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Introduccion
En relación a los aspectos epidemiológicos ligados al consumo de sustancias
gene-psico-neuro-socio-toxicas (Kalina E. 2008) debemos señalar que el
control sobre las drogas tiene su origen en la intención de proteger el bienestar
humano, especialmente cuando en la década de los ’50 la comunidad
internacional se interesa por el impacto masivo del consumo de drogas en la
salud pública por lo que comenzó a prohibir una serie de sustancias y a
establecer medidas para eliminar su producción, distribución y consumo. Tanto
en el primer tratado de control de drogas de la ONU, la Convención Única de
1961 con las listas de narcóticos, luego la Convención de Sustancias
Psicotrópicas de 1971, posteriormente la Convención contra el Tráfico ilícito de
1988 con listas de precursores y más recientemente la Convención Marco
sobre Control de Tabaco de la OMS de 2003, todas hacen referencia al interés
por la salud pública. (Jelsma M. 2008)
Hay estudios actuales (Johnston L. et al 2008) que muestran que dentro del
contexto de la legislación represiva en la población de adolescentes
estadounidenses la tendencia es a una gradual y sostenida declinación en el
consumo de drogas estimulantes (anfetaminas, metanfetaminas, cocaína y
crack), con una estabilización en el consumo de marihuana, LSD, PCP y otros
alucinógenos; mientras que toma relevancia una fuerte tendencia al crecimiento
en el consumo de sustancias como heroína y otros narcoticos como oxycontin y
vicodin así como de las llamadas drogas de “prescripción” (tranquilizantes y
sedantes, incluyendo barbitúricos) y las llamadas “club drugs” como ketamina,
rohypnol, and GHB.
En un estudio (Reinarman C. 2008) que compara las modalidades y
características del uso de drogas en la población de usuarios de San
Francisco y Amsterdan se evidencia la poca jerarquía que ellos refieren a
las cuestiones referidas a la penalización a la hora de decidir consumir
drogas. El estudio explora la percepción y las practicas de los usuarios de
drogas en contextos contrapuestos como son Amsterdam, donde se puede
consumir marihuana en locales habilitados, y San Francisco donde se debe
recurrir a los traficantes o al cultivo domestico. La investigación concluye en
que las medidas represivas para aumentar el precio de las drogas o
disminuir su disponibilidad no han influido suficientemente para
controlar el consumo mientras que la penalización se asocia con mayores
riesgo de encarcelamiento aunque esto no aparece como impedimento
para el acceso y uso de drogas en los consumidores.
Los diferentes estudios señalan que por estos motivos debemos referenciarnos
en los antecedentes y experiencias sistemáticas de aquellos países europeos
que disminuyeron las penalizaciones por la tenencia de drogas para consumo
personal transformando las sanciones en cuestiones de índole administrativa
(excepo cuando se transgredan las leyes de protección ciudadanas, es decir en
los casos que el consumo se realiza en lugares públicos o por fuera de la
esfera privada). (Galdós J. 2007). En este orden de cosas España, Italia,
Portugal y Luxemburgo no penalizan la tenencia para uso personal mientras
que en Holanda, Alemania y la República Checa existen tribunales que
sancionan con multas administrativas si la cantidad es pequeña y para
consumo personal. Existen variantes sobre los criterios para definir “cuánto”
corresponde legalmente para “consumo personal”, siendo muy diferentes
dentro de la Union Europea ya que en Portugal se entiende como la cantidad
promedio para el consumo individual durante un período de diez días, en
Austria se penaliza con prisión a partir de los 15 grs. de cocaína o 3 grs. de
heroína y en Finlandia las cantidades no punibles son hasta 1 gramo de
heroína o 1,5 gramos de cocaína.
En relación a la cannabis vemos que, específicamente, en algunos países
como Holanda, Suiza, Bélgica, Luxemburgo, Portugal, Irlanda y Reino Unido se
han producido cambios en las leyes para despenalizar o descriminalizar su
posesión en cantidades pequeñas para consumo personal, siendo Holanda,
desde mediados de la década de los setenta, el ejemplo más conocido por
permitir la venta a mayores de edad de cantidades de hasta 5 grs. de cannabis
en los llamados “coffee shops”. (Jelsma M. 2008). Actualmente en la mayoría
de los países europeos las infracciones por tenencia de cantidades pequeñas
de cannabis (hasta 30 g) no se penalizan o solo se imponen sanciones
administrativas.
