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Diabetes y otros factores

de riesgo cardiovascular
Prevención y tratamiento L

Título original:
>Diabetes y otros factores de riesgo cardlovascular:
,Prevención y trataMiento

Responsables:

Juan Joié Gagliardi no, Ma L1ricio Jadzlnsk,y, Norberto V. Cédola,

Jorge Alvatifl.1~. R()oolfo E. H<'rn~ndez: Martha SereddY,

I\.,,~c Sinay y Charles Clark Jr.

Primera edición, 2005


ISBN 987-43--9836-1

IMPRESO EN ARGENTINA
SOSA. Amilc¡¡r [J Titulo y responsables de cada unidad
M,',litr.' 1"'lP(',:ialista en endacn'noln!Jia y nutrición, Ex ja{e de In Unidad r/e Enducrin%gia y
N¡¡I¡i,ir:;n dI'! I/ospital Le,lllid.as Lucrro d¡~ Baliln (Jlanca. Actuolmen/p. CanSI/Uoulc CIn Unidad.
I ~ 111' '1I,II·nt(.' del Capítulo At{on(.ico d~ In SAO.
STAMBOULIAN, Daniel 1. Diagnóstico y clasificación de la diabetes _ Pág.!7
M,·r/i.:o In{ect610go. Presidente de la Fund(¡(.icJn [¡'ntros de EI/udios Jnf~clOlólJic(}s. CABA.
Martha Sereday
TESONE, Pedro
.7r-{r rlr/ Dr.pnrt.amentn d" M"rii,ino rid f/o5pital Ramos Mejí(f. CA OA. Profusor Consulto Ar/junla
2. Síndrome metabólico; fisiopatología, e.xpresión y evaluación clínica Pág,23
rlc~ Nutrición y Director de In Correm de Médicos Espacinlistas en Nu/rici6n. Facullad de' Medicino

Isaac Sinay y Juan José Gagliardino


uall. El< Presidente de la SoóednrJ ArgNltirm de Nutn'cion. Ex Plp.sidente ele la Suócdnd Argea,

tina dI! Diabetes. Ex Presidente d,,1 Capilulo Arg(mtino de lo Sociedod Lalínoonwricana de

3. Obesidad: diagnóstico y tratamiento o .. __..•.•,•..._.. PCíg.39


Artcroscierosis. Prp.lidell/p de in Asor;rr(ión Argentina de Atemsr.lerosis.

Jorge Braquinsky
VILLAMIL, ALberto S.

Jefe de la Sección Hipert~nsiú" Arterial del Hospital Dr. (o,¡me Argerich. Jale do !tr Sección de
4. Criterios efe control y seguimientQ de-la diabetes tipo 2 __ Púg.S9
Hipertensión Arterial del InstifUfO Cardíova5C111ar Ouenos Aires. rre~;derrfe de Fun rJap res.

Pedro Tesone, Félix Miguel Puchulu, Martín Rodríguez, Claudia Viton'a

VITORIA JORGE, Claudia

Bioquimica. Miembro del ¡rlJtillJto da Clinica M~diCfl y Diabeles. Mendozfl.

Jorge y Jorge Waitman

WAITMAN, Jorge 5. Automonitoreo gluc~mico y glucosúrico _ púg.71


Especialista ~n MC1/icina Inlema. Docente Universitario en Medicina UNe. Ex Profp.sor Adillrlio
Juan José Gagliardino y MartIJa Sercday
Interino de In IJllidad HospitalClritl IOn Medicina, Hospi/rrl Córdoba. UNe. Jafe del Servicio de

[Iínica Medica 1 y del Departamen/o ¡fu Oiabetes del Hospi/nl Córdoba. UNe. Jefe de la Sección
6. Evaluación !!conómica de la diabetes y de los factores de riesgo
Oia/)etes del Sanolorio Allende. Córdoúrl.

cardiovascular _ _ _._.-.-_ Pág. 79


WIIGNSKI, Regina

Dor:rora en Farmar.i(l y flioC/l/imita. ProJL·:,'()((J ril:lIlnr Emérita de la Universidad de Buenos Aire¡


Juan José Gagliardino y Joaquín E. Caporale
en el De¡;artrimellto dI'. RioC/l/imiw Clinico. Mi"III/)1O rillflnr de la Aco¡fwiÍa Nncional de Far(ll(J·

cin y 8inflrJímicn, Sitiol Rioquímiru Clínim ¡f,. /.1/,irlos. Ex Decano du la Facultad do Fnrmaón y
7. Papel de la hiperglucemia y el estrés. oxidativo en el desarrollo y
Bioqurmicn. fresidenfe rfe la Comisidn de' lllvl'.... I:iU'lI'i¡i1l [i('/Illj'ico y Tecnológiccr de lo Universi­
progresión de las compLi€aciones crónicas de la DM Pág. 87
dad de Buenos Aires.
Osear R. Rebolledo
ZUFRIATEGUI, Zulma

Nutriríanista. Docente da! Centro ,,!Jernnr¡fo 11. 11t.1II.\\'aYJl dr 1.0 Plrltn.


8. Nefropatía diabética _ P6g.10S
Alicia Elbert y Maximino Ruiz
9. Retinopatía diabética _ púg.125
L. Arturo Irarrózaval
10. Neuropatia diabética periférica y autonómica Pág. 137
Mauricio Jadzinsky
11. Riesgo cardiovascular en la diabetes, la predlabetes y el sindrome
metabólico: Oportunidades y estrategias de ,prevención Páq.16.7
Charles C/ark Jr.
12. Cardiomlo¡patia en diabetes tipo 2 ....~_ _ ¡·(iI¡.11'l
Alberto S. Villami! y Víctor F. Contreras

12 111
IJ'ldJ"/t lf• ~ dl~ll' 1III JIIII ":..!II'_'.;.i,_"_,,-/'_'_,.,_'rl_,_li_p_~'r_¡_''/_-:_II_(l_' _ - r{-':"'~lmrr dl' C~¡r!"¡(;;rlI;¡ao pmo (11 J~}VV~'JJci(in y UU!'m":l'JPlo r/~ fo u'jI(I)("r· .... •

13. PIe diabético: prevención y tratamiento Pdg.187 Red de Centros de Referencia Nacionales para Prácticas
Nlllhl'rto V. Cédolo, Feden'co N. Cédola y Miguel J. Domfnguez en Servicio
111. Infecciones en el paciente diabético. Guia de diagnóstico
y tr¡¡tamie nto P{jg.211
Capital Federal: Hospitales Durand (Dr. M. Jadzinsky), Tomú (Dr. J.
Daniel Sl7Jmboulian, Hugo Paganini y Maurido Jadzinsky
Alvariñas) y Francés (Dr. I. Sinay)

15. D~abetes e Hipertensi6n arterial Pág. 227 Provinciá de Buenos Aires: Hospital Evita (Lanús) (Dr. J. Músculo), San
Guillermo Burlando Martin de La Plata (Dr. N. Cédola), Hospital Municipal de Bahía Blanca
(Dr. A. Sosa), Hospital de Tandil (Dra. N. Bellusci), Chacahuco (Dr. G.
16. Dislipidemia en la diabetes tipo 2 pag.243
Dieuzeide), Balcarce (Dr. G. Alzueta) y Junín (Dres. D.. Rímoli y J. Cintora)
Laura Schraier y Regina Wikinsky

17. Diabetes gestacional ~__ Púg.257 litoral: Ores. V. Commendatore y J. Prez


Jorge Alvariñas
Noreste: Dra. S. Lapertosa
18. Educación terapéutica de las personas Coon diabetes tipo 2 Pág.277
Juan José Gagliardino, Daniel Assad. Gabriel G. Gagliardino, Rosario: Dra. A. Libman
Elba Lahera, Li[iana Rizzuti y lulma lufriategui
Noroeste: Dr. E. A. Nader
19. Bases para la prescripci6n de actividad física en personas
con diabetes tipo 2 __ Pág. 293­ Cuyo: Dr. G. Marcucci
Nora Mercuri y Viviana Arrechea
Neuquén: Dra. M. C. Luaces
20. Tratamiento de 1" DM tipo 2: Plan de alimentación Pd.g.313
Isaac Sinay
Córdoba: Dr. J. Waitman
21. Tratamiento farmacológico ora'l d,e la diabetes tipo 2 Pág. 325
Claudio Gonzalez y José Miguel Dominguez Algunas predsiones en relaci6n con lo pro/wcsta de estlldi'o...

22. InsuLinoterapia en pel'$ona~ con diabetes tipo 2 ~ Pág.343 La modalidad semipresel)Cjul e~ u11:) ;i1,ll'~'lI'¡ I ¡Vol v(i1 idd p,¡I\¡ I,~I ~:j Lu··
León Litwak y Guillermo Dieuzeide dio y La capacitación de 1.0:; lldlll'!o'; i1drln 11111' ('olllilí:i 111', l,klllpCl~;
laborales y familiflre~; COI) 1:1 dl';,lilldiln ,d Ill'i1I'II.i(llldrllil'llln y I¡\
23, Hipoglucemias en personas con diabetes tipo 2 _~_ Pá.g.359
Cristina Faingold y Pablo Arias
actualización.

24. Di"¡¡bete~ meUitus en personas de edad avanzada _ Pág,37J Es preciso esl'ablecer ah/lIllo.'. (Iml:Ir/rI'. ¡"f'vifl'./'II/ 10.11111, ,.¡I'IIIClS O/'M'
Julio Libman, Astrid M. Libman y Pablo An'as tuno acercarle algunas suqlJll 'IIC;I/;; lfui' {¡¡'"uf J¡ ÍlllltU ',/1 rl/'t rJ"rI¿'tljIJ:

25. Evaluad6n y control del bienestar psicológico en • Existe un compromi~1J d(~ 1!... LucHo indiV'idll.i1 V.1It1ll1ll1lllll 11111' W
personas con diabetes ._.... ~.. Pág.385 traduce en la lectllrfl y rlllillbs de I.(}~ maN·d.d"', ..11111'.\1 IlIcl', (lll
Frank Snoek manual preparado pMil t ..1l. fin).

14 11 ,
/trl/I'I-/c''; v rilo' lltl:n, t; r/(' fi' '-~f.:..' c(Ha'io\'..-:;-cu/r:r

• Los módulos presentan un diseño didáctico-comunicacional que Diagnóstico y clasificación


privilegia la reflexión, la indagacQón y La producción dé trabajos
o consultas sobre los cuales discutir, lograr acuerdos e indagar. de La diabetes
• Es conveniente organizar un pLan de estudio. Trate de respetarlo
para poder generar así hábitos de trabajo eligiendo un Lugar que Martlla s, de Sereday
considere adecuado y cómodo para estudiar y fijando días y horas
de estudio, en lo posible no menos de dos horas por vez.

• Complete el análisis de cada tema o unidad antes de continuar


con la siguiente" . Introducción
• Realice las actividades propuestas, no deje de hacerLas por más
simples que le parezcan, ya que hacerlo le permitirá respónsa­ Para comenzar a transitar esta etapa do estudio, creemos necesario
recordarle cuáles son {os prop6s;fos de esta capacifación .. ,
bilizarse de su propio aprendizaje.
e Mejorar la calidad de atención de las personas con diabetes y
• En la medida de lo posible reúnase o establezca contacto con
un compañero de manera de compartir su tiempo de estudio, otros factores de riesgo cardiovasculélr y consecuentement.e la
calidad de vida de quienes las, padecen.
para ello contará con las direcciones electrónicas y lugares de
residencia de todos Los inscriptos. (Ar inscribirse cada En este pn'mcr módulo le proporlemos. como objetivo que:
participante debe autorizar o no, hacer público su e-mail),
D Revise SIlIS conocimientos sobre la forma adecuada de estable­
cer el diagnóstico preciso de DM.
Esperamos que tenga un productivo periodo de estudio.
Actividad inicia·L
Lo im'itamos a pellsar aCj~rw de:
La,s diferenles I'onn¡¡:i () pr()(:(~dÍln'ii'lllu.'1 qllc' ((IIl(líc' plll" d'¡;HllIll' ••
ticilr li1 DM
Los villol'c~ dI' n:iol'l'lwin. <[lIf' IltJll/ilIHllllIlldlllll'llll' 1J\li.\ ',11 Il:..iI I/¡If iÓll
L;:l'J pwcbi1:: o I'X(lI111 1I11 ", dI' 1.,110111111110 11111) ',1111111.1
S'i I\,~ Iwrc:irio il'ilwifll' pl"I'c1IIl" di' pe "'111 1 lIi 1 dInlln! 11'.

Lo~; crite,ill~, di! d,l'.¡lll~¡III(111 d,'ld 11M fllIl' LllIIIIII'


El, v<llrj¡' que "~.IH\qll:l " 1.11, 1',llllpill'\:iI, rlc' ¡ll I'VIII 11 11111

E5ta p,,'rrlcrn actividad 1i.'lw t 1'1/111 /inrllltl'l/II/II" 1/'.llld '<1 ' ;/1'1"1/1//1
unos il'l\'lo/III'S pllm ¡}lIItlt:11I {(I', l'IOLI';W.'. 1/1//' llil/I//II IIIIIJI/I/I'/II/I'IIII'

16
.1'"' t'/C'fIJ 'T.f;.I/','

/', 1/"111 "I/I"'./I(//llIl1li.'or In mirada,\), observar aquello que por su Recuerde que
,111/,111/1/1';,(1111 '.,' '!rl/na «seguro,').
Cada diagnóstico debe ser confirmado con otra gLucemia realiza­
/It //1 \lt '1 ( "III/l/dJll lo este análisis, lo invitamos a leer el te.'(to de la unidad da en un día subsiguiente.
l'rllJI f ¡jl/o/l, Ilnr sus respueJtas... o reflexionar sobre las divergencias.
En relacíón CO/1 la pérdida de peso...
TradicionaLmente se incluye La pérdida de peso como síntoma de
Diabetes MeLlitus (DM)
diabetes. Sin embargo, la diabetes tipo 2 se asocia con obesidad y La
U¡ Diabetes mellitus es un grupo de enfermedades metabóLicas pérdida de peso aparece en forma tardía con la progresión de la falla de
!ll'llvoc;¡das por una deficiente secreción o acción de La insuLi na y la célula IS.
Cíllilcterizadas por hiperglucemia sostenida. La ADA propuso disminuir el valor superior de La glucemia en ayunas
Dado que la glucemia es una variabLe continua no tiene una cifra de a 100 mg/dl basada en que en grandes pobLaciones la gLucemia promedio
c()rte que separe la población S,¡lna de La enferma. Por lo tanto se debe está por debajo de ese valor y que por encima de él aumenta el riesgo de
recurrir a estudios epidemioLógicos que brinden La evidencia necesaria desarrollar diabete5. Esta propuesta es motivo de controversia y no hay
para establecer los vaLores diagnósticos de La enfermedad. estudios epidemiológicos que la avalen.
Así... La denominación actuaL de prediabetes propuesta por La ADA al referirse
a la gLucemia en ayunas alterada (GAA) y a la tolerancia a La gLucosa
-la Asociación Americana de Diabetes (ADA) (1997) Yla Organiza­ alterada (TGA) es discutible. La OM5 habír.t introducido el término en 1965
ción Mundial de la Salud (OMS) (1999) -sobre Ln base de estudios estr.tbleciendo «que puede usarse retrospectivamente al rever un caso» y
realizados en grupos étnicos con alta prevalencia de diabetes (Naurues, «por definición excLLiye la tolerancia a la gluco!;a ;.üteradi:l1>. Además es un
Samoas y Pi mas) y en estudios prospectivos en los que se verificó la término inapropiado porque aproximadamolllc ~~olo un 50% de Las personas
aparición de retinopatía- establecieron eL criterio diagnóstico que se con «prediahetes» desarrollaría diabetes ül¡ los 10 ;:1I-10S siguientes,
aplica en forma universal (Tabla 1).
Por sus características particulJres el d¡::Ir¡ núsLico de diabetes en la
embarazada se describe en detílllr ('11 1'1. r,q])1 ul.o correspondiente
• Glucemi~ plasmática al azar más síntomas de rliabctes' ;~ 200 mg/dl (11.1 mmoljl)
(Capítulo 17) .
• Glucemia plasmática en ayunas ;:; 126 mg/dl (7.0 mmoljl)
* (;Iucernia pla~mjticil 2h ros cargu de 759 de glucost\
anhidra al 20% I ? 200 mg/dl (11.1 mmoljl) • ¿C6mo medir LJ glucemia?
• Glucemia en ayunas alterada (GAA) I ~ 1]0'" Y '" 126 mg/dl ...
ScgummcntL' I/:;kr! .,,(/111' 1l/Ir'.. ,
• Tolerimcia a la glucosa alterada (TGA) 2h poscaJga
de 75q de gluco$,' I ;. 140 Y<: 200 mg/dl' La med'ÍCión de L;, qIU(;I~1I1¡,\ el) f-l11l',11I1I IolpilM (1 il';l'í wdi:livas y
• Al il7M significa sin relación con la ingest.] medidores de glucemi;l) ticml' IJi!'(~I~IICj;¡ COII 1.1 111'1 lid ,'11 pl'¡'.Illtl vellOSO .
Slnlomas de DM: polifagin. polidipsia, polillria. perdida dn peso
•• La ADA propone descender el nivollnferíor alOa mg/dl EL uso de medidores de ~jl,(jt:I'l1\i;¡ (n:flect:óllli·t1l)~, Vhi(J:,\:II:,()n~~J) paríl el
•• * Estadios dcnol1l ¡nados prediJbotes por lo ADA , diagnóstico y control de lél di"bete~, merece Ulld n~C:l)l1ll'llcliltión fnrrnill:
la lectur,a cuidadosa. de 1.;\:; ctiracteTÍslicas rk \1)', 111 j·.rlll);; ya Ilue 10;-;
Tabla 1. Criterio diagnóstím de Diabetes.

19
¡!,¡,!jl. ( l,-/I,l Ji,' (JlJi "l," nl" .. ,!.l r_"_'I_'_i~_._.1_"_''_J/_i.·_; _

11,111111'1", <ir' ql.ucemiu pueden estar expresados en sangre entera o en La das ificación actual de la diabetes se basa fundamentalmente en
pI, 1',11101 velluso. conceptos etiológicos y no más en el empleo de insulina para su
I .1 HemolJ lobi na gLicosi lada A1C (en la actualidad referida como tratamiento (Tabla 3).
1\] c) no t'~ recomendada para eL diagnóstico de DM; en cambio se ha
cOllvertido en la medición de elección para el control de su evolu­ 1- Diabetes, tipo 1 I
ciúlI (Podrá analizarlo en el Capítulo 5). 1.1- [n.mu~om('di;¡da t
1.2- Jdlop~tlca
1~I'rtlc,.dc que ["T Diabetes tipo 2 I
A los fines epidemiológicos se recomienda la determina­ 3- Otros tipos específicos i

ci6n de la glucemia en ayunas por ser más simple, menos 3.1- Defectos g~nHicos en La función de la celulo B
costosa y mejor .aceptada que la prueba de sobrecarga. 3.2- Defecto~ g¡mHicos en la ~cciór;¡ de la insuLíno
3.)- Enfermedades del piÍncrea~ ('!x0crino
3.4- Endocrínopatías
3.5- lnducid~ por drot¡as o agentes químicos
[] Criterios pan la detección de diabetes 3.6- lnfecciones
3.7- Formas no CQmunes de rliabf.'te~inmunom('diadil,
La presencia de una variedad de anticuerpos antiproteírlas de la c~lula
3.8- Otros síndromes gl'néticos a,oeiJdos eventualmenl:e con día~ctes
~ pancreática (ICA, IAA, GAD) permite identificar a personas con alto
riesgo de padecer diabetes tipo 1. Asimismo existen pérsonas asintomáticas ti- ~!ibetes meltitus gestadonal JD_M_G...:>_-_" ..........

en quienes se debe considerar la detección de diabetes (Tabla 2), Arfaptado de las Rccomendacione5 dínir;os dI! lo ADA

fobIa 3. Clasificación de la diabctr...I .


Debe buscarse diabetes en:
I •Todos las personas 2 45 años. En caso de normalidad repetir cada-3 años.] Revisemos brevemente cada una de ellas
• En person<ls < 45 años que tengan factores de riesgo adicionales: Diabetes tipo 1 (antes denominada insulinodependiente): causada
• sobre peso: IMC ¿ 25 kgjm2 por destrucción de las células ~ del p¿ncreas que generalmente conduce
• familiares de primer grado con diabetes a una deficiencia absoluta de insulina. Es más frecuente en los menores
• ariltecedente de hijos can :~ 4,5 Kg. al nacer de 30 años y generalmente comienza en forma imprevista. En nuestro
• antecedentes de diabetes gestadon<ll país afecta a un O. 7 ~ 1.0 % de las personas menores de 20 años.
• hipertensión arteri¡,[ ~ 140/90 mmHg
Diabetes tipo 2 (antes denominada no insulinodependiente): abarcil desrlp.
• niveles de colesterol HOL ::: 35 mgjdl (0.90 mmoljl) y de
triglícéridos :2 250mgjdl (2.82 mmol/dl) una insulinorresistencia preponderante, con relativa deficiencia de insuUnil, ;\
• GAA o TGA en exiÍrnenl'S previos
un defecto de secreción de insulijna predominante, con insulinorresistencb.
• antecedentes personales de enfermedad cardiovascular
Es mas frecuente en los mayores de 40 con antecedentes famil¡im~$ de c!iílhl'h ,,;
Adoptado de los
.
Re(Qm(mrl(lcioll('~
-
e/inicas de lo ADA
Yse asociil a menudo con obesidad y otros factores de ri~sgo Glrdi()vrl'.I~liI,lI.
Es de comienzo lento y asintomático y en un 20 a 30 "/!. di' l~a:.II', 11110111 i
fabla 2. Critnrios de detección. requerir insulina para su control (véalo en los Capftulo~. ;"1 V" ,;,),

"O
'11. 1 1I11 . /1' 'Ir ",r" ¡'rJI 1 ¡,' II"dl
---------------
l)111butl:S gcstacionat (DMG): definida como cualquier grado de in­ Sindrome metabólico y diabetes tipo 2:
11l1"I,IIII.iol ,1 LI qll.lcosa que se inicia o diagnostica durante el embarazo, su fisiopatologia y expresión clinica
1'1111 il 111.11'I1\1 'Illt~ 01 pJrtir del 3° trimestre (lo encontrará en el Capítulo 17).

1II ""1111'11111} de sobrepeso, del sedentarismo y de la expectativa de Isaác Sinay y Juan Josú Galjliardino
Vldol ,'11 1'-1 p¡'lblación ha lLevado a una verdadera epidemia de diabetes,
l"'I'I',:i.dlllellte del tipo 2. En nuestro país se estima la prevalencia en
"III',h'l!nl' del 7% en las personas mayores de 20 años, lo que represen­
1.1 mi', dt' 1.500.000 de diabéticos potenciales. De ellos entre el 35 y
1'1 '11)% 'ignoran su condición.
n Introducción
Lil detección temprana de La diabetes y SU consiguiente tratamiento
puedell reduci r La frecuencia y severidad de las complicaciones crónicas. En esta oportunidad, el objetivo de estudio es:
H,lY que tener presente que al momento del diagnóstico aproximada­ ReranOCN los vínculos existentes entre el Síndrome MetabólicD
mente el 50 % de los diarbético5 ya presentan complicaciones macro y y la diabetes ti po 2 para lograr idenhficur ~os riesgos, diagnos­
nricrovilsculares. ticar en consecuencia y acompañar al paciente en el proceso
Si bien la evidencia científica muestra que las campañas comunitarias de alcanzar Las metas de tratamiento personales más adecuadas.
de detección de diabetes no son costo-efectivas, tienen como beneficio
secundario la concienti'zación pública de la sevendad de la diilbetes y sus
complicaciones. En cambio es costo-efectiva la detección de diabetes en
poblaciones de riesgo como en personilS con hipertensión. Actividad iniciaL
Por lo tanto
Algunas preguntas para entrar en tema ...
Se debe promover la búsqueda de personas con diabetes sin ¿Qué es el síndrome metabóLico?
diagnóstico utilizando las recomendaciones previamente expues­
tas y prevenir el progreso a diabetes clinica de aquellas personas ¿Qué vinculaciones tiene con la diabetes?
con GAA oTGA (regulación alterada de la glucemia o disglucemia). • ¿Es la sospecha de su presencia motivo de preocupación en La
consulta?
¿Cómo lo diagnostica?

• 8i bLiografia
¿Qué datos de laboratorio son indicadores precisos que d,ebe

1- ADA. Clinical Practice Recommend.ltiolls 2004. Di(llJf!((~s Care 27 (5upp 1) 511-14, 7.004 considerar?

2- ADA. Clinic~l Pr.lctice ller.omOlc~d'ltion5 2003. Diobdcs Core ;16 (Supp 1) 55-$20
3- WHO Expert Committcc on Diubetes Mellitus: First Report. Tecllnical Report Series SI':g(l((Jm~ntp usted podrá hacer preguntas nuevas y más ajlJ.';i:nnrls di'
310,1995 acu.:rdo sus il/ter"sc; y preocupaciones projé:;ionales diaria';; (n irl\!í·
(1

Le :,olicitamo5 ahora, que VUCh,C1 (J la actividad iniciol qUE:' le propu~;imos y tamos o responder las que enunciamos ya seguir pensando ('11 lo'. (1 11 1'
compare las respuestas que m "5<0' momento comideró con las <!stablecidas io preocupan, esperando que el d(]sarrol/o quo 5eguidamf'lI/t· 1'1111111/ fU

después de la l~.,ctura. Laego podrá continuu( con la fJnidad 2. ni lo ayude a responder/mi.

2':
~ '1, ,,1 • ,,jI,. J· II• '1'fl: dtdi'l" l,~~~+l ~I 'J1i;[(Pfi¡', fII. l,;h·l,(() Y d'ti{

J)t\f~ I'l idón Al leer tenga en cuenta que...

Los componentes mencionados en la Tabla 1 pueden no estar


1,1 metabólico (SM) es un cuadro heterogéneo que inclu­
':illrlrolllC'
presentes en su totalidad. Igualmente tener en cuenta que si bien la
VI' 11I;¡IÜIIJ~tH:jones clínicas (distribución particular de la grasa corpo­
consecuencia primaria del SM es el incremento de la frecuencia de
1.\1, .I1l11)(:~l1to de la presión arterial) y metabólicas (ínsulinorresistencia
enfermedad cardiovascular y de diabetes, cuando esta última apare­
y ;i1I'('¡-,¡ciones en el metabolismo de los lípidos y de los hidratos de
ce el riesgo de la primera aumenta considerablemente.
(;,11'110110), que condicionan un aumento de la incidencia de enferme­
r1;¡<! Cí'lrd'iovascular y de diabetes. Además de estas dos patologías, las
pNsonas con SM son más susceptibles de padecer afecciones tales
corno síndrome de ovario poliquístíco, hepatosis grasa, litiasis vesicular I.J Prev,alenda
coLesterínica, asma, disturbios del sueño y algunas formas de cáncer.
Aunque existen discrepancias sobre los componentes del SM, ad­ Datos provenientes de Estados Unidos de Norteamérica muestran
juntamos la clasificación propuestn recientemente por la Federación una prevalencia del SM cercana al 50% en la población entre 20 y 70
Internacional de Diabetes. años -con distribución similar en hombres yen mujeres- que aumenta
en función de la edad de las personas. En nuestro país, datos releva­
dos en poblaciones de dadores de sangre (Departámento de Metabo­
Obesidad Central (Circunferencia de cintura ~ 94 cm para hombres lismo Hidrocarbonado de la Sociedad Argentina de Endocrinología y
europeos y 80 cm e~l mujeres de igual origen). Metabolismo) muestran una frecuencia ligeramente menor.
Más dos de cualquiera de los siguientes factores
Triglicéridos:::: 150 mgjdL o con tratamiento especifico para su control.
• Fisi,opatologia
Colesterol-HDL < 40 en hombres y < 50 en mujeres o con tratamiento
especifico para su control.
Aunque la fisiopatología del SM es motivo de investigaciones en
Hipertensión Arterí-al (2 130/85 mmHg) o con tr¡¡tamiento específico curso, se reconocen en ella tres elemento~importantes:
para su C() ntro l.
Glucosa plasmática en ayunas;: 100 mg/dL o diagnóstico previo de
factores genéticos
diabetes tipo 2, • fac~ores ambientales
• factores endocrinos
Tabla 1. Cara(.terísticas del Síndrome Metabólico (IDF ConsenslIs Worldwide for
el in ical Prartire 2005), A continuocí6,¡ mraclo,-i:o/l"l1os r ((t!u /11111 rJ¡' 1'1/11',.

Es importante destacar que en esta clasificación la insu­ 1. Factores genéticos


linorresistencia no figura en forma explícita lo que no significa que no
se la considere. Dado que la insulinorresistencia aumenta en función Estaría n relacionados wn ~tj$tri buciÍJIl dl~ Id q1'[\:::'1 corporal de
de la circunferencia de la cintura, la propuesta de la IDF facilita al hpo central o androide, probablemente resultMll.l' dl' 1111;'\ ';(\lln:ciIHI
clínico su detección obviando su medida directa. natural de personas COI'1 un tipo de t~jido ad'ipo::;o ql.ll~ ll}$ nsegur,1ba

24 2 ;:~
P~.d' ,l. ~ II:!,' 4rl tlll" t"lrJrJJ' 1~'/1'~_
J," ,ir ";1"11 (l,I')"J
J
--- ----------------

la rJj~poll;bilidad de reservas energéticas suficientes y un aporte En las mujeres con SM es sumamente frecuente· su asociación con el
continuo de glucosa aL cerebro durante períodos de hambruna. Síndrome de Ovario PoLíquístíco, presentando perturbaciones menstruaLes
.v de la fertilidad, acné e hirsutismo asociados con hiperandrogenismo.
2. Factores ambientales
Son III úLtiples e incluyen:
2.1. ALimenta,rios: condicionados por la ingestión de una dieta:
I : Asociación del sindrome metabólico con La insulinorresistencia
2.1.1. Con valor calórico elevado En forma operativa podemos definir la insulinorres,istelilcia como
2.1. 2. Rica en grasas de origen ani maL («saturadas)}) la situación en la que se necesita mayor cantidad de insulina para
2.1.3. Rica en hidratos de carbono de absorción rápida (mono lograr un efecto bioLógico ~minado. Sus manifestaciones cl'íni­
y disacáridos) cas son La hiperirilsuLinemia acompañada de una menor respuesta a
2.1.4. Pobre en fibras (exceso de ali mentas «refi nadas)}) la hormona de tejidos blanco como el hígado, el tejido muscular
(estriado y liso) y el tejido adi poso.
2.2. Sedentarismo: manifestado como una:
EL Síndrome MetabóLico definido por Los criterios de OMS y ATP
2.2.1. Menor práctica de actividad física prog ramada
III tiene un poder predícbvo paril insuLinorresistencia del 78%, Esto
2.2.2. Menor práctica de actividad física en tiempo libre impLica que aunque no to,dos, la gran mayoría de las personas con
2.2.3. Menar carga de actividad física en eL trabaj o o en las SM presentan insuLi norres istencia.
tareas del hogar
2.2.4. Mayor utilización de medios de transporte para recorrer "

distancias relativamente cortas. ~ Interacción de los distintos factores patogénicos en el


2.2.5. Mayor número de horfls frente a pantalLas de televisión desarrollo de las. alter,aciones características del sindrome
y computadoras metabóLi€:o
2.3. Mig,radones y transculturizaci6n: están asociados a cambios
dr¿Ísticos en estilos de vidi1; entre los ejemplos más conocidos de Características de la grasa abdominal (vl~r Crrpftl.llo 3): la grasa
comb~nacjón de estos factores están los indios Pima (A rizona,
abdomi nal está constituid'l por ;Id í poei In', di' 111, IY0l" volumen que
los de otras locaLizacíoner" qlJ(' ~nll Ii~~; i',1 I'1Ib ", .1 101 ,¡(tiC)11 ,1ntiLi política
USA), Los inmigrantE:\$ japoneses de San Francisco y Hawai y en
nuestra Región los ind'ios Mapuches de Argentina y Chile. de la insul1 na. En consecuPIKi~1 1,,1 ~11l1l1i'1I1 (1 (11' '" 1;Ict.ividad lipol:ítica
incrementa la conrcnt.r¡;¡(jóll dí' ';11', J.l1('dlll:III~, dí' dl'q I';\d,\ción (glice­
roly ácidos gra~o~) (\1\ I,~ rin~III.1ti()llllIlIllll.l'lli'iidn "dipIJ~J() 'I:illllb'ién
3. Factores endocrinos libera citoquina5 que COIT[:r, illl.lVI '11 ,1 1" IJIIIIIVI'I' 1,1 1", 1, 1!l1I )ilOi Ilfl;ul1atorio
Según Bjorntorp, la hiperllctividad deL eje CRH-ACTH-cortisoL se­ (Liberacíón de prote11lil e re.¡\;livn) V\JlrliJOIII)loLim (lilwroll;iün dc PAI-l)
ría uno de los determinantes de la distribuci ón adiposa de tipo cen­ característicos del 5M y ,lUI11l'11LIII 1;lill'¡ulinul'rtl'.,¡'III'III:LI (di~lll'inución
tral o androide. CompLementJriamente, eL incremento deL cortisol de Liberación de adiponectil1il).
inhibe la secreción de LH hipofisaria lo que expLicaría el En el hi"gado los <'icido~; ~lr,)~Os Libres prolllIWVI:11 V d qliu'roL C~
hipogonadismo de grado variable observado en hombres con SM. substrato para la gluconeogó nesis por lo que d ¡HIII)I' 111,n di' ',u ,-IPUI­

26 7
rl¡l¡i; 1'" · ,(, r;l;"','fl' 1.(lllhi·~'d:·l'!~/{J(

I:e incrementa la producción hepática de Este incremento g~ucosa.


na una serie de fosforilaciones que comienzan con la cadena pde s'u
(~: . ¡:,worecido por la insulinorresistencia, consecutiva al aumento
propio receptor y continúan con otros sustratos. Dichas fosforilaciones
del depósito de triglicéridos en los hepatocitos, que disminuye l,os ocurren inicia lmente a nivel de los residuos ti rosi na de dichos
~~us tratos. Cuando estas fosforilaciones ocurren a nivel de residuos
dl:'cto':\ glucogenogénico, antiglucogenolitico y antigluconeogénico
de la insulina. La resultante final es una mayor liberación hepática :;erina, disminuyen la eficacia de la serial (insulinorresistencia) que
de glucosa a la circulación general. ~e verifica inmediatamente por:

<:Juna disminución de la velocidad de traslocrtci6n y actividad del trans­


portador de glucosa en el músculo y en el tejido adiposo (GLUT 4),
:> la consiguiente disminución de la entrada y utilización de la gluco­
Hígado Glucem'jól Cerebro
sa en estos tejidos y

[2] Utilización

" aumento de la glucosa circulante (hiperglucemia).


Frente a esta situación de insulínorresistencia y para mantener la
de glucosa
glucemia dentro de límites normales, las células ~ pancreáticas aumen­
i ndcpcndrente

d~ insulina
tan la liberación de il'lSulina produciéndose una etapa de normogLucemia
+
l:"
o
c:1l
", i?2("'-~~creta9o:'-"'--"
'_._~~ glúcidos )
---_ '
, con hiperinsuLinemia (Figura 2). En consecuencia La hiperinsulinemia
sería el marcador bioquímico característico cle esta etapa.
.3
.
....

I.'~:~' .'~I
l.::>
.......-..

En personas genéticamente predispuestas a desarrollar diabetes.


.JJ.j " ,"
, ,
esta sobrecarga funcional cle las céluLas ~ no puede mantenerse en
al~
I Insulina +
Utililación'd~:~~- :::::::::>. Tejido adiposo
forma indefinida y en consecuencia disminuye progresivamente la se­
creción de insulina. Esta disminución de la respuesta secretora de la
Islotes dcpendiente d"" (()5J
1, insulina y músculo
célula 13 genera cambios metabólicos que se manifiestan inicialmente
FIguro 1. Insulina y control,qlu,cémicó r:fl ayunas.
como una Ili'perglucemia po.stprandiaL (y ALteración en La ToLeran­
cia a La GLucosa) y finalmente aparece la Di.abetes tipo 2 (Figura 2).
Una vez establecida ~a disminución de la secreción de insulilna, la
Simultáneamente, el aumento rlel ,1porte de ácidos grasos libres
hiperglucemia y la hipertrigliceridemia ejercen una acción tóxica sobre
al hígado incrementa la producdón de VLDL COI1 el consiguiente
la función' y I.a masa remanente de las células 13 (g,luco-lipotoxicidad). El
aumelilto del niveL cir:cuLamte de trí9lk~ridos y La reducción de la
aumento deL estrés oxidativo (ver Capítulo 7) generado por el aumento
fracción CoLesterol-HDL. configulrilmlu ;)~·;i {;l el ir.lipidemía caracte­
de sustratos oxidables (glucosa y triglicéridos) sería el responsable del
rí stica del SM (ver Capítulo 16).
deteriom de la función y la disminución de la masa de células p. Es
En eL músculo y en el tejido adi'poso el aumento de los ácidos im portante recordar que el aumento del estrés oxidahvo también dísmi~
gr<!sos libres reduce la utilización de glucosa en l'e5puesta a la insulina nuye la utilización periférica de glucos~ en respuesta a la inf>ld,illil,
y promueve un aumento del dep(,¡~;il:l) intramioftbrrllar de triglicéridos. estableciéndose así un círculo vicioso que potencia la insulinorn,~~i';hmrin,
procesos que incrementan ¡Hi" rni:b lil insulinorresistencia muscular. la sobrecarga insular. los cambios metabólicos y las otra!,; l1lilllill"ll.dl in­
Para ejercer su acción;} Ilivdintracelular. la insulina desencade­ nes carncterístícas de la diabetes y del SM.

If
28
!.'J(/~ • ' .. lO .' ,." "'"
:,;'¡ '_"¡I,' ,1J).'f¡·b -¡,¡tI l!
. ----­
La insulinorresistencia no se manifiesta con igual magnitud '€ n to­ 1-1 conocimiento de la fisiopatoLog~a del SM y sus componentes tiene
dos los óliganos y tejidos que respondeJil a la insulina. Por ello el illllJl.iGlllcias t(>rapéuticils muy importantes. Sobre la base de su análisis el
hiperinsulinismo promueve en el ovario una mayor producción de 1\1 P III recomienda considerar a la obesidad como el primer objetivo del
andrógenos (síndrome de poliquistosis ovárica) y en el túbulo renal 11:11 ilnl iento empleando para ello la reducción del peso corporal mediante
aumenta la reabsorción de sodio, efecto este último que favorece el plilll ue alimentación y práctica regular de actividad fisica (ver capítutos
desarrollo de otro componente de~ SM: la hi pertensión arterial. 10 y 20). Aunque la metformina ha sido empleada con éxito para reducir
Hi'pertensión: la hiperinsulinemia (secundaria a la insuli­ [" incidencia de enfermedad cardiovascular en personas. con diabetes
norresistencia), coincide con el aumento de los dos elementos que I.ipo 2, no existe una evidencia similar con su aplicación en personas
determinan la presión arteríal: el volumen minuto y la resístenciil mn 5M. Otro tanto ocurre con las tíazolídinodionas (ver Capítulo 21).
periférica. El primero aumenta como consecuencia del incremento en la
reabsorción de sodio que promueve el aumento de la volemia (y del
retorno venoso). La resistencia periférica se debe al aumento de la Indicadores predictivos del sindrome metabólico
actividad simpática que estimula la vasoconstricción. Esta respuesta
está además potenciada por el aumen.toen La concentración de sodio En ciertas personas, el interrogatorio de sus antecedentes farni­
en la fibra muscullar lisa (ver también Capítulo 15). li<lres y personales suele permitir identificar una serie de indicadores
,le riesgo del 5M. Ellos incluyen:
\.
La Figura 2 ilustra claramente la asociación de insuLinorresistencia e 1
• antecedentes familiares de diabetes
insulinodeficiencia y la evolución progresiva de la alteradón del metabo­
lismo hidrocarbonato (desde el SM en normoglucemia hasta la diabetes • diabetes gestacional previa \
tipo 2). • antecedentes obstétricos: macrosomía fetal, abortos a repetición,

morbimortalidad neonatal, polihidramnios

• antecedentes familiares o personales de enfermedad vascular

ObC9íd~cJ TGA Dinbctcs


~ J~O
obstructiva en personas menores de 45 años.

o;
.E.. 2.50
m
~ 150
g
Diagnóstico del sindrome metabólico y de diabetes tipo 2
l3 ~O

:lll -S 11 ,~
III Ir, :'0 :/~ 30
"ji.", ,1" 1IIdhl'h"¡
En la Tabla 1 se enumeraron I.as anormalidades d'ínic<ls y metabólicas
que caracterizan al SM. Por lo tilllto LiJ pre~unf.ión di¡;¡gnóstica deberá
-~
:::- ],0
ln5ulinorresls­ confirmarse ulteriormente_
2;! ;;]Ol ~ 1
&& tencia

"'
-~
150 Respecto a la sospechfl V t~l di,'l'lll<'d:iw dI' diilbde~ tipo 2, Lo
100
c:
·0 ~()
invitamos a leer con detenimícnto lo:; Cap "./1 1m I .Y 4 que describen
v
§
u...
()
:11) -5 O 'i 1(1 1.'1 ]1) 25 30
los criterios y pruebas de labor,llodo pilla ~u ¡Jrcdici.'il:>11 y rLij'HJnó~ti­
I\~II": ,lo ~iah"tc'¡ co. A la lista de indicadores predictivos y díi\9111(1';Lico" IIW,J1I:iLlllildoo;
en esos capítulos, los datos rel@vados.en el interroq;Tl:ol jcl y ul eX;IIlH~1l
Figura 2. Historia natural de; la diolid.'.'; ti{Jo Z. clínico del paciente permiten identiflcillr otros t;lle~; (01110:

30 31
Manifestaciones clínicas.: • poLidi psia
e infecciones: fundamentalmente balanopostitis y vulvovaginitis, • polifagia
micosis interdigitales, enfermedad periodontal, forunculosis, • modificaciones del peso no justificabLes por cambios en La ingesta
piodermitis a repetición;
4. Presencia de síntomas generales y neurológicos

e disfunción erécti l;

e astenia

() mononeuritis. especialmente paráli sis de los nervios


o parestesias
oculomotores y deL facial.

o prurito

Asociaciones de riesgo: e visión borrosa

o disfunción sexual
• psoriasis
4.2. Examen físico (en su descripción seguimos un criterio

iI enfermedad de Dupuytren

topográfico)

síndrome de Peyronee

\) síndrome de túnel carpiano

Estos predictores adquieren mayor valor si el paciente es mi.lyor de


Si el médico dispone de un auxiliar capacitado para regis­
trar el peso y la talla l la duraci6n de este examen se reduce
\
50 años, pertenece a un grupo étnico con alta prevalencia de diabetes al recilbir al paciente en ropa liviana.
o tiene hábitos de vida, sedentarios.
Ante la identificación de cualquiera de estos indicadores se debe
determinar ~a gLucemia en ayunas y si su valor es igualo mayor de 126 Primera Consulta. Verificar y registrar los siguientes parámetros:
mg/dL se repetirá la determinación en los 2-3 días subsiguientes.
1. Peso, Talla y Distribución de grasa corporal (Calcular luego ellndice
de Masa Corporal (IMC) y Perímetro de la Cintura (ver Capítulo 3).
2. Tensión arterial medida en posición, sentada y de pie (medida en el
Interrogatorio y examen fisíco de personas con síndro
brazo hábil).
me metabólico ':J diabetes tipo 2.
3. Auscultación cardiaca, carotídell y femoraL.
Anamnesis; Es importante efectuar un interrogatorio exhaustivo
por lo que en ocasiones deberú completarse durante una segunda 4. Abdomen: búsqueda de hep.ltomegalia (hígado graso), puñopercusión
consulta. Los datos relevantes ti consignar son: lumbar y puntos ur~ter¡:¡h~$.
5. Examen de los pies (ver Capítulo '13)
1. Factores ambientales (citados en Patogenia)
Inspección: colol'"ilcíón de lil piel; U(Jhlfll111Ciol1e~j; lIIicosis
2. Los factores de riesgo Yil enunciados en Sospecha de diabe­ interdigital, hiperquerlltosis; lesione~: excoriílcione;:, úl(l~ras,
tes tipo 2 (Capítulo 1). ~bscesos. gangrena, otras;
3. Presencia de síntomas vinculados con la hiperglucemia: Palpación: pulsos pedias y tibiales posteriOl'c:.i; crlUI11<l 111 aleol<l r,
poliuria temperatura; Signo del abanico.

3~ 33
",.(¡-('/r.' IIh ~dt;.fi: n y ti d;;'1 . lj{lIl 'It ~/4·t'" df.1l-(I/· fI
niof.JI/

, glucosuria y proteinuria cuantitLltivi'ls de 24 horas*

Durante el examen de los pies, es importante mencionar al paciente


la importancia del autocuídac1o de los mismos. ( s'i el sedimento urinario es patológico, solicitar urocultivo y eventu¡¡l

antibiograma

Sí no se dispone de tiempo pom (()(l¡pteta{ todos. 1m datos. me1Joonado~ lo,;


ft¡{tantes se n>gislrarán en una consulta ulterior; A GOnt!IJUoci6n indicamos, • si la proteinuría es positiva y los valores de creatinina y urea

como continuar con el interrogatorio (eventua{menL:¿) y el examen físico: plasmáticas superan los límites normales se solicitan·) clearance de

creatinina (recordar que el clearance de creatinína no es confiable

Segunda consulta con creatininemias superiores d 1,2 mg/dL)(ver Capitulo 8)

•si la proteinuria es negativa, reo:llizar medición de mícro¡¡lbuminuria c,emícuantitatív.l


1. Piel y faneras (con tjr~ reactiva) o cuantitativa (RIA o método inmunoturbidimétrico).
dermopatías específicas de la diabetes
2. Perfillipídico (ver Capítulo 16)
• acantosis nigrkans en región posterior del cuello y axilas
• Colesterol total, Colesterol-LDL (por cálculo) y -H DL Ytriglicéridos
2. Distribución de la grasa corporal (ver Capitulo 3)
3. Electrocardiograma y eventual ergometria
• Perímetro de la cintura (medido con cinta métrica rígida, con el
paciente de píe y en espiración normal, ver Capitulo 2). Valores 4. Telerradíografia de tórax
de referencia: 102 y88 cm para hombres y mujeres respectivamente
Perimetro de 'la cadera (medido a nivel del diámetro mayor en la

\
• 6. InterconsuLtas
región trocantérea)

Cociente cintura/cadera (valores normales: mujeres < 0.8, hombres: < 0..9)
Se recomienda realizar inicialmente interconsultas con:
3. Presenóa de gíngí0tis, fJstado de piezas dentarias " OftaLmólogo
4. Examen neurológíco mínimo o Cardiólogo (si la tensión arterial o la auscultación cardíaca/carotidea

sensibilidad termoalgésica
o la modificación de los pulsos periféricos lo requieren)
.. sensibilidad vibratoriJ medi<tnte diapasón de 256 Hz
:) Nefrólogo (si la creatinina plasmática es > 1.7 mg/dl, o nay

• reflejos patelar y i:lquiliallo


proteinuria positiva

monofílamento
Q Diabetóilogo -en etapa precoz de complicaciones crónicas si no se
logran los objetivos terapéuticos propuestos­
5. Fondo de ojo: debe realizj)r~~ con pupila dilatada. Para ello se derivará
o Odont6logo (si se detectan lesiones bucales)
al oftalmólogo (solicitar eX[lIllPll de retina periférica; ver Capitulo 9).
Es muy importante citar o derivar ;:ü paciente para ~u educ[.lciól'l
diabetoLógica destacando ';(j illlport,mcíil Co!llo part(~ (J(~ su triltilmien­
5. Estudios Complementarios (ver Capitulo 4) to (educación terapéutícu, ver Capitulo 18) VqlJ(~ (~r,t:J dirig-ida tanto a
éL como a su familia.
Es preciso solicitar los siguiente~ estudios:
1. Análisis de rut'ína: En cada consu'lta, es primordi<1ll-CI11ilrGlrle ",llxl("il~n~(' l;¡ in1¡Jort,m­
cia de la práctica regular de ;]ctividad físicll y d. CLllllplilnienlu de un
hemog.rama, eritrosedimenlilció'-l, glucemia, hemoglobina glicosiLada
plan de alimentación adecuado a su condición fi!;'ICiJ y bpo di' n)(~diciJ.­
(HbAl, HbAlc)' frudo5amina (opcional), creatinina, urea, ácido
ción que utiliZa.
úrico, hepatograma, orina completa

"')' ,
~, ';,
• BibLiQgrafia ~oplo carotídeo derecho; pulsos periféricos palpables y simétricos. Presión
1. Alberti Kr., Zimmet PZ. DC'finitioll, di,)gnosis ill1d r.inssific..tion of di.. lJf'tes mellitu~ ;lrlerial165/95 mm Hg.
,llld its complicatiolls. Part 1: diagnosis alld clólssifiCltion Qf diabetes mellitus: 1rile un laboratorio reciente con hemograma, eritro, orina normales, gLucemia
provisional report o~ a WHO cunsllltatiun. Díabet Med 15:539-553,1998 1)0 mg/dl, ácido úrico 4.2 mg/dL, creatinina 0.93 mg/dL Colesterol 243 mg/dL
7. De Fron?]), R., BonnadonnJ, R.. iFcrran nin-i, E.: P,)th OgOIl(',;, of Nl DDM. Diabetes Cne 15: Triglicéridos 283 mg/dL eH DL 32 mg/dl y cLDL por cálculo 154 rng/<.Il.
316-368, 1992.
Diagnóstico presuntivo: síndrome metabólico (asocia obesidad central,
3. Grundy SM, Brew~r HB. Clp~n)JI' JI, Srtritli SC JI., Lellfillll Cfor t¡'~ COnllJll'llle PJrtilipallt~.
Definilion of Mptaboli, Syndlome: Rppol'l, Qf t.lw Nilt:ion~l He.lrt, Llmg ,)Ild Btood In,lililtr/ Iiipertensión, hipertrigliceridemia, cHDL bajo (dislipidemiil mixtil), Existe
Ameri(,)n Heart !llSociation Conferenc!! on Scientific Is!ues Relatl'd ta Definition. ,lparente vasculopatía periférica carotldea.
Ci rculation 109: (,33-435, 7.00/, Lo~. exámenes de laboratorio solicítados incuyeron: curva de tolerancia íl la
4. Grundy 5M, Hnn~r.n B, Slnitil. SC Jr" C[ncm,)1l Jl, Knhll RA lor [ollfeIPllcC' P,]lticirnnt',. IJlucosa oral (basal 94 mg/dl y a los 120 mínutos 122 mg/dl), Enzimas hepátícils
(Iinkal M~na~('ment of tihe Metabolic Syndrome: RepDrt of the N¡¡tional He¡¡rt, LUllfl .lnd (normales), Electrocardiograma (desvio a izquierda de eje eléctrico), Ecodoppler
Blood In~titllt~/Americ<)n Ht'ilrt A~>ociation Conf(~rence un Scientific hsucs Relatcd to
m.'n,)gr.IT1('Ilt., [ircu[,ltion 10'.1: 5~1"5%. 2004 .lll:erial (cuello con placíls sin sig nificación hemodi nárnica en territorios
5. K;¡hn. eR.: lOSlllin ¡¡ction, diabetogens, lInd the c¡¡use of type Il diabete~. DiClbetes 'B: rolrotideos izquierdos .Y derechos, con una placa en carót¡da externa derecha
1066-1085. 19\1It. qlle ocluye un 70% de la luz).
6. Md;¡ughlin l, Abb~~i f, Che.)1 K, Chu J, LlIllCl1dol.l e ,)nd Reo1ven G. Use of mel.. bolic Epicrisis: sindrome metabólico con impiltto en órgano blanco.
m~rkers to identify overvmight individual$ who are insulin rO$istallt. Ann lntem Med Tratamiento: información sobre que problemas puede evitar si mejora ,;u
139:802-609, 2003.
'.ituaciÓn actual, adecuación de plan de alimentación con restricdón cal6rica
7. ReJvC'n G.: Rolr. of ínlulin rp,;j.,tJIlC[' in hum,)!1 r1is['~~C'. DiJhC'I('<; .U:1595·J(J07, 1()x¡-¡.
total moderada (aproximadamente 700 calorías sobre ingreso actual), reducción
8. Third RepDrt of the National Chol~>terol Education pro~ram (NeEP) expert panel on ¡JI: grasas saturadas, de hidrato<; de carbono simples y de alcohol. aumento de
d~t~ctiulI, ~V¡Üu~tiOII and tT~~tm(ifll Df hiyh l>lood cliole,tb'rol in adult~ (Adult T.r~'ltmenl
P~nf'IIII). Final roror!. Circu[o1tiol1 106: 3143';,421, ZOOl'
fibra dietaría y restricción moderada de sodio (consumo düuio aproximado de
t~OOO mg). Iniciar caminatas durante el fin de semana hasta llegar il 150 minutos
por sem¡:¡na ,a velocidad 6/Km/hofél. Supresión de hidrodorotiazida 50 mg y
Caso CLin;co 1 Il'emplazo por EnalapriL 10 mg más hidroclorotiazida 12.5 mg/día.
Seguimiento: primer control en 2 il 3 meses. Datos constatar: reducción de
Paciente ~e)(o masculino, 48 años de Podad, con hipertensión conocida desdp.
pc~o corporal. adhesión a la práctica regular de actividad física y reducción­
hace 15 años.
',llpresión de alcohoL evaluación del perfil lipídico (para decidir eventual
Antecedente familiares: madre con diabetes tipo 2 y con colesterol elevado.
Un hermano hipertenso fallecido a los 44 ,,¡'lOS a Cilusa de un infarto de illcorporación de una estatina o un fibrato) y de la presión arterial para decidir
iJlJmento de la dosis de enlllapril si fuera necesario.
miocardio masivo.
D:ttos complementarios ti solicitar si lo permite el medio: ergometría, ecodoppler
Antecedentes persona/e!;: no registr<l antecedentes p;¡tológicos. Empleado de
cilrdíaco y microalbuminuria.
comercio, fuma 15 cigarrillos por día, bebe iíproxiOllidamente 1 lqtro de vino
diario, utiliza 2 horas diarias en viajes para llegar al. trilUJjo y retornar a su
casa, sedentario y ve tel.evisión aproximadamente 15 !loras por SemilnJ. Su
esposa trabaja y cocina y viven con 2 hijos sano~ COIl e~colaridad secundaria. Caso Clí Ilico 2
Toma hidroclorotiazida 50 mg día. No tiene indicaciol1e~ r:!i0.tillias de restricción
de sodio. P;lch~nt(l sexo femenino, 67 aiios de edad, con dislipidemia conocida desde
Motivo de (oflSl/lta: cefaleas, cansancio y preocupación puco, hól tenido registros liace 10 años.
ctomicili,lrios recientes de presión arterial de 160 mm Hg (sistólica) y 90-100 1l1Jl'i~cedante familiares: padre con diabetes tipo 2 fallecido por ACV a los fiIi
mm Hg (diastólica) además de un a,n5lisis laboral reciente con triglicéridos en ní'IO~; (pl'Icvio <í su fallecimiento tuvo am putación supracQndíilea de IllíC1ll1J1'D
valores devildos. iJli'l'1 inl pOI' gclllgrena). Madre hipertensa fallecida a los 54 aiíor. !JO! c;ilicl'l
Examen físko: Peso 84 kg; t01lla 1,68 m; circunferencia r:!r. cintura 104 cm; IMe ele 1ll;¡1ll~1.
29.8. Aparato respiratorio y abdomen siPo Ap?rato cardiovacular: se verificil I1l1t,ncud('lIl'cs personales: 3 embarazos, 3 partos, el ~equnrl() pljr l'I";,íll'oI (01
I ('rill illCl) pOI posíción pelviana; el tercero mUf'rl:l~ IH'II11011'.d pUl 10111',,1

36 ¡ '/
dC':.conocid;¡. Los pesos de nacimiento fueron sucesivamente: 3.500 g, 4.400 Obesidad'
~I.Y /1.300 g. En eL ültimo embara7.0, a los 38 aiíos de edad, presentó hipertensión
.Y (~delllils. AIl)¡¡ de casa, no fuma, no bebe alcohoL sedentaria. Vive con su
(l."PI)';O y los dos hijos sanos. La paciente cocina. Jorqe Braguinsky
Tom,) fClloribrato 200 rng/dia. No tiene indicaciones dietarias.
Motivo de Consulta: preocupación por dos registros de gLucemia de 110 y 115
IllQ/dL el recuerdo de la evolución de su padre y su obesid.¡d (aument6 10 Kg e.n
ll)~. últimos 15 anos).
E)(ump-n físico: Peso 76 kg; talla 1,54 m; circunferencia de cintura 92 cm; IMC
32.1. Ap¡¡rato respiratorio y abdomen s/p; Aparato circulatorio: presión arterial
I Propósito de esta unildad
130/80 mm Hg; pulsos periféricos: no se palpan tibial posterior ni pedio
izquierdos.
[n esta ocasión el tema que nos convoca es la obesidad., Dado que
Trae dos laboratorios recientes con hemograma, eritro, orina norm<lles, glucemia ¡:omo dice el (Jutor...
110 y 115 mg/dL ácido úrico 5.2 mg/dl, creatinina 0.84 mg/dl, Colesterol 203 '_11 cnfermedad mE'tabólica mus común ha sido encarado con desdél1 e
y 195 mg/dL Triglkéridos 203 y 182 mg/dl, cHDL 38 y 42 mg/dt y cLDL (por
indiferencia. (Frank. 1995)
cátculo de últimos datos) 117 mg/dl.
Diagn6stl'co presllnt:ivo: slndrome metabólico (asocia obp.s·idild centraL l/l/eremos darle la importancia que 5(> merece en Sil relación con la
hipertrigticeridnmia, cH DL bajo (disli pidemia mixtil). Existe aparente diabetes.. de manera que l1ucsfro., propúsitos son que usted puedo:
vasculopat.ía periférica.
Los exámenes de laboratorio solicit¡¡dos incuyeron: curva de tolerancia a la :) Analizar la correlación obesidad-diabetes en función del conocimiento
glucosa oral (basal 104 mg/ril y a Los 120 minutos 182 mg/dl), Enzim<ls actual del impacto negativo de la primera sobre la segunda y
hepáticas (normales), Electrocardiograma (s/p), Ecodoppler arterial (oclusión
severa (>90%) de arteria fp.moral profunda izquierda con buen lecho distal " definir criterios para establecer un plan para bajar de peso y así
por revascularización colateral. reducir dicho impacto.
Eplcri:.is: sinrirome metabólico con impacto en órgano blanco, en el contexto
de una tolerancia a la glucosa oral rtlteradil (a reconfirmar en una segunda
oportunidad).
Tratamiento: plan de alimentación cnn restricción calórica total moderada Actividad inicial
(aproximadamente 500 calorías sobre inf.¡W~'o ilctUíll), reducción de grasas
satu'radas'y de hidratos de carbono simple'" aumento de fibra dietilria. Iniciar Le solicitamos qU2 rewpere de su práctica profesional, pública o pril/a­
caminatas durante el fin de semilnil Ilil~til llegar i1 150 mi nutos por semana a da, lo historia clínica de un o una pacie'nte obr::io/a diabético/a. Luego
velocidad 6/Km/hora. Se mantiene re 11 11 fi hril 1:0 y ',p l(~ c:.;plica que en si cumple reflexione sobre las preguntas que seguidamente le formulamos:
los cambios de estilo de vida pre~CI'ipl(jl; pml1;dMlllentp mejorará el perfil
lipídico, la tolerancia il la glUCOC,1¡ y rlf'lollllr;'i lit proCJrrsión del problema • ,;:"Cuáles fueron las indicadones que prescribió en relación con el peso~
circulatorio descubierto en su eX,)Ill!'1I drl!'1 i.tI.
Seguimiento: primer control en ;~ a J nw~,I~~;. D;rtos él wllstatar: reducción • ,: Recuerda ClJál fue' la respuesta que obtuvo del paciente on t€rminos
del peso corporaL adhesión a la pr:ir:l:ic:¡ WlJULill de fH:tividad física, evaluación de: aceptación, adhesión, rcch020 y consultas de familiares?
de su pcrfillipídico (para decidir f'vf'nlml incorporación de derivados del
• ,:Cómo se sintió usted (Jnte las Jt'5puestas obtenidas?
ácido nicotínico) y una nueva curVól dp \:oil'rilncia a la ~lucosa oral (de persistir
su alteración a pesar de hC1ber cllIn pUdo con la5 indicaciones de plan de • ,:(w7l/)iaria alguna de fiUS indicaciones?
actividad física y de alimentación, podrá considerarse la prescripción de
Illetformina o tiazolidinedionils). • Si lo respuesta que obtuvo del paciente no fue /(1 Ifll(' 1 '5¡JI'I rilm

38 3
(I¡.¡flj /lt',' 11 f 'ti l' !:I'IJjlrf', I~l 1'/'1''',''1.: n"¡,rrf¡,·I'r.'":(I.'illl - u¿'~sj,lu'!'D

¿ore que es consecuencia de lafalta de voluntad del mismo'? o (;lri.lcterizado como una verdadera «epidemia de obesidad)),
L' qlle usted no fue lo bastante claro o enérgico.7'· d(~110minación que luego se generalizó como «epidemia global» ya que
',1' presentaba en la mayoría de los países. Trece años después la epidemia
• ,: CLima actuaría hoy?
'.\' l'xpande en forma rápida y no están claras Las medidas eficaces y
o d('¡amos pensando... !JI 'l1eralizables para detenerla o retrasar su desanolho.
D('~pu(s dL' leer este capítulo volveremos sobre estas cuesLionrs.
Se estima que en el año 2025 la prevalencia de sobrepeso (IMC
;)5) será del 70%, o sea que la obesidad será de aLrededor del 50%:
1111 mundo de gordos.
• Introducción
A principios del 2004, se estima que la prevalencia de sobrepesp en
La definición habitual de obesidad era «exceso de grasa corporaL}), parte del mundo, incluido nu~stro pais, es 58-64% de La poblaci6n
Ifl:lll
que, sj bien coloca en el tejido adiposo y no en el peso corporal lo y 1" de obesidad de alrededor del 30% en adulto,s.
defi nitorio de la obesidad, dejaba sin resolver dos cuestiones:
¿Cuánto es exceso? y
¿Cómo medir en la práctica la grasa corporal? Diagnóstico de obe,sidad
De alll que la definición más pertinente sea considerar a la obesidad
.. Medid aquello qU6 puede ser medido y convertíd. en mensurable lo
como
I/llf' no puede ser medido.)
El aumento de la grasa corporal, frecuentemente acompa­ G:alHeo G,tlilcl
ñado de incremento del peso corporal. la magnitud y la distri­ Es obvio que eL primer paso semiológico realizado en eL consuLto­
bución del exceso de grasa corporal condicionan la salud del rio es la observación del paciente que generalmente permite hacer el
o.rganismo (De Girolammi, en Bragujnsky, 1997). d'jélgnóstico. Pero es evidente que ella no es siempre suficiente pues
110 permite su identificación en casos intermedios como Los de
Veremos más adelante que en lél pr~cticil cLinica la circunferencia o ',obrepeso moderado, ni evaLuar con precisión La progresión del trata­
perímetro de la cintura tiené Ull.) bUf~na correlación con la grasa miento o Los procesos de adaptación aL nuevo peso (<<mantenimien­
intraabdominal, probablemente .(;1 qr;\';;l cnrportll regional con mayor 1m». Por Lo tanto es necesario efectuar ciertas mediciones.
impacto metabólico-vascular, En til defilrír.ióll propuesta, el exceso graso
dej¿¡ de ser un rasgo puramente <l1I;ltúnlico para alcanzar significación Estimación de la masa grasa. Como a partir de eLla ~e define en
clínica, introduciendo la nociólI dI' riesgo. parte la obesidad, es necesario conocer los porcentajes normales y
.lI1ornKlles. Su estimación sin embargo es siempre indirecta y los
Una definición operativ;) ílct11óllmente muy extendida es la que
Illétnrios mtls precisos" ti!lp.s como la psicometrla y la bioimpedancia,
determina obesidad cuando ellmJice de Masa Corporal (IMC) es ¿30
1.~5C¿¡pan il la práctica diaria.
Creemo.i que algunos datos estadi:)(¡cos selVirán para aclarar el panorama....
La bln'impedancia es actualmente el único método que reúne 1m:
Prevalencia de sobrepeso y de obesidad. En 1991 se observó eL brusco criterios de ~im plicidad, rapidez y ausencia de variabü'idad depen··
incremento de la obesidad ocurrida en la década del '80 en los EEUU, diente dnl operador.

40 .(1,"1
el" .fl (,'((j'~'(~',
'I::.~·r (1.(/1'117, - Ot· ..id!!/ - O

Se estima que en personas menores de 35 años el tejido adiposo I illtura (con mayor precisión que la relación cintura/cadera, R!Ce
representa del 12 al 20% del peso corporal en varones y deL 20 al ,1111:eriormente utilizada), es una medida adecuada de la grasa abdo~
30% en mujeres. Illinal y que podría ser un indicador de la grasa j,ntraabdominal. Es una
IIH~djci6n simple, que solo requiere una Ei nta métrica metálica, es poco
Oe mai7era que...
,i1I'ctada por La estatura y la edad y su reducción se asocia con mejoría
Se considera obesidad todo aumento del tejido adiposo de más dl~ 105 factores de riesgo cardiovascular.
del 25% en hombres y del 33% en mujeres, pues por encima de
esos valores perturban lo salud del individuo. ,: Pero en qué lugar exacto medir dicha circunferencia?

s.: IIa propuesto medir fa cintura:


Grasa corporal
11 nivel deL ombligo. En nuestra opinión, este
Categoría Hombres "/o Mujeres %
(", ~I lugar más conveniente porque es visible, ,- ',. '" ~
Normal 12-20 20-30 d¡'.minuye apreciablemente el error del observa­ '. ,'. ~ ./ '(.
1: ~ ~
di.!' y coincide con el lugar elegido por Jean Va­ ~':\ : .....
Limite 21-25 31-33
111 11.'para diferenciar mitad superior del cuerpo
Obesi'dad > 25 > 33 di' l;¡ inferior, correspondiendo a La separación
a , i i
1'1111 e 4 y 5 vértebra lumbar. Presenta un in­
J
I¡//IY (, [nn/('Il/¡m((./(y [)iogn(J.li~ orO/les,ly, 19']9 < •
t; ~~~
¡ .
,! :
Tabla 1. Crilen'os de normalidad y obosidnrf. II HlVeniente en las personas con abdomen muy i ¡.' i
JI[ \
1lIllll1inente. Como en estos. CiJSOS el ombligo '''''- ~

Curiosidades... plll'dc estar muy por debajo corresponde hacer


1",101 medición con el paciente acostado, pasando el centímetro metá­
Peso y talla. La forma habitual de! (~!~tudiar il un paciente, medir s'u I il:tl por debajo de la espalda a nivel de L4-L5. Debe tenerse en cuenta
taLLa y su peso, no merece Illayorf'~; comentarios en Los libros de la qlle en grandes obesos los siguientes niveles también son muy
especiaLidad, y esto es Lo curio~(), .va que como el peso incluye no solo 1 Ilestionables por la dificuLtad en hallar los reparos correspondientes.
al tejido graso si no también ol:ro~ tl'.jido~ (óseo, muscular, vísceras,
sangre, i'lgua, sustancias mur.os;¡~; y coLi'lgel1o), su camblo no implica Al nivel de la cresta ilíaca derecha.
obligatoriamente engorde o fld(~llJiJz"miento, Pero el peso tiene una
buena corre'lación con la grasa corporal. especialmente si se lo reladona Ln Organización Mundial de la Salud (OMS) ha preferido el punto
con la estatura, sexo, edad'y conl:pxll1ril física, medio entre el reborde costol inferior y la cresta ilíaco. Nuevamente,
I~n p~rs()nas muy obesas estos jalones suelen ser difíciles de determi­
Circunferencia de cintura (Ce) Existen

~~
llar. La OMS recomienda tomar la circunferencia de cad~ra en La máxima
numerosas evidencias acere;:) drL papel del circunferencia a nivel de los trocánteres mayores, También ha estable­
aumento de la grasa abdom111;iI. en la produc­ tirio ¡¡mjtlJ~; máximos de la circunferencia de cadera y el aumento por
ción de gran parte de las eomorbilidades I'llcil11¡\ d(~ e~tos valores incrementa la morbilid¡¡d r.ardiovil~r.ulllr.
.~}
metabólicas de la obesidad. T,ltnbiún hay am­
pLio acuerdo en que la circunferencia de la /11 'IJI'mo·. /( 'I/Iwcar que...

42 'f
II/"h,! , -'T¡:..iit"~¡(l·.(" . d(l,'
- u\",' n:.':.'7G
J)¿'~;~-,1;1tl ·111

En ocasiones el IMC debe utiLizarse <:on reservas; ya que, por ejemplo,


Aumentado Muy aumentado
- un jugador de rugby o un atleta con gran desarrollo muscular pueden
Hombre 2!: 94 cm ~ 102 cm
tener un IMC alto con menor porcentaje de grasa que el promedio y no
Mujer ~ 80 cm 2 88 cm ser obeso. A la inversa, una persona anciana con pérdida de masa
OM5, !?ecien',ement.'c la Fedcmodn lntfrnt1cionlll dI' Oirlbetes mnrf¡fir,r) estos valores adaptándol05 muscular y aumento de grasa puede tener un IMC normal. Tampoco nos
a d,fcrCIIW5 etnias y rcqioncs. Como no hay dato~'fi"dJ,'(Jir¡rlo\ de Américn del SIlr. provi¡iollalmcnte habLa de la distribución de .la grasa. Sin embargo su uso se ha
sugiere uti{i,:ar valo~es de corte máximos de! 80 Y 90 cm (){1m /lOmiJw< y ml.[jem.\ mnprctivamcnte.
universaLizado y es el indicador más utilizado parLl el diagnóstico de
TabEa 2. Riesgo asociado a/ aumento dr. lo cintura abdominal. obesidad y la OMS lo utiliza para su clasificación de las obesidades.
Razones de su uso... una razón es que su correladón con la grasa
El aumento de La circunferencia de La cintura es un fuerte factor corporal es muy buena, otra es su simplicidad y el hecho de que se basa
deríesgo para el desanrollo de diabetes y enfermedad cardiovasC'uLar. en el peso y la talla, las mediciones utilizadas en cada examen individual.
Por ejemplo en eL clásico Estudio de las Enfermeras La CC mostró un
gradiente de riesgo de diabetes y de enfermedad cardiovascular mayor
que el peso corporal o el ICe. Semiologia del paciente obeso \ I
Ya mencionamos que la simpLe 'inspección deL paciente obeso aporta
• Il1d11ces mucha información.
\
Indice de Masa Corp'oral (IMe) ti QUf1 preguntar? ~
A mediados del siglo 19 el astrónomo belga Quetelet investigó Pocas afecciones pueden dar Lugar () un interrogatorio tan rico. Los
diversos índices que se adecuaran a la reLación entre talla y peso. De antecedentes famiLiares de obesidad, de diabetes, de enfermedad
I
todos ellos e'l que se ha universalizado e~ el lLamado Indice de Masa cardíoisquémíca, La historia deL peso deL paciente, sus relaciones
CorporaL o IMC (en inglés Body Mass Index, BMI), lLamado también interpersonaLes, su vida sexual, el sueño; su conducta diaria: como y
Indice de QueteLet. Este índice di'dll'jnuye la potencia estadística de qué come, nos darán información irreemplazable.
la talla (poco relacionada con la obes'idad pero referente obligado
del peso) a:L colocarla en el dcnoll) inadar y elevarla al cuadrado. El eXLlmen físico puede ser también muy esclarecedor: el tipo de
distribución adiposa (verificado con la medición de las circunferen­
Osea: IMC = PesojTalla 2• El Pe';1l :;C) l'xpresCl en kilogramos y La talla en cias, en especial La de la- cíntura), la presencia de estrías rojas, de
metros. pigmentación (ej. de acantosis nigricans), de giba, de le5iones mic6ticas,
edemas, várices, hernias, nos darán una visión más reaL deL paciente.
Ejemplo
Hombre con 1,75 m de 92 Kg. de peso:
est;)i:III';l y
92/1.75;' "" n/3,03 = 30,7 Clasificación de las obesidades
La OM5 incluyó una clasificación de las obesidades, que normatiz3
Como veremos a contimwcidn 1m [MC:2 30 define obesidad médica.
este importante aspecto, esta información es conveniente o recomen­
Consideraciones a tener UII CUI.'nta... dabLe que usted la tenga siempre a mano si trata paciente~; obe~;os:

¿¡,(~,
,5 \1
"1
rt·'!11Q C~{("t'f)·,'(1-\.-1I/11(
-UI'" "j,]j'-D

Bajo Peso IMC -: 18,5 Puede hilber riP,'.go por otro, problemas nes igualmente fuertes abogan a favor deL criterio universal. Por lo
Normill IMe 18,5-7.4,9 Peso normaL (peso saludable) tanto y hasta que no se encuentre una respuesta apropiada conviene
Preobesidild ' IMr. 25- 29,9 P¡,jede h.lb~r il~or.iaciún con riesgo, en mantener el criterio diagnóstico de la. üMS, cuyo uso hasta ahora ha
particular CQ n IMe " il 27.5 demostrado su conveniencia.
Obesidad grado 1 IMe JO-34,9 Riesgo nlBdiano. en particu(;¡r asociado a
Nuestro cons~jo es
obc5¡dade~ centrales
Obesidad grildo 2 IMe J5-3~!.Y Riesgo severo
Obesidad grado 3 IMC ;:: {fO Riesgo muy severo (obe5idad mórbida)
Para el médico dinico en general es suficiente la determina­
ción dellndíce de Masa Corporal (IMC) y del perfmetro de cintura
Sobrepeso incluye il todo ¡Me;:: a 25, o sea eL grupo que contiene preobcsidad + obesidad
para definír crí,terios diagnósticos de ,obesidad y las metas
-
Adaptada de OM5 (19fJ7)
terapéuticas correspondientes.

Tabla 3. C/mificación de obesidad y re/ociun con áesqos segúnl'MC.


CIJncepción actual de La obesidad

~
,:Como respondería la siguiente prequnta.;·
Esta clasificación tiene la ventaja de unificar Ilos criterios diagnós­
ticos en todo el mundo y se utiliza para definir sobrepeso y obesidad; La obesidad, ¿es un factor de riesgo o una enfermedad?
sin embargo su utilización susdta críticas importantes tales como:
Oi!"}! mas r¡ Uf!
• No establece diferencias por edades: Un IMC de 24,5 puede ser
alto y quizás equivaler a un sobrepeso en muchos jóvenes y no la obesidad es heterogénea: puede ser un factor de riesgo aterogéníco
obstante, ser adecuado para una persona de 60 años. n de diabetes y también una enfermedad severa como por ejemplo la
• No establece diferencias entre sexos. obesidad mórbida y la insuficiencia cardíaca con disminución franca de
la expectativa de vida. La hipoventilación alveolar que acompaña a la
• Quizás lo mús importante, no establece diferencias étnicas.
ilpnea del sueño ocasiona graves problemas inclusive la muerte; el 80%
Ahora bien, nos incluir aquf una reflexión que le
parf'D2 pCftineni'o de las personas con insulinorresistencia son obesas o tienen algún gra­
ayudr: /i1J 5U habajo coúdiano elJ la comunidad. do de sobrepeso. La enfermedad cardiovascular, incluyendo la hipertensión
arterial, la diabetes son claros ejemplos de la gravedad que puede aso­
¿Es esta una clasificación universal o étnico especifica? ciarse íl la obesidad, en particular a algunas de sus formas..
Deh,'miOS decir qW?:
t:En su respuesta tUI/O en cuenta tolias estaE complicacionf,r; aSQón­
es una cuestión abierta y no resuelta. Numerosas evidencias de­ das a la obesidad?
muestran que un mismo criterio no es igualmente aplicable! a poblacio­
nes étnicamente muy diferentes. Estudios realizados en Australia, Chi­
na, India y en nuestro continente en México, muestran diferencias J Sindrome metabólico (¿o enfermedad metabólica?)
antropométricas que requieren otros CritN¡O·S de clasificación. Así en Tal como se explicó en el Capftulo 2, se trata de una serie de procesos
China se utiliza un IMe de 24 para definir obesidad. Sin embargo razo­ de los cuales la obesidad central forma parte, que pueden ser vistos como

46 , -¡
r;:
-Oi:.'·i,iq,i D

enfermedades independientes o como distintas. manifestaciones de una Desarrollaremos 10$ conceptos presentados en el cuadro.
patología compleja de prevalencia creciente: la enfermedad metabólica.
Etiopatogenia de La obesidad
El siguiente cuadro resume los eleméntos que caracterizan a la obesidad:
.l. Factores genéticos. la obesidad resuLta de la interacción de factores
genéticos con factores ambientales y su concurrencia varia en cada
fenotipo de obesidad. Hoy se reconoce que la influencia genética en el
Enfermedad epidémica, metabólica, cróncÍCa, heterogénea y es­ desarrollo de obesidad varía en cada fenotipo entre un 40% y un 70%.
tigrnatiztlda, caracterizada por el exceso de grasa corporal cuya
magnitud y distribución condicionan la saLud de la persona. Se Si bien ningún gen puede explicar todas las formas de obesidad, se han
asocia co,n frecuentes comorbitidades y está determinada por la identificado mutaciones en 9~nes como el de la leptina (y de su receptor)
interacción de factores ttlles como: odel receptor de melanocortina que determinan ciertas formas de obesidad.
A partir de esos hallazgos se abre la posibilidad, por primera vez. en
• genéticos, que se expres.an en un medio obesigénico en diversas obesidad, de aplicar tratamientos etiológicos. La administración de leptina,
hormonas,enzimas y otras sustancias de acción met;;¡bóLica por ejemplo, a niños con defectos en su producción, ha mejorado
ínteractuando con i ~
significativamente su obesi,dad.
• el medio (culturaLes) que incluye:
:!.
L alimentación hi percalórica/hi pergrasa, con exceso de azúca­
res concentrados, pobre en fi'bras, vegetales y fTl:ltas. (<<dieta
Tejido adiposo. El tejido adiposo ha pasado de considerarse un
simple reservorio de energía a ser un regulador de la homeostasis
energética del organismo y una glándula productora de hormonas,
\1
occidental» o «dieta gloibaL»).
:::. sedi=ntarísmo marcado (síndrome de inactividad física) que
citoquinas y metabolitos de importancia endocrino metabólica.
\
representa la cuLtura del sedentari'Smo o sedentarismo obligado. Es decir que astamos dúndole un nuevo status...
Enfermedad por carencia (de actividad). Además, intervienen El tejido adiposo como regulador de la homeóstasis energética.
otros factores como el aLcohol y el tabaquismo. La lipogénesis y la lipolisis son dos funcione-s opuestas que se suceden
La identificación de factores virósicos y tóxicos y la de acuerdo a variaciones del balance energético. El ingreso de nutrientes
comprensión de la regulación deL metabolismo energético (ingreso estimula la secreción de insulina que, por activación de la lipoproteina­
y gasto calórico), el papel de la leptina, la grelina, el GLP-l, La lipasa, promueve la entrada de las grasas circulantes (quilomicrones,
adiponectina, la acción de la insulina y de las melanocortlnas a VLDL) al adipocito (lipogénesís) y simultáneamente inhibe fuertemente
niveL del sistema nervioso central, podrán aclarar diversas dudas la lipolisis. En ocasiones se activa también la adipogénesis formándose
actuales sobre la patogenia de la obesidad. nuevos adipocitos. Si se altera la adipogénesis, el exceso de grasa
Los cambios én el paradigma. puede depositarse fuera del tejido adiposo (músculo, hígado) y generar
insu1i norresiste ncia.
Aunque lo expn~~ado muestra al exceso de tejido adiposo como
definitorio de la ob-esidad, parecería que la patología metabólica En el periodo postprandial disminuye la insulinemia, aumentan el
asociada a la obesidad (insulinorresistencia y sus consecuencias) glucagon y las catecolaminas y se activa la poderosa lipasa intraceluLar
depende principalmente de la localización de la grasa fuera deL hormona-sensible (LHS) promoviendo la hidrólisis de los TG deposita­
tejido adiposo (hígado, múscuLo). dos en los adipocitos (LípóLisis) y la liberación de glicerol y de ácidos
grasos libres (AGL). La salida de Los AGL tiene como función proveer

l.9

l ..
• Ol:c,'in'arl- D

sustrato energético a la periferia. Sin embargo, una producción /1continuación lo ayudaremos en su tarea con algunas «pistas}.' pafa un
exagerada de AGL, como sucede en la obesidad, puede inundar al hfgado tratamiento exitoso:
y al músculo promoviendo insullnorresistencia.
o una anamnesis cuidadosa y una interpretación adecuada de lo relatado por
el paciente en relación con su historia ylas características de su nutrición;
Un balance calórico positivo prolongado puede producir hi­
pertrofia de ,los adipocitos que es una causa significativa de Go el conocimiento de las características de la afección;
insuli norresi ste ncia. dedicarle tiempo suficiente al paciente en cada consulta;
J la infonnación sobre los alimentos y los productos comerciales de su
El tejido adiposo como órgano endocrino. La leptina junto con agrado disponibles, (aqul también irifluyen los costos como vimos en el
los AGL son productos importélntes de origen adipocitario. La leptina
capítulo anterior);
inhibe [a secreción de insulina, promueve insulinorresistencia y es la
principal seiíal del estado nutricional para el cerebro. Es también una [) la experiencia en el manejo de técnicas conductales, imprescindibles para
hormona clave en el desarrollo puberal. en lr.1 menarca yen la fecundidad. lograr adherenciil i.l un plan hipoca16rico.
La adiponectina, que se si ntetiza aparentemente SÓllo en el tejido Indicaciones del tratamiento. En principio está indicado en toda
adiposo, tiene una acción insulinosensibiUzadora probablemente por
su acción al nivel de los PPAR y disminuye su producción cuando aumenta
la masa de tejido adiposo.
persona con IMe ~ 30 o con IMe ~ 27.5 Yalguna comorbilidad signifi­
cativa asociada. Pero también lo está, según George Bray, en pacientes \

El tejido adiposo también libera numerosas citoquinas, ta,les como la


IL-6, el PAI-l, la angiotensina 11 y el TNF ex. Aumentan en la obesidad
(predominantemente mujeres), que sienten su obesidad como un
estigma que disminuye su autoestima. \

Objetivos del tratamiento. No son primariamente llegar al «peso


y tienen actividad pro-coagulante y de ti po inflamatorio.
ideab> o «peso teórico»), pues esto representa algunas de las abstrac­
3. Balance energético. No hay depósito de reserva grasa (engor­ ciones que tanto daño han hecho al manej,o de pacientes obesos.
de) sin balance calórico positivo, tal como lo plantea la 1a. Ley
Para lograr manteners.e en un peso infen'or al inicial por tiempo
de la Termodinámica. prolongado el paciente y el médico deben haber establecido ciertos
¿ Recuerda cuúl es? (¡cuerdos para comenzar luego a incorporar la importancia de
Hay estado de equilibrio cuando el Ingreso == Gasto; cuando el ingre­ Tener pautas alimentarias muy especificas: comer moderadamen­
so aumenta o disminuye el[ gasto (Ingreso> Gasto) hay mayor depósito te una alimentación hipograsa, con disminución fra,nca de azúcares
(engorde). Ambos términos son difíciles de evaluar ya que ~a estimación concentrados y aumento de fibra, vegetales y frutas), que no resulten
del ingreso depende de datos subjetivos aportados por la persona inte­ del mandato externo (del profesional o de uno mismo), sino que resulten
rrogada y esa información generalmente está distorsionada por el sub naturales, tal como en el caso de una paciente que decía: «yo desde
registro, oen términos cotidianos el no reconocimiento de lo consumido que hice el tratamiento como asÍ>} y habfan transcurrido tres anos del
Tratamiento. Por su extendida prevalencia, el tratamiento de la comienzo de su tratamiento.
obesidad pertenece hoy tanto a los especialistas capacitados como a Incorporar el hábito de ser fisicamente activo, con mayor desarro­
los internistas, dí nieos, gefileralistas y médicos de familia que adquie­ llo muscular y aeróbico que antes del tratamiento.
ran entrenamientos como el otorgado por el presente Programa. Esta «nueva persona») será capaz de lograr y mantener un peso más

5·0 51

~
- 01· -hlna - D

bajo. Quien por el contrario baje de peso sin incorporar nuevas pautas Actividad fisica y ejerdcioterapia. La práctica regular de activi­
previsiblemente recuperará el peso perdido a corto o a largo plazo. dad física no s610 persigue aumentar el gasto caLórico sino principal­
Illente mejorar la aptitud metabólica y clínica del paciente. Además eL
De mantener la motivación y aprender: L¡:¡ motiv<lción es el motor
ilumento de la actividad y de la masa de tejido muscular mejora la
que permite un tratamiento exitoso porque seguir un plan de alimenta­
homeostasis glucémica, aumenta la sensibilidad del músculo a la insulina,
ción hipocalórico durante meses es diñcil y requiere que el médico la
d colesterol~H DL y ayuda a direccionar La pérdida de grasa, producto
refuerce periódicamente. Pero cuando la motivación decae por diversos
del plan hipocalórico, preservando la masa magra.
motivos, lo que suele ocurrir alrededor del 40 mes, empieza a jugar el
aprendizaje, en especial de Los procedimientos conductuales. El trata­ En el mismo sentido, información adicional sobre los beneficios de la actividad
miento de la obesidad es situacíonaL, o sea, depende de la capacidad de (¡sica se presenta en el Capítulo 19.
generar permanentemente situaciones donde uno se pueda cuidar.
Farmacoterapia. Este es un tema difícil debido en gran medida afactores
Nuestro consejo es que lea sobre las técnicas conductuales, conocer­
t~xtramédicos. Los fármacos adecuados, prescriptos correctamente y
las le permitirá acompañar mejor a sus pacientes.
controlados de cerca por el médico tratante, pueden ser tan necesarios en
Duración del tratamiento. Dependerá del peso inicia'Ly de La motiva­ d tratamiento de la obesidad, como en el de la hipertensión, la diabetes y
ción del paciente. Pero esto deberá manejarse con prudencia frente aL lJ hipercolesteroLemia. En todos Los casos su administración debe asociarse
mismo, insistiendo en el logro de los objetivos planteados más arriba. .11 plan de alimentación y la práctica regular de actividad ñsica.
Para incorporar estas nuevas pautas como propias se requieren aLrededor Medicamentos disponibles. Con un criterio operativo, en realidad son
de 6 a 8 meses de trabajo consecuente. pocos los medicamentos realmente eficaces disponibles en la actual1dad y
podrían resumirse en la siguiente tabla:
Componentes deL tratamiento. Aunque probablemente lo más
importante de un tratamiento es lo ya expresado, enumeraremos los pasos
convencionales: De acdón periférica Orlistat (Xenical)
Deacaón central Catecolamfnérgicos
PLan de aLimentación. Debe rechazarse el concepto de dieta, inter­
Feniletilamínicos No !enileti/anJfnicos
pretado generalmente como un corto peñodo de alimentación muy es­
tricta. Este concepto, compartido por la gente y por muchos profesiona­
I
Fentermina
Mazindol
f Dietilpropio~ (anfepramOló1il) Fenilpropanolamina
les incluso aLgunos «obesistas}>, encamina aL tratamiento hacia el fracaso.
Los planes de alimentación para el adelgazamiento se elaborarán junto
con el paciente, siguiendo su día a día y paso por paso. Lo más conveniente
IAro;n doblO CIlfKnlnnrinhglcn
Y.. $l!fotoniné!9f.ca
I Fen propore)(

Sibutramina

suele ser un plan claramente hipograso con disminución de carbohidratos Tennogénicos Sinergia cafelna-efedrina

ca nce ntrados (du lces) y aumento de alimentos proteicos (da ras de huevo
y carnes magras). Con esto se busca no s6lo aportar proteínas de alta
calidad biológica sino utilizar su alto poder de saciedad. De todos modos el
plan es hiperproteico relativo ya que no hay un exceso absoluto de proteínas Fármacos de acción periférica: el OrListat
sino un aumento porcentual en función del valor calórico total. El Orlistat es un inhibidor uni,versal de las lipasas cuyo principio
Más información sobre el tema de plan de alimentación de personas con activo es la lipostatina. La droga no es absorbida en la luz intestinaL por
obesidad y diabetes encontrará en el Capítulo 20. lo que su acción terapéutica se concentra en Las Lipasas digestivas, en

I
52 5.
¡
- (1j'Jf..'!J:id:1d - D

particular La lipasa pancreática, disminuyendo la hidrólisis del triacílglicerol ,1 veces abundantes. Otros efectos incluyen malestar abdominaL, distensión
ingerido, bloqueando alrededor del 30% su digestión y absorción. V fliltulencía.
La excreción de grasas por materias fecales aumenta unas pocas (lIras drogas actúan....
horas después de su toma, dependiendo de la cantidad de grasa incluida
en la dieta. Drogas de acdón central
Pueden dividirse en tres tipos según actúen:
Dosificad6n. El efecto máximo se logra con dosis de 120 mg en 3
tomas diarigs. Administrado con una dieta moderadamente hipocal6rica, Via serotoninérgica (5-HT), por ej. fenflurami na y de>!fenfluramina.
balanceada y con no más del 30% del valor calórico como grasas, se Vfa mecanismos catecolaminérgicos (fentermina, dietilpropion,
produce un déficit .calórico adicional promedio de alrededor de 200 mazindol).
calorias diarias. ., Las que combinan ambas vías (serotoninérgíca ycatecolaminérgica),
Orlistat y pérdida' de pesa. Un reciente metanális'is que incluyó 11 ej. sibutramina.
estudios (6021 casos) utilizando Orlistat como terapia del sobrepeso y Drogas serotoninérgicas. La demostración de su posible papel causal
la obesidad, encontró que Orlistat logra una reducción adicional a la 1'1)la aparición de lesiones valvulares cardíacas y de hipertensión pulmonar
obtenida con placebo de 2,7 Kg al año de tratamiento. La tasa de primaria determinó su retiro del mercano.
abandono de tratamiento fue en promedio 33%. Drogas catecolaminérgic¡;¡s. Con excepción del mazindol, estils drogas
r1l~rivan de la feniletilamina.
Pero además...
Iir
Oriistat, intolerancia a la glucosa y prevención de di,abetes tipo - Anfetamina \1
2. Tanto el Programa Finlandés de Diabetes y el Programa de Preven­ - Fentermin<l
ción de Diabetes demostraron que en pac-ientes con intolerancia a la Drogas anorexigena.s catecolaminérg;cas - Dietilpropión
glucosa, una pérdida de peso promedio de un 7% disminuye el riesgo - Fenproporex
de desarrollar diabetes en un 58%. - Mazindol
Los resultados de un análisis retrospectivo de datos de 3 estudios
doble ciego, en pacijentes obesos (IMC 30 a 43) tratados con Orlistat, fiero resulta que ignoramos su ...
demostraron que la pérdida de peso con esta droga puede mejorar la Mecanismo de acción. Aunque no completamente aclararado, estas
intolerancia a la glucosa. drogas actuarían a nivel del perifórnix inhibiendo la ingesta de alimentos.
El XENDOS, estudio de 4 años, controlado doble ciego con placebo, Fentermina: Su acción anorexígena está ampliamente demostrada.
realizado en 22 centros médicos suecos entre 1997-2002, mostró que la Si bien tiene propiedades estimulantes centrales (que hace que algunos
progresión ¡} diabetes. tipo 2 fue significativamente menor en el grupo pacientes no la toleren), su potencial de abuso y adicción es bajo. Si
Orlistat + cambios en hábitos de vida que en el grupo placebo. ':e utiLiza en gránulos de acción prolongada, puede indicarse entre 15
:l 35 mg por día en una toma por la mañana. Su pico de acción es a las
Sin ,emb(Jrgo, no olvidar qUé•.. 8 hs y su máxima duración es de 20-24 hs.
El OrListat tiene efectos indeseables. Sí el consumo de grasas supera La droga más utilizada en la actualidad y autorizaaCl por la FDA para su
al prescripto, el exceso de ellas que llega al colon puede provocar diarreas, uso por un año ·es la sibutramina, La sibutramina irnhibe la recaptación de

5'~ 5,5
iabC'ii:.!" JI (;tro; .t{lc!P(f'·- d~ ri1"~.7n C:lrd;tTG"-:uit.'l I -(¡,I,"all,i-D

noradrenalina y de 5-HT causando pérdida de peso vía sus efectos sobre el 'l. Ollr';ity. Report of the British Nutrition Foundation Task force. Blackwell Sc-icnce, O~ford.
1999
ingreso alimentario y el gasto energético. Los efectos de la sibutramina
1.0. Pme,IJhin G. Schulman G. Cdlular mechanisms of insulln resistance: potel\,tiallin~\ with
son mediados predominantemente pos sus metabolitos activos producidos innammalion, Int. J Obesity 27 (5 3) 56-511: 2.Q03
en el hígado. La vida mediu de estos metabolitos es de ,alrededor de 14-16 "11. Pouliot MC. Despres JP y col. WJisl circumfererlle (mil &bdominal sagital diJmeter: best
hs, lo que permite una sola toma diaria. 5imple anthropometrí'c indexes of f1bdominal viscl;'ml .ldipo~e ti"u~ accumlllnnon, Arn J
CardioI73:460oS;199'Í
El metanálisis de numerosos estudios realizados en personas ton 1.°, Prentice A y col. Bcyond BMI. Obesily Revj~ws 2: }(,1-lt,7: 2001
IMe >25 mostró una disminución promedio de 4,5 kg/año. 1J. Snow V. Barry P, FittNman N, Qaseem ti and Weiss Kfor the Clinical offic,lCY Assr~smcnl
5ubcomíté of the Americ~n Collage of Physícians, Pharmacological amd surgicJI m¡¡n~gement
La dosis de sibutramina es de 10 a 30 mgjdia. Los efectos adver­ of obe~ity in prim~ry CClre: A clinical pr~clice guideline Irol1l lhe American College of
sos no som importantes aunque puede causar un aumento en la pre­ Physicians. Ann Interll Med 142:525-S31,2005
'5i6n arterial y de la frecuencia card¡a·ca. Por lo tanto en pacientes 1/,. Vague J. Obc$iti<1',. .lohn Llbbey and Co. London 1991
hipertensos la sibutramina debe ser usada 1;00 prudencia. Ir,. World He~ltll Ora.1niZiJtion, WHO (OM5). Obcsity. Prcvcnting ijnd MJnaging the Glob~l
Epidemi'c, G~n~VE'. 1998
Otros medicamentos así como la cirugía de la obesidad mórbida y el J G. World He.1lth Orgo1llilo1tion. I~easurl ng Obesity: clallí'fícJtion and descri ption of
tratamiento grupal de la obesidad son nítidamente especializados y anthropomctric data. WHO, Copenil~gen, 1989

escapan al marco de este capítulo.


