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“La Tradición en el Derecho Romano”

Definición legal de Tradición Art. 651 c.c.


La tradición es un modo de adquirir el dominio de las cosas, y consiste en la entrega que el
dueño hace de ellas a otro, habiendo por una parte la facultad e intención de transferir el
dominio, y por otra la capacidad e intención de adquirirlo. Lo que se dice del dominio se
extiende a todos los otros derechos reales.

La tradición según doctrina:


Es el modo más importante de los modos de adquirir del Derecho de gente. Descansa sobre
una idea muy sencilla. Tratándose de una cosa NULLIUS, el que toma posesión se hace
propietario, y esto es la Ocupación. Pero cuando se trata de una cosa de la cual se tiene ya
alguno la propiedad, es necesario, para adquirirla, que a la toma de posesión se una
abandono por parte del propietarios. Por eso, si el propietario entrega una cosa con
intención de transferir la propiedad a una persona que tenga la intención de adquirirla, es
conforme al derecho natural que haya traslación de la propiedad del beneficiario del
adquiriente: esto es la TRADICION.

Características de la tradición
a) Es un modo derivado. Es una forma de transferir el derecho real por acto entre
vivos que necesita la expresión de una voluntad anterior o precedente, la del
propietario (tradente), a favor del adquiriente.
b) En un modo de adquirir por acto entre vivos. La transmisión de un derecho real
originario en la muerte de una persona tiene su propio modo, que es la sucesión por
causa de muerte o partición de derechos hereditarios. El usufructo y la hipoteca se
constituyen, no se traditan. Los derechos personales se ceden a favor de una
persona denominada cesionario.
c) Es a titulo oneroso o gratuito. Si la tradición está precedida de compraventa,
permuta, aporte en sociedad o dación en pago, se realiza a título oneroso. Si va
precedida de donación es a título gratuito.
d) Es una convención. La convención es un negocio jurídico que crea, modifica o
extingue obligaciones. Por el contrato únicamente se crean obligaciones de allí que
todo contrato sea una convención, pero no toda convención sea un contrato. La
tradición es una convención, ya que tiene como fin exclusivo extinguir una
obligación emanada del título. El título ordena al vendedor la entrega de la cosa; la
tradición cumple este mandato. La única excepción en que la tradición crea
obligaciones se presenta en el contrato de mutuo o préstamo de consumo.

Un ejemplo claro es cuando Juan presta a Pedro $ 4,000.00 para que se los pague el
30 de enero. En el momento de traditar los $ 4,000.00, Pedro adquiere el
compromiso de pago. En este contrato si hay verdadera tradición. La tradición en la
compraventa tiene una misión frente al título antecedente y es la de extinguir la
obligación de entrega o transferencia del dominio (dare) por parte del vendedor.

Otro tipo de obligaciones surgidas del contrato subsisten aun después de la


tradición, como es por ejemplo la garantía por evicción o por vicios redhibitorios,
que el código siempre califica de derecho personal mueble.
e) El título que la origina debe generar la posibilidad de adquirir el derecho real.
El comodato, el arrendamiento, el depósito no generan tradición, ya que crean
obligaciones de hacer.
f) Es negocio jurídico dispositivo bilateral. Necesita la manifestación de dos
voluntades: la intención de transferir en el tradente y la intención de adquirir en el
adquirente. Según esta característica, es inadmisible la tesis de considerar la
tradición como una manifestación unilateral o aislada del tradente.
g) Por la tradición se adquiere el derecho real sobre cosas singulares,
excepcionalmente cosas universales como en la compraventa de un derecho de
herencia. Como por ejemplo: Juan muere y deja un heredero, Pedro. Este puede
venderle a Mario los derechos herenciales que le tocaran en la partición. Mario
adquiere el dominio por tradición.
Diferencia entre tradición y entrega
La entrega implica el hecho físico o material de poner una cosa en poder de otro, “pasar de
una mano a otra un derecho”. La tradición es una entrega especializada, con intención del
tradente de transferir el dominio y del adquirente de adquirirlo, con existencia previa de un
título atributivo de dominio. En la entrega propiamente tal no hay intención de transferir y
adquirir, y el título que la precede es precario o de mera tenencia, como ocurre en el
arrendamiento y el comodato. Quien adquiere un bien por tradición es dueño o cuando
menos poseedor, en contraposición a quien recibe por una simple entrega, que es apenas
tenedor o detentador.

