de la Generalitat es un poder público y, por tanto, está sujeto a la ley y, en consecuencia, a éstos y a otros preceptos. Los límites de su respuesta son, por tanto, muy claros y rebasarlos podría conllevar consecuencias graves, incluso de tipo penal. Espero que Montilla no se comporte como Atutxa o Ibarretxe. Por tanto, la única finalidad que pueden tener las palabras de Montilla es intentar coaccionar al Tribunal, algo muy grave y nada democrático. Un cargo público Barcelona, 6 de diciembre del XXXº Año Constitucional tiene, además, la obligación de hacer pedagogía con sus actuaciones. Un mal ejemplo para los ciudadanos es poner continuamente en duda la independencia e imparcialidad de un tribunal de justicia. Ciertamente, Acatarás las sentencias Montilla no ha dicho que cometería desacato pero tampoco ha dicho lo que debería: que respetaría la Francesc de Carreras sentencia fuera cual fuese su contenido y que, por Catedrático de Derecho Constitucional de la Universidad Autónoma supuesto, obedecería aquello que dispusiera el Tribunal. de Barcelona Con sus ambiguas palabras ha mostrado una gran inseguridad respecto a sus propios actos y se ha Ante la probabilidad de que el Tribunal Constitucional comprometido a tomar unas actitudes que, según lo que se pronuncie en las próximas semanas sobre el Estatut disponga la sentencia, le serán exigidas por sus propios de Catalunya, otra vez vuelven a ejercerse presiones socios de gobierno y tendrá dificultades para cumplirlas. para que la sentencia declare su plena constitucionalidad. En buen lío se ha metido. Efectivamente, en estas últimas semanas diversos Porque, en el fondo, ¿qué es lo que están diciendo políticos han amenazado con desacatos o con Montilla y todos los políticos catalanes que se expresan referendums ilegales en el caso de que el Tribunal de manera semejante? Lo ha explicado muy agudamente aprecie la inconstitucionalidad de ciertos preceptos que, mi colega y amigo el profesor Juan José Solozábal por lo visto, se consideran intocables. (“Nacionalismo y Constitución”, en Elimparcial.es). El El lunes pasado, en una solemne conferencia, el problema constitucional y democrático, sea cual fuere el presidente Montilla, con su habitual tono mesurado pero contenido de la sentencia, lo constituiría que el Tribunal, con un fondo muy duro y con voluntad decidida de debido a las coacciones que está recibiendo, renunciase intimidar al Tribunal, ha insistido en todo ello con estas a sus funciones constitucionales o no dispusiera de plena palabras: “Si se produjesen decisiones que supusieran libertad para ejercerlas. Y ello, a fin de cuentas, es lo que una limitación o una minoración de nuestro autogobierno, se pretende con las amenazas de que hablamos: que aún sabremos reaccionar adecuadamente, con firmeza en el caso de que el Tribunal encontrara preceptos institucional y realismo político. (…) Como president de la inconstitucionales, no los declarara como tales por la Generalitat tomaré la iniciativa de propiciar, si llegase el reacción que ello pudiera provocar en Catalunya. momento, una respuesta unitaria, serena y constructiva, basada en la confianza en nuestras fuerzas y en nuestras posibilidades. En este sentido, si la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut fuese lesiva para nuestro autogobierno, he decidido convocar a los líderes de las fuerzas parlamentarias para sondear su disposición a procurar que la respuesta de las instituciones y de la sociedad catalana sea lo más sólida, mayoritaria e inequívoca posible”. Ante palabras tan rotundas, se me plantean dos preguntas: primera, qué es, según Montilla, una sentencia “lesiva para nuestro autogobierno”; y, segunda, cuáles pueden ser las respuestas que anuncia sin desvelarlas. Ambas preguntas son inquietantes. En cuanto a la primera, supongo que Montilla se refiere a aspectos fundamentales del texto estatutario, no a meras cuestiones de detalle. Es decir, se trata de impedir que sean declarados inconstitucionales, o interpretados en un