La centralización administrativa es una de las formas de organización
administrativas más importante en nuestro país debido a que el poder ejecutivo no solo representa la cabeza legal sino también es como un gran administrador. Debido a esto el presidente tiene ciertos poderes que son de gran importancia para llevar a cabo una buena administración pública, como son el poder de decisión a través de la cual elije lo que hace con los recursos de la nación; el poder de nombramiento para elegir de la mejor manera a sus funcionarios de acuerdo a las leyes correspondientes; poder de mando para ordenar a los subordinados de manera que cumplan con los objetivos de la administración pública y por último los poderes de revisión y vigilancia mediante el cual supervisa a sus subordinados.
Estos poderes que tiene el presidente vital para que se lleve una buena administración pública y se cumplan con los objetivos.
En México la administración pública recae no solo en el presidente sino
también en sus secretarias y está dividida en federal que es la administración que tenemos en los 31 Estados y el Distrito Federal; local que es la admón., que se lleva a cabo en cada Estado de la Republica y la municipal.
La administración pública de nuestro país es tan compleja que el poder
ejecutivo se ha visto en la necesidad de recurrir a la descentralización de algunos organismos para que de alguna manera le sea más fácil cumplir las necesidades de la población.
Dicha situación ha originado que la descentralización se divida en región
ya que es necesaria para cubrir los servicios públicos en determinados territorios; descentralización por servicios la cual realiza el presidente para dar satisfacción a todas las necesidades, las cuales no puede cubrir el de una manera correcta y se lo encarga a estos organismos descentralizados y la descentralización por colaboración que es la que realiza en coordinación con particulares para cubrir condiciones públicas para las cuales los organismos públicos no cuenta con el personal necesario. El ejecutivo federal también se apoya de la desconcentración que le otorga a ciertos órganos para que le ayuden con el cumplimiento de su función publica sin embargo cabe señalar que dichos órganos siempre tienen dependencia con la presidencia o una Secretaría.
A pesar de tantas separaciones o de la ayuda que busque el gran
administrador de nuestro país para llevar a cabo la función pública esto no implica ni nos garantiza que en nuestro país se lleve a cabo una correcta administración.