Requisitos de la Tradición
1. Existencia de dos personas, tradente y adquiriente
2. Consentimiento exento de vicios entre tradente y adquiriente
3. Existencia de un título traslaticio de dominio que genere una obligación de dar
4. Entrega del bien

1. Existencia de dos personas, tradente y adquiriente. En el derecho romano se


conocían con el nombre de tradens y accipiens. El artículo 642 del Código
Civil denomina tradente “a la persona que por la tradición transfiere el dominio
de la cosa entregada por él o a su nombre, y adquirente la persona que por la
tradición adquiere el dominio de la cosa recibida por él o a su nombre”.

En la tradición, el tradente adquiere una obligación de dar, que es la de


transferir el dominio; es un deudor de la entrega y el adquiriente es su acreedor.
“La obligación vincula a dos personas (acto jurídico bilateral) si se trata de
cumplirla, apenas si es natural que concurran a ello ambas partes”.

1.1 Titularidad dominical en el tradente. El tradente debe ser dueño o titular


del derecho que transfiere y debe tener facultad para transferirlo. Desde el
derecho romano se ha expuesto que nadie puede transferir a otro un derecho
más extenso del que tiene; en el se permitía contraer obligaciones en un
contrato por una persona que no fuera titular del derecho, pero en la
ejecución o realización de la obligación si debía probar su calidad de titular
o propietario.

En la tesis tiene plena aplicación en nuestro derecho positivo. Como la


tradición es un medio para cumplir determinadas obligaciones, es decir,
sirve de pago, se aplica al tradente el artículo 663 del código civil “Si el
tradente no es el verdadero dueño de la cosa que se entrega por él o a su
nombre, no se adquieren por medio de la tradición otros derechos que los
transmisibles del mismo tradente sobre la cosa entregada”.

Cuando en el título se crea una obligación de dar, el tradente


obligatoriamente tiene que transferir el derecho, caso en el cual el pago hace
las veces de tradición. Si no somos dueños de la cosa pagada el pago no
vale, no hay tradición.

1.2 Propiedad aparente. No obstante el principio de que nadie puede transferir


a otro más derechos de los que tiene, se ha puesto especial atención en el
derecho moderno a su quebrantamiento, con el objeto de proteger la buena
fe exenta de culpa de los adquirente. Desde el derecho romano se ha
expuesto la tesis de que el error común e invencible es creador de derecho,
lo que equivale a decir que una apariencia seria de buena fe exenta de culpa
crea una realidad jurídica que debe ser respetada por toda la comunidad.

El ejemplo de un caso resuelto por la Corte nos puede ilustrar el tema: de


acuerdo con nuestra legislación, un bien inmueble adquirido a título oneroso
durante la existencia de la sociedad conyugal, aunque solo aparezca en la
escritura pública uno de los cónyuges, es la de la sociedad conyugal a título
de ganancial. Se disolvió una sociedad conyugal por muerte de la cónyuge,
y el marido, en vez de adelantar el juicio sucesorio, vendió el bien inmueble
objeto de ganancial a un tercero. Se adelanto el proceso de sucesión y en la
partición el bien inmueble correspondió a una de las herederas, que adelanto
una acción reivindicatoria contra el tercero para recuperar el bien.

El tercer adquirente logro demostrar dentro del juicio que en el certificado


del registrador el marido aparecía como propietario y que no sabía de la
existencia de la sociedad conyugal, ni de la muerte de la cónyuge; además,
del certificado se desprendía que las escrituras de adquisición estaban bien
otorgadas durante el tiempo necesario para adquirir por prescripción.

1.3 Capacidad del tradente y del adquirente. Como la tradición implica la


expresión de la voluntad, tanto el tradente como el adquirente requieren
capacidad. Los dementes, los impúberes y los sordomudos, que no pueden
darse a entender por escrito, no son capaces de hacer tradición. Tampoco la
pueden realizar por si mismos el menor de 18 años ni el prodigo interdicto.
Si hay una venta entre el hijo de familia y sus padres, obren conjunta o
separadamente en el ejercicio de la patria potestad, el acto adolecería de
nulidad absoluta.