sentido que los vacíe de contenido, preceptos que afecten a las competencias, los derechos, las relaciones con el Estado, la financiación o la lengua. En cuanto a las respuestas con las que amenaza, Cuando Montilla dice que la sentencia puede ser “lesiva” sólo se me ocurre una que pueda ser válida: el para el autogobierno de Catalunya está incurriendo – acatamiento de la sentencia aun estando en desacuerdo seguramente sin enterarse – en una contradicción ya que con la misma. Supongo que Montilla conoce el art. 38.1 el autogobierno de Catalunya no es otra cosa que la de la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional según el autonomía de la que dispone la Generalitat en el marco cual “las sentencias recaídas en recursos de de la Constitución y del Estatut. Y, precisamente quien inconstitucionalidad (…) vincularán a todos los poderes garantiza este marco es, en último término, el Tribunal públicos”. Y también el art. 87 de la misma Ley, que dice Constitucional. Por tanto, el autogobierno de Catalunya así: “Todos los poderes públicos están obligados al es lo que este Tribunal determina. Guste o no – a unos y cumplimiento de lo que el Tribunal Constitucional a otros – la sentencia declarará cual es el ámbito del autogobierno y, en ningún caso, puede ser lesiva para el los padres y la de los hijos. mismo. La mayor parte de los españoles vivos forman parte Si hubiera unos diez mandamientos para la de una u otra de estas generaciones, cuyas dimensiones actuación de un político en un Estado de derecho, uno de son muy desiguales. Según los datos que el Instituto ellos sería, sin duda, el siguiente: “respetarás las Nacional de Estadística ofrece en la red, la generación de resoluciones de los jueces y acatarás sus sentencias”. los padres de la Constitución estaría integrada por algo más de 15 millones, y la de los hijos tendría ya más de La Vanguardia, 27 de noviembre de 2008. 21. Estas cifras son producto de mi propio cálculo pero, pese a sus inexactitudes, creo que la relación entre las dimensiones de una y de otra permite afirmar que nuestra Constitución está hoy en manos de sus hijos. Que es a ellos a quienes incumbe mantener en buen estado Los retos de los hijos de la Constitución nuestra vida constitucional, pues son ellos quienes pueden defender la Constitución contra sus enemigos y Francisco Rubio Llorente sobre ellos pesa el deber de corregir los defectos que la Presidente del Consejo de Estado práctica ha puesto de manifiesto. Nuestra vida constitucional es buena, pero podría ser A diferencia de lo que sucede, por ejemplo, con los mejor; nuestra Constitución es excelente, pero tiene gusanos de seda, las sociedades humanas no están defectos. Si aquélla no es mejor y estos defectos formadas por individuos que hayan llegado al mundo persisten es porque nada se hace para lograrlo, una simultáneamente y sólo tras la extinción de los que les pasividad que quizás puede explicarse porque los hijos precedieron. Desde el punto de vista de la edad de sus de la Constitución tienen una idea inadecuada de ella y miembros, forman un continuo que sólo artificiosamente un exceso de veneración por el texto constitucional. cabe considerar dividido en generaciones. Es sin La idea es inadecuada por ser en parte parcial y en embargo un artificio frecuente, y útil cuando la división parte falsa. Esta generación parece ver la Constitución entre generaciones se hace por referencia a una fecha exclusivamente desde la perspectiva de los Derechos. significativa para el análisis que se pretende llevar a Como un texto que reconoce y garantiza los que cada cabo. uno de los españoles tenemos o deberíamos en razón de El propósito de este artículo es el de hacer algunas nuestra dignidad humana y los que las Comunidades reflexiones sobre nuestra Constitución al cumplir los 30 Autónomas tienen o deberían tener como emanación de años y, en consecuencia, parece que la fecha significativa su derecho, también preconstitucional a la autonomía. para la división de nuestra