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L'avi José no era de cap partit polític, desprès de la guerra part de la família va
començar a anar-se’n a Mèxic, finalment la seva àvia Anita va pressionar perquè ells
viatgessin també, sortint en el 52, quan el pare de Rodrigo tenia 8 anys. La família de
Rodrigo va sortir per a Cuba, on van estar un temps i desprès van marxar a la ciutat de
Mèxic.
El pare de Rodrigo va anar a l' Instituto Luis Vives on va començar a tenir contactes
amb gent de l'exili, l'avi José, va començar a anar a l’Orfeó Català i a tenir una vida
catalana dintre de la ciutat de Mèxic. Els pares de Rodrigo es van conèixer en una
cafeteria de la ciutat de Mèxic.
Rodrigo i el seu germà van anar al Colegio Madrid. Rodrigo va decidir residir a
Barcelona el 2000.
Rodrigo Surrell del Portillo nació en México Distrito Federal, de padre catalán y
madre mexicana.
Su padre es José María Surrell Cabré –catalán- y el abuelo paterno fue José María
Surrell –catalán- y su abuela paterna es Anita Cabré Llobet –catalana-.
La familia de Rodrigo salió para Cuba, donde estuvieron un tiempo y después se fueron
para la ciudad de México.
El padre de Rodrigo fue al Instituto Luis Vives donde empezó a tener contactos con
gente del exilio, el abuelo José, empezó a ir al Orfeó Català y a tener una vida catalana
dentro de la ciudad de México.
¿Cómo se llaman?
Al final mi yaya presionó un poco al abuelo para que se fueran a México y tomaron la
decisión de irse en el 52, en ese momento decidieron vender la pastelería y todo lo que
tenían aquí. Mi padre tendría unos 8 años y una tía mía 10 u 11 años.
Se supone que había un negocio en México muy bueno por lo que mandaron antes de
llegar el poco dinero que tenía mi abuelo, total llegaron y no había negocio, no había
dinero, no había absolutamente nada, se los habían timado y ya está.
Mi abuelo no, mi abuelo era una persona que le gustaba el negocio y entonces
negociaba con unos y con otros, era una especie de intermediario, si podía vendía lo que
les compraba a los otros y al revés, nunca se afilió a ningún partido, era una cuestión de
subsistir por el tema del negocio.
Me llegó a contar mi abuelo que en Gerona tenían una casa y que cuando venían a
inspeccionar, mi abuelo siempre sentaba a los oficiales en frente de una mesa, tenían
unos baúles en los que se sentaban y todos los militares se ponían a buscar por todas la
casa desesperados a ver si encontraban algo de azúcar por ejemplo, porque sabían que él
tenía por ser pastelero y nunca encontraban nada.
Terminando la guerra antes de que ellos se fueran, un oficial le preguntó qué donde
tenía escondida la azúcar y pues claro le dijo “siempre estaba debajo de ti” pues los
oficiales se sentaban y nunca se levantaban y tenían escondido el azúcar allí abajo, en
esos baúles donde se sentaban. Él como negociante era muy bueno, siempre tenía para
vivir bien y poder ir tirando, aún en época de guerra tuvieron con qué pasarla.
Bueno se fueron en barco, primero se fueron a Cuba, estuvieron en Cuba un tiempo, que
ahí fue donde mi padre vio al rey mago y el impacto que tuvo a los ocho años de ver a
un negro cubano de rey mago, fue muy fuerte.
Allá mi abuelo iba al Orfeó Català a ver los partidos del Barca, a tomar agua vichi a
comer sus paellas, caracoles y demás, a vivir una vida catalana dentro de la Ciudad de
México.
De mi madre todos son mexicanos, algunos tíos que eran duques y cosas así raras que
después de la revolución nadie volvió a tener un sobrenombre, pero bueno todos son
mexicanos de la capital. Mi madre es mexicana 100%.
La vida de mi padre ha sido de mexicano pero como siempre extranjero, porque al tener
la nacionalidad española, cuando él en el 68 quería participar, no lo dejaron porque le
decían que él era español, que no era mexicano y que no era un problema suyo.
