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em aay EDITORIAL PORRUA nee a rr) 148 JOSE VIZCARRA DAVALOS CLASIFICACION DE LAS EXCEPCIONES ee ee Sesame 0 6 Foto Lat que suena : pe ‘De previo y Especial a Promnciaento |S Ue no spay EL PROCESO gen el process Por su omsenivo Dilatorias CONCEFTO ¥ OBIETO, 2.—DESARROLLO HISTORICO ‘PROCESO, 3.—NATURALEZA JURIDICA DEL PROCESO, POSTU= DDOCTRINALES MAS IMPORTANTES. 3.1.——Teoria contractualista. in eastk “Teoria de la situacién juriica. 3.3—Teoria de Ia institu = “Teoria de la relacién juridica, 3.5—Teoria de la pluralidad jones. 4.—RELACION JURIDICA PROCESAL, 4.1.—Los sujetos. ‘resupuestos procesales, 4.3.—Iniciacién, integracion y 0 de la relacion juridica procesal. 4.4.—Desarrollo de 1a jutidica procesal. 4.5—Suspensién de la relacion juridica '4.6.—ExtinciGn de Ia relaci6n juridiea procesal. 5.—Es- ‘DEL PROCESO, $.1.—El impulso procesal. 52—La precli- ‘proces. 53.—EI principio de contadiccin. $4—La adquisicién El principio de inmediacién. 5.6—El principio 57.—EI principio de eventualidad. 5.8—Cargas Las que se Resuelven Len la Sentencia, or el objeto. 6:2.—Por el modo. 63.—Por la forma de trami- LAS PAR HL PROCESO, 8.1,—Concepto persona fsica y moral 82.—Litis- i, 83.—Capacidad procesal de las partes. 84.—Sucesin ‘en juicio (personali leza juri jear Ia teorfa actualmente la mas aceptada. Jos presupuestos procesales, como se inicia y se desa- olla, los motivos de suspensién y de extincién. M49 JOSH VIZCARRA. DAVALOs Idemtificar los principios que integran 1a estructura. qq proceso. 1.7, Conocer las distintas clases de procesos. 2, En cuanto a las partes 2.1, Saber el concepto de parte 2.2. Tdentificar la persona fisica y moral 23. Explicar la litisconsorcio, 24, Dar la explicacién de capacidad procesa 2.5, Explicar sucesién y sustitucién de parte 2.6. Saber qué es personalidad y personeria, 1. CONCEPTO Y OBJETO Partiendo del principio constitucional (articulo 17) que no po- demos hacernos justicia por siimismos, que no es admitida la defensa propia del derecho y agotados los medios pacificos para la solucién del conflicto surgido con motivo de la relacién de ese derecho, debemos acudir a los Srganos jurisdiccionales para la proteccién del mismo. Desde que esa proteccién se invoca al in- terponer la demanda (forma normal en Ia que se materializa el cj cicio de la accién), hasta que el juez la concede o niega, media tuna serie de actos realizados por los que intervienen, cuyo conjunto toma el nombre de proceso. Etimolégicamente la palabra proceso de uso relativamente modemo, proviene del latin processus que sig- nifica accién de ir hacia adelante. En su acepcién general nos dice E, Pallares * que la palabra proceso significa, “un conjunto de fe nnémenos, de actos 0 acontecimientos que suceden en ef tiempo y {que mantienen entre si determinadas relaciones de solidaridad o vinci lacién”. Este concepto se aplica a los procesos quimicos, fisicos ¥ biotdgicos, ete., incluyendo los juridicos. Agrega que el proceso juridico “es una serie de actos juridicos que se suceden regular mente en el tiempo y se encuentran concatenados entre si por ¢l fin u objeto que se quiere realizar con ellos". Todo proceso tien€ tun objetivo o fin que es precisamente lo que da unidad o vinci" lacién a los actos del proceso. El proceso jurisdiccional tambié®™ pPodemos definrlo? como “e! conjunto de actos juridicos realizados po" * Diccionario de Derecho Procesal Civil, pig. 640 2 José Vieara oe ‘TEORIA. GENERAL DEL PROCESO 151 juez las partes, los terceros, los auxiliares de justicia, etc., con ptivo del cjercicio de la accién, cuyo fin es la sentencia ‘Con frecuencia existe confusién con el uso de los vocablos pro- 9, juicio, litigio y procedimiento, resultando importante estable- sus diferencias. Del primero ya qued6 precisado, La palabra icio? se deriva del latin iudicium que a su vez. viene del verbo dicare, compuesto de jus derecho y dicere, dare, que sig- fica dar, declarar o apiicar el derecho. Para Escriche el juicio Ja controversia 0 decisién legitima de una causa, ante y por el ez. competente’ Como el concepio de juicio esta vinculado al de litigio, para omprensién es necesario precisar el de este iltimo para enten- er mejor aquél. La palabra litigio o Jitis significa pleito o litigio al.’ También significa controversia, contienda, disputa, Por lo cuando esa controversia o pleito se plantea en un proceso, el juez, se le llama juicio, El proceso es el género y el juicio La palabra procedimiento en sentido estricto, es para designar onjunto de formalidades que revisten los actos © actuaciones ‘proceso. En sentido amplio se utiliza como sinénimo de. pro- 0 0 jucio, El Yerdadero fin del proceso puede inducirse considerando la én del juez y de las paries en el mismo. Indudablemente el ez desarrolla una funcién pablica y ésta procura el restablecimien- B del orden juridico mediante la actuacién de 1a ley: su misién Onsiste en_declarar sila voluntad abstracta de la iey ampa- ® el proceso civil sélo se inicia a instancia de parte y lo que fa busca es la satisfaccién de un interés individual, que se ob- mediante la actuacién de la ley en el proceso. Para el juez. Satisfaccién de un interés individual es objeto mediato, pues el 10 lo constituye el restablecimiento del orden juridico; para artes en cambio, lo inmediato es su interés individual. E1 que uiere una cosa en un comercio, dice Chiovenda, satisface una Residad personal y no tiene en cuenta el beneficio que con ella al comerciante; éste a su vez realiza un acto de su giro 8 Sogin E, Pallares on su obra precitada, pig 464 * Diccionario de La Real Academia de ia Lengua 152 Jost. VIZCARRA DAVALOs comercial y no le inferesa el destino que el comprador dé a la adguirida, Entre el juz y ol sueto de la Us no existe ciertances te una desvinculacién tan absoluta, pero cada uno de ellos buce cn el proceso un fin distinto. Por eso es aceptada la concepcise de Chiovenda de que “el proceso tiene por objeto la proteceicn de} derecho subjeivo mediante Ia actuacién del derecho objetivo y ca su regulacién debe tenerse en cuenta, tanto el interés privado dg Jos ltigantes como el interés piblico en el mantenimiento del orden juridico”. 2. DESARROLLO HISTORICO DEL PROCESO* 4) El proceso (civil) conserva todavia, especialmente en las na- ciones de raza latina, los caracteres generales del proceso romano, pero puede sefialarse la influencia del proceso germano, iniciada con la invasion de los barbaros en la Peninsula Hispénica, sobre todo a partir del fuero juzgo, que, como sabemos, fue la primera Jegislacién uniforme para los dos pueblos, porque resumia los prin- cipios fundamentales del Cédigo de Eurico y del Breviario de Aniano. 4) En el proceso romano, cuya estructura ya conocemos, 52 desarrollaba una actividad del Estado por un funcionario que aque nombraba y cuya misién era declarar el derecho; 1a interyencién del pueblo estaba reducida al juez que el magistrado designaba para que, en calidad de jurado, juzgase los hechos y resolvese la causa con arreglo a las instrucciones que aquél previamente le habia impartido, De alli los caracteres del proceso: era una institucién de derecho privado, en la que el juez desarrollaba una actividad intelectiva, porque decidia 1a contfoversia de acuerdo con su con- vviecién; por eso la prueba constituia una carga, ya que estaba destinada a formar esa conviccién y debia entonces recaer sobre los hechos particulares que las partes invocaban, Como consecuct cia, la sentencia obligaba tan s6lo a los que habian sido partes ca al litigio. ©) El proceso germano, en cambio, tenia una estructura y un ‘objeto muy distintos, Era un medio de pacificacién social: la solu- * H. Alsina en su citada obra, pig. 404, quien nos proporciona un resumes sobre este pinto bs ee . TBORIA GENERAL DEL PROCESO 153 gn dependia, no del convencimiento del juez, sino de ciertas for- idades en las que el pueblo veia una expresién de la divini . Objeto de la prueba no eran los hechos particulares, sino las jones de las partes, y los medios de prueba (juicios de Dios) 9 estaban dirigidos a formar la conviccién del jucz, sino a bus- “una manifestacién de la voluntad suprema, como emanacién de divinidad, y por eso no constituian una carga, sino un benefi- quien resistia Ia prucba del fuego era inocente, porque de la idad recibia las fuerzas necesarias para sobreponerse a los imientos, La misién del juez se limitaba a declarar a quién spondia la prueba, y por eso la primera parte del proceso aba con una sentencia, amada interlocutoria, en la que se esa declaracién. La sentencia definitiva se pronunciaba por asamblea, después de producida Ia prueba, y obligaba no solo Jos litigantes, sino a todos los que habian asistido a ella, porque Ta verdad absoluta revelada al pueblo por la divinidad, 4) Aunque en el periodo del renacimiento el Derecho romano ri nuevamente preponderancia, no sc volvié a su proceso 0, sino que se infiltraron numerosas instituciones.germanas, principios fundamentales sobre Ia prueba y la sentencia conti- on siendo romanos, pero tienen tradicin germana, la querela litatis, que es el antecedente del recurso de casacién; 1a divi- én del proceso en dos periodos, uno anterior y otto posterior a contestacién de Ia demanda; Ia divisién del proceso en varios estadios con términos diferentes y un orden predeterminado; el sis- ma de las prucbas legales, etc. Estas reminiscencias del forma- lismo germénico son las que dieron al proceso su extensin actual su complicada estructura. Posteriormente se introdujo la costum- dde hacer actas de las diligencias, con lo que el proceso, hasta onces oral, fue haciéndose escrito; las partes ya no formulaban de palabra sus pretensiones, y hasta las manifestaciones de los igos se consignaban por escrito, sin intervencion de los lit antes La influencia del derecho canénico, que se hizo sentir a partir de Ia Edad Media, sobre todo con sus métodos inquisitivos, ter- ‘mind