sociedad en generaciones es Una perspectiva que no es falsa, pero que no permite ver la de su promulgación, diciembre de 1978. Los españoles la realidad constitucional, mucho más amplia. La que tenían entonces derecho de voto han de tener ahora Constitución sirve para limitar y dividir el poder, pero al menos 48 años, aunque muchos tengamos también para dotarlo de una organización que asegure su desgraciadamente bastantes más. Con independencia de legitimidad democrática y le permita actuar con eficacia, y que hicieran o no uso de ese derecho y del sentido de su no puede llevarse a cabo aquella tarea sin hacer primero voto, tuvieron la posibilidad de manifestar su opinión ésta. No hay Estado de derecho si no hay Estado. sobre la Constitución y por tanto han de considerarse Esta perspectiva parcial, que induce a desinteresarse obligados por ella, como expresión de la voluntad de la por todas aquellas partes del texto constitucional que no mayoría. La abrumadora mayoría de ellos no tuvieron estén en relación directa con los Derechos, no es la única parte alguna en la elaboración del texto constitucional, causa de la inadecuación de la idea que hoy se tiene de pero por la razón dicha, parece adecuado denominar la él. La idea es también inadecuada porque está apoyada generación formada por ellos como la de los padres de la en la falsa creencia de que el texto de nuestra Constitución, aunque esta denominación se utilice Constitución es hoy el mismo que fue promulgado hace habitualmente en un sentido más estrecho; incluso 30 años, con la única excepción de la levísima demasiado estrecho, puesto que deja fuera a hombres modificación establecida en 1992 en relación con los que, como Adolfo Suárez o Felipe González, Fernando ciudadanos europeos. Y no es así. Nuestra Constitución, Abril o Alfonso Guerra, alguna parte tuvieron en esa obra. como todas, no cambia sólo cuando es reformada, sino La generación siguiente estaría integrada por quienes también por otras vías que alteran el sentido de sus han adquirido el derecho de sufragio, la ciudadanía plena, preceptos o los privan de fuerza. Valga un ejemplo ya dentro de la Constitución, los españoles que están reciente, el de la preocupación por la entrada de capital entre los 18 y los 48 años. Una generación que cabe ruso en una empresa nacional. denominar la de los hijos de la Constitución. Como esa preocupación viene del temor a que el Estas dos generaciones no abarcan la totalidad de capital que controla la empresa anteponga sus propios los españoles vivos, puesto que muchos de ellos no han intereses al interés general, el remedio más simple sería llegado todavía a la ciudadanía plena. Forman otra el de ponerla bajo el control del Estado, haciendo uso de generación que podría denominarse la de los nietos, pero los poderes que le otorga el artículo 128 de la esta concesión a la simetría no es necesaria y puede Constitución. Pero éste es un remedio al que no cabe resultar perturbadora. Aplicada a la Constitución, la acudir porque, aunque ese artículo no ha cambiado, el afirmación de que, según el principio democrático, la Estado no puede utilizarlo sin la autorización de la tierra pertenece a las generaciones vivas, sólo tiene Comisión Europea, vigilante celosa de la libertad de sentido si se la entiende referida a las integradas por mercado. quienes pueden disponer de ella, manteniéndola sin Pero la pasividad de los hijos de la Constitución no cambio alguno, introduciendo en ellas las reformas que se explica sólo, ni principalmente, por la idea inadecuada juzguen necesaria, o en último término, violándola o que de ella tienen. Viene más directamente de un exceso destruyéndola, aunque en este último caso, como es de veneración por ella. Su actitud respecto del texto evidente, democrático o no, el poder empleado será constitucional se asemeja en alguna medida a la del puramente fáctico, no jurídico. Las únicas generaciones pueblo judío respecto de las Tablas de la Ley. Parecen vivas a tener en cuenta desde el punto