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Lenguaje y Poder en la Sociedad del Conocimiento

IV

En el área política, en tanto, el efecto de las NTIC en la profundización de la


democracia es evidente. En Chile, un movimiento estudiantil de enseñanza media,
denominado “Los Pingüinos”, impulsó en 2007, relevantes cambios en la legislación
educacional del país, iniciando sus coordinaciones inter colegios y liceos mediante un
uso intensivo de la comunicación digital, tanto a través de la propia Web (páginas,
sitios, blogs, mails, foros, comunidades, etc), como mediante telefonía celular,
especialmente mensajes de texto y MMS.

Los efectos de la acción de dicha red horizontal, con líderes validados en la propia
experiencia e impulsada por intereses específicos de estudiantes, superaron con creces
la capacidad de los partidos políticos de conducir el proceso, el que culminó con una
huelga nacional de gran impacto social, que atrajo las simpatías (aunque luego cierto
rechazo) de buena parte de la población adulta, la cual legitimó públicamente sus
demandas coordinadas, ordenadas y clasificadas gracias a los modos de comunicación
Web y terminó con una nueva Ley de Educación en el país, que aún así, se consideró
insatisfactoria por sus líderes, pues tras ser integrados a una institucionalidad de poder
instalado, su incapacidad de interpelar el lenguaje especializado terminó en su retiro
masivo de las comisiones diseñadas al efecto.

Así y todo, las NTIC están permitiendo nuevas expresiones de organización social y
combinación de grupos humanos asíncronos y atópicos, que se manifiestan con igual
pujanza que aquellas grandes mayorías volcadas a las calles –epítome de la expresión
popular de los años 60-70- a través de la Web, en las que utilizando las diversas
técnicas y softwares libres puestos a disposición de los usuarios en Internet, se
intercomunican, acuerdan compromisos y acciones, con efectos políticos y de
transformación social nada irrelevantes.

Los denominados movimientos “single issues”, grupos que se reúnen puntualmente


detrás de la consecución de un único objetivo, apuntados por Anthony Giddens como
una las nuevas formas de atender los asuntos de la ciudad, tienen en las NTIC un
aliado que no sólo es accesible por su bajo costo respecto de antiguos medios de
comunicación (como afiches, avisos en medios, pancartas o volantes), sino también
por su alta penetración, que además, es comunicacionalmente eficiente y eficaz para la
promoción de objetivos, dada su multimedialidad e interactividad sea de forma textual,
gráfica y/o audiovisual, on line o “quemada”1 (grabada).

Los partidos políticos tienen en este nuevo tipo de organizaciones ciudadanas un fuerte
competidor, las que reunidas anónima, espontánea y horizontalmente para enfrentar y
solucionar determinados problemas sociales, se instalan con dirigencias coyunturales,
voluntarias, que se validan democráticamente en la gestión de comunicaciones, más
que en liderazgos carismáticos. Se trata de un tipo de dirigencias de la ciudad con una
ética similar a la de los antiguos griegos, las que una vez conseguido un propósito,
vuelven a sus actividades y negocios normales, marcando una fuerte diferencia con los
profesionales de la política actual y que consiguen mayor ajuste estructural con las
nuevas empatías ciudadanas respecto del manejo de los poderes públicos.

En efecto, estos movimientos constituyen apuestas de coordinación de intereses


inmediatos, que no obligan a la militancia permanente, ni adhesiones ideológicas
totalizantes alguna de quienes se unen a ellos, característica que responde más
consistentemente con el nuevo tipo de ciudadano-consumidor universal, cuya vida
diaria se desenvuelve con arreglo a sus intereses inmediatos, con escasa fidelidad a
productos y visiones del mundo, que busca soluciones rápidas y de calidad, en tiempos
acotados, porque su foco de atención no es lo público, sino lo privado. Ejemplos de
aquello pueden observarse en Chile en movimientos como el que se formó contra la
delincuencia, por cambiar el plano regulador de una comuna de Santiago, por el mejor
funcionamiento del tren Metropolitano de la capital y el sistema de transportes, etc.