dando al proceso una fisonom{a particular, que subsistié, Principalmente en materia penal, hasta la revolucién francesa. Junto ‘al proceso ordinario romano-germano, se formé otro proceso bre- We y sencillo, legislado especialmente en la “Clementina Saepe Con- 154 José: ViZcaRRA DAVALOS tingit”, que procuré coneretar en una audiencia todas las peticio. nes de las partes, afirmando el poder del juez. en la direccién de} pleito y admitiendo el juicio en rebeldia tal como hoy se le conoce Con este proceso general e indeterminado se favorecié el desarroll de los juicios especiales, principalmente cl ejecutiv. ¢) Sobre esta base, como hemos dicho, los glosadores clabo. raron un proceso denominado “comin”, que comenzé a aplicarse en Alemania en el periodo de la revepoién del derecho romano (fines del siglo xtv), y un siglo después se habia extendido a todo su tertitorio, pero alli bajo la influencia de la Hamada “evolucién cameralista “sufrié exageraciones que lo transformaron por com. pleto, En Francia Ia romanizacién del proceso era ya decisiva en el siglo x1v bajo la influencia del derecho canénico y los estudios del derecho romano, los rigores del formulismo se atemtian; al pro- cedimiento oral lo substituye el procedimiento escrito; los testis son examinados en secreto como en el proceso canénico; se supri- men las ordalias (juicios de dios) y se adopta el sistema de prucba romano, Pero en el norte de Francia continuaron aplicindose las costumbres germanas, lo cual permitié més tarde la elaboracién de tun nuevo proceso, En efecto, consolidado el poder central, fue pl ‘méndose un proceso tipico més racional, en gran parte por obra de las ordenanzas reales, que unas veces no hacian sino consagrar las pricticas seguidas por los parlamentos y otras introducian nue ‘vas formas de procedimientos. De esta triple fuente, derecho can nico, derecho feudal y las ordenanzas reales, derivé un proces® auténomo, a la vez oral y escrito, a diferencia del procedimiento feudal que era exclusivamente oral, y del procedimiento canénic® que era exclusivamente escrito, Este proceso tuvo su expresion ef la Ordenanza de 1667, en que se inspiré el cédigo de procedimies tos sancionado en 1806 ) Con Napolesn el Cédigo Francés se infiltro en Alemania rmostrando, dice Chiovenda, un enérgico contraste con el pesad ¥ complicado proceso germano, porque era mas simple, mis adapt do y mis ligero, presentando como realizadas oralidad y public dad que ya formaban confusamente las universales_aspiracion®s reformistas. Esto suscité con el ticmpo, una disputa sobre la conve niencia de mantener sus principios como orientadores de 1a futtft legislacién procesal germana, siendo fécil advertir su influenci TRORIA GENERAL. DEL PROCESO 155 Ja Ordenanza Procesal de 1877 en la que se inspiré mas tarde la P Ordenanza Procesal Austriaca en 1895, g) También on Italia después de la restauracién continué apli- feindose en algunos Estados el Cédigo Francés, y cuando se san- tions cl cédigo de 1865, justamente con las leyes existentes en flgunos Estados, en particular el Cédigo Sardo, fueron su fuente Gnmediata el Cédigo Francés y Ia Ordenanza de 1667. En esta evolucién del proceso se fueron estableciendo las carac- feristicas propias de los sistemas procesales mas representativos, il dispositivo y cl inquisitive, actualmente identificados con los pro- ieesos civil y penal respectivamente. Dada la importancia que epresentan, citando a H. Alsina‘ estas son sus principales carac- Heristicas y distinciones: El derecho positivo se diversifica en distintas ramas segiin sca Ja naturaleza de tas relaciones que regulan y ello hace que la tu- {ela juridica no siempre pueda realizarse por los mismos medios. De ahi la cxistencia de diversos procedimicntos en consideracién fl 6reano que deba aplicarlo y al derecho que se intenta tutelar {Gudicial, administrativo, militar, eclesiéstco, etc.). En ol orden ju- icial también 1a naturaleza del derecho impone un distingo, se- in que la violacién del mismo afecte los derechos de los par- ficulares 0 los gencrales de Ia colectividad: en el primer caso, la ffimacién del derecho se hace en el proceso civil; en el segundo, se Thace en el proceso penal. Esta es la razén, como hemos visto, de un erecho procesal civil y de un derecho procesal penal, que regulan espectivamente, la accién civil y la accién penal y para cuyo ejer- Gicio se instituyen a su vez el proceso civil y el proceso penal El procedimiento civil y el procedimiento penal, como es sabi- Mo, tuvicron origen y desenvolvimiento comin, lo que explica que Dor largo tiempo fuieron objeto, no sélo de una exposicién, sino Hambién de un tratamiento legislative unitario. El proceso de sepa- Hacién se inicié a principios del siglo pasado con la sancién del de Procodimientos Civil francés de 1806, seguido del Cédi- #0 de Instruccién Criminal en 1808, lo que determiné 1a aparicién diversas obras destinadas a su comentario. Pero es recién a pios de este siglo, con el florecimiento del derecho procesal Penal, que la doctrina establecié una linea de separacién absoluta "De su misma op. cit, pig. 408 156 J0S8. VIZCARRA DAVALOS proclamando la autonomia del proceso penal, tras de lo cual embargo, no tardé en producirse una reaccién en favor de su u dad conceptual Son principalmente los penalistas quienes sefialan, con una pre. cisién que parece convincente, las diferencias que los separan y lay que pueden resumirse asi: 1’—EI proceso civil tiene por objeta declarar la existencia o inexistencia de un derecho, o la repara. cidn de un dafio, 1o cual afecta al derecho privado; el penal ticne ppor objeto la averiguacién de un delito, la individualizacién de sy autor y la aplicacién de una pena, lo cual interesa el derecho piblico, porque el delito no existe con respecto al individuo sino frente a la sociedad; 2°—Como consecuencia de ello, el impulso cen el proceso civil corresponde preferentemente a las partes, en tanto que en el penal sc otorga predominantemente al jucz; 3%—El proceso civil tiene carscter subsidiario, porque sdlo funciona cn defecto de un entendimiento amigable de las partes, mientras que en el penal es obligatorio porque no puede exist pena sin pro- eso; 4"—En tanto que la accién civil puede ser intentada por cual- quiera aun cuando no esté legitimado, la penal slo puede serlo Por un Ministerio Piblico (oficialidad) y excepcionalmente por el ofendido; 5*—A diferencia de lo que ocurre en el proceso civil, en el que la relacidn procesal se perfecciona a initio, en Ia ins- truceién criminal no existe y sélo puede hablarse de ella en el ple- nario; 6°—El régimen de’las pruebas en lo civil es diferente que en lo penal. En éste la materia de la prucba pertenece exclusiva mente al derecho formal, es decir, al procedimiento, y por eso el ‘cédigo penal no contiene reglas al respecto. En cambio, Ia materia de la prueba en lo civil pertenece en gran parte al derecho civil: las relaciones tienen limitaciones, vinculaciones, y obstaculos. determi- nados por su contenido y se reflejan en la admisibilidad y eficacia de la prueba (forma de los actos juridicos, prueba de los contratos, tc.); 7°—Una controversia civil puede ser sometida a la decision de arbitros, mientras que en materia penal el proceso es indeclina~ ble; 8°—El proceso civil puede terminar por una transaccién, en cambio el penal es irrenunciable. Pero estas proposiciones no han quedado sin respuesta y asi Jos partidarios de la unidad han anotado, siguiendo el mismo of den que: 1°—En el proceso civil esta igualmente interesado c! ‘orden piblico y la diferencia no estriba en la naturaleza de la pre- TEORIA GENERAL DEL PROCESO 157 Uensién, resarcitoria o simplemente declarativa en el primero y pu- initiva cn el segundo, sino en la prevalencia del interés, privado 0 ipiblico, que puede influir en el modo de conduccién el proceso, pero que no supone una exclusién del interés pablico en el pro- e280 civil; 2°—Hay ciertos procesos civiles, como el laboral y el igoncursal, en que las facultades dispositivas de las partes se ha- flan anuladas pricticamente por las concedidas al juez; 3°—Tam- ‘bien existen ciertos procesos civiles obligatorios, como los que se friginan en las acciones consttutivas (divorcio, interdiccién, qui bbra, ctc.); 4°—La accién penal, en ciertas legislaciones, también (puede ser cjercitada por el particular ofendido y en algunos casos jes el duciio do la instancia, como ocurre en los delitos de accién pPrivada (querella); 5°—En la instruccién también hay relacién pro- esal, aunque imperfecta, porque no se admiten debates ni dofen- Sas, pero el juez no actia arbitrariamente sino con sujecion a eglas destinadas a proteger los derechos del acusado; 6"—La cir- Teunstancia de que et Cédigo Civil legisle sobre prueba no hace Derder a ésta su caricter procesal y, por otra parte, también el juez ide lo penal debe tener en cuenta sus disposiciones para pronun- iarse sobre ciertas cuestiones previas (Ia propiedad en el hurto, la Posesin en la usurpacién, el régimen de los instrumentos pi 60s y privados, ctc.); 7—En materia civil hay cuestiones que no PBueden someterse a la decisién de Arbitros, como las que versan obre cl estado y la capacidad de las personas y en general en Jas que estén interesadas la moral y las buenas costumbres 8°—Tambien el proceso penal puede extinguirse por Ia renuncia del @graviado en los delitos de accién privada (querella, Lo anterior demuestra que la diferencia no es a Ia esencia sino @ Ia estructura de ambos procesos. impuesta por la distinta natura- Teza de la materia a decidir y que es posible una teoria que com- Prenda los principios fundamentales que los informan. Asi, la Accién, concebida como el medio de provocar a actividad juris- iccional del Estado, admite una concepeién unitaria plicable en el proceso civil y en el proceso penal: en el primero es el indivi- uo quien se siente lesionado en su derecho y por es0 se le acuerda referentemente su