y más tarde informará a su comandante
general sobre sus diferencias políticas con el licenciado Ma-
nuel Z. Gómez, linarense de origen pero con fuerte relaciones
políticas con Juan José de la Garza.

Tampoco Morales oculta su animadversión contra el cau-


dillo tamaulipeco, y le previene: Me temo también que si
el señor Juan José de la Garza no esta de acuerdo con
usted para ir a Tampico vaya a empeñarse con Pedro
Hinojosa, para que con la fuerza que le obedece, y va
de orden de usted para aquel punto, le preste recono-
cimiento y cuando se le dificulte procure dividirla que
de todos modos causara un perjuicio a otros, otras pre-
visiones en correo violento hace el capitán Morales y
recibe de Vidaurri en reconocimiento a sus acciones estas
palabras: Amigo, no puede usted figurarse a que grado
llega mi gratitud hacia usted, ni cual es la magnitud de
la idea que tengo de su amor a la Patria, me callo pues,
porque considero suficientes cualesquiera expresiones
para manifestar estos sentimientos. Dios y las generacio-
nes presentes y futuras le darán el premio a que es
acreedor.

Se juega el destino de la frontera norte para la causa liberal y


Morales lo reconoce: Veo con gusto las grandes esperanzas
que se promete, de que la nueva administración corres-
ponda a la sociedad procurando las medidas radicales
que tanto necesita el bien de la nación y los importantes
intereses de la frontera y advierte; pero me parece que
hay mucho que temer, ha tenido lugar la entrada del se-
ñor Juan Alvarez a la ciudad de México, ese nuevo
método de transacciones o convenios que han adoptado
por los jefes de la revolución del centro del país para
arreglar las pequeñas diferencias en los principios que
sostienen, en los que por saldo de todas las operaciones,
se resulte que les dieron lo contrario de lo que piden y en
la parte que más perjudique.

Se inicia entonces un fluido intercambio de mensajes entre el


gobernador Vidaurri y Morales, quien será un elemento va-
lioso para hacer llegar información a los puntos de interés
para el sostenimiento de la causa que defiende el caudillo de
Lampazos, que son Camargo, Reynosa, Matamoros y Tampi-
co sitios en que se encuentran las aduanas, centros de
alimentación económica del poder en Nuevo León y cuyo
control empieza a ser disputado por los hombres de Tamauli-
pas.

Comunica a Vidaurri. Acabo de recibir un correo de Reyno-


sa y con fecha 21 del corriente, me dice don Francisco García
entre otras cosas: Que teme que la orden contra la aduana
no tenga buen éxito, por motivo de una circunstancia del
señor licenciado Garza relativa a que no se ejecuten las
órdenes que no vengan por su conducto, pero que de
cualquier manera cuente usted que yo haré lo posible en
conseguir el pago de ella, ya dirigiéndome a Victoria al
señor Garza o al jefe de la línea, mi hermano Guadalupe.
Por ese tiempo Vidaurri, había expedido nombramiento al
licenciado Manuel Z. Gómez, como jefe de la aduana en Ma-
tamoros y es el propio Morales quien con su felicitación,
entrega dicho encargo.
Manuel Cerda, Simón Avendaño, Juan Villarreal, Sixto Suá-
rez, Félix Quintero, Marcelo de la Peña, pero sobre todo
Antonio Doria de Villagrán tendrá siempre enterado de lo que
pasa en la vasta geografía que va desde Tampico, hasta Mon-

VI
terrey y tendrán permanentemente informado a don Santiago
Vidaurri de lo que hacen sus adversarios. Es el 6 de noviem-
bre de 1855, y Morales escribe: Son las cuatro de la mañana
y acaba de llegar felizmente de Tampico el extraordinario
Manuel Cerda, en el acto continúa su camino, verbalmente
le informará los motivos de su demora así como el empeño
de Juan José de la Garza en ocupar esa plaza.

Es evidente la confianza y el cuidado que ofrece Morales, a


los aventureros que recorren enormes distancias para llevar,
traer, cuidar mensajes importantísimos para el control de la
delicada situación militar que se vive entre los cabecillas que
controlan esas regiones. Ninguna noticia he tenido de los
extraordinarios Sixto Suárez y Félix Quintero que apre-
hendió Aregullín, sin duda los tiene de la Garza en
Altamira, ayer que pasó para esta un correo del señor
Garza para usted, le pregunté por ellos y me dijo que no
los había visto. La conflictiva relación de los guerrilleros
tamaulipecos con Vidaurri, hace difícil el trabajo de informa-
ción que Morales realiza con sus hombres, quien
frecuentemente son aprehendidos y ha de utilizar toda su
astucia para sacarlos adelante.

En ese mismo tiempo defiende apasionadamente a los hom-


bres de Linares de las intrigas armadas en su contra en la
sección Saltillo bajo el cargo de José María Aguirre y afirma:
En la comunicación oficial que dirige ayer, participando
haber solemnizado el nombramiento de presidente inter-
ino del señor Juan Alvarez, dije que Linares puso en
activo servicio más de cuatrocientos hombres y omití
hacer la explicación en qué términos. En campaña más
de doscientos cincuenta, y ciento cincuenta que estuvie-
ron dando la guardia de frente y tantos hombres diarios
en esta ciudad. Además, cincuenta hombres de que se
compone la fuerza de policía rural que vigilaban los ca-
minos de Tamaulipas, desde el día 28 de mayo, que
secundando esta ciudad el Plan proclamado en la capital
hasta principios de septiembre. Y agrega: Con bastante
indignación ha visto este pueblo el informe calumnioso
que con fecha veintiocho de septiembre dio don José Ma-
ría Aguirre en el que desarrolla una idea respecto de
Linares que jamás ha abrigado su vecindario, sobre cuyo
particular debo saber si usted cree oportuno que diga
algo este pueblo en cuyo caso, desde ahora le suplico me
indique las principales ideas que deberán fundar, pues
quiero que estas hablen consecuentes con los hechos.

Una nueva tarea es encomendada por Vidaurri al prefecto


político del sur de Nuevo León y don Guillermo Morales no
se anda en mientes, cumple cabalmente la seria responsabili-
dad de buscar caballos para la movilización del Ejército del
Norte, así como yeguas para reforzar los criaderos del go-
bierno, tarea que es cubierta con holgura y confianza. Los
servicios que Morales presta al general en jefe del Ejército
del Norte, le valen la confianza total del general Vidaurri,
quien al salir a sus campañas militares, le nombra primer
vocal de la junta de gobierno, que prácticamente le convierte
en gobernador del Estado por dos meses [enero-febrero 1856],
al término de los cuales renuncia para enfrentar sus negocios
en su hacienda El Fresno.

Sin embargo, a donde quiera que se encuentre, don Santiago


Vidaurri recibirá el parte de lo que ocurre en el teatro de la
guerra, entre los que defienden las ideas de una república
renovada y quienes aprovechan la ocasión para saquear o
satisfacer sus ambiciones. Guillermo Morales aprovecha la
situación de privilegio que representa Linares, para saber las
acciones militares de Sayas, Gautier, Escobedo, Aramberri,
Zaragoza y los pasos siempre tortuosos de su enemigo de
siempre: Juan José de la Garza.

VIII
Linares es cruce de guerra y los correos extraordinarios se
multiplican, informa en Monterrey a don Jesús Garza Gonzá-
lez, Martín Sayas me escribió ayer: Dice que estará aquí
mañana, es bueno que venga para amonestarlo por la
conducta que algunos oficiales han observado con los ve-
cinos de San Carlos, lo que motivó escribirle al capitán
Julián Quiroga manifestándole el orden y modo con que
debe conducirse con aquellos ciudadanos, esto dio un re-
sultado favorable, el pueblo de San Carlos que estaba
alarmado se tranquilizó y lleno de contento se pronunció y
disfruta así las garantías que siempre deben esperar de la
moralidad y orden de las fuerzas de Nuevo León que los
tiene ocupados.

Vuelan las informaciones que le llegan a don Guillermo Mo-


rales de Tampico, Victoria, China, Galeana, el sur de Nuevo
León, de todo está informado en Monterrey o donde se en-
cuentre don Santiago Vidaurri: Supongo que los señores
jefes de la sección le habrán ya informado de su marcha
con dirección a China, hoy dormirán en La Mota.

Acaba de llegar un vecino de esta ciudad que estaba en


Santander, me ha informado que por muchos esfuerzos
que hacen los de Victoria para reunir gente no lo pueden
conseguir: que un tal Galván de Cruillas tiene cuarenta
hombres en Padilla, que hasta el día 15 [octubre de 1856]
que él se vino, no se movían los de Victoria. En Santan-
der antes de venirse se decía que Garza salió de Tampico
para México, otros opinaban que se dirigió para Mata-
moros; nada se sabe de cierto y cualquier cosa que ocurra
se la comunicaré por extraordinario violento.

Los grupos beligerantes que simpatizan con Vidaurri, precisan


financiamiento, y no escatima imaginación Morales para pro-
porcionárselos, después recuperará en el mejor de los
casos la inversión. Igualmente ocurre con el vasto com-
promiso de cubrir el inmenso territorio e informar pun-
tualmente lo que ocurre: Convive con este correo en
pagarle cien pesos por su viaje de Monterrey a Tampi-
co y vuelta y otros cien pesos por su primer viaje a
Monterrey, le tengo dados sesenta pesos, se le restan
cincuenta; espero que sea cubierto en esa administra-
ción por no ser pagados en Tampico.

Vidaurri le encarga: El señor licenciado don Esteban


Coronado pasa para Tampico y él es la persona de
quien hablé a usted en mi carta de fecha de hoy y que
he devuelto hoy. Los pliegos que en dos diversas oca-
siones he mandado a usted dirigidos a Tampico,
entregéselo al señor Coronado, a quien recomiendo
muy particularmente por llevar una comisión impor-
tante cerca de Eulogio Gautier. Si alguna cosa se le
ofreciere, le suplico a usted se la proporcione allanán-
dole las dificultades que se le presenten para su pronto
arribo a Tampico.

Los contingentes militares que se mueven bajo el mando del


general Vidaurri requieren ser avituallados y las haciendas
del sur de Nuevo León y de Tamaulipas colaborarán estre-
chamente con don Guillermo, para proporcionar alimento,
techo y sobre todo capacidad de movimiento, de ahí la im-
portancia de proporcionar al centro militar: yeguas, caballos,
mulas y burros.
En marzo 30 de 1857, Vidaurri escribe a Morales: En San
Luis supe que había usted mandado las yeguas que le
tenía pedidas, y suponía que serían mansas y no al precio
de diez pesos, cada una como me han informado a mi
arribo a ésta. He visto que las yeguas son ladinas, que
llegaron bastante maltratadas y que se han ido ya cua-
tro. Estoy conforme con el precio y con la clase de las
yeguas, si para suplir esta falta me manda usted cuanto
antes un burro nuevo, bueno. Más si esto no le pareciere

X
a usted justo, mándeme siempre el burro avisándome de
su precio para pagárselo.

Sirve Morales de intermediario en la venta de baldíos,


ocurrido al beneficio de la Ley de Desamortización, mu-
chos compran tierras y el Estado obtiene recursos para
seguir manteniendo los numerosos grupos que se integran
al Ejército del Norte. Apela además a su fuerte relación
de amistad con el caudillo norteño para abogar por algunos
conocidos como don Julián Morales de quien dice que es
uno de los mejores ciudadanos que ha prestado servicios
desde que Nuevo León ha tenido precisión de hacerse res-
petar para conservar sus derechos: Tomando para ello sus
hijos las armas en la mano, por este motivo en la última
jornada de la sección Sayas sobre Camargo, fue allí
herido gravemente y ha quedado baldado sin poder
atender a su familia, lo que lo ha obligado a ocurrir a
usted a solicitar la gracia de que su único hijo que tie-
ne, se conceda quede exento del servicio de la guardia
nacional y pueda, con su trabajo, atender las necesida-
des de la familia.

Comparte Morales serias responsabilidades con el gober-


nador de Nuevo León y Coahuila, para que éste resuelva
sus necesidades de dar movimiento a sus fuerzas arma-
das. Vidaurri le manifiesta lo siguiente: Necesito
comprar cosa de trescientos caballos mansos, de rienda y en
buen estado para el servicio; los he de pagar al contado y
para eso es que los quiero con todas las cualidades dichas y
además que sean de buena edad, espero que usted sino los
tiene me los consiga entre sus amigos o del estado de Tamuli-
pas, y me avise del precio, que espero sea cómodo, que
son para el servicio del Estado.

La dificultad de allanar las órdenes de Vidaurri se amortigua


por la amplísima relación que se tiene con los dueños de las
Haciendas, entre ellas La Gavia del poderoso terrateniente
don Fortunato Zozaya, con los señores Garza Valdés, Pedro
José García, don Antonio Leal de León quienes le resuelven
con frecuencia las necesidades de movilización al Ejército
norteño.

El trato amable de los políticos linarenses amortigua el gol-


peo entre las autoridades civiles y clericales, quienes al ser
requeridas económicamente a censo de obras piadosas, aca-
tan las disposiciones de las nuevas leyes emanadas de la
Constitución de 1857: La hacienda de Guadalupe se sabe
que tiene una Capellanía, de capital de veinte mil pesos,
el administrador ha dicho, que ignora haya alguna finca
que la hacienda reconozca y que el apoderado que lo es
don Manuel María Morales contestará sobre el particu-
lar, este señor se haya en esa ciudad a quien en carta
particular le doy conocimiento para que si cabe en las
facultades de su poder resuelva y de lo contrario lo ponga
en conocimiento de esa superioridad.

Vidaurri ordena a Morales: Urgale usted al administrador


de Guadalupe, que sino tiene dinero, puede vender semi-
llas y dar caballos buenos para la campaña a precios
convenientes, así como mulas de silla y de tiro que deseo
tener cuanto antes, haciendo sus ventas el administrador de
modo que no se perjudique la finca, que no es mi ánimo
causarle ningún mal. Lo que interesa es reunir recursos y
caballos o mulas útiles para la campaña.

Corrían vientos de violencia ese año de 1858, en el cual se


libraron batallas intensísimas entre los ejércitos conserva-
dores y liberales y donde el peso de la guerra fue cargado
al Ejército del Norte. La balanza se inclinaba desordena-
damente para un lado, y otro entre tanto se precisaba
reforzar los contingentes, avituallarlos de armas, parque,
artillería y Linares se convierte en cruce de elementos de

XII
guerra hasta la catástrofe sufrida por el Ejército del Norte,
el 29 de septiembre de 1858, en Ahualulco: Digna cierta-
mente de sentirse, pero que considerando nuestra
situación y el porvenir debemos empeñosamente procu-
rar por cuantos medios sean posibles que el Estado
conserve toda la respetabilidad que augure su existencia
y Vidaurri le contesta: Estoy en un todo de acuerdo con
usted y para dirigirme a los pueblos he dejado que corran
la multitud de especies y comentarios sobre los últimos
sucesos, a fin de que calmados los ánimos se reciban mis
conceptos con toda la tranquilidad necesaria, para que
los puedan apreciar; pues se que hay grande disposición
en los soldados para volver de nuevo a la carga, pero en-
tre tanto me ocupo de los medios para arbitrar recursos
con el objeto de estar preparado cuando llegue la ocasión.

Los efectos de la guerra impactan severamente sobre la eco-


nomía de la región, el propio Guillermo Morales recurre a la
generosidad de Vidaurri solicitándole: Hoy escribo al señor
Patricio Milmo para que me dispense el favor de arreglar
el recibo de los un mil quinientos pesos, importe de la
firma, ó sea la libranza que acepté a favor del superior
gobierno del Estado la que se dignará mandar, que se me
devuelva y el jefe del Estado le contesta: Que no se puede
dar la orden que desea, pero va para que se le abonen
a ese crédito todas las contribuciones que tenga que
pagar.

Pero generoso al fin, Vidaurri agrega: No obstante la escasez


con que usted sabe muy bien tengo que luchar diariamente,
he dispuesto que se auxilie al Ayuntamiento de esa ciudad
con la suma de doscientos pesos para ayuda de los gastos que
tenga que hacer en la custodia que ponga para seguridad de
los concernientes a la feria.
Caen las fechas, la correspondencia se hace menos frecuente
en lo particular; no así en forma oficial por los cargos de
responsabilidad pública que ambos representan y en diciem-
bre de 1860. Se precisa renovar la cámara de diputados al
congreso general y Morales agradece: En cuanto a mi per-
sona le doy las mas debidas gracias por el singular
aprecio con que se digna distinguirme suplicándole muy
particularmente cambie, en esta parte su opinión; pues
razones muy poderosas me alejan de poder desempeñar
en un caso dado un cargo tan superior para el que se re-
quieren conocimientos muy particulares, esto es lo
primero y lo segundo que si desgraciadamente me viere
precisado a separarme del frente de mi casa e intereses
sería lo mismo que resolverme a la completa ruina de
todos ellos, pues no tengo ni encuentro una persona capaz
que los maneje, esta razón exige de usted la justicia de ser
atendida sin necesidad de otras muchas que pudiera dar y
que a la sola consideración de usted quedan sujetas.

La controversia política de Vidaurri con los hombres del sur:


Aramberri, Escobedo se agudiza y Morales interviene a favor
de la familia Avilés: Hace algún tiempo que el señor Ra-
món Avilés y su hijo don Atanacio se dirigieron,
manifestándome los sufrimientos de sus males, el primero
y el segundo los padecimientos y privaciones a que ha
estado sujeto hace mucho tiempo por las razones que ex-
pone, todo su contenido será o no cierto pero las últimas
cartas que he recibido me han conmovido tanto que me
veo obligado a dirigirle a usted la presente suplicándole
que se digne tomar en consideración este negocio y si le
fuere posible sin perjuicio alguno dar sus órdenes esa
superioridad, para que esta familia esté tranquila, será
un favor que será agradecido siempre.

A lo que el gobernador de Nuevo León dice: Hay muchos


cargos en contra de los señores Avilés, lo cual se prueba

XIV
con la conducta que han observado de andar huyendo sin
querer presentarse al gobierno a justificarse, pues éste
tiene la mejor disposición de perdonarles tan luego como
comparezcan ante él y lo satisfagan como lo ordeno.

Las diferencias entre el gobierno de Nuevo León con el


presidente Benito Juárez se agudizan, las relaciones se
tensan en los últimos días en que don Guillermo Morales
envía su última carta personal a su amigo don Santiago
Vidaurri. Es el 19 de febrero de 1864, y el rompimiento
entre Vidaurri y Juárez estaba próximo.

Y expresa el alcalde primero de Linares: Manifestándole


quedar entendido del contenido de sus diversos párrafos
y que debe estar seguro de mi empeño para evitar de
cuantas maneras sea necesario, el que se altere en este
pueblo la paz y el orden de que tanto necesitamos, con-
forme con el gran pensamiento y medios adoptados por el
superior gobierno, para conseguir los saludables benefi-
cios que le asegura el orden inalterable de que disfruta la
sociedad toda en nuestro Estado, lo que estimado en lo
que vale este inapreciable bien, sabrá vivir agradecido.

No podrá don Guillermo contener los ánimos políticos con-


trarios a don Santiago Vidaurri y el 10 de marzo de ese año,
los linarenses contrarios al hombre de Lampazos, se
exaltan y desconocen su gobierno expresando su apoyo
al legítimo representante de la soberanía nacional don
Benito Juárez.

Muchos años después, cuando se hubieron ido los días


de violencia fratricida y ya muertos muchos de los hom-
bres de la historia, entre ellos el propio Vidaurri,
Maximiliano de Habsburgo y el propio Benito Juárez; en
Linares, en noviembre de 1877 , llegaban por fin los servi-
cios del telégrafo electromagnético, justo cuando Gui-
llermo Morales pagaba su tributo a la tierra.

Atrás quedaban muchas páginas de la historia regional,


atesoradas en el valiosísimo archivo de don Santiago
Vidaurri que hoy se dan a conocer en esta compilación
de la correspondencia entre ellos.

Amigos y aliados, leales a una idea y un principio: su


invariable amor por Nuevo León.

XVI
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor gobernador don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León junio uno de 1855
Muy señor mío y amigo de mi particular aprecio:
La suma escasez de numerario hace muy difícil la ejecución del
préstamo que está asignado a esta ciudad, pues si bien es cierto
que algunos vecinos podrán exhibir alguna cantidad, lo es más que
la mayor parte y quizá los mas dispuestos a prestar auxilios no
pueden contribuir sino con cosas que valdrán lo que se les
asigne y las cuales ofrecen.
Hoy hace tres días estoy batallando con empeño por reunir
la cantidad de dos mil pesos que se asignó a esta ciudad y para la
fecha no tengo colectados más de cosa de doscientos pesos de los
cuales he tenido de gastar bastante en recomposición de armas,
construcción de cartucheras, porque todo esto era muy necesa-
rio, supuesto las circunstancias en que nos encontramos;
impuesto de lo dicho que es la verdad de lo que nos pasa por
acá espero oficialmente una determinación o una instrucción
para expeditar estos negocios que teniendo que emprenderlos,
en la práctica presentan muchas dificultades.
Sin otro asunto tengo el honor de repetirme a sus ordenes,
su afectísimo servidor y amigo que besa su mano. [6609]

Guillermo Morales.

Señor don Santiago Vidaurri


Saltillo, Coahuila
Linares, Nuevo León agosto tres de 1855
Mi muy respetado y apreciable amigo:
Supongo a usted instruido por otros conductos de lo que suce-
dió en Hidalgo [Tamaulipas] al señor don Agustín Higuera y lo
1
Armando Leal Ríos

que allí pasó con la fuerza que había organizado, substrayéndo-


sele de su obediencia y reconociendo por sus principales jefes a
los señores [Eulogio] Gautier y [Martín] Sayas. Desde este pa-
so ahora entiendo que han caminado, estos hombres en
desacuerdo con el señor [Juan José de la] Garza respecto de sus
operaciones cosa que me ha venido a confirmar la inesperada
pasada por esta ciudad del señor licenciado [Juan José de la]
Garza para ciudad Victoria [Tamaulipas], quien llegó el día
primero a las cinco de la tarde y de que sale por la tarde de este
día.
Yo desearía que en Tamaulipas se propagara la causa en el
mismo orden que en Nuevo León, pero no es fácil obtener ésta
de pueblos que jamás han disfrutado del bien local y que divi-
didos por enemigos personales, los mismos habitantes no
conspiran sino a la distracción de los otros, sirviendo de protes-
ta la causa pública y en su conducta no se observa sino una
inmensa cantidad de ambición, inmoralidad y debilidad y puede
ser que esto dé lugar a alguna desavenencia escandalosa entre
algunas personas de las que figuran como jefes de Tamaulipas.
Quiera la divina providencia que no suceda, pero he observado
algunas conversaciones que casi me lo aseguran, sino hay entre
estas personas la prudencia necesaria para el arreglo de sus ne-
gocios.
Ayer se ha suscitado por el señor [Juan José de la] Garza y
otra persona una conversación sobre el nombramiento que
hizo el Saltillo, en la persona de usted de gobernador y coman-
dante general de aquel Estado, según se lee de la Acta del
Pronunciamiento. No pareció al señor [Juan José de la] Garza
muy conforme con ese acto, así como el señor [Manuel Z.]
Gómez de quien por mi parte no comprendo su modo de pen-
sar ni que será lo que pretende, cuando veo que se resisten y
que piensan ocuparse de muchos.
Otra cosa me ha hecho persuadirme de la desavenencia que
hay entre el señor [Juan José de la] Garza y [Eulogio] Gautier;
según se me informó pensaba pedir aún de este pueblo, alguna
gente armada para ir a Victoria [Tamaulipas], entiendo que no
llevó adelante este pensamiento puesto que hoy se marcha para
2
Linares: Cruce de Guerra

Victoria, pero si tal sucediera no creo prudente acceder a su


solicitud, pues es necesario persuadirnos que no es gente de
orden y que hay muy poco que exigir de los muchos beneficios
que el Estado ha prodigado con el exclusivo objeto de que co-
operen a la realización de la grandiosa obra que ha emprendido.
Hoy remito al señor secretario del gobierno las comunica-
ciones y partes que el señor [Eulogio] Gautier y [Martín] Sayas
me mandaron, participándome el feliz resultado de la acción de
armas tenida en Tula [Tamaulipas] contra la guarnición que
cubría aquel punto cuyo pormenor me abstengo de dar, así
porque entiendo que hasta el señor Garza, como Gautier y
Sayas se lo han comunicado por este extraordinario.
Concluyo felicitando así a usted en unión de la división de
su digno mando, por el feliz suceso obtenido en los días 22 y 23
del pasado julio ocupando esa Plaza [Saltillo], cuyo hecho de
armas llena siempre de gloria a tantos dignos ciudadanos que lo
ejecutaron.
Sin otro asunto y deseando a usted todas felicidades me re-
pito a sus ordenes, su afectísimo amigo y atento servidor que
besa su mano. [6610]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y comandante general don


Santiago Vidaurri

Linares, Nuevo León septiembre 25 de 1855


Muy señor mío y respetado amigo:
Por desgracia no faltan entre nosotros personas que a pesar de
ser hijos de Nuevo León y deberle todo lo que valen y el in-
apreciable bien que hoy disfrutan y despojados de todo
reconocimiento dedican sus pensamientos, sus ideas y hasta su
3
Armando Leal Ríos

voluntad misma al interés personal y ambiciosos de tal o cual


individuo cuyos hechos y conocida conducta son más claros
que la suya misma, pero quieren presentarlos con un carácter
legal atreviéndose a recomendar tal procedimiento como un
hecho digno que le acredita tal o tales consideraciones en que
se han desarrollado algunas ideas con que han procurado cubrir
sus obras, cuyos hechos han dado para la causa los primeros
resultados que estamos palpando. Hablo del señor licenciado
[Manuel Z.] Gómez y del licenciado [Juan José de la] Garza en
San Luis. El primero acérrimo enemigo de los felices pensa-
mientos y mejoras obras e intachable conducta de buenos
ciudadanos de Nuevo León, que han merecido la más brillante
acogida en toda la República por los hombres sensatos.
Este ciudadano no omite ocasión para expresar públicamen-
te sus pensamientos recomendando a su héroe como el guía
privilegiado, por su carácter, por su saber, por su influencia y
vastísimos conocimientos en política, considerando cerca de él
a los demás hombres como criaturas que de la cuna se asoman
a la calle a ejercer su libertad. Tales son las convicciones del
señor [Manuel Z.] Gómez para con quien he tenido las mejores
relaciones, pero este sujeto delirante por sus caprichos se per-
mitió ayer una acción indigna de su educación y guiado de sus
miras particulares, que por mi parte no puedo pasar desaperci-
bida en el caso.
Recibí a las seis de la tarde del día 23 la comunicación oficial del
día 20 y adjunto ejemplar del Armisticio en San Luis el 14
del corriente, a varios amigos en la noche les enseñé este ejem-
plar, habiendo dejado la comunicación oficial en la Secretaría
de la Carpeta del Mes, ayer de mañana vino el licenciado [Ma-
nuel] Villalón y procurando saberlo todo me la pidió, se la
enseñé, se retiró y pasaban dos horas cuando vino el licenciado
[Manuel Z.] Gómez y estando yo ocupado en la Sala Consisto-
rial arreglando la salida de los reemplazos, me manifestó deseo
de ver la referida comunicación, le dije que estaba en la Carpe-
ta, se pasó solo a la Secretaría, la buscó hasta que la halló, se
impuso de ella y luego se sentó a extractarla, copiando trozos
enteros. Estaba concluyendo esta operación cuando yo entré a
4
Linares: Cruce de Guerra

la Secretaría y su aspecto, todo su semblante me re-


velaron que se ocupaba de alguna acción maliciosa, le tomé
un papel escrito que tenía en las manos y era precisamente el
extracto que había sacado de la comunicación. Le hice una
muy seria y formal reprensión por el grosero abuso que había
cometido, haciéndole en el acto y en su presencia
pedazos su papel. Se quedó suspenso, sin resolver una pala-
bra y después de un rato me fue a hablar a la sala tratando de
satisfacer la concurrencia, pero no tuvo razón que le favorecie-
ra, quizo exaltarme gritando que era un gran patriota, que él
mandaba más, en fin, delirios de esa naturaleza, le previne que
se retirara y se retiró luego.
Me he permitido poner en conocimiento de usted esta ocu-
rrencia porque hoy se fue el licenciado [Manuel Z.]
Gómez para esa ciudad y a pesar de que por ésta le formulé el
informe siempre habrá de descubrir la verdad quien que se lo
sepa, tal como pasó.
Los de Tamaulipas pensando en gobernadores, diariamente
me escriben de Villagrán; hace seis días que el señor [Juan
José de la] Garza, la primera vez que estuvo en esa
expidió una Circular proponiendo a los pueblos de jefe in-
terino a don Francisco Villasana, durante su
ausencia por tener que pasar a México, el jefe político don
Ramón Rodríguez Fernández, así lo dispuso para ser
comisionado por los pueblos proponiéndose gobernador.
Los de Villagrán se resolvieron por [Francisco] Villasana, así
entiendo que hay otros varios.
El señor Jesús Cardona llegó a esta ciudad hace algunos días,
mira para Tamaulipas pero aún no se resuelve a visitarla. Que
Dios conserve a Tamaulipas en su santa gracia y a nosotros de
lo necesario para concluir felizmente nuestro quehacer.
Me repito de usted su muy atento servidor y amigo que besa
su mano. [6611]

Guillermo Morales.
5
Armando Leal Ríos

Excelentísimo gobernador y comandante general don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León septiembre 28 de 1855
Muy señor mío y respetado amigo:
Son las once de la noche, hora en que he sabido por conversa-
ción del Cura Villarreal, que el licenciado Juan José de la Garza
llegó a Victoria el lunes o martes. Encargó a [Martín] Sayas la
Comandancia Militar del Centro de Tamaulipas y acto continuo,
se marchó para Tampico. Como la conducta de estos dos hombres
en nada absolutamente la considero ni sana, ni conveniente con
sus disposiciones me temo mucho que los procedimientos del
señor [Juan José de la] Garza y [Martín] Sayas sean sin conocimiento
de usted y que en privado manejan, nos vayan a proporcionar
mayores males que los que han dado por resultado de los mal-
ditos convenios de San Luis [Potosí], que deban suponerse
como el origen de los gravísimos resultados para los principios
que sostienen los Estados y fuera para su existencia e importan-
tísima conservación. Me temo también que si el señor [Juan
José de la] Garza no está de acuerdo con usted para ir a Tampi-
co [Tamaulipas] vaya a empeñarse con [Pedro] Hinojosa, para
que con la fuerza que le obedece, y va de orden de usted para aquel
punto, le preste reconocimiento y cuando se le dificulte procure
dividirla que de todos modos causará un perjuicio a otros.
Considerando de la mayor importancia e interesante conve-
niencia que usted personalmente con la visión de su mando,
tomara posición del puesto más necesario que tienen los Esta-
dos y cuando menos, adopte todas las medidas más oportunas
que diere este resultado; me he resuelto a darle conocimiento
por extraordinario violento, en la inteligencia que el señor [Juan
José de la] Garza no obre de acuerdo con usted sobre el parti-
cular y sí, guiado de su muy conocida ambición y ningún
respeto a sus deberes. Cuyo procedimiento sin remedio reco-
nozca pronto y eficaz. Más si este señor camina de acuerdo
con usted antes de todas las cosas, le suplico me dispense y
tendré mucho gusto que suceda lo contrario de lo que he pen-
sado de esta persona.
6
Linares: Cruce de Guerra

He llegado a entender que los convenios elaborados en La-


gos [Jalisco] por el Triunvirato de los señores [Ignacio]
Comonfort, [Antonio] Haro y [Manuel] Doblado han destruido
no solo la esperanza de mejorar, sino hasta la era de la Revolu-
ción. Quiera no suceda al señor [Ignacio] Comonfort con el
señor [Antonio] Haro, peor y más ridículo desenlace que al señor
[Juan José de la] Garza, pero es muy justo que se lo exprese y
arrepentido de su cariño fraternal al señor [Antonio] Haro, más
dispuesto pronto a procurar llevar entero su pensamiento al de
Nuevo León, para quien resultara en este caso mayor y más
solemne compromiso que en el que hasta hoy se encuentra
teniendo que aceptar una lucha muy desigual pero que siendo
tan justa la causa que sostiene, no debe cejar un ápice usted en
todas circunstancias; es necesario adoptar grandes pensamien-
tos y mayores resoluciones que auguren en primer lugar su
conservación y se proporcionen los medios de desarrollar y
llevar hasta su fin la grandiosa obra que se ha propuesto para lo
cual me aventuro a indicarle mi pensamiento y que lo tomara
usted en consideración si lo creyere análogo.
Partiendo del principio que la unidad entre los Estados, que
sostienen los principios proclamados por Nuevo León es de
todo punto la base principal y que ante todas las cosas se debe
procurar asegurar para afirmar las grandes resoluciones a que
deben corresponder sus habitantes, me parece conveniente que se
convócase por usted una junta general en Monterrey [Nuevo León]
compuesta de cuatro o más jefes municipales, vecinos de cada
pueblo de los Estados según su número de habitantes para que
desarrollando a sus grandes y muy sentidos pensamientos, pa-
tentizárales los grandes resultados que se les preparan si
desgraciadamente se llega a entronizar el sanguinario partido
que procura asegurarse del poder, y que tantos males ha causa-
do al país y cuya infalible consecuencia sería que el poder
militar concluiría de una manera atroz, con las fortunas y bienes
de todos sus habitantes, resolviendo enteramente todo lo con-
veniente.
Este paso podría dar también por resultado que esas des-
avenencias, que por algunos genios díscolos se suscitan en
7
Armando Leal Ríos

Tamaulipas se cortasen de raíz y caminaremos unidos y con-


forme con todo.
Este pensamiento debe de suponerlo como originado de los
grandes deseos que me animan para procurar que nuestros es-
fuerzos hasta aquí, no sean estériles y que cuando menos, si los
Estados de oriente no procuren llevar hasta México a plantear
sus principios con el orden y moralidad que los ha sostenido,
que se hagan fuertes para que respetados y conservados en
cuanto valen, saquen cuantas ventajas les correspondan para su
conservación y aumento.
Sin otro asunto, debo a usted mil felicidades. Su afectísimo
amigo y seguro servidor que besa su mano. [6612]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Monterrey, Nuevo León septiembre 30 de 1855
Mi muy querido amigo:
Acabo de recibir la importantísima carta de usted de 28 del co-
rriente, en que me da aviso de los oscuros, pero muy
sospechosos pasos del licenciado [Juan José de la] Garza, que
aún al ojo menos predispuesto le hacen conocer la valía de ese
hombre a quien yo tanto he considerado, hasta guardando el
secreto de sus aberraciones. Pero ya estoy resuelto a obrar, y
aunque en este momento no se la medida que dictaré, puede
usted estar seguro de que saldrá prontamente y revestida con la
energía necesaria para que sepamos a lo que debemos atener-
nos por parte de Tamaulipas.
El pensamiento de usted es una iniciativa muy política y no
es difícil que la adopte; sin embargo, todavía quiero obrar con
más actividad y tal vez por lo pronto preferiré otro medio pero
que siempre nos conduzca al mismo fin. Lo que resolviere se
lo participaré oportunamente.
8
Linares: Cruce de Guerra

Amigo, no puede usted figurarse a que grado


llega mi gratitud hacia usted, ni cual es la magnitud de
la idea que tengo de su amor a la Patria, me callo pues,
porque considero suficientes cualesquiera expresiones
para manifestar estos sentimientos. Dios y las generacio-
nes presentes y futuras le darán el premio a que es
acreedor.
Me despido, repitiéndome su verdadero gran amigo. [6613]

Excelentísimo señor gobernador y comandante general don


Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León octubre 11 de 1855
Mi muy señor mío y respetado amigo:
Tengo dispuesto que mi hermano don Isidro Morales pase a
hacer una comprita del otro lado del río, por tal mo-
tivo habré menester en las aduanas de Camargo, Reynosa ó
Matamoros [Tamaulipas], para cubrir los impuestos
del valor de ciento veintisiete caballos, sobre cuyo particular
me dirijo a usted oficialmente. Suplicándole por la presente se
digne mandar librar sus ordenes a favor de mí referido herma-
no, para que en la aduana que se presente le sean abonados los
impuestos que tenga que pagar por el importe de los referidos
caballos.
A cuyo favor le viviré a usted reconocido. Su fiel y verdade-
ro amigo que afectuosamente besa su mano.

