21-05-2009

PALABRAS DEL PRESIDENTE DEL PARTIDO JUSTICIALISTA, DR

NÈSTOR KIRCHNER EN CHACABUCO, PROVINCIA DE BUENOS AIRES.

Queridos hermanos y hermanas: me gustaría que en esta asamblea de

hombres y mujeres de la pampa húmeda, de hombres y mujeres jóvenes que
estamos acá le podamos hacer, y les pido un poquito de silencio, las
reflexiones necesarias en la etapa. En primer lugar, quiero traer un fuerte
abrazo y un compromiso, un fuerte abrazo de nuestra compañera Presidenta
Cristina a todos ustedes por el acompañamiento, la ayuda y un compromiso
que me dijo, como dijo Darío y Julián, logramos remontar la situación de
Chacabuco y el Presidenta quiere estar acá, el 5 de agosto, como cuando me
tocó ser Presidente y nunca me voy a olvidar que vine un 5 de agosto a
celebrar el aniversario de este hermoso y querido pueblo para hacer las
inversiones, de las que hablaba Darío, para darle la potencialidad y la fuerza.
¿Qué me dijo la Presidenta? Dijo: “Se está saliendo del infierno, pero quiero ir
el 5 de agosto, cuando cumplan 144 años, a firmar un acta que sea el acta de
impulso definitivo de Chacabuco para ya no sólo salir de la situación definitiva,
sino generar las inversiones que este pueblo de Chacabuco necesita para
consolidarse”. (APLAUSOS).

También, cuando veo vuestros rostros, me recuerda aquellos días, que me tocó
asumir la Presidencia de la Nación, me recuerdo haber venido a Chacabuco,
me recuerdo la situación que tenía la Argentina, cómo estaba la industria, los
empresarios, los productores, recuerdo la situación de quiebra. Siempre digo
que la Plaza de Mayo más triste que me tocó vivir fue la del 26 de mayo, del
año 2003. Me acerqué a la Plaza, estaba atendiendo a dignatarios de otros
países y la gente me agarraba y me decía “hemos perdido la esperanza,
hemos perdido los sueños”; al que no le remataban la casa, había perdido el
dinero en el corralito; al que no le remataban el campo; al que no le remataban
la industria. Habían logrado quebrar y casi poner de rodillas el orgullo y la
dignidad de que la bandera pueda abrazar a todos los argentinos, parecía que
la bandera se había achicado; por el contrario había que volver a envolver a
todos los argentinos con esa bandera para empezar a reconstruir la Patria.

Y me tocó llevar una dura lucha adelante, en la discusión de la deuda externa

privada, por primera vez en la historia, ahorramos 70 mil millones de dólares de
deuda, ahora cuando alguien gobierna para defender los intereses de la
mayoría con aciertos y con errores, para reconstruir la Patria, para reconstruir
la Argentina es imposible tener un millón de amigos, los intereses que uno toca
reaccionan y atacan porque quieren tener siempre sumergido al pueblo, porque
no quieren que el pueblo vuelva a tener la felicidad, la dignidad, la justicia y la
inclusión que debe tener. (APLAUSOS).

Además pagamos al Fondo Monetario Internacional y terminamos con la

imposición de un proyecto político ajeno a la Argentina, ese proyecto que a
nosotros nos hizo quebrar en el 2001, y que hoy con esta crisis internacional
que hay están viviendo ellos la caída del Consenso de Washington y se están
dando cuenta de lo qué es ese modelo financiero que concentró la economía y
que le dio vida a muy poca gente y a muy pocos países, condenando a la
mayoría de las naciones a la pobreza y a la desigualdad.