En el arte, en tanto, surgen diariamente miles de propuestas creativas y estilos que se


manifiestan tanto en los diseños implícitos de las millones de páginas, blogs y sitios
circulantes -con temperatura, colores y espacios adecuados a los modos de visionado
de ordenadores y otros adminículos NTIC-, así como en proyectos estéticos
propiamente tales, los que, trabajando con las utilidades multimediales que ha
impuesto el medio Web-Internet, inician nuevas aventuras de descubrimiento en la
plástica, literatura, cine, música y demás artes audiovisuales que circulan en los
diversos aparatos reproductores u on line, fijos o nómades del mercado.

1 Los nativos digitales utilizan el verbo “quemar” por “grabar”, usado por generaciones anteriores, debido a
que efectivamente las actuales reproducciones se efectúan mediante la “quema” de la superficie de los CD
por los rayos laser incluidos en los aparatos digitales.
El impacto de la digitalización en el costo de producción de dichas artes ha
democratizado y ampliado el universo de quienes pueden acceder y realizar sus obras
en estos campos expresivos, permitiendo el surgimiento de artistas de éxito
internacional, gracias a Internet. Aquellos están desintermediando a compañías que
tradicionalmente se dedicaron a estas labores. Estos avances no son triviales para la
Educación, en la medida que recientes experimentos demuestran que los niños que
acceden a la interpretación de instrumentos musicales mejoran sustantivamente su
capacidad de lenguaje, categorización y generalización, debido a que entrenan sus
capacidades de distinción auditivas, base fisiológica de una mejor expresión lingüística.

La digitalización inducirá pues, cambios sustantivos en la forma de crear un negocio.


Cuando la actual recesión termine, la inversión no retornará a las anteriores
infraestructuras; se van a dirigir hacia la digitalización, desde los procesos de
producción hasta la distribución. Si creemos que lo que ocurre en la industrial editorial
(e-book) y musical es una anomalía, veremos que estaremos equivocados.

Los líderes industriales del futuro crearán nuevos modelos de negocio, replicando lo
que hizo Google con la industria de la publicidad (pago por click respecto de la
publicidad tradicional). El dinero se acumulará vendiendo y promocionando marcas
modos nunca antes visto. La fuerza de trabajo cambiará por completo: miles de
millones de nodos conectados con o sin redes físicas, modificarán nuestra percepción
sobre horarios de trabajo, formación de equipos y comunidades, tipo de colaboración,
y hasta las estructuras físicas que los arquitectos diseñarán como oficinas corporativas.
La nueva economía transformará la cultura del puesto de trabajo.

Los modelos de “firma frente a cliente” que muchas empresas practican en su trato
ante aquellos cambiará sustantivamente. La competencia en todos los ámbitos de la
producción y servicios será tanto mayor, cuanto más se profundice la globalización y
nuevos jugadores mejoren el marketing de sus productos. Las empresas se centrarán
en los clientes, derivando desde las batallas de precio, hacia el valor y relaciones
construyendo fidelidad mediante comunidades de consumidores. El tipo de relación
directo e individual que posibilita Twitter es solo un comienzo. En la nueva economía,
las firmas exitosas tendrán a los mejores evangelistas, apalancados en un uso experto
del lenguaje y las comunidades más grandes, merced al contacto directo con los
clientes.
Las TIC permitirán el uso experto de la enorme cantidad de datos que muchas
empresas ahora almacenan sin utilidad. El cambio de guardar por “recopilar” hará a las
compañías más inteligentes, ágiles y reactivas. Mediante el análisis de datos y la
continua mejora en la toma de decisiones, las empresas tendrán una mejor
comprensión de los tipos de bienes y servicios que buscan, gracias a la información
basada en el uso que los clientes le dan.

Las nuevas fuerzas productivas transformarán el marketing, las comunicaciones,


publicidad y relaciones públicas hacia prácticas cada vez más “uno a uno” y profundas
innovaciones en el Customer Relationship Managment (CRM). El desafío será pues
imaginar los negocios del 2015, una vez ingresados al próximo boom y cuando la
frecuencia de los ciclos económicos sea cada vez más corta.

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