Guillermo Morales.

Aumento. Administrativamente don José Ardines tiene en-


cargo de recibir la orden y remitírsela a mi hermano. [6614]
9
Armando Leal Ríos

Excelentísimo señor gobernador y comandante general don


Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León octubre 15 de 1855
Muy señor mío y respetado amigo:
Dos cartas he visto, del señor [Manuel Z.] Gómez escritas en
ciudad Victoria [Tamaulipas]. Manifiestan el capricho y ambi-
ción del señor [Juan José de la] Garza en quien cabe bien aquello
de la viga de marca que le aplica al señor [Antonio] Haro.
La primera dice del comandante licenciado, que después de
haber batallado con el señor [Manuel Z.] Gómez para despren-
derlo de los hombres que lo rodean, y con las muchas
prevenciones vino a empeorar todo, las paces que el señor
[Santiago] Vidaurri hizo con el ejército, pasando el 4º Ligero en
su auxilio, pero que por fin el señor Garza se resolvió a venir a
fuerza a una entrevista con el señor Vidaurri en el estado de
Nuevo León, de la cual no me prometió resultado favorable
ninguno pero que me cabe la satisfacción de haberlo hecho
posible, el día once envié otra carta en que manifiesta las razo-
nes por que el señor Garza no vino a atender la entrevista con
usted, siendo la principal haber recibido un comisionado o ex-
traordinario de Tampico [Tamaulipas] en que lo llama el
vecindario y comercio de aquella plaza, así como haber recibido
comunicación del centro en que se pone a sus ordenes con la
guarnición de su mando, lo que aceptó en el acto.
Todos estos frívolos motivos con que se excusa y entorpece
las rectas determinaciones de usted, el señor Garza dándole
inteligencia en sentido contrario a sus disposiciones como su-
cede con la calificación que hace de la comunicación que usted
dirigió a don Guadalupe García, en que manda marche el 4º
Ligero para la capital del Estado. Esto lo considero como un
puro pretexto inconsecuente en que despojado de todo reco-
nocimiento y obligación con usted y el Estado, a quien todo le
debe, trata de saciar su ambición metálica, agente principal y
positivo de sus maniobras según lo que hasta aquí puedo dedu-
cir de su conducta. Pues se atiene a los servicios que ha
prestado a la causa que sostienen los Estados, esos son ninguno
10
Linares: Cruce de Guerra

y si positivos perjuicios de fatales consecuencias aprovechando


el fruto de los grandes resultados que tienen las acciones de
Monterrey y el Saltillo y el recomendable nombre que por mil
títulos se ha granjeado usted, con su esclarecida conducta y la
del ejército a su digno mando.
La bien marcada conducta del señor [Juan José de la] Garza,
exige de parte de usted por su decoro y en apoyo y robustez de
los principios que sostienen los Estados, una providencia pron-
ta y enérgica que le marque él hasta aquí, porque de lo contrario
este hombre que no se para en medios para conseguir sus fines,
puede proporcionarle a la causa y al Estado males gravísimos y
como no considero que obre solo, sino en común acuerdo con
el señor Haro, porque a la influencia y maniobra de este señor
debemos atribuir las resoluciones de la Guarnición de Matamo-
ros [Tamaulipas], las de Tampico [Tamaulipas] y como, de
aquella plaza, pues es muy dudoso que sin esta directa coopera-
ción pudieran aparecer estos resultados a favor del señor [Juan
José de la] Garza, de quien el comercio de Tampico, con nin-
gún carácter puede esperar garantías y si se aventurara a lo
cómodo y barato de un arreglo.
Supuesto que los pueblos del centro de Tamaulipas, estén
molestos y agraviados con las tropelías y extorsiones de los
agentes jefes del señor [Juan José de la] Garza cuya conducta ha
motivado según entiendo que sus mejores vecinos hayan ocu-
rrido a usted solicitando protección de estos elementos de orden
que fastidian en lo más de aquel Estado, debemos de esperar
como ese contingente pésimo sea resuelto favorablemente para
la causa y nuestro Estado y me parece conveniente y muy opor-
tuno la pronta ocupación de la línea llevando en la retaguardia
de su ejército la fuerza de Tamaulipas con jefes de ellos, siem-
pre que le merezca confianza; despojando de todos sus oficiales
la guarnición de Matamoros, haciendo que se organicen en
aquella plaza la guardia nacional y sin pérdida de tiempo se
dirigiera a Tampico extrayendo en buen tiempo el mal que se
prepara y que puede desarrollar con un carácter rápido y ame-
nazante, pues para ese paso considero a usted con la influencia
necesaria en la Frontera que es lo que basta, sin olvidar la bue-
11
Armando Leal Ríos

na inteligencia con don Antonio Guerra en Santa Bárbara, con


facultades para que organice la Guardia Nacional de aquellos
pueblos pudiendo despacharle en su auxilio si lo considera
conveniente a su hermano Gaspar [Guerra], si usted cree que
hagan estos señores más obra buena.
Ya le informará el extraordinario lo que a mí me platicó: que
las comunicaciones para el comandante [Pedro] Hinojosa las
recibió el señor [Juan José de la] Garza y no las mandó, me
temo que lo mismo haya sucedido con las de don Antonio Guerra.
Mucho he platicado en este papel y desde ahora le suplico
me dispense el rato que lo distraje con esto; manifestándole que
he recibido sus dos últimas apreciables por este conducto, le
doy a usted las más elevadas gracias.
Soy a sus órdenes su afectísimo servidor y verdadero amigo
que besa su mano.
Guillermo Morales.

Aumento. En nuestras conferencias, hemos convenido en


la importancia que hay en que cultive sus muy buenas relacio-
nes con los señores [Ignacio] de la Llave y [Santos] Degollado,
mandándoles a cada uno su comunicado con todas las mencio-
nes para que de acuerdo, se mantengan firmes y no cejen. Para
el diez hemos votado por el señor [Miguel] Blanco de Monclo-
va, sobre este particular verbalmente le hablará el señor Manuel
Valdés Cantú, dador de la presente. Octubre 15 de 1855. Gui-
llermo Morales. [6615]

Excelentísimo señor gobernador y comandante general don


Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León octubre 23 de 1855
Mi apreciable y respetado amigo:
Por su recomendable 21 del corriente veo con gusto las grandes
esperanzas que se promete de que la nueva Administración
12
Linares: Cruce de Guerra

corresponda a la sociedad procurando las medidas radicales que


tanto necesita el bien de la nación y los importantes intereses
de la frontera; Dios permita que sean cumplidos todos nuestros
deseos. Pero me parece que hay mucho que temer, ha tenido
lugar la entrada del señor [Juan] Alvarez a [ciudad] de México,
ese nuevo método de transacciones o convenios que han adop-
tado por jefes de la revolución del centro del país para arreglar
las pequeñas diferencias en los principios que sostienen, en los
que por saldo de todas las operaciones, se resulte que les dieron
lo contrario de lo que piden y en la parte que más perjudique.
El pronto reconocimiento de su parte al gobierno del señor
[Juan] Alvarez, después de lo prudente que venía considerando
esta medida por las razones que usted manifiesta, le prepara un
campo más ventajoso en el porvenir de los negocios de México
y en las muy preferentes atenciones y activas providencias que
demandan las absurdas pretensiones de los ambiciosos a quie-
nes por esta vez, tocara únicamente a los estados de Nuevo
León y Coahuila rechazar; pues por Tamaulipas, al señor [Juan
José de la] Garza entiendo que no es esto lo que ha de llamar la
atención.
Considerando de grande importancia la comunicación oficial
para Joaquín Castro, la mandé con el honrado ciudadano An-
tonio Doria, acompañado de otro vecino con las instrucciones
necesarias; así pues que se fuera por La Gavia a Padilla [Tamau-
lipas] con orden de que si el señor [Joaquín] Castro no había
llegado a Victoria [Tamaulipas] retrocediera sobre el camino
para San Fernando [Tamaulipas] hasta donde lo encontrara,
espero que todo será bien desempeñado, salió a las siete de la
mañana para amanecer en Padilla [Tamaulipas].
Aquí pasó un extraordinario para el licenciado [Manuel Z.]
Gómez que le manda el licenciado [Juan José de la] Garza des-
de Llera [Tamaulipas], lo auxilié porque manifestó verbalmente
que llevaba el importantísimo negocio de arreglo de la unión de
Tamaulipas con nuestro Estado, puede que haya sido alguna de tantas
paparruchadas del señor Garza y me engañe; anoche parte de
vuelta. Supongo que usted sabría lo que dice ese correo.

13
Armando Leal Ríos

Sin otro asunto, me repito a las órdenes de usted su fiel ser-


vidor amigo, que le desea felicidades y atentamente besa su
mano. [6616]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y comandante general don


Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León octubre 24 de 1855
Mi apreciado y respetado amigo:
A las ocho de la mañana de hoy recibí su recomendable de ayer
y adjunto, copia de la que le dirigió el señor [Juan] Alvarez cuyo
contenido me ha llenado de gusto. Complaciéndome con feli-
citar a usted por la conducta franca y consecuente con que ha
sido correspondido, pues los buenos sentimientos que demues-
tra el señor [Juan] Alvarez y las ideas de que esta animado, nos
auguran un porvenir favorable.
Son las dos de la tarde y acabo de despachar al vecino Ma-
nuel Cerda con la comunicación para el señor general Traconis
[Juan Bautista], sabe muy bien todas cuantas entradas tiene
Tampico y considerando muy vigiladas las de Altamira [Tamau-
lipas] hasta cerca del paso del río del Limón y de allí tomará
una canoa y por el río fuera a llegar a Tampico, va muy bien
montado en dos caballos con herraduras y aunque tiene que
hacer alguna vuelta entrará en aquella plaza para el día 27, le di
para sus gastos treinta pesos ofreciéndole gratificar bien sus
servicios.
Es muy probable que el señor [Juan José de la] Garza procu-
re sembrar en todos los pueblos el descontento ocupando hasta
medidas muy reprobadas, de lo que me indica algo la adjunta
copia, contestación a una de tantas que apuesto a algunos ami-
gos de Tamaulipas, demostrándoles la conveniencia que hay en
las circunstancias de que los Estados permanecen unidos para
14
Linares: Cruce de Guerra

presentarnos fuertes; reprendiendo con energía la división que


pretende el señor Garza a las cuales quiere otra fuerza guiado
de sus intereses particulares.
Acabo de recibir un correo de Reynosa [Tamaulipas] y con
fecha 21 del corriente me dice don Francisco García entre otras
cosas que teme que la orden contra la aduana no tenga
buen éxito, por motivo de una circunstancia del señor
licenciado [Juan José de la] Garza relativa a que no se
ejecuten las órdenes que no vengan por su conducto, pero
que de cualquier manera cuente usted que yo haré lo po-
sible en conseguir el pago de ella, ya dirigiéndome a Victoria
[Tamaulipas] al señor Garza o al jefe de la línea, mi hermano
Guadalupe.
Hoy mismo sabré de vuelta de correo, percibiéndole al señor
García y a mi hermano Isidro [Morales] si hubiera vuelto de
Brownsville, presentar la intervención del señor [Juan José de la]
Garza o del señor jefe don Guadalupe García en el pago de la or-
den y que el empleado de aquella aduana acatando activamente la
orden de usted, la adjunta y en caso contrario le ponga la razón
que estime conveniente y se me devuelva.
Este informe no quiero que sirva para que usted dicte alguna
providencia, sino para que esté al tanto. Esperemos el resulta-
do que le comunicaré oportunamente.
Sin otro asunto y deseando a usted todas felicidades me re-
pito a sus órdenes su fiel y verdadero amigo que besa su mano.
[6617]
Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Reynosa, Tamaulipas octubre 20 de 1855
Mi estimado amigo:
Acabo de recibir la apreciable de usted de 18 del presente de
cuyo contenido quedo enterado, y en contestación digo a usted
15
Armando Leal Ríos

que enterado como estoy de las buenas disposiciones que ani-


man al señor gobernador [Juan José de la] Garza, para arreglar
satisfactoriamente las pequeñas diferencias que puede haber
entre él y su excelencia el señor [Santiago] Vidaurri, no veo
ninguna necesidad por ahora de promover nada ni en pro, ni en
contra de los excelentísimo señores.
Esta convicción en que estoy es la misma de todas las per-
sonas de esta villa. La pronta marcha de su excelencia el señor
Garza para Tampico me consta también que fue motivada por
interés nacional y no comercial, ni particular. La unión que usted
desea, la deseamos todos y para sostenerla es necesario no llevar-
nos de lo que se cuenta ni de lo que parece, tal vez en alguna
acción o conducta de un individuo distinguido porque la política
hace a veces hacer ver lo contrario de lo que se hace en secreto.
Con la misma franqueza que usted me habla, hablo a usted
también y le aseguro que no veo ningún motivo para el desaso-
siego en que usted está por lo que parece. [6618]

Francisco García.

Excelentísimo señor gobernador y comandante general don


Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León octubre 25 de 1855
Mi apreciable y respetado amigo:
Me propuse detener hasta hora por la mañana al extraordinario,
en espera de don Antonio Doria por cuyo origen he llegado a
entender por algunos conductos que la sección del señor [Joa-
quín] Castro llegaría el domingo para Victoria[Tamaulipas].
Visto que se dilata Doria, he dispuesto se vuelva el correo que
sale a las siete de la mañana.
Sin otro asunto soy a las órdenes de usted su fiel y verda-
dero amigo que besa su mano. [6619]
Guillermo Morales.
16
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León octubre 28 de 1855
Mi muy respetable amigo:
Son las doce de la noche y acaba de llegar don Antonio Doria,
en Santander encontró la primer partida de la sección del gene-
ral [Joaquín] Castro comandada por el capitán Prieto, luego un
escuadrón mandado por Savaniga y en San Fernando a Castro
con el resto de la sección, llevaban dos partes ligeras y dos ca-
rros de parque; muy bonita fuerza pero muy maltratada por la
necesidad y lo muy movido del camino; hoy estará durmiendo
en Chupaderos, rancho de la fundación de Ercillas sobre el
camino para Santander [Tamaulipas], el extraordinario que salió
esta mañana lo encontró Doria y me aseguró que muy de ma-
ñana, mañana alcanzará la sección.
Luego que recibió la comunicación Castro, dice Doria que
se puso furioso que la leyó en voz alta y a cada palabra le apli-
caba una razón mala, que después que leyó una carta particular
se calmó un poco y le preguntó que cuantos hombres traía el
coronel [Juan] Zuazua, le contestó que mil rifleros, luego entra-
ron en conversación, le mandó dar una taza de café y enseguida
le enseñó varias cartas de [Juan José de la] Garza, en una le
aseguraba que usted era un anexionista y en otras le noticiaba
que el amigo [Santiago] Vidaurri le había comunicado que le había
pedido el 4º Ligero de Línea, que no tenía que mandarle sin su
consentimiento porque fueran para el objeto que usted le había
dicho y por último le dijo que él reconocía a [Juan José de la] Gar-
za y no a usted. Este informe verbal me indica algo de lo que
puede ser la contestación, poco consecuente con sus órdenes;
me apresuro a que usted mande muy pronto la contestación
para que estos desatentos militares pronto vuelvan al orden y
cuanto antes se le retire al señor Garza la acción caprichosa que
está ejerciendo.
Me ha dicho Doria que de todos los pueblos de Tamaulipas,
están sacando la gente que pueden por orden de Garza y orde-
na mandarla con dirección a Tampico [Tamaulipas].
17
Armando Leal Ríos

Sin otro asunto soy a sus órdenes de usted, fiel y verdadero


amigo que besa su mano. [6620]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León octubre 28 de 1855
Mi apreciado y respetado amigo:
En el acto que recibí su recomendable 25 del corriente y adjunta
comunicación para el señor licenciado [Manuel Z.] Gómez
impuesto de su contenido pasé personalmente a su casa y pues-
ta en sus manos lo felicité por la honrosa confianza con que el
Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León lo había dis-
tinguido nombrándolo Administrador de la Aduana Marítima
de Matamoros [Tamaulipas], deseándole mil felicidades en su
nuevo destino.
A continuación a nombre de usted le ofrecí los auxilios que
necesite para su marcha, y que informado usted que tenía dis-
puesto mandar su familia a la capital del Estado tenía particular
encargo para proporcionarle toda clase de recursos que hubiera
menester, para todo lo cual desde aquel momento estaba a sus
órdenes.
La honrosa conducta que se ha observado con el señor
Gómez, por lo que ha realizado sus procedimientos y por la
que es un digno merecedor de la mayor consideración y aprecio
de todos sus amigos.
Sin otro asunto me repito a las órdenes de usted su fiel y
verdadero amigo que besa su mano. [6621]

Guillermo Morales.
18
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León octubre 28 de 1855
Mi apreciable y respetado amigo:
Ayer a las dos de la tarde recibí su recomendable de 26 del co-
rriente y adjuntas comunicaciones para los señores generales
[Juan Bautista] Traconis, [Joaquín] Castro y el ad-
ministrador de Aduana Marítima de Tampico. A la hora que
llegó el extraordinario llovía mucho, así continuó toda
la tarde y noche, y hoy en la mañana salió un extraordina-
rio para Santander [Tamaulipas] con la comunicación del
señor Castro adonde se halle pues ninguna noticia se tiene, ni
don Antonio Doria ha vuelto, a la misma hora salió el
de Tampico [Tamaulipas] bien montado en dos muy bue-
nos caballos herrados, lleva todas las instrucciones
para librarse de caer en manos de [Juan José de la] Garza
o sus gentes. Derrotero: La Gavia, Baratillos, Buen
Pastor a pasar a un lado de Cruillas [Tamaulipas] y de trave-
sía por la sierra de Alamitos hasta llegar a los retenes donde
tomará una canoa para llegar por el río a Tampico.
La muy interesante y ventajosa posición en que
hemos quedado demanda del digno jefe que rige los
destinos del Estado, la resolución firme y constante como
hasta aquí, en todos sus procedimientos hasta cose-
char los frutos particulares del Estado y gratitud de
la nación.
Acaba de llegar un vecino de Victoria [Tamaulipas] y hasta
hoy, tres días que aún no llegaba la sección de Matamoros
[Tamaulipas], se dijo allí que una parte de la de San
Fernando y otra en Santander, nada asegura que el señor
Garza continuaba su marcha para Tampico.
Soy a las órdenes de usted su atento fiel y verdadero amigo,
que besa su mano. [6622]

Guillermo Morales.
19
Armando Leal Ríos

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León noviembre tres de 1855
Mi muy apreciable y respetado amigo:
El señor don Juan Cárdenas me ha informado de un negocio
de un préstamo de dinero que se hizo bajo su formalidad, sobre
cuyo particular se ha dirigido a usted hoy, por el conocimiento
que el señor licenciado don Domingo Martínez sabe desde su
origen de este mismo asunto, entiendo que es justo el reclamo
del señor Cárdenas. Por tal motivo uno mis recomendaciones
a la de otras personas para que usted, se digne tomar en consi-
deración la solicitud del señor [Juan] Cárdenas y resolver lo que
estime conveniente.
Desde que el señor Cárdenas se halla en este lugar ha mani-
festado la buena disposición para auxiliarle con sus conocimientos
en los asuntos de Tamaulipas y como puedan serle de alguna
utilidad, lo pongo en su conocimiento.
Sin otro asunto quedo a sus órdenes, su afectísimo fiel y
verdadero amigo que besa su mano. [6623]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe del Ejército


don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León noviembre cuatro de 1855
Mi muy apreciable y respetado amigo:
A las seis de la tarde de ayer llegó el extraordinario que lleva
dos pliegos para el señor [Juan José de la] Garza y para [Joa-
quín] Castro, nos llama la atención aquello de excelentísimo
señor gobernador y comandante general del estado de Ta-
maulipas licenciado Juan José de la Garza, sáquenos de la duda
20
Linares: Cruce de Guerra

que origen tiene este nuevo nombramiento.


El extraordinario que pasó ayer de Tampico nos aseguró
que la Guarnición de Tampico, no permitiría que ocuparan
aquella plaza la Sección de Garza que está muy inmediata, pero
como cuentan mentiras nada se puede creer.
Ayer, a instancias del licenciado [Domingo] Martínez me
permití comentarle sobre un negocio del señor [Juan] Cárdenas.
Más informado entiendo que no es tan sencillo, por otros ante-
cedentes como con que tuvo pertenencia al gobierno general y
tuvo responsabilidad en aquel tiempo sobre la Aduana de Ma-
tamoros, quien sabe cual será la verdadera responsabilidad del
referido señor Cárdenas.
Tampoco quiero que tome en cuenta el segundo párrafo,
sobre cuyo particular usted mejor que nadie sabe lo que se ne-
cesita.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes, su fiel y verdadero
amigo que besa su mano. [6624]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y general en


jefe don Santiago Vidaurri

Linares, Nuevo León noviembre seis de 1855


Muy apreciable y respetado amigo:
Son las cuatro de la mañana y acaba de llegar felizmente de
Tampico el extraordinario Manuel Cerda, en el acto continua su
camino, verbalmente le informará los motivos de su demora así
como el empeño de [Juan José de la] Garza en ocupar Tampico.
El otro correo –dice Cerda– que lo encontró bastante can-
sado pero que sin embargo, llegaría ayer a Tampico. Al
extraordinario León Alvarez que llevó una comunicación para
21
Armando Leal Ríos

Castro y otra para don Juan de la Garza le ordené fuera hasta


donde están estos señores.
La Comisión de los señores licenciados [Domingo] Martínez
y [Francisco] Margain, el primero salió a las tres para Villagrán
[Tamaulipas] y el segundo sale hoy para La Gavia, constante-
mente he estado apurando al primero para que sin pérdida de
tiempo continúe su marcha pues en la dilación está el peligro.
Una hora antes de salir don Domingo [Martínez] me manifestó
que ni él, ni [Francisco] Margain tenían un peso y que cada uno
necesitaba a lo menos cien pesos.
Sin orden de usted para facilitárselos pero deseando que por
ningún motivo se perjudiquen sus providencias, no dudé en
proporcionarles los doscientos pesos que pidieron sobre cuyo
particular resolverá usted lo que estime conveniente.
A don Francisco Margain le he facilitado dieciocho pesos
que me pidió para socorro de tres soldados, tres caballos y un
vecino montado a caballo hasta Monterrey.
A este extraordinario le tengo dados cuarenta pesos, los
treinta que le di al salir de aquí los gastó y me falta gratificarlo.
En otro asunto soy a las ordenes de usted su fiel y verdadero
amigo que besa su mano.

Guillermo Morales.

Aumento. Al apearse Cerda del caballo sufrió un golpe que


lo ha puesto mal, para continuar.
Di a Cerda que en la mañana del día 31 lo despacharon, pero
que fue imposible salir porque ese día principió al amanecer el
ataque, las fuerzas de Juan de la Garza por el Fortín Landeros,
que le mataron tres cabos, un sargento y cuatro soldados, que
se retiró y después siguieron presentándose algunas guerrillas
las que en el acto eran rechazadas; que el señor [Juan Bautista]
Traconis y la fuerza que le obedece está con mucho entusiasmo
dispuesta a defender la plaza que por la noche llevaron tres
lanchas cañoneras al paso de doña Cecilia, dos sobre el río Ta-
mesí y un vapor a Bama sobre el mismo río hasta enfrente de
Altamira que éste mandó el señor Traconis que se viniera [Ma-
22
Linares: Cruce de Guerra

nuel] Cerda, que después tomó una canoa y salió en el paso de


la Chaca, que el día primero y hasta que llegó a Alamitos Alto
todo el día oyó cañoneo muy pausado. Que la plebe de Tampi-
co deseaba que entrara don Juan [de la Garza], por las esperanzas
de lo que les proporcionara el desorden. [6625]

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León noviembre nueve de 1855
Mi estimado y respetado amigo:
De la existencia de los fondos de cuantos he pagado cuarenta
pesos que gastó Antonio Doria y el vecino que lo acompañó en
ida y vuelta a donde estaba [Joaquín] Castro, treinta pesos que
gastó el extraordinario Manuel Cerda a Tampico y veinte pesos
que le di de gratificación, doscientos pesos que le dió a los li-
cenciados [Domingo] Martínez y [Francisco] Margain de estos
mismos fondos pagan al segundo extraordinario adonde se ha
encontrado Castro, para todas estas operaciones ha faltado
dinero, los he puesto de mi bolsa pero de los mismos fondos
luego que se cobré, me pagaré.
Con mucho entusiasmo tomó por su cuenta una representa-
ción don Antonio de la Paz, relativa a que se les disminuya el
contingente, anduvo de casa en casa exigiendo y recogiendo
firmas desde que me indicó la idea la manifesté lo inoportuno
de él, por la razón de la multiplicada atención del gobierno y
porque entendía que cuando estuviera fuera de las presentes
circunstancias sería indudablemente reformada en parte el de-
creto que establece el contingente, esto no obstante insistió y hoy
mandan por encargo la solicitud.
Ninguna noticia tenemos aquí del señor Garza. don Jesús
Cárdenas para San Fernando, el jueves y el viernes salió don
Agustín Higuera para Victoria, a donde esta don Juan. Soy a sus
23
Armando Leal Ríos

órdenes su afectísimo fiel y verdadero amigo que besa su mano.


[6626]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León noviembre nueve de 1855
Mi apreciable y respetado amigo:
En la comunicación oficial que dirige ayer participando haber
solemnizado el nombramiento de presidente interino del señor
Juan Alvarez, dije que Linares puso en activo servicio más de
cuatrocientos hombres y omití hacer la explicación en que tér-
minos. En campaña más de doscientos cincuenta y ciento
cincuenta que estuvieron dando la guardia de frente y tantos
hombres diarios en esta ciudad. Además, cincuenta hombres
de que se compone la fuerza de policía rural que vigilaban los
caminos de Tamaulipas, desde el día veintiocho de mayo que
secundando esta ciudad el plan proclamado en la capital hasta
principios de septiembre. Hago esta explicación porque de
pronto quizá usted y varias personas no tendrán presente todas
estas circunstancias.
Al poner la referida comunicación he querido demostrar en
ella los verdaderos y puros sentimientos de que con el mayor
entusiasmo ha estado animado este vecindario para contribuir
con toda clase de servicios y desmentir con los hechos lo que
dice el señor [José María] Aguirre en su comunicación respecto de
esta ciudad, y por si estimare oportuno y conveniente mandarle
dar publicidad.
Con bastante indignación ha visto este pueblo el informe ca-
lumnioso que con fecha 28 de septiembre dio don José María
Aguirre en el que desarrolla una idea respecto de Linares que
jamás ha abrigado su vecindario, sobre cuyo particular debo
24
Linares: Cruce de Guerra

saber si usted cree oportuno que diga algo este pueblo en cuyo
caso desde ahora le suplico me indique las principales ideas que
deberán fundar, pues quiero que estas hablen consecuentes con
los hechos.
Sin otro asunto soy a las órdenes de usted su fiel y verdade-
ro amigo que besa su mano. [6627]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León noviembre 11 de 1855
Mi muy estimado y respetado amigo:
A las seis de la tarde recibí el oficio en que me encarga el auxi-
lio de mulas y carretas para la sección Castro, en el acto hice el
reparto para cien mulas y veinte carretas que estén aquí el día
quince y el día dieciséis saldrán para Victoria [Tamaulipas] lo
que le serán de su conocimiento por sus órdenes.
El extraordinario que trajo la correspondencia llegó ano-
che y a las diez salió el primero para La Gavia, esta tarde sale
el otro para Villagrán; llegará el tercero, el de [Juan José de
la] Garza para Victoria [Tamaulipas].
Son las cuatro de la tarde y llegó felizmente el segundo ex-
traordinario de Tampico. Dios quiera que esta misma suerte,
corran los demás; el extraordinario me ha informado que todas
las entradas del río están mandadas cubrir por [Juan José de la]
Garza, esto no obstante, espero que no tengamos novedad.
Sin tiempo para más me repito a sus órdenes, su fiel y ver-
dadero amigo que besa su mano.

Guillermo Morales.