Por eso, desde acá, yo les quiero contar cuál es la visión del modelo de país
que tenemos; lo digo con la autoridad moral de haber logrado que nuestros
industriales, comerciantes y productores puedan salir de la situación en que
estaban; lo digo con la autoridad moral de haber mantenido un cambio
competitivo colocando más de 10 mil millones de dólares; lo digo con la
autoridad moral de haber subsidiado el combustible para que nuestro campo,
nuestra industria y demás puedan producir; lo digo con la autoridad moral de
haber generado las cosechas más importantes y el nivel de exportaciones más
importantes de la historia; lo digo con la autoridad moral, junto a la Presidenta
actual, de haberle dado los seis años de crecimiento más importantes de la
historia argentina: un 60 por ciento, 43 por el consumo interno y 17 por las
exportaciones; lo digo con la autoridad moral de haber recuperado las
paritarias; lo digo con la autoridad moral de haber dado 15 aumento a los
jubilados; lo digo con la autoridad moral de haber jubilado a un millón 800 mil
personas que habían dejado en el camino, en la década del 90; lo decimos con
la autoridad moral de haber recuperado Correos Argentinos; lo decimos con la
autoridad moral de haber recuperado Aguas Argentinas; lo decimos con la
autoridad moral de haber recuperado el espacio radioeléctrico; lo digo con la
autoridad moral de haber construido, con la actual Presidenta, la mayor
cantidad de reservas que tiene la historia argentina y lo decimos con la
autoridad moral de nuestra Presidenta, que ante esta crisis internacional la
Argentina sigue creciendo y sigue soportando con dignidad y responsabilidad la
paralización de la economía del mundo. (APLAUSOS).

Nuestra Presidenta tiene – y comparto plenamente – cuál es el concepto y la

filosofía del modelo. Nosotros queremos que nuestros productores exporten
materias primas, pero no queremos volver a 1910, cuando la Argentina era el
mayor exportador de materias primas, pero el país estaba en estado de sitio, la
gente con una hambruna y los dirigentes sindicales, nacionales y populares
todos presos porque eran muy poquitos los que podían vivir en esta Argentina y
el resto estaba hambreados y sin trabajos. Nosotros queremos que nuestras
materias primas tengan valor agregado, que tenga trabajo argentino porque
queremos exportar la mayor cantidad de producción primaria con trabajo
argentino, con trabajo de nuestros pibes y de nuestras pibas. No queremos
exportar la materia prima solamente que tenga trabajo extranjero y después
nos importen el trabajo extranjero y dejemos en la calle a los pibes y a las pibas
argentinas que se quedan sin trabajo porque traen el trabajo de afuera.
(APLAUSOS).

Nosotros sabemos y le vamos a abrir los brazos siempre a todos los hombres
de la industria, del comercio y de la producción y no le tenemos miedos a
aquellas patronales rurales, que en vez de dedicarse a defender los intereses
del sector, si lo hubieran hecho hubieran acompañado la 125, se dedican a
hacer política para revivir los enfrentamientos más duros que tuvo la sociedad
argentina. (APLAUSOS).
Por eso a los productores e industriales argentinos la Presidenta los va a seguir
convocando al Consejo Social para construir un modelo que nos contenga a
todos en el marco de la pluralidad, la justicia y la equidad y en el marco de la
distribución del ingreso.

Yo siempre tomo un vaso, les quiero contar una anécdota que tuve cuando era
gobernador de la provincia de Santa Cruz. Me tocó estar en una reunión con el
ministro Cavallo y nos decía: “la única distribución del ingreso que puede
existir, no la puede hacer el Estado, sino hay que esperar que este vaso se
llene y cuando el vaso de llene va a distribuir para los que menos tienen”. Cada
vez que el vaso se iba llenando, se lo tomaban cuatro vivos y la gente no veía
una moneda. Esa era la realidad concreta.

Por eso, nosotros creemos en el Estado presencial, nosotros creemos en el

Estado promotor. Fíjense la decisión que tomó la mujer coraje, como le digo a
la compañera mía de toda mi vida a quien tanto amo y admiro. La decisión
coraje cuando dijo “vamos a terminar con la ignominia de la AFJP que se
quedaron con los fondos de los argentinos, de los jubilados y se los prestan a
tres y cuatro vivos y nunca llega al pueblo argentino”.