Alessandri sostiene que el tradente debe tener capacidad de ejercicio, esto


es, facultad para disponer de la cosa, y el adquirente solo capacidad de goce,
atribuible a toda persona por el derecho de existir.

Somarriva afirma que el adquirente debe tener capacidad de administración,


y el tradente de disposición.

La tradición puede hacerse por intermedio de un representante legal. Los


traditar y adquirir en representación de sus hijos menores en ejercicio de la
autoridad parental, lo mismo los tutores y curadores. También la persona
incapaz de obrar puede hacerse representar por medio de un mandatario,
quien debe obrar dentro de los términos del mandato.
2. Consentimiento exento de vicios entre tradente y adquiriente. Si hay un
consentimiento viciado la tradición se anula. Es necesario concluir que también
a este fenómeno jurídico lo afectan el error, la fuerza y el dolo. El error puede
recaer en la persona, en el objeto y en el título.

a) Error en la persona. Este error en la tradición se refiere a la identidad


física de la persona. En materia de expresión del consentimiento es
principio general que el error en la persona no lo vicia, a no ser que la
consideración de esta persona sea la causa principal del contrato. Sin
embargo, tratándose de la tradición no rige el mismo criterio. El artículo
657 del código civil requiere para la validez de la tradición que no se
padezca error en cuanto a la persona a quien se hace la entrega, si del
contrato o negocio jurídico nace una obligación de entregar, es obvio
que su cumplimiento o pago debe hacerse al beneficiario de la entrega,
esto es, el acreedor. Si ese pago se hace a persona distinta, la tradición
es nula. Un ejemplo claro es cuando alguien compra un
electrodoméstico y será entregado a domicilio y es entregado en el
apartamento del vecino, este error anula la tradición.

b) Error en el título (658 c.c.). Se pueden presentar dos situaciones: los


contratantes entienden que hay un titulo traslaticio, pero yerran respecto
a su naturaleza. Como por ejemplo vendo a Juan un caballo y él cree que
se lo dono. La donación y la venta son títulos traslaticios. La otra
situación se presenta cuando un contratante entiende que hay un titulo
de dominio y el otro entiende que hay una mera tenencia. En ambos
casos el error anula la tradición. Según el artículo 659 del código civil,
“si la tradición se hace por medio de mandatarios o representantes
legales, el error de estos invalida la tradición”.

Algunas nociones de fuerza en la tradición. La fuerza vicia el


consentimiento “cuando es capaz de producir una impresión fuerte en
una persona de sano juicio, tomando en cuenta la edad, sexo o
condición. Se mira como una fuerza de este género todo acto que
infunde a una persona un justo temor de verse expuesta ella, su consorte
o alguno de sus ascendientes o descendientes a un mal irreparable y
grave”. La fuerza la puede emplear uno de los contratantes o un tercero,
y más aun, puede obedecer a un hecho de la naturaleza o a una fuerza
extraña que ponga a la víctima en un estado de necesidad y por tal factor
realice el negocio jurídico. Un estado de violencia generalizado puede
originar la fuerza como vicio de consentimiento:

“En caso de perturbación del orden publico que haya dado lugar a la
declaratoria del estado de sitio por conmoción interior, se tendrá como
fuerza que vicia el consentimiento cualquier aprovechamiento que del
estado de anormalidad se haga en la celebración de un acto o contrato
que se traduzca en condiciones tan desfavorables que logran presumir
que en circunstancias de libertad jurídica no se hubieran celebrado”.
Como por ejemplo alguien vende su finca en condiciones desfavorables
porque la zona está bajo el control de la guerrilla, puede apelar a la
nulidad relativa del contrato por la presencia de la fuerza en la expresión
del consentimiento.

En el caso del dolo es un procedimiento engañoso o maquinación que


induzca al tradente o adquirente a expresar su voluntad, anula la
tradición.

3. Existencia de un título traslaticio de dominio que genere una obligación de


dar. La tradición es un modo derivado porque necesita la expresión de una
voluntad anterior o precedente que transfiera el derecho real. Esa expresión del
tradente se debe consignar en el título, que debe ser, en e l caso de la tradición,
de aquellos potenciales para adquirir el dominio: compraventa, permuta, aporte
en sociedad y mutuo, entre otros. Si el título no tiene esa característica, no
puede originar la tradición, como ocurre en el arrendamiento y en el comodato.