Aumento. Este correo recibió y gastó treinta pesos. Usted


dispondrá la gratificación que se le deba pagar. [6628]
25
Armando Leal Ríos

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León noviembre 12 de 1855
Mi muy apreciable y respetado amigo:
Con motivo de la entrada, de las salidas y ocupaciones que tuve
ayer tarde me distraje y los últimos dos correos no los despa-
ché, y ahora en la mañana al estar saliendo llegó el otro y
aprovechándolo despachó las comunicaciones para Tampico y al
señor Garza el que salió ayer para dormir cerca de Croix [Ta-
maulipas] hoy.
Por la adjunta que me ha entregado el Curita, verá usted lo
que anoche se supo en Villagrán [Tamulipas] de la Sección Cas-
tro, cosa que no es de dudar haya sucedido, espero hoy el
correo que pasó para Victoria si se ratifica esta noticia avisaré a
[Monte] Morelos y Cadereyta [Nuevo León] para que no man-
den sus mulas y carros.
Hay mucho que temer que las fuerzas que vienen de Méxi-
co, sigan el ejemplo de la sección Castro, pues en toda hora
estarán listas las maniobras de don Juan de la Garza y los de-
más malditos y de pronto nos vamos a quedar sujetos a muy
fatales consecuencias.
Sería muy conveniente que la sección Zuazua dispusiera
muy pronto en otra fuerza para con ella atender a donde lo
exigen las circunstancias, pues los de Tamaulipas hoy inter-
vienen arbitrariamente en las aduanas y mañana que se
les haya dado tiempo hostilizarán nuestros pueblos.
Para evitar este resultado, es conveniente dar antes de que nos
den, en ese fin usted sabe lo que más conviene y todos seamos
conformes si toma providencias tan enérgicas que corten de
raíz la epidemia que han desarrollado en Tamaulipas.
Mandé ejemplares para Villagrán e Hidalgo y muy pronto
estarán en Victoria, lo mismo que en Burgos, Padilla y San Fer-
nando[Tamaulipas]. Es muy seguro que la conducta del señor
[Juan José de la] Garza sea tan doble no solo para [Juan Bautis-
ta] Traconis haciendo como del carretero, de 2º en jefe, sino
26
Linares: Cruce de Guerra

para todas sus perversas miras pues un hombre como éste,


destituido de toda acción legal no se para en los medios.
Sin otro asunto soy a sus órdenes, su afectísimo, fiel y ver-
dadero amigo que besa su mano. [6629]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León noviembre 14 de 1855
Mi apreciable y respetado amigo:
Anoche volvió el extraordinario que llevó la última comunica-
ción para [Joaquín] Castro, me ha informado que en Victoria
con un escándalo extraordinario se insurreccionó toda la sec-
ción, que Castro, los oficiales y la mayor parte de la fuerza se
fueron para el interior, que los soldados que allí quedaron esta-
ban entregando su fusil y su mochila y les daban un peso en
mano, que con mucho entusiasmo estaban organizando fuerzas
para remitirle a don Juan de la Garza y tenían ochenta hombres
que habían juntado de los pueblos y de Victoria nada podían
reunir que en la plaza dejó Castro, tres piecesitas [artillería] chi-
cas.
Persuadido de que la sección Castro desapareció, hoy me
he dirigido a las autoridades de [Monte] Morelos y Cadereyta
para que suspendan la remisión de mulas y carretas que se les
había pedido.
Por extraordinario comunico esta noticia para su conoci-
miento y para que las autoridades reciban a tiempo el aviso.
Sin otro asunto me repito a las órdenes de usted su fiel y
verdadero amigo que besa su mano. [6630]

Guillermo Morales.
27
Armando Leal Ríos

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe del Ejército


del Norte don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León noviembre 24 de 1855
Mi apreciable y querido amigo:
Son las once de la noche y se me han presentado los extraordi-
narios Simón Avendaño y Juan Villarreal que condujeron los
adjuntos pliegos para Tampico y como verá usted por la adjun-
ta carta, que ni con un su amigo les fue posible entrar,
Villarreal que fue el primero, lo mandó este su amigo hasta
Altamira [Tamulipas] adonde estaba su amo Ramón Prieto,
para ver si él podía hacer que llegara porque tiene posesión de
canoas entre el río, con gente; dice que el día que perdió en el
rancho donde está el señor Prieto, inmediato a Altamira [Ta-
maulipas] se tuvo la noticia que unas lanchas cañoneras que
encontraron en el río, otras con gente de Juan de la Garza las
hicieron pedazos y los que no mataron, se ahogaron.
Que el día siguiente que llegó al Chocoy [Tamaulipas], llegó
allí una partida de setenta hombres de caballería y veinticinco
infantes llevando presos a los otros dos extraordinarios: Sixto y
Félix Quintero, que los aprehendió la madrugada de ese día una
partida comandada por Aregullín, que aún diciendo, le dijo
Sixto Suárez que la correspondencia que llevaba para Tampico
la dejó enterrada por allí cerca y solo presentó la de don Juan
de la Garza y que continuaron con los dos correos; precisa de-
cir que después procuraron ver si conseguían modo de pasar y
que pensados los pasos, tenían las canoas recogidas y vigiladas.
Ninguna noticia dan del señor [Francisco] Margain y el li-
cenciado [Domingo] Martínez, supone Villarreal que estarán en
Tampico [Tamaulipas] porque con un exhorto que les di no
hubo resultado; recorrieron todos los pasos y en ninguna parte
los encontraron, ya este viaje se perdió y no queda otro recurso
que buscar con buena práctica si así usted le parece, o que vaya
a Victoria por Horcasitas [Tamaulipas] a salir a los pueblos de
la Huasteca a entrar por el río Pánuco o poniendo otro propio
a don Higinio de la Fuente para que él enterase a alguno de su
confianza por la cantidad de cien pesos a condición precisa que
28
Linares: Cruce de Guerra

ha de llevar la correspondencia a Tampico y a traer la contesta-


ción.
Dice Villarreal que el señor [Ramón] Prieto le dijo que [Juan
José de la] Garza tendría seiscientos o setecientos hombres de
todas las fuerzas, mal armadas. Pero que era una borrachera y
desorden eterno en el campo, que supo que se retiraban del
campo de Canalizo a Altamira [Tamaulipas] por la mucho agua.
Quedo preparando otro correo por si se determinara que
vuelva.
Vamos a otras cosas, la fuerza de Castro se fue para el inter-
ior, las tres piecesitas [artillería] chicas que dejaron en Victoria
se las llevaron a [Juan José de la] Garza.
El señor licenciado [Manuel Z.] Gómez llegó hace poco ra-
to. Lo saluda, que no le escribe porque está un poco malo,
tuve una conversación muy larga y me ha informado estas co-
sas.
Primera.- Que con fecha 12 del corriente le comunica desde
el campo de Canalizo don Juan José de la Garza a don Guada-
lupe García el nombramiento de general y comandante general
con que se le reconoce, insertándole una comunicación de don
Ponciano Arriaga que le remitió por conducto de usted, exitán-
dolo a que tenga una entrevista y arreglar sus diferencias, pues
esta pendiente de este resultado el señor [Ponciano] Arriaga
para resolver aceptar o no la Cartera del Ministerio de Hacienda
y Gobernación. Entiendo que por este aviso ha dado lugar
aquel equivoco que me manifiesta usted cuando le dije que nos
llamó la atención del membrete en el sobre de excelentísimo
señor gobernador y comandante general y hoy con este nuevo
carácter he visto las circunstancias de la convocatoria. [Juan
José de la] Garza, gobernador y comandante general de Tamau-
lipas y no recuerdo porque conducto supe que para probar en
Tampico, que usted reconozca con ese carácter manda la co-
municación y el Administrador de Aduanas.
Segunda.- Que don Guadalupe García le informó al licen-
ciado [Manuel Z.] Gómez que usted se dirigió a un don Juan
Villarreal de Camargo [Tamaulipas] para que organizara allí una
fuerza y aprehender a [Guadalupe] García y a don Jesús García

29
Armando Leal Ríos

Ramírez; que [Juan] Villarreal luego que recibió su comunica-


ción se la llevó a Guadalupe García, yo entiendo que esa es una
profunda grosería con que han atribulado y comprometido a
don Jesús García Ramírez, quien dice el licenciado [Manuel Z.]
Gómez que el día antes de salir de Matamoros vio una comuni-
cación donde usted aseguraba a Guadalupe García que no
permitiría que ninguna fuerza armada de Nuevo León pusiera
sus plantas en la frontera tamaulipeca.
Tercera. Que don Guadalupe García estableció el treinta
por ciento sobre los precios de Brownsville a las mercancí-
as por dichos derechos, asegurando que este era el
derecho que cobraba don Juan Margain en Camargo [Tamau-
lipas] y el licenciado Guerra en Reynosa [Tamaulipas]. La
conducta fraudulenta de estos hombres va a proporcionarle un
trastorno en todas esas operaciones y quieren en el interior
hacer vacilar la parte suprema, ya habrá visto como comienza a
expresarse de usted un periódico de Matamoros y así se irán
desarrollando las ideas subversivas en todos los pueblos que
hoy le prestan la mejor disposición, como verá por la adjunta
carta de Villagrán [Tamaulipas], puede ser muy ventajoso el
terreno en que estos hombres se coloquen si usted les permita
por más tiempo sus maniobras y entonces sabe Dios cual sea la
suerte de Nuevo León; ya es necesario que se persuada que
las consideraciones y la conducta que ha observado con el
señor [Juan José de la] Garza anda muy mal correspondi-
da y que no hay que esperar nada bueno de él, ni de los
que lo acompañan, pues bien considerado el mal que
puedan causar debemos estimarlo de mayores consecuen-
cias que el que nos ocasionaron los aventureros tejanos si
desgraciadamente ocuparan la frontera y para evitar el
que crezca más se hace ya indispensable la aplicación de
un remedio que obre con energía.
Se me ha informado que el señor Garza mandó el día seis o
siete de este mes una comisión al gobierno general compuesta
de su hermano Serapio y un tal Fernando Izaguirre, y el maldito
extraordinario que le mandó a usted [Juan José de la] Garza
hace pocos días nos encaja la mentira que esa nueva comisión

30
Linares: Cruce de Guerra

había llegado a donde está don Juan de vuelta de México el día


diez y que le trajo el despacho de comandante general de Ta-
maulipas y orden para que [Juan Bautista] Traconis entregara la
plaza haciéndolo responsable de todas las desgracias. Todos
esos malditos de Tamaulipas son muy embusteros.
He sido muy largo en mi conversación, mi carta está muy
llena de borrones y todo junto; le suplico me dispense pues no
la reformo, ni le digo otra cosa por no entretener más el correo.
Deseo a usted toda clase de felicidades, su fiel y verdadero
amigo que con atención besa su mano. [6631]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León noviembre 29 de 1855
Mi apreciable y respetado amigo:
Antes de anoche recibí su recomendable 26 del corriente y ad-
junto pliego para el señor Traconis; acto continuo solicité, una
buena mula de silla y tres caballos que tenía ya preparados y
herrados y salió de extraordinario el señor Marcelo Peña acom-
pañado de otro vecino hoy habrán pasado la sierra; van a pasar
por entre Santa Bárbara y el Valle del Maíz [Tamaulipas] a salir
a Pánuco [Veracruz] y entrar por Pueblo Viejo a Tampico [Ta-
maulipas], este sujeto después de ser de mucho empeño es muy
conocedor del terreno y solo una desgracia extraordinario hará
que dentro de cinco días no llegue; por alquiler de los caballos y
la mula pagué treinta pesos y cincuenta pesos que di al señor
Peña para lo que se le ofrezca, he considerado hacer estos gas-
tos porque de otra manera se exponen a ser descubiertos en el
tránsito si van pidiendo auxilios aunque los paguen.
La última comunicación que se había mandado al señor
Traconis y que me dijo eran las instrucciones de la conducta
que debiera observar con el señor Garza, se me quedó en la
31
Armando Leal Ríos

bolsa del día que la mandan los que trajeron los extraordina-
rios anoche que volvieron, ayer la llevó el señor Peña adjunta
a la otra.
Ninguna noticia ha tenido de los extraordinarios [Sixto]
Suárez y [Félix] Quintero que aprehendió Aregullín, sin duda
los tiene don Juan José de la Garza en Altamira [Tamauli-
pas], ayer que pasó para esta un extraordinario del señor
Garza para usted, le pregunté por ellos y me dijo que no los
había visto.
Hoy he mandado la cuenta del dinero de los caballos que
facilitó este vecindario, oportunamente mandaré el descargo.
Le suplicó a usted vea la manera con que se puedan ser cu-
biertos los prestamitos aquí, algunos dicen que los de
[Monte] Morelos y Cadereyta [Nuevo León] han sido paga-
dos ¿Será esto cierto?
Hoy he solicitado de la Tesorería del Estado una libranza
de dos mil pesos a cargo de la Aduana de Reynosa [Tamauli-
pas] a favor de Manuel Garza Benítez, hijo de don Francisco
Javier Garza Valdés de esta ciudad, esto es un abono a lo que
han facilitado los vecinos, le suplico me dispense el favor de
que se libre la orden de la Tesorería para la libranza de los
dos mil pesos, si para ello hubiera algún inconveniente.
En la cuenta verá usted que por mi parte no había prés-
tamo ninguno, he gastado de mi peculio en gratificaciones a
la salida y vuelta de los soldados en socorrer a las familias
antes de que esa superioridad dictara la orden para auxiliarlos
y en otras muchos indispensables gastos setecientos y pico
de pesos, esta suma ha sido mi voluntad destinada a los obje-
tos que dejo indicados sin solicitar remuneración de ninguna
naturaleza y ojalá y que mis circunstancias me hubieran per-
mitido haber sino más útil.
Sin otro asunto me repito a las órdenes de usted, su fiel y
verdadero amigo que besa su mano. [6632]

Guillermo Morales.
32
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León diciembre cuatro de 1855
Mi apreciable y respetado amigo:
Anoche a las ocho se me presentó de vuelta el correo extra-
ordinario que conducía las comunicaciones para don Juan de
la Garza y el Comandante Militar de Tampico, a su llegada a
Victoria [Tamaulipas] el comisionado Ad hoc le recogió los
dos pliegos, los abrió e impuesto de ellos acusó recibo que
consta en el adjunto pasaporte, me ha parecido conveniente
darle a usted conocimiento del resultado de este correo para
sus disposiciones.
No apresen los extraordinarios [Sixto] Suárez y [Félix]
Quintero; el señor [Marcelo] Peña sino ha tenido novedad
debe haber llegado el domingo o lunes a Tampico [Tamauli-
pas].
Le doy a usted las gracias por el favor que me dispensa
de haber mandado librar la orden de dos mil pesos a fa-
vor de don Manuel Garza Benítez, suplicándole me
dispense el que antes no hubiera consultado con usted si
podía o no hacerlo como para lo que en lo sucesivo esa
superioridad reglamentará el modo de cubriese a los pue-
blos de lo que han prestado, quedaremos sujetos a lo que
se determine.
Cuanto he gastado de mi peculio, la suma que he dicho en mi
anterior ha sido mi voluntad donarla a beneficio de las personas
que la han recibido y aunque usted no quiere que haya hecho
este gasto y que forme una cuenta para que se me pague; le doy
las debidas gracias, manifestando que soy conforme con el servi-
cio que he hecho y el agradecimiento de las personas que lo han
recibido.
Sin otro asunto soy a sus órdenes, su afectísimo, fiel y ver-
dadero amigo que besa su mano. [6633]

Guillermo Morales.
33
Armando Leal Ríos

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe del Ejército


del Norte, don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León diciembre siete de 1855
Mi muy respetado y apreciable amigo:
A los veinticinco días de haber salido de esta ciudad los extra-
ordinarios Félix Quintero y Sixto Suárez, se me presentó
Quintero con un pliego de don Juan de la Garza y una carta
para don Juan Margain; no trajo el pasaporte, lo despacharon
dice el viernes pasado, le quitaron los dos caballos que llevó
cada uno y ha caminado como ha podido, los caballos son aje-
nos y es necesario pagarlos a sus dueños.
Debo en Tampico $1,318.00 [un mil trescientos dieciocho
pesos] si usted cree que esa cantidad sea pagada en aquella
Aduana, dígnese mandarme una libranza de ese valor y en el
acto que avisen estar pagada, mandaré entregar a la Tesorería la
suma referida.
Algunas personas me han hablado para que me dirija a usted
solicitando una libranza de mil o dos mil pesos sobre la aduana
de Tampico [Tamaulipas] en descuento de lo que han prestado.
Me dirá si los recursos le permiten obsequiar esta solicitud y de
no, para manifestarles la razón que se tenga a bien comunicarme.
Sin otro asunto me repito a las órdenes de usted, su afectí-
simo, fiel y verdadero amigo que besa su mano. [6634]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León diciembre 18 de 1855
Mi muy apreciable y respetado amigo:
Después de muchos trabajos pudo el señor [Marcelo] Peña
llegar a Tampico el nueve del corriente y ocupada aquella plaza
34
Linares: Cruce de Guerra

por don Juan de la Garza; [Juan Bautista] Traconis habrá salido


para México y el jefe de la plaza le dio el adjunto certificado
devolviendo el pliego que llevó para Traconis.
El administrador de aquella Aduana recibió el pliego que se
le remitió, una contestación va también adjunta.
He visto la comunicación particular del señor [Juan José de
la] Garza para el licenciado [Manuel Z.] Gómez en ella mani-
fiesta muy buenos deseos para venir a tener la conferencia con
usted y arreglar las diferencias que entre ustedes existen, tanto
públicas como privadas; Dios permita que hable con el corazón
y que los dos arreglen sin dificultad lo conveniente, formando
de esa manera una columna invencible, para lograr tan impor-
tante objeto me parece muy preciso que usted haga el sacrificio
de despreciar las faltas pasadas de don Juan [de la Garza] y los
que últimamente le hallan inferido los de Matamoros [Tamauli-
pas], quienes procediendo de todo mal se expresan en lo
particular con una arrogancia descarada.
Dígame usted ¿Cuánto será bueno pagarle al señor [Marcelo]
Peña y al vecino que lo acompañó?
Sin otro asunto soy a sus órdenes su afectísimo, fiel amigo y
servidor que besa su mano. [6635]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y general en


jefe del Ejército del Norte don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León enero dos de 1856
Mi respetado amigo:
Hace cinco días volvió a pié Sixto Suárez trayendo consigo las
comunicaciones que tuvo y dejó ocultas a donde lo aprehendie-
ron, están muy maltratadas.
Adjunto mando unas cartas de los señores Clausen, dispén-
seme el favor de que se las entreguen.
35
Armando Leal Ríos

Sin otro asunto me repito a sus órdenes, su afectísimo, fiel


y verdadero amigo que besa su mano.

Guillermo Morales.

Don Carlos [Margain] volvió y supongo le habrá informa-


do del resultado de su viaje. Me ha pedido con urgencia
cincuenta pesos para pagar a los que lo acompañaron, le he
dicho que no tengo pero es muy seguro que se los doy, por-
que pide aprisa. [6636]

Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León febrero cuatro de 1856
Mi muy apreciable y respetado amigo:
Me ocupo hoy en la presente de un negocio que nunca he que-
rido favorecer con mis relaciones, pero satisfecho de las tantas
causas que le habitan al ocurrente, me tomo la libertad de supli-
carle se digne admitirle la renuncia que hace el señor don Juan
Berlanga Quintanilla, quien renuncia del cargo que desempeña
como capataz de una compañía de caballería. Creo por demás
mencionar a usted las causales, pues el ocurrente lo hará sin
duda.
Concluyo deseándole felicidades en todo como su fiel y
verdadero amigo que besa su mano. [6637]

Guillermo Morales.
36
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y general en


jefe del Ejército del Norte don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León febrero 15 de 1856
Mi respetado y estimado amigo:
Estoy muy pendiente de su encargo que espero quedará arre-
glado la entrante semana. De lo que daré a usted oportuno
aviso.
Me repito a las órdenes de usted su fiel y verdadero amigo
que besa su mano. [6638]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León febrero 15 de 1856
Mi muy estimado amigo:
La respetable comunicación oficial de diez del corriente en que la
superioridad se digna participarme en el nombramiento de pri-
mer vocal del consejo de gobierno. Me honra demasiado
confiándome el desempeño de una de aquellas comisiones, en
que los ciudadanos necesitan poseer conocimientos propios en los
diversos ramos de que tiene que encargarse.
Usted me conoce, sabe quien soy y lo muy poco que puedo
valer; y aunque me anima la mejor disposición para servir a la
patria y al Estado y operar esforzadamente en cuanto pueda
para que el supremo gobierno y él digno jefe que hoy rige los
destinos del Estado lleven adelante sus principios, hasta ver
planteada la grande obra que han emprendido, esto no me pri-
va de la convicción que tengo de mi insuficiencia para el
desempeño de los deberes que me impone el nombramiento que
se tiene hecho en mi persona, pero como ignoro las razones
37
Armando Leal Ríos

que el gobierno haya tenido para resolverse a dar tal paso, me


abstengo de manifestare como pienso respecto de mi acepta-
ción hasta no ir allá a la capital que será la semana entrante, y
en nuestra vista allanaremos todo.
Esté usted seguro que en cuanto valgo y sin reserva deseo
ser eficazmente útil y que nunca seré yo quien presente él más
pequeño obstáculo a las superiores determinaciones; pero el
temor de que mis deficiencias en casos como el presente, sea
mas bien perjudicial que benéfica a la causa pública, me hacen
proceder como lo haga en la presente, esperando de su bondad
que por su parte seré dispensado.
Deseo a usted todas felicidades su afectísimo, fiel y verdade-
ro amigo que besa su mano. [6639]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y general en


jefe don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León febrero 28 de 1856
Mi muy respetado y apreciable amigo:
Con un empeño constante he procurado conseguir las yeguas;
al efecto contraté primero unas y no me cuadraron, luego las
mandé buscar a otros puntos, las compraron y hace quince días
me las trajeron y no me gustaron; y por último las compré a la
Hacienda del Fresno a seis y medio pesos escogidas. Ayer las
recibí y hoy salen para esa ciudad, muy pronto sino sucede una
desgracia las recibirá usted, quiera salgan de su gusta todas son
de cinco y seis años, pues chicas habrá que perder tiempo en
que comenzaran a producir.
El extraordinario que pasó para Tampico llegó a ésta el 23 a
las cuatro de la tarde, se proveyó de lo necesario, lo recomendé
en el tránsito hasta ciudad Victoria [Tamaulipas] y entiendo que
sin demora habrá llegado y vendrá de vuelta.
38
Linares: Cruce de Guerra

Por lo que vemos en los periódicos de la capital los re-


accionarios es infalible que en esta vez fracasarán todas
sus esperanzas y muy pronto quedarán exterminados; el
gobierno general entrará en quietud y la nación toda ale-
jando los vaivenes que por tanto tiempo le han
proporcionado un semillero de desgracias, disfrutará de
paz; si el gobierno general sin miramientos a personas ni
clases tiene la energía necesaria para alejar o destruir los
embarazos que hasta hoy le han impedido el que se cons-
tituya según su voluntad, podrá libremente darse las
instituciones que imperiosamente demandan, las mejoras
y engrandecimiento del país en tan feliz desenlace.
La cooperación de usted ha tenido la parte más activa y sin
que se pierda terreno en lo trabajado, entiendo que por ahora
no se verá usted precisado a alejarse del lugar en que se halla
colocado y que si importantes eran sus servicios en el interior
del país muy superiores y necesarias las debemos considerar
entre nosotros y principalmente cuando esto nos asegura la
conformidad en las resoluciones del hombre en quien los Esta-
dos tienen depositada su más sincera confianza, yo espero que
por ahora este será el desenlace de nuestras circunstancias, me
anticipo a felicitar a usted con el indecible placer que cabe en el
corazón de su fiel y verdadero amigo que en todo desea acierto
y las mayores felicidades, suyo atentamente beso su mano.
[6640]
Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y general en


jefe don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León febrero 28 de 1856
Mi respetado amigo:
Don Gerónimo González dador de la presente va encargado
del cuidado de llevar las veintiuna yeguas, cuyo servicio ofreció
hacerlo gratuitamente.
39
Armando Leal Ríos

El aventurero Simón Avendaño gana un peso diario desde el


día 27, hasta el día que sean desocupados; Francisco Cuevas
gana un peso diario desde el día 27 hasta el día que lo desocu-
pen.
Pedro Cazares gana un peso diario desde el día 29, igualmen-
te hasta el día que lo desocupen, él gano de estos aventureros
aquí se los pagaré yo, nada tiene usted que darles, han recibido
parte de lo que han de ganar.
Necesito ciento cincuenta pesos para el cura Nuin de esa
ciudad, hoy los he girado a su cargo y me dispensará el favor de
mandarlos entregar.
El señor González tiene un negocio pendiente que le ha gi-
rado el licenciado Pedro Dionisio, tiene empeño en que se
concluya para lo que le suplico se digne usted poner sus respe-
tos en lo que concurra a este asunto.
Sin otro asunto me repito a sus ordenes su afectísimo since-
ro amigo que besa su mano.

Guillermo Morales.

Aumento. Se me ha informado que una yegua se cayó y no


se ha querido levantar, probablemente se muere. [6641]

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y general en


jefe don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León marzo 13 de 1856
Mi estimado y respetado amigo:
Cumpliendo con el nuevo encargo de usted de las veinte ye-
guas las solicité con el apoderado del Fresno y la entrante
semana se las mandaré a usted, procuraré que sean de las me-
jores pues hasta ahora no me ha dicho usted de que edad o
clase las quiere.
40
Linares: Cruce de Guerra

Sin otro asunto me repito a las órdenes de usted su afectísi-


mo, fiel y verdadero amigo que besa su mano. [6642]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y general en


jefe del Ejército don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León marzo 25 de 1856
Mi estimado y respetado amigo:
Antes de hoy no me fue posible remitir las veinte yeguas que el
portador Simón Avendaño acompañado de Rafael Rodríguez y
Bonifacio Avendaño le entregarán a usted.
Por la adjunta cuenta verá lo que importarán las primeras y
lo que importan éstas deducido el quince por ciento que por mi
conducto entregó al señor cura Nuin, quedan a mi favor ciento
sesenta y seis pesos y le aviso que con esta fecha he girado a su
cargo y a favor del señor Jacinto Lozano de ese comercio. Deseara
que salgan a su gusto pues es lo mejor que se ha conseguido.
Sin otro asunto soy a sus órdenes fiel y verdadero amigo que
besa su mano. [6643]

Guillermo Morales.

Linares, marzo 25 de 1856


Cuenta del importe de cuarenta y una yeguas compradas a don
Andrés Leal y Torrea y remitidas al licenciado Santiago Vidaurri
a Monterrey: [6644]
Por veintiuna yeguas que se le remitieron a seis
pesos y medio.......................................................... $ 136.50
41
Armando Leal Ríos

Gano de Simón Avendaño.................................... $ 6.00


Gano de Pedro Cazares en cinco días................. $ 5.00
Gano de Francisco Cuevas, hasta Morelos......... $ 3.00
Gastos de potreros en tránsito............................. $ 4.00
Marzo 25, por veinte yeguas que hoy mismo sé
recibieron y se remiten con Simón Avendaño a
seis y medio pesos................................................... $ 130.00
Gasto de potrero en tránsito................................. $ 4.00
Gano de tres aventureros que las conducen a
ocho pesos cada uno.............................................. $ 24.00
Gano de Juan Camacho en cuatro días que fue
a recibirlas................................................................ $ 4.00

Suma......................................................................... $ 316.50

Por mi orden a su cargo y a favor del cura


Nuin Valioza............................................................ $ 150.00

Resto......................................................................... $ 166.50

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y general en


jefe don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León abril uno de 1856
Mi estimado y respetado amigo:
El treinta de marzo me escribe de Tampico don Juan Gutiérrez
recomendándome la pronta remisión de la adjunta que le dirige
a usted y que contiene noticias muy interesantes.
El extraordinario que pasó por esta para Tampico el veinti-
cuatro de marzo aun no pasa; me dejó un caballo encargado
quien sabe si habrá vuelto por otro rumbo o como siempre el
señor [Juan José de la] Garza lo habrá embromado, dígame si le
mando el caballo en la primera oportunidad que se presente.
42
Linares: Cruce de Guerra

Sin otro asunto y con mil deseos de verlo, lo saluda su fiel y


verdadero amigo que besa su mano. [6645]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y general en


jefe don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León abril 30 de 1856
Mi respetado amigo:
Cada día me ha aumentado más y más mis quehaceres, hasta
verme hoy precisado a salir por algún tiempo de mi casa; hace
quince días mande para Potosí [Nuevo León] seis engordas y
mañana mando otras cuatro, que van en camino, el negocio es
de alguna consideración y exige el que vaya yo personalmente a
establecerlo y como para verificar mi salida necesito antes po-
nerlo en el conocimiento de usted cuya resolución espero sea
favorable pues entiendo que por ahora no habrá motivo alguno
que me pueda obligar a pasar a esa ciudad; le suplico se digne
contestarme lo que a bien tenga sobre este particular o si diri-
giendo mi renuncia del nombramiento que se hizo en mi
persona de primer vocal del Consejo si se me admite lo haré
con un propio luego, luego.
No entienda usted por ningún motivo que quiero excusar de
prestar mis servicios en cuanto me considere útil, de ninguna
manera, antes sí debe estar usted plenamente persuadido que
mi persona y en cuanto valgo serán siempre a la disposición de
usted en cualesquiera que sean las circunstancias en que nos
encontremos o la suerte favorable o adversa llegue a colocar-
nos.
El extraordinario Pedro Pérez se me presentó el 27 a las
ocho de la mañana, se habilitó de lo necesario y le di todas
las cartas de recomendación para que en el tránsito le facili-
ten lo que se le ofrezca.
43
Armando Leal Ríos

Sin otro asunto me repito a sus órdenes su fiel y verdadero


amigo que besa su mano. [6646]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y general en


jefe don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León mayo ocho de 1856
Mi estimado y respetado amigo:
Vista su apreciable cinco del corriente y atendiendo a la impe-
riosa necesidad que tengo de atender mis intereses
personalmente me resolví a hacer formalmente mi renuncia
cuya solicitud tengo el honor de acompañarle, suplicándole se
digne aprobarla y que el mismo portador o por el ordinario me
sea devuelto.
Quiero desembarazarme pronto de los negocios que tengo
pendientes, para que en caso de ser necesario prestar mis pe-
queños servicios, no haya cosa que me lo impida y usted pueda
contar con la cooperación en lo que se ofrezca de su verdadero
amigo.
El veinte de este mes estaré en la Hacienda de Potosí, si
arreglo allí un negocio de que estoy pendiente puede ser que
me resuelva ir a México a procurar otro de algún interés si así
fuere con la debida oportunidad lo pondré en su conocimiento
debiendo asegurarle que casi es probable que tenga prevención
de pasar a México en cuyo caso usted se dignará librar sus ór-
denes en cuanto se le ofrezca.
Vamos a otra cosa; por lo que he visto en varios periódicos
la anexación de los pueblos de Coahuila a Nuevo León ha sido
motivo de que los enemigos de usted, se aprovechen de un
campo por consideran legal para deshogarse y presentar sus
procedimientos en este asunto con carácter muy grave, es un
mal ciertamente, pero ninguna enfermedad es incurable si se
44
Linares: Cruce de Guerra

trata con propiedad y se le aplican las mejores medicinas, por


tanto debe usted examinar este negocio con mucha prudencia y
cuidado y resolverse a adoptar una causa que lo conserve lleno
de prestigio ante la nación y el mundo entero, para conseguir el
desenlace de que sean vencidos todos sus enemigos y que no
fracasen en la causa las elevadas esperanzas que el
Estado tiene de mejorar y adelanto, por el buen nombre y
que con tanta gloria que ha sabido usted conquistar y a quien
por mil títulos debemos todos los ciudadanos de Nuevo León
aspirar. Los hijos adoptivos rara vez corresponden con fideli-
dad y menos hoy que esperan de aquellos que les falta
educación y que obran por el instinto exclusivo de su
interés. Tenemos muy reciente la lección que nos dio
Tamaulipas, a quien apenas había recibido de Nuevo
León los beneficios de que carecía cometió la más pérfida
defección y todavía quien sabe si más delante nos dará mas
dolor de cabeza no obstante que debemos confiar que entre
ellos mismos existan los elementos de distracción.
Me extiendo demasiado en una materia bien difícil para mi
peso, haciendo uso de la confianza y aprecio que me dispensa
he querido manifestarle las ideas que posee mi corazón en este
asunto y con la viva y natural expresión que las siente su fiel y
verdadero amigo que en todo le desea el mejor acierto y felici-
dad. Atentamente beso su mano. [6647]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y comandante


general don Santiago Vidaurri
Linares, Nuevo León mayo 11 de 1856
Mi estimado y respetado amigo:
Como a las cinco de esta tarde llegó de vuelta el extraordinario
Pedro Pérez y en el acto continuó su marcha.
45
Armando Leal Ríos

En ciudad Victoria le facilitaron catorce pesos, en Hidalgo


un caballo que llevó hasta Tampico y según dice se habrá muer-
to, ambas cosas tenemos que pagar cuando sepa el valor del
caballo le daré a usted conocimiento.
Sin otro asunto me repito de usted su fiel y verdadero amigo
que atentamente besa su mano. [6648]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León mayo 29 de 1856
Mi muy respetable señor de mi aprecio:
Por el correo de ayer he recibido del señor don Jesús Cár-
denas una carta para mi hermano don Guillermo, en la que
le suplica se dirija a usted para que interponga su gran in-
fluencia en México a fin de que sea despachada
favorablemente una solicitud que dirige al señor Ministro
de Hacienda, la que viene adjunta a la referida carta; y co-
mo usted sabe mi hermano no se encuentra en esta, y
persuadido yo de su buena voluntad para con el señor Cár-
denas así como de las consideraciones que tan
bondadosamente se ha dignado usted dispensarle me tomo
la libertad de remitirle la referida solicitud para que impues-
to de ella, se digne si lo tuviera a bien remitirla a título con
la respetable recomendación de usted para las personas de
México que estimare conveniente.
Sin más por ahora tengo el placer de ofrecerme por primera
vez a las órdenes de usted como su menos amigo y seguro ser-
vidor que atentamente besa su mano. [6649]

Isidro Morales.
46
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor gobernador de Nuevo León y comandante


general son Santiago Vidaurri

Linares, Nuevo León julio 14 de 1856

Muy señor mío de mi distinguido y particular aprecio:


Con fecha tres del corriente me manifiesta don Camilo Larum-
be haber facilitado por recomendación de mi hermano
Guillermo, al correo Pedro Pérez que pasó para Tampico en
mayo en efectivo catorce pesos y un caballo que le facilitó y se
murió; doy la suma de veintiséis pesos con lo que he pagado al
señor Larumbe lo que avisó, así para su conocimiento.
Hoy he tenido una entrevista con el señor don Pedro y Mar-
tín Sayas, no obstante no tener de usted más que un recado que
me dio don Carlos Margain, haciéndose necesario que Sayas
mande sus comisionados y salga él en persona a cumplir con el
negocio que usted le ha encomendado, manifestando necesitar
algunos recursos para los precisos gastos y no teniendo el señor
don Pedro según lo manifiesta, no obstante mis escasos bienes
por lo abatido del comercio, hice un esfuerzo y facilité setenta
pesos los cuales entregué a Sayas.
Obro sin ningunas instrucciones de usted sin mas que los
que ha visto, he dado a [Martín] Sayas y don Pedro [Hinojosa] y
satisfecho de las relaciones que el señor mi hermano Guillermo
con usted he recomendado a Sayas mucha prudencia y juicio en
este negocio, veo con sentimiento que nos encontramos en esta
con un Juez cerrado pero muy capaz para un negocio apurado,
a más que estoy desesperado aguardando que llegue el miérco-
les día de correo para saber donde se encuentra mi hermano; lo
supongo en San Luis Potosí según la última que con fecha die-
ciocho me escribió de México y me dice estaba para salir en el
acto. Que sepa a donde asertivamente se encuentra, voy a po-
nerle un propio para que se venga a ayudar a usted y a huir de
los negocios que por aquellos rumbos trae.
Dígnese usted dispensar lo cansado de mi carta y mi mala
forma, estando seguro que lo que digo pues lo siento y puede
usted estar seguro con fidelidad, lo serviré en el tamaño de mi
47
Armando Leal Ríos

capacidad dictando sus órdenes a su fiel servidor que atento


besa su mano. [6650]

Isidro Morales.