Para terminar; le proponemos que vuelva a pemar las respuestas qu.e
formuló a las prr;:guntas que le hicimos al inicio de ,esta unidad. • ,
(aso CLínico
Este ejercicio de auto evaluación d@ las decisiones que toma vin~'uladQs 1';lciente de 46 años de sexo femeníllo obesa; padre obeso, hípertenso y con
asus prácticas, forma parte del compromiw de citudio que ,este Programa d i;lb~tes tipo 2, madre ,con sbbrepe~o e hipertensión arteriaL un hermano
lo propuso desde su comienzo. "beso e hi pertenso.
Esperamos que lo siga haóendo... Antecedentes personoles: hipotiroídismo (triltadiJ con levotimxina 100 mcgl
dia, obesidad desde la infancia, llcentuadll luego de la pubertad y en
1 r.ltamiento permcHle!nte. Dos hijo~ cu'yos pesos al nacer fueron de 3,200 kg
v3,600 kg. Durante el segundo embarazo tuvo hipertensión y aumentó 20 kg
'111(' posteriormente no bajó. Su peso mínimo fue 65 kg Y su peso habitual
Bibliograña (desde hace 10 anos) es de 84 kg; sedentaria, con hipertensión arterial
(tratada con enalapríl20 mg/día. hidraclorotiazida 12,5 mg/díil yamlodipina
1. BrQguin,ky J. y col. Obesidad. Ed. El Ateneo, ~ueno\ Airt's. 1997 ) mg/día), tabaquismo y díslípemia.
2. Ilroy (; & Greenway F. Currt'rrt ~nd potenlial drug~ for trc~tmrnt of olw_\ity. Endotr. revie-w';, Motivo de consulta: aumento de peso que no puede controlar II peS;H de
20 :805-75: 1999
intentar diversos tr¡¡tamientos.
3. Downey Morgan. Ob~sity as a dj~easc enlity Am HCiHt J 142:1091·4:2003
Examen físico: peso 90 kg, talla 1,65 m, circunferencia cintura 100 cm,
4. H~n T5. Seid~ll.)(, Lc~n MU. Thc inftuencc\ of height alld ar¡e on waist cirmmfcrencc ~$
011 illdex of adiposity in adults. Int J Obesity 21:8~-9; 1997
IMC 33.
5. Kan T5. Lt'illl MEJ Ycol. Waist. circumfcr€nr.e IPductinn ,1nd c_~rdiov.l$cuIDr bp.nf'fits Illlring
Aparato respiratorio s/p. Aparato circulatorio: presión arterial 150/90 mm
wcíght los~ in women. Int J Obesity 21:127-34;1997 Hg, Examen de miembros: Edemas en miembros inferiores, varices y
6. Joint WHO/FAO Expert (onsultalion. Dieto nutrition and the prrvcntion or ehronic disease:;. osteoa rtrasi s de rodi lla s.
Ge~ev~. 2003 Exámenes complementarios: análisis de laboratorio: glucemia en ayunas
7. Kopelman P &,5tod M. Clinical Obelity Blackwell Scíencr. Oxford. 1998 (114 mg/dl) y 2 h post carga (12ft mg/dl), triglicéridos (230 mg/dl), cHDL
B. Me TiglW 1( & col., Screening, ¡md interve~tions for obesity in adult~: summary of lile (34 mg/dl).
cvidencl' for the US prt'wntive ,~rvic~\ T~$k Forct', Ann Int. r~ed. 139: 933-969;2003 Estudioscomplemontarios: Eco Doppler venosa de miembros inferiores (ín­

56 5'
suficiencia venosa crónica), Ecografta abdominal (esteatosis hepática de primer Criterios de control y seguimiento
gfado).
de la diabetes tipo 2 Ij'l
Diagnóstico: Obesidad grado n. Sí ndrome metabólico (hipertensión, glucemia
en ayunas> 100 mgjdl, circunferencia de cintura> 80 cm, hipertriqticeridemiíl,
cHDL bajo), Estaatohepatiti~ no alcohólicil, Prediabete~. Paciente con alto
riesgo cardiovascular (presenta 4 factores de riesgo: hipertensión. dislipemia,
Pedro A. Tesone, Félix Miguel PLlchulu, Martín Rodríguez,
obesidad y tabaquismo). Claudia Vil'on"a y Jorge Waitman
Tratamiento: Se establece un objetivo de descenso de un 10-15% del peso
inicial (10kg) en 4 a G meses, que disminuirá la grasa intraabdorninal en un
30% y mejorará las comorbilidade·s metabólicas asociadas. Sé solicita iJnamnesis
alimentaria de una semana para detec"t:a'r sobrealimentación (ingesta.
hipercalórica con exceso de grasas [41,82%]). Se prescribe plan de "Iimentación Propósito
hipocalónco de 1600 Cal (1000 Cal menos que I.as necesarias para mantener
peso i1ctual), de modo qu·e disminuya entre 0,5 a 1 kg semanal y Ion el desarro([o de los contenidos de este m6dulo, esperamos que
ilproximadamente 10 kg en 3-6 meses; car<:lcterísticas del plan: glúcído5 de IIsted pueda:
digestión lenta, alta en fibra e hiposódica,. fraccionada en 4 comidas y 2
colaciones; suprimir <llcohol. Se incluye a la paciente en grupos de tratamiento ) Conocer datos sig nificativos. sobré el control y el seg ui miento
cognitivo-conductual para que reciba educación alimentaria, darle contención de personas con diabetes tipo 2, para ~uego
psicológica (para facilitar adherencia al tratamiento) y un marco adecuado
para expresar sus dificultades y compartir sus vivencias. Se recomienda pr~ctica confeccionar una lista que utilizará cUlando entreviste uno de
de actividad física (especialmente aquagym) teniendo en cuenta su osteoartritis estos pacientes.
de rodillas.
Evolución: La paciente comenzó con pequeñas. caminatas de 10 minutos 5
veces por semana con aumento progresivo hasta llegar a los 30 minutos 5 a
7 veces por semana. A los 6 meses del tratamiento bajó 6 kg y se estabiliz.ó, areas previas
normalizando su presi6n arterial y los TG. subió el cHDL y disminuy6 cantidad
~e cig,arrillos diafios. Se decidió iniciar tratamiento farmacológico con n,do que usted se ha interesado en participar en este Programa de
sibutramina (lOmgjdíll). La paciente bajó en los siguientes 3 meses 5 kg más (upacitaci6n, seguramente tendrá información (encuestas, trabajos,
y llegó a nuestra primera meta: 80 kg. (10 kg menos que el peso inicial) e i/lllestigaóones) acerca de estadísl'icas que revelen el grado de C017­
iniciamos la fase de mantenimiento con ¡)justes en la dieta e indicación de
1/01 de la glucemia de personas COIJ diabetes en nuestro país.
continuar con ~a actividad fisica y los grupos de ápoyo.
rll tal senl'ido lo consultamos:
• ¿Qué datos cuantitativos son los que maneja?

• ¿Sabe si en el centro hospitalario donde usted se dC5emperla se


realizan relevamientos o se.guimientos referidos al contro·l
glucémico de los pacientes internados y/o ambulaton'os?
• Cree que seda posible instrumentar algún tipo de control esta­
dístico de esos pacientes?

S8 59

~J
I
lJ;áb~,tt!· v r.lltJ.~ .((lCtt":,·.- rft:. ri~~qo L(udj-(wa~:~¿lk;'J ¡;t¡/mi 'm' "l If~ In ¡¡¡(l/1I:tC'S ~\¡'fll,) i. - B

Comparta con otros colegas estas westiones el imagine cómo debería


ser la puesta en acción de un control de este tipo, diferenciando la
población destinataria.
o
Confeccione tambien la lista do'nde enumere todos los controles que s:l! 12%

deberían implementwse, indicando los. tiempos de realízación de cada u


<11 menor 16%

menor 2-1%
uno de ellos. No olvide plantearse objetivos, tiempos y recursos tanto ~ Rlesgp
O menor
evento, final Riesgo 25%
humanos como económicos para la implementación. ~ relacionado In'farto RIesgo
1JJ
menor
diabetes" miocardIo retinopat1a
Una vez que haya hecho su bosquejo de trabajo, continúe COI1 la B
¡; U años" Riesgo
Riesgo
\11 extra"i6n
u eventes finale\i
lectura de la unidad para encontrar respuestas.. cataratai*
~ macrovasculares·

so
• Introducción jo 'Descenso sigllif:icativo UKPI1>S 33 llll'\t<lt 1996

Figura 1.
Como se menciona en varios capítulos de este Manual (7,8-10,12
y 13), las com plicaciones de la diabetes pueden prevenirse o retar­
ciar su progresión mediante un aj ustado control de La glucemia y de Apesar de estas evidencias y de la existencia de guias nacionales
r: internacionales basadas en ellas, en la ,práctica diaria las personas
Los otros factores de riesgo cardiovascular asociados.
ron diabetes muestran pobre control de la glucemia y de los factores
Señalamos ya que.." d(~ riesgo asociados.

En el DCCT una disminución en 10% de La HbA1c (de 8,9 a 7,2%) Aún en países desarrollados Como USA, el60% de las personas con
redujo 45% la frecuencia de retinopatla no proliferativa grave, 56% La de diabetes tiene HbA1c mayores de 7%, eL 45% es obesa, eL 28°/Q tiene
nefropatia y 60% ,la de neuropatía. En el UKPDS esta relación entre hlbAlc IlIicroalbuminuria, el8°/Q proteinuria clínica, 22% fuman, el 26% h.a
y microvaswlopatía fue lineal comprobándose que por cada 1% de dismi­ ',ído hospitalizado e'l último año y el42% considera que su estado de
nución en La HbA1c se produjo una reducción significativa de las compLi" ",;üud es pobre. En Argentina los resultados del programa QUALIDIAB
caciones vasculares y de la mortaLidad vinculada a La diabetes (Figura 1). que evalúa la calidad de atención reóbida por personas con di'abetes
d0mostró que el 62% de los diabéticos tipo 2 registrados no tenía
Finalmente, el Diabetes Epidemiolagy Collaborative Analysis 01 ninguna determinación de HbAlcen el último año y que el60% tenía
Diagnostíc Criteria in Eurape (OECODE) demostró que glucemias en­ qlucemias en ayunas superiores a 140 mg%. IguaLmente CaLeUa y col.
tre 140 mg% y 200 mg% 2 h después de la sobrecarga con glucosa, dI' la Red QUALIDIAB Mendoza demostraron que el 30% de 740
aumentan 1,5 veces el riesgo de muerte, riesgo que asciende a 2 11 ¡",béticos atendidos por especiaListas en diabetes tampoco tenían
veces con glucemias> 200 mg%. Por otra parte, el seguimiento liderminaciones de HbA1c en el último año.
durante 22 años de personas no diabéticas demostró que el incre­
mento de la glucemia en ayunas, aún dentro deL rango normal, au­ ((/b0 pre,guntarsB wáles son las causas de esta disociacíón entre co­
menta el riesgo de eventos cardiovascu1ares. IIOcimiento5 y práctica asistencial.

60 !;il

t,\
Sin duda son múltiples: mala adherencia al tratamiento, insufi­ romo decíamos...
ciente cobertura o inadecuada educación deL paciente, alta presencia
de comorbilidades (pacientes compLejos), pero frecuentemente y no j- Objetivos glucémicos
menos importante es eL desconocimiento o La falta de convenci~ :> Objetivos del control lipfdico en personas con diabetes tipo 2
miento deL médico en la necesidad de un buen controlgLucémico, Otras determinaciones posibles en personas con diabetes tipo 2
ª
el bajo número de consultas y eL poco tiempo dedicado ellas. En
3- Objetivos del control de la presión arterial en personas con diabetes
consecuencia una aLternativa de solución sería la implementación de
programas de educación continua de médicos y otros integrantes del
equipo de saLud.
J- Objetivos Glucémicos
No olvide que...
Varias asociaciones han ,propuestos objetivos de diferente grado
La mayoría de Las personas con diabetes es atendida por médícos de rigidez y complejidad. Una de las propuestas más consultada y
de distintas especiaLidades (médicos de familia, internistas, cardiólo­ .il1lple es la de la Asociación Americana de Diabetes (ADA) (Tabla 1).
gos), ellos serían los destinatarios de dichos programas que deben
informarles sobre las características que debe tener La atención de
personas con diabetes. HbAlc (%) < 7
-
Apoyan esta hipótesis las siguientes evidencias: el entrenamiento Gl Preprandial (mg%) 90 a 130
de médicos que atendían diabéticos mayores de 65 años, aumentó la Gl Postprandial (mg%) < 180
frecuencia de realización de la HbAlc y disminuyó su valor medio de
8.5% a 7.8%. Un descenso similar se Logró en nuestro medio a través L(! glucemia se expresa tanto en mg/dL (mg%) como en mmol/L. Para con­
del programa de educación de médicos generatistas implementado por vertir mmol/L en mg/dL se muLtiplica por 18.
la Sociedad Argentina de Diabetes (PROCAMEG). --------
T(lbla 1. Objetivos q(ucémicos según la ADA.

Entonces la pregunta ahora es...

¿Qué objetivos perseguir? Por ejemplo


11.1 mmol/L corresponde a 200 mgjdL
DesarroLlaremos seguidamente varias propuestas. Lo invitamos a
realizar, a medida que lee, las preguntas que considere necesarias La gLucemia postprandiaL se mide 1 a 2 h después de una comida
para una mejor comprensión de la problemática. Dichas preguntas, (pico de hiperglucemia). En diabéticos con glucemias en ayunas y
evidencia de sus preocupaciones y sus avances en eL tema, se convier­ ¡ll'eprandiales normales pero que no logran normalizar la HbA1c se
ten en una de Las maneras posibles de organizar su aprendizaje. Il\edirán glucemias postprandiales 1 a 2 hs después de comer. Para la
HbA1c debe usarse el rango de referencia emitido por el laboratorio
Reclj,('rde que puede compartirlas con otros colegas inscriptos en hioqu~míco y en general se acepta que el valor de 7% corresponde a
este programa. un 150f0 por encima deL límite superior normal.

62 63
Dif:b.~!.. .' JI 'l~1C'.tJí7'!C·¡r-;; r/~ Iln{/~J (('fJ(¡i(u·w.ndw

Aunque sus criterios son más estrictos y su lectura más compLeja, .- Objetivos del control lipidico en personas con diabetes
creemos importante transcribi r igualmente los objetivos propue-stos tipo 2
por la Federación Internacional de Diabetes (IDF)(Tabla 2), porque los
refieren al impacto de la elevación de la gLucemia sobre grandes y Para determinar las metas terapéutícas de la di.slípidemia en perso­
pequeños vasos. nas con diabetes tipo 2 reproducimos los objetivos del Programa i'4acio­
Ilal del Colesterol y su Panel de expertos para la detección, evaluación y
Se recomienda ver también los Capítulos 7 a 10. tTCltamiento de la hiperco1esterolemia en adultos (ATP In) (Tabla 3).

LDL < 100 mg%


Riesgo Bajo Riesgo Arterial Riesgo Microvascular
Trig licéri dos < 150 mg%
HbAlc % S 6.5 > 6.5 >7.5
HDL > 40 O1g% hombres y > 50 mg% mujeres
Gl Ayunas y ellO 2: 110 ;.. 125
Preprandial (mg%) f'lbia 3. Objetivos de tratamiento dol ATP 111.

Gl Pnstprandial mg% <: 135 ~ 135 > 160


: I
En el Capítulo 16 se anaLiza con profundidad las estrategias re­
qlll~ridas para alcanzar estos objetivos terapéuticos.
La glucemi(l capilar en ayunas es aproximadamente 18 mg% más Otras determinadones posibles en personas con diabetes tipo 2
baja que la del plasma venoso. La glucemia capilar postprandial es la
Existen otras determinaciones que son útiles o se proponen como
misma que la del plasma venoso.
IH5ramientas diagnósticas o de seguimiento; algunas ya tienen con­
En ocasiones la determinación de La HbAlc como indicador de la ',l'rlSO como la determinación de marcadores inmunol6gicos (GADA,

glicosilación de proteínas puede reemplazarse por la prueba de j CA, anticuerpos antii nsuli na) para el diagn 6stico de Dia betes

fructosamina. La fructosamina mide la glicosilaci6n de la albúmina I\utoinmune de Comi·enza en el Adulto (LADA).


cuya vida media es más corta que la de La Hb (3 semanas), pero su Otras cuyos resultados no implican un cambio de conducta de
correlacíón con Las complicaciones no ha sido establecida. ,,¡;guimiento o prescriptíva no justifican aún su uso generalizado en la
pl':lctica diaria. Entre ellas podemos citar: la homocisteína, el
Es útil para valorar modificaciones. del tratamiento en el corto
Iibrin6geno, la Lp(a), la proteí1na Cre_activa, el péptido e, la insulinemia,
plazo, por ejemplo durante el embarazo, y en pacientes con
v .llgunas pruebas de insulinorresistencia (HOMA, Qukki).
hemog lo bi nopatías.
Cualquiera sea eL criterio elegido, los objetivos metabólicos deben
adecuarse a cada paciente considerando la edad, presencia de - Objetivos del conrtrol de la Presión Arterial ·en personas
complicaciones, pronóstíco, otras comorbilidades, riesgo de con diabetes
hipoglucemia y habilidad para reconocerlas (ver Capítulos 23 y 24). El tema se desarrolla en eL Capítu.lo 15. Transcribimos en la Tabla 4
III'~ objetivos establecidos por el Con~enso de la Sociedad Argentina

64 65
. Cril;ri,~.~ d.- f:1¡Wr'i \' ;c'1uimicntl) ri~ l:1 1i,;1' -¡'.:: tiré' ~ ·0

de Diabetes (SAD) y el Consejo de Hipertensión Arterial de la Socie­ Detecóón y seguimiento de la neurQpatía


dad Argentina de Cardiología (CHA-SAC).
Es una compLicación seria que puede prevenirse efectivamente
mediante el control estricto de La gLucemia y de Los otros factores de
Sin Daño de Organo Blanco Con Daño de Órgano Blanco riesgo cardiovascular asociados a la diabetes. Las estrategias para
~u prevención, control y tratamiento están descriptas ampLiamente
Objetivo < 130j85 mmHg Objetivo <: 120/80 mm Hg l:n eL Capítulo 10.
Tabla ,. Valores meta de la presión arterial según ni Consenso de la SAD y el CHA-5AC.
Retinopatia
Su prevalencia y magnitud están reLacionadas con el tiempo de.
l'volución de la diabetes, siendo La causa más frecuente de ceguera
Automonitoreo glucémico 1'1) aduLtos.entre 20 a 74 años de edad. El tratamie'nto intensivo de
El tema es tratado en detalle en el Capítulo 5. 1,1 hiperglucemia y de la hipertensión arteriaL disminuye La aparición
Vla progresión de la retinopatía diabética. Su diagnóstico, prevención
ReitBramo5 .que v tratamiento se describen en eL Capítulo 9.
Su reaLízación es fundamental para valorar la respuesta indivi­
dual a la terapéutica y el logro de los objetivos glucémicos, evitar Cuidado de Los pies
hipoglucemias y hacer los ajustes terapéuticos necesarios.
El pie es la iona más vulnerable de Las personas con diabetes tipo
;~,particularmente cuando se asocian La vasculopatía y La neuropatía
Determinación de cuerpos cetónicos periférica. Las úlceras suelen preceder a las amputaciones que tienen
Está indicado en personas con diabetes que sufren una intercurrencia un costo socioeconómico elevado. Las estrategias de diagnóstico,
aguda o con glucemias elevadas o en presencia de síntomas de prevención y tratamiento se describen en el Capítulo 13.
cetoacidosis diabética.
Seguimiento cHnico
Los métodos que miden ácido ~-hidroxibutírico en sangre pueden
ser más precisos que los que determinan acetoacetato o acetona en Debe adecuarse a La mayor o menor dificuLtad para aLcanzar los
orina, ya que durante la cetoacidosis estos últimos se transforman en criterios de controL citados anteriormente. Los criterios del examen
~-hidroxibutírico y la medición en orina puede subestimar Los nive~es dínico y la soLicitud de estudios complementarios e interconsuLtas
de cuerpos cetónicos. l;n primera consulta y subsiguientes se desarrollan en eL Capítulo 2.
Sin embargo a modo de eJempLo tra~scribimos aLgunas pautas (con
modificaciones) de la Asociación Latinoamericana de Diabetes
Plan de alimentación y actividad fisjca (ALAD)(Tabla 5).
Ambos temas son tratados en detalle en los Capítulos 19 y 20 Al iniciar este módulo le propusimos la confección de una lista de
por Lo que sóLo reiteramos su papeL fundamentaL en el tratamien­ cotejo para el seguimiento y el control de los pacientes diabéticos. A
to de ~a diabetes. continuación encontrará la que le proponemos nosoUos.

66 67

·Ji\
Inicial Cada 3/4
-Anual
­ ,:NaMa considerado en su propuesta todos estos aspecl"os?
PROCEDIMIENTO
meses!l)
-
Historia clinica completa X IVlanejo del plan y objetivos del tratamiento. Educación del
Actualización datos historia clínica X paciente y su familia
Evolución de problemas activos y nuevos eventos
--­
X
-
Examen físico completo X
- -X Por su enorme importancia, el médico debe explicar claramente
Talla X
.11 paciente (ya sus familiares) los objetivos y el plan de tratamien­
Peso e IMC
-
X
- X X
1.1.1 y cuando éste lo comprende acordar los alcances del mismo. Esto

Perlmetro cintura o relación cintura/cadera X


- -X ílllplica lograr que el paciente participe activamente en el control y
Tensión arterial
----- X X X
I (',ltamiento de su enfermedad para lograr las metas terapéuticas

Pulsos periféricos X X que le permitan prevenir eL desarrollo y progresión de las complica­


1--­ .... I iones y mejorar su calidad de vida. La educación del paciente y su
Inspección de los pies X X X
X

X LlIniLia juegan un ¡papel fundamental para lograr las metas terapéu­
Sensibilidad pies (monofilamento)
Reftejos aquHeano y patelar X
- X"" I icas preestablecidas y sus características y forma de implementación
--­

Fondo ojo e/pupila dilatada o fotograña no midriática X X(4) ',(~ tratan en el Capítulo 18.

Agudeza visual X X
Examen odontológico
-X X Cuidados en la preconcepción
I--~ ---
Glucemia X X X
- --- En las mujeres con diabetes el control metabólico debe ser bueno
HbAlc X X
Parcial de orina(/) X
- - X
11 IllUY bueno con HbA lc normale~ o lo más cercanas posible aL valor

Microalbumi nuriall}
-- X X
normal antes de la concepción.
Creatinina
- X X También s.e debe ev.aluar la presencia de complicaciones. crónicas
Electrocardiograma X X v tratarlas cuando corresponda como en el caso de la retinopatía.
Prueba de esfuerzo m X X Suspender medicación como estatínas, lECA y ARA II y agentes
Ciclo educativo X X IliJ)oglucemiantes orales. Mayor información se brinda en el Capitulo 21.
-f-­ - -X
Reforzamiento de conocimientos y actitudes
~
Evaluación psicosocial X
- -X Inmunizaciones
(1) Toda per50n~ con diabcte~ drbe SN controlada al menos cada tres o cuatro meses pero
dicho (antrol puede ser moís frecuente ~i el caso lo requiere. por ejemplo. cuando est~ Las vacunaciones para influenza y antineumococcica son efecti­
hacinndo ajll~~e~ en ~1' dosi, de los medicamentos pllrJ lograr un mejor control metabólico. y disminuyen las internaciones relacionadas. Se recomienda ad­
v,",!>
(;1) Se recomienda determinM proteinuria com tiras reactivas. Si es n~gativa. medir l1Iinistrar anualmente vacuna p.ara influenza.
microalbuminuria. Si es positiva, cuantificar protelnuria en orina ~e 2(, hora,.
(l) Se recomienda l'n personas mayúre:. de 35 a¡¡o~. e';p~cialmentl' 5i V,ll1 ~ injci~r un progmma La vacuna antineumococcica requiere una soLa administra­
inttmsivo ~e. actividad física. No hay evidencia que indique la ffP.clJ~ncia de e~te examen. Iiún y refuerzo en personas de 65 años o más que fueron vacu­
(4) Estudio> de co~¡to-bene~kio ~ugierell que el examen oftalmológico se r~pit,¡ rada nados hace más de 5 años. Igualmente en diabéticos con sín­
dos ariO, cuando e" normal.
drome nefrótico, insuficiencia renal crónica y post transplantados
Tabla 5. Pautas para el control y seguimiento de personas adultas con diabet~s.
(ver Cap (tulo 14).

8 69
Como le fuimos. anticipando, en los siguientes capítulos desarrollare­ Automonitoreo
mos con mayor profundidad, los temas del control que aqui hemos
mencionado. Lo esperamos en el próximo capítulo... gLucémico y glucosúrico

Juan José Gagliardino y MarCha S. de Sereday

lJ BibLiografia
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.3. Calell,l p, ~odríguez M, Bermejo A y col. Pbstm 19 HipcrtcnsiOn Jrtcrial y r;,llidild de
Propósito
.ltonci6n de di.lbéticos: evaluación ;l trilv~s del prorrrama QUIILIDIAB 1u Jornadas N,1Cio­
nates de Diabetes Salta 2003. En esta 0poltunidad, el motivo de trabajo que nos hemos formulado es:
4. Deicllm~nn R, Castello E. Horsw~U Ret al. Improvemcnt~in Diabetie [are as Me.)"urpd by
HbA le Aftcr il Physician Edueiltion Project. Diabetes Care 2?: ~612-1516 ;199 9. .
() Fortalecer su comprensión sobre la importancia del automonitoreo

5. Gilgliard,ino JJ, De 1" HNa M, Siri Fy col. Evaluación proliminM de la calidad' de at"~cj{jn
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'l,

6. Guias ALAD de Diagnóstico, Control y Tratamiento de la Diabetes Mellitus Tipo 2. Rev. diabetes.
Asoe Latinoamer Diabetes Sup!. 1:105"167. 2000
7. Hdfris M. Helll tl1 Citre a nd I1c.atth St.ltI.IS nnd outeamos ror raticnt~ witl1 typo 2 di~bctps. }' le proponemos:
N.ltional Institute of Diabetes and Digestive and' Kidncy Discase" National Institutc'. of
He.alth, Bethc,da, M~ryla\1d USA. Diabeles Care ~3: 754-758;2000
• Defi ni r objetivos terapéuticos teniendo en cuenta eL estado

8. Slricl1iri,. M. Kishikaw<l.H, Ohkubo,Y, Wake,N: Long tenn Results of the Kumamoto Study
on Optimal Diabctes Control in Type 2 Diabetie Piltients. Diabetes Care 23 (Supplcment general deL paciente y su estilo de vida.

2):B21-B22, 2000
9. Standards of Medical C~re in Diabetes. American Diabetes Assoeiiltion.Diabetcs Care :: Ensayar estrategias de seguimiento para evaLuar el cumplimiento

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treJtOlellt or d,i.lbetC,'; Qn the developnlCllt ,¡no progre~sion of long-term (omplicatiolls in
in~ulin-d~pendent diilbetcs ml'llitus. N Engl. J Med. 329:977-986, 1993
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suL¡¡honylureils or in5ulin eompJred with eonvcntional treatment ;md rlsk of complications
¡,n patients with ty,pe 2 diabetes. UKPDS 33. Lancl't :;52:837-853, 1998 Los resuLtados deL Den y del UKPDS demostraron que mantener
los valores de HbAlc Lo más cercano posible a los normales previene
la apa.rición y retarda la progresión de las compLicaciones
microangiopáticas de la diabetes (fI'gura 1).

En la Figura 1 podrá ver la progresión de la retinopatía en función de


{os valores de HbAlc Y de [a glucemia.

70 71
(!jufllf ~ ,.. t~U:..1; (a:.:tflr¡;: d~ li;.':;r~ cardi'..'if!l:;"'uinl"

Los dos métodos disponibles actualmente para el automonitoreo, el


qlucémico y el glucosúrico son prácticas sumamentE! útiLes porque:
FPG
Incorporan al paciente como integrante del equipo de salud asu­
15 ~ -.~ 2hPG miendo un rol activo en el control y tratamiento de su enfermedad.
~
Q
- - HbAl c '.' Permiten al paciente comprobar la importancia de su participación
.~ 10
.¡..¡
ro activa, generando autoconñanza, autonom¡a y permitiéndole
é.
o corregir errores o afianzar conductas.
e
~
(1)
S Brindan una oportunidad única de mejorar la comunicación entre
a:
los integrantes del equipo de salud y el paciente.
Sirven para evaluar el grado de control metabólico logrado a lo
O
largo del día.
FPG (mg/dL) 42 87 90 93 96 98 101 1'04 109 120 , Al definir la situación metabólica en el instante (gLucemia) o
2hPG (mg/dL) 34 75 86 94 102 112 120 133 154 195 inmediata anterior (glucosuria), permiten establecer sobre bases
HbAlc (%) 3.3 4.9 5.1 5.2 5.4 5.5 5.6 5.7 5.9 6.2 objetivas los ajustes de la actividad fisica, la ingestión de alimen­
tos o la medicación.
El desarrollo de retinopatía aumenta abruptamente a paltir de valores En consecuencia, es deseable y es nuestro objetivo, que toda persona
de glucemia en ayunas (FPG)de 1.09 m.g/dL, de 151, m[J/dL 2 horas dr,spu~s
11111 diabetes, ya sea de tipo 1. tipo 2 o gestacional. realice esta práctica
de la sobrecnrga COf! glucosa y wn una HbA 1c de 5.9%.
ll.:gularmente. Debe tenerse en cuenta que hasta el programa de
.\utomonitoreo más simple requiere aceptación, educación, motivación
Figura 1. Relación entre glucemia, HIJA 1c y retinopatía.
V participación activa deL paciente. Por lo tanto, cualquier programa
tI.' automonitoreo impLica que el paciente debe recibir instrucción y
Dado que la HbAlc refleja las oscilaciones diarias de la glucemia durante dl'::;arrollar ciertas habilidades (ver Capítulo 18). Asimismo es necesario
3-4 meses, la conclusión es que el objetivo de tratamiento de las personas
('valuar periódicamente la correcta ejecución de los pasos del monitoreo,
con diabetes debe ser maTiltener los niveles de glucemia lo más bajo '01.1 práctica regular y cómo actúa eL paciente en ~unción de sus resultados.
posible. Dicho objetivo deberá ajustarse a variables personales tales .como
la edad, la presencia' y grado de complicaciones y eL grado de comprensiófiI
y aceptación de los pacientes de su diabetes. De ello se desprende que el ¡'.I."'nu'r:rcJ IJJ:n':1 r:l,urJt:UI';n IIJ:T~T.
aLcance de este objetivo depende en gran medida de la participación -- -
activa deL paciente en el control y tratamiento de su enfermedad. En tal sentido le solicit(Jmos que:
Escriba algunas opciones sobre la manera en que verificarí'il
El control de la' glucemia a' lo Largo del di~ por el propio paciente en la práctica eL cumplim,iento efectivo del automonitoFeo.
se ha logrado en los últimos años gracias a la introducdón de las
tiras reactivas y los reflectómetrós manualesl que han permitido el Identifique si tendlÍa en cuenta vari~bles tales como edad,
automonitoreo, procedimiento que ha revolucionado y facmtado nivel de educación del paciente, duracién de su enfermedad
enormemente el manejo de la diabetes.

72 7J
ni(tb.;t,-.,,- y (lr.r(1 \ .1(1(/(011',;, dr n'~;fJf) (G_r1..'(p/,::~ '~lJJ¡;r
~ 111JInl11.;t,';F~cr:'~"J ·"!hl'CI-m~/·1 V -::¡III~") ,"ric·; -g

¿Recuerda [as diferencias entre ambos tipos de automonitoreo? Negativa Vestigios + ++ +++
I
¿eud[ es la pertinrmcia de cada uno en relación con el conocimiento de G/l O 0.5 1.0 5.0 10.0
[os valores de glucemia y metas terap'éuticas seleccionadas?
(;rlifíco 1. Glucosuria.
RepcJselos mentalmente y luego lea lo que sigue, ya que allí [os describi­
mos y además sintetizamos en una gráfica su pertinencia según objetivos
Si asumimos que la orina recogida dos horas después de las comidas
buscados.
lI'qistra el período de 9'lucemias más altas, la determinación de dos
Los automonitoreos glucémico y glucosúrico son dos maneras '1IIIrosurias diarias (luego de almuerzo y cena) nos permitirá definir
diferentes de evaluar el nivel glucémico de las personas con diabetes: ',i realmente el paciente está agfucosúrico durante todo el día. En
,",I:os casos debemos indicar al paciente que evacue su vejiga antes
El glucémico define con exactitud su valor (variable según que el ,1" comer. EL control glucosúrico es solo posible sí no hay compromiso
método empleado sea de comparación visual o con refleetómetro) 1I'I1;)l ni visual.
en el instante de la extracción de sangre.
• Elglucosúrico determina en cambio si la glucemia, en el tiempo
previo a la obtención de la muestra de orina, superó los 180 mg/dL
Objetivos del tratamíento del DNID
\1
(asumiendo que el umbral renal para la glucosa del paciente es normal).
III
~
Por consiguiente, ambos tipos de monitoreo cumplen funciones 'c
distintas y su valor relativo depende del objetivo de tratamiento ..

'o
u Menor
Euglucemia
buscado. Si el objetivo del tratamiento es la euglucemia y la estrategia Q. frecuenciá de

terapéutica es la insulinoterapia intensificada con inyecciones de E com pi icaciones

8 r
insulina corriente o. análogo de acción rápida antes de las comidas ü Ausencia
(según glucemia previa y estimación de la ingestión inmediata de c: de srntomas
.
~

gLúcidos), la única alternativa es el monitoreo glucémico. Si en cambio ¡¡


Q.
se trata de una persona con diabetes tipo 2 y el objetivo deL tratamiento
es lograr evitar los síntomas de [a hi perglucemia o valores de H'bAlc I
por debajo del hipotético umbral para el incremento de complicaciones Medios . . - - Glucosuria ---......- Glucemia ---..
microangiopáticas (glucemias < 180 mg/dl todo el día), el monitoreo
glucosúrico es una alternativa váLida y eficiente. En todo caso, se puede figura 2. Elección de la técnica de automonitureo seg¡in objetivos del tratamiento.
iniciar el autocontrol con mon~toreo glucosúrico y pasar posteriormente
al glucémico cuando ya el paciente adoptó la sistemática del
automonitoreo yasumi6 su rol activo en el control de la enfermedad. Los reflectómetros utilizados actualmente para el monitoreo
qlucémico tienen una gran exactitud. Pero es necesario verificar si el
El gráfico siguiente muestra [os valores de glucosuria correspondientes l'I'sultado que expresan se refiere.a sangre entera, o a plasma ya que los
a cada símbolo del envase de venta de las tiras reactivas. valores plasmáticos son 10-20% más aLtos. As,imismo, recordar que los


75
~__ ___ ---=-!1~'.'!!~\~1.'(:~. . ~") .~{(.'Cr_ r_n1L-;,.1 y r:b.t~L~ :~'n:¡' . g

métodos de laboratorio miden la glucemia en plasma (o sangre) venoso g'·1 /Icrde que «Enseñar es, ante todo y sobrE' todo, aprendeo~
y los aparatos de automonitoreo la miden en plasma (sangre) capilar MigueL de. Unamuno...
y que si bien dan valores iguales en ayunas difieren un 20% (capilar ¡,.
NiI dude que usted puede aprender de su paciente diabético.
venosa) en condiciones pospral1diales.
El uso de los reflectómetros es también recomendable en hospitales Como ya dijimos La HbAlc representi:l el promedio de glucemias
o unidades de atención primaria lo que requiere asegurar su rli.lrío de un período prolongado mientras que la glucemia refleja el
mantenimiento periódico adecuado. Aunque los nuevos reflectó metros v.llm deL instante de la toma de sangre (ver Capítulo 1). Sin embargo
almacenan los datos y permiten análisis sofisticados de la información, ('11 lunción del promedio de glucemias diario se puede estimar el valor

una eva luaci6n senci lla y efectiva puede efectuarse registra ndo qw' tendría la HbAlc tal como se muestra en la Tabla 2.
simultáneamente los valores del automonitoreo, la medicación utilizada
y un evento como una hipoglucemia (modelo de la Tabla 1). "~
r, % HbAl( ,

c:J Rápi 4
Mes: Insulina·" c::J Retarda Autocontrol I Observaciones I "
-. 5
Desayuno Al Me Cena De i Al Me Cen >tlTES
DOIMII 6
-
Lunes
----~.

Martes
(Fj; /10m r.xacf.o de
_._ .. _-_ .. , ..
7
8 \:

9 f
MiércoLes

L
_ JLlcves
~~ ,1
... _..
- 12 1

Viernes 13
. ...._._ ·_··- __<1 I
:-;-:---- ~--_.;'
Sábado Golcf5tcin rle c/inicrl! Oiabates 13 :60. 1995
~_ ..
DomIngo Tobla 2. Relación entro HbAlc Y promedio de glucemias en el DCa

• 5i no se inyecta insulina anote la medicación /¡ipofJluccmiante,

Tabla 1. Modelo de Hója de Registro Diano de valores de al/tomanitorco, medicación


y eventos clínico-metabólicos,
'Cómo se definen {os objetivos terapéuticos?

Como mencionáramos anteriormente, el médico y su paciente deberán


definir el objetivo ideal en función de la edad del paciente, su estado
Este modelo de registro es el más recomendable, pero recuerde que I"isiológico (crecimiento, pubertad, embarazo, geronte), la presencia y
usted puede y debe adaptarlo a las necesídades de cada pacíente en '.lrado de avance de las complicaciones crónkas de la diabetes y el
particular, dedicándole el tiempo de explicación para el autocontrol que qrado de comprensión y aceptacíón del paciente respecto de su
sea preciso, aún cuando sabemos que no es tiempo lo que nos sobra!!!!!!! enfermedad. Definido ese objetivo, el médico (con la colaboración del

76. n
resto de los integrantes del equipo de salud, en el caso de un grupo Evaluación económica de la diabetes
institucionaL}, se esforzará para, que el paciente lo comprenda y le de los factores de riesgo cardiovascular
motivará para que lo asuma y haga lo necesario para alcanzarlo.

Juan José Gagliardino y Joaquín E. Caporale


Ello i mpli ca aceptar que el objetivo terapéutico que se pretende
lograr no es una decisión plivativa del médico, sino que es el fruto
del acuerdo entre él y la persona con diabetes.

Introducci ón
La Asociación Europea de Diabetes esti:lbleci6 una serie de parámetros
que se describen en el Capítulo 4 de este Líbro y que facilitan la elección T<ll como se describió ét1 el Capítulo 1, el número de personas con
del objetivo terapéutico. d¡,-lhetes aumenta permanentemente y la Organización MundiaL de la
En conclusíón, dada la importancia del automonitoreo en el control '.. dud estima que en el año 2025 habrá en el mundo 300 millones de
y tratamiento de l<l diabetes, debemos hacer un cuidadoso análisis jl"I::;onas adultas con di·abetes. El 80% de esas personas estará en
I
siguiendo las pautas descriptas para elegir el método que mejor se 1,\': países en desarrollo lo cual afecta él nuestro Pars. 1\
adapte a las necesidades de nuestro paciente. \ "

La atención de Las personas con diabetes consume habitualmente


Después de la Lectura de esta unidad, seria apropiado que usted ('lliJe el 5 y el 10% del presupuesto total de Salud y ese porcentaje
revise las propuestas que imaginó para realizar el seguimiento de sus pudría aumentar considerablemente en función de Las cifras mencio­
pacientes diabéticos, realizando los cambios que considere neces_arios Il.ldas anteriormente, En consecuencia es necesario anatizar las cau­
para mejorarla y lograr así una mejor respuesta a las necesidades de ',01'; que generan el alto costo de la diabetes e implementar estrategias
cada uno de ellos. qlle permitan disminuirlo para que en el futuro no se agraven los
Recuerde que un texto breve como «hoja de ruta» escrito en forma IlIoblemas económicos que enfrenta hoy nuestro sistema de salud. Por
clara y precisa es de gran ayuda para aLcanzar los objetivos terapéuticos IIl:ra parte, la aparición continua de nuevos procedimientos diagn6sti­
1 o~ y terapéuticos hace que !las entidades de financiamiento de la
que beneficiarán a su paciente.
'"ilud presten cada vez más atención el las ecuaciones costo/beneficio
V costo/efectividad de cada una de ellas para decidir su grado de
(ubertura. En consecuencia el médico necesita hoy conocer algunos
,l':pectos bilsicos de economía de la salud para elegir y para justificar
Bi,bliograña­ '.II'~ prescripciones sin resignar criterios de ética y equidad médica.

1 American Diabetes As.ociation. Clinical Practice Recommendation~ 200'•. Di~bl'te5 Ca'fc


27 (Suppl 1). 2004
~ GuídelincI for Diabete, Careo /1 de5'ktop lJ~ide to Tvpe 2 Diabete, Mellitm. Europ"",n Actividad inicial
Diabetes PolicV Group. 1998-1999.
3 Report of tlle Experi: (omml~tee on tlle Diagnosis an~ et~$;.ification of Diabetes Mcllítus Ilodo que en este capítulo se aborda el tema del costo econ6mico de la
Diabetes eare 199 i : 20; 1183-1197
I 'I/rermedad, le proponemos que, para entrar en tema, estíme cuál es el
" Viberti Ge. ¿Un umbral glucél1lir.o Pclf;¡ l;JI cOlllplir.;¡ciollf'~ df' la diabf'trl? Ncw Engl J Med
332: 1293 .199:.. /nsto mensual que tiene una persona con diabe.tes para atender su salud.

a 1.
Algunos parámetros a tener en cuenta: • costo-efectividad, en la que se compara el costo de una intervención
y los resultados obtenidos, expresados en unidades físicas tales como
• Visitas al médico (gastos de traslado, bono de consuLtas... ) años de vida ganados, días de invalidez prevenidos, reducción de la
• Análisis de Laboratorio (trasLados. valor del bono de práctica... ) presión arteriaL o de Los valores de HbAlc (dinero vs. Unidades fisicas).
• Medicamentos (cobertura de Obra Social. .. )
• costo-utilJ'dad, donde la efectividad de una intervención se expre­
• Internaciones por complicaciones

sa mediante una unidad de medida que incluye la calidad de vida.


Actividad física
tal como los Años de Vida Ajustados por Calidad (AVAC) o en inglés
Otros...
los Quality Adjusted Lije Years. (QALYs) (dinero vs. calidad de vida).
¿ Tiene una cifra estimada?, ¿ Había hecho ese cálculo?, ¿ Lo sorprende?
Ahora lo invitamos a continuar leyendo. I El análisis de lós costos
Generalmente La Literatura clasifica Los costos en directos, indirec­
El análisis económico en la salud 11\', e intangibles. Los primeros se dividen en costos médicos y no
Illl'dicos e incluyen los recursos utilizados en el controL y tratamiento
EL anáLisis económico permite estimar eL costo de las enfermeda­ ti.' una enfermedad, en nuestro caso La diabetes. Los costos directos
des y evaLuar la relación costo-efectividad de diferentes programas Illl:dicos constituyen La tipoLogía más utiLizada para determinar el
impLementados para su prevención y tratamiento. Este análisis es illl)ll1cto de una enfermedad y también para evaLuar el costo de una
sumamente útil para priorizar gastos en la formación de presupuestos i1"I'C'Tminada intervención.
y para eL proceso de toma de decisiones.
Los indirectos representan los costos asociados a la pérdida de
Para determinar el peso relativo de una enfermedad como La dia­ ploductividad: ausentismo laboral, jubilaciones y mortalidad prematu­
betes, el análisis económico emplea dos enfoques diferentes: 1,1 V:;u cálculo es sumamente compLejo dado que se trata de asignar un

descri ptivo y v,ilm monetario a la vida,


c: evaLuativo Los costos intangibles están representados por el estrés, eL sufri­
El primero es utilizado frecuentemente y permite determinar los Illil:11to y eL dolor que eL individuo debe soportar como consecuencia de
recursos utilizados y los potenciaLmente perdidos en reLación con una ',11 enfermedad. Dada la diferente subjetividad individual su cálculo
enfermedad determinada. Sin embargo esta metodoLogía no demues­ jllI:senta importantes dificultades.
tra la eficiencia de distintas estrategias respecto a la utilización de
los recursos y por lo tanto pierde relevancia en la toma de decisiones. ":videncia empiri'ca del costo de la diabetes
EL enfoque evaluativo permite analizar y comparar los costos y
los resultados de una o varias intervenciones para determinar su La mayor parte de las evidencias respecto a los costos de la dia­
eficiencia en eL uso de los recursosecon6micos. I",tes provienen de países desarrolLados como Estados Unidos y paí­
',! '~, de Europa y expresan generalmente costos directos médicos. Así
Las formas de evaluación de este tipo más frecuentemente utiliza­ pOI' ejemplo en Europa el costo directo médico anual promedio per
das son: (npila es de 2.834 euros, siendo Alemania y España los países con
• costo-benefido, en la cuaL tanto el costo como el beneficio de v,llores extremos (3.576 ± 920 y 1.305 ± 2197, respectivamente).
una determinada intervención se expresa términos monetarios 1'01' su parte La Asociación Americana de Diabetes estimó que en
(dinero vs. dinero); 1()92 la atención de personas con diabetes consumió 92.000 mi llo­

o 81
h'ldl/(1{ Ifll) 1'( ,II/(J¡ui¡"!l d Itl (/'-(Jl': 'l lit: Y d~ /;; - f~c:tGlt;: di' n'(..-(j',.1 cnri1¡!.~~':l[ul{(r -1:,

nes de dólares (14,5% del presupuesto de salud de los tstados Uni­ E~; importante considerar que, tal como se muestra en la Tabla 1,
dos). Cabe mencionar que está demostrado que la magnitud del cos­ 1,1 rrecuencia y duración de las hospitalizClciones aumenta en fun­
to de atención no es proporcional ~ su calidad, lo que implica inten­ I 11111 de la presencia de complicaciones crón'ícas y del grado de co,n­

tar permanentemente optimizar el uso de los recursos independien­ IllIl metabólico de lal personas co n DM.
temente de la cantida,d disponible.
Hay otras evidencias que serlalan el impacto Flegativo de las com­
Se estima que el costo anu¿Jl per capita de una persona con DM plicaciones sobre los costo,; de atenci6 n: en Suecia la su ma de cos­
es de 2 a 5 veces mayor que el de las personas sin DM. Aunque en In'~ directos e indirecto$ de la DM alcanzó en 199¡¡, la cifra de 5.476
nuestro país no hay estadísticas que comprendan tado,s los IlIilLones de coronas suecas (equivalente a 557 millones de dólares
Subsectores de Salud, estudios realizados por nuestro grupo en el "'.tJdounidenses). El 75 % de estos recursos se utilizó en el trata­
Subsector de la Seguridad Social muestran una relación 5:1 entre el 111 il~nto de las complicaciones de la enfermedad.
costo de personas con y sin DM.
El impacto negativo de las complicaciones de la diabetes se veri­
Cuando se analizo l<:l estructura de los costos directos Inédi­ I ice)también éll nivel de lO$ costos indirectos. En un estudio local se
(Os, se verifica que en general las hospitalizaciones representan el ,j"mostró que el Jusentismo laboral aumentaba sólo en personas
50%. Tal Como demostramos en un e·studio de hospitalizaciones de 1[118 tenían complicaciones crónicas. Algo sim1lar ocurrió con las

personas con diabetes desarrollado en la ciudad de La Plata (Argen­ jlilrilaciones por discapacidad: en el periodo 1984-86 la diabetes
tina), el costo anual per cápita de las hospitalizaciones de personas III:UPÓ el tercer lugar como caLlsa de esas jubilaciones entre los em­
con DM fue significativamente mayor que el de las personas sin DM pl~ados públicos de lal Provincia de Suenas Aires. La presencil1 en
apareadas por edad y se>!o (US$ 1628,00 vs. US$ 956,00). Esto fue dlas de manifes.taciones macroal1giopáticas (lAM, ACV y
consecuencia de la combinadón de:· ,Imputaciones) y mic;roangiopáticas ((eguera) fueron las responsa­
hles d0 las discapacidades. El costo anua l de esas jubilaciones, con­
• altas tasas de internación (6 al 10%), ',f'cutivo a l.os años de productividad perdidos, alca nz6 los U$5
• mayor tClsa de reilnternaci6n (52% vs. 9%), J.3,660,00 y U5D 23.660,00 per copita para mujeres y hombres res­
• estadías más prolongadas (práctica mente el doble), pectivamente,
mayor utilización de recursos diagnósticos y terapéuticos de
alta comp:lejidad. En consecuencia la estrategia razonable para bajar el costo de
:Itención de las personas con diabetes y optimizar el uso de recursos
Promedio de dias de internación cada 100 personas I
I'conómicos, es disminuir el desarrollo y progresión de las complica­
.-iones de esta enfermedad.
Nivel de HbA 1c Sin complicaciones Con complicaciones
(nivel de control) crónicas crónicas Estudios como el DCCT, el UKPDS y el Steno 2 han demostrado
<O 8·'" (bueno) 4,6 30,3 ~~=hacientemente que las compLicaciones crónicas de la diabetes
8-10% (reguló)!) 4,2 37,9
pueden prevenirse mediante el control estricto de la glucemia y de
--­,. 10% (malo) 9,3 74,2
los factores de riesgo carcliovascular asociados coh una relación cos­
to-efectividad favorable.
Adaptado de Diabetes (are 1:51,2001
En la. Tabla 2' se muestra el costo del tratamiento empleado en el
Tabla 1. Días eJe hospit:alizaci6n por complicaciones agudas según nivel de HIJA le UKPDS y en la Tabla 3 la relación costo-efectividad obtenido.

82 83
IJiU/il'tr'" V 1'/11 fl~c¡-ou"'" d IIlo"9r cr,dh'~'o.' (uJnr

Luego de un año de seguimiento los afiliados en programa


Costo promedio Control Control
por paciente (í) convencional intensivo Diferencia lll<.'joraron significativamente los indicadores clínicos y bioquímicos,
¡[ i:;llIi nuyeron la frecuencia y duración de s.us hospitalizaciones y
Costo deL tratamiento 3.505 4.245 740 11 "Ij aro n un 28% el costo anual de atención per copita (Tabla 4).
Costo de las Complicaciones 5.580 '•. 630 -949

Costo TotaL 9.085 8.875 -209 Categoria del Diferencia


Control PROPAT
Co,sto Directo MédIco
Adaptado de 8Titis/¡ Med. J. 1998.
IItención Ambulatoria 440,3 178.7 261,6
Tabla 2. Costo de intervenciones utilizadas en ei UKPDS. 390,9 281,2 109,7
l"1edi camentos
f'r:lcticas por Lilboratorio 73.9 43,1 30.8
Los da'tos de la Tabla 2 demuestran que el tratamiento intensivo
disminuye el costo de atención debido a su impacto favorable sobre Hospitalizaciones 1.881.8 1.503,7 378,1
el desarrollo y progresi6n de las complicaciones, mientras que los Costo Directo Médico 2.787,1 2.006,8 780.3
datos de la Tabla 3 muestran el mismo resultado pero evaluado a Adaptndo de Rev. Soc. Argent. Djabcte~ 35:77. 2001
través de una medida de costo: efectividad.
Los resultados descriptos provienen de estudios realizados en roúla 4. Costo anual per copita di1 afiliados con ri¡a/Jetes incorporados al PROPAT.
países desarrollados, empleando tratamientos intensificados y es­
trechamente controlados que se tradujeron en una franca mejoría Es importante ,destacar que la implementación del PROPAT sce
de la calidad de atención. Pero quienes tienen la responsabilidad de realizó estando vigente la Ley de Convertibilidad por lo que los valo­
administrar los recursos de salud suelen preguntarse si es posible I~S de la Tabla 4 equivalen a dólares estadounidenses. Los datos del
obtener resultados semejantes en países en desarrollo. En respuesta PROPAT demuestran que aún en países en desarrollo y con moderado
a ese interrogante pre-sentamos los resultados obtenidos en un gru­ filado de control la mejoría de la calidad de atención no s6lo no
po de personas con diabetes incorporadas a un programa de preven­ iIlcrementa el costo de atención sino que por el contrario lo disminuye.
dón, control y tratamiento (PROPAT) implementado en cuatro ciu­
dades de la Prov. de Buenos Aires afiliadas al Instituto de Obra
Médico Asistencial (TOMA). Perspectivas
Oe lo expuesto surge que el deterioro de la calidad de vida del diabético
lCER (f:)
v el costo socioecon6mico de la enfermedad está condicionado
Control intensivo V5. primordialmente por el desarrollo y la progresión de sus complicaciones
ControL convendonal crónicas. Ellas no son unal consecuencia inexorable de la enfermedad y
Costo / ailo de vida ganado 720 :.u aparición puede evitarse aplicando estrategias de prevención cuya
implementación exitosa requiere la participación de disti ntos estratos
Costo / año libre de compLicaciones 1.049
(integrantes del equipo de salud, pacientes, comunidad) y niveles que
Adaptado dI! Oritish Med. J. 1998. \~jercen el poder de decisión. La aplicación de esas estrategias obliga a
las autoridades responsables de la salud de la población él evaluar la
Tabla 1. Relación costo-cfectl'vidad rielas intervenciones del UKPOS.

85
84
relación costo-efectividad y costo-beneficio de su implementación. ~
papel de la hi pergLucemia y el estrés
Esta acción integrada implica un cambio en el desarrollo de nuestra xidativo en el desarrollo y progresión de las
medicina tradicional, al menos en lo referente a enfermedades crónicas,
poniendo énfasis no solo en las estrategias de recuperación y
complicaciones crónicas de la diabetes
rehabilitación sino también en las de pre.vención.
Osear R. Rebolledo
Hay indicios que sugieren que hemos comenzado a transitar ese camino. ".
La elaboración por parte de entidades como ~a Sociedad Argentina
de Diabetes y algunos Ministerios de Salud provinciales, de Documen­ "'1\
tos de Consenso pura la atención y tratamiento de personas con diabetes
y ~us complicaciones, el incremento en la cobertura de medkamentos Propósito
e insumas por parte de casi todas las entidades de financiamiento de
salud, la aprobación de una ley nacional del diabético y la difusión de Presentar los últimos adelantos del tema de este módulo, deri­
planes de educación del diabético y su familia son algunos de ·esos vados de estudios experimentales y clínicos prospectivos.
indidos. Re5ta evaluar en forma permanente y sistemática el impacto
Analizar el concepto de «memoriá glucémica» y sus implicancias
\
de estas medidas para introducir ajustes y optimizar tanto sus resulta­
dos como el empleo de los recursos disponibles.
en el tratamiento de la diabetes. \

o Bibliografía .-.ctividad inicial


1. G)~li.1rdino J:J. Milrtell.1 A, Etcliegoyel~ GS. CJpoliJlt, JE, Guido ML. Olivem EM. GOl1l''t1I'Z C.
Hospitaliz.ltion ¡¡nd R~'-h()~pit.llizdtiDn of People \'Iith and withou~ Dillvete, in La Plllti.\, ( t'Ili:ínuando con nuestro ciclo de pregunta:.' y respuestas... como de­
Argentina: (omp<1fison of th,'ir Clinic.1I Char.ll:terirtic, .lIla c(),t~. lJiilb~tc, R,,:•. Clin, Practicc. I !" un conocido locutor televisivo, le proponemos que refle xíol1f} sobre
E~ prcll~l.
tU' que le presentamos a continuación pues le permitirán anticipar las
? G:lgli;\rdino JJ. OIi'/er:, EH, Etchegoycn GS, Guido ML. ,'4.\rtAla A. (a IJOr.1 le JE, Oe La H('t'a M.
Siri F. Bonelli P. COl1trol y p,-evenciór;, ·.GclI~daria pJrJ pcr~oll¡)\ con di.1bet:r~~: imp~cto de la ti !lIáticas que abordaremos:
implemcl\l',\Ci6n de un rrQgt"lIll~1 de JtcIlci6n (PROPAT). Rcv. $OL Argent. DiJbete\ 35:/7­
8G,. 200·l. ¿Es posible estableCN un punto, un «umbral» a partir del cual
3. Grrlbnr W. Le'?lc B. Lt\I1¡Jer T. Songcr B. Willi¡lmS R. cd". ThG ~conomir., 01' Día betcs .1nd el nivel de glucemia se c01'wierta en tóxico?, o dicho de otro
Diabetes C.1I~'. ~russeL\ 11m! Genl'v;l: l~tern;¡t.i(JI\JI Dii1betc~ Fednation ,lila World HeJlth
Organization. 1997. modo, ¿existe un punto que sea la bisagra: no-comp.licaciones /
l.. J6n~~oll El, The Economic 111I~act of Di.lb~t:e.\. D'iabetcs Cue. 21 (Suppl 3). ¡1l93. complicaciones producidas por la diabetes? Esta pregunta no
5. DliverJ E~~. Duh;üde EP, Gaqli.Jlrlino JJ. (o,ts of t"mpor~ry ;md pcrmallent di&.lbili!.y im.!uc,·d tiene respuesta en el texto.
by diabetes. Dió1bctl's Can: 14: 593-596.19'11.
f). Tlic Co~t uf DiJbcte~. Type Ir in Europe. The COlJE-2 StllrlV. Di¡lbt>tol0'li.l /.5: ~1-S28 ..:W02. La alteración de los flujos metabólicos producida por la
7. The Dinbetr5 Control ilnd C0l11plic~tiom Trial Rc"c<JIch Group. Rewurcc util'ization and co·,t:¡ hiperglucemia crónica, ¿con la aparición de qué disfunciones o
of can' in the Diahl'tt'J Control ond (olllplícJtion:. Trial. Diabetes L.Jrr 18:361-376,19<)5.
8. UKPDS Study tíroup (UKPDS 40). (ost rffertivent'&s ~n·.llyr.is of improvcd bloolt prr~S5Llrr
manifestaciones se correlaciona?
control in hy¡:>ertel)~ive p.lticnt·.i with typr 2 di<lbeté\. Briti:.11 Ml'C1. J. 3H:720-72r..1998.
íl. Willi¡¡ms R, Tuomi!l'!1tn J. Bjork 5, cds. Tlie Ecol1omicg nI' \)j~betes CMI'. Aninternatiol1nl
o Si esto es así ¿qué estrategias podría implementar para prevenir
prrsprcl ¡ve. 'fllackwcll Sf.icl1c~. 2000. el desarrollo y progresión de las complicaciones de la diabetes?

86 7
LJ Introducción Elios son:
') aumento del estrés oxidativo,
Ya hemos wmentado en otros capftulas que:
ü alteración de la actividad de diversos sistemasenzirnáticos y
Estudios pobli.lcionales prospectivos realizados en personas con
diabetes Tipo 2 como el UKPDS y el Steno-2 como asi también con () glicación no enzimática de proteínas, lipoproteínas (LP) y ADN.
diabetes Tipo 1 (DCCT) demostraron de manera inequívoca la reLa­
La interrelación implica que con el desarroLlo de cualquiera de
ción entre el grado de control glucémico y el desarrollo de complica­
los procesos indicados, automática mente aparecen los restantes.
ci.ones crónicas de la enfermedad.
F'or lo tanto, frente a la hiperglucemia sostenida el sistema, por
En todos ellos tanto la aparición como la progresión de las I'droalimentacién, progresa y se perpetúa.
complicaciones microvasculares se retrasaron en p.acíentes con
Una vez establecido el estrés glicoxidativo ya partir de la alte­
hemoglobinas glicosiladas más bajas, permitiendo concluir que un
1.1ci6n m@tab6lica primaria, la hiperglucemia, se desencadena una
estricto contro,l glucémico logrado mediante un tratamiento
':ecuencia de eventos representados en la Figura 2. Las dos pri me­
adecuado previene o demora el desarrollo y progresión de dichas
1,;$ etapas de dicha secuencia son parcial o totalmente reversibles
complicaciones.
'.;j la hiperglucemia se controla precozm@nte; si por el contrario la
Si bien se acepta el concepto de causa-efecto, el mecanismo por misma persiste, las les'iones resultan irreversibLes. Este hecho, co­
el cual la hiperglucemia sostenida a, lo largo del tiempo genera ~a5 nocido como «memoria hipe~glucémica)}, se caracteriza por el de­
complicaciones crónicas no está todavía totaLmente aclarado. :·.arrollo de complicaciones durante período~ de eug'lucemia subsi­
1
yuientes a períodos de hiperglucemia y destaca la importancia del 11'.:
Las evidencias aportadas por los mismos sugieren que el meca­ diagnóstico y tratamiento precoz de la diabetes Tipo 2. Esto últi­ I
I
nismo/s en cuestión, denominado actua.lmente estrés, glicoxidativo, mo es frecuentemente difícil de lograr debido al desarrollo solapa­
incluye diversos procesos ~nterrelacionados tal como se muestra en do de la insulinorresistencia que lleva al fallo de la célula beta (ver
la Figura 1. Lapítu{Q 2).

f~

Mecanismos desencadenados por la hiperglucemia


1 Causa Hlperglucemla

i 1 l-:~~ ~
MecíJn"o;mo? (\ Gl'IcaClon
.
\ enzímátlca
no _
Los procesos indicados a conti nuación ocurren tanto en personas
con metabolismo normal de los hidratos de carbono como en aque­
llos con insulínorresistenc.ia o diabetes. La diferencia estriba en la
intensidad y velocidad con que ocurren en cada caso. Aunque no
" Efecto Complicaciones '...........__________. / '

I (~xistiría un umbral (tóxico» para la glucemia, se consider.a que el

L v¿¡lor de BOlo para La HbAlc es el punto de inflexión para el desarrollo


de complicaciones microangiopáticas (promedios glucémicos diarios
Figura 1: Procesos que originan el estrés glicoxidativo. cercanos a 150-160 mg/dL)(ver Capítulos 7,8-10,12 y 13).

88 9
Ahora deMngase un momento para analizar la secuencia ele event05 que ipergLucemia y estrés o~ídativo (EO)
presentamos en el esquema siguiente: ¡II
i.:lbetes y marcadores de EO: tanto estudios dínicos como los

-----.J

Alteración
metabólica
(hiperglucemia)
-.
estrés oxidativo
alteración de vía5 metabólicas
1",i1iz;"ld'os en células endoteliales de aorta cultivadas, en ·células del
111I'·,;"lngio glomerular, en monocitos y en ratones transgénicos, han
rlr'l)l(}strado que la hiperglucemia crónica altera el balance oX'idativo
glicación no enzirnJtica
I .111111I!ntando la producción de radicale~ libres del 02 que juegan un
p'lIld importante en el inicio, desarrollo y perpetuación de las compl'¡­

.-
lModificacio~~~ - .
L!structural~

e :~'-l
~ato!ogla~ - .
i1lteraciones membrana basal endotelios
hipertrofia músculo liso arterial
desmielinización 5egmentaria

disminución de la luz vaf.cular


r.11 iones de la diabetes.
Dado que el EO aparec~ en etapas tempranas de la enfermedad
¡1I,'cediendo la aparición de las complicaciones, él sería uno de los
I '¡11~,lntes y no la consecuencia de aquéllas. El cOlilsenso actual es que la

'T'
subperfu5JÓn con hipoXI<l regional
Iliperglucemia c:ronica, aún leve, es un factor pro-oxidante. Sin embargo
[_~~:j::o.g"'ab;"dad,
',1! decto no se manifiesta de igual forma e intensidad en los distintos

IlilFlnos y tejidos, debido probablemente a una diferente sensibilida-d o


[- LeSiÓ;;-J - . nervl~c; periféri<:o<. Idptlcidad ele defensa frente al mismo. La c¡:¡rga genética individua~
glomerulo renal 1.1lllbién seria otro factor condicionante de la respuesta a lainjl,lria.
• micl"O y milcrovasculatura
-------
Figura 2: Etiopatogenio de las complicacio/1es de la DM. SeClJl'ncia de eventos y La hiperglucemia crónica, aun leve, es un factor prQ~oxidante. Por lo
sus efectos. tanto todo incremento de la glucemia, ya sea persistente u oscilante
como la hiperglucemia postprandial, debe minimizarse.

Sin embargo, poblaciones de personm con glucemias de ayuno o


tolerancia a la glucosa normales muestran que aquellos ubicados en el RadicaLes libres y EO
cuartilo superior ya presentan un mayor riesgo de morbi-mortalidad
por enfermedad cardiovascular. Esta Ob!lNVllción sugiere que los El EO es producido por sustancías oxidi'lntes derivadas .del oxígeno,
distintos tejidos o sistemas tendrían una'difcr('~llte sensibilidad a la rlrl nitrógeno y de'l cloro, ~stos últi mos característicos de la respuesta
glucosa para el desarrollo de complicaciones. IIlmune.

Tenga en cuenta qu.e.: Sabemos que


Durante la respiración normal de las células aeróbicas para oxidar Los
Aunque la generación del estrés oxidativo, las modificaciones de diferentes sustratos energHícos, el02 acepta 4 e- y 4H+ para ~u completa
vías metabólicas y la glicación no enzimática de las proteínas induci­ ¡educción a H20. Sin embargo en los peroxisomas, en las m'itocondrias y
dos por la hiperglucemia transcurren en forma simultánea e Jún en el citosol, el metabolismo oxidativo genera además en forma
interdependiente, los describiremos separadamente para posteriormente continua especies de'! 02 parcia'lmente reducido: el ión s'Uperóxido, el
integrarlos. peróxido de hidrógeno y el radicaL hidroxilo. Estos compuestos

9{) 91
denominados radicales libres del 02 (ROL) son mucho más reactivos de electrones hacia el 02 a trav~s de la cadena respiratoria se relaciona
que el 02 y por tanto, mils tóxicos. siendo los responsables del EO. con la diferencia de potencial eléctrico en la membrana interna de la
Los ROL son oxidantes muy reactivos, es decir sustancias mitocondria. Cua ndo hay una mayor afluencia de sustratos
deficita6as en electrones que, al tomarlos de diferentes sustratos a metabólicos, glúcidos o ácidos grasos, esta diferencia de potenciaL
los cuales oxidan, inician reacciones que se propa9'an en cadena. aumenta debido a la mayor oferta de coenzimas reducidas,
generándose una producción excesiva de radicales superóxido en las
Los procesos bioLógicos intracelulares normaLes que producen ROL son: mitocondrias lo que determina La aparición deL EO. El proceso descripto
~ los cataLizaclos por la xantina oxidas", la cicloxigenasa, La es semejante al que se observa en la reperfusión postisquémica deL
NADPHoxidasa, miocardio.
'" los producidos por célu las i nvo lucra das en la resp uesta Por otra parte, el EO producido por la hiperglucemia induce un
inflamatoria como macrófagos, neutrófilos o eosin6filos y estado protromb6tico aumentando la agregabilidad de las plaquetas.
las reacciones de compuestos exógenos oxidantes que provo­ Este efecto activador ocurre por aumento de la síntesis de superóxido
can la liberadón de ROL. en sus mitocondrias y es aditivo al del colágeno (Figura 6 ).
Los ROL juegan un papel esencial en los mecanismos de defema
del organismo como Los producidas por Los neutr6fiLos o macrófago5
del sistema inmune. Sin embargo, si su producción aumenta y no son Hiperglucemia y alteración de vias metabólicas
neutralizados, pueden causar daño a diferentes estructuras celuLares
como enzimas, lipidos, membranas y ADN, llegando incluso hasta la La alteración de los flujos metabólicos producida por la
muerte celular. hiperglucemia crónica se correlaciona con la aparición de disfunción
La cantidad de ROL es controlada por un sistema antioxidante com­ endotelial, proliferación celular y tendencia al desarrolLo de
;'\ plejo constituido por enzi mas como la cata lasa y las superóxido aterosclerosis, manifestacio nes características de las com plícacio­
dismutasas y el sistema gLutatión-glutatión peroxidasa y sustancias nes crónicas de la diabetes.
antioxidantes, como las vitaminas C, E, A Y K, el ácido úrico, la
Le sugerimos que, antes de seguir leyendo, analice con detenimiento
bilirrubina, compuestos con grupos tiol como el ácido lipoico, la
el diagrama de la página siguiente y explique la secuencia tal como
cisteína. el glutatión, la metionina y la ubiquinona.
si lo hiciera para un auditorio. Es un buen ejercicio de rewperación de
sobere!i (iY de constatar qué tan buen orador es!!).
El EO, en esencia, un desbalance entre la producción de sustan~
cias oxidantes y las defensas encargadas de neutralizarlas. Ahora si nuestro desarrollo:

La oxidación intracelulm de la glucosa comienza en el citoplasma,


generando NADH y piruvato que ingresan a .la mitocondria y proveen
Uno de I,os procesos por los cuales la hiperglucemia genera un EO
l'nergía para generar el ATP mediante la fosforilaci6n oxidativa. Parte
ocurre en Las mitocondrias. En ellas durante la respiración celular, se
del piruvato sale de la célula en forma de Lactato que es posteriormente
desarrolla la oxidación final de diversos sustratos. La transferencia
utilizado como sustrato para la gluconeogénesis hepática.

9 93
(/f,ii(i\'{I'('r/(lf . [{ vnpd ,{- fa f;;r:rrll';c'''!!!E_Xj~!,'_ - <'~irl(fti'·f! ... ~fJ

¡ .~-~~~--------~~~
'1lllcúlisis por el déficit de NAD+. Esto produce una acumulación excesiva
¡" los intermediarios de lél glicolisis hasta la etapa de formación de
t
I
G~UCDSa
'11 ilNJldehído-3P (GAD-3 P).
--.
Via de polioles (sorbitol)

t •

Glucosa 6-P

--.
+NADH, +GSH

vía de Hcxosamina
1
Pilra consumir el exceso de glucosa intraceLular, tal como se mues­
11.1 (~n la Figura 3, se incrementan entonces vías alternativas tales
IIIIlO:

t ----
t PAl-l, TGF- a. y I~, +e-NOS La vía de los polioles o de la aldosa reductasa que transforma glu­ I
t Fructo5~ (l­

__ --6ftiy.~l~[uj_fl).R-PKL_
cosa en sorbitol y luego este últi mo en fructosa. Simultáneamente
qenera un Eü por consumir NADPH y glutatíón reducído (GSH). Este ~1"11l
t ~ t DHAP -+ t DAG -+ t PKC ulti mo, potente antioxidante, no puede ser regenerado por la
t GAD-3-P glutatión reductasJ que necesita NADPH como cofactor. El déficit
de NADPH tilmbién compromete .la síntesis de óxido nítrico (NO)
~
Síntesis de AGE
NAD+ '---. Proteína + glioxal, metilgliox<ll, vasodilatador por la óxido nitrico s·intetasa (NOS), lo que resulta en
GAPDH una relajllción deficiente d'el músculo liso vascular (Figura 6). la
NADH ~ Jldosa reductasa reduce ademils los compuestos dicarbonllicos glioxill
blfo~foglic. y metilglioxal; este efecto result~ beneficioso ya que ambos son

,
1-3 "'" intermediarios para la síntesis de AGE (ver más adelante).
I
I
I
El exce$O de fructosa-6-fosfato es dNivado a la vía de la hexosamina,

C02
piruv<lto ••• .. ,..... ~ --"," I H20
promoviendo una disminución de III fibrinolísis por aumento de la

síntesis del inhíbidor del activador del plasminógeno (PAI-l) y de

ATP
factores de transformación TGF-o: y TGF-~. El aumento de estas

ci toqui nas favorece el desarrollo de la nefropatía por esti mular la

Figura 3. Alteración de flujos metabólicos producidos por la hiper[(lucemia crónica.. síntesis de componente~ de la matriz del mesangio como

(ver abreviatums en el texto). heparanSLilfato-proteoglucanos y fibmnectina. Por otra parte, la

vía de la hexosamina tiene un papel importante en el desarrollo de

ínsulinorresistencia inducida por la hiperglucemia o los ácidos grasos

libres_ Al activarse esta vía se di.ficulta ila entrada y fosforilación de

En los tejidos donde la glucosa penetra libremente (retina, células la glucosa a las células, hecho demostrado en adi pocitos que recu­

del mesangio glomerular y de los endotelios vasculares, nervios peran la sensibilidad a la insulina cuando se la ·ínhibe. Por otra

periféricos y cristalino), la hiperg~ucemia estimula las vías menciona­ parte di,sminuye la actividad de la NOS lo que dificulta la síntesis

das aumentando la producción mitocondrial de iÓn superóxido. Al mismo de NO. Por lo tanto, la (lctivilci,6n de la via de la hexosamina por la

tiempo y como consecuencia del aumento de 1.05 ROL, se activa la hiperglucemia induce cambios marcados tanto en la expresión génica

poli(ADP·ri'bosa) polimerasa (PARP), enzima enctlrg'Elda de reparar las


como en la función de proteínas, contribuyendo de esta manera al

alteraciones del ADN nuclear y mitocondrial producidas por los ROL. la


desarrollo de complicaciones.

PARP consume la coenzíma NAD+(coenzima oxidada) reduciendo su


disponibilidad. Ambos efQctos inhiben la actívidad de la gLíceraldehído­ La acumulación de triosafosfatos (GA3P y di-hidroxi acetona

3'-fosfato deshidrogenasa (GAPDH) alrededor del 60%, frenando así la fosfato [DHAP]) también favorece el desarrollo de complicado­

94 95
nes. El incremento de DHAP aumenta la síntesis de di·acil glicerol ti) glicación de las proteínas es un proceso complejo que puede dividir­
(DAG) que il su vez estimuta la traslocación y activación de isoformas ',1' ':11dos etapas principaLes: la primera o de iniciación, es de caracteristi­
de la proteína quinasa e (PKC), originando cambios en diversos ; ,1', reversibles mientras que la segunda es irreversibLe (Figura 4).
órganos y tejidos como muestra €l Cuadro 1. La activación de la PKC
contribuye a una mayor síntesis de proteínas fibronecti nll y colcígeno La glicaci6n no enzimática modifica la estructura, la función y la
Tipo IV, aumentando el espesor y por lo tanto modificando la fun­ Jctividad biológic.a de las proteínas.
ción de las membranas basales.
[nhibidores especlficos de La PK(-~ normalizan el flujo sanguíneo 1,' :,ugelimos detenerse un tiempo prudencial para int€lprf'tar (a siquíente'
en la retina, disminuyen la filtración glomerular y normalizan par­ 1I/lIra y luego si, anofizar el texto que continúa.
cialmente la excreción de albúmina.
El incremento de GA3P por su parte aumenta la glicacióll de proteínas
intra celu La res (ver más adelante).

Hiperglucemia y activación de la PKC


Mediadores Efectos
t factor de crecimiento del t permeabilidad vascular
endotelio vascular (VEGF) l' angiogénesis
J NO, i endotelina alteraciones hemorreológicas
i (PAI-l) =! fibrinólisis oclusión vascular filiara 4: MecanismOs (/~fO(miición áe pmtcínas glicodas (fructosaminas o [Ay AGE).
í Colágeno
TGF-p oclusión capilar
i Fibronectina Glicación reversible: La reacción de glicación no enzilmátka co­
mienza con una condensación entre eL grupo aldehído o carbonilo de un
i factor nuclear - KB (NF - ~B) activación genes de respuesta
a la injuria (inflamación) lllonosacárido (alcl'osa o cetosa) y grupos amino libres de una proteína,
de los fosfolfpidos de lipoproteinas o de las bases de los ácidos nucleicos.
[!ladro 1. Por esta condens'acTón bimoLecular La proteína o el ácido nucLeico sufren
Ima modificación post-ribosomal sin la participación de enzimas que le
da el nombre a la reacciono
• Efecto de 'lagLh:ación de proteÍnas
Por pérdida de una molécula de agua se forma una aldimina lábil o
En los últimos veinte años se ha reconocido que una de las consecuen­ hase de Schiff. Esta aLdimina intermedia se transforma a cetoamina esta­
cias fisiopatológicas más importantes de La hiperglucemia e!S eL aumento 1M por un reordenamiento motecular de Amadori. Estas cetoaminas se
de la interacción de la glucosa con las proteinas por un proceso multietápico conocen genéricamente como compuestos de Amadori (CA) o
que ocurre sin la partícipación de enzimas: La <~gLicaci6n no enzimábca». f, uctosaminas. Las reacciones descriptls son reversibles y eL equilibrio,
Su desllrrolto está exclusivamente condicionado por la proteína, la que se establece en 4 semanas aproximadamente, está desplazado hacía
concentración delhidrato de carbono y el tiempo de contacto entre ambos. 1::1 formación de las fructosami nas.

96 9
La glicacíón también puede iniciarse por cetoaldehídos, productos Aplicación clínica de la glicaci6n de proteínas
1I
dicarboníLicos de autoxidación de la gLucosil formados in vivo· por reac­ Mientras que la glucemia indica el niveL de glucos-il durante un
1

ciones de óxido-reducción (Figura 4), que generan simultáneamente ROL. ]Il'J iodo de alrededor de 15 m1nutos previos <3 la extracción de sangre,
11

En este caso ocurre una glicoxidación que implica el desarrollo simultáneo 1.1', proteínas glicadas reflejéln promedios gtucémicos durante períodos

de un estrés metabóLico y un éstrés oxidativo. protongados: las proteíná'S glkadas de suero (fructosaminas) 1-2

semanas y la hemogLobina glicada (HbA1d 5-7 semanas.

El mecanismo expuesto es una simplificacíón de los procesos de glicJción


ya que no todos los grupos amino libres de una proteina presentan la
misma reactividad frente a los azúcares y estos últimos tienen diferente 111/ lluevo ejercicio de (wóljsis será la illf:e¡pretaó6n dé! la Figura 5.
capacidad glicante frente a un grupo amino, dependiendo de que sean
aldosas o cetosas, y de la proporción que tengan de formas muleculares
abiertas o en anillo. La velocidad con que lil glucosa forma iJldiminas es
menor que Lu de otros azúcares debido a su baja proporción en forma de lDl
captaci6n, por rereptor 8/{
aldehído libre. Asignando valor 1 aL poder glucosilante de la glucosLl, el de + c~ptaci6n por macróf¡go5

la fruetosa es 7,5 veces, mayor, el de la D-ribosa 16,6 veces y el del í captura en 1;1 pared arterial
í' pero~ldacl6:n lipídlca
intermediario de La gLucolisis GA3P, más de 200 veces mayor. Es importante l' fo.rmaci6n complejos inmun-es
notar que la glicación extracelular es glucosa rJf'pend~ente, mientras que en
la intracelular adquiere importancia la presencia de otros compuestos formados l -- HDl
durante eL metabolismo intracelular de la glucosa (ver más adelante). VLDL-IDL. <--- Gl'ICOXIDACION -t
.~captación el celular
I hidrólisis por LPl -,1 de VlDl 1 esteriflcad6n del el UlCAT)
E$ fmporl"antr destacar qUf!: J afinidad apoE-HSPG -, í' IDL T tlilnsporte de CE a VLDl (CI!T'P)

la demostración de que lñ modificación de la hemDglobina o las


proteínas plasmáticas por restos de glueósa adheridos ocurre en forma
Lenta, acumulativa y proporcional a las gLucemias diarias de los pacien­
\,
nderencías: lOL, HDL VLDL, 1Dl: lipoplOt~ínas; el: coLesteroL CE: colc:;teroL cr,h'rific~do,
oI¡lI'E: apoprotPÍn~ E¡ HSPG: l1eparan-\uLf~to-proteogluc~nos; lPL: li poprotcína lip~,¿¡ de LJ
tes diabéticos, permitió un gran adelanto en la evaluación del control 1',1I,~d vascular; lCAT: lecitinJ-culestcroL Jcil transt'~ré\s¡¡; CETP: protcina trantportadora de CE.
gluc~míco.
rir¡rlrQ 5: Efectos dI' la glicoxrdaóón sobrr las diferentes L/'.
é5 decir que:
Lil cantidad de hemoglobina glícada: o fructosamin<:ls presentes en la
s¡:¡ngre permite conocer, mediante un ()nálisis sencilLo, de manera Como se observa en la Figura 5 los cambios generados en las HDL y
retrospectiva e integrativa los niveles de glucemia por un lapso prolongado VLDL producen trastornos en el transporte reverso de colesterol y en el
y proveen ¡:¡l clínico parjmetros confiables y útiles para evaluar el ;)claramiento de los triglicéridos plasmáticos (ver Capítulo 16). Las LDL
tratamiento aplicado. ':ufren una mayor oxidación en el espacio subendotelial y esta modificación
La glicoxidaci6n de las lipoproteinas plasmática~ (LP) es importante .IUmE'nta su retención en el mismo y les confiere mayor poder aterogénico.
In consecuencia La atteración det metabolismo de la,s LP por
y posee características particulares respecto a otras proteínas por afectar
simultáneamente la porción proteica y sus fosfolípido5, generando un EO r¡licoxidación juega un papel importante en et desarrolLo de la
que favorecería la lipoxidación. micro y macroangiopatía diabética.

f).(:¡
98
oI,,,,,'lrrollo de complicaciones crónicas de la diabetes constituyendo la
Hasta aquí el desarrollo df' las etapas reversibles df. la glicación, nos
, 1'1I1~l11oria hiperglucémica» como ya se mencionó anteriormente.
ocuparemos ahora de [a:
1,;, 'I:ientemente se ha reconocido el papel de las reacciones de Maillard
";' '¡I~ los procesos en los que participan radicales libres (glicoxidación)
Glicaci6n irreversible: Esta etapa sucede al procesa de glicación y
comprende una serie de feacciones complejas, denominadas reaccio­ 111) ':6lo en el desarrollo de las complicaciones crónicas de la diabetes
',IIlO también en la artritis reumatoidea, en la ,enfermedad de Alzhei mer
nes de Maillard, que llevan a la formación de productos de glicación
" "11 los mecanismos de envejecimiento de los seres vivos.
avanzada ó AGE (Advanced GlycatiolJ End products).
Mientras que las reacciones de 'la glicación no enzimática reversible Las reacciones de Maillard, con formación de AGE y producto~ de
ocurren por la fijación de grupos carbonito de los hidratos de carbono glicoxidación, producen cambios más profundos en ta estructura
a los grupos amino libres de las proteínas, la irreversible es producida ue la poteinas que la glicaci6n reversible. Son permanentes y
por una serie de reacciones complejas de deshidratación, condensación ¡)fectan principalmente a las proteínas de vida media prolongada,
cíclica, entrecruzamiento intermolecular y oxidación de los CA. Estas tant'o intra como extracelulares alterando sigificatívamente sus
reacciones se desarrollan en períodos de semanilS a años y tienen mayor propiedades fisicoquhnicas y su actividad biológica.
relevancia en las proteínas de vida media larga como el colágeno, la
elastina, la mielina y el cristalino. DUl'ilnte su desarrollo aparece ade­
más un EQ, como consecuencia de La generación de ROL.
Interacción de AGE con receptores ceLulares
La hiperglucemia sostenida promueve además la producción, por
reacciones enzimáticas y no enzimáticas, de compuestos con grupos En diversas células tales como monocitos, macrófagos, linfocitos,
carbonilo adyacentes, como la 3-desoxiglucosona, e'( glioxal y el metiL plloocitos, astrocitos y células endoteliales se han identificado di fe­
gLioxal con gran capacidad para reaccionar con los grupos amino de las lI:ntes receptores capaces de fijar y degradar los AG E para li mitar su
proteínas. Cuando la velocidad de formación de estos compuestos so­ ,Ir umulación en órganos. Vtejlidos. Esta capacidad disminuye con la
brepasa los mecanismos de depuración fisiológicl1, se establece un 1'1 hd, por lo que la aoumulación de AG Ese relaciona con el proceso del

estr&s cmbonHko. Este úLtimo se sumaría al glicoxidativo generando '·Ilvejecimiento. En eL caso particular de la diabetes la hiperglucemia y
entre ambos la producción de AGE. ',11 r.onsecuencia la gl.icoxidación, aceleran el depósito y la acumulación
de AGE ya que La intensidad de su productlón supera la veLocidad de
Exi ste gran va riedad de AG E producidos por diferentes vías
,Idaramiento.
metabólicas con producción de derivados wmplejos con estructura de
tipo pirrólico e imidazólico. Mientras que los AGE extracelulares se Existen diferentes receptores celulares para, AGE con di,ferentes
forman exclusivamente a partir de la glucosa .v sus productos de I".tructuras y funciones. El más conocido, denominado RAGE, al acti­
autoxidación, los intrace~ulares son generados por la glucosa 6-fosfato, v;)rse desencadena en Los macrófagos un estrés oxidativo, (síntesis de
fructosa, GA3 P, 3-desoxiglucosona, glioxal y ITletil glioxal. Una vez IWL) y la activación de genes de respuesta a la injuria por medio del
formildos, los AGE persisten durante toda La vida de La proteína, de la ¡"dor de transcripción NF-KB con la consecuente producci6n de
LP o del ácido nucleico aL cual estén unidos modificando su función. Iitoqui nas. Éstas esti mulan la síntesis de las matrices extra celulares,
1'1 tejido conectivo y la proliferación de células del músculo Uso, los
Como los, AG E' son modificaclo nes irreversibles de lils macromoléculas, I'íbroblastos y el mesangio renal yfactores vasoactivos y procoagulantes
su concentración no disminuye al corregir la hipergtucemia como ocurre
(Figura 6).
con las aldiminas y fructosaminas. Esta característica los liga al
01
100
LeY: componentes de las matrices extracelulares modificados por Oespués de las idas y vueltas que todo proceso de aprendizaje exige, [e
AGE interaccionan de manera anormal entre sí alterando las propieda­ proponemos que ensaye algunas conclusiones sobre lo [eído hasta aquí,
des de filtración selectiva de la membrana basal de los endotelios. vinculándolas con los capítulos anteriores y el impacto en su tarea
Se Cllcllta que cuando a la tercera o cuarta vez que Eil75tein explicó su profesional futura.
I.l:oría de la relatividad a un grupo dE' estudiosos y éstos la comprendieron, A continuación encontrará las nuesl:ras...
el científico dijo: ... «pero esto no es mi teoríG), ¿ Por qué el relato?, Porque
110 es fácil explicar [o que de suyo es dificil.
En tal sentido, en la Figura 6 se intenta representar esquemáticamente las Conclusiones
diferencias a nivel de la micro-y macrocirculación entre e[ estado no/mal y [a DM.
Analfcela, con ella a la vista vuelva a revisar el texto anten'or, tómese el La hiperglucemia cránica produce un estrés metabólico denomina­
tiempo que necesite para su correda interpretaci6n. do glicoxidativo que se asocia al desarrollo y progresión de las
complicaciones crónicas de la diabetes.
Recuerde que es usted quien regula sus tiempos de aprendizaje.
La glicoxidación, que ocurre en menor proporción en personas con
metabolismo normal de los hidratos de carbono y de manera aumentada
NORMAL: DIABETES en aquellas COIl diabetes, implica una acumulación de productos de
I
1
PDCF
glicación reversibles y AG E en diferentes proteínas circulantes y
1
estructuras del ,organismo con la producción simultánea de un Eü.
La glicoxidación actúa como un factor que disminuye La capacidad
de autorregulaci6n del flujo sangu~neo de los lechos vasculares
co mpro metiendo la nutrici ó n ti sular.
Teniendo en cuenta que la glicoxidación depende de los niveles
promedio de glucosa circulantes y que la hiperglucemia crónica, aun
leve, es un factor pro-oxidante, la meta principal del tratamiento de
+--0;
LDL·o •. .J..NO
y -..­
--.
las personas con diabetes debe ser el mantenimiento de eugLucemias
para evitar el desarrollo de complicaciones.
t
ONOO'
El desarrollo de sustancias capaces de inhibir o disminuir el Eü y la
Referenci~s:
formación de AGE puede representar en el futuro un adelanto importante
Mon/Maer.: monocitO/IlI.1Cróf.lgO: po: I'I0qlll'I,¡',,: MBH: lIIernbran~ b~,~l en la terapia de la diabetes y sus complicaciones.
normal; MBG: InembrdnJ basal fllie,loa: LDL-ox.: Ull ~licoxidJo~: PDGF:
factur de erccimirntn o~rivado d~ ~laquqta':; FNT: roldlll .ir. np.crosis tumoral:
IGF-l: factor in.luli Iloc,ímil-l: IL: illterlcuquill;i; DNDO': r,ldical pl:'roxi-nitrito.

Figura 6: Represéntoaón esquemál.ico de ((/5 dlferencia5 a nivd de Irl micro-mClcrocirculacirí"


('¡Itre d rstodo normal y la DM.

102 103

li
I

Jllrflr'rr ll ~rl'/lIr'. ~llr{,llr\.h IJt líllrllldr'llIjJ'.I_'.;,;iI_'I.;,;.' _

O'II/JI,ioqlll fid
Nefropatia
I, ~,II', 11, ti" '.M. 1<1'1" ,II"dl) (1 R, L,l 9licación y 9lir.oxidaci 6n de las li poprote1 nas, su diabética
11111" ,,1.11" 1" 1'11 1.1 11M .. ~1",lí .. il';':
60:6ft5-656. 2000•
.', 11'11'11,,11,,11 .IV. l.,il(w·)1 li. 1I.1\~' E et JI. FJsting blood g[ucos~: an underestimated ri~k
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;', 1/,; g I:l-Hi'n. ;.~OO1.
11

1" 11, M,tI in 11. rIJI,lic~l' G. 15th Golgi Il'cture: from hyprr9Iyc:cmi~ 1:0 the dym'gulation of
V,I',rllldr ¡,',lItldpllil1g in di~beles, Diabl'tologia; Iolo: G7t,-G92. 2001. 1­
'., f.dl'Ile 1'. V¡¡del P, Limen Nd al. Multif\lctorial intervention and cardiovollcular disc,lse in
1'.,I:iI~Jlt~ with type 2 diabetes: the 5tcno-2 ~tudy. N Ellgl J Med; 31,8: 383-93, 200'3.
(;. Idri:: l. Gray $, Donnclly R. Pr(Jtcin kina\e C activation: isoz'yrne-.pecific: ert'ects on • Propósito de esta unidad
mct~bolism and cardiova¡;cu!Jr complic:atiol1S' in diabl'tes. Di~betologia; lo!,; 659-673,
2001.
7. Ko GTC, ChJn J(N. Woo J et ;JI. Glyt¡jted rraemolJlobin and c;¡rdiovascular risk f~ctoTl in
Al finalizar la lectura de este capituLo, esperamos que usted:
chine~e su1Jject5 with normal glueose toLemnce. Diabet Mea. 15: 573-578. 1998.

g. Lyons TJ, Jcnkins AJ. Glycation. o~idation. al1d lipcxid~tion in tlle development of the
Fortalezca su idea sobre el valor de la detección temprana de la
complication~ of diJbcks: a cMbonyl stress hypothesis. Diabete.s Rcv: 5: 365-91. 1997. diabetes como estrategia efectiva para la prevención de sus
9. Rebolledo OR, IIdis Dato SM. Lol glic¡;¡ciúll (glkosi[ación) y gl"icoxidaci6n de las protc¡n~~ compLicaciones. en particular de La nefropatía.
en la DM. En Diabetes Mellitus 3". Ed.. Maximino Ruiz .Y col. Ed. librería Akadia. 2001,.
Pág, 331,.
10. Rüsen P. Nawroth pp. Kinq G et.ll. The role of o~id¡jtjve ~trl',S in the, onset and progrcf.sion
of díabele~ ~nd i~s cumpliotions. Diabcte5 Metab ~C~ Rev: 17: lK9-n~, 2001. • Actividad para la reflexión sobre, sus saberes
11. The DCCT rcscareb group: tlle effpct, of ínten$iv~ diabetl'$ treatmel1t 011 thc devclopment
and prog r~>,ion of long-term eOI11 plications in insu lin·dependent diabetes mellitus: The
Diabetes Control ¡¡na Complications Trial. NEngl J Med 1~93: 329: 977·986. Como ya lo hemos venido haciendo, comenzamos la unidad 50licitdn­
12. Unitcr! Kingdom Prospcctivp Di~bete> 5tudy (UKPD5). lntensive-blood glucose control dale que recuerde, repose en apuntes o lea en los libros de su biblio­
with sulphonylurea5 Ol in5ulin compared wlth conventional tre~tment and rilk of
com plications in IDDM. Lancet 198.8; 352: 9131.
teca o en los sitios médicos en internet, los aspectos o situaciones
que a continuación le consultamos.