político son la de ver en ella un texto sagrado recibido de arriba, en el que los hombres no pueden poner sus manos. convocar un referéndum sobre el derecho a decidir. Es esta visión que la generación de los hijos de la Montilla, de acuerdo con Duran Lleida, también es Constitución tienen de ella, una visión que alienta la partidario de dar una respuesta firme, pero propugna que generación de los padres, la que les impide acometer la sea unitaria y viable, en el sentido de no ilegal ni tarea de reformar la Constitución para corregir los estrambótica. Pero no considera necesario precisar en defectos hoy perceptibles en ella. Eliminar preceptos que, qué consistirá porque, como en su momento a Ibarretxe, como los que dan preferencia al hombre sobre la mujer le parece inverosímil que pueda haber recortes en la sucesión a la Corona, o exigen la condición de importantes en un texto "plenamente legal". reciprocidad para conceder voto a los extranjeros en El argumento de que lo refrendado por el pueblo no nuestras elecciones municipales, han perdido su razón de debería poder cambiarlo un tribunal tiene fuerza. Sin ser si alguna vez la tuvieron. Modificar la regulación de embargo, es la peripecia concreta del Estatut lo que lo algunas instituciones como el Consejo General del Poder debilita. Que el texto era plenamente legal también se Judicial o el Tribunal Constitucional, que sólo por esta vía dijo, y con gran énfasis, del proyecto salido del pueden ser protegidas de la dinámica propia de la Parlament, y luego se admitió que muchas partes del democracia representativa. Y sobre todo concluir la mismo no tenían encaje constitucional. El propio Maragall organización territorial, o cuando menos racionalizar el ha reconocido (en el libro de E. Tusquets y M. Villanova proceso que lleva hacia ella. sobre su vida, publicado este otoño) que el proyecto Se dirá que sea o no verdad, lo que digo no es pretendía cambiar la Constitución a través de la reforma oportuno. Que en tiempos de tribulación no se ha de del Estatut: lo mismo que intentó Ibarretxe con su plan hacer mudanza, o que no está el horno para bollos, soberanista, y que fue la razón principal de su rechazo etcétera. Tal vez tengan razón quienes así piensan, por el Congreso en 2005. aunque no es seguro. Hace 30 años no se ataban los El proyecto del Parlament no era el resultado de una perros con longaniza, y por mucho que sea el trabajo de necesidad acuciante de defender el autogobierno en reformar ciertos artículos de la Constitución, tal vez no peligro, o de superar las insuficiencias de la Constitución, sea mayor que el de negociar sin ese apoyo el sistema de sino un "fruto del puro tacticismo: Maragall quiso financiación de las Comunidades Autónomas y determinar presentarse más nacionalista que CiU, y CiU más cuál es el grado de diferencia en el goce de los derechos nacionalista que Esquerra", declaró Duran Lleida en EL que la Constitución tolera. Pero aunque las razones PAÍS el 12 de febrero de 2006. Y añadió que quienes pragmáticas fueran incontestables, no cabe oponerlas a habían dicho que no se podría "tocar ni un punto ni una la conveniencia de abrir debate sobre la reforma coma" estaban "engañando a la ciudadanía". constitucional, para hacerla "luego que las circunstancias El callejón al que condujo aquel proyecto inviable políticas de la Nación lo permitan", que es la fórmula que llevó a intentar reconducirlo mediante el pacto entre las Cortes de Cádiz utilizaron para endosar a las Zapatero y Mas: éste aceptaba modificar los aspectos siguientes la difícil tarea de hacer una división más más obviamente inconstitucionales, introduciendo dosis adecuada del territorio nacional. de ambigüedad e imprecisión en los planteamientos, a cambio del compromiso socialista de refrendar el nuevo El País, 2 de noviembre de 2008. texto en Las Cortes y de ciertas concesiones políticas (como la retirada de Maragall). Lo que llegó al Parlamento español era, por tanto, un acuerdo político cuyas líneas esenciales no