Excelentísimo señor gobernador y general en jefe don Santiago


Vidaurri
Linares, Nuevo León agosto 22 de 1856
Mi respetado amigo:
Hace dos días llegué a su casa sin novedad y hoy mismo salgo
para Rayones [Nuevo León] a recibir una caballada que allá
compré al apoderado de [Hacienda] Potosí en México, ese
negocio se nos trata de entorpecer por un tal Román Pérez y el
administrador de esta hacienda es Vázquez Dávalos, si en este
asunto se me presenta alguna dificultad probablemente tendré
que ocurrir a esa ciudad para su terminación.
Tengo a la vista su muy recomendable 14 del corriente e im-
puesto de su contenido le doy a usted las muy debidas gracias
por la particular confianza que me dispensa y de ofrecerle que
teniendo un negocio muy importante en esa ciudad sin pérdida
de momento estaré hoy, luego que vuelva y allí veremos las
providencias adoptadas por usted para la salvación del Estado y
conservación de sus derechos caprichosamente retirados.
Concluyo manifestándole que si la cosa urge muy seriamente
y el Estado con alma, vida y corazón acepta la próxima lucha
que se le prepara con mayor injusticia y lo ve usted resuelto a
sacrificarse antes que dejarse dominar, haré de mi parte cuanto
me sea posible, pues para todo estará siempre dispuesto su
atento amigo y servidor que besa su mano.

Guillermo Morales.
48
Linares: Cruce de Guerra

Aumento. Los señores diputados, todos quedaron buenos


y por igual en espera de recursos para poder subsistir. [6651]

Excelentísimo señor don Santiago Viduarri


Monterrey, Nuevo León
Linares, Nuevo León agosto 30 de 1856
Muy señor mío y de mi particular aprecio:
En mi poder su grata 13 del corriente que dirigió a mi hermano
Guillermo, quien había salido para [Hacienda] Raíces hace cin-
co días le puse un propio y lo espero hoy con ansia.
Las noticias recibidas de los excesos que en Villagrán han
cometido las fuerzas de Aregullín hicieron que se alarmara el
pueblo y salieran todas las familias y no quieren volver porque
las fuerzas que tiene el coronel [Martín] Sayas no es para dar
una redada únicamente para defenderse.
Entre las casas saqueadas fueron la de don Francisco Anto-
nio Doria, don Vital Morales y antes fueron a su rancho y
sustrajeron su atajo de mulas y caballos, cuantos encontraron.
Crea positivo que la fuerza que atacó a Sayas fue en número
de más de cuatrocientos hombres y que sino hubiera sido la
defensa que Sayas hizo no quedaría nada y hubiera venido a
esta ciudad y muy grandes serían los males que tendríamos que
lamentar y aún necesitamos fuera de sufrirlo, si marchan como
se dice aquí ayudando en todo lo que me ha sido posible al juez
primero se reunieron setenta y tantos hombres con lo que es-
casos trescientos compone toda la fuerza de [Martín] Sayas así
que en obsequio de que no sufra un descalabro irreparable esta
población, y estando de su mano haciendo marchar una fuerza
respetable para que el valiente [Martín] Sayas no solo las venza
en Villagrán, fuera en Victoria que tomando estos pasos son
los pueblos que se opongan.
Sin otro asunto por ahora, me retiro como su más útil servi-
dor que atento besa su mano. [6652]
Isidro Morales.
49
Armando Leal Ríos

Señor don Santiago Vidaurri


Monterrey, Nuevo León
Linares, Nuevo León septiembre seis de 1856
Mi muy estimado y fino amigo:
Hasta ayer tuve el gusto de llegar a esta ciudad, y con bastante
sentimiento he venido a encontrarla alarmada con motivo del
estado que nuestros negocios públicos guardan para con Ta-
maulipas. Al mismo tiempo he recibido su muy apreciable del
dos del corriente que tengo también el sentimiento de no haber
contestado en el acto como debía, por que mis atenciones fuera
de la ciudad no me lo habían permitido; más hoy no queriendo
retardar mas su contestación paso a verificarlo y manifestándo-
le: Que le estoy sumamente reconocido por las infinitas
pruebas que siempre y en cada momento me da a usted de la
ilimitada confianza que le merezco, y en esta vez por la que me
manifiesta con querer que me encargue del ejercicio de los
mandos político y militar en este punto en las circunstancias tan
comprometidas, en que se encuentra el Estado.
Usted amigo, debe estar al tanto de los nuevos y muchos
compromisos que particularmente me he contraído en México,
a virtud de un negocio que emprendí ocasionalmente y en el
cual ni pensaba cuando con otro muy distinto salí de esta para
San Luis Potosí, tal negocio me tiene la atención sumamente
ocupada, y con inquietud bastante para no atender debidamen-
te cualquiera otro asunto, y por lo mismo no se como poder
obsequiar sus deseos respecto al encargo que quiere conferirme
en las presentes circunstancias tan difíciles para el Estado como
para mí en lo particular; sin embargo, como la cuestión que el
Estado trata de defender actualmente es de vida o muerte no
solo para nosotros, sino para la Nación en general desde luego
estoy dispuesto a cualquier sacrificio como lo he hecho otras
veces y lo haré siempre que se ofrezca; más para esto, se hace
preciso que usted por su parte, en virtud de la confianza y amis-
tad que le merezco se sirva no vacilar en obsequiar en lo
posible las indicaciones que yo le dirija para obrar por estos
puntos sobre Tamaulipas a fin de obtener un triunfo completo
50
Linares: Cruce de Guerra

sobre los que se resisten a nuestras pretensiones en dicho Esta-


do.
Contemplará usted quizá como yo mismo, que este negocio
sobre el Estado vecino no es tan insignificante que deba obrar-
se con lentitud y mezquindad, sino de una manera pronta y
enérgica sin que andemos con operaciones a medias y confian-
do la defensa de los grandes intereses del Estado y la Nación a
personas que si bien son mas que suficientes para ser dirigidas
con seguridad de buen éxito, no lo serán tal vez para emprender y
dirigir como jefes, así es que para estos casos estoy íntimamente
persuadido que la presencia de usted aumentaría tanto la pro-
babilidad de un buen resultado al extremo de poder contarlo
como seguro, estas son mis convicciones, y si yo entro a ayudarlo,
como se lo tengo ofrecido en mi anterior ha de ser en la inteligencia
que en la próxima acción sobre Victoria [Tamaulipas] si la hubiere
haga usted un esfuerzo y vuelva a dirigirla personalmente.
Yo no sé hasta que punto conocerá usted el carácter de los
tamaulipecos; más no será inútil decirle que en esto debe po-
nerse mucho la atención y cuidar que no se les ofenda en lo
más mínimo su amor propio con relación al que tienen de que
ellos no dejarán que sus derechos para gobernarse por sí mismo
les sean arrebatados, por tanto si concluido lo de Victoria [Ta-
maulipas] se hiciere indispensable organizar el gobierno interior
de dicho Estado, en este punto es necesario caminar con mu-
cho tiento haciendo uso de una política conveniente y justa,
que manifiesta a los tamaulipecos que Nuevo León por fuerza
jamás los obligará a proceder de tal o cual manera en cuanto al
gobierno interior de su Estado, pues todo lo que sea salirse de
esta línea de procedimiento causará en mi juicio grandes males
a la presente revolución y la desprestigiará mucho ante los
hombres que mejor piensan en Tamaulipas y nos enajenaría las
simpatías que tengamos adquiridas o pudiésemos adquirir en
nuestro favor.
Insisto en mi idea que haga usted un esfuerzo y venga a diri-
gir la acción de Victoria [Tamaulipas] y mucho más cuando en
nuestra vista nos explicaremos en puntos muy interesantes que
no creo prudente confiarle a la pluma.

51
Armando Leal Ríos

Esta misma la dirigí a usted pocas horas antes con un propio y


aprovechándose este extraordinario he creído conveniente repetírsela.
Soy de usted su afectísimo, fiel y verdadero amigo que besa
su mano. [6653]
Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León septiembre cinco de 1856
Mi muy estimado y apreciable amigo:
Hasta ayer tuve el gusto de llegar a esta ciudad, y con bastante
sentimiento he venido a encontrarla alarmada con motivo del
estado que nuestros negocios públicos guardan para con Ta-
maulipas. Al mismo tiempo he recibido su muy apreciable del
dos del corriente que tengo también el sentimiento de no haber
contestado en el acto como debía, por que mis atenciones fuera
de la ciudad no me lo habían permitido; más hoy no queriendo
retardar mas su contestación paso a verificarlo y manifestándo-
le: Que le estoy sumamente reconocido por las infinitas
pruebas que siempre y en cada momento me da a usted de la
ilimitada confianza que le merezco, y en esta vez por la que me
manifiesta con querer que me encargue del ejercicio de los
mandos político y militar en este punto en las circunstancias tan
comprometidas, en que se encuentra el Estado.
Usted amigo, debe estar al tanto de los nuevos y muchos
compromisos que particularmente me he contraído en México,
en virtud de un negocio que emprendí ocasionalmente y en el
cual ni pensaba cuando con otro muy distinto salí de esta para
San Luis Potosí, tal negocio me tiene la atención sumamente
ocupada, y con inquietud bastante para no atender debidamen-
te cualquiera otro asunto, y por lo mismo no se como poder
obsequiar sus deseos respecto al encargo que quiere conferirme
en las presentes circunstancias tan difíciles para el Estado como
para mí en lo particular; sin embargo, como la cuestión que el
52
Linares: Cruce de Guerra

Estado trata de defender actualmente es de vida o muerte no


solo para nosotros, sino para la Nación en general desde luego
estoy dispuesto a cualquier sacrificio como lo he hecho otras
veces y lo haré siempre que se ofrezca; más para esto, se hace
preciso que usted por su parte, en virtud de la confianza y amis-
tad que le merezco se sirva no vacilar en obsequiar en lo
posible las indicaciones que yo le dirija para obrar por estos
puntos sobre Tamaulipas a fin de obtener un triunfo completo
sobre los que se resisten a nuestras pretensiones en dicho Esta-
do.
Contemplará usted quizá como yo mismo, que este negocio
sobre el Estado vecino no es tan insignificante que deba obrar-
se con lentitud y mezquindad, sino de una manera pronta y
enérgica sin que andemos con operaciones a medias y confian-
do la defensa de los grandes intereses del Estado y la Nación a
personas que si bien son mas que suficientes para ser dirigidas
con seguridad de buen éxito, no lo serán tal vez para emprender y
dirigir como jefes, así es que para estos casos estoy íntimamente
persuadido que la presencia de usted aumentaría tanto la pro-
babilidad de un buen resultado al extremo de poder contarlo
como seguro, estas son mis convicciones, y si yo entro a ayu-
darlo, como se lo tengo ofrecido en mi anterior ha de ser en la
inteligencia que en la próxima acción sobre Victoria [Tamauli-
pas] si la hubiere haga usted un esfuerzo y vuelva a dirigirla
personalmente.
Yo no sé hasta que punto conocerá usted el carácter de los
tamaulipecos; más no será inútil decirle que en esto debe po-
nerse mucho la atención y cuidar que no se les ofenda en lo
más mínimo su amor propio con relación al que tienen de que
ellos no dejarán que sus derechos para gobernarse por sí mismo
les sean arrebatados, por tanto si concluido lo de Victoria [Ta-
maulipas] se hiciere indispensable organizar el gobierno interior
de dicho Estado, en este punto es necesario caminar con mu-
cho tiento haciendo uso de una política conveniente y justa,
que manifiesta a los tamaulipecos que Nuevo León por fuerza
jamás los obligará a proceder de tal o cual manera en cuanto al
gobierno interior de su Estado, pues todo lo que sea salirse de
53
Armando Leal Ríos

esta línea de procedimiento causará en mi juicio grandes males


a la presente revolución y la desprestigiará mucho ante los
hombres que mejor piensan en Tamaulipas y nos enajenaría las
simpatías que tengamos adquiridas o pudiésemos adquirir en
nuestro favor.
Sin embargo, de estas observaciones espero que usted me
comunique las suyas para ponernos de acuerdo en todo. Y por
último espero confiadamente que, a pesar de sus muy grandes
atenciones, procurará a venir a dirigir las operaciones sobre
Victoria [Tamaulipas] y a nuestra vista, que espero será antes de
ocho días contados desde hoy, recibiré verbalmente todas las
instrucciones que tenga a bien comunicarme.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su afectísimo, fiel y
verdadero amigo que atentamente besa su mano. [6654]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Monterrey, Nuevo León
Linares, Nuevo León septiembre 11 de 1856
Mi respetado y apreciable amigo:
Con bastante gusto he visto la disposición de usted relati-
va a dirigirse para esta ciudad sobre Victoria [Tamaulipas]
porque de esta manera estoy bien persuadido que termina-
rá el negocio de Tamaulipas favorablemente a nuestro
Estado.
A nuestra vista tendré el gusto de hablar largamente con
usted y nos haremos nuestras reflexiones en el negocio que
nos tiene tan ocupados.
Me repito a sus órdenes su fiel y verdadero amigo que
atentamente besa su mano. [6655]
Guillermo Morales.
54
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León septiembre 17 de 1856
Mi respetado y apreciable amigo:
Hoy mismo llegó a esta ciudad de Tampico mi primo don
Marcelo de la Peña, las noticias que trae relativas a
nuestro Estado de cosas las he considerado tan satisfactorias
y de tal importancia que sin pérdida de momento he
conseguido que continúe a presentársele a usted pa-
ra que verbalmente le imponga de cuanto vio y sabe de cierto
este asunto y como usted recordará ha desempeñado comisio-
nes de importancia en las difíciles y muy comprometidas
circunstancias del año pasado.
Nada tengo que decirle, sino que para punto general entien-
do que es muy necesario que abrevie lo posible su venida para
aprovechar las ventajas que favorablemente se nos han presen-
tado.
Por un soldado que mandó ayer [Martín] Sayas y [Mariano]
Escobedo a llevar algunas cosas que les faltan se quedó ayer a
dormir en Hidalgo la Sección de este punto, es necesario que
se retiren pronto porque entre el zancudo y la mucha humedad
de aquel punto nos puede atrasar mucha parte de los soldados.
Me repito de sus órdenes su fiel y verdadero amigo que
atentamente besa su mano. [6656]
Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Monterrey, Nuevo León septiembre 21 de 1856
Mi muy estimado amigo:

El fuerte temporal que ha habido impidió mi salida para abajo,


más hoy se ha levantado y mañana emprendo mi marcha con el
objeto de arreglar nuestro negocio en las villas y hacer que pa-
55
Armando Leal Ríos

ren las armas que aún tenemos del otro lado del río, proveernos
de recursos y de bastante pólvora.
Considere usted como me encontraré con cerca de tres mil
hombres y con la miseria en que estamos; la sección Sayas me
aflige demasiado y por eso dispuse que se le remitieran tres mil
quinientos pesos del préstamo que se hiciera al efecto en Cade-
reyta, [Monte] Morelos, [Terán] La Mota y Linares.
Y por mi parte le recomiendo a usted active la remisión de
ese pequeño recurso, que lo aumentaré lo bastante, tomando a
Mier [Tamaulipas] y que le escriba a [Martín] Sayas manifestán-
dole la importancia de que aún cuando no comprenda las
razones de las órdenes las ejecute como se le ponen, porque de
la fiel ejecución de ellas depende el éxito de nuestras operacio-
nes en la línea del Bravo.
También le recomiendo a usted no me desatienda a [Martín]
Sayas con menesteres para la tropa, para la que salen dentro de
tres días de esta ciudad carros con bastantes víveres para su
sección.
Amigo, no dudo de nuestro triunfo y que sus resultados co-
locarán a la frontera y particularmente a nuestro Estado. En
una posición brillante como merece; un poco de paciencia y
que usted me ayude con [Martín] Sayas para que no tengamos
tropiezos, y al efecto le mando copia de la que usted le dice
oficialmente para que usted le pueda escribir con más certeza.
Sabe usted que lo aprecia y se le respeta, suyo sincero amigo
y servidor que besa su mano. [6657]

Señor don Jesús Garza González


Linares, Nuevo León septiembre 22 de 1856
Mi apreciable amigo:
Por su grata de 18 del corriente quedo impuesto de los aconte-
cimientos ocurridos en los Puntiagudos y resultados entre
56
Linares: Cruce de Guerra

nuestras fuerzas y las de Tamaulipas, así como de que el señor


don Santiago [Vidaurri] en persona iba a dirigir las operaciones,
resolución que debes considerar muy necesaria porque lo con-
trario estamos muy expuestos a resultados que nos acarrearían
graves males.
Las dos últimas providencias dictadas para procurar recur-
sos las he puesto en planta, la primera: préstamo voluntario
había producido cerca de doscientos pesos que en el acto le
mande al señor Sayas; la segunda que recibí antes, préstamo
de mil pesos recibí en el acto al vecindario, éste manifestó con
la mejor disposición los deseos que lo animan para auxiliar al
superior gobierno, pero que era público y notorio la suma
pobreza en que se encuentran para poder dar dinero, ofrecie-
ron toda clase de víveres y que harían un esfuerzo para dar
cada uno lo que les toca con la manera que me ha sido posible
he ido realizando este negocio y espero terminarlo hoy o ma-
ñana a más tardar.
Hoy mismo le remito a la sección Sayas para que atienda sus
necesidades de pronto doce arrobas de café, un tercio de azú-
car, cincuenta o más arrobas de galleta y lo más que consiga, así
como lo que reúna en dinero, de los mil pesos que correspon-
den a este vecindario, y tan luego como reciba el dinero de
Cadereyta, [Monte] Morelos y La Mota lo remitiré también,
dentro de unos cuatro días tendré ochenta o cien fanegas de
bizcocho y pinole que les mandaré luego. En fin, esté usted
seguro que en cuanto me sea posible y considere necesario
adoptaré las medidas más oportunas para atender la sección y
que sus padecimientos por falta de recursos se aminoren cuan-
to nos ea dable.
Hace ocho días tengo reunidos setenta caballos y veinte y
tantas reses en espera de las providencias que se
tienen dictadas, ya veo que las fuerzas que debían de disponer
de estas cosas no tendrán, pero pendiente de los resultados en
Mier o Camargo, los conservo reunidos y en pastoreo hasta
saber lo que sucede, es probable que se maltraten bas-
tante por las muchas lluvias pero no quiero andar con demoras
si fueren necesarios estos recursos.
57
Armando Leal Ríos

La correspondencia que trajo el correo fue mandada ayer


mismo a un tiempo y para hoy será en su poder. Nada ocurre
por aquí de nuevo y deseando con ansia el más feliz resultado
al señor don Santiago, espero que cualesquiera que sea éste me
lo comunique luego pues entiendo que la entrevista de ambas
fuerzas en la frontera será el acto más sano de los que se tengan
que representar. Dios permita que haya un arreglo favorable
para ambos Estados. Mis ocupaciones ayer todo el día no me
permitieron devolver hasta hoy el correo de la sección Sayas, sé
que no tienen novedad y cualquier cosa que ocurra de impor-
tancia la pondré en el acto de su conocimiento.
Son a sus órdenes su afectísimo y sincero servidor que aten-
tamente besa su mano.
Guillermo Morales.

Monterrey, septiembre 24 de 1856

La autoridad de [Monte] Morelos avisa oficialmente que ya


remitió a Linares los mil pesos que se le asignaron a aquella
ciudad, se le contestó dándole las gracias. [6658]

Manuel García Rejón.

Señor don Jesús Garza González


Monterrey, Nuevo León
Linares, Nuevo León septiembre 29 de 1856
Mi estimado amigo:
Por su apreciable 27 del corriente quedo impuesto del estado
que guardaban nuestras fuerzas cerca de Mier y que para hoy se
habrá resuelto este negocio.
Mi hermano salió de San Luis Potosí el lunes 22 del corrien-
te y llegó a esta su casa el 27. Dice que el 14 de este mes
58
Linares: Cruce de Guerra

llegaron a San Luis mil doscientos hombres bien armados con


ocho piezas a la orden del general [Vicente] Rosas Landa que el
18 recibieron un extraordinario de México con órdenes para
que marcharan, los seiscientos guardias nacionales de Guana-
juato que formaban parte de los mil doscientos hombres de
vuelta sobre Guanajuato, con motivo de un pronunciamiento
en la sierra de dicho Estado, lo que verificaron el mismo día 18
llevando consigo dos piezas de las ocho que trajeron y que los
seiscientos hombres que quedaron en San Luis tienen orden de
marchar hasta Matehuala. Los de San Luis dicen que Nuevo
León dé un golpe a estos seiscientos con lo que a su juicio que-
dará resuelto por aquella parte el negocio.
Los sanluiseños se manifiestan bastante disgustados por el
nuevo gobernador que les pusieron y algunos empleados.
Hace ocho días que estuvo un sujeto de San Carlos en Vic-
toria [Tamaulipas] este me ha informado que dentro de la Plaza
no hay doscientos cincuenta hombres que están sufriendo bas-
tante deserción por falta de recursos y el desacuerdo entre los
jefes de la plaza.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su afectísimo amigo
que atentamente besa su mano. [6659]

Guillermo Morales.

Señor don Jesús Garza González


Monterrey, Nuevo León
Linares, Nuevo León septiembre 29 de 1856
Mi estimado amigo:
Mi hermano don Isidro Morales que acaba de llegar de San
Luis me trajo un mal resultado de un negocio que arreglé en
México relativo a la vente que hice de unos carneros y otros
ganados, causándome esto un perjuicio muy grande en mi cré-
dito e intereses, por la relación que tiene dicho negocio con el
59
Armando Leal Ríos

compromiso que contraje en México al comprar a los señores


Mestrio una hacienda existente en esta jurisdicción.
Yo desearía ir personalmente arreglar este asunto a San Luis,
pero me detienen las circunstancias en que actualmente nos
encontramos con los negocios del Estado, de manera que me
tiene usted aquí en un estado violentísimo, como nunca me he
visto, sin saber que partido tomar, porque estoy seguro que si
yo fuera en persona a San Luis, lograría un arreglo, sino del
todo satisfactorio, a lo menos con el menor gravamen posible
para mi crédito e intereses que tan comprometidos los tengo
actualmente.
No puede usted figurase cuanto me repugna hacer a usted
esta manifestación, pero me es sumamente indispensable, por-
que como he dicho antes, jamás me he visto más comprometido con
mis negocios; y como los del Estado, según están, me llaman
también mucho la atención, ocurro a la amistad y prudencia de
usted a fin de que me ayude a arbitrar un medio para no perju-
dicar tanto, ni los míos, ni los del Estado. Como el negocio me
es muy interesante, bajo los dos aspectos que dejo indicados
deseo su contestación por la primer conducta que se le presente
pudiendo usted participarle mis apuros a nuestro amigo el se-
ñor Vidaurri.
Sin otro asunto me repito a sus ordenes su atento amigo y
servidor que besa su mano. [6660]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León septiembre 30 de 1856
Mi apreciable amigo:
Informado por varios conductos que nuestros oficiales cometí-
an algunas vejaciones en las personas de algunos vecinos de la
Jurisdicción de San Carlos [Tamaulipas] y estimamos tuvieron
allí lugar algunos hechos aunque pasajeros pero temerosos varios
60
Linares: Cruce de Guerra

de los principales vecinos de ser molestados imprudentemente,


ocurrieron conmigo lo que motivó a dirigirme al capitán don
Julián Quiroga, reglamentándole la conducta que debía obser-
var con todos los ciudadanos y los pueblos, esto parece que
surtió efecto razonable que se conoce de la adjunta carta y otra
más satisfactoria en que comunica un vecino de San Carlos el
contento con que se pronunció el pueblo y la tranquilidad y
garantías que disfrutan.
Pensaba antes informar a usted todo lo que se me ha infor-
mado, pero entiendo que todo a cambiado y espero que
continuará mejor.
[Martín] Sayas me escribió hoy y me dice que mañana estará
aquí, no es malo que venga para amonestarlo bien y se volverá
en el acto.
Sin tiempo para más, me repito a sus ordenes su fiel y ver-
dadero amigo que besa su mano. [6661]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León septiembre 30 de 1856
Mi respetado amigo:
Supongo que habrá recibido usted por extraordinario la muy
importante noticia que a las ocho de anoche hemos recibido y
que a la letra copio por si algún motivo imprevisto en el camino
hubiera impedido el que con más oportunidad haya sido en su
conocimiento.
= México, 17 de septiembre de 1856 = Mi querido tocayo =
El adjunto pliego le impondrá de su importancia y espero por
lo mismo que influya para que sea conducido violentamente a
su destino. Los frailecitos se pegaron buen chasco en la
noche del domingo último, que tenían preparado un pronun-
ciamiento. Como se impondrá usted por los periódicos,
61
Armando Leal Ríos

por Morelia, Guanajuato y otros puntos hacen tam-


bién esfuerzos y esto me hace lamentar más el Estado que
guardarán nuestros paisanos; por todas partes asoma la
reacción y solo la podremos vencer si la contrariamos uni-
dos.
= Hace un mes que nada sabemos de esos rumbos, y cuan-
do ustedes me podrían escribir por Matehuala me es sensible
que no lo hayan verificado, debían considerar cuan importante
nos es estar al tanto de lo que en Nuevo León suceda, porque
nuestro deber es trabajar por una paz honrosa.
= El triunfo obtenido en el negociado de la unión de Coa-
huila en que tuvimos que afrontar la opinión del gobierno y de
su Ministro de Relaciones, les dará a entender que no nos dor-
mimos, el Saltillo está comprendido en la unión y formará parte
del mismo Estado.
= Francamente creo que no es difícil arreglar todas las de-
más diferencias que se tienen con el gobierno general, entiendo
que una conducta conciliatoria sin injurias, expresiones acres y
violentas, sin amenazas, ni insultos restablecería la paz al Esta-
do.
= No se que habrá sucedido con mi tío Prieto que contestó
al gobierno aceptando el cargo de gobernador y comandante
general que se le confería.
= No hay tiempo para más, comunicar la noticia del oficio a
[Silvestre] Aramberri y [Mariano] Escobedo, y yo tendría mu-
cho gusto de ver letras de esos amigos, también es bueno que
todos se interesen por la paz tan necesaria para el progreso de
esas poblaciones. = A los amigos todos un expresivo recuerdo,
=licenciado Manuel García = a don Juan Benavides = Galeana.
El desenlace de este negocio ha sido visto por los habitantes
de esta ciudad con suma satisfacción, y con las demostraciones
más vivas de regocijo fue inmediatamente solemnizado con
música, cohetes, repiques de campanas.
Por tan grande acontecimiento en que visiblemente se ve la
decidida protección de la divina providencia a favor del Estado
y del digno jefe que rige sus destinos, doy a usted las mas since-
ras felicitaciones con la expresión más viva de aprecio y
62
Linares: Cruce de Guerra

adhesión que le profesa su fiel y verdadero amigo que besa su


mano.

Guillermo Morales.

Aumento. De San Luis Potosí salió el 22 de éste, mi her-


mano [Isidro Morales] y dice lo siguiente: El 14 del corriente
llegó a aquella plaza la sección Rosas Landa con número de mil
doscientos hombres bien armados y ocho piezas.
El 18 recibió éste un extraordinario del gobierno general
comunicándole las noticias del pronunciamiento de la Sierra de
Guanajuato; el mismo día contramarcharon para Guanajuato
seiscientos hombres con dos piezas de la misma sección Rosas,
el resto se preparaban para marchar a Matehuala [San Luis Po-
tosí] que se consideraba amenazada por [Silvestre] Aramberri.
Los sanluiseños están sumamente descontentos con su gober-
nador Aguirre y demás empleados que les han puesto.
Una persona que salió de Victoria [Tamaulipas] hace
ocho días me ha informado que a su juicio, habrá dentro de
aquella Plaza a lo más doscientos cincuenta hombres que di-
ariamente sufren división, que entre los oficiales hay mucho
desacuerdo.
Mis negocios particulares se han trastornado y esto me obli-
ga a hacer que mi hermano salga de vuelta mañana a San Luis
Potosí. [6662]

Señor don Jesús Garza González


Linares, Nuevo León septiembre 30 de 1856
Mi estimado amigo:
Supongo que habrá recibido usted por extraordinario la muy
importante noticia que a las ocho de anoche hemos recibido y
que a la letra copio por si algún motivo imprevisto en el camino
63
Armando Leal Ríos

hubiera impedido el que con más oportunidad haya sido en su


conocimiento.
= México, 17 de septiembre de 1856 = Mi querido tocayo =
El adjunto pliego le impondrá de su importancia y espero por
lo mismo que influya para que sea conducido violentamente a
su destino. Los frailecitos se pegaron buen chasco en la noche
del domingo último, que tenían preparado un pronuncia-
miento. Como se impondrá usted por los periódicos, por
Morelia, Guanajuato y otros puntos hacen también esfuerzos
y esto me hace lamentar más el Estado que guardarán nues-
tros paisanos; por todas partes asoma la reacción y solo la
podremos vencer si la contrariamos unidos.
= Hace un mes que nada sabemos de esos rumbos, y cuan-
do ustedes me podrían escribir por Matehuala me es sensible
que no lo hayan verificado, debían considerar cuan importante
nos es estar al tanto de lo que en Nuevo León suceda, porque
nuestro deber es trabajar por una paz honrosa.
= El triunfo obtenido en el negociado de la unión de Coa-
huila en que tuvimos que afrontar la opinión del gobierno y de
su Ministro de Relaciones, les dará a entender que no nos dor-
mimos, el Saltillo está comprendido en la unión y formará parte
del mismo Estado.
= Francamente creo que no es difícil arreglar todas las de-
más diferencias que se tienen con el gobierno general, entiendo
que una conducta conciliatoria sin injurias, expresiones acres y
violentas, sin amenazas, ni insultos restablecería la paz al Esta-
do.
= No sé que habrá sucedido con mi tío Prieto que contestó
al gobierno aceptando el cargo de gobernador y comandante
general que se le confería.
= No hay tiempo para más, comunicar la noticia del oficio a
[Silvestre] Aramberri y [Mariano] Escobedo, y yo tendría mu-
cho gusto de ver letras de esos amigos, también es bueno que
todos se interesen por la paz tan necesaria para el progreso de
esas poblaciones.
= A los amigos todos un expresivo recuerdo, =licenciado
Manuel García =a don Juan Benavides = Galeana.
64
Linares: Cruce de Guerra

El desenlace de este negocio ha sido visto por los habitantes


de esta ciudad con suma satisfacción, y con las demostraciones
más vivas de regocijo fue inmediatamente solemnizado con
música, cohetes, repiques de campanas.
[Martín] Sayas me escribió ayer. Dice que estará aquí maña-
na, es bueno que venga para amonestarlo por la conducta que
algunos oficiales han observado con los vecinos de San Carlos,
lo que motivó escribirle al capitán Julián Quiroga manifestán-
dole el orden y modo con que debe conducirse con aquellos
ciudadanos, esto dio un resultado favorable. El pueblo de San
Carlos que estaba alarmado se tranquilizó y lleno de contento
se pronunció y disfruta hoy las garantías que siempre deben
esperar de la moralidad y orden de las fuerzas de Nuevo León
que los tiene ocupados.
Su afectísimo amigo y servidor que besa su mano.

