Tipos de fibras musculares

Los músculos de nuestro cuerpo están compuestos por fibras musculares que se clasifican
según el tipo de miosina por el que están compuestas. Se pueden clasificar en dos tipos
principales:

* Tipo I: Estas se pueden llamar de diferentes formas; fibras rojas, fibras lentas, oxidativas o
ST (Slow Tire).

* Tipo II: Estas también se pueden llamar de diferentes formas; fibras blancas, fibras rápidas,
glucolíticas o FT (Fast Tire). Este grupo de fibras se divide a su vez en dos subgrupos A y B.

TIPO I – Fibras rojas

Este tipo de fibras, están formadas por pocos filamentos gruesos de miosina, por lo que están
muy vascularizadas. Se caracterizan porque son de contracción más lenta, presentan una gran
resistencia a la fatiga y son buenas para realizar trabajos de media o larga duración a causa de
tener gran cantidad de mitocondrias (células encargadas de la generación de energía para
trabajos aeróbicos). Estas fibras son capaces de almacenar lípidos y glucosa, por lo que son las
indicadas para un buen rendimiento haciendo ejercicios aeróbicos.

TIPO II – Fibras blancas (Grupo A)

Contienen mayor número de filamentos de minosina pero menos gruesos, por lo que están
mucho menos vascularizadas. Además, acumulan menos cantidad de glúcidos y grasas.

Estas fibras, son las indicadas para actividades motrices de duración corta o rápida.

TIPO II – Fibras blancas (Grupo B)

Contienen menos filamentos de miosina, por lo que están mucho menos vascularizadas.
Acumulan muy poca cantidad de glúcidos y casi no acumulan lípidos. Son las indicadas para
trabajos de tiempos cortos y alta intensidad. Este tipo de fibras, son las más utilizadas a la hora
de trabajar en el gimnasio.

CONCLUSIONES

Como conclusión, decir que las fibras rojas son mejores a la hora de realizar ejercicios
aeróbicos por su resistencia a la fatiga, mientras que las blancas, serían las indicadas a la hora
de trabajar en el gimnasio. A la hora del reclutamiento de fibras al hacer deporte, siempre se
va a hacer de las que son más lentas a las más rápidas, primero se reclutarían las fibras blancas
y a continuación las rojas.

El tipo de fibras que tiene cada persona depende de su genética y pueden estar distribuidas
por el cuerpo de manera no uniforme, es decir, una persona determinada puede tener mayor
cantidad de fibras rojas en los brazos que en las piernas.

A la hora de sacarle mayor rendimiento al deporte que realizas, sería recomendable que
conocieras que tipo de fibras tienes en tu cuerpo, realizándote un estudio médico.