HACIA UNA EDUCACION MÁS HUMANISTA

Damaris Rodríguez
Andrés Quintero
Tirzo Gutiérrez
Claudia Rodríguez

El pensamiento pedagógico del tercer mundo ha sido abordado desde dos puntos de
vista: el pensamiento pedagógico africano y el pensamiento pedagógico
latinoamericano, los cuales tienen como punto de partida común el hecho de que
han sido continentes colonizados por otras naciones y continentes, lo que hizo que
su cultura fuera puesta en riesgo de cambios y transformaciones muy profundas,
olvidando las culturas propias de cada comunidad a la cual llegaron.

Es así como en el contexto del pensamiento africano encontramos a Amilcar Cabral,

quien lucho toda su vida por la independencia de Guinea y las islas de Cabo Verde;
Julius Nyerere, presidente de Tanzania, quien promovió la educación para la
autoconfianza; y Antonio Faundez, filósofo chileno, especialista en sociología de la
cultura y la educación, cuyo aporte se basó en la educación de adultos y los
procesos de alfabetización, postalfabetizacion y cultura oral en la educación
africana.

Dentro del desarrollo del pensamiento pedagógico a partir de Latinoamérica se

resaltan los aportes de Francisco Gutiérrez, con relación a la pedagogía de la
comunicación, Rosa María Torres, pedagoga y lingüista ecuatoriana quien se enfoco
en la alfabetización popular, María Teresa Nidelcoff, educadora argentina que habló
acerca de la formación del profesor pueblo, Emilia Ferreiro, doctora en Psicología,
quien basada en el constructivismo, hablo acerca del aprendizaje de la lectura y la
escritura, y Juan Carlos Tedesco, sociólogo educacional, cuyo aporte fue
relacionado con la dinamización del sistema educativo.

A partir de este contexto se realizara un análisis crítico acerca de los diferentes

argumentos planteados que permitan fijar una posición sobre como fomentar una
transformación de las relaciones humanas entre los actores involucrados
en el proceso educativo a partir del pensamiento pedagógico del tercer
mundo.
mundo.

Es importante resaltar que el pensamiento pedagógico del tercer mundo es “aquel

pensamiento originado por la experiencia educativa de los países colonizados,
básicamente los de América Latina y los de África. Estos países construyeron una
teoría pedagógica original en el proceso de las luchas por su emancipación.” 1
Partiendo de ello, se reconocen algunos aspectos determinantes en el fomento de
una transformación en las relaciones humanas entre los actores del proceso
educativo, como son: estudiantes, docentes e institución educativa. Estos son: la
cultura, la autoconfianza, la alfabetización, la comprensión de la realidad, el
constructivismo y la dinamización del sistema educativo.

1
Moacir Gadotti. HISTORIA DE LAS IDEAS PEDAGOGICAS. Siglo Veintiuno Editores, S.A. de
C.V. Mexico. Pág. 215
Con relación a la cultura se puede decir que “aunque la cultura tenga un carácter
de masa, no es uniforme, no se desarrolla igualmente en todos los sectores de la
sociedad. […] La experiencia del dominio colonial demuestra que, en el intento de
perpetuar la explotación, el colonizador no solo crea un perfecto sistema de
represión de la vida cultural del pueblo colonizado, sino que todavía provoca y
desarrolla la enajenación cultural por parte de la población, ya sea por medio de la
asimilación de los indígenas, o por la creación de un abismo social entre las élites
autóctonas y las masas populares”.2

A diferencia de lo anterior, en el ámbito educativo se debe luchar por que los

individuos no se sientan colonizados en el proceso de aprendizaje, sino que puedan
retomar aspectos fundamentales de su cultura propia y contextualizarlos dentro de
su proceso de aprendizaje. Se debe propiciar el aprendizaje evitando que éste sea
apropiado por asimilación y evitando que se cree un abismo social entre los
individuos que aprenden y entre éstos y el conocimiento.

En la sociedad de Tanzania, la autoconfianza como filosofía educativa se oriento al

rescate de la confianza en sí mismo por parte de los ciudadanos, mediante el
estudio y la valoración de su cultura, moral e historia. Los educandos eran
formados para participar activamente en la construcción de la nueva sociedad,
buscando siempre la elevación de la calidad de vida de los ciudadanos. Un punto
importante en el desarrollo de esta filosofía fue el rescate y adopción del idioma
nativo, el “suvaili” como lengua oficial.