Guillermo Morales.

Hoy le escribí al señor Santiago [Vidaurri] con don Pedro


Gómez. [6663]

Señor don Jesús Garza González


Linares, Nuevo León octubre cinco de 1856
Mi apreciable amigo:
A las once de la noche llegó a esta ciudad un vecino de toda
verdad que salió de San Carlos el viernes, me ha informado lo
siguiente:
El jueves temprano se presentaron a las inmediaciones de
San Carlos [Tamaulipas] cien hombres, de ciudad Victoria
[Tamaulipas] comandadas por un tal Izaguirre, ordenó este a la
primera autoridad que se dispersaran y enseguida ocupó el
pueblo con su fuerza, no se sabe para donde se dirigen; en
conversación han dicho que vienen otras partidas más en auxi-
65
Armando Leal Ríos

lio; han dicho también que don Pedro Hinojosa con tres o cua-
trocientos hombres llegó de Tampico [Tamaulipas] a Victoria.
Que el jueves por la noche recibió Izaguirre un extraordinario
despachado desde Victoria por Hinojosa.
En el acto que recibí estos informes los puse en conoci-
miento del señor [Martín] Sayas que se hallaba aún en esta
ciudad, inmediatamente ordenó su marcha que verificó a las
dos de la mañana.
Tengo dictadas y en práctica las providencias convenientes
para estar a la mira de los pasos que esta fuerza dé en San Car-
los de lo que por extraordinario le daré conocimiento.
Yo entiendo que de Victoria no vendrán más hombres que
los cien caballos que ocuparon San Carlos, quizá con el objeto
de llamarle la atención a la sección Sayas puede ser que para
esta hora se hayan devuelto pues si permanecieran pronto ten-
drán con quien entenderse.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su atento amigo y
servidor que besa su mano.

Guillermo Morales.

En los carros que llevan el entrante, van las dos tiendas de


campaña que encarga el señor Vidaurri. [6664]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León octubre 11 de 1856
Mi respetado amigo:
Hemos tenido nuestros días de apuro con la ocupación de las
fuerzas de Victoria [Tamaulipas] a San Carlos y gracias a la pro-
videncia estamos tranquilos.
Por la adjunta comunicación que recibí ayer del señor [Mar-
tín] Sayas que me encargó lo comunique al propio gobernador
66
Linares: Cruce de Guerra

como lo verifique, ínterin lo hace él oficialmente los resultados


que gloriosamente obtuvieron nuestros valientes sobre el ene-
migo, de esta ciudad salieron con dirección a San Carlos
[Tamaulipas] ciento diez hombres que hoy han entrado de vuel-
ta.
Son las cuatro de la tarde, recibí juntos los dos extraordina-
rios y en el acto se devuelve el Güero Treviño como se me
encarga. [Martín] Sayas estará hoy en Villagrán de vuelta de la
jornada de San Carlos para las siete de esta noche recibirá las
dos comunicaciones.
Deseo a usted todas felicidades, su atento servidor y verda-
dero amigo que besa su mano. [6665]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León octubre 15 de 1856
Mi respetado amigo:
Anoche llegó el correo del día 12, en el momento se lo remití a
[Martín ] Sayas. A las cinco de la tarde de hoy han vuelto con la
adjunta comunicación y en el momento emprenden su marcha.
Quedo impuesto de que la sección Sayas contramarcha se-
gún que usted lo ha determinado, y de que [Mariano] Escobedo
cubrirá este punto con quinientos caballos, este también luego,
luego tendrá que replegarse a donde este la sección para sí Gar-
za emprende sobre nosotros no es prudente que se exponga a
una segura derrota, así es que por ahora tendremos que resol-
vernos a sufrir dentro de muy breves días la ocupación del
enemigo con todas sus consecuencias y Dios permita que en
San Luis no repitan los hechos escandalosos de Villagrán [Ta-
maulipas] y que por consecuencia suceda lo mismo en otros
pueblos del Estado; usted sobre esto habrá meditado todo y
sabrá evitarnos la completa ruina que nos amenaza.
67
Armando Leal Ríos

Por un mozo que vino de Tampico [Tamaulipas] se nos ha


informado que a Victoria han venido quince piezas y más de
setecientas cargas de parque y armamento de Tampico custo-
diado con menos de doscientos hombres, será esto o no cierto,
el mozo dice que de aquí para Tampico [Tamaulipas] vio doce
piezas [Artillería] en Alamitos, que ahora que vino alcanzó a
[Juan José de la] Garza en el Chocoy con doce piezas que ya
debe estar en Victoria, yo estará usted informado como existe
un número de hombres muy responsable de cada pueblo; con
severas penas a las autoridades que descuiden su mandamiento.
Así que debemos estar persuadidos que el hombre se prepara
de una manera formal y de que muy pronto continuará el desa-
rrollo de su plan.
Este mal que nos amenaza exige de usted providencias ente-
ras y muy enérgicas, que tal causa den sus resultados por que de
lo contrario nos perderemos para siempre.
La sección Sayas llegará aquí pasado mañana y hará que con
la mayor violencia continúe su marcha proporcionándole todos
los medios de transporte, quizá calmara algo el agua que ha
hecho estar los ríos muy crecidos.
Su afectísimo amigo que le desea a usted todas felicidades y
que pronto concluya usted su jornada para esta parte del mun-
do. [6666]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León octubre 20 de 1856
Mi respetado amigo:
Supongo que los señores jefes de la sección le habrán ya infor-
mado de su marcha con dirección a China [Nuevo León], hoy
dormirán en la Mota [General Terán].
68
Linares: Cruce de Guerra

Acaba de llegar un vecino de esta ciudad que estaba en San-


tander, me ha informado que por muchos esfuerzos que hacen
los de Victoria para reunir gente no lo pueden conseguir, que
un tal Galván de Cruillas tiene cuarenta hombres en Padilla,
que hasta el día 15 que el se vino no se movían los de Victoria
[Tamaulipas].
En Santander antes de venirse se decía que [Juan José de la]
Garza salió de Tampico para México. Otros opinaban que se
dirigió para Matamoros [Tamaulipas] nada se sabe de cierto y
cualquier cosa que ocurra se la comunicaré por extraordinario
violento.
Sin más asunto me repito a sus órdenes, su atento amigo y
servidor que besa su mano. [6667]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León octubre 22 de 1856
Mi respetado amigo:
Son las cuatro de la mañana y acabamos de recibir el parte de
que los victorianos con setecientos hombres y siete piezas [arti-
llería] se dirigen sobre el Estado.
Según el parte ayer a las tres habían ocupado a Hidalgo
[Tamaulipas] y hoy quizá temprano ocuparán a Villagrán alen-
tados de que la sección Sayas se ha retirado. Se dice que viene
don Juan José de la Garza, todo me parece muy exagerado.
Dentro de pocas horas lo sabremos y se lo comunicáremos
violentamente si la fuerza enemiga fuera muy superior habrá
que convenir en que la nuestra siendo pequeña haga su retirada
para el interior del Estado a salvar el resto de la artillería porque
no será fácil organizar en el momento un número considerable,
en fin veremos lo que hacemos y como libramos la premura de
que se la cojan, pues las internas infaliblemente perecen.
69
Armando Leal Ríos

Sin tiempo para más me repito a sus órdenes, su atento ami-


go que besa su mano.

Guillermo Morales.

El señor [Ignacio] Zaragoza le impondrá de lo que hemos


acordado hacer. [6668]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León diciembre cinco de 1856
Mi apreciable y respetado amigo:
El dador de la presente don Francisco Yades es una de
las personas que con buena voluntad proporcionaron a [Mar-
tín] Sayas el numerario que le fue posible para socorrer la
sección de su mando, no ha sido indemnizado hasta ahora y me
constan los compromisos en que se haya y por los que se ve
obligado a ocurrir a usted para que tomando en consideración
en sus apuradas circunstancias se digne mandar sea cubierto su
adeudo; para todo lo que se lo recomiendo muy particularmen-
te es por otra parte una de tantas personas perjudicadas en
aquella Villa, en la ocupación de las fuerzas de Victoria [Ta-
maulipas].
Muchos de los vecinos de Villagrán que perdieron todos sus
intereses, sus casas y cuanto tenían y que hasta la fecha andan
vagando con mil necesidades, me han venido a hablar para que
me dirija a usted, manifestándole su situación y que se digne
tenerlos presente para que de cuantas maneras le sea posible les
procure su indemnización, pues no les queda otro recurso que
el de ocurrir a usted. Este hecho que ha sido bien público y
notorio no necesita recomendación, y por lo mismo me limitó a
este simple recuerdo dejándolo todo a su prudente considera-
70
Linares: Cruce de Guerra

ción, y esperando me conteste sobre este particular lo que esti-


me conveniente.
No habiendo podido conseguir que a su pasada de don Juan
José de la Garza no diera recibo del dinero, víveres y caballos
que exigió a más de los que recogió Aregullín desde que entró a
esta jurisdicción, tuvo que ir hasta Villagrán [Tamaulipas] a
donde conseguí que reconociera la cantidad de cerca de tres mil
pesos, valor de dinero y víveres dando orden para que sea pa-
gada en la sub-comisaría de Tampico [Tamaulipas] luego que lo
ocupe. Los caballos y mulas dijo que no pagaba nada porque
los había pedido de auxilio y que se habían perdido en Monte-
rrey y dentro del Estado y aún los últimos que se le dieron
ahora en su pasada, ofreció pagar o devolver, se los tomó, y ni
una ni otra cosa cumplió. Sería conveniente que las autorida-
des de los pueblos hagan que todos los vecinos acrediten lo que
han dado por su conducto y lo que les han tomado para que los
reclame pues los de Tamaulipas han de procurar cobrar hasta lo
que nunca han tenido, cuya operación nos quedran pagar.
Sin otro asunto por ahora me repito de usted su fiel y ver-
dadero amigo que atentamente besa su mano. [6669]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León diciembre 11 de 1856
Mi apreciable y respetado amigo:
Contesto a su recomendable del 8 del corriente, que lo más
pronto que me sea posible le mandaré las quince yeguas, cuan-
do las reciba cambiará las que guste y los mismos mozos que
lleven éstas traerán aquellas.
Deseo a usted toda clase de felicidades, su afectísimo y ver-
dadero amigo que besa su mano.
Guillermo Morales.
71
Armando Leal Ríos

Que queda por cuenta de don Santiago, las quince yeguas,


así como las siete que no son jorras. [6670]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Hacienda del Fresno, diciembre 27 de 1856
Mi querido y respetado amigo:
A su pasada el señor Galván para Tampico, estaba en uno de
mis ranchos donde le proporcione un mozo que lo acompañó
hasta aquel puerto, hoy ha vuelto, con cinco días de camino por
haber andado lo más por el campo, llegó algo malo y pongo
este propio con el exclusivo objeto que ponga en sus manos las
cuatro adjuntas comunicaciones que manda el señor Galván y
dos misiones de la unión. Procure que no se sepa que mando
estos correos porque ya sabe que hay muchos enemigos.
Sin otro asunto deseo, a usted todas felicidades su verdadero
amigo que atentamente besa su mano.

Guillermo Morales.

Son las cinco de la tarde. [6671]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


El Fresno, enero 12 de 1857
Mi apreciable y respetado amigo:
Ayer ha vuelto el extraordinario que mande a Tampico, a quien
no le fue posible entrar aquella plaza por estar ocupada por las
fuerzas de don Juan José de la Garza, todas las entradas de
Altamira, Chaca, Tancasnaque.
72
Linares: Cruce de Guerra

Verá si a pesar de esto y con el riesgo de que se tomen la co-


rrespondencia quiera usted que vuelva el extraordinario a
Tampico, puede usted disponerlo seguro que sin pérdida de
momento saldrá de aquí.
El 25 de este mes le remitiré sus yeguas y es probable
que en lugar de quince, vayan veinte o veinticinco para que
forme una manada que merezca cuidarse; si usted se
retira para el interior, que el señor Indalecio se prepare para
recibirlas.
Convine con este correo en pagarle cien pesos por su viaje
de Monterrey a Tampico y vuelta y otros cien pesos por su
primer viaje a Monterrey, le tengo dados sesenta pesos se le
restan cincuenta, espero que sea cubierto en esa administración
por no ser pagados en Tampico.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su adicto y verdade-
ro amigo que besa su mano. [6672]

Guillermo Morales.

Monterrey, Nuevo León enero 16 de 1857


Mi muy querido amigo:
Contesto a la grata de usted fecha 13 del presente y supongo
que tanto los pliegos primeros como los que le mandé a usted
posteriormente para Tampico los tendrá en su poder; consérve-
los en ese estado entre tanto se le presenta a usted un amigo
que irá por ellas para conducirlas a su destino.
Queda satisfecho el correo a quien se le han entregado los
cincuenta pesos que se le restaban y los sesenta que le tendía
usted dados se los remitiré oportunamente.
Deseo a usted felicidades y disponga del aprecio que le pro-
fesa este seguro amigo y servidor que besa su mano. [6673]
73
Armando Leal Ríos

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León enero 15 de 1857
Mi apreciable y respetado amigo:
Creí haber recibido muy pronto el correo de vuelta y
por este motivo y haber estado en la Hacienda no escribí
cuando salió, éste fue y vino sin haber podido entrar por
la ocupación de las fuerzas de don Juan José de Garza, ya para
hoy habrá sido en su poder la correspondencia que aquel llevó.
Ahora recibí este segundo pliego y con todo empeño lo he
puesto hoy mismo en camino con orden de que esté el 17 o 18
en Tampico, lo lleva don Bruno Peña y otro mozo que le
acompaña lo apunté por siete pesos diarios de ida y vuelta y
además una gratificación de cincuenta pesos, así como si hubie-
ra que hacer algún gasto de canoa por que le sea indispensable,
se le pagará por separado.
Este es sujeto de conocimiento y de mucho empeño y solo
una desgracia causará un atraso o que en lo absoluto no pueda
entrar a Tampico.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su afectísimo amigo
y atento servidor que besa su mano. [6674]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Fresno
Monterrey, Nuevo León enero 16 de 1857
Mi muy querido amigo:
El señor licenciado don Esteban Coronado pasa para Tampico
y él es la persona de quien hable a usted en mi carta de fecha de
hoy y que he devuelto hoy.

74
Linares: Cruce de Guerra

Los pliegos que en dos diversas ocasiones he mandado a


usted dirigidos a Tampico entregéselos al señor Coronado,
a quien recomiendo muy particularmente por llevar una
comisión importante cerca de Gautier.
Si alguna cosa se le ofreciere, le suplico a usted se la propor-
cione allanándole las dificultades que se le presenten para su
pronto arribo a Tampico.
Consérvese bueno y disponga del aprecio que le profesa
quien se repite suyo, afectísimo amigo servidor que besa su
mano. [6675]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León enero 21 de 1857
Mi apreciable y respetado amigo:
Ayer muy temprano se me presentó el señor Coronado
a quien atendí en el acto en lo que se le ofreció, proporcio-
nándole un caballo para su silla y un hombre bien montado que
lo acompañará, al amanecer de hoy continuó su marcha para
Tampico.
Puse en sus manos el último pliego que trajo el co-
rreo del 16 del corriente; el otro pliego ya dije a usted en mi
última que en el mismo día que lo recibí lo remití con
don Bruno Peña, si este señor no se le ha presentado
embarazo para entrar y volver muy pronto lo tendremos de
vuelta.
Quedo entendido de que el correo recibió los cincuenta pe-
sos saldo que se le debía y del resto dispondré.
Deseo a usted todas felicidades, su fiel y verdadero amigo
que atento besa su mano. [6676]

Guillermo Morales.
75
Armando Leal Ríos

Señor Isidro Morales


Hacienda El Fresno, febrero 24 de 1857
Querido hermano:
Mil inquietudes han sufrido tus hermanas y yo, con tu
dilación sin tener razón de ningún género, hasta que
por fin salió mi compadre don Bruno [Peña] con el objeto de
vender los ganados y un mozo directamente a México. Cuando
antier por la tarde recibí tu apreciable del dos del corriente que
trae Guerra, y estamos tranquilos al saber de tu salud.
Hace un mes y días estuvo un mozo esperándote en el Pe-
ñasco, hasta tu dilación resolvió buscarte y en ello consintió
don Eusebio Torres quien se quedó para entregarte la carta que
te escribí. En ella te doy las instrucciones relativas a la enajena-
ción de los ganados y otros negocios, entiendo que la habrás
recibo y hoy solo te encomiendo el que este asunto de chivas
quede sin falta terminado, pues tengo grandes apuros que cu-
brir con García Ruiz en Tampico.
Los esquilmeros que ya me comen, así que no hay más re-
medio que los chivos se vendan y que dejemos esos gastos que
me han convertido miserablemente y sabe Dios las tonteras
que haya cometido Octaviano durante su administración, pues
por lo que se ha vendido y existe hay respetabilísima falta, así es
que en este negocio debo perder mucho. Desde el 20 de di-
ciembre salieron los ganados de Potosí y en espera de tu vuelta,
han permanecido en la Hacienda de Vacas, hasta hoy que tu los
destinas.
En la Hacienda de Albercones está el pastor don Hilario y
sus dos hijos, la cuenta de estos la tiene Octaviano y empeñarte
en que paguen o que se los echen por delante, lo mismo que a
todos los demás pastores pues hemos dado principio a juntar
los esquilmos y es probable que necesitamos de veinticinco o
treinta pastores con lo que se pretende ir con ustedes para la
costa a recoger aquellos esquilmos y ya se pasa el tiempo. Octa-
viano que se venga por Potosí y se traiga todos los pastores y
cuanto allí tenga, para no volver.
76
Linares: Cruce de Guerra

Guerra, de palabra me dijo que de la remuda se la situara en


el Valle nuevo, con tal motivo Simón Ortíz y un vaquero te
entregarán seis mulas y un caballo para ti, el primero lleva or-
den de que sino has llegado al Valle deje allí las mulas y se pase
a la Hacienda de Vacas y de allí, a donde te encuentre. Nada
otra cosa puedo decirte pues te supongo ya en camino y hayas
vendido los ganados, bien que vayas rumbo a los pueblos de
Catorce y Charcas [San Luis Potosí] a venderlos.
Felipe le pidió cuarenta pesos al señor don Ramón, págase-
los, hasta ahora no me ha entregado Felipe su caballo o mula
de los que haya traído, oí decir que le dejó a Jesús María [Bení-
tez] una o dos y que este los dejó cuidando, no se donde. Te
acompaño de nuevo el recibo de las mulas que recibió don
Jerónimo [Treviño] con independencia de las en que los mozos
llevaban el bastimento; he sabido que mulas muy conocidas
faltan y que Jerónimo debe responder por ellas al mejor precio
que se le hayan vendido las demás, las que constan en el recibo,
las recibió partida por partida y salió con ellas sin faltarle ni
una. Por la adjunta de don Roumaldo Castillo que recibí por el
correo de hoy, verás que me ofrece tomar las chivas a diecisiete
reales, mira que partidas sacan de esta o de otra, que no haya
desecho y que paguen al contado.dos terceras partes a lo me-
nos, pues repito que tengo mil necesidades que ya deberás
considerar.
Bruno Peña que fue de extraordinario a Tampico desde
Monterrey, lo cogieron de vuelta las partidas de [Juan José de
la] Garza y está preso en la Artillería; con tal motivo me dirijo a
don Santiago [Vidaurri] y harás que con un propio llegue la
adjunta a sus manos, a ver que discurre para que se ponga libre
a [Bruno] Peña. Necesito para la hacienda una diez o doce
fanegas de frijol, mira si consigues a buen precio que puesto
aquí no pase de seis pesos.
Sé que en la hacienda de Bocas hay un maíz que sembrado
se da en sesenta días, si hay modo tráeme una carga o dos o lo
que se pueda. En fin, no sé que otro encargo te tengo hechos,
las fiestas respecto de tiempo [Feria de Linares] estuvieron
buenas, efectos hubo como nunca: mantas buenas por mayoreo
77
Armando Leal Ríos

a catorce pesos, otros al menudeo un real, así por ese orden lo


demás, nosotros como ya consideraras sin surtido nada vendi-
mos, para atender medianamente a los esquilmeros de ganado
menor. Pedí a Jesús María [Benítez y Pinillos] setecientos pesos.
Garza pidió por un propio lo que se le debe, Dión no le con-
testó porque ignora este compromiso de tu parte.
Según estoy informado las peores mulas fueron las que reci-
bió el bribón de don Jerónimo [Treviño] y entrega el chivo de
Ramón, mira como arreglas con esa alhaja y con Jerónimo que
pague las mulas que faltan a diez pesos cada una; no te des-
atiendas con la venta, pues el señor Jerónimo [Treviño] tiene
forma de llevar sus bestias de la hacienda. Mucha prontitud en
todo es lo que se necesita para el éxito de los negocios, de lo
contrario tendremos la ruina inevitable en todos ellos. Tu
hermano que desea tu felicidad.

Guillermo Morales.

Si por casualidad cambiases los ganados para San Luis, que


lleva un guía del Valle para San Miguel y cualquier otro pueblo
pasado de México, siempre será mejor que procuren enajenar y
que los lleven pronto. [6677]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Hacienda El Fresno, febrero 20 de 1857
Mi respetado amigo:
Recordará usted que el extraordinario que me recomendó a
Tampico antes que el licenciado Coronado lo fue, según mi
aviso el joven don Bruno Peña sujeto de bastante empeño, éste
logró llegar y entrar a Tampico en tres días del en que salió de
Linares.
A los dos o tres días de estar Peña en aquella plaza llegó el
señor licenciado Coronado, éste arregló algo de sus negocios y
78
Linares: Cruce de Guerra

el primero o dos de este mes despacharon a don Bruno Peña


con la correspondencia para usted, fuera ya del peligro lo en-
contró una partida de don Juan de la Garza, lo aprehendió y
recogió la correspondencia, se lo presentaron a Garza y perma-
neció preso hasta hoy en la artillería.
No se cual sea la razón que el señor Garza halla tenido para
apresar este joven cuyo acontecimiento ha llenado de aflicción
a toda su familia y por consiguiente a mí de apuros con sus
exigentes solicitudes lo que me ha precisado a dirigirle a usted
la presente por medio de un propio, para que con su vista
haga lo que puede hacerse para que este joven consiga su
libertad, hoy a las ocho de la noche se me presentó su padre,
su esposa y toda la familia y les ofrecí escribirle a usted como
lo verifico, esperando su resolución. Ningún valor tengo
con el señor [Juan José de la] Garza por lo mismo no me
dirijo a él para ver si conseguimos su libertad.
Hace tres días me remite un amigo de Tamaulipas un cua-
dernito en que se hallan impresa toda la correspondencia que
traía según infiere, Peña. Vienen cartas de usted que escribe
Gautier, Galván, don Antonio, el licenciado Coronado al reti-
rarse de Tampico para México; del presidente de la república a
Gautier y a [Pedro] Hinojosa; la copia de dos libramientos, uno
de diecisiete mil pesos y otro de nueve a cargo del gobierno y a
favor de usted.
La copia de la última acta de la guarnición, avisos de Tampi-
co poniéndose a disposición del supremo gobierno y poniendo
a disposición del general Moreno, la plaza.
Hasta las contestaciones entre Gautier y Garza pretendiendo
éste que le entregaran la plaza, mismo avenimiento que cabría
de su parte; el referido cuaderno se lo mandé inmediatamente a
nuestro querido amigo don Ignacio Galindo, para que se lo
remita a usted y entiendo que para cuando reciba esta será
aquel en su poder.
Acabo de recibir de nuestro amigo Galindo una carta fecha-
da ayer en Monterrey en que me recomienda mucho al sargento
Antonio Araiza que lleva un negocio de usted muy importante
a Tampico, ignoro si Ariza continuó su camino pues no se me
79
Armando Leal Ríos

presentó con ella y entiendo que don Juan José de la Garza


hará con este extraordinario si cae en sus manos, lo que con los
demás.
Es muy regular que don Bruno Peña, luego que ven-
ga exija el ofrecimiento que le hice por su viaje pues se
desempeñó muy bien, dígame como lo arreglo.
Sin otro asunto deseo a usted en todo las mayores felicida-
des, quedo como su más fiel y verdadero amigo que
atentamente besa su mano. [6678]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales.


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León marzo 23 de 1857
Mi querido amigo:
Por las muchas atenciones que me rodeaban en San Luis Poto-
sí, me vi precisado a no contestar la grata de usted fecha 24 de
febrero último que recibí en esa ciudad.
Estoy impuesto de las cosas que ha hecho [Juan José
de la] Garza con la correspondencia que ha interceptado y
siento sobremanera la prisión de [Bruno] Peña, a quien se le
pagará lo ofrecido cuando se presente; pues no dudo que
habrá sido puesto en libertad terminada como está la cues-
tión de Tampico, y separado Garza del gobierno de
Tamaulipas.
He vuelto de la campaña sin novedad, y me tiene ya
en esta a donde puede librarme sus órdenes como a su
sincero amigo y servidor que besa su mano. [6679]

80
Linares: Cruce de Guerra

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León marzo 30 de 1857
Mi muy querido amigo:
En San Luis [Potosí] supe que había usted mandado las yeguas
que le tenía pedidas, y suponía que serían mansas y no al precio
de diez pesos cada una como me han informado a mi arribo a
ésta. He visto que las yeguas son ladinas, que llegaron bastante
maltratadas y que se han ido ya cuatro.
Estoy conforme con el precio y con la clase de las yeguas, si
para suplir esta falta me manda usted cuanto antes un burro
nuevo, bueno; más si esto no le pareciere a usted justo, mán-
deme siempre el burro avisándome de su precio para pagárselo.
Me repito de usted afectísimo y verdadero amigo que besa
su mano. [6680]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Monterrey, Nuevo León
El Fresno, marzo 31 de 1857
Mi muy querido y respetado amigo:
Varios jóvenes de esta ciudad y entre ellos el dador de la pre-
sente que lo será (Dios mediante) don José María Gómez,
deseando proporcionarse una ocupación por la cual consigan el
bienestar de su familia.
Han ocurrido al beneficio de la Ley de desamortización y
haciendo uso de la parte que se los permite, han denunciado
ante el señor alcalde primero con las formalidades necesarias
varias fincas pidiendo que de conformidad con lo prevenido en
la referida Ley se les adjudiquen, tal solicitud la he considerado
por mi parte muy justa porque de ella ninguna persona ni co-
munidad aparece perjudicada, y por el contrario aplicadas estas
81
Armando Leal Ríos

fincas, así como otras muchas que estarán en su caso a diversos


individuos aparecerá el desarrollo de un capital muerto en bien
de la sociedad.
Por todas estas razones no he vacilado en dirigirle a usted la
presente esperando confiadamente en que pondrá usted de su
parte todo el empeño necesario a fin de que mis recomendados
sean obsequiados en todo lo que solicitan, favor que entre los
muchos que me ha dispensado ocupará él más recomendable
lugar, pues deseo vivamente él serles útil de cuantas maneras
me sea posible a las personas por quien me intereso.
Son muy repetidas las molestias que le infiero y que espero
me dispense, pues a ello obligan las consideraciones de que son
dignos los buenos ciudadanos por quien me empeño.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su fiel y verdadero
amigo que atento besa su mano. [6681]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León abril tres de 1857
Mi muy querido amigo:
Tengo a la vista sus apreciables de fechas 30 y 31 del último
marzo en que me recomienda las denuncias hechas por algunas
personas de esa ciudad, y el que se exceptúe del servicio de la
guardia nacional al hijo de don Julián Morales.
Esta gracia está acordada ya y en cuanto a lo demás por mi
parte se allanarán todas las dificultades que se presenten para lo
que convendrá que se presenten los interesados conforme a la
Ley.
Deseo a usted todo género de felicidades y me repito suyo
afectísimo amigo y servidor que besa su mano. [6682]

82
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León marzo 30 de 1857
Mi apreciado y respetado amigo:
El dador de la presente don Julián Morales, es uno de los mejo-
res ciudadanos que han prestado sus servicios desde que
nuestro Estado ha tenido precisión de hacerse respetar para
conservar sus derechos, tomando para ello sus hijos las armas
en la mano por este motivo en la última jornada de la sección
Sayas sobre Camargo, fue allí herido gravemente y ha quedado
baldado sin poder atender a su familia lo que lo ha obligado a
ocurrir a usted a solicitar la gracia de que su único hijo que tie-
ne, se conceda quede exento del servicio de guardia nacional y
pueda con su trabajo atender las necesidades de su familia.
Le suplico a usted si considerare justa esta solicitud se digne
atender al relacionado don Julián Morales.
Sin otro asunto desea a usted felicidad, su fiel y verdadero
amigo que besa su mano. [6683]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


El Fresno, abril primero de 1857
Mi apreciable y respetado amigo:
Con suma satisfacción me he impuesto por su favorecida de 23
del pasado marzo que haya usted vuelto sin novedad de la
campaña, felicitándolo por los buenos resultados que haya ob-
tenido y deseándole en todo las mayores felicidades.
Por una casualidad estaría en Monterrey don Bruno Peña a
la llegada de usted y aunque no lo he visto supe que arregló su
negocio lo que se libró mucho y doy a usted por mi parte las
más debidas gracias.
83
Armando Leal Ríos

Deseo se conserve usted feliz y libre sus órdenes afectísimo,


fiel y verdadero amigo que besa su mano. [6684]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


El Fresno, abril dos de 1857
Mi muy apreciable amigo:
Impuesto de su apreciable de 30 del pasado marzo digo a
usted que cuando uno cree quedar mejor, queda peor; las
últimas yeguas que le mandé fueron lo más bien escogidas
que se pudo, algunas de caballada mostrenca no ladina porque
no hay de otras, es la única en que se consiguen bonitas yeguas
y donde hay que escoger la caballada que la Hacienda tenía
arregladas, las consiguió don Andrés Leal vendiendo hasta unas
cuantas manadas aburradas que había y por estas inmediaciones
no hay a quien comprarle, los extranjeros han limpiado, pues
día con día están las caravanas comprando; hace cinco días
estuvieron aquí mismo, me ofrecieron pagar a diez y doce pe-
sos yegua, no les vendí porque no tengo, la caballada que
compré en Rayones ha extrañado mucho y la que no se ha
muerto está muy flaca.
El precio de diez pesos cada yegua puesta por mi cuenta y
riesgo en esa no debe hacérsele caro, pues ya ve a como pagan
los que les vendan. Yo no tengo burros, menos cinco o seis
que dejaron sin vender, son muy viejos, insolventes a fuerza de
maíz los conservo; he comprado con dificultad unos cuatro
chicos que este año o el que viene comenzarán a trabajar por
esa razón, no se sabe que tal saldrán.
Estoy informado que hay un vecino cerca de aquí que tiene
un burro razonable, hoy mismo le solicitaré si lo vende y si me
gusta en el acto se lo mando.
84
Linares: Cruce de Guerra

No puede usted figurarse lo sensible que me ha sido el que


las cosas no hayan salido a su gusto, y quizá en esto no haya
tenido parte algún informe malicioso de alguno de los señores
de [Pedro] Hinojosa, de los que con ellos han platicado, que
procuraron por cuantos medios le es posible perjudicarme,
pues en ello han puesto el mayor empeño, celosos por su refe-
rida y absurda ambición por que me ocupo de negocios que ni
ellos, ni toda su generación han emprendido, aprovechan hasta
la más pequeña circunstancias para ejercer su ruina y miserable
venganza por lo pasado, esto no se le debe a usted ofuscar y al
manifestarlo lo hago animado de la sincera confianza que me
dispensa y por que veo en usted ese verdadero amigo, a quien
con franqueza no tengo embarazo para comunicarle todo, así
como mis circunstancias me obligaren a ocurrir a usted para lo
que se me ofrezca lo haré sin vacilar contando con su protec-
ción.
Sin otro asunto por ahora me repito a sus órdenes su fiel y
verdadero amigo que atento besa su mano. [6685]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Monterrey, Nuevo León
Linares, Nuevo León abril nueve de 1857
Mi apreciable y respetado amigo:
No se consiguió el burro que solicita, pero deseando que se sirva
del que necesita le voy a mandar el sábado uno de los míos que
he comprado, está en la caballería de usted, anda en cuatro años
y es todo un burro cambujo, no muy grande esta creciendo. Por
conocimiento de muchas personas que lo conocen se que es muy
superior; estando tan bien cuidado como está, mándele a su
caporal que prepare su caballería para que ahí le traigan las
hembras, es muy seguro que le dará treinta o cuarenta mulitos,
85
Armando Leal Ríos

procurando que las yeguas estén bien limpias y que se las echen
con buen orden, el lunes o martes próximo llegarán con él, lo
lleva un solo mozo porque es muy mansito y es un animalito de
mérito, ya lo verá.
Me repito a sus órdenes su fiel y verdadero amigo que besa
su mano. [6686]
Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León abril 14 de 1857
Mi muy querido y respetado amigo:
Hace siete meses mandé a mi hermano don Isidro a México
con una partida de mulas y dos ganados, uno y otro negocio se
perdió completamente según estoy informado, pues hasta aho-
ra no llega mi referido hermano, el fatal resultado de este
negocio me ha venido a poner en un apuro violento, porque
con motivo de los muchos gastos que he tenido que hacer en la
hacienda, he aniquilado mis recursos y por otra parte la respe-
table pérdida que en todo sufrí el año pasado por los
tamaulipecos, me entorpecieron todos los giros de una manera
cruel, todas estas circunstancias me obligan a ser franco con
usted y a manifestarle que necesito que usted me facilite la su-
ma de tres mil pesos, pues bien que sus circunstancias
particulares se lo permitan o que los solicite de las personas de su
confianza que se los pueda proporcionar, pagaré la suma de un
diez por ciento anual y esta cantidad la volveré en el término de
dos años o antes si se pueden arreglar mis negocios, confío
pues en la más firme esperanza de que usted tomando en con-
sideración lo que dejo manifestado hará el esfuerzo que quepa
en sus facultades para atender mi solicitud y que lo que a usted
le parezca mas prudente, me conteste con este mismo portador.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su muy atento ser-
vidor y amigo que besa su mano. [6687]
Guillermo Morales.
86
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León abril 15 de 1857
Mi apreciable y respetado amigo:
Con el portador Sixto Suárez remito a usted el mejor de los muy
pocos burros que tengo, menos éste como dije a usted en mi última,
lo compré en diciembre, me importó cincuenta pesos y está en la
caballería desde entonces, me han asegurado que es bueno, no lo
conozco. Al conductor he pagado cinco pesos porque lo lleve
con mucho cuidado para que no se maltrate y le sea luego útil.
Deseo a usted toda clase de felicidades, su fiel amigo y ser-
vidor que besa su mano.
Guillermo Morales.

