com/2008/05/14/how-to-waste-your-theological-education/ Mayo 14 - 2008
¿Cómo desperdiciar tu estancia en el Seminario?
1. Cultiva tu orgullo escribiendo solamente para impresionar a tus maestros en vez de
hacerlo para entender la verdad con mayor claridad. 2. Perfecciona el fino arte de ahorrar tiempo al no investigar realmente para tus tareas sino escribir tus incultas e insuficientes opiniones, acompañadas de notas al pie estratégicamente elegidas para llenar espacios y agregar “paja”. 3. Olvídate de que estás recibiendo educación cumulativa y confórmate con el conocimiento que ya has obtenido. Dite a ti mismo: “Estudiaré seriamente éste asunto cuando haga mi maestría o doctorado” 4. Aprópiate de una actitud de superioridad, competencia y crítica hacia tus compañeros de seminario. Murmura de ellos con otros amigos, hermanos y familiares. 5. Cuestiona constantemente la capacidad y sabiduría de tus profesores. Encuentra maneras de desacreditarlos y ponerlos en vergüenza; de preferencia en clase. Hazlos parecer bobos. 6. Descuida el devocional personal, congregarse, leer la Biblia y orar... 7. Olvídate de evangelizar a tus vecinos, tendrás una iglesia que atender. 8. Vuélvete hábil sacando ideas y declaraciones (con las que no concuerdas) de contexto y malinterpretandolas. Se perezoso y no inviertas tiempo en estudiar y entender puntos de vista opuestos; en vez de eso, alimenta tus prejuicios y exalta tus opiniones personales mediante lecturas superficiales y parloteo. 9. Expresa tus opiniones tan seguido como sea posible; especialmente en clase. Lanza preguntas que demuestren tu ignorancia en vez de interrogantes movidos por interés genuino. 10. Habla de movimientos heréticos, enseñanzas y doctrinas erróneas con un aire de fariseísmo y justicia. 11. Encuentra algo mejor que hacer en vez de servir a tu iglesia local. 12. Alimenta tu vida con películas cuestionables, televisión inmoral, internet sin restricciones y música de cualquier tipo. 13. Borra de tu agenda la oportunidad de tener comunión y rendir cuentas a otros hermanos en Cristo 14. Deja que tu estudio de cosas sagradas se vuelva monótono, aburrido, sin sabor y sin sentido 15. Apréndete de memoria el reglamento del seminario pero no te sientas obligado a obedecerlo; puedes romper las reglas argumentando que “después de toodo, esas reglas sólo exaltan el legalismo” 16. NO leas para aprender; lee sólo para criticar lo que pienses que sea incorrecto. 17. Convéncete a ti mismo de que ya sabes todo lo que te enseñan. 18. Sólo estudia, no lo pongas en práctica; ni en tu vida, ni en tu familia, ni en tu trabajo 19. No tomes notas en clase, después de todo, el verdadero conocimiento no es el que anotas sino el que puedes retener sin anotar ¿No? 20. No depserdicies tu tiempo haciendo amistad con tus profesores o gente mayor y más sabia que tu. 21. Comete el error de pensar que tu educación garantiza tu éxito ministerial. 22. No practiques una vida devocional. Nunca tendrás tanto tiempo para estudiar como lo tienes ahora en el seminario; así que dedícate a lo importante; sólo estudiar. Busca ser alivianado y despreocupado; no un obsesionado por Jesús. 23. Sueña constantemente en un futuro lleno de oportunidades hasta el punto de descuidar el presente como una oportunidad de aprender la Palabra de Dios 24. Dedícate a otras cosas mientras estás en clase en vez de poner atención; como tareas, planes, chatear, leer o cualquier otro asunto. 25. Gasta tu tiempo platicando en vez de estudiando. 26. Evita asistir a cultos y otras oportunidades de adoración comunitaria. 27. Enójate y vuélvete enemigo de todos aquellos que no piensan igual que tu. Hagas lo que hagas, no leas ni medites en 2 Timoteo 2:24-26 y Santiago 3:13-18 como parte de tu preparación. 28. Basa tus esperanzas en un ministerio pastoral tranquilo, cómodo y sin carencias, rechaza cualquier llamado (aunque venga de Dios mismo) a servir en una iglesia con dificultades. 29. Anhela que pronto llegue el día en que por fin te olvidarás de toda ésta teología para por fin predicar “Sólo a Jesús” 30. Olvidate del hecho de que antes que nada, estas llamado a ser proveedor, pastor y líder para tu propia familia. 31. Conoce todo acerca de Calvino, Owen y Edwards; pero no te preocupes por conocer la ley, los profetas y los apóstoles. 32. Adquiere conocimiento sólamente para enseñar a otros, pero no hagas el esfuerzo de lidiar con tu propio corazón. 33. Toma notas de los sermones de tu pastor los domingos, pero sólo para resaltar sus errores y subrayar su pobre razonamiento teológico, así no tendrás que convencerte de que lo que dice es útil para tí. 34. Protégete a ti mismo de la verdadera fraternidad hablando solamente de asuntos teológicos en vez de compartir tus luchas, pruebas y conflictos espirituales. 35. Justifícate a ti mismo con la ilusión de que tomarás en serio tu lucha personal con el pecado tan pronto como seas pastor; por ahora no es un asunto tan importante. 36. Eso de servir a los pobres, visitar a los enfermos y atender a la viudas y a los huérfanos; déjaselo a quienes no han ido al seminario a estudiar teología superior; tu tienes asuntos más nobles que atender. 37. Trata de sorprender a todos diciendo que te gusta predicar; pero evita lo más que puedas el aceptar invitaciones; si no hay necesidad de preparar sermones qué mejor. 38. Deja que la envidia te obstaculice a reconocer el buen trabajo de tus compañeros de estudio. 39. Evita servir detrás de las cámaras; sirve sólo cuando los elogios y reconocimientos estám asegurados; sólo donde todos te vean. 40. Da una apariencia de espiritual y connocedor por encima de todo. No dejes que nadie vea tus imperfecciones o ignorancia; si es necesario mentir no dudes en hacerlo. 41. Ama más los libros, la teología y la denominación que a Jesús mismo. 42. Deja que la pasión por el evangelio sea reemplazada por un interés en la doctrina y la especulación; mientras más complejo y enredado mejor. 43. Enójate y encárgate de que noten tu estado de ánimo cuando recibes menos que un 10. 44. Deja que tu pasión por el ministerio crezca o disminuya en la misma proporciòn en que recibes cumplidos o crìticas de tus profesores o compañeros 45. No te ocupes en estudiar lenguajes; deja que la Compu-Biblia y Bible Works hagan el trabajo por tí