podían ser modificadas. Lo cual podía tener lógica política, pero su Proscenio catalán legitimidad quedaba condicionada al ulterior control de constitucionalidad: para evitar que necesidades políticas Patxo Unzueta coyunturales llevaran a avalar algo que abriera paso al desbordamiento. Una vez suprimido el recurso previo de El principal debate del momento entre los partidos inconstitucionalidad, en los ochenta, la posibilidad de catalanistas consiste en decidir qué van a hacer si el recurso a posteriori de ciertas normas es una garantía, no Tribunal Constitucional recorta el Estatuto. En Euskadi una amenaza. Especialmente cuando, como en este hubo un debate similar en vísperas del pronunciamiento caso, su buscada imprecisión permite aplicaciones que de ese mismo tribunal sobre la convocatoria de la desborden el marco que todos deben respetar. consulta de Ibarretxe. El lehendakari anunció que si era Aunque el respaldo al Estatut en el referéndum desfavorable presentaría una demanda contra España hubiera sido mayor (fue del 35% del censo) no había ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos. Ahora, manera de evitar el pronunciamiento del tribunal. Los que Artur Mas ha propuesto (El País, 16-11-08) la presionan para que no se pronuncie, oponiendo el convocatoria de un referéndum sobre el anteproyecto principio democrático (votación parlamentaria y primitivo de Estatut: el aprobado por el Parlamento de referéndum) al de legalidad, plantean, frente a un Cataluña en septiembre de 2005. El argumento es que lo problema político difícil, uno irresoluble. Porque, ¿cuál que ha refrendado el pueblo no puede ser modificado por sería el paso siguiente a cualquiera de esos referendos un tribunal. en contra de la sentencia del Constitucional? ¿La La propuesta de Mas tiene en común con la del declaración unilateral de independencia? lehendakari el intento de desacreditar por adelantado una El historiador catalán Enric Ucelay-Da Cal ironizaba resolución diferente a la deseada y de presionar a los no hace mucho, a propósito de acontecimientos históricos magistrados advirtiéndoles sobre las graves mucho más graves que los actuales, sobre lo que consecuencias de su decisión. También hay semejanza consideraba una "combinación característica, y muy en la retórica: Ibarretxe habló de "liquidación del catalana, de gesto dramático en el proscenio y prudencia autogobierno vasco", y Mas de "condena a muerte del entre bastidores". Afortunadamente, habría que añadir: autogobierno catalán". Y como entonces en el País esa prudencia de fondo que impide llevar a la realidad las Vasco, otros partidos catalanistas proponen medidas más bravatas ha librado a los catalanes de meterse en radicales, sobre las que se discute con fingida seriedad: callejones como los que tanto han agobiado a los vascos. ERC, por ejemplo, propone ignorar la sentencia y Sería lamentable que ahora que una parte de los hijos de Sabino Arana parecen querer salir del laberinto Constitución soberanista en que los metió Ibarretxe, sus excesos retóricos llevaran al catalanismo a tomar el relevo. J. J. Armas Marcelo El País, 4 de diciembre de 2008. El más preciado documento vivo de la hoy denostada Transición Democrática es la Constitución Española de 1978. Treinta años atrás, muchos españoles creyeron que Pensar la Constitución la Constitución era sólo un método para huir hacia delante, pero quedará demostrado con el tiempo, y por Manuel Martin Ferrand eso recuerdo otra vez a Suárez, que también es un mecanismo efectivo para mirar hacia atrás sin ira, hacia lo Nos acercamos al trigésimo aniversario de la que muchos no quieren ni saben ya recordar. Constitución de 1978 y se nota, más que por el Independentistas y secesionistas afirman querer salirse entusiasmo colectivo -indescriptible por su ausencia-, por de ella, pero al mismo tiempo se acogen a su letra más el almíbar celebratorio que prodigan los profesionales del generosa para exigir respeto a sus minorías. Están ditirambo que, por cuenta propia o ajena, no