El titulo es un fenómeno jurídico que antecede necesariamente al modo. Por


ejemplo si Juan entrega a Pedro un caballo antes de la celebración del contrato
de compraventa, esa entrega no puede ser tradición por cuanto no tiene el título
como antecedente. Mientras no opere la tradición, aun realizado el título, el
transferente sigue en su calidad de propietario y, por tanto, las acciones
emanadas de este derecho solo a él corresponden. En el lapso comprendido
entre la celebración del negocio jurídico y la tradición, el vendedor puede
disponer de su derecho (hipotecar, dar en prenda, constituir servidumbre y aun
vender a otro). En este caso, el comprador afectado tiene acción de
indemnización de perjuicios contra el vendedor. No procede la acción
reivindicatoria, ya que no es titular del derecho real.

3.1 Concepto de seudotradición. Se conoce como seudotradición o tradición


medio, aquella que no transfiere el dominio, sino que pone al adquiriente en
calidad de poseedor con esperanza de adquirir por prescripción. Por ejemplo
si Juan tradita cosa ajena a Pedro, este es un poseedor, no un propietario.
Como no adquiere por tradición, no le queda más camino que la
prescripción para llegar a ser propietario.

En el titulo debe cumplirse además con las solemnidades exigidas por la ley
para que genere una tradición valida. “si la ley exige solemnidades
especiales para la enajenación, no se transfiere el dominio sin ellas” (Art.
660 c.c.). Vender un inmueble de un menor, sin autorización judicial, o
comprar un inmueble por escritura privada, no puede generar tradición.

4. Entrega del bien. No obra lo mismo la tradición de los bienes muebles que la
de los inmuebles. Para transferir la propiedad de cosas muebles se necesita la
entrega material, un desapoderamiento real y visible de la cosa (Art. 665 c.c.).
en cambio, la tradición del dominio de los derechos reales se efectúa por la
inscripción del título en la oficina de registro respectiva (Art. 667 c.c.). Este
requisito de la entrega material tiene aplicación tratándose de bienes muebles.

Tradición de cosas corporales muebles:


Según la doctrina se conoce como: Desmaterializacion o Espiritualización de la tradición y
tiene además del contenido expuesto el efecto de considerar transferido el dominio por el
mismo contracto, lo que de cierta manera contraria el espíritu del legislador defensor
acérrimo la teoría del titulo del modo y el modo en la transferencia del dominio. Según
Articulo 568 del código civil nos establece el dominio.
Las cosas corporales muebles deberán hacerse un significado de las partes a la otra parte
que le transfiere al dominio y las considerara como:
1. Real: El tridente pone el bien en el poder de adquirente permitiéndole la
aprehensión material. A veces la ley exige obligatoriedad de este tipo de tradición,
como ocurre con la factura cambiaria de compraventa. No podrá librarse factura
cambiaria que no corresponda a una venta efectiva de mercadería entregada a lo real
y materialmente al comprador.
2. Longa Manu: Se produce por indicación o señalamiento de la cosa. “Se supone
alargada a la mano hasta tomar posesión de un objeto.
3. Simbólica: Entregándole las llaves del granero, almacén, cofre o lugar cualquiera
en que este guardando una cosa.
4. Entrega Entendida: El tradente se obliga a poner la cosa a disposición del
adquirente en determinado lugar.
5. Tradición de Frutos: Cuando con permiso del dueño de un predio se toma en la
piedra, frutos pendientes u otras cosas que forman parte del predio, la tradición se
verifica en el momento de la sepacion de estos objetos. Aquel a quien se debieren
los frutos de una sementera, viña o platio podrá entregar a recogerlos, fijándose el
día y hora de común acuerdo con el dueño. Si se trata de frutos naturales (una
cosecha, por ejemplo) la tradición se efectúa cuando se separan de la tierra o cosa
que produce. Si son frutos civiles, en el momento de percibir la renta o interés del
capital. Para que una persona adquiera el dominio de un bien mueble se necesita el
cumplimiento de dos proceso: Un titulo creador de la obligación de dar y la entrega
materia, que en tal caso se confunde con la tradición.
6. La tradición de bienes dados en prenda: según articulo 2134 del código civil. Un
bien dado en prenda puede ser objeto de enajenación por el deudor, pero la tradición
al comprador solo se entenderá realizada cuando el acreedor lo autorice o se haya
cubierto el crédito en totalidad, circunstancia esta que se debe constar en el
documento de la prenda suscrito por el acreedor.
7. La tradición forzada en la extinción del Domino: Cuando se decreta la extinción
del dominio como consecuencia de las actividades ilícitas el juez establecerá en la
sentencia ordenar la tradición del bien objeto de la acción de extinción a favor de la
nación.

