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Marx, el musical
Josep Maria Ruiz Simon
Que en paz
descansen
L
o explica el Sócrates de Platón en el Teete-
to: Tales, mirando los astros, cayó en un
pozo, por lo que se rió de él una muchacha
tracia que se burló de su preocupación por
conocer las cosas del cielo, cuando ni siquiera se da-
ba cuenta de lo que tenía ante sus narices y bajo sus
pies. Y, tras narrar esta anécdota, hace explícita su
moraleja: la misma burla vale para todos aquellos
que se introducen en la filosofía. Desde que Platón
hizo circular esta historia, la caída de Tales, el proto-
filósofo, ha servido para ilustrar la presunta incom-
patibilidad de la filosofía con lo práctico. Pero no
debería olvidarse que aquel que la cuenta es Sócra-
tes, un filósofo conocido por su ironía. Y que quien
se la hace contar, Platón, otro filósofo, llegó a pen-
sar que sus enseñanzas podían ser útiles para el
buen gobierno de las ciudades. La anécdota de Ta-
les esconde en su interior otra historia: la de la multi-
tud que, al oír la estentórea carcajada, se vuelve
complacida para ver a la jocosa tracia y, al hacerlo,
tropieza y cae de cuatro patas en el lugar común,
despertando así la risa del propio Sócrates.
Durante dos milenios y medio, la risa socrática ha
convivido con la de la muchacha tracia y no han fal-
ARCHIVO
tado voluntarios para hacerse cargo de la defensa de
Imagen de una representación musical de acento maoísta los filósofos contra la acusación de inutilidad que
suele lanzárseles. Hace medio siglo, Alexandre Kojè-
ISIDRE AMBRÓS nes y bailes parece una apuesta dan y asesor del mencionado pro- ve se entretuvo con ello mientras daba respuesta a
Pekín. Corresponsal aventurada. yecto. otra cuestión. E identificó tres hechos diferenciales
El equipo que prepara la adapta- La idea de sus promotores es que hacían de los filósofos individuos más capaces
De cuadratura del círculo se po- ción de la obra se muestra, sin em- convertir el denso tratado de polí- que los profanos
dría definir el proyecto del gerente bargo, optimista. Opinan que el tra- tica económica en un musical al cuando de lo que se
general del Centro de Artes Dramá-
ticas de Shanghai, Yang Shaolin.
bajo del filósofo alemán es tan rele-
vante hoy como en los turbulentos
estilo de los que se representan en
el Broadway neoyorquino. Así lo
Los filósofos fueron trataba era de gober-
nar o de aconsejar a
Una compañía de teatro china pre- tiempos de la década de 1860. “El afirma el director de la obra, He indispensables quienes lo hacían.
para la adaptación y conversión de
El capital, la obra emblemática de
espectáculo ayudará a la gente de
la calle a comprender por qué se
Nian, que dice que recordará “a los
espectáculos de Broadway y Las
en tiempos En primer lugar, el
filósofo era más ex-
Karl Marx, en un musical al estilo ha producido la crisis financiera”, Vegas”, según explicó al periódi- de mudanza perto que el profano
Broadway, que se estrenará en explica Zhang Jun, profesor de co chino Wen Hui Bao. Precisó, en el arte de la dia-
Shanghai, la capital financiera de Economía de la Universidad de Fu- no obstante, que “no se trivializará léctica, lo que le per-
China, el próximo año 2010. el contenido de El ca- mitía identificar las insuficiencias de la argumenta-
Se trata de una iniciativa valien- A escena. El capital, pital”. ción de los profanos y, gracias a ello, hacer valer me-
te y oportunista a la vez. En unos de Marx, adquirirá La adaptación está jor sus propios argumentos y refutar las objeciones
tiempos en que la crisis financiera ahora ritmo de ambientada en una de los demás. En segundo lugar, el propio arte de la
internacional cuestiona la evolu- musical empresa y la evolu- dialéctica permitía al filósofo desprenderse de los
ción del capitalismo y ha devuel- ción de sus trabajado- prejuicios en un grado superior al que suele estar al
to a la actualidad las teorías de res. He explica que, al principio, alcance de los profanos, lo que le capacitaba para
Karl Marx, un grupo de em- los trabajadores se dan cuenta abrirse mejor a la realidad y depender menos de la
prendedores chinos pretende de que su jefe los explota y co- manera en que la hacen imaginar los tópicos domi-
hacer negocio con la obra fun- mienzan a comprender la teo- nantes en cada momento. En tercer lugar, esta aper-
damental del autor del Mani- ría de la plusvalía. Pero lejos tura a la realidad le hacía más próximo a lo concreto
fiesto comunista. de unirse, tal como Marx pro- que al profano, que, aunque se reía de las abstraccio-
La idea es arriesgada. En puso en el Manifiesto comu- nes de los filósofos, caía en ellas y en su irrealidad
China no existe tradición de nista, algunos siguen traba- sin darse cuenta. Concluía Kojève que estas tres
musicales modernos. Obras jando como antes, otros se re- competencias habían hecho que los filósofos fueran
de éxito como ¡Mamma mia! belan y el resto recurre a la prescindibles cuando, en periodos de continuidad,
han pasado fugazmente por negociación colectiva. bastaba con la aplicación inconsciente de los prejui-
los auditorios del gigante asiá- El estreno esta previsto pa- cios generalmente admitidos. Pero que los hacía in-
tico. El público de más edad ra el año 2010 en Shanghai y, dispensables en tiempos de mudanza, cuando había
no está acostumbrado a este ti- según el gerente general del que acometer reformas estructurales o algún tipo u
po de espectáculos y el más jo- Centro de Artes Dramáticas de otro de revolución. Lo decía en pasado porque, por
ven lo desconoce, prefiere los Shanghai, Yang Shaolin, “la obra aquel entonces, los filósofos ya se habían extingui-
conciertos musicales o ir al cine. incluirá canciones, baile, una ban- do, según Kojève, de la faz de la Tierra.
Ante tales perspectivas, la repre- da en vivo, animación y nuevos me-
sentación de El capital con cancio- dios de comunicación”.c
El Roto y Ari Puello, dos ción del pintor alemán Grosz (fe-
roz contra el hedonismo de una
Alemania sobre la que se cernía
miéramos que nos llamasen atrevi-
dos, lo compararíamos de buena
gana a esos juegos de manos sor-
cotidiana muchas veces inconfe-
sable por el silencio y el miedo”.
La chica explica: “Llego a casa