Marzo 18 de 1994

Ecuador Niega Violación De Soberanía

Mientras que las autoridades ecuatorianas negaron una violación a la soberanía de
Colombia, los 110 presos colombianos recluidos en la cárcel de Tulcán, población
limítrofe de ese país, comenzaron ayer a ser trasladados a otros centros penitenciarios.
La medida fue adoptada luego del frustrado asalto a ese penal por parte de cuatro
hombres el pasado lunes. En el operativo posterior a ese hecho, una docena de Policías
del Ecuador entró a territorio colombiano y dio muerte a uno de los presuntos asaltantes,
según las denuncias de habitantes y funcionarios colombianos.

La mayor parte de la población carcelaria en Tulcán está sindicada de narcotráfico. En

torno al intento de asalto se conocen dos versiones: la primera, que se pretendía atentar
contra la vida de dos reclusos, y la segunda, que era un intento de liberación.

Respecto al caso de la violación de la soberanía del territorio nacional, el cónsul Isaac

Gaviria dijo que las cancillerías de las dos naciones están investigando y que las
relaciones son buenas e inmejorables . La comisión investigadora por Colombia está
encabezada por Gabriel Pizano, de la División de Soberanía Nacional.

Ayer, la Policía de la provincia de El Carchi (Ecuador) negó que sus unidades hayan
violado la soberanía de Colombia y que la muerte del asaltante de la cárcel de Tulcán
obedeció a una ejecución llevada a cabo por sus compinches.

Sin embargo, testigos señalaron que el hombre que tenía una herida en un brazo y
portaba un arma, se refugió en una casa y allí fue asesinado por los uniformados
ecuatorianos.

El comunicado de la Policía del vecino país señala que cuatro sicarios colombianos
lograron ingresar al centro de rehabilitación social de Tulcán, armados de metralletas, con
la intención de liberar a un interno, detenido por narcotráfico, de nacionalidad ecuatoriana.

Al detectar tal situación, el personal que custodia dicho centro de rehabilitación, informó al
comando de Policia Carchi y se inició un operativo al mando del comandante Carlos
Castillo Espin, frustrando de esta manera el objetivo de los sicarios .

Los asaltantes emprendieron la fuga en un vehículo de la Cooperativa Rápido Nacional,

de placas PDP 109 marca Dodge-Aspen, y abrieron fuego. Producto del enfrentamiento
agrega el comunicado abandonaron el vehículo y en su interior se encontraron dos
metralletas mini ingram de fabricación americana calibre 9 milímetros, cuatro
silenciadores, 23 proyectiles 9 milímetros y varias prendas de vestir, una de las cuales se
encontraba manchada con sangre, por lo que se presume que uno de los sicarios se
encontraba herido .

Según el informe de las autoridades ecuatorianas, en coordinación con la Policía de

Ipiales (Nariño) se supo que en territorio colombiano fue encontrado un sicario muerto con
tres impactos en la cabeza y se presume que fue asesinado por sus mismos compañeros
.
Publicación eltiempo.com Sección Información general Fecha de publicación 18 de marzo
de 1994 Autor