Hoy ustedes son dueños de bancos, son dueños de inmobiliarias, son dueños
de empresas siderúrgicas y se enojan cuando el Estado quiere meter un
director y dice que queremos entrometernos en la vida de las empresas
privadas. Bajo ningún aspecto, pero esa platita que las AFJP se la dieron a un
núcleo chiquitito de privilegiados, es del pueblo argentino y la Presidenta la va
a cuidar como se fueran sus propios ahorros.

Nuestra Presidenta recuperó esos fondos en un esquema económico

excelente. El mundo se quedaba por la crisis sin mercado de capitales,
recuperó los fondos, cuida los fondos de los jubilados y pone el excedente para
que tenga rentabilidad no el servicio de unos pocos, sino al servicio de todos
los municipios de toda la República Argentina, de todos los habitantes para que
sirva para incentivar la economía.

Ante el parate internacional, ante el motor del mundo, Estados Unidos el 30 por
ciento del Producto Bruto Interno se paró por la crisis que tiene. Gente viviendo
en carpas, con una situación muy difícil que lamentamos profundamente, la
Presidenta recreó el mercado de capitales y recreó la posibilidad de inversión
en un Plan de Obras Públicas que seguramente Chacabuco y las localidad
cercanas debe ser el más importante de la historia, es un inversión de 111 mil
millones que van a los argentinos y argentinas de toda la patria para ir
construyendo la patria que necesitamos.

También nuestra Presidenta junto a nuestros diputados y senadores nacionales

pusieron la movilidad jubilatoria. Se terminó de mendigar, cada seis meses los
jubilados tienen actualización de sus sueldos, por ley como corresponde para
que no se repita nunca más lo que hizo la Alianza residual que nosotros los
escuchamos agredir y los escuchamos con esa máquina de impedir, que lo
primero que hizo ante el primer problema que tuvo, fue bajarles los sueldos a
los empleados públicos, bajarles los dineros a las provincias y, por supuesto,
bajarle a los más débiles, a nuestros jubilados el 13 por ciento. Esa era la
Alianza que venía a cambiar y esa es la alianza que anda por allí diciendo que
ellos son la república. La República somos todos, pero si queremos seguir
manteniendo la Nación, que por mucho tiempo, hasta que no aprendan la
lección de la historia, por Dios que no vuelvan.

También yo me pregunto, hay algo que siempre nos pasa a los peronistas,
pasó en el ’55, pasó en la década del ’60, y pasa hora. Si nosotros somos tan
malos, ¿por qué nos quieren proscribir, por qué se presentan para que no
podamos ser candidatos por la provincia de Buenos Aires quien les habla,
Massa, Scioli y muchos candidatos más que no son candidaturas testimoniales
sino que corporizan el proyecto de cambio que hay en la Argentina? Nos tienen
miedo, vayamos a las elecciones, que sean las urnas, que el pueblo argentino
decida o nos quieren proscribir de vuelta. (APLAUSOS)

También tengamos buena memoria. Hay otros que se dicen que son
justicialistas disidentes, peronistas disidentes. Yo he militado toda mi vida y juro
con todo respeto porque no me gusta descalificar a nadie ni agredir a nadie
pero me gusta hablar con la verdad y los ojos a la gente, que en mi vida, lo vi
en una unidad básica, en un acto peronista o en mi vida luchar contra la
dictadura al señor De Narváez, nunca lo vi, jamás en mi vida. Lo vi sí
defendiendo las ideas que la derecha neoliberal que llevó ese presidente que
no quiero nombrar en la década del ’90, lamentablemente usando nuestras
banderas para hacer algo totalmente distinto. Usaba el discurso y hacía las
cosas totalmente distintas. Lo vi queriendo ser ministro, vicepresidente, lo vi
con los empresarios que gozaban de esa Argentina del ’90 mientras los
argentinos se quedaban sin trabajo, caían en la pobreza y en la indigencia.

Terminemos con la hipocresía, podrán escribir mucho, podrán decir mucho,

pero para poder asumir la representatividad de este glorioso pueblo argentino y
de este glorioso movimiento, hay que tener una historia de lucha por la
representatividad, de lucha por la igualdad, de lucha por la inclusión, de lucha
por la distribución del ingreso, de estar al frente de las banderas nacionales y
populares, de estar al frente de la banderas de Perón y de Eva Perón, de estar
al frente de la inmortal, al lado de la inmortal Evita acompañando el proceso de
transformación.