El texto plantea que los sistemas educativos en las diferentes sociedades son
diferentes por que las sociedades son diferentes. Independientemente de que la
educación sea formal o informal, debe cumplir el objetivo de “transmitir la sabiduría
y el conocimiento acumulados por la sociedad de una generación a otra, y preparar
a los jóvenes para tener un papel activo en el mantenimiento o desarrollo de esa
sociedad.”3 El sistema educativo de Tanzania plantea estimular valores como el bien
común, el bienestar humano y el compromiso comunitario. Se realza el empeño
cooperativo y no el avance individual, la calidad y responsabilidad de dar servicio
adecuado en cualquier formación, la preparación para el trabajo, la capacidad de
pensar de manera autónoma, y propone que la educación proporcionada debe
estimular en cada ciudadano el desarrollo de tres aspectos: una mente indagadora,
una habilidad para aprender a partir de otros, y una confianza básica en su propia
posición, en una sociedad en la que valora y es valorado por lo que hace y no por lo
que se obtiene.

De lo anterior se puede hacer la siguiente paráfrasis sobre el contexto de Tanzania:

“Los estudiantes de Colombia deben servir a los propósitos de Colombia. Deben
estimular el crecimiento de los valores a los que aspiramos.” Debe ser nuestro
objetivo que “nuestros alumnos sean instruidos para ser miembros y empleados de
un futuro justo e igualitario al cual este país aspira”4.

En el proceso de alfabetización, la lengua es considerada como expresión e

instrumento de comunicación con la realidad. Mediante su expresión concreta, el
2
Ibíd. Pág. 222-223.
3
Ibíd. Pág. 225.
4
Ibíd. Pág. 227.
lenguaje, es una de las manifestaciones culturales más ricas y completas. El
proceso de alfabetización debe ser entendido como parte del proceso cultural como
totalidad. De la misma forma, “el proceso cultural tiene sus formas específicas de
manifestación”5.

“En los países africanos, sobre todo, y en el nivel lingüístico, la cultura se expresa
fundamentalmente por medio de manifestaciones orales. Son culturas orales,
esencialmente. Los conocimientos empíricos, lo imaginario, los sentimientos, la
lucha política popular, la literatura, las técnicas, etc., privilegian lo oral, en
oposición a lo escrito. […] En África, los materiales elaborados en los procesos
educativos en los cuales participamos utilizan de manera abundante el
conocimiento popular y oral. De esa forma, algunos cuadernos de cultura popular
están completamente elaborados con base en la cultura oral, siendo imaginados por
el pueblo, escritos por él y para él.”6

Esto nos permite concluir que en el proceso de alfabetización es de vital

importancia partir de las costumbres y manifestaciones culturales y sociales de la
población a la cual se pretende alfabetizar. La comunidad responderá de manera
más positiva y comprometida a un proceso de alfabetización que incluya actividades
basadas en el contexto próximo de los aprendices.

El lenguaje total planteado por Francisco Gutiérrez en su tesis sobre la pedagogía

de la comunicación afirma que la pedagogía del lenguaje “lleva al perceptor el
placer nuevo y motivador del aprendizaje. El alumno siempre está queriendo saciar
su hambre de estímulos, sensaciones y percepciones. […] La educación deberá
promover, antes que nada, el desarrollo de aptitudes para asumir responsabilidades
tanto individuales como sociales frente a un mundo imprevisible y cada día menos
codificado.”7

Con relación a la alfabetización, la pedagoga y lingüista ecuatoriana, Rosa María

Torres, plantea nueve tesis sobre el proceso de alfabetización. Afirma que el éxito o
fracaso de la alfabetización depende de la experiencia y la capacidad para organizar
y movilizar a las personas al proyecto alfabetizador. La alfabetización debe ser
entendida como un proceso social de formación, organización y movilización de una
nueva conciencia crítica. También es importante una confianza auténtica en el
pueblo como protagonista activo y sujeto de sus propias transformaciones
históricas.

María Teresa Nidelcoff, enfoco su aporte educativo en proponer 13 líneas generales

orientadas a que las relaciones humanas prevalezcan entre docentes y estudiantes.
Su tesis plantea actitudes claras que deben delimitar el proceso de enseñanza
aprendizaje. Algunas de ellas son:

1. Los profesores son personas. Es importante valorizar la comunicación y sus

componentes afectivos. Buscar la comunicación individual y la corrección de
trabajos de manera individual.

