Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
L eft
review 88
segunda poca
Emily Morris
Marco DEramo
Cuba inesperada
7
UNESCOcidio 52
ENTREVISTA
Gleb Pavlovsky
60
ARTCULOS
Kevin Pask
Jean-Paul Sartre
Fredric Jameson
Nacionalismos estadounidenses 72
Marxismo y subjetividad
92
La actualidad de Sartre
122
CRTICA
Wolfgang Streeck
La poltica de la salida
Michael Christofferson Una mente de izquierdas?
Kristin Surak
Revendiendo Japn
Hung Ho-Fung Canadizacin?
129
138
146
159
traficantes de sueos
Suscrbete
Fredric jameson
LA ACTUALIDAD DE SARTRE
123
124
nlr 88
125
Ibid., p. 120.
126
nlr 88
Lenguaje y praxis
La terminologa sigue siendo el hilo ms seguro para guiarnos por el
laberinto del desarrollo filosfico, siempre que la interroguemos de
dos modos: qu dilemas nos permite la nueva terminologa excluir o
neutralizar, y qu revelaciones especficas empaa u oculta la nueva formulacin. Tanto Sartre como Heidegger pretendan con firmeza evitar
las ilusiones de la subjetivacin: Heidegger lo haca prohibiendo enrgicamente el lenguaje de la conciencia y la personificacin; Sartre, al
contrario, insistiendo con tanta firmeza en el lenguaje de la conciencia
que los lenguajes personalizados de la identidad y del yo no encontraban lugar en sus formulaciones. El nuevo lenguaje de la totalizacin
empleado por Sartre, es por lo tanto, una especie de asimilacin al denominado Heidegger pragmtico: desarrolla la nocin de conciencia
como proyecto tanto amplindola, para incluir la concepcin heideggeriana del mundo, y la mundialidad y el estar en este mundo, como
describiendo de qu forma mi continua temporalidad convierte todo lo
que la rodea en una Zuhandenheit una manejabilidad similar a la de
una herramienta muy diferente de las antiguas filosofas epistemolgicas estticas y contemplativas de los objetos y su presencia puramente
cognoscible (Vorhandenheit).
Pero al pensamiento contemporneo, ms atrado por la diferencia que
por la identidad, le pareca que el trmino totalizacin daba preferencia a la unificacin; mientras que nosotros queremos que nuestros
sujetos sean mltiples y heterogneos, y preferimos las posiciones de
sujeto inconmensurables a cualquiera de esas perspectivas de unificacin incluso en proceso perpetuo de las que en ltimo trmino podra
127
128
nlr 88