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Fuente: SimplexIT

Artículo original: La Olimpíada Informática para chicos del secundario

Rogelio García Llano, ingeniero electromecánico del ITBA con un posgrado en


Sistemas, es el director del Programa Olimpíada Informática Argentina (OIA).

-Hace 11 años que estoy con esta grata tarea de organizar los certámenes nacionales y
hacer el seguimiento de los provinciales, con el objetivo de detectar a aquellos chicos
talentosos para la informática, en especial la programación. Los participantes son chicos
de secundario, excepcionalmente están los dos últimos años del primario, para la
categoría Inicial.

Tenemos un solo auspiciante, el Ministerio de Educación, que además financia. Para


eso, tenemos que hacer una propuesta anual, propuesta que consta qué vamos a hacer,
cuál es el equipo que va a trabajar, cuál es el presupuesto que tenemos pensado, y año a
año se nos aprueba la propuesta para llevar a cabo la edición correspondiente a ese año.

Lo que queremos hacer es resolver los problemas de la manera más austera posible. Es
cierto que si mañana pido a Microsoft, a HP o a cualquiera apoyo económico, me lo van
a dar. La presidenta de HP en Argentina nos regaló las 4 máquinas para que los chicos
entrenen en el viaje. Apoyo podemos conseguir, pero lo que quiero es tratar de, dentro
de los niveles de austeridad con que uno se debe manejar, cumplir los objetivos. Las
cosas se pueden hacer bien sin gastar dinero.

¿Hace cuánto que Argentina participa?

Once años. En realidad, había participado un par de veces antes, pero después se diluyó
el tema de las Olimpíadas, que quedó sin timón. Cuando me ofrecieron hacerme cargo,
lo generamos prácticamente desde cero. No teníamos logo, reglamento ni nada, así que
fuimos avanzando sobre eso. El primer año sacamos nuestra primera página de Internet,
para difundir resultados, reglamentos, estructura organizativa, etc.

Hay que reconocer que para que esto funcione, tenemos en cada provincia
coordinadores provinciales. Son gente que trabaja ad honorem, haciendo un gran
esfuerzo que yo valoro, porque sin ellos no podría llevarse adelante el programa
nacional. Ellos son quienes organizan, en cada provincia, los certámenes provinciales,
con instancias escolares, interescolares y provinciales. Es decir, si una escuela quiere
hacer un certamen interno; después, se hacen certámenes interescolares entre escuelas
de una misma ciudad; por último, están los provinciales, que son entre los mejores de
cada una de las ciudades. De ahí salen los tres mejores de cada nivel, que son quienes
vienen al certamen nacional. Digo “vienen” porque se hizo en Buenos Aires, pero
queremos federalizarlo. Es cierto que algunos certámenes se hicieron fuera de la Ciudad
Autónoma de Bs.As., pero nunca nos fuimos muy lejos.

Este año, tenemos la idea de hacerlo en Mendoza. ¿Por qué Mendoza? Porque ahí se
hizo, hace unos 15 años, una Olimpíada Internacional de Informática. Argentina
organizó y participó. Teníamos una oferta de la Universidad de Champagnat, y hemos
tenido muchos participantes internacionales de colegios de Mendoza. Y para el año
próximo, la intención es hacerlo en la zona de Chapadmalal, donde hay un lugar muy
grato para que los chicos estén todos juntos. Es una de las ideas que tenemos para el
2009, cosa de seguir federalizando y que no sea Buenos Aires el centro de todo.

¿Cuánta gente participa en cada edición?

En los certámenes nacionales de programación llegan entre 60 y 70 chicos, de muchas


provincias, no menos de 12 o 14 provincias. Los seis mejores del certamen nacional en
el nivel más alto se suman a los cuatro mejores del segundo nivel, y con esos 10 se hace
un certamen de selección, del que saldrán los cuatro integrantes del equipo olímpico. El
certamen de selección tiene las mismas condiciones que la internacional: tres días, dos
de competencia con uno intermedio de descanso, con tres problemas en cada día de
competencia. Así logramos tener mayor seguridad de las capacidades de los chicos,
porque los chicos pueden tener un día no muy bueno. Por lo tanto, tratamos de eliminar
toda posibilidad de equivocarnos en la selección. Creo que una de las cosas más
importantes es premiar a aquellos que tienen el talento y el esfuerzo para llegar a un
buen nivel de preparación para la Olimpíada.

Después de la selección, que fue hace poco más de un mes, hacemos el entrenamiento
previo al viaje, que lo hacen los 4 chicos del equipo. La preparación es esmerada, es
aceptable. En este momento, Argentina está dentro de la primera mitad, y dentro de ella
figura en el tercer tercio. Esa es la posición que tenemos, no puedo pretender mucho
más. Como digo siempre, hay países y países, igual que hay marcas en Formula 1: tenés
a Ferrari, McLaren, etc, y después vienen Red Bull y otras. Es cierto que alguna vez
podemos llegar a un podio, como el caso particular de chicos nuestros que han llegado a
medallas de plata y oro, pero la realidad nuestra está en la primera mitad. O sea, los
resultados son razonablemente buenos. Yo estoy contento y satisfecho, lo cual no indica
que me conforme. Uno siempre tiene que intentar mejorar.

Rogelio García Llano: "Pretendemos que los chicos empiecen a ver desde pequeños que el uso de esta herramienta es
importante."

Para ud., que está en contacto con los chicos, y teniendo en cuenta estos buenos
resultados, ¿qué hace falta mejorar?