Tradición de Bien Inmueble. Registro.


La tradición de los derechos reales constituidos sobre inmuebles se realiza mediante la
inscripción del titulo en la oficina de registro de instrumentos publicados. Como puede
apreciarse en un acto formal o simbólico que se origina el derecho en el adquiriente.
Para adquirir la propiedad y la posesión en bien inmueble hay que hacer lo siguientes
pasos:
Celebración de negocio jurídico apto para adquirir es decir escritura publica.
Tradición realizada por medio de la inscripción de titulo en la oficina del registro
de instrumentos públicos del lugar de la ubicación del inmueble.
Posesión del inmueble por el adquiriente.
De estos requisitos el segundo es el definitivo por qué el inmueble tiene que estar inscrito
en el CNR.porque son propietarios a partir del registro; si este no se ha realizado, el tridente
sigue en su condición de dueño. No puede confundirse de la tradición de bienes inmuebles
con la obligación de la cosa.
La tradición se realiza por la institución: Por la entrega es el acto que pone al adquiriente en
posesión de la cosa.
Efectos de la tradición:
Si la tradición se realiza por el verdadero propietario del bien, se transfiere por ella el
dominio al adquiriente. Si el comprador no es dueño, no puede transferir el dominio. Si es
poseedor regular, la entrega realizada solo genera para el adquiriente la condición de poseer
regular, con la ventaja de adquirir con un titulo justo. Si el comprador irregular y el
adquiriente esta de buena fe, adquiere una posesión regular. Si el comprador es un mero
tenedor de las cosas entregada por el o a su nombre, se excluye para adquiriente la
adquisición por tradición. El acto jurídico así no transfiere el dominio, pero pone al
adquiriente en calidad de poseedor la esperanza de adquirir por prescripción.

Como bien se entiende, en los tres casos anteriores el adquiérete no recibe el dominio sino
la posesión. Sin embargo, si el comprador adquiere con posterioridad el dominio de la cosa
entregada, se entiende que el dominio ha tenido efectos desde la fecha de entrega. Juan
vende a Rodrigo un radio que es de Jorge y se le hace entrega material el 24 de enero del
2009. Si posteriormente (el 4 de julio del 2009).

Juan Compra una radio a jorge, se entiende que Rodrigo, el adquiriente obtuvo la tradición
del mueble el 24 de enero del 2009.
La tradición, que en un principio fue invalida por haber faltado ese consentimiento, se
valida retroactivamente por la ratificación.

¿Cuándo puede exigirse la tradición?


Si la tradición es una forma un modo de ejecutar el titulo, lo normal es que se efectué o
realice una vez verificado este. “Se puede pedir la tradición de todo aquello que se deba,
desde que no hay un plazo pendiente en su pago; salvo que intervenga un decreto judicial.
No puede exigirse la tradición inmediatamente, cuando el titulo esta sometido al
cumplimiento de una condición, a la ejecución de un plazo o cuando existe una orden
judicial que impida su realización.

El plazo es un suceso futuro y cierto del cual depende la exigibilidad o la extinción de un


derecho o de una obligación. Ejemplo si le digo a Maria, “le entrego este carro el 25 de
diciembre de 1988”, el plazo es cierto, ya que forzosamente llegara el 25 de diciembre de
1988. Si en el titulo consta el plazo para la verificación de la tradición, hay que esperar su
llegada para que esta se realice.

¿Que ocurre con la tradición precedida de un titulo sometido a una condición?


En la compraventa de un inmueble en la escritura pública se consigna las condiciones
establecidas por las partes, como ocurre con muchas frecuencias con el saldo del precio que
se debe.

