N° 370

Lunes, 8 de noviembre de 2010

Zapatero censura en el Congreso

la defensa de los pensionistas
El gobierno socialista sigue censurando las propuestas de la oposición:
Zapatero veta la enmienda conjunta del PP y siete partidos políticos más para
derogar la congelación de las pensiones.

El gobierno socialista de Zapatero es el primero que utiliza

sistemáticamente el veto en el Congreso para censurar el debate.
Felipe González solo lo ejerció en cuatro ocasiones, y con José María Aznar
no se llegó a utilizar nunca: Zapatero ha recurrido al veto en 50 ocasiones.
Ahora, Zapatero ha vetado 22 enmiendas de los grupos de la oposición que
ya estaban siendo debatidas por la Comisión de Presupuestos.

Zapatero incumple su compromiso electoral de consolidar el Parlamento

como el principal foro político.
Programa del PSOE 2008: “El Parlamento debe consolidarse como el principal
foro en el que se contrastan las distintas alternativas políticas, facilitando el
debate de los problemas que generan más inquietud a la ciudadanía».

El PP presenta un recurso de amparo ante la Mesa para evitar que el

PSOE siga impidiendo la libertad política en el Congreso:
Ningún otro gobierno de la democracia impidió el debate de Presupuestos.

Soraya Sáenz de Santamaría:

“El Gobierno no está para gobernar ni para comunicar, está para tapar la voz de
los diputados que venimos al Congreso a defender y hacer nuestro trabajo”

El gobierno socialista rompe la hucha de

los pensionistas para pagar su despilfarro
El gobierno socialista incumple el acuerdo de pagar las pensiones
mínimas con el dinero del Estado
En la reforma del Pacto de Toledo de 1996 se acordó separar las fuentes de
financiación y se decidió que el Estado debería soportar ese gasto.

El año que viene el gobierno pagará 200 millones menos de su cuota a

las pensiones mínimas y los endosará a la Seguridad Social.
El gobierno cargará a la Seguridad Social con el 60% del gasto para el
complemento de las pensiones mínimas.
El gobierno bajará su contribución a las cifras de 1996.

Zapatero pagó con el dinero de los propios pensionistas su promesa de

de elevar las pensiones mínimas cada año.
El Gobierno socialista no ha aportado un solo euro más para compensar las
subidas.

Y ahora Zapatero ha decidido también usar la caja de las pensiones para

encajar sus cifras de déficit presupuestario.