escasean en además los que hablan de «patriotismo constitucional», el patio nacional aunque, según marca la experiencia, su redundancia un tanto ingenua, porque la Constitución es influencia tiende a ser contraria a la causa que les motiva. el único patriotismo admisible en esta democracia que de La Constitución, fruto principal y compilatorio del tan abierta parece que siempre está a punto de romperse. fenómeno que resumimos como Transición, nos permitió Lo demás es pasión irracional, casi siempre indecente, e salir, sin mayores conflictos, de una dictadura para intereses inmobiliarios, camuflados de mezquinas conformar una democracia que se dice parlamentaria y patrioterías y demagogias ancestrales. Hasta quienes han representativa sin llegar a serlo plenamente. Es algo que pretendido y pretenden romperla, disimulados en la falsa se hizo «de la ley a la ley» y de ahí arrancan muchas de intención de renovarla y mejorarla, saben de la pródiga sus limitaciones y, lo que es peor, la perpetuación de solidaridad de su letra, de modo que fue y es ejemplar, modos y formas del pasado. El balance es, sin duda, inteligentemente ambigua, y en apariencia confusa para positivo; pero los tiempos parecen exigir, y la sociedad quienes buscan confundirnos y traducirla mal. Por eso, demanda, nuevos planteamientos. Siete partidos políticos por encima de golpes e idolatrías, la Constitución se ha -PNV, ERC, BNG, ICV, CC, UpyD y NaBai- de los once ido imponiendo con la solvencia y la buena memoria que que tienen representación en el Congreso de los la Historia concede a las cosas bien hechas. Hoy, en esta Diputados ya han anunciado que, el sábado, no estarán columna de papel y reflexión, celebro con todos los presentes en el acto conmemorativo que, presidido por demócratas españoles un nuevo aniversario de la los Reyes de España, celebrará tan señalada efeméride. Constitución. Y celebro que los esfuerzos de quienes han Cada cual ha dado sus razones para ello, pero late en el buscado y buscan liquidarla hayan sido tan inútiles como fondo un agotamiento, por deformación y mal uso, de sus sueños delirantes. Así que de la Constitución algunos de los Títulos en que se divide el texto Española podemos hoy decir lo mismo que el general fundamental y rector de nuestra convivencia. Eso no es Miranda decía de sí mismo: «A los me quieren, los quiero; grave si se entiende que es así. ¿Se entiende a quienes no me quieren, que me respeten; y a los que unánimemente? El verdadero espíritu constitucional no me respetan, que me teman». conlleva en su seno la capacidad de acomodarse a las circunstancias por las que atraviesa la Nación que la ABC, 2 de noviembre de 2008. inspiró. Muchas de ellas marcadas, precisamente, por la aplicación y desarrollo de su propio texto. Otra cosa es que, en nuestro caso, los redactores de la Carta Magna, y el momento en que actuaron, fijaran unas condiciones muy estrictas, casi insuperables, para su mutación. Hace treinta años se pactó un Estado asimétrico que ya rechina y que, elefantiásico en sus gastos, no satisface plenamente ni a sus mayores beneficiarios. Eso tiene arreglo, especialmente cuando los dos primeros partidos de ámbito nacional -los que con CiU e IU acudirán al Congreso el sábado próximo- suman más del ochenta por ciento del total de los votos en las legislativas. Otra cosa es que nadie, o muy pocos, quieran renunciar a los privilegios que, normas electorales incluidas, les concede la situación establecida. La partitocracia, especialmente la bipolar, tiende a ser el más indesmontable de los sistemas de poder porque, a diferencia con los regímenes C's de partido único en los que solo se puede estar dentro o fuera, en ella se puede esperar la vuelta del péndulo y el turno propio. Todo ello, por supuesto, con parcelas fedBcn propias en lo autónomo y local y siempre con cargo a los Presupuestos. Hay que recordar, en cualquier caso, que la Constitución no es intocable. www.ciutadans-bcn.org ABC, 4 de diciembre de 2008. www.ciudadanos-cs.org