cjercicio y excepcionalmente al Ministerio Piiblico cuando se halle interesado el orden piblico, como en el Proceso laboral; en el segundo, el lesionado es 1a sociedad y por Ello la accién corresponde al representante social y excepcional- 158 JOS VIZCARRA DAVALOS ‘mente se concede al individuo cuando el interés social cede anty el interés particular, tales son las acciones privadas o de instancig privada. Lo mismo puede decirse de la prucba en cuanto a su régimen de administracién, los términos, notificaciones, recursos, senten- cias, y otras tantas instituciones, que sin dificultad y probable. mente con ventaja, sobre todo desde el punto de vista prictico, pueden ser sometidas a un régimen uniforme. La uniformidad, sin embargo, no significa identidad, sino comunidad conceptual, que admite las peculiaridades de cada proceso y que hasta pueden ser recogidas en un mismo cuerpo legal 3, NATURALEZA JURIDICA DEL PROCESO. Posturas doctrinales més importantes: 7 Cual sea la esencia del proceso es uno de los problemas que todavia esperan una respuesta definitiva. Se han enunciado cinco soluciones fundamentales: 1*—La teoria contractualista, 2*—La de la situacién juridica; 3*—La de la institucién; 4*—La de la rela- cidn juridica, y $*—La de la pluralidad de relaciones. No se trata de meras especulaciones doctrinarias, sino de gran importancia practica, porque partiendo de puntos distintos se llega a conclusio- ‘nes diferentes, que inspiran luego los distintos sistemas procesales 3.1, TeoRIA CONTRACTUALISTA La teoria contractualista supone Ia existencia de una conven- cin entre el actor y el demandado, en la que se fijan los puntos del litigio y tiene su fuente los poderes del juez. Su antecedente se remonta a la litis contestatio del derecho romano, expresién que, segiin hemos visto, proviene de la presencia de cinco testigos en el sistema de las acciones de la ley, quienes Iuego expresaban ante cl juez 1a forma como haba quedado trabada la itis ante el magis- ‘rado y de cuyos puntos no podia aquél apartarse en la sentencia. El procedimiento formulario suprimié los testigos, substituyéndolos por la formula, pero mantuvo 1a division de las facultades del juz. En ambos casos era indispensable la presencia del demandado, y Por eso se autorizaron diversas medidas para hacerla efectiva. En 7 Bs Hugo Alsina, en su op. cit, tomo I, pig. 4 tun adecuado panorama sabre lat tors més sobresli ‘THORIA GENERAL DEL PROCESO 159 procedimicnto extraordinario subsistié el principio de la limi- j6n de los poderes dol juez. porque continuaba considerdndose proceso como una insttucién del derecho privado. Con estos carac- es pasd al derecho espatiol, y en la ley 3, titulo 10 de la Parti- Ill, se dice expresamente que el fundamento y principio del picio es 1a demanda y la contestacién. Sobre esta base se sostuvo por algunos que existia un verda- 0 contrato en el cual quedaban fijadas las cuestiones litigiosas, de alli que ni el actor pudiera mas adelante variar su demanda i el demandado sus cuestiones propuestas. Otros, en cambio, dvirtiéndo que cl consentimiento de las partes no es enteramente Tire, puesto que el demandado concurre por Jo comin contra su oluntad, sostuvieron Ia existencia de un acto bilateral que presenta cearacteres de un cuasicontrato, lo cual explica que los efectos de Ia cosa juzgada afecten solamente a quienes intervinieron en el Titigio. De esta doctrina participaron los pricticos espafiles. Pero no resulta dificil demostrar la inaplicabilidad de 1a doc ‘rina contractualista al proceso modemo. En el procedimiento ro- ‘mano cl juez desempeiiaba en realidad una funcién de drbitro, y Se explica entonces que sus poderes estuvieron limitados por la ‘Yoluntad de las partes, en tanto que hoy nadie discute que el juez Mena una funcién publica, que ejerce en forma delegada uno e los atributos de la soberania del Estado. La litis contestatio pro- ucia la novacién del derecho, que no renacia aun cuando la facciGn fuera rechazada por un impedimiento exclusivamente for- ‘mal, mientras que la procedencia de una excepcién dilatoria, ol desistimicnto y la perencién de Ia instancia, no afectan a ta ac ‘cidn misma, No es tampoco indispensable ahora la presencia del ‘demandado, pudiendo continuar el juicio en su rebeldia, y es evi- dente que no puede hablarse de convencién en ausencia de una de Jas partes 3.2. Teoria DE LA SITUACION sURIDICA La doctrina de la situacién juridica, expuesta por Goldschmidt, ‘comienza por negar la existencia de una relacién procesal. Es éste, dice, un concepto de absoluta inutilidad cientifica, porque los Mamados presupuestos procesales (capacidad de las partes y com- petencia del juez) no son condiciones de existencia de una rela- cidn juridica, sino de una sentencia de fondo valida, y porque no 160 Jost. VIZCARRA DAVALOS puede hablarse de derechos y obligaciones, sino de cargas proc sales, las que tienen su origen en la relacién de derecho piiblicy que, fuera del proceso, existe entre ol Estado, el érgano encarvady de la jurisdiccién y los individuos, El deber del juez de decidir lg controversia no es de naturaleza procesal, sino consttucional, « deriva de su carécter de funcionario piblico. En cuanto a los lis, mados deberes de las partes, éstas no tienen, como en el derecho romano, 1a obligacién de comparecer, pero esti en su interés ha cerlo si desean evitar las consecuencias de su ineomparecencia: Ig Hamada obtigacién de producir prueba no es sino la carga que tody ciudadano tiene de colaborar con la administracién de justicia, coma ‘ourre con los testigos; el lamado deber de buena fe no ¢s sino de caricter moral, aun'cuando se traduzea en normas legis En favor de la teoria que sostiene que el proceso es una relacion Jjuridica, se ha alegado el argumento de que el mismo implica una cooperacién de voluntades encaminadas al mismo fin: Ia sentencia Y que la sentencia tiene la fuerza vineulatoria que falta al princi Pio del proceso. Es cierto que la sentencia y mas exactamente su efecto, In cosa juzgada, es cl objeto del proceso; es igualmente cierto que, segiin algunas tcorias, la sentencia tiene la eficacia de un negocio juridico material, es decir la de alterar las relaciones juridicas materiales. Pero aun cuando estas tuviesen fundamento, en rigor cabria atribuir a los actos procesales la calidad de negocios juridicos, més no la de una relacion juridica, El hecho juridico que produce una relacién juridica no es por esa sola circunstancia una relacién juridica ni siquiera latente. Claro que el proceso no ha de considerarse como una serie de actos aislados. Pero un complejo de actos encaminados hacia un mismo fin, aun cuando haya v rigs sujetos, no llega por eso a ser una relacién juridica, a no ser que este término adquicra una acepeién enteramente nueva, Un fio no consttuye una relacién porque sea un complejo de co- sas semovientes. Por otra parte, es evidente que la peculiaridad Juridica del proceso determina la naturaleza del efecto del acto pro cesal. Pero ni uno ni otro constituyen una relacién juridica y efecto comin a que se refieren todos los actos procesales, desde Ja demanda hasta la sentencia, y que en realidad constituye la lunidad det proceso, es el derecho subjetivo material que el acto hace valer. TEORIA GENERAL DEL PROCESO 161 La norma substantiva, no s6lo debe ser considerada como un Gistema de regulacién de la conducta (imperativos), sino también Iomo un sistema de regulacién de la litis (medidas), que se diri- igen al juez y a las partes. Partiendo del punto de vista de que el Gerecho substantivo regula la conducta del juez y de que el objeto Wel proceso es beneficiar a una de las partes con la cosa juzgada, Ja sentencia constituye para ellas una expectativa, y por consiguien- fe, a las partes corresponde, mediante los tespectivos actos proce- ales, procurarse una situacién favorable y evitar las que pudieran [perjudicarle. El planteamiento del litigio importa entonces un esta- ido de incertidumbre, que es lo que caracteriza el aspecto dindmico Wel proceso, el derecho se reduce a la promesa de una sentencia favorable o la amenaza de una sentencia desfavorable, La situa- tcidn juridica, entendida como la esperanza a una sentencia favora- ble y, por consiguiente, al reconocimiento en juicio del fundamento ie una pretension, dependera de la previsién y actuacién de las partes en el proceso. No puede entonces hablarse de derechos y Gbligaciones entre las partes, sino simplemente de cargas y posibi- Jidades, ya que de ellas depende que la expectativa de una senten- cia se incline hacia una u otra de las partes. El juez no tiene para fon estas ninguna obligacién, sino que, como érgano del Estado, 5 quien rige y gobierna el proceso, fallindolo con arreglo a la ley. En resumen, s6lo puede afirmarse que las partes en el proceso “tienen espectativas (esperanza de obtener una ventaja procesal sin lun acto propio, como la que tiene el demandado de que la deman- da sea rechazada por un vicio de procedimiento); posibilidades (de fobiener una ventaja mediante la ejecucién de un acto, como la demanda, excepciones, recusacién, tacha de testigos, etc.), 0 libe- tacién de cargas procesales (reconocimiento del demandado, con- fesién del contrario, etc.), todo lo cual se traduce en situaciones del proceso. La teoria de la situacion juridica destruye sin construir, por ella se pierde la visi6n de conjunto que el concepto de relacién proce sal permite ver en el proceso una unidad. Es cierto que no puede hhablarse de derechos y obligaciones, porque estos conceptos corres- ponden al derecho sustancial 0 material, pero no puede negarse la existencia de deberes y facultades de la partes y del juez. La prueba es una carga, que impone el deber de aportarla para que el juez pueda tomarla en consideracién; la interposicién de un re- 162 Jost VIZCARRA DAVALOS curso es una facultad que puede dejar de usarse pero que pe levar el conocimiento dela Zits aun nuevo examen pa eee © por otro tribunal, etc. Los actos de las partes estin condicn” dos por cietos principios como Ia bilateraidad, y todos tensa objeto formar ta conviccién del juez. Esta docirina consider Proceso no como debe ser, sino como es a veces en la vide jini 8 decir, segiin lo hace notar Calamandrei, el proceso no seria wt medio para actuar el derecho, sino un medio para hacer valer con derecho lo que no lo es, criterio demasiado ealsta que no poole constituir el fandamento de una doctrina cientfiea, Ademis" tals situacién juridica supone una relacién juridica, y por tanto, una cor. Secuencia y no un estado auténomo dentro del’ proceso’ Por sna Parte, una consideracién de orden politico hace peligrosa esta tan tia aplicada a nuestrasinstituciones: por ella el juez queda exeluiag de ta relacién procesal y no debe dar cuenta de su conducts mic que al Estado, que le ha delegado sus funciones, es decir, priva” las partes de todo derecho de contro! 