Aumento. Sixto Suárez el portador es el mozo que acom-


pañó al licenciado Coronado a Tampico. Me reclama su trabajo
que nada le dio el referido señor licenciado, se lo recomiendo a
usted para que le paguen los gastos pues lo considero justo por
haber perdido éste bastante tiempo. [6688]

Señor don Santiago Vidaurri


México
Linares, Nuevo León junio 24 de 1857
Mi apreciable y respetado amigo:
Con suma satisfacción me he impuesto por su recomendable
carta tres del corriente de su feliz arribo a esa hermosa Capital y
de la importante y perfecta armonía que existe entre usted y el
señor [Ignacio] Comonfort; Dios permita que en esta vez y
para siempre queden zanjadas todas las diferencias que los
enemigos del orden hacían aparecer entre usted y el muy digno
Presidente de la República y que sus conferencias den tan feli-
ces resultados a la Nación entera como los que ha obtenido Nuevo

87
Armando Leal Ríos

León cuando éste en tiempos muy difíciles ha fiado en usted su


suerte y porvenir.
Yo, amigo mío, aunque quizá uno de los más insignificantes
de los que compone la sociedad mexicana deseoso del engran-
decimiento de ésta, y confiando en la prudencia y tino con que
sabrá conducirse con nuestro actual Presidente no dudo
que prescindiendo de todo cuanto sea posible, sin mengua del
honor y derechos del Estado, será consecuente con el señor
[Ignacio] Comonfort y nos brindará a su vuelta con cuantos
beneficios hubiere obtenido asegurándonos ante todas las cosas,
la paz y armonía entre el Estado y el Gobierno Supremo.
Sin necesidad de muchos empeños, yo estoy persuadido que
en la próxima elección para presidente por estos puntos obten-
drá mayoría de sufragios el señor [Ignacio] Comonfort, pues en
lo general he advertido que todos los ciudadanos están conven-
cidos de la necesidad de que su excelencia continúe en el
puesto hasta dejar bien aseguradas todas cuantas reformas y
mejoras necesite el país, y que tan acertadamente aunque con
mil dificultades ha sabido plantear.
Deseo que usted en lo particular sea muy feliz hasta su vuel-
ta para que tenga el gusto de que venga a vivir entre nosotros
con la satisfacción que debe producirle él haber hecho a favor
del Estado cuanto estaba de su parte.
Sin otro asunto me repito a las órdenes de usted su fiel y
verdadero amigo que atento besa su mano. [6689]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


México
Linares, Nuevo León junio 25 de 1857
Mi apreciable amigo:
Es en mi poder su recomendable nueve del corriente y adjunta
lista de los ciudadanos que pueden desempeñar la comisión de
88
Linares: Cruce de Guerra

diputados por nuestro Estado al gobierno general, haremos lo


que esta de nuestra parte para que salga lo más uniforme que
sea posible la elección.
Deseo a usted todas felicidades su fiel y verdadero amigo
que besa su mano. [6690]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


El Fresno, agosto 29 de 1857
Mi apreciable y respetado amigo:
Correspondo a su muy estimada del 18 del corriente manifestá-
nandole que me ha sido muy satisfactorio su contenido tanto
porque veo en ella la realización de los deseos tan generalizados
en el Estado para que usted rija sus destinos, colocándolo en
el elevado puesto de gobernador, como porque a la vez que-
do entendido de su feliz vuelta al seno de su muy apreciable
familia.
Felicito a usted con la sinceridad de un verdadero amigo por
ambos acontecimientos y en cuanto al primero no dude usted
que como siempre estoy pronto a cooperar con mis insignifi-
cantes esfuerzos para que los deseos de usted relativos a elevar
al Estado al lugar que debe ocupar entre los demás de la unión
tengan su verificativo.
Agradezco a usted infinitamente la oferta que me hace de su
elevado destino y tengo el honor de hacer yo otro tanto ofre-
ciéndome a sus órdenes en cualesquier situación que me
encuentre como su adicto servidor y fiel amigo que atento besa
su mano. [6691]

Guillermo Morales.
89
Armando Leal Ríos

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Monterrey, Nuevo León
El Fresno, septiembre ocho de 1857
Mi muy respetado y apreciable amigo:
El dador de la presente lo será (Dios mediante) mi hermano
don Vital Morales que pasa a esa capital con fin de ver si le
devuelven una mulas que le llevó el licenciado [Juan José de la]
Garza embargadas, las que cayeron en poder de las fuerzas del
Estado el día que las de Tamaulipas corrieron para el Saltillo,
entonces se le acusó un recibo ofreciéndole que luego que el
Estado las desocupara le serían devueltas.
Yo solicito por mi parte otra cosa sino es que si existen las
referidas mulas y usted lo estima de justicia le sean devueltas, y
sino usted le dará la resolución que estime conveniente.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su atento amigo y
servidor que besa su mano. [6692]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Monterrey, Nuevo León
El Fresno, septiembre 30 de 1857
Mi apreciable y respetado amigo:
Por su última que me entregó mi hermano don Vital Morales
veo que quiere cien yeguas mansas, es difícil conseguir por aquí
este número y que por consiguiente si se consiguieran le sería a
usted imposible aquerenciarlas, pues son animales muy porfia-
dos y constantes, se están yendo al lugar donde se criaron.
Solo siendo potrancas se puede asegurar que se aquerencien
donde uno quiere.

90
Linares: Cruce de Guerra

Dentro de quince días cortaré dos manadas de treinta po-


trancas cada una, de estas cuente usted con una, luego que ya
esté arreglada le avisaré a usted para que mande por ella, yo
tengo bastantes yeguas pero son mostrencas y considero que de
esta clase no le serán útiles, razón por lo que no se las ofrezco.
Sin embargo, consúltelo usted con los inteligentes y si le asegu-
ran que pueden aquerenciarlas disponga de otra manada del
último tamaño que le ofrezco. Se me presentó un recomendado de
usted en solicitud de las yeguas que se le han venido, procuraré
averiguar si hay algo y se lo pondré en su conocimiento.
Sin otro asunto me repito a las órdenes de usted su fiel y
verdadero amigo que le desea todas felicidades y atento besa su
mano. [6693]
Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León noviembre ocho de 1857
Mi querido amigo:
En carta de fecha 30 del último septiembre me dijo usted que po-
día disponer de una manada de treinta potrancas mansas, y deseo
saber a que precio me las ha de dar usted para resolver sobre el particu-
lar. Espero la contestación de usted, éste su amigo y servidor
que besa su mano. [6694]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León noviembre 12 de 1957
Mi apreciable y respetado amigo:
Doy contestación de su recomendable ocho del corriente mani-
festándole que está arreglada y puesta en pastoreo la manada de

91
Armando Leal Ríos

treinta potrancas que le ofrecía a usted, ésta considero que estará


buena para el mes de abril pues en toda ésta estación apenas se con-
serva, así es que yo entiendo que a sus intereses conviene disponer
entonces de ella, pues ahora se expone a perderla, esto no obstante
usted dispondrá lo que crea conveniente. Desde que se la ofrecí a us-
ted nunca hubo intención que me las pagara y si de que se las lleven a
usted y le salgan buenas con lo que seré en todo muy conforme.
Sin otro asunto me repito a las órdenes de usted su fiel ami-
go y servidor que atento beso su mano. [6695]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León noviembre 16 de 1857
Mi querido amigo:
Doy a usted las mas cumplidas gracias, por la manada de treinta potran-
cas, que se sirve ofrecerme en su apreciable de fecha doce del presente
a que contesto, y de que dispondré a fines de marzo o principios de
abril próximo. Quisiera saber la opinión de usted sobre si convendrá
o no aburrarla, para que sino le busque con tiempo un buen garañón.
Repitiendo a usted mi agradecimiento, me suscribo suyo
amigo y servidor que besa su mano. [6696]

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León noviembre 22 de 1857

Mi querido amigo:
Necesito comprar cosa de trescientos caballos mansos, de rien-
da y en buen estado para el servicio; los he de pagar al contado

92
Linares: Cruce de Guerra

y para eso es que los quiero con todas las cualidades dichas y
además que sean de buena edad, espero que usted sino los tiene
me los consiga entre sus amigos del Estado o de Tamaulipas,
y me avise del precio que espero sea cómodo pues son para
el servicio del Estado.
También quiero comprar cuatro o seis garañones de buena
raza, y creo que se podrán conseguir en La Gavia [Tamaulipas]
o en otra hacienda; busquémelos y dígame a como los dan.
Consérvese bueno y disponga de este su amigo y servidor
que lo estima y besa su mano. [6697]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León noviembre 25 de 1857
Mi querido y respetado amigo:
Contesto su recomendable de 16 y 22 del corriente, a la primera
quedo entendido que a fines de marzo ó principios de abril
dispondrá de su manada de treinta yeguas, para las que tengo
preparado un garañón rosillo de buen paso y de bonito corte, si
después quiere mandarlas aburrar están dispuestas para todo.
A la segunda, desde hoy me ocuparé con empeño de solici-
tarle los trescientos caballos en esta ciudad y los pueblos
inmediatos de Tamaulipas y por el correo que viene dígnese
decirme a que precio los puedo pagar para con ese conocimien-
to ratificar mi contrato con las personas que puedan entregar
algunas cantidades de consideración y que tengan las cualidades
que se solicitan. Otro tanto haré para conseguir los seis garaño-
nes; entre la caballada mostrenca que tengo los hay tan bonitos
y de tan buena clase como no será fácil conseguirse, tienen el
defecto de ser ladinos pero son muy dóciles para amansarse y
muy prontos para aquerenciarse en la manada, los más de los
garañones que tiene mi caballada son de esta clase y me han
dado buenos resultados, si por un evento no se consiguen me-
93
Armando Leal Ríos

jores y a mi gusto, usted verá si se resuelve a que le despache de


estos.
Deseo a usted todas felicidades su fiel amigo y servidor que
atento besa su mano. [6698]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León diciembre tres de 1857

Mi querido amigo:
Esperaba que usted me dijera el precio de los caballos que le
encargué, más ya que no me lo dice en su apreciable a que con-
testo, dígame si por de pronto podré disponer de ciento
cincuenta caballos a razón de doce pesos cada uno, que serán
pagados al contado.
Me repito de usted amigo y servidor que besa su mano. [6699]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León diciembre tres de 1857
Mi querido y respetado amigo:
Con empeño he procurado el número de caballos que me en-
carga con todas aquellas personas que he creído que puedan
tener, los señores Garza Valdés, don Pedro García ó don An-
tonio Leal y otros, pueden reunir de sesenta a ochenta caballos
piden unos quince pesos, otros dieciocho y otros veinte pesos
por cada uno, manifestando que están muy escasos de este artí-
culo. Por la adjunta de don Fructuoso Zozaya verá que no hay
94
Linares: Cruce de Guerra

esperanza de arreglar nada en aquella Hacienda pues quieren


veinticinco pesos por caballos cualquiera.
Creo conveniente que para lograr hacer la compra de los
trescientos caballos mande un comisionado con sus fondos, yo
le proporcionaré alojamiento y donde tenga sus comidas sin
gasto alguno y estoy seguro que comprará muy razonables ca-
ballos y quiera su precio no excediera al de quince pesos para la
oferta de estos, veré también donde los ponemos hasta que se
acabalen, aún no ocurro a solicitar en Villagrán, San Carlos y
Burgos [Tamaulipas] dígame usted el precio a que puedo ofre-
cerles pagar para asegurar los que se vendan.
Dígame si ya tienen las yeguas para los garañones que solici-
ta y mande quien los venga a escoger para la entrante semana, ó
dígame cuales son los principales colores que quiere para sí se
consiguen y se conformara con que yo los mande escoger y se los
mando ahora con el portador que es un propio que mando a
Manuel María, sino los completo le mandaré tres o cuatro.
Me repito a sus órdenes su fiel amigo y servidor que atento
besa su mano. [6700]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León diciembre siete de 1857
Voy a adoptar el medio que usted me propone en su apreciable
de fecha tres y mandaré un comisionado con los fondos nece-
sarios para comprar los caballos.
Nada me dice usted de la calidad de los garañones de La Gavia
ni de su precio; quiero saber si son de buena raza, porque deseo te-
nerla.
Lo mismo quiero saber de los de usted, pues sino son de ra-
za quizá mandaré a Tejas por garañones con el aviso de usted,

95
Armando Leal Ríos

dispondré mandar por los garañones y por el rocillo que me tiene


ofrecido.
Me repito de usted amigo y servidor que besa su mano. [6701]

Señor don Guillermo Morales


La Gavia, diciembre dos de 1857
Muy señor mío y apreciable amigo:
En contestación a su recomendable del treinta próximo
pasado digo a usted, que tengo muy pocos caballos que
estén en buen estado, a causa de los muchos que se per-
dieron en la revolución pasado, por lo que no podré
vender más; tengo cosa de cuarenta al precio de veinticin-
co pesos de los precios enterados para vender; salvo los
tres que serán los que me sobraron, los he separado para
garañones
Deseando se conserve bueno, espera sus órdenes
su afectísimo amigo y servidor que besa su mano. [6702]

Fructuoso Zozaya.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León enero cuatro de 1858
Mi querido amigo:
Para el día primero del presente tendré el gusto de dar a usted
un abrazo con motivo de mi ida a esa ciudad a conferenciar
con el licenciado [Juan José de la] Garza. Cuanto pudiera yo
decirle lo reservo para nuestra visita que me limito a anunciarle.
96
Linares: Cruce de Guerra

Consérvese bueno y disponga de este su amigo y


servidor que lo estima y besa su mano. [6703]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


El Fresno, enero 23 de 1858
Mi muy apreciable y respetado amigo:
Debo por varios ramos a la Recaudación de Rentas de ciento y
tantos a doscientos pesos, deseo pagar pero no tengo un centa-
vo en plata, lo puedo hacer con caballos mansos, dígame a que
precio me los ha de tomar el gobierno, que este sea el mejor y
menos gravoso para ambas partes, teniendo usted presente a
como dan los tres que ya tienen; ya está bien informado de lo
escaso que se haya este artículo y sin determinarle número si el
precio me fuere conveniente, entregaré cuantos pueda.
Dígnese darme su resolución lo más pronto que le sea posi-
ble para ver si me es posible evitarme las exigencias de
Tamaulipas que también debe haber menester caballos.
Sin otro asunto me repito su fiel y verdadero amigo que le
desea todas felicidades y atentamente besa su mano. [6704]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León enero 29 de 1858
Mi muy querido amigo:
Mando a usted la orden para el recaudador de esa
ciudad, para que se le admita por lo que debe el recibo que

97
Armando Leal Ríos

dará a usted, el oficial que saldrá a aquella el domingo pró-


ximo a comprar caballada, habiéndome asegurado el señor
don Manuel María que con el dinero se consiguen a quince
pesos, valor a como le tomaré los que me ofrece.
El oficial que voy a mandar llevará de dos mil quinientos a
tres mil o más pesos, recomiendo a usted prepare a los que
tengan caballada mansa por ese rumbo.
Sabe usted cuanto lo estima este su amigo y servidor que be-
sa su mano. [6705]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León febrero 19 de 1858
Mi respetado y apreciable amigo:
Hoy ha estado conmigo el señor don Diego Malo, Receptor de
rentas de esta ciudad quien me ha suplicado interponga mi em-
peño con usted a fin de que se le conceda un escribiente que le
ayude a llevar las labores de su oficina, dotándole el sueldo que
crea conveniente a dicho escribiente, lo que no ha podido con-
seguir de la Administración General por no tener orden para
ello.
Convencido yo, de las razones que tiene dicho empleado
porque he visto lo muy recargado que tiene su oficina y de que
la enfermedad que acaba de sufrir le priva en parte el que pueda
desempeñar con la exactitud que debe, me tomo la libertad de
suplicarle se digne acceder a su solicitud si la considera justa.
Vamos a otra cosa, su comisionado de caballos durante la
feria compró diez o doce y como los quiere será muy difícil que
complete un ciento, así por el precio y cualidades como por la
suma escasez.
Don Juan José de la Garza a todos los pueblos de Tamauli-
pas ha mandado solicitar caballos útiles para el servicio nada
más y pagarlos a veinte pesos y no acabalará la mitad de los que
quiere sino es con caballos nuevos, hoy anda el señor Martínez
98
Linares: Cruce de Guerra

por cerca de La Gavia, lo espero para mañana con los que con-
siga, quién sabe de los míos los que le habrán gustado serán sin
duda muy pocos porque son nuevos y como han acabado de
salir de los trabajos están maltratados.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su fiel amigo y ser-
vidor que besa su mano. [6706]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, febrero 26 de 1858

Mi muy querido amigo:

En esas circunstancias en que es preciso obrar con energía y


prontitud, porque solamente así se evitarán los violentos resul-
tados que se prometen al Estado al expedir sus años que llevan
de carrera de ejecución, como emanadas de una situación
apremiante concierne mucho que la persona que ejerza la auto-
ridad política local este adornada de aquellas indispensables
cualidades, por eso y sin que se entienda que desconfíe de nin-
guno de sus vecinos que en tiempos normales son a propósito
para el desempeño de aquel y cualquier otro cargo
público, por ser honrados y demás para qué los que los de-
signen, he nombrado a usted, alcalde primero y comandante
local de esa ciudad, cuyos cargos apenas que acepte
usted, aunque para ello tenga que hacer el sacrificio de aban-
donar sus intereses, puesto que son preferentes los de la patria
y que esta exija sus servicios en esta vez con esa eficacia, activi-
dad y energía de que tiene dadas repetidas pruebas.
Es llegada la hora de la prueba para los liberales, un esfuer-
zo nomás y la carta del 57 brillará con la luz
purísima de los principios que contiene y que por ser los
99
Armando Leal Ríos

preceptos de la justicia eterna, elevará a México a la altura a que


la tenga derivada la providencia y para lo cual le ha prodigado
los suficientes elementos que le envidian las demás naciones.
Agradecería a usted, si me extendiera acordarle la necesidad
de obrar con prontitud y entereza al ejecutar las ór-
denes del gobierno; de este cumplimiento, de ellas
depende el buen éxito de las operaciones militares y una
amigable insinuación es más que bastante para usted
que otras y por eso ha sido, muy celoso de la estricta ob-
servancia de los deberes.
Que esta comunicación sea, como encargado de los mandos
políticos y militares de esa ciudad y obrando en la
energía que le es propia es cuanto, espero de usted, su inva-
riable amigo que lo estima y atento besa su mano. [6707]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León marzo 11 de 1855
Mi respetado amigo:
Ayer se marchó de esta su enviado don Jesús Morales a recibir
la manada y potros, esta se conserva buena y en número de
veinticinco yeguas, pues aunque se cortan de treinta y cinco y
cuarenta nunca quedan de ese número porque se mueren y se
pierden, su enviado me avisan que quiere treinta y siete, ya di
orden se las entreguen como esta y además tres potros escogi-
dos de los mejores.
Me avisan que quiere llevar toda la caballada que le cuadre, no
solamente las treinta yeguas, ignoro las instrucciones o autoridad
que tenga para ello, el lunes quiere tomar el camino, la está contra-
tando con don Bruno Ríos toda mostrenca y orejana.
Su afectísimo fiel amigo y servidor que besa su mano. [6708]

Guillermo Morales.
100
Linares: Cruce de Guerra

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León marzo 19 de 1858
Mi muy querido amigo:
La oferta que por conducto de don Manuel María Morales
me ha hecho usted de dar mil quinientos pesos por los tres
mil que reconoce de obras pías, la acepto desde luego y espe-
ro que violentamente me los mande, porque tengo grande
urgencia de dinero para hacer salir la infantería. Para cubrir
a usted en todo caso le mando una orden conminándolo para
que pueda justificar que obligado por la fuerza ha hecho la
entrega.
Si algunos otros dieron algunas cantidades de la misma ma-
nera que usted lo hace ahora le suplico que las agencie
violentamente y me las mande, porque los recursos escasean
mucho; sirviéndole para eso la misma orden.
La urgencia de que salga la infantería, y el que se hagan otros
gastos, me obliga a mandar a usted ésta por extraordinario.
Me repito de usted afectísimo amigo y servidor que beso su
mano. [6709]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Monterrey, Nuevo León
Linares, Nuevo León marzo 16 de 1858
Mi respetado amigo:
Hoy salió de vuelta su recomendado el señor don Jesús Mo-
rales a quien le entregué la manada de potrancas y tres
potros garañones que escogió; además compró cincuenta
yeguas, va muy contento aunque con mucho cuidado porque
la caballada toda va pariendo. Del valor de la caballada en-

101
Armando Leal Ríos

tregó al señor [Guillermo] Morales doscientos pesos, el resto


de trescientos veinte pesos los giró a su cargo.
El señor Jesús [Morales] lleva la caballada en unión de se-
senta caballos que mandó el capitán Martínez y dos mulas que
se pidieron al Juzgado 1º para la artillería.
Me repito a las órdenes de usted su fiel amigo y servidor que
besa su mano. [6710]

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León marzo 25 de 1858

Mi muy querido amigo:


He hablado con el señor don Pedro [Juan José de la] García y
convencido de la imposiblidad en que se encuentra de poder
hacer la redención del capital de obras pías que reconoce, le he
concedido el que no se le exija y en consecuencia recomiendo
a usted no moleste a éste amigo que tanto aprecio me merece.
Sin mas por ahora me repito de usted afectísimo amigo que
lo aprecia y besa su mano. [6711]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León marzo 22 de 1858
Mi muy apreciable y respetado amigo:
El día 20 a las tres de la tarde llegó el extraordinario que trajo la
orden superior del día 19, para que remita en el acto a esa supe-
rioridad un mil quinientos pesos que debo al curato de esta
ciudad, y que así mismo exija a las demás que tengan cantidades
a censo de obras piadosas, para que impuestos de la superior
102
Linares: Cruce de Guerra

resolución cumpla cada uno con lo que le corresponda, están


anuentes, con excepción de [Manuel] Villalón que reconoce dos
mil pesos y que no tiene otro recurso para pagar que con los
alcances que le debe el gobierno.
Las cantidades hasta ahora manifestadas valen doce mil pe-
sos, faltando don Pedro J. García y quizá algunas otras
personas que por estar ausentes no han hecho su manifesta-
ción.
La hacienda de Guadalupe se sabe que tiene una Capellanía,
de capital de veinte mil pesos, el administrador ha dicho, que
ignora haya alguna finca que la hacienda reconozca y que el
apoderado que lo es don Manuel María Morales contestará
sobre el particular, este señor se haya en esa ciudad a quien en
carta particular le doy conocimiento para que si cabe en las
facultades de su poder resuelva y de lo contrario lo ponga en
conocimiento de esa superioridad. Por la comunicación oficial
relativa a la contestación que dieron los causantes se impondrá
usted que quieren estar seguros que el gobierno mande recoger
los originales de sus hipotecas que están en los archivos de los
fondos a que pertenecen sus adeudos; varios pendientes a esta
resolución, han pedido una espera de cuatro o cinco días, usted
verá de la manera que se resuelve esta solicitud y que queden
asegurados, la que espero cuanto antes acompañado de una
exigencia seria para que en el acto exhiban las cantidades que
les corresponden.
Tengo hoy en esa ciudad dos mil pesos y hoy me dirijo a
mi primo don Manuel María Morales para que los recoja y
mande entregar a la tesorería del Estado la suma de mil qui-
nientos pesos que a mí me corresponden por el capital que
reconozco.
Vamos a otra cosa: mucho trabajo me ha costado reunir ca-
ballos siquiera regulares en que montar la compañía, el correo
le informará lo que ha presenciado, a pesar de esto espero ma-
ñana (Dios mediante) quedará arreglado este negocio y aunque
con afanes pero se ha organizado una razonable compañía ma-
nifestando todos, buena disposición en servir; hasta ahora no se
ha desertado ni uno de los que forman.
103
Armando Leal Ríos

Ayer llegó de San Fernando [Tamaulipas] don Florentino


López, dice que vio poco más o menos de trescientos caballos
que le manda el señor [Juan José de la] Garza que están muy
buenos y se cree que un día a otro llegarán aquí, sin pérdida de
momento continuarán con el mayor cuidado su camino, prepa-
ra algunas herraduras para los que lleguen malos de los cascos.
Anoche se me presentó don Pedro Hinojosa, se manifiesta
descontento con el señor [Juan José de la] Garza así como lo
están de los tamaulipecos que están aquí. Cuenta una tela bien
tejida de sucesos que le han pasado, quien sabe lo que será esta
persona, me manifestó que iba con el objeto de ofrecer sus
servicios al Estado, él es un hombre que debe saber porque ha
servido a diversos cuerpos aunque hoy no lo reciban los de su
casa.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su muy atento ami-
go y servidor que besa su mano. [6712]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León marzo 25 de 1858
Mi apreciable y respetado amigo:
A las ocho de hoy llegó su extraordinario que mandó, lo deten-
go hasta por la mañana para avisarle cuanto dinero mando mío
y de las demás personas esto lo llevará el capitán Martínez que
llegó esta tarde y saldrá mañana mismo, tomaré todo empeño
en reunirle cuanto dinero se pueda de los dineros a censo de
obras pías.
La Compañía por no haberse acabado de herrar ayer la caba-
llada no solió, hoy está completamente arreglada, ayer pasó
revista y por la mañana emprenderá su marcha.
Sin otro asunto soy a sus órdenes su fiel amigo y servidor
que besa su mano. [6713]
Guillermo Morales.
104
Linares: Cruce de Guerra

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León marzo 29 de 1858
Mi querido amigo:
Acuso a usted recibo de sus gratas fechadas 22, 25 y 26 del
actual, quedando impuesto de cuanto me dice y dándole las
gracias por la actividad y patriotismo que ha desplegado en
las presentes circunstancias, contribuyendo de una manera
poderosa y eficaz para la defensa de la causa nacional.
Sin más por ahora me repito de usted afectísimo amigo y
servidor que lo extraña y besa su mano. [6714]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León marzo 26 de 1858
Mi apreciable y respetado amigo:
Como no tenía fondos de que disponer de pronto más de los
míos para atender en toda la organización de la compañía y
cumplimentar las superiores órdenes, di ayer quinientos pesos y qui-
nientos que recibí de la recaudación para socorro, forrajes y el
resto para mis setecientos que le debía haber mandado para
saldo de mi cuenta lo gastaré hoy mismo y quizá me faltará.
Dije a usted ayer que hoy salía la compañía, no sucedió así
porque hoy por la mañana se perdió lo más en la ceremonia de
la bendición de la bandera, una arenga a la compañía y otras
varias quisiera pero esta completamente lista y por la mañana se
podrá en marcha.
Esta noche sale el señor capitán Martínez y de mañana remi-
tiré los caballos y mulas que aquí deja de los que compró.
Por no demorar los correos no escribo al señor don Jesús,
limitándome con remitirle novecientos cincuenta pesos únicos
que recogí hoy muy tarde de los señores don Andrés Leal y don
105
Armando Leal Ríos

Francisco Garza Valdés, quedando al empeño de exigir a los


demás causantes, quienes no dejan de presentar mil dificultades
con motivos de escasez, sea lo que fuere lo que reúna se lo
remitiré en el acto.
Me repito su fiel amigo y servidor que besa su mano. [6715]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León marzo 29 de 1858
Muy apreciable y respetado amigo:
El señor José Sotero Noriega acaba de ofrecerme entregar ma-
ñana el dinero luego que lo reciba se lo remitiré.
El día 27 a las seis y media de la mañana salió la compañía
perfectamente habilitada de todo llevan los ochenta y cuatro
hombres, excepto once caballos para que el sobrante lo entre-
guen a quien se le ordene el capitán, después llevare este
sobrante para que no sufriera retardo en su marcha.
Me repito a las órdenes de usted su fiel amigo y servidor que
besa su mano. [6716]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León abril tres de 1858
Mi muy respetado amigo:
En contestación a su recomendable 31 próximo pasado, digo a
usted que para ahora habrá recibido los seiscientos cinco pesos
106
Linares: Cruce de Guerra

que pagó [José Sotero] Noriega y le remití en comunicación


particular con el policía Francisco Alameda.
He hablado con don Pedro José García sobre el valor del
agua que solicita y su determinación de mandarle entregar dos-
cientos diez pesos que es a razón de quince pesos el surco,
poco más o menos podrá ser su valor, queda entendido que se
corrieron los trámites que están mandados y confío que así por
el derecho que le asiste como por el anticipo que hace de esta
cantidad será atendida de preferencia su solicitud considerán-
dose a buena cuenta esta suma si resolviere ser mayor el
importe de la Merced.
La compañía camina hasta Raíces sin novedad, con el au-
mento de dos jóvenes que voluntariamente salieron de esta
ciudad a incorporársele y prestar sus servicios. El capitán ha
devuelto algunos caballos que ha considerado débiles, se los he
mandado entregar a sus dueños rebajándoles de la lista en que
constan todos los que proporcionaron caballos.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su fiel amigo y ser-
vidor que besa su mano. [6717]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León

Monterrey, Nuevo León abril 10 de 1858


Mi querido amigo:
Tengo a la vista sus apreciables del tres y siete del actual y ya de
oficio le digo a usted lo relativo al negocio de la Hacienda de Gua-
dalupe, recomendándole a usted que cuanto antes me mande
los caballos y mulas que proporcione su administrador por
cuenta de lo que debe entregar por el capital y réditos que co-
rresponde a esa hacienda, pues tengo que mandar caballos a
107
Armando Leal Ríos

