Sei sulla pagina 1di 7

Marco Teórico

El movimiento moderno en Chile se caracterizó en sus comienzos por una ambigüedad entre
las reminiscencias clásicas y las nuevas teorías surgidas. Dado que aún los mandantes y las
formalidades municipales eran reticentes a aceptar en su totalidad los cánones de la
modernidad, al comienzo y hasta la mitad del siglo XX muchos edificios modernos aún
mantenían ornamentos y tipologías neoclásicas o neobarrocas, como por ejemplo el
tratamiento de las fachadas de los edificios en el casco histórico.

La fachada continua con zócalo, fuste y remate es una de las tipologías que caracterizaron a
las manzanas del centro de Santiago desde la colonia. Por lo que los arquitectos modernos
tuvieron que adaptarse a esta preexistencia urbana, limitando en parte la expresión modernista
que exigía un tratamiento diferente para cada cara del proyecto. Otro punto de ambigüedad fue
la simetría en algunos de los proyectos modernos, especialmente en las fachadas, que
debieron adecuarse a las manzanas que pretendían modernizar. Esto en parte por la sociedad
que aún mantenía cierto arraigo hacia lo tradicional.

Varios factores contribuyeron a la masificación de la arquitectura moderna, como la creación de


la primera fábrica de cemento en 1909 (Lo que terminó con la dependencia de las
importaciones desde Estados Unidos) y la posterior masificación de las hormigoneras a partir
de 1930(2), que junto al acero (hormigón armado) son los materiales fundamentales en la
construcción de la arquitectura moderna. “En una conferencia dictada por Víctor Auclair, en la
Universidad Católica en 1912, se difundió el hormigón armado. Con este material -la
arquitectura de solo artística se trocó en artístico-científica; la lógica se puso al servicio del
arte-. Las características de -resistencia a las fuerzas dinámicas, insonoridad, estabilidad,
duración indefinida, incombustibilidad-, y su capacidad antisísmica, marcaron la dirección en
que impactó al proyecto arquitectónico. Como antes el fierro y el acero, el hormigón armado
agregó un nuevo elemento de conflicto al dominio estético que ejercían los estilos sobre la
1
forma.”

Por otro lado los terremotos del 1908, 1928 y 1942 en Valparaíso, Talca y Chillán
respectivamente posibilitaron que los arquitectos jóvenes posteriores a la reforma educacional
de pensamiento moderno tuvieran un espacio donde construir una arquitectura acorde a esta
nueva tendencia. También influyó la contratación por parte del gobierno de Chile del arquitecto
y urbanista austriaco Karl Brünner en 1930; para introducir la enseñanza del urbanismo en el
país y generar un nuevo plan urbano en el centro de santiago. En este plan se regulan los
conventillos e impulsan la descomposición de la manzana mediante la introducción de calles y
espacios libres interiores en los terrenos para así densificar con altura donde la actividad
residencial colectiva comparta sus usos con espacios destinados a comercio y oficinas.

Este tipo de sistema constructivo junto a la nueva enseñanza permitió que en las nuevas obras
se implementaran los componentes que dan cuenta de Arquitectura Moderna, en la cual la
funcionalidad es lo predominante. Elementos como la rampa, la ventana corrida y la tipología
peineta entre otros se hallan transformado en símbolos reconocibles del traspaso de una
arquitectura clásica a una moderna.

La rampa fue un elemento ampliamente difundido por el movimiento moderno dado que la
función de conectar diversos espacios en lo vertical no presenta restricciones como en una
escalera, materializando el recorrido continuo y expedito.

1 AUCLAIR, Víctor: “Ensayo de Cronología del Concreto armado en Chile a Principios del siglo 20”. Blog “Red

Franco-Chilena del Patrimonio Cultural”. 2009.

3
Los modernos como Le Corbusier comenzaron a utilizarla en espacios exteriores conectando
terrazas debido a la necesidad de grandes superficies para su colocación. Para luego incluirlas
en los interiores. El hecho de que en Chile la escalera haya seguido predominando se debe a
un hecho de que la rampa requiere más espacio para poder ser construida, pero esto no quita
el hecho de que es un elemento que cumple su función completamente.

Otro de los principios del movimiento moderno fue la maximización de la luz natural y la
ventilación en las construcciones para que así los interiores fueran más higienizados. Esto lo
lograron con el uso de la ventana corrida, que proporciona mucha más luz y aparte enmarca el
paisaje con amplitud, permitiendo la proyección del espacio interior a su exterior.