7 3.3, TEoRiA De La instiTuciON El concepto de institucién, enunciado en el , enunciado en el campo del derecho administrativo, donde se le define como “una organizacién je ca al servicio de una idea”, ha sido aplicado al proceso por Guasp, concibiéndolo como “una organizacién puesta al servicio de la idea de justicia”. Entendemos por institucién (dice Guasp), no simple mente el resultado de una combinacién de actos tendientes Ms, ino ampleo de aetividades relacionadas entre si Vineulo de una idea comin objetiva, a la que figuran adh sea esa 0 no su finalidad es Sot roliact ticulares de los sujetos de qi in aun por el ridas, specifica, las diversas voluntades par uienes proviene aquela actividad. La tucén se compone, pues, de dos elementos fundamentales, que son la trama y la urdimbre de un tejido: la idea objetiva y el con. junto de esas voluntades que se adhieren a dicha idea para lograr Su realizacin. Entendida de esta manera, no es diffil aplicar el concepto de institucién al proceso: la idea objtiva comiin que en aparece, es la actuacién o Ia denegacion de la pretensiém lee voluntades adheridas a esta idea son las de los diversos sujetos que fn el proceso figuran entre los que la idea c idea comiin crea una seri de vinculos de carécter juridico, 7 TEORIA GENERAL DEL PROCESO 163 De esta fundamentacién, Guasp saca las siguientes conclusio- 4@) El proceso es una realidad juridica de tendencia permanente den nacer y extinguirse continuamente procesos concretos. pero jdea de actuacién de pretensiones fundadas sigue siempre en pie) El proceso tiene cardcter objetivo (su realidad se determina, no or la actitud de las voluntades a las que se debe Ia actividad que o integra, sino por la significacién de la idea objetiva superiot a as voluntades); c) El proceso no sitia a los sujetos que en él atervienen en un plano de igualdad 0 coordinacién, sino en un lano de desigualdad o subordinacién; la idea jerérquica es tam- in consustancial en su contenido por las voluniades de los sujetos ales dentro de ciertos limites reducidos que no puede en modo yuno, extenderse ala alteracién de la idea fundamental del mis- €) El proceso os adaptable a la realidad de cada momento, SSin que la consideracién del respeto a situaciones subjetivas ante- fires tenga la misma fuerza que en wna relacién de tipo contractual En resumen Guasp considera el proceso como una institucién para que cn ella las partes formulen sus pretensiones y éstas sean cali- ficadas y resueltas por el rgano jurisdiccional Esta ‘concepeién ha provocado objeciones desde diversos puntos ‘de vista. Asi Wemner Goldschmit dice que Guasp no ha tenido en feuenta la diferencia entre cl enfoque estitico del proceso (teoria ide la relacién juridica) y el enfoque dindmico (teoria de la situa- ‘ein juridica), lo que le induce a dar prevalencia a la idea sobre Ta funcion, 0 sea que prescinde de a estructura del proceso para efinitlo por su objeto. Couture, que en un primer momento le habia pprestado su adhesin aunque sin fundarla, precisé luego el alcance de la misma reconociendo que el concepto de institucién es impre- iso: y agrega: “No cabe esperar que la definicién del proceso ‘como institucidn vaya a revolucionar la ciencia del derecho, ni que haya de sustiuir a las otras concepciones hoy dominantes, en par- ticular a la que concibe el proceso como una relacion juridica, a a que hemos prestado y continuamos prestando adhesion. Esta idea no constituye propiamente una doctrina, ni siquiera una nueva con- cepeién. Es apenas una forma més sencilla de entenderse, En un momento del derecho en que se conciben como instituciones el tra~ bajo, Ja empresa, el nombre y, sogin lo ha demostrado un escritor norteaméricano, hasta la Constitucién, por ello, bien podemos incorporar el proceso a esta abundante y no siempre bien avenida 164 JOSE VIZCARRA. DAVALOs familia institucional, para servimos de un vocablo que acenti dos o irs carseres antes” (pemanenciay cand) er parte, De Pina dice que afirmar que cl proceso es una institucion sin poruicio de ser relacén, no solo no conribuye a eslarece 2 naturaleza del proceso, sino que conduce a abrir un nuevo debate aque parecia definitivamente clausurado con la conclusin, admitids por la mayoria de los procesalistas, de que es una relacién juridica, 3.4, TPORIA DE LA RELACION JuRIDICA La doctrina de la relacién juridica aunque tiene su er te en los trabajos de Hegel, fue expucsta por primera nee nay Bulow y desarrollada especialmente por la doctrina italiana. Afirng que la actividad de las partes y del juez esta regulada por la ley salvo los casos excepcionales que ésta permita a aquellas apartar, se de sus preveptos. El proceso determina la existencia de un relacién de cardcter procesal entre todos los que intervienen, crean- do obligaciones y derechos para cada uno de ellos, pero tendiendo todos al mismo fin comin; la actuacién (aplicacién) de la ley.* Es, pues, una relacién auténoma, compleja y pertenece al derecho piblico. Auténoma en cuanto tiene vida y condiciones propias fundada en normas distintas (procesales) de las afirmadas por las artes (sustanciales); compleja porque comprende un conjunto indo fimido de derechos y obligaciones; y pertenece al derecho piblico porque deriva de normas que regulan una actividad piblica, El deber fundamental que constituye como el esqucleto de toda relacién procesal, es la obligacién que tiene el juez de proveer a las demandas de'las partes, aun en caso de silencio u oscuridad de la ley, obligacién que forma parte de su ofcio y que esta garan- tizada con penalidades cuando incurre en incumplimicnto, A las partes corresponde la exposicién y prueba de los hechos, en la forma y dentro de los plazos y condiciones que la ley determina El contenido de la relacién procesal, viene a comprender el con junto. de derechos y obligaciones que tienen el juez ¥ las partes. ademas esti, condicionado por las formas establecidas por la ley para la tramitacién de los juicios, Ella determina bajo qué condi- such Eso Palas resme esta tera estutlacndo que el proceso una tsacin jurdica de derecho pablico que te etabloce ene les pes» je Diccionario de Derecho Procesal Civil, pig. 641 0 TEORIA GENERAL DEL PROCESO 165 cl demandado obligado a contestar la demanda, el ac- ‘ justificar sus pretensiones y el juez a dictar sentencia. Preci- do estos conceptos, dice Chiovenda, su principal expositor: El s0 es una unidad no solamente porque los varios actos de que ‘compone estin coligados para un fin comin, Esta unidad es pro- ja de cualquier empresa, aunque no sea juridica, como una obra arte, la construccién de un edificio, un experimento cientifico y otras semejantes. El proceso es una unidad juridica, una organi- jon juridica 0, en otfos terminos una relacién juridica. Antes ‘que la demanda de la actuacién de la ley pueda ser juzgada, tie- que ser examinada: esto produce un estado de dependencia, por onsiguientc las partes (actor y demandado), deben ser colocadas en ptitud de hacer valer sus razones eventuales; existen por ello de- bres y derechos. De aqui la idea simplisima, pero fundamental (Gislumbrada por Hegel, afirmada por Bethman-Holiweg y desen- ‘wuelta por Bulow y después por él, por Kohler y otros muchos aun fen Italia); “el proceso civil contiene una relacién juridica”. Es la fdea ya inherente al iudicium romano, Es la idea que la doctrina ¥y los practicos expresaban ya, inconscientemente, con la palabra itis pendentia, entendiendo por ésta la pendencia de un Ja plenitud de los efectos juridicos. Litispendencia y relacion ju ico-procesal son conceptos y expresiones no equivalentes, pero si fcoincidentes. Independientemente del derecho de accién que no puede corresponder sino a una de las partes y que s6lo una vez ‘erminado el proceso corresponderd a una 0 a otra, durante el pro- eso ambas partes tienen el derecho al pronunciamiento (sentencia), ¥¥ el juez esté obligado a darlo con respecto a ambas partes. Si es incierto durante el proceso, a cudl de la partes favorecerd Ia sen- tencia y, por consiguiente, 1a tendencia de cada parte a obtenerla ‘no puede considerarse entre tanto sino como una aspiracién, es por cl contrario una verdadera y propia expectativa juridica, es decir tun derecho, aun cuando de naturaleza formal, instrumental, que cada parte tiene durante el proceso, con relacién al pronunciamiento del juez. 3.5, TEORIA DE LA PLURALIDAD DE RELACIONES Para Camelutt, 1a relacién juridica nace de la combinacién de | una obligacién y eventualmente de un derecho que tiene por objeto 166 JOSE. VIZCARRA DAVALOS| la prestacion de una actividad para el desenvolvimiento del pr, eso. Por consiguiente, si hay por una parte una obligacién "po, Ia otra un correlativo derecho subjetivo de accién, puede atime se que existen tantas relaciones juridicas procesales cuantos sen, Jos conflctos, de tal manera que el proceso es un complejo de reigt Giones. Por Jo tanto el proceso no es élo un relacion uridica, sino un conjunto de relaciones que van naciendo y extinguicn a medida que aquél se desarrolla oe Pero esta doctrina tambicn tiene el jonte de cl inconveni we des. truye Ta concepcién orginica del proceso y no facia, sno hhace menos viable el examen de su estructura q 4. LA RELACION JURIDICA PROCESAL? 