Usted se preguntará ¿por qué tanta insistencia? Por dos razones:

En primer lLlgar porque consideramos que €s la manera de ayudarlo a


recuperar sus conocimí~nto5" sus prácticas y a obsürvar sus f'lJlencías
respecto a la problemática que abordaremos.

Yen segundo lugar porque el estudio autónomo o a disL'ancia exige la


participación octÍ\ta y com{Jfometida en el propio aprendizaje.

Por lo tanto, aquÍ planteamos las preguntas,


• Recuerde cuáles son los factores y cuúles los mecanismos que
df!Ecncadenan la aparición de la nefropatfa diabética

104 105

Jirld, ' ¡. ~ y ()Irt~' jd(,~q,,· rir ,r):" :~1~- r(JJJ1'i(wo·:((d'7f

• ¿Atendió pacientes con eSúJ patología? país aún se verifica un aumento continuo de pacientes con ND en trata­
miento sustitutivo y datos preliminares muestran cifras de incidencia
• ¿Qu~ accesibilidad al trat:amiento en di6lisis 'l'icnen las per50nas cercanas aL 38%, constituyendo actualmente la primera causa de ingreso
en la ciudad que usted vive? a hemodiálisis. Estas cifra's alarmantes determinan la necesidad de
implementar medidEls preventivas, para modificar esta re,alidad.
• ¿ Conoce cuál es el costo de la misma? ¿ Sabe qu~' obra:; sodales
cubn:;n esf:a at€nci6n y cuáles no o cudles son los. reparos que
ponen para autorizarlos?
Patogenia
• Al medir la microaibuminuria, ¿ qué factore:;, son capaces de pro·
ducir [¡l/SOS resultados? La ND se desarrolla como consecuencia de la combinación de factores I~

genéticos (mayor riesgo en familias con hipertensión arterial, cardiopatía ti


• Yen el caso d~ exi;;l;encia de proteínuria de 3 64 años de duración,

¿cuáles son 105 factores que aceleran la progresión de la nefropatfa? o nefropatia), hemodinámicos y metilbólicos.
Los factores hemodinámicos resultan de la ruptura deL balance entre
Esperamos que responda ésf;{]s y otras preguntas que le formularemos sustancias vasodilatadofas (óxido nítrrico, prostaglandinas) y
y luego encuentre en f!1 texto of(Junas de las respuestas. vasoconstrictoras (sistema reni na-angiotensi l1a, endoteli na, trom boxano),
que produce una vasodHatación de la arteriola aferente con aumento del
«La primera clave do la sabiduría es la pregunta asidua y frecuente.
flujo plasm5ticQ renal y de la presión intraglomerular.
Dudando es como llegamos a la búsqueda, buscando es como percibi­
mos la verdad» Los cambios metabóLicos producidos por la hiperglucemia actúan por
Abelardo varios mecanismos: la! vía deL sorbitol, (lctivación de Lil proteinqui nasa e,
(1079~11!¡2 -Fil65ufo í~MICf"; - 111I111.¡rlrll dI' 1;\ UnivN:;ídad de París) aumento de los productos formados por la glicación mo enzimática de
proteínas, lipido5 y aumento del estrés oxidativo (ver Capítulo 7).
En suma, los factores hemodinámicos y metabólicos determinan
por diferentes mecanismos modificaciones del parénquima renal con
Introdu'(ción producci6n attNada de citoquinas, factores de crecimiento y estrés
oxidatívo.
La nefropatia diabética (ND) se deo:;mrrol'L;¡ en alrededor del 5­
10% de las personas con diabetes tipo? y juntn con las aLteraciones La aparición t,empran.a de estas alteraciones determina inici,aL­
cardiovascuLares es una de las caU'~;l'; lundamentales de su mente cambios funcionales (hiperperfusión e hipertensión
morbimortalidad. intraglomerular) agregándose mas tardiamente modifica.clones
morfológicas tales como engrosamiento de la membrana basal
En los países desarrollados la ND c()ll~ititlJve l;) primera causa de glomerular, tubular e hipertrofia g'lomerular y tubular.
tratamiento sustitutivo renal. La situación :;[)cioecon6mica en los paí­
ses de Latinoamérica dificulta el acceso (l di::lli'~i'; y ~u registro lo que En los últimos años ~e na jerarquizado el papel patogénico de lO'5
determina una incidencia muy variable seg(lIl d p;,¡b considerado: 57% productos de glicación que pueden dañar en forma directa por acumu­
en Puerto Rico, 27% en Argentina y 16,3')/" ~~11 Uruguay. En nuestro lación en los tejidos o en forma indirecta interactuando con sus recep­

106' 107
V il'¡II\ ~, u_',,_I..:.iI..:.'I_' _

\
¡llrdlr'/! /1/1 hlJI", nl"dJII IIOdl"l
• N.!':Jpalio di,~i'Oi(n·ll

1"11'''' 111) l' ,¡ d(l', l.'11 r~l, ml~so1l1gio


y aumentando la producción de LI Evolución de la nefropatia diabética
lllllqllill.l·,. 1,,1 ril.(Iqllill¡¡ TGF-I~
(Factor transformador de crecimiento)
1",1 jllllll,lI),1 IIDI' lo:, c;:lInbio:; hemodinámicos y metabóLicos cumpLiría
La Figura 2 muestra la cronología del des~trrollo de la nefropatía
1111 P'III1'1 rl'llI r,d, en el desllrroLLo de las compLicaciones renaLes.
diabética.
11 ;llllll('~l1tO progresivo de la matriz extraceLuLar producido por es­
l.,', ,¡11.f·ld(~iones finaLmente obLitera Los capilares disminuyendo el fiL­
DIAGNOSTICO PROTEINURIA INCIPIE",TE CLINICA IRe
IJoIdo glomerular y determinando as! eL desarrolLo de la insuficiencia
microalbuminuri" proteinurla

rellal.

La Figura 1 representa el desarrollo de la nejropatfo diabética. I.e .) o 3 5 la 15 20 23 oños

I I l ' I I I J

511gen'mos detenerse e.n ella y observarla detenidamente, lo que le


120 150 ,120 FG (ml/min) 120 60 <10

permitirá comprender más cabalmente su jisiopatología. 1 0,8 0,8 Creatinina (mg/dl) 1 >2 >]0

, .__-""'I'E:_:~ .1
r
Figura 2 : Cronología del desarrollo de la nefropatía diabético.

Alteración el f<lctores glomerulare.s • Hiperglucemia


balance de citoquinas, factores

vasoactivos, de crecimiento:

I
sustancias Al observar en la figura la progresión de los valores, es posible advertir

va 50activas
AH, TX, ET, PDGF

(AH, NO, etc)

el deten'oro que se produce a lo largo de los Míos.

Flujo-presión
~ .. TGF B
~
. t GlicClción
En tal sentido, tenga en cuenta que.~

intraglomeru lar En Los primeros cinco años siguientes al diagnóstico de la diabe­


a
Hiperfíltrado '(t SINTESIS
-;1

• DEGRADACION

tes, el riñón puede mostrar algunos cambios funcionales


(microalbuminuria aisolada, aumento del filtrado gLomerular) duran­
microalbuminuria
te episodios de descompensación metabólica o Luego del ejercicio
MATRIZ EXTRA CELULAR

violento, pero en general este peñodo es silente.

~
HipertnJfia

glomercular

t
EXPANSION MESANG1AL Nefropatia incipiente: a partir del quinto año la desarrollan 2 a
4% de Los pacientes por año (Figura 2) de evolución de la diabetes.

GLOME:RULOESCLEROSIS
t
Generalmente esta etapa es asintomática y se caracteriza por:
microalburni nuria persistente
filtrado gLomerular normal o eLevado (hiperfiltrado >150 mljmin).
Figura l. Fisiopatologia del desarrollo de la Nefropatía Dia/)(!/,ica.

AJI (angiotensina ro.


TX (tromho;{llrin), [T (!'ndoti'lina), pD(;r (factor den'vado dr.
Para la detección de La microa,lbuminuria es necesario utilizar
plaque,tas), TGF (Transformin,g Growth factor).
métodos tales como eL radioinmunoanálisis, inmunoturbidimétrico,
Alteraciones clin;cas (hiperfiltmdo. microalbumínun'a, hipcltrofia glomerular).
inmunonefelométrico o enzimoinmunoanálisis. Tanto la ADA (American

W8 109
!,iH}rdl'° y II/' .... r; íuetl.'ll','" (1... /'¡L~~-!j':' r:nrdi:'~"!í:,u¡J(lr - NI;rr~(Jati¡l dio!:. ¡ieJ¡- [ ]

Diabetes Assodation) como la National Kidney Foundation clasifican la PROTE1NUlR1A (tira,; lt>ortIV¡;.~)
rnicroalbuminuria como significativa cuando sus valore-s en orina de 24
horas son de 30-299 mg/24 horas y de 20-199 Il·g!min. si se realiza en
orina de 4 ó 12 horas (periodo de recolección en tiempo preestablecido). !
negatlva.L positiva _ _ cuantifiqr proteinuria
en diurcsi~ de 24 horas
No se han determinado los valores normates en el embarazo.
EvaluClI" ~IlCROALBUMINURIi\

En los últi mo~ años se ha jera rquiz,a do li! expresi 6n de la (tiros rc¡¡ctiv¡¡~)
NEFROPATlA
microalbuminuria como la relación de albuminuriaj.creatininuria pues r I
..---. CLINlcA

permite corregir la variabilidad producida por la dilución (valor signifi­ (+) (-) ¡ !I"
cativo de 30 iI 300 ~lgjmg). La relación se puede establecer + ~ TRATAMIENTO
verific~r método -1- (-) ...... COf1~rol Anual

independientemente de la forma de recolección de la orina y su ventaja cuanti tativo

es que se puede realizar en muestras aisladas o al azar; la ADA recomienda J


utilizar la primera muestra de la maiiana (Figura 3). 2 mUestfi}~ (+)

Ya hemo~' presenf'ado ,en el Capítulo 5 índicacioncJ.l ocerca del automonitor:qo, ~


NEFROPATlA INCIPIENTE _ TRATAMIENTO
pero no estd demás recordar que:
En nuestro país hay tiras y cartuchos que miden esta relaci6n en Figura 3. Algoritmo diagl1ó:~Uco dr Ir¡ nefropatfa incipiente y clínica.
forma automatil~dil, facilitando la acce~ibilidad de la microalbuminuria
a grandes poblaciones. Se debe destacar entonces que en las personas con diabetes tipo 2 la
La microalbuminuríal se consideril diagnóstica de nefropatíll incipiente microalbuminuria se debe realizar a partir del momento del diagnóstico
cuando presenta valores positivo~; en dos de tres determinaciones de la diabetes y en caso de ser negativa repetir anualmente (Figura 3).
realizadas en el transcurso de 3 a 6 Ill(~~)es" Al momento del diagnó5tico
de la diabetes tipo 2 se debe de';c;¡rtar la presencia de proteinuria y si EstCl actitud 5e fundamenta en que:
esta es negativa realil,ar la micro;:llbulllinuria (Figura 3). • El 30-50 % de las personas con diabetes desconoce su condi­

Al evaluar los datos de microalbuminuria se deben considerar los ción por lo que algunos concurren a la consulta cuando presen­

factores que puedell false;;¡¡ ~;U'j resultados (positivos o negativos) tan los primeros síntomas de las complícaciones.

tales como: Con frecuencia ellos tienen otras alteraciones renal,es (enfer­

descompensaciótl metabólica medad vascular ateroesclerótka, glomerulopatías primarías,

adenoma de próstata con cuadro obstructivo) que se deben

infección urínari;:¡
descartar (lntes de atribuir la enfermedad renal a la diabetes.

hipertensión arterial df!SCOmpensada


También presentan otros factores de riesgo cardiovascular

insuficiencia cardíacJ. congestiva


(hipertensi6n arteriaL y dislipidemia) que pueden favorecer el

" fiebre desarrollo de lal riefropatía diabética. Debe recordarse que la

ejercicio fisico intl'n~,(J Pi diil previo o durante la recolección. microalbuminuria es adGmás un marcador de disfunción

• contaminaci6n con flujo vaginal o sangre drogas (DAINE, inhibidores endotelial y un factor de riesgo independiente para enferme­

de la enzima convertidorJ de angiotensina Il) dad coronaría en p'ersonas con diabetes tipo 2.

110 lU
- Ncjropatla ci:!Il,·tico-1])
!J11,'/II'J.'o; J~II IIJ~ '111t".!I' U," 'r.• 1 ~rl(t"~·¡l'.f,'fhTl

Esta etapa se acompaña en general de cifras tensional.es elevadas,

20 - 199 IJg/min 30 - 299 mg/ 24 horas El nivel de proteinuria es un factor de riesgo para la progresión de
la nefropatía y debe evaluarse periódicamente para ajustar el tratamiento

Valores de
microalbuminuria
#­ al objetivo de Lograr vaLores Lo más cercano posible aL normal. Una vez
estabilizada, Los controles de función renaL y proteinuria se realizarán
tri mestra Lmente.
Nefrapatia urémica: Se desarrolla a los 3 a 5 años de iniciada
la proteinuria,
Albuminuria / creatininuria
30 - 300 IJg/mg Con una depuración de creatinina de aproximadamente 50 a 60
mL/min. o proteinuria se debe considerar la «derivación al nefrólogo»
siendo «prioritaria» cuando el fiLtrado alcanza 30 mL/min. En eSi:l
Figura 4. Valores de referencia,
etapa lo más importante es establecer el control estricto de los diversos
factores qU.e intervienen en la progresión de la nefropatía, informar
Filtrado glomerular: La función glomerular se debe evaLuar al "paciente .Y a 'Su familia de Los diferentes tipos de tratamiento
anuaLmente midiendo la creatininél sórica o la depuración de sustitutivo disponibLes y determinar con ~L equipo de saLud eL momento
creatinina. En este período eL filtrado glomerular puede estar eLeva­ «oportuno» para iniciarlo, lo que requiere el trabajo interdisciplinario.
do (hiperfiltrado) o normal. En ese estad~o los factores de riesgo de progresión más im­
portantes son:
No olvide que:
hipertensión arterial
En pacientes con desnutrición severa, con atrofia muscular o edad
avanzada se pueden obtener «valores de creatinina cercanos aL normaL» hipe.rgLucemia
aún cuando eL fiLtrado gLomeruLar esté disminuido, Esta divergencia debe • dislipidemia
considerarse para adecuar la dosis de drogas nefrotóxicas O de medios de • tabaqui1smo
contraste a la función reaL del paciente. Por lo tanto y de ser posible «la
• sedentarismo
depuración de creatinina» se debería medir anualmente y corregir sus
valores de acuerdo a la superficie corporaL y a La edad del paciente, • anemia
• alteraciones deL metaboLismo fosfocálcico
Nefropatia clini€a: está determilnada por La progresión de la
microaLbuminuria a La, macroalbuminuria (Figura 2). El rango de Adem6s se deb~ evaluar: la presencia de factores concomitant~~j
macroalbuminuria de 300 mg/24 horas corresponde ¡:¡proximadamente que puedan favoreoe~ el deterioro de la fundón renal tales como
a 500 mg /24 horas d@ proteinuria. depleción de volumen, drogas nefrotáxicas (DAINE, aminoglucósido~;),
obstrucción e infección urinaria, uso de sustancias de contJ;'1~jt.e,
La proteinuria puede aumenta~ por encima de 3,5 9/24 h, desarro­ presencia de otras glamerülopatías y estenosis arteria rellilL.
llándose el síndrome nefrótico caracterizado por ed~míls, dlslipidemia,
hipoaLbumlnemia y dilsminución progresiva del filtrado glomerular Otro aspecto que debe jerarquizarse es la necesidad ~p. 11l1l11IJ~IWI' 1-1I1

(aproximadamente 1 mVmin/mes) si no se reaLiza tratamiento adecuado. estado nutricional adecuado pues su deterioro .lLll1ll'llt;1 Irl

JI'..:
112
11I

/tillhl'//" Y ft/JtI'. ¡tifitilI" ,lit /ir'O:(Ul (tJn!,'(wa'::ui'r)


- N¡;fi,'fJl/llI/ (/i,¡t'ct.'nr·1l

IllOrbimortt1lidad de estos pacientes durante el tratamiento sustitutivo. Solicitar ecografía rena'l, prostática y evaluación de residuo
Actualmente el tratamiento sustitutivo ¡renal al que pueden acce· postmíccional para evaluar cambios de tamaño renaL ylo alteraciones de
der lil r , personas con diabetes es el mismo que el de los no diabéti­ 0as urinarias (enfermedades obstructivas, adenoma de próstata, vejiga
;(l~: hcmodiálisis, diálisis peritoneal o trasplante renal. Se debe con­ neurogénica o litiasis) con un estudio simple y de bajo costo. En caso
feccionar el acceso con un filtrado glomerular de 20 mL/min. e iniciar necesario realizar tomograña o resonancia magnética. En todas estas
l;:¡ di áli si s según la evaLuac; 6n i'ndividua li zada (estado clínico, situaciones consultar al nefrólogo yo urólogo para realizar el diagnóstico
hemodinámica y nutricíonal} aL disminuir el vaLor aproximadamente y tratamiento correspondiente.
a 15 mL/min.
Estudios de contraste: Evaluar previamente su beneficio para el tra­
El mejor tratamiento sustitutivo para Las personas con diabetes tamiento:
es el transplante renal o renopancreático; ello requiere implementar
un tratamiento intensificado en etapas precoces y en La etapa o en pacientes con creatínina de > 2,5 mg/dL se sugiere evitar su
prediálitica, que le permita acceder al trasplante con la menor can­ indicación por el riesgo de insuficiencia renal aguda.
tidad y seve·ridad de complicaciones micro y macrovasculares. 24 horas antes y después de la administración del medio de contras­
Estudios complementarios: Antes de iniciar el tratamiento de la te se debe realizar hidratación abundante y controlada.
nefropatía diabética se deben descartar como mencionamos anteriormen­ dado que existen medios de contÍ<1ste con diferente nefrotoxicidad,
te, otras patologfas frecuentemente en personas con diabetes tipo 2. debe informarse al radiólogo la condición de diabético del paciente
y su grado de función renal para seleccionar el medio más adecuado.
Recuerde que:
Se debe sospechar otra patología cuando existe: Despues de la descripdón realizada, en [a que usted seguramente ha
encontrado algunas respuestas a nuestras y sus inquietudes, pasaremos a
e Sedimento indicativo de infección urinaria: realizar urocultivo, descn"bir el
antibiograma y estudio de la integridad de la vías urinarias.
Presencia de nefropatía sin retinopatia: realizar ecografía y biopsia
renal ante sospecha de glomerulopatía primaria. Es importante des­
tacar que la ·enfermedad renaL del paciente diabético no disminuye el Tratamiento
tamaño renal aún en etapas muy avanzadas de la insuficiencia renal.
Objetivo:
• Disminución brusca del filtrado glomerular sin causa aparente.
Hematuria sin proteinuria: descartar patología de vfas urinarias y Prevenir el desarrollo, retrasar o revertir la evolución de cada
realizar biopsia ante la sospecha de glomeruloplltía primaria. una de las etapas de la nefropatía diabética. Para ello la presión
arterial en personas con diabetes debe ser ~ 130/80 mm Hg y si
Asimetría renal: hacer radiorrenograma con captopril y arteriografía presentan proteinuria ~ 1 g/24 horas :5:125/75 mmHg.
si se sospecha enfermedad vascular renal.
El tratamiento se basa en:
Caída brusca de La función renal después. administlGlr inhibidores de la
enzima convertidora: sospechar enfermedad var.culnr arterioesclerótica • Control metabólico
renal e indicar radiorrenograma con captopril y arteriografía. • Cambio de hábitos (dejar de fumar)

114 115
flfU/l"¡t", v 14 /1/1. /(/11(111 '. ¡fr' IlJ "/(1 (Wdi~'\'\1':(u(m - Nr/"cpotiLlái('j'- kiw-11

• PI:Hl de alimentación (control de la ingesta de protelnas, pacientes con filtrado glomerular menor de 30 mljmin se sugiere reem­
r¡lllcidos, grasas y sodio) plazar los hipoglucemiantes orales por insulina para controlar la glucemia.
• Tríltllllliento farmacológico (antihipertensivos, antiproteinúricos) Las meglitinidas (,repaglinida, nateglinida) o las tiazolidinodionas
.. Controlli pldico (rosiglitazona, píoglitazona) podrían considerarse como herramientas
• Aspirina terapéuticas en estas circunstancias pues la presencia de insuficiencia
renal no modifica su farmacocinética significativamente, pero es nece­
• Control de la anemia y del metabolismo fosfocálci.co en las
sario mayor número de estudios para arribar a una condus16n definitiva.
etapas más avanzadas.
Analizaremos en detalle cada uno de ellos. la Cambi'o de hábitos: fumar aumenta el riesgo de desarrollar
microalbuminuria, acelera su progresión a macroalbuminuria y la
• Control metabólico: la progresión de la nefropatla diabética puede progresión de la insuficiencia renal personas con diabetes tipo 1 o
modificarse con las intervenciones efectivas disponibles actualmente. 2 por lo que se debe promover el abandono de este hábito.
Datos recientes muestran que la «regresión» acumulada de la
microalbuminuria es frecuente, alcanzando al58% de los pacientes 11I Plan de alimentación: el Valor calórico total se debe adecuar al
con seis. años de evolución, indicando que la presenciél de estado nutricional del paciente. En etapa sustitutiva renal
microalbuminuria en casos de nefropatía incipiente no implica su (hemodiálisis o díálisis peritoneal) se establecerá un pLan de ali­
progresión inexorable a la nefropatíCl clínica. El dato justifica todo mentación con las calorías adecuadas al paciente y a La técnica
esfuerzo para su detección y tratamiento precoz. dialftica establecida, considerando en general más de 35 calorías /
Kg aún en p.acientes sedentarios.
Las pautas de control metabólico fueron normatizadas para pacientes
(~sin complicaciones severas», pues aquellos con complicaciones - Proteínas: en el estadio de nefropatía incipiente el plan de ali­ ')1
(ancianos, ceguera, insuficiencia renal avanzada) no se incluyeron en mentación debe ser normoproteico (0,8-1 g/Kg/dla) pues no hay j
los estudios. No existen estudios prospectivos randomizados que evidencias que demuestren mejor evolución con su restricción,
demuestren que los objetivos glucémicos establecidos en pacientes seleccionando prote¡nas de alto valor biológico.
sin complicaciones son también válidos en esta etapa. Sin embargo En presencia de nefropatia clínica se sugiere mantener los mismos
algunas publicaciones muestran que un mejor control en los 6 meses niveles de proteína si se conserva la función renal. Con filtrados
previos al inicio del tratamiento sustitutivo renal, disminuye la menores de 25 mljmin. los aportes pueden disminuirse de 0,8 g/Kg/
morbimortalidad durante los primeros 5años de seguimiento en diálisis. día a 0.7-0.6 g/Kg/día siem pre que se mantenga el estado nutricional
En consecuencia se sugiere en esta etapa alcanzar valores de glucemia adecuado.
lo más cercano a lo normal evitando la hipoglucemia.
- Hidratos de carbono: deben cubrir el 50-60% de las calorías totales.
Otra pregunta de difícil respuesta es - Grasas: siguen las normas de cualquier paciente con diabetes sin
¿Cuándo incorporar el usó de insulina ·en padentes con insufi­ complicaciones.
denda renal? - Restricción de sodio: en la nefropatla incipiente se sugieren 3 g de
Un estudio realizado en pacíentes con diabetes tipo 2 y creati ni na Na/día. En presencia de síndrome nefrótico o insuficiencia renal se
séricél de >1.5 a <3.7 mg/ dL demostró que el uso de insulina posible­ debe regular el contenido de sodio según las cifras tensionales y la
mente retrasaba la progresión de la nefropatía. En consecuencia en sobrecarga dé volumen, pudiendo restringir su ingesta a 2,4 g/día.

116 117
- Nc('<,r:11i11 din/H im· D

• T~atamientQ f~rmacoL6gico: En Los pacientes con diabetes tipo 2 aunque los lECA también

- El control estn'cto de' la presión arten'al permite evitar o retardar la disminuyen la microalbuminuria Q La proteinuria, no hay coinciden­

progresión de la insuficiencia renaL. Pero adem~s, hay clara evidencia cia sobre su efecto en la progresión de la insuficiencia renal y solo

de que la Inhibición del sistema renina-angiotensina presenta efectos elSO% han demostrado una mejoría sigfi1ificativa.

beneficiosos independientes de su acción antihipertensíva ya que la ~ Antagonista de los receptores de la angiotensina JI los ATl (ARA Il).' se
angiotensina II a tra,vés de sus receptores ATl produce no soLo ha demostrado qlJle la administración de Losartan (estudio Renal) e
vasoconstricción sino que promueve la retención de sodio, La, producción Ibersartan (estudio IDNT) a personas con diabetes tipo 2 disminuyó
de radicaLes Libres, eL aumento de moléculas de adhesión, La fibrosis e significativamente la albuminuria y la progresión de la insuficiencia
hipertrofia cardiaca y vascular. EL bLoqueo de estos efectos ha renal. Este último efecto fue mayor que eL producido por los lECA.
jerarquizado el uso de los inhibidores de la enzima convertidora de
Finalmente se ha establecido que más del 60% de los pacientes

angiotensina JI (lECA) Yde los antagonistas de los receptores ATl de


requieren combinar drogas para alcanzar los objetivos antihipertensivos

La angiotensina II (ARAII) en personas con diabetes.


establecidos y que la asociación lECA-ARA II es altamente eficiente.

- JECA: están indicados en la etapa de nefropatia incipiente o clínica sin


~ Otras drogas antihipertensivas.' todas las drogas antihipertensivas son
y con hipertensión para disminuir la microalbuminuria, La
macroproteinuria y La veLocidad la progresión de La insuficiencia renal. capaces de retardar la progresión de la insuficiencia renaL. Cuando La
En pacientes normotensos :;e debe iniciar el tratamiento con dosis administración de lECA y/o ARA 11 no son suficientes para disminuir
la presión arterial deben asociarse o agregarse otros hipotensores
bajas de cualquiera de los lECA (enalilpriL 2,5 mg/dia, ramipril 5mg/
(ver Capitulo 15) como (P bloqueantes), antagonistas del calcio
dia, captopril12,5 mg/dia, lisÍI'1opril5 mg/día, períndopriL 2mg/día) y
díhidropirídínícos especialmente diltiazem o verapamil, recordando
luego ajustar la dosi,s según reSplJe5ta terapéutica (Ver Cuadro 2).
que los no dihidropiridinicos (nifedipina) pueden aumentar la
Antes y a la semana de iniciar su administración se debe evaluar la
proteinuria.
función renal y la kalemia. Si la cnJalinína aumentó más de 1 mg %
o la kalemia está por encima de 5,5 mEq/L se debe suspender el ~ Diuréticos: en algunos pacientes para alcanzar los objetivos de tratamien­
trata miento. to se necesita asociar diuréticos a los hipotensores ya mencionados.
Como el efecto antiproteinúrico C~; de aparición lenta y se manifiesta La presencia de edemas en el caso del síndrome nefrótíco frecuente­

luego de varias semanas de t~at¡¡lll'ient(), en pacientes normotensos la mente ha.ce indispensable, su uso; en esa circunstancia es aconseja­

respuesta debe evaluarse durante 2 el 3 I11(Y;~~S antes de aumentar la ble utilizar diuréticos de asa (furosemida, torasemida), pero no existe

dosis. contraindicación para utilizar diuréticos distales (tiazidas) oahorradores

Si presenta intolerancia se puede sustituir por antagonista de los de potasio, siempre que verifique la, función renal y la hiperkalemia

receptores de la angiotensina II (ARA Ir) cuya ventaja sobre los lECA (Figura 5).

es la falta de asociación con la tos,


Están contraindicados en el embarazo, en Il'iperk'-llemia y en enferme­ 11 Controllipidico: La prevalencia de disLipidemia en personas con diabetes
dad renovascular. tipo 2 es mayor que en la población general y parece ser un factor de
Se puede concluir que en pacientes con di<lbete~ tipo 1 (normo o riesgo en la progresión de la nefropatía diabética.
hipertensos con cuaLquier grado de prote,inurla) los lECA constituyen Los objetivos para los pacientes con insuficiencia renaL son los mismos

las drogas de primera elección pues dÍ5mi nuyen l!l albuminuria y la que para cualquier persona con diabetes (ver Capítulo 4). Sin embargo,

progresión de la insuficiencia renal. dada. la mayor susceptibilidad de los pacientes con alteraciones de la


1.1 119
IJlII

¡J,l(;/Wj¡-'. i.' nl'JI '~~I/~il~:·. d(' '" '.'1" j (lIt1rul /oo,((dOl - Ndicpn[¡u I!i¡'/:dinl f]

fllnción renal a Los efectos colaterales de los hipolipemiantes, deberá correspondiente. Mencionaremos brevemente los objetivos que de­

.líll~;tilI'Se su dosis según el valor deL filtrado glomerular. En ben establecerse en pacientes con insuficiencia renal y diabetes.

lon~;cC:llel1cii\, la NCEP (National Cholesterol Education Program) y de


1;)': 1l0nllélS DOQI (Dialysis Outcomes Quality Initiative) establecen pautas - Anemia: en general se presenta cuando el filtrado glomerular dismí­
fl".l:l'ictivas para eL uso de hipolipemiantes en pacientes con nuye aproximadamente a 30 mlfmín, pero en los pacientes con
illsuficiencia renal. La primera contraindica el uso de fibratos con diabetes suele aparecer con fiLtrados de 45 ml/min. Su diagnóstico
clearence de creatinina < 30 ml/min, y la segunda estabLece comen­ se establece con una hemoglobina <11 g/dL (hematocrito <33%)
zar con estatinas y utilizar gemfibroziL sólo si hay intolerancia a las en mujeres premenopaúsicas o en prepúberes y una hemoglobina
estatinas o si los triglicéridos son ?e SOOmg/dL. <12 g/dL (hematocrito <37%) en los hombres adultos y en mujeres
postmenopaúsicas.
Al. evaluar la anemia se debe descartar otras causas, además de la

Normotenso Hipertensos -Objetivos


Micro-macro :f, 130-80 mmHg
ins'uficiencia renal y luego iniciar su tratamiento. Los estudios a solicitar

illbuminuria Protcínufia > 1 gr/ 24 horas deben incluir hemoglobina, hematocrito, índices hematimétrícos (volu­

~. 125-75 mmHg
men corpuscular medio, hemogLobina corpuscular media, concentración

~ ¡¡OCA y/o ARAII


hemoglobina corpuscular media), recuento de reticuLocitos, ferritina

sérica, saturación de transferrina y sangre oculta en materia fecal.

lECA o ARAr! Intolerancia o


Iniciar con + +Rcspuesta insuficiente
Dosis bajas El objetivo de tratamiento será obtener hematocrito entre 33 y 36%

Antagonista del Ca
YhemogLobina entre 11 y 12 giL, evitando incrementos bruscos. Se

13 Bloq ueante u otro

prescribirá hierro, ácido fólico, vitamina 812 y en caso de no

+ Considerar efecto sobre

lípldos e hidratos alcanzarse los objetivos siempre que la ferritlna sérica sea >100 111

LYla saturación de transferrina >20%, se agregará eritropoyetina.

Enalaprl1 2,5 mg/ 24 dí,a


Captopril 12,5 mg/ 24 día
Perindopnl 2 mg/ 24 día
+ Diuréticas

respuesta insuficiente
~ Metabolismo fosfocálcico: los pacientes con insuficiencia renal presentan
Ramipril 5 mg/ día o edem¡¡s

un amplio espectro de enfermedades óseas que comienzan con filtrados


de 60 mL/min y se hace significativa en el paciente con diabetes a
F,'gura 5, Algon'!rrI() de tratamiento en personas con diabetes normo e Ilipcrtensos partir de los 30m L/min Su estudio debe incluir la calcemia, fosfatemia
con micro y macroproteinuria. y parathormona intacta.
Los objetivos del metabolismo fosfocálcico en pacientes con clearance

• Aspirina: Todas las personas con diabetes y nefropatia diabética que de creatinina de 15-29 mL/min son mantener un fósforo sérico de

tengan patología micro o macrovascular (infarto de miocardio, by pass 2,7- 4,6 mg/dL, el calcio sérico en rango flormal (generalmente 8,4 •

vascular, accidente vascular cerebral, isquemia transitoria, enfermedad 9.5 mg/dL) y los valores de parathormona intacta entre 70-110 pgl
vascular periférica, claudicación (!) angina de pecho) deben recibir mL para evitar el desarrollo posterior de hiperparatiroidismo.

aspirina en la dosis recom~ndada para cualquier paciente con diabetes.


Para obtener estos objetivos se debe indicar un plan de alimentación

Control de la anemia y del metabolismo fosfocálcico: todo pa~ con fósforo no mayor de 800- 1200 mg/día, quelantes del fósforo

ciente con un filtrado glomerular < 60 mL/min. debe ser derivado al como carbonato o acetato de calcio y vitamina D2 o catcitriol según

nefrólogo para eva,[uar ambas alteraciones e í niciar el tratamiento requerí miento.

120 121
- Nt'fropatm din/,,:tJ(,)· [J

Llegamos alftnal de este módulo, sin du.da compl~jo y ,completo. (hipoalbuminemia con alfa 2 y gamma globulinas normalQs, colcstGrol
I_c sUrTen'mos su relectura y análisis en profundidad ani'es .de pasar (elevado), triglicérídos (normal), cHDL (disminuido). Examen ginecológico
normal; Tele de tórax (derram~ bitaterCll pequeño sin lesión activa en el
al sil(uicnf:c. Lo esperamos. parénquima; fibrosis en vértice superior derecho). Fondo de ojo (retinopatía
pro lifera.tiva foto coa gula da).
Diagnóstico: (on estos resultados se confirma presencia de nefropatía
diabética. No se Iluede descartar una glomerulopatia primaria si n realiz<Jr
biopsia renal, realizilble si el fondo de ojo fuera normal.
rl 8i bLiografia -Tratamiento: mejorar GOrltrol gluc:émico y de los otros factores de riesgo
cardiovilscular, asociados (hipertensión y dislipemia) mediante plan de
1. American Diabl'b~s Associatiun: Standards uf Medical (are in diabet.:s (pD>ition <;tatemcnt)
Diabetes eme 7.004; 27(suppll): $1~- 533
alímentllcíón y control ae la proteinuria.
2. ();¡crJe P, Vedel P,Larsell Net al The Stena - 2 <;tudy intc nsified multifactorial intervc nti on
reduces the risk of cClrdiovascular úiseasl' in pati,ents with type 2 diabct~'> alld
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Di.lhctologia 1998; 41: 745-759
No fuma, no ingiere alcohol y es sedentario. Hace 2 ailos tuvo IAM. Medicado
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R, Ritz E. Nephropathy in type2 diabete; J lnt Med 1999;245:111-126 Examen físico: peso 85 Kg; talla 1,75 m; cintura 97 cm; IMe 28. Aparato
respiratorio s/p, Aparato circulatorio: Presión arterial 150/100 mm Hg.
Abdomen s!p. Miembros infe~iores: !!dema bimaleolar. PUl50S periféricos
, presentes.
Di'agnóstico presun'tivo: nefropatía diabética.
Diagnóstico diferendal: hipertensión esencial o secundaria, glomerulopatía
(a'so Clínico 1 primaria, estenosis de arteria renal, slndrome nefrótico, edema ll~aleolar
Mujer de 69 años, con diabetes tipo 2 de 10 años de evoluci6n; tuvo por amilodi pina.
tuberculosis hace 15 allos. Exámenes complementarios: hemograma (normal), hepatograma (normill),
Motivo de consulta: desde hace 3 mes€s dolor lumbary edemas en miembros ionograma (norm¿¡L) y PSA (normal); creatíninemia (1.7mg/dl), dearance
, inferiores. de creatinin¿¡ (55 ml/ll1in); Colesterol total (250mg/dl), triglicéridos
Examen físico: Aparato ResIDi ratoria: derrame pleural pequeño bi lateral. (190mg/dl), cLDL (140mg/dl) y cHDL (30mg/dl); orina completa y
Aparato ci rculatorio siPo Presió n arterial 150-90 mm Hg. Edema en sedimento (sin signos de infección o 'hematuriª con proteíniJria), orina de
miembros infer~ores, blandos e indoloros qu,e llegan h3sta tercio inferior 24hs (proteína 2'9/24hs); fOf'ldo de ojo (retinopatía proliferativa). Ecograña
de muslos y dejan fovea. renal (rilÍ'Íones grandes y simétricos).
Qiagn6stico presuntivo: síndrome nefrótico, Tratamiento: plan de alimentación con 0.8 g/kg/dla de proteína y
Diagnóstico diferendal: síndrome ne·frótíco primario o secundario. disminuci6n estricta de la ingesta de sal (2.4g/día). Suspender la
ExCi,menes complementarios: proteinuria (5 ~/24 hs), creillinjna (0.84mg/dl), metformi na (contraindicada en pacientes con insuficiencia rena l) y
hemograma (normal), eritrosediment¡¡ción (45 mm en 1" hora), proteinograma ophmiza-r control metabóliC0 con insulina.

122 123
111

Objetivo de Presión arterial < 125-75 mm Hg (tiene proteinuria) utilizando Retinopatia


il1hil>idorcc; dela ECAy/o inhibidores de ATl por su efecto sobre proteinuria
y prrHl rp';i611 de la insuficiencia renal. Controlar potasemia y oeati ni nemia diabética
0\ Ll 1:(~lll,lna (debe ser < 5.5 mEq/l y no aumentar más de lmg/dl
ff",P"¡ l.iv;lIl1elll:r~) para continuar el tratamiento.
Un uo ólicanzar los objetivos terapéuticos asociar diuréticos de asa L. Arturo Irarrázaval
(¡'In 0::('111 ida).
Si I;¡ difilipemia no se corrige al disminuir la proteinuria luego de tres
meses, indicar estatinas.

Continuando con esta <darea cotidiana de la paz» como decía


Juan Ramón Jiméncl (aunque el poeta espaiiolse rejería al arado lo
citamos por la belleza de la expresión y como metáfora de la tarea
médica), le planteamos el objetivo de esta nueva unidad:
Reconocer la importancia del control regular y periódico de La
retina del paciente diabético, ya que un examen a tiempo per­
mite establecer un d]agn6stico precoz de retinopatla e
implementar su tratamiento más adecuado.

En este caso, no le haremos preguntas para provocar la revisión de sus


conocimientos prevías. La gravedad y seriedad de esta complicación amerita
que se detenga a reflexionar sobre la misma y, una vez más, a reconocer
la importando de los controles periódicos del paciente diabético.

Igualmente es preciso recordar que frecuentemente es necesario


derivar aL paciente al ofta1lmóLogo para corroborar o establecer un
diagnóstico certero de la retinopatía o su agravamiento.

Epidemiologia

La retinopatía diabética (RD) es la primera causa de ceguera en


aduLtos de 20 a 70 años, con altísima prevalencia ya que a Los 10
años de diagnosticada hasta un 5% de los pacientes están ciegos y
un 33% disminuyó su visión a La mitad. Alos 20 años más del 90%
de las personas con diabetes tipo 1 tiene algún grado de retlnopatía,
a lo largo de su vida un 75% de los casos desarrolla proliferaciones

121.,
12S

1110/ 11'/1 n. V ¡., ¡ n, /; rr Ill{ ¡'~ I (u (¡." ~¡:) (:'Irdí('~ 'l. . uinr

neovasculares retinianas que necesitan tratamiento con láser y en míentras que otro con más de 9% probablemente las tenga' en el mediano
un 112°10 adema macular, con el consecuente peligro de ceguera o o largo plazo. En un paciente con mal control metabólico, la retinopatía
d'i'11l1 i nución im porta nt,e de la visión. Estas cifras demuestran que suele seguir progresando hasta dos años después de lograr un control
pl.1l"1 ir;'\Il11~lltp todas las personas con diabetes están en riesgo po­ estricto (memoria hiperglucémica).
'l'I'IIC;i,d de ceguera. En la diabetes tipo .2 hay una tendencia relativa­
llIente menor a la proliferación, pero dado que representan alrede­ Observe que en el párrafo anterior aparecen, entre otros, dos concep'tos
dor del 90% del total de los diabético~, la mayoría de los casos de que usted ya ha trabajado: lQ memoda glucémica y el estrés oxidativO'.
ceguera se producen en este grupo.
Lo mencionamos para: a) reafirmar la importancia de comprender a
la diabetes como una enferme.dad que compromete a todo el organis­
mo y b) poner en evidencia que a aunquE? para su estudio, este ma­
J Etiopatogenia nual está organizado en capítulos, la diabetes debe ser entendida
como una totalidad.
La retinopatía' diabética es una microangiopatía que produce: Otros factores que favorecen el desarrollo y aceleran La progre­
sión de la retinopatía, aunque de menor impacto que la hiperglucemia, l'
• Alteración de la permeabilidad vascular que genera el edema son la hipertensión arterial, la les; ón renal y eL tabaquís.mo.
macular diabético, principal causa de disminución de visión,
aunque en general no lleve a la ceguera. ¿Cuáles son las «etapas evolutivas de la diabetes» a tener en
cuenta en su vinculaci6n con la visión? ;111
• Oclusión capilar progresiva, con la consiguiente hipoxia. Los me­ .!
diadores químicos liberados por céLulas hipóxicas desencadenan Le sugerímos que realice un cuadro con los datos de aparición y
la formación de neovasos que crecen principalmente desde la desarroLlo de la retinopatía, Si le parece adecuado podría tenerlo
retina hacia el vítreo, seguida de una fibrosis que produce secun­ siempre a mano para consultarlo.
dariamente hemorragia vítrea y desprendimiento de retina. Estas
alteraciones llevan a la ceguera si no son tratadas temprana y
adecuadamente·. De esta forma la neovascularización es la princi­
pal causa de ceguera en estos pacientes. También puede haber Desarrollo de la retinopatia
neoformación vascular en el iris, que lleva en muchos casos a un
glaucoma de muy dificil tratamiento. Diabetes tipo 1: casi nunca aparece antes de los 5 años ni antes de
la pubertad, por lo que estos pacientes deberían comenzar con
controles oftalmológicos ,anuales 5 años después del diagnósti­
Dentro de los factores que favorecen el desarrollo de la retinopatía,
co y no antes de la pubertad.
el principal es la hiperglucemia y el consiguiente estrés oxidatívo (ver
Capítulo 7). Varios estudios han demostrado que un control estricto de Diabetes tipo 2: dado que generalmente al momento del diagnósti­
la glucemia previene la a'paridón y la progresión de la retínopaHa co esta forma de diabetes lleva entre 5 y 10 años de evolución,
hasta en un 65% de los casos. Sobre. la base de esos estudios se puede el examen oftalmológico debe realizarse inmediatamente del
decir que una persona eón diabetes que mantiene valores de HbAl c mismo y luego regularmente en forma anual. Frecuentemente la
por debajo de 7%, raramente tendrá complicaciones oftalmológicas, retinopatía está presente al[ momento del diagnóstico.

126 12'7
~ g'!incprri..io dfaLI¡;U(:1- O

Embarazo: Si bien el embarazo produce una clara tendencia a


empeorar La reti nopatía, esto se deberla aL descontrol metabóLico,
CJue es evitable, y no a factores hormonales. Una embara,zada
CJUt~ Ill<lntiene sus niveles de HbAlc bajos y establ.es no aumenta
')11 riesgo oftalmológico. No hay ningún motivo oftalmológico
que impida el embarazo o el parto normal, siempre que durante
la gestación se logre un control metabólico adecuado.

Hemos preparado rl siguiente:: cuadro sobre la severidad de la


retinopatía. Creemos que también lo ayudard a interpref:ar 1(1 informa­
ción que le dé un oftalmólogo, si deriva al paciente diabético, de
manera de poder decidir la conducta terapéutica apropiada.

Nivel de Severidad
1: Sin retinopatia aparente
2: RD no prolíferativa leve
iRD no proliferativa
moderada
4: RD no proliferativa
severa

Foto 5 Fato 6

~: IW proliferativa
Diagnóstico

En todos estos niveles se puede encontrar edema macular (Foto El estudio y diagnóstico de la retinopatía diabética es básicamente
6) que debe tratarse. En los niveles iniciales el edema puede afectar clínico, mediante un fondo de ojo con dilatación pupilar, lámpara de
all % de los pacientes mientras que en Los más tardlos está presente hendidura y .lentes apropiados. Si el examen se realiza sin dilatar la
hasta en el 70% de los casos. pupila puede haber hasta un 50% de error en la clasificación, aún en

128 129
'/1~lJd v ntl'.')' jnc/tJ,I'Ci !/,. lie !J11 GHdú~VO;;(!Jlof - .<cti¡¡Dpl1tlo diabdi(c - D

manos de retinólogos. El error aumenta si no se utilizan instrumentos La vitrectomía es una cirugía intraocular que se indica princi~
Lldecuildos y es realizado por profesionales sin entfenamiento. palmente en casos de hemorragias vítreas severas, desprendimien­
to traccional de retina y en algunos casos de edema macular seve­
Si bien la angiografía con fluoresceína y otros estudios pueden ro. Consiste en extraer todo el humor vitreo y los neovasos forma­
~:er fundamentales en algunas circunstancias, no son adecuadas para
dos, eliminando las traccíones que producen hemorragias y des­
el control habitual de la retinopatía, como si Lo es el fondo de ojo. prendimiento de retina. Es una técnica de aLta compl1ejidad y re­
Si usted personalmente realiza el fondo de ojo de sus pacientes no quiere gran entrenamiento; puede evitar la ceguera en mils deL
80% de los casos, pero debería usarse solo cuando la retinopat¡a
olvide hacerlo con la pupila dilatada. Ante cualquier duda prescriba la
interconsulta con el oftalmólogo. no respondió al tratamiento con Láser.

Para lograr 0ncular adecuadamente los módulos ya estudiados y ha­


bida (uenta que su interés por la diabetes que lo ha llevado a realizar
• Tratamie,nto este Programa de Capaótaci6n, le proponemos que:
Ell único tratamiento médico que existe para la RO, es el can­ • investigue sobre cada uno de esos procedimientos,
trol adecuado de. la hiperglucemia.
11 aven'güe si en su localidad los puede realizar,
El edema macular diabético se puede encontrar en cualquier
• v0rijiqllfl el costo de cada U170 estos procedimientos y la cobertu­
momento de La evoluciól1 de la enfermedad. Su tratamiento comien­
za con un control clíliico estricto que en algunos casos lo corrige. ra que ofreccm las obras. sociales
Posteriormente eL especialista determi nará si se requiere tratamien­ • amplíe el tema con las lecturas recomendadas acerca de cuáles
to con Láser o vitrectomía. son los méf:'odos de elección según las condiciones del paciente.
Aunque ,esta informací6n ya fue descn'pta, recuerde que se.r mé­
la retinepatia diabétka no protiferativasevera es el nivel de
dico es una tarea que implica la lectura y revisión cont:inua del
riesgo más importante dentro de la clasificación y debe reconocerse
conocimiento adquirido y
precozmente pues prácticamente todos los. casos requerirían trata~
miento con láser para evitar su progresión a niveLes sin retorno. Para ir terminando...

EL tratamiento consiste e,n la panfotocoaguLación con láser cuyo


objetivo primordial es destruir parte de la retina hipóxica para que la
nutrición y eL oxígeno sean suficientes para el resto de la retina. Este Pronóstico
tratamiento es preventivo, siendo su objetivo estabílizar la retinopatía;no
devuelve la visión, sino que como casi todos Los tratamientos de esta La diabetes es una enfermedad que, al menos por ahora, no se
afección, evita su pérdida. El tratamiento con láser indicado en el mo~ cura, por Lo que la retinopatía puede mantenerse o empeorar en
mento adecuado disminuye en un 90% los casos de ceguera. CuaLquier cualquier momento de la vida, De todas formas, la ceguera es prevenible
oftalmólogo que reciba um entrenamiento breve está capacitado para casi siempre: pongamos por ejemplo 100 pacientes que, siguiendo su
realizar este tratamiento. Como regla generaL una panfotocoagulación evolución naturaL podrían (aunque no necesariamente) llegar la
representa un mínimo de 1200 a 1500, disparos de láser en ,cada ojo. ceguera.

130 131
)111
flio/¡, 1, " V ,¡II,'¡ ;i:(I'iI'-,~ el" ¡¡."'!O (;(II</I(I'/II:(,U/W - Rctin:.wat,ü dieút.!i(¡] - D

5. Klein BE et al. The Wi~consin Epidemiologic Study of Oiabetic I'lctinopJtliy. IX. Four'-year
Evolución natural Ceguera 100% 100 ciegos incidence and progre$\íon of diabelíe retínop~thy whcn .lge at diognosis is less than 30
-­ - yc',us. Arch OphthalmoL. 107(2):237-43,1989.
Control estricto de glucemia Previene 65% 35 ciegos 6. Klei n BE Mos; SE Kle.in R. Effect of pre.gnancy on progrcl'<io n of dí abNic reti ~opathy.
_.­ Diabetes Carc, 13(1):34-40.1990.
Panfotocoagulación bien indicada Previene 90% 3,5 ciegos 7. The Diabetes ControL and Complicabon; Triill Resean;h Group (DCCT). The effectof inten!>ivl"
-
Vitrectomia bien indicada Evita 80% 1 ciego
- diabetes treatment on the progcession of diabetic retinopathy in insulín-dependcnl di¡Jbctrc
mellitu~. Arch Ophthalmol 113:.3G-51.1995.
8. Th~ D'iabctic RctinopJ,thy Stud.y Rese.uch G~oup, Photocoagulation treatmcnt of
prol'lfer¡¡tive diabetic reti nopilthy: Cli 11 ¡c<ll 1¡ppli c~tions 01' Oiabetic Rr.ti nop;lthy StlJdy
(DRS) findi ng~, DRS Rcport No. 8. Ophthnlmo\ogy &8: 583-600, 1981.
9. UKPDS 38. UK Pro,pective Diabetes Study Group. Tight blood prc,;sure control and ri,K of
Aunque no todas 'las personas con diabetes sin tratamiento lle­ macrovasculolr i1nd microvasculM compliciltions in type 2 didbe-t.e.\: BMJ. 317:703-13.1998.
garán a la ceguera, el ejemplo sirve para demostrar que práctica­ Err,1tum in: BMJ 318:~9, 19Q9.
mente el 99% de los casos de ceguera son prevenibles.

10. Wilkinson ep, Ferris FL 3rd, Klein RE. Lee PP, Ar¡ardh CO, Oavi, /11, Dills D. Kampík A.
Pararajasegaram R, V~rdilguer JT; GlobaL Oiabétic Re-tinopathy .Projcct Group. i'roposcd
interniltional cLinicaL di~bl'tic rctinopathy ilnd diahct:ic macul.lr edema disll~se severity
¿Contundente verdad? sc.Les. Ophthalmology. 11O(9):lG77-8~,2003.

Edad de diagnóstico Primer examen I ---+1­ -


Control posterior
Anual
t
<30 años 5 años después de diagnóstico
Caso Clínico 1
>30 años con el diagnóstico Anual Paciente de 55 años de edad, sexo femenino, diabética tipo 2 con
Con diagnóstico o primer trimestre Trimestral antiguedad de 13 anos.
Embarazo
Antecedent·e.s famWare.s: madre con diabetes tipo 2 insulinorrequiriente
Tabla 1. Con t.roles oftalmológicos recomendados para pacientes s,'n retinopatía. fallecida. Padre obeso e hipertenso falleddo. Tiene 1 hermana no diabética.
Antecedentes personales: colecistectomía por litiasis vesicul~r a los 48
años.
Menopausia a los 49 años de edad; no realizó tratamiento hormonal de
reemplazo.
Operación de by pass coronario a los 58 años.
i] BibLiografla Motivo ,de consulta: concurre por primera ve,z para control de su diabetes.
Examen jisic(}: Peso 82 kg; Talla 1,63 m. Circunferencia de cintura: 102
1. Díabetc~
Retinopathy Vitredumy Study Rese~rch Grou,p. 'Early Vitrectomy for srvrrc v'itrr.ous cm. IMe: 30.9. Aparato respiratorio: s/p. Aparato circulatorio: Presión
hemorr~ge ,in d~,lbetic retinopathy.. Fuur Yblrs re,ults ofa randomized tría~ DiJbetc\
Retinopo1thy Vitrcctomy Study Report 5. Arch Opllthalmol108:958-964.1990.
arterial 150j90 mm Hg acostada y 1351 90 mm Hg de pie. Examen de las
extremidades inferiores: disminución de tos pulsos pedios (más acentuado
2. Eilrly Treatment of Di¡¡~elic Retinopo1thy Study. Photocoag'ulatíon lor diabetic macul.lT
edema: Early Tre<ltmllnt Di.lbctic Retinopathy Study Report No. 4. Imt OphthalmoL Clin del lado izquierdo). Insensibilidad ul monofila mento.
27:265·272,1987. Diagnóstico presuntivo: diabetes tipo 2 con obesidad central e hipertensi,ón
3. EJlly Treatment uf Diabetic Retinopathy Study, Fundus photographic ri,k fJctor~ for arterial y signos de macroangiopatía (enfermedad coronaria y enfermedad
progression of di,]betic rctinop~thy. ETDRS Report No, 12. OphthalmoL09Y [/8:823­ vascular periférica)_
833,199l. Análisis de laboratorio solicitados: hemograma (s/p), Glucemia (184 mgl
/.. Fwis FL. Early photocudgulo1líon in patients with eithertyp.e 1 01' type II diabetes. Eilrly dl), HbA1c (8.9%). cole~terol (234mg/dl), triglicéridos (156 mg/dl), cHDL
Treatment ofDío1betic Retinop.~thy Study Report No. 7.3. Tran~ Am Ophthalmol Soc 94:505­
53,7.1996. (35 mg/dl), cLDL (160 mg/dl) y Análisis de orina (vest~g~os de proteina).

132 133
('r'l,i· 'l"', V Ojf!tl"" l!lcl·-',,_.; de rif;'7(l cwd¡:\t'~.·\,·.·tll(:t .. F.'!t;/lCl)(Jt,a ,jiab¿r;'C,1 -O

Estudios complementarios: examen oftalmológico (agudeza visual IMC 23.8.

di~minuida marcadamente en ojo izquierdo y presbicia). Fondo de ojo Aparato respiratorio sipo Aparato circulatorio ruidos cardiacos s/p. Presi6n

(exudados duros en ambos ojos que en el ojo izquierdo se disponen en iJrterial 160 /100 mm de Hg (acostado) y 150/100 (de pie). Abdomen

forma de a ni llo alrededor de la mácula). Reti nofluorescei nografía globuloso indoloro a la palpación superficial y profunda. Extremidades

(RFG)( confirma presencia de edemas y se detectan microaneurlsmas en inferiores: pulsos pedio') dismi nuidos; sensibilidad al monofi lamento ne­

cuadrante superior derecho de ambos ojos). La extensión del edema macular gativa en ambos pies.

y de áreas de no-perfusión son las princípates indicaciones cle la RFG Djagn6stico presuntivo: cHabetes tipo 2 en período de insulinorrequeriencia

debido a que estas ilnorma1lidades no pueden ser estudiadóls mediante la (disminución de peso sin cambiar ingesta), con hipertensión arterial y

oftalmoscopía. lesiones de microangiopatía (neuropatia diabética periférica) y

Diagnóstico oftalmológico: retinopatía no proliferativa (de background) macroangiopatía (disminución pulsos peroféricos).

con múltiples microaneurismas y exudados duros, especialmente en anillo Análisis de laboratorio: Hemograma (eritrocitos 5.430.000/mm 3 ,

rodeando a la mácula y edema de m[lcula. leucocitos 7.200/mm 3, Hb 15.5 gOfo, Hc 47%), glucemia (243 mg/dl),
1111

Diagnóstico d~finitivo: Paciente con diabetes tipo 2 con hipertensión HbAlc (9.8 "lo), uremia (51 mg /dl), colesterol (254 mg/dl), triglicéridos

I
arterial, dislipemia y reti nopatíj) diabética no proliferativa y edema de (322 mg /dl), cHDL (33 mg/dl), cLDL (158 mg/dL), creatininemia (1,2
macula en ojo izquierdo. , mg/dl), deMence de creatinina (116 mg/min). Anfilisis de orina completa
Tratamiento: Educación diabetológica con énfasis e"l cuidados del pie (glucosuria 9 gil), proteinuria en orina de 24 horas (negativa),
para prevenir aparición de lesiones. Lograr objetivos li pídicos y de presión MicroaUbumi nuria en ori na de 24 horas (56. ¡¡ mg [V. R hasta 30 mg/24
arterial según normas (ver Capítulos 15 y 16). Derivar a un oftalmólogo horas]).
con experienciCl en diabetes ya que la retinopatía CQn edema de macula Estudios complementarlos: Eco-doppler de vasos del cuello (engrosamiento
requiere un reconocimiento temprano y la fotocoagulación con láser, aún mio-intimal de la carótida primitiva derecha). Examen oftalmológico
si la visión no está' comprometida. (agudeza visual marcadamente disminuida); Exanien del fondo de ojo: ojo
derecho: vasos de neoformación en la períferia de la retina, múltiples
manchas y puntos hemorrágicos. Exudados en copos de algodón (antes
denominados exudados blandos); ojo izqu'ierdo: les'iones similares él las
del ojo derecho más vasos de neoformllción en el disco óptico y hemorragia
(aso Clínko 2 del vítreo.
Paciente de sexo masculino de 58 años de edad, con diabetes tipo 2 desde Diagnostico definitivo: diabetes tipo 2 insu li noneque ri ente, ca n
hace 1!8 anos. hipertensión arterialy dislipemia. Lesiones de microangiopatía (neuropatia
Antecedentes famifiare-s: padre fallecido por enfermedad cardiovascular. diabética periférica, nefropatia inci piente y retinopatía proliferativa) y
Madre viva, obesa, con hipertensión arterial. Tiene 2 hermanos, uno de macroangiopatía (enfermedad vascular periférica y engrosamiento parietal
ellos en tratamiento por dislipemia. de los vasos del cuello).
Antecedentes personales: casado a los 31 años de edad. Esposa obesa, en Tratamiento: reposo en cama sin apoyar los pies h<lsta la curación de
tratamiento por hipertensión arterial y dislipemia. Tiene 2 hijos sanos. lesiones en ambos pies. Educación diabetológica. Plan de alimentación
Diagnóstico de diabetes a los 40 años de edad. Fue tratado con dieta e con restricción de la ingesta de sal y alcohol. Iniciar insulinoterapia
hipoglucemiantes orales. Actualmente plan de alimentación cualitativo intensificada. Tratamiento de la hiperténsi6n (inhibidores de la ECA) y de
que no cumple e iI1gesta moderada de alcohol. Fue fumador de 20 cigarrillos la dislipemia (estatinas) para lograr objetivos de controllipídico.
por día hasta hace 2 arlOs. Glibenclamida 10 mg/día y metformina 1000 Deriv<lr II oftalmólogo con experiencia en retililopatía diabética para evaluar
mg/día. tratamiento con pan fotocoClgulación en el oj,o derecho y vitrectomia en el
Motivo de consulta: lesiones ampollares en el borde interno de los dedos ojo izquierdo.
gordos de ambos pies por uso de calzado inadecuado. Nota descenso de peso
comiendo lo mismo que antes.
Examen físico: peso 74 Kg; Talla 1,76 m; circunferencia de la cintura 118 cm;

134 13!5
Neuropatia diabética
periférica y autonómica

Maunóo N. Jadzinsky

1
111111, '

Propósito I
• Analizar la clasificación, la fisiopatología y el tratamiento de
la neuropatía diabética
• Comprender la importancia de su diagnóstico precoz para lograr \ 11:
una mejor calidad de vida del paciente l"
ll¡
1':1

ir
j'
• Actividad inicial 1,

La neuropatfa diabética que desarrollaremos en este capitulo es, como '11


leerá luego, una de las complicadones que suelen diagnosticarse en
I
forma tardía.
• ¿Por qué imagina que es así?
• En su práctica profesional ¿le tocó diagnosticarla? Si es así

¿Cuáles fue'ron los si'gnos o síntomas que tuvo en cuenta para

llegar al diag nóstico?

Por ot~a parte, para comprender mejor las características clínicas de las
lesiones nerviosas produddas por la diabetes, le sugerimos que "repase" los
distintos tipos de fibras nerviosas y sus funáones.

Porahora y para recuperarsus conocimientos sobre la neuropatia diabética,


recuerde como pueden afectar las alteraciones metabólicas de la diabetes al
sistema neMoso y en particular a los distintos tipos de nérvio5.

137

IL

:;ca v nuto':c'mira -1IiJ

• Introducción o los axones de los nerv;os periféricos


\ las células de Schwann
Aunque las lesiones nerviosas, constituyen una de las
complicaciones más frecuentes de las persona.s con diabetes, son elementos vasculares endoneurales
probablemente, las diagnosticadas más tardíamente. La prevalencia
Estos defectos incluyen:
de la neuropatía diabética es dificil de establecer. Esta disparidad
en la información se debe a varios motivos, tales como ausencia de • Atrofia axonal y pérdida de las fibras nerviosas míelinizadas pe­ " .
criterios diagnósticos normatizados, gran diversidad de métodos em­ queñas y grandes.
pleados para su diagnóstico y a las numerosas formas clínicas de
presentación. Desmielinizacián segmentaria y paranodal. I
• Prolifera ción del tejido conectivo endoneura 1 que incluye
A pesar de estos inconvenientes, es generalmente aceptado que la engrosamiento de la membrana basal de las fibras nerviosas, de
neuropatía diabética se encuentra en un 8% de los diabéticos tipo 2 los vasos sanguí neos endoneurales y del peri neuro.
recientemente diagnosticados y que esta. cifra se eleva al 50% luego de
20 años de enfermedad.
La diversidad de las manifestaciones clfnicas de la neuropatía ha
dificultado su clasificación y numerosos autores han intentado agrupar­
la de diversas maneras. Aún cuando fue formulada en 1973, la clasifica­
• Patogenia
las alteraciones metabólicas de la diabetes influyen sobre las neuronas,
1 I
,1

ción realizada, por P. K. Thomas mantiene su vigencia (Tabla 1). las células de Schwann y los vasos endoneurales. El factor desencadenante '\11,1:.1
de todas las complicaciones lo constituye la hiperglucemia (ver Capítulo!).
Analice e.ntonces, la tabLa que reproduce dicha clasificación Los cambios metabólicos mayores producidos por la hiperglucemia son:
el incremento de la vía metabólica de los polioles, el aumento de la
1. Neuropatías diabéticas simétricas 2. Neuropatfas diabéticas focales formación de radicales libres y la producción de productos finales de
- glicación avanzada (AGE). Además de estos mecanismos lig.ados directa­
a.-Nellropatía diabetiw motora a.-Lesión de los pO/es craneales mente a la hiperglucemia, la deficiencia de ácido y-linolénico, adquiere
b.-Ncll{()patia diabética sensitivo b. -Ncuropatias rudiculiJros y prT».imab importancia en la génesis de la neuropatía.
c. -Neuropatía diabética autonómica c. -Amiotrofia diabética

Tabla 1. Clasificación de la Neuropatfa diab{:tica (P. K. Thornas).


• Via metabólica de los polioles
Como ha sido demostrado, el aumento de sorbitol intraneural
• Lesiones estructurales de Los nervios periféricos consecutivo a la hiperglucemia es mediado por la actividad de la
aldosa reductasa (AR) y genera una disminución del contenido de
Los estudios histológicos clásicos de material de autopsias o de mioinositol del nervio. Este fenómeno limita notablemente la capa­
biopsias de nervios de pacientes con neuropatla diabética han cidad de las neuronas para sintetizar fosfoinosítidos. Estos últimos
identificado lesiones que involucran: actúan como señales intracelulares y su deficiencia se manifiesta

138 139
clínicamente por alteraciones en los potenciales de membrana y en la La autooxidación de la glucosa produce radicales Libres potenciando
velocidad de conducción de la célula nerviosa. su efecto negativo y eL de los AGE, generando una disfunción neurovascuLar.
Además, el aumento de la vía de los. polioles es una alteración L
potencialmente tóxica para la célula de Schwann con la consiguiente Superóxldo ... Daño Endotelial 11I1

repercusión en la síntesis y degradación de la mielina. "\. Disminución de ,I~


~ SupNó.ido di'mllt~"-"
Disminución de glutation.
Aumento de AGE
H202 H20
~."to d. "di,,'~ Iib",
ro
>. ~)"- 'if
Disfunción

~
"¡;(
Glutatión perolCidasa Neurovª5culilr

_.
1 -~~
Ci

NADPH NADP El:::> ...


-

< Glut>lti6n o.idado Glut-ltlon ~edu(ld~

~
e
~/,
'o

Glucosa
Aldosa reductilsa
• sorbitol - - - - - - . . , - fructosa
Sorbitol
'"
,~
(9 GM.atión R~dIICI"~¡a

dehídrQgen~sa

NADPH NADP
Efecto osmótrco ;7"'-";>­
Glucosa ~/ ... Sorbitol
I\ldo~a RerJuctasa -,,1
Disminuci6n de mlo.lnositol
Figura Z. A/ltooxidación de la glucosa y producción de radicale.s libres.
Figura 1. Alteraciones neurovasculares relacionadas con la vía metabólica de los polio/es.

Productos finales de glicaci6n avanzada (AGE)


El incremento de la vía del sorbitol produce una disminución del
mioinositol del nervio y aumento de radicales libres. La formación de AGE por mecanismos explicados en el Capftulo 7, puede
contribuir al desarrollo de las complicaciones de la diabetes él través de
diversa vías como por eJemplo efectos sobre la matriz extracelutar
Aumento de La formación de radicales libres (engrosamie,nto de la mémbrana basal por interferencia con el recambio
normaL), interacciones con receptores de AGE en varias céLulas (macrófagos,
Por otro lado, el incremento de la vía del sorbitol utiliza NADPH como células endoteliales y células del mesangio glumerular) e interacciones con
muestra la Figura 1 y disminuye el poder reductor de las células generan­ moléculas intracelulares (favorecen la coagulación y trombosis en la super­
do así un estrés oxidativo. La probabLe conexión entre la vía de los poLio Les ficie endoteliaL por la estimulación de la producción de citoquinas que pro­
y las aLteraciones vasculares se relaciona por la inhibición de la produc­ mueven el crecimiento). También se ha obselVado un aumento en la glicación
ción de sewestrantes de especies reactivas de oxigeno produciendo de de ta proteína de la mielina comparable a la que ocurre con las proteína~
esta manera un descenso del potencial redox celular (Figura 2). Por otra plasmáticas. Los AGE también se oponen a la acción delóxído nítrico (NO),
parte, ocurre una disminución en la síntesis del vasodilatador NO por el potente vasodilatador liberado por el endotelio y de este modo contribuyen
defecto de NADPH llevando además a una hipoxia regional. a la disminución de la: relajación de Lós vasos en la diabetes.

140 1111
- Ncura.')Dt:a :h'IIL I'ticil ptn~~:o(r. y üuto,tjI..'J"'::a ..
J
1I!l

Alteraciones de los ácidos grasos l1J Presentación cLiRica y clasificación


Deficiencia de ácido gamma linolénico: Las manifestaciones clínicas de la neuropatía diabética pueden
clasiñcarse en cuatro grupos sindrómicos mayores:
La hiperglucemia y eL estrés oxidativo producen una disminución de
la desaturación hepática deL ácido LinoLeico, La fuente más importante de • Polineuropatía bilateral simétrica y distal
ácidos grasos '(.6. Como consecuencia de eLlo, disminuye La producción l> Neuropatía predominantemente de fibras cortas

de prostanoides vasoactivQs, especialmente la prostaglandina PGI2, lo


que determina una disminución de La respuesta vasodíLatadora de los Neuropatía predominantemente de fibras largas

vasos neurales. Esta desaturación anormal puede corregirse administran­ '"' Neuropatía mixta

do ácido y-linolenico que incrementa sensiblemente la capacidad de


vasodi lataci ón. • Neuropatía motora proximaL
De la descripción anterior se desprende que las alteraciones • Mononeuropatías focales y asimétricas
neurovasculares, son la consecuencia de cambios complejos de varios Mononeumpatías de los pares craneanos

sistemas que tienen como vía ñnal común la disminución del aporte de
.. Neuropatía troncal.

oxigeno con la consecuente hipoxia tisular que repercute negativamente


sobre la función neural. • Neuropatía diabética autonómica

HIPERGLUCEMIA
Para comprender mejor las características clínicas de las lesiones
nerviosas producidas por la diabetes, es necesario conocer los distintos

Anormalidades Meta\JóllcaSl
tipos de fibras nerviosas y sus funciones.
AGE Estl'és
Oxidativo
,

Vía· de los
Poliolcs
Metabolismo de
ácidos grasos

Anormalidades E.ndotelia les

En tal sentido, en la Figura 4- se esquematizan.

Motor Sensor Automático


I~
,,/\
,~
Endotelina Angiotensin~ Ox. Nítrico PG12

.
\
I

,/ \.
1._ _ .!~UjO sanguineo neural V oxigenación -~ \
+
Dcsml~llni7.~'d~J
[~_~~~:,~6n neu~~1 V de cél!Jla de schwan~
Aa A (l f P A[I e A~ é

. +

Degeneración ill(Olíal
.
~~,~~ini;r;a(;i6n segmentarla
"~l ..
Control
Grande
S. Vibratoria
~ ..
Dolor
Pequef\a
Dolor 5. NeIVioso
~

Muscular Percepción de pDsición Frío Calor Autónomo

Figura 3. [ntr:graóón de los mecanismos etioparogr'nico5 de la rreuropatfa dialJ~tica. Figura 4. Tipos de fibras y funciones nerviosas.

:1.42 'lA:!
n¡~lln/~(,I' OUt)( 1'J(!(}f':' de rit;(T(l Cfirdic\'w;wlo¡

Las fibras poco mielínizadas y amiellnicas(fibras pequeñas) son las Los enfermos con este tipo de lesión, son poco sens:ibles a los traumas
afectadas más precozmente. . o microtraumas y pueden presentar lesiones que por su frecuencia son
casi caractensticas de la diabetes, tal como la osteoartropatia de Charcot
A continuación describiremos cada una de las dIferentes formas de o eL mal perforante plantar (ver Capitulo 13). Debe recordarse que el
neuropatfas para más adelante introducirlo ,en su tratamiento. 7,8% de los pacientes con neuropatía distaly simétrica desarrollan anual­
mente lesiones en Los pies.
1. PoHncuropatin bilateral Glmétrl'cl:i y dü.1:;:¡l Las lesiones motoras de la poLineuropatía distal y simétri'ca acom­
Es la más común de las manifestaciones neurológicas del diabético. pañan generaLmente a las manifestaciones sensoriales y pueden afec­
Aunque algunos autores han 'intentado dividirla en formas predominan­ tar a las cuatro extremidades. Es en los miembros inferiores donde esta
temente motoras, sensitivas y autonómicas, las formas mixtas son las situación adquiere importancia c'línica pues la atrofia de Los múscuLos
más comunes, propios del pie, producida por la neuropatía, impide el mantenimiento
de su morfoLogía y fundón que se describen en detalLe en eL capítulo
Las Lesiones producidas en la diabetes afectan inicialmente las fibras 13. Las aLteraciones morfológicas del pie son posteriormentQ asiento
pequeñas denominadas "cortas" o "fi nas" que conducen la sensibilidad de hiperqueratosis, inflamación y ulceración, dando comienzo al pro­
táctil y termoalgésica. Cuando predomina la lesión de las fibras cortas blema del pie diabético. La atrofia muscular en las manos, afecta pre­
las alteraciones más frecuentes son el dolor y las parestesias, acompa­
ñadas precozmente por alteraciones del umbral térmico. En cambio,
ferentemente a La ·eminencia tenar y la hipotenar. Estas Lesiones, se ,I
presentan en general, en pacientes con diabetes de Larga evoLución y
cuando la lesión afecta predominantemente a las fibras largas Los si nto­ con controles metabólicos poco satisfactorios.
mas más importantes son la disminución o pérdida de los reflejos
osteotendinosos y ·el umbral de sensibilidad dolorosa y vibratoria.
En los cuadros en los que predominan las manifestaciones sensoria­ ~,.. Neuropatía motora pr.)ximal
les eL doLor es el síntoma más reLevante, presentando diversas
Ha sido descripta con eL nombre de amiotrofia diabética, un síndrome
características. Inicialmente se Localiza en la porción distaL de Los miem­
que s.e presenta en pacientes diabéticos y caracterizado por atrofia
bros inferiores, adoptando la forma de bota o escarp~n. El dolor es
muscular, pérdida de fuerzas y compromiso sensorial. La amiotrofia afecta
descripto por los pacientes como "quemante o fulgLlrante", profundo,
seLectivamente la cintura ,escaputar o la pelviana.
con frecuentes exacerbaciones durante et reposo. Las formas más dolo­
rosas pres€!ntan aumento de la sensibilidad de la piel de la zona afecta­ La primera manifesta.ción es una disminución de Las fuerzas, acom­
da que desencadena eL dolor con el roce de las ropas 0 sábanas (aLlodinia). pañada por fuertes dolores musculares en tas zonas afectadas. Los sín­
Estos síntomas, se acompañan de adeLgazamiento y deterioro del esta­ tomas se acentúan con astenia y atrofia muscular importantes. Se afec­
do general del paciente. tan especialmente Los muscuLos psoas iLíaco y cuádriceps, que impiden
o dificultan subir escaleras o trepar a una sma.
La disminución o abolición de Los reflejos tendinosos es evidente y
generalmente, el más afectado es el reflejo aquileano. La alteración de El curso de esta afección es habitualmente progresivo, siendo
la sensibilidad vibratoria, es con frecuencia la primera manifestación fundamentaL para atenuarlo la regulación de la glucemia. Algunos autores
encontrada aunque debe recordarse que siempre sucede a la lesión de sugieren la 'utilización exclusiva de insulina. En términos generales,
~as fibras finas que producen pérdida o disminución de La sensibilidad luego d·e varíos meses de tratamiento tos pacientes evoluciúnan favora­
táctil y dolorosa que son de difícil reconocimiento. blemente, con reversión casi total de los síntomas.

141. lli~'

~
3- Mononeuropatias focales y así-métricas - Neuropatla diabética autonómica
Un número importante de lesiones neurológicas focales y asimétricas La aparición de la neuropatía autonómica puede constatarse en etapas .,;

ocurren en los diabéticos. Las lesiones más frecuentes son las neuropatías muy precoces de la diabetes: se ha demostrado su manifestación subclínica
de los pares craneanos y la neuropatía troncal. En general aparecen en en pacientes con muy escasa antigüedad de la enfermedad.
enfermos con mal control metabólico o como primera manifestación de
una diabetes desconocida hasta ese momento. La gran diversidad de signos y síntomas que componen esta forma
clínica de la neuropatía diabét.ica dificulta su clasificación. Por elLo la
a. Mononeuropatía de los pares craneanos: Las parálisis del motor mayoria de los autores coinciden en clasificar las lesiones en grupos
ocular común, del motor ocular externa y del patético son las lesiones sindrómícos, según las vísceras afectadas. Su prevalenóa es variabLe y
más comunmente observadas en diabéticos. De aparición brusca, debe considerarse que aumenta con la edad del paciente y la antigüe­
frecuentemente precedida por dolor ocular y cefaleas varios dias dad de la diabetes.
antes de la aparición de la par5lisis. La afectación del motor ocular
común, se caracteriza por ptosis palpebral e indemnidad del reflejo Hasta aquí nos hemos referido a los distintas formas de r1f!()ropatía
pupilar. Este signo es de importancia. ya que la asociación de periférica. Veamos ahora como la diabetes afecta al .nstcma nervioso
oftalmoplejía con disfunción pupilar sugiere una lesión compresiva autónomo y cuales son sus consewencías.
extra-axial. Las lesiones de los otros nervios oculares se acompañan
de diplopía y dolor ocular.
• Lesiones del sistema cardiovascular
La lesión del facial es más frecuente en los diabéticos que en los no
diabéticos. Aunque el diagnóstico diferencial con la parálisis de BeU es La dene,vaci6n total o parcial del sistema cardiovasculalr puede
dificil, debe tenerse en cuenta que pueden ser recidivantes y en general permanecer asintomática durante mucho tiempo. Se caracteriza por pro­
curan con secuelas. ducir anormalidades de la frecuencia cardíaca, (en respuesta a diferentes
Las mononeuropatias de los pares craneanos, cursan evolutivamente, estímulos), hipotensión postural y falta de dolor durante el infarto.
durante un periodo de 6 a 8 semanas, debiendo establecerse durante este 1. Anormalidades de la frecuencia cardíaca: Las lesiones más frecuentes
tiempo un cuidadoso control metabólico. son la taquiCardia de reposo y la falta de cambios de la frecuencia
b. Neuropatia troncal: Denominada también neuropatía o radiculopatía cardíaca en respuesta a estímulos. La existencia de una taquicardia de
toracoabdominal, se presenta en diabéticQs de ambos sexos de más reposo (más de 90 latidos por minuto). es frecuente en diabéticos
de 50 años de edad, con larga evolución de 'ta enfermedad. De con neuropatía autonómica. Las alteraciones de las respuestas reflejas
aparición brusca, el dolor y las disestesias son los signos más reLe­ cardíacas deben investigarse instrumentalmente. Los métodos más
vantes del cuadro. El dolor es quemante, con hiperestesia cutánea, aceptados para el diagnóstico de la denervación cardíaca son de fácil
generalmente unilateral, aumentando en la noche. La pérdida de realización y fueron regladas por Ewing. Consisten en estimular refle­
peso acompaña casi siempre al dolor. En el examen se observa jos produciendo modificaciones en la frecuencia cardíaca, que pueden
hiperestesia. disminución del tono muscular y aún parálisis de los medirse por las variaciones existentes entre los espacios R-R del elec;··
músculos afectados. El electrodiagnóstico es importante y la trocardiograma. En general se realiza una bateria de cinco pruebas. dl'
electromiogra·fia muestra potenciales de denervación. El control las cuales tres corresponden a respuestas parasimpáticas y [as otra:.
metabólico y el tratamiento del dolor son de especial interés en dos son respuestas simpáticas: Las pruebas consisten en li'! 11J(~dÍl'illll
esta neuropatia. de los espacios R-R, durante:

146 lIt!
o La respiración profunda (seis ritmos. respiratorios por minuto), 2. Hipotensión ortostática: Es uno de [os componentes más comunes
r,) La maniolDra de Valsalva (espiraci6n forzada con glotis cerrada) del síndrome de disfunción autonómica en personas con diabetes;
se debe considerar su presencia cuando los pacientes se quejen de
El cambio de decúbito supino ¡¡ la posición de pie.
mareos, astenia, alteraciones visuales, trastornos cognitivos y oca­
las maniobras simpáticas consisten en la toma de la presión arterial sionalmente desmayos, durante los cambios de posición.
en posición acostado, sentado y de pie; se considera positiva la caída
Estos síntomas, pueden exacerbarse cuando se ingieren drogas del
de la presión sistólica por encima de 30 mm Hg. La segunda de las
tipo de los diuréticos, fenotiazirlaS y vasodilatadores.
pruebas simpáticas consiste en ejercer presión sobre un "Hand Grip", lo
cual produce normalmente un incremento de la presión diastólica de La presencia de hipotensión arterial se debe a un déficit de la res~
más de 15 mm Hg¡,cifras menores se consideran patológicas. puesta vasoconsbrictora, como consecuencia de la lesión de las fibras
posganglióTilares que son las responsables de la vasoconstricción.
La Tabla siguiente muestra los valores normales y pat-olóqico!: de [as
pruebas mencionadas 3. Infarto silente: Aproximadamente el20% de los diabéticos presentan
insuficiencia coronaria aguda y aún infarto indoloro. Estas caracte­
Normal l)urlt'~1l Anormal rísticas dí nicas no son específica's de tos diabéticos, pero es en esta
patología donde se observa con mayor frecuencia.
Maniobra de Valsa/va

1,210 más ...
-
-­ 1.ZO o mellos
Respiraci6n profunda
f--~----.
15 latidos 1) mlÍs 11 a 1(, latidos 10 latidos o menos La lesión de los plexos subepicárdicos al igual que los. de otras visceras
-_._._-­
Cambio de dectíbito 1.04 o miÍs 1.01 a 1.03 1.00 o menos fue demostrada por Faerman. Las lesiones de los filetes nerviosos
. Hi[Jolflnsión 110slUral .10 mm Hq ~ 10 a 29 mm Ng !!Lmm Hg o más . si mp~tico- parasi mpáticos, se caracterizan por engrosamiento
H(lI1dgrip 15 mm Hg o mas ..¡ 11 a 14 mm Hg o menos
10 mm I(r¡ arrosariado y fragmentación axonal.

Tabla 2. Pruebas de denervociófI cardiaca.


lesiones urogenitales
De todas las pruebas utilizadas pa-ra la evaluación de la sensibilidad
cardla·ca a los distintos estímulos, la de la res¡;>iración profunda es la de Las alteraciones del aparato genitourinario son frecuentes en per­
mejor reproducibi lidad y especificidad y en ocasiones se la encuentra sonas con djabetesy adquieren gran relevancia, porque compro­
aislada, siendo en estos casos manifestación temprani,l de la lesión del meten directamente su calidad de vida. Las lesiones del SNA referidils
sistema nervioso autónomo. a la esfera urogenital se manifiestan como la vejiga neurogénica y la
disfunción sexual tanto masculina como femenina.
La lesión neurológica cardíaca puede guardar relación con la muerte
súbita de los pacientes diabéticos y si bien los mecanismos de la misma Dflscribiremos a continuación cada una de ellas...
no están dilucidados aún, la frecuencia de arritmias ventriculares es
elevada. Existe evidencia de la relación entre la muerte y la longitud Vejiga neurogénica: su prevalencia es elevada, superando el50%
del segmento al, especialmente cuándo este está prolongado. El en pacientes con diabetes de larga evolución. Se caracteriza por 'la
segmento O'T, es consicierado como un indicador de la repolarizaci6n ausencia de sensación de repleción vesical producido por la pérdida
cardíaca y depende para su regula€ión del sistema simpático. El de la sensibilidad a La distensión del músculo detrusor, manifestán­
segmento al prolongado puede deberse a una hiperactividad del ganglio dose por la falta del primer deseo miccional y un incremento de
estrellado. lo cual puede llevar a una arritmia ventricular. la capaddad de La vejiga.

148 149
Desde un punto de vista clínico la vejiga neurogénica se define por la etiología de la DE en la diabetes es multifactoriaL, siendo la
la presencia de un volumen de orina mayor a 400 ml en la primera neuropatía y la vasculopatía sus causas más frecuentes.
micción matinal. Esta situación frecuentemente no es percibida por el Es de gran importancia, poder diferenciar si la DE es de origen
paciente, quien por el contrario, nota una disminución de la nicturia orgánico o tiene principalmente causas psicológicas; para ello ayuda
que interpreta como un signo de mej,ori'¿l de su control glllcémico. Por la realización de un completo y cuidadoso interrogatorio, preferente­
el contrario, el aumento de volumen de la diuresis matinal debe hacer mente a la pareja.
S()spp.r.har la existencia de una vejiga neurog,énica, siendo necesario
realizar estudios complementarios que permitan confirmar el diagnós­ En generul, los síntomi,ls de disfunción orgánica son de comienzo
tico. La ecografía veskal pre y postmiccional constituye una herra­ gradual y progresan con el tiempo; el paciente refiere inicialmente una
mienta valiosa al igual que los estudios urodinámicos. El uso de la disminución de la rigidez con tumescencia incorn pleta que dificuLta el
Hujometría urinaria y la medición de los potenciales evocados de los coito, si n alteración de la libido, repitiéndose esta situación con dife­
nervios uretrales y de los esfínteres ayudan a completar eL diagnóstico. rentes parejas sexuales. La pérdida súbita de las erecciones, con man­
tenimiento de la tumescencia matinal sugiere una causa psicogénica,
pero debe tenerse en cuenta La posibilidad de la superposici6n de
Es fundame.ntal diagnosticar precozmente esta complicación para factores psicológicos y orgánicos.
detener su progresión natural y prevenir las infecciones recurrentes
El estudio del paciente con DE es complejo e incluyeli'l historia médica
favorecidas por el residuo urinario y el reflujo vesicourreteral que
y sexual del individuo, con evaluación física y del perfil pskoLógico. La
frecuentemente acompañan a la vejiga neurogénica.
presencia de vejiga neurogénic:a ayuda a confirmada etiologla neuropática
de la DE, dado que las vías nerviosas son comunes al aparato genital y al
urinario.
Disfunción sexual masculina: La diabetes es una de las causas orgánicas
más frecuente de disfunción sexual masculina y una de las primeras El test de la tumescencia peneana y el ecodoppler de la arteria
manifestaciones clínicas de neuropatía autonómica. Consiste en alteracio­ dorsal del pene y de los cuerpos cavernosos son de gran utilidad. Para
nes @n la ,erección y/o eyaculación. La alteración sexual orgánica más el diagnóstico diferencial es útil la aplicación de sustancias vasoactivas
observada en hombres con diabetes es la disfunción eréctil (DE), definida como papaverina, fentolamína y prostaglandina E.
como la dificultad sostenida para iniciar o mantener una erección adecua­ Los trastornos en la eyaculación se manifiestan por el orgasmo sin
da para una relación sexuaL satisfactoria. La prevalencia de la DE ha sido eyaculación y la presencia de espermatozoides en la orina por eyacuLa­
estimada entre el35 y 75% de los pacientes con diabetes, increment<lndose ción retrógrada. Esta es la única causa de infertilidad que se conoce en
estas cifras con la edad y la antigüedad de la enfermedad. diabéticos.
La erección peneana depende de:
Disfunci6n sexual femenina: El efecto de la neuropatía autonómica
la integridad del músculo liso de la pared arb~!riolar y los si nusoides diabética sobre la función sexual femenina ha recibido escasa aten­
de los cuerpos cavernosos, ción. Si existe alguna alteración en el área de la se~ualidad detectada
un flujo sanguíneo normal y durante el 'interrogatorio, se considera habituaLmente que es debkl,l ,1
causas psicológicas y no orgánicas.
una competencia esfinteriana ildecuada; estos mecanismos son
regulados por el sistema nervioso autonómico. La disfunción sexual femenina relacionada con la neurOpi'ltíil d1.l!>(··

150 ll) "


tica se manifiesta como una disminu.ción o ausencia de Lubricación sea con múltiples dosis o con sistemas de perfusión continua (ver Capítulo
va'ginaL, que desde un punto de vista fisiopatológico es homoLogabLe a 22), ha demostrado La mejüría de algunos parámetros, especiaLmente la
la disfunción eréctil y que se traduce como dispareunia. Debe interro­ velocidad de conducción motora y sensitiva y en o casiones eL dolor.
garse sobre la presencia de dolor durante el coito a toda mujer con Aunque se discute si el control gLucémico estricto revierte Las lesiones del
diabetes y en especial a las premenopáusicas. sistema nervioso autónomo, no se ha demostrado t¡¡l reversibilidad en
pacientes con transplante de páncreas que permanecieron normogtucémicos
Siempre pensando en ofrece.r unúl mejor calidad de ,orie/a a la;
durante más de 10 anos. Sin embargo en estos pacientes mejoraron Las
personas con diabetes. reflexione sobre los trastornos. ,de5Cn"ptos hasta
manifestaciones somáticas de la neuropat1'a, especialmente los parámetros
aqui, en cspedal tos que involucran lesiones que af-ectan la sexualidad (te
eLectrofisioLógicos y el doLor.
hombres y mujeres.
Si Ir; ,oamef! bien, le sugen"mos que construya I7lcntalmentr? cÓmo 2· Terapéuticas etioLógicas
s~ría la chada a sostener con un/a paciente diabético/a P(lro abordar La administración de inhibidores de la aldosa reductasa y el
é)5te tema, teniendo en cuenta difp.(p.ntes edade5 y ni,veles educativos supLemento de h'lioinositol en la dieta no han dfJmostrado utilidad.
al'canzados.
Acido y-linolénico: el déficit de ácido y-Linolénico agrava los
A cont'inuación y tal como le anticiparnos, cor/'f,pnzaremos con e.l fenómenos de anoxia existentes en Los diabéticos que forman parte de
desarrollo del la etiopatogenia de La neuropatía diabética. Su administración en dosis
de 300 a 500 mg diarios ha dado resultados controvertidos.
Antioxidantes: de todos los antioxidantes conocidos el único que se
• Tratamiento de la neuropatia diabética empLea en el tratamiento de la neuropatía diabética es eL ácido á­
ti poico, poderoso secuestrante lipoñlico de radicales libres. Su admi­
El tratamiento de las distintas formas de neuropatía diabética puede nistración por vía oral (600 el 1.200 mg diarios) tanto en pacientes con
agruparse en tres grandes actitudes terapéuticas, algunas de eLLas apLi­ neuropatla periférica como en neuropatía autonómica cardíaca, ha
cabLes simultáneamente: demostrado su utilidad no 5Ó lo como tratamiento etiológico sino
). .. Mejoría del controL metabólico también como tratamiento sintomático de est¡¡ complicación.
2- Terapéuticas etioLógicas 3-Tratamiento sintomático
3- Tratamiento sintomático:
3,a) de la neuropatía pen"férica
a. de la neuropatía periférica
b. de la neuropatía autonómica Tratamiento, del daLoF
El dolor es un hallazgo frecuente en las mono y poLineuropatías periféricas.
1- Mejoría del control met<lbbLko Las medidas terapéuticas a utiLizar pueden dividirse en dos grupos:
El importante rol que desempeña la hiperglucemia en La génesis de La • Mejoria del control metabólico. Es La medida más importante y La
neuropatía diabética, justifica todo intento de mejorar el control primera que debe instrumentarse én pacientes con neuropatía
metabólico para prevenir o mejorar Las complicaciones de La diabetes, dolorosa. Ya fue considerada previamente.
C!speciaLmente Las neuropáticas. El tratamiento intensivo con insulina. ya - Tratamiento del dolor con drogas. Aunque se han utiki~ado numcroslrl~

152 153
drogas para mejorar el dolor de la neuropatía diabética, muy pocas yen la capacidad de expansión del lecho vascular cuando se produce el
han demostrado eficacia. Analgésicos simples como la aspirina, el cambio postural.
paracetamol y antiinflamatorios no esteroides gen€ralmente produ­
Tratamiento de las manifestationes cardiovaseulares
cen alguna mejoria pero deben utilizarse con precaución por sus
posibies efectos sobre el riñón. Los resultados con los El empleo de ácido (x-lipoico es de alguna utilidad. El transplante
anticonvu/Sionantes como la difenilhidantoína y la oxocarbamazapina, de páncreas solo o asociado con el de riñón ofrece una apasionante
han dado hasta ahora resultados contradictorios; estudios recientes alternativa ya que Los pacientés, logran eugLucemia, algunos ya por
con gabapentin en dosis elevadas han demostrado ser otra posibilidad periodos superiores a los 5 años. Aquí también la información es confusa:
terapéutica en la neuropatía dolorosa. La utilización de antidepresivos mientras para algunos grupos las pruebas funcionales mejoran, para
tricíclicos, especia lmente la ami natri ptil¡ na, ofrecen mejores otros se mantienen iguales aunque no empeown cuando se las compa­
resultados en combinación con fenotiazínas y su efecto se debe ra con diabéticos no transplantados.
probablemente al bloqueo serotoni nérgico. Debe tenerse presente
su efecto de prolongar el segmento QT, por lo que su uso está Tratamiento de ~as alteraciones urogen'it¡;¡les
contraindicado en pacientes con neuropatía autonómica cardíaca. Vejiga ncurogénica: su tratamiento tiene como principal objetivo
Ciertas drogas antiarrítmicas como el mexitilene y la infusión mejorar La dinámica del vaciamiento vesical, evitando eL residuo urinario
endovenosa de lidocalna han demostrado efectos beneficiosos. postmíccional y las infecciones sobreagregadas. Los pacientes que
presenten una vejiga groseramente distendida puedelil mejorar la con­
Resumiendo... tract]Lidad de la misma mediante el drenaje con catéter; luego debe
hacerse la reeducaciór1 miccionaL instruyendo al enfermo para que orine
Diremos que el tratamiento del dolor de la neuropatia diabética con programación horaria en lugar de esperar la sensadón consciente de
periférica es un desafío aún no solucionado y que sus resultados distensión vesical; además es aconsejable que finalice la evacuación de
son freouentemente insatisfactorios. la estrategia actuales la la vejiga, comprimiendo la pared abdomína'l para disminuir el residuo.
combinaciónl de drogas que ejerzan su acción endiferentes lugares
de la vía del dolor. Disfunción sexual
Este tratamiento deberá discutirse con el p¡:¡ciente y su com pañera
sexual pues de ello depende gran parte de'l éx~to de cualquier terapéu­
3.b) de la neuropatía auton6mica tica impLementada. ActUillmente existen numerosas herramientas p<lra
eL tratamiento de la disfunción eréctil y cada una de ellas tie,ne venta­
Tratamiento de la hipotensión ortostátka jilS y desventajas, por to que es indispensable conocerlas antes de
Cuando la sintomatologría es importante se pueden adoptar medidas tomar una decisión terapéutica.
de tipo mecánico. Consisten en eleva,r unos 10 a 12 cm la cabecera de
En primer Lugar debe optimizarse el control glucémico; luego la
la cama, posición que reduce la presión sobre la artería fenal y pro­
pareja debe decidir entre realizar tratamiento médico o quirúrgico o no
mueve un aumento de la secreción de renina con ,aumento del volumen
realizar ni nguno de ellos.
sanguíneo. Debe advertirse a los pacientes sobre la necesidad de evi­
tar la incorporación o cambios de posición en forma brusca. El empleo El tratamiento médico se basa en la administración oral del siLdenafil
de vendas elásticas en miembros inferiores o de fajas que cubran hasta y el tadalafilo, drogas que han demostrado una efectividad del 60% en
la 'zona costal suele dar buenos resultados. Estos elementos disminu­ hombres diabéticos; estas drogas actúan a través de la inhibición de la

154 155

1,'

fosfodiesterasa-5. La contraindicación absoluta para ambas drogas es rJ 8i bliografia


la presencia de enfermedad coronaria en tratamiento con nitritos.
1. Aretov AS, BaTinov A, Dyek PJ. ~he ,en;ory ~ymptolll\ of ~i~'bctic pollncuropllthy are
Otra terapéutica utilizada frecuentemente es la aplicación de ímproved with it lipoic ,\Cid. OíauctO!--, (are 26:770-776,2003.
sustancias vilsoactivas inyectadas directamente en los cuerpos caver­ 2. Bayncs JB. Role of thc oxid~tiv1;' ,tress in the develupmcnt of uiab.etic complic~tion\.
Diabetes 1,0: 405-1,12,1991.
nosos: las drogas habituaLmente usadas son la fentolamina, la
3, (~meron NE. COUN MA. Robcrt:~on S. Allgiotr'nsin convcrtinq enzyme inhibition prevO!nts
papaverina y el alprostadil, que ~stimUtlan el proceso de la erección thc dcvf:iopmcnt of musde and ncrvc dysfunction in er.perimlo'ntal diabetic rals. ()ialJet%gilí
por inhibición del tono simpático y relajación del músculo liso de los 35:17.-18.199~.

cuerpos cavernosos. 4. C'¡l1luron NE. Colter MA. Metabalir. ,)nd vascular factor5 in the pathoiJ~ne<;i,. of ctiabl"tic
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El tratamiento quirúrgico de la disfunción eréctil consiste en 'la coloca­ pati~11t5. (DEKAN 5tudy). Oiabctes Car~ 7.0:3G9-376,19~7·.
5. Dine.s KC. [alllcrlIn NE, [oll:cr MA. eOnlr,lstin~ effect5 of treatment with fatty "cid:; on
ción de una variedad de prótesis en los casos en que han fallado las opciones pcri pller.ll ncrvc fu ~ctioll ;lnd capi l[ari latian in ';treptuz.utur;i n ~ iabctic r,ll$, Dia{¡ctologio
médicas. Siempre debe evaluarse cuidadosamente el perfil psicoLógico del 36:1132-1138, 1993.
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Dralif'trs CO((< 2~:1'79-1'86.19Y9.
las mujeres diabéticas no tiene un tratamiento específico; la disminución
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de la lubricación vaginal y mejora aplicando cremas que modifican la se­ rcvi!~w. ,J,Ne(J(Opl1t!lol.Exp.NelJrol. 55:1181-1196.1996. ;:
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illld unl'xpt'cted de.)th~ in mole diilbetic patil'lIls. Oiabetoloqía 31,.:182·187,1991.
Llegamos al final de esta unidad .Y l@ proponemos como ya ha 9. Facrm,ln r, Faccio e JarJ7.insky MN. Autollolllic Nervous System Jnd ,[)i¡lbr,tr<;: AllcratiOIl,
sucedido, revisar sus r(;,splJp.sl:as previas, volver sobre 105 conceptos centra{el of ncrve fiuer~. Diabctn 26:111,7-1152,1977.
10. Faerl1lan I.. JJd~il1~ky MN. Podol'.ky s,: DiabQtir n~llTop,ltlly and sewal dysh1O<'tion . En:
presentados JI reconsiderar la charla hipof.él:ica con sus pacientes que le Pü<Jubky S. (cd). C/illiclJl dia/Jelc.\, modcTIl mana.qcmont. New York: App!Ptilll. 19BO; ~C¡5­
sugel1'mos pensar, a la lUl de la van'edad de tratamientos posibles. 323.
11. Faerrn,ln 1.. Maler M., Jild~ill5ky MN. A-"ymptomatic NeuTOgenic Btadderin Juvi'nil~
Realice las revis.iones que' le indicamos ya que de ellas depende la Diabctic~. Dlabelologia 7: 168,-173,1971.

mejor comprensión de los distintos t·emos que se han tratado. Recuerde 12. Hamti. I.: Diabctic pcri phcral neuropathie~. Ann I"telrl Med. 54; 107: 5 /,6,1937.

que toda rarea de aprendizaje implica "horas silla" y que sin duda, al 13. Jilulin,ky MN. Fox 'D, Faern1an J. A<,ymptomatic neurogenie bl¡¡dder in diauetit ('hildren.
EII: Hoet. JJ (cd). VIII (ongrc~s of the lnternational Diabete~ Federiltion. L C. S. No.
momento del "'repaso" previo a fa evaluación, todos los apuntes y 21l0. Amsterd;¡m: Excerpta Medica. 1973; 197-202
actividades realizadas son sus mejores afiado.'>. 14. J'adlinsky MN, FlIent.l~ GV PtJgltr~¡; C. S.;wal dysfunction in diabctic females. En: Rifkin.
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7.3. Zie~ler O, LilUX (j. Effprts of tre~tl1lent with antioxidJnt alpha lipoir .)Cid on cardiac (200 a 400 mg) que pueden increme~tarse posteriormente. Asociar un
autonomic n~uropathy in NIDD patiCIlL-i (DEKAN Stlldy). Diabetes C.lrr. 20.369-376.1997.
inductor del suefio para mejorar eL reposo nocturno. Otras drogas que
pueden empLearse son el tramadol, dutoxetina. venlafaxina.Educar aL
paciente en el cuidado de los pies pues se trata de una paciente de alto
Caso Ctiniéo 1 riesgo.