Otro método fue el de la tipología peineta, en cual se disponen los cuerpos de un grupo de
edificios alternados con patios interiores de manera que la mayor cantidad de recintos tengan
acceso a la luz y ventilación natural.

4
Discusión bibliográfica

Para esta discusión bibliográfica se dispuso del seminario de investigación “La rampa, un
elemento moderno en un período de ambigüedad en Chile“, de Claudia Román. En éste se
elige la obra de Teatinos 666, dado que aquí la rampa tiene un rol protagónico, y se hace una
comparación entre esta rampa y las rampas del movimiento moderno. Además, se estudia el
diálogo que se establece entre la rampa y la tipología de peineta (barra); tipología que
comenzaba a aparecer en Santiago.

Para el desarrollo del trabajo, se tomarán tres aspectos tocados en este seminario: la tipología
peineta, simetría y luz en la obra. Los cuales a su vez están relacionados entre sí.

La tipología peineta originalmente consta de dos o más bloques, separados por patios, y
conectados entre sí a través de una circulación lateral. De este modo, tanto lugares de
estancia como de recorridos son iluminados. Según la definición de José Rosas “edificio barra
corresponde a un volumen dispuesto como franja paralela a la calle, que se desarrolla en
2
predios de mayores dimensiones que el edificio compacto” . El arquitecto del edificio usa esta
tipología pero con una variación: la circulación pasa por el centro del edificio, generando una
doble crujía. Según Claudia Román “esta modificación acerca a la obra a un pensamiento
clásico”, ya que genera una simetría frontal. No quedando clara del todo la razón de esta
variación.

Además de la simetría en la totalidad de la obra, como resultado del uso de la tipología peineta
doble, se puede advertir una simetría en la rampa considerada de forma aislada. Le Corbusier
y otros exponentes de la modernidad, en general se caracterizaron por utilizar rampas de dos
tramos (con sentidos opuestos), para pasar de un nivel a otro; generando así una rampa
asimétrica. En la rampa de teatinos, en cambio, aparece un tramo central y dos laterales.
Según Román “la simetría, junto con una ornamentación presente en toda la longitud de la
rampa, marcando los bordes, hacen que la rampa tenga un carácter clásico.” De esta manera,
pareciera ser que asocia la simetría a una búsqueda de lo clásico, más que a un resultado;
alternativa que, al igual que la simetría en la totalidad de la obra, será tratada en el desarrollo.

En cuanto a la luz, Román, expone que la intención de iluminar la rampa es totalmente explícita
en la obra. La mayoría de los edificios procuran iluminar los departamentos, relegando los
recorridos y espacios comunes a las zonas carentes de luz. En una progresión desde la calle
hacia el fondo del predio, el primer trecho de la circulación, “tiene una directa relación con el
acceso que se presenta desde la calle con una doble altura que se mantiene en el hall de
3
recepción hasta la rampa” . En un segundo intervalo, la circulación en forma de rampa,
despliega una ventana corrida de vidrios traslúcidos, que permite iluminar el recorrido sin
permitir a la vista fugarse hacia el exterior; de modo de constituir y mantener el continuo y
rectilíneo recorrido.

Por último, terminada la rampa, se llega al tramo horizontal de la circulación, que es iluminada
y permite, a diferencia del tramo de la rampa, mirar la ciudad, pues las ventanas son
transparentes.

2 ROSAS Vera José: “Manzana y tipo edificatorio en transformación: Las arquitecturas de las manzanas
céntricas. Manzanas con edificación mixta. Mapa.

3 ROMAN, Claudia: “La Rampa; un elemento moderno en un período de ambigüedad en Chile”. Seminario de

investigación. Santiago, Chile. 1996.

5
Objetivos:

Problema general:

Identificar las problemáticas respecto a la inserción del edificio Teatinos 666 en el contexto
actual, e identificar los descalces y ajustes entre obra y lugar.

Objetivos específicos:

1) Identificar los elementos formales y su trasfondo teórico, que buscan poner en


relación la obra con su contexto.
2) Identificar los cambios actuales producidos en el contexto.

6
Hipótesis:

La obra fue construida a partir de los requisitos municipales del período y los objetivos
proyectuales del arquitecto. Actualmente, lo primero ha provocado un descalce en el sentido
contexto-obra, mientras que lo segundo, a pesar de no haber sido necesariamente pensados
en relación a este futuro, ha hecho que el edificio continúe manteniendo sus características en
el sentido obra-contexto.