4.1, Los suietos DE LA RELACION PROCESAL En opinién de H. Alsina," no puede negarse la existencia de una relacién juridica en el proceso con derechos y obligaciones entre el juez y las partes y no vemos para ello algin obsticulo en ‘cuanto aveptamos que la accién es un derecho que el actor tiene contra el Estado para la tutela que demanda su pretensin jurii frente al que demanda. Tres son los sujetos de la relacién proce- sal: actor, demandado y juez. Los dos primeros consttuyen las par- tes en el juicio y Ia ley determina su capacidad, las condiciones de su actuacién en el proceso, sus deberes y facultades, asi como Jos efectos de ta sentencia entre ellos. El juez ejerce 1a funcion jurisdiccional en nombre det Estado, el cual reglamenta la forma de su designacién, fija sus atribuciones y reglamenta su actividad en el proceso. Ordinariamente interviene un actor y un demanda- do, pero es posible la presencia de varios actores y varios deman- dados (ltisconsorcio activa 0 pasiva), Otras veces las mismas partes se encuentran frente a frente en distintos procesos vinculados por Ja misma relaciGn juridica sustancial o por cuestiones conexas (plu- ralidad de procesos). En fin, en algunos casos los efectos del pro- ceso se extienden a terceros, en que una u otra forma resultan afectados por los actos de los sujetos principales. 1 Bit vos a ue mis eps See y H. Alsi ten major ls expe De su op. cit, pig, 428, i. veel ‘TEORIA GENERAL DEL PROCESO 167 Pero el concepto de relacién juridica no es entendido unifor- ne por los autores. Dice a este respecto Alcalé Zamora y lo, “Mientras unos estiman que el proceso ¢s una relacién dica, para otros la establece, y en tanto un sector aprecia una fia relacion juridica que progresivamente se desenvuelve, son ios los que repuntan que el proceso se compone de una serie fe relaciones juridicas. La divergencia surge, asimismo, en cuanto fa determinacién de quiénes son sujetos de dicha relacién, hay fores en cuya opinién lo son slo las partes, y la mayoria sos- ‘que la relacién es triangular, el actor, el demandado y el juez fn cuanto a la situacién de las partes entre si, se considera en al- funos libros como de derecho privado, en los restantes como de echo puiblico; por unos procesalistas como relacién inmediata, ntras que los dems afirman que el nexo entre ambas se veri- fiea por medio del juez. A su vez, hay quienes entienden que entre partes surgen derechos y obligaciones, en tanto que una corrien- doctrinal distinta reconoce iinicamente la presencia de ligimenes nire aquéllas y éstos; en ocasiones, son caracterizados como presu- puesto, en tanto que en otras como consecuencia, de la actuacién Iprocesal. Y por lo que atafe a la triangularidad de 1a relacién ju- fica procesal, se concibe por unos procesalistas como sencilla, y ‘por otros como doble. Finalmente el proceso ¢s contemplado, en Jos ‘ltimos afios como una relacién de puro derecho piiblico, o sea fexclusivamente como una relacién juridica entre las partes por un Jado y el tribunal por otro”. Los sujetos de 1a relacién juridica iprocesal son las partes y el juez, con derechos y obligaciones reci- [Procos; es una relacién de derecho publico que se inicia con la demanda, se integra con la contestacién y se desenvuelve en el {curso del proceso hasta extinguirse con la sentencia, Son éstos los ‘eonceptos desarrollados a continuacién. 4.2. Los PRESUPUESTOS PROCESALES No basta la interposicién de la demanda, sino que también es ‘ecesaria la concurrencia de ciertos requisitos para que la relacién procesal sea valida, Ia sola presencia de las partes no seria sufi- ‘ciente para generaria si carecieren de aptitud para actuar en juicio 6 faltare en el juez la aptitud para conocer del mismo. Tales re- 168 JOSE. VIZCARRA DAVALOS. quisitos no afectan a la accién, pues su ausencia sélo impide |g constitucién de la relacién procesal y no nace, en consecuencia, ¢| deber del juez. para actuar en el proceso, debiendo fundar la razjn de su imposiblidad. Por eso se les lama presupuestos procesales Toda persona puede ser titular de un derecho substancial (legitimatio ad causa), pero no siempre tiene la aptitud necesa, ria para defenderlo personalmente en caso de litigio (legitimatio aq processum). El primer presupuesto de la relacién procesal es |, capacidad de los sujetos para estar en juicio; si esa capacidad falta, sea on el actor, sea en el demandado, podré opon cexcepcién previa de falta de capacidad, que, resuelta ‘mente, impedird la prosecucién del proceso. La capacidad proce. sal? es por consiguiente, uno de los capitulos fundamentales en el estudio del proceso, y por las diversas cuestiones que comprende le dedicaremos luego un estudio aparte. (Constltese en la pig. 193), La facultad conferida a tos jueces para resolver los litgios esta condicionada a la aptitud para conocer de los mismos; no todos los Jneces tienen Ja misma competencia. En primer lugar, sera necesa- rio determinar la jurisdiccién dentro de la cual corresponde Ia pro- ‘mocién del proceso (federal, estatal, administrativa, etc.) y dentro de ella establecer el tribunal que por razén de la materia, canti- dad, etc, esté anticipadamente designado por la ley para su concci- miento, La competencia del juez es, por lo tanto, otro presupucsto de la relacién procesal, cuya ausencia hace procedente la excep- cién previa de incompetencia. Por su importancia ya le dedicamos su apartado en la Tercera Unidad. Por otra parte, es necesario que la demanda esté revestida de ciertas formalidades exigidas para ascgurar la regularidad del debate ¥y cuya existencia debe ser constatada por el juez antes de entrat al fondo del litigio. La ausencia de alguna de ellas hace proceden- te Ia excepcién previa de defecto legal en el modo de proponer Ia demanda, incluso puede ser desechada, no admitirse, lo que impe~ diré el nacimiento de la relacién procesal. De lo dicho resulta que la falta de un presupuesto procesal da Jugar a una excepcién también procesal (falta de capacidad, incom petencia de jurisdiccién, defecto legal en el modo de proponcr 18 Ta caacided de goce nos permite set titulares de derechos y obligacion ® La capacidad de ejericio es la que nos permite hacer valer por st mis esos derechos y obligaciones TEORIA GENERAL EL. PROCESO 169 demand), que los cédigos legislan como pfevia a la discusién de fondo, y cuya procedencia no afecta a la aecién, puede ser inten- tada nuevamente, 14.3. CONTENIDO DE LA RELACION PROCESAL Se inicia la elacién procesalcon la inttposicién de Ia deman- da, que es la forma normal de ejercicio de 12 accién, pues desde fese momento el actor y el juez se hallan sujetos a determinados procesales a. Es necesario distinguir todavia entre substitucién de parte substitucidn procesal. En la substitucign de parte hay un cambio la relaci6n jurdica substancial que se produce durante el process En la substitucién procesal los sujetos de la relacién substanciel son los mismos, pero el derecho no lo eerce el titular original, sing un tercero en su propio interés 8.5. REPRESENTACION EN JUICIO Todo litigante tiene el derecho de comparecer personalmente ante cualquier juer para la defensa de sus derechos, pero en line ‘nos casos es Ia parte misma quien delega esa intervencién en un tercero que actia en nombre suyo, mientras que en ottos, por tra- tarse de incapaces de hecho, la ley impone la intervencién de la persona que integra su capacidad. En el primer supuesto existe re- presentacién convencional, y en el segundo la representacién legal Nos ocuparemos de cllas sucesivamente, pero como ambas estin sometidas a prescripciones comunes, las examinaremos en primer término, Justficacién de la Representacién.—Tanto la representacién legal como la convencional se hallan sujetas a las mismas disposiciones de Ia personeria, por lo que corresponde ocuparse de ellas antes de entrar al examen de las instituciones en particular. Cuando se pre- sente en juicio por un hecho que no sea propio, aunque le competa ejercerlo en virtud de representacién legal, deberd acompafiar, con su primer escrito, los documentos que acrediten el carécter que ‘ostenta, Los apoderados 0 procuradores acreditarin su personeria desde la primera gestién que hagan en nombre de sus poderdan- tes, con la correspondiente escritura del poder. Examinaremos por separado los casos que pueden presentarse al respecto Los representantes de los incapaces justificarin su personalidad acompaiiado un testimonio del auto de designacién y del discerni- minto del cargo, segim lo prescriba la ley de fondo. Pero tratén- dose de los padres llamados a representar a sus hijos en ejercicio ‘TEORIA GENERAL DEL PROCESO 199 Ja patria potestad, estin obligados a justificar ese caricter, con la ida de nacimiento, porque el estado civil de Ia persona por fa que comparece en juicio, requiere comprobacién mientras le sea {erminantemente negado, Los representantes de las sociedades jus- fificardn su carécter de tales, con los estatutos 0 escrituras testimo- frindas en forma, de donde resulte su designacién y la extension e sus facultades. Los apoderados o procuradores acreditarin su personeria con la ‘correspondiente escritura del poder. Si la representacién fue conferi- ida por contrato, el poder debe ser otorgado ante fedatario publico 'o instrumento privado. ‘Los empleados piblicos cuyo nombramiento no ha sido debi- damente publicado, necesitan documentos que acrediten su perso- tralidad, para demostrar el cardcter que ostentan. Los poderes otorgados en el extranjero se rigen, en cuanto a su forma, por las leyes del pais en que han sido otorgados, pero fn cuanto a sus efectos se rigen por las leyes nacionales. 