A mi padre siempre le han pasado cosas así ¿no?, tres meses antes de que yo naciera
precisamente en el 77,
se hizo la reforma de
acuerdo
gubernamental que no
podías tener la doble
nacionalidad y mi
padre tuvo que elegir
por la nacionalidad
mexicana, con lo cual
mi hermano nace en el
75 y nace como hijo
de padre español y de
madre mexicana y yo
en el 77 nazco como
hijo de padre
mexicano, nacido en
Barcelona, España y
madre mexicana, con
lo cual es un poco
raro, y bueno ahí sigo
como mexicano, todo
el tiempo.
El abuelo José
¿Tú recuerdas cómo era la vida al principio cuando eras pequeño, tus abuelos
extrañaban España creían que iban a volver?
Ellos tenían claro que iban a seguir en México y de repente venían aquí a ver a la
familia. Siempre los domingos había comida en casa de los abuelos y era como llegar a
otro país, en vez de comer unos tacos y enchiladas, se comía paella, canelones, había
una dieta muy mediterránea, se tomaba agua vichi, que no sé de dónde la conseguía el
abuelo, bueno había una gastronomía muy española.
Y además sobre todo el acento que tenían los dos, nunca perdieron el acento español,
era curioso y sobre todo que entre ellos hablaban catalán, en la familia podías estar
sentado en la mesa y entre mi padre, mi yayo, mi yaya y mi tía, se hablaban catalán todo
el tiempo y luego nos hablaban a nosotros en castellano, estaba el póster del barca y
tenían muchas cosas de aquí, así que era como llegar a otro lugar que no era el común
de las casas.
He estado en varios colegios pero acabé en el colegio Madrid, que era uno de los
colegios que empezaron con todos los exiliados igual que Luis Vives, lo que pasa es que
el colegio Madrid quedaba más cerca de casa entonces acabamos ahí tanto mi hermano
como yo.
Yo al final como nunca he sido buen estudiante me echaron, pero llegué a conocer
mucha gente que vivía el mismo entorno que yo en cuanto a abuelos españoles y
entonces en el colegio Madrid como que hablabas el mismo idioma, se hacían las
verbenas, ya sabían lo que eran los canelones y ciertas cosas que a lo mejor muchos
compañeros que eran mexicanos no conocían. Fue divertida esta época, del mítico
colegio Madrid, esto de hablar el mismo idioma.
¿Cómo era tu vida cotidiana en México desde pequeño? Porque tenías muy
mezclada tu vida, ¿no?
Cambiaba todo cuando iba a casa de mis abuelos, porque mi padre después de tantos
años en México, es más mexicano que español, en fin lo oyes hablar y habla un
castellano muy mexicano, pero le oyes el catalán y es un geronés muy cerrado, son muy
distintos.
Pero era curioso porque la vida era normal, siempre íbamos los domingos a una casa
que tenía mi abuelo en Cuernavaca y ahí era donde todo cambiaba, porque mi abuelo
llevó naranjas españolas allá y entonces era curioso el sabor de la naranja dulce de
México con la naranja amarga de aquí, y entonces el zumo de naranja que te tomabas un
domingo en Cuernavaca, era ácido, raro, no era una naranja común, y bueno, eran
tradiciones que se llevaban ahí, te digo todo cambiaba en casa de mis abuelos.
Sí, sí, ahí empecé con mi predilección a los caracoles y a la paella, llegamos a ir varias
veces, cuando festejábamos algo acabábamos ahí con toda la familia.
Sí estudié en México Publicidad y Diseño Gráfico y ahí terminé, estaba metido en las
cuestiones gráficas. Yo quería estudiar animación en 3D, pero que no fuera en Estados
Unidos, entonces empecé a buscar escuelas en Europa y hubo varias opciones en
Madrid y en Barcelona, fue entonces cuando decidí dejar la empresa que tenía y venir
aquí.
Tenía una empresa de publicidad, de páginas web y de servicios, esto como hace 6, 7
años, era de los pioneros que había y entonces me vine tres meses de viaje aquí,
encontré una escuela muy cerca, me gustó, pagué el curso y me tuve que comprar otro
boleto para ir a México y volver.
Bueno tampoco hablaban mucho porque era entrar en la nostalgia, realmente porque era
su ciudad, donde ellos estuvieron, donde ellos crearon sus negocios y vivieron, no se
hablaba mucho, de repente hacían un viaje y traían el recuerdo de aquí, lo normal.