Por eso, acá no hay dudas ninguna, lo que está en juego el 28 de junio no es
una candidatura más o una candidatura menos, ténganlo en claro, son dos
modelos de gestión de país absolutamente diferentes.

Por eso yo les pido que cuando estén en la cola para votar se acuerden,
quienes están acá, quienes nos miran por televisión o nos escuchan por radio,
de ese ruido de helicóptero, cuando los que venían a cambiar todo se
escapaban y dejaban solo al pueblo argentino; cuando estén en las colas pibas
y pibes argentinos acuérdense cuando los viejos, vuestros papás y vuestras
mamás, cuántos hogares se quebraron; acuérdense cómo llegamos casi al 30
por ciento de desocupación; ese día cuando estén en la cola acuérdense de la
indigencia y la pobreza, a los niveles que habían llegado; ese día los de gorrito
amarillo, los hermanos y hermanas de la construcción, acuérdense dónde
había quedado la construcción en la Argentina porque se decía que era un
gasto improductivo, casi 450 mil puestos de trabajo se crearon en la
construcción; ese día acuérdense que en la Argentina no había justicia, que
tuvimos que renovar la Corte; acuérdense de memoria, justicia y verdad porque
terminamos con las leyes de Indulto, Punto Final, de Obediencia Debida que
avergonzaban la memoria de los argentinos, del genocidio que cometieron
aquellos que no reararon en nada (APLAUSOS). A nuestros hermanos
industriales les pido ese día cuando estén en la cola que se acuerden de sus
industrias quebradas, de la falta del apoyo nacional, de la falta de apoyo de
políticas nacionales, de la falta de un desarrollo nacional. Claro que falta
mucho, pero cuánto estamos haciendo, cuánto trabajo que generó la industria
nacional. A nuestros productores les pido que se acuerden cómo remataban
sus campos, cómo estaban endeudados con los bancos, cómo no tenían
ninguna posibilidad de recrear su actividad productiva y que se miren, se los
pido con humildad, cómo y dónde llegaron, donde estaban, más allá de que
puedan tener algunas diferencias, discutamos y debatamos entre hermanos las
diferencias, pero vean todo lo que hicimos para recuperar la producción en la
Argentina, recuperar la rentabilidad y recuperar los mercados en el mundo.
Vean cómo le dimos competitividad a la economía, saliendo de ese uno a uno
que defendía y aplaudía la Sociedad Rural cada vez que iba el ex presidente
cuando se hacía la Asamblea Anual, con el uno a uno con el que no tenían
competitividad porque nuestros productos eran muy caros en le mundo. Como
nosotros le dimos competitividad teniendo un dólar competitivo, y colocando
diez mil millones de dólares que ponen todos ustedes para que nuestra
producción tenga competitividad en el esquema. Por eso les pido que tengan
memoria, nadie es perfecto, de diez decisiones que se toman seguramente en
seis nos equivocamos, pero cuántas cosas hicimos, a cuántos rostros les
devolvimos la alegría, a cinco millones de argentinos les devolvimos el trabajo,
a los intelectuales, a los investigadores, la salud. Veo a mis hermanas
enfermeras allí acompañándonos, que nos honran de honor y de
responsabilidad (APLAUSOS) Una salud, que ellas lo saben, nosotros somos
defensores del hospital público, somos defensores de la salud pública, ellas
saben que en la Argentina se quería privatizar todo, hasta la salud, para
obtener rentabilidad a costa de las pobres espaldas de los argentinos y de las
argentinas allá en la década del ´90.

