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OVNIS EN LA ANTIGÜEDAD

UN PAPIRO MUY CUESTIONADO


Es uno de los más antiguos testimonios sobre la observación de OVNIS en el cielo. Se trata
del Papiro Tulli, que data, al parecer, de tiempos del faraón Tutmoses III (1505-1450ac),
que al ser traducido proporciono la siguiente noticia:
“EN el año 22 en el tercer mes de invierno, sexta hora del día, los escribas de la casa de la
vida descubrieron una bola de fuego que venia desde el cielo, y aunque carecía de cabeza,
el aliento de su boca tenia olor fétido. Su cuerpo, de cinco varas, no tenia voz. Todos se
atemorizaron al verlo y se tiraron al suelo. Acudieron ante el rey para informarle, y el rey
ordeno que meditara sobre lo sucedido. Pero aconteció que las bolas fueron mas, y que
brillaron en el cielo, y se elevaron alto hacia el sur.”

La primera vez que se publico este texto fue en 1953, en el Nº 41 de la revista DOUBT, s
dijo que fue un tal Boris de Rachewitz el traductor del texto cuyo original halló entre los
documentos del difunto profesor Alberto Tulli, que fue director del Museo Egipcio del
Vaticano.

SIMPLE PEZ, SUBMARINO O NAVIO ESPACIAL


Loa dioses Babilónicos Oanes, Etana y Gilgamesh, puede ser una sola persona o varias muy
semejantes.
Acerca del primero habló en el siglo III a.c. un sacerdote babilónico llamado Beroso.
Beroso escribió una singular historia de Babilonia, que se perdió en su casi totalidad.
Sobrevivió un apequeña parte que habla sobre Oanes. Poseía este Oanes cuerpo de pez y
ojos muy poco humanos. Ayudó a los Caldeos a crear una civilización. Tenia una curiosa
costumbre durante el día transmitía su saber a los hombres y durante la noche estaba en el
mar. ¿Acaso poseía este Oanes una imponente embarcación en el mar?.

Decía el sacerdote Beroso la describirlo ante los asombrados griegos que parecía un pez,
pero sal mirarlo con detenimiento podía apreciarse que debajo de esa cabeza podía verse
otra, de hombre. Es decir que la primera cabeza pudo ser en realidad un casco que servia
para proteger a la interior, que era la verdadera

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