La conseguí hace cuatro años, que se volvió a abrir el acuerdo gubernamental en donde
podías tener la doble nacionalidad. El primer año que estuve aquí estaba como
estudiante y conseguir trabajo y todo esto fue muy difícil como extranjero.
Bueno sí, todavía cuesta un poco, porque al poner en el currículum dónde estudiaste y
todo lo que has hecho y como la mayor parte de las cosas las he hecho en México ¿no?
¿Tú crees que toman en cuenta
esto? Es que mucha gente que he
entrevistado piensa así, que
aunque tengas un buen
currículum, el hecho de que este
currículum no es creado en
Europa te quita puntos para
encontrar trabajo.
Sí, pero se supone, sólo en papeleo, porque yo hablando con el ex-jefe que tenía,
siempre me lo dijo “mira ahí viene otro de no sé donde, éste no lo agarró porque me
roba algo o yo que sé”, tienen mucha desconfianza.
Y los mismos empresarios prefieren darle trabajo a alguien que sea de aquí que a
alguien que sea de afuera, con lo cual si costaba trabajo, a mí me costó… no sé, estuve
como un año y algo, aún con papeles, enviando currículums y demás, entonces no me
quedaba de otra que trabajar de camarero, yo que soy diseñador gráfico y publicista
¿no?
Era un poco raro y difícil hasta que por fin pude entrar en una empresa de iluminación,
de diseño muy buena, muy famosa y de un nivel fuerte a nivel mundial y ya de ahí las
cosas me han ido mucho mejor, estoy empezado a cotizar y empezando a hacer una
vida.
A parte de esta cuestión de trabajo ¿cómo sentías que te trataban los catalanes?
¿Pero tú en general, cómo ves a los catalanes contigo, por ejemplo? ¿Cómo te has
sentido con los catalanes?
Y en parte está bien, pero yo de entrada los veía muy mal, hubo varias veces que yo me
molestaba, yo hablaba en castellano y ellos me hablaban en catalán, yo volvía a
hablarles en castellano y si no entendía preguntaba y me daban la explicación en catalán
y entonces yo les hablaba en inglés.
¿Tú te has identificado diciendo que eres hijo de exiliados, que eres español o
catalán?
No, digamos gozo del privilegio de tener la nacionalidad española, vale, pero es que no
soy catalán ni soy español ni nada, yo me críe en México y soy más mexicano que el
chile y no quiero ni pienso perder la forma mía de hablar, aunque la he modificado pues
tengo un castellano más universal para que cualquier persona me pueda entender, pero
tengo mis modismos mexicanos y mi habla mexicana y es que soy mexicano. Me he
adaptado a como se vive aquí, como siempre que vas a otro lugar a vivir y estoy
empezando a hablar catalán, no tengo ningún problema mayor con el catalán.
Tengo un amigo, el primer amigo catalán que tuve desde hace muy poco y sólo él
empezó a hablar castellano cuando me conoció y aún así, como que no me invita
mucho, o sea son muy reservados. No sé por qué, será que así son, tal cual.
Igual vas a México y te abren las puertas de par en par seas quien sea ¿no? y aquí no
tanto. Cuesta mucho entrar en un círculo totalmente catalán como extranjero porque
tienen que cambiar sus costumbres, en vez de hablar catalán, porque estás tú enfrente
tienen que hablar castellano, que es el idioma de los exiliados, por así decirlo, para
ellos.
Mi primo, que es catalán, nació en Estados Unidos pero vive aquí, una de sus hijas se
llama Marieta, que en castellano es María y a la niña le dices “oye María” y se voltea, se
enfada y dice “María es un nombre de criada yo soy Marieta”, y es catalana de arriba
abajo, pero también es un poco la educación que le van dando ¿no?, nacionalista y todo,
y el catalán se vuelve un poco cerrado.
Obviamente hay que entenderlos porque les ha salido el tiro por la culata, porque han
querido que Barcelona fuera tan cosmopolita, que fuera la top model de las ciudades,
pero siendo la top model se deben de adaptar a hablar castellano y luego a hablar inglés,
porque hay otros idiomas, no nada más catalán, catalán, catalán y que quien venga tenga
que hablar catalán. Es un juego un poco raro.
