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La Cruz hace la diferencia:

Como consecuencia del fluir inicial del Espíritu Santo hace unos años, el mayor defecto ocurrido lo
estamos viendo ahora que cosechamos el fruto de la experiencia. Su mensaje omitió la Cruz e
ignoró el arrepentimiento.

El resultado es la “auto ayuda”, "éxito en la vida," "alcanzar la grandeza," "cómo vivir la vida
abundante," actualmente es esto lo que llena los libros en todas partes. El tema parece ser que "El
estilo de vida de los ricos y famosos" primaria y fundamentalmente les pertenece a los que creen en
Cristo. Así que cuando vienen los tiempos difíciles, el creyente falla en su fe, preguntándose cómo
Dios pudo hacerle algo así, o qué ha hecho mal.
Millones han sido convencidos, y ejercen la fe en Cristo sin sentir primero pena por sus pecados.
Así que buscan la autosatisfacción sin satisfacer primero la necesidad de la Salvación, que
comienza con el arrepentimiento. Tratar de entrar al Reino de Dios sin arrepentimiento es como
traer todo el equipaje de hábitos de la vieja vida en pecado a la nueva vida en santidad.

Como resultado, muchos hoy actúan como "pecadores enmendados", aplicando una curita de
lamentos a la fatal herida del pecado, deseando la vida abundante, sin notar que fe sin
arrepentimiento es presunción.

El Evangelio no es una lotería. No jugás a las oportunidades con Dios. No apostás con Jesús. Dar,
esperando obtener alguna ganancia no es lo que Jesús sugirió.

Cuando Jesús les contaba a Sus discípulos lo que iba a suceder con Él, cómo sufriría tantas cosas en
manos de los escribas y fariseos, que iba a morir, y a los 3 días resucitaría, Pedro lo retó por hablar
así.

Jesús no le hizo caso a Pedro. Por qué? Porque en todas las tentaciones que Cristo sufrió en el
Monte, Satanás intentó atraparlo para quedarse con lo que Dios había prometido, no dejándolo
morir en la Cruz.

Para nosotros, intentar ganar las promesas de Dios, sin pasar primero por la Cruz es tan satánico
como la tentación a Jesús.

La Cruz es donde morimos a nosotros mismos, donde Cristo nos perdona, desde donde podemos
seguir viviendo en la resurrección de Cristo.

Sin Cruz, no hay corona.


Sin valor, no hay gloria.
Sin dolor, no hay recompensa.

Esta es la causa por la que el mundo y el medio secular se oponen a la Cruz. Jesús hablaba
francamente a Sus discípulos que si alguno le seguía necesitaría tomar su cruz para ello. Estableció
también que si alguno buscaba su vida, debería primero perderla por Él y por El Evangelio. "Porque
qué provecho tendrá un hombre si gana el mundo entero, pero pierde su alma?" , esa fue Su
pregunta.

Hoy aún tenemos profetas predicando acerca de ganar sin la necesidad de ir a La Cruz para hallar
vida en el Espíritu por medio de la muerte a uno mismo; otros utilizando vocabulario psicológico
con sólo un “barniz” de Cristo; ministros tomando el Nombre de Jesús para sus propias creencias,
produciendo una fe falsificada.

"Yo soy El Señor...no harás ayuntar tu Ganado con animales de otra especie; tu campo no
sembrarás con mezcla de semillas, ni te pondrás vestidos con mezcla de hilos." (Lev. 19:19)

No se cruza un caballo con una vaca; ni se mezcla la teología con el sistema psicológico mundial;
no intentes mezclar las obras humanas con la fe divina, es lo que las Escrituras nos dicen a vos y a
mí cuando aplicamos Su Verdad.

Tibio es una mezcla de caliente y frío. Es lo característico de nuestros días donde todo ha sido
mezclado y unido y ya no hay bueno ni malo, blanco y negro, caliente y frío, verdadero y falso, sino
que todo está hecho para mezclarse, y esa mezcla “suaviza” las cosas. Inútil. Todo se adapta a lo
vulgar. Una “santa” suciedad. Basura religiosa.

Confesar a Cristo no es todo lo que abarca la salvación. La conversión verdadera es la


transformación de pecador a santo, una "nueva creación." La orden de Dios para Israel cuando
marchaban hacia Canaán fue destruir todo lo pagano y sus dioses, para que Israel no sea seducido
por esa idolatría, incorporándola a su adoración. Dios tiene una orden para "tierras secas".

La acusación de Dios a ellos fue que no destruyeron los pueblos en la tierra como Él les dijo, sino
que "se mezclaron con lo pagano y aprendieron sus horribles obras." Por sus malas obras fueron
manchados, por causa de su amor a los ídolos hubo adulterio a la vista de Dios. (Sal. 106:34-39, Ez.
23:37-39)

La Cruz es un lugar donde la mayor bendición y la más grandes maldades se confrontan.

La Cruz se mantiene como la fuente de la más grande misericordia jamás igualada. La Cruz es
donde se origina toda doctrina teológica y toda ciencia ética. La Cruz es nuestro lugar de entrega;
nada puede compararse a Su poder para limpiar los pecados.

Extraído de “Partner's Blessing” de Edwin Louis Cole

"Y todas estas bendiciones te seguirán, y alcanzarán, si oyes la voz del Señor Tu Dios" (Deut. 28:2).

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