8.5.1, REPRESENTACION CONVENCIONAL La representacién convencional esta legislada en las leyes de fondo, pero veremos ciertos principios aplicables. “Tiene igualmente todo litigante el derecho de comparecer personalmente ante cuales- quiera juez 0 tribunal, o hacerse representar por cualquier persona habil mayor de edad, sea 0 no procurador recibido.” Nuestra ley cconsagrada el principio de libertad de comparecencia, a diferencia de otras legislaciones que han establecido 1a representacién obli gatoria. Quien ostenta la representacién convencional se dice que tiene personeria, en sentido estricto. 8.5.2, REPRESENTACION LEGAL La incapacidad de hecho trae como consecuencia la inhabili- dad para actuar personalmente en cl proceso, y los ineapaces sélo pueden hacerlo por medio de los representantes necesarios que les da la ley. El legislador ha debido, proveer a esa representacién, y lo ha hecho valiéndose de dos insttuciones: la patria potestad con- ferida a los padres respecto de sus hijos y la tutela 0 curatcla segin que se trate de menores 0 incapaces. Pero al lado de ellas ha esta~ blecido otra institucién, Procuraduria del Menor, que representa a 200 Jost: VIZCARRA DAVALOS los menores y es parte legitima y esencial en todo asunto judicig 6 extrajudicial, ante Ia jurisdiccién voluntaria 0 contenciosa en que aquellos demanden o sean demandados © que se trate de la person © bienes de ellos, so pena de nulidad de todo acto y de todo jus cio que hubiere lugar sin su participacién, pudiendo deducir yg aeciones que correspondan a los tulores © curadores cuando éstog UNIDAD 5 Son representantes de los ineapaces: "De las personas por LAS PRUEBAS acer, sus padres, y a falta © incapacidad de éstos, ls tutores que se les nombre; 2°—De los menores sus padres, 0 a falta de ellos sus tutores; 3°—De los dementes, sordomudos, 0 ausentes, sus Qmamatmiadins) 22-Concartd be mctian, yeti’ padres, y a falta 0 incapacidad de étos, ls tuores. 1WVO DB #RUBRA. 3.—TaowlA GENERAL Dt LA PRUEBA Por lo tanto, quien ejerce In representacin legal, tiene perso- Clasifcacion de lw medion de prueba. 32.—Objeto de ln ralldad pructa, 33,—Prucb del dencho. 3A-—Heehos que deten prota 3.5-—Hechos cua pra no es neeuria 3.6.~-Cagn de Ia pr ba. 3:7—-Prtn de los heshos negvos,4.—Lov seTmuns PRO tonfesional, 5,1.1.—Definin. 5.12-—Fundamento, $.13-—Ele menton5.14-—Clasifescion, 52.—La. prueba docimena 52.1-—Defiiién, $22.—Claicacion, $3.La proba peri SA—La inspccién ocular. 5:5.—La testimonial, :6—La fama publica. 57-—Las putas cic $8.—La presincional. 6--Dit- (Onenwvos: Al concluir esta unidad el alumno podré Saber los conceptos de probar, prueba y motivo de prueba. Explicar la clasificacién de las pruebas. Saber el objeto de las prucbas. Conocer que hechos deben probarse y cuales no. Explicar la carga de la prucba. Conocer y explicar los sistemas probatorios. Conocer los medios de prucba en particular. Saber de la confesional, su concepto, fundamento, elementos y Ia clasificacién. Saber el concepto de documento, su clasificacién y de los de~ més medios de prueba Explicar en que consiste las diligencias para mejor proveer JOSE VIZCARRA DAVALOS 244 caso que se les haya planteado con las méximas garantias de acier to, Dado este concepto amplio de las diligencias para mejor pro. veer, su acuerdo no puede quedar reservado para el momento en que las pruebas propuestas por las partes se hayan practicado, que el juez debe estar autorizado para acordarlas en aquel en que las estime conveniente segin el estado del proceso. UNIDAD 6 LOS ACTOS JURIDICOS PROCESALES SUMARIO: 1—LOS ACTOS PROCESALES EN GENERAL. 1.1,—Gene- ralidades. 1.2—Actos procesales. 1.3.—Distintos tipos de actos procesales. 1.4—Requisitos de las aeluaciones, 1,5.—Validez de Jos actos procesales. 2.—LAS RESOLUCIONES TURISDICCIONALES, 2.1.—Coneepto. 22.—Clasifieacion. 23—La sentencia, 24—La sentencia ejecutoriada. 3.—Los MEDIO$ DE COMUNICACION EN BL PROCESO. 3.1.—Conoepto. 3.2.—Clasfcacidn. 3.3—Los medios de Comunicacién en particular. 4—Los 4.1 —Concepio, 4.2,—Clasfiacion. 43, Funcién de los términos Onsetivos Al concluir esta unidad el alumno podré: 1. Identificar los actos juridicos procesales. 2. Distinguir los hechos y actos procesales. 3. Identificar los tipos de actos procesales mas importantes. 4, Conocer los requisitos de las actuaciones procesales. 5. Explicard la validez del acto procesal 6. El concepto de resoluciones jurisdiccionales. 7. Distinguir los diversos tipos de resoluciones. 8. Explicar lo que es Ia sentencia y sus requisites, 9. Dar explicacién de los efectos de 1a sentencia ejecutoriada Distinguir los medios de comunicacién en el proceso. Explicar los diversos medios de comunicacién en el proceso Proporcionar el concepto de término procesales. Explicar la clasificacién de los términos procesales. Establecer la funcién de los términos. 246 JOSE. VIZCARRA DAVALOS 1. LOS ACTOS PROCESALES EN GENERAL, Li, Generatipapes ! La relacién procesal se presenta como un conyunto de actos que realizan las partes, el juez y los terceros, vinculados en orden suce- sivo, de tal manera que cada uno de ellos es una consecuencia del que le precede y un antecedente del que le sigue. Aun cuando en apariencia son actos independientes en el sentido de que pueden ser jecutados en forma aislada, su vinculacién resulta, en primer lugar, del principio de preclusién, segtin el cual determinados actos proce. sales pueden realizarse tnicamente en el supuesto de la existencia de una situacién procesal previa (ejemplo: el offecimiento de pruc- bas supone la demanda y la contestacién), y s6lo por motivos excep- cionales puede alterarse ese orden (ejemplo: citacién para sentencia por allanamiento de la demanda, fin del proceso por convenio, etc); en segundo lugar, por la finalidad comtin, que establece entre ellos una relacién de interdependencia (ejemplo: el interrogatorio respecto del offecimiento de la prucba testimonial, el cuestionario para los peritos, los alegatos con relacién a la prueba, etc). Esto indica que el proceso puede ser descompuesto en los dis- tintos elementos que lo integran y que cada uno de ellos puede ser cexaminado independientemente, es decir, con prescindencia de su Vinculacién y de la posicién que ocupen en ta relacién procesal. El acto procesal so presenta normalmente como un hecho, esto es, cen forma objetiva, pero también puede consistir en una omisidn, ¥y en consecuencia, més exacto seria decir que “acto procesal es todo acontecimiento que de cualquier manera influye en la relacién procesal” (latus sensu), sin embargo, vamos a ver que hay ciertos hechos que influyen en ella y no constituyen actos procesales. La determinacién del concepto del acto procesal tiene gran importancia prictica. Asi (el articulo 29 bis de la Ley Procesal Civil Local) sobre Ia caducidad de la instancia (dispone) los pla 20s sefilados para que proceda, se computarin desde la fecha de notificacién de Ia resolucién dictada a la diltima peticién de las partes o actuacién del tribunal que tenga por efecto impulsar cl procedimiento, lo cual requiere un examen de los elementos y con diciones del acto para establecer los casos de interrupcién " Biasindonos en I, Alsina en sv obra citada tomo I, pg. 608 TEORIA GENERAL DEL PROCESO 247 perencién producida por la ejecucién de un acto comprendido en la disposicién citada Hechos, Naturaleza Juridica. Los hechos tienen en la vida del derecho influencia decisiva: por ellos nacen, se transforman 0 se cextinguen las relaciones juridicas. Ciertos hechos, tanto de la na: turaleza como del hombre son ajenos al derecho, pero en cuanto influyen en la conducta de los individuos, caen bajo su regulacién. Asi los fendmenos celestes son indiferentes para la vida juridica s6lo en apariencia, porque la determinacién del dia y la noche tienen trascendental importancia para la division del tiempo, fundamento a su vez, de instituciones como la preseripcién, los términos, la caducidad de la instancia, etcétera. Los hechos toman el caricter de hechos juridicos cuando es- tan regulados por una norma de derecho. Como en el derecho ci vil, también en el derecho procesal puede hacerse un primer dis- tingo entre hechos de la naturaleza y hechos del hombre. De los hhechos de la naturaleza, el més importante, desde el punto de vis- ta del proceso, es el transcurso del tiempo, que bajo la forma de términos, establece un orden gradual en su desenvolvimiento; pero hay también otros cuya influencia no es menor, como el terremo- to, la inundacién, la peste, etc.. que pueden producir la paraliza- cidn del proceso, y algunos, como la muerte, importan la suspen- sin de la relacién procesal misma. No obstante, el derecho positivo s6lo se ocupa de ellos accidentalmente, y quedan todavia muchos aspectos librados a la especulacién de la doctrina, no siempre con- forme en el modo de apreciarlos. 1.2. ACTOS PROCESALES Los hechos humanos pueden ser voluntarios o involuntarios, Un ejemplo de estos altimos, en materia procesal, lo constituye la omisién de un recurso contra una resolucién adversa. Los hechos Voluntarios se distinguen, a su vez, en licitos ¢ ilicitos. Los pri- ‘meros son los que, permitidos por la ley, se ajustan a sus pres- cripeiones; los segundos son los prohibidos por la ley, y constitu- yen una violacién de la misma (ejemplo: la produccién de un documento falso, la demanda simulada, el falso testimonio, etc.) Pero, en el concepto de acto licito se comprende no solo lo que esti juridicamente permitido, sino también lo que no esti juridics 248 JOSE VIZCARRA DAVALOS ‘mente prohibido. Acto juridico es: “Todo hecho voluntario licito que tenga por objeto crear, transformar o extinguir un derecho.” ‘Acto Juridico Procesal, es el acto voluntario licito ejecutado en el proceso que tiende a la constitucién, conservacién, modifica. cin o cesacién de una situacién juridica en Ia relacién procesal (estricto sensu). Pero es necesario que ¢l acto sea un hecho posi- tivo y tenga por objeto uno de esos fines, aunque no vaya dirigido precisamente a la parte contraria, y por consiguiente, no son. actos procesales los actos juridicos que no tienen influencia sobre la re. lacién procesal (ejemplo: el otorgamiento del poder). 