¡Uy!, bueno siempre pasa al ser extranjero y al tener un acento que no es como el de
aquí. Que tú llamas para conseguir piso y te dicen que está alquilado y hacía que hablara
mi novia, en catalán, y al
momento le decían “sí, ven a
verlo cuando quieras”, o les
hablaba en castellano, pero
con un castellano español y
también “sí, pasa cuando
quieras”. O sea que apenas te
escuchan prejuzgan, siendo
que el dinero para pagar está,
que tengo un trabajo estable
también, que tengo todas las
condiciones normales, lo
único que no tengo es el
acento, por así decirlo ¿no? Y
entonces, por esto mismo te
rebajan o te tachan.
Colegio Madrid
Ahora bien también hay mucha gente que viene de afuera que se aprovecha de las cosas,
igualmente de aquí para allá o de allá para acá, como siempre, entonces pagan unos por
culpa de otros, es lo que pasa. Muchos estudiantes vienen y dejan los pisos hechos un
asco, pero yo lo que quiero es vivir porque no vengo de estudiante, aunque tenga él
habla mexicana, que como te digo, no lo voy a perder, ni lo quiero perder, es algo mío.
Lo que me pasa es que tengo la cabeza en México y cuando estoy en México tengo la
cabeza aquí, entonces como ya llevo tiempo aquí no sé dónde está el lugar, ni dónde no,
que generalmente creo que eso es lo que llaman el exilio, vives en un lado pero tienes la
cabeza en otro lugar, o sea, añoras demasiado.
Vives en ese lugar pero quieres tener un poco las tradiciones de este otro lugar donde
estudiaste y luego, por ejemplo si voy a México, estoy bien y de repente digo “me
gustaría un cafecito de éstos que hacen aquí que son muy buenos, que es muy sabor de
aquí” ¿no? “o las calles, quisiera ver las calles tan cuadradamente perfectas como en
Barcelona”, pero estoy en México, es un vivir en dos lados, pero estando en uno.
¿De Cataluña?, que quiere ser un país que no creo que se haga, que hay cosas que se
deberían de cambiar igual que en todos lados y hay cosas que son muy buenas. Pero por
ejemplo, que sea el único, como dicen país, en el que se cobran los peajes, siendo que
en el resto de España no, pues no lo veo tan justo ¿no? y que la vida aquí en Barcelona
sea el triple de cara que en Almería, por ejemplo, pues tampoco lo creo justo.
Pero eso sí, la calidad de vida que tienes aquí, los eventos que hay, Barcelona es muy
divertida, por ejemplo hay muchas cosas por hacer, siempre hay entretenimiento para la
gente, es que hay de todo y eso también forma parte de una Barcelona nueva, de una
Barcelona que te ofrece absolutamente todo lo que una persona puede querer ¿no?
Bueno yo creo que está bien porque son cosas que no hay que perder, la historia
precisamente para eso está, para recordarla y para que siempre esté viva porque son
sucesos que han ido pasando y cada suceso es memorable ¿no?.
Igualmente cada uno en su vida tiene su historia y hay que ir a la remembranza, todo
eso es importante ¿no?. Aunque hay partes de la historia como ésta, que hay que
potenciar, porque es algo que está pero se está empezando a perder, ya la gente no la
toma tanto en cuenta.
Por ejemplo yo te decía que a mí como mexicano no se me abrían tanto las puertas aquí
en España, siendo que cuando los españoles lo necesitaron en México se les abrieron
todas las puertas ¿no?. Que, ¿qué necesitan? y Lázaro Cárdenas era el primero: “¿que
toda esta gente necesita un pasaporte mexicano?”, pues “pues dénselos, pero que esté a
gusto y que esté bien”. En cambio ahora no es lo mismo ¿no?, el carné de conducir
mexicano no es convalidado en España, entonces tienes que sacarte uno aquí y así hay
cosas que no van.
Pero igualmente el recordar toda esa historia, que fue buena para mucha gente y que se
fue a México y que estuvieron protegidos y se salvaron precisamente por eso, es algo
que mucha gente de aquí ya ni siquiera se acuerda, entonces está bien potenciarlo y
sacarlo a la luz.