Si Vicky Davila, que se supone debería ser imparcial en su condición de
comunicadora social, aunque trabaje en un medio parcializado y gobiernista, inicia diciendo, ¡Ya EstaClaro! Casi como un ¡No hay derecho!, qué más da, que yo utilice un ¡no hay derecho! en mi calidad de colombiano conciente de que, mientras no exista gente idónea en el gobierno, no se generarán transformaciones reales. Apelando al manejo idiomático “Vickydavilesco” hay “otro gallo de pelea”, en reemplazo del “hombre de la ternura” Luis Carlos Restrepo, quien decidió seguir haciendo política pero ahora como jefe del partido de la U. El nuevo gallo nombrado, ¡Ya está claro!, es el economista con posgrados en finanzas y administración, Frank Joseph Pearl, quien fue consultor Asociado de McKinsey & Co donde adquirió experiencia en múltiples sectores de la economía, pero también fue presidente de Valores Bavaria, la misma empresa que hace ya algún tiempo, pero en el primer mandato del mismo presidente Uribe, logró vender su empresita estrella, haciéndola pasar por una fusión, permitiéndole de ese modo, a uno de los tipos más ricos de Colombia y según Forbes, también del mundo, no otorgarle al país los impuestos de la venta de su empresa, aunque para crear nuevas plantas de producción cervecera y embriagar al pueblo, si está dispuesto a todo. Pero Julio Mario, el hombre que prefiere regalarle un edificio a la universidad privada más costosa del país, aunque aclaro que no por eso menos buena, no es el tema de mi comentario de opinión. En cambio, es para mí muy claro que quien ejerza en cualquier cargo del gobierno, debe ser y así ha sido siempre, de entera confianza del mandatario de turno. Por lo mismo, hemos conocido los casos de Noguera, Palacios, Sabas entre otros, todos cubiertos con el mismo manto. Pero por muy de la casa que sea éste economista con postgrado en finanzas y administración, con maestría incluso en Administración de Negocios en el Ivey Schoolof Business de Canadá, no tiene tanto que hacer, cuando de asesorar al presidente en temas de paz, se trata. Pearl es el Alto Comisionado para la Paz y además también Consejero Presidencial para la Reintegración. No se sabe quién es peor, si el Psiquiatra, filósofo y escritor colombiano que paso de ser reconocido como el señor de la ternura, a ocupar el cargo de director del partido de la U para sacar adelante la reelección presidencial, cooptar disidentes de otros partidos, coordinar la campaña de 2010 y diseñar un plan B por si Uribe no se lanza. O el genio de las finanzas y los negocios ocupando un cargo que resulta crucial por estos días de virus porcinos y gestores de paz. ¿Hacia dónde van los caminos de la paz? Esa que tanto añoramos los colombianos… se maneja solamente y de manera muy imprudente, desde la “cosa política”.