Río Grande [Coahuila] y los comisionados está aquí hace mu-


chos días esperando la llegada de los que me ha
ofrecido [Juan José de la] Garza y de los que no tengo noti-
cia, suplicándole a usted a la vez averigüe lo que hay de cierto
sobre esos caballos y me de aviso.
Urgale usted al administrador de Guadalupe, que
sino tiene dinero, puede vender semillas y dar caballos bue-
nos para la campaña a precios convenientes, así
como mulas de silla y de tiro que deseo tener cuanto antes,
haciendo sus ventas el administrador de modo que
no se perjudique la finca, que no es mi ánimo causarle nin-
gún mal. Lo que interesa es reunir recursos y
caballos o mulas útiles porque de hoy al martes debo recibir
la noticia de haber llegado a Brazo de Santiago las
armas que espero y es indispensable hacer un movimiento
rápido para dejar bien puesto el nombre del Estado
que ha logrado poner una fuerza respetable a la vanguardia
contra lo que esperaban los reaccionarios.
Respecto a las quejas de usted sobre los caballos, debe
usted disculparme porque habiendo sabido que los últi-
mos caballos que se trajeron fueron conducidos de
[Monte] Morelos a Cadereyta a media rienda y de esta
última ciudad a Monterrey los ensillaron los policí-
as, me monté en cólera al ver que llegaron inútiles
para el servicio, lo que me trastornó mis combina-
ciones y le causó una pérdida al Estado. Todo esto me
molestó y me trajo a la memoria lo de las yeguas;
más usted debe estar convencido del aprecio que le ten-
go, de la confianza que me merece y de la persuasión en
que estoy de que usted es de los hombres de más activi-
dad, de más celo y patriotismo con que cuenta el
Estado para salir airoso en la empresa que ha acometido
para salvar a la Nación, o por lo menos afianzar
de una manera estable los derechos que le correspon-
den a la frontera.
Consérvese bueno y disponga de este su amigo y servidor
que besa su mano [6718]
108
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León abril siete de 1858
Mi muy querido y apreciable amigo:
Grande ha sido la pesadumbre que me ha causado la lectura de
los párrafos de su recomendable del tres del corriente, relativa
al mal estado en que llegaron los sesenta caballos que fueron en
unión de las ochenta yeguas, esta providencia que es a la que se
atribuye el perjuicio, fue dictada por uno de aquellos actos de
gran disposición en cumplir las órdenes superiores sin pérdida
de momento, no estimulado solamente por los deberes de Juez,
sino por que hay en mi alma una cosa que me arrempuja para
ayudarlos y quisiera tener un semillero de recursos con que
favorecer todos sus pensamientos y contribuir de una manera
positiva al desarrollo y perfección de la importante causa que
nuestro Estado sostiene, pues estoy persuadido que en esta vez
tenemos un compromiso de superior magnitud a cuantos he-
mos pasado y su desenlace si es favorable elevará al Estado a
la suprema altura de engrandecimiento sobre el mejor de los de la
república y si es adverso, tendrá un porvenir funesto para todos
sus ciudadanos, principalmente para los que obran con con-
ciencia pura, estos son mis convicciones, y de que para lograr lo
primero y evitar lo segundo, necesitamos trabajar con todo
empeño, arrostrar toda clase de dificultades allanándolas con
toda prontitud, estos son mis verdaderos sentimientos y de
quien así piensa y con su conducta lo ha demostrado.
Nunca puede usted suponerle descuido ni que intencional-
mente haya dejado de librar, con toda energía las órdenes
necesarias para que condujeran la caballada con el mayor cui-
dado pero para que fueran juntos los caballos y yeguas sucedió
este caso: a tiempo que el señor don Miguel Martínez llegó a la
estancia de La Vaca con los sesenta caballos estaba por hacer
jornada don Jesús Morales con sus ochenta yeguas, reunieron
ambas caballadas y vinieron a dar temprano a la hacienda de
Camacho, a donde les proporcioné un buen potrero y fue per-
sonalmente a ver de que manera continuaban para delante, el
señor Morales, me manifestó que iba muy bien, y me ofreció
109
Armando Leal Ríos

llevar los caballos y mulas que mandé con el mayor cuidado ha-
ciendo jornadas muy cortas y durmiendo en los mejores potreros,
fiado en esa promesa mi principal cuidado fue el de proporcionarle
los mejores policías en el número necesario para que condujeran la
caballada recomendada a estos en lo particular llevaran cuida-
dosamente aquellos intereses sin tocar el pelo de un caballo, a
su vuelta me informaron que habían sido entregados en muy
buen estado; y quien sabe si después de un mes de estar en esa
no habían tenido muy buen potrero y se hayan atrasado cosa muy
fácil en esta estación del año, principalmente cuando por motivo de
la seca que se está sufriendo no pudo ir la caballada muy gorda;
de la certeza de todo lo dicho lo puede informar el mismo se-
ñor Martínez, a quien le consta de vista mis procedimientos.
Los últimos dieciocho caballos y mulas no los llevarán los
policías hasta esa ciudad porque sus remontas estaban fatales, y
muy a mi pesar encargué su conducción al señor alcalde 1º de
Montemorelos, operación que no volveré hacer para que si los
policías o vecinos que yo mande no cumplen bien, respondan
de los perjuicios que por su descuido causen.
Debe usted vivir persuadido que no omito empeño en el
mejor cumplimiento de mis deberes como juez, que si alguna
vez puede alguna de mis disposiciones perjudicar o ser perjudi-
cada será en aquello que no esté al alcance de mi vista para
evitarlo.
Deseo a usted toda clase de felicidades, como su fiel amigo
servidor que atento besa su mano. [6719]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León abril siete de 1858
Mi muy apreciable y respetado amigo:
Ayer hice venir al administrador de la hacienda de Guadalupe,
le notifiqué la orden y exigí su cumplimiento, me ha suplicado
110
Linares: Cruce de Guerra

lo espere por término de cuatro días que va a ocurrir con Ma-


nuel María [Morales] que es el apoderado de la hacienda para
que ocurra con usted, ó que le amplíe el término preciso
para darle conocimiento de todo a don Manuel Gargollo [due-
ño de la hacienda de Guadalupe] y esperar su resolución, esto
es muy dilatado y por ahora convendrá que den la cuarta parte
y se sume a lo menos, sino tienen posible para lo demás.
Ayer se fijaron los avíos relativos a la última superior resolu-
ción sobre las fincas laicas y en este asunto procederé con
empeño porque es el recurso pronto que se debe contar.
Esta tarde voy a repartir las órdenes de ustedes para la mu-
nicipalidad de Galeana [6720]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León abril 12 de 1858
Pongo a usted esta solo con el objeto de recomendarle a don
Juan Valdés, porque su señora que pertenece a una familia a
quien yo aprecio, me ha manifestado que teme se le moleste.
Suplico a usted por lo mismo vea a ese señor con consideración
evitándole cualquier motivo que lo moleste.
Le encargo a usted que si me pudiera conseguir un pavo real
macho y una hembra me los mande con cuidado, para hacer un
obsequio.
Sin mas por ahora quiero desearle felicidades, me repito su-
yo afectísimo amigo y servidor que besa su mano.

Aumento. Le recomiendo a usted no cobre nada al padre


Margain, hasta que yo le avise; pues va a hacer una solicitud al
gobierno. [6721]

111
Armando Leal Ríos

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León abril 14 de 1858
Mi muy apreciable y respetado amigo:
Doy contestación a su recomendable diez del corriente, mani-
festándole que hasta hoy daré principio al negocio de la
hacienda de Guadalupe, pues hace una hora que se me pre-
sentó el administrador de su resultado le daré oportuno aviso.
La solicitud de [Manuel] Villalón en la parte de los once días de
agua de los caños ha causado a todos estos vecinos una alarma y
han presentado un escrito fundando sus derechos y pidiendo la
derogación de la providencia en que aparece admitida la solicitud
de Villalón, los fundamentos parecen buenos y que tienen justicia
ya los verá.
Don Antonio Garza Benítez dueños de la mitad del agua
que solicita Villalón en los Lampazos me ha ofrecido en lo par-
ticular dar quinientos pesos al contado por la parte de agua sin
caballerías de tierra y un sitio de ganado menor en los mismos
puntos que Villalón determina en su solicitud al nordeste de
esta ciudad, si el referido [Manuel] Villalón no compra, el ofre-
cimiento es razonable en razón de que el agua es muy insegura
y el terreno poco útil aunque todo esto a mi juicio puede valer
sin sitios en ochocientos pesos, verá si nos resolvemos a vender,
Villalón no tiene dinero y éstos hasta tienen interés en el negocio.
En comunicación oficial consulto a esa superioridad sobre
algunos puntos relativos a la enajenación de fincas; el principal
debe ser si se admite una parte del valor que representan a ra-
zón de un seis por ciento ó se exige que lo paguen todo, esto
último creo la más conveniente pues con excepción de muy
pocas personas todos tienen modo de hacerlo, así se atenderá
algo la situación porque si se les admite parte, nada se adelanta.
Ninguna noticia he tenido de que vengan los caballos de
Tamaulipas, sin duda están tan atrasados como nosotros.
Hay varios de los que tienen que desamortizar sus fincas que
ofrecen mulas mansas buenas a mi satisfacción, aunque no muy
gordas. Dígame si se las admiten, les he dicho que el gobierno
no pasa de pagarlas de treinta pesos estando buenas.
112
Linares: Cruce de Guerra

Todos los dueños de fincas andan empeñados buscando di-


nero hasta ahora, ninguna ha pagado, ocurrí con estos señores
a que dieran las trescientas fanegas de maíz para Galeana, se las
ofrecí pagar a doce y me han manifestado que ni tienen. Ya
urgido por la lamentable situación en que dice el alcalde de
Galeana que está aquella población por la falta de este artículo,
me resolví a darlo del mío al precio de dos pesos fanega; su
importe se me pagará y descontará de lo que tenga que pagar al
Estado por contribuciones de otras cosas, suplicándole si fuere
de su aprobación se me de el recibo correspondiente.
Cumpliré con los encargos de su recomendable de 12 del co-
rriente y veré si se consiguen, lo avisaré.
Hoy me hablan de El Canelo que tienen allí setenta y tres
caballos en muy mal estado, ya oficialmente doy conocimiento
de este asunto para ver si se mandan traer a que se repongan,
devolviéndoles a los buenos los que aquí vienen o que se cui-
den como usted lo suponga.
Soy a las órdenes de usted su fiel amigo y servidor que besa
su mano. [6722]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León

Monterrey, Nuevo León abril 16 de 1858


Mi muy querido amigo:
Han despachado todos los negocios que me mandó usted con
su apreciable de fecha 14 del actual, excepto el relativo a [Ma-
nuel] Villalón, porque no vino a este negocio. Le di el trámite
que usted ha visto, esperando el resultado que ha producido,
porque no puede ser justo que se pague a un empleado con
preferencia a los demás, no obstante de que Villalón alega po-
113
Armando Leal Ríos

derosas razones. Si don Antonio Garza Benítez da seiscientos


pesos por la parte que ha ofrecido, quinientos puede usted dár-
selo y mandármelos, que aquí arreglaremos el documento para
reconocer esa cantidad al Ayuntamiento.
Se devuelve la solicitud relativa a tierras de ejidos para que
se obre conforme a la Ley que es bien clara y comprende los
diversos casos que pueden presentarse.
No vuelva usted a consultarme porque se pierde
el tiempo y la situación es tal que no debemos perder ni mi-
nutos; pues ya comenzamos a obrar, [Juan] Zuazua
busca al enemigo y debe haberse trabado algún combate; las
armas han empezado a llegar y ya verá usted que no debemos
perder el tiempo. Conjuro a usted por lo mismo a nombre de
la Patria, para que se proceda en todo con actividad
y al efecto lo faculto ampliamente, exigiéndole solo resulta-
dos y resolviendo usted las dudas y dificultades
atendiendo solo al fiel resultado y solo resultados, espero
de usted debiendo consistir estos en dinero, caballos y
mulas mansas en buenas carnes. De manera que usted re-
solverá si se admite la mitad en dinero y la otra en
animales, o un poco más de uno o de lo otro; el caso es que
me mande usted y cuanto antes dinero, caballos y mulas man-
sas en buenas carnes.
Sin mas por ahora me repito suyo amigo y servidor que besa
su mano. [6723]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León abril 21 de 1858

Muy apreciable y respetado amigo:


Pongo este propio sin más objeto que darle conocimiento que a
las ocho de la mañana de hoy, salieron de ésta sesenta mulas y
sesenta y ocho caballos de la Hacienda de Guadalupe; más seis
114
Linares: Cruce de Guerra

mulas mansas y dos caballos con que pagó un individuo una


finca que desamortizó.
Como verá usted en una de mis últimas comunicaciones ofi-
ciales le pedí al administrador de Guadalupe, en abono a lo que
debe la Hacienda por la Capellanía, ciento cincuenta mulas y
doscientos caballos, me ha ofrecido que el resto que le falta lo
pidió a las estancias de San Fernando y que vendrán pronto
luego que lleguen las remitiré en unión de las más que se consigan.
Son fatales los males que estamos sufriendo con la seca, la
caballada, vacas, usted está poniendo y se están muriendo; en
muchas partes han adoptado el medio de matar la cría para ver
si se salva el vientre por otra parte las enfermedades del triste
mal de lengua y otras muchas epidemias están concluyendo con
los animales. Mucho me temo que la mayor parte de la caballa-
da no sea útil por no estar gorda pero no hay mas de que se
cuide mucho y se le dé bastante maíz, que se reponga es lo me-
jorcito que se consiguió.
Luego que [Manuel] Villalón supo por [Antonio] Garza Be-
nítez que había ofrecido quinientos cincuenta pesos por el agua
y tierra de los Lampazos se esforzó en buscar dinero y por mas
que trabajo ha logrado reunir trescientos cincuenta pesos y
habiendo despachado el negocio estoy pendiente de su solu-
ción.
Me repito a sus órdenes su fiel amigo y servidor que besa su
mano. [6724]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León mayo cinco de 1858
Muy respetable y apreciable amigo:
Con el portador don Rafael Aldape que conduce el dinero del
préstamo con dos vecinos que lo acompañan, remito a usted
115
Armando Leal Ríos

los cincuenta pesos que quedó restando don Antonio de la


Garza Benítez, para el saldo de los quinientos cincuenta pesos,
valor del agua y tierra que se les vendió.
Me repito a las órdenes de usted su fiel amigo y servidor que
atento besa su mano. [6725]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Monterrey, Nuevo León mayo diez de 1858
Mi querido amigo:
Contesto sus dos apreciables de fecha cinco del ac-
tual, habiéndose recibido con una de ellas los
cincuenta pesos que quedó restando don Antonio Garza Bení-
tez.
Una equivocación originó el oficio de que usted se que-
ja y considero que con esta explicación quedará usted
satisfecho; pues no puede usted persuadirse de que haya
habido otro motivo para haberse dicho lo que tanto le ha
podido, sabiendo que lo aprecio como un verdadero ami-
go.
Estoy convencido del sacrificio que hace usted con perma-
necer al frente del Ayuntamiento de esa ciudad, más no dude
que por unos días mas continuará en ese puesto, mien-
tras concluye todos los arreglos para ponerme en marcha, a
mi salida para el interior, que verá dentro de breve
tiempo daré a usted la licencia que desea y que considero muy
justa.
Sabe usted que lo estima, quien se repite suyo afectísimo
amigo y servidor que besa su mano. [6726]
116
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Monterrey, Nuevo León
Linares, Nuevo León mayo cinco de 1858
Muy apreciable y respetado amigo:
Hoy han sido puestas en camino para esa capital ciento dos
mulas, con cuyo número completa la Hacienda de Guadalupe,
ciento cincuenta, entre estas van cinco o seis mansas. En lo
general la mulada es de lo mejor que se puede conseguir y no
será fácil reunir otro número como éste, a lo menos por estos
alrededores.
Me presentó el administrador ciento cuarenta caballos de
los que solamente se tomaron cincuenta y cinco, el resto se le
volvió por flaco con orden de que lo cuidase por si el gobier-
no quisiera disponer de ellos en ese estado.
Por la rigurosa seca que aquí sé esta sufriendo es-
ta toda la caballada en ese estado insolvente, tengo
dictada las órdenes necesarias para ciento cincuenta caballos
que presentarán entre el día seis, siete y ocho si todos o más
estuvieren buenos los remitiré en el acto.
Hecho el reparto del préstamo de dos mil pesos ha sido
necesario una exigencia muy seria para reunir cerca de mil
cuatrocientos pesos que le remito. Los ciudadanos todos
manifiestan una grande disposición en cumplir, me cons-
tan todos sus esfuerzos pero han sido estériles por que no
hay ni quien compre algo de lo que venden ni quien les
preste, esto sucede entre ciudadanos disponibles y pudo-
rosos, que se comprenden de vergüenza, pude reunir algo
más de lo que remito hoy, lo que resta lo mandaré luego,
no entienda usted que de mi parte haya disimulo para exi-
gir las obligaciones a cada persona sea de la clase y
condición que fuere sino que se observa en una escasez de
numerario en todos, así como en obsequio de la justicia
debo manifestarle que la mayor parte de los ciudadanos
abundan en deseos de servir y otros que son tardados con
que se tiene que batallar, pero esto sucede en todos los
pueblos, nada tiene de particular.
117
Armando Leal Ríos

Muy sensible me ha sido ver la comunicación oficial de dos


del corriente en que se me incrimina que yo he sido un embara-
zo para la pronta marcha de las fuerzas que están preparadas, y
lo de que ofrecí que las ciento cincuenta mulas de la hacienda
de Guadalupe, serían mansas o de silla, con excepción de unas
cuantas cerreras, redacción que en cierta manera perjudica mi
autoridad, pues las personas a quienes se ha ordenado den ca-
ballos, quieren satisfacerse de la orden y encuentran según la
comunicación que yo les he proporcionado el perjuicio de que
den caballos cuando sin una exigencia en esos términos se su-
pone de entrada necesita la superioridad.
Hace tres meses que abandoné completamente mis inter-
eses, estoy perjudicándome extraordinariamente y como usted
no ignorará, tengo mi crédito comprometido en peligro de su-
frir un grave mal, todas estas razones me hacen suplicarle a
usted me permita retirarme a atender mis intereses y compro-
misos, esto quiero que suceda sí usted no supone que pueda
aquí haber algún perjuicio pues comprendo muy bien nuestra
situación y nuestros compromisos pero gracias a la providencia
con el triunfo obtenido por nuestras armas en Zacatecas creo
que adelantamos bastante y es de esperar se libre algo nuestra
situación.
Sin otro asunto le desea a usted toda clase de felicidades su
atento servidor y amigo que besa su mano. [6727]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León mayo 13 de 1858
Mi muy apreciable y respetado amigo:
La invariable y acreditada conducta de honradez y buen com-
portamiento de Francisco Ochoa, administrador de la hacienda
de Vaquería y sus anexos, ha sido visto y observado por todas
118
Linares: Cruce de Guerra

las personas con el aprecio que se merece, y no con poca sor-


presa he sabido que acusado ante el superior gobierno de
ladrón de bestias se ha librado orden para su aprehensión; sin
meterme en observaciones que creo innecesarias sobre el ori-
gen que haya movido a los acusadores, puedo a usted asegurar
bajo la más buena fe que el señor Ochoa está muy distante de
abrigar tan innoble conducta y por el contrario, enemigo siem-
pre de todo aquel que tome lo ajeno, los persigue con excesivo
empeño valiéndose de las autoridades para que lo auxilien
cuando lo cree prudente.
Lo cierto de esta conducta que es muy pública me determina
a dirigirle la presente, suplicándole a nombre de nuestra amis-
tad se digne concederle al señor Ochoa que no se presente ante
usted conducido como un criminal, que se le permita entrar a esa
ciudad libre y estoy seguro que cuando oiga usted sus explicacio-
nes se satisfacera que es todo un hombre de bien y de que
únicamente sus crueles enemigos le proporcionan este agravio a
su conducta, entonces quedará usted tranquilo por haber libe-
rado a un hombre honrado de que sufriera la vergüenza de
entrar preso ante el respetable pueblo que lo conoce y aplicara
el castigo que demandan los falsos calumniadores.
Diré para su conocimiento que merecedor de la confianza
general el señor Ochoa ha sido siempre para estos pueblos una
columna avanzada que ha procurado librarnos de varios perjui-
cios de que hemos estado amenazados, como sucedió en
tiempos que [José María] Carvajal con sus filibusteros amena-
zaban estos pueblos, de manera que cuando una partida se
quisiera internar al territorio del Estado, era el primero que
comunicaba a la autoridad sus movimientos todos estos son
hechos que eternamente hablaran a favor del referido señor
Ochoa y que la superioridad recordando lo pasado debe conce-
der un mérito que merece.
Continuamente ha tenido el señor Ochoa que batallar con
los diversos bandos de Tamaulipas que le han ocasionado a los
intereses de la Hacienda innumerables perjuicios y que hasta
ahora está sufriendo sin resultados y por esto también ha sido y
será víctima, concluyo repitiéndole mi suplica como favor espe-
119
Armando Leal Ríos

ra recibir, su fiel y verdadero amigo que le desea todas felicida-


des y atento besa su mano. [6728]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León mayo 30 de 1858
Muy apreciable y respetado amigo:
El 26 por la tarde recibí, la orden para que mandara cuarenta
hombres, ayer por la mañana, salieron en unión de nueve de
Hualahuises. Tenía aquí cuarenta y tantos fusiles buenos,
como he estado oyendo decir que faltan armas después que
fueron cuarenta y dos hombres armados, no habiéndolos
provisto de lo mas que les falta, por no demorarlos y que
estén en esa capital el día dos lo más tarde.
Para evitar un desorden entre la fuerza en el camino dispu-
se la condujera hasta entregarla don Marcelo de la Peña,
hombre de cuidado, le di para sus gastos dieciséis pesos.
Tomé empeño en que fuera un joven de capitán
de los cincuenta hombres pero apenas se puede us-
ted figurar lo que lloraban sus madres y ellos, que
por fin prescindí de mi propósito y mande un joven don Filo-
meno Plaza con el carácter de teniente.
Con el referido don Marcelo remito los trescientos pesos
de la finca que se le vendió a [Andrés] Leal y [Anto-
nio] Garza.
Sin otro asunto y deseándole toda clase de felicidades, me
repito a sus órdenes su fiel amigo y servidor que besa su mano.
[6729]

Guillermo Morales.
120
Linares: Cruce de Guerra

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León.
Monterrey, Nuevo León junio siete de 1858
Mi muy querido amigo:
Contesto la apreciable de usted de fecha 30 de mayo último,
habiendo quedado satisfecho de su contenido. No contesté a
usted antes ni por conducto del señor Peña por la multitud de
negocios y atenciones que me rodean.
Consérvese usted bueno y disponga de este su amigo y ser-
vidor que lo estima y besa su mano. [6730]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León junio uno de 1858
Muy apreciable y respetado amigo:
Don Manuel Leal, padre del joven José María a quien ha determi-
nado usted marche a prestar sus servicios en una de las Brigadas
que están para salir a incorporarse al Ejército del Nuevo León, se ha
empeñado en que le dirija a usted la presente recomendándole muy
particularmente a su hijo, de cuyo aprovechamiento en su carrera,
dependen sus futuras esperanzas; le he manifestado que considere
por demás esta recomendación y que debe esperar confiadamen-
te que el cuidado de parte de usted, les proporcionara a éstos
jóvenes la ocasión de que concluyan su carrera, quiera con mejo-
res resultados que los que hasta aquí podrían esperar; sin embargo,
de ser muy conforme con lo dispuesto por usted siempre ha queri-
do que por mi parte contribuya dirigiéndole la presente, con
el fin de recomendarle al referido joven en el aprovechamiento de
todo aquello a que lo considere apto por su capacidad, cuyo
encargo cumplo con gusto repitiéndome a sus órdenes de fiel y
verdadero amigo que atentamente besa su mano. [6731]
Guillermo Morales.
121
Armando Leal Ríos

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León

Monterrey, Nuevo León junio 11 de 1858


Mi querido amigo:
Al señor Manuel Leal le escribí por uno de tantos extraordina-
rios que he despachado a Victoria, manifestándole que su hijo
José María iba a marchar a la campaña, asegurándole que no
perdería la carrera que tiene emprendida, ni el tiempo que se
ocupará en servicio del Estado, porque el gobierno tendrá buen
cuidado de que se les abone ese tiempo, y aún de mejorar su
condición. Sin duda esa carta no la ha recibido ese amigo, y
suplico a usted le muestre esta para tranquilizarlo y para su sa-
tisfacción.
Queda contestada la apreciable de usted de fecha primero
del actual, y en espera de sus órdenes este su amigo y servidor
que besa su mano. [6732]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León junio 13 de 1858
Muy apreciable y respetado amigo:

Tengo necesidad de pasar unos días en esa ciudad por unos


negocios, a más si usted cree que no haya perjuicio en conce-
derme una licencia por diez días le agradeceré mucho este
favor.
Don Trinidad Gutiérrez de Lara es el juez a quien yo susti-
tuiré, éste señor puede quedar provisionalmente o como usted
lo determine.
Son las doce de la noche, recibí el adjunto pliego del gobier-
no de Tamaulipas y tres impresos, por ellos vemos a don Juan
José de la Garza trasladado a Matamoros, sin duda iba a procu-
122
Linares: Cruce de Guerra

rar organizar más fuerzas y pues hasta ahora dicen que no son
muchas las remudas.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su fiel amigo y ser-
vidor que besa su mano. [6733]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León julio dos de 1858
Muy apreciable y respetado amigo:
Por las exigencias del señor don Trinidad Gutiérrez de Lara, su
temor en las circunstancias y las amenazas o protestas de don
Manuel Gargollo [dueño de la Hacienda de Guadalupe] por los
intereses de que se han dispuesto, y de cuya comunicación daré
a usted oportunamente conocimiento y no querer el señor Gu-
tiérrez en ninguno de los asuntos pendientes conocer, me
obligaron esos motivos a recibir el Juzgado por un poco de
tiempo, pues no se me cumplió el deseo de ir a ver mis queha-
ceres que todo el año han estado casi abandonados.
Mi primo Manuel María [Morales] tiene encargo para procu-
rar arreglar la parte que me toca a mí libranza, quizá para
cuando reciba esta ya habrá terminado este asunto.
Me repito a las órdenes de usted su fiel y verdadero amigo
que besa su mano

Guillermo Morales.

Aumento. Ayer hicieron jornada sus yeguas, hoy estarán en


[Monte] Morelos. Las llevan dos mozos míos y sus enviados.
[6734]
123
Armando Leal Ríos

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Monterrey, Nuevo León julio 16 de 1858
Mi muy señor mío y amigo de toda mi consideración y respeto:
Los deseos muy grandes que me animaban por obsequiar su
muy apreciable de 24 de junio próximo pasado, contrariados
por las circunstancias apremiantes en que me encontró su ya
citada, con motivo de tener que cubrir en el tiempo que ha
transcurrido a la fecha algunos compromisos anteriores al que
contraje con usted para la compra de armamento para el Esta-
do, me hicieron dilatar su contestación hasta no tener el gusto
de hacerlo remitiendo a la Tesorería, cuando menos, la tercera
parte de mi asignación.
Hoy que, aunque con sacrificio he podido superar las difi-
cultades que se me presentaron para la concesión de fondos,
tengo el placer de contestar a usted, manifestándole que hoy
mismo quedan enterados en la expresada oficina ($500.00) qui-
nientos pesos, como la tercera parte de lo que tengo afianzado,
quedándome el sentimiento que mi oferta no haya podido ser
mas grande desde un principio, ni menos exhibir de pronto
mayor cantidad que la que dejo enterada.
Con este motivo me repito de usted como siempre su afectí-
simo servidor y amigo que atento besa su mano. P.p. de don
Guillermo Morales. [6735]
Manuel María Morales.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


El Fresno, octubre 27 de 1858
Muy apreciable y respetado amigo:
Sin ninguna de sus favorecidas a que referirme le dirijo la pre-
sente para saludarlo, pues considero que sus atenciones no le
habrán permitido escribir a sus amigos, dedicado exclusivamen-
124
Linares: Cruce de Guerra

te en sus tareas a la reparación de la pérdida que ha sufrido el


Estado, el día 29 del próximo pasado septiembre en el Ahualul-
co, digna ciertamente de sentirse, pero que considerando
nuestra situación y el porvenir debemos empeñosamente pro-
curar por cuantos medios sean posibles el que el Estado
conserve toda la respetabilidad que augure su existencia, y aleje
el temor de que pueda ser invadida por los religionarios, para
esto son hoy necesarios nuevos esfuerzos de parte de todos los
ciudadanos, quienes comprendiendo los incalculables males que
resultarían de que ocuparan nuestros pueblos el enemigo, de-
bemos esperar que contribuirán de manera más positiva con
sus recursos, satisfechos también de que toda obra comenzada
demanda su conclusión, pues de lo contrario la pérdida es infa-
lible.
Se necesita a más de esto que usted como antes con
la expresión sentida en sus escritos promueva y resta-
blezca la acción activa y enérgica única que da los
positivos resultados, calculando en todos los medios
adaptables hasta conseguir el fin propuesto. Estas ideas
quizá convendrán a muchos y se detendrán en manifes-
tarlas porque algunas veces pesan más los intereses
particulares que el bien público, pero este es un embara-
zo allanable en la práctica.
Sin otro asunto deseo a usted toda felicidad, su fiel amigo
y servidor que atento besa su mano.

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León noviembre ocho de 1858
Mi muy querido amigo:
Contesto su apreciable, de fecha 27 del último octubre que llegó
a mi poder el día de ayer.
125
Armando Leal Ríos

Estoy en un todo de acuerdo con usted y para dirigirme a


los pueblos he dejado que corran la multitud de especies y co-
mentarios sobre los últimos sucesos, a fin de que calmados los
ánimos se reciban mis conceptos con toda la tranquilidad nece-
saria para que los puedan apreciar; pues se que hay grandes
disposición en los soldados para volver de nuevo a la carga,
pero entre tanto me ocupo de los medios de arbitrar recursos
con el objeto de estar preparado cuando llegue la ocasión.
La desgracia que sufrimos era una consecuencia necesaria
del estado que guardábamos y ha servido para que los soldados
vinieran a ver a sus familias, y descansaran un tanto de las fati-
gas de la guerra. No dudo de la buena disposición de los
pueblos, y de la de mis amigos y amigos de la causa, y creo que
cuando convenga moverse a todos los encontraré listos y pron-
tos a marchar a donde nos llame la salud del Estado y de la
nación.
Sin más por ahora me repito suyo afectísimo amigo y servi-
dor que besa su mano. [6736]

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


El Fresno, noviembre 16 de 1858
Mi muy querido y respetado amigo:
Impuesto del contenido de la que le adjunto de nuestro amigo
Francisco Antonio Doria, en que recomienda al señor licenciado
don León Guzmán y desea que con anticipación sepa que este señor
se dirige a esa capital con negocios de importancia, le pongo un
propio a don Fabián García para que sin demora le remita la pre-
sente. Dios quiera que este comisionado traiga una misión
buena y que le sea a usted muy conveniente.
Desea su felicidad su fiel amigo y servidor que besa su ma-
no. [6737]

Guillermo Morales.
126
Linares: Cruce de Guerra

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León

Villagrán, noviembre 15 de 1858


En este momento acaba de pasar por esta Villa, para Monterrey
y con negocio de bastante importancia para la causa nacional, el
señor licenciado don León Guzmán.
Se lo participo con brevedad, para que del mismo modo
lo haga usted a nuestro don Santiago [Vidaurri] a fin de que no lo
sorprenda con su llegada a aquella ciudad; por lo mismo, no
dudo de su actividad lo hará así, procurando recomendar a di-
cho señor Guzmán con anticipación sobre los pueblos del
tránsito.
Creo que con este aviso, parará inmediatamente a Linares a
recibirlo, lo acompaña don Marcelo Peña y esta noche duerme
en La Parida [Nuevo León] pues para todo tiene usted lugar.
Soy su afectísimo amigo que besa su mano. [6738]

Francisco Antonio Doria.

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León noviembre 29 de 1858
Muy respetado y apreciable amigo:
Hace cuatro días vine de la hacienda con el propósito de resta-
blecerme de mis enfermedades, hoy me ha hablado mi
hermano político don José Ardines de un negocio de plata pas-
ta que le remitieron a esta ciudad unos señores Ygarabides del
Cedral [San Luis Potosí], que estos intereses han caminado de
la mejor buena fe con los documentos de aquella administra-
ción, que consideraron suficientes para su seguridad que
anticiparon su aviso a esta administración de rentas, y que pos-
teriormente han sido informados que una suprema disposición
127
Armando Leal Ríos

particular del Estado, previene que debió darse avi-


so anticipado a la administración principal y no a
esta subalterna, que esta falta involuntaria emanada
de que la disposición es particular del Estado y no
general para que estuviese al alcance de todos les
puede causar algún perjuicio en sus intereses, de-
seando evitarlo de la manera más prudente así como
cuestiones y molestias que siempre son desagrada-
bles, me ha suplicado le dirija a usted la presente,
oficialmente al superior gobierno del Estado, la can-
tidad de que estime conveniente disponer del valor
de la referida plata dignándose librar a favor de los
interesados las órdenes de conformidad con las re-
glas que el supremo gobierno tenga establecidas,
para que la cantidad de que disponga les sea pagada
con los impuestos que causen por las importaciones
de efectos que puedan hacer por Matamoros [Ta-
maulipas] y los derechos que causen con las
remisiones de plata que hagan.
Los informes que me han dado sobre el asunto relacio-
nado la correspondencia que me han presentado, todo me
ha persuadido de la buena fe con que han caminado los
relacionados intereses, los cuales por orden superior se
han remitido a la administración principal. Todas estas
razones me han inclinado a resolverme aceptar la suplica
que me hacen y dirigirle a usted la presente suplicándole que
se entere de todos los datos que esa superioridad examine
relativos al negocio referido considérese aceptable el ofre-
cimiento que por mi conducto se hace al superior
gobierno se digne acceder en los términos que dejo rela-
cionados sobre cuyo particular escribo a mi primo don
Manuel María Morales para que procure arreglar definiti-
vamente este asunto.
Sin mas por ahora me repito a sus órdenes su fiel
amigo y servidor que besa su mano. [ 67 39 ]

Guillermo Morales.
128
Linares: Cruce de Guerra

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León febrero tres de 1859
Muy apreciable y respetado amigo:
Hoy escribo al señor Patricio Milmo para que me dispense el
favor de arreglar el recibo de los un mil quinientos pesos, im-
porte de la firma, ó sea la libranza que acepté a favor del superior
gobierno del Estado la que se dignara mandar, que se me devuelva.
El señor Milmo me ha dicho a nombre de usted que la or-
den de usted para que se me pague la cantidad referida, será en
los términos que yo lo solicite, por lo que le suplico a usted me
dispense el favor de mandar que el señor administrador de ren-
ta de esta ciudad, pague dicha cantidad de los fondos cobrados
y por cobrar a cuyo favor le viviré eternamente reconocido, su
fiel amigo y servidor que le desea toda clase de felicidades y con
atención besa su mano.
Guillermo Morales.