Paciente femenina de 52 años de edad, con diabetes tipo 2 de 11 anos de


diagnóstico, coincídentemente con una intervención de Litiasis biliar.
Antecedente familiares: diabetes materna re e hip(utcnsión arteriaL en eL Caso Clínico 2
padre qU(~ f~lleció por ACV.
Antecedentes personales: dos hijas, nacidas a los 28 y 31 años dccdad, Paciente masculi mo de 47 arios dEl edad, con di<1betes tipo 2 desde hace 8
con miÍs de /t.OOO 9 cada una, ambas por cesárea. No recuerda haber años.

tenido hiperglucemia durante los embarazos. ReaLiza tratam¡~nto Antecedente familiares: sin antecedente de diabetes ni de hipertensión

aLirnentario, no hace actividad física y está medicada con glibenclamida arterial.

10 mg/dia y 25 unidades de insulina de accióll intermedia antes de dormir, Antecedent'es personales: desde su diagnóst.ico realiza tratamiento indicado
con controles adecuados, aunque su automonitoreo es esporádico. tanto el pLan de alimentación ((no come duLces»). como el medicamentoso
MQtivo de Con~ulta: dolor en ambos miembros inferiores, que <Iumentan (gLibenclomida 10 mg más metformina 1000 mg diarios) en forma irregular.
durante la noche; estos dolores han sido precedidos por sensación de f.1oD.Vo de Consulta: concurre a La consuLta por aparición brusca, precedida
hormigueo y calambres, ¡oem actualmente sU irltensid¡¡d ha aumentado de dolor, de ptosis del párpado derecho.
impidiéndole eL reposo nocturno. Examen !i<¡rco: Peso 86, tillla 1,73 m, circunferencia de cintura 105 cm,
Examen físico: Peso 66 kg; talla 1,63 m; circunferencia de cintura 96 cm; IMe 29. Presióm Mterial 145/80 mm Hg.
IMC 25. Presión arterial 145/70 mm Hg. Aparato respiratorio y circulatorio Auscultación cardIaca y pulmonar s/p. En miembros inferiores se encuentra
s/p. Se verifica dismi nución de los puLso pedios y ausencia de Los tibiales pérdida de vello, puLsos pedios y tibiales conservados y francil disminución
posteriores; existe atrofia de los músculos propios del píe, dedos en garra de los reflejos en especiaL el aquitiano. El paciente manifiesta transtornos
sin lesiones tróficas. Disminución de los reflejos patelar y aquiliano y de de la erección. Reflejo fotúmotor bilateral conservildo .
la sensibilidad vi bratoria. Diagnóstico presuntivo: Iieuropiltla diabética del motor ocular.
Diagnóstíco presuntivo: neuropatía periférica. Diagnóstico diferencial: debe hacerse con lesiones compresivas. La
Diagnóstico diferclldul: Debe hacen,(> entre v1JscuLopatía y neuropatía. conservación del reflejo pupilar favorece eL diagnóstico de mononeuropatía
La presencia de pulsos periféricos descarta la isquemia marcada mientras diabética del tercer par.
que los síntomas (parestesias) que aumentan durante eL reposo y Las Los exámenes de laboratorio soLicitados incuyeron: glucemia (213 mg/dL),
alt@raciones neurológicas (reflejos y sensibilidad) favorecen el diagnóstico HbA 1c (8.9), CoLesteroL (297 mg/dL), cLDL (187 mg/dL), cHDL (3It mgl
de neuropatía. Los exámenes de laboratorio solicitados incuyeron: Glucemia dL), Triglicéridos (213 mg/dL), creatininemia (1.2 mg/dL) y uricemia (7.0).
(134 mg/dL), HbAlc (7.2"10), Colestrol (198 mg/dL), cLDL (124 mg/dL), Diagnóstico: mononeuropatía diabética focal y asimétrica deL motor ocuLar
cHDL (41 mg/dL). TrigLicéridos (145 mg/dL) y Creatininemia (1.2 mg/dL). con manifestaciones de neuropatia distal y simétrica y neuropatia
Como exámenes complementarios se reaLizó D'oppler arteriaL (mostró autonómic\)o
dlsmi nu(:i6n pero no obliteraci ón de la Luz va,scular) y velocidad de Tratamiento: control estricto de La glucen~ia (es conveniente utilizar
conducción nerviosa (disminuida). insulina), no recomendándose otras medicaciones asociadas (Vitaminas,
Diagnóstic:o: Neuropatía Diabética Distal y Simétrica, él predominio corticoides). La estimulación fisioterápica facilita la recuperación.
sensitiva, aunque también existe un componente motor (atrofia de Generalmente la parálisis disminuye y desapilrece luego ae 30 a 45 dl¡¡s de
múscuLos). adecuado control metabólico.

t5 159
Riesgo cardiovascular en la diabetes,

La prediabetes y eL slndrome metabólico:

Oportunidades y estrategias de prevención

Charles M. Clark, Jr.

:.J Propósito

El lector encontrará en este capítulo una buena síntesis de lo dicho


y por decir en diferentes capítulos de este manual. Esta síntesis facilitará
la visión del síndrome metabólico en general y de la diabetes tipo 2 en
particular como un todo y. en consecuencia. adoptar una estrategia
terapéutica global y no fragmentaria.
También reitera la evolutividad de la enfermedad y la necesidad de
modificar la terapia según la etapa correspondiente.
¿Es cierto que Lo que abunda no daña? Parecerla que es1:e proverbio
no se aplica íl la obesidad, la glucemia. el perfillipídico y la tensión
arterial. En ese sentido sugerimos modificar nuestra actitud de
«tolerancia y complijcidad» con nuestros pacientes frente a «deslices
inocentes~} de sus indicadores de grado de control.

Como tarea práctica le sugerimos tralar de sintetizar los conceptos cen­


trales de cada urlO de [os capítulos relaaonados con el actual y comparar
los resultados con lo que usted tenía como válido antes de su lectura.

e EpidemioLogia
La prevalencia de diabetes aumenta constantemente en todo el
mundo y se ha quintuplicado en los últimos veinte años afectando de

161.
manera muy pronunciada a personas de 30 a 40 ariOS. La diabetes dos es obesa y esta cifra crece de manera alarmante, sobre todo en los
impone una enorme carga socíoeconómka porque incrementa 2-4 veces niños. Tal como se describe en el Capítulo 3 su causa es de origen
el riesgo de infarto de miocardio (1M) y de accident,e cerebro-vascular muLtifactorial: aumento del aporte calórico total (porciones de comida
(ACV); además es la causa principal de ceguera, insuficiencia renal significativamente más grandes), consumo frecuente de comidas rápidas,
terminal y amputaciones y la séptima causa de muerte en Estados menor gasto de energía por disminución de la actividad física (acceso
Unidos. Los gastos generados por la diabetes en USA se estiman en a dispositivos y aparatos que evitan esfuerzos como controles remotos,
132.000 millones de dólares anuales. ventanas y puertas de apertura/cierre autonHítico), diseño de ciudades
y centros urbanos pequeños que desalientan la marcha y promueven
En e:tite mismO mar7Uoi- en f:'l Capitulo 6 !tatamo5 la problemática del traslados en vehículos y uso frecuente de ascensores. Además, el ejercicio
costo de la enfermedad. Sería ÍJueno que vue/I'n a él pam recordar Los como actividad recreativa disminuye con la edad, sobre todo en las
'olores que prf.mntomos sobre nl/c~tro país. mujeres des pues de la menopausia.

Los cardiólogos han reconocido recientemente el impaCto de las Otra cuestión importante es consecuencia del inicio precoz de la
complicaciones cardiovasculares en las personas con diabetes: diabetes tipo 2 ya que sus complicaciones aumentiln con la duración de
la enfermedad. Por consiguiente, es previsible que una proporción
¿Por qué? importante de personas con diabetes diagnosticada en la niñez o
adolescencia desdrroll.en neuropatia y nefropatía a los 30 años. Esta
Porque las complicaciones ateroscleróticas son responsables del 80%
estimación deriva de extrapolar datos de la evolución natural de la diabetes
de su mortalidad y de más del 75% de las hospitalizaciones, se
en indios Pima.
manifiestan a edad más temprana, tienen más probabilidades de ser
inoperables y son de peor pronóstico.
renga en cuenta que: Prevención de Las comp~icaciones de la diabetes
Casi el 50% de las personas con diabetes tipo 2 tienen enfermedad
Numerosas evidencias sustentan el beneficio de la implementación
coronaria (Ee) documentada.
precoz de intervenciones destinadas a prevenir las complicaciones de
Algunos de los factores de riesgo para el desarrollo de diabetes tales la diabetes. El riesgo cardiovascular está aumentado en la etapa de
como la distribución del tejido adiposo, características raciales/étnicas, prediabetes, de modo que cuando se diagnostica la diabetes han
antecedentes familiares de diabetes y diabetes gestacional previa son transcurrido generalmente de 7 a 9 años y la frecuencia de complica­
inmodificable~. En cambio otros como la obesidad, el sedentarismo, la ciones es alta.
glucemia en ayunas alterada (GAA) y la de la tolerancia a la glucosa
ti n buen control de la glucemia, aunque dificil de lograr y mante­
(TGA), son modificables. C¡¡he destacar que en función de la nueva
ner, disminuye eficazmente el riesgo de complicaciones microvasculamr..
definición de la GAA o prediabetes (glucemia en ayunas 100-125mg/
Aunque no hay certeza de que también disminuyan las ateroscLer6ticn:"
dL), la población ,en riesgo de diabetes aumentó considerablemente; en
el estudio de Honolulu (HolJolulu Heart Stud'"y) demostró una relilcillll
consecuencia, la posibílidad de prevención también aumentó
continua entre glucemia y riesgo de EL Igual conclusión se obtuvu 1'11
proporcionalmente (ya lo hemos visto en el Capítulo 1).
el Chicago Heart 5tudy que analizó la relación entre d'jillw'LI". l'
Respecto a la obesidad, un tercio de la población de Estados Uni­ hiperglucemia basal asintomática con el riesgo de enh'I'IIH'd.\d

162 1t¡ ~I

"
cardiovascular y la mortalidad por todas las causas. Un estudio de personas Como ya dijimos...
con gLucemias normales seguidas durante 22,5 años mostró mayor
En la diabetes tipo 2 la hiperglucemia se debe a La menor secreción
mortalidad por enfermedad cardiovascular en el cuartilo superior de
de insulina por las células ~ pancreáticas, lo que sumado al menor
gLucemias con un valor de corte de glucemia de alrededor de 88 mg/dL.
efecto de la hormona sobre los tejidos periféricos (insulinorresistenc1a)
aumenta la producción hepática de glucosa y disminuye la utilización
Fisiopatologia y evolucíón natural de la diabetes tipo 2 (ver Cap. 2) de glucosa en los tejidos periféricos (Figura 2). Las personas obesas,
en especial con obesidad central (ver Capítulo 4), necesitan concen­
La Figura 1 ilustra Los fenómenos que se SIJ ced'e n en la evolución traciones de insulina de 3 a 5 veces más altas que las no obesas para
natural de la diabetes tipo 2. La enfermedad macrovascular comienza Lograr un determinado efecto metabólico de la hormona.
en la etapa temprana del proceso de insulinorresistencia y al momento
del diagnóstico ya están presentes diversas complicaciones, habiéndose
perdido La oportunidad de su prevención. Producción Absorción
9Iuco~¡a intestinal
¿ Recuerda que f'n al Capftülo 2 también le mostramos un grúfico acerca Glucemia
de la fíl~storia natural de la DM?
....
......
Observe ahora fJste que está mus completo ')fJe~ ;m.:olpora otras patolo­
gfÓ5 o complicaóone:¡ ~
,
~

'"
.S
'5
'"
.5
----v-l

Antigüedad

IIntecedentes Ipara:
Edild 15- 40+ Edad 15- 60+ Edad 25- 70+

~-oJ
-~-'-~-

.,_.....

Disfunción
4
Insulina (+)

Utilización de glucosa
dependiente de Insulinsa
& 'f~'~l

Tej. adiposo V
Sen';.¡n,Udad.l M Jrts.vll"fI
células B músculo
SCt.~tC'({un etc IlisulirliJ
CoolplrcL,cfonr:!;;
F... ctorc;\i añlblóñtéll~.. : MIC-ROANCióPATlA' ....... 1. Hígado, :,. Tracto intestinaL 3. Tejido ildiposo, ~'. Tejido adiposo y músculo

r~l'
MJlllvtr {ci~1l . Páncreas endocrino.
Oúesidad
$euenliJrl>HlU
Figura Z. Hiperg/ucemia ('11 diaw.l;es tipo 2. ConseCllenoa de 3 dr,fecto5 mctab6lico5 IJllIyoms.
.!GA HIPERG. POSPA. HI~EllO. AYUNAS ~I
1tl sul in(}rre SISf"P n DCl 1nsulrnon esi~tencla In!iUlin0rrC5í5tcllciil ;;t
I-IlperirlCZulil1erñl;) lnsllllna psC'uCQ~norrnZlI HipoinSlllinr::m¡l~

HDL? R'~f"In[')r-ilti;:¡
Ceguera
Insuflcl .. ncla' rel1al
• Preven(ión de compLi'Cadones microvascuLares
Trl9IinS-ric1o-5? NefropClti¡s
Amputaciún

-
Hiperten~;Jón
f\toro~_s~lero:;l~ iJc..;t.:I~ratla
Ncuropiltio E.C. Se ha estabLecido que la reLación enhe la HbAlc y el riesgo de
ACV
Ql""!JC"'>"'~"'P~""C"'1D"'A-=O-/.( complicaciones microvasculares es un continuo es decir, no tiel1P
quiebres o ánguLos que definan 'Un valor de corte. Sin embargo se ~iJb!'
~
MACAOANGIOPATIA _

que disminuir 1% la HbAlc reduce un 30% las complicilciolHI<,


Figura 1. Evolución natural de la diabr.tr:.1 mr.lIit/J, tipo 2 y sus complicaciones. microvasculares. Por consiguiente, una disminución de la ql.uCl~1l\ j.\,

1fj/~ 16!·
cualquie~¡¡ sea su magnitud, es beneficiosa porque al disminuir las eventos cardiovasculares mayores era un 51% más bajo en pa­
complicaciones también disminuye los costos de atención y mejora la cientes diabéticos que redujeron su presión di<lstólíca a 5 80
calidad de vida de· las personas con diabetes. Sin embargo, como lo comparado con los que La disminuyeron a ~ 90 mm Hg.
demostró entre otros estudios la Tercera Encue~tª Nacional de Salud y • eL ,estudio sobre control apropiado de la presión en la d¡abete5
Nutrición (Third National Health and Nutn'tion Examination 5urvey, NHANE5 (Appropriate Blood Pressure Control in Dia/Jetes, ASCD) y otro sobre
1II), s610 el control de la glucemia no basta para prevenir las complica­ prevención de l.i1s complicaciones cardiovasculares (Heart Outcomes
ciones pues otros factores de riesgo como la mic:roalbumi nuria, la PrevenDon EvaluaDO/), HüPE) demostraron la eficacia de los inhibidores
hipertensión, lil dislipidemia, la obesidad y el tabaquismo contribuyen a de la enzima convertidora de la angiotensina (lECA) para prevenir la
su desarrollo y progresión. Esto remarca la necesidad de que tanto .los morbimortalidad cardiovilscular en pacientes de alto riesgo.
pacientes como los médicos reconozcan la importancia de controlar
simultáneamente la HbAle, la presión arterial y el perfillipídico. En consecuencia los objetivos tensionales recomendados actual­
mente para personas con diabetes son de ~ 130/80 mm Hg.
Control de la glucemia (Tratado en profundidad en el Capítulo 4)
El Den demostró que el trati)miento intensivo de ~a enfermedad reduce Control del pe.rfillipídico
el riesgo de complicaciones microvasculares en personas con diabetes El 97% de los adultos con diabetes tipo 2: tienen una o más alteraciones
tipo 1. Al DCCT siguió el Epidemiology 01 Diabetes lnterventions and lipídicas .Y el tratamiento hipolipemiante agresivo disminuye su riesgo
Complicatfons (EDIC) para determinar si este tratamiento tamhién tiene de EC (ver Capítulo 16). Además, el tratamiento hipolipemiante solo o
beneficios duraderos y disminuye el riesgo de atemsclerosis carotíde<l. con aspirina tiene una rel~ción costo:efectividad mayor en personas con
Sus resultados sugieren que el tratamiento intensivo previo retarda la diabetes tipo 2 que en quienes no la padecen. En el·estudio sobre colesterol
progresión de la néfropatla diabética. En dos estudios observacionales y complicaciones recurrentes (Cholesterol and Recurrent Events, CARE),
re¡üizados en Finlandia la hipertrigliceridemia fue un potente predictor las estatinfls redujeron un 25% la tasa de compLicaciones cardiovasculares
de mortalidad cardiovascular, mientras que la HbAlc basal y la duración no mortales y la mortalidad cardiovascular. Igualmente el estudio escan­
de La diabetes fueron marcadores de morbimortalidad cardiovascular <l dinavo 4$ so'bre supeMvencia con simvastatina (Scandinavian Simvastatin
10 años. Se ha sugerido asám;smo que el riesgo cardiovascular para SurvivalStudy) mostró que el tratamiento prolongado con este fármaco
personas COI1 diabetes sin enfermedad cardiovascular es similar al de disminuía significativamente la morbimortalidad asociada con EL EL Pro­
personas 1110 diabéticas con un 1M previo. grama Nacional de Educación sobre el Colesterol (National Cholesterol
Education Program, NCEP) de Estados Unidos recomienda mantener nive­
Controil de la presión arterial (ver Capítulo 15) les de coLesteroL-lDl < 100 mg/dl en personas con diabetes, un objetivo
similar al establecido para la prevención secundaria.
El estudio prospectivo sobre diaibetes tipo 2 del Reino Unido (Un;ted
Kingdom Pl'ospective Diabetes Study, UKPDS) demostr6 que un descen­
so de 10/5 mm Hg en la presión sistólica/diastólica se traducía en un<l
disminución del21 % en el riesgo de 1M y del 44% en el riesgo de ACV. Todos estos datos demuestran que la diabetes es una enfermedad
frecuente, grave, de prevalencia creciente, que genera altos costos y
Otros estudios confirmaron estos hallazgos:
lo más importante, que puede prevenirse mediante un control inten­
• el estudio sobre el tratamiento óptimo de la hipertensión sivo de la glucemta, la presi'ón arterial y el perfillipídico.
(Hypertension Optimal Treatment, HOT), mostró que el riesgo de

166 ""iJ'
Las Tablas 1 y 2 resumen las estrategias preventivas efectivas y las Factores de riesgo y prevendón de La diabetes tipo 2 (que desarro­
metas recomendadas, respectivamente. llamos en los Capítulos 2 y 3).
Diversos factores de riesgo (edad, características étnicas, obesidad
de ti po central, sedentarísmo, antecedentes famiLiares de diabetes, dia­
1. enf. microvascular por 1% betes gestacional previa, GAA y TGA) permiten predecir ,el desarrollo de
• Control glucemia 30%
diabetes. Estos factores de riesgo no se presentan aisladamente, sino
• Control PA 24% .j,enf. microvascular por 10 mm
que se acumulan: el síndrome metabólico es una sumatoria de varías
• Coritrollipidico 55% 1. compl. coronarias; 43% ! muertes factores de riesgo de diabetes (ver Capítulo 2). Como ya mencionamos,
• A,:,pirina 28% 1. lAM, 18% J- enfermedad CV algunos de los factores de riesgo de diabetes como la obesidad y el
• Examen y tratlmiento 60 - 70% ! pérdida grave de la visión sedentarismo son modificahles, lo que permite prevenir o retrasar el
Oftálmológico desarrollo de la enfermedad. Se sabe que la prevalencia del slndrome
• Examen de los pies 50 - 60% ! snf. pédica grave metabólico es tres veces mayor en personas sedentarias de ambos sexos
32% 1. hospitalización; 64% J., enfermedad que en aquellos con índice de masa corporal equivalente pero que prac­
• Vacuna antigripal
respiratoria + muerte tic<ln actividad física moderadamente vigorosa. Por otra parte, el
parámetro que se correlaciona más e5trechamente con la obesidad en
• Educacíón diabetológica (onocimiQntos, actltude S, adherencia al
tratamiento, control glucémico niños es el tiempo que pasan mirando televisión.
Varios estudios han demostrado el efecto favorable de la modificación de
Tabla 1. Resultados logrados tras un manejo terapéulico r'fícw. los hábitos alimentarios sobre la prevención de la diabetes (ver Capítulo 20):
o El estudiofinlandés sobre Prevención de la Diabetes comparó el porcen~
taje de desarrollo de diabetes en personas· obesas con TGA en el grupo
control vs. el correspondiente al sometido a intervenciones intensivas
Control glucemia ADA IDF ACE destinadas a disminuir de peso y aumentar la actividad fisica. La inci­
HbAl c (%) <7 6,5 6,5 dencia acumulada de diabetes a los 4 años fue del 11% en el grupo
Ayunas. (mg/dL) 80 I <100 <110 con intervenciones y del 23% en el control. El riesgo de diabetes a los
4 años disminuyó 58% en las personas que recibieron irltervenciones.
120 mino postprandial (mg/dL) !~1~", <140 I
PA (mm Hg) <130 1 80 mm Hg • El programa de prevención de la diabetes (Diabetes Prevention Program,
Colesterol- LDL <lOO mg/dL DPP) de Estados Unidos que evaluó la modificación de los estilos de
Colesterol-HDL >40 (lJ\uj~res), 50 (homhres) mg/dL vida y la prevención con metformina obtuvo resultados similares. La
incidencia de diabetes fue 58% menor NI el grupo con intervenciones
Triglicéridos <:150 mg/dL
para modificar estilos de vida (destinadas a lograr un adelgazamiento
l Microalbuminuria <30 mg/9 creatinina del 7,5% con 150 minutos de actividad ñsíca semanales) y 31%
Adoptados de AIlA. [(inical PracticI' REcammIJnI/rltion5. lDF (Ewope) European Diabetes Po{icy Group, menor para el grupo tratado con metformina respecto al grupo control.
4m~árnn Collegc af €ndacrinuloyy (ACE) y fKiJe.rt Panel in Dp.tection, Eva/uotian Ilnd {rcnlmmt of Higli
B{aad Cholc;:if(ol irl MIlIt.(. • En el estudio sobre prevención de diabetes (Study to Prevent Non-Tnsulin
Tabla 2. Objetivos deseables del control dc la glucemia, de la (lA del perfillipidico y Dependent Diabetes MeLlitus, STOP-NIDDM), se observó una di~mimu:i('1I1
de la microalbuminuria. del25% del riesgo de desarrollo de diabetes en personas con TGA ITal.ldil',

{j
168
!

,\l
con acarbosa; posteriormente sus autores informaron una disminución Expertos sobre el Tratamiento de Adultos (Adult Treatment Panel JJI,
de las complicaciones cardiovasculares que debe aun confirmarse. ATP JII) del NCEP. Consecuentemente, implementar estrategias tera­
péuticas destinadas a modificar las causas subyacentes como la obesidad, Ij,
En el estudio de prevención de diabetes con troglitazona (Troglitazone
in the Prevention ofDiabetes, TRIPOD) se investigó si su administración el sedentarismo y los otros componentes del síndrome descriptos en el
a mujeres hispanas con diabetes gestacional previa, al reducir la Capítulo 2. Igualmente no retrasar innecesariamente la administración
insulinorresistencia protegía la función de las células ~ pancreáticas de fármacos cuando los cambios de estilo de vida son insuficientes para
y retrasaba o prevenía el comienzo de la diabetes tipo 2. Aunque el alcanzar los objetivos terapéuticos predeterminados.
estudio se interrumpió anticipadamente debido al retiro del fármaco
del mercado, luego de un período de 30 meses la incidencia de
diabetes disminuyó 55%. Este efecto persistiría después de Mortalidad >20% t mortalidad total
suspendido el estudio.
>30% t muertes relacionadas con DM
Todos estos resultados indic~n que el comienzo de la diabetes se
puede retrasar o prevenir en personas de alto riesgo, mediante cambios >40% !. muertes relacionadas con obesidad
en los hábitos de vida y/o fármacos que disminuyen la insulinorresistencia Presión arterial !. 10mm Hg en PA sistólica y diastólica
(metformina o una glitazona), o que protegen la función de las células ~ I 1­
disminuyendo la glucemia postprandial (acarbosa). Diabetes 50% t glucemia en ayunas
Lípidos 10% t colesterol total
15% t c-LDL
SeLección de estrategias terapéuticas
30% t Triglicéridos
Como se menciona en éste yen otros capítulos del manual, la diabetes 8% i c-HDL
es una enfermedad progresiva, cuyo tratamiento efectivo debe adaptarse
a sus diferentes etapas evolutivas. La estrategia común y aplicable a Tabla 3. Beneficios de un adelgazamiento del 10%.
todas eHas es la adopción de un plan de alimentación adecuado a la
edad, sexo y grado de sobrepes%besidad y la práctica regular de actividad Resta hallar la respuesta a varios interrogantes tales como
ñsica. Cuando estas medidas aplicadas efectivamente no son suficientes ¿ejercen los fármacos efectos aditivos a los de los cambios en los estilos de
para lograr los objetivos terapéuticos fijados, se utilizarán diferentes vida?, y ¿qué otros agentes pueden prevenir la diabetes tipo 2?
fármacos en forma aislada o asociados. Los fármacos disponibles actúan
sobre la insulinorresistencia, la absorción de glucosa, el estímulo de la Es probable que las respuestas a estos interrogantes provengan de
secreción de insulina y la propia insulina o sus análogos. Su mecanismo estudios en curso con lECA, como el de ramipril y rosiglitazona (Diabetes
de acción, oportunidad de uso y dosis se describen en el Capítulo 21. Es Reduction Approaches with Ramipril and Rosiglitazone Medications, DREAM),
importante que los médicos informen a sus pacientes que según el UKPDS, con bloqueadores del receptor de angiotensina, con secretagogos de insulim
el 15% de las personas con diabetes tipo 2 requerirá insulinoterapia de acción corta o ambos, o con combinaciones de drogas tales como
después de 12 años de evolución de su enfermedad. nateglinida yvalsartán (estudio NAVIGATOR) yotros estudios con glitéJz()Il~I".
Es también importante que los médicos reconozcan la importancia Tratar la obesidad no es fácil (ver Capítulo 3) y las medidas pn 'V<' 11 I i
del síndrome metabólico, un objetivo secundario del Tercer Panel de vas a nivel comunitario pueden ser útiles. La base para su trnlilllli('llllI

170 1
-m

son las dietas con bajo contenido de grasas y la práctica regular de Bibliograffa
actividad física (ver Capítulo 19). Una disminución deij aporte de grasas,
como la puesta en práctica en los estudios de Finlandia y DPP, es el 1. A desktop guide to type 2 diabetes mellitus. Europeiln Diabetes Policy Group 1999(IOF).
Diabetic Med. 1'6:716-730. 1999
modo más saludable y práctico de reducir ca~orías. Aun un adelgazamiento 2. American Diabetes Association. 5tandmls of medical care in diabetes. Diabetes Care 27
modesto ofrece [beneficios importantes (Tabla 3). (Suppl 1):515-35. 2004
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La terapia familiar es obligatoria para la obesidad en ~os niños, para Thaulow. Fasting blood glucose: a~ underestimated risk factor for cardiovascular death.
Results from a 22-year follow-up of healthy nondiabetic meno Diabetes Care 22:45-49. 1999
modifñcar comportamientos familiares que promueven el sedentarismo.
4. Buchanan TA, Xiang HA, Peters RK et al. Preservation of pancreatic beta-cell function and
La Academja Americana de Pediatría recomienda no ilflstalar televisores prevention of type 2 diabetes by pharmacological treatment of insalin resistance in high­
en el dormitorio de los niños. risk hispanic women. Diabetes 5a:2796-803, 2002
5. Chiasson JL, Josse RG. Gomis R, et al. Acarbose lor prevention of type 2 diabetes mellitus:
El programa de actividad física se describe en el Capítulo 19 y los the 5liOP-NIODM randomísed tria~. Lancet 3'59:2072-2077, 2002
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heart disease in men of Japanese ancestry. Honolulu Heart Programo Diabetes 36:689­
adelgaza, es importante para lograrlo, mantener el adelgazamiento y 692.1987
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estudio DPP, et ejercicio no fue l!Jln marcador independiente para la and Cardiovascular Disease in Patients with Type 2 Diabetes. N Engl J Med 348:383­
393,2003
prevención de diabetes pero sí lo fue el adelgazamiemto. 8. Haffner 514, lehto S, Ronnemaa T, et al. Mortality from o€ ronary Iheart disease in subjects
with type2 diabetes and in nondiabetic subjects with anct without prim myocardial
Asimismo son estrateg1ias probadamente efectivas las destinadas a infarction. NEngl J 14ed 339:229-234, 1998
modificar comportamientos como el autoCO'ntrol {registro diario de 9. HOT l'iansson Let al. Hypertension üptimal Treatment (HOT) randomised trial. HüT Study
Group. lancet 351:175'5-1762.1998
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10. Kimm SY, Glynn NW, Kriska AM. et al. Decline in physical activity in black girls and white
ejercicios), el control de estímulos y la Ireestructuración cognitiva girls during adolescence. NEngl J Med 347:709-715,2002
(objetivos realistas, modifícación de la respuesta interna a las desvia­ 11. Knowler Wc. Barrett-Connor E. Fowler SE, et al. Reduction in the incidence of type 2
ciones). Otras estrategias de utilidad probada son el manejo del estrés diabetes with lifestyle intervention or metformin. N Engl J Med 346:393-403. 2002.
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heart dísease in elcterly subjects. Diabetes 43:960-967, 1994
Se ha observado que la combinación de fármacos asociado a estra­ 14. Lowe lP, Liu K. Greenland P, et al. Diabetes, asymptomatic hyperglycemia, anct 22-year
tegias modificadoras del comportamiento es más eficaz que el empleo mortality in black and white meno The Chicago Heart Association Detection Project in
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separado de cada una de ,ellas. La obesidad se debe considerar una
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16. 5acks FM. Pfeffer MA. Moye LA. et al. The effect of pravastatin on coronary events aftl'r
myocardial infarctíon in patients with ~verage cholesterollevels, Cholesterol' and
Recurrent Events Trial Investigators. NIEngl J Med 335:1001-1009, 1996
Se puede encontrar material educativo en español para pacientes
17. Testa MA and DC 5immonson. Health economic benefits and quality of tife during illljlrowd
y médicos en http://ndep.nih.gov y http://www.betterdiabetescare.org. glycemic control in patients wíth type 2 diabetes meltitus: a randomizect. wlll,oll,·d,
y http./jwww.cdc.govjdiabetesjconsumerjlearn.htm. doyble-b\ind trial. JA'MA 280:1.49GJ-149Ó,1998
18. The Diabetes Control and Complications Trial/Epidemiology of Diabetes IntclV<'lllillll·. "lid
Complicatíons Research Group,.Sustained effect ofintensive treatment of tVIH' 1 di"III'I,'"

2
mellitus on development and progression of diabetic nephropathy: the Epidemiology of Los exámenes de laboratorio solicitados incluyeron glucemia (152 mgjdl),

Diabetes Interventions and Complications (EDrC) study. JAMA 290:2159-2167, 2003 HbAlc (8,0%), Colesterol total (245 mgjdl), triglicéridos (205 mgjdl),

19. Third National Health and Nutri"bion Examination Survey, NHANES III, 1991-1994. The cHDL (34 mgjdl), cLDL (1~0 mgjdl), T5H (1.2 uUjml), Anticuerpos

Diabetes Control and Complications Trial (DCCT) Research Group. Effect of intensive therapy
on the development and progression of. diabetic nephropathy in the Diabetes Control and antiperoxidasa tiroidea (negativos), Microalbuminuria (20 mgj24 horas).

Complicabons Trial. Kidney lnt 47:1703-1720, J995 Como exámenes complementarios se realizó fondo de ojo (normal); examen

19. Third Report of the National Cnolesterol 6duc.abon program (NCEP) expert panel on cardiovascular (ECG con ritmo sinusal y trazado normal).

detection, evaluation and treatment of high btood cholesterol in adults. (Adult Treatment Diagnóstic.o: la diabetes ti po 2 en mujer menopáusica, con antecedentes

Panel III). Final reporto Circulabon 106: 3a43-3421. 2002 familiares de enfermed,ad coronaria prematura), con 3 factores de riesgo

20. Tuomilehto J, lindstrom J, Eriksson JG, et al. Prevention of type 2 diabetes mellitus by cardiovascular asociados (obesidad central, hipertensión y dislipemia) tiene

changes in lifestyle arnong subjects witll impaired glucose tolerance. N Engl J Mee
344:1343-1350, 2001 rieg.o cardiovascular alto.

21. UK Prospective Diabetes Study Group. Tight blood pressure control and risk of macrovascular Tratamiento: Educación diabetológica, plan de alimentación (grasas <30%

and microvascular complications in type 2 diabetes: UKPDS 38. BMJ 317:703-713,1998. y < 10% de grasas saturadas y restricción de ingesta de sodio), práctica

22. Uusibupa MIJ, Niskanen LK, Siitonen 0, ee al. Ten-year cardiovascular mortality in regular de actividad física (30 minutos de ejercicios 4 dias por semana).

relation to risk factors and abnormalities in lipoprotein composit,ion in type 2 (non­ Drogas: metformina (1700 mgjdía), glibenclamida (10 mgjdía),

insulin-dependent) diabetic and non-diabebc subjects. Diabetologia 36:1175-1184, 1993 simvastatiJila (10 mgjclía) ,e inhibidor de ECA (10 mg/día). Ve'rificar a los 3

23. Yusuf S, Sleight :P, Pogue J, et al. Effects of an angiotensin-converting-enzyme meses respuesta a los cambios de estilo de vida y a la medicación. En caso

inhibitor,ramipri'l, on cardiovascularevents in high-risk patients. The Heart Outcomes


Prevenbon Evaluation 5tudy Investigators. N Engl J Med 342:145-153, 2000 necesario agregar gemfibrozil si los tri glicéridos siguen por arriba de valores

objetivo « 150 mgjdL).

(aso Cli!1ico 1 (aso CLinicco'.2


Paciente de sexo femenino, de 53 años de edad, con diabetes tipo 2 desde
Hombre de 48 años de edad, obeso, con antecedentes familiares de diabetes.

hace 5 años.
Antecedente familiares: varios familiares (maternos y paternos) con

Antecedente familiares: madre viva de 75 años no diabética, no


diabetes tipo 2.

dislipémica. Padre fallecido a los 52 años de edad por infa,rto de miocardio,


Antecedentes personales: Empleado administrativo, de hábito sedentario,

tenía hipercolesterolemia. Ignora otros antecedentes familiares de diabetes,


dejó de fumar hace 8 años.

hipertensióJil o dislipemia.
Motivo de consulta: conocer su posible riesgo de desarrollar diabetes.

Antecedentes personales: histerectomía a los 48 años por miomatosis


Examen fisico: Peso 88 Kg; Talla 1,70 m; circunfe~encia de cintura: 110

tlterina. Sedentaria, no fuma. Tratada CQn metformina (1700 mg/día) y


cm; IMC 30.

glibenclamida (5 mg/día).
Aparato respiratorio: sjp; Aparato circulatorio: ruidos cardiacos normales.

Motivo de consulta: contml de su diabetes y SH posible riesgo vascular.


Presión arterial 145j90 mm Hg. Abdomen globuloso. Hígado palpable por

Examen fisko: peso 75 kg, talla 1,63 m, c~rcunferencia de cintura: 100


debajo del reborde costal con borde romo. Resto del abdomen sjp. Miembros

cm; IMC 28.


inferiores: piel y faneras sIpo Sensibilidad al monofilamento normal. Pul­

Aparato respiratorio: sjp, Aparato circulatorio: ru.idos cardíacos norma­


sos periféricos pr·esentes.

les, frecuencia cardiaca 80 p/min. Presión arterial: 160j90 mm Hg en


Diagn6st,ico presuntivo: Síndrome metabólico.

ambos brazos. De pie 150/90 mm Hg. Abdomen: globuloso, sin


Diagnóstico diferencial: con Diabetes tipo 2 con factores de riesgo

organomegalia ni soplos. Extremidades inf,eriores: sensibilidad al


asociados y con hepatopatía.

monofilamento normaL Pu1lsos periféricos bilaterales presentes.


Los exámenes de laboratorio solicitados ir:¡cuyeron: Glóbulos rojos (4.860.0(JOj

Diagnóstica presuntivo: diabética tipo 2 con riesgo vascular aumentado.


mm 3), Glóbulos blancos (6.700/mrn 3), HbAlc (15.2 g%), hematocritQ (1;)'%,),

Diagnóstico diferencial: Historia falmiliar de dislipemia primaria o


glucemia en ayunas (112 mgjdl) ya las 2 horas postsobrecarga de qlllCO'IlI

secundaria a disfunción tiroidea en paciente con diabetes tipo 2.


oral (178 mgjdl), colesterol (232mgjdl), cHDL (32 mgjdL), cLDL (lS0 11Iqj

11
dl), triglicéridos (180 mg/dl); fosfatasa atealina (ncHmal), TGO y TGP (en Cardiomiopatía en
el rango superior del valor normal); Análisis de orina (normal);
microalbuminuria 32 mg/24 hs (VR hasta 30 mg/24 hs). Diabetes tipo 2
Como exámenes complementarios se realizó Ecografía abdominal (hígado
agrandado con ecorrespuesta heterogenea por infitltración grasa difusa). ""'1
Vesícula biliar (alitiásica de paredes normales); vía bitiar (calibre normal).
Alberto S. Villamil y Víctor F. Contreras
Diagnóstico: paciente con glucemia en ayulílas y tolerancia a la glucosa
alteradas (prediabetes). Presenta además de la obesidad de tipo central
otros marcadores de insutinorresistencia como la hipertensión arterial,
dislipidemia y los signos ecográficCls de esteatosis hepática no a,lcoholica
(NA5H). La combinación de todos estos elementos junto con Uina Propósito
microalbuminuria en el límite superio~ de lo normal le confiere al cuadro
un aumento del riesgo para desarrollar diabetes tipo 2 y eventos
cardiovasculares. Como el título le anticipa...
Tratamiento: Educación, ¡plan de aLirli1entaci'ón y programa regular de
ejercicios aeróbicos (estrategias que disminuyen insulinormsistencia) para La diabetes tipo 2 está asociada con un aument{) del riesogo
lograr reducción mel peso corporal y del riego de desarrollar diabetes tipo cardiovascular. De hecho hace 3 décadas el estudio Framingham reveló
2. Tratamiento de hipertensión con inhibidores de ECA y la dislipidemia que la incidencia anual de insuficiencia cardiaca en las personas con
con estatinas. diabetes era sustancia,lmente mayor que en los no diabéticos y que las
personas con cliabetes tipo 2tienen de 2 a 4veces más riesgo de desarrollar
un infarto agudo de miocardio (IAM) que quienes no lo son.

y dado que...
A menudo la diabetes tipo 2' forma parte del síndrome metabólico
el cual esta asociado con otros factores de riesgo cardiovascular (FRCV)
tales como obesidad abdominal, hipertensión arterial (en esta pobla­
ción su prevalencia es del 50%, el doble que la población general),
dislipidemia, un estado pro-trombótico e insulinorresistencia.

En esta unidad le proponemos:


Analizar la asociación de diabetes con hipertensión y/o isquemia
miocárdica.
Evaluar el daño morfológico y funcional miocárdicopara el
desarrollo de insuficiencia, cardíaca.

Tenga en cuenta que:


Si bien la cardiopatía isquémica y la hipertensión arterial son las
causas más frecuentes del desarrollo de insuficiencia cardíaca en estos

]76
117
pacientes. es de destacar que hay descriptos casos de insuficiencia buiría a promover la aterosderosis en estos pacientes, afectando el
cardíaca en diabéticos no hipertensos cuya necropsia reveló la ausencía balance normal entre coagulación y fibrinolisis, favoreciendo el au­
de enfermedad corOtílaria y de valvulopatias. Histológicamente existía mento de los niveles de fibrinógeno.
hipertrofia de tos miocitos, fibrosis intersticial, y microangiopatia
intramiocardica. Estos cambios era'n similares a los encontrados en la La hipertrofia ventricular izquierda es un factor de riesgo de
cardiopatía hipertensiva y enfatizan la importancia del control de la morbimortalidad cardiovasc:ular y su presencia es habitual en personas
presión arterial @n personas con diabetes. con diabetes, debido en parte a la elevada prevalencia de hipertensión
e isquemia miocárdica. Varíos estudios han demostrado que las personas
Es preciso mencionar que: con diabetes, sobre todo las mujeres, tienen una mayor masa ventricular
En un estudio reciente hallamos en personas con diabetes ti po 2 izquierda debido al aumento del espesor de la pared y del diámetro del
normotensos de reciente diagnóstico, sin cardiopatía isquémica, alte­ ventrículo, siendo la diabetes en estos pacientes un factor de riesgo
raciones en la función diastólica. Estos hallazgos confirmarían la independiente para dicha hipertrofia.
existencia de una miocardiopatTa diabética especifica, independiente
En conclusión, la asociación de diabetes con hipertensión y/o
de la presencia de la hipertensión o la cardiopatía isquémica.
isquemia' miocárdica sinergizan significativamente el daño morfológico
y funcional miocárdico, originando un poderoso sustrato para el desa­
rrollo de insuficiencia cardíaca (Figura 1).
Fisiopatotogia y patogenia
Las concentraciones elevadas de glucosa tienen un efecto tóxico
di,recto sobre el endotelio vascular. Este efecto puede conducir a la
disminución de la relajación mediada por factores endoteliales, au­
mento de la vasoconstricción, hiperplasia de células musculares lisas,
Hiperglucemia

Hipertensión
Arterial

remodelado vascular y eventos ateroscleróticos. La hi perglucemia \..


también acelera la formación y acumulac:ióliI de tos denominados
productos avanzados de gJicosilación no enzimática de proteinas (AGE) Miocardiopatía
[ Diabetes Tipo 2
que actuando en diferentes niveles contribuyen a la patogenia de los
hastornos vasculares en la diabetes.
La glicosilación del colágeno disminuye la respuesta a la colagenasa
'\ ---~
yen consecuencia la hiperglucemia puede promover un aumento de la Insu Iinarres istencia
matriz ilnbersticial que conducirá a, la hipertrofia y el remodelado vascular
y miocárdico.
Además el colágeno glicosilado se 'liga a las partículas de colesterol­ Figur.a 1. factores promotores de miocardiopatía en la diabetes tipo 2,
LDL prolongando la permanencia de esta lipoproteína en la íntima,
favoreciendo su oxidación y promoviendo la aterogénesis.
[@nsiderando el riesgo de desarrollar cardiomiopatías cuando ,',C' 1'/1
La insulinorresistencia bpica de la diabetes tipo 2 también contri­ ,cuentran presentes los factores ont2riQres,. t€ solicitamos qUe:

78
1. Elabore una lista de indicaciones vincutadas a cambios de estilo de (presión arterial media, 144/82 mm Hg) tuvieron un riesgo relativo de
vida que a su criterio debería cumplir una persona con driabetes para insuficiencia cardíaca significativamente menor (3,6 veces) que eL 8,1
reducir la probabilidad de desarrollo de complicaciones cardiovasculares. del grupo con tratamiento menos agresivo (presión arterial media 154/
87 mm Hg).

2. Enumere los fármacos que prescribiría para controlar la glucemia Las modificaciones en el estilo de vida ~ueden reduÓ'r varios FRCV:
" moderada ingesta de sal y
3, ¿Cuál se6a el primer tratamiento de eLección al constatar la pre­ 5 ¡,reducción de peso (IMC < 26 ).
sencia de una cardiomiopatía? La práctica regular de actividad fisica reduce significativamente la
presión arteriaL y Los niveles de colesterol (que puede
4. Sil la evolución del paciente deriva en una insuficiencia cardíaca, complementarse con una dieta pobre en grasas saturadas).
¿cuáles serían ~os críterios para indicar su internación? • En fumadores también se indicará la inmediata suspensión del
consumo de tabaco.
En relación con el tratamiento de la HTA, recuerde que en el Capítulo
A.continuación descn'biremos las formas de prevenci6n y tratamiento 15 de este manual tratamos el tema, de manera que en este momento
para que usted saque sus propiaS conclusiones, solo recordaremos que para el:

• Prevención y tratamiento de 'la miocardiopatia diabética Tratamiento de la hipertensión


Dado que como mencionamos anteriormente la patogenia de la Es importante controlar durante el tratamiento aspectos tales como:
miocardiopatía en el diabético es muLtifactorial, su prevención y el
tratamiento estarán dirigidos a todos las variables fisiopatológicas men­ ofl función renal y niveles de potasio periódicamente en pacientes
cionadas. tratados con lECA o ARA H.

La prevención debe C0menzar por demorar el prevenir el desarrollo de En pacientes ancianos tener especial cuidado en disminuir graduaL­
la diabetes tipo 2 en 'la población de riesgo, es decir en personas con mente la presi,ón arterial para evitar complicaciones debidas al fLujo
intolerancia a la glucosa o con glucemia en ayunas alterada (g,LLJcemia sanguíneo insuficiente, particularmente a nivel cerebral y coronario.
>100 y <126 mg/dL). Los pacientes que no logran aLcanzar los objetivos de presión arterial
El ,estudio UKPDS mostró que en personas con diabetes tipo 2 e empleando tres drogas, incluyendo un diurético y tos pacientes con
hipertensión el controL intensivo de la gLucemia no logró reducir enfermedad renal manifiesta deben ser derivados a un especialista en
significativamente los eventos macrovascu'lares pero sí las complicacio­ hipertensión.
nes nlÍ'crovasculares. Sin embargo con un control intensivo de la presión
art(:riall se logró reducir significativamente las complicpciones macro y En el Capítulo 16 analizaremos en detalle el control de la dislipidemir1. f'o!
llIicrovasculares. En este estudiO' los pacientes con control más estricto lo tanto en este capítulo solo mpncionaremos que es preciso recorda! r¡w ':

o 18:1
la disl~pidemia en eU diabético está caracterizada por aumento En un metaanálisis de 13.000 pacientes con disfunción ventricular
en los niveles de triglicéridos y det eoLesterol-LDL y disminución de la sintomática o asintomática post-infarto, la mortalidad fue del 36,4 y
concentración de colesterol-HOL. Si bierl las estatinas tienen poco del 24,7% en diabéticos y no diabéticos respectivamente.
efecto sobre los trígLicéridos y aumentan modestamente los niveles de El tratamiento de esta entidad es esencialmente similar en ambos
colesterol-HOL, estudios de prevención secundaria como eL 4 S Yel grupos. El farmacológico se basa en la administración de diuréticos,
CARE, sugieren que estas drogas tienen mayor efecto en pacientes lECA y beta bloqueantes. También se usa digital y espironolactona en
diabéticos ,que en no diabéticos. Recientemente el estudio Heart la insuficiencia cardíaca sistólica.
Protection Study (HPS), mostró que tanto ~as personas con enfermedad
vascuLar como las incluidas en e~ grupo de alto riesgo en prevención No existen aun datos pronósticos del tratamiento de la insuficien.
primaria, se benefician COI1 el tratamiento con estatinas aún con niveles cia cardíaca diastólica, siendo drogas de elección en este caso los
de colesterol relativamente normaL nitritos y diuréticos a ba6as dosis para favorecer el lLenado ventricular
que está comprometido en estos pacientes.
Los fibratos como el gemfibrozil son potencialmente superiores a
las estat1nas para e1 tratamiento de La dislilpemia del diabético, ya que ¿ y qué decisión tomar si el paciente evoluciona Q una insufi­
aumentan los niveles de cülesterol-H DL y disminuyen los de trigllcéridos. ciencia cardíoCCJ?
Sin embargo aun no existe evidencia proveniente de estudios a largo
plazo que comparel1 en estos pacientes el beneficio del tratamlento
En padentes que evolucionan a insuficiencia cardíaca descompensada,
con fibratos vs. estatinas.
los criterios para decidir su internación son:
En los Capítulos 20 a 22 dE'5cn"bimos {as alternativas terapéuticas • Descompensación hemodinámica a'guda de causa cardíaca (por
(medicamentosa y no medicamentosa) para el control de la ejemplo lAM, taquiarritmia" insuficiencia mitral)
hiperglucemio, razón por la cual te recomendamos :su lectura. Igualmen­
te que luego trate dE integrar lo descripta en elfos con el resto de fluestras • Taquipnea de reposo

rfcoFfiiEndaci(f!fiEJ¡ ~ Desaturacián arterial de Ü'2( <90%)

Se aconseja eL uso de aiSpiriJAa en bajas dosis, como antiagregante !Jo Signos de hipoperfusión perifénca

plaqlJretariQ', ta,nto para prevención primari'a como secundaria. Existen Insuficiencia renal aguda o crónica descompensada
además otros. tipos de drog;as como el clopidbgrel que ha demostrado
su eficacia en preveneión senlnoaria (pacientes con IAM previo). Il Natremia < 120 mEqjL
• Presión arterial sistólica < 80 mm Hg
Para ir terminando...
'" Signos de ma·rcada congestión pulmonar
El estadio final de La miocardiopatia diabética, independiente ~ Progresión clínica a pesar de un adecuado malílejo ambulatorio
del factor causal, es la insuficiencia cardíaca. Las tasas de complica­
ci0nes y de mortalidad por insuficiencia cardíaca en personas con
En la Tabla final, sintetizamos la información que hasta aquí se ha
d'j;¡betes son mayores que en pacientes no diabéticos.
desarrollado. Recuerde que puede recrearla o expandirla para que se
Un rj(}tQ valio5o a considerar es, que: transforme en un instrumento útil en su prác.1:ica médica cotidiana.

83
8. Prisant LM. Clinical Trials and Lipid Guidelines for Type TI Diabetes. J Clin Pharmacol
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Sobrepeso IMC < de 26 Hypertension 17 (Suppl 3): S 124,1999.

Tabla 1: Metas terapéuticas sobre los factores de riesgo para miacardiopatia diabética.

(aso 'Cl1nico
Paciente masculino de 63 años de edad, con diagnostico de diabetes tipo
2 desde hace 13 años. descubierta en coincidencia con un cuadro de angor
• BibLlografia pectoris de dos días de duración, por el que fue internado, sin que se
1. Con~.enso de Insuficiencia Cardiaca. Comision de Tratamiento de ta insuficiencia Cardiaca
demostrara lesión orgánica de miocardio.
Av~nzada e Insuficiencia Cardiaca Descompensada. Sociedad Argentina de Cardiología. Antecedentes familiares: No tiene antecedentes de diabetes, padre obeso
I<ev Argent Cardiol 68 (Supl III): 45-64,2000. e hipertenso, fallecido de un accidente cerebrovascular a los 56 años.
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:\):1706,1997.
Antecedentes personales: Ex fumador de 1 paquete de ci'garrillos diarios,
3. 11.\II~.';on, L; Zanchetti, A; Carruthers S; Dahlof B; Elmfeldt D; Menard J. For the HOT Study
liroup: Effects of intensive blood pressure lowering and low dose aspirin in patients with
hasta la aparición del episodio de angina. Apendicectomía a los 23 años.
Hyp,¡rlension: principal results of the Hypertension opUmal Treatment (HOl') Randomi,ed Hipertenso, con colesterol elevado. Tres años después, del primer episodío
Tria!. L,lncet 351: 1775-1762,1998. de angina, el paciente presenta un cuadro doloroso en zona precordial y al
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Framingnam Study . Am J Cardiol 34:29-34,1974. en dos arterias, decidiéndose la colocación de un stent en coronaria anterior.
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Insulin-Glucose Infusion in Acute Myocardial Infarction (DIGA MI) Study. Círculation99:
2626-2632,1999.
a raíz de ello se decide la realización de un triple by-pass. En el último
6. MRC/BHF Heart Protection Study of cholesterollowering with simvastaNn in 20536 hiCfh
;lÍlo, el paciente se queja de fatiga al caminar y a ~os esfuerzos mínimo5,
risk individuals: a randomized placebo-controlled triat. Lancet 360: 7-22,2002. y edema vespertino de miembros inferiores
7. Nationallnstitutes of Health. The seventh report of the Joint National Comll1ittre nll Pi)rJ 5U diabetes esta medicado con RO$iglitaz~Jna 8 mg. y Glimepirid;¡ 1,
Preventi01l, Detection, Evaluation, and Treatment of High Blood Pressure (JNC 7). JAMA IUY. dos veces por día. Realiza tratamiento alimentario en forma di5couI ilu,,!.
2f39'(Nn 19): 2561-2572,2003. No hace actividad física. Por su hipertensión y su hiperlipetnin, e~;L'l 11' .. 1111'\11
10mg de inhibidores de la enzima convertidora y 50 mg. de betabtoqueantes Pi e diabétlCo:
dos veces por día, acompañados de 20 mg. diarios de atorvastatina, los
que ingiere en forma esporádica. revenClón y tratamiento
Motivo de Consulta: Paciente consulta porque en los últimos días se acentúa
el cuadro de disnea que le imp~de realizar cualquier actividad fisica,
incluyendo la marcha, se queja además de tos especiallmente nocturna. Norberto V. Cédola ,Federico N. CMolo y José Miguel Domínguez
fxamen'fisico: Peso 90 kg; talla 1,77 m; circunferencia de cintura 109 cm;
IMC 29. Aparato circulatorio: Presión arterial 160/90 mm Hg. Frecuelilcia
cardíaca 92 pulsaciones/minuto. Auscultación cardíaca con soplo sistólico
en especial en foo¡¡ mitral. Aparat0 Respiratori1o con algunos rales y frotes
en ambos campos. Abdomen globuloso; a la pa,lpación se encuentra un
hígado aumentado de tamaño. Miembros inferiores: edemas importantes , Propósito
en ambos miembros. Ausencia de los pulsos ~edios y tibiales posteriores. La problemática que abordaremos a continuación está desarrollada
Ausencia de los r.eflejos patelar y aquiliano y de la sensibilidad vibratoria. de tal manera que Ulsted:
Diagnóstico presuntivo: Insuficiencia cardíaca.
Diagnós.tico diferencial: El cuadro ofrece pocas posibilidades d,e • Conocerá los elementos que es preciso tener en cuenta al observar,
diagnósticos (Merel1ldales. La presencia de isquemia miocárdica asociada
evaluar y proponer cuidados y tratamientos a personas con diabetes
a hipertensión arterial, constituyen junto coñ la presencia de miocardiopatía
los factores etiológicos más frecuentes, de la insuficiencia cardíaca en que al momento de la consulta tienen o no úlceras del pie.
personas con diabetes. • Observará algoritmos diagnósticos que promueven el tratamiento
Los exámenes de laboratorio solicitados incluyeron: Glucemia (222 mg/dL), adecuado para la úlcera de pie sin y con riesgo de amputación y
HbAlc (8.9%)., Colesterol (208 mg/dL), clDL (161 mg/dL), cHDL (44 mg/
de la vida.
dL), Triglicéridos (195 mg/dL) y Creatininemia (1.41 mg/dL). Hemograma
(eritrocitos s/p, Leucocitos 9.700/mm 3), con una eritrosedimentación de • Comprenderá la importancia de la educación diabetológica de los
53 mm Cultivo de orina (negativo). pacientes para garantizar unal mejor calidad de vida.
Como exámenes. complementarios se realizaron: radiografía de torax
(elongación y calcificación de la ,aorta, hipertrofia de ventrículo izqui,erdo
y dilatación cardíaca generalizada). Electrocardiograma (lesión isquémica
y preexistente e hipertrofia del ventriculo izquierdo). Ecocardiograma n Actividad de reflexión previa
(rracción die eyección de 32 ml).
Diagnóstica: Mi0cardiopatía dilatada. Insuficiencia cardiaca congestiva. Le proponEmos que conteste el siguiente cuestionario.
Tmtamiento: E~ palciente es internado y medicado con di uréticos; se Si usted ha atendidC9 a personas con diabetes:
incrementó la dosÍlS de i,mhilbidores de la enzilma convertidora. Se agregaron
estati-nas y se ptescri~i'ó un plan de alimentación adecuado a Sl!! diabetes, 1. ¿Cómo abordó en la' consulta el examen de los pies?
pero adern:ás hÍJposódico. Para el control de su hipefglucemia se inició a. Le pregurrtó 31 paciente:
insuli noterapia.
- Si 5e llabía lastimado o tenía alguna lesi6n: raspón o callosidad.
- Quién le cortaba las uñas.
- Si los zapatos que usaba diariamentE' eran CÓII\odos.
- Sí reali,zaba alguna actividad fisica y con qué calzado.
- Si 1t05 sentía fríos O catientes.

186 lB1
'J

2. Además de hacerle preguntas usted y una prevalencia del 4-10%, reflejando diferencias entre las poblaciones
a. Siempre los hace descalzar y observa los dedos, los espacios y estrategias de manejo. En 1986 en EE.UU el46% de las internaciones
interdigitales y Ila pLanta de los pies.. por úlceras correspondieron a personas con diabetes y el costo directo
de su atención fue estimado en US$ 145 millones. Por lo tanto, las
b. L3 mayoría de las veces, los obliga a mostrarte los pies, los toca complicaciones del pie en la diabetes representan un cuadro
y los revisa. particularmentre perturbador y diversos países y organiz 9 ciones
c. Pocas veces les pide que se descalcen. internacionales han fijado metas para reducir la tasa de am putaciones
hasta en un 50%.
d. Casi siempre confía en el interrogatorio.
Las recomendaciones dirigidas a prevenir o demorar estos resultados
3. Realiza la técnica del filamento, en personas con pie en riesgo: adversos se refieren a dos situaciones claramente diferentes:
a. Siempre que el paciente viene a la primera consulta. Recomendaaones para personas que aáualmente no tienen úlceras del pie.
b. Reitera 'la técnica por lo menos, cada tres meses. Recomendaciones para el manejo de las úlceras del pie diabético.
c. Cada vez que cuenta con tiempo suficiente.
d. Instruyó a un familrar para que 'Lo haga.
1. Recomendaciones para personas que actualmente no
Sin duda usted tendrá más preguntas o cuestiones sobre los cuales tienen úlceras deL pie
reflexionar. Lo invitamos CI leer este capítulo para afianzar las prácticas
necesan'as para disminuir el 6e5go del desarrollo del pie diabético y, 1.1. Pie de riesgo. Definición: es un pie que está en riesgo de infección,
además, incorporar los conocimientos que le permitirán ofrecer una mejor ulceración y subsecuente amputación.
atención a estos pacientes.
1.2. Fisiopatologia del pie de riesgo: En la diabetes, las alteraciones de
los pies tradiciorlalmente eran consideradas la consecuencia de la
enfermedad vascular periférica, la neuropatía periférica y las
Introducción
infecciones. Desde un punto de vista didáctico, estas causas se agru­
Se define oomo pie diabético la infección, uloeración y/o destrucción paron en cuatro factores fisiopatológicos: neuropatía diabética
de los tejidos profundos en miembros inferiores asociados con periférica, factor ortopédico, infecciones y enfermedad vascular
anormalidades neurológicas y enfermedad vascular periférica. Aproxima­ periférica. Apesar de no ser estrictamente un factor fisiopatológico,
damente el 40-60% de las amputaciones de miembros inferiores ocurren nosotros agregamos la educación diabetológica deficiente como cau­
en personas con diabetes, pudiendo llegar a cifras del 70-90%. El 85% sa precipitante de las lesiones del pie diabético (Figura 1).
de estas amputaciones son precipitadas por una úlcera subsecuentemente
Educación diabetológica deficiente (EDO): Casi todas las
complicada! por una infección severa o gangrena.
amputaciones comienzan con un «evento precipitante»: un trauma físico,
Las úlceras del pie afectan hasta el15% de las personas con diabetes químico o térmico. Los traumas producidos por el calzado son,l11uy
(~n algún momento de su vida, con una incidenda anual del 2,4/2,6% frecuentes. La mayoría de estos eventos precipitantes pueden prevenil',l:

8 9
m
mediante una adecL!ada educación diabetológica sobre cuidados del isquémico, pero el pie puramente isquémico sin neuropatía concomitante,
pie y uso de calzado adecuado. raramente se observa en pacientes diabéticos, razón por la que se lo
denomina «pie neuroisquémico». En contraste con el pie neuropático,
Factor infecdoso (FI): Aunque no hay evidencia estrida que las éste es un pie frío, con piel atrófica y pulsos ausentes. Sus complicaciones
infecciones sean causa di,recta de ulceración, probablemente se insta­ son el dolor de reposo, la úlcera neuroisquémica y la gangrena.
len luego de ocurrida la ulceración. También es probable que los
gérmenes utilicen como puerta de entrada una infección micótica de
los espacios interdigitales o grietas en la planta del pie. DIABETES MELLITUS

~"
Factor ortopédico (fO): Las alteraciones biomecánicas del pie • Tabaco
incluyen el aumento de las presiones plantares, las deformidades óseas • HTA
• Dislipemia
y la disminución de la movilidad articutar (DMA). Las causas del aumento
de la presión plantar incluyen las altera,ciones óseas y clel tejido
conectivo, la DMA, la formación de callos y cambios posturales y de la Disminución de NEUROPATIA Alteraciones
!
Enfermedad
marcha. Las deformidades óseas o ~a DMA solas no son suficientes para la movilidad DIABETICA micro­ macrovascular
articular circulatorias
generar riesgo, pero si cuando se asocian con neumpatía periférica. ~
Motora Sensitiva Autonómica
\
Neuropatia diabé'tica periférica (NDP): Las alteraciones de la NDP
adoptan 'la disposición en forma de media,s o guantes; se manifiestan
[On di6minución de la sensibilidad superficial y propíoceptiva y la atrofia
1 ,.
!
Disminución de
'\

Co rtocircu itos

Posición. las presiones en (Shunts)

de tos músculos interóseos del pie con aparición de dedos en martillo. anormal del pie puntos de apoyo

Además puede prodL!cirse la migración distal de la almohadilla de grasa


plantar qU€l cubre la cabeza de l0s metatarsianos y un aplanamiento
deO alrco transverso o tongitudinal.
r
• Problemas Aumento dé Disminución de

ortopédicos
las presiones en la nutrición
La afectación simultánea de las fibras nerviosas simpáticas produce • Artropatía puntos de tisular

(Charcot)
apoyo
defilervación de las glándulas sudoríparas con disminución de la Isquemia
transpiración y pérdida del tono vasomotor de los vasos sanguíneos
pe !íi fé ricos. El resultado de estas alteraciones es el «pie neuropótico» Formación de Ulcera rl I
cuyas características son: pie entumecido, caliente y seco, generalmente cailos

indoloro y con pulsos presentes. Sus complicaciones son el edema Infección

[<':~r:;fi~~~--I-::~~~~;i~~'1 -~-~f~~~~~:--1 [~_~;;~~~~ . . . l


neuropático (raro), la úlcera neuropática y la r1euroartropatía de Charcot.
Enfermedad vascular. periférica (EVP): Presente con mayor fre­
cuencia en personas con diabetes tipo 2' de larga evolución y asociada
con otros factores de riesgo cardiovascular. Las lesiones de la EVP son , Educación diabetológica deficiente
L. .__.._.. . . . ._.
I
._..
multisegrnentarias, bilaterales y afectan las arterias tibiales y peroneas
entre la rodilla y el pie. En los pacientes diabéticos que fuman, también
Figura 1. Fisiopotologfo de las lesiones deL pie diabético.
pueden afectarse los vasos proximaLes. La resultante final es el pie

190
1.3. Identificacióli1 del pie de riesgo: es fundamentaL para una preven­
ción efectiva del pie en personas con diabetes. El riesgo de úlceras o
amputaciones aumenta en hombres con miabetes, con control metabólico
pobre o complicadoll16s cardiovas.cuCares, retinijanas o renales.

A rtontinuación r1l1umeramos {as condióones que aumentan el n'esgo


de amputación de un pie' en riesgo:

'. N.europatía diabética periférica con pérdida de sensación doLorosa.


Figura 2 ED = Educación diabetológica, 1= Infecciones, FO = FactQr ortopédico, NDP
.. Biomecá0l1ca alte fad a (en presencia dé t:leuropatía).
1
=Neuropatía diabética periférica, EVP =Enfermedad vascular periférica.
,ji Eviden'CÍa de aumento de Las IDresiones (eritema, hemorragia debajo
de (alLos).
Evaluadón de la educación diabetológica: La anamnesis, la inspec­
,. EFlfermedadl vascular periférica (pulsos pedios disminuidos o ción del pie y el examen deL calzado permiten vaLorar el grado de
ausentes). educación diabetológica del ¡paciente.
,. Antecedentes de úCceras o amputación. Verificar: en cada visita y con ,tos pies desnudos:
,. Patología' ungueaL severa.
Condiciones de hig,i.ene.
<;,

8> Presencia de traumas (heridas, hematomas, cambios de coLor y

edema, todos signos de lesión y de presión aumentada).


1.4. Examen del pie de riesgo: req.uiere Las siguientes cOli1diciones.:
Erb cada visita el médico de cabecera na~á un examen cuidadoso de . Número, forma y estado deL calzado en relación con el tamaño y
los pi'es deL di'a,bétkO'. la forma del pie.

Si existe aumento de la temperatura local {signo de Lesión o

Todos [os irntegrantes deL equipo de salud que atienden personas infección subyacente).

con diabetes deben ser capaces de reaLizar un examen simpLe del[ pie.
• La parte interna deL calzado buscando cuerpo·s extraños, clavos o
EL examen de tos pies es un paso fund'ame.ntal que puede reahizar­ bordes ásperos.
se en pocos minutos y pe~mH1e idenhficar la presencia de factores de El Si el paciente (o sus familiares en caso de discapacidades) realiza
riesgo y evaluar eL grado de educadórn diabetológica. Proponemos eL auto examen de Los pies.
utilizar Los procecnmientos semiollógicos clásicos evaluando
secuencialmente cada uno de los factores fisiopatológicos repr€sen­ Porque:
tados comiD LiDs 5 sectores efe un pentágono (figura 2). ,~ La identificación precoz y eL tratamiento agresivo de los problemas
Este ordena,miento permite agregar un sistema de clasifica­ más simples disminuyen el riesgo de úlceras y amputaciones.
ción del riesgo y agrupar condkiones con requerimientos tera­ (JI Un calzado inadecuado ya sea ajustado o no lo suficientemente pro­
p~utic()s y pautas de seguimiento diferentes (Podrá observarlo fundo para acomodar bien el pie, aumenta eL riesgo de lesione~ V
fin 1,1 rabia 1). úlceras.

p 193
• Los bordes ásperos del calzado también pueden causar lesiones. Porque:
• El autoexamen permite detectar lesiones que pasaron inadverti­ Las presiones plantares aumentadas, las anormalidades óseas y la DMA
das por la pérdida de la sensibilidad. asociadas a pérdida de la sensibilidad por la NDP se asocian con un
riesgo aumentado de ulceración y amputación.
Evaluadón de las infecdones
Verificar: Examen neurológico
• La superficie de la piel en las caras dorsal y plantar y en los Investigar:
espacios interdigitales.
La pérdida de la sensación de protección: en ausencia de síntomas,
Las uñas, los callos, las grietas de la piel y los talones. identificar esta alteración (neuropatía sensitiva) usando un monofilamento
Porque: de nylon de 5,07/10 g (monofilamento Semmes-Weinstein).
• Las infecciones de la piel causadas por hongos (tiñas) se locali­ ¿ Cómo se realiza él examen con el' monofilamento?

zan principalmente en los espacios interdigitales originando zo­


nas de descamación, fisuras, exudación y maceración. Existe Con el paciente con los ojos cerrados (Figuras 3, 4, 5 Y 6)

tambien una variedad seca o hiperqueratósica que afecta los ta­


lones y las plantas de los pies.
• La uña con infección micótica (onicomicosis) tiene aspecto opa­
co, coloración amarillenta y está engrosada.
Las infecciones bacterianas pueden desarrollarse en el lecho
ungueat, en 10s espacios interdigitales, debajo de una zona de
Seleccionar los sitios de
hiperqueratosis o en una úteera isquémíca.
acuerdo con el modo de
\ ,~.,
) t
",--"",
) screening.
Evaluadón del factor ortopédico
Figura 3
Verificar:
La presencia de dedos en martillo, hallux valgus y zonas de hiperqueratosis.
Investigar:
El signo del rezo (para evaluar la DMA). Se colocan los dedos y la palma de
una mano en oposición con la otra mano; en condiciones normales las
articulaciones metacarpofatángicas e interfalángicas pueden extenderse
totalmente. La incapacidad bilateral e indolora para lograr esta extensión
máxima constituye el «signo del rezo». Este signo muestra buena correlación ""----'--../
con la disminución de la movilidad de las articulaciones del pie.
Figura 4 Figura 5
-11]

Aplicar el filamento perpendicular a la piel. Ejercer suficiente fuerza 1.5. Categoría de riesgo y Frecuencia de seguimiento (Tabla 1)
para que el filamento se doble.
fategorias Riesgo Frecuencia del examen
Recordar: O: pie sin incremento de riesgo Anual
() El contacto con el filamento sólo debe durar 1,5 segundos. 1,2 Y3: pies en riesgo inminente Semestral, trimestral y
o No permitir que el filamento se deslice sobre la piel o que bimestral respectivamente
'haga contacto repetida'mente sobre el sitio de prueba. 4 o mayor pies de alto riesgo Mensual
Elegir dilStinto5 sitios y horas palra validar los resultados. L li
Tabla 1. Categorización del n-esgo y frecuencia de seguimiento,
No aplicarlo directamente sobre úlceras, callos o tejido necrótico.
Hallazgos: Si el paciente no percibe el tOQ'ue del filamento en 1.6. Manejo
uno o varios de los pu'ntos examinados hay déficit sensitivo evi­
dente (neuropatia sensitiva). Identificados los problemas específicos que pueden conducir a la
amputación, se debe prescribir un tratamiento adecuado sobre la base <!le
La pérdida de la sensación de protección se corretaciona los factores evaluados o derivar al especialistal.
significativamente con et riesgo de úlceras o amputaciones futuras
del pie. Educadón djabetológica defidente: Los pacientes con diabetes y pie
de aLto riesgo deben conocer sus factores de riesgo y'su manejo apropiado.
Registrar los resultados en los círculos de la figura del pie Deben comprender las implicancias de la pérdida de la sensación de protec­
Colocar el signo + en e~ sitio donde el paciente siente el ción, la importancia del monitoreo diario de los pies, de su cuidado apro­
monofilamelilto. piado (cuidado de piel y uñas) y la selección del calzado adecuado. Se
aconsejará a los pacientes con neuropatía que usen sus zapatos nuevos
Colocar el s1'gno ~ en el sitio donde el paciente no siente el gradualmente para minimizar la formación de ampollas y ulceras. Pacientes
monofi la mento. con dificultades visuales o impedimentos físicos que dificulten su capaci­
dad de evaluar la condición del pie, pueden necesitar la ayuda de otra
persona ó un miembro de su familia. La educación sobre cuidados del pie y
el uso de calzado adecuado también beneficia a los pacientes con pie de
bajo riesgo.

Examen vascular Infecdones: La micosis interdigital (tinea pedís) puede tratarse eficaz­
mente con una buena higiene y tópicos con fungicidas. Aunque hasta hace
Anamnesis: Investigar la presencia de poco la única cura para la onicomicosis era la ablación de la uña, actual­
síntomas de claudicación intermitente. mente el itraconazol y la terbinafina ofrecen tasas de curación del 70-80%
en cultivos y mejorías cosméticas en alrededor del 50% de los casos. Por
Examinar: pulsos pedio y tibial posterior.
sus altos costos y la alta tasa de recurrencia de la lesión su costo-efectivi
Figura 6 dad es cuestionable y debe ser explorado en personas con diabetl~~~

,19
Factor ortopédko: Las personas con evidencias de aumento de presión sensación dolorosa. El sitio de la ulceración es muy importante pues se
plantar (eritema, callos) deben usar calzado que amortigüe y redistribuya relaciona (Gn el ractor fisiopatológico asociado y el evento preci pitante.
las presiones. Los callos pueden de'blidarse con un escalpelo o piedra pómez La evaluación sistemática y estandarizada de las úlceras permite
por un integrante del equipo de salud con entrenamiento en cuidados guiar el tratamiento posterior. Para ello es importante clasificar a las
del pie. Las personas con deformidades óseas (dedos en martillo, hallux úlceras según su: etiología, profundidad y extensión y realizar una
valgus) pueden necesitar zapatos ext~a-anchos y profundos. En oca­ minuciosa evaluación.
siones (pie de Charcot), puede necesitarse zapatos hechos a medida.
Neuropatia diabética periférica: Los diabéticos con neUTopatía 2.2. Etiología de las úlceras de~ pie
pueden manejarse adecuadamente con zapatos bien almohadiUados Úlcera neuropática: Es la complicación más hecuente del pie
o calzado deportivo. Deben ser educados sobre las implicancias de neuropátíco. Aunque clásicamente se localiza debajo de la cabeza del
la pérdida de la sensibilidad y las estrategias de sustitución (visión, primer metatarsiano, puede encontrarse en el pulpejo o el dorso de los
palpación) para detectar los, problemas precozmente. dedos, entre los dedos y en el talón. las ubicadas en la planta del pie
Enfermedad vascuLar periférica: En personas con daudicació,n de son gene[Cllmente circulares, con aspecto en sacabocados y rodeadas de
callos. Son indoLoras y los pulsos del pie están presentes.
miembros inferiores o pulsos distalles disminuidos o ausentes se eva­
luará minuciosamente su estado vascuíar. Se brindará educación in­ Úlcera neuroisquémica: Se presenta como un área de necrosis ro­
tensiva sobre protección del pie y se recol11endará el uso de calzado deadas por un halo de eritema. Su ubicación más frecuente es en tos
protector amplio y profundo, que permitan IJsar cualquier tipo de plan­ sitios de mayor presión sobre los bordes del pie (extremo del dedo
tillas especiales. Se considerará el tratamiento con ejercicios y las gordo, sobre la cabeza del primer metatarsiano, en borde interno y
opciones quirúrgicas. Estos padentes deben derivarse al especialista. cabeza del quinto metatarsiano, en borde externo del pie). Frecuente­
mente se complica con una infección secundaria. No hay callos ro­
1.7. Prevención de las condiciones de alto riesgo deando a la úlcera, son doilorosas (intensidad dependiente del grado
La NDP es uno de los predictores de úlcera y amputación más importante. de n€uropatía coexistente) y los pulsos están ausentes.
Su desarrollo puede demorarse significativamente manteniendo ,glucemias tan Frente a !Un paciente diabético con una lesión del pie la tarea
cerca de lo normal como sea posible (ver Capítulos 1 y 4). Debe alentars.e el principal es determinar si asienta en un pie neuropático o en un pie
abandono del cigarrillo para reducir el riesgo de enfermedad vascular periférica. neuroisquémico. Por lo tanto la primera maniobral es palpar los pul~
sos del pie: si los pulsos (pedio y/o tibial posterior) están ,presen­
tes, es improbable que exista isquemia significativa.
2. Recomendaciones para personas diabéticas con úlceras del pie
2.3. CLasificación de las úlceras según su profundidad y extensión
2.1. Úlceras del pie
La clasificación de las úlceras del pie facilita la elección del tratamiento,
Definición: Se definen como una ruptura de la barrera cutánea que se ayuda a monitorear el progFeso de la cicatrización y permite comunicarse
extiende a trilvés de todo el espesor de la dermis. Generalmente resultan en términos estandarizados. Aunque se han propuesto numerosas clasi­
(:I~ un;} injuria causada por un trauma mecánico, térmico o quimico por ficaciones, la más aceptada es la de Wagner que establece 6 grados (O a
1.1 NDF1 :aJllyacente, que el paciente no percibe debido a la pérdida de la 5) según la profundidad y extensión de las lesiones (Tabla 2 y Figurí1 7).

199
2.4. [valuación clínica de las úlceras del pie
Grado o: Pie de riesgo. No hay úlcera pero existen callos, cabezas de
metatarsianos prominentes, dedos en garra u otras deformidades. Debe incluir su profundidad, extensión, área, localización, apariencia o
Grado 1: Úlcera superficial (no sobrepasa la piel y el tejido celular aspecto, temperatura y olor. Aunque una medición precisa es dificultosa,
subcutáneo). la profundidad de la herida es un determinante pronóstico importante. Se
Grado 2: Úlcera profunda (llega hasta los tendones y hay infección). estima clásicamente introduciendo suavemente una sonda o un instrumento
Grado 3: Infección profunda con celulitis, o absceso profundo, a romo y estéril dirigido hacia la base de la herida. La sonda también sirve
menudo con osteomielitis. para evaluar la extensión de la herida y determinar la presencia de algún
Grado 4: Gangrena localizada (un dedo o un área pequeña del talón). tracto sinuoso subyacente, absceso o la penetración hacia el hueso,
Grado 5: Gangrena extensa del pie. articulación o vainas tendinosas que puede no ser aparente a la simple
inspección visual. EL área de La herida puede estimarse midiendo sus
Tabla 2. Clasificación de lesiones del pie según Wagner. márgenes sobre una pelicula transparente. La loca~ización anatómica debe
ser específicamente registrada. La descripción incluirá su color, la ¡presen­
cia de calLos circundantes, tejido de granulación, drenaje, escara o necrosis.
La fotografia de la herida' es de valor, especialmente para
monitorear la evolución.

La determinación de la temperatura local con la palma de La mano o


con un termómetro dérmico ayuda a determinar La presencia de inflamación
subyacente o isquemia significativa. El oLor de La herida puede indicar La
presencia de necrosis oinfección. También es esenciaL evaLuar la extremidad
Gr~do O Grado 1
Grado 2

Sin úlcera pero Ulce,-a superficial,


Ulcera profunda

contralatera L.
pie de alto riesgo sitio más frecuente
No afectación ósea

cabeza del ler

metatarsiano

El examen neurológico inetuye el estudio de la presencia o ausencia


de La sensación de protección (monofilamento de Semmes-Weinstein de
10 g). Piel seca y agrietada con venas distendidas en el dorso deL pie
pueden indicar neuropatía autonómica.
La evaluación vascular comprende la palpación de pulsos (tibial
posterior y pedio); su ausencia indica isquemia de La extremidad inferior
y requiere interconsulta con cirujano vascular y estudios no invasivos o
arteriograñ.a.
Es importante La búsqueda de indicadores de infección de tejidos
Grado :1 Grado Grndo 5

Absceso con Gangrena localizada; Gangrena del pie


blandos o deL hueso pues comprometen la capacidad de cicatrización de
afectación ósea por ej.: dedos, talón La úlcera. Las infecciones frecuentemente producen hiperglucemia que
Adaptado de AJM Bouflo, no cede y malestar y pueden faltar sintomas y signos tales como fiebre
-----~

f(qtlra 7. Clasificación de los lesiones del pie según la extensión de los lesiones.
y Leucocitosis. Es importante identificar drenaje purulento, CGluLítis

o
201
circundante, inflamación, edema, hueso o articulación expuestos, tracto 2.6. Cultivo yantibiograma
sinuoso o aibscesos profundos. Es de alta especificidad y valor predictivo
para osteomielitis que la articulación o el hueso puedan tocarse con una Las infecciones de las lesiones del pie son comúnmente polimicrobianas. 11I

sonda estéril. Las infecciones de las heridas pueden clasificarse como no . Por lo tanto ante la sospecha de infección y hasta obtener el resultado
amenazantes o amenazantes del miembro. del cultivo y antibiograma se iniciará la cobertura con antibióticos de
amplio espectro (dirigidos a gérmenes gram+, gram- y anaerobios),
Las infecdones no amenazantes del miembro generalmente tienen modificándola si es necesari.o según los resultados del cultivo.
< 2 cm de celulitis sin abscesos profundos, osteomielitis o gangrena y
no presentan signos de toxicidad sistémica.
2.7. Tratamiento
Las infecdones amenazantes del miembro presentan celulitis de>
2 cm, linfangitis, abcesQs profundos, osteomielitis o gangrena, Existen seis recomendaciones sustentadas por estudios clínicos:
especialmente en un miembro isquémico. Evitar el apoyo: es esencial para la cicatrización e implica impedir
todo estrés mecánico sobre la extremidad injuriada. La estrategia efectiva
En las úlceras infectadas son útiles los cuLtivos para organismos
para evitar el apoyo más estudiada es el yeso de contacto total (YCT).
aeróbicos y anaeróbicos de material obtenido de la base de la úlcera
Su empleo requiere habilidad técnica y experiencia del profesional porque
limpia, por curetaje o por aspiración de secreciones purulentas. No son
puede producir complicaciones si no se aplica de manera apropiada o si
útiles los cultivos de escobillados o hisopados.
el seguimiento del paciente no es adecuado. El YCT está contraindicado
en pacientes con heridas infectadas o isquémicas.
2.5. Estudios de imágenes Otras estrategias incluyen el reposo en cama, yesos bivalvas y otras
botas de yeso, medios zapatos, sandalias y vendajes de espuma de
La evaluación radiográfica es necesaria si se sospecha osteomielitis goma. Salvo el reposo en cama todas requier1en el uso de muletas y
o en úlceras de larga duración. La radiografía simple puede mostrar gas ninguna es tan eficaz como el YCT. El método elegid'o depende de la
subcutáneo, cuerpos extraños, fracturas o cambios neuroartropáticos y experiencia del clínico. Si una !Úlcera no progresa adecuadamente a
erosión perióstica u osteótisis sugestivas de osteomietitis. Si el la cicatrizatián se derivará al especialista.
diagnóstico es incierto se requieren otros estudios de imágenes: el
Es necesario evitar el apoyo hasta dos semanas después de cicatri­
centellograma óseo es poco específico y el centellograma en triple fase
zada la úlcera. La descarga de la zona afectada y el retorno gradual al
con globulos blancos marcados es más específico pero difícil y costoso.
apoyo reducen el riesgo de desarrollar un proceso neuropático agudo o
La resonancia magnética nuclear es generalmente el procedimiento de
la recurrencia de la úlcera.
elección aunque ni nguna prueba diferencia claramente la osteomielitis
de la neuroartmpatía de Charcot activa. La biopsia de hueso puede DebridamientD: El debridamiento profundo de Los tejidos desvitalizados
brindar evidencias microbiológicas o histo~ógicas de infección y se la a intervalos frecuentes acelera la cicatrización de las heridas neuropátkas.
considerará s1 el diagnóstico de osteomielitis no ha sBdo clarificado por El debridamiento puede hacerlo en forma ambulatoria un miembro del
otros estudios. o cuando tratamientos previos sugieren resi,stencia de equipo de salud entrenado. Existen pocos datos que sustenten el uso del
los organismos infectantes a los antibióticos. La falla diagnóstica y el debridamiento enzimático u otras estrategias. No hay sustento para el
tratamiento inadecuado de la osteomielitis aumentan el riesgo de empLeo de técnicas de hidroterapia y su aplicación puede producir
amputación. maceracíón, infección o quemaduras. .