5
Ibid. Pág. 229
6
Ibíd. Pág. 230, 231.
7
Ibid. Pàg.233.
2. Gustar de los alumnos, querer verlos felices. Ser conscientes de que vivimos en
una sociedad con profundos conflictos de clase.
3. Incluir dentro de la didáctica pedagógica la lucha por la paz, por la defensa del
medio ambiente y por la justicia social. Ser sensibles a la problemática de la
mujer.
4. Proponer el tema de los derechos humanos buscando la defensa de la dignidad
del hombre.
5. Tener una actitud de inquietud por fomentar la creatividad. Valorar el aspecto
lúdico.
6. La escuela debe asumir el descubrimiento de lo que nos rodea y de nosotros
mismos.
7. Crear un ambiente sereno y de respeto donde aflore la pluralidad.
8. Ir de lo conocido a lo desconocido. Aprender junto con los estudiantes a ser
libres, amar la libertad y descubrir lo que la anula.

La aplicación de estos criterios permitirá que se fomente una transformación en las

relaciones humanas entre los actores involucrados en el proceso educativo.

Los aportes que hace el pensamiento pedagógico del tercer mundo son
determinantes para establecer criterios respecto de cómo debe ser el actuar dentro
del proceso de enseñanza aprendizaje, más aún teniendo en cuenta las situaciones
específicas que se pueden vivenciar en la actualidad en un aula de clases, como son
las problemáticas en el hogar, en las relaciones entre padres e hijos, las relaciones
entre los mismos jóvenes con sus grupos sociales, la influencia de los medios
masivos de comunicaciones, entre ellos el internet, y otras situaciones que pueden
influir en el comportamiento y en el proceso educativo como tal.

Desde el punto de vista del constructivismo, Emilia Ferreiro, afirma que “la escuela
se dirige a quien ya sabe, admitiendo, de manera implícita, que el método está
pensado para aquellos que ya recorrieron, solitos, un largo y previo camino. El éxito
del aprendizaje depende, entonces, de las condiciones en que se encuentre el niño
en el momento de recibir la enseñanza.”8.

Con relación a la lectura y la escritura, Piaget habla acerca de dos tipos de errores,
el primero de ellos es en el proceso de conceptualización. Cuando el estudiante
comete errores, es importante que el profesor no trate de evitar tales errores,
porque al hacerlo está evitando que el estudiante piense. Otro tipo de errores es
producto del método, como resultado de la aplicación ciega de una mecánica.

Es importante que el docente genere espacios para que el estudiante descubra por
sí mismo en donde esta el error y trate de encontrar la solución al mismo, y por
otra parte, que no haga las cosas de manera mecánica sino que reflexione acerca
de cómo hacer determinado procedimiento y porque hacerlo de esa manera y no de
otra.

Por último, es importante resaltar la propuesta de Juan Carlos Tedesco, sobre la

dinamización del sistema educativo. El afirma que el carácter privado o estatal de
los establecimientos no determina el estilo de gestión característico de cada oferta
educativa. Plantea dos aspectos sobre los cuales es importante centrar la discusión
8
Ibíd. EL APRENDIZAJE DE LA LECTURA Y DE LA ESCRITURA. Pág. 243.
para generar cambios en un sistema educativo, El primero de ellos es el
igualitarismo con el que se considera a los docentes, el cual priva al sistema de la
eficiencia, y el papel de los directores de las escuelas, que debe pasar de ser
ejecutor de instrucciones a gestor y creador de alternativas apropiadas.

Con ello podemos concluir que la aplicación de cada uno de los aspectos
mencionados en el presente escrito contribuirán de manera apropiada y pertinente
a que la educación que se imparta sea cada vez más humanista, que contribuya a
la formación integral de los educandos, que las experiencias vividas como docentes
propendan por un fortalecimiento y constante mejoramiento de la labor docente,
que permita que los directivos docentes sean gestores de alternativas propias en
sus instituciones y que la actividad educativa impartida en la institución trascienda
fuera de la misma y beneficie a la sociedad en general, formando personas
integras, seguras del conocimiento adquirido, con perspectivas claras acerca de sus
roles dentro de la sociedad en pro de su fortalecimiento y transformación positiva.