7
Desarrollo:

Esta obra fue proyectada y construida en un período de ambigüedad clásica-moderna; hecho


que queda reflejado en el mismo edificio. Por un lado, presenta una fachada continua, zócalo,
fuste, y remate, ornamentos clásicos (hall de entrada principalmente), y simetría. Por otra parte,
tiene una tipología moderna, con presencia de ventana corrida y rampa (VER IMAGEN 1, 2 Y
3). Todas estas características tienen una repercusión en la relación de la obra con su contexto
actual. A continuación se intenta discernir entre las características que producen un descalce y
las que no lo hacen, cuál es el origen de éstas, y la relación que hay entre el supuesto origen y
el descalce.

Retomando el primer tema de la discusión bibliográfica, interesa analizar si la simetría de la


obra (la variación de la tipología peineta) se debe a una reminiscencia clásica o posee otro
origen. Advirtiendo las dimensiones del predio a construir, y de los metros cuadrados exigidos
por el programa, se identifica una razón que trasciende la mera reminiscencia clásica, para
llevar a cabo un cambio de forma. Observando un esquema (VER IMAGEN 5) de la posible
distribución de los departamentos usando la tipología original, se advierte un espacio
inhabitable (del doble de largo que los existentes, pero con la mitad de su anchura). De modo
que el arquitecto, para no abandonar esta tipología, optó por duplicarla, espejándola y
obteniendo esta manera una simetría en el plano horizontal. Esta decisión de proyecto, que
guarda directa relación con el predio, genera una correspondencia particular entre el edificio y
el contexto próximo del edificio. El generar patios a ambos costados de la circulación brinda al
edificio dos fuentes de luz natural, de modo que, la posible “desaparición” de estas fuentes sólo
podría darse por la construcción en altura en ambos lindes del predio. De esta manera, la
tipología utilizada por el arquitecto en este edificio, es menos susceptible a los cambios de
contexto, que las otras tipología utilizados en aquellos años.

En cuanto a la simetría de la rampa, también se entiende como una búsqueda intencionada del
arquitecto, y no como una reminiscencia clásica, como menciona Claudia Román. Hay una
continuidad en con la rampa, desde la entrada del edificio hasta el extremo opuesto, siguiendo
una línea recta, y generando una continuidad visual y física (dada por pendientes constantes, o
pequeñas variaciones, inferiores a 10%). Dicha continuidad no habría sido posible si se
hubiese utilizado la rampa asimétrica (VER IMAGEN 4).

Dado que la planta del edificio es simétrica, por las razones expuestas previamente, la rampa
necesariamente debía de tener un tramo central y dos en los costados, para establecer así
este diálogo continuo con el resto del edificio.

Continuando con los objetivos proyectuales del arquitecto, cabe mencionar el tema de la luz y
las vistas, relacionado esto no sólo a la tipología, sino también a las decisiones tomadas en
cuanto al tipo de ventanas que hay en las distintas instancias del recorrido. Al advertir que en
una parte del recorrido es posible la vista hacia el exterior (sector “Corredor”, VER IMAGEN 2)
y en otro no (sector “Rampa”, VER IMAGEN 2), entra la duda del motivo de esta diferenciación;
¿tendrá alguna razón formal o será algo casual? Podemos aproximarnos a la respuesta, pues
identificamos que la decisión de diferenciar las ventanas (translúcidas y transparentes) hay una
relación directa con el contexto del período. Cuando el edificio fue construido la fachada
continua era la manera de configurar las manzanas, de modo que, la edificación emplaza
desde el borde que limita con la calle, y el patio es una resultante que queda ubicado al fondo
del predio. Por tanto, el arquitecto seguramente se preocupó de que la vista con más
probabilidad de ser anulada por alguna obra colindante o cercana, fuese desde sus inicios
olvidada, rescatándose únicamente la luz como concepto fundamental, de manera de así poder
tener dominio sobre la totalidad de la obra, y no depender del contexto. En cambio, el resto de
las ventanas (transparentes), se ubican en un lugar donde es más probable mantener la vista,
dado que tienen vistas hacia los patios traseros de los edificios colindantes. Este es el motivo

8
por el cual los principios que movieron y guiaron el proyecto de Teatinos 666 no han sido
modificados.

Además de las decisiones particulares del arquitecto, las condiciones del período exigían que
existiera una fachada continua. El arquitecto no sólo se preocupó de que esto fuera cumplido,
sino además de hacerlo de manera que la fachada tuviera alguna relación formal con los
edificios de la época, por lo que el edificio se compone de un zócalo, fuste y remate, al igual
que los edificios clásicos. Estos aspectos han provocado un descalce en el presente donde ya
no existen estas ordenanzas.

Potrebbero piacerti anche