También existen estudios que muestran que el inicio precoz del consumo de
cocaína puede impactar incrementando la morbimortalidad general con
aumento de las muertes relacionadas con drogas así como de trastornos
psiquiátricos, especialmente impactando, con marcados incrementos de los
trastornos sociopaticos, en la población juvenil. (Sirvent Ruiz C. 2007)
Otros estudios evidencian que un número muy importante de jóvenes e incluso
adolescentes dentro de la UE consumen frecuentemente alcohol, tabaco,
cannabis, cocaína y drogas de síntesis simultáneamente conformando un
fenómeno que en los últimos años experimenta un profundo proceso de
transformación vinculado a la cultura del ocio y caracterizándose por el
policonsumo dentro de contextos de diversión, a diferencia de lo que sucedía
en los años 80 donde el consumo de drogas, fundamentalmente de heroína,
estaba asociado a la marginalidad y a la delincuencia. Progresivamente la
heroína ha sido sustituida por cannabis, cocaína y éxtasis, combinadas entre
sí o mezcladas con alcohol y tabaco. Estos cambios en las tendencias hacia el
policonsumo de sustancias se acompaña además de otros cambios como ser
la precocidad del inicio en el consumo de jóvenes perfectamente integrados en
la sociedad y que consumen con fines recreativos y socializantes en forma
habitual y sin medir los riesgos aunque los reconozcan. (Guía sobre drogas
2007)
Los estudios muestran que en la UE la preocupación de las autoridades
políticas y sanitarias se ha incrementado ante la aparición en los últimos
años del nuevo perfil de los usuarios “coca-ol” (consumidores de
combinaciones de cocaína y alcohol) que tanto como el de los
consumidores de crack van en aumento, ocupando el lugar que antes
ocuparon los heroinómanos. (Tomás Dols S. 2007)
Así también existen evidencias de que dentro de este contexto de
despenalización que caracteriza el entorno europeo, y aunque existan
diferencias significativas entre países, se registran cifras persistentes de entre
7000 a 8000 muertes anuales provocadas por el consumo de drogas y dentro
de estas cifras el 80 % de las sobredosis mortales están asociadas al consumo
de opiáceos ya que en algunos países de la Union Europea se ha
incrementado hasta el 40% la cantidad de jóvenes menores de 25 años que se
inyectan drogas. El siguiente cuadro muestra la proporción de jóvenes y
nuevos consumidores de drogas por vía parenteral en la UE:
(Observatorio Europeo 2008)
Referencias
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and futur. Oficina de Publicaciones Oficiales de las Comunidades Europeas.
-IREFREA (2008) Red de profesionales fundada en 1988, con sede en distintos países
europeos, que se interesa por la prevención y la investigación sobre problemas de
drogas y de otros tipos en la infancia y la adolescencia. http://www.irefrea.org/
-Jelsma M. (2008) “El estado actual del debate sobre políticas de drogas. Tendencias
de la última década en la Unión Europea y las Naciones Unidas”. Texto de apoyo para
la Primera Reunión de la Comisión Latinoamericana sobre Drogas y Democracia.
http://drogasydemocracia.org/files/2008/06/martin_jelsma_espanol.pdf
-Morávek J. (2008) “Problem Drug Use, Marijuana, and European Projects: How
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-NIDA (2008) Monitoring the Future, University of Michigan’s Institute for Social
Research. http://www.drugabuse.gov/Newsroom/08/MTF2008Drug.pdf
-Small, Kerr, Charette, Schechter y Spittal, (2006). Impacts of intensified police activity
on injection drug users: Evidence from an ethnographic investigation
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http://www.journals.elsevierhealth.com/periodicals/drupol/article/PIIS095539590500196
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-Tomás Dols S. (2007) “El problema de las drogas ayer y ahora” Revista Española de
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-Volkow N. (2008) Drugs, brain and behavior. The science of adicttion. NIDA
http://www.nida.nih.gov/scienceofaddiction/sciofaddiction.pdf D RUGS, BRAINS,
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