Monterrey, Nuevo León febrero siete de 1859


Que no se puede dar la orden que desea, pero va para que se le
abonen a ese crédito todas las contribuciones que tenga que
pagar. Y si más adelante se pudiere se le mandará cubrir el
resto de los fondos públicos o de otra manera. [6740]

Excelentísimo señor gobernador don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León noviembre 29 de 1860
Muy respetado amigo:
Varias personas de esta ciudad se han resuelto a tomar la em-
presa de hacer la feria de esta ciudad el entrante año, abrigando
la esperanza de que el superior gobierno los auxilie con la cus-
129
Armando Leal Ríos

todia necesaria por cuenta del Estado, para la conservación del


orden y seguridad, pues sin este requisito tan esencial le es im-
posible al ayuntamiento y a los particulares llevar en sí la
responsabilidad de sufragar los gastos que tienen que hacerse
para el pago de esta custodia, lo que ha motivado que algunas
personas me supliquen dirija a usted la presente a fin de que
tomando en consideración las razones expuestas por el ayunta-
miento en comunicación oficial de hoy, se digne resolver
consecuente con su solicitud si lo creyera de justicia. Yo bien
veo que los fondos del Estado estarán hoy muy escasos para
hacer esta clase de gastos y quizá no le será posible al superior
gobierno decretarlos pero pareciéndome justa la solicitud he sido
consecuente en dirigir a usted la presente sobre el particular.
Sin otro asunto me repito a sus órdenes su fiel amigo y ser-
vidor que besa su mano.
Guillermo Morales.

Mi querido amigo:
No obstante la escasez con que usted sabe muy bien tengo que
luchar diariamente, he dispuesto que se auxilie al Ayuntamiento
de esa ciudad con la suma de doscientos pesos para ayuda de
los gastos que tenga que hacer en la custodia que ponga para
seguridad de los concernientes a la feria. Sabe usted que lo
aprecia y deseándole felicidades me repito de usted, suyo amigo
y servidor que besa su mano. [6741]

Excelentísimo señor gobernador don Santiago Vidaurri


Linares, diciembre 20 de 1860
Mi respetado y apreciable amigo:
Su recomendable 17 del corriente me impone de los muy justos
y benéficos sentimientos que lo animan para procurar por
130
Linares: Cruce de Guerra

cuantos medios estén a su alcance el que la elección de diputa-


dos al congreso general y presidente de la república se haga en
las personas que relaciona, muy mucho conforme con ellas,
haré todo cuanto esté de mi parte para obtener el más favorable
resultado.
En cuanto a mi persona le doy las mas debidas gracias por el
singular aprecio con que se digna distinguirme suplicándole
muy particularmente, cambie en esta parte su opinión, pues
razones muy poderosas me alejan de poder desempeñar en un
caso dado un cargo tan superior para el que se requieren cono-
cimientos muy particulares, esto es lo primero y lo segundo que
si desgraciadamente me viere precisado a separarme del frente
de mi casa e interese sería lo mismo que resolverme a la com-
pleta ruina de todos ellos, pues no tengo ni encuentro una
persona capaz que los maneje, esta razón exige de usted la jus-
ticia de ser atendida sin necesidad de otras muchas que pudiera
dar y que a la sola consideración de usted quedan sujetas.
Me repito a las órdenes de usted su fiel amigo y atento ser-
vidor que besa su mano. [6742]

Guillermo Morales.

Excelentísimo señor gobernador don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León enero 19 de 1861
Muy apreciable y respetado amigo:
El señor don Ascensión Ríos de Doctor Arroyo [Nuevo León]
que se haya en esta ciudad pasaba a verse con usted para arre-
glar un negocio sobre cobro de dos mil pesos de derechos de
alcabala que debe el señor don José María García Lozano, por
la traslación de dominio de la finca del Carmen de la Laja que
compró a los señores Lambares, y sabedor en esta de que usted
se hallaba en los pueblos de la frontera del Estado, en cuyo
tránsito para ir hasta allá, hay algún peligro de indios bárbaros,
131
Armando Leal Ríos

no queriendo exponerse se resolvió a devolverse a su casa y


ponerse a usted un propio que lo es don León Alvarez y escri-
birle sobre el particular. Con este objeto me ha facultado para
dirijirme a usted, a fin de conseguir un arreglo o alguna espera
para el pago que se exige al referido señor Lozano. Y me ha
manifestado que por tal de cumplimentar en todo lo posible la
orden del superior gobierno para dicho pago de resolver el
señor García Lozano y su socio el señor Delgado, hacer el sa-
crificio de conseguir el dinero a rédito en la cantidad de mil
pesos que darán de pronto al gobierno, abonándoseles en cuen-
ta quinientos pesos en bonos contra el Estado y
dispensándoseles los quinientos restantes como una gracia con
que los favorezca esa superioridad por las razones de suma
escasez en que se encuentran y servicios que han prestado a
favor de la causa que ha sostenido el Estado, como se informa-
rá usted de las cartas adjuntas, y disponer conseguir de usted
este favor a lo menos le suplico se sirva resolver su orden de
pago. Acordándole una espera a lo menos de cuatro meses en
cuyo tiempo consideran poder conseguir con que cubrir esas
obligaciones. En caso de que esa superioridad acepte la propo-
sición ofrecen remitir en el acto los mil pesos en efectivo y los
bonos de los quinientos, a cuyo cumplimiento puedo asegurarle
que no faltarán.
Espero que de la manera que lo crea más conveniente me
dispense el favor de resolver este negocio por lo que seré agra-
decido su fiel y verdadero amigo que besa su mano.

Guillermo Morales.

Candela [Coahuila], enero 25 de 1861


Mi querido amigo:
He recibido su apreciable de fecha 19 del actual y por ella me he
impuesto de lo que pretende don Ascensión Ríos, en represen-
tación de los señores García Lozano y Delgado.
132
Linares: Cruce de Guerra

No me es dable acceder a todo lo que desean esos señores y


lo único que puedo hacer en obsequio de la recomendación de
usted es que enteren desde luego mil pesos, se los admitan qui-
nientos en buenos documentos contra el Estado, y se les espere
cuatro meses por los otros quinientos.
Deseo a usted felicidades y me repito suyo amigo y servidor
que besa su mano. [6743]

Señor don Ascensión Ríos


Carmen de la Laja, enero 12 de 1861
Mi apreciable amigo:
El excelentísimo señor gobernador del Estado, con fecha seis
de diciembre último ha expedido una orden por conducto de la
secretaría relativa a que don Fernando Delgado y yo paguemos
los derechos de alcabala por la traslación de dominio de una
parte de los terrenos de la Laja, cuyo contrato no debe perfec-
cionarse sí no es hasta el año de 1868, caso que se cumplan las
condiciones estipuladas y en aquel tiempo debe otorgarse la
escritura de propiedad, nosotros nos hemos presentado al juz-
gado suplicando se nos prorrogue el término necesario para
ocurrir ante el excelentísimo señor gobernador a patentizarle de
cerca los términos del contrato y manifestarle los atrasos en los
pagos, a causa de las circunstancias políticas y que en lo absolu-
to nos es imposible en este tiempo pagar los derechos de
alcabala. El juzgado me ha concedido el termino para pasar a
Monterrey y entendemos que su excelencia, penetrado de como
está el asunto se servirá resolver que este derecho se pague
cuando se tire la escritura de propiedad.
Estando yo con mi salud quebrantada no puedo emprender
el viaje como quisiera por lo que yo y el señor Delgado, facul-
tamos a usted ampliamente para que representando nuestras
personas y derechos se acerque al excelentísimo señor gober-
nador a suplicarle encarecidamente se sirva revocar la superior
133
Armando Leal Ríos

orden ya citada. El asunto lo sabe usted perfectamente desde su


creación, y no necesita para tratarlo más que las facultades que
se le dan.
Sin más asunto por hoy su afectísimo amigo y seguro servi-
dor que besa su mano. [6744]

José María García Lozano.

Excelentísimo señor gobernador don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León abril seis de 1861
Muy respetado amigo:
Hace algún tiempo que el señor don Ramón Avilés y su hijo
don Atanacio se dirigieron manifestándome los sufrimientos de
sus males el primero y el segundo los padecimientos y priva-
ciones a que ha estado sujeto hace mucho tiempo por las
razones que expone en la adjunta, todo su contenido será o no
cierto pero las últimas cartas que he recibido me han conmovi-
do tanto que me veo obligado a dirigirle a usted la presente
suplicándole que se digne tomar en consideración este negocio
y si le fuere posible sin perjuicio alguno dar sus órdenes esa
superioridad, para que esta familia esté tranquila, será un favor
que será agradecido siempre.
Su fiel amigo que desea verlo y respetuosamente besa su
mano.

Guillermo Morales.

Monterrey, Nuevo León abril 10 de 1861


Mi estimado amigo:
Me he impuesto del contenido de la apreciable de usted de seis
del corriente y de la que a ella me adjunta, y en contestación
134
Linares: Cruce de Guerra

debo decirle que hay muchos cargos en contra de los señores


Avilés, lo cual se prueba con la conducta que han observado de
andar huyendo sin querer presentarse al gobierno a justificarse,
pues éste tiene la mejor disposición de perdonarles tan luego
como comparezcan ante él y lo satisfagan como lo ordeno. Por
consiguiente puede usted contestarles que así lo hagan, porque
de lo contrario me veré precisado a dictar nuevas providencias
que den por resultado una aprehensión, ya que voluntariamente
no han querido hacerlo.
Consérvese usted bueno y disponga del afecto de este su
amigo y servidor que besa su mano. [6745]

Señor don Guillermo Morales


Hacienda de la Meza, enero 31 de 1861
Muy señor mío de mi respeto:
El cariño que la generosidad de usted ha tenido a bien dispen-
sarme, me impulsa a dirigirle la presente para manifestarle la
triste situación en que se encuentra toda mi casa, desde hace
seis meses que desgraciadamente han sorprendido al gobierno
con informes falsos y en nuestra contra los vecinos de Las Vír-
genes y algunos de Río Blanco [Nuevo León], los primeros
como enemigos declarados de mi casa por las rentas que deben
y no se ha logrado que paguen a pesar de las repetidas órdenes
que para ello ha expedido el superior gobierno; y los segundos,
movidos sin duda, de la envidia por el cariño estimado que el
señor gobernador nos tenía, y no encontrando medios para
desconceptuarnos con aquel señor, se han valido de los muy
viles de hacer acusaciones inciertas en mi contra y de Juan mi
hermano, de que resultó según estoy informado que su exce-
lencia [Santiago Vidaurri] ha librado algunas órdenes para que
se nos aprenda y seamos remitidos con custodia ante aquella
superioridad.
Sorprendido con esta determinación, me resolví a retirarme
con mi hermano fuera del Estado a buscar la subsistencia de la
135
Armando Leal Ríos

familia por una vía legal como siempre he acostumbrado, y


para dar lugar a que el tiempo le diera un desengaño de mi
conducta al superior gobierno, quien en fuerza de tan malos
informes, sin duda nos habría avergonzado.
Esta timidez y el sentimiento de vernos perseguidos por una
persona de quien hemos recibido tantos beneficios, nos a he-
cho andar errantes todo el tiempo que llevo dicho, y abandonar
los pocos intereses que tenemos, nuestro anciano y enfermo
padre y familias. Esta separación nuestra y la incapacidad en
que se encuentra mi señor padre para atender los pocos nego-
cios que tiene la casa, nos ha ocasionado unas pérdidas tan
considerables que sin duda quedaremos en la miseria, y acaso
en la orfandad que es lo más triste por el fallecimiento de mi
señor padre que espero de un día a otro, según la gra-
vedad de sus enfermedades que se han aumentado
considerablemente.
Todos estos padecimientos y el conocimiento tan positivo
que usted tiene de nosotros y de la conducta que siempre he-
mos observado, me han impulsado a suplicar a usted tenga la
bondad de interponer su valiosa influencia con el excelentísimo
señor gobernador, para que tomando en consideración los pa-
decimientos y pérdidas que hemos sufrido, se digne impartirnos
su protección, mandando que se revoquen las órdenes que se
hayan librado en nuestra contra y que se nos extienda un salvo
conducto para poder con libertad atender a mi señor padre en
los últimos momentos que le quedan de vida, y a los muy insig-
nificantes intereses que nos quedan para subvenir a la
subsistencia de tan numerosa familia que va a quedar a nuestro
cargo, protestándole a usted desde ahora con la fidelidad que
acostumbro que tanto yo, como Juan ni nos hemos mezclado
en cosas que perjudiquen al superior gobierno, o de alguna
manera trastornen su orden, ni nos mezclaremos en lo sucesi-
vo, porque como hombres pacíficos, solo aspiramos a trabajar
con libertad para adquirir lo necesario para la vida.
Tenga usted la bondad señor de no molestarse con esta co-
municación tan pesada e interesarse cuanto le sea posible en la
felicidad de una familia que va a quedar en la orfandad, así co-
136
Linares: Cruce de Guerra

mo en la suerte, del que se complace en ser su afectísimo servi-


dor que atento besa su mano. [6746]

Atanacio Avilés

Excelentísimo señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León febrero nuevo de 1862
Muy apreciable y respetado amigo:
Sin ninguna de sus recomendables a que referirme me permito
dirigirle la presente suplicándole tome en consideración los
puntos a que me voy a referir y se digne resolverme lo que es-
time conveniente. Es el primero para cumplir con lo que
previene la Ley de 26 de diciembre, hice mi manifestación de
los intereses que poseo en esta ciudad por valor de veintisiete
mil y pico de pesos comprendiendo en esta la toma de agua de
la hacienda, que como usted sabe ha sido y hasta la presente un
semillero de disputas y perjuicios para mí causados por la ambi-
ción de estos principales señores, a esta manifestación la
comisión revisora sin más razonamiento que su voluntad, me
aumentó diecinueve mil pesos más, ascendiendo por tanto a
cuarenta y siete mil quinientos pesos, que el dos por ciento y sin
agregados me causan la obligación de pagar un mil ciento y pico de
pesos, en momentos que no tengo un real de plata de que dis-
poner, aumentando mi conflicto las justas exigencias del
recaudador y sus previsiones de embargo de intereses, recargo
de operaciones, etcétera, etcétera, y lo creo muy capaz de todo
cuando así se lo ordena su deber; procurando por cuantos me-
dios me sean posibles cumplir y no dar lugar a molestias que
redunden en mi crédito ocurro a usted para que si estima cierta
mi situación y merezca alguna consideración se digne determi-
nar que se me rebaje el aumento que se me hizo y el resto en la
parte que me corresponda de dinero lo pagaré en el acto con
caballos o mulas a los precios corrientes y esto desearía que
137
Armando Leal Ríos

fuera antes de que los bandos armados de Tamaulipas vengan y


nos limpien, el gobierno hoy necesita ambas cosas y no las con-
sidero abundantes.
El segundo punto es la manifestación que se me exige de los
intereses que poseo en el territorio de Tamaulipas, con mucho
gusto lo haré y quisiera pagar aquí todas mis contribuciones
pero en estos momentos, estoy expuesto a arbitrarios procedi-
mientos de parte de las autoridades de aquel Estado,
exigiéndome en la parte que me corresponde el pago de mi
manifestación, si me excuso no lo dude usted ni un momento
mandarán arriar todos mis intereses y me aniquilan por tanto
mi suplica en lo particular de este negocio se reduce a que me
permita el que no haga mi manifestación, o la pague ínterin
restablece usted el orden en aquel Estado y una resolución su-
perior del gobierno hace entender al de Tamaulipas que los
ciudadanos de Nuevo León deben hacer la manifestación de
los intereses que poseen en aquel Estado en el lugar de su resi-
dencia y pagarla, en esto no considero haya perjuicio y usted
pesara mis razones y de todo me dispensara el favor de darme
su resolución para el señor Dupeyron, quien me ha ofrecido
escribir a usted también sobre los puntos que dejo referidos.
Sin otro asunto tengo el gusto de repetirme a sus órdenes su
fiel y verdadero amigo que atento besa su mano. [6747]

Guillermo Morales.

Señor gobernador don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León septiembre 24 de 1863
Muy respetado amigo:
Antes de ir a esa ciudad escribí a algunos amigos de Tamaulipas
sobre el encargo de compra de caballos que me hace para que
cuando vuelva y usted tenga que mandar al individuo que haga
la compra tener algunos datos que puedan sernos útiles.
138
Linares: Cruce de Guerra

Ayer me escribió don Luis que había sido informado que de


Tamaulipas venían fuerzas para Nuevo León y aunque supuse
que no habría nada, esto no obstante, en el acto salió un propio
con cartas para algunas personas sobre negocios particulares y
que recorren de Villagrán a Hidalgo [Tamaulipas] son las once
y media y no vuelven.
Se dice por Victoria que la sección de Tancasneque que en
Tampico [Tamaulipas] desembarcaron más fuerzas francesas
hasta el completo de cinco mil hombres con los más que allí
estaban y de díceres también que iban a expedicionar por Vic-
toria [Tamaulipas] para Nuevo León, aunque eso no pasa de
díceres he dispuesto que se acerque a Victoria un enviado y
traiga alguna noticia.
De Villagrán [Tamaulipas] me dicen ayer que llegó Pedro de
León con órdenes del gobierno para organizar una guerrilla,
nombró por ayudante al famoso [Sixto] Acevedo y se dirigió a
San Carlos [Tamaulipas] para que le den gente con la organiza-
ción de fuerzas que haga esta clase de hombres nada habrá que
temer de los enemigos. Pero de allá, que se descuiden y nos los
dejen pasar.
Sin mas por ahora me repito a sus órdenes su muy atento
amigo y servidor que besa su mano. [6748]

Guillermo Morales.

Señor don Guillermo Morales


Linares, Nuevo León
Monterrey, Nuevo León septiembre 19 de 1863
Mi estimado amigo:
Será bueno que vaya usted preparando a sus amigos de Tamau-
lipas sobre venta de caballada, pues tengo pensado enviar a un
individuo a que me compre la que necesito para la tropa, por-
que sé que en ese Estado, principalmente en Jiménez se halla
139
Armando Leal Ríos

buena. Espero pues, se dirija usted con tal fin a sus conocidos
diciéndoles que no sean caros al venderme los caballos que
necesito.
Consérvese usted bueno, como le desea su afectísimo amigo
y servidor que besa su mano. [6749]

Señor don Santiago Vidaurri


Linares, Nuevo León febrero 19 de 1864
Muy respetable y apreciable amigo:
Desde el día 17 fue en mi poder su muy recomendable de 16 del
corriente, y por estar en cama hace algunos días, no me fue
posible contestar en el acto, lo verifico ahora manifestándole
quedar entendido del contenido de sus diversos párrafos y que
debe estar seguro de mi empeño para evitar de cuantas maneras
sea necesario, el que se altere en este pueblo la paz y el orden
de que tanto necesitamos, conforme con el gran pensamiento y
medios adoptados por el superior gobierno, para conseguir los
saludables beneficios que le asegura el orden inalterable de que
disfruta la sociedad toda en nuestro Estado, lo que estimado en
lo que vale este inapreciable bien, sabrá vivir agradecido.
Sin más por ahora deseo a usted, toda clase de felicidades
su más afectísimo amigo que lo aprecia y atento besa su mano.
[6750]

Guillermo Morales.

140
Índice Onomástico

Acevedo, Sixto 6748


Aguirre, José María 6627
Alameda, Francisco 6717
Aldape, Rafael 6725
Alvarez, Juan 6616, 6617, 6627
Alvarez, León 6625, 6743
Araiza, Antonio 6678
Aramberri, José Silvestre 6662,6663
Arriaga, Ponciano 6631
Ardines, José 6614, 6739
Aregullín, 6631, 6632, 6652, 6669
Avendaño, Bonifacio 6643
Avendaño, Simón 6631, 6641, 6643, 6644
Avilés, Atanacio , 6745, 6746
Avilés, Juan 6745, 6746
Avilés, Ramón 6745, 6746
Benavides, Juan 6662,6663
Benítez y Pinillos, Jesús Ma. 6677
Berlanga, Juan 6637
Blanco, Miguel 6615
Camacho, Juan 6644
Cárdenas, Jesús 6626, 6649
Cárdenas, Juan 6623, 6624
Cardona, Jesús 6611
Carvajal, José María 6728
Castro, Joaquín 6616, 6619, 6620, 6622, 6624,
6625,6626, 6628, 6629, 6630,
6631.
Cazares, Pedro 6641, 6644
Cerda, Manuel 6617, 6625, 6626
Comonfort, Ignacio 6612, 6689
Coronado, Esteban 6675, 6676, 6678, 6688
Cuevas, Francisco 6641, 6644
Dávila y Prieto, Jesús 6662
Degollado, Santos 6615
Delgado, Fernando 6744, 6745
141
Índice Onomástico

Doblado, Manuel 6612


Doria, Antonio 6616, 6619, 6620, 6622, 6626,
6652, 6737, 6738
Dupeyron, Luis 6747
Escobedo, Mariano 6656, 6662,6663, 6666
Fuente, Higinio de la 6631
Galindo, Ignacio 6678
García, Fabián 6737
García, Francisco 6617, 6618
García, Guadalupe 6615, 6617. 6631
García Lozano, José María 6643, 6745
García, Pedro José 6700, 6711, 6712, 6717
García Ramírez, Jesús 6631
García Rejón, Manuel 6662, 6663
Garza Benítez, Antonio 6722, 6723, 6724, 6725, 6726,
6729
Garza Benítez, Manuel 6632, 6633
Garza González, Jesús 6658, 6659, 6660, 6663, 6664
Garza, Juan José de la 6610-6613, 6615-6618,
6620,6622, 6624-6626, 6628,
6629, 6630, 6631-6634, 6635,
6645, 6666-6669, 6672, 6674,
6677, 6678, 6679, 6692, 6703,
6707, 6712, 6718, 6733
Garza, Serapio de la 6631
Gautier, Eulogio V. 6610, 6675, 6678
Garza Valdés, Francisco J. 6632, 6700, 6715
Gargollo, Manuel 6720, 6734
Gómez, José María 6681
Gómez, Manuel Z. 6610, 6611, 6615, 6616, 6621,
6631, 6635
Gómez, Pedro 6663
González, Gerónimo 6641
Guerra, Antonio 6615
Guerra, Gaspar 6615
Guerra 6631

142
Índice Onomástico

Gutiérrez de Lara, Trinidad 6733, 6734


Guzmán, León 6737, 6738
Haro y Tamariz, Antonio 6612, 6615
Hinojosa, Pedro 6612, 6615, 6630, 6664, 6678,
6685, 6712
Higuera, Agustín 6610, 6626
Izaguirre, Fernando 6631, 6664
Lambares 6743
Larumbe, Camilo 6650
Leal de León, Antonio 6700
Leal, José María 6732
Leal, Manuel 6731, 6732
Leal [y Torrea], Andrés 6685, 6715, 6729
León, Pedro de 6748
Llave, Ignacio de la 6615
López, Florentino 6712
Malo, Diego 6706
Margain, Carlos 6636, 6650
Margain, Francisco 6625, 6626, 6631
Margain, Juan 6631, 6634
Margain, Rafael 6721
Martínez, Domingo 6623, 6624, 6625, 6626, 6631
Martínez, Miguel 6719
Milmo, Patricio 6740
Morales, Isidro 6614, 6617,6649, 6750, 6652,
6660, 6662, 6677, 6687
Morales, Jesús 6708, 6710, 6719
Morales, Julián 6682, 6683
Morales, Manuel María 6700. 6705, 6709, 6712, 6720,
6734, 6635, 6739
Morales, Vidal 6652, 6692, 6693
Moreno 6678
Noriega, José Sotero 6716, 6717
Nuin Valioza, Cura 6641, 6643
Ochoa, Francisco 6728
Paz, Antonio de la 6626
143
Índice Onomástico

Peña, Bruno 6674, 6676, 6677, 6678, 6679,


6684
Peña, Marcelo de la 6632, 6633, 6635, 6656, 6729,
6730, 6638
Pérez, Pedro 6646, 6648, 6650
Pérez, Román 6651
Plaza, Filomeno 6729
Prieto, Ramón 6631
Quintero, Félix 6631, 6632, 6633, 6634
Quiroga, Julián 6661, 6663
Ríos, Ascención 6743, 6744, 6745
Ríos, Bruno 6708
Rosas Landa, Vicente 6659, 6662
Rodríguez Fernández, Ramón 6611
Rodríguez, Rafael 6643
Savaniga 6620
Sayas, Martín 6610, 6612, 6650, 6652, 6656,
6657, 6658, 6661, 6663, 6664,
6665, 6666, 6668, 6669, 6683
Suárez, Sixto 6631, 6632, 6633, 6634, 6636,
6688
Torres, Eusebio 6677
Traconis, Juan Bautista 6617, 6622, 6625, 6629, 6631,
6632, 6635
Treviño, Jerónimo 6677
Valdés, Juan 6721
Valdés Cantú, Manuel 6615
Villalón, Manuel 6611, 6712, 6722, 6723, 6724
Villarreal 6612
Villarreal, Juan 6631
Villasana, Manuel 6611
Vázquez Dávalos, 6651
Yades, Francisco 6669
Zaragoza, Ignacio 6668
Zozaya, Fructuoso 6700. 6702
Zuazua, Juan 6620, 6629, 6723

144
Índice Geográfico

Ahualulco, San Luis Potosí 6636


Albercones, Hacienda 6677
Altamira, Tamaulipas 6617, 6625, 6631, 6632, 6672
Baratillos 6622
Boca; Hacienda de 6677
Brownsville, Texas, E.U.A. 6617, 6631
Buen Pastor 6622
Burgos 6629, 6700
Cadereyta Jiménez, Nuevo 6629, 6630, 6632, 6657, 6658,
León 6718
Camacho, Hacienda 6719
Camargo 6614, 6631, 6658, 6683
Candela, Coahuila 6643
Canelo, Hacienda el 6722
Carmen de la Laja, Hacien- 6743, 6744
da el
Catorce, San Luis Potosí 6677
Cedral, San Luis Potosí 6739
Coahuila 6610, 6616, 6647, 6662, 6663,
6743
Croix 6629
Cruillas 6622, 6667
Charcas, San Luis Potosí 6677
China, Nuevo León 6667
Chocoy 6631, 6666
Chupaderos [Rancho] 6620
Doctor Arroyo, Nuevo León 6743
Fresno, Hacienda el 6640, 6643, 6671, 6672, 6674,
6677, 6678, 6681, 6683, 6685,
6690, 6692, 6693, 6704, 6747
Galeana, Nuevo León 6662, 6663, 6717, 6720, 6722
Gavia, Hacienda la 6616, 6622, 6625, 6628, 6697,
6701, 6702, 6707
Guadalupe, Hacienda 6712, 6718, 6720, 6722, 6724,
6727, 6734
Guanajuato 6659, 6662, 6663

145
Índice Geográfico

Hidalgo 6610, 6629, 6648, 6656, 6668,


6750
Horcasitas 6631
Hualahuises, Nuevo León 6729
Jiménez 6749
Lagos de Moreno 6612
Linares, Nuevo León 6609-6612, 6614-6617, 6619-
6638, 6640, 6641, 6642, 6643,
6644, 6645, 6647-6670, 6674,
6676-6680, 6682 6683,6686-
6690, 6694-6701, 6703, 6705-
6725, 6727-6735, 6736, 6738-
6743, 6745,6747-6750
Llera 6616
Matamoros, Tamaulipas 6614, 6615, 6621, 6622, 6624,
6631, 6635, 6667, 6733, 6739
Matehuala, San Luis Potosí 6659, 6662
México [ciudad] 6611, 6612, 6616, 6627, 6629,
6631, 6647, 6649, 6650, 6653,
6660, 6667, 6678, 6687
Meza, Hacienda de la 6746
Mier 6657, 6658, 6659
Monclova, Coahuila 6615
Montemorelos, Nuevo León 6629, 6630, 6632, 6657, 6658,
6718, 6719, 6734
Monterrey, Nuevo León 6612, 6615, 6616, 6621, 6625,
6644, 6669, 6672, 6677, 6684,
6718, 6738,
Morelia, Michoacán 6662, 6663
Mota la[General Terán], 6657, 6658, 667
Nuevo León
Nuevo León 6610-6612, 6616, 6621, 6631,
6647, 6653, 6659, 6662, 6663,
6690, 6731, 6732, 6739, 6745,
6747, 6750
Padilla 6616, 6629, 6667

146
Índice Geográfico

Pánuco 6631, 6632


Parida, Hacienda la 6738
Potosí, Hacienda el 6646. 6647, 6651
Pueblo Viejo 6632
Raíces [Galeana] 6652, 6717
Rayones 6651, 6685
Reynosa, Tamaulipas 6614, 6617, 6618, 6631, 6632
Río Blanco [Aramberri] 6746
Río Grande [Coahuila] 6718
Saltillo, Coahuila 6610, 6615, 6662, 6663, 6692
San Carlos 6659, 6661, 6663, 6664, 6665,
6700, 6748
San Fernando 6616, 6620, 6622, 6626, 6629,
6712, 6724
San Luis Potosí 6611, 6612, 6650, 6653, 6659,
6660, 6662, 6666, 6677, 6679,
6680, 6739
Santa Bárbara [Ocampo], 6615, 6632
Tamaulipas
Santander [Jiménez], Ta- 6620, 6622, 6667
maulipas
Tamaulipas 6610-6617, 6620, 6622, 6623,
6624, 6625, 6627, 6629, 6631,
6632, 6633, 6640, 6647, 6652,
6653, 6654, 6655, 6658, 6659,
6661, 6664, 6665, 6666, 6668,
6669, 6673,6679, 6687, 6692,
6697, 6698, 6712, 6728, 6733,
6747, 6748
Tampico, Tamaulipas 6612, 6615, 6616, 6617,6618,
6620, 6622, 6624, 6625, 6626,
6628, 6629, 6631, 6632, 6633,
6634, 6635, 6640, 6648, 6650,
6656, 6664, 6666, 6667, 6669,
6671, 6672, 6673, 6674, 6750
Tancaxneque 6672, 6748

147
Índice Geográfico

Texas 6701
Tula 6610
Vacas, Hacienda las 6677, 6719
Valle del Maíz 6632
Vaquerías, Hacienda 6728
Victoria 6610, 6612, 6615, 6616, 6617,
6619, 6622, 6626, 6628, 6629,
6630, 6631, 6640, 6648, 6653,
6654, 6655, 6659, 6662, 6664,
6665, 6666, 6667, 6668, 6669,
6750
Villagrán 6611, 6625, 6628, 6629, 6631,
6652, 6664, 6666, 6668, 6669,
6700, 6738, 6750
Virgenes, Hacienda las 6746
Zacatecas 6727

148
BIBLIOGRAFÍA

Editorial Porrua, S. A. Diccionario Porrua. Historia, Biografía y Geo-


grafía de México. México. Editorial Porrua. 1964.

James R. Fortson. editor. Los Gobernantes de Nuevo León 1579-


1989. México. Gobierno del Estado de Nuevo León. 1990.

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Correspondencia Santiago Vidaurri-Pedro Hinojosa. 1855-1864. (Serie:
Archivo Santiago Vidaurri 3). Monterrey, N.L. AGENL. 2000.

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Armando Leal Ríos

Linares: Cruce de Guerra

149
149
GOBIERNO DEL ESTADO DE NUEVO LEÓN
SECRETARÍA GENERAL DE GOBIERNO
SUBSECRETARÍA DE ATENCIÓN AL CIUDADANO
ARCHIVO GENERAL DEL ESTADO

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