Sei sulla pagina 1di 14

+ La situacin en que se recitaba este Salmo es idntica a la que se describe a propsito del Salmo 7: un inocente -acusado y perseguido injustamenteexpone

su caso al Seor en demanda de justicia. + La splica se alterna con las declaraciones de inocencia (vs. 3-5) y con una descripcin de la maldad de sus perseguidores (vs. 10-12).

Seor, escucha mi apelacin

+ En el versculo final, el salmista manifiesta su certeza de que alcanzar el favor divino.

1. CON ISRAEL
Esta reaccin del hombre perseguido que se "refugia en el templo" es admirable. Las sociedades antiguas consideraban los santuarios, "asilos inviolables": Dios, defensor y fiador de la justicia. Cuando se tiene conciencia de ser inocente, no es acaso normal que se haga un llamado al juicio de Dios? "Pronuncia la sentencia, Seor, T, T que sabes la verdad!".

2. CON JESS
Hay palabras de este salmo que solamente Jess pudo pronunciar con toda verdad. En su pasin El era realmente "el inocente injustamente acusado". "T has penetrado mis pensamientos; de noche has venido a vigilarme; me has sometido a pruebas de fuego y no has encontrado maldad en m... He seguido firme en tus caminos, jams me he apartado de ellos... De los malvados que me atacan, de los enemigos mortales que me rodean, lbrame. Por tu justicia, ver tu rostro: con verme ante Ti cuando despierte quedar satisfecho".

3. CON NUESTRO TIEMPO


Si nada de este salmo nos concierne, por qu no lo recitamos en nombre de aquellos que padecen la injusticia?; son tantos por desgracia. Seor, oye la justicia! Escucha la queja de aquellos que sufren!

Seor, escucha mi apelacin atiende a mis clamores, presta odo a mi splica, que en mis labios no hay engao: emane de ti la sentencia, miren tus ojos la rectitud.

Aunque sondees mi corazn, visitndolo de noche, aunque me pruebes al fuego, no encontrars malicia en m.

Mi boca no ha faltado como suelen los hombres; segn tus mandatos, yo me he mantenido en la senda establecida. Mis pies estuvieron firmes en tus caminos, y no vacilaron mis pasos.

Yo te invoco porque t me respondes, Dios mo; inclina el odo y escucha mis palabras. Muestra las maravillas de tu misericordia, t que salvas de los adversarios a quien se refugia a tu derecha.

Gurdame como a las nias de tus ojos, a la sombra de tus alas escndeme de los malvados que me asaltan, del enemigo mortal que me cerca.

Han cerrado sus entraas y hablan con boca arrogante; ya me rodean sus pasos, se hacen guios para derribarme, como un len vido de presa, como un cachorro agazapado en su escondrijo.

Levntate, Seor, hazle frente, doblgalo, que tu espada me libre del malvado, y tu mano, Seor, de los mortales; mortales de este mundo: sea su lote esta vida; de tu despensa les llenars el vientre, se saciarn sus hijos y dejarn a sus pequeos lo que sobra.

Pero yo con mi apelacin vengo a tu presencia, y al despertar me saciar de tu semblante.

Mustrame las maravillas de tu misericordia!

Mustrame,

Seor. Tus obras son patentes, pero yo soy ciego y olvidadizo, y necesito que me las vuelvas a mostrar, que me las recuerdes, que me las hagas reales. Tu misericordia es tu amor, y si yo vivo es porque t me amas. Cada palabra de tus escrituras y cada instante de mi existencia es un mensaje de amor que me envas en cuidado constante de mi efmera vida. Y tu misericordia es tambin tu perdn cuando yo te fallo y te vuelvo a fallar, y t me acoges una y otra vez con incansable piedad. Slo tengo que aprender a reconocer tu sello en mi vida para entender tus maravillas.

la que entiendo como mayor maravilla de tu misericordia es la confianza que me das de poder aparecer ante ti con la frente erguida y el corazn tranquilo. Yo nunca hubiera osado pronunciar las palabras que hoy pones t en mis labios en este Salmo: Aunque sondees mi corazn visitndolo de noche, aunque me pruebes al fuego, no encontrars malicia en m. Es verdad que no deseo hacer el mal, pero tambin es bien verdad que el mal anida en m y hago sufrir a los dems y te entristezco a ti, y t lo sabes muy bien y te dueles de mi dolor.

Ahora

puedo acabar el Salmo con confianza: Con mi apelacin vengo a tu presencia, y al despertar me saciar de tu semblante.

Protgenos, Seor Jess, que nos refugiamos en ti, y lleva a


plenitud en nosotros tu designio de vida y de salvacin; concdenos que, iluminados con el gozo de tu resurreccin, encontremos, un da, en tu presencia, con todos los santos, la alegra perpetua, por los siglos de los siglos. Amn

Potrebbero piacerti anche

  • Salmo 120
    Salmo 120
    Documento10 pagine
    Salmo 120
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 117
    Salmo 117
    Documento17 pagine
    Salmo 117
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 114
    Salmo 114
    Documento11 pagine
    Salmo 114
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 115
    Salmo 115
    Documento10 pagine
    Salmo 115
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 113
    Salmo 113
    Documento18 pagine
    Salmo 113
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 111
    Salmo 111
    Documento12 pagine
    Salmo 111
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 112
    Salmo 112
    Documento9 pagine
    Salmo 112
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 104
    Salmo 104
    Documento17 pagine
    Salmo 104
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 110
    Salmo 110
    Documento11 pagine
    Salmo 110
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 109
    Salmo 109
    Documento10 pagine
    Salmo 109
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 108
    Salmo 108
    Documento13 pagine
    Salmo 108
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 107
    Salmo 107
    Documento12 pagine
    Salmo 107
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 105
    Salmo 105
    Documento18 pagine
    Salmo 105
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 102
    Salmo 102
    Documento16 pagine
    Salmo 102
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 101
    Salmo 101
    Documento15 pagine
    Salmo 101
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora
  • Salmo 093
    Salmo 093
    Documento18 pagine
    Salmo 093
    Jesús F. Espinoza García
    Nessuna valutazione finora