Tradición de Derechos Personales:


La persona que tiene a su favor un crédito a quien se le denomina acreedor, puede cederlo a
otra mediante una venta, donación, permuta o aporte en sociedad ( titulo traslaticios).
La tradición en los Derechos Personales que un individuo cede a otro, se verifica por la
entrega del titulo, hecha por el cedente al cesionario.
Es más enfático afirmar que La Cesión de un crédito no tendrá valor alguno entre el cedente
y cesionario, sino mediante la entrega el titulo. Según esta norma la única forma de
tradición de un crédito o derecho personal es la entrega del titulo y se descartan de planos
las demás formas de tramitar.
Disposiciones legales Código Civil
De La Tradición Y Del Registro De La Propiedad Raíz E Hipotecas
Capítulo I
Disposiciones Generales
Art. 651.- La tradición es un modo de adquirir el dominio de las cosas, y consiste en la
entrega que el dueño hace de ellas a otro, habiendo por una parte la facultad e intención de
transferir el dominio, y por otra la capacidad e intención de adquirirlo.
Lo que se dice del dominio se extiende a todos los otros derechos reales.

Art. 652.- Se llama tradente la persona que por la tradición transfiere el dominio de la cosa
entregada por él o a su nombre, y adquirente la persona que por la tradición adquiere el
dominio de la cosa recibida por él o a su nombre. Pueden entregar y recibir a nombre del
dueño sus mandatarios, o sus representantes legales. En las ventas forzadas que se hacen
por decreto judicial a petición de un acreedor, en pública subasta, la persona cuyo dominio
se transfiere es el tradente, y el Juez su representante legal. La tradición hecha por o a un
mandatario debidamente autorizado, se entiende hecha por o al respectivo mandante.

Art. 653.- Para que la tradición sea válida debe ser hecha voluntariamente por el tradente o
por su representante. Una tradición que al principio fue inválida por haberse hecho sin
voluntad del tradente o de su representante, se valida retroactivamente por la ratificación
del que tiene facultad de enajenar la cosa como dueño o como representante del dueño.

Art. 654.- La tradición, para que sea válida, requiere también el consentimiento del
adquirente o de su representante. Pero la tradición que en su principio fue inválida por
haber faltado este consentimiento, se valida retroactivamente por la ratificación.

Art. 655.- Para que sea válida la tradición en que intervienen mandatarios o representantes
legales, se requiere además que éstos obren dentro de los límites de su mandato o de su
representación legal.
Art. 656.- Para que valga la tradición se requiere un título traslaticio de dominio, como el
de venta, permuta, donación, etc. Se requiere además que el título sea válido respecto de la
persona a quien se confiere.

Art. 657.- Se requiere también para la validez de la tradición que no se padezca error en
cuanto a la identidad de la especie que debe entregarse, o de la persona a quien se le hace la
entrega, ni en cuanto al título. Si se yerra en el nombre solo, es válida la tradición.

Art. 658.- El error en el título invalida la tradición, sea cuando una sola de las partes
supone un título traslaticio de dominio, como cuando por una parte se tiene el ánimo de
entregar a título de comodato, y por otra se tiene el ánimo de recibir a título de donación, o
sea cuando por las dos partes se suponen títulos traslaticios de dominio, pero diferentes,
como si por una parte se supone mutuo, y por otra donación.

Art. 659.- Si la tradición se hace por medio de mandatarios o representantes legales, el


error de éstos invalida la tradición.

Art. 660.- Si la ley exige solemnidades especiales para la enajenación, no se transfiere el


dominio sin ellas.

Art. 661.- La tradición puede transferir el dominio bajo condición suspensiva o resolutoria
con tal que se exprese. Verificada la entrega por el vendedor, se transfiere el dominio de la
cosa vendida, aunque no se haya pagado el precio, a menos que el vendedor se haya
reservado el dominio hasta el pago o hasta el cumplimiento de una condición. Lo dicho en
el precedente inciso se entiende sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 1675.

Art. 662.- Se puede pedir la tradición de todo aquello que se deba, desde que no haya plazo
pendiente para su pago; salvo que intervenga decreto judicial en contrario.
Art. 663.- Si el tradente no es el verdadero dueño de la cosa que se entrega por él o a su
nombre, no se adquieren por medio de la tradición otros derechos que los transmisibles del
mismo tradente sobre la cosa entregada.