Primero, falta una base mayor de chicos que se interesan por la programación. Segundo,
nos falta que curricularmente la educación esté también de ese lado. La programación
no es una materia en los colegios, salvo en algunas escuelas técnicas, donde hay talleres
o cosas así. La programación no es más que una forma de estructurar el pensamiento
para resolver problemas.

Si bien es cierto que uno puede decir que no es bueno estructurar a la gente, está bien.
Pero tampoco es bueno dejar que sigamos pensando que los argentinos somos
excelentes en la improvisación. Es cierto, sabemos improvisar y resolver problemas en
emergencias. Pero la improvisación es una muestra clara de que no tenés programación,
planeamiento, previsión. Entonces, si uno tiene que improvisar y carece del talento para
hacerlo, lo más seguro es que de la improvisación te surja otro problema, que deberás
resolver improvisando de nuevo y por lo que te crearás más problemas. Así, de un
círculo virtuoso sale un círculo vicioso.

Creo que es mejor tener una estructura de razonamiento bastante clara


independientemente de que sigamos teniendo nuestra cuota de talento para la
improvisación.

¿Cuáles son los mejores equipos que participan?

Por un lado, los chinos. Por otro, creo que los países de Europa del Este están muy
sólidos: Rumania, Bulgaria, Croacia andan muy bien. En la última olimpíada, Italia, que
nunca había sobresalido, obtuvo tres medallas. En Argentina, podemos tener la
satisfacción de decir que estamos por encima de Brasil, Venezuela, Colombia, de Cuba a
veces. Cuba es pobre en lo que hace a cantidad de recursos. Nunca llevan más de dos
chicos, que en general sacan medallas. No se si es bueno o malo, pero marca un nivel de
rendimiento de nuestros chicos en las Olimpíadas Internacionales.

Y de los que siempre sacan medallas, ¿qué se puede aprender, tanto en lo


organizativo como en el nivel de preparación?

Hay cosas que no vamos a poder aprender. Los que sacan medallas es porque quieren
sacar medallas. Porque una medalla implica un cambio de vida futura para ese chico.
Normalmente, es preseleccionado un año antes; a veces, dos años antes. Lo ponen
durante un año a trabajar solamente en eso, sin ir a la escuela ni nada, cosa que no es
nuestro objetivo. El objetivo que nos ha sugerido el Ministerio de Educación es que los
chicos aprendan, entrenen y participen, pero no es el objetivo ir en busca de la medalla.
Se podría hacer. No sería complicado conseguir una medalla si yo agarro a los tres o
cuatro talentosos y les digo que no van a ir al colegio por este año, que les voy a dar
tales o cuales ventajas a posteriori, como pagarles una cadena terciaria en la universidad
de su elección, privada o pública. Van a tener otras ventajas adicionales, como su propia
computadora, cosas que no ocurren. El objetivo es probar cuánta capacidad potencial
tenemos para aplicarla, en este caso, en competencias a nivel secundario. Tenemos
chicos con talento, pero tampoco pretendemos sacrificar cosas para tener una medalla,
que no es el objetivo central.

¿Cuál sería el mensaje que le daría a un chico interesado en participar?

¿Qué le diría? Primero, que entre a la página www.oia.org.ar. Que vea ahí qué tipos de
problemas se toman, que lea el reglamento, la estructura organizativa, etc. Si realmente
está interesado, que se contacte con nosotros. Dependiendo de qué provincia sea, lo
pondremos en contacto con el coordinador provincial. Y que lo haga con todo gusto.

Si no le gusta la programación o estudiar la matemática más profunda, puede participar


igual. El objetivo es sacarlos un poco de la calle, o de navegar por la web buscando
pavadas o tonteras.

A mí muchas veces me preguntaron: la computadora, ¿es mala o es buena? Es como el


hierro. Si lo uso para hacer discos de arado, seguramente será buenísimo. Si lo uso para
hacer balas de cañón, seguramente no es bueno. Si uno usa bien esta herramienta, es una
herramienta impresionante, fuerte, beneficiosa. Así como tiene esas cosas, puede tener
“contraindicaciones”.

Pretendemos que los chicos empiecen a ver desde pequeños que el uso de esta
herramienta es importante. Hace poco, se hablaba del analfabetismo. Yo tengo bastantes
años, por lo que para mi el analfabeto era el que no sabía leer y escribir. Después de
tantas experiencias a lo largo de mis años, puedo decirte que el analfabeto es aquel que
no sabe dos idiomas además de la lengua madre, y que no sabe sentarse frente a una PC
y dialogar con la máquina. Además, no sucede como antes, que era muy caro. Ahora no
lo es. Y creo que esa es la línea del Ministerio en lo que hace a que la informática se
ponga cada vez al alcance de más gente. Cualquier ciencia, blanda o dura, puede usar la
informática. Es una herramienta, no es otra cosa. Es cuestión de utilizarla para hacer el
bien. Es una herramienta que es imposible de no conocer y tratar de utilizar.

El certámen provincial/nacional se va a hacer a mediados o fines de octubre, o sea que


tenemos tiempo para organizarlo. Lo único que me preocupa un poco en este momento
es ver cómo estructurar todo para estar con total seguridad y con todos los elementos
que deben ser tenidos en cuenta para organizar una Olimpíada en Mendoza en tiempo y
forma. Si bien no está confirmado, estamos en contacto con la gente de Mendoza.
¡Espero que lo podamos lograr!

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