03
Vendajes: El ambiente húmedo de la herida es importante para la gente y la mayoría de estos pacientes requieren hospitalización y
cicatrización. Los vendajes deben prevenir futupos traumas, minimizar antibiótiooterapia parenteral (los agentes orales sólos no deben utilizarse).
el riesgQ d'e infección y optimizar el ambiente húmedo de la herida. Los En pacientes con signos de sepsis o disturbios metabólicos severos la
factores que determinan la elección de los vendajes incluyen el tipo de
infección representa un riesgo de muerte por lo que el tr-atamiento debe
herida, la presem:ia de exudado, las condiciones de la piel ,que rodea a la
iniciarse precozmente. Deben hacerse cultivos con material obtenido del
herida, la probabilidad de reililjuria y los costos. Los vendajes disponibles
fondo de la herida y de sangre El tratamiento empírico debe utilizar
incluyen los destinados a lograr absorción, 'hidratación y humedad. Los
antibióticos de muy amplio espectro, incluyendo cobertura para aeróbios
vendajes no reemplazan el debridamiento o la descarga de la zona
y anaeróbios gram-positivos, gram-negativos y organismos resistentes
afectada. comúnmente encontrados en la comunidad. Para infecciones menos
Manejo de la infecdón: La presencia de pus o dos o más signos de severas es suficiente la terapia de espectro más re€lucido. Los regímenes
inflamación (eritema, calor, sensibilidadl o dolor, ardor, induración) indican recomendados para ambas condiciones se detallan en el Capítulo 14. El
infección. El tratamiento antimicrobiano es un componente del buen tratamiento será reevaluado con los resultados del cultivo y antibiograma.
cuidado de la úlcera. Existen cuatro categorías de pacientes en quienes En infecciones serias debe monitorearse el estado hidroelectrolítico (Fig. 9).
debe considerarse la terapia antibiótica: Osteomielitis: Curar la osteomielitis solo con terapia antibiótica es dijiól
pero posible. El tratamiento será prologado (> 6semanas), preferentemente
Padentes con Lesiones cLinicamente no infectados: las evidencias
actuales no, apoyan la terapia antibiótica para estas lesiones. con 1-2 semanas de tratamiento parenteral. Se debe remover el hueso
infectado t tratando de no comprometer la función del pie, ya que ello
Infecdone5 no amenazantes deL miembro: Estas infecciones requieren aumenta la probabilidad de cura y acorta el curso antibiótico.
iniciar la terapia ,antibiótica inmediatamente después de diagnosticada Reconstrucción vascular: Una vez controlada la infección puede realizarse
la infección. En casi todas las infecciones leves y moderadas puede la arteriografía, incluyendo la visualización de los vasos del pie e intentarse
emplearse la terapia oral. Los antibióticos más comúnmente utílizados la reconstrucción vascular. Los re9ultados de la ciFugia vascular periférica
se indican en en el Capítulo 14. Los antimicrobianos tópicos no han sido son comparables con los logrados en pacientes no diabéticos. Cuando hay
bien estudiados y los agentes antisépticos y algunos astríngentes no, son pérdidas de tejidos extensas, maximizar el flujo arterial restaurando el pulso
recomendados por su citotoxicidad. Pacientes con problemas de absorción del pie, logra una cicatrización más rápida y duradera. .La revascularización
gastrointestinal, alergia Ll organismos resistentes a los agentes orales en pacientes con isquemia también elimina el dolor y a menudo permite
pueden necesitar tratamiento parenteral. recuperar mejor la función y el bienestar. Se ha demostrado que ta
Estos pacientes pueden tratarse en forma ambulatoria si se cuenta revascularización disminuye las amputaciones en todos los niveles,
con un antibiótico oral adecuado, un paciente confiable, dispuesto y reemplazándolas frecuentemente por cirugías del pie más conservadoras.
cap'az de seguir el tratamiento prescripto y un buen a,poyo familiar. El
Amputadón: La decisión de amputar se toma después de una extensa
tratamiento parenteral puede administrarse en el domicilio si se dispone
discusión paciente-equipo de salud y la comprensión de su magnitud
de un servicio de infusión experimentado. Los pacientes ambulatorios
para el futuro del paciente. En ocasiones es una determinación preferible
deben reevaluarse en el hospital o en la clínica dentro de las 72 horas
luego de un largo e infructuoso tratamiento. Una amputación bien
paral verificar la respuesta al tratamiento y cuando es posible, la eficacia
realizada y la rehabilitación exitosa pueden mejorar la calidad de vid:l
del antibiótico mediante cultivo y antibiograma. (Figura 8).
del paciente. Una vez decidida, el objetivo es hacer la amputación llhi e
Infecdones amenazantes del miembro: Constituyen un problema ur­ distat que pueda cicatrizar y posibilitar al paciente a una función óplilll.l.

() "0
Infección leve-o moderada
2.8. Tratamientos médicos asociados celul"itis > 2 cm

Normalizar la glucemia, controlar ~as comorbilidades, tratar el edema


y brindar trerapila nutricionaL apropiada son componentes importantes ---------_._-_. . . ¡;---_._._-----
~-----------------
Sin
Úlcera superficial Manejo ambulatorio

del tratamiernto y la prevenciór1l de las, úrceras deL pie. compromiso óseo oJo Reposo de la <ona lesionada Paciente confiable

.. art.lcul~r . . . Cultivo y an~iblograma Asistir en domicilio

Sin Isquemia significativa Trat.antlblotlco oral

2.9. Otras tecnoLogi'as Sin toxicidad sistemica I


~
empírico

r-'- -­
No hay estudi'os controlados ralllddmi'zados que apoyen el uso deL
r·-----··~:bridami~--~~:_o--- [·~~~~~~~~~n~~ ~:~~~el~~-:
oxígeno hiperbáriE:0 gara tratar Eas lesiones de p·ie neuropático. Sin I Curas locales inadecuada
embargo Sll1 uso es raz<!mable gara heridas severas amenazantes del ;
i-------
Cal<ado adecuado
-. Antibióticos LV.
.'0'- • _
[4\
miembro o amenazantes de la vi'da que mo hal'l respondido a otros
r-··--··· w
l
- - - - . - - - - - - - ,
¡
tratamientos, palrticularmente sil hay isquemia que no pudo corregirse i ManejO

l
Seguimiento estrecho
mediante procedimiemtos vascuVares. Nuevas tecnologías incluyen factores Educación preventiva
- - - - - - - _.._---------_...;
de crecimiento, equivalentes de piel viva, estimutación eléctrica, láser (Adaptado de Gibbons G.W. Eliopoulos GN.).
frío y calor. Ellas muestran un modesto beneficio cuando se asocian con
Figura 8. Infección del pie diabético no amenazante del miembro.
adec::uada clescarga de la zona, debridamiento y controL de la infección.

2.10. ÚLcera recurrente


Infección Severa
Se de.ftn'e C9mo toda solución de contincJidad que aparece en el mismo celulitis> 2 cm
Linfangitis
sitio de la úlcera origir'lOl más de 30 días después de su cicatrización. Si Edern¡¡
ap:31rece dentro de Los 30 días de cicatrización se la consideral parte deL
¡ ~
episodi o Q.f¡igi'naDo

--------------J
Úlcera profunda o Internación inmediata --

Pacientes con úlcera de pie cicatrizada tienen mayor riesgo de gangrena


Compromiso óseo y
Control clinico y
díabetológico
r Paciente no confiable
~oatenCión en domicilio
desarrollar ulceraciones futuras. articular Cultivo y antibiograma Inmunocomprometido
[ squemia significativa Antibiótico de amplio
Toxicidad sistémica espectrol
Muchas de las recomendaciones p'ara prevenir La úlcera inicial son _ _ _ _ _ _"_.-=-"----=-" • ~ 1 I

apropiadas para prevenir su recurrenda. Y

D~brid¡¡rniento quirúrgico

Amputación abierta

Pie de Charcot: El clínko debe saber que un pie tumefacto sin alteraciones Cuidados locales

Revascularización

radiográticas en un paciente conl diabetes, ¡iluede representar el estadio


inicial de un pie de Charcot. Si se presenta esta condición, se requiere ¡c¡;;,gia del pie
una observación cuicladosa y reposo aprowiaclo, elevación e i,nmovilización ¡ Calzado adecuado
. Manejo
del miembro. El d'Í'agnóstico diferencial entre un pie de Charcot, una
infección o una monoartritis suele ser difícit y requiere un seguimiento
minucioso. Los pacientes con pie de Charcot deben derivarse pues su
U eguimiento estrecho
Educación preventiva
-----~-------' (Adopt-,;do dI.'
Gibbons G. W, f/JopnrJlo.< G.M.)

tratamiento es tributario de especialistas con experiencia en eL tema. Figura 9. Infección del pie diabético amenazante del miembro o la vida.

7
.11]

Este final provisorio, dado que aún te resta transitar por varios capítu­del primer metatarsiano de más de 3 meses de evolución.

los, debe ser el momento de la reflexión sobre lo leído, de volver a las Al examen presenta disminución de la sensibilidad vibratoria y pérdida de

preguntas y respuestas del inicia, de revisar sus apuntes, los que' tomó sensación de protecciéln en ambos pies. Ausencia de reflejo aquiliano.

a medida qu~ leía y de realizar la síntesis personal e intransferible de Pulsos periféricos presentes y pies tibios.

Diagnóstico presuntivo: úlcera neuropática.

sus nueVO!i aprendizajes y de sus viejas ,certezas.


Diagnóstico diferencial: la localización de la lesión debajo de la cabeza del

Hágalo. Luego continúe con la s.iguiente unidad. primer metatarsiano, rodeada de callos y ausencia de dolor son características

de úlcera neuropática. La presencia de los pulsos tibia les posteriores y pedios

hace improbable la existencia de isquemia significativa.

Exámenes complementarios: Rx simple del pie para excluir osteomielitis.

• Bibliografia Si el diagnóstico eS incierto se requieren otros estudios de imágenes (RMN

es el pT0cedimiento de elección).

1. American Diabetes Asociación. Preventive Foot Car~ in Diabetes. Diabetes Care 27 (5tlppl Ante la sospecha de infección realizar curetaje del fondo de la herida para

1): 563-564. 2004. tomar muestra para cultivo y antibiograma.

2. AmeFican Diabetes Asociación: Consenws Development Conference on Diabetic Foot Wound Tratamiento: después de enviar una muestra y hasta' obtener el resultado

Careo Diabetes Care 22:135 t.-1360, 1999. del cultivo y antibiograma iniciar tratamiento empírico con antibióticos

3. Cédola N.V. Un modelo simple y práctico para la identificación del pie en riesgo de las de amplio espectro. Desbridamiento de la úlcera y tratamiento de las

personas con diabetes. Rev. Soc. Argentilil;) Diabetes 36:7-15, 2002.


callosidades.

4. Frykberg R.G., Veves A. Diabetic Foot Infections. Díabetes/Metabolism Reviews 12:255­


270, 1996.
Para lograr la cicatrización se evitará el apoyo. Prolongar esta medida

5. Mayfield J.A, Reiber G.E., Sanders U., Janisse D., Pogach L.M. ~reventive Foot Care in
hasta qui nce días después de cicatrizada la úlcera.

People with Diabetes. Diabetes Care 21:2161-2177,1998. Tratamientos asociados: normalizar la glucemia y controlar las

6. The Dabetic Foot. Proceedings of tlhe Fourth International Symposiumon The Diabetic comorbilidades.

Foot. Diabetes/Metabolism Researcll ami Reviews. 20 (Suppl1), 2004. Consulta con un podólogo para utilizar calzado adecuado. Educación

7. Zavala A.V. Nuevos aspectos del manejo- del pie diabético. En:Ruiz, M. Diabetes diabetológica para asegurar la cicatrización de la úlcera y prevenir la recurrencia.

Mellitus.Tercera Edición. Librería Akadia Editorial. Buenos Aires. Argentina. Capitulo 33,
págs. 480-489, 2004.

Caso Clinico 2
Caso Clínico 1
Paciente de 68 años de edad de sexo masculino con diabetes tipo 2 de 20
Paciente de 56 años de edad, sexo femenino, con diabetes tipo 2 de 8
años de duración. Registra antecedentes, de 2 hermanos con di~betes ti po
años de antigüedad!. Registra antecedentes familiares de diabetes tipo 2,
2. Fumador de 20 cigarrillos diarios durante 30 años.

hipertensión arterial y obesidad.


Motivo de consulta: sensación de calambres y dolor muscular localizado

Motivo de consulta: presenta úlcera indolora, de 1,5 cm de diámetro en la


en ambas pantorrillas, más acentuado en miembro inferior izquierdo,

planta del pie izquierdo, sobre calbeza del primer metatarsiano.


apareódos después de camina.r aproximadamente 200 m y desaparecen

Examen físico: peso: 75 kg; talla: 1,60 m; c. cintura: 95 cm; IMe: 29.
minutos después de interrumpir la marcha.

Aparatos respiratorio y cardiovascular s/p; presión arterial 155/90 mm Hg


Examen físico: peso: 85 kg; talla: 1,l0 m; c. cintura: 110 cm; IMC: 29.

acostada y 130/90 mmHg de pie.


Aparatos respiratorio y circulatorio: s/p. Presión arterial 145/90 mm de

Vida sexual: s/p.


Hg y soplo sobre arteria carótida derecha. Miembros inferiores color pálido,

[x;1Il1en de miembros inferiores: presenta una úlcera indolora de 1,5 cm de


con disminución de la temperatura en el muslo, pierna y pie izquierdos.

di:lllll'tlll en la superfide plantar, rodeada de callos, debajo de la cabeza


Pulsos: femoral izquierdo disminuido; poplíteo, tibial posterior y 'pedin

o 209
izquierdos ausentes c.on conservación de los del lado derecho.
fecdones en el paciente diabético.
Vida sexual: disfunción eréctiL.

Diagnóstico presuntivo: Enfermedad vascular periférica a predominio de


uía de diagnóstico v tratamient
lado izquierdo

Diagnóstico diferencial: los dos factores fisiopatológicos a considerar son

la enfermed'asd vascular periférica y la neuropatía periférica.


Daniel Stamboulian, Hugo Paganini y Mauricio Jadzinsky
Exámenes complementarios: a'l1áilisis de laboratorio: hematocrito (46%),

Leucocitos (7.S00 por mm 3), reCtlento de plaquetas (300.000 por mm 3),

glucemia (1'36 mg/dl), colesterol total (264mgjdl), triglicéridos (156mgj

dl), c'HDL (29 mg jdl), cLDL (160 mgjdl) y HbAIC (8.3%).

ECG: ritmo sinusal con bloqueo aurículoventricular de primer ~rado.


Objetivos de este móduLo
Indice tobillojbrazo: < 0,6 (lado izquierdo).

La velocidad de conducción no es fundamental ya que la disminución de


La propuesta de trabajo de esta unidad implica:
reflejos osteotendinosos y la pérdida de la sensación de protección son
Analizar las infecciones más comunes en personas con diabetes, sus
indicadores de NDP.

la disminución del pulso femoral, atlnque no característico de la EVP en la

riesgos, complicaciones, tratamiento y prescripción de antibióticos.


diabetes, suele observarse en diabéticos que fuman (caso del paciente),

que muestra sig,nos de arteriopatia arteriosclerótica y diabética.

Eco-Doppler no invasivo de vasos del cuello y de miembros inferiores

(obstrucción parcial de carótida derecha) y ausencia de flujo sanguíneo


Actividad previa
debajo del hueco poplíteo izquierdo.
Le proponemos que elabore un argumento que le permita sostener, en
Tratamiento: mejorar control m@tabólico y de los factores de riesgo
un hipotético ateneo médico en el cual usted es el disertante, la
cardiovascular asociados (hipertensión y dislipemia) (Plan de alimentación

y medicación si es necesario); dejar de fumar, antiagregantes (aspirina).


siguiente afirmación:
Indicar calzado adecuado y educación diabetológica con énfasis en los
«Las personas con diabetes padecen infecdones graves debido a
cuidados del pie de riesgo.
que su enfermedad produce alteraciones que los hace proclives a
contraerlas en un número alto de casos con desenlace fatal»
o
«Las infecdones más comunes en las personas con diabetes suelen
generarse a partir de lesiones en los pies, razón por la cual su prevendón
implica educar al padente en técnicas de au.tocuidado».
Haga el ejercicio de escribir sus argumentos y recién después comience
la lectura de este capítulo para cotejar su trabajo con nuestra informadón.
¡Adelante!

• Introducción
Si estamos de acuerdo en que «las personas con diabetes tiem:!n ma­

210 21
'(Ir

yor predisposición a padecer infecciones, algunas de las cuales adquieren Infecciones leves Infecciones severas
--,
formas de p~esentación graves, con altos índices de morbimortalidad»,
Piodermitis, erisipelas Celulitis necrotizante
entonces debemos encontrar el por qué... Onicomicosis Infección urinaria complicada
Esto se debe a que ellas tienen alteraciones inmunitarias que favo­ ! Muguet Otitis externa maligna
recen cierto tipo de infecciones. Dentro de las más frecuentes figuran Balanopostitis Pie diabético
la,alteraci6n de la función de los neutrrófilos, la adherencia leucocitaria, Vulvovaginitis Colecistitis enfisematosa
laJ quimiotaxia, y una disminución de la función de los linfocitos T. Infección urinaria no complicada Neumonia severa de la comunidad
Existe evidencia de que los pacientes que tienen valores ae glucemia --
adecuados logran mejorar las funciones defl si,stema inmune. Tabla 1. Infecciones frecuentes en personas con diabetes.

Por lo tanto, afirmamos que: Iremos describiendo cada una de ellas.


las personas con diabetes tienelil mayor predisposición a ¡padecer
illilfecciornes. Algunas adoptan formas graves. Dentro de las infeccio­ Epidemiología Es una infección frecuente. Entre el 1 y el 2% de los resfríos se
nes ~eves predominan las micosis superficiales y entre las severas el complican con sinusitis bacteriana.
pie diabético y las celulitis necrotizantes. - --- --- ---
Formas clínicas Puede adoptar diferentes formas: aguda de la comunidad,
intrahospitalaria, sinusitis del huésped con compromiso
inmunológico y fúngÍ(a. Los síntomas más frecuentes son dolor
facial, descarga purulenta por la nariz, fiebre y cefalea. Debe
Microorganismos que infectan a los pacientes dia1béticos sospecharse su presenda cuando un resfrío común se
Las personas con diabetes se infectan con microorganismos especiales. 1prolonga más de una semana.
----
Tienen mayor frecuencia de infecciones .causadas por Streptococcus ~­ Agentes Predominan S. pneumoniae (31%), H. infiuenzae no tipificabLe

hemolítico del grupo B, Klebsiella sp. y Salmonelta enteritidis. Padecen etiológicos (21%), M. catarrhalis, S. aureus, S. pyogenes, bacilos

gramnegativos y anaerobios.

entre tres y cuatro veces más infecciones que los huéspedes normales
causadas por Mycobacteri,um tuberculosis y son frecuentes las enfermedades Diagnóstico
Es clínico. Pude ayudar la radiografía pero se obtienen muchos
originadas por Staphylococcus aureus. Las infecciones por Candida sp. falsos negativos y positivos. El cultivo de secreciones de

nasofaringe no tiene utilidad. La tomografía computada ayuda

especialmente de piel y mucosas, son habituales en este tipo de pacientes. en los casos complicados en la sinusitis del paciente con

compromiso inmunológico.

Tabla 2. Sinusitis aguda.


Infecciones más frecuentes en personas con diabetes
Se presenta gran cantidad de infecciones que hemos clasificado,
desde el punto de vista práctico, como leves y severas. Entre ellas Se pueden indicar diferentes tratamientos para la sinusitis aguda.
consideraremos las infecciones respira~orias altas y bajas, las infeccio­ Habitua~mente, el antibiótico por vía oral es de elección. La amoxicilina,
l

nes urinarias, el pie diabético y la fascitis necrotizante. sola o con ácido clavulániw o sulbactam, logra una cura mayor del
80% de los pacientes tratados. Generalmente se obtiene éxito tera­
La Tabla 1 resume {o antedicho, presentando {os hechos en forma péutico con las cefalosporinas de segunda generación (acetit
ordenada para faólitar su comprensión. cefumxima). La azitromicina, las cefalosporinas de tercera generación

213
y actualmente las quinolonas de tercera generación, como la
levofLoxacina y la telitromicina, son alternativas válidas para el
tratamiento. Ciprofloxacina
Ceftazidi ma
200 mg cada 12 h, EV
2 9 cada 8 h, EV
Debe combinarse con el
tratamiento tópico y/o
I·I¡
lmipenem 500 mg cada 6 h, EV quirúrgijco de drenaje.
Meropenem 500 mg cada 8 h, EV
Amoxicilina 500 mg cada 8 h, VO El tratamiento debe
Tabla 5. Otitis externa maligna: dosis e intervalos de los óntibióticos.
Amox¡cilina-acido clavulánico 500 mg cada 8 h, VO durar entre 10 y 14 días
Levofloxacina 500 mg cada 24 h, VO 7 días.
.la ,otitis externa maligna es una entidad rara, grave, y generalmente
Tabla 3, Sinusitis aguda: dosis en intervalos de los antibióticos. se presenta en forma avanzada en la primera consulta por retraso del
diagnósticQ. EL tratamiento inicial debe incluir cobertura frente a P.
aeruginosa.
la sinusitis aguda es una infección frecuerüe que aparece habitual­
mente como complicación de los resfrios. Dentro de los distintos
esquemas de tratamiento, las quinoLonas de tercera generación son Epidem'iolog'ia El 25% de los padentes con faringitis tiene

Streptococcus~-hemolítico del grupo A en las fauces.

muy recomendables por su espectro antimicrobiano y su administra­ --- --- I~


ción en 'Una sola toma diaria. Formas cl'inicas No existen signos cl'inicos patognomónicos de

faringitis estreptocódca. La congestión, el edema, las


1
1I
petequias y las membranas sobre la faringe son signos li1ue
1I
Epidemiologia Es una infección rara, típica de personas con diabetes se encuentran en proporción variable. Habitualmente
presentan fiebre, odinofagia y adenopatía submaxilar
Formas cL'inicas
l.
y con alta mortalidad.
Se presenta con dolor, otorrea y pérdida de la
- dolorosa.

audición, sin fiebre. Generalmente, el diagnóstico se


retrasa y se complica con una intensa celulitis y
edema del canal auricular, con extensión de
Agentes etiológicos Es causada por el Streptococcus
Diagnóstico
- -- ~-hemolítico
-
Puede confirmarse mediante cultivo de fauces.
del grupo A.

Las pruebas rápidas de diagnóstico (prueba de látex) son


.
I
osteomielitis a la base del cráneo. útiles y se dispone rápidamente del resultado. Tienen el
-- - inconveniente de producir algunos falsos positivos y
Agentes etiológicos La Pseudomonas aeruginosa es el agente causal.
r1egativos. La detección de antiestreptolisina en sangre no
Diagnóstico La rápida consulta al otorrinolaringólogo y la realiza· tiene valor diagnóstico.

I ción del examen otoscópico son básicas para el


diagnóstico. La resonancia magnética es un método
útil para el diagnóstico del compromiso intracraneal.
Tabla 6. Faringitis estreptocócica.

Tabla 4. Otitis externa maligna. La pel1iólina sigue siendo la droga de elección para el tratamiento de
la faringitis. La clindamicina, las cefalosporinas y los nuevos macrólidos
son alternativas posibles. El objetivo fundamental del tratamiento es
El tratamiento debe incluir el drenaje quirúrgico de la lesión y prevenir la aparición de complicaciones no supurabvas (fiebre reumática)
dlltibirlticos. Se prefiere utilizar ciprofloxacina, inicialmente por vía y supurativas (abscesos periamigdalinos), y disminuir la e~iminación del
e'lll/nv e'lloS<l, ceftazidima o imipenem. patógeno por las fauces. •

215
Penicilina V 500.000 UI cada 1-12 h,VO 10 Amoxicilina-árido clavulánico o sulbactam 500 mg cada 8 h, VD, 7 a 10 días
Penicilina Gbenzatínica 1.200.000 UUM Única dosis Levofloxacína 500 mg cada 24 h, VO, 7 a 10 dias
Roxitromicina 300 mg cada 24 h 10 Cefuroxi ma 500 mg cada 12 h, VD, 7 a 10 días
Azitromicina 500 mg cada 24 h 5
Tabla 9. Exacerbaciones agudas de la bronquitis crónica: dosis e intervalos de los antibióticos.
Claritromicina 500 mg 2 veces por día 10

rabia 7. Faringitis estreptocócica: dosis e intervalos de las antibióticos. Las exacerbaciones agudas de la bronquitis crónica aparecen con
frecuencia en la práctica clínica. El tratamiento debe dirigirse a mejorar
Las faringitis estreptocócicas deben confirmarse mediante un exa­ la mecánica ventilatoria del paciente y a solucionar los factores
men de fauces (método rápido del látex o cultivo) para no tratar empí­ causales. Los antibióticos en esta patología están indicados para las
ricamente muchas que son virales. exacerbaciones de mediana intensidad y severas.

Epidemiologia La bronquitis crónica se define como tos y expectoración Epidemiologia Los pacientes diabéticos padecen con mayor frecuencia
durante tres meses por año, al menos por dos años sucesi­ infecciones respiratorias bajas y éstas son más graves que
vos, sin que hayan sido originadas por otras causas tales las que afectan a quienes no padecen diabetes.
como tuberculosis o bronquiectasias.
Formas Puede presentarse como «no complicada» o puede ser «grave»
Formas Habitualmente trastornos pulmonares crónicos, con comien­ clinicas y requerir hospitalización. Generalmente los pacientes tienen

clinicas zo súbito de fiebre, aumento de la expectoración, cambio de fiebre, tos, expectoración y diverso grado de dificultad

, coloración de la misma y con diverso grado de compromiso respiratoria. El compromiso sistémico se ve con frecuencia.

sistémico y respiratorio.
Agentes Agentes S. aureus, Hinfluenzae b, bacilos gramnegativos, M.

Generalmente son desencadenadas por el cigarrillo, la polución


etiológicos etiológicos pneumoniae, C. pneumaniae y virus de la influenza.

ambiental, los alergenos o el asma. Los virus representan un


tercio de los agentes etiológicos (influenza Ao S, Diagnóstico Es clinico y se confirma con radiologia. En algunos

parainfluenza, coronavirus o rhinovirus). Entre los agentes no pacientes, el cultivo de secreciones respiratorias y los

virales predominan el S. pneumoniae, H. influenzae, S. aureus, I hemocultivos facilitan el diagnóstico microbiológico.

Candida sp. y los bacilos gramnegativos, aunque su rol en la


patogenia de las exacerbaciones no está claro. Tabla 10. Neumonía de la comunidad,
Es clinico. La indicación de estudio bacteriológico del

Diagnóstico esputo es controvertida.

Los pacientes con neumonía complicada y que no fueron interna­


Tabla 8. Exacerbaciones agudas de la bronquitis crónica. dos pueden manejarse con un macrólido (claritromicina, roxitromicina,
azitromicina) o una nueva quinolona (lev.afloxacina, gatifloxacina,
La base del tratamiento es el cuidado general del paciente. La moxifloxacina) por vía oral. También puede utilizarse telitromicína como
alternativa de las nuevas ~ 'V' •. "J..c.¡Q"!J;. ~
administración de amoxicilina más ácido clavulánico, cefalosporinas,
nuevos macrólidos o nuevas fluoroquinolonas ~a obtenido buenos Los internados deben recibir ceftriaxona junto a un nuevo macrólido
resultados en este tipo de cuadms. o levofloxacina endovenosa.

216 217

Epidemiología En las infecciones urinarias más del 80% de los diabéticos


Ceftlriaxona I 2 9 cada 24 h, EV o 1M
1tienen compromiso renal. 1I
Roxitromicina 300 mg cada 24 h, VD (vía oral) Formas Puede adoptar dos formas: la infección urinaria no
clínicas complicada (sin compromiso renal y causada por patógenos
Azitromicina 500 mg e~ primer dia y~uegp 2501 mg por día, durante 5 días, ve habituales), y la complicada (con compromiso renal, causada
Levofloxacilíla 500 mg¡ cada 24 h, va () EIl por patógenos poco habituales). Esta última puede ser grave,
como la pielonefritis enfisematosa, con fcrmación de gas y
Claritromicina 500 mg¡ cada 12 f¡
causada en un 75% de los casos por E. eoli, que a menudo
Telitromicina 800 mg¡ cada 24 h VD requiere nefrectomía: o los abscesos perinefríticos ql!le deben
drenarse para ser curados. Las infecciones fúngicas son
Tabla 11. Neumonía de la comunidad: dosis e intelYolos de [os ontibióticos. frecuentes en este tipo de pacientes.
-- --
Microbiología 1 E. [01i o Proteus sp. predominan en las no complicadas, y la P.
-
la neumoní,a de La cOlíllunidad puede adoptar formas más gra- aeruginosG, otros bacilos gramnegativos y Candida sp. en tas
ves en Los pa<iientes diabéticos. complicadas. El S. aureus predomina en los abscesos
perinefriticos.
Es nece5ario recordar y eslf.U alerta, respect@ a que... Diagnóstico Se hace con el urocultivo. En los casos de abscesos o
pielonefritis enfisematosa, el agente causal se aisla en la cirugía.
Ciertas. infecciones específicas como la tuberculosis suele presen-
tarse con relativa frecuencia en personas. con diabetes. En estos casos Tabla 12. Infección urinan-a.
es ne'cesario hacer ~a interconsulta y derivación con neumonó'logos o
tisiólogos y el médico de cabecera s0lo debe ha'cerse cargo de optimizar
el control clínico y, metalDólicQ de la diéJJl!Jetes. Las infecciones urinarias complicadas (pielonefritis) deben tratarse
inicialmente por vía parenteral. La ceftdaxona (1 g IM o EV cada 24
Le hemos presentado las características, la forma de presentación y el horas) representa una buena opción.
tratamiento de las enfermedades respiraforias altas y bajas. Repáselas Las quinolGnas EV (ciprofloxaóna o levofloxacina) son alternativas
y compare nuestra propuesta con:;u conrducta habitual frente a cuadros válidas. Luego de dos o tres días y con buena respuesta terapéutica,
similares. puede completarse el tratamiento con quinolonas por vía oral (duración
aproximada: 14 días)
A continuación te des.cribiremos las injecd@T/rts relacionadas con el Las baE:teriurias aslntomáticas en pacientes diabéticos deben tra-
tracto' urinario. tarse. Si hay recurrencia Luego de 10 a 14 días de tratamiento, es
Las infecciones urinarias en el waciente diabético deben recomendable indicar profilaxis prolongada (3 a 6 meses).
categorizarse adecuadarJilente para cdefinir el tratamiento y su duración. En tas infecciones urinarias recurrentes, después del tratamiento
Las formas no complicadas corresponden a los cuadros de cistitis de se indica pnufilaxis con nitrofuranos, TMfl-SMX o quirilOlonas durante
la, mujer. Las drogas de elección paral el tratamiento empírico son las tres meses. En general, se administran tres veces por semana a la
f1uor8qulnoCo.nas (nQrfloxaCÍlna, ciprofloxacina o Levonoxacina, entre noche. Si hay recaída, se r,ecomienda la prolongación de la profilaxis
otri'ls) y la duración d'eltratamiento es de 7 días. rota'ndo los esquemas.

219
Las infecciones urinarias en el hombre siempre merecen una eva- A continuación observará una tabla que describe las caracteris6cas
luación uro lógica para co nfirmar o descartar factores Ipredisponentes. del pie diabético y las lesiones e infe,cciones que suelen asociarse. En
el Capítulo 13 describimos en detalle esta patología.
Las infecciones urinarias en lOs pacientes diabéticos son fre-
cuentes e importantes. Deben categorizarse adecuadamente para Epidemiología! Es la forma de infección más ~recuente que compromete la
determinar la vía de administración y la duración de los esquemas piel y las partes blandas.
antibióticos.
Formas Existen dos formas: la no complicada (con úlcera pequeña,
clinicas área de celulitis menor de 2 cm, sin fascitis, absceso u
A continuación descn"biremos las caracterís6cas pn'ncipales de las in- osteomielitis, sin isquemia y con buen control metabólico y
fecciones urinarias para que usted pueda categorizarlas y de esta la complicada (con úlcera profunda, más de 2 cm de
manera facilitar la toma de decisionr!sterapéuticas pertinentes. celulitis, sospecha de infección profunda, isquemia y mal
control metabólico).
r- ---
Infección urinaria fÚiflg,ica en pacientes d,iabéticos Agentes En la forma no complicada predominan los cocos
i\' Difícil diagnóstico diferenciaL entre cQlo,nización etiológicos grampositivos ae~obios (S. aureus y Streptococcus sp.). En
la complicada, generalmente son poli microbianas (aerobios y
!! Dificultad diagnóstica entre IU baja y alta
bacilos gramnegativos, incluida P. aeruginosa.
Opciones terapéuticas en IU baja:
-Anfotericina (EV) monodosis (0,3 mg/kg)
r-
Diagnóstico l Es clin,ic;La radiografía ayuda para descartar osteomielitis.
Se debe tomar una muestra de la lesión para microbiologia.
-Fluconazol (oral) 200 mg, y luego 100 mg/d {jurante 5 días
Tabla 13, Pie diabético (ver Capítulo 13).

Infección urilíllaria: antibióticos de uso parenteral El manejo ter.apéutico se basa en la administración de antibióticos
y el drenaje correctode la lesión.
• Ceftriaxona
• '~-lactámicos con inhibidores de ~-lactamasas En el caso deL pie diabético no complicado, eL tratamiento puede
hacerse en forma ambulatoria, con cuidado local de la lesión y admi-
• Otras cefaLosporinas
nistración de antibióticos orales. Se prefiere utilizar una nueva quinolona
.. Ami nCDgLucósidos como la Levofloxacina o ciprofloxacina con metronidazoL
,ij Otros
fn los casos de pie diabético complicado, el manejo debe hacerse
con el paciente hospitalizado. Corresponde la consulta con el cirujano
Infecdólil urinaria: antibióticos de uso oral vascular y el tra'umatólogo, y drenar adecuadamente la zona. Se
" TMP-SMX administrarán antibióticos sistémicos como ampicilina-suLbactam,
cLindamicinajunto a ceftriaxona o ciprofloxacina o levofloxacina. Si el
<l\ Cefalospori nas
paciente se encuentra grave, en ocasiones puede admi nistrarse
'" Ouinolonas imipenem o meropenem .
.Jo Nitrofuranos
La duración del tratamiento estará de acuerdo con la evolución y la
.. IHactámicos con inhibidores de I~-lactamasas presencia o no de Osteomielitis. •

21
fascitis necrotizante
Antibióticos Dosis e intervalos Observadones La fasdtis necrotizante constituye una urgencia infectoLógica
• Infección leve que requiere un tratamiento rápido y clínico-quirúrgico combina-
Clindamicina 300 mg cada 6 h, va Agregar antisépticos locales do. La administración de peniciLina junto a clindamicina y
Ci profloxaci na 750 mg cada 12 1:1, va gentamicina es la terapia empírica recomendada. La combinación
Evaluar drenaje
de ceftriaxona y clindamicina o metronidazol es una alternativa a
• Infesción grave
utilizar. la cirugía amplia de drenaje es esencial para salvarLe la
Ampicilina-sulbactam I 3 9 cada 6 h, EV
vida aL paciente y, en aLgunos casos, se necesita incluso la ampu-
Ciprofloxacina I 400mqcadal 2 h, EV taci ón. Puede complementarse con la admi ni straciórl de sesiones
Levofloxaci na
de cáma,ra hiperbárica.
Clindamicína
Ertapenem I 1 9 cada 24 h 1M o EV
Tabla 14. Antibióticos y pie diabético.
fasdtis necrotizante: dosis e intervalos de los antibióticos
El manejo del pie diabético es multidisciplinario y se b~sa en el
tratamiento quirúrgico y la administración de antibióticos de amplio
espectro. Ceftriaxona 2 9 cada 24 h, EV Debe complementarse el
Clindamicina 900 mg cada 8 h, EV tratamiento con el
Epidemiología Es una infección grave con 40% de mortalidad. I 'Gentamicina 5 mgjkgjdía cada 24 h, EV drenaje de la zona
afectada.
Penicilina 24 millones Ul/día cada 4-6 h EV
Formas clínicas Compromete el tejido celular subcutáneo y desde all! se
extiende a la fascia. Se localiza habitualmente en los
miembros inferiores, la pared abdominal o el periné. Tabla 16.
Generalmente los pacientes tienen dolor, crepitación y
flogosis con necrosis o amJ!lollas en la zona. Los signos de La fascitis necrotizante es una urgencia infeetológica. Requiere la
toxicidad sistémica están habitualmente presentes.
I __ participación de un equipo médico que esté famUiarnzado con este tipo
Agentes etiológicos Puede adoptar una forma monomicrobiana o de patologías. El debridamiento ampl~o es la base del tratamiento.
I polimicrobiana.
La forma monomicrobiana es causada por el Streptococcus Llegamos al final de esta unidod. Le hemos brindado un panorama
~-hemolítico del grupo A. En la polimicrobiana participan
los anaerobios, los bacilos gramnegatívos y, en ocasiones,
sobre las infecciones en personas. con diabetes, sus riesgos, trata-
otros cocos grampositivos. mientos y prescripciones farmacológicas.
Diagnóstico Es clínico. Usted ahora podrá cotejar los argumentos que esgrimió al realizar la
La radiografia de la zona puede evidenciar aire en el tejido actividad inicial con los que hemos desorrollado hasta aquí.
celular subcutáneo. Se deberá tomar una muestra
quirúrgica de la zona para confirmar o descartar la Después de hacerlo tómese un descanso si lo precisa.
presencia de C. perfringens.
1/;11/0 J 5. C/.'Iulitis. Lo estaremos esperando en el próximo capítulo.

223
Bibliografia Realiza tratamiento alimentario, no hace actividad física y está medicada
con glibenclamida 10 mg/día y 850 I11g de metformina dos veces por día.
1. American Thoracic Society. 8. Standards for the diagnosis and care of patients with chronic Los C0ntroles últimos de Hba1c dieron un valor de 7,3 %, aunque su
obstructive pulmonnry disease. Am J Respi~ (rit Care Med. 152:S77-121,1995.
automonitoreo es esporádico.
2. Barlett J. Dowell $F, Mandell LA, File 1M Jr., Musher OM, Fine MJ. P(actice Gl!lidelines for
the ,Management of Community-Acquired Pneumonia in Adults. Clin Infec IDis. 31:347- Motivo de Consulta: Infecciones urinaria, aparentemente bajas, que se repiten
82,2000. con alguna frecuencia. Disuria y polaquiuria, en alguna ocasión presentó un
3. Bartlett JG. Lower respiratory infections. IOCP guidelines. 5:147-67,1996. sindrome febril de escasa intensidad.
4. BisnoAL, Gerber MA, GwaltneyJM Jr, Kaplan EL, Schwartz RH. Diagnosis and management Examen ftsico: Peso 72 kg; talla 1,67 m; circunferencia de cintura 98 cm;
of group Astreptococcal pharynl'jitis: a lpractice guideline. [li 11 Infect Dis 25:574-83,1997. IMe 25,9. Aparato respiratorio s/p; Aparato circulatorio: Presión arteriall
5. Calvet HM, :roshik¡¡wa liT. Infections in diabetes. Infect Dis Clin North Am. 15:407-21,2001. 145/70 111m Hg. Disminución de los pulsos pedios. Abdomen globuloso, a lal
6. (rane M, Werber B. Critical pathw¡¡.y approach too diabetic pedal infecti'ons in a palpación no manifiesta alteraciones. Puño-percusión renal negativa. Dis-
multidisciplinary setting. J Foot Ankle Surg. 38:30-3.1999. minución de los reflejos ¡patelar y aquiliano y de la sensibilidad vibratoria.
7. Gwaltney JM, Jr. Sinusitis. In; Milndel GL, Bennett JE, Dolin R. Principies and Practice of Diagnóstico presuntivo: Infección urinaria baja.
lnfectious Diseases. 5th Edition. New York: Churohill Livingstone Inc.; 2000: capítulo 51.
Diagnóstico diferencial: Debe hacerse con la infección uri naria baja o alta.
8. Jeffcoate WJ, 'Harding KG. Diabetic foot ulcers. lancet 361:1545-51,2003.
En esta última, el cuadro presenta decaimiento, deterioro del estado general,
9. 'Klein JO. Otitis Externa, Otitis Media, and Mastoiclitis. In: Mandel Gl, Bennett JE, Dolin
R. Principies and P,ractice of lnfectious Diseases. 5th Edition. New York: Churchill Livi ngstone
fiebre y elevación de la glucemia acentuada.
Inc.; 2000: Cilpitrulo 50. Los exámenes de laboratorio solicitados incuyeron: Glucemia (143 mg/dL),
10. Mandel GL, Bennett JE, Dolin R. 1. PrincipIes and Pr'lctice of tnfectious Diseases. 5th HbA1c (7.3%), Colesterol (208 mg/dL), cLDL (121 mgjdL), cHDL (44 mg/
Edition. New York: Churchill Livingstone Inc.; 2000. dL), Triglicéridos (145 mg/dL) y Creatininemia (1.1 mgjdL), Orina completa.
11. Mandell LA, Bartlett JG , Dowell SF, File TM Jr., Musher DM, Whitney C. Update of Practice (leucocituria) y Cultivo de orina (positivo >100.000 colonias de E.Coti, sen-
Guideliñes for the Milnagement of Communíty-Acquired Pneumonia i~ Immunocompetent sibles a diversos antibióticos).
AdUilts. Clin Infect Dis. 37:1405-33,2003.
Exámenes (omplementarios: Ecograña de vías uri narias (i ndemnidad de
12. Naber K, Bergman B, Bishop Met al. EAU guidelines for the management of urinary and
male genital tract infections. Urinary Tract Infection (UTI) Working Group of the He~lth
ambos riñones y en vejiga la presencia de residuo urinario).
Care Office (HCO) of the Emopean Associatiofll of Urology (EAU). Eur Urol. 40:576 _ iagnóstico: Infección urinaria baja. •
88,2001. Tratamiento: Optimización deltratamiento glucémico (HbAlc < 7.0); evitar
13. Patterson JE, Andriole VT. Bacterial urinary tract infections in diabetes. Infect Dís Clin períodos prolongados sin orinar para disminuir riesgo de residuo urinario;
North Am. 11:735-50,1997. antibióticos (según resultado del cultivo) durante 7 a 10 días y repetición
14. Stone DR, <¡orbach SL. Necrotizing fascitis. The changing spectrum. Dermatol Clin del cultivo una o dos semanas luego de finalizado el tratamiento.
15(2):213-220,1997.

Caso (Linico 2
Caso Cl1nico 1
Paciente masculino de 61 años de edad, con diagnóstico de diabetes tipo
Paciente femenina de 47 años de edad, con diabetes tipo 2 diagnosticada ·2 desde hace 12 años, descubierta en CClIincidencia con un infarto agudo
hatee 7 años durante un examen. de rutina, sin síntomas ni manifestaciones de miocardio de cara diafragmática.
previas. Antecedentes familiares: No tiene antecedentes de diabetes, padre
Antecedentes familiares: No tiene antecedentes de diabetes, padre lJipertenso, madre fallecida de accidente cerebrovascular. No tiene hermanos
hipertenso. ni hijos.
Antecedentes personales: 1 hija, nacida a (os 24 años de edad, con bajo Antecedentes personales: Ex fumador de 1 paquete de ci~arrillos diario~,
[J(~SQ 2.100 9 vía vaginaL Amigdalectomia, apendiceetomía, nódulos mamarios no recuerda enfermedades quirúrgicas y en los últimos 2 años presenta
~lililtera'les, con biopsia que demuestran fibroadenomas. -laudicación intermitente a los 300 metros de marcha. CQndi(~il:)1l

25
socioeconómica precaria. Diabetes e
No realiza' tratamiento ali,mentario, 'no hace actividad física y está medicado
con glibenclamida 10 mg/día, l(i)$ que ingiere en forma esporádica. No hipertensión arterial
trae estudios pr'evios de ningún tipo.
Motivo de Consulta: Hace 12 días observa emojecimiento y edema en la
zona del hallux del pie izq¡uierdo; hace 6 días se produce apertura espontánea Guillermo Burlando
de la lesión con eliminaeión de pus sin otras manifestaciones clínicas.
Examen físico: Peso 81 k§; talla 1,70 m; circunferencia de cintura 120 cm;
IMC 28. Aparato respiratorio: sipo Aparato circulatori0: Auscultación • Introducción
cardíaca s/p, presión arterial 160/90 mliTl Hg, ausencia de los pulso pedios
y disminución de los tibiales posteriores. Abdomen globuloso sin manifes- La presencia de hipertensión y diabetes s.ignifica una aSOClaClOn
taciones anormales a la palpación. Disminución de los renejos patelar y
preocupante no 50lo por el riesgo que representa para el desarrollo de la
aquiliano y de la sensibilidad vibratoria. Pérdida de la sensibilidad al
mon0filamento. En la zona del hallux del pie izquierdo se observa una enfermedad cardiovascular sino también por su impact0 sobre el desarrollo
lesión ulcerada ,de 1 cm de diámetro, de eSCasa profundidad, sobre un y progresión de las compli(aciones micro y macroangiopáticas de la diabetes.
fondo edematoso e inflamatorio que elimina una sustancia amarillenta.
Diagnóstico presuntivo: Celulitis en hallux del pie izquierdo.
Diagnóstico diferencial: Debe hacerse con la i,nfección de partes blandas Propósitos de esta unidad
y osteomielitis. En esta úlUma, el cuadro se presenta en forma más tórpida
que en los de partes blandas solamente y en el caso de producirse .. Colaborar con usted en la reflexión y el análisis de las implicancias
eliminación espontánea de material purulento, se observa una fístula. de la HTA en relación con la diabetes, como así tamhién sobre las
Los ,exámenes de laboratorio solicitados incluyeron: Glucemia (222 mg/ formas de tratamiento más adecuadas.
dL), HbAlc (8,9%), Colesterol (208 mg/dL), cLDL (121 mg/dL), cHDL (44
mg/dL), Triglilcéridos (145 mg/dL) y Creatininemia (1.1 mg/dL), Cultivo de
orina negativo. 9.7-00 Leucocitos, con una eritrosedimentación de 53 mm. • Actividad inicial
El examen de la lesión con una sonda roma no muestra trayecto fistuloso.
Como exámenes com plementarios se realizaron: radiografía de la zona de Como lo hemos hecho en las unidades anteriores, le proponemos una actividad
lesión (calcificaciones arteriales sin tlesión ósea e indemnidad de la cortical que procura recuperar sus conocimientos, evaluarlos y de esa maneTO ayudarlo
del metatarsiano y d'e la falange). Doppler arterial (disminución del índice
tobillo/brazo significativa en ambos miembros inferiores). Cultivo y a reflexionar sobre la actualidad y pertinencia de los mismos.
antibio~rama de muestra obtenida del fonao de la lesión (con gérmenes • ¿Son los valores de TA establecidos como normales para una persona
sensibles a cidosporinas). sjn diabetes, iguales que para una con diabetes?
Diagnóstico: Celulitis de hallux con neuropatía y vasculopatía periférica.
Tratamiento: Dada la condi,ción socicoeconómica del pacie¡:¡te se dispuso .. ¿ Podría. enumerar las causas determinantes de la HTA y vincularlas
su internación. Administración de insulina para controlar su glucemia, con la diabetes?
debridamielílto inicial de la lesión repeti,do cada 5 día,s y cefalosporina con
dindamicina. Su tensión arterial se medico con beta,bloqueantes e • Recuerde las complicaciones más comunes asociadas a la diabetes y
inhibildores de la enzima convertidora. !..Juego de 9 días de internación se su mecanismo de producción.
da el alta con franca mejor1a de ta lesión para su seguimiento por Consultorio
xterno. Indicación de educación cQn énfasis en cuidados del pie para ¿Cómo debería ser un algoritmo de tratamiento para una persona con diabete.~
prcv~n,ir recurrencias 'Y utilización de calzado adecuado. e hipertensión? Diséñelo y al terminar la lectura de esta unidad POr11C1
confrontar su propuesta con la que nosotros le presentamos.

227
(U!ílr

• Diagnóstico • aumento de lal reabsorción tubular de sodio,


En su último informe el Joint Nationa! Committee VII elabmó una • altera€iones de sistema' simpático adrenérgico,
nueva clasificación de la presión arterial para personas adultas (Tabla 1'). • aumento de lal reactividad vascular,
En el mismo documento all igual que en las consideraciones del Primer
Consenso Latinoamericano de Diabetes e Hipertensión Arterial se estableció • aLteración del transporte íónico,
que en personas con diabetes la presión arterial sistólica nO' debería • reducción de [a actividad Ca-ATPasa de membrana y aumento del cal-
exceder de 120 mm de Hg. y 80 mm Ila diastólica, determinadas por lo cio intracelular con aumento de la contractilidad del músculo liso
menos en tres ocasiones después de cinco minutos de descanso y en vascular,
posicióm sentada. Avalan estas cifras las evidencias del estudio HOT que
demostró que con una presión diastólica menor a 83 mm de Hg disminu- • hiperplasia e hipertrofia de las células musculares lisas que reducen
el diámetro vascular y provocan un aumento de la resistencia
yen notablemente las lesiones cardiovasculares.
periférica.

Clasificación Presión Sistólica Presión Diastólica


(mm Hg) (mm Hg)
Factores genéticos ,
Normal < 120 < 80 Factores ambientales J
Prehipertensión Obesidad
120-139 80-89
--- Sedentarismo
- ,--~

Hipertensión Grado 1 140-159 90-99


---11--
Hipertensión Grado 2 ~ 160 ~ 100 [~sUlino~r:sistencia I
Tabla 1. ClasificaCIón de la presión arterial en adultos. (Igualo mayor de 18 01;05; + The JNC 1 Report). Hiperinsulinismo
--*--"
En el Monitoreo Ambulatorio de la Presión Arterial (MAPA) estos L HiPera~tividad I
valores son de 125/75 mm Hg durante el día y 120/70 mm Hg durante
el sueño. El primer Consenso Latinoamericano de Diabetes e Hipertensión
Arterial recomienda evaluar anualmente con MAPA a todo diabético
normotenso por lo menos en una ocasión.

Figura 1
Etiopatogenia
La Figura 1 resume la patogenia de la hi pertensión arterial en personas Dado que en situaciones de hiperinsulinemia sin insulinorresistencia
con diabetes. Allí se aprecia que la hipertensión es de origen multifactorial (insulinomas) no hay aumento de la presión arterial, mientras que en las
y aunque persisten diferentes opiniones, hay factores sustentados con etapas tardías de la diabetes tipo 2 en que hay insutinorresistencia sin
evidencia·s indiscutibles. Por ejemplo la hiperinsulinemia, asociada a hiperil11sulinemia suele verificarse asociación con hipertensión, proba-
numerosos cambios metabólicos y celulares, wntribuye a generar la blemente la insulinorresistencia es quien juega el papel principal en la
hipertensión arterial a través de: patogenia de la hipertensión.

228 229
Otras aLteraciones que participan en La génesis de la hipertensión DesClibiremos ahora esas complicaciones. Lo haremos en forma sintéti-
arteriaL en Las personas con diabetes son: ca, a modo de presentación, dado que cada una de ellas se especifica en
;) La actividad deL sistema renina-angiotensina, cuyo aumento pro- detalle en otros capítulos siguientes tal como lo explicamos en el Módulo O.
mueve una respuesta ¡:¡resora mediada por La angiotensina n. La Cardiopatía
variabiLidad de Los niveLes de actividad de La renina pLasmática
descriptos (altos y bajos) en personas con diabetes estaría reLacio- Los pacientes diabéticos con hi,pertensión tienen una alta inciden-
nada con eL grado de controL gLucémico. cia de enfermedad coronaria. Se supone que en estos pacientes, aL
daño de La estructura miocárdica ocasionada por la hipertensión se Le
• La glicosüación sostenida de proteínas vasculares y de apoproteínas, suma la disfunción ae La céLula cardíaca atribuibLe a La diabetes. Esta
como así también La formación de productos de gLicosilación avan-
asociación conduce a una cardiopatía congestiva prematura, infarto o
zadal (AG E), influyen sobre La elasticidad de la pared vascuLar (ver muerte súbita (ver Capítulo 12).
Capítulo 7).
Como se' sabe el paciente diabético puede no percibiré dolor precordial,
• Ciertos estímulos, como ta carga de sodio, muestran una disminu- (infarto silente), hecho que dificulta su detección y tratamiento precoz.
ción deL factor natriurético atrial provocado por la hiperilílsuLinemia. Las características clínicas y anatómicas de la cardiopatía diabética se
• Estudios modernos han demostrado la participación de factores describen en et Capítulo 12.
genétic<Ds, ta~es comoanorrnalidades en el gen del angiotensinógeno. Nefropatía
El efecto de la angiotensina sobre la producción de radicales Libres
y el efecto de estos últimos sobre La respuesta de Los tejidos a la
La hipertensión favorece la aparición temprana de microalbuminuria
insuLina podrían expLicar la reLación entre insulinorresistencia e y La agrava (ver Capítulo 8). Ocurre en eL 15 a 20 % de Los hipertensos y
hipertensión a,rten.al en personas con diabetes (ver Capítulo 2). como se menciona en otros capítuLos, La microalbuminuria es un importante
predictor de la aparición de La nefropatía y de disfunción endoteLiaL.
Se debe considerar también la posible existencia de una estenosis de
Mientras qUE:! la hipertensión es secundaria a La nefropatía en eL
La arteria renal que sería 3,5 veces más frecuente en pacientes diabéticos
diabético tipo 1, en la diabetes tipo 2 participarí,a en la génesis de la
que en no diabéticos. nefropatía favoreciendo La hialinosis precoz de La arteriola aferente
Igua,Lmente La hipertensión puede ser secundaria i3 algunas enferme- gLomerular, La fibrosis intersticial y aLteraciones deL mesangio.
dades endocrinas como La tirotoxicosis, el feocromocitoma, el síndrome Retinopatía
de Cushing y La acromegaLia.
La hipergLucemia junto con La hipertensión provocan modificaciones
en La autorregLlLación del flujo retinaol favoreciendo el desarro'LLo y la
progresión de La retinopatía (ver Capítulos 7 y 9).
Consecuencias de la asociación de diabetes e hipertensión
arterial
La hipertensión es un factor de riesgo cardiovascuLar independiente Aspectos clinicos de la persona con diabetes e hipertensión
que agrava la morbimortaLidad cardiovascuLar y Las compLicaciones propias EL padente presenta la sumatoria de Los datos clínicos propios de
de la diabetes. ambas enfermedades.

2
Repasaremos ahora, las técnicas semio{ógicas que debemos utili- sexual y el disbalance electrolítico de ocurrencia frecuente en personas
zar y {os datos que debemos obtener: con diabetes.
Interrogatorio: interesa conocer los antecedentes familiares de Gran parte de los diabéticos tipo 2 con hipertensión son obesos. Esto
hipertensión y diabetes. justifica' la importancia del descenso de peso para lograr éxito talnto en el
L(lboratorio: la micmatbuminuria debe sumarse a los exámenes de tratamiento de la hipertensión como en el de la diabetes (ver Capítulo 3).
rutina sin olvidar: El tratamiento antihipertensivo modifica simultáneamente las lesiones
• Examen de fondo de ojo macro y microvasculares de la diabetes.
• ECG y prueba ergométn'ca
El Consenso ~atinoamericano de Diabetes e Hipertensión propone
incluir en el control y seguimiento de estos pacientes: Objetivos del tratamiento
• Automonitoreo glucémico o Obtener la normalidad PERMANENTE de lal presión arterial
• HbA.lc 2 a 3 veces por año «130/80 mm Hg).
Anualmente: Mantener un peso corporal adecuado a talCa y edad.
• Examen de Fondo de Ojo Mantener normoglucemia y normolipidemia.
• MAPA Pfevenir y retardar el desarrollo y la progresión de las complicacio-
• ECG (Preferentemente ecocardiograma) nes micro y macroangiopáticas de la diabetes.
• Microalbuminun'a Permitir una vida plena.
• Interconsulta con médico cardiólogo
El tratamiento está sustentado en dos grandes estrategias
• Modificación del estilo de vida .
• Tratamiento
• Prescripción de fármacos.
Recuerde que...
Aunque seguramente usted conoce muchas de {as recomendaóones
El éxito del tratamiento depende á'e un diagnóstico certero y que a contínuaóón haremos, creemos que siempre es útil recordarlas.
precoz y de la adherencia sostenida del paciente a los cambios
de estilo de vida y a la prescripción medicamentosa. Ello requiere Una estrategia valiosa puede ser que las coloque a fa vista en su
el trabajo mancomunado del dinico entrenado en eU manejo de consu{ton'o o sala. de hospital, además de entregársela copiada Q sus
personas con diabetes, el paciente, el cardiólogo, el educador, la padentes para que las lean cada dia.
nutric,;iQnista y ,el profesor de educación ñsica.
Recuerde que «el mensaje emitido no es igual al mensaje recibi-
T.1mbién depende de la elección correcta del fármaco para evitar sus do» es decir que no siempre los pacientes entienden las prescn'pciones
4 ¡':ccl (l'; ~dversos sobre el control glucémic0 y lipídioo, la disfunción
1 dadas por el facultativo.
(·m
Modificación del estHo de vida Actividad física (ver Capítulo 19)
Sabemos que la modiñcación del estilo de vida es fundamental para el Si bien es una recomendación indiscutible debe constatarse previa-
manejo del paciente diabético hipertenso. Esta puede ser la única estra- mente la presencia de enfermedad cardíaca, lesiones microvasculares
tegia terapéutica necesaria, o bien complementarse con el tratamiento (retino y nefropatía), enfermedad vascular periférica y neuropatía
farmacológico cuando no se alcanzaron las metas del tratamiento. periférica y autonómica para adaptar su prescripción a las condiciones
del paciente. Es también indispensable realizar un estudio ergométrico
Además de disminuir la presión arterial y la hiperglucemira, este cambio antes de indicar su práctica regu[ar.
de actitud tiene un valor agregado: actúa favorablemente sobre otros
factores de riesgo card~ovascular asociados tales como la dislipidemia, la El ejercicio debe ser aeróbico, con una duración de 20 a 30 minutos
obesidad y el sedentarismo. si es diario o 45 a 60 minutos si se practica día por medio. Se recomienda
monitoreo glucémico previo y posterior a la práctica y corrección de la
¿Cuándo s'e debe poner en práctica? medicación cuando fuera necesario.
Nuestra sugerencia es que toda persona con diabetes con presión
arterial sistólica mayor de 120 mm de Hg o diastólica mayor de 80 mm . . Tratamiento farmacológico
de Hg es tributaria de las siguientes recomendaciones:
Se prescribirá cuando no se obtiene un resultado satisfactorio
• Normalizar su presión arterial (presión arterial < 130/80 mm de Hg) con el cambio de estilo de
• Normalizar el peso corporal (ver valores norma'les en Capítulo 3) vida desarrollado efectivamente durante un tiempo prudencial y
según el grado de hipertensión del paciente. En la actualidad la
• Respetar un plan de al~mentación especíñco con bajo tenor de
decisión de incorporar fármacos a[ tratamiento es precoz tratando
sodio (ver Capítulo 20)
de llegar a valores de presión normales en el menor tiempo posible.
• Realizar regularmente actividad física (ver Capítulo 19)
• No fumar Se deben considerar los efectos secundarios propios de cada
droga antihipertensiva, pues ellos son notables y precoces en la
o Mantener la normoglucemia y la normolipidemia (ver Capítulos 4 y 16)
población diabética y recordar que no existen efectos antagónicos
de la insulina o de los antidiabéticos orales sobre la acción de las
Plan de alimentación (ver Capítulo 20) drogas antihipertensivas. Por el contrario, está descripta la reducción
de la presión arterial con el uso de metformina y tiazolidinedionas.
Uno de los puntos más importantes del plan de alimentación del
paciente hipertenso, es el contenido de sodio. Se recomienda un aporte Mucho se ha discutido sobre cuál sería el fármaco más conve-
entre 2 y 3 gramos de sodio por día, evitando los alimentos procesados. niente para tratar la hipertensión en personas con diabetes. La
Se debe tener en cuenta el contenido de sodio del agua corriente ya que droga ideal debería mantener la presión arterial en valores norma-
presenta marcadas diferencias según la zona geográfica, hecho que también les sin alterar el metabolismo hidrocarbonado y lipídico ni la fun-
ocurre con las aguas comerciales. cí ón sexua l, reduci r la insuli norresi st,enci a, la morbi mortalidad
cardiovascular y retardar la aparición y progresión de las lesiones
No se recomienda el consumo de alcohol, permitiéndose hasta 30 g/
degenerativas de la diabetes.
dlol llllel hombre y 15 g en la mujer. Ejemplo: 250 ml de vino en hombre
V L'i<¡ 1111 1~1l la mujer. Acontinuación enumeramos las drogas más utilizadas en n'uestro
medio y sus relaciones con las alteraciones metabólicas de la diabe- • Antagonistas ex 2 adrenérgicos de acdón €entral
tes. En La Tabla 1 se describen dosis diarias habituales de estas
drogas. Incluyen la a-metildopa y la clonidina {agonista). Esta última en
dosis de 0,1-0,6 mg/día tendria alguna acción analgésica en la forma
• Diuréticos dolorosa de la' neuropatía diabética.

Reducen la expansión del votumen plasmático frewentemente La a-metildopa es la droga de eLección para tratar la Ihipertensión en
asociado COfil hipertensión arterial. Son las drogas de elección en el la diabética embarazada.
tratamiento de la hipertensión moderada ya que disminuyen los even-
tos cardiovas'Culares y el accidente cerebro vascular. • ~-bloqueantes
Sus efectos secundarios se caracterizan por disfunci€>n sexual, Reducen la morbimortalidad cardiovascular, previenen la recurrencia
hipoka(emia, hipomagnesemia e hiperuricemia. Elevan el colesterol del infarto de miocardio y la muerte súbita. Sin embargo pueden
y los triglicéridos y disminuyen el colesterol-HDL. También elevan la aumentar la glucemia, los triglicéridos y disminuir el colesterol-HDL.
glucemia por disminuir la secreción de insulina y la sensibi~idad Pueden enmascarar Los síntomas y signos de ~ipoglucemia, espe-
periférica a la misma y por aumentar la gluconeogénesis hepática y cialmente en el diabético tipo 1, razón por la cual es importante
Ila liberación de glucagon.
recomendar a estos pacientes, al iniciar su utiLización, la necesidad del
Son de bajo costo, de gra,n efectividad y cuando se utiLizan en automonitoreo gLucémico. Estos efectos son muy atenuados cuando se
dosis bajas (menos de 25 mg de hidroclorotiazida) combinados con utilizan dosis inferiores a 50 mg diarios de Atenolol.
otros antihipertensivos provocan pocos efectos secundarios. El Carvelidol es otra droga de este grupo con gran efecto
antihi¡¡>ertensivo que permite utiLizar dosis mucho más bajas y progre-
La indapamida es un diurético con acción antihipertensiva y
sivas hasta obtener eL efecto deseado. Por su acción broncoconstrictora
cardioprotectora que reduce el espesor de la pared ventricular iz-
su uso está contraindicado en asmáticos.
quierda. Prácticamente no tiene efectos sobre el metabolismo glúcido
ni lipídico,
• lnhibidores de la enzima convertidora de la angiotensina (lECA)
Ante La falla renal en La nefropatía diabética la furasemida sigue
siendo la droga de elección. . Por su acción sobre el eje renina-angiotensina-aldosterona b~oquean
la formación de angiotensina II. ActuaLmente son el grupos de drogas
• Bloqueantes al-adrenérgicos antihipertenslvas más utilizadas, habiéndos,e demostrado su efecto bene-
ficioso contra la progresión de la nefropatía diabétka {ver Capítulo 8).
De uso limitado porque pmducen hipotensión ort()stática con
Además me su acóón nefroprotectora limitarían la progresión de la
mayor frecuencia en personas con diabetes, lo que limita aún más
retinopatía en el diabético tipo 1 (Estudio EUCLW).
su prescripción cuando hay neuropatía auton€>mica.
En el estudio HOPE eL Ramipril redujo la microa~buminuria, la
los más utilizados son el Prazosin y e'L Doxasozin; este último
neuropatía y las muertes por infarto agudo de miocardio y por acci·
lr.duce la insulinorresistencia y los triglicéridos.
dente cerebro vascular. •

·'-7
·'II·m

En diabéticos hipertensos eL empleo deL Perindopril (estudio Progress reconoce la eficacia, obtenida mediante La administración combinada
2001) previno La aparición deL ACV recurrente. de diferentes grupos de drogas.
No se han demostrado efectos adversos so'bre el controL glucémico y
eL metabolismo de los Lípidos. Durante su uso se debe monitorear
pernódicamente el fiLtrado gLomeruLar y la posibilidad de la hiperkalemia.
Evaluación
EL efecto secundario más frecuente es la tos, producida por Valoración clínica
190tenciación de la bradiquinina y dependiendo de su magnitud puede (presión arterial)
Investigaciones (MAPA)
requerir su suspensión. Consejo inicial
Los lECA están contraindicados formalmente en el embarazo. Las
drogas más utilizadas son: EnaLapril, LisinopriL Perindopril y RamipriL
;-'---~"-""---""-J
i Prehipertensión I
~ 1
1111

• Antagonistas del caLdo


Compartell con Los lECA su efecto neutro sobre el metabolismo de
gLúcidos y Lípidos. Cambios de
Cambios de
estilo de vida estilo de vida
En aLgunos casos puede observarse edema bimaLeoLar con el empLeo j"

de Amlodipina, Nifedipina o Nitrendipina.


DeL grupo de las no dihidropiridinas el Diltiazem es una de las más
----"1-- 1
frecuentemente empLeadas.
[ Sin" ji l--C~I

-~~-~p~r~i~~:~.1 l:<:.1'l1 piica~ iD '2.::.1 Grado 1 Grado 2


• Antagonistas de Los receptores AT1 de' La angiotensina II Monod'roga Asociación
r------............- - - l o asociación de 2 o más

~~J~~~~]
Estas drogas tierlen una acción similar a Los lECA pero a diferencia Continúa ¡ de drogas drogas

T
de elLos no impi,den la formación de angiotensina Ir sino ql!le bLoquean
a su receptor AT!.
Como Los lECA no aLteran eL metabolismo de Los gLúcidos y lípidos.
¡
----1-------------
1
Pueden ser Las drogas de el€cción para reempLazar los lECA cuando Continúa control periódico de la presión arterial ~

estos producen tos ya que sus efectos coLateraLes son mucho menores.
Administrados junto con dif,erentes tipos de lECA aparentemente
aumentan sus efectos antihipertensivos y renoprotectores.
kn nuestro mercado disponemos deL Losartán, lbesartan, Candesartan,
OB~ETIVO 130/80 mm Hg 1
Inllllj'.i'lItan y Vasartán.
1:11 el trat~miento de La hipertensión en el paciente diabético se Figura 2. Algoritmo de tratamiento.
Bibliografia
Diuréticos
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Carvedidol 6.25-S0
Antag. canales de Ca2+
Amiodipina 5-10
Diltiazem 60-1S0 (aso (linico 1
Nifedipina (acción prolongada) 20-60
Paciente varón de 49 añ0s <de edad, con diabetes tipo 2 de 5 años de evolución.
Verapamilo 80-240
.- ----- --1 Antecedentes familiares: desconoce antecedentes de enfermedad cardíaca .
Inhib. enzima de conversión Antecedentes personales: tratado desde hace dos años con plan de
Enalapril S-40 alimentación, práctica regular de actividad ñs.ica y metformina (850 mg dos
Imidapril 5-]0 veces por día) con buena adhesión al tratamiento.
Lisinopril 5-20 Notivo de consulta: control periódico de su diabetes.
Perindopr! 2-8 Examen fisico: Peso 82 kg; Talla 1,70 m; circunferencia de cintura 115 cm; IMC
Quinapril 20-40 28. Presión arterial 136/86 mm Hg. Facies rubiwnda. Aparato respiratorio y
Antag. del receptor de angiotensina 11 circulatorio slp, Abdomen: no presenta estrías de color rojo víIilOSO. Examen de
Candesartan S-lO las extremidades; sensibilidad y reflejos osteotendinosos conservados; pulsos
Irbesartan 150-300 periféricos presentes. No refiere alteraciones de su esfera sexual.
Lo~artan SO-lOO Estudios complementarios: fondo de ojo (normal).
Telll1i~artan 40-S0 Diagnóstico presuntivo: diabético tipo 2 con obesidad central e hipertensión.
Diagnóstico diferencial: diabetes e hipertensión secundarias.
Ti,/¡[a :~. /losis habituales de las distintas drogas antihipertensivas. Los exámenes de laboratorio solicitados incluyeron: hemograílla V
eritrosedimentación (valores normales), glucemia (105 mg/dL), HbA c1 (6,4%), 15Lipemia en La
colesterol (181 mg/dL), cH DL (38 mg/dL), cLDL (110 mg/dL); triglicéridos
(130 mg/rll); creatininemia (1 mg/dL), ionograma en sangre (normal); cortisol dia betes ti DO 2
libre urinario en orina de 24 hs (dentro de límites normales). Microalbuminuria
(18 mg/24 hs}.
Diagnóstico: diabetes tipo 2 con obesidad e hipertensión arterial. Laura Schreier y Regina Wikinski
Tratamiento: plan de alimentación y actividad física para bajar de peso; continuar
con igual dosis de metformina. Disminuir ingesta diaria de sodio (2 g) Yevitar
alimentos procesados. Inhibidor de ECA (objetivo de tratamiento 120/80 mm Hg).

Caso Clínico 2 . Propósito de esta unidad


Paciente de sexo masculino de 71 años de edad con diabetes tipo 2 desde
En esta ocasión nuestro propósito es orientar su estudio para que usted:
hace 2 años.
Antef:eden tes familiares: abuela y tíos patemos con diabetes ti po 2 y otros Reconozca La vilílculación er1tre la diabetes y La dislipemia y
familiares de la misma rama con enfermedades vasculares.
establezca relaciones que le permitan estar aLerta ante una
Antecedentes personales: tabaquismo. Abandonó el tratamiento con
hipoglucemiantes orales hace un año. persona con diabetes y un perfillipídico aLterado.
Motivo de consulta: forúnculo en pierna izquierda y fiebre.
Examen fisica: Peso 80 kg, Talla 1,70 m; circunferencia de cintura 117 cm;
IMC 28. Presión arterial 170/100 mm Hg. Aparato respiratorio y circulatorio
sipo Abdomen: presenta soplo paraumbilical izquierdo intenso. Examen de Actividad inicial
las extremidades: disminución del vello, hiperpigmentación ¡pretibial;
sensi,bilid~d y reflejos osteotendi'nosos disminuidos; pulsos periféricos Le solicitamos que lea las preguntas que a continuación formulamos.
presentes pero disminuidos. la finalidad de las mismas es pwmover la reflexión y ia recuperación
Diagnóstico presuntivo: diabético tipo 2 con obesidad central, hipertensión é sus conocimientos sobre el tema.
y macroangiopatía.
Diagnostico diferencial: no ofrece dudas diagnósticas. Puede ensayar formular otras sobre la relación dislipemiaj diabetes
Los exámenes de fiaboratorio solicitados incluyeron: hemograma ~eritrocitos que tambiÉn lo preocupan y que usted cree que no están expresadas.
normales y leucositosis) y eritrosedimentación (29 mm primera h), glucemia
(171 mg/dL), HbA cl (8,7%), colesterol (258 mg/dL), cHDL (30 mg/dL), cLDL Aposteriori, escn'ba sus respue-stas para poder luego cotejarlas con el
(160 mg/dL); triglicéridos (180 mg/dl); creatininemia (1,2 mg/dL), orina desarrollo del capitulo.
completa (vestigios de proteinas, glucosuria positiva con cetonuria negativa).
Estudios complementarios: fondo de ojo (reti,nopatía diabética no ¿Qué características adquiere la dislipoproteinemia en los pa-
proliferativa) y ECG (hemibl.oqueo de rama derecha) y prueba ergométrica cientes diabéticos?
(desnivel ST) y ecografía abdominal (aumento del calibre aorta abdominal).
Diagnóstico: diabético tipo 2 con control metabólic0 pobre, con hipertensión ¿Cuál es eL rol que cumple el tejido adiposo en este caso? o ¿la
arterial y dislipemia y lesiones de micro y macroangiopatía. vinculación entre los ácidos grasos libres (FFA) y La insuLina es
Tratamiento: anbbioticoterapia para controlar proceso infeccioso, educación una de las características fisiopatológicas que debe ser conside-
rliabetológica para lograr mejor adhesión al tratamiento, plan de alimentación rada? ¿Por qué?
(diéta hiposódica), insulina -mientras dure el proceso infeccioso- (insl!Jbna de
011 riúnintenlledia ]0 Uantes de cena), inhibidor de ECA (evaluar respuesta para ¿Recuerda cómo es el metaboLismo de las Lipoproteínas? ¿Podri;\
oIjll'.I:lI d()~;i~), estatillas para controlar la distipemia y aspirina como antiagregante. esquematizarlo? •
• ¿Cuál es el tratamiento de elec'CÍón para estos pacient@s? endocri no-metabólicas generan un perfH aterogénico característico
¿Qué razones lo justifican? (ver Capítulo 2). Esta disLipoproteinemia se caracteriza frecuente-
Algunos consejos... Dado que en esta unidad se mencionan y ela- mente por aumento de TG ~en ayunas y postprandiales) y disminu-
boran l/alares bioquímicos de referencia, le sugerimos que ción del GolesteroL-HDL. Aunque el nivel de colesterol-LDL puede ser
normaL o aún menor que en los paciemtes no diabéticos, predominan
revise los conceptos de metabolismo de lípidos, su regulación hormonal las partículas de lDL pequeñas y densas que poseen mayor potenciaL
y su reLación con otros factores de riesgo cardiovascuLar. atemgénico. Cabe agregar que lal VLDL característica del cua'dto de IR
es de' mayor tamaño y está sobrecargada de TG.
En la patogenia del perfillilpoproteico descripto, juegan un papel
• Introducción importante el aumento en ayunas de ácidos grasos libres (FFA) y de la
insu~ina asociados a la IR. lLa IR tiene una relación directa con el
La diabetes tipo 2 condiciona un aumento de la enfermedad aumento FFA porque dism~nuye La función supresora de la insulina
ca.rdiovascular ater0sclerótica (ECA) debido en parte a su frecuente sobre la lipóLisis. EL aumento de FofA se debe rno sólo a La mayor lipóLisis
asociación con alteraciones li.pídic0-lipoproteicas. En los últimos años, deL tejido adiposo viscerat sino también a su menor captación por el
La mortalidad' por ECA en personas no diabéticas descendi0 35%, pero tejido adiposo subcutáneo. 'En el hígado los FFA actúan como ¡precur-
se ha mantenido constante en personas con diabetes. Por consiguiente sores para la síntesis endógena de TG aumentando su producción y
el III PaneL de Expertos para Adultos (ATP III) del Programa NacionaL
también estimulan La síntesis de apo B. La hiperinsulinemia asociada
de Educación para el Colesterol (NCEP) considera la presencia de diabetes
estimula la síntesis de TG. Cabe desta,car que aún una modesta dismi-
tipo 2 como equivalente a la preexistencia de enfermedad coronaria y
nución de la insulinemia Logra bajar la concentración de FFA, su flujo
aconseja tratar a quienes la padecen como si fueran coronarios.
hepático, la síntesis de TG y la formación y secreción de VLDL. Esa
El estudio Framingham y otros estudios posteriores demostraron que dismi nución de la insulinemia puede lograrse por insulinosensiblización
la mujer diabética tiene un riesgo relativo de ECA mayor que el hombre. farmacológica o por cambios de hábitos de vida.
La diferencia se debería en parte a que las alteraciones lipoproteicas son
Los TG de VILDL son hidrolizados en el pLasma por la tipoproteína
más acentuadas en la mujer diabética, con una mayor disminución de
lipasa (LPL), enzima locaLizada en el endotelio de Los vasos deL tejido
colesterol-HDL.
adiposo y muscular y cuya actividad depende de la insuLina. Esta enzima
Las alteraciones de las lipoproteínas (incremento de LDL y de hidroliza los TG de los quilomicrones y de hecho en el período
triglicéridos [TG] y disminución de HDL) son importantes predictores de postpra,ndiaL, la VLDL compite con Los quilomicrones por la LPL,
enfermedad coronaria en personas con diabetes tipo 2. Aestos factores sumándose al conjunto de Lipoproteínas ricas en fG que se acumulan
de riesgo tradicionales pueden sumarse los no tradicionales como la en ese período (Figura 1).
apoproteina B(apo B), LOL pequeña y densa e hiperinsulinemia en ayunas.
En la Figura siguiente hemos resumido el metabo.usmo de Iti'.
lipoproteinas.
Cuadro bioquímico y fisiopatológico
Le sugerimos detenerse un tiempo en ella pues le será de utilidmf /111111
La drisLipoproteinemia· asociada a la diabetes tipo 2 se debe aL la comprensión del resto de la unidad.
f".L1du de insulinorresistencia (IR) en el que numerosas aLteraciones
11- El aumento de FFA y de insulina
Produce mayor síntesis hepática de TG y Apo By por lo tanto de VLDL
Remanentes de LPL g
LRP - - Quilomicrones - - QUILO MICRONES

. +
Insulina
J...
11:
I1I- La hiperinsulinemia estimula la actividad de LH que produce
') Formación de subfracciones de LDL aterogénicas
Apo-C-II

~)
~
LPL
.. +

~
+

lJi t.-~
IV- La producción de LDL pequeñas y densas determina

v-
o Mayor pasaje y retención en la pared arterial

Los bajos niveles de HDL producen


o Menor capacidad antiaterogénica por disminución del transporte
R-LDL
/---,)

"~ _ _o /
oo'

'tejidos
r"
R-LDL
. reverso de colesterol
hepático V extra hepático
La aterogenicidad de los TG fue discutida ya que las VLDL poseen un
tamaño considerable (30 a 80 nm) y difí€ilmente atraviesen el endotelio,
pero diferentes subtipos de VLDL tendrían una potencialidad aterogénica
Figura 1. Esquema del metabolismo de las /ipoproteínas. Los quilomicrones se absorben variable. En la IR, la sobreproducción hepática de TG genera diferentes
en el intEstino yen el plasma se convierten en remanentes de quilomicrones por acción de
la /ipoproteína /ipaso (LPL) que hidro/iza sus tngticéridos. La enzima es activada por la tipos de VLDL tal como una VLDL circulante rica en colesterol, con menor
insulina y la apoproteína C-II (Apo C-JI). Los remanentes son captados por los receptores contenido de TG y menor tamaño, lo que facilita su pasaje a través del
hepáticos específicos (LRP). En el hígado se sintetizan tnglicéridos endógenos (TG) y endotelio y aumenta su aterogenicidad.
apoproteina B (ApoS) para conformar las VLOL. Una vez secretada la VLDL se degrada en
el plasma por acciones sucesivas de la LPL y de la lipasa hepática (LH) formando lipoproteí¡:¡a Otro subtipo de VLDL que frecuentemente secreta el h¡gado en la
intermedia y LDL que son captadas por los receptores de LOL (R-LOL) hepáticos o
fxtrahepüticos. Existe interacción entre las /ipoprotefnas con Apo B(VLDL, IDL y LOL) Y las diabetes tipo 2, es la VLDL rica en TG y de mayor tamaño. Si bien estas
HDL que intercambian moleculas de colesterol (col) y TG. En estE proceso interviene la partículas intactas no atravesarían la pared arterial, pueden degradarse
proteína dc' tr(Jl1~tó(Jncia de colesterol esterificado (CETP), contribuyendo al remodetamiento en el endotelio por la LPL y convertirse en partículas de menor tamaño
de las /ipoplOteinlls. En el esquema se representa este intercambio solamente con VLDL.
que atraviesan fácilmente la pared arterial yse depositan en los ateromas.
Este proceso se facilita por la disfunción endotelial propia de la diabetes.
Una subfracción de LDL estrechamente asociada al síndrome de IR es
En el 177 isrno senhdo que el esqUEma gráfi'co anten'or, el siguiente
la LDL pequeña y densa con elevada potencialidad aterogénica. En la
resumen organiza las caracteristicas a comiderar.. _
diabetes tipo 2, la hiperinsulinemia aumenta la actividad de la lipasa
hepática (LH) favoreciendo la producción de las subfracciones de LDL
pequeñas y densas. Estas pa1rtículas muy aterogénicas, poseen una con-
Resumen de las características fisiopatológicas formación anómala de su apo Bque reduce su captación y remoción por
los receptores fisiológicos. La proporción de LDL pequeñas y densas SI}
1- El aumento de fFA se debe a:
asocia en forma directa con la concentración de TG. Varios estudin~;
• Menor supresión de lipólisis por la insulina
prospectivos han demostrado que la LDL pequeña y densa es un factor de
• Menor captación de FFA por el celular subcutáneo riesgo y de predicción para el desarrollo de la diabetes tipo 2.•

246 7
Además de la acción aterogénica de las lipoproteínas asociadas a la Clasificación del riesgo I Colesterol-lDL :Colesterol-HDl Triglicéridos
diabetes tipo 2 debemos recordar las alteraciones que pueden presen- Mujer 1 Hombre
tar las antiaterogénicas (HDL). Frecuentemente, el nivel de colesterol-
Alto riesgo > 130 mg/dl 1<45 mgjdl < 35 mgjdl >400 mgjdl
HDL es bajo, debido en parte al aumento de la actividad de la LH que
libera colesterol de la partícula. Además la HDl se enriquece en TG por Riesgo intermedio 100-129 mgjdl¡45-55 mgjd1135-45 mgjdl 200-400
I
mayores intercambios de lípidos entre las lipoproteínas, lo que disminuye Bajo riesgo < 100 mgjdl 1> 55 mgjdl >45 mgjdl <200 mgjdl
su capacidad de remover el colesterol acumulado en los tejidos
Tabla 1- Clasificación del riesgo cordiovoscular de los pacientes diabéticos según los
extrahepáticos. volares de colesterol-LDL, HDL y tn'g/icéridos.

tespués. de esta caracten"zación de la dislipidemia, es dable €sperar que ¿Le deparó sorpresas la tabla?' ¿Son estos los valores que utiliza para
u.sted se esté cuestionando la manera en que realiló, hasta ahora, su la medición del n"esgo cardíovoscular en los pacientes diabéticos?
diagnóstico. Piense un instante cuáles fueron sus aciertos y cuáles pueden
ser ospectos que no ha considerado. Como: \~En cuestiones de cultura y de saber, sólo se pierde lo que se
'da; sólo se gana lo qUé se da;;
Antonio Machado
Diagnóstico de la dislipidemia
¿ Qué le parece si comparte los valores presentados con otros colegas del servido
La evaluación del metabolismo lipídico en personas con diabetes en eVlos que trabaja y discute con ellos sobre las implicandas de los mismos?
comienza con la determinación del perfil básico que incluirá: colesterol
total, colesterol-LDL, colesterol-HDL, TG y el índice de riesgo aterogénico Si lo cree conveniente puede compartir con el resto de 105 illscn'ptos a €str!
(colesterol totaljcolesterol-HDL). La medición se hará anualmente con 'rograma los comentan"os o sugen~ndas recogidos, enviándolas al sitio web.
un ayuno previo de 12 h. o con mayor frecuencia si está tratado con as esperamos...
hipolipemiantes. La evaluación se hará teniendo en cuenta lal edad y el
sexo del paciente, su índice de masa corporal y la estimación de la El ATP III propone además al colesterol-HDl como uno de los
acumulación de grasa visceral. marcadores del síndrome metab61ico con valores de corte de 40 mg/
dL para hombres y 50 mg/dl para mujeres (ver Capítulo 2). También
Es preciso destacar que: incorpora a los TG como marcadores del síndrome metabólico y p~o­
pone un valor deseable de 150 mg/dlL.
El ATP 1II incluye a las personas con diabetes en la categoría de Se considera útil estimar el colesterol-no-HDl como la suma del
mayor riesgo y establece como primer objetivo del tratamiento
colesterol contenido en las lipoproteínas con apo B (LDL, IDl YVLDL)
la disminución e~ colesterol-LDL por debajo de 100 mg/dL.
que se obtiene fácilmente restando el colesterol-HDL del colesterol total.
Este parámetro sería la seg unda meta de tratamiento (después del
Esto coi ncide con la categorización propuesta pGr la American colestLerol-LDl) en pacientes con TG > 200 mg/dL. Finalmente, la apo B
Diabetes Association (ADA). Recientemente, se ha propuesto disminuir es 00nsiderada un excelente marcador de riesgo con elevado valor
la meta de tratamiento de co~esterol-LDl a menos de 70 mg/dl, cuando predictivo, y su aumento se asocia con el predominio de subfracciones
el riesgo es muy elevado. de lDl pequeñas y densas.

248 249
rr-----··--·--·--·--·-·-·---------------------------~

e Tratamiento I C-LDL>100mg/dl y/o TG • lS0mg/dl y/o C-HDL < 40mg¡dl (varones) I


, C-HDL < SOmg/dl (mujeres)
L...-__ f
Las pautas del tratamiento actual de la dislipemia en personas con
Cambios en estilo de-vlda----
diabetes se basan en Las normas de la ADA y del NCEP (ATP III). Control glucémico adecuado
Siendo la diabetes tipo 2 ulí1a de Las causas más frecuentes de dislipemia I r -r- I
secundaria, es aplicable el criterio de Knopp de tratar previamente C-LDL> 10. o. mg/dl'. l'C-LDL>100 m.g/dl*' C-LDL>10.0 ~..g¡dl* C'LDL> 100 mg/dl*
cada condición causante de dislipemia y discontinuar la medicación TG<~_O_~!... l~~.@. I~_,,:_~~q~gL9L~ ___!§~_J.?_O~gL~I ,
hipolipemiante hasta regular la enfermedad de base. Las hiperLipemias r---'-[- .. ,---- ~:=----~ .L
severas usualmente obedecen a dos problemils CGexistentes, por ejemplo Ihl ~~r~~;~nte IhG>400m9/dll TG: lS0-400mg/dl~ hIP~~~~~7~nte !nten~ificarj'
asociación de diabetes e hiperlipemia familiar.
fa e~ec~lón: L ---1---' ---.------ ~~~I~b~~ ~~da
.
I~---- ~-----
El tratamiento comenzará con indicaciones para adquirir esti-
I estatlna
: Alternativa:
, ezetimibe
¡ I
Fármaco
: hlpollpemiante
~~ ~lcanzar I
Col-no HDL> 130 ,_ ,
mg/dl ,c-LDL<100 mg/dl
-control
glucémlco

los de vida saludables. EUo incluye un plan de alimentación con una ------- --J laff~~~~~n'l' I l::i~~f~ó:' ----- -------

cantidad diaria de grasa total de 25-35 % con disminución de grasas Alternativa: -Altematlva:
ác. nicotínico . Fibrato··
saturadas « 7% del total de calorías), de colesterol « 200 mg) y de ----ir 1------
ácido,s grasos trans como así también la ¡ngesta de fibras solubles (10- I}f [@} 2° colesterol no-

25 g/día). Fármaco hiP~Ii-p_e-m-i-an-tel~i;;¡~ñSi-fica~I~- _~r;;~;3dOe ~~(i1~


1a eleCClon: flbrato -cambio de de Vida
Alternativa: estilo de vida ,-aumentar dosis
En segunda instancia se considerará el manejo del sindrome ác. nícotínico o -control 1 fármacos
!iazolidinedionas glu~~~i~ -asociar fármacos
metabólico y sus factores de riesgo asociados, reduciendo eL pes0 e
inoementando la práctica r,egular de actividad física (ver Capítulo 19). 'Entre 100 y 130 mgldl de C-LDL, con,iderar el inicio de tratamiento farmacológico de
forma individualizada. ···Sobr€ todo si C-LOL < 130 mg/dl y triglicéncfos (TG) >400 mgld/.

Cabe agregar la supresión del hábito de fumar que disminuye la Figura 2. Algoritmo para la selección del tratamiEnto según los alteraciones
IipoprotBicas existentes.
HDL Yaumenta los procesos oxidativos.
Frecuentemente se necesita agregar fármacos para alcanzar la
meta principal del tratamiento que es disminl!Jir el colesterol LDL A continuaóón describiremos lOJ agente3 farmacológicos cuya efectividad
a menos de 1!OOmg/dL y redudr otras alteraciones como TG eleva- posee evidencia de clase Ay para ampliar esta informaóón lo ilJvitamos, a
dos y HDL disminuido. realizar una revisión crítica del trabajo de Bloomgarden.
Fibratos: son muy usados para tratar la hipertrigliceridemia (mode-
En la Figura 2 se observan tos pasos a seguir para el tratamiento de rada a severa) de la diabetes tipo 2. También elevan eL HDL en plasma
las dislipemios, según {as diferentes situaciones. debido a su acción sobre los PPARS- y (receptores nucleares activadores
de la proliferación de peroxisomas) y revierten eL perfil heterogéneo
alterado de subtipos de LDL que suele acompañar a la hipertrigliceridemia.
La administración de gemfibrozil en el Helsinki Heart Study (cuyo objetiv()
fue elevar el colesterol-HDL), redujo significativamente la i,ncidencii1 de
ECA a 5 años en pacientes diabéticos. Otros estudios prospectivos como
el VA-HIT y eL DAIS confirmaron los beneficias a largo plazo delli':io dl-) I

2
gemfibrozil y el fenofilbrato respecto a la reduccíón de eventos Ezetimibe: Corresponde a una nueva clase de fármacos que inhiben la
car<!iGvasculares o la' progresión de la enfermedad; en cambio el uso de absorción intestinal del colesterol y de los ácidos biliares. No interfieren en
bezafibr3to no produjo estos beneficíos. Las dosis recomendadas se la absorción de vitaminas liposolubles. Como monoterapia y dosis <le la
encueliltr.an en la Tabla 2. mg/día, se reduce ,el coCesterol LDL alrededor del 18%. Esa misma dosis
combinada con estatinas, puede reducir el celesterol-LDL un 25%, equivalente
Estatinas: Son inhibídores de la 3-hidroxi-3-metilglutaril-coenzima A a lo obtenido con las dosis máximas de difererntes estatinas utilizadas solas.
reductasa, útiles para el mánejo de alteraciones lipoproteicas y para la Niacina: reduce efectivamente los TG, eleva el colesteml-HIiJL y el
prevención primana y secundaria en personas con diabetes tipo 2. Su tamaño de las LDi.. convirtiéndolas en partículas menos densas. Por lo
efecto se observa aún con colesterQt-LDL normal si el colestero[-H DL está tanto dosis moderadas (1000 a 1500 mgjdía) de niacina mejoran el
bajo y h3Y hipertrigliceridemia, por lo que el aumento de apo B y LDL perfillipoproteico aterogénico de la diabetes tipo 2. La combinación
pequeñas y densas justifican el tratamiento con estatinas. El estudio de estatinas 'Con niacina es una buena alternativa para el tratamiento
pionero de prevención secundaria fue el Scandinavian Simvastatin Survival de la dislipemia asociada al síndrome metabólico.
Study (45) que mostró descenso del 55 % de eventos cardiovasculares en
personas con diabetes vs. 32% en no diabéticos. Los estudios {ARE y Tiazolidinedionas: son agonistas de los 'PPAR5-y que aumentan la
UPID realizados en pacientes con colesterol-lDl BOmgjdL también mos- sensibilidad a la insulina (insulino-sensibiLizadores) y mejoran las
traron beneficios significativos en persornas con o sin diabetes. Es nece- disLipoproteinemi'as. La administración de rosiglitazona (4 a 8 mg) a
sario realizar controles de función hepática, en especial de la 'CPK. personas con diabetes tipo 2 aumenta el HDL y reduce las WL peque-
ñas y densas. Su combinación con atorvastatina disminuyó también
Las dosi:: puede verlas en la Tabla 2 los TG y el coLesterol-LDL. Cabe destacar el efecto favorable de este
fármaco sobre la redistribución del tejido a.diposo.
Fármacos - mg/dia Dosis de inicio I Dosis máxima Este es elfinal dG:l wpftulo; efiperamos que haya encontrado las respues·
Simvastatina I 10 80 tas a ias preguntas que formulamos y que seguramente usted se
Fluvastati na 20 80 autoformuló.
Estatinas . Pravastatina 20 40 Recuerde que este manual es un documento <wsable» comú/Wo todas las
Atorvastatina I 10 80 veces que fo necesite; en Especíal esta unidad donde mostramos valores de
Lovastati na 10 80 referencia en el tratamiento de la dislipemfa.

----
Rosuvastatina I ~
10 80 Ahora ,le proporcionamolf algunas referencias para que usted pueda seguir
Ezetimibe 10 rofundizando ea el tema. Recuerde además, que En nuestro Programa
Bezafibrato 400 600 usted recibirá actualizaciones pEriódicas, resLÍmenes y comentarios para
Fibratos Gemfibrozil = 600
I 1200 continuar su capacitación en el tratamiento de personas con diabetes.

Ac. Nicotínico
Ii;lmlidinedionas
-
¡-
Fenofibrato I

- -
t-
200
1000
4
+ 15 °0
8
Lo E5peramos eD' el próximo módulo.

//111//1 2 IJOJ';:; rCn1I1lp.ndadas para los hipolipemiantes.