1.3, DISTINTOS TIPOS DE ACTOS PROCESALES A) En una primera clasificacién, por el contenido de los actos procesales, tenemos tres categorias: Algunos constituyen meras ma- nifestaciones de la voluntad que importan el ejercicio de un dere- cho preexistente: son los actos procesales en sentido estricto, (la demanda, un recurso, las diligencias de prueba, etc.) Otros tienen por objeto la constitucién de un derecho mediante un acuerdo pre vio de voluntades: son los llamados negocios juridicos procesales (compromiso arbitral, prérroga de la competencia, transaccién, etc.) Entre estas dos categorias existe una tercera, en la que los actos tienen por objeto la constitucién de un derecho, pero no supone un convenio, sino que resulta del ejercicio coincidente de actos pro cesales por ambas partes: son los acuerdos procesales (desig cidn de peritos, determinacién de documentos indubitados en la prueba de cotejo, etcétera. B) Una segunda de clasificacién citando a R. de Pina y J. C Larrafiaga ? resulta interesante. Nos dice que los actos procesales, se derivan de las partes, del érgano jurisdiccional y de personas que no figuran entre los sujetos de la relacién juridica procesal. Siendo el Proceso Civil (como dice Rocco), un fenémeno que se desenvuelve en el tiempo en una serie de hechos y de actos, el interés de la clasificacién de éstos para su estudio no neces encarecimiento especial @) ACTOS PROCESALES DE LAS PARTES. Algunos tratadistas ad- miten Ta divisién de los actos juridicos procesales de las partes * Derecho Procesal Civil, pig. 231. TEORIA GENERAL DEL PROCES: 249 cn actos juridicos procesales licitos (conformes con el derecho) y actos juridicos procesales ilicitos (contrarios al derecho). Los actos juridicos procesales ilicitos carecen de eficacia respec- to a los fines del proceso, aunque pueden transformar su normal desenvolvimiento, y si los titulares de la jurisdiccién ta cumplen satisfactoriamente, les opondriin en la generalidad de los casos, un obsticulo invencible. La realizacién do estos actos amerita la im- posicién de sanciones que, segiin el caracter de los mismos, puc- den ser simplemente disciplinarias 0 penales. El campo de lo ilicito procesal seré més menos amplio segiin el celo de los encargados del ejercicio de la funcién juris- diccional y de sus auxiliares, y segin que la organizacién judicial sea més 0 menos perfecta Las leyes de procedimientos contienen disposiciones que tien- den a prevenit y a procurar, en su caso, el castigo de esta clase de actos. Cuando constituyan delito, su sancién compete a los érganos de la jurisdiccién penal, en cl proceso correspondiente, si se trata de actos no delictivos aunque ilicitos, la sancién la hara efectiva el érgano jurisdiccional que conoce del proceso civil don- de el acto se produjo. Los actos juridicos procesales licitos son, (eseribe Rocco), las acciones humanas juridicamente licitas, es decir, conforme a las nor- mas del derecho procesal objetivo. Los actos procesales pueden scr: manifestaciones de voluntad (acciones u omisiones), juridicamente permitidas 0 autorizadas, constitutivas del ejercicio de un particu- lar derecho subjetivo (derecho de accién); 0 manitestaciones de ‘voluntad (acciones u omisiones) juridicamente obligatorias, y que constituyen el cumplimiento de una “obligacién” juridica (deberes de las partes de ejercitar ciertos actos. procesales). Los actos procesales licitos se dividen en simples manifesta- ciones de voluntad (acciones o actos procesales en sentido estricto), ¥y manifestaciones de voluntad dispositivas © negociables (negocios {juridicos procesales). Entre las manifestaciones de voluntad del primer grupo se hayan la demanda, los alegatos, etc., y como manifestacién com- pleja, que constituyen negocios juridicos, tenemos los que reciben el nombre de convenios procesales. 4) ACTOS PROCESALES DEL OROANO JURISDICCIONAL. Los actos juridicos procesales del érgano jurisdiccional estén constitui- 250 JOSt. VIZCARRA DAVALOS 4os, principalmente, por las resoluciones jurisdiccionales, los medio de comunicacién en el proceso, etc. (de los que trataremos mas ade lante), sin que ellos integren la totalidad de los que pueden realizar La prictica de una inspeccién ocular, es un acto juridico pro. cesal del érgano jurisdiccional; lo es también el examen de un testigo; tiene idéntico carcter la formulacién de voto particular por tun miembro de un tribunal colectivo, capaz de producir sus efvc- tos al resolver un recurso, etcétera La doctrina distingue entre los actos de los érganos de juris- diccién ejecutados por el juez y los realizados por sus auxiliares (secretarios, ejecutores, subalternos, etc.). ‘Tratindose de los actos de los érganos de jurisdiccién, es preciso distinguir entre su emisin y su desenvotvimiento en la actividad desplegada para poner en prictica su contenido. La facultad de emisin es indelegable, no asi de la puesta en prictica del conte- nido del acto, que la ley procesal declara delegable, dentro de las normas que dicta al efecto (actos de jurisdiccién delegada) ‘o) ACTOS PROCESALES DE PERSONAS EXTRARAS AL PROCESO. Generalmente se niega el caricter de actos jutidicos procesales a Jos realizados por las personas que no figuran entre los sujetos de la relacién juridica procesal. Es indudable, no obstante, que en el Proceso no actian solamente las partes y los érganos jurisdiccio- rales, sino también personas distintas que producen determinados actos esenciales, frecuentemente, para alcanzar los resultados que ‘en el proceso se persiguen. {Qué cardcter atribuir pues, a estos actos? Un testigo que declara, un perito que formula un dictamen, como hemos dicho anteriormente, producen actos que cacn de lleno dentro de la defi- nicién del acto juridico procesal, tal y como se formula por los tratadistas. Estos actos, no sélo se relacionan estrechamente con Jos procesales, sino que ellos mismos son verdaderos actos juridi- cos procesales. 1.4, REQUISITOS DE LAS ACTUACIONES PROCESALES. Es Ia Ley Procesal la que reglamenta los requisitos que para su validez requieren las actuaciones procesales del érgano jurisdic~ cional, estableciendo los que son generales a todas y algunos mas para detcrminados actos (ejemplo la sentencia), que veremos en st ‘TEORIA GENERAL DEL PROCESO 251 momento, De aquellos podemos referir dos tipos: de forma y de fondo. Los de forma son: Por escrito (cualquiera que sea su mani- festacién manuscrita, mecanografiada, impresa, etc.); en idioma nacional, legibles (que permitan leerse); claras (que permitan cap- tar la idea 0 lo que se pretende decir); no debe borrarse o tacharse su contenido (porque propicia su alteracién); piblicas; asentar el dia (fecha) y en ocasiones la hora cuando se practican, (lo que permitiré advertir su realizacién en tiempo hébil); foliadas, ribri- cas y entreselladas, fechas y cantidades con nimero y letra (ar- ticulos 52 y 53 del C.PC. de J). De fondo son: practicarse en dias y horas hébiles, realizarlas cl funcionario a quien corresponde; y que éste las autorice con su firma (articulos 54, 55, 83 pérrafo iiltimo y 125 del CPC. de J.) Estos requisitos de fondo son aplicables en el proceso civil como regia general; sin embargo el primero (realizarse en tiempo habil), no es aplicable en algin tipo de asuntos civiles (alimen- tos, servidumbres, interdictos, de familia, etc., articulo 55 segundo parrafo de la misma ley). Por lo tanto en estos asuntos como en ‘materia penal, no existe la inhabilidad del tiempo. 1,5. VALIDEZ DE LOS ACTOS PROCESALES En razén de que la legislacién positiva regula la forma del acto procesal, estableciendo no sélo los requisitos para su validez, sino las consecuencias de su inobservancia, nos ocuparemos de ella por separado, La ausencia, de una amplia reglamentacién legal, en cuanto al contenido, obliga a considerar las cuestiones que plantea desde un punto de vista puramente doctrinario. Asi algunos cédigos (como el nuestro) declaran nulas las actuaciones faltas de algunas de las formatidades esenciales, de ‘manera que quede sin defensa cualquiera de las partes y cuando la ley lo determine expresamente, sin que esta nulidad pueda ser invocada por la parte que dio lugar a ella. La nulidad establecida en beneficio de una de las partes no puede ser invocada por la otra (articulos 63 al 66 del C. de D. C. de Jal.). ‘Aunque el eédigo no lo diga en forma expresa, ¢s indudable que las nulidades fundadas en la falta de algin requisito esencial del acto fen que se producen no son subsanables y que, respecto a elas, més cexactamente que de mulidad, puede y debe hablarse de inexistencia. 252 J0Sf VIZCARRA DAVALOS La nulidad de los actos procesales realizados ante 0 por juez incompetent, (esté especialmente sefialada en nuestro Cédigo Pro, cesal Civil, articulo 159), es calificada como de “pleno derecho Por tanto, no requiere declaracién judicial” (articulo 160), El tema de la invalidez e ineficacia de los actos jutidicos pro. cesales, no ha merecido hasta ahora Ia atencién que su importan cia reclama, ni tiene una reglamentacién adecuada en los cédigos, Por lo que se puede decir exactamente que esta materia es una de las més complejas y delicadas. El examen de fos preceptos legales referentes a nulidades nos muestran que se refieren, especialmente, a las de los actos de los ‘rganos de jurisdiccién (notificaciones y resoluciones judiciales), sin dar la debida regulacién a las demés actuaciones que tienen a vece la misma o mayor importancia 2. LAS RESOLUCION! 