Pero si el tradente adquiere después el dominio, se entenderá haberse éste transferido desde
el momento de la tradición.

Art. 664.- La tradición da al adquirente, en los casos y del modo que las leyes señalan, el
derecho de ganar por la prescripción el dominio de que el tradente carecía, aunque el
tradente no haya tenido ese derecho.

DE LA TRADICION DE LAS COSAS CORPORALES MUEBLES


Art. 665.- La tradición de una cosa corporal mueble deberá hacerse significando una de las
partes a la otra que le transfiere el dominio, y figurando esta transferencia por uno de los
medios siguientes:
1º Permitiéndole la aprehensión material de una cosa presente, o entregándosela realmente;
2º Mostrándosela;
3º Entregándole las llaves del granero, almacén, cofre o lugar cualquiera en que esté guarda
la cosa;
4º Encargándose el uno de poner la cosa a disposición del otro en el lugar convenido.
5º Por la venta, donación u otro título de enajenación conferido al que tiene la cosa mueble
como usufructuario, arrendatario, comodatario, depositario, o a cualquier otro título no
traslaticio de dominio; y recíprocamente por el mero contrato en que el dueño se constituye
usufructuario, comodatario, arrendatario, etc.

Art. 666.- Cuando con permiso del dueño de un predio se toman en él piedras, frutos
pendientes u otras cosas que forman parte del predio, la tradición se verifica en el momento
de la separación de estos objetos.

Aquel a quien se debieren los frutos de una sementera, viña o plantío, podrá entrar a
cogerlos, fijándose el día y hora de común acuerdo con el dueño.
CAPITULO III
DE LAS OTRAS ESPECIES DE TRADICION
Art. 667.- La tradición del dominio de los bienes raíces y de los derechos reales
constituidos en ellos, salvas las excepciones legales, se efectuará por medio de un
instrumento público, en que el tradente exprese verificarla y el adquirente recibirla. Este
instrumento podrá ser el mismo del acto o contrato, y para que surta efecto contra terceros,
deberá inscribirse en el Registro público de la Propiedad.
Los instrumentos privados otorgados con anterioridad a la vigencia de este Decreto, cuyo
original se hubiese perdido, tendrá el mismo valor la certificación del libro respectivo,
expedida por el Alcalde Municipal con citación de la parte contraria. (10)

Art. 668.- La tradición del derecho de hipoteca se verifica por la anotación de la escritura
que la constituye, en el competente Registro de hipotecas. La tradición y anotación de
hipotecas, en el caso de subrogación legal, se sujetará a lo dispuesto en el artículo 1483.

Art. 669.- La tradición de la herencia se verifica por ministerio de ley a los herederos, en el
momento en que es aceptada; pero éstos no podrán enajenar los bienes raíces ni constituir
sobre ellos ningún derecho real sin que preceda la inscripción del dominio de dichos bienes
a su favor, presentando al Registro el título de su antecesor, sino constare a favor de éste la
inscripción, y los documentos auténticos que comprueben la declaratoria de su calidad de
herederos, o la adjudicación de tales bienes al que pretenda su inscripción. La tradición se
retrotrae al momento de la delación.

Art. 670.- La tradición de un legado de cosa inmueble se efectúa por medio de una
escritura pública en que el tradente exprese entregarlo y el legatario recibirlo; en esta
escritura se insertará la cabeza, cláusula y pie del testamento en que conste el legado.

Art. 671.- La tradición de un derecho de servidumbre se efectuará por escritura pública en


que el tradente exprese constituirlo, y el adquirente aceptarlo.
Art. 672.- La tradición de los derechos personales que un individuo cede a otro, se verifica
por la entrega del título hecha por el cedente al cesionario con una nota que contenga, la
fecha de ésta, el traspaso del derecho al cesionario, designándolo por su nombre y apellido,
y la firma del cedente, o la de su mandatario o representante legal. La nota de que se habla
en el inciso precedente puede reemplazarse por un instrumento separado en que se haga
constar la cesión. Si no hubiere título, la tradición del derecho se opera por el otorgamiento
de un instrumento en que se consigne el contrato de cesión.

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