3
m
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8. Expert Pilnel on Detection, Evaluatio~ and Treatment of High Blood Cholestelol in Adults. Famili.ar Mixta. Hermana de 40 años aparentemente sana.
Executive summary of thé third report of the National Cholesterol Education Program Antecedentes personales: amenorrea a los 47 años, no fumadora,
(NCEP) (Adults treatment Pannel HIJ. JAMA 285:2486-97,2001.
sedentaria. Nunca recibió terapia hormonal sustitutiva,
9. Freed M, Ratner R, Marcovina S, Kreider M, Biswas N, Cohen B, Brunzell J; Rosigtitazone
Study 108 ínvestigators. EffeGt, of rosiglitazone alone and in combination with atorvastatin
Examen fisíco: peso 72 Kg, talla 1.60 m; circunferencia cintura 102 cm;
on the metahJolic abnormalitie:> in type 2 diabetes mellitus. Am J Cardiol90:94 7-52,2002. IMC 28.0. Aparato respiratorio sipo Aparato circulatorio presión arterial
10. Grundy S, Cleeman J, S,'irey Merz, N, Brewer B, Clark L, Hunninghake D, Pasternak R, 130/80 mm Hg. Abdomen globuloso, palpación sipo Miembros inferiores
Smith S, Stone N'. Implication~ of recent clinical trials for the National Cholesterol Education sensibilidad at monofilamento normal. Pulsos periféricos presentes. !Los
Program (NCEP), Adults treatment Pannel III guidelines. Circulatíon 110:227-239,2004. exámenes de laboratorio solicitados incluyeron: HbA1C (8,0%), Colesterol
11. Grundy S. Vega G·. McGovern Met al, for the Diabetes Multicenter Research Group, Efficacy. total (250 mg/dl), cLDL (165 mg/dl), cHDL (40 mg/dl), Triglicéridos (250
safety, alnd tolerability of oncé-daily niacin for the treatment of dislipidemia associated
with type 2 di;¡bef:c~: results of the Assessment of Diabetes control and Evaluation of the
mg/dl), apoB (145 mg/dl), Colesterol totaljcHDL (6.3), T5H (1.8 ~lU/ml).
cffriGIl:Y o/ Nia:,pan trial. Arch Inter Med' 162:1568-1576,2002. Diagnóstico: Diabetes tipo 2 y dislipemia.
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13. HOWMd B, COW,lfI L, Go 0, Welty T, Robbins D, Lee E. Adverse effects of diabetes on actividad física según pautas descriptas en los capitulas 18, 19 Y 20.
lIIult:ipll' cardiovascular disease risk factors in women: the Strong Heart Study. Diabetes Metformina 1500 mg/día y Atorvastatina 20 mg/día hasta bajar cLDL a <
Care 21:1258-55.1998.
100 mg/dl. Realizar un examen de laboratorio para controlar el efecto de
14. Knopp RH. Drllg Treatment of Upid Disorders. N Engl J Med' 341:493-511,1977.
la medicación, sin interrumpirla, agregando TGO, TGP YCPK cada 4 meses
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o ante cada cambio de la medicación.
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19. Sacks D, Bruns D, Goldstein D, Maclaren N, McDonald J, Parrot Mi. Guidelines and Síndrome Metabólico, no se han diagnosticado dislÍJpidemias famili'·lIc· r"
recomendation for Laboratory Malysis in the Diagnosis and Management of Diabetes pero 'el estudio no es ·exhaustivo.
Mellitus. Clin Chem 48:3.:436-72,2002.
Antecedentes personales: diabetes desde los 41 afios, época eh qlw dejo
i

5 1IIII
2S
de fumar. Camina 30 minutos diarios. Plan de alimentación con frecuentes Diabetes' gestadonal
transgresiones. Tratamiento farmacológico por su diabetes (glibenclamida
5 mg diarios) e hipertensión arterial (enalapril5mg/día). Dislipemia anterior
tratada con simvastatina 5 mg en la cena. Jorge Alvariñas y Susana Salzberg
Examen físico: peso 89 kg; talla 1,70 m; cintura 115 cm, IMC 31.
Aparato respiratorio sipo Aparato circulatorio: presión arterial 150/100
mm Hg. Los exámenes de laboratorio solicitados inCluyeron: HbAlc (8,3%),
Colesterol total (225 mg/dl), cLDl (132 mg/dl), cHl:'l (35 mg/dl),
triglicéridos (220 mg/dl), ApoB (150 mg/dl), colesterol total! CHDL (6.4). Propósito
TGO (15 UI), TGP (18 UI), CPK (11 UI).
Diagnóstico: diabetes tipo 2 con obesidad, dislipemia e hipertensión o Analizar con profundidad la sintomatología, el diagnóstico y el
arterial mal controladas. tratamiento de la diabetes que se manifiesta durante el embarazo.
Tratamiento: educación buscando obtener mejor adherencia a los cambios
de estilo de vida, plan de alimentación y práctica regular de actividad Evaluar las decisiones más adecuadas a tomar para garantizar un
física según pautas descriptas en los capítulos 18, 19 Y 20. Metformina embarazo y un recién nacido sin complicaciones graves.
1500 mg/día y Enalapril 10 mg/día. Aumentar la dosis de simvastatina
(20 mg/día) hasta bajar cLOL< 100 mg/dl y subir cHOLo Controlar
transaminasas y CPK en cada estudio de laboratorio, cuya periodicidad
será a criterio médico. Observar sí descienden los triglicéridos, siendo la Actividades
meta < 150 mg /dl. Es deseable medir LDL pequeñas y densas. Acontinuación encontrará una serie de preguntas que le presentamos para
organizar el estudio de este módulo.
Léalas y contéstelas, no las saltee, enfréntese aellas para verificar lo que sabe.
Recuerde que este ejercicio de recuperar sus conocimientos previos
sobre los contenidos que se desarrollarán es una valíosa estrategia de
enseñanza, ya que...
... »en el contexto lingüístico de comunicaóón las personas interpre-
tan la naturaleza y se interpretan a sí mismas dentro de su entorno»
Jurgen Habermas, 1962
Poder decir su palabra, por escrito u oralmente son las evidencias de que
sabe para hacer. Así que amigo nuestro... ¡¡¡¡escriba!!!!

Consulta:
¿Cuáles son las alteraciones metabólicas que se producen durante ül.
embarazo?

257
¿Cuáles las que se producen en mujeres que manifiestan su diabetes aclararon hipótesis e instituyeron nuevos métodos de diagnóstico,
durante el embarazo? seguimiento y control, modificando las causas de morbimortalidad para
llevarlas a valores semejantes a los de la población general. En nuestro
país este es un problema que aún no ha podido solucionarse totalmente:
aunque en centros especializados de la capital y del interior se han
Recuerde cuáles son los factores de riesgo para el desarrollo de una
conseguido resultados muy alentadores, desgraciadamente estos
diabetes gestacional
resultados no son extrap0lables a todo el país.

¿Cómo se diagnostica la diabetes gestacional?


Definición
La diabetes gestacional (DG) se define como la «intolerancia a la
glucosa de seven"dad van"able que comienza o se diagnostica durante el
¿Cuáles serían las metas a alcanzar e·n relación a los valores de la
embarazo».
g.~ucemia y el aumento de peso corporal durante el embarazo?
Pero tenga en cuenta que...
Esta definición no excluye la posibilidad de que sea una intole­
¿Cuál es a su criterio el tratamiento adecuado a prescribir en caso de rancia a la glucosá previa no reconocida o una diabetes que comenzó
una diabetes gestacional? concomitantemente con el embarazo.

¿ Cuándo se manifiesta?
En la gran mayoría de los casos la alteración de la tolerancia a ,la
glucosa comienza en el tercer trimestre; por lo tanto no afecta el
crecimiento embrionario ni es causa de malformaciGnes congénitas.
• Introducción
Teniendo en cuenta que se trata de un grupo heterogéneo, Freinkel
La asociación de diabetes y embarazo constituye actualmente uno clasificó estas alteraciones en 3 subgrupos:
de los desafíos más importantes desde el punto de vista diabetológico,
obstétrico, neonatológico y de salud pública.
Con la aparición de la insulina en el tratamiento de la diabetes, el Al A2 81
~ I I
cambio en el pronóstico fue radical. Permitió normalizar la fertilidad, Paciente con glucosa Pacientes con Pacientes con
hacer desaparecer prácticamente la mortalidad materna y reducir la plasmática en ayunas glucosa plasmática glucosa plasmática
mortalidad perinatal a menos. del 3%. menor de 105 mgjdl, con en ayunas entre en ayunas mayor o
A partir de la década de 1940 comenzaron a aparecer soluciones tolerancia a la glucosa 105 y 129 mg/dl. igual a 130 mg/dl.
potendales a este problema, pero realmente ha sido en los últimos 10 anormal.
.t 1'1 .tilos cuando los avances, sobre todo en el mundo desarrollado,
I ...1

259
I

Modificaciones metabólicas durante el embarazo normal 26° Y la 32° de gestación son de gran trascendencia desde el punto de
vista metabólico y esto condujo a realizar en ese momelilto el estudio
A lo largo del embarazo tienen lugar una serie de modificaci'ones nonmatizado del metabolismo h¡drocarbonado durante el embarazo. II.nl
horm~)nales (jue van reduciendo pau'Latinamente la sensibilidad de los
tejidos a la insul~na. En la embarazada normal, la célula B responde a la resistencia
insulínica aumentando la secreción de insulina de 1,5 a 2,5 veces. Esta
En las primeras semanas del embarazo el metabolismo hiperinsulinemia reactiva fisiológica permite mantener los valores
hidrocarbonado de la madre se modifica por la elevación de los niveles glucémricos dentro de los Ilímites normales.
de estrógenos y progesterona.
Estas hormonas estimulan la secreción de insulina que estimula la
glucogenogénesis y en forma concomitante, inhibe la golucogenólisis y
La gluconeogénesis. Como consecuencia de estos procesos disminuye
Cambios metabólicos en Las padentes con diabetes gestadonal
el nivel de la glucemia en ayul1las. Cuando el estado de resistencia insulínica' se comibina con una reducción
de la capacidad secretora de las células ~ se manifiesta la diabetes
I
AIpartir de [a JO semana en que comienza la elevación de la hormo­
gestacional. Esta es una entidad etiopatogénicamente muy heterogénea,
na lactógeno p'lacentaria y del cortisol materno, comienza a disminuir
en la cual existe un común denominador que es la hipergluoemia
la respuesta de los tejidos a la insulina (insulinorresistencia), que llega
diagnosticada en el transcurso del embarazo.
a su máxima expresión en el tercer trimestre.
Si bien la gran mayoría de las pacientes tienen características comu­
Se ha encontrado una reducción de la' sensibilidad i,nsulínica de
nes a la diabetes tipo 2, hay un peq¡,¡eño subgrupo que evoluciona a la
más del 50% durante el 3er trimestre comparado con el primero. ~sta
diabetes tipo 1, con destrucción parcial de la masa de células By en las
menor sensibilidad se acompaña de una e'levación significativa de la
cuales se pueden detectar marcadores inmunol0gicos de este proceso.
insulinemia que trata de ¡¡;ompensar la menor respuesta tisular. Es
probable que la n:~ducción en el transporte de glucosa mediado por la
No ol0de que...
insulina en el músculo esquelético sea el resultado de un acoplamiento
ineficiente entre la activaóón del receptor de insulina y la translocación
de los GLUT 4 a la superficie celular. Se demostró claramente que La diabetes gestacionaL es una

entidad cLinica asociada con morbimortatidad fetal, cQmo

Otro factor que contribuye al aumento de la resistencia ijnsulínica,


macrosomía, hipoglucemia neo natal, hipocalcemja, polidtemia,

es la elevación de los ácidos grasos libres provenientes de la lip6lisis.


hiperbilirrubinemia y síndrome de distres respiratorio y

Estos cambios son los responsabl,es de la tendencia a la aumento de la mortalidad perinatal.

hiper'glucemia, [ipólisis e hipercetonemia manifiestas en este período.

EL cortisol y la hormona [actógeno placentaria son diabetO).génicas Por lo tanto, resulta imperativo su diagnóstico y posterior control y
y el momento de su efecto máximo se manifiesta en la 26° semana de tratamiento.
gestación. La progesterona, otra hormona con acción antiinsulínica,
ejerce su máxima acción en la 32" semana. En consecuencia, las semanas Analicemos ahora, los
H"I'
260 .1 ,1/1'·1

lJ I
1,1

1J
Factores de riesgo para desarrollar Diabetes GestacionaL • Subdiagnóstico: en los países en desarroLLo, uno de Los temas más 1

111i11
preocupantes es la falta de identificación de Las pacientes, ya sea
Los factores que en nuestro estudio muLticénrtrico (Salzberg S y porque La paciente consuLta tardíamente o porque no se Le solicitan
ii:l~ !¡ I

Alvariñas J. Rev Soc Argentina Diabetes 1995), demostraron estar Los estudios para su evaLuación.
reLacionados con mayor riesgo de diabetes gestacional son:
el Sobrediagnóstico: por probLemas técnicos o de metodología.
.. Diabetes gestaciona~ previa
• Obesidad materna

i Edad matema mayor a 30 años


Diagnóstico de diabetes gestacional
• Antecedentes fami.Liares de diabetes
La diabetes gestadonal es una entidad que genera mayor riesgo
., Antecedentes de macrosomía fetaL
feto-neonataL, y tiene la característica de ser sintomática en la madre.
.. Mortalidad peri natal previa
Por esta razón es imprescindible el estudio del metaboLismo
hidrocarbonado durante eL embarazo para estabLecer su diagnóstico.
Se pueden agregar como factores de riesgo eL hecho de pertenecer
a determinados grupos étnicos como los indios Pima y Los naurúes Respecto de Los criterios de diagnóstico, en La actualidad existe
entre los más importantes y el embarazo múLtipLe. una confusión, ya que hay dos posiciones definidas y variantes de
cada una de eLLas: 11

La propuesta por eL National Diabetes Data Group a partir de L(}~i


• Epidemiologia estudios O'SuLLivan y Maham, posteriormente modificados por el I
La prevaLencia de diabetes gestacional varía notabLemente reflejando, Natfonal Diabetes. Data GroufJ y luego por Carpenter y Coustan.
en térmínos generaLes, los patrones de diabetes tipo 2 de la población Este úLtimo criterio fué validado en una reciente reunión de
estlúdiarla. En nuestro estudio multicéntrico se encontró una prevaLencia expertos.
del 5·%. En Las mujeres con factores de riesgo ese vaLor sube aL 6,5%, * Los criterios establecidos por la Organización MundiaL de La SaLud
mientras que en Las mujeres que no Los tienen es deL 1,5% (Cuadro5 1 y 2). (OMS).
Sin embargo, Las cifras publicadas en la literatura varían ampliamen­ Dado que ambos criterios tienen diferencias marcadas y que nin­
te entre el 0,7% Yel 14,3%. Esta diferencia tan maKada obedece a guno de los dos cubre totaLmente nuestras expectativas de diagnós­
varios factores: tico, en 1997 el «Comité de Expertos de Asociación Latino America­
" Diferencias en La metodología y Los criterios diagnósticos utilizados. na de Diabetes (ALAD)>> decidió impLementar como diagnóstico d('
Frecuencia variable de factores de riesgo en La poblQ,ción de emba­
diabetes gestacional, una modifica·ción de los criterios estabLer.irh¡·. [~
por la O.M.S. Este criterio de la ALAD fue aceptado por La Socicd,lll 1,
razadas estudiada. Argentina de Diabetes y en 1998 se decidió impLementar eSél 1111'1 f) l'
I
Difen~ncias étnicas: se han encontrado grupos de muy baja fre­ doLogía y criterios de diagnóstico.
cuencia de diabetes gestacionaL como en Taipei, Taiwán (0,7%) y
otros con alta frecuencia como Los indios Zuni (14,3%). Léa{os, aníllícelo5, te-nga a mano los valores....

262

l
En sintesis, los criterios de diagnóstico de Diabetes Gestadonal son:
Se considera que una embarazalila tiene diabetes gestacional cuan­
do durante el embarazo se encuentra un valor de glucosa o Glucosa plasmática en ayunas mayor o igual ,a 105 mgjdl.
plasmática en ayunas mayor o igual a 105 mgjdl (repetida en
o Glucosa plasmática a los 120 minutos postcarga mayor o igual a
dos determinaciones). Si el valor de esta ~lucemia es menor de
140 mgjdl.
105 mgjdL, se sug~ere realizar una pruebal de car,ga con 75 g de
glucosa y se confirma el diagnóstico cuando a [los 120 minutos En las embarazadas sin factores de riesgo, que presentan valores
postcarga se registra un valor de 140 mgjdl o mayor (Figura 1). postcarga entre 140 mgjdl y 150 mgjdl, es conveniente repetir el estudio
en el curso de la semana, con el objetivo de evitar el sobrediagnóstico
por problemas técnicos.
Este estudio es sencillo y se utiliza como screening y diagnósti­
co ya que, con soLo dos valores de glucosa plasmática estamos en y si es preciso no olvidE realizar un...
(()ndiciones de identificar a pacientes con diabetes gestacional.
Retesteo
La Figura 1 muestra el algodtmo con las etapas o momentos para En gestantes con valores derltro de los limites considerados normales,
la toma de decisiones. pero que ¡presenta factores de riesgo para desartrollar diabetes gestacional,
se sugiere repetir el estudio entre la 31° y 33° semana de amenorrea.
24-28 semanas
r-----< 1~_5____u__ __
_~~o~-~=J
t
Glucemia en ayunaS ~~¿?I .J
Control y seguimiento clínico prenataL
sobr,ecarga
según OMS
Es preciso recordar siempre, que:
[-~14o-~~
El contFOl y seguimiento clínico durante el @m~arazo no difiere en

[¡m" : ¿ 120 minutos

1
~ NO J
los distintos tipos de pacientes con diabetes. Como fuer.a previamente
señalado, para reducir el riesgo de complicaciones maternas y fetales
la atención debe estar a cargo de un equipo interdisciplinario.
J~3:¡.;-~t~.:. )
S1
r;w5mg/d~~J
,

G l
L - . - -.. _.....i Las consultas:

[~:~~~7~~] r;14ó-~~-idl¡ deben realizarse cada 15 días hasta la 30° semana y


luego semanalmente hasta la internación, siempre quP IH) '.j'
. !iREPETIRI
PRUEBA . J I - - -....
presente ninguna patología concomitante que requiera rol1111 Ii,".
mas frecuentes.
I .._.~ ,

Figura 1: Escalonamiento de decisiones para el diagnóstico de diabetes gestacionaL Es comienitntí2~ ..

264
Realizar al1amnesis al] mentaria a fin de evaluar la preexistencia Si bien no hay esquemas de control rígidos, en Hneas generales, si la
de carenl:ias, en la afii mentación. paciente desarrolla una diabetes gestacional:
rncrluir el examen clínico nabituall y la evaluación del estado • del grupo Al es probable que sea suficiente con 3 automonitoreos
nutri60 na lo diarios: antes del desayuno, 2 horas después det almuerzo y cena.
c. Evaluar la curva de peso, presencia de edema en los miembros • de tos grupos A2 o Bl, en general es necesario obtener datos
inferiores, tensión arterial" altura uterina y movimientos y lati­ glucémicos 4 a 5 veces por día, pre y postprandiales, en dist:il1tos
dos fetales. horarios.

Cetonuria
Evafuación metabólica
Evitar La cetonuria es I:Jno de Los objetivos terapéuti.cos, tanto en
Glucemia I(as gestantes normales como en Las que presentan diabetes gestacional
NumeniJSOS estudios demuestran la, importancia de la normoglucemia o pregestacional.
para lograr un desarrollo fetal normal. Uno de los más elocuentes es el Esto se basa en evidencias provenientes de diversos estudios que
de Karlson y KjeTImer que estud¡:aron promedios de glucemias en relacionan eil desarrollo de hipercetonemia crónica en el tercer trimestre
em~arazadas con diabetes encontrando una correlación positiva con la con disminución del coeficiente intelectuaL en el niño determinado por
mortalidad /jlerinatal (Terbla 1). scores de.Stanford Binet.
En la práctica se considera imprescindibLe la investigación diaria de
Promedio de GLucemia (rngjdl) % Mortalidad perinataL cetonuria antes deL desayuno.
> 150 23,5%
100-150 15,3% Estudios complementarios
< 100 3,8%
ta periodicidad de los estudios dependerá de cada paeiente en particular
Tabla 1.
y de la presencia o no de complicaciones.
Se solicita u.n perfil básic0 de laboratorio y estudios específicos
Este estudio demuestra la importancia del control glucémico. relacionados con su condición de paciente diabética (Tabla 2).
A tal efecto es impresdndible entrenar a la paciente para la
La Tabla organiza el pedido de estudios de laboraton"o seglÍlI f'!
~ realizadón ,del perfil glucémico diario. La cantidad de controles
trimestre de embarazo en que se halle .la paciente diabética.
y los horarios dependen de la severidad de la alteración metabólica
y de las características de cada paciente.
En todas las embarazada.s con diabetes, lo ideal es comenzar haciendo
automonitoreos glucémicos pre y postprandia,les durante 2 o 3 días para
evaluar el perfil glucémico.

266
¡),t"llm

• Glucemia en ayunas entre 70 y 90 mg/dl


Estudio 1° Trimestre 2° Trimestre 3° Trimestre
Hemograma
Glucemia
Urocultivo
x
X
X
X .
X
X
T '_
X
X
X
(,) Glucemia preprandial entre 70 y 105 mg/dl
e Glucemia 2 horas postprandial entre 90 y 120 mg/dl
• Cetonuria negativa
Lipidograma X
X
• Evitar las hipoglucemias
Hepatograma
X
Toxoplasmosis X x • Fructosamina y Hb glicosilada dentro de límites normales.
(hagas X X lEs ampliamente conocido el rol de la hiperglucemia en la
1
HIV X X etiopatogenia de las complicaciones feto-neonatales. Es importante
L Rubéola X evitar no sólo la hiperglucemia en aryunas, sino también las
L Grupo y Factor Rh , X , I ,
hiperglucemias postprandiales, ya que se ha demostrado que la norma­
lización de los valores glucémicos postprandiales reduce la tasa de
Tabla 2. recién nacidos grandes para su edad gestacio.nal.
Si bien el efecto de las hipoglucemias maternas sobre el feto no es
Es conveniente además.­ tan claro como el de la hiperglucemia, se ha demostrado que los valo­
• En las pacientes con diabetes gestacional indicar HbA1c y/o res promedios de glucemias menores de 85 mg/dl predisponen al desa­
fructosamina desde el momento del diagnóstico. rrollo de recién nacidos pequeños para la, edad gestacional. Esta situación
se asocia wn mayor riesgo de desarrollar resistencia insulínica y pos­
íI Solicirtar orina completa cada 2 meses. teriormente diabetes tipo 2 en el futuro.
j En las pacientes que presentan anemia se reemplaza la hemoglo­
bina glicosilada por fructosamina, que s'e aconseja repetir cada 3 2. Ganancia de peso durante el embarazo: Según la National Academy
semanas. of5cience, la ganancia óptima de peso durante la gestación depende
del estado nutricional previo determinado por el índice de masa
corporal (IMC).
Tratamiento metabólico durante el embarazo No olvide que...
Objetivos No se considera conveniente el descenso de peso durante el embarrlZl1
en las pacientes obesas.
La obtención de UIil control metabólico óptimo, que permita
asemejar los niveles glucémicos a Los de las, embarazadas no Observe en la Tabla 3 las recomendaciones referidas al atwwlIl (j d,'
dialbéticas, para evitar las complicaciones feto-neonatales. peso según el IMe registrado al inicio del embarazo.
Respecto del control metabólico se considera óptimo lo establecido
por el Consenso de Diabetes y Embarazo de la Sociedad Argentina de
Diabetes.

,..68

cando si es necesario el plan de alimentación, para lograr la ,evolución


IMe Se recomienda el aumento de propuesta del peso materno y también del creci miento y desarrollo fetal.
-
Menor de 19,8 = bajo peso 14 a 18 Kg
--­ En las pacientes obesas no es conveniente realizar una restricción
Entre 19,8y 26 = norma peso 11 a 14 Kg calórica mayor del 30% del va~or calórico total, ya que dietas más
Entre 26 y 29 = sobrepeso
- -
7 a 11 Kg
- restrictivas producen aumento significativo de la cetonemia materna. Por
el contrario, la restricción calórica del 30% reduce el índice de macrosomía
Mayor de 29 = obesidad 7 Kg
sin riesgos p'ara el feto.
Tabla 3.
o Hidratos de carbono
Se recomienda que ellSO a 60% del valor calórico total sea cubierto
Tratam~ento
por hidratos de carrbono con predominio de poLisacáridos para evitar
los elementos terapéuticos de mayor jerarquía durante el embarazo son: los picos de hiperglucemia que producen los hidratos de carbono simples.
Es necesario que estén armónicamente distribuidos a lo largo del día,
1" Educación diabetológ~ca,
en 3 o 4 comidas y 2 o 3 colaciones. El objetivo de este fraccionamiento
~). Plan de alimentación ,es evitar los ayunos prolongados que pueden acarrear hipoglucemias y
~;. Insulinoterapia cetosis de ayuno.

En algunas embarazadas se podría agregar un cuarto elemento que es I Protefnas


la actividad física. En el primer trimestre la recomendación proteica no varía con respecto
1" Educación diabetoLógica: el primer paso para la atención en diabetes a la indicación previa al embarazo. Es importante recordar que el 50% de
yembarazo es poner en marcha un programa de educación diabetológica las proteínas debe ser de alto valor biológico. Durante el segundo y
personalizado, según las características de cada paciente. tercer trimestre $(? agrega 12 g de proteínas de alto valor biológico. Es
conveniente realizar este suplemento desde el comienzo de la gestación
2- Plan de alimentación: es fundamental en el tratamiento de las en embarazadas de bajo peso.
embarazadas con diabetes. La prescripción ideal es aquella que pro­
vea a la madre las calorías y ~os nutrientes necesarios para el desarro­ ! Grasas
llo normal det embarazo y del feto, si-n producir grandes oscilaciones
Cubren el resto del valor calórico, oscilando entre el 30 y 35 % del
de la glu(emia. Los requerimi'entos de principios nutritivos son
valor caLórico total. En mujeres con hipercolesterolemia previa es necesario
equivalentes a los de las gestantes 110 diabéticas.
reducir las grasas que contengan ácidos grasos saturados y no superiJ!' lO',
300 mg diarios de colesterol de la alimentación.
• Valor colóri€o total
11I Vitaminas
Se considera que conviene mantener el valor calórico total previo
durante el primer trimestre del embarazo y a partir del segundo trimestre Las vitaminas pueden ser cubiertas por el plan de alimentlCirllll'XI ¡'pi o
agregar 400 calorías diarias para mantener la progresión adecuada del el requerimiento de folato. La suplementación de fa latos prcvi~, "I.'l1llldl.i/41
peso. Es importante el seguimiento de la curva de peso materna, modifi­ Ydurante las primeras semanas de gestación se asocia r.011 11II'lll1l ¡lit 1111'111 1.1

270
de' malformaciones del tubo neural. Por lo tanto, la prescripción de ácido entre anticuerpos amtii nsuli na e hi poglucemia, hi pocalcemia,

fólico es parte de ra terapéutica del embarazo programado. Cabe señalar neonatal y síndrome de distrés respiratorio.

que aLgur;los estudios han relacionado prematurez y bajo peso al nacer


con déficit de folato después de la 28° semana. Sobre la base de estos hechos, es importante que la paciente en
tratamiento insulínico tenga un bajo nivel de anticuerpos antiinsulina
Minerales desde el comienzo de La gestación.
Una alimentación adecuada cubre los requerimientos. El requerimien­ A tal efecto, lo ideal seria.. ,
to de hierro se ha estimado en 30 mg/día a partir del segundo trimestre.
En general, la alimentación no llega a cubrir esa cantidad, por Lo cual Utilizar insulina humana desde, por lo menos, 6 meses antes del inicio
debe prescribirse suplementación medicamentosa, de la gestación.
Respecto al sodio, es importante señalar que ni los edemas ni la Este es uno de los aspectos básicos de la programación del embarazo.
hipertensión inducida por el embarazo son sodio-dependientes, por lo
cual las dietas hiposódicas no tienen indicación en estos cuadros. En "
cambio, en la hipertensión crónica es necesario la prescri peión de una Resultados
dieta hiposódica con 3 a 4 g de cloruro de sodio por día.
Fibra
Con esta metodología de tratamiento en 276 hijos de madres con
diabetes gestacional los resultados fueron los siguientes:
Hay dos tipos de fibra: soluble e insoluble, ambas son importantes en
las mujeres embarazadas con diabetes. La fibra soluble disminuye la Macrosom;a: 11.23%

velocidad de absorción de la glucosa a nivel intestinal y como conse­ Hipoglucemia: 10.8%

cuencia, reduce tos picos hiperglucémicos. La fracción insoluble aument?


Malformaciones: 1.47%

el volumen de las heces, mejorando la motilidad intestinal, disminuida


fisiológicamente por el embarazo. No debe exagerarse la prescripción de Ictericia: 22.1%

fi'bra, a ¡fin de evitar su efecto en la reducción de la absorción de nutrientes Enfermedades respiratorias: 5.5%

tales camo hierro y calcio, entre otros. Mortalidad perinatal: 0.72%

• Insulinoterapia: en las embarazadas con diabetes gestacional cuyas Estos resultados demuestran la pertinencia de las medidas
glucemias en ayunas son mayores de 90 mg/dl y/o postprandiales diagnósticas y terapéuticas planteadas en este capítulo, En conse­
mayores de 120 mg/dl, se recomienda comenzar con insulir:1oterapia. cuencia y para cierre del mismo, lo invitamos a que luego de su lecturl1
verifique el grado de acierto de las respuestas que dio a las preguIl1 jI',
La utilización de insulina humana es de gran importancia, ya que que le hicimos al comijenzo.
minimiza la formación de anticuerpos antiinsulina que han sido
fuertemente relacionados con morbilidad fetal. Nuestro grupo ha
encontrado una clara relación entre alta tasa de anticuerpos y no olvide... más importante que el número de respuestas 01/:11111/11" ,",
antiinsulina y macrosomía fetal (Alvariiias J, Poskus E, Salzberg S. cuanto más conoce ahora y cuanto más podrá hacer por la SiJ/lII/ 1/1",11/1/('/11'
15 th IDF Congreso, 1994). Otros autores hallaron correlación positiva de sus padentes,

272
• Bibliografía 22. Rizzo r, Metzger B. Correlations between antepartum maternal metabolism and intelLigence
of oFfspring. N Engl J Med 325:911, 1991.
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Foz de Iguazú, 1995.
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pregestational diabetic patíents and in tliieir newborns. Abstracts 15th IDf Congress. PS
1034. A412. Kobe 1994. 25. World Health OrgaAization Study Group: Prevention of Diabetes Mellitus. Geneva, WHO,
1994. Technical Report Series 844.
3. Alvariñas JI. Salzberg S, Glatstein L. y{ol. Diabetes y Embarazo. Documento de consenso en
Rev Soc Arg. de Diabetes; 29: 211, 1995.
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Sociedad Argentina de Diabetes A. C. Buenos Aires, 1998.
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development of clinical diabetes after gestational diab~tes. Diabetes Care 16: 1231, 1993. Antecedentes Familiares: padre COIíl diabetes tipo 2.

7. Eatalano P. Incidence and significance of islet cell antibodies in women with previous Antecedentes Obstétricos: 2 embarazos previos que concluyeron con 1

gestational diabetes. Diabetes Care 13: 478, 1990. parto vaginal con recién nacido de peso 3290 g (hace' 4 años) y con una

8.. D~mm P, Kuhl C. IPrevalence and predictive value o()f islet cell antibody in women with cesárea con recién nacido de 4450 9 (hace 2 años). '

gestational dia~etes. Diabetes Medicine 11: 558, 1994.


No se le hizo estudio del metabolismo glucídico en las gestas anteriores.

9. Di Mario U, Dotta F Humoral Inmune Aspects in 'Díabetíc Pregnancy. Immunobiology of


normal and diabetic pregnancy. Ed. Andreani O. John Wiley & Sons Ltd. 1990. Embarazo actual: Peso al i·nicio del embarazo 89 kg.

10. Elisabeth R, Tri mble f fer the HAPD Ceoperative Research Group. Hyperglycaemia and Adverse
Examen jfsico: Peso 97 kg, talla 1,63 m; IMC 36,6.

Pregnancy Outcome (HAPO) Study: Achieving uniformity for plasma glucose measurements. Aparato respirat~)rio s/p. Aparato circulatorio ruidos cardíacos normales,

Diabetes 50 (Suplo 2 ): A 539, 2001. Presión arterial 110/60 mm Hg. Abdomen globuloso, útero con aumento

11'. 3ang H, Metzger. Smening for gestational diabetes mellitus in Korea. IntJ Gynecol Obstetr de tamaño acorde con estadía de su gestación. Miembros inferiores con

51: 115,1995. moderado edema bilateral.

12. Karlson K, Kjerlmer. The outcome of diabetic pregnancies in relation of the mother blood Diagnóstico: embarazo en persona obesa.

sugar. Am J Obst Gyn 112: 372, 1973.


Diagnóstico diferencial: debido a la presencia de factores de riesgo para

13. King H. Epidemiology of glucóse intolerance and gestational diabetes in women of diabetes gestaci(j>nal (mayor de 30 años, antecedentes de macrosomía fetal,

childbearing age. Diabetes Care ($upl. 2): B18, 1998.


14. Kjos SL, Buchanan TA. Gestational diabetes mellitus. N Eng J Med 341: 1749-1756,1999.
padre con dia,betes tipo 2, obesidad), debe pesquisa-rse su posible existencia.

15. Kno,pp R, Magee M. Hipocaloric diets· and ketogenesis in the management of obese gestational
Exámenes de laboratorio: glucemia (82 mg/dl), gCucemia 2 hs desplLJés <le

diabetic women. J Am Coll Nutr 10: 649, 1991. sobrecarga (117 mg%), colesterol (247 mg%), triglicéridos (153 mg%),

16. Langer 0, iLevy y col. Glicemic control in gestational diabetes: how tight is tight enough: cHDL (39 mg%). Orina completa (normal).

small for gestational age versus large for gestational age. Am J' Obstet Gynecol 161: 646, Seguimiento: a pesar del resuCtado normal de la glucemia 2 hs después de

1989. la sobrecarga con glucosa, debido a la presencia de factorE:S de riesgo se

17. Metzger B, Coustan D. Summ~ry and Recommendations of the fourth InteTllational Workshop­ repitió ta prueba entre la 31 y 33 semana (147 mgjdl).

Conference ón gestational diabetes mellitus. Diabetes Gare 21 (Sup1.2): B 161, 1998. Diagnóstico final: diabetes gestacional.

18. Met~ger B. Organizing Comittee: Summary and Recomendations of the Third International Tratamiento: comenzar inmediatamente con educación diabetol6gica y un

WOfkshep-Conference 01'1 Gestational Diabetes. Diabetes 40: 197, 1991.


plan de alimentación adecuado. Automon¡itoreos glucémicos pre y postprandiale~

19. National Acad'emy of Sciences. Guideline for nutrition during pregnancy. Diabetes 40 (Supl.
él, 1991. persiguiendo el objetivo de tener glucemias en ayunas entre 70 y 90 mg/dl y 2

20~ Pendergrass M, Fazoni E, De Fronzo R. Non-insulin-dependent diabetes mellitus and gestational


hs postprandial menor a 120 mg/dl. Si no se logra el objetivo terapéutico en 7

diabetes meltitus: same disease another na me? Diabetes Rev 3: 5'66,1995. días con el plan de alimentación iniciar insulinoterapia (0.1-0.2 unidade~ pOI

21. Phillips D. Bil'!:h weight and the future developmentof diabetes. Diabetes Care 21 (Suplo 2): kg de peso actual) y corregir con insulina regular si los valores gluc(jm ¡CU!.

B159, 1998. preprandiales son mayores a 120 mg/dl.

274
Caso Clinico 2 Educadón tera péutica
Paciente de 20' años que acude a la consulta en la 20° semana de embarazo.
de las personas con diabetes
Antecedentes. familiares: no presenta antececlentes de diabetes.

Antecedentes. Obstétricos: ,paciente primigesta. Peso al ini(io del emba­

razo 59 kg.
Juan José Gagliardino, Daniel Assod¡ Gabriel G. Gagliardino,
Examen físico: peso 62 kg, talla 1,68 m, IMC .21,9.
[{ha Lahera¡ Liliana Rizzuti y Zulma Zl1friategui
Aparatos respilratorio y circulatorio s/p·; presión arterial 120/62 mm Hg.

Abdomen correspondiente a embarazo de 5 meses.

Diagnóstico: ,embarazo en persona sin factores de riesgo gestacional.

Exámenes complementarios: glucemia (78 mg/dl), colesterol (195 mg/

dl), triglicéridos (98 mg/dl), cHDL (45 mg/dl). Orina (normal).

Seguimiento: dado que la glucemia en ayunas es normal se solicit6 prueba


¿ Recordamos juntos «cosas dichas» ... ?
de tolerancia oral a la glucosa con 75 9 de glucosa con determinación de

la glucosa plasmática a los 120 minutos entre la 24 y 28 semana' (117 mg/


Desde el capítulo 1 hemos venido diciendo que la diabetes mellitus (DM) es
dl). En consecuencia se descartó la diabetes gestacional y se continuó el

seguimiento obstétrico.
una enfermedad crónica que requiere tratamiento permanente a partir..del
momento de su diagnóstico.
Ya en 1922 lo destacaba el Profesor Joslin yrecientemente lo confirmaron
diversos estudios previamente mencionados como Malmo, DCCT, UKPDS,
DaQin, DPP2;
«la educación de las personas con o en riesgo de desarrollar diabe­
tes, es un' componente esencial de las estrategias de prevención y
tratamiento.»

• ¡¡Pero atendón!!!
Ella no reemplaza a la terapéutica tradicional (plan de alimentación,
actividad física, antidiabéticos orales e insulina), si·no que:
.. Proporciona el estímulCl necesario para iniciar un cambio impor­
tante adoptando estilos de vida saludables.
• Permite comprender e integrar las indicaciones terapéuticas f¡wo
reciendo su cumplimiento y consecuentemente su efectividilll.
• Brinda un apGYo social y emocional que ayuda a mejomr \.1 e ,,1 i .
dad de vida del paciente.
" Contribuye a disminuir los costos del tratamiento d(~ 1.1 ('lilC'líJlI'lhul.

276
I

OlDervando Ila Figura 1 se dará cuenta de cuál debería ser el obje­ y si... «una imagen vale más que mil palabras».... ¿comprende por qué
~'I
t¡vo central de la educacion de personas con diabetes. elegimos el monigote?
Por supuesto que si usted es un buen dibujante o can'catun'sta, podrá
recrearlo y convertirlo en un afiche para colgar en su consultorio... y
¡¡¡enviarnos uno a nosotros!!!!. (Le reservaremos los derechos de autor).
Continuemos ahora con la construcción del marco teórico.
La educación es un proceso continuo ,e ind~spensable para
optimizar ,Los resultados de~ tratamiento y mejorar la caLidad de vida
de las personas con diabetes. Como favorece la adhesión razonada a[
tratamiento y la optimizadón de sus resultados, se la denomina «edu­
cación terapéutica»,
1\
Dijimos ya que...
No debemos confundir información con educación. La primera, si '
bien es importante, no necesariamente implica un cambio en la ac­
Figura 1.
titud del paciente.

Seguramente usted estará pensando que el monigote está contento ¿Cuóler, son a su criterio los argumentos que sosti~1Jen estos qfirmaciones~
pues ahora está integrado y tiene base de sustentación. Aunque le Escríbalos a contim/Oci6n recordando que le :>erán Miles. para cuando deha
resulte pueril esta primera explicación, elegimos la imagen por el valor conversar cm]' :sus pacientes.
simbólico que ,adquiere en la interpretación de la idea rectora:

La persona con diabetes educada abandona el papel de


espectador pasivo y adopta el de protagonista responsabLe de su Los hallazgos de las investigaciones tanto médicas como pedagógicas
tratamiento; se convierte en un integrante fundamental deL equipo nos permiten sostener que:
de salud sin cuya participadon activa es difíciL alcanzar las metas
La edl!lcación de las personas con diabetes es un proceso continuo y
terapéuticas establecidas.
progresivo porque:
• solemos olvidar lo aprendido,
En otra oportunidad, en este' manual' hemos afirmado... • recibimos las enseñ.anzas en un momento poco propicio,
«el mensaje emitido no es igual al mensaje recibido», • el programa inicial no fue el más adec~ado,
nunca tan claro como en este caso, Si el paciente no se convierte en un • con el correr del tiempo el tratamiento puede sufrir nlte'loIl jll

participante activa en el proceso de cuidarse, «seguirse», «monitorearse», nes O pueden apareoer nuevas técnicas que requien!t1 1111 IltlC'VII

todos los recaudos que el equipo médico tenga serán insuficientes. aprendizaje.


i
27J8
~q r
I

1I

lLJJ.L.

• las motivaciones y tos efectos del aprendizaje se debilitan o " La familia que comparte la alimentación y las actividades del
desaparecen y se establecen discrepam:ias entre lo que una paciente.
perS(i)na sabe y lo que hace.
~ Si es posible, el entorno de la persona con DM incluyendo compa­
Por lo talnto, todo programa de educación continua debe veri­ ñems de trabajo, amigos, maestros (en caso de niños) que pue­
ficar periódicamente sus resultados y de acuerdo con ellos refor­ den ayudar en ciertas situaciones como hipoglucemias.
zar motivaciones, renovar y actualizar conocimientos e incorpo­ • La población en general para facilitar y promover el diagnóstico y
rar prácticas pertinentes. la consulta precoz.

Lo antedicho nos enfrenta a dos preguntas claves: .. El equipo de salud que ayudará a uniformar los mensajes y a
ampliar la información brindada a los pacientes.
¿Quién debe educar al paciente? Y. .. ¿sello educar al paciente diabético? Estas disti ntas alternativas requieren estrategias y recursos huma­
nos y económicos diferentes, pero cualquiera sea la elegida, es preciso
¿Usted Que opina? diseñar el programa para lograr los efectos mencionados

¿A qué nos refen'mos con esto?


Aque aquí no cabe el dicho «cada maestrito con su librito», pues si
usted pertenece a un equipo de salud, todos los integrantes deben
¿Que sabemos? conocer los objetivos del programa y S1 trabaja en soledad, debe dejar
registradas las acciones que llevó a cabo para que eventualmente otra
¿ Quién debe educar al paciente? persona pueda continuar la tarea iniciada (porque «Gilgamesh el
Todos ~os integrantes clel equipo de salud según las circunstancias, inmortal» y «FUlnes el memorioso» son obras de la literatura... nosotros
pero empleando técnicas educativas apropiadas. La educación la inicia somos pobres mortales olvidadizos ¿no?)
el médico al hacer el diagnóstico, la continúa durante cada consulta y,
de ser posible, se completará en centros o en grupos de educación con Después de esta parrafada vamOs a ayudarlo en la:
experiencia. PLanificación de un programa de educación
Si bien es ideal contar con un equipo de educación interdisciplinario
Los pasos o componentes que no deben estar ausentes son:
(médicos, nutricio nistas, enfermeras, profesores de educación fisica,
podólogos, pedagogos), suele lograrse éxito empleando recursos mas 1* Diagnóstico de situaci Ón
modestos. 2. Objetivos
3. Contenidos

¿A quién educar?
4· Actividades

Los destinatarios son múltiples: 5. Recursos didácticos

• La persona con DM es la primera destinataria de la educación 6· Métodos de enseñanza-aprendizaje y

terapéutica. • Evaluación.

80
Desarrollaremos en forma breve cada uno de ellos. A medida que lo identificar las discrepancias y las coincidencias.
hacemos le sugen'mos que en un texto paralelo vaya escn'biendo su Los objetivos deben ser razonables y formulados en forma clara y
propia planificación a manera de ensayo, para que alfinalizar la lectura concisa.
de este capítulo usted ya tenga un primer borrador de trabajo. No deje
de hacerlo. Le resultará muy útil para la evaluación final del curso. También debe asumirse que el proceso de :La enfermedad, el estado
~sicológico y las sitlJlaciones sociales pueden cambiar obligando a
modificar los objetivos iniciales, por to que ellos deben evaluarse
1- IDiagnóstico de situación: Par,a desarrollar un programa de educa­ periódicamente.
ción de personas con DM exitoso se requiere conocer el nivel edu­
cativo y socioeconómico de la población a quien va dirigido, eL No olvide que:
promedio de edad y tipo de DM, sus costumbres y hábitos dietéti­
cos, sus conocimientos acerca de la enfermedad, su grado de acep­ Cualquier objetivo terapéutico se Logra más fácilmente si es
tación, sus motivaciones y sus miedos. Esta información permite limitado y razonable.
determinar tanto el momento oportuno de inclusión del paciente
A continuación le presentamos un ejemplo donde se destacan las
en un programa de educación, como fijar sus objetivos, contenidos,
actividades y recursos didácticos. Igualmente se debe valorar el
características generales que debería considerar al expresar sus objetivos:
impacto de la DM y de Sl!J tratamiento sobr,e los hábitos de vida, el
grado de control metabólico al que está dispuesto a acceder y la Que el paciente realice correcta y regularmente
satisfacción del paciente con eL proceso de educación proplJesto. r el automonitoreo glucémico con tiras reactivas
I , i -
Breve Claro Simple Evaluable
'Mi d~agnóstico

Sexo:
Los párrafos largos Es aliada de la I En un lenguaje De manera de poder
IEdad:
Cumple la dieta: Sí o no muchas veces concisión. I accesible a observar si se

Motivaciones
confunden (y no
Sé lo que todos. curr¡plió o no con
Nivel Social:
los leen!!!). quiero lograr. criterios también
EscoLaridad alcanzada
Nivel Económico

Expectativas
I elaborados por usted.
Temores

Otras a su criten'o ..

Lo·s objetivos generales de la educación de las personas


con DM apuntan a:
2- ObJetivos: al iniciar un programa de educación se debe definir qué
se preterilde alcanzar. HabituaLmente se espera lograr un cambio en incrementar su participación ,artiva en el autocuidado para
ciertas áreas de madurac:iólíl, de conductas cognitivas, psíquicas, mejorar su control metabólico, prevenir las complicaciones
ñsicas, afectivas y sociales del paciente. crónicas y mejorar su calidad de vida.
Es necesario definü objetivos educativos a Largo, mediano y C0rto
ptazo, con la participación actíva de los pateientes y los integrantes Al decir su participación activa, usted esta:rá ob~;erVoll1dll
del equi'po de salud ya que, frecuentemente las expectativas de [que este es un objetivo de ambos, del equipo médico V dt·' \101
los, pacientes y las de los profesiona[es difieret:l, debiéndose ciente y está formulado en términos de lo,gros o prop{I'.ifl1't Ifill'

282 1\
deberá aLcanzar su paciente, es decir que es «para el paciente» no «para No cabe duda que:
eC médico». Alcanzar ·estos objetivos requiere la motivación y el compromiso
Esta diferencia no sutil debe tenerLa siempre presente. adquiridos por el paciente. La promoción de estas dos condiciones se
facilitan expLicándole al paciente que conocer mejor su enfermedad y
Los objetivos especi:ficos, derivados de ellos, señalan las metas de dominar nuevas técnicas Le permitirá tomar decisiones apropiadas con
cada unidad del Programa. Ellos ]nclilJyen: respecto al tratamiento cotidiano, lograr hábitos de vida más flexibLes y
reducir el riesgo de aparición y progresión de las complicaciones crónicas
• Aumentar el conacimientQI sobre, La D'M y los factores de riesgo de la enfermedad.
card~ovas(Ular asoQ;iados';

• Presentar conocimientos ydesarrollar mabilidades para ejecutar técnicas y tenga en cuenta que:
de autoJillonitoreo (clínico y metabóLic01 e interpretar sus resultados;
La amenaza de las complicacioliles tardias no debe utilizarse como
Exponer las nociolilas esenciales para adaptar un plan de alimentación única justificación de la educación.
tanto a su tip0 l€ e medicacióm (insulina a antid~aMticos orales) como
a Sl!JS. circunstancias fisJioléJgicas {crecimiento, embarazo) o régimen Ahora le llegó el tumo a usted de formular objetivos, pero no se preocupe...
de' vidil'; seguramente no diferirá con 105 que presentamos ya que hemos tratado de
abarcar todas las intancias a considerar en el programa de educación. Lo
.. Conocer, si recibe insullna, los distintos orígenes y tipos, la forma
que sí debe quedar claro ,es que siempre será preciso adaptarlos a sus
correclla¡ de eLecc:ión, carga de jeringas, aplicación y adaptación de la
pacientes... por eso reaNza primero el diagnóstico!
dosis a distintas situaciones de la- vida cotidiana;
Reconocer la hipogluG:emia y etras compLicaciones agudas, sus síntomas,
liIlétodos y técnicas de diagnó·stico pre€oz y de prevención y ¿ Continuamos?
tratamiento;
3- Los contenidos, que son los mensajes y la información diabeto~ógica,
Brindar información sobre complicaciones cróni€as, sus síntomas, deben ser comprendidos, aceptados y aplicados por eL paciente. Se~án
prevenciór1', diagnóstico precoz y tratamiento; definidos en función de Ilos objetivos propuestos y adaptados a las
• Recon0cer la rmportancia de la práctica] regular de actividad física, condiciones de la poblacíón a educar. Deben estar actualizados y
' consensuados entre todos los integrantes del equipo de salud para
sus indicaciones, precauciones y restri€ciones;
que la informacion sea provista en forma homogénea.
• VaLorar la importa1ncia y necesidad de adoptar una sistemática para el
cuidado de los pies y ,efectuar la consulta precoz ante lesiones para Escribirlos, discutirlos y consensuarlos facilita las posibles modifica­

lograr su prevención y tratamiento adecuado; ciones que seguramente deberá reaLizar el equipo de salud.

!t Conocer las características de diferentes métodos anticonceptivos y 4- Las actividades del Programa también se adecuarán a tos objetivo~; IIi
de planificación familiar, al iguaL que la puesta en práctica de cuidados y a los conocimient.os brindados, por ejemplo, pradicand~) 1;1

especiales antes y durante eL embarazo; determinación de la glucemia (glucosuria) con tiras reactivi1~; n d

Identificar conductas apropiadas a adoptar frente a situaciQnes­ examen de los pies. Es conveniente incluir en estas actividildcs él Lo~;

probLema de la vida cotidiana. famiLiares de la persona con diabetes.

5~ Los recursos didácticos se caractertzan, en diabetología, por el


mode~Q vivo que siNe de experiencia individual o grupal. Todos apren­
demos comparando, cometiend0 errores, analizando sus causas y
descubriendo persoraalmente la" soluóón conecta. P0r lo tanto el equipo • Diagnóstico
de sa~ud debe ayudar al paciente a descubrir por sí mismo estas .: -------------_ .. ­
• Objetivos Generales
sotiuciones, preparándolo para enfremtar con éxito los problemas que
le plantea diariamente su erJfermedad. Otros recursos a considerar son Objetivos Especificos
el bempo, el ambiE~'fi1te, la aparat0logía o instrumental y la • Contenidos
documentación bibliográfica.
• Actividades
El tiempo de Uf,] programa valiÍa' según sus objetivos, su intensidad y el • Recursos didácticos
ritmo de las metas a alcanzar. Expertos d'eL Gnup0 para el Estudio de la
Tiempo total estimado
Educación en Diabetes de la Asociación Europea de Diabetes (DESG)
han establecida que una persona con DM tipo 2 recién diagnosticada Duración de cada encuentro
que' inicia tratamiento s"álo con dieta, requi'ere para su educación 9 o reunión

horas (mínimo 5 horas) y un ad,icional de' 10 horas dura,nte el primer Lugar a realizarse

año de control y seguimiento. Ayudas visuales a utilizar.

Equipos necesarios

El ambiente es un elemento importante ya que un entorno agradable Folletos a entregar (¿fotocopias?)

favorece en desarrollo del pmceso educativo.


Divulgación del encuentro entre

Lél1 aparatología, aunque simpre, requiere un mínimo de entrenamiento los pacientes y familiares

para SUI manejo adecl1ado. Em cuanta a los materiales didácticos pueden Invitación/participación de

emplearse desde el pizarrón y láminas hasta videos y películas. otros colegas

La documentación bibliográfica (material escrito) es una a1yuda


importante para toeo pnDgrama de educaci0m. SiNe de recordatorio y
referencia para nefotzar el c(!>ntenid0 deU resto de las ensei'lanzas. lEs Destacaremos ahora algunas modalidades de trabajo con los pacientes....
esencia~ que este material sea ameno y q~e siNa de guía práctica para
ayudar a la persona a mejorar el manejo d~ario de su enfermedad. Para ello le proponemos que analice la Figura siguiente y explicite los
dos modelos reflejados en ella. Indique a su cn"ten"o, los pro y los
Es PQr eso' que hemos insistido en diversos capítulos de este manual ,en contra de cada uno de ellos.
q.ue vaya escn"biendo, recomendaciones o pensando cómo haría folletos
sobre los diversos temas. tlíQtalfos. Si lo hizo ya tiene parte de la tarea Después de haber reflexionado sobre esta propuesta y realizado el
médicoyeducativa realizada. análisis solicitado, /0 invitamos a seguir leyendo.

Observe que a continuación le sugen"mos seguir completando la planifi­


cación de su programa de educación diabetológica.

286
b) La técnica grupal es muy uitilizada, Se aconseja formar grupos de cinco
W[¡ N-'· (:.JilS~
a aiiez pacientes, en los que se puede incluir a sus familiares. Su eficacia se
a) Tradicional b) incrementa si los grupos se homogeinizan de acuerdo al tipo cl'e diabetes,
nivel soóocultural, edad e intereses de los participantes.
Médico y Paciente 11 Médico QY Paciente
'Existe una gran variedad de técnicas y quienes estén interesados en su
0 S>
0 conocimiento y utilización pueden consultar textos especializados o grupos

D íJ 11 Diagnóstico Q
Entiende el
problema
con experiencia que le brindarán información sobre programas y cursos de
capacitación para imp[ementarlos.

Diagnóstico y Indica
tratamiento
11 U {]
Acuerdan tratamiento
'ventajas: Promueven el intercambio de conocimientos y experiencias,
permiten compartir la solución de problemas, promueven la maduración
1
de la relación entre eL paciente y su familia (cuando ambos participan en
Figura 2. los Programas) y fomentan el autocontrol y La pertenencia.
Desventajas: iNo siempre es posible seleccionar pacientes con anteoedemtes
simitares, lo cual puede ser obviado si el educador posee habilidades
6- tos' liIifere:ntes métodos de enseñan~a-apliendizaje (individual y
gm~al), sin ser mutuamel1te excluyentes" deben seleccionarse y
para Llegar simuLtáneamente a los distintos niveles de los integrantes
combinarse para adaptarlos a distintos pa C':ientes y situacio,nes.
1
del grupo. Dificulta su desarrollo la presencia en eL grupo de pacientes
con atención irregular, indifefentes, tímidos, que no participan o que
a) Técnica individual: a emplea~ en cada visita periódica al médico, monopolizan la discusión.
aprovechandQ la ocasióliIl para eva~uar conocimientos, habilidades y CuaLquiera sea la técnica utilizada!, debe crearse un clima de acepta­
actitudes, reforzar conceptos e incorporar nuevos conocimientos. ción entre el equipo docente y los pacientes para que éstos no sientan
Es adecuada tanto al inicio deL tratamiento como durante el control y inhibiciones para discutir sus problemas. No deberán manifestarse des­
seguimientl!>. Debe promoverse un prolí:eso dinámico en lugar de la acuerd0s entre los miembros del equipo de frente al paciente, pues ellas
estrategia alásica unidireccional (figura 2.0,), estableciéndose una relación generan confusión y rechazo del grupo.
ecuánime, interactiva y negociadora con eL paciente para la adopción de Los miembms del equipo deben estar siempre dispuestos a escuchar al
Los objebvos y estrategias del tratamiento (Figum 2.b). paciente y brindar no sólo la información pertinente, sino que deberáln
lograr que el paciente sienta que es respetado como persona y conSi­
Ventojas: se adapta a las necesida,des, habiLidades, intereses y
deradQ (amo un integrante más del equipo, alentándolo a aceptar una
conocimientos preexistentes de cada paciente; el diáLogo frecuente permite
cuota de responsabitidad progresiva en el control y tratamiento de su
una.realimentación directa para que el paciente, protegido por La ir1timidad,
enfermedad.
exponga sus problemas más fáci'Lmente que en púb~ico; en muchas
ocasiones es LaI única aLternativa disponible" EL docente debe utilizar un lenguaje comprensi1ble ya que la utiliz;]1 jOl1
de términos excesivamente técnicos constituye una barreril polld Id
Desventajas: consume mucDo tiempo, ya ql!le el profesional en general no comunicación.
cuenta con las lioraiS necesar,ias para eSQ:uchar y explicar toda la
problemática a sus pacientes. elJ cada consulta. Recuerde que:

288
I

Cuando sea necesario dar un panorama realista (como en caso de Los cambios de actitudes, se verificarán duralílte el control de la

las complicaciones crónicas), debe evitarse crear un clima de. temor enfermedad y pueden evaluarse mediante parámetros clínicos,

y ansiedad extrema en el paciente. bioquímicos-metabólicos y terapéuticos.

En la Tabla que sigue, enunciamos algunos principios que creemos deben Todo lo amtedicho refleja nuestra experiencia de trabajo en este
sentido, es un proceso permanente, arduo y sin duda con altibajos,
guiar el accionar del educador.
pero con grandes satisfacciones cuando se ven los logros como mos­
tramos en la Figura 3, que refleja los resultados de la implementación
de un programa educativo para personas con diabetes tipo 2.
·"Ut: • •:.I.11 tll«;¡"UI:,lI
1I

Escuchar. Dar la palabra. I


PEDNID-LA: Programa educativo para personas con DM tipo 2
• Extraer y modelar antes que transmitir. Comparatir conocimientos. --------- -
Glucemia de ayunas HbAlc (%) Peso Corporal (Kg)

lOiLU
(mmol/L)

• Plantear objetivos modestos y alcanzables y ayudar al paciente a 90


planteárselos. 12

¡
8

• Facilitar la toma de decisiones, ofreciendo o mostrando alternativas. 80


4

• Informar sobre los progresos conseguidos, destacarlos y «socializarlos» OI I , 1 J I I

-6 O 12 -6 O 11 70·
i i -6 o 12

al grupo. meses meses meses

,- pre~~~~~ir:, ---~í~t:~~~~t~·lh_- T~i~I~~~~~~s


1 ...._ .. _~,,_._.... _._._.... . ._._._._ ._..... .. I

• Trabajar las emociones y no solo la razórl. PDB •


No juzgar, ponerse alIado, valorar la relación horizontal más que la

vertical.
1 1L 180 C=¡PS 7 3 I1

Despenalizar el error, entendiendo que «errar es humano».

I'::illhh 4:lli :I~ " "


-6 O
meses
12 -6 O
meses
12 ·6 ' O
meses

12
I

7- El proceso educativo comienza y culmina con la evaluación. Rea­ ------- -_._---- ------
Adaptado d4!' Ga9IJardino el ato Diabetes Care 2001
---".. I
lizada al final del proceso, determina los logros arcanzados por el Figura 3.
paciente o el grupo. La comparación de esos resultados con ~os
objetivos formulados al inicio del Programa sirve de realimentación
para ajustar parte o todo el proceso o por el contrario mantenerlo
debido al éxito alcanzado. Para terminar: ,1
j
La evaluación incluirá conocimientos, hablilidades y actitudes. Conclusión
Los conocimientos se pueden valorar utilizando una lista de temas La educación de las personas con DM es un proceso contimlO epI!'
relativos a la DM para identificar lagunas y errores. debe formar parte de todas Las modalidades de tratam jl'nl (J. lol
Para las habilidades se puede requerir la realización de una técnica
l
implementación satisfactoria de un programa educativo reqlljl'tl':
como el automonitoreo glucémico o glucosúrico () el examen de los pies. • Prestar especial atención dura1nte la entrevista inicial ,1 fd'. pi l'

90 - I~ 111 1,
LL
ocupaciones del paciente y tratar de ganar su confianza: un pa­ Bases para la prescripción de actividad
ciente ,que establece una relación de confianza con los miembros física en personas con diabetes tipo 2
del equipo favorece la adherencia a la educación y al tratamiento.
• Elegir objetivos concretos y alcanzables, que deben ser comparti­
> dos por el paciente y justificarlos adecllladamente. Nora Mercun' y Viviana Arrechea
• Involucrar a los familiares tan rápidG como sea posible.
• Optimizar la utilizadón del tiempó y las oportunidades para brin­
dar educación.
ít Evaluar periodícamente los progresos, logros y fracasos obteni­ Introducción
dos, modifical'ldo objetivos e if1lcorporando conocimientos y ha­
bilidades según necesildad. Los beneficios de la práctica regular de actividad física son sustan­
tl Actualizar los conocimientos específicos y pedagógicos de los ciales en la prevención y el tratamiento de la diabetes tipo 2. Tanto la
integrantes del equilpo. prescripción de un régimen sistemático e individual de actividad física,
,1) Homogeneizar el mensaje entre ~os integrantes del equipo. como las indicaciones para llevar un estilo de vida más activo, requieren
que el ·equipO' de salud evalúe el estado clínico y metabólico del paciente,
sus posibilidades y preferencias para determinar el tipo, frecuencia, du­
ración, intensidad y grado de progresión <de la actividad física. De este
modo puede optimizar la efectividad del ejercicio mediante la participación
del paciente en condiciones seguras, disminuyendo el riesgo de deserción.
• Bibliograña
1. Assal J.-Ph, G.oLay A. and Visser A.Ph. New trends in .patient education. A transcultural fl planteo ante/ior anticipa el objetivo central de esta unidad...
alnd inter-disease approach. WHO and University of Geneva Medical School, Excerpta
Medica, Int.Congress Series 1076,1995.
2. Gagliardino J, Etchegoyen G, the PEDNID-LA Research Group. Amodel education program
Reflexionar sobre la importancia de (Conocer el estado clílnico y

for peopLe with type 2 diabetes: a cooperative Lati n-American im plementation study. metabólico de personas con diabetes tipo 2, así como las posibili­

Diabetes Care 24:1001, 2001. dades y restricciones para la realización de actividad física, para

3. Gruesser M, Bott U. Ellermann P, Kronsbein P, Jorgens V. Evaluation of a structured


treatment and teaching program for non-insuLin treated type II diabetic outpatients in
lograr una adhesión a esa práctica que reduzca la posibilidad de

l5ermany after the nationwide introduction of reimbursement policy for physicians. Dia­ abandono con eL consiguiente beneficio para sw salud.

betes Care 16:1268, 1993.


4. Tnternational Cllrriculum for Diabetes Health Professional Education. lnternational Dia­
betes Federation, Consultative Section on Diabetes Education, 2002 Para comenzar este trabajo de estudio autónomo, le sugerimos una SCn'I'
5. MuLhauser I, Berger'M. Patient education-evaLution of a compLex imtervention. Diabetologia de preguntas para que empiece a «revisar» sus conocimientos previos .~(Jhre
45:1723, 2002
la temótica que nos ocupa.

Actividad I
I I
1 -Decimos que es importante indicar la práctica regulal ¡J,. ,/1 / /1'/tll/Il

292
jfsica a un paciente con diabetes tipo 2, pero ¿por qué? glucosa al sistema nervioso (Central, el niveL de glucosa sanguínea es cui­
_ ~.H o .~ - - _. H_·_·' - - - - - ­
dadosamente controlado durante el ejercicio. Por eso la hipogtucemia
- - - - ~ - - _. --_.. --- ._- - - - - -- ._- -- -- - - - ­
durante el ejercicio ocurre raramente en personas sin diabetes.
Usted sabe que...
2- Si pudiera establecer un porcentaje de «percepción sobre hará o no la
actividad jfsica que le indico», usted diria que las personas que atiende
Los mecanismos que permiten mantener una glucemia normal du­
a dian'o responden a la prescripción de realizar actividad jfsica,... :
rante el ejercido están mediados por ,el sistema endocrino y el siste­
% aproximado...
- ma nervioso simpático. Una reducción en la insulinemia y un aumento
Et paciente cumplirá...
. - del glucagón son necesarios para promover un aumento temprano
en la producción y liberación de glucosa hepática durante el ejercicio,
Sí, porque es m JY disciplinado y hace todo lo que le
dicen ...
mientras que en el ejercicio prolongado el incremento en los niveles
---- - ->--­ plasmáticos de glucagón y de catecolaminos parecen jugar el papel
Sí, al principio ,ues está preocupado, pero a la semana principal. Estos cambios corresponden a la reacción inmediata del
«larga todOl>
--~-
~
cuerpo a una sesión de ejercicio. Pero el cuerpo además responde al
Si porque la fam ilia lo acompaña estímulo repetido (práctica regular de actividad física), mediante
No, porque no ttiene tiempo, ganas diferentes mecanismos de adaptación tales como: aumento del
<
volumen minuto cardíaco y disminución de la frecuenda cardíaca
No porque trab ¡ja todo el día
- (Fe) en trabajos de intensidad submóxima yen reposo, que mejoran
No porque dice que: «entre los chicos y la casa me muevo nuestra capacidad y eficiencia durante el ejercicio.
todo eL día»
~
-
Ag reg ue otra ra zón de acuerdo a su criterio... La pregunta ahora es...

Después q.ue complete esta actividad de revisión lo invitamos a leer el ¿Qué sucede con este proceso en las personas con diabetes tipo 2?
desarrollo siguiente.

Respuestas msi.elógicas durante el ejercicio


El aumento del consurmo de energ,ía q~e ocurre durante el ejercicio • Actividad fisica y diabetes tipo 2
i'ndlJce cambios fisiológic0s tales como aumento del gasto cardíaco, Las personas con diabetes tipo 2, al igual que las portadoras del
redistribl!lcí'ón Elel flIujo sanguíneo y mayor flujo capilar, que promueven un síndrome metabólico, presentan como característica una disminución de
aumento del aporte de oxígeno y de sustratos metabólicos a los tejidos. la respuesta del hígado, del músculo y del tejido adiposo a la insulina
(insulinonresistencia), acompañada de hiperinsulinemia relativa.
Para satisfacer sus T'lecesidades, energéticas, el músculo esquelético
utiliza sus, propias rese.rvas de glucógeno ytrriglicé,ridos, así cormo los ácidos Durante el ejercicio la contracción muscular tiene un efecto simitar al
grasos litDrces provenientes de lal lipóLisis de los triglicéridos del tejido adi­ de la insulina. La contracción muscular ,aumenta la entrada de gl.UCOSJ ,~
Jiloso y de la glucosa liberada por el hígado. Para asegurar la provisión de las células por incremento en el número y actividad de los tranr,pbrt'ldo­

2'94
(:i:',i:'
---

res de glucosa ubicados en la membrana celular. Posteriormente aumenta Recuerde que además. debe mencionárselo a su paciente para no crear
su fosforilación y depósito en forma de glucógeno. Estos efectos requie­ falsas expectativas, no olvidando que el logro de estos beneficios está
ren la presencia de una cierta cantidad de insulina, ha1bitualmente dispo­ sujeto a van-ables personales.
nible en personas con diabetes tipo 2. Los fenélmenos descriptos condi­
cionan un aumento de la sensibilidad de los tejidos periféricos a la ilnsulina IBeneficios l..3'~
Plazos
....
­ ...... L~rg:?-..
Mediano
que se mantiene por horas o días después de finalizado el ejercicio según -
1- Aumenta el consumo de glucosa
la intensidad y volumen del esfuerzo. El aumentG de la sensibilidad a la
insulina y el consecuente mejor control de la glucemia, ocurren en forma §menta la respuesta de los te~~s a la insulina
independiente del descenso del peso corporal. 3- Disminuye la concentración basal y postprandial
de glucosa e insulina
En presencia de insulinorresistencia disminuye la síntesis de óxidiD ;,,- Mejora los niveles de hemoglobina glicosilada

nítrico en las células endoteliales, fenómeno que reduce La respuesta - " -~

vasodiLatadora de la insulina resuLtando en una reactividad vascular anor­


15- M;j~ra el perfillipidico:
mal. El ejercicio aumenta eL factor de relajación endoteLial, incrementando '" disminuye los triglicéridos
la vasodilatación y disminuyendo La tensión arterial elevada, un factor de e aumenta la concentración de HDL colesterol

riesgo cardiovascular con frecuencia asociado a la diabetes tipo 2. • disminuye ligeramente la concentración de LDL
colesterol
Además, hay evidencias múLtiples que confirman que la práctica regu­ ---­ - -
lar de actividad física reduce en forma significativa el riesgo de aparición 6- Contribuye a normalizar la presión arterial
.. _ ­ -_ .. ­
de la diabetes tipo 2 y que, facilitando el buen control metabólico, reduce 7- Aumenta el gasto energético:
eL desarrollo y progresión de sus complicaciones crónicas. • favorece el descenso del peso corporal I
-
Tal como ocurre en las personas sin diabetes, la práctica regular de un .. disminuye lo maso groso total
programa de actividad física, otorga importantes beneficios a corto, .. disminuye la graso abdominal subcutánea y
mediano y largo plazo. la grasa visceral
.. preserva y aumento lo maso musculor
• aumenta la expresión de enzimas antioxidantes
-­ -­

Beneficios de la actividad fisica a corto, mediano y largo plazo 8- Mejora el funcionamiento del aparato
cardiovascular
-.­
Le solicitamos leer con atención y luego serialar en las columnas los 9- Aumenta la densidad ósea y previene
plazos en los que usted estima se producen las mejorías mencionadas, la osteoporosis
teniendo en cuenta que:
10- Aumenta la fuerza y la elasticidad muscular
1-._--------­ .­ -
" Estos beneficios son el resultado de la práctica diaria o de 3-5 veces 11- Contribuye a disminuir el riesgo de
semanaLes(duración mínima de 3D') de actividad física moderada a DM tipo 2 y del desarrollo de complicaciones
intensa. en ambos tipos de diabetes
,-----­ .,--...--------­
12- Da sensación de bienestar y mejora la
Definimos corto plazo a los beneficios inmediatos, mediano a aquellos
:1
obtenidos entre días y 4 a 6 meses y largos después de los 6 meses.
calidad de vida . -­

;]:96
." tiooZ· ml

Al final de esta unidad encontrará la respuesta a esta actividad.

Relativas
Allí podrá cotejar las suyas con {as que le presentamos como equipo
• Glucosa en sangre> 300 mg/dl o >240 mg/dl con cuerpos cetónicos

IIl1f
docente.

urinarios

¿Continuamos?
.. Hipertensiór;¡ no controlada con presión sanguinea sistólica en

reposo > 180 mmHg o presión sanguínea diastólica > 105 mmHg

Apesar de estos beneficios de la práctica regular de actividad físka,


• Neuropatia autonómica severa con rnipotensión postural
existen condiciones que la limitan o aún la impiden y que debeJ11
considerarse en forma cuidadosa antes de incorporar a una persona con • Enfermedad valvular moderada del corazón

diabetes t~po 2 a un programa de actividad física. .. Cardiomiopatia

.. Aneurisma ventricular

En la Tabla 1 las enumeramos,


• Pulsaciones d-=l corazón en reposo> 120 latidos/minuto
• Enfermedad metabó~ica no controlada (por ej. tirotoxicosis, mixedema)
• Enfermedad infecciosa crónica (por ejemplo, hepatitis, SIDA)

Absolutas • Desórdenes neuromusculares, musculoesqueléticos o reumatoideos

exacerbados por la actividad física.

• Cambio reciente signMicativo en el ECG en reposo


111
• Infarto de miocardio reciente complicado (Adaptado de American College ofSports Medicine y Gordon NF: Diabetes: Your Complete
Exercise Gujde. Chompajgn, IL, Human Kinetics Publishers, 19(3),
• Angina de pecho inestable
Tabla 1,
" Disritmia ventricular no controlada

,. Lesión aguda o mal controlada del corazón


~
.. Miocarditis o pericarditis activa o sospechada
De igual modo, es preciso saber que la práctica de actividad física puede
inducir o agravar lesiones, tal como se descn'be en la Tabla 2.
lO

ti
Tromboflebitis agwda o trombos intracardíacos
Coágulo pulmonar o sistémico reciente
'r:
.. Retinopatia proliferativa de alto riesgo sin tratamiento previo Recuerde: 1),
.. Hemorragia retiniana significativa reciente
Salvo en los casos donde está contraindicada, la práctica regu­
'1
• Lesión renal aguma o mal controlada
lar de actividad fisica va siempre acompañada de beneficios.

.. Infección aguda o fiebre


La magnitud de esos beneficios dependerá de La relación re­

gularidad/intensidad de su práctica y de la presencia o no de

.. Angustia emocional significativa (psicosis)

complicaciones en quien la desarrolla.

1
298 299 -1,:1111,1,
~ II'n' L
iS'1l IDv¡ -[f]

Actividad

1- Anote cuáles son los estudios previos que en forma habitual indica
• Cardiovasculares a un paóente antes de establecer un plan de actividad física. Re­
* Disfunción cardíaca y arritmias debido a enfermedad
flexione sobre cuáles son {as razones projundas de este pedido.
cardíaca isquémica.

* Aumento excesivo de la ~resión arterial durante la práctica de


actividad física. 2- Si además del control de la gl.ucemia no realiza ningún otro estu­
* Hipotensión ortostática posterior a la práctica de actividad ñsica. dio en particular, piense en cuáles indicaría y defina por qUÉ lo haría.
• Mícrovascu[ares
* Hemorragias ae [a retina.
Nuestras respuestas para que usted las confronte con las suyas...
* Proteimuria aumentada.
* Aceleración de las lesiones microvasculares.
la evaluación debe incluir:
• Metabólicos • Un examen neurológico para detectar la presencia de neuropatía
* Agravamiento de la hiperglucemia y de la cetosis. autonómica o periférica.
* Hipoglucemia en pacientes bajo terapia insulínica o sulfonilureas. • Un fondo de ojo para identificar una retinopatía proliferativa.
• Musculoesqueléticos y traumáticos • Análisis de laboratorio.: la Hbalc' el perfillipídico y la detección
* Ulceras en [os pies (especialmente en presencia de neuropatía). de microatbuminuria.
* Lesiones ortopédicas relacionada con la neuropatía. • Una prueba de esfuerzo: recomendable en todo paciente que piensa
* Aumento de la velocidad de progresión de enfermedades incorporarse a un programa de actividad física aeróbica cUya in­
degenerativas en articulaciones. tensidad exceda a la de cam~nar a intensidad moderada, y tiene
riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular de aC¡je~do a
(Adaptado de American Diabetes Association: Diabetes Mellitus and exercise (Position los siguientes {riteriGs:
Statement). Diabetes Care 16 (Suppl.2):37,1993.
Tabla 2. .> 35 años de edad
> 10 años de duración de diabetes tipo 2
presencia de cualquier factor de riesgo adicional de enfermedad
Recomendaciones para la prescripción de un plaJil de coronaria
actividad física .. presencia de enfermedad microvascular (retinopatía o nefropatía,
incluyendo microalbuminuria)
Antes de comenzar un programa de actividad física, la persona
enfermedad vascular periférica
wn diabetes debe completar una evaluación médica con estudios l€ e
diagnóstico apropiados, para detectar la ~resencia de complicacio­ neumpatia autonómica.
nes macro y microvasculares que pueden exacerbarse por la práctica Además de esta evaLuación inicial, existen otras consider~ci()Il('"
de ejercicio.
importantes para prescribir y participar de manera más sequra í~1I L111

300 301
"'11

programa de actividad física, que Lo invitamos a Leer más adeLante en el


apartado precauciones. Si aL inicio de un programa La condición física
de la persona Lo permite, conviene impLementar pruebas de campo para . 1[1.11
,1

evaluar la capacidad cardiorrespiratoría, taLes como; Y"l' ~


Gimnasia de estiramiento 2 o( 120 U1 yogurt descremado
70,,1
Tai-chi o 1 huevo
test de marcha de 6 minutos,
test de marcha de 1 milla, y Caminar 3-4 km/h

Trabajos caseros

test de Coopero Subir y bajar escaleras


186 cal
despacio 2.5 - 3 140 - 240 50 9 de copos de maíz o arroz
Es muy común creer que La práctica de cuaLquier acti,vidad física Trabajos de carpintería y o 2 sandwiches de miga
genera un ,consumo calórico capaz de compensar una ingesta abundan­ I pintura
te de alimentos. Se trata de un preconcepto que debe revisarse tal como
Lo demuestran los valores presentados en la Tabla 3, donde puede ob­
.Cilminar 5 km/h

Ciclismo 9.5 km/h


276 cal
servar La cantidad de calorías consumidas al practicar distintos tipos de Tenis de mesa
3.5 - 4 240 - 300 100 9 de pan frances o Llctal
actividad física, y alternativas de ingesta que proveen un número de Remar por placer
o 1 porción de polenta
caLorías similares.
Ciclismo 13 km/h
Tenis dobles 330 cal
Mets: nivel de intensidad energético 4.5·5 300 - 360 1 porción de ravioles
Voleibol
Gimnasia o 1 sándwich de hamburguesa
Sugerimos que amplíe y fot'ocopicesta tabla y la tenga a la vista en
-
su consultorio y sala de espera para que sus pacientes entiendan que la Caminar 6.5 km/h
act"ividad física no ,es «(piedra libre» para comer cualquier cosa. Ciclismo 16 km/h 1 380 cal
Natación pecho 1.6 km/h I 5,5 - 6 360 . 420 1 porción de pizza rellena
Patinar I ó 1 empanada de carne frita
• 'SeLección de ~a actividad física más apropiada --
Caminar 8 km/h
Ciclismo 17 km/h 480 cal
Estará de acuerdo con nosotros que: Tenis singles 6· 6.5 420 . 480 1 porción de pastel de papas/came
o 1 ha mburguesa con puré
Natación crawl 2 km/h
Con frecuencia hacemos la prescripción de un plan de actividad física
a una persona con diabetes tipo 2 que durante la mayor parte de su vida Trotar 8 km/h
ha sido sedentaria. En esos casos no es fácil la adopción de un nuevo Ciclismo 19 km/h 630 cal
Aerobics 7-8 480 - 700 1 porció n de locro
estilo de vida. o 1 porción de budin de pan
Natación espalda 2 km/h
Fútbol con dulce de leche
Por lo tanto no debe perderse de vista que: - -
Trotar 9.5 km/h 720 cal
Búsquet 8.5 - 9 > 700 2 medias lunas rellenas con
El énfasis positivo que ponga el equi po de saLud junto con la selección jamón y queso + 300 ce de
Handball
de la actividad apropiada, es clave para lograr éxito en la incorporación cerveza y 1 ftallcito
del hábito de actividad física.
Tabla 3. Equivalencia entre actividades e ingesta de alimentos.

3102 O
jll!
111

Por otra parte minutos de ejercicios aeróbicos de baja intensidad, de estiramiento


Al igual que otros componentes deL tratamiento de la diabetes tipo y movilidad articular, antes y después de la práctica' principal. 11
2, la actividad fisica s·e debe prescribir de ma,nera ifildividúa,l para • Si el paciente ,es sedentario puede comenzar aumentando el movi­
evitar riesgos y optimizar sus benefidos. miento cotidiano o realizar más de una sesión corta (10 minutos)
En consecuencia el tipo, la frecuencia, la intens,idad y la duración por día.
del ejercicio recomendado dependerán de la edad, de las preferencias .. Si bien es individuaL el ajuste en el 'grado de esfuerzo se realizará
del paciente, del grado de entrenamiento previo y de la condición luego de un acondicionamiento inicial de 4-6 semanas.
ñsica actual, del resuLtado de la evaluación cardiovascular, del grado
de control metabólico, de la antigüedad de La enfermedad y de la Es conveniente:
presencié,l de complicaciones crónicas.
Suplementar la actividad fisica aeróbica con el entrenami,ento de
En general la actividad física pr'escripta a personas con diabetes La resistencia, que también contribuye a aumentar la tolerancia a la
tipo 2 debe ser aeróbica, es decir actividad continua, ritmica y glucosa y la sensibilidad a La insulina.
prolongada que involucre grandes grupos musculares. Esta práctka incluye actividades que utilizan La fuerza muscular

- '- " "._'. .-


En la Figura 1 se describen [as partículanCiades. repetidamente ¡Jara mover un peso o trabajar contra una carga durante
un periodo de tiempo.

S
Entrenamiento de Resistenr.ia dp. Se recomienda:
Tipo \lo> Actividad. fí¡¡I'ci\ lafuer-za 2. a.3 veces por semana,
acróbll:;;\ -. Progresar hasta 3 senes, AL menos una serie de 8-12 repeticiones de cada uno de 8-10
Repeticiones:'8-10 por serie,
ejercicios diferentes, utilizando la mayor cantidad de grupos muscula­
res, 2 a 3 vece-s por semana. luego se incfementarán a 2-3 series de 8­
12 repeticiones. En las personas con diabetes tipo 2 se recomienda,
como programa de entrenamiento, el uso de pesos livianos y varias
repeticiones para mantener o mejorar La fuerza muscular,
--
Todos los días o 2.0-30 min (diarios) Moderada 55% a 80% de la frecuencia
3-5 veces por Ó 45-60 mino cardíaca máxima (FCM) seg ún condici6n
semana (3-5 veces por semana) física, grado de entrenamiento y edad, Intensidad de la, actividad física
~,--

(Recomendaciones del American Col/ege of Sport.l Medicine Guidelincs for Aerobic Para generar adaptaciones la intensidad prescripta debe superar un nivel
Exercise Programs, número de la publicación y alío).
mínimo, sin alcanzar la carga que produzca signos y síntomas anormales.
Figura 1, Características de la actividad física a prescribir.
la intensidad del ejercicio puede medirse en:
• Nivel de intensidad energético (Mets)
Recuerde que: . Nivel de consumo de oxígeno (% de consumo máximo de oxígeno)
• En caso de obesidad, es conveniente la práctica diaria " Frecuencia cardiaca
• Al tiempo indicado (práctica semanal mínima) se deben sumar 5-10 .. Percepción subjetiva de esfuerzo -PSE- (Escala de Borg)

HI/) 305
~ Ll~'-,'~ [1rJflt bJ r!~ Ir}",,' m

Seguramente se estará preguntando...


¿ Cómo puedo estar seguro que la práctica de la actividad fisico &'Iegida se
desarrolla en condiciones aeróbicas?

Tenga en cuenta que: '~~ ------- 50- 60%~


de la FCM

I I
D~RAClaN I minutos/dia__
.- ----- --U
La frecuencia cardíaca debe mantenerse, en personas con diabetes ti.po 10-?0 20-30 más de 40
2, en un rango de 55 a 80% (Método del porcentaje de la FC máxima [FCM)). minutos/d~.~ I minutos/día
Para estimar la FCM aproximada reste de la cifra 220 la edad de la persona y Caminar, subir·bajar escalllras. nadar, trot"r, remar,
después calcule el 55-70 D/o de esa cifra para obtener la FC objetivo para
sujetos sedentarios a activQs, y más de 70% para personas más entrenadas.
I .enVID.D I I
gimnasia acu¡itica. pedalear. bailar. gimnasia
deportes
......
a~róbka,
individuilles y de oquipo (modo recrentivo). _

En la Tabra á obstwe la cla.qicaci6n de la intensidad de la actividad Figura 2.

júica, basada en actividades cuya duración sea de hasta 60 minutos.


En la Figura 3 se sugieren algunas variantes de actividad física según
el resultado de la evaluación clínica:

Muy Suave <20 <35 <10


--
Suave 20 - 39 35 - 54 10 - 11 Prescripción de la actividad fisica inicial

Moderada
---
40 - 59
- - - f-­
55 - 69
- -
12 - 13 Evaluación clínica

- - Fondo de ojo - ,ECG • Ergornettia - PuLsos pe-dios


Intensa 60 - 84 70 - 89 14 - 16
-- Examen Neurológico - Evaluación' meta'b6l'ÍCa (H bA tc - perftlltpfdko,)
_ _ o

Muy Intensa 2: 85 ~ 90 17 - 19
.­ --
Máxima 100 100 20
Artropatías de Cardiop. isquémíca
Modificado por Hoskeli y Pollack dI! PhysiCflI Activity and Health: A Report of I.hr. Surgeon miembros inferiores Relinopatia HTA Ob~so No obe:;o
Gcnt!ral, 1996. Activ. en (>1 agua I\ctiv. en cl.'glJa Activ. en el agua/ Caminar /Trotar/Remar
Tabla 4. lnténsidad rdativa. (caminar, palJlt'ar) Nataci0n Caminal/Nat.lcipn Nalaci6n/Cicli._mo
Natación/Giml1.1~iil Caminar/Ciclismo Ciclismo/Remar Ejer. Gimnasia aeróbica
especial segun Rehabilitación de Resi stencia Drportr.s individuales
Acontinuación enumeramos una serie de alternativas de fácil realiza­ afección cardiovascular o de conjunto
ción para iniciar un programa de actividad física. Para elto es necesario
definir los niveles de aptitud que determinan a priori ~ condición física del POSPONER LA ACTIVIDAD FISICA SI:

paciente y el gasto calórico diario correspondiente al movimiento realizado: - Glucemia> 250 mg/dL y Cuerpos <;etónicos positivos - Hipoglucelllia

• sedentario (estilo de vida pasivo: menor a 100 cal), Figura 3.


• activo (estilo de vida activo aunque no realiza actividad física
programada: menor a 300) y En la Tabla 5, se podrán seleccionar la distancia y el tienlpO rll111J11 \;I~
• entrenado (práctica actividad física regular y dosificada: mayor a 300) dos en caminar según el nivel de aptitud previa y la edi"td dd p;~:¡I·IIII'.

01. J07
¡"be!:'" y Cf.Fo~ J-"l{"!J~I'J;.r dt tit'
1 l
'1]; nU;/;'lHl'T:";u/n{ e [ti;ru
- ¡';."j'.. r 1(,' f"t'r,:n'/,ri¡,l1 t{t' nd¡~'¡dad .11,;::0 en rr"',IS{JlJlJ~ ceH i'.l'i,:;'UCJI''- tip:: ,'. - i:E

Recuerde que:
Al comienzo se utiLizará eL niveL de progreso 1 y en forma gradual se 1I
llegará aL 3, para luego pasar aL siguiente ni,veL de llptitud. .. Propóngas.e practicar la actividad fi'sicél eLegida en forma regular y
seleccione la que sea de su agrado.
o Evite proponerse objetivos inalcanzables. Aumente en forma gradual
,.1
el tíempo de la práctica y la intensidad del esfuerzo.
20 23 20 25 15 20
I .. Practique il diario no menos de 20 minutos. Si lo hace 3 veces por
sedentari0l--'~O
3 1;0
I JI46 30
40
37
50
25
35
33
46
semana aumente Q1rodualmente el tíem po él 60 minutos.
- - _._, 1 20-21 io-----r-2'3 20--25 .. Realice. al iniciar y al concluir la práctica, 5 a 10 minutos de ejerci­
Activo 2 30 32 30 35 30 37 33
cíos aeróbicos de baja intensidad (Nti ramiento y movi lidad
~0~143 40 ~46 40-----r5O
20 20 20 21 20 23 articular).
Entrenado 1 2 I 30 I 30 30 32 30 35
.. 5i nunca practicó actividad fisica programada, comience aumentando
o 40 40 43 40 46
las actividades diarias que re,aUza habitualmente como cllminllr.
Modificado de Dr. Kennefh H. Coopero Nofa: Camlnarconsume ';.2 caVm;nutQ aproximadamente
subir y bajiH escaleras.
Tabla 5.
" Detenga el ejercicio ante signos de hipoglucemia, dolor en el pecho
Actividad o respi raci ó n si bita nte.
Hasta ahora usted ha leído y analizado la respuesta fisiológica al ejerácio, • Uti lice calzqdo cómodo y medías de poliéster y algodó n de
{os benefidos o ventajas, las contraindicaciones y /05 efectos adversos. preferencia de coLores daros.
. .

Llegados al final le solicitamos que: .. Revise a diario sus pies busc¡¡ndo la presencia de ampollas y otras
posibles lesiones antes y después del ejercicio.
• Enumere recomendaciones y prec,auciones que ifldicarí,a a un paciente

con diabetes al momento de indicarle actividad física.


.. Beba mayor cantidad, de líquido sin calorías ní cafeina, como agua,
• Intente diferenciarlas seg,ún la edad y situélclón particular del paciente. antes. durante y después de la práctica.
• 5i desea conocer la intensidad del esfuerzo realizado, controle la
Recomen daciones Precauciones frecuencia de su pulso en forma inmediata des,pué$. de detener la
, pr¡lcticil.
Varón I .<
NiflO
, .. No olvide llevar consigo azúcar y un brazalete que indique que es
.Joven
una persona con diabetes tipo 2 durante la sesión de actIvidad
Adulto
Anci.ono
física.
-­ -
Mujer • Si camina, trota o anda e,n bicicleta, trate de hacerlo sin
Niña interrupciones, durante el tiempo propuesto.
,Joven
Adulta ¡, .. El tipo. la frecuencia, duradón e intensidad del ejercicio
Anc-iana -­ deberían ser regulados de tal forma que el consumo energetico
alcance de 700 a 2000 calorías por semana.
Lea ahora,. las que le proponemos para repensar sus respuestas. n .. Ilo_-'· I

30& 309
Respuestas a la segunda actividad

Beneficios
-, Realice un examen clínico general antes de recomendar el tipo, la I
~recuenciil, la intensidad y la duración de Ita actividad fisica a realizar. 1- Aumenta el consumo de glucosa
X
+---+---+---1
Oetennine si el paciente es sedentario, activo o practica ~n forma 1-
2- Aumenta la respuesta .
de los tejidos íl la insulina

. .. _-.._ _.
X I I I
regular una actividad física programada (entrenado) 3- Disminuye la concentración basal y postprandial de

glucosa e insulina

x
.. Seleccione junto con él, las actividades que sean de su agrado. y 1-----. - ­ ---+ - I I
recomiende, en especial al sedentario u obeso. actividades grupales 4- Mejora los niveles de hemoglobina gl~cosilada X
o en compañia' de otra persona para disminuir el riesgo de deserción.
- .. _.­ ---
5- Mejora el perfillipiqico:
En C¡¡SO de obesidad o neurop'ilti.a perirférica, pro~cr;ba actividades
de alto impacto como saltar o trotar. • disminuye los triglicMdos
• aumenta la concentración de HDL colesterol X
• Entrene al paciente para realizar el automonitoreo glucémico e
indí,que que lo realice antes de comenziH la sesión de actividad - disminuye ligeramente la concentración de LDL

física: si la glucemia supera los 250 mg/dl y se acompaiía de cuerpos colesterol

--1 -
cetónicos en orina, posponer la práctica de ejercicio. 6- Contri buye a normalizar la presión arterial X

- Si la glucemia se encuentra dentro de limites normales o ánte una 7- Aumenta el gasto energético:
X
hipoglucemia, indique consumir hidratos; de carbono extra antes • favorece el descenso del peso corporal
de comenzar losejercicios (de acuerdo con su intensidad y duración).
I-"--+-~ I .1
- disminuye la masa ,grasa total X
En lineas generales, consumir 10-20 gr de hidratos de carbono por

E±E
- disminuye la grasa abdominal subcutánea
cada 30 nlinuto's de actividad moderada. y la grasa visceral
X
• Para disminuir el riesgo de hipoglucemia y si el paciente recibe - preserva y aumenta la masa muscular

insulina o ingiere Sulrfonilureas: estime la intensidíld y dUrilción de


- aumenta la /])l¡presión de enlrmos antioJidan~es X

la actividad fisica. 1--- ­


8- Mejora el funcionamiento del aparato cardiovascular X

.. Si consume hipoglucemiantes puede disminui ro sl!Jspender la dosis


previa. 9- Aumenta la densidad ósea y previene la osteoporosis x

.. Si se inyecta insulina indíquela más de una hotd antes del ejercicio y 10- Aumenta la fuerza y la ela~ticid~dmuscular tj-­ x

disminuya la dos'is que produce el pico en el momento de la actividad. 11- Contribuye a disminuir el riesgo de DM tipo 2 y

lO Si desea verificar el efecto del ejercicio so!:¡re la glucp.miil, contrólela


del desarrollo de complicaciones en ambos X
media hora después de terminar la práctica. tipos de diabetes
~ - --------­
12- Da sensación de bienestar y mejora la
.. Si la actividad fue superior ti la normal, indique controlar la glucemia
calidad de vida
x
durante la nelche. Puede ser necesario disminuir la dosis de insulina
hipoglucemialltf' nocturno.
Llegamos al final de esta unidad. Esperamos que el análisi$ dI) lo.~
Enseiíe al paciente a controlar su Fe. En presencia de neuropatía
autonómica es aconsejable utilizar la percepci6n subjetiva del
contenidos presentados le haya resultado interesante y Gsciarl.'c&rior y
esfuerzo en lugar del control de la Fe. que las actividades lo hayan ayudado a reflexionar sobre sus pnid.ícl1s
habituales. Lo esperamos en la próxima unidad.

310 311
1 rl~ .
DinU.'tLJ v r.1'i.. . 7 - U:ll' d" 1¡,~!nO f(:¡,d¡[J\'·~vt;"'!:1r

• Bibliografia: PLan de alimentación: cambios de estilo


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7. Thc Health Prufc~s10nal's Guide tu Di~l>eles ¡¡nd Exerdsc. N. Ruderm~ll, J.T. Dcvlin (ed~.) Con este capítulo esperamos que usted
ADA. Amprkan Diabetes A~soci~t.ion. Clinical Education Sf!'ri~~. ·199~
Reflexione sobre qué alimentos que pueden consumir Las perso­

nas con diabetes teniendo en cuenta otros factores de riesgo

cardiovascular asociados.

Analice las propuestas que le presentamos para luego elaborar un

instructivo para sus pacientes de manera de fortalecer su adhe­

sión al plan de alimentación prescripto.

Introducción

Como se comentó en el Capítulo 11, diversos estudios han demostra­


do que la progresi6n de la intolerancia a la glucosa a la diabetes tipo 2
se reduce significativamente mediante cambios de estilos de vida.
Dijimos que esos cambios incluían:
• Un plan de alimentación y
• La práctica regular de actividad fisica

Ahora b;cm, la pregunta seria, ¿por qué estos cambios son beneficiosos?
Sin duda usted sabe que la pérdida de peso en la diabetes t.ipo ~~
puede restaurar la sensibilidad a la insulina y mejorar sustanciillmcnl:e
la función de las células B pancreáticas.