Acá hay dos modelos de gestión distintos, acá hay una Presidenta, hay una
mujer coraje, que le toca una etapa mucho más difícil que la mía. A mí junto a
Daniel me tocó sacar la Argentina del infierno, pero ella, mujer coraje y
argentina, no tiene la suerte que tuve yo de tener un vicepresidente que
acompañe como me acompañó a mí, se la tiene que bancar sola luchando con
todas sus fuerzas (APLAUSOS). Ella repite cotidianamente, es parte de la
intimidad que vivimos constantemente, yo en esta etapa que me toca vivir
quiero que la Argentina recupere la redistribución del ingreso, que la gente siga
recuperando el poder adquisitivo, que nuestros jubilados sigan mejorando, que
todos nuestros pibes puedan ir a las escuelas, de 10 mil becas que dábamos
nosotros nuestra Presidenta coraje las subió a más de 30 mil becas, más las
becas universitarias, más la ampliación del presupuesto educativo al 6 por
ciento del Producto Bruto Interno, más la ampliación del proyecto universitario y
la ley universitaria que tienen que tratar.

Ahí lo vemos a Daniel luchando por repontenciar esta provincia, algún día
todos ustedes van a tener en claro que un gobernador de esa alianza residual,
por esas cuestiones de la política allá en el ´88, regaló 6 puntos de la
coparticipación de la provincia de Buenos Aires perjudicándola enormemente.
Allí está la provincia que tuvo que tomar Daniel, aquella provincia que tuvimos
que ayudar desde el Gobierno Nacional, lo sabe Florencio, lo sabe quien fue
ministro de Economía en ese momento, para que pueda medianamente llevar
sus cuentas adelante. Y Daniel tomó ese presupuesto con el desequilibrio que
lo tomó, y está gobernando con eficiencia y decisión para generar un punto de
inflexión histórica que permita el cambio definitivo y el crecimiento permanente
y paulatino de la provincia de Buenos Aires (APLAUSOS).

Ahí tienen ustedes a dos dirigentes, más todos los que están aquí, pero dos
dirigentes de Chacabuco, Julián y Darío, cuando van a hablar con la
Presidenta, o cuando iban a hablar conmigo, o van a hablar con Florencio o
con cualquier ministro, o cuando hablábamos en aquellos tiempos cuando me
tocó el honor de ser presidente de los argentinos, no iban a buscar prebendas
para ellos, iban a buscar soluciones para Chacabuco, dos dirigentes
ejemplares que representan dignamente a su pueblo.

Para terminar ustedes se preguntarán por qué voy de primer diputado nacional
de la provincia de Buenos Aires, y se los quiero contar también. En primer lugar
porque soy un militante de toda la vida y me debo a aquellos que me honraron
siendo intendente, gobernador y presidente de la República; también porque
con esta provincia que tanto nos ayudó y esta Patria que tanto nos honró, el
lugar que los amigos, el pueblo, los compañeros y las compañeras me dicen
que tengo que ir, sea de concejal o diputado nacional, en este caso diputado
nacional para defender desde la cámara con todas mis fuerzas este proyecto
transformador de Patria, lo hago con un inmenso honor. Se los digo
sinceramente, me honró ser presidente, me honró tener la responsabilidad de
conducir la Argentina, pero también me va a honrar ser una de las voces que
se levantan desde la profundidad de la Patria para consolidar este proyecto que
transforme definitivamente la Argentina. Voy a poner lo que tengo, voy a poner
todas mis fuerzas para que esta Patria siga mejorando, voy a poner mi amor,
voy a poner mis sueños por la Patria y por la provincia de Buenos Aires, con
toda la fuerza y con toda la decisión (APLAUSOS)

Por eso desde Chacabuco al país, miren los rostros de estos miles y miles de
argentinos que están aquí, son rostros de amor, son rostros de paz, son rostros
que quieren trabajar y que la Argentina mejore, son rostros de la mano tendida,
son rostro del abrazo, de cariño y el beso. A cada gesto de provocación, a cada
gesto de autoritarismo, a cada gesto de cultura fascista nosotros pongamos la
otra mejilla, pensemos en Dios porque los argentinos nos necesitan con
grandeza, con generosidad, con capacidad de dar amor y generar el puente de
plata para construir la Argentina que todos soñamos.
Muchas gracias Chacabuco, muchas gracias Darío, muchas gracias Julián,
muchísimas gracias por esta asamblea de amor y de convivencia.