312 313
Un porcentaje elevado de personas con diabetes Tipo 2tienen sobrepeso A esta altura usted podrá decir:
y aún las que presentan peso normal son insulinorresistentes. 1I
-Yo se los digo siempre, pero los pacientes vuelven a la consulta y no han
El índice de masa corporal (IMC) > 27 y la distribución central de grasa caminado ni una cuadra... o siguen «picando dulces y go[osinas» aescondidas..
(tratado en extenso en el Capitulo 3), se han asociado con mayor riesgo
para hi pertensión, dislipidemia, diabetes y mortalidad coronaria. La No cabe dudo que para [o,grnr cambios significativos debemos apelar a la
reducción de un 10% del peso en pacientes obesos (aún sin llegar al peso educaci6n, cuyo campo de estudio es la ensei'ianza y el aprendizaje.
normal) mejora esas situaciones patológicas en gran número de personas.
¿Cómo enseriar para que el paciente aprenda? ¿ Bmta la palabra del médico?
Los cambios de estilo de vida deben enfatizar la necesidad de
incrementar la actividad física y reducir el ingreso calórico, de hidratos de Veremos...
carbono de absorción rápida y de grasas saturadas, lo que redunda en una Apenas sea posible, el médico y el equipo (educadores, nutricionistas,
reducción del. peso corporal y de la resistencia a la acción de la insulina. profesores de educación física, enfermeros) o parte del mismo, o en ausencia
Muchas personas con diabetes presentan además dislipidemia e hipertensión de equipo el médico tratante, deberán comenzar el proceso educativo.
por lo cual son aconsejables las reducciones en grasas saturadas, colesterol
y sodio (ver Capitulas 15 y 16). Complementariamente, la práctica regular A continuación desarrollaremos cada uno de ellos.
de actividad fisica mejora los niveles glucémicos, el perfillipídico y la
hipertensión arterial reduciendo así el riesgo cardiovascular que tiene • Plan de alimentación
gran impacto en la morbilidad y mortalidad en diabetes tipo 2.
Le proponr;mos completar la siguiente grilla para luego cor¡frontar sus
Es decir que ,estamos enfatizando cambios no medicamentosos, de bajo respuestas con las que descn'biremos.
cosi:o, adecuados a la cotidianeidad y al Uempo del paciente, que se
puede realizar con la familia, con un amigo, con la pareja con quien se
convive... en fin, una sen'e de aspectos positivos tanto para la calidad de
vida del paciente como también para su en~'Omo cercano.
Estas estrategias no farmacológicas deben implementarse tan pronto e
como se haga el diagnóstico de diabetes. Con ello se reducirá el impacto ~
.¡:
o
de la glucotoxicidad y de la li potoxicidad sobre la secreción y acción
de la insulina (ver Capitulas 2 y 7). De esta manera probablemente se ¡
pueda lograr por un buen tiempo un buen control metabólico y clínico ~~
~(3
de la diabetes y de otros factores de riesgo cardiovascular asociados ..... :::­ I I I I I

t~
sin necesidad de utilizar medicamentos.
Los cambios en el pl.an de alimentación y la práctica regul.ar de actividad
_'E:§."
,r,g. .. l:;
o v
física son suficientes para tratar a muchas personas con diabetes tipo 2.
Los fármacos a emplear si hay respuesta inadecuada a los cambios de ~
~.g
hábitos de vida no excluyen mantener el plan de alimentación y de actividad 8 .~
física adecuados para ese paciente. i! ~~

314 315

D¡flJ~~ri.'s v ofl\-"s JC1ct}rc~ de n·(.~fJtl (or(HCt,'o.~c!J!ar '/ml df'l '7lin¡- 1Jt(}r;lI/L caniJ.lil~' di ('(il(l l.: Vir)l/ ~O prronn.": CcH O't':;h,..(.. tt/Jt1.~ - ".le

Objetivos del plan de a~imentaci6n en personas con diabetes tipo 2, pastas preferentemente secas, frutas enteras, pan, en lo posible negro. 1
dislipidemia' e hipertensión arterial: Fibra: se asegura su ingreso con vegetales crudos, frutas (prefiriendo 1

Asegurar y mantener objetivos metabólico - vasculares óptimos. Estos cítricos, frutas con piel, frutillas), pan negro (integral o de salvado),
incluyen: Leguminosi'ls y granos integrales. Estos alimentos proveen además minerales
y vitaminas necesarios para una alimentación saludable.
• Lograr niveles glucémicos normales o tan próximos a la normalidad
como sea factibLe para prevenir o reducir el riesgo de complicaciones En la diabetes tipo 2 un adecuado ingreso de fibra confiere beneficios
agudas y crónicas especificas de la diabetes (ver Capítulos 8 a 13) metabólicos que se han asociado con mejor control gLucémico, reducción
de la insuLinorresistencia y mejorías en el perfil de lípidos.
• Obtener un perfiL lipídico que reduzca eL riesgo de enfermedad coronaria
y arterial periférica (ver Capítulo 16) Su cantidad se debe adecuar a la tolerancia gastrointestinaL.
• Lograr niveles de presión arterial normales para minimizar el riesgo Edulcorantes artificiales: Sacarina, aspartame, sucraLosa y otros.
de enfermedad vascular (ver Capítula 15) Consumidos dentro de niveles aceptable-s son útiles y seguros.
Modificar el ingreso de nutrientes para prevenir y/o tratar: Velocidad de absorción: es mucho más rápida para los alimentos que
• Obesidad (ver Capítulo 3) contienen azúcares simples (azúcar, dulces, miel, jugos de frutas, helados,
• Dislipidemia (ver Capítulo 16) repostería), cuyo ingreso debería restringirse. En cuanto él los demás si
bien vana entre los distintos ali mentas, aún dentro del mismo grupo (ej.
• Enfermedad cardiovascular (ver Capítulos 11 y 12)
papa y batata), no hay evidencias claras de que aq,uellos de absorción
• Hipertensión arterial (ver Capitulo 15)
más lenta produzcan mejofías claras en KbAlc' fructosamina.. glucemia,
• Nefro y retinopatia (ver Capítulos 8 y 9) Lípidos o grado de insulinorresistencia. No hay dudas que el mayor impacto
Adecuar las propuestas nutricionales indivíduales, teniendo en cuenta: sobre la glucemia (exceptuados los hidratos de carbono simples) depende
• Posibilidades sociales, económicas, culturales más del total de hidratos de carbono ingeridos en Ufla comida o colación
que de su origen o tipo.
I

• Preferencias y gustos personales


• Estilo de vida relacionados con ocupaciones, horarios y característi­ Cantidad de hidratos de carbono: debe ser aproximadamente un 50%
cas del grupo familiar del total de caLorías aportados por la dieta. En los diabéticos tipo 2
• Respeto a los deseos de cambios de hábito tratados con insulina es importante mantener un esquema regular de
• Tolerancia gastrointestinal y patologías asociada,s a la diabetes ingestión y distribución de hidratos de carbono a lo largo del día.

(onsejito...
Componentes del plan de alimentación, COA especial Destacar la importancia de limitar al máximo los alimentos con
referencia a diabetes y dislipidemia hidratos de carbono simples, aumentar aquellos que ingeridos
crudos hacen un buen aporte de fibra. Con las limitaciones que
Hidratos de carbono impone, el peso, no temer la utilización de alimentos como
papa, batata, mandioca, grano de chocló y pan (intentando
Origen de los mismos: intentar que los mismos provengan de vegetales
que sea negro), que contienen hidratos de carbono complejos
crudos, vegetales coodos (incluyendo papa, batata, mandioca y choclo),
y de absorción lenta.
arroz (preferentemente integral), porotos, lentejas, habas, garbanzos, soja,
11 1: 11 :
1
316 31

l'
-EI!l

Proteinas Grasas
De origen animal: las carnes (vacuna, bovina, ovina, porcina, aves, On'gen: el aceite de oLiva es un proveedor de grasas monoinsaturadas. 11
otros animales de granja y caza, pescados), aportan aproximadamente Su empleo en ensaladas, purés, con hortalizas cocidas y en el prepara­
un 20% de su peso en proteínas. Debe tenerse en cuenta e'l distinto do de sa~sas para carnes, pastas o granos permite asegurar que consti­
contenido de grasas en las carmes de distintos orígenes. y recordar que en tuyan aLgo más de un tercio del aporte de grasa de la dieta.
las de un mismo origen hay cortes más magros que otros.
Dos a tres porciones de pescado de mar por semana proveen un
Quesos: también aportan un 20% de proteínas aproximadamente en aporte recomendable de grasas poliinsaturadas deL grupo omega-3.
relación con su peso. Aquí también debe recordarse que existen quesos
Otros aceites de origen vegetal que proveen grasas poLiinsaturadas
totalmente descremados (0% de grasa) mientras otros tienen un conte­
pueden emplearse intentando que aporten algo menos de un tercio del
nido graso del 60%.
total de grasa. Cuando estos aceites se hidrogenan para hacerlos más
La Leche aporta proteínas de alto valor biológico pero en baja sólidos (margarinas) se originan ácidos grasos trans-insaturados, que
concentración (3%). la ctara de huevo aporta 4 g por unidad, también de elevan el colesterol-LDL y bajan eL HDL en plasma. Por lo tanto conviene
alto villor bioLógico. evitar estos alimentos. Las grasas de origen animal (saturadas) no
Oe origen vegetal: hortalizas y frutas de todo tipo aportan aproxima­ deben aportar más de un tercio del total, y algo menos si el coLesterol­
damente entre 1 y 3% de su peso en proteínas. LDL plasmático es >100 mg/dL.
El pan aporta entre 6 y 8% de su peso en proteínas, las pastas 10% y El colesterol dietario (principal aporte yema de huevo y los alimen­
las legumbres (porotos, garbanzos, habas, lentejas, soja) del 20 aL 35% tos que la contengan, hígado, seso y achuras) debe ser menor'de 300
de su peso s@co, mgjdla y si el paciente presenta un colesterol-LDL ~100 mg no debería
Selecdón según origen: intentar que un 50% de las proteínas sean de superar los 200 mgjdía.
origen .animal. Selección de alimentos: por su contenido en grasas saturadas debe­
Impacto sobre la insulinemia: las proteínas son tan potentes como non limitarse:
los hidratos de carbono para estimular la secreción de insulina.
l¡leteos no descremados (excepto quesos utilizados como alimen­
Impacto sobre La glucemia: las proteínas ingeridas solas o junto con to-condimento o ralLado),
hidratos de carbono no modifican la glucemia.
manteca,
Cantidad de proteínas de la dieta: las personas con diabetes deben cortes de carne no magros, pescados de río y vísceras.
recibir un 15 a 20% de las caloñas de la dieta como aporte proteico si su
función renal es normal. Por su contenido en colesterol deben restringirse o evitar:

Consejito: • yema de huevo,


• sesos, hígado, ri ñones y mollejas.
ExpLicar al paciente La importancia de intentar que tas Impacto sobre los lípidos circulantes: tanto en diabéticos como en
proteínas de origen animat sean aportadas por alimentos con no diabéticos las dietas bajas en grasas saturadas y colesterol reducell
bajo contenido de grasas. los níveUes de colesterol total, colesterol-LDL y triglkéridos, con erecl:o~;
variables sobre el colestero~- HDL. Las grasas monoinsaturrld.v; rl1lT1lril'~11

318 319
¡mil
I
tienen efectos benéficos reduciendo el nivel de colesteroL-LDL circulante. • Selección de alimento$ en fundón de lo descripto (permite 1I11
Las grasas poLinsaturadas omega-3 tienen efecto cardioprotector una prescripción cual~tativa)
porque bajan los triglicéridos y en algunos casos se ha observado elevación
de los niveles de colesterol- HDL.
• • Leche descremada ,. • • Lácteos enteros
Cantidad de grasas de la dieta: no debe ser mayor del 30%, pues
• • Quesos descremados • • Pescados de río
porcentajes mayores pueden implicar un aumento del valor caLórico total
que produzca incremento del peso corporal.
• • Clara de huevo •• Pan blanco
• • (ames poco grasas • • Galletitas
Conscjito: • • Pescados de mar • Alimentos permitidoJ; como
• • Carne de animales de granj~ condimento
• • Carne de animales de Cilza • • Queso de ra llar
No oLvide que las grasas son necesarias para la palatabilidad
• • Hortalizils crudas (A y 13)# • • Margarina
de la dieta. Se deben restringir Las grasa de origen animal
• • Hortalizas cocidas (A y 6)11 • • Mayonesa. crema de leche
(saturadas) y Los a~imentos con contenido elevado de
colesterol. • • HortalizilS C: Pilpa. batatil, grano • • Jamón en muy pequeilils
de choclo cantidades
• • Mandioca • Alimerlto'; dt!~¡¡ColI:eJildo~
• • Pastas ~eca$, arroz • • Azúcar, mieL dulces
Sodio: este tema usted puede Leerlo en los Capítulos 8 y 15. • • Habils. lentejas, garuanzos. • • Carnes grasas, vísceras, fiambres
porotos. arvejas
• • Bebidas glur.ocarhoniltildas y colas
Tenga en cuenta también que ... • • P¡¡n negro
• • Frutas cítricas, anilniÍ, frutillas l. i\líment,o~ compuc:~to~
1"1.' !iir In~fl do,';
Alcohol: en los hombres sin hipertrigliceridemia se admiten 30 9 de • • Frtltas B •
• • Repostería, helados, facturas
etanol (una copa de vino o dos latas pequeñas de cerveza o una y media • • Frutas ~ecas
• • Pizla. empanadas
medida de whisky) por día y la mitad en las mujeres. • • Aceite
• • Fritos
• • Bebidas glucocnrbonatadas
dietéticas • • Masas para tartas de comercio
Vitaminas, minerales, potasio: con una dieta completa y variada los
suplementos no son necesarios saLvo en condiciones especiales.

Rocuerde que:
Acontinuaci6n encontrará una selección de alimentos para recomendar a
sus pacientes. 11 Hortalizas A = acelga, achicoria, apio, berenjena, berro, brócoli, cardo, coliflor,
escarola, espárrago, espinaca, hinojo, lechuga. morrones, nabo, pepino, rábano,
rabanito, radicha, radicheta, repollito de Bruselas, repollo, tomate.
ti Hortalizas B = alcaucil, arveja fresca, cebolla, calabaza, ceboll.:l de lJerdf~o,
chauchas, nabo, remolacha, salsifí, zanahoria, zapallo.
* Frutas B = banana, cereza, ciruela, damasco, durazno, higo. m:lnlflr1n,
melón, membrillo, pera, sandía, uva.

320 32
- ('tn" r(;· a1;mtfJ?rV tl .'r?: (lan';~·(.I~-, d, '~ht" li ,.H.. ·)

Necesidades energéticas según grado de acHvidad C'uando se prescribe el plan de alimentación es ineludible averi­
guar horarios, actividades, posibilidades y gustos del paciente
1\ continuación, le proporcionamos algunas recomendaciones ya que para la compra, elaboración y distribución de los alimentos. Los
::i bil'll hay criterios precisos para el cálculo calórico que se pueden con­ incumplimientos dietarios deben eva~uarse conjuntamente con
"ltltar (In lilbibliografía recomendada, una forma práctica es la siguiente: el paciente intentando comprenderlos, lo cual permitirá ir
resolviéndolos paulatinamente.
I\ctívídad muy liviana, mediana, intensa, muy intensa. Ej: jubilados
(30)/oficínistas (35)/amas de casa (40)/peones (45)festíbadore·s (50)
I (:\::pectivamente. (En todos los casos los números entre paréntesis
I epresentan Calorías/Kg/d¡a). • Objetivo.s espeáficos del plan de alimentación en el diabético
tipo 2 con hipertensión '
Recálculo de la necesidad energética si hay sobrepeso: dado que en
muchos casos la prescripción restrictiva se mantiene por tiempo prolon­ Recuerde que el tema es tratado en detalle en el Capitulo 15.
gado y que a ella se agregan algunas limitaciones cualitativas, para hacer
posible su cumplimiento es recomendable no indicar reducciones mayo­ La evidencia demuestra que los efectos beneficiosos de la restricción
res a un 20 - 25 % de lo calculado según explicamos prev,jamente. moderada de Na en diabéticos mayores de 45 años y con presiones más
elevadas parecen ser mayores que en la población general.
Algunas equivalendas aproximadas
" Queso 60 9 Y2 claras = carne 120 9 Por último, la tabla resume la información reJen"da a la
• Hortalizas.( 200 9 = pastas o arroz 65 g = pan 60 9 = frutas A- lB 300 g
Selección de alimentos en el paciente diabético con hipertensión
Algunas ideas sobre técnica dietética (preparadón de alimentos) (¡Aguan­ Contenido en Na de

te Doña Patrona!) Alimentos con bajo


alimentos para empleo Alimentos no
contenido de Na en ,pequeñas cantidades aconsejados
• El queso descremado se puede agregar a ensaladas, hortalizas cocidas (ca ndi rnentos')
y pastas.
• Cer~;¡les,
harinas, • Queso rallado, • Alímeflto~ envasadas
• Las claras permiten hacer milanesas dietéticas, souffles, budines, 1 legumbr~s 1 cda, ~ 100 mg • Fíambres, embutidos,
tortillas, revueltos y merengues. • Pastas secas • Margarína, encurtidos
• Una cuohara de aceite puede reemplazarse por 3-4 cucharadas de salsa • Frutas frescas y secas 1 cda. -= 40 mg • 'Caldos,sopas concentradas
de tomates o aj'les liviana o 4 cucharadas de salsa blanca hecha ton • Vegetales (ex"epto los • Jamón cocido, • PoLvos para hornear

margarina, o 1 cuchara de pesto. enumerados después)


100 9 = 1000 mg • EduLcorantes artificiaLes
• Aceites • Jamón crudo, con Na
• Las carnes a la plancha, parrilla, hervidas, al horno o a la cacerola y las 100 9 ~ 4000 rng, • SaLes pseudo-dillteticas
• Pitn sin saL
pastas oarroz pueden mejorarse con condimentos, hierbas aromá,ticas, • Ga~eosas y sodas
• Infusiones • Cubitos de caldo 10 9
salsas y pesto. (con agua ad~cuada) (1 unídad) = 50 mg • Productos cong()[ado~;
;, Las ensaladas pueden mejorarse con condimentos, hierbas aromáticas, • Hierbas aromática, • Bica rbonato de N<1
alguna cucharada de queso rallado, algunas aceitunas o frutas secas. • Ahumado~
• Productos COnrjlllt\llll';
i Consejo importante!

323
322
I'tjIJ)ll'~1 V nf)TJ'. ¡tU '''1/.'''- dI- /W ... (fIJ l.nrl/hwd' l'¡dm

IIml el aquí le Ilre:scnlamos alimentos permitidos y no permitidos; lo invitamos Tratamiento farmacológico oral
f1 f'1I11I/l(iWI'III,lest'la propuesto, las que usted propuso en el cuadro inicial que
le solicitamos completar. El trabajo que ahora (e proponemos es. que piense
de la diabetes meUitus tipo 2 1

1111 ,i ¡:. (, l/divo pam entregar a Sous padentes con las indicaciones aquí sugeridas.

Claudia González y José Miguel Dominguez


1
'[¿'IU/O en CU(Jllta:
• El formato que tendría: puede ser un tríptico (esos dc>splegables
quC' se arman con una hoja ofido doblada en tres), o un gran
afiche expuesto en el consultan·o, o dos hojas A4 abrochadas.
• La caligrafía: letra dara y grande (el tamaño 12 para el t'&to y 14­
liI Propósito I
para títulos es a prlJeba de «chicotas» y somos varios (os q.ue nos
incluimos en ese grupo por eso la familiaridad del t,!imino) Antes de leer esta unidad, ,le recomendamos repasar la fisiopatologia !III!
• No sobreabunde en explicaciones; elija el modo direct~o para las de la diabetes tipo 2 para que usted pueda:
indicadones.
• Juegue con imágenes que puede: conseguir de archivos de internet
Conocer eL mecanismo de acción de Los fármacos que actúan

para subrayar restricciones o destacar los alimentos.


como antídiabéticos oraLes, identificando su adecuado uso y

prescri pción.

• ¡¡¡Use su imaginaci6n.'!.'.'
Reconocer que las recomendaciones vertidas por los especiali s­

Pero como con esto sólo no basta, vuelva a leer el capítulo refen'do al
tas sobre el grado de control metabólico y las metas de trata­

automonitoreo (5) pues allftambién desarrollamos el seguimiento de los


miento son las decisiones inícial[es de la terapia de la diabetes.

pacientes para corroborar que cumplen con las indicaciones.


Imagi nar un plan de acción que garantice La ad hesión de sus

Tiene baslanl'e trabajo, de manera que cerramos aquí este capítulo y lo


pacientes al tratamiento, así colliO criterios para ev,aluar dicha

esperamos en el pr6ximo.
ad hesión y reaLizar un monitoreo que le permita establecer ac­

ciones correctivas.

Bibliografia
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postprandiales. Como se mencionó en el[ Capitulo 4, la American !
7. The Séventh R~port üf tht' Juint iN~tiun~~ Committ~e un Prevention, Detection, Evaluation, anú
Diabetes Associat'ion establece ,como obj,etivos para el control d(o~1 'j
Tr~i1lmellt 01 High Blood PreSIUrl\ JAMA 289: 2Sf¡0·2" 72, 200:; metabolismo glucídico una HbAlc menor a 7%, glucemia de i1vuna:J

324 325

IUlI
111111111

l1frl/'I'(I" ~~ ¡lUlo,' Id~ II'ft ~ di' ,iL'~'Ir1 t 'flI/J( \'n.;,-UilH

111(~Il()r 130 mg/dL y mayor a 90 mg/dL y una glucemia posprandial


j\ Muchos obesos, hipertensos, mujeres con poliquistosis ovárica y perso­
(dn~; hora'. postingesta) menor a 180 mgjdL. Fundamentan estos va­ nas de tercera edad tienen insulínorresistencia pero no son diabéticos.
lorc'; 1'11 evidencias aportadas por estudios como el UKPDS (United
Las personas con células p genéticamente predispuestas son incapa­
A'jllt¡dol/J Prospcctive Diabetes 5tudy) y el Steno 2 que demostraron que
ces de mantener por largo tiempo la sobrecarga funcional generada
1111 (OI1'llOl intensivo de la glucemia y de la presión arterial disminuyen
por la insulinorresistencia (agravada en ocasiones por factores am­
::i!JIl iliclItivamente el desarrollo y progresión de Las complicaciones bientales) y en determinado momento disminuyen su secreción de
1l1'iClOVLlSculares y una reducción significativa de la tasa de complicacio­
insulina: aparece entonces la hiperglucemia y consecuentemente, la
Iles lll<lcrovasculares (ver Capítulos 8 a 13).
diabetes tipo 2.
En este capítulo nos ocuparemos de los antid'iabéticos orales que
lO La magnitud de esta hiperglucemia dependerá también de factores
contribuyen al logro de las metas mencionadas.
dietéticos tales como la utilización de azúcares simples de absorción
En la diabetes tipo 2 los antidiabéticos orales son una herramijenta rápida, responsables de la híperglucemia postprandial.
probadamente apta para lograr y mantener los objetivos terapéuticos; sin
embargo, tratándose de una enfermedad progresiva e íncurable en buen La Figura 1 resume lo descripto:
número de pacientes pueden fracasar luego de un tiempo. Para lograr su
utilización racional es necesario comprender tanto ~ farmacología de los r~~~i~~~. secretor
agentes antidiabéticos orales como la fisiopatologia de la diabetes tipo 2. Lde las céulas
Ji

1111
1

La fisiopatología de la diabetes tipo 2 es compleja y aunque ya fue HI~-~~~~~~-;~;'~ ~


descripta en el Capítulo 2, sus componentes podrían resumirse del si­
Insulinorrcsistencia Insu"norresist;~~i~-"l
guiente modo: hepática muscular y
adlpocltaria I
• Insulinorresístencia: es un factor presente en la mayoría de los
pacientes, que desarrollan diabetes tipo 2. Su mecanismo de pro­
ducción se relaciona con alteraciones al nivel de su receptor y par­ Absorci6n Intestinal dI} azúéare¡ simples
ticularmente de sus mediadores intracelulares. La insulinorresistencia
se manifiesta al nivel de diversos tejidos con distinta intensidad,
ProcJutclún Absorci6n
pero por razones de simplificaci.ón se la divide en: glucosa intestinal
Glucemia
- hepática (caracterizada por un aumento de la gluconeogénesis
y producción exagerada de glucosa) y
- muscular y adiposa (llamada también «periférica» y caracterizada
por menor utilización de glucosa).
Como consecuencia de la insulinorresistencia para lograr un determi­ ----rl

() tA~~
nado déscenso de la glucemia se necesita mayor cantidad de insulina. Insulina (+)
Mientras las células ~ de estos pacientes puedan segregar suficiente Utili1¡¡ción de g.lucosa
",sul~na
insulina para cubrir el aumento de la demanda, la glucemia mantiene dependiente de
Tej. adiposo
valores normales (período de normoglucemia con hiperinsulinemia). y músculu 11111
1

326 ,.7
1/1(11,,(,". V 11(lr.-. ludoll'r, di' 'JI' '111 (fHdJ't'~-:1 tld(u :rJt'lfílu" I ¡i~l' .~. m
Ant1diabHicos orales: perfil farmacológico general ¿Cómo actúan las sulfonilureas?
1)1' ,1r.l.lcrdo con la interpretación mencionada de la fisiopatología de Su efecto primario es producir el cierre de canales de potasio ATP
1,1 diabl~lt"; tipo 2, los fármacos orales destinados a lograr su control dependientes de las células Pde los islotes de Langerhans. Estos canales
1111'1, ¡)JÍJl'ico apuntan a: participan en el mecanismo fisiológico que culmina con la liberación de
insulina (Figura 2). En condiciones normales la glucosa ingresa a la célula
ij Redllcir la insulinorresistencia Pa través de un transportador (GLUT-2) y en su interior se metaboliza
-Biguanidas: metforminu promoviendo un incremento del cociente ATPjADP endocelular.
-Tiazolidi nodionas: pioglitazona, rosiglitazona
...-"'--
• Estimular la secreción de insulina '.
-Sulfonilureas
-Meglitinidas y análogos: repaglinida, nateglínida
• Enlentecer la absorción ínte...tinal de hidratos de corbono
l
inhibidores de las et-glucosidasas intestinales (acarbosa y otros)
Algunos agentes orales son capaces de inducir hipoglucemia: estimulan
la secreción de insulina que una vez segregada puede reducir la glucemia [ATP]
a niveles aún inferiores a los considerados normales. Son los verdaderos [ADP][PI]

hipoglucemiantes orales y entre ellos se cuentan las sulfonilureas y las \ "\ ?Ca++
meglitinidas.
·"------~l~rl~,
Los restantes agentes antidiabéticos bucales difícilmente ocasionen K+ Despolorizilción ---...? Insulina
per se hipoglucemia pero ella puede presentarse cua,ndo se los asocia con 1... --J.'-- Adapt.Jdo de Diabetes 45: 223, 1996
~

secretagogos; en general se comportan como «normoglucemiantes» o


«antihiperglucemiantes». En esta categoría se incluyen las biguanidas, las Figura 2. Esquema de la regulación de la secreción de insulina en la c~lula ~. (Adaptado
tiazolidinodionas y los inhibidores de las et-glucosidasas. de Gagliardino 2000).

El ATP generado produce el cierre de canales de potasio dependientes


de ATP (KATP) por lo que estecatián se acumula en la cara interna de la
• Hipoglucemiantes orales o «secretagogos de insulina» membrana plasmática produciendo su despolarización. La despolarización
Dentro de esta clase encontramos a las sutfonilureas y a las meglitinidas abre los canales de calcio dependientes de voltaje aportando calcio al
ysus análogos. Ambos ti pos de fármacos esti mulan la secreción de i nsuli na interior celular y éste uniéndose a la calmodulina culmina liberando insulina
preformada pero no su síntesis (<<secretagogos»). por estímuLo de la exocltosis.

Pasaremos breve revista a estos ag~ntes. El canaL de KATP es una estructura compleja constituida por dos
subunidades proteicas: Kir6.2 y SUR. La sub unidad SUR (Sulphonylure(1~
Sulfonilureas: es un grupo amplio de fármacos hipoglucemiantes que Receptor) opera regulando la actividad del canal (Kir6.2). Las sulfuniLureilf,
comparten la propiedad de estimular la secreción de insulina. se unen a la subunidad SUR promoviendo su cierre. En consecuenci<l In

328 329
1I
I

- Trn:tlJJir"1 .'len !omi(l'r'J1fvn:(() r.r"A J¡; lt1 dj:tnr!(; u,'~"'/litu~ rJpn .:- fII

.1Cr.ión principí.ll de las sulfonilureas es estimular la secreción de insulina, Existe una formulación de liberación modificada dé la glíclazida,
qu~ C0l110 mencionamos anteriormente, se encuentra deteriorada en las que permite una sola administra,ci6n diaria (ver Tabla 2).
per~0ni)~,; con diabetes tipo 2. Cabe mencionar que como actúan por
IliIe( :;-1 Il'i SIllO no metabólico, pueden estimular la secreción de insulinll aún Varias de las sulfoni'lureas se metabolizan a nivel hepático mientras
cU;)lldo la hormona no se libere en respuesta a la glucosa. Pero para que que por ·ejemplo la clorpropamida lo hace en escasa proporción y se
se Illílniríeste su efecto hipogLucemiante se requiere la existencia de una elimina mayoritariamente s~n modificaciones(20%) por ,el riñón.
maStl rema,nente suficiente de céLulas p. La principal reacción adversa de las suLfGnilure·as es la
Las sulfonilureas se han clasificado de acue~do con un criterio bipogLucemia. Esto s-e debe a que la acción estimuladora de la seore­
generacional. Así. tenemos: ción de lnsuli na ocurre aún con glucemias bajas. La incidencia de esta
'manifestación adversa es variable: paTa hipoglucemias severas su fre­
Sulfonilureas de primera generación cuencia oscíla entre 1 y 4% por año. La aparición de hipoglucemias
• Tolbutamida parece más frecuente con drogas de vida media prolongada tales como
• CLorpropamida Lil cLorpropamida y La glibenclamida.
Sulfonilureas de segunda generación El efecto hipoglucemiante es potenciado por el aLcohoL las
• GlibencLamida (o gliburida) sulfodrogas, los antiinflamatorios no esteroideos ácidos y los fibratos.
• Glipizida En personas que reciben sulfoniLureas los ~-bloqueante", al reducir la
respuesta simpática, dificuLtan la percepción y pueden potenciar la
!l' GlicLazida

hipoglucemia en ayunas tanto como la hiperglucemira posprandial.


,~ GlímepUida

Otros efectos adversos descriptos son náuseas, vómitos, hepatitis


mas muestran en g,eneral diferencias farmacocinéti'cas que se colostática, 'hemólisis, depresión de La médula ósea y alteraciones
resumen en la Tabla 1. dermatológicas que oscilan entre el simple rash hasta los sTlndromes
mucho más raros de Stevens-Johnson y de Lyell. La clorpropamida
j~ ----.-
puede inducir efecto antabús (disulfiram) y ocasionar hiponatremia
(formt?.. ción
dilucional (efecto s¡miL HAD).

j
>90 I habitual) I 80 I 95 I Aprox.l00 Por su efecto estimulador de la secreción de insulina, las sulfonilureas
90

(mK~:",j') ~
promueven incremento del pe.so corporal.
95 I 8599 98 I 99.'
Existen canales KATP en otros tejidos del organismo como eL
miocardio y las céLulas musculares lisas de las arterias coronarias. Su
33

0.10 t- ~20-· S 10-15

-;26
4

0'20i ­ O~O
5
estructura difiere de la de los canales pancreáticos en la composición
de sus subunidades (kir/SUR). En modelos animales se ha descripto la

...
capacidad de Las sulfQniLureas de aboLir el precondicionamiento
~.
+++

I +/-

Tabla 1. Farmacocin61ica dr: las s-u!fot1ilumas.


I I
-/- +/- ­ isquémico. Ello podria atribuirse a su capacidad de ligarse a las prote'i­
nas SUR dé los canales KATP de los miocitos de los vasos coronarios. La
consecuencia clínica no es clara y es aún tema de debate ya que no S(~
ha probado ni ngún efecto de relevancia terapéutica.

:no 331
f1idlu'/,·'. V 11'!ld.', lilc!l"" rll' ú¡ .,(,i:) '·Wrii 11VO·-[Ui:lr ~ Trai.·{lm.;,·nr:,."l (:rrma(Cl{~;iJi((' ~'r!t' flr In Cll~i1tU:ti'f ltie!i,iiw' trf;!.' '- m
[] Meglitinidas y análogos Se elimina principalmente por vía renal.
meglitinidas son drogas de acción breve, que se ligan a la subunidad
L(lS Los efectos adversos más frecuentes son gastrointestinales: náuseas,
SUR del canal de KATP en un sitio diferente del de las sulfonilureas. La vómitos, diarreas, sensación de plenitud gástrica y sabor metálico y
magnitud de su efecto dependería de la concentración de glucosa pueden ser causa de abandono del tratamiento. Su frecuencia eintensidad
plasmática: de este modo estimularían la 'secreción de insulina sólo durante se reduce administrando la droga con o después de las comidas, sin que
el período postprandial. Administradas inmediatamente antes de cada ello afecte sensiblemente su biodisponibilidad.
comida permiten un buen control de las excursiones glucémicas prandiales La metformina puede inducir anemia megaloblástica, porque es GlpaZ
con bajo riesgo de hipoglucemias interprandiales o nocturnas. de limitar la absorcíón de folatos y de vitamina B12. Por este mismo
Tanto la repaglinida como la nateglinida tienen una vida media mecanismo facilitaría el desarrollo de hiperhomoci:steinemia leve. Pero
corta, cercana a ta hora. el efecto adverso más temido de la metformina es la acidosis láctica
que es consecuencia natural de su mecanismo de acción. Este efecto
Flexibilizan el tratamiento y pueden, como las su'1fonilureas" admi­ es sustancialmente menor con la metformina que con otras biguanidas
ni strarse conju ntamente con agentes <<normoglucemiantes» D con empleadas. antiguamente (ejemplo fenformina). Su presentación es hoy
insulina. No se recomienda asociarlas con las sulfonilureas. muy rara y se observa cuando se administra la droga a personas que La
tienen formalmente contraindicada: personas con hipoxemia (EPOc.
insuficiencia respiratoria, insuficiencia cardíaca), alteraciones en la
Agent'es nórmoglucemiantes o «antihiperglucemiantes» metabolización del ácido láctico (i nsuficiencia renaL insuficiencia
Metformina hepática, insuficiencia cardi·aca) y etilistas. Al igual que otros agentes
orales, la metformina está contraindicada en pacientes embarazadas.
La metformina es una biguanida de acción antihiperglucemiante, cuya
acción principal consiste en depri mir lél producción hepática de glucosa
por inhibición de la gluconeogénesis. Este efecto éstaría relacionado TiazoLidinodionos (glitozonos)
con su capacidad de reducir la actividad del complejo 1 de la cadena
respiratoria inhibiendo así la formación de glucosa a partir de lactato. Las formas disponibles en el mercado son la pioglitazona y la
También incrementa la actividad de la AMPkinasa (AMPK), efecto que rosiglitazona. Las tiazo'lidinodionas son agonistas de los factores de
redunda en una mejoría de la sensibilidad periféríca a la insulina. transcripción PPAR y que operan sobre receptores nucleares.
Su administración mejora la HbAlc y, a diferencia de otros fármacos La familia de Ilo.s receptores PPAR es ampLia, destacándose los tipos
antidiabéticos, promueve una moderada reducción del peso corporaL PPAR ex y y. Los fibratos actúan como agonistas PPAR y Yeste efecto
especialmente al principio del tratamiento. efectos se verifica espedalmente a nivel del metabolismo de los
trigli.céridos. Los receptores PPAR yse relacionan con los mecanismos
La metformiria induce cierta reducción de los niveles de VLDL y se ha de sensi'bi lidad insulínica.
descrito una ligera elevación del colesterol-HDL. Asimismo se le adjudica
!!Jn efecto reductor de los niveles de PAI 1 que parece asociarse a una AL estimular estos receptores, Las tiazolidinodionas mejoran lil
mejoría del estado fibrinolitico. captación de glucosa, especia~mente en el músculo esquelético.
Su administración puede asociarse con cualquiera de los fármacos Tanto la pioglitazona como la rosiglitazona reducen la trigliceridemi¡:¡;
orales mencionados anteriormente y también con insulina. aunque se ha descrito una ligera elevación de los niveLes de colesb>.rol­

332 333
-El)

LDL, está demostrudo que reducen los valores de LDL ol<idada. Además iOn en tela de juicio aquellos conceptos que consideraba «segu­
el incremento de LDL seria a partir de moléculas más grandes y menos ros» .aún aceptando que en medicina «a seguro se lo llevaron
;¡terogénicas. Algunos autores destacan cierto efecto antiinflamatorio preso» como decía mi abuela?
de los agonistas PPAR y. Los pacientes tratados con tiazolidinodionas
experi mentan incremento del peso corporal. Después de meditor subre estas cuestiones, lo invitamos a seguir le­
Ambos agentes son metabolizados a nivel hepático. yendo.
Entre sus efectos adversos merece mencionarse la hepatotoxicidad que : .
requiere monitorear periódicamente la función hepática durante el j
tratamiento con tiazolidinodionas. Además, se ha descripto la aparición de Tratamiento farmaco'lógico orall de La diabetes tipo 2 1
anemia (probablemente dilucional) y edema. Por ello están contraindicadas
en pacientes con insuficiencia cardiaca (clases III y IV de la clasificación El grado de control metabólico del paciente y las metas de tratamien­
de la New York Heart Association). Esto último las contrail1dica en pacientes to estabLecidas juegan un rol fundamental en las decisiones iniciales de
con insuficiencia cardíaca (clases III y IV de la clasificación de la New York la terapia de la diabetes. Si los niveles de HbAlc se encuentran muy
Heart Association). elev(ldos (valores iguales o mayores a 9%), el paciente debería iniciar su
Dado que estas drogas se metabolizan a nivel del sistema P450, deben bmtamiento con insulina (ver Capítulo 22), asociada a la adopción de
tenerse presente las interaccionesa este niveL La rosig litazona es estilos de vida saludables (plan de alimentación y práctica regular de
metabolizada principalmente por el CYP2C8 y la pioglitazona, además, por actividad física (Capitulas 20 y 19). Cuando los valores. de la HbAlc son
el CYP3A4. inferiores a 9% y el p'lan de alimef1tación y la actividad física por sí solas
hayan fracasado en el logro de los objetivos del tratamiento (descriptos
en «Introduccióm», se iniciará ~a administración de antidiabéticos orales.
Simultáneamente se enfatizará la necesidad de continuar y adecuar el
• Inhibidores de alfa glucosidasas intestinales plan de alimentélción y de actividad física .
La acarbosa es un seudoglucosacárido que inhibe la actividad de Como regla general:
las a-glucosidasas intestinales. Por este mecanismo reduce eL incre­
mento prandial de la gLucemia consecutivo a 'la degradaéión de azúca­ Los objetivos terapéuticos con la terapia oral deben lograrse tan
res complt:'jos a monosacáridos y su absorción po.sterior. pronto como sea posible; en consecuencia y salvo consideraciones
particulares, los ajustes en el tratamiento farmacológico se 'harán
Su efecto adverso más frecuente es gastrointestinal: flatulencia, rápidamente y sin demoras injustificadas. En caso necesario se indicará
meteorismo y distensión abdominal. la adición de fármacos requerida para alcanzar las metas terapéuticas
en 6-12 meses.
Antes da desarrollar el tratamiento oral, le preguntamos:
La terapia oral puede iniciarse como monoterapia (un solo agente
• ¿ QLlé sabe usted sobre este tema? oral), o bien como terapia combinada. Aunque el empleo inicial de
asociaciones de agentes, a dosis submáximas, podría acelerar el logro
• ¿Cudles son sus dudas? del control glucémico deseado con una menor incidencia de eventos
• ¿QUé comentarios o le.cturas realizadas en forma reciente pusie­ adversos, el tema es aún objeto de discusión.

334 335

1I1

_ _ _ _ _ _ _ _ _ _-_T::.:.I.::.I/:.:.I.~!/:.:.:¡¡~','.::.iI~il_-.I..JI~II;;.I.':....'''~,1",)/,. '! ''fn! d- ¡,.. dil'¡"ff'~ .~

I
Como se muestra en el algoritmo de la Figura 3, basado en los criterios ••• r~TJ( ....

de la Asociación Canadiense de Diabetes, freouentemente las personas MI


con un IMC mayor o iguaL i:l 25 inician eL tratamiento con uno o dos f - -------------------.- - -,
I
agentes orales de las diferentes clases: metfo~mina sola o asociada con
una tiazoLidinodiona, un secretagogo, un inhibidor de a-glucosidasa o
eventualmente, insulina.
Djagn6stico clírlico y prescripción de plan de alrmerlta~ión y actividad física 1
--·---'----'--T--· - r
Hlpcrglucemia - - -a-mo'¡€r3c.W
leve - - -----, I~erglucemia5(!Ver~
(HbA1C < 9.0%) ~HbA1C ), 9,0%)
En cambio, pacientes con IMC inferior a 25 (que asumimos tienen
un deterioro mayor de la secreción de insulina), inician eL tratamiento
I---·;;br;~l
+ -----~
con uno o dos agentes orales de las difereliltes clases: metformina, Sin 50brepeso 2 agentes
tiazolidinodionas" secretagogos, inhibidor ~e ff.-glucosidasa () i nsuLi na. L ~.~ 25) (BMI < 25) antihiperglucemiantes de

~ ¡ diferente d~sc,:
bigllJnlda

eJ
Frente aL fracaso de cuaLq uiera de ,estas intervenciones a dosis máximas cen,ibili1'lnor de 1~$ulil\a
· ~.er.retl}g{}g(') lh~ 1t"l9U Iln~}
se procederá a adicionar una droga de cualquiera de Los otros grupos no 1 Ó 2. agentes InsllllnJ
empLeados hasta eL momento (Tabla 2).
Si a Los 6-12 meses de la administración de dos o tres antidiabéticos
Biguanld;¡ ,ola o
combiMción con
~enf,iili li7-~dor de Insulina
secretagogo <.le insul ina
anti hip~rglucemlante ..
de diferente doses:
biguanida
<;ensibilllador dI: Insulina
L _
Inl1lbidor de la
"-9Iucosido~a

orales no se alcanzan las 'metas terapéuticas, se considerará la insulina 1­


,€-cretogogo de Insulina

j
Inhlbldor de la insulina
administración de insuLina sola o agregada a los fármacos empleados .J
Il
u-gluCO'sidasa inhibldof de la r---ínsull~1
u-gluco<;idasa ylo preprandlol
hasta ese momento (Capítulo 22). l-.-- I

En las mejores condiciones, la eficada (efecto máxi mo) de la -. + + - ~ .


--Si-; se alc;;-~~
monoterapia esperable en términos de reducción de los niveles de /'-!bAlc Si no ~e alcan~;l Si no se alcanza F;~~
es: sulfoniLureas 1.5-2%, metformina 1.5-2%, tiazolidinodionas 1.0-1.5% el objetivo I el objetivo el obJetivo el objetivo _1
e inhibidores de a-glucosidasas 0.5~1.0%.
~ + +
C
--~"---~

Agregar una droga de diferente Agre9~r


un agente
clase o usar insulina sola o en antihipurglucemlante
Tratamiento de la diabetes tipo 2 en ancianos ,

_c::~i~tinta Clase o insulina ~

l
comblnoclón con
• Bigual1lda ­
Es muy importante consigni,lr que, desafortunadamente, no existen 1

• Secretagogo de in~ulfna
estudios a largo plazo que demuestren los beneficios de un control > Sellsibilizador de insulina
Intcn,lficar el
... __ T.. Inhibidor de In "·9IUCOsi~ regimen de in~ul ina o
metabólico intensi,vo espedficamente en sujetos de edad mayor de 65 agregar:
años. Sin embargo debería promoverse su logro en pacientes ancianos • Bi¡¡uanida
• Secret¡¡gogo ~e insulina
con capacidad cognitiva conservada y una expectativa de vida que permita , • 5enslbili,ador de insulina
potencialmente beneficiarse de un control estricto de la gLucemia (10 a #1,
,'"
• Inhibidor de I,l Il·.. glucosidasa

20 años).
[se re-;;-I;~"rdn""~ju<;tes- de tiempo yl u adi~i~nes de otros agente' ant;hiperglucemlantes, -­
ylo insulina para alr.»n7.ar d objetivo de HbA1C dentro de los 6 a 12 mew~,
Las 'características del tratamiento en estos pacientes se describe en
----==="""-~-~ --~--~~-

el Capftulo 24.
'* Figura 3, Algoritmo de tmtamienl:o de la f¡iP'Ng!ucrmia en la diabetes tipo ?


337
336
1111'111
11 .:' tlli
¿ Recuerda que inicialmente le propusimos pensar un plan de acción
para que los pacientes adhieran al tratamiento? ¡No lo hemos olvidado!
En grnr.la!, únir., loma c~ Después de rozonar y memorizar el algoritmo, escribo algunas líneas

t
250 mry/di, 150-~OO rng/~i,l 7~;O mry/d;,
d~~,i1_vuno _
que le sirvan para sostener (lfJt~ fas pacitHite5i lO$ w.:ont"." dr: la
En t,;nninn', dc eficaciJ, poca
Glibr.nclar;",idJ 2.5 Ing/~íA ,,-lol1lg/rlla 11 m~/db 9JnJocia con Ids do 10 mg/,jí,l, importancia de cumplir LO r:.stipulado.
(6 qli"IJ~~.1) (Tnmaf ¡in "lim"l1lol. un,l o dos
tomas dial;a> cu,ndo"e J~lnini'lr.n
mj, dc 10 mg, liclllpr., rto' tom,~ DE se" posible que sean palabras cercanas al vocabulario cotidial1·o.
rJiJri.\S)
... --- rf?Wffo/!: que:
(jlilnopiríd, II mg/dla 2·1, mg/diJ RI1lg/rJIJ Por.~ g,lll.lIlr.la rn ¡"'1111inol dc c-fic",ia
['(lO más de 1, m~/di" Por lo g~nú'~i.
:e :ldmlnistrtl f'lJl U/M tnmil di.lria ningún viento es favorable paro quien no conoce el puerto al ('{Uf'
Glicll1itía so mg/di] lWm(j/oía 320 m~/d~lo 'e adminima;;-;;'~sdc· 80 111g, debe arribar.
en genera\' dos tnll1al :1 iJfí,),
--.....,.-1 - - ­ Séneca
Glk~1zid~ JO mgío¡~ ·O·~O I1In/día 120 mg/dl. Una ~/li"" toma di,ria
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alimcntos retr,11,l'l ,lbllllci~n
Para {{egar a buen puerto... SEO claro, preciso y atento. Lo esperamos.

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Natr.qlinida
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1aO Ing
1,1 nll\ll1a
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~,.
cada ante. de cMln .1nle\ d" !lrovil)' a ("do comid.1 ha,t,l (:/1 Diílbl\l·,':' Llre 2ó (51):53J-S50, 2003
comidJ r.omid.l fadJ comid.l m"nrellto inmeoi,1tJll1eI11.'~ prr~iu .,
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Mel.formina 500 il1<)/dia 850-2000 m9/rJíat.500 ll1 0/djiJ D~de.el puoto dc vi,to rl;~;-­ P,lticnts with Type 7, Dio1Detes. N EIl\ll J Ml'rl V.3:383-393,7.003.
nfieacla, es PO({' Id Q,'1r:.'HlCla a

l' I
partir de lo' tOOO nrg/dí.1 ti. Garbcr,AJ, Larsen.J, 5chenider. SH. et al. 5.imultancous gLyburide/metfonnin tllcrilPY ;1
r{;¡¡oildlnodil1nos (glllozonas) supnrior to componenl ruonotllcrrlpy as Ml initi,)L pharmacoLuyical t:rColtment for tYPl' ?

~.~- '"~"" B mg/día ~do S· "omini'be" El mg


1ílA n diabetes. Diabete, Oh!'s Met.lb 4: 201-220.2002.
Rn\ín 1.O a" di,,,ios. puede hJco~o on UIl,¡ 5. HOllll:'. r, R~lrjd-,lct.ill~ insulrjn ~pcre"'lgogues: a c1inícal need? E¡(p. Clin. EndocrinoL.
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¡
,

t
Celda una
5. Mllrphy.GJ, ¡¡nri Holder. Jc. PPAR·g.1mma a~onist~: t.hnrapeutic role il1 di.lbetcs,
P"joqlit.17olln ~~m~~5-30 mg/di.l '.~ mg/dIJ Pl1I h¡ !lCI1C,'¡1. um IO¡;t.)1l10 in/l.lml1l.1tion 11nd caneer. Trene! in PharmacoLoyir.al Sciellccs n: 4G9-474, zono,
di;lri.
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(t·n'5 tomJ'; (111.'\ turna. d~
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de su mo) lOO m9)
Therapeul:ic" 10'" Ed. McGraw-Hilt, 2001: 1917-2073
Ln.< do¡;s recomendadas son aplicables (l pacielltes sin O/tE,aOOlles ¡Je In funci611 'en"l y/o beprilica. 9. TomJi. F.. Crea.F.. Grl.'parrjnnc, A., Versaci, F.. Oc Po1uLism R., Pent., de PapP",¡\" Cid." ;,,111),1 ..
Tabla 2. Dosificación de los antidiab(itico.~ omles. Gioffr~, PA. 15chcmic preconditionillg durin9 wrollo1ry clIH]iopla·¡ty i', lilllV.',nl.id I,v

338 339
Caso Ctini-co 2
glibenclnmide. n ,declive ATP··<;('n$i\ive K+ ch~nnel blocker. lirClJlntion 90: 700-70S,
1994, Paciente masculino de 71 afios, profesional, casado, 2 hijos sanos. Con
10. UK Pro<;pective Diabetes StuJy Group: Effect ofil1t(>n'.iv~ blood-glucole control with diabetes tipo 2 desde los 58 aftas,
m~'tformin on cOlllplicoltion<; in ovcrweight patients with type 2 diilbctes (UKPDS J4).Lcn[~t Alltecedente-r, familíares: desconoce antecedentes de diabetes.
152: 1154·:,{.~.199B. Antecedentes pe{sona¡'.l?_~: hiperuricemia desde los 44 anos, hepatitis 11
11. UK Prospective Di~bQte\' Stu~y Gruup: Int@Il_livc hl,ood-gluco.\~ control with los 55 ano,s. Obeso desde hace 10 años. Refiere hipergluDemia~ periódicas
sulphunylureJs or illsuli,n colllp.Hrrt wlth conV€ntional treJtmellt ill1d rir,k of colllplicatiom (siempre", de 200 mg/dl). Tratado con metformina 500 mg; previamente
in poltirllt', wíth, type 2 diabetes (UKPD5 33). L,JllCct 352: 837-853,1993. '
fue medicilrlo (:On Clorpropamida 250 mg. Hace 1 sola ingestión de comida
12. UK Pro,pectivc Diubctc;, Sl:llrly G¡oup: ifight pre,sure control a~¡j ri5k 01 IlIilnOv¡lscular
and miuova~culM cOlllplic.ltions il1 I.ype ~ diflb"tc\: UKPDS 38. Bt~J 317: 703-713, muy import.ante (cena).
1')98 Motivo de comuftu: control de su diabetes y examen periódico.
Examen físico: altura 1,66 m, peso 82 Kg, circunferencia de cintura 110
cm; IM{ 29,8. Aparato rc~piratorio s/p; apamto circulatorio r.oplo sistólico
en punta, presi,ón arterial 145/90 mm Hg. Miembros i nferiore~ disllli lIución
del vello en piernas, mflejos conservados, disminuciá'll de la ~.ensi bitidad
(aso Clínico 1 (monofilamento) .
Las pruebas de Laboratorio solicitadas incluyeron glw:cmi,\ (260 IlH)jdl),
Paciente masculino de 50 ai1os, con diabetes tipo 2 desde hace 10 años.
HbAlc (8.1"/0), uricemia (medicada; 6.8 mg/dl) Col.csterol (187 IllQ/dl),
Antecedente:; familiares: desconoce antecedentes de diabetes, madre
cHDL (41 mgjdl). Función renal normal. rondo de ojo (rctínopatí.l no
hi pertensa.

proliferativa). EcoDoppler de los vasos del cuello (aterolf1"to5i~ carol'idea


Antp.cf!defll'f5 personales: casado, 2 hijos, sedentario, ali mentó;lción v.'niada,

no estenosal1lte).
alrnuerza fuera de su ca,a, en base iJ s~ndwiches, queso y dulcl; l) postres.
Tmtamfctlto: se indica educación diabeto lógica, plan de Olli mentilciún
Motivo de CO'nS.I1/'ta: consulta por sQbrepeso; refiere epigasl:ralgia
adecuadO' ,\ sus requerimientos y prúctica regular de actividad físic<l
"emocional».

(caminatas diarias con aumento progresivo de distancia a recorrer).


Examf:n físico: talla 1.74 m; peso 86 kg; circunferen6a cintura 115 cm,
Automonitoreo glucémico. Glimepirída 4 mg y metformina 1000 mg diarios.
IMe 28. Aparato respiratorio s/p. Aparato circulatorio: presión arterial
Segu,imiento: En los 3 meses siguientes se ajusta medicación con aurnel1to
150/100 mm Hg. Miembros inferiores pulsos periféricos presentes, reflejos
progresivo de las dosis de glimepirida 12 1119 Y metformina 1500 mg, pero
osteotendinosos y sensibilidad (monofilamento) conservados. Ellabor<itorio
no re-speta plan de alimentación ni actividOld física. HbAIC ~ 7.9. Rechaza
inoluyú §lucemia (120 mg/dl), HbAJ!c (7.9%), colesterol (191 mg/dl).

tratamiento con insulina.


cHDL (42 mg/dl), orir;¡a completa (normal).

Araíz de intervención por nevo extendido (infiltrado basocelular), comienza


Diagn6r.tico: diilbetes tipo 2 COIl control pobre, hipertensión arterial y
con insuli na de accióníntermediit nocturna a la que Se le agrega luego
sobrepeso.

otra dosis lIl<ltinal. Dado que sólo se logra grado de control regular, se
Tratami'ento: educación diabetológica para llogrilr ildherencia al plan de

intentan distintos es.quemas terilpltuticos con insulina. Se los combi"121


Ollünentación y práctica regular de actividad fís-kil.
sucesivil,mentc con metformina y glilazonas con mejoras transitorias. En
Seg¡Jimiento·: baja 8 Kg de peso en 3 meses, glucemia en ayun(-l_~ 110 mg/

r;onsecuencia se indica insulina glargin<i al acost.arcSe y correcclones con


dl, glucemia 2 hs ¡postprandial 129 mg/d'l; presión arteria'l 145/85 mm
insu1ina corriente mejorando los perfiles glucémicos. En la actu<Jlidad estil
Hg.Interrulllpe tra,tilmi,er~to dUral~te dos afios (fallecimiento de la madre y
tratado con insulina glargina nocturna y correcciones con insulin;:¡ aspaT'tato.
separación matrimolilial, depresión). AUlillenta de peso (87 Kg) Y sube su
Se ,logró introducir el hábito de I¡ comicias diarias y elmonitoreo preprand i,tI
presiOn tlrterial (lBG/lOO mm Hg); glucemia ayunasI74mg/dl, HbA lc 8,5%.

y postprandial. Ultimo valor de HbA lc 7.2%.


Rei nicil) tratamiento con metformi na 1700 mg diarios y rosiglitClzona 4 mg

di¿Hios. Refuerzo de la educación diabetológica y monitoreo glucémico

pre y postprandia l. E~alapril 10 mq diilrios. Logra bajar de peso (82 kg),

mejorar co,ntrol glucémico (HbA 1c 6,9%) y reducir presión arterial (135/

90 mm Hg).

341
340
,lllllllll

Insulinoterapia en personas
con diabetes tipo 2

Leon Litwak y Guillermo Dieuzcide

Propósito

Usted'yo sabe ,que...


La diabetes tipo 2 (DM2) es una enfermedad crónica de cur¡]der
progresivo que requiere un enfoque terapéutico din~mico con el ohjetivo
de lograr un control metabólico adecuado para prevenir lri apilticióll vio
retrasar la progresión de sus complicaciones crónicas. Estas camctcnstims
las ha leido y analizado en este manual. En la misma linea, esperamos que
después de leer este nuevo capítulo, puedo:

• Conocer la secuencia de las etapas evolutivas de la diabetes tlpo 2


para poder identificarlas y elíl consonancia, apUcar el tratamiento
apropiado para cada una de ellas.
• Reconocer La importancia y las consecuencias favorables, desde el
punto de vista de control metabólico y prevención de las complica­
ciones, de indicar el tratamiento con insulina en forma temprana.

FisiopatoLogla
En las personas con díabetes tipo 2 hay tres alteraciones cuya
combinación determina el estado de hiperglucemia:
resistencia periférica a la acción de la insulina (músculo y tej'ido
adi.poso) (IR),
• incapaddad de las céLulas Bpara cubrir la demanda exagefólt!,1 dI'
insulina generada por la IR y

excesiva producción de glucosa hepática.

l43
• ( rt· d,' I ,. ~ l':: t I ·f.l-"l~ .:. ': l -'-rn
Si bien la IR juega inicialmente un rol patogénico importan­ para lo tlJa[ le pedimos que recuerde y escriba evidencias que podrían ser
te, en realidad es La falla de ILas células beta la que determina ~a su ú'libletóN para el diálogo con sus poden/es.
aparición y progresión d,e la diabetes tipo 2.
Luego, como hasta ahora, continúe con la lectura para la autocorrccción.
nin!mos qUF:... Descn"biremos brevemente cada ('tapa de lo his.toria natural de la Diabel:'('~~
La DM2 pasa evolutivamente por 5 etapas claramente definidéls tipo 1..
desde el punto de vista fislopatológico y cllnico.
1) Etapa de tolerancia a la glucosa alterada (1GA): puede extenderse
durante muchos años previos al diagnóstico. Se caracterizi'l por un aumento
progresivo de la IR con hiperinsulinemía <ccompcnsi'lcJora» que no logra
TGA 1 2 3 4
Glucosa ~lur4)~j) po:.t-prilndiill normog~ucemia ya que presenta hiperglucemia PQ~tpl;:¡ndial (I-IPP).
350
300 I GIUOOS3 en ayunas
250 En esta etapa son útiles los cambios en los hflbitos de vida (plan
200 I alimentario y actividad física), con el agregado en algullO<; (J~OS de
150
1001~ insulí nosemibilízadores.
Real'te,ncia ji
'.Insul¡n~ 2) Etapa 1 de DM2: caracterizada por la persistencia de la IR y
250 I profundización dE' la falla de las células~, determinada gel~étic'~\Inentc
I

15011~~1
r
En riesgo de
dlabete.!
I ~~e ~u~a x}'U\\(,~
í'\\l\~ b Nivel de insulino
y agravada por la gluco y lipoto.xicidad (etapa de insulinopenia relati­
va). La HPP se agrava y comienza la hipergllKemia de ayuno (HA).
Años -10 -5 O 5 (> 10 15 20 25 30
Mor1iflcildc eJo R. M. &ür:Jen<.>I~11 Centro Internacion.:ll de Dii!lbctc~
Terapéutica: si con el tratamiento no farmacológico no se logran
los objetivos terapéuticos, se debe considerar el uso de drogas
Figura 1. insulinosecretoras de acción rápida (Meglitinidas) asociadas a
insuli nosensibi lizadores.
Sin embargo, con glucemias de ayuno superiores a 180 mgfdl ya se
,1- Le plOponemos que a partir de la lectura de los valoré'S que apore­
debe considerar el uso de insulina en forma transitoria o definitiva.
een r;lJ lo ¡(qura, .wmado a 1(J qUI' ya ha aprendido a lo largo de osf:'c;
programa de capacitación, establezca CÓ/l'W es /0 sc:cuencía de (~v(]n­ 3) Etapa 2 de DM2: evidenciada por la persistencia de la IR, mayor
/'05 que condiciona lo apan'cíól1 .Y progrc$idn de la diabetes tipo 2. compromiso en la respuesta insulirlOsecretora de las células ~, mayor
2- También le solicitamos que piema sobr2la veracidad de la siguien­ amplitud en las HPP y niveles elevados de HA.
fe fmsc: Tratamiento: deben emplea rse insuli nosecretores del ti po sulfoll'i I1111 :'1',
asociados a 1nsulinosensibilizadores.
«el tratamiento farmacológico... (en las etapas presentadas)
implementado con el objetivo de lograr un control glucemico adecua­ Al igual que eola etapa ,anterior, ante la persistencia de gllU:~1lI1as
do debería ser dinámico con adaptaciones rápidas en función de de ayuno supe,riores a 180 mg/dl se debe considemr nI ll1W de
la progresión de la enfermedad», insu~ina. transitoria o definitiva.

344 345

JI/el/tl""·1 ~"pI/tl. ¡¡¡l/tt/t". </1, '¡t"f/n r r"di~H·I¡'.~ O/ttl ~ lf7:uU!i("t._·~ar;I:t7 en p(",·'~·~)!W~· (,'V¡ (ii(Jb(,tr~ Uj.H.l ."- ~

11) Etapa 3 de DM2: caracterizada por la pers-istencia de IR y un mayor autoinmunidad humoral y ceLular representada por la presencia de
dct:l~ríoro de las células ~. Antícuerpos anti GAD y anti células del islote (ICA). No son obesos y
presentan un deterioro rápido de la función de sus células ~ que re~
Tratamiento: esta etapa presenta dificuLtades para el control tanto de
quiere la administtación precoz de insulina para su tratamiento. Aeste
las glucemias de ayuno como de ,las postprandiales. Es necesario asociar
subtipo de Diílbetes Mellitus, se lo denomina LADA (Latent autoinmune
insulina a los hipo y normogluc€!miantes orales insuLjnosensibilizadores
diabete:; 01 the adult)o Por lo tanto, al margen de las etapas descri ptas
y/o insulinosecretores.
para la evolución de la DM2, la Diabetes LADA debe considerarse siem­
En la práctica clínica diana la utilización de insulina a partir de pre e'l1I presencia de personas con DM2 delgados y con una progresiva
esta etapa suelle demorarse muchos años, con las consiguientes incapacidad de mantener un central metabólico adecuado con la tera­
cotlsecuencias graves sobre el desall'ollo y la progresión de las péutica oral. El dosaje de péptido e basal y la pre:.;cncia de los marca­
complicaciones crónkas. dores inmunológicos mencionados pueden faciliülr el di<lgl1óstiro y
)
tratamiento precoz con insulina.
¿ Por qué sucede? 1m

Esto ocurre como comsecuencia de falta de información y del temor


al uso de insulina por parte de los médkos y de los pacientes. • Objetivos de control glucémico en la diabetes

5) Etapa 4 de DM2: etapa en la que la IR se asocia a un estado de Existe un claro consenso sobre la necesidad de lograr" glu<::'cmiil5
insulinopenia absoluta. pre y postprandíales lo más cercanas a los valores normales (Tabla :1).

Tratamiento: es necesario iniciar terapia de reemplazo completo


ton insulina (aunque puede seguir asociándose a drogas • Bajo Riesgo Riesgo de Riesgo de
insuli nosensibiLizadoras). general Macroangiopata Microangiopata
Ayunojprepandial (~g(dl)
- <:: 110 ~ 110 ,.. 125
El patrón evolutivo de la DM2 quedó claramente demostrado en el
Glucemia postprandial (mg/dl) 135 ¿ 13¡' > 160
-
estudio UKPDS (usted tuvo acceso a esos estudios en varios capítuLos
HbAl c (%)
---
<:

< 6.0 <: 6.0·6.5 <: 6.5-7.5


de este programa): después de 9 alños de seguimiento solo el 8% de
los pac:ientes se podía controlar únicamente con tratamiento no Tabla 1: Ohjic'tivos terapélJl.ir:os - DM2.
farmacológico. En el grupo tratado con sulfonilureas o con metformina
se úbSérvó que el 45% de los pacientes necesitó combinar dos o más
DRtél7qase a analizar esta Tabla. Con seguridad hay valores que us.t-Rd
drogas para regular su gLucemia. Finalmente, al inicio de su tratamíento
30% de los participantes utilizaba insulina, pero a tos 5 años la utilizaba
ya ha visto y analizado. Consid(frelo la reafirmaóón de lo presentado
el 50% de los pacientes. anteriormente.

En los últimos años se ha descripto un subgrupo de personas clasifica­ ¿ Le sirve como repaso? ¿ Es esta reiteración útil para usted? ¿ La St/I/r'1I
dos inicialmente como portadores de DM2 y que estudios de o la relee? .
epidemiología molecular determinaron que representan entre'un 10 y
20% de todos los pacientes con DM2 que no requieren inicialmente ¿ Sabía que la rt;:flexi6n sobre 1.0 tarea de (Iprendizaje es 1111 I 'íl '11 il itl rlr:
insulina para su tratamiento. Estos pacientes presentan evídencias de metacognidóf7 que lo ayuda a estudiar mejor?

:J4e 3'

1:11·
Glucemia y riesgo vascular. El riesgo paril desarrollar macroangiopatia
tiene un umbral de glucemias más bajo que el descripto para el desarrollo " Cirugía
de la microangiopatía (Tabla 2). Por otril parte no hay aún datos precisos • Embarazo (por la contraindicación absoluta de hipoglucemiantes
del valor de HbAlc por encima del cual comienza el desarrollo de orales).
complicaciones macroangiopáticas.
Indicaciones definitivas:
Sobrrla base de lo descripto, para evaluard grado de control metabólico • Falla insular ~: este diagnóstico se plantea en pacientes con inca­
da la DM?, podamos considcr(/r los valores consignados en la Tabla 2. pacidad para obtener y mantener niveles glucémicos adecuados,
con hiperglucemia sostenida (glucemias de ayuno >180 mg/dL y/o
HbA1c >7%) a pesar de recibir dosis rn:lxil1lélS de 2 o más

~
Grado de control Bueno Regu~r Malo antidiabéticos orales (uno de ellos insulino~eCld()r), ubicados en
Glucemias de ayuno < 110 mgjdl < 140 mg/dl :- 140 mg/dl cualquiera ce las etapas descriptas de la enfermedad.
Glucemias posprandiales < 140 rng/dl I < 180 mg/dl > 180 mg/dl Pérdida de peso sostenida y no controlable ell un pildl~nl(' CM) DM2
- -­
Hemoglobina HbAlc < 6.5% 6.5% - 8 % >8 % • Pacientes que deban recibir corticoterapia crónica.
• Pacientes con insuficiencia renal y/o hepática crónic;\.
Tabla 2. GradoI de control mcta/lúlico de lo DMZ,
e
Estos estadios pueden diagnosticarse con el dosaje de péptido b;I:.. 11
«0,2 nmol/l) o la ausencfa de respue~ta al glucagon. La prc~on(i" dI':
anticuerpos anti GAD e leA, orientan al diagnóstico de diélbete~ li po
• Indicaciones de uso de insulina en la diabetes tipo 2
LADA. Un diagnóstico di ferencial adicionill que debe considl'L¡ r:iL~/
Esas indicaciones las dividiremos en transitorias y definitivas. especiaLmente en diabéticos ancianos, es el de cilncer de páncreas.

Si le parece bien, ante.'! de leerlas haga su propin clasificación de cuú{.es.


son unas y otras
Inconvenientes y dificultades en el uso de insulina en el
Ind;cadones transitorias: diabético tipo 2
Descompensaciones agudas severas como el coma hiperosmolar no Uno de los factores limitantes es eL riesgo de presentar
cetósico y la cetoacidosis diabética. hipoglucemia (este tema lo encontrará más desarrollado en el Capítulo
24). En el paciente con DM2 ella está en relación con la duración de l,l
Presencia de enfermedades graves interrecurrentes: enfermedad, la existencia de episodios previos de hipoglucemia, la util.i­
- infecciones severas zación de dosis illélceptabLemente altas de insulina, los horarios in,ld~',
cuados de aplici.lciúll de ;"lsuLina, el ayuno prolongado, el ejercicio·intl'll
- infarto agudo de miocardio
so no planificado y lilingestión excesiva de alcohol. Sin embi41'9 1l '.11
- accidente cerebrovascular frecuencia es mucho menor que en pacientes con diabetes (DM1).
- alteraciones gastrointestinales que bloqueen la vía oral Otro inconvenienb~ ti considerar es eL incremento de peso qlli' 1::,10\
- polit'raumatismos y quemaduras. ,en relación con la dosi~ media diaria de insulina y con 1;\ ill'.ulilll',IlIi,1
media plasmática. Diferentes estudios muestran que ellJt;n dI' i1I';lIlillol
348
+9
I r:¡¡n·ii..,;~ :~,~~.:""'J'

produce un incremento promedio de 3 él 9% del peso respecto al basal o En el. CilSO de insulina Glargina es indiferente aplicarla antes o
(2/3 relacionados al incremento del tejido graso y 1/3 al aumento del después de la cena.
tejido magro). En el UKPDS los pacientes insulinizados aumentaron en .. En ambos casos es necesario monitorear sU efecto controlando las
promedio 4 Kg más (en 10 años) que los tratados sollo con dieta y 2 Kg glucemias de la madrugada (03:00 a 04:QO hs) y las previas al
más que los que recibían sulfonHureas. Es importante, al tratar a Los desayuno. Se ajustará la dosis cada 3 a 4 días en el caso de NPH y
pacientes con DM2 con insulina, evitar incrementos de peso marcados cada 7 a 10 días cuando se utilice Glargina.
ya que la obesidad es un factor de riesgo independiente en la generación
• Si la 'glucemia a la madrugada es menor de 80 mg/dl se indicará una
deinsulinorresistencia y en el desarrollo de enfermedad coronaria,
hipertensión y dislipidemia. colación en ese momento y se reducirá la dosis (alrededor del 20%)
del día siguiente.
El tercer inconveniente a superar es la barrer;¡ que el paciente y su
familia desarrollan por temor a los «(pinchazos». La utilización de accesorios • SfJljonilureas-Insulina;
nuevos como las jeringas tipo PEN junto a un sólido apoyo de parte del Esta combinación también se utiliza frecuenh~mel1te. En compar.l­
equ'ipo terapéutico suelen reducir estas barreras. ción al tratamiento con insulina como monoterapiil produce nWI1()1'
1"ambi~n importa el grado de convencimiento del médico en que la. ganancia de peso y menos hipoglucemias nocturnas. DolrJo r¡1IC: en 0SI:0';
necesidad de insulinoterapia define una terapéutica correcta y protectora pacientes aún eXlste secreción endógena de insulina, Ir¡ ;~dll1ill'isl'.ro1ción
y no un castigo determinado por el destino o por el (unal comportamiento» de suLfonilureas estimula su liberación postprandial evitándose el u~;n
del paciente. de insulinas de acción rápida o ultrarrápida que complican la ter;:¡péul im
al paciente en esta etapa de su enfermedad. Para este tipo de esquelll,l
terapéutico se recomienda utilizar insulina NPH o Glargina.
El uso de secretagogos de insulina está contraindicado en el caso
• Esquemas de i'nsulinoterapia en el paciente diabético tipo 2
de pacientes con diabetes tipo LADA.
a. Tratamiento combinado con hipoglucemiantes orales:
Es el más comúnmente utilizado (38 estudios avalan esta asocia­ • Metformina-Inst/[jna:
ción). CorresponderQa al tratamiento de la Etapa 3 (Figura 1). Pero tal El. empleo de fármacos que aumentan la sensibilidad a la insulina
como mencionáramos previamente, se puede utilizar esta combina­ (especialmente a nivel hepático) ha sido largamente utilizada en nuestro
ción en cualquiera de sus etapas previas. Se indica en pacientes que, país y en Europa. E~ta asociación mejora el control glucémico, reduce la
utilizando dosis máxi mas de alltidiabéticos orales, no alcanzan su.s ganancia de peso y el riesgo de hipoglucemia. La metformina puede
objetivos terapéuticos. utilizarse en cualquiera de sus formas, ya sea, la de acción rápida (dosis
La~; insulinas utilizadas son las de acción intermedia (N PH) o análogos. máxima sugerida 2.000 mg/día) o la de acción prolongada (dosis máxim¡¡
de i:lcci6n prolongada (Glargina), pudiendo asociarse a una o más drogas aconsejada 1.700 mg/día) (ver Capftulo 21).
orales. Su dosis inicial es alrededor de 0,2 a 0,4 U.I./kg (peso real). Cabe mencionar que hay autores que llegan a emplear dosi5 111'
¡Atenci6n!: [¡?I/er en (uenta: hasta 2550 rngjdiá.

• En el caso de insulina NPH se sugiere comenzar a aplicarla en horas • Tiazolidinodiollos-lnsulina;


de la noche, antes de La cena (sólo si ésta se efectúa tarde) o Los resultados de investigaciones que han asocii:ldo ti,"l/ol'id illlllllllllol'¡
preferentemente antes de acostarse. con insulina muestran descenso!> de HbA1c signifir..ltivO". ';;11 1 '1111101111"

m
11
. • ') '.1100'. (1m .·/1U/l1 'ti ". ~~/J: 1
_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _.:l...;II,;.:I...;I...;/I:..."_,'!...;/I_I_"!...I'...;tI...;I_,_/:..1'p

se recomienda utilizar esta asociación sólo en pacientes con DM2 que no • Cálculo por Kg de peso real (0.2 U/Kg). Una persollJ d.' '/0 l<el
tengan insuficiencia cardíaca o la presenten en el grado 1 y n. Por lo comenzaría con 14 Ude insulina en una dosis de NPH 1l(l(~ttHlI;1 (,ti
tanto la presencia de edema franco y/o de disnea son datos clínicos acostarse) o en dos dosis (50% a la mañana o al mediodl;] y 5U;'(.. ,ti
orientativos para determinar la conveniencia de emplear esta asociadón. acost.arse), o bien 1 sola dosis de insulina Glargina éldlllini~'I.l'cldo1
antes de la cena, al acostarse o antes del desrlyuno,
• Meglitinidas·~
InsuLina: • Cálculo por promedio de gLucemias matinales de los últimos 7 dí;)::;,
Estas drogas de recienteincorporrlci61íl en el mercado estimulan la al que se le quita la última cifra y se le resta el número 10. Ejemplo:
secreción de insulina por un penodo corto. Fisiopatol6gicamente su promedio de glucemias 230 mg/dl, se saca e1 Oy se le resta 10 ~ 13
combina¡;ión con insuLina sería de gran utilidad pero no existe suficiente unidades éldministradas en una o dos dosis de NPH o 1 dosis dl'
evidencia res-pecto a posibles ventajas () efectos colaterales de esta insulina Glargina.
asociación.
El ajuste posterior y el control de dosis se hará evaluando:
b. Monoterapia con InsuLina: los monitoreos glucémicos dé la madrugada (esporádicamente) y !IIIII
Es importante lograr esquemas de tratamiento simples que sean sobre todo las glucemias pnNias al desayuno (control de NPH
comprendidos y utilizados por los pacientes que con frecuencia son nocturna),
mayores. Se debe utilizar eL menar número posible de 'inyecciones los monitoreos previos a almuerzo y merienda (control de NPH
considerando eL uso de análogos de insulina de acción prolongada matinal) o monítoreos previos a merienda y cena (NPH previ.'l ,JI.
(Glargina) y/o premezclas (insuLi na corriente y NPH o análogos de insulina almuerzo).
de acción ultrarrápida y NPl o NPA). Cualquiera sea el esquema de • En el caso de insulina Glargina los monitoreos utilizados; ser.'m e'\
insulinoterapia siempre intentará imitar la secreción de insulina endógena, de las 03:00 hs (esporádicamente) y los 4 preprandiales del día,
planteándose el objetivo de lograr niveles de HbAlc < él 6.5% sin provocar
excesivas hipog,lucemias. La monoterapia con insulina se programa, al Los ajustes de dosis se harán cada 3 a 4 días (N:PH) o cada 7 1I 1.0
igual que en pacientes con DM 1, considerando la administración de insulina días (Glargina) subiendo o bajando, según corresponda, un 20% lJ
basal e insuLina periprandial. dosis utilizada, Se controlará cuidadosamente que el paciente siga
un plan alimentario adecuado para evitar el incremento de peso.
Dosis basales:
Dosis. prandiales:
Diferentes estudios que compararon regímenes basales efectuados con
insulina NPH (:1 a 2inyecciones por día) y el análogo ultralento de insulina Se logran administrando insulinas de acción rápida o ultrarrápidil ante5
Glargina, demostraron que a igual control metabólico, este último produce de las comidas. El uso de los anáLogos de acción uLtrarrápida lispro y ...1

menos hipogLucemias mejorando así la calidad de vida de los pacientes. aspart permiten obtener mejor control metabólico con mellO',
Estas ventajas permitirían comenzar la terapia insulínica más precozmente hipoglucemias en comparación a la insulina corriente.
que con las insulinas disponibLes hasta ahora. ,
Esperamos que la Tabla colabore en la comprensión de lo prC.\(·/Ilr,tllI
No olvide qUfl...
previamente.
La dosis inicial de insuLina para Los regimenes basales s,e caLcuLa por Recuerde que' usted puede apropiarse de el/a, inCOrflll/rlllr/rI /lIrt,. "
dos métodos simples: columnas con otra información que considere necesaiil1l:r l/Jlll '111 11111/11 J\\ 111

352 '111
1"

Estamos en elfinal del capitulo y lo con.wltamos una vez más:


Desayuno
_._­ Almuerzo Ceno j ; l oco.la..e Si tuviera que preparar 1 diapositiva o 1 lámina sobre este temo para
--- -- - presentársela a un grupo de e:;tvdianles de medicina:
NPH - - NPH
Regular o UR Regular o UR-- r- R~gular o UR !PH ~_Gl~~~ina ¿ClIdles Eon los dos o trr!> conceptos centrales que- destacaría?
--
Mix Mix Mix
- - Después de que los hoya elegido, reftc,dol1€ sobrE' las razoneS para esa
Regular o Regular o Regular o p.lecóón.
UR + NPH UR + NPH UR + NPH
Esta tarca es un buen f'jfmp/o de cómo rcalizar síntesis sobre determina·
Tabla 3. Esr¡tJt~m(/s de insulinoterapia (m pacien/es mn DM2. rIos temas, muy útil para tant'o para el estudio como para la prCÍd.7ca
diaria, ya que' la necesidad de comunicarlos unida a la brcvcr/o(/ que c'(ige
lino diapoútiva o I)no lámina, nos obligan a buscar clll/idad y concisi()/I.

Conclusiones ¡Buena suerte!

El tratamiento con insulina en pacientes con DM2 presenta ventajas


que deben considerarse para lograr implementarlo precozmQl1te. Combinado
con antidiabéticos orales mejora el control glucémico con menor aumentu
de peso y menos episodios de hipoglucemia. Otra ventaja adicional es 8i,bliografia
que con esta combinaci6n disminuye el número de inyecciones diario,
1. Atta, of Diabete~. C. Ron~ld K.lhn. Sci~ncc Pr~\s Llmited. 32-)1, Clevelanrl Slrrot. LfllHJon
por lo que los pacientes aceptan y aprenden rápidamente las técnicas de UK 2000.
utilización de insulina como parte natural de su tratamiento. La 2. AutoilHllune Di,lllote, not rcquirinu ¡nsulin .lt diagno,¡~ (L.llenl· Alltoinmul1c Di~be\l".\ lIf
incorporación de insulinlls premezcladas también permite reducir el número r:hr Adult). Di¡;¡betes elro' 24: [460.200l.
de inyecciones diarias y tograr el efecto dual de actuar tanto sobre los niveles 3. B¡;¡uchi JC. I\lzuc\d G. 'Oiolw¡irle (j and Group ATLANSAD. Did \'le tre.lt s(JO;" hipcrc¡lvcemiJ
Jpprupi<ltcly? An cVJIUJtion of tn.'J\rncnt brhavior of ~tleS\ hypcrqlyccmia il1 paticnl~l
basales y preprandiales de glucosa como sobre los picos postprandiales. wi\h .lcule myoc.lldial infMction. Di.ll)('tr.s & Metabolls11I 29:2180.2003.
4. Diabctc; lipu 2 No Jn~ul il1odelprl1dil'nte. Su uiaqnostico. control y tratnmir.nto. SociedaL!
El objetivo primario del tratamiento de la diabetes es que el I\rgentini¡ de Diabrt.os. 1998.
paciente desarrolle sus capacidades plenamente con una adecuada 5. flmanini E. Endor.rine Rcviews 19:477·490.1998.
calidad de vida, previniendo o demorando la aparición y progresión (j. GNirh.l. Clinical ?erspectlve: lnsulin Rc~i,;tal1ce Ts No!. Nrrrs,arily an E~s~lItial Cnmponent
de [as complicaciones. of T:vpe 2 DiJueles. J Clin Endocrinol Melnb BC,:2113-2115. 2000.
7, Guiu\ de In ALAD psra el diagnústiro. crmtroly trat«l11ielllo de In diabetes mellit"·; I,ipn ;'.
Rcv Asoc L,1tino.lm de lJiabet€' 1:1'19,2000.
Por ello los médicos tratantes deberían aceptar 'la asociación de drogas
8. Utwak lo Mileo V~qlio R.,Alvarez A y Gu1.lnall R. Autocol!trol (11:, I~ r.luccllIi., (,ll'iloll.
y el empleo precoz de insulina en pacientes con DM2 para lograr dicho EVilluaóC'1l del rc~ultado a largo piulO (3 ,1 7 a¡lOs). Medicina (Buenos Airll';) ';'1: /1 11I.
objetivo. la terapéutica con insulina en personas con diabetes tipo 2 lCJ99.
evoluciona permanentemente y Los regímenes ideales son los que logran CJ. M,llmberll K and th~ Diabetes Mcllituó. lnsulin Glur.ose infusloll ill /11'111,' ~jv'" ,lId;,¡1
Infarctio'n (DIGAm Sludy Group). Pruspprlivr. randollliz~d ~1:u(lv nI' illll'II',iv,' ;ll·.lllill
valores de HbAlc Y de glucemia postprandial adecuados sin producir tre,llmcnt on lonq·term sUlvivJl.lltC'r nrutc mvoc~nlial inl<Hctioll ill poli ¡PIII', wlt I1 d\\lIII'1 ,oo.
hi poglucemias. nlcllitll'. British Med J 31 /.:1512.1997.

3" 1::5
Diagnóstico: diabetes tipo 2 mal controlada, obesidad centraL dislipemia
111. MII,I,lli~r $, [tlt'llll.ln S. Jllsulln therapy in type 2 diabetes. Endor.rinol nn~ Melab Clin e hipertensión arterial.
No,!.11 flrI1"ricn 30:035.2001. Tratamiento: educación diabetológiccl para lograr mejor adherencia a los
I l. ::lri·,hí..i ",1 el ,~l., Lonq-term rcsult~ or I:ho Kumillllutu Study on optimal diólbntcs cont.rol in cambios de estilo de vida, aprender a valorar el contenido de glúcidos de
IVI'" :' c.IiJuctic patients. Diabetes (me 23 (suppl ~); fl?1-R~9. 7.000
diferentes comida~ y la aplicación de insulina; aumento de 'la dosis de
1;", "lolrr,1116,1 a la gluco~.¡) y morl"lIrlnd: comparación entre los criterios diolgnustícou de la
lJM:; y los de I¡¡ American Diolbctc~. Associatiürl E·;tudriu DECODE Lancet 3S4:617·21.1lJQ<} enalapril a 20 mg diarios y agregado de atorvastat:ina por SLI dislipemia
(20 mg/día). Dado que a pesar de la medicación hipoglucemiante e
13. UI( Prospective DialJl~tes Study (UKPDS) Grollp, A ninn-Y"oll updaÍl~ of a randolllizcd.
mntroll.cd triOlI 00 1.111' cllect uf improved mct¡¡bolic control nn rOmpliC¡ltiulIs in 1'100­ insulinosen~ibilizadora y del plan de alimentación (70 % de adherencia)
insulin-dependent diabetes mellitus. Alln lnlef'n Med 12/.:l36-14f).1~llIb. no logra los objetivos terapéuticos buscados, se prescribe insulina (iniciar
14. Uf( Prospccl.ive Díabde'; ')tud." (UKPDS) liroup. [freet nr illl:f!n~ivo Lrloot!-lJlucose control. Lm1Ccl: con 10 U de insulina NPH antes de desayuno y de cenil), .1sociada a agentes
3"2:354-865,1')%, orales (meHormina 1700 mg/día). Se indica control glucémico pre y
15. UK ProslDcctive Diabores $tudy (UKPDS) Group. Effect of inten'.ive blond-glucl1sc control. l¡lIlc!'t
35?:8J7-853,1998.
postprandiJl (automonitoreo) durante 5 días para dctt:'rnrin3r posible ajuste
16. V;ln don ~clgh~ lO et illo Intensive ln~ulin ThcrolPV in t.he üitic¡llly ¡llo N. En~1 J Med 3t,~:13~9· de dosis de insulina.
1357.2001.
17. Yki Jarlincn,K.lupil.l M, I(ujansuu E. l't ,11. Compolrison of insul'io rcgimon in pilt.icllt·¡ with non
imulin d~l'l'ndcot Di,lbetCI mdlitll~. N. Enql.l Med 3n:1 /,?6.1992.

Caso Clínico 2
Paciente de sexo masculino de 48 años de edad, Con diilbetes tipo 2 dn~:d('

hace 4 ¡Úíos.

Antecedcnte8 familiares: padre con diabetes tipo 2 obeso, Iwrl1lólno

Caso Clínico 1
hipertenso.

Paciente de sexo masculi no de 55 años de edad, con diagnóstico de DM2 Antecedentes personales: furnador, triltado por su diabetes con plill1 de

desde hace 10 il ños.


aLimentación y actividad física que dice cumplir en un 80% y gli mepí rid;-¡

Antecedentes familiares; madre obesa con diabetes tipo 2, padre


4 mg/dia.

h~pertenso con dislipern ¡il.


Motivo dr! eO(J.~lIlta: control periódico en el que refiere modesta reducción

Antecedentes persona/es: obeso, hi pertenso tratado con enalapril10 mgl


de peso en los últimos 6 meses de (2-3 kg) sin modificación del tratamiento,

di.. , ~edentario. Tratado hasta la fecha por su diabetes con plan dQ


habiéndose descartado hipertiroidismo y otras afecciones que podrían

alimentación (cumplido en un 70%), glibenclamida 10 mg/dia y metformina


justificarlo. Estando en su oficina sufre un episodio de intenso dolor

1700 mg/dia.
precordial por lo que es trasladado a un hospital e internado en UTI. En el

Motivo de consulta: control periódico de su diabetes e hi pertensión.


ECG se verificil supradesnivel significativo del segmento ST- T desde V1 a

V4, confirmándose enzi rnatic<lmente el diagnóstico de Infarto anteroseptal.

Examcnfísíco: Peso 95 kg, talla 1,70 m, circunferencia de cintura 118 cm,

Glucemia de ingreso. realizad!} en guardia de 278 mg/ol.

IMe Jí'. Aparato respiratorio s/p. Aparato circulatorio: presión arterial

150/95 mm Hg). Examen de miembros inferiores muestra conservación de

Examen fí!oieo: peso 77 kg. talla 1,70 m, circunferencia de cintura 90 cm,

pulsos pedios con di,sminuci6n de reflejos osteotendinosos y de la


IMe 26. Aparato respiratorio s/p. Apllrato círwlatorio presión <lrterial1/,O/

sensibilidild al monofila mento . Lo~ datos de ~aboratorio realizados incluyen


90 mm Hg; miembros inferiores disminución del vello, hiporrefl('xíll

glucemia (160 mg/dL), HbA1c (9,4%), cole~terol (250 mg/dl.), triglicéridos


rotuliana, di5minución de la sensíbilídad al monofitamento. Di~llli IIl11il\11

(200 mg/dL), cHDL (30 mg/dL), clearance de creatiniml (78 ml(min).


de los pulsos tibial posterior y pedio.

Proteinuria en orina de 2/¡ hs. (0.6 g). En el monitoreo glucémit:o, verificado


Los exámenes de l~boratorio solicitados incluyen glucerniu (VIO 11111/ 111 ),
"]
por laboratorio, presenta glucemias en ayunas mayores iI 180 mg/dL en
HbA1c (9%), colesterol (200 mg/dl), triglicéridos (170 Ill!l/dl). 11111\ (tlD

forma reiterada y glucemias postíllmuer7.0 que superan en varias ocasiones


mg/dl), orina com plP.to1 (normal), microalbumi nuri,l (po:;íl:iv;¡): 01111 il 111'1 pll"

I1

240 Illg/dL.

r.:..7
356
;¡llti (jAlJ 0 fCA (positivos).
Estudios complementarios: examen cardiovólscular: tele de tórax (botón
Hipoglucemias en personas
olúrLico prominente; silueta cardíaca dentro de límites normales máximos), con diabetes ti po 2
EI:G (secuela de IAM previo).
Dfagn6stico: diabetes tipo LADA con compromiso macrovtlscu(ar y lesión
lIe órgano blanco. María Cn'stina Faingold y Pablo An'os
Tratamiento: educación diabetoLógíca para facilitar aprendizaje de
utilización de insulina, monitoroo glucémico y adaptación de dosis de
insulina a glucemill preprandial e ingesta de gLúcidos. Insulinoterapia (ver
cálculo de dosis desr.ripta previamente),ind'icadil por tratarse de un paciente
delgado, que hi.l disminuido de peso en los últimos meses, que e~ un LADA
y que ~ufri6 un evento cardiovilscular agudo (IAM),
Propósito de La unidad
Analizar detenidamente los efectos adversos consecutivo,; a lé,)
aparición de gLucemias muy bajas.
• Comprender la importancia, una vez más, del control adccuíldo
de la glucemia y la educación de las personas con diílbd(:~;
para lograr que ella no ejerza su efecto gLucotóxico tisular.

, Reflexiones previas

En 105 distintos capitulas que hasta aquí ha trabajado, usted ha obser­


vado que pusimos énfasis en hacerle comprender al paciente la impor­
tancia de mantener la glucemia dentro de lími('es normales, de cumpli,.
un plan de alimentación y de actividad¡rsica adewados y del papel de
la educación diabetológica como medio para lograr esos fines.

En esta oportunidad, el planteo que presentamos sigue en la misma


línea, pero alerta sobre cómo el temor a las hipoglucemias opera ('11
contra dellJuen control de la glucemia.

Es en ese sentido que le proponemos completar la siguill/ltc tahll/,


incluyendo en ella I.Oef05 los factores que pueden c!csltncadC:/l1II o
aume.ntar el riesgo de hipoglucemias.

358 35~)
I I
:., 11,1' l· t,. ,. i.' ,'1:: I .1 1i .• ~I j" ~ , {' ..... ~ ,",c''''' I I ,el

trata de pacientes con diabetes tipo 2 de diagnóstico reciente; ,11.


Factores que predisponen a la I Factores que acentúan eL riesgo 111
aparición de HipogLucemias prolongarse La enfermedad la disminución de la secreción de insuli 11.1,
las alteraciones en el proceso de contrarregulación y la búsqueda de Ull;)
normoglucemia estricta pueden aumentar considerablemente la frecuencia
de hipoglucemias gfaves en estos pacientes tratados con insul'inil. A;;¡ lo
demuestra el hecho de que en estudios controlado.s (UKPDS), 1" incidrnci;,
de hipoglucemias graves medida en pacientes mayores de 65 ilño~ de ('darJ
tratados con insulina fue de 2,76 episodios por cada 100 pacientes·;¡no.
Más adelante podrá constatar si realmmée su IJ~~iü incluyó todo5' /05 jactorf's,... Obsen'E' con deliGn;miento la Labia ya que presantamos los cSf;/lrlir1~
realizados por distinto.s; grupos de invest:iqadores.
Intmducdón
Los resultados de estudios prospectivos de intervención realizados en A) Proporción de pac1enter. que sufren h~pogrucemii:ls graves al
personas con diabetes tipo 1 o tipo 2, muestran que el buen control meOO5 en. una ocª~ión
glucémico. disminuye la frecuencia de aparición y la progresión de tas
- - ----- --­ -­
UKPDS (tras 6 años de seguimiento) DCn (tras 6,5 años de seguimi~lltll)
complicaciones micmvélsculares. EL precio de este efecto favorable es ill Metforn~ina ~ulfonilu;as-l I~uli~a - ­ - -
hipoglu<;emia iatrogénica que es tanto más frecuente cuanto más bajos
son los niveles de HbAlc logrados, además de generar situaciones de
2,4% 3,3% r 11.2% I 65%

riesgo (caídas, accidentes viales). B) Incidencia de hipoglucemias gral/es (episodios por cada 100

Es precíso [(mer.en cuenta qw;,

La preocupación generada por Las hipoglucemias tiene un impacto


pacientes-año,:;)
Di;betes Tipo ~on ill~)--
VA CDSM9. DCCT1
-r
DM ~IPO 1
Estocolmo1O
~I
Kuomomot~PDS3
negativo sobre el bienestar de los pacientes y sobre La adhesión al
tratamiento, constituyendo un obstáculo pllTa lograr un buen control
O I 2,3 3,0 62 110

metabólico. Tabla 1: frecuencia de presentación de hipoglucemias gravl's(dl!fínidas (omo aquellas


que reqttieren la ayuda de un tereelD paro su tratamiento) en esU/dios realizados en perso­
Asimismo, es importante recordar que las hipoglucemias pueden llOS con diaiJl'tes tipo 1 y 2.
incrementar el riesgo cardiovascular, contrabalanceando los posibles
beneficios que tendría la reducción de la glucemia.
Aspectos fislopatológicos
• Frecuencia de presentación La hipoglucemiA (resultante de la no ingestión de alimento', ¡jil
La experiencia clinica muestra que las hipoglucemias en personas rante un l~pso milS o menos prolongado), representa UIl,l ólilll'llol/oI
con diabetes tipo 2, aun las tratadas con insulina, son hasta diez veces seria y con consecuencias negativas a ,'corto plazo sobfi' 101 IlIllt.l(111
menos frecuentes que en aquellas con diabetes tipo 1 (Tabla 1). Al del sistema nervioso. Por ello contamos con más mCI:;1I11'oIllll" 11.\101
evaluar estas cifras debe tenerse en -cuenta que en el caso del UKPDS, se paliar la hipoglucemia que para contrarrestar la hip~rqllll 1'111 irl,

I() 1
360
O}IfJlr1Ie'- ~I 11'111', /rJI/(I/(·· './J' !IT,''-t/d ((lr,1r':.'va~:uJ.¡r - HipoIJlil(t'III;{I$ ,

(1/ C¡¡!lscLl.Il1ncia ... Como mencionamos anten"ormente:

las hipoglul!:emias espontáneas son raras porque, en condiciones En Las personas con diabetes (tipo 1 62) la progresión de su enferme­
normales, el descenso de la glucemia pone en marcha un sistema de dad suele acompañarse de una allteración en los mecanismos de
seguridad (supresión ae la se.creción de insulina + estimulo de la contrarregulaciól1, con secreción deficitaria de glucagón y de catecoLaminas,
secreción de hormonas de contrarregulación) mucho antes de alcan­ de la percepción de los síntomas y aumento del umbral hipoglucémico.
zar glucemias que producen sintomas (Figura 1). Sin embargo existen diferencias entre las alteraciones de la respuesta a·La
hipoglucemia en pacientes con diabetes tipo 1 y 2 que pueden exp'licar la
Sin embargo en la práctica diabetológíca las hipoglucemias constitu­
distinta frecuencia de aparición de hipoglucemias (Tabla 2).
yen una preocupación frecuente para las personas tratadas con insulina, l
sus famiLiares y 10S médicos tratantes. En pacientes tratados co.n insulina
que buscan un control metabólico óptimo las hipoglucemias leves son un r
hecho práctica mente cotidia no. En la mayoria de los casos la s 1 6 1.1 H 6 J.
hipoglucemias se deben a la comb'inación de un aporte inadecuado de I
(-. ti ,1. HÓ i
insulina (por administración de la hormona o por estímulo de su secre­
ción por secretagogos como suLfonilureas o meglitinidas) junto a la omisión ' Niveles de in$ulin~ contr.olados por.lil glucemi,~ 1 NO ~reem~lazo I S] (l~liel1tras
por lnyeCClol1es) perglslil <;eCl'p.­
del aporte correspondiente de glúcidos, o aumento del consumo muscular
de glucosa debido al ejercicio. Esto se debe a que al mantenerse elevada
l ciól1 rcsidl.lill.)
la concentración de insulina las hormonas contrarreguladoras rápidas no Tabla 2: dlferenáas entre las alteraciones de /(J respurslrl (¡ Ir¡ hipof¡III(o'lIIln 1'11

pueden aumentar suficientemente la producción hepática de glucosa y personas con d'ialJctf15 tipo 1 y tipo 2.
los tejidos insulinosensíbles (grasa, músculo), continúan captando can­
tidades importantes de glucosa. En los contenidos que df5arrollaremos a contínuacíón encontrará ill­
formación ,que Ir permitird comprll'Or las respuestas queveftiú cuando
completó la tabla al inicio de este Capítulo.
100

ge • 83 mg/dl: ,¡, secreción de insulina


Esperamos que la constatación de' cuan comp./eta fue su lista de fac­
".....
Ol 80 • 68 mg/dl: 1 secreción de glut:agon y adrenalina
tore5 le permita estar muy alerta e identificar la presencia de alguno
E
......
de ellos cuando lo comulte un paciente.
• 66 mg/dl: " s~creci6n de GH
70
e"'
IU

60 "li
• 58 mg/dl: i ~ecn~ción de cortisol

:1

• 54 mg/dl': aparición de sintomil5 autonómicos


Factores tausales y factores de riesgo
50
W • 49 mg/dl: aparir.ión de a'lteraciones cogniCivils
40 Existen factores causales y factores de n'esgo de hipogLucemia. LoS
factoras causales son:
admí ni straci6 n de una dosis inadecuada de in su ti n'-I () di'

hipoglucemiantes orales (suLfonilureas, megLitilnidtls) pot' I 'ITol (Iel

Figura 1: Umbrales para la puesta en marcha de los drsl in t05 componentes do la paciente, del médico o del farmacéuticQ, o por volul1\'.~r1 dol 1J,~ci, 'fl­

respuesta al descrlnSO de la glucemia. te (hipoglucemias facticias);

362 363

".111
fr. f. Ij.l J •• , I"l f 1 1"-.'1 J ti' I f L'It,'li "~ .'. -1i11(:1

- /I)~ocql«c'l!/i

" di~;llIillución del aporte externo de glucosa (supresión de una comi­


d;'l, Jyul10 más o menos prolongado, alteraciones deL vaciamiento Manifestaciones dinieas de La hipoglucemia
g;-,strico, malabsorción intestinal);
Las neuronas, .a d~ferencía de otras células del organismo, utilizan
, reducción de la producción endógena de glucosa (ingesta de alco­
casi exclusivamente glucosa como combustible (aunque en el ayuno
hoL hipocorticismo);
crónico se producen cambios adaptativos que permiten utiLizar
aumento de la utilizaci6n de glucosa tal como ocurre durante el alternativamente lactato y cuerpos cetónicos) y carecen de las enzimas
ejercicio o el amamantamiento; necesarias para almacenar glucógeno o para sintetizar glucosa a partí r
, aumento de la sensibilidad a la insulina (después de la actividad de aminoácidos y glicerol. En consecuencia, la disminución aguda del
física, luego deL descenso de peso, tras la mejoría del control aporte de glucosa representa una amenilza partl las funciones deL
9lucémi ca, du ra nte eL tratamie nto con insu li nose nsi bi lizado res aso­ sistema nervioso que las hormonas de contrarregulación procuran evitar.
ciados con secretagogos o insulina); Es por ello que los síntomas y signos iniciales de hipogLucemifl son de
tipo autonómico (o neurogénico), seguidos luego por mJnife~;t,lcioncs
alteraciones en la farmacoci nética de la insulina (variaciones en el de neuroglucopenia (trastornos conductuales y neurolúgicos) (TaIJ/n 3).
sitio y la profundidad de la inyección, presencia de anticuerpos,
insuficiencia renal o hepática) o de los hipog.lucemiantes orales Son frecuentes ademeÍs los síntomas de malestar general (cefal.eí'ls
(i nteracciones medicamentosas, insuficiencia renal). y náuseas), cuyo mecanismo de producción es desconocido.
Los pródromos de la hipoglucemin son eL resultado de la pN«-~p­ '1
Entre los fadores de riesgo de hipoglucemia se encuentran: ción por el paciente de los s'íntomas neurogénicos y su reconol:i 1ll¡(~11­ 1
!"I,
1

¡
control glucémico estricto (niveles de HbAlc en el rango normal); tú como indicativos de hipoglucemia. La capacidad de percibir esto~;
síntomas y re'lacionarlos con una hipoglucemia depende del umbral de
edad avanzada (> 65 años);
cada persona (que a su vez depende de factores tales como el grado
• mayor duración de la diabetes; de control previo) y de su entrenamiento; de allí la importancia de
antecedentes de hipoglucemias graves; impartir reiteradamente estos conocimientos durante la educación
diabeto Lógica.
aLteraciones en la percepción de la hipoglucemia;
insulinodependencia absoluta (péptido e no detectabLe); Es importante destacar que los síntomas de la hipoglucemia son
proteiformes, variando enormemente de una persona a otra según la
embarazo; veLocidad de caída de La gLucemía, la edad del paciente (y el estado de
aLco holismo; su árbol arterial) y la actividad del sistema nervioso autónomo (SNA).
desconocimiento de los síntomilS de la hipoglucemia; Por ejempLo en pacientes de edad avanzada o medicados con
bLoqueantes 0-adrenérgicos o con alteraciones previas del SNA, l,()~i
estilo de vida irregular (trabajadores con turnos rotatorios); síntomas de aLarma pueden no presentarse, rnanifest:lnd{)~;r. l.:l
uso indistinto de diferentes drogas hipogLucemiantes, aunque per­ hipogLucemia directamente por pérdida deL conocimiento; ell P:~tO'1
tenezcan a la misma clase farmacológica;
casos tenemos una situación de riesgo denominada «fultn el!' IWl'u'P
cíón de La hipoglucemia», cuadro que obliga en muchos C;l~;l}l, ol 1,1 ¡I"llldl
insuficiencia hepática o renal.

los regímenes de tratamiento intensificado.

364
36
¡lorllol rr 1,. ,1·1'/11', J·rl ("(1 '."/1 nr".lIl' 1 drIl; '1(1 ;(11/(1: ;iJ~J(:JI~.rg!i.J.'!!~~ ¡'1(fr{1}¡~~_~I~.~U(10~ ~

r.m •. loh '1-11' 111." I fr:JlITlT<lIlTi'iTiT~ que glucemias reiteradamente bajas pueden deteriorar los mecanismo5
de defensa contra futur(l5 hipoglucemias, la cifra de 72 mg/dl sería un
Temblor Mareos umbral razonable para hablar de hipogLucemia en personas con diabetes.
SI~II~i)ci6n de hambre Trastornos en la ateflción
P.1lpitilciones Debilidad, i ne~stabilídad Ant:,fl d cuadro de.'iC{ipto, com;fderando la.~ manifestaciones clínicas JI
Taquicardiil Oiplopia, visión borrosa la malJ€W de rra[i)!,(IT e/ diagnóstico...
Sucto~ación copiosa Disartritl i. Cuál sería a J;tj enterio, d mejor metodo prim tratar CI un paórHlte en
Palidel (onfu~íón, labilidad emocional tie:~g(> de pr;esenl:ar hipoglucemias?
Sensaci6n de ilngustia Irritabilidad, agresividad
Convulsiones, coma
rabla 3: Sintamas mós comunes ,de hipoglucemia.
Sólo despups de {(na meditada refle.I(!6n, contimíc con la lectu.ra.

jlll11
Diagnóst1(1D Tratamiento 'j' p'reve-nción
T11 nto las hi pogluccmias asintomática,s (detectadas por automonitoreo), I
Tengo en cuó?:lJta que.... como l.as sintomó1:icJs leves, pueden tratarse eficazmente por eL propio
En presencia de una presunta hipoglucemia, su verificación (determinación paci'ente ingirielldo glClcidos en forma de azúcar (2 o 3 sobres), tabletas
de [¡¡ glucemia) es muy útil par¡¡ corroborar o descartar el diagnóstico clínico. de glucosa, jugo', cJG,' fruta, gaseosas liIO d'iet o galletitas. Una ingestión
inicial de 20 9 de r¡l,uco~a scría adecuada, repetida a los 15-20 minutos r.i
La sintomatologi;) 110 mejora, seguida de una colación (2 galletitas d~
La presencia de:
agua con un trozo de queso o un sándwich de queso).
Sintomas compatibles con hipoglucemia luego de un ayuno más
oi

o menos prolongado o realización de actividad física intensa, Cuando el. pacielltc no puede o «no quiere)} (alteración conductual
debida ;\ la 1l(~UI()!JILlcnp('l1ia) ingerir glúcidos, es necesario inyectar I
dismi nuci6n de la concentración de glucos-a en sangre o plasma y

I~I I I I
glucagon (1 nlr¡ illtr,)l11u:~rl1l.ar o subcutáneo), que puede ser administra­
• resolución de los síntomas luego de administrar glucosa,
constituyen la triada de WhippLe, que permite diagnosticar con do por un fílmilial', b 25 q de gLucosa endovenosa (50 ml d€ solución de
precisión una h'ipoglucemia. dextrosa al 50%) y llloero rolocar un goteo rápido de glucosa al 5-10%,
En paciente5 (ll-h.u:~ el qIlli;,l~J()1l puede, a través del estímulo de receptores
I¡)'adrenérgiw~ •. ;,11 111 I! '11 1:;11' f~1 consumo de oxígeno del rniocardio precipi­
En las personas CQn diabetes no es posible definir la hipoglucemi<l en tando episodio" doi'.qlll'llIi;\ y de arritmia.
función de una concentración determinada de glucosa en sangre porque
A menudo ~;I Ilipnqlw:I:lllia grave causada por la ingestión de
el umbral hipoglucémico no es constante como en las personas tilO diabé­
sulfoniLureas St: prulllllrFI rIlJ'I~: .,1I{1 de 12 horas, requiriendo la infusión di)
ticas. Por ello los pacientes mal controlados pueden percibir sintomas de
glucosa en forlllol ¡'llIllillll<l durante un tiempo prolongarlo () 1.;1
hipoglucemia con gLucemills más elevi:ldas que las personas normales,
administración reit,l1l; id.! (n",j;l (' horas aproximadannente) de Llna c<lnh·
mientras que aquellas con un control más estricto frecuentemente tole­
dad adecuada de t:;1r1whidl,~tn~: (simples y complejos) por vía olClL
ran glucemii;ls muy bajr.ls sin presentar síntomas. En consecuencia e'l
automonitoreo glucémíco tiene un rol crucial en la práctica diaria. Dado Dada ~1 rnorbilidrlll '¡',1H ¡.Id!1 ;1 la hipoglucemia y la im posib ililJ;\J (Ji.'

366 367
contar con herramientas terapéuticas más apropiadas que las actuales, 6. Levy C, Kinsle~ S, B~¡~j M, ct al. urece of ~Iycemíc wntrol on ~lllco';¡~ r.ountorregulation
debemos realizar todos los esfuerzos neEesarios para prevenir su aparición. during ny~nglycem¡a in NlODM. Diabete~ C:Jre 21: 1330-1338, 19QB
Ellos incluyen: e
7. Okhubo K, Ki,híkawa H, Ar~ki et ~1.1ntcnsive insulln ther.,pv prevent> UlPo pl'Ogl'cssíon of
diabctic miclOV<1>cular romplication, ín.lap,;nese p¡ltient.s with non-i nsulin·(lrpcm'lent diabete.o
mell'itlJ~: a r,ln~ol1lizcd prusvec\.ivo 6-ye:1f study. Diabetes Res Clin rr,lct 28: 103-117, 1Q9S
~, educación del paciente ysus familia,resjconvivientes (automonitoreo,
R. Shnrr Rl, Ray \VA. D~ughorty JR. Griffln MR. Incidence and risk factor; for ~;"rious hypnglycemía
síntomas, factores causales, tratamiento); in older per~(lns IJsing insulin ur sulrnnylureas. Alth lntcrn Med 157: 1/ilH-1686, "1997
.~. reconocimiento y consideración de los factores de riesgo mencionados; 9. The Iliabnt.cs Control and (ompllr..Jtion~ Trial Resf'olrch Graup. Th.- el"fcr.t of intcnsive trealmcnt
or rJi,lbetes on the devciopment and progrcssion or long-I.crm compliCiltions in im.ulin­
G manejo de un régimen terapéutico flexible; depcndt'nt diabetes mellítus. N Eng .1 Med 37.9: 977-986, 1993
t) metas gLucémicas adaptadas a las necesidades individuales; 10. The Unil.od Kingdom Prospcctive DiatJl·t~~ St:urJy Rest'arcil Grollp. lntensíve !Jlood glucose
control with ~ulphonylure)s 01 irwlIlin comp,Jn~d with c:onvcntional treatmcnt Jnd risk of
accesibilidad permanente aL equipo de salud. col11plicatiom in paticnts with type l di.Jbct('·;. Lancet 352:8l7-lJ'.i:\, 19')(1
,

Conclusión Caso Clinico 1

Paciente de sexo femenino de 83 años de edad, con dia~l1ó~tico dv dinlll'lf":

A pesar de los avances en eL tratamiento de la d,abetes, la búsqueda tipo 2 de más de 15 ai'ios de evolución.

de un control glucémico estricto resulta, casi invariablemente, en un Antecedentes familiares: desconoce antecedentes de diabe~.e~ 11 01.10:; r¡')l.llll'l~:;

incremento del número y de La gravedad de las hipoglucemias. La de ricsgo cardiovascuLar.

morbilidad (e inclusive mortalidad) asociada a las hipoglucemias, cons­ Antecedentes personales: medicada desde hilce 2 años con gliben(:I;llllid" 5

tituye en muchos casos un escollo para aLcanzar un buen controL mg/día (prealmuerzo). Durante ese período jam;ls experimentó signos o :;lntUII\;v:

metabólico, disminuyendo la adherencia del paciente a la terapia indica­ de hipogLucl'mia. Como medicación concomitante reóbe: tanzopr;lmit·,

aLendronato y citrato de calcio.

da, Es necesario, por lo tanto: a) realizar una buena evaLuación de los Enfermedad actual: consultó recientemente por infección urinaria, di<:lgnosticad~
factores predisponentes para la aparición de hipoglucemias, b) intentar por urocuLtivo y medicilda con ciprofLoxacina. A los 7 días de comenzar
un tratamiento lo más flexibLe y próximo al control fisiológico y c) adaptar antibioticoterapia, presenta un cuadro de diáLogo incoherente Vdiaforesis. Los
metas glucémicas individuales considerando la relación riesgo/beneficio síntqmas se instal¡Jn 2 horas después de la merienda. En ese momento se controLa
de un tratamiento muy estricto. su gLIJr.em~a yse constata un valor de 65 mg/dl. Se le inyecta glucagon 1M y il Los I
"
10 mino la glucemia es de 86 mg/dl . La paciente es traslildada a un hospital

donde se cunstata un nuevo descenso glucémico con un registro de {.6 mg/dL.

Treinta minutos de$pués y luego de haber ingerido un s{lndwich y un jugo de

• Bibliografía naranja con azúcilr, su glucrmiól seguí" disminuyendo, LLegando a 1.1 mg/dl. Se

decide internarla yactministr.Hle de)l("EbOSil al 10% por vía parentl'raL que se mantiene

1. Boylc: PJ, Schwartz NS, Sh"h SD, ~t ;iI. PIi1,mil glucose concentrations al tile oll\cl. or
hypoglycemic symptom, in patients with poorly controll~d diabetes an in nondiabetics. N
durante 24 hs. e indicarLe L~ingest16n de hidratos de carbono de absorción

Eng J Mee! 318: 901·907, 1988 rápida en forma fraccionndil.

2. Desouza C. $.lI.1zar H. r.h~oung B, el ~1. Association of iJyp0!jlycemí.J ol~~ cardíac is.chenria. Interpretod6n del cuadro de hipoglucemia dfjíd'l control. Posibles causas:
Diah.,tf'~ (orl' 2G: 1<;85-1489, 2003 1. ¿L\l asociacii\n de gLibenclamida y ciprofloxacina potencia el ('fecto
3. Gerich .lE. Hypogtyccmia and countt>rtt>gulA1tion in type 2 diabetcs. Ll1ncct 3~6: 1946-1<l47. 2000 hipogLucemiante dI;! La primera?

4. Heller SR. Abnorm;,l\ties of thc: oIcctroc.lrdiogrilm during hypuglycemia. The C3use of thc 2, ¿La pobre respuesta terapéutica es debida a que las suLfodrogils producen

dr.,ld in heí! syndrome? Int J elin Pract (5uppl) 129: 27-32, 2002 un efecto hipoglucemiantc muy proLongado?

5. Hepbum DA. McLeod KM. Pell Ar.. eL al. Frt'quency and ,ymptoms of hypoglycacmia expericnced 3. ¿Pudo eL glucagon, por su efecto l?-citotrópico, aumentar ~1 secreción de

by patif'll15 with type 2 diabctc; trc.1tcd wil.h insulin. Diabetic Med 10: 231·237, 1993 insulina en esta paciente y prolongar La hipoglucemia?

36~ 369

\ ' ."t,.:fll, ~ ú;,.' I n: \"i": I t.('¡l..'··~\'::-íi:{ll" 11111

RCSI'l/('5 tas: Diabetes en personas


1. lol d~;oci;:¡ción de glibenclamidJ con ciprofloxacina puede potenciar el
1'1'<'ci:o hipoglucemiante de l¡¡ primera al igual que otr.as drogas tilles como de edad avanzada ~lllllli
illhibidores de la ECA, esteroides anabólicos, cloramfenicol, derivados I
C11J\liHillicos, ciclofo'ifamidJ. disopirilmida, fibratos, tluoxetina, inhibidores
de la MAO, miconazol, oxifenbutazona, sulfon¡¡midas, agentes si mpaticolíticos,
l
Julio Líbman, Astrid M. Lr'bman y Pablo Arias
::í1lícilatos, probenecid, quino lonas, tetraciclinas, tritocualina.
2. Siempre hay que tener en cuenta, para hacer el aporte do carbohidratos il
estos pacientp.s, que Las sulfodrogas continúan estimulando la ~ecreción
de insulina y que la dlJTación de este efecto adverso dependp.rA de la vida
media dd preparado utilizado.
3. El Glucagon e'i un potente estimulador de La secreción de insulina; esta propie­
dad se utiliza en dinica para la evaluación funcional de lªs células~. E~ factible,
entonces, que el glucaqon haya corregido inicií1lmente la glucemia incrementando Ei Propósito de esta unidad
la glucogenolisis, pero luego, dí1dQ que este efecto hepatico es traRsitorio,
Analizar con detenimiento" las implicanr.ias de la d'iab(~t:<:s en
haya prevalecido la acción combinada dé ta glibendamida y del glucagon sobre
la $ecreción de insulina agravando y prolongando el cuadro de hipoglucemiól. Las personas de edad avanzada. 11"

(;ISO (lín'ieo 2
Paciente de sexo masculino de 51 ;¡ños de edad. con diagnóstico de diabetes
tipo 2 de 15 anos de evolución conocida, que concurre <1 la consulta con una • Actividad previa
glucemia reciente de 240 mg/dl y una hemoglobinil glicosilada de 13%,
indicadores de un pobre control metabólic:o actual y en los meses previos. Ustt.C1 yo ~abfl que iniciamo,} cada capitulo con a/guno proplil":i[U

Tratamiento: Se prescribe plan de alimp.ntación e hipoglucemiante~ orales de tmbcJo previo.


(lI11etformina AP 850 mg con la celJa, glimepirida 4 mg con el desayuno), Ala
semana concurre nuevamente a control manifestando la presencia de (~pisodios En esta oporWnidad le solicitamos que haga una listo de la:. person(/.~
de hipoglucp.mia repetidos, de intensidad leve a moderada, que ceden con la do más de 65 afios que he: atendido en los últimos dos meses.
ingestión de jugo de frutas o gaseosas. Se lo entrena para realizar automonitoreo
glucémico y se le solicita que, adem[¡s de registrar l<:ls glucemias en ayunas, las Recuerde qué enfermedades padecían.. el tipo de tratamiento que
Inida cilda vez que presente sintomatologíil hipoglucémica. lus indicó, CLlantas de ellas tt'lIf,an diabetes, su condióón
Seguimiento: luego de una semana el paciente regreSé! y se constata que los 5ocioccanómiw, su nivel de escolCln"(/ad, o t-oda otro informaóón
vülore~ glucémico5, tanto en ayunas como durante los frecuentes 'episodios de que considere pertincn te para una mejor compmnsión d,f! la proble­
hipoylucemia referidos por el paciente, superan los 110 mg/dl. Se le recomiendLl mática del adulto mayor con diabetes.
entonce:. no ingerir hidratos de carbono de absorción rápida sin reilli7.ar antes
un control de su glucemia y recurrir a la ingestión de hidratos de carbono sólo
ante glucemias inferiore5 a 80 Illg/dl.
A los 20 dlas concurre nuevamente, comprobándose Unól disminllción notable
en la frecuencia do s\ntomas de hipoglucemia, sobre todo en la última semana.
• Introducción
Comentmiojcondusi6n: debido a que el paciente presenl:<1ba registros glucélllicos
Una de las características inherentes a Los serp.s vivo!; 1"; 1.1 V.I! ildill'i
persistentemente elevados antes de la primera consulta, el tratarTIijento instlurado
indujo manifestaciones cLínicíls de hipoglucemi¡¡ sin que se produjeran verdaderas dad, que se incrementa notablemente a medida que llnil rl'I'.llllo1 ,1110111/.\
hipoglucemias bioqulmicas, al estar elevado el umbral para su pen;:epcion, la madurez y luego envejece. Si bien suelen tom[1r~;(' 111', 1,', 011\11', 1'1111111

370

w.
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iuiciu de 1;, «vejct!», se discute la edad a partir de la cual corresponde cientes plantea ciertos desafíos relacionados por un lado con aspectos
h"hl;H" dl.~ personas senescentes, ancianos o gerontes. Seria más correcto, biológicos (limitación de la motilidad, disminución de la tasa de
,lllnqlJl' poco practicable, considerar otros aspectos además del aclaramiento de fármacos h~poglucemi¡lntes, aumento de la labilidad a ...1

I.'l'lllllllúg ico, tales como la existencia de diversas enfermedades, de hipoglucemias, poLifarmacia asociada aL tratamiento de enfermedades
Il!"oblernas sociales y de conducta o alguna medida de las capacidades concurrentes). Pero por otro y esto es algo que tenemos que tener
li';icas y psicológicas para defin,ir la «ancianidad» de las personas. siempre en cuenta, de la existencia de factores psicológicos
(rendimiento cognitivo, trastornos del estado de ánimo) y sociales
Un poco de hi5ton'a... (marco de referencia, soporte famiLiar, caída del poder adquisitivo)
que condicionan no sóLo las características del tratamiento, sino también
Mientras que la expectativa de vida en la Roma del siglo 1 superaba sus posibilidades de cumpLimiento.
apenas los 30 años y en España a comienzos del siglo XIX oscilaba
alrededor de los 35 años, en el ailo 2000 en países como Suecia y Compartimos con usted los datos estadísticos disponibles...
Alemania dicho parámetro superaba los 80 años y en Argentina era
aproximadamente de 73 años. En consonancia con el aumento de la
edad promedio de la población se incrementa considerabLemente la
preva1lencia de distintas enfermedades asociadas al envejécimiento: • EpidemioLogía
enfermedad cardiovascular, neoplasias, trastornos cognitivos como la:
demencia de tipo Alzheimer y alteraciones metabólicas como la diabe­ En un estudio reciente realilado en EUA con más de 3000 per~()IlJ:'
tes tipo 2, Aproximadamente el 50% de los casos de diabetes en los de 70 a 79 año,s de edad la prevalencia de diabetes (casos conocidos
ElJA se regi5tran en personas de más de 65 años de edad y uno de cada más casos recién diagnosticados) fue de 15.6%. En este estll(lio el
cinco personas mayores de 65 ariOS tiene diabetes. Esto se debe en diagnóstico de diabetes se hizo combinando Los criterios de la OMS de
parte al aumento de la sobrevidZl, con los cambios resultantes en la 1985 (glucemia en ayunas ~ 140 mg/dl o glucemia 2 horas post­
secreción y la acción de la insulina y de otros mediadores qufmicos sobrecarga 2: 200 mg/dl) y de la ADA de 1997 (glucemia en ayunas;:::
(hormonas, citoquinas, neurotransmisores), relacionados directa o 126 mg/dl), Aplicando estos criterios se identificó un 8% de personas
indirectamente con el metabolismo de los hidratos de carbono, asi que desconocían su diabetes, Una prevalencia considerablemente mayor
como a los cambios en el estilo de vida (ingesta de comidas ricas en se detectó en Finlandia, donde según eL criterio de la OMS, eL 30% de
calorías fundamentalmente en grasas saturadas y carbohidratos sim­ hombres de 61) a 84 lirios de edad tenbn diabetes y un porcentaje
ples, sedentarismo) y el resuLtante incremento de peso corporal. similar tolerancia a la glucosa alterada (TGA), En este estudio La pre­
valencia fue mayor en el grupo etario de 75 a 79 que en el de 80 a 84
Aunque las manifestaciones clínicas .Y los principios básicos deL
liños, quiz5s por f,llLr.cimiento a una edad más precoz de ~os personas
tratamient~) de la diabetes en Los ancianos tienen algunas pecuLiarida­
con diabetes. L¡¡ prcvillencia de TGA en personas mayores de 85 años
des significativas, no difieren demasiado de las correspondientes a
alcanzaba en l!nglilterm ¡ü 3f¡'Yo en 1973, EL análisis de los dato~ de l.a
pacientes adultos de menor edad.
encuesta NHANES III, realizada en los EUA entre 1988 y 199/, V
¿ Por qué, entonces, los libros especializados dedican un capitulo a la representada en lél F((lum 1. muestra eL incremento del porcentilje rk

personas con di[lbcte~; en funci6n de la edad con su máximo del. ?()"/,)

diabetes en personas mayores?


a Los 75 añor. de edfld () m:ls. La prevalencia de TGA mllp.~¡t¡¡\ lmil

Probablemente porque la terapéutica diabetológica de estos pa­ evoLución similar.

~7í:.
373
1111:111",

jlll
·Ilr; ~I' " 1 I {JI, 1~1 ",'.:' J dU.
l
• Ji:'¡1hd
11

" -1 ci6n importante de la secreción de insuLinLl en respuesta a la glucosa y II


,'1 - una leve insuli nonesistencia. Por el contrtlrio los pacientes de edad 1

"

" I avanzada con exceso de peso tienen fundamentalmente una


'" , l' - Ed a d (Mi os) insulinorresistencia marcada que reS'lJlta en una menor utilización de
,
Ij, r-
.-
EJ 40-49 glucosa periférica y un menor efecto supresor de la producción hepática
'" lo SO-59
'1' de glucosa. Estas observaciones tienen implicancias terapéuticas
~ _60-7'1

n
')
I
:.:' .s l'
relevantes como se verá más adelante.
I
_750má:;
La acumulación de grasa abdominal que se produce aún sin varia­
o
DBT GAA TDG ciones de peso corporal, la inactividad física y la reducción de la masa
muscular que se observa con la edad contribuyen a la disminución de
n/IIII'O 1: ['revalenero de diabetrs mellil:il.~ (011), glucemia al/c!rad,/ fm /ly"rl(l~ (GAA) .v
(p/I'lllflc:ia a la glucosa alterada (TGA) rn la poli/ad/in 9('1111101 de EUA. se!!,I" Cf/ClJe5ta
la sensibilidad a la insulina. El aumento de factores tales como el
NHilNE5 JIJ (adaptado de: Harris MI et al. Díabctt:s Carf' 21:518-24, 19C1lJ). cortisoL. el TN F-n. y el tono simpático adrenérgico también contribuirían
a generar in:.ulinorresistencia e hipertensión arterial.
En personas mayores de 85 años la diabetes persistente se asocia El uso relativamente frecuente en pacientes de este grupo etario de
con una menor supervivencia, mientras que la diabetes de reciente medicamentos que modifican la secreción o la acción de la insulina,
diag nóstico no parece afectar la tasa de mortalidad. Las complicacio­ tales como gl.ucocorticoides, difenilhidantoina, diuréticos tiazídicos y
nes de la diabetes son frecuentes en este grupo etario. El aumento de de asa y bloqu(,;\lltes de los receptores ~- adrenérgicos, contribuiría él
la morbimortalidad se debe principalmente a enfermedades asociadas, alterar la h()ll1r.o~tasis de la glucosa.
de Lus cuales La enfermedad arterial obstructiva (corOllarin, cerebral,
periférica) es la más importante, seguida por Las manifestaciones de
m'i<:lflilllgiopatía (retínopatía, nefropatia).
Característi(as eli ni cas y diagnóstico
VI'IIIIIO':; lus proces.os que determinan su sinr.omaiología...
En pen;¡IIIi1:; dI' l~dJd avanzada la diabetes que se manifiesta más
frecuellb~ml'I1I() (Ir. dI' tipo 2. Su comienzo suele ser oligosintomático e

isiopatología insidioso Ven IOl1',OCIlCllcia no es raro detectar la hiperglucemia durante


un examPIl ni' Llbnfill,llrio de rutina o una internación por una
El proceso de envejecimiento conlleva una disminución progresiva .enfermedJ el 1;0 nOI m'llle,
dl~ 1;1 I:nlcr;-¡ncia a los hidratos de carbono: por cada década de vida La
Los sínt(JI1l,~~; PUI'dl.:11 ser inespecíficos tales como astenia, parestesias
qlllf.l'1I1i,1 C:'n ayunas se incrementa en -0.9 mg/dl y la glucemia post
y pérdida de P''''II, n 11l~'S orientadores como poliuria, polidipsia,
súbrec;¡re]a en .....7 y 13 mg/rJL a los 60 y 120 minutos respectivament~.
vulvovagil1iti~; l.;UII pllll il II vul.v.lr o balanopostitis, En ocasiones el cuadro
En per:.;onas de edad media y avanzada hay una disminución de la de comienzo Plll',li' ',('1 llIl coma hiperosmolar hiperglllcémico no
cilptación de glucosa en respuesta a la insuLina con hiperinsulinemia cetósico. LJrlil pl'Il!lllrriún 'importante presenta complicílcione~;
de ayuno, alteraciones en la fases rfipida y lenta de secréción de insulina microvascul¡1Tl':; ;11111111111'1110 del diagnóstico.
y aumento en la producción hepática de glucosa.
La Tabla 1 IilSI/II/(' /11', ¡ill/I/,IS más frecuentes de preselllncirill df' /11
Los pacientes añosos delgados con diabetes tienen una disminu­ diabete.s tipo 2 0/1 pl,lI ',Ol/l/', mio.. .lls.

37L~ 5
!t!'I"·, ti,: tI" '11 111 n q'l
,.. , ,
¡?!IIt,l~'l:' r 1/1'"

hacer sospechar su existencia, aún en ausencia de antecedentes de


diabetes. Es una complicación severa que presenta un porcentaje elevado
Síntomas «clásicos» o asociados a complicaciones
de mortalidad. Superado el episodio, la mayoría de los pacientes pueden
(disminución de lél visión, parestesias)
! Coma hiperosmotar
°
controlarse con dieta sola asociada a hipoglucemiantes orales.
I\llm;)( io nes metabólica,s, Cetoacidosi~ La hipoglucemia constituye la complicadón aguda más frecuente
Alteraciones «mixtas» y cuando es severa puede asociarse a cuadros neurológicos y coronarios
Depresión. apalia graves. Puede ser consecuencia de la administración de insulina o drogas
Alteraciones neuropsicológicas Confu~¡ón del grupo de las sulfonilureas y con menor frecuencia las meglltinidas. Si
T~$!o~nos
cognitivos bien la dorpropamida y lit glibenclamida son las sutfonilurcas que originan
Incontinencia utinr,~i~ hipoglucemias con mayor frecuencia, cualquier insulinosecret;;lgogo puede
Manife$tacione~ «(geriátricas~) Pérdid~ de peso
ALteraciones de la memoria
producirla si se lo lldmin¡~tr;) en dO'¡binildecuada (por error de prescripción
-----+-1
Caida,
- o de su toma), si el paCi(~llll' h,) disminuido lu ingestión de alimentos, o
VuLner<tbilidad él llmentada Infecciones en presencia de nefropatia () hepatopatía (defecto de eliminación). Hay
Evoluciú n tú rpid;'l de heridas que tener en cuentñ que ltl edad ílv<:Inzada es considerada como un factor
de riesgo P¡:Htl la ilp,lriciÚI1 rle hipoglucemias en los pacientes tratados
Tablo 1.
con insulina.
Entre las cC>lnplicllcione~ crónicas, al igual que a toda edad, es f41ctible
El diagnqstico se establece de acuerdo a criterios idénticos a los
obselVar la retlnopatia diabética (presente aproximadamente en la cuarta
otros grupos etanos (ver Capít'uto 1).
parte de Los p;\Ciplll:e" :)L momento del diagn6stico), la maculopatía
La lectura del cuadro debe haherlo advertido sobre complicaciones de degenerativa y la'; c.ltJr.lta5.
posible manifestaci6n en este grupo etareo. Antes de continuar con la A nivel renilL íldcll1:L d~ la nefropatía crónica, se obselVan la papilitis
lectura, haga su propia lista de manera de poner en juego lo aprendido necrotizanl;e, [;\:.; pidolll'i'l'itis y las cistitis. r
a lo largo de ,este curso. Como siampTl:?' podrá cotejar sus respuestas con '1'1
La hipertell'i'íón 'IrteriaL es sumamente frecuente y su control es
la:. qur desarrollamos (J contlnllGdc3n.
esencial pam p1<~vcllir 1::1 ~p"lri(ion o retardar la progresión de la neuropatía,
retinopatía y de 1;1 l:n!'('lnll'déld coronaria, como también para disminuir
el, riesgo dr iKridl'lllf"; ¡,t:l'l'hrovOlsculares.
• CompHcadones agudas y crónicas
La disfunción enktiL r".' m:1'\ frecuente y de aparición más precoz en

La cetoacidosis diabética es rara, pero con relativa frecuencia se estos pacienl:e~;.

presenta el estado hiperosmolar hiperglucémico no cetásico en pacientes


tratados sólo con dieta, o con hipoglucemiantes orales, o como La ateroesderosis de miembros inferiores es 10 veces más frecuen­
consecuencia de intercurrencias como infecciones agudas. Su desarrollo te en persona::; con r¡UI~ :;;11 diilbetc~., siendo más precoz y extend'ida. La
es favorecido por alteraciones en la percepción de la sed, la escasa ingestión prevalencia de ol)';\:n IU-:'¡()III'~; arteriales y de amputación de los miembro r

de líquidos, la toma de diuréticos y la dismi nución de la capacidad tubular inferiores aunwll1';) ll1arr;¡r!illllf'llte en fumadores. Dado el elevado impacto
renal máxima para la absorción de glucosa. La presencia de deshidratación socioecon6mico ilf,uci,¡do ,1 1" amputación, los integrantes del equipo
asociada a un CU'adro neur!tll6gico con alteraciones del sensorio debe de salud deben polle!' 1,1 Il1nyur empeño para prevenir l<l5 illterilcipl1c~

376 3
IIIIIII¡

I
[1111

f}j·¡l'·:, '·l"'l-'. /,,-./ tI. ,lit" í~".' Uf ¡",. 'ir Jil "IJJlfl O' ilfliOlrr/

dr·~1 p'ie en ancianos con diabetes. Es importante recalcar además que la concomitantes médicas y neuropsiquiátricas.
~.;ol.>r('vidaluego de 3 años de una amputación es del 50%.
A los pacientes con una expectativa de vida suficientemente prolon­
Vc:rclI1os a continuaóól1 poto{ogicJí que suelen asocíarse en C'ste qru,. gadil como para obtener beneficios de un control metabólico intensivo,
po de pacientes. activos, motivados, con función cognitiva intacta y dispuestos a Asumir
la responsabíl.idad de tal control, debe estimuLárseLos para LogrClr ese
objetivo, tratando de disminuir al m~ximo el riesgo de hipoglucemia.
• Patologlt3s asociadas Para pacientes con complicaciones severas, patología~; asociildas
Los pacientes añosos con diabetes tipo 2 presentan una alta que Limitan la 50brevida y/o alteraciones funcionales y cognitivas
prevalencia de trastornos cognitivos que pueden revertir al mejorar el irreversibles, es rtlzonable establecer objetivos gLucémicos n1t~nos
control glucémico. Los trastornos cognitivos sumados a la depres,iÓIl, estrictos y tntís selJuros. Es poco probable que estos pacientp.'i obl ('11"
repercuten negativamente sobre la calidad de vida y la posibilidad de gan beneficios importantes (reducción en la progresiún dI' 1.'1'.
alcanzar un control metabólico apropiado y aumentan el riesgo de complicaciones microvascuLares.) y estarían expuestos a los efectos
internaciones por descompensaciones u otros factores. De allí la vasculares y 11l'urológicos de las 11i poglucemias.
importancia de un dillgnóstico y tratamiento adecuados. Un objetivo terapéutico prudente para ellos seria propender ..
renga, en Cl/t?nt"a qUf'... gLucemias de ayullo -< 140 mg/dl y post prandiaLes < 18Q mg/dl.

Las personas de edad avanzada con diabetes desarrollan con mayor Las hipcrgl.ucclIl i;:\s severas y si nto máticas deben controlarse pj~r.1
frecuencia periartritis de hombro y retracción palmar de Dupuytren. evitar la (~xc(':iivJ tipúlisis, el catabolismo muscular exagerado y la
También aumenta el riesgo de caídas y fracturas consecutivas a pérdida urirl~lIi;) df' c;-¡Lorias (glucosuria). Los pacientes con mal C01)­
hipoglucemias. La evolución prolongada de la diabetes es, según trol metabólico ',nI) 1ll:ls propensos a desarrollar un coma hiperosmolar
estudios clínicos y epidemiológicos, un factor agravante de la pérdida hipergluc(:mico no rrlú:;ico.
de masa ósea que ocurre en adultos mayores. Aún rUi)lujl) ullnnlJol de la hiperglucernia es importante en perso­
La aparición progresiva de una descompensación metabóLica sin nas con diill)l·tl"; dI' I'lbd avanzada, la mayor disminución de la

! ~I
Cilusa aparente debe hacer pensar en la- presencia de algún ti po de morbi 1111l11'nl id,ll! ri(;rivoI del controL de los otros factores de riesgo
neoplLlsia, como las de colon y páncreas (ésta última tendría una mayor cardiow':;I~lJlal. I'ril)lip.lll1\1~nl:e la hipertensión arterial. Existen menos
prevalencia en personas con diabetes). evidenci;l~. \'11 (",h- IJl'l.lpO ~~t.ario, sobre los efectos favorables del
tratamiellto II ¡poi ipl'1l1 ¡dllte y del estado de hipercoagulabilidad con
Pamir finalízondo ... desarrollaremos... aspirina, ;-u'ill 1'11.llli1o '.1.1 11I ili /.flci6n parece razonable.

En función de lo (l><puesto, los objetivos del t,ratamiet:lto de la

Tratamiento diabetes cnlo ~;Olll)I1r,Olll:i;¡ !ie limitan a lograr mejoria sintomática,

El desarrollo y la aplicación de un esquema racional de tratamiento obtener una buena ca lhJad de vi da, mantener valores de glucemia

debe ser realista y considerar diversos factores como la expectativa de aceptables, evitar 1M llpi~;od¡os de h;poglucemia, prevenir las

vida, el grado de autosuficiencia y capacidad de adhesión al mismo, complicacionc~i a!Judar: Vprevenir o retrasár el desarrollo de com­

situación socioecon6mica, presencia de complicaciones y de alteraciones plicaciones cró"lc;w.

378 ".9
~ , fl ", :1;. ~ t III

Cambios en el estilo de vida: existe evidencia importante mos­ renal; por lo tanto en presencia de hepatopatías y/o nefropatía pue­
ITando que una intervención interdisciplinaria: que provea educación den acumularse y causar hipoglucemias importantes. Las sulfonilureas
rliabetológica mejora significativamente el control glucémico en adultos de primera elección en estas edades serían la gliclazida y la glipizida.
de edad mediana y avanzada, a través de cambios en el estilo de vida,
Las meglitinidas (repaglinida y nateglínida) por su efecto rápido y
el manejo adecuado de la farmacoterapia y La práctica del automonitoreo
glucémico/glucosúrico. breve disminuyen el riesgo de hipoglucemias. La repaglinida no se
elimina por vía urin¡:H'ia por lo que podría utilizarse en presencia de
En esta etapa de ta vida la terapia nutricional también es parte lnsuficiencia renal, aunque en estos casos sería más convenient~ el
fundamental del plan terapéutico ya que en personas con exceso de uso de insuli na.
peso y diabetes de mciente diagnóstico puede producir una notable l~
mejoría en el control metabólico. El aporte calórico debe adecuarse al Las sulfonílureas así como Las meglitinidas pueden asociarse a la 1

lMC y tener como objetivo lograr un buen estado nutricional, controlar metformina, glitazonas o insulina en circunstancias en que no se lo­ 1

la glucemia, la dislipoproteinemia y lograr un peso razonable que no gran los objetivos terapéuticos. Es preferible no demorar La
tiene que ser forzosamente el peso ideal. Sus caractensticas generales insulinización y de ser posible evitar la polifarmaciél. La metrorm'inll
se describen en el Capítulo 20. tiene lilS mismas indicadones y contraindicaciones mencionadas en el 1111' 11
Capítulo 21.
La actividad fisica es de suma utilidad y debe ajustarse a la 1
capacidad orgánica y gustos del paciente (ver Capítulo 19). Debe to­ Existe discusiún respecto a la edad «tope» para la prescripción de
marse en cuenta el riesgo de hipoglucemias y las limitaciones produci­ metformina por el riesgo de aparición de acidosis láctica. La FDA nor­
das por la enfermedad coronaria, con frecuencia silente y la existencia teamericana la fija en 80 años, y diversos autores toman como limite
de neuropatía y enfermedad vascular en miembros inferiores. 75 años. En nuestra experiencia, La administraci6n de 500-1500 mg/
dia de metformina puede utilizarse en pacientes de hosta 80 ilrlOs
• Farmacoterapia oral
teniendo en cuenta las precauciones mencionadas en el Capitulo 21. 1),

Los insuLinosensibilizadores como la rosiglitazona y la pioglitazona, '/


En caso de no lograrse los objetivos glucémicos con un plan de
alimentación y de actividad física adecuados, o en presencia de mani­ de efic~cia metabólica similar, tienen indicaciones similares a las de
fe$tLlciones clínicas de una descompensación metabólica importante, personas con diabetes más jóvenes (ver Capítulo 21).
o (on hiperglucemias asintomáticas, corresponde 'iniciar el tratamien­
to farmacológico. Al hacerlo no debe olvidarse que estos pacientes • 11l5t1linoi'erapia
I
suelen estar ya medicados por otras patologbs asociadas o comunes La ínfiulini1 e:.; In herrilmiel1t;< í'l emplear en personas con diabetes tipo I

de la edad tales como hipertensión arterial, insuficíencía coronaria, 2 con o sin Ill:lnHe~t:ilciolle~ clinicil~; (pérdida de peso, astenia, poliuria y
insuficiencia vascular en miembros inferiores, neuropatía, polidipsia), en la~ qU(~ no ~;e lllg¡i1nlos objetivos glucémicos establecidos
hiperlipoprote'inemia, osteoporosis, depresión y artropatías. (ver Capítulo 4). Sp f~fllph~íl igualmente en presencia de nefropatía ()
Suifonilurf1as: su administración debe comenzar con dosis bajas, hepatopatííls. i1~,¡ COIllO en ~;'iluaciones intercurrentes como illfeccir¡ne~,
utilizando las de acción rápida, de vida m(;~dia corta o mediana, y con cirugía o acidosis y (~~I'ildo hiperglucémico hiperosmolar no cetósico. L;l
menos metabolitos activos (ver Capítulo 21). Debe recordarse que son insulinoterapiil jnü~ll~;ifit:,ld;1 durante el período agudo y los meses
inact.ivadas por el hígado y que junto con sus metabolitos, algunos de posteriores parece Jn~¡or;lr ,ldem{¡sla evolución y el pronó~tico del infarto
ellos con acción hipoglucemiante, se eliminan en su mayoría por vía agudo de miocardio.

360 1
1,' ,;

Si bien tiene un efecto adverso muy importante (hipoglucemias) su • Bi bliografia


l.I~d ¡ e~
cada vez más frecuente en pacientes con diabetes tipo 2 de
1. Amcrican Diabete~ Av;ori.ltrion. DiJqno~i5 ¡¡na d;lS~ít'ir..ltion of Di"betes ~'~llitu". Dlilbctcs
Cdild avanzada, debido, entre otros factores, a la comodidad que CMe 27 5u~~II~11I~l1t 1: S5 - ,)10, 200'•.
representa su administración con «lapiceras) de insulina. Muchos 2. Anlcr,ic.ll1 Diabotes 1I\\ociation. St.<IouJrd¡ for Medica~ (~HP io Diabctes. Diilbete~ CM~ Z7
pacientes que iniciaron a regañadientes refi'eren una sensación de (Suppl1): S15 - 535, 20114.
3. Burbi~,1 M" RizlO M.R., ManzelL~ [l. l'l JI Age.,rd;lted' in$ulin re·¡i';IJI1r.e: i~. it nn oblig~tory
bienestar y ({aumento de la fUerZil>l al comenzar la insuli noterapia. t'inrling? The le~'lon from healtliy c,'nt.eniolns, Diabete~ Mr.t.lh RI~~. r.CI'. 17: 19-26, ;:'001.
Esto se debe probablemente a la mejoría metabólica que incluye un 1,. De Fron70 R.A .. BOllnadoolld R.e., Frrranniní E. P;¡~hoCJene5i; of NIDI1M: ;, 1J;¡lill1r.rrl ovcrvie'N.
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J. El1ni~ E.D., Stnhl E.J .. Kre\slJerg R.A. Thc hVP'~roITOolar hypcrglycemic Iyodrome. Diabetes
La insulinoterapia puede indicarse como tratamiento único junto con Rev. 2: 115-17.r,. 1994.
el plan de alimentación o asociarse con hipoglucemiantes orales. 6. Fink ,R.l., W,111'lce r., Olef<.¡ky J.r~, Effptll oí ;¡giog on imulin-ltll'.díJl.cd glucose di~pol~ll ;md
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7. Fran~~ L.V.. Di B:1fi M.• Sborr R.l.. Relnick, H.E" VolO Eijk J.T.M .. RallN D.C., NC'Wlllan A.rl.,
Sl1ría des€ableqUE' antes de leer nues/.ras conclusiones, usted elabore PililO! M. Typr 7. Di.1bctc:; in oldN well-funn.iQning peopl~: wilo i'. undinqno:r.d? Datn frnOl
l:h\lI1C,llth. Agi nq .lnd ~udy CUl1lposi tían study. lliabd.e.\ C) re ~4: 20GS- 2070, ~oo 1.
{as suyas. H6galo. Lo espf!{umos... 8. G<1rlÍu dI) lo'. r\io~ M, DiJuetel en el SeneSCf'ntc, En: G.Jrci.·1 rlr. IlJ~ Riw. M" llllrrutv r.lI, r.
J.
(EdlLorc~): Dí;¡b:;\'l', Mr.-llitu:¡. Sl'~und., Edir.iÓo. Fund~ción <le IIlVl'•.'Jiq;,r.ióll V1'l'II,'o:i"I1,lIlIi"I1I.(I
W~dico, )anti;"JLI (\1] C.hil,': 297-:;07. 2003.
9. Halter J.B, r,"Ii;¡Lrrr 1'000;(:nt<" En Ther;¡py 01' Di,1iJel:c:; Mellitll': 'il\d Rd~"'d fli'.old,·",. 11111,[
Erlil:ion. /1111 Dial¡ 1I·,',IIc. ~'t,-2f¡O. [lI'Jfl.
lO. Ko1ltia~l KS. H,ld·.. i·.Ln M.V.• Hl'ikinheirno R.J.. Manil.l K.. J.. ((,li.,ld ',.A. 11"",,11,1111'1'.,' 011,,1
• Conclusión Diab(~tl": t~"II¡III·. 1",·,ji,.l.inq ~'"Il::11ily in r'·'·,tlll·..I'I'·'¡ :1', y,·.II". "1 ,,1 '''VI'. 11'1" /I'p·i)"1 11.:
1/.iS-1.711, l.')H7.
A pesar deL consenso actual respecto a Los beneficios de la 11. Mencilly (j,S., Ulli, ,11 l. lo ".·.i"I 11.. 1-1;)111'.1 .. Tillll",I,'v JI, NIIIIIM 111 1111' ,·Id,·'¡v. lIi.. I"·I,". r.lI1'
normogLucemia, debe tenerse en cuenta que, las metas glucémicas del 19: B~O·n?r" 1'1'110.
lit]
12. 5,'1Il1)', 1.. F., """',11.11. 1I1,,1,,·I.".I"kllilll'. in IIld", pI'I·;",.... Mpd Ili,1. N",III AIII !~;': ¡'ll-B03, 19q~·.
tratamiento se logran apenas en uno de cada cuatro ancianos con
13. ~;l11it.1i M.J., II,dl ~1.ll.I'. 1,IIIi"IWlh"I,'I"I"',lIl1'" illll"'VI'IV 01'1"'1. 1I1,11"'IIII'"li¡19: 387-390.1973.
diabetes. Esto se debe e111 parte a características particulares de los Ill¡1
14. ,r'lIlil,iJ N.I.". II,'(~I,,'I! ·,.rl., 1',,1111/'1 V./I,. ,'1 ,,1, /11111111.,11"'11 111'.111111'111 ''':'lIrJ~ in ,1 Cohort of '!
pacientes durante esta etapa de la vida, pero t;:¡mbien a la tendencia de Eld"lIy 1'"",,1,' 'Nill, 111.1111'1,".. 111.•111'1''', 1"'11 :';': /11: /tI,', 1'1"" i
los médicos tratantes a menospreciar la importancia del control 15. TUlllllil"lilll ,1" Ni',',ill('II/1" l(¡v,·I., ' .. 1.. '\"'1.1".'"("1 ,1.1'"1,11'.. 11,, l .. 1'I"lr E.. Aro A., Pun~.lnr S.•
metabóLico estricto, siempre que no ocasione trastornos más graves K'"VIIIII'II M.. 1. 1'''''J.d''III'' "111,,,1,,'1,". Ml'lIilll", 111 ¡'Id,''¡y 1111'11 :t1I"'¡ fJ~ to ~(, vr3J'~' io c)~.terll
:1I1r! \\"".1'('11\ 1il'll.lIld. Ili.,["·llIlo";'1 ,".: (,11 ',1'" I'I!:I,.
qlle Loe¡ que pretende evitar, para prevenir las complicaciones vasculares
y mejorar la calidad de vida de las personas anc;onas con diabetes.
En estos pacientes el enfoque ínterdiscipLinario es muy importante
para establecer sus característícas biológicas (árbol vascular, Caso cHnico '1
rendimq~mto cognitívo), evaluar el impilcto de la diabetes y de su ,Juan K. e~ UIl P.llil'III" di' 1I ,1110', d.' ('dad
evolución. Til;III' ,nll'I""'. ,111'11"" 1":\:i¡!JlC a medianos esfuerzos (refiere
con DM tipo 2 de 16 años de
:~!I
tratarniento sobre su bienestar, establecer La disponibilidad de recur­
angiopl;:)!;tii\ 1~1l 1111 Vd'''1 t 11". ,\111\'; .11 r;IS), hiperten~ión arterial y retinopatía
sos (entorno afectivo, medios económicos, residencia) y asegurar un
no proliferiltiva di' . IW! ,1,
tratamiento integral de la diabetes y de los otros factores de riesgo Consulta por íl~¡l:('Il¡;¡. pí',ldid., di' 3 kq~;. de peso, discreta anorexia, parestesias
card:lovascular asociados para prevenir eL desarrollo y progresión de las nocturnas en rnil'lllhltl', iltl"rkll"t"; y poliuria. Refiere cumplir con el plnn
complicaciones crónicas. alimentario indicarlo ))(11 ',11 nwtJicu de cabecera, pero no realiza actividad

382 383
I

11111
j~l' /tI .r{¡1 fr1,'ll!>~·n.~,·uhu

II"'i, d por Illiedo a precipitar una crisis anginosa. Realiza automonitoreo Evaluación y control del bienesta
ql1ll01l1ico (AMG) una a dos veces por semana. Está medicado con atorvastatin
io IllCJ/d, enillapril 20 mgjd, hidroclorotiazida 25mg/d, carvedilol 12.5 mg/
d, c1on<1zepam 0.5 mg/d, aspirina 100mg/d, glibenclamid¡~ 20 mg/d,
psicológico en personas con diabetes DII

rlletformina 1700 mg/d y rosiglitazonil 4 rugId.


Al examen fi~ico muestra una presión i1rterial de 145/90 n1 mHg, frecuencia Fran/{ J. Snoek
de pulso de 64 latidos por minuto, discreta hepatomegalia blanda, edemas
maleolares leves, sensibilidad vibratoria ytáctil d'isrninuida en ambas piernas.
El laboratorio muestra una hemoglobina de 11. 5 gjdl, critrosedimentación
20/38 mm, enzimas hepáticils en el limite superior de la normalidad, glucemias
de ayuno y postprandiales de 235 y 312' mg/dl respectivamente, creatinina
1.9 mg/dl, tric¡lic~ridos 190 rng/dL colesterol tot.al de 7.15 mg/dl, LDL-( 140 Llegados al filial dI? este manual nos detendremos a analizar cómo
mgsjdL HDL-C de 46 rngs/dl y HbA 1c 8.7%. El eXilmen de orina presenta 500 realizar la evaluaciún del estado psicológico de una persona con dia­
mg de albúmina en 2/, hs y un urocultivo negativo. Sangre ocultn en materia betes para ayudarlo a Inr¡wr un ntndo de biOl1est.'ar mayor.
fecal negativa. La radiografía de torax y la ecografía de abdomen son normales,
excepto por una mínima congestión hiliar y hepatomegalia moderada con
esteatosis. Propósitos de la unidad
A pesar de una resistencia inicial del paciente, se suspr-nde la medicación
antídiahética ora! y se inicia insulinización con 2 inyecciones diarias de • Conocer COIllO llfect;l ;j lit p';iqui~; I.a l~nÚ'rIlll'dild qUl' " lo l¡¡flJO di!
insulina humana NPH en dosis progresivas, aumentando 2-4 unidades cada 3 este Proqr,11l1;1 1IH~l1lo~ cardLil'l'íl.arill C1JIlIO 111'lllil ;1, cOlllpleja, :IUO­
días de acuerdo al AMG realizado antes del desayuno y la cena hasta llegar a biante'y dl:!lIlll0dnllte.
46 UI/d. Se reajusta la medicación hipolipemiante e hipotensoril.
A las 6 semanas las glucemias en ayunas, 2 horas post almuerzo y precena Cornpml1dr'1 Id inljlllilillll'i" di' 1'\ \",1.\110 p'.ieológieo dd
I'V,i1I1011

son de 141, 190 Y122 mg/dl r(!spectivamente, y la HbA 1c disminuyó ó'l 7.2%. pacil~111'1' rolcíl í!.lllIlll '.11 11 i,i111~I·e:.. y promoviendo 5U
1.1 ;111'111.11 i,')ll di'
El paciente recuperó su peso, con desaparición de la astenia y mejorla del particip,ll:í 1)11 del ¡Vd 1'11 1,1 f 111111111 Ytrdl,¡ 11rjr~nlo de la misma.
estado general.
.p¡ln~;ill' f", 1: r"'i:¡ 'lj idO, qlll' It 111:,111'/1';\11 1,1 IJí;'iloc¡o médico-paciente para
POdN ll~i, olplir.m· l'fI 111111101 1'1'1'( l.ivil ('l1CUI-~stas que permitan cono­
Esta caso pone de manifiesto la necesidad de inslJlinización y la fulta de utili­ cer el e~t;ldll di' '"dllll P'oIljlliCol <Id paci0llte.
dad y el riesgo de empleo de antidiabéticos orale) efl ciertas condiciones. Como
Jile demostrado por el UKPDS, la diabetes mellilus es una enfermedad progresiva
y al caiJo de 10-15 arios un número importante de pacientes requiere
insu/inilaci6n para su control. Carece de sentido el empleo de dosis supramáximas RefLex~ oncr. pn:vi.n',
de sulfonilureas. Además, es necesario tenar en cuenta que lo met/ormino estó
La torca dI.' f'~llll"('r (11 /11'1 v/llmlo de empatía con el paciente exige del
contraindicada en presencia de nefropatía por el riesgo de acidosis
láctica:constituyendo además la coronariopatra una contraindicación relativa médico tiempo, IIlr'lIl i,,/I y ',¡;llrlllridad para entender desde el sentimiento
para el LISO de In misma. Las glitaz~nas no deball emplearse el) caso de y no sólo dusdl.' la IIO'tÍlI, 1,1 ';II/hmiento del otro. 11
insuficiencia cardiQca y la presencia de edema, más que las enzimas hepáticas
Es desde eS/11 pllimisf1 rlllf' lo invitamos a leer este último capftulo y le
<dJorder/ine», constituye cieri.amente una indicación para suspender su
administración. El colesterol LDL en este paciente debe mantenerse debajo de proponemos 11(1L'fl/11t1 f)jnrr:icin de imaginación y de introspección que faci­ I
100 mg/d/, osi como la presión arterial debe estabilizarse al nivelo por debajo liten su prcparadrill ¡HIIII IIplhwlos instrumentos o encuestas a los pacien­
da 130/80 mmHg. tes diabéticos (/'W dubll atender y que en esta ocasión le presentamos.

384 385
lI:.):}

Introducción El bienestar psicológico debe ser considerado como requisito pre­


vio para un correcto autocontroL pero es también un indicador impor­
Hemos i05tenido en forma r(lit~roda que... tante por sí mismo. Por consiguiente, la función psicológica de las
La diabetes es un problema serio y agobiante que afecta a la personas con diabetes es un componente integral de la atención
persona con diabetes y su familia en todos los órdenes de la vida. diabetológica y debe ser controlado cuidadosamente. La detección
Tanto en la diabetes tipo 1 como en la tipo 2, el autocontrol es la precoz de problemas psicológicos servi ria para indicar la interconsulta
piedra angular de la atención general de la enfermedad promovien­ en tiempo y forma e iniciar un tratamiento adecuado con efecto~;
do la importancia d~ los factores cognitivos, emocionales 'f del com­ positivos tanto sobre los indicadores, psicológicos como los metabóli(:n~.
portamiento. En ese contexto, la diabetes y los factores psicológi­
cos interactúan de un;:¡ manera compleja.
La diabetes puede afectar el funcionamiento psicológico de • 1. Problemas psicoLógicos. Cómo asumir la enfeml(~d:;)d:
una persona tanto direda como indirectamente. dificultades
Veamos par qué. Cuando consideramos los problemas psicológicos en las P(,~'~(¡I1i1:,
En primer lugar, la carga que significu vivir con diabetes y controlar con diabetes es importante distinguir entre problemas de adapt.'1cit>1l
una enfermedtld crónica tan demandante puede provocar proble­ <mormalesl), relacionados con la carga de vivir con la diab~~te~, y
mas de ajuste y eventualmente un agotamiento emocional, mental condiciones psicológicas comórbidas graves, como la depresión, ID':
y físico «((bumoutr», particularmente cuando a pesar del esfuerzo problemas de alimentación o de personalidades fronterizas.
diario de la persona por controlar la enfermedad los resultados En la primeri1 categoría se encuentran los inconvenientes relaciD'
médicos y psicológicos son pobres. nadas con asumir ~a enfermedad, que pueden ocurrir en cualquier es1:<ldio
En segundo término, las fluctuaciones de la glucemia pueden afectar del proceso de la enfermedad, pero particularmente poco despué.s d~1.
de manera aguda el comportamiento det padente. La hiperglucemia diagnóstico y posteriormente cU1lndo las complicaciones ~;ecundarias e
y la hipoglucemia en particular, se asocian con un comportamiento irreversibles comienzan a manifestarse. M~dicos, enfermeras, trabaja­
psicosocÍill inadecuado. dores sociales entrenados como psicoterilpeutas -de manera
personalizada o grupal- pueden brindar asesoramiento psicológico.
• En tercer lugar, las complicaciones crónicas de la: diabetes pueden
provocar a largo plazo un deterioro funcional y afectar en forma En el segundo nivel, los problemas psicológicos graves se identifi­
adver$J la calidad de vida del paciente. can según criterios diagnósticos (lCD-l0, D5M-IV) y requieren tratarSI'
por un especialista en salud mental incluyendo psicoterapia y/o drugcl"
Por otro tado, el funcionamiento psicológico puede modificar el ps¡cotrópicas. La prevalencia de depresión grave entre las pcr'~nIHl',
control de la diabetes tanto directa como indirectamente. Es ~iabi­
adultas con diabetes tipo 1 y tipo 2 es del 15%.
do que el estré5 psicológico puede desestabilizar seriamente el control
de la glucemia. AdemJs, estados de ánimo negativos. como la depre­ Los pacientes que presentan un¡:¡ condición psicológ,i(;\ ('OIHIIIIJIlI¡¡
sión y la ansiedad pueden impedir un buen autocontrol con La conse­ crónica pueden tener problemas de adherenl':ia al t.r;ll:dllli"I-II" V 1.11,
cuente aparición de indicadores de wntrol y tratamiento insuficientes demandas diarias del autocontrol. En este grupo de 1J;'llil'l1l (", p·.il 11111
(aumento de la frecuencir:l y magnitud de complicaciones y costo de gicamente vulnerables se justifica un tratamiento cnlllhi 1II Iilo 1111111 11 11 V
1

atención de la enfermedad). psicoló gico.

386 111/
Oj(r/"r 'ti , V ll/n.l~· jtW{('J , I dt" n""~,w1 "nJdirl'l'a";lll{~ ~(
________r_".'I,tI__"_"_I_¡,_'I_¡.;.\_'_'_'J_}!JIJ/I~d /HJ fJl" ;"ll,ll'.rl d/,irfJill '2~~t"1 4IJJrJI, I,ltl 11".~/JI·fl

• 2. Consideraciones diagnósticas
No existen datos precisos acerca de la proporción de po1ci~nlc,', (~n
La evaluación de la salud psicológica de las personas con diabetes los que el estado metabólico y la salud psicológica pobres so sup\'r­
apunta a la identificación precoz de aquellas con escaso bienestar, pongan (grupo D). Se puede estimar que esta asociación se prcsc.:nt::
para comenzar con su asesoramiento o el tratamiento adecuado. Los en alrededor del 20-25% del total de la población diabéticD.
problemas psicológicos pueden. aunque no necesariamente, relacio­ ¿Qué aconsf'jamos?
narse directamente con la diabetes. A menudo diabetes y problemas
psicológicos se interrelacionan y los pacientes confunden causa y con­ Tanto en la atención primaria como en la secundaria es neces;¡rio
secuenóa. evaluar sistemática y simultáneamente los indicadores psicológicos y 111':
parámetros metabólicos. Obviamente, debe prestarse especi<l! JI'cncj(1I1 .1
Básicamente, al considerar la relación entre control y salud psicoló­ los pacientes de los Grupos e y D. Los pacientes del Grupo A -[Olltlli!
gica, se pueden distin'guir cuatro gwpos de pacientes:
metabólico escaso pero buena salud psicológica- debe'lÍan benefir.iill',I'
A- Estado metabólico bueno y salud psicológica buena
utilizando el tratamiento intensificado para mejorar su control gLucél1íiCi',
BI» Estado metabólico pobre y r.alud psicológica buena
El profesional debe primero explorar las barreras psicológicas específica
relacionadas con la intensificación del tratamiento -por ejemplo ansiedad
C· Estado metabólico bueno y salud psicológica pobre
por la terapia insulínica- circunstancias sociales complicadas o temor él La
D03 Estado metabólico pobre y salud psicológica pobre
hipoglucemia (ver Capitulo 22). Deberá así eva'luarse cuidadosamente el
impacto del tratamiento diabetológico intensificado sobre la salud
Aunque se haya probado que el bienestar psicológico y el control
psicológica del paciente, en particular si las, mejorÍ11s metabólicas que se
glucémico se mantuvieron estables a lo largo del tiempo, ambos
producen a expensas del bienestar emocional no duran demasiado tiempo.
parámetrós deben considerarse como estados más que características,
Debe asegurarse la accesibilidad al asesoramiento adícionat para ayudar
es decir, son dinámicos y responden a intervenciones efectivas.
al paciente a superar preocupaciones específicas y poder enfrentar
Diversos estudios sugieren que la mayoría de las personas con efectivamente !.as crecientes demandas del autocontrol,
diabetes presentan salud psicológica buena, con una calidad de vida
Tenga en Clwnta que...
satisfilctOlia. Es importante destacar que el informe del propio pacien­
te sobre su calidad de vida no coincide necesariamente con un control
glucémico satisfrtctorio (HbAlc), ya que lu correlación entre ambos Los datos epidemiológicos disponibles justifican incluir el control
indicadores es débiL Datos epidemiológicos sugiieren que alrededor del o supervisión del bi~nestar psi'cológlco en la atendón diabetológica
30% de 10$ pacientes diabéticos presentan control glucémico pobre de de rutina y ciertamente se ha probado que ello es benefidoso ell
manera pe.rsistente, mientras que 25-40% de los pacientes presentan términos de mejorar el bienestar y la satisfacción del paciente.
salud psicoLOgica ¡pobre,
Alos fines de la ev,¡.Iuacíón y del control, se necesita un instnHlIl:'lilTI
Es preciso considerar que,., breve, fácil de imptlftir'y válido como autoinforme. Desde un punto dI' vi'.1 rI
psicométrico, la scn:jibiUd.,d y la especificidad son criterio:. 'j¡nporlilIIIJ'" ,1
Es escasa la información sobre determinantes psicosociales del con­ tener en cuenta. lamhiCi¡.l deben existir puntajes o valore:; rll' n:lplHlll,irl
trol glucémico pobre persistente. Los predictores identificados son: diag­
nóstico ,precoz, sexo femeni no, y pertenenciu ti una clase socioeconómica
que permitan interprctiJr correctamente los indicadores V~;Ij~; V,II ¡,ll.illll! "" I
Si bien la implementación mediante computadorils e~ atraltiv;l y m;l', I ~I il. ,1/ 1I
baja, pero estas variables sólo explican el 20'''/0 de las variaciones. que el lápiz y el papel, dl;l no es un requerimientoimpre';cillc!ilill'. I
388
9
• 3. las encue.stas WHO-S y PAlO 50 por encima del mismo, la salud psicológica @s adecuada y en el
rango intermedio (>28 y <50) justifica un examen más profundo del
Aunque no hay un patrón de oro para medir La salud psicoLógica de las
estado psicoLógico deL paciente (encuesta PAID). En estudios en los
personas con diabetes, existe cada vez mayor consenso que: la mejor
que se comparó la encuesta WHO-S con otras herramientas se infor­
forma de controlar el bienestar psicológico es combinar la médición del
mó que. la estala tiene buena sensibiLidad y especificidad para eL
bienestar emocional. general con la de fa angustia emocional especifica
screening de depresión.
de la enfermedad.
La Encuesta de 5 Puntos sobre Bienestar de la Organización MundiaL
de la Salud (World 'Heolth Organization 5-item wcll-being questionnaire, 3.2. Encuesta PAID
WHO-5) y la Escala de Áreas Problema en Dictbetes (Problem Areas In
Diabetes, PAID) son l1erramientJs útiLes para evaluar el bienestar'omocional La escaLa PAlO fue desarrollada por el Dr. W. H. Polonsky .Y
general y La angustia emocionaL relacionada con la diabetes, coLaboradore~ en la CLínica de Diabetes JosLin de Bastan y ha sido
respectiva mente. validada en varios estudios clínicos.
la encuesta es una medición hecha por el propio paciente de la
Describiremos (/ continuación cada una de ellas.
angustia emocional.
Contiene 2Q puntos que se evalúan con una escala Likert de 5
3.1. Encuesta WHO-S
puntos, de O (ningún problema) a 4 (un problema muy grave).
La encuesta WHO-S es una escala unidi mensional breve y confiabll:'
desarrol\.;¡da por el Prof. P. Bech y colaboradores en Dinamarca a partir de Cada ítem describe una emoci ó n negattva específica relacionada
mediciones psícoló9'icas preexistentes en el área, con vaLidación probada con La diabetes y su controL. La encuesta PAID es unidimensionéll
en diferentes poblaciones y paises. La Federación Internacional de Diabetes pero, con ti nes clínicos, se pueden evaLuar subescalas:
(FID) recomienda la encuesta WHO-5 para ámbitos donde se brinda emociones negéltiva<¡ (12 ítems),
atención de la diabetes.
• falta de apoyo (2 'items),
los 5 puntos de la escala están redactados de manera positiva
.' problemas reLacionado (on Iq dieta (3 ítems) y,
f
;
y su puntaje corresponde a la escala likert de 6 puntos de «siem­
pre» (5) ¡;¡ « nunca» (O). Cuanto más alto el puntaje mejor es el problemas relacionados con el tratilmiento medicamentoso (3 ltems).
bienestar.
Las correlaciones entre los puntajes de la encuesta PAID y la HbAlc
El puntaje :;e calcula mediante la suma, con un mínimo de Oy un estuvieron en eL ra,ngo ~ r =.10 -.30. Los puntajes se suman, con un
máximo de 25. PJifa facilitar la 'interpretación, los puntajes se transfor­ mínimo de Oy un máximo dI-' 130. Para faciLitar la interpretación, los
man a una escala de 0-100, en La que Los puntajes por encima de 50 puntajes se tmnSfOnl1ilrl J una escala de O~100. Los puntajes má"
indican una salud psicológica buena a excelente. altos indican nive'le;. rniJynws de ang ustia emocionaL, con prorfledio';
entre 20 y 30 en pacienl:e,; con diabetes tipo 1 y tipo 2. Lo:. puntflje~i
28 Por debajo de este número, la escala indica q:ue el paciente presenta
de 40' y superiores indican niveles aLtos de ang,ustia o «burnout)o) ql'
indicadores de depresión que requiere tr<ltamiento especi,üizado;
la diabetes. La evalu;n;iól\ más exhaustiva de puntajes alto~ (3 () 1I )
ayu da a identi fkiH :i rell s pro bLe mática s relevnntes.

390 391
- J ~'(dUHá'JJ. v ~·oJa'lll d i ¡ir '.'1' ·tla {I"'}¡ I·'f.t~/ ·P{¡/i·, I r'n~

4. DivuLg'a€ión y discusión de los resultados Tenga en cuenta que ee¡ preciso hacer un resumen de los resulta­
dos, integrando los puntajes de ambas encuestas y las acciones que
Los puntajes de las encuestas WHO-S y PAID son fácíles de calcu­ se han acordado entre las partes. Toda la información es volcada a la
Lar. Una vez determinados el próximo paso consiste en d1vulgar ficha del paciente. En caso de tener los datos cargados en una b¿¡se
los resu~tadQs y discutir directamente con el paciente sus computarizada, se puede entregar al paciente un resumen de sus
implicancias. El tiempo necesario par;>. evaluar L'Üs ,resultados variará resultados.
según el nivel de compLejidad. De ser necesario, se pueden agendar
discusiones sobre los resultados para la siguiente consulta. En el anexo le presentamos las encuestas mencionadas. Recuerde que
la primera de ellas (WHO-5) es de autoadministración y su paciente
La comunicación efectiva al paciente de los indicadores de puede completarla mientras está en la sala de espera. El PAID en cambio
evaluación psicológica es vital como primer paso del proceso de lo utilizará en aquellos pacientes cuyo puntaje del WHO-S, quedó en eL
asesoramiento. En este sentido, un enfoque positivo no crítko es rango de .26 a 49. En este caso la complejidad del cuestionario f)bLi~;¡ :')
una condición sine qua non, asegurando al mismo tiempo la que se realice con ayuda de algún integrante del equipo d(~ G.ll.ud
confidencialidad. previamente entrenado.

Sugerencias para su implementación,


Si,empre es mejor comenzar preguntando cómo el/la paciente se
ha sentido aL contestar las preguntas, luego rle lo cuaL se Le pueden
Leer Los puntajes obtenidos. Primero se discute la encuesta WHO-S y
• BibLiografia
luego la encuesta PAID. Utilice frases como «. ... En la encuesta sobre
bienestar Ud. indica que carece de sentimientos positivos la mayor parte 1. Ander50n R.l, FreedLand KE, (IOlAse RE, Lu~tm,ln PJ. The prcvalcnce af comQrbid depre\siol1
in adult~ with d·iabet"~. A metJ-uflalysir,. DiabE'les CilIe 24: 1069-1078, 2001,
del tiempo ... ») en lugar de decirle <cSu puntaje fue bajo». Los pacientes
Z. Ilttp:/jwww.wh(0.&.r9
en general van a reaccionar espontáneamente y brindarán información
3. Kono CE. Bowlin SJ, BOllrqeoir; N, FedoPf DO, GLyteio'ic control from 1988 to 2000 onlO0'l
adicionaL que puede ser importante para interpretar los resultados de U.S. adlJJLts diagno~cd with tyP(' ::l diabctc3: ;l prC'timinary reporto DiabE'te, (are 27: 17­
las encupstas. Por ejemplo, el paciente puede mencionar hechos re­ ?O,200r..

ciente,; de :;u vida o señalar problemas recurrentes específicos de la 4. Kr~l1s H~\.l. Porta M, KE'lJ'/\ H, jl.lchr Johanson K (eds). DiabetE'" care ~nd rewilfch in
Europe. The SI. Virwmt D¡·d;lrJl.ion Actiun Prr¡gr.1mme. Implcmcntation Oocument.
diJbetes. CopenhagNI. WHO. Regional Offiw for Europe', "1995.
S. Polon':ky WH, Aflder5un B,l, Lolm.'f :PA. Wrleh GW. Jaeobson M~. MSil.ssmcnt uf t1íabcte,,­
La comunicación de Los puntajes de la encuesta PAID se hace de relüLE'd c:Iir.tre5r,.. Diabetor, CHe ~o: 7(,O-7aG, 19'17.
manera similar, comenzando con una conclusión neutral, como por 6. POUW~f F, Snack FJ, van dor rLoc'q 11M, Arkr HJ, Heinl' RJ. Monitoring of ps.ycholoqif..ll
ejemplo «En la Gncuesta PAlO Ud. señala que Ucne angustia emocio­ well-beillg in outpiJtien\s witll di'l!Jul:!·s. EffelL:, on mood. HhAlc, and the p~tí'~nl'i'
evaluation OT the qlJnlity of diril)l'l,", (',1re: ,'1 rnl~domized conlJoILed stlldy. Diabetes Car"
nal..», particularmonie con respecto a..... o «Ud. dice que no tiene 24: 1919-1935, 2001.
mucha angu.5tia con respecto a la diabet.'es en conjunto, pero parece que 7. Rubln RR, Peyrot M. rWch')lo~i,:¡[ iS5ues ,lnd trt'dLfllent, far peopLo with d'inbc'e~ . .1011111,11
existen algunas áreas problema que vale fa pena observar ... l>. En el uf Clínical j>5ycholnQV ')7: {¡ " 7-1.,78, 2001.
8. Snock FJ. Shinner. Psyciloll1lJÍi:nl r.llUlI~elling in problernntic diabetr\: dne;. 1t 11l'11),'lIiJ\iJ,'¡ i,'
último caso, el paciente tiene puntajes más altos (3 ó 4) en algunos Medicine 19: 265-213. ;JOO?,
ítem:; que justificafl ser observados. En caso necesario, se discute con 9. Wclch GW, WeinqN K. PollllI'.kV WH. Rl'~:pnn\ivene~~ oilile Problrm ArC,l~, 111 lIhrb"I''',
eL paciente opciones de asesoramiento o tratamiento psicológico. (PAlO) qu{)r,tionnaire, lli.lbd.ir. Medilino 20: 69-17, 2003.

39 .. 393
1' . ~!I(tl 1'11 ItlL·"'JJrh (/1/.1 dt'r,'Jl··{t l

Anexos
Encuestas
INSTRUCCIONES: ¿Cuál de los siguientes temas relacionados con su diabetes
constituyen un problema para Ud.? Haga un circulo alrededor del número
que m~or describa su situación. Po/favor conteste todas las preguntas.
o o I o o o

,..-1
~i ..... +-'­ ...... ...... ......
1. ¿ Piensa que no tiene objetivos claros y concretos para el cuidado de
su diabetes?
Ningún
problema
O
f'robLellla
ll1p.nor
.1.
Plllbl~lll;l
modcritdo
2
ProblelTlil UI'1
poco ~erjo
,:¡
Problemil
'_,~rio

"
2. ¿Se siente desalentado con el plan de tratamiento de su diabetes?
N N N N N
NinlJún Problema Pmblomil f'roblp.mi) 1m Probli.'llIrl

-1- ~-t-- -­
problema menor moderadQ poco serio serio
O 2 3 4
3. ¿Siente miedo ,uando piensa que tiene que convivir con lo diabetes?
IV) M M M
Ningún Problema Probleil1il PrQblem~ un Problema

~
---t--_---L

I ~ ~ ~ r­
I

I
problema
O
menor
1
modcrado
2
poco .erio
3

4. ¿ Pasa por situacione$ sociales incómodas reladonadas con el cuidado


de su diabetes (ej., que /0 gente le diga qué tiene que comer)?
~crio
4


o;

.....
<::
'o
.~
lJ"l
-+--+­ lJ"l lJ"l lJ"l lJ"l
Ningún
problema
O
!>mlll!'ma
ni'~rlOr
1
Prnblrm.'l
moderado
2
Problem~ un
poco serio
3

5. ¿ Tiene sentimientos dé privación respecto de los alimentos y (as comidas


4
Problema
serio

a;¡
.::=...
que consume?
.... Ningún Problem¡¡ Problem;¡ Problema un Problema
:l probll.'rll<l menor moderado poco serio ,serio
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7. ¿Sabesi SU estrIdode ánimo osus sentimientos serelacionan con la diabetes?


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394
395

/1.J/tJrlt ,¡-u v (l'ti?J¡J! tld /"I'tk" iHI 'l~t4 "Jr;f)Jt"C'

17.(:Síellte que está solo con (a diabetes?


8. ¿Se siente abrumado/agobiado por la diabetes? N111'11'111 ProbLema Problema Problema un Problema
111,,1111'111;) IlIcnor moderado poco serio serio
Ningún Problema ProbLema ProbLema un Problema
() 1 2 3 /.
problema menor mode~ado poco serio serio
O 1 2 3 /¡ llt.¿ Siente que sus am,'gas y familiares no (o apoyan en sus esfuerzos
9. ¿Le preocupan los síntomas y las reacaones consecutivas a la pora controlar la diabetes?
producd6n de hipoglucemias? Nil1qulI Problema Probl~mil Problemil un Problema
Ningún ProbLema ProbLemil Problemil un Problema 1'1'11 hl ('IIlJ menor modcrildo poco serio serio
problema menor moderado poco wriu serio 11 1 2 3 4
O 1 2 3 4 1tI.¿ Puede afrontar y asumir las complicaciones de la diabetes?
10.¿Se enoja cuando piensa que debe convivir con la diabetes? Nillq¡jl\ Problema ProblemJ Problemil UII Problel1l.1
1'1 uhlcrna menor moderado poco serio serio
Ningún Problema Problema Problema un Problema
problema menor moderildo poco serio serio
11 1 2 3 '¡
O 1 2 3 4 :~O,¿Se siente «emooonalmente agotado» por el esfuerzo constante
11.¿ Está siempre preocupado por los alimentos y la comida? IIccesario para controlar la diabetes?
Ningún ProbLemil Problema Problema un ProbLema Nillfl1in Problem;:¡ Problema Problema un ProblelllJ
problem<l menor moderado poco serio :;erio IlIllblcma menor moderildo poco serio serio
O 1 2 3 4 11 ) 2 3 4

12.¿ Le preocupa el futuro y la posibilidad de padecer complicadones serias?


Nínyún ProbLema Problema Problellla lHl Problema
probLema Illenor morlerado poco serio serio
O 1 2 3 4
13.¿Siente culpa o ansiedad cuando pierde el control de su enfermedad?
Ningún Problema Problema Problema un Problema
¡probLema menor modl1'rado poco serio serio,
O 1 2 3 '.

14.¿No «acepta)) su diabetes?


Ningíln Probl~ma Problema Problema un Problemil
problema menor moderado poco serio serio

I',.,~,I;) Clínico 1
O 1 ? 3
1',II.icnte de sexo fcrncnirm de 54 ail0s de edad, soltera con diabetes tipo 2.
15.¿Se siente insatisfecho con su diabetó(ogo?
Ningún Probtema Problemil Problema un Problema J\lIt,cccdentes familiares: no pres0.nta Jntecedentes reconocibles de
problema monor modP.rildo poco >L'rio "er;o l¡,d:I)[ogia psiquiátrica, padre fallecido por un cuadro cardíaco agudo. La
O 1 2 3 4 Il100drc falleció por compliciJcionc~
post-operatorias de litiash biliar.
1IIIIcccdellt(]~ persoflale~: mflnifiesta haber padecido U~ ephodio
16.¿5iente que el control diario de su diabetes consume mucho de su
dl'lm~:.ivo recurrente y sintolll<ltología ansiosa obsesiva concomitante
energia física y mental? r11",dr: hace más de 20 aiio:.;, con tratamientos psicoterapéuticos y
Ningún Problema Problema Problema Ull Problema
p'.j'lllarrnacológlcos. Sus manifestaciones incluyen trastornos del sueiío,
problema menor moderado poco serio serio
I 11111 lkspr.rtares a horóls muy tem priln;:¡s riel dí;}, fatiga permanente, dolores
O 1 2 3 <\

397
3%
:, ll'I~:. Ilr /1''''it,''tJ ~".:I.-(~ t:Ullll., _

1'11 1.1 11111 d V la cintura sin correlato con patología médica detectable y Caso Clínico 2
d 1.1'1 Ilo',I,iCl(!os como densionales». pero que la paciente reconoce co mo
, [1 i 111. i Ikll tes con sus' estados depresivos. Hace tres a¡íos detectan Paciente de sexo mélsculino, 20 aiíos, con diabetes tipo 1 desde hace r.
IlipNglucemia en un examen de rutina l~ detectan hiperglucemia .Y años e hipertensión.
Ili;¡~JJlostican diabetes. prescribiéndosele un plan de ¿llimentaciófl (nunca Antecedentes familiares: abuelo materno díabetico.
tuvo sobre peso) y posteriormente glibenclamida 5 mg/día. Este diagnóstico Antecedentes per!ional~s: soltero. operado de adenoides a los 6 años, sin
ha incrementado su tendencia obsesivJ y tiene un comportamiento permanente otros ilntecedentes de importancia. Trata su diabetes con insulina N.pH
de cumplimiento riguroso de li) diet.l. realizar su rutina física exageradamente (mañan<J y noche) y corriente antes de almuerzo y cena. Cumpl(~',pilrcialmelltlC
y humor depresivo conti nuo. Esto último lo atribuye a su diabetes, ya que su plan de alimentación .Y de ilctividad física; es remiso a la práctica del
conoce y ha averiguado l~~ cilracterísticas de la enfermedad y su pens¡\I11ien­ monitoreo glucémico indicado antes de cada comida.
to se diríge a uno de los componentes típicos del humor depresivo: la Moavo de consulta: acude .J la consulta por indicaclón de su médico d.'
enfermedad y sus consecuencias, fruto de cavilaciones obsesivas. cólbecera presentar un trastorno depresivo. Este cuadro se manifestó 1101(('
Maniriesta además falta de placer en cualquier ilctividad que realice, miedo a aproximadamente u.n año, habiendo sido tratado con antidepresivos tricíclicO';.
estar enferma ante cualquier sí ntoma, lo que ha llevado a que los médícos la V'NO con escasos resultados favomble~.
tilden des.pectivamente de hipocondr'íilca; ti(!nc j!le.rl1i1anente malestar corpmal; Relata qlle el diagnóstico de su diabetes le ha dado «(vuelta ta cabezil», dil'\
habla de su tristeza y hastio por la vida; ·esta irritable y descuidada en su y su p(~nsamíento gira permanentemente alrededor de Su situación rlf'
arreglo personal. Este estado la ha U.evado a restringir su trabajo profesional, minusvaliil. además del sentimiento de culpa respecto de su familia a qujrn.~',
sus vínculos familiares y las relaciones de amistad, induciéndola paulatina­ dice agobii! r con la preparación y gastos de comida.
mente a vivir casi aislada. Sus episodios depres'ivos son más intensos por lél
El rebLo del par.i0nte se centra en la dísminución de la éltenci6n y de [il
maña:na y que además, preguntada, ti'enen carácter ciclico, eSpeCi¡llmente @1iI
ClJIlCcnt.rilCiól1, lo que le dificulta o impide su actividad de estudialllb~
otoño y primavera, aunque. aclara que desde hace casi dos años, este cuadro
11IIivI'lsitario, E-; (Nidente una pérdida de confírHilza en sí mismo y sQntimiéllto';
permanece con muy pocas variaciones. Se ha $olicitado TAe de cerebro.
.k inferioridad, qlll" lo alejan de sus amigos, salidas y rclnciones afecliviJ~.
Motivo de comiu,lta: derivada por su médico de cabecera por plmisten­ In .1tormt'lltilll 1.1'. idf';\'; de inutilidad e incluso culpa, acompailadas de una
cia de ~as manifesta,ciones descri ptas previamente a pesCH del buen control III,r~pécl:iva !;ombnót dl-~l fllturo. Ademas de su régimen aliment<lrio, no tiene
de su diabetes. ,lllI'lit.o y tiene frt'(IJI~lltl'~; ;llteraciones del suerlo, lió pudiendo dormirse o
Di'agnóstiw:Trastorno depresivo recurrente, moderado, con síntomas dl"',perL~ndose J la 1I0che 1lI.J~ de una vez, La depresión del estado de animo
som~tir.os. v,u¡~t e~caSiJlTlente de lIn di;) parZl el otro y no suele responder a cambios
Diagnóstico diferellC'ial~ actualmente con depresióri vascular (Nebes, oIll1iJil,nt.illes, liunque presenta vólriólciones circadianas tipic<J5 como es una
RO) sobreJgregada; trél~torno obsesivo compulsivo. IIII'II!! iil V('~pertina. Frecuente malhumor, irritabilidad, pmoCLlpaciones
Examen físico: peso 58 kg, talla 1,66 m. IMC 21. Pre5ión arterial 110/70 I1i11il1lll'ldríJC<ls y disnea ~;u~pirosa casi permanf>nte. Vn dato importante que
mm Hg. Los exámenes de laboratorio que envía su médico de cabeoera (,1 ',Iilidló' y ¡¡ tener ell cuentLl, e~ la pérdida marcada de léllíbído. El cansancio
muestran HbAlc de 7%, colesterol de lBO mg'%, triglicéridos 120 mg% y ''', 'ixoIql'rado, que apílreec illclu5U tras un esfuerzo mínimo.
orina norm;¡!. lIiIlU"ú';I:ico: Epi';od'io depmsivo moderado.
Conducta, rcr0'Pi!utica: optimizaci6n del tréltamiento antidepresivo tanto 1Ji"II"iht:ico dIferencial: Tra~torno de llns~edad.
farmacológico (amo psicoterapéutico. S¡¡lvo inconvenientes, el sueíio se "//11/1/1' dc: 511 I/IrMico de cabecera: diilbetes pobremente r.ompensilda (l
regulará al mejorarse la ritmopatía depresiva. 1"",,11 di; 1.1 il1ri,icólCil'iíl de in~ulinolerapia que pretende ser intensificada
.comentario: El Trastorno depresivo reCUrfel'1te se caracteriza por episodios \'ilIII 11'1 IOtllÓ] qUl' d paciente lil cumpla. Pobre control glucémico (HbAlc

repetidos de depresión, sin antecedentes de exaltación del estado de '1'1.. ),11111 ·,irpID'. de neUrOp:ltiil periférica (sensitivo-motora), retinopatía
ílnimo o aumento de la vitatidad. Este wadro, y por la ed;:¡d de la pacierlte, (1'I"lililli!¡'I';ILív,¡), VIwlrop;1I:íJ (mir.roalb.m1inuria positiva).
se intensifica con la presencia de enfermedades crónicas médicas, e.spe­ "mlllll (f 1,( '/'{/Iic'!/Itítm Se 'í nici a interve nr,;í ón ~slcotera pé uti ca coadyu vada
cialmeflte aquellas que puedan lesionar el sistema arterial. 1IIIIII,\I.IIIII"1I11111';icofarmacológ.ico.

398 399
_-w _

Seguimiento: 7 meses después de iniciar el tratamiento psico y farmacológico,


el. pacíente manifiesta franca mejoría de su cuadro depresivo con correspon­
diente correlato de adhesión al tmtamiento de su diabetes y mejoría de su
control metabólico.
[amantaría: el episodio depresivo es un cuadro importante en la vida de
".1..1 IHlII[lC<lción es patrocinada
una persona, qlJe ~o invalida müs que la hipertensión o la di¡¡betes. Sin la
intervención terapéutica el paciente permanecerá con una discapacidad en por las <;iguientes empresas:
su vidil personal, social y laboral.
( I.lVI ,,.i ~).A.l.C.

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I ,1111 H, \I( ll"ins Beta S.A.

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I "IV' I NI )1 (Ibk Pha rma Argentina S.A.

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