2.1. Concerro La actividad de los érganos jurisdiccionales en el proceso se ‘manifiesta en una serie de actos regulados por la ley. Las resolu: ciones jurisdiccionales son: “Ia exteriorizacién de los actos proce- sales de los tribunales, mediante los cuales atienden a las necesi dades del desarrollo de! proceso y a su decision”. Son tambi respuestas del érgano jurisdiccional a las peticiones formulac las por Jos que intervienen en el proceso” Estas resoluciones no tienen todas el mismo objeto ni idéntica trascendencia. El estudio de este tema nos permitiré dar a cada una su peculiar significacién e importancia, 2.2, CLASIFICACION Una primera clasificacién® nos establece que las resoluciones Judiciales pueden dividirse en dos grupos: Interlocutorias y de fondo. Las primeras son: Providencias (que también suelen recibir deno- minacién de decretos) y autos (calificados como sentencias inter- Tocutorias), que son las que dictan los érganos jurisdiccionales durante la sustanciacién del proceso; las segundas son las senten- Citando @ R. de Pina y J.C. Lamataga, Derecho Procesal Civil, pg. 319 TPORIA, GENERAL, DEL PROCESO cias que deciden la cuestién de fondo que constituye et objeto del La distincién entre providencias (0 deeretos) y autos, se funda en la mayor o menor transcendencia do las euestiones sobre que recaen, punto acerca del cual proveen las leyes procesales detalla- damente, En algunas legislaciones existe una diferencia formal entre providencias (0 decretos) y autos, debiendo éstos contener, como Jas sentencias, resultandos y considerandos. En la literatura procesal y en la legislacién italiana las reso- luciones judiciales se clasifican en decretos, ordenanzas y senten~ cias. La distincién entre sentencia, ordenanza y decreto es bastante confsa. Rooco ha pretendido establecerla diciendo que la sentencia declara el derecho controvertido; la ordenanza provee a la marcha de un proceso en cutso, y el decreto a todas las demas fumciones judiciales © administrativas. [La doctrina alemana no presenta un criterio uniforme en cuanto 4 la distincién de las resoluciones judiciales, pues unos autores afirman que la existente entre sentencia, ordenanza y decreto es puramente formal (la sentencia, dicen, se pronuncia en forma so- lemne; 1a ordcnanza, mediante’ un acto simplemente formal, y l decreto mediante un acto no formal); mientras que otros, después de clasificar las resoluciones judiciales en sentencias y_decretos, atribuyen el cardcter de sentencia a la resolucién recaida previo de- bate entre las partes, o cuando, aiin no habiendo existido éste, las partes hubieren sido citadas en legal forma, y consideran de creto a la resolucién recaida cuando la cuestién ha sido decidida ‘Ahora analicemos 1a clasificacién de las resoluciones en las Leyes Procesales Nacionales. El Cédigo de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal (articulo 79) preceptia que las resolucio- nes son: a) Simples determinaciones de trémite y entonces se la- arn decretos; b) Determinaciones que se ejecutan provisionalmen- te y se dnominan aulos provisionales:«) Decisions que tienen fuerza definitiva y que impiden o paralizan definitivamente Ia pro- secucién del juicio } se llaman autos defintivos, d) Resoluciones que preparan el conocimiento y decisién del negocio ordenando, admitiendo o desechando pruebas, y se laman autos preparatorios. ¢) Decisiones que resuelven un incidente promovido antes o después de dictada Ia senfencia, que son las sentencias interiocutorias; ) Sen tencias definitivas, las que resuelven el fondo de ta controversia. 254 JOSE VIZCARRA DAVALOS Las resoluciones judiciales, segin el Cédigo Federal de Pro. cedimiento Civiles (art. 220) son: Decretos, autos y sentencias Decretos, si se refieren a simples determinaciones de tramite, autos cuando decidan cualquier punto dentro del proceso; sentencias, cuando decidan el fondo del negocio, Esta clasificacién se ajusta a los conceptos doctrinales tradicionales y facilmente entendible por su sencillez E Esta materia no ha sido felizmente tratada por las leyes proce- sales. En vez de establecer tres clases de resoluciones (decretos, autos y sentencias), algunas complican innecesariamente la clasificacién subdividiendo los autos en otros tres tipos (provisionales, definiti- ‘vos ¥ preparatorios) y conservan el viejo tipo de sentencia interlo- ccutoria (que en realidad es un auto), junto a la sentencia definti- va, Io que en la practica se presta a dudas y confusiones y al consiguiente planteamiento de problemas de dificil solucién. Siguiendo el criterio doctrinal (aunque no fielmente) que ha servido para establecer la clasificacién de las resoluciones judicia- les, en nuestro Cédigo de Procedimientos Civiles Local, se distin- guen, en atencién a su contenido, las siguientes: A) Decretos. El cédigo citado declara que son “simples de- terminaciones de tramite y entonces se lamaran decretos” (iraccién 1 dol articulo 83) debiendo incluirse todas las que no estin expre- samente comprendidas en los demés apartados (del citado precep- to). Se afirma, a este respecto, que muchas resoluciones que con- forme al cédigo anterior eran calificadas como autos, en el actual deben reputarse como decretos, ya que éstos no solamente com- prenden las resoluciones de escasa importancia en el proceso, y Tas que las leyes anteriores amaban decretos, tales como las que mandan agregar a los autos algin oficio, documento o escrito, © hacer saber un cémputo o informe, expedir copias certificadas, ct tera. Son resoluciones que no impulsan el proceso B) Autos. “Decisiones sobre materia que no sea de puro tr mite, debiendo contener los findamentos legales en que se apoyen (fac. Il del articulo 83). Son resoluciones que si tienden a la se- ‘cuela del proceso, que lo impulsan y deben contener fundamentacién ¥ motivacién, Constituyen la mayoria de las que se pronuncian et la sustanciacién del proceso. Se subdividen en tres tipos: Provisio- nales, los que contengan determinaciones que se ejecuten pro- Visionalmente. Definitivos, contienen decisiones que tienen fuerza ‘TEORIA GENERAL DEL PROCESO 255 efinitiva y que impiden o paralizan definitivamente el juicio 0 procedimiento, Preparatorios, su contenido son providencias que preparan el conocimiento y decisién del negocio, ordenando, admi- tiendo o desechando pruebas. ©) SENTENCIAS. Son las que deciden o resuelven la controver- sia principal o incidental aplicando la ley al caso concreto (frac- ccién IMI del articulo 83). ‘Tradicionalmente las sentencias se subdividen en definitivas interlocutorias. Las definitivas ponen fin al proceso en una instan- cia y las interlocutorias estén destinadas a la resolucién de cues- tiones incidentales. Las interlocutorias, se emplean para resolver los incidentes promovidos antes 0 después de la sentencia definitiva, Segiin sus efectos, impiden 0 paralizan definitivamente la prosecu- cién del juicio, teniendo en este caso el efecto del auto defintivo (por ejemplo la resolucién que declara procedente la falta de personali- dad en el actor, resolviendo el articulo de previo y especial pro- ‘nunciamiento en que se trata de esa excepcién), o no lo impiden © paralizan (por ejemplo Ia resolucién que niega una nulidad pro- cesal demandada por uno de los litigantes, etc). 2.3. LA SENTENCIA A) CONCERTO. La actividad que las partes y el juez desarro- Ilan en el proceso tienden a un fin comiin, la definicién de la ltis mediante Ia declaracién de la voluntad de la ley que garantice 0 declare procedente las pretensiones del actor 0 del demandado y se restablezca el orden juridico violado. El acto por el cual el juez formula esa declaracién es la sentencia. Hugo Alsina nos dice * que Ja palabra sentencia proviene de la voz latina sentiendo que signi- fica sintiendo, juzgando, opinando. Desde el punto de vista de la litis procesal, podemos definir la sentencia, como “el acto proce- sal mediante el cual el juez resuelve Ia controversia principal o incidental”. Desde un éngulo més amplio la sentencia también se puede conceptuar como “el acto juridico mediante el cual el juez resuelve una controversia, principal o incidental, aplicando la nor- ‘ma general al caso concreto”. La denominacién de sentencia debiera reservarse para desig- nar tinicamente, a la resolucién judicial en virtud de la cual el “De ou obra citada, tomo IV, pig. 53. 256 JOS6. VIZCARRA DAVALOS ‘rgano jurisdiccional competente, aplicando la norma al caso con. creto, decide la cuestién planteada por las partes. En Ia realidad legal, sin embargo, la denominacién de senten- cia se aplica también a resoluciones que no revisten este caricter EL interés en la produccién de la sentencia de fondo es comin al demandante y al demandado, ya que a ambos afecta igualmente 1a resolucién del caso juridico planteado. El contenido de la sentencia esta integrado por un razonamiento (elemento légico) y un mandato (acto de autoridad). El elemento ogico constituye la justificacién de la sentencia; el elemento 0 acto de autoridad, como manifestacién de la autoridad del Estado, ex presada por medio del organo jurisdiccional competente, constituye su esencia, La sentencia tiene una eficacia imperativa y obligatoria, la parte vencida, una vez que la sentencia es firme, no puede dejar ccumplirla, salvo que la parte que la ha obtenido renuncie a ejecucién. Se ha lamado a la sentencia, en sentido figurado, “ley especial”, porque su potestad se reficre al caso conereto que la motiva. La eficacia de la sentencia se concreta en Ia obligacién que se impone a la parte vencida de comportarse de acuerdo con Ia declaracién de derecho formada por el juez B) FORMACION. La formacién de la sentencia es segin se trate de un 6rgano jurisdiccional unipersonal o colegiado. En el Primer caso, el juez, en vista del material allegado al proceso, emite el fallo con su propio y exclusive esfuerzo mental. En el segundo, la sentencia se produce con el concurso de varios “jue- ces” que integran el tribunal entre los cuales, para cada picito se nombra un ponente, procediéndose a votacién de las conclusio nes formuladas por éste y siendo el fallo resultado de la mayoria de votos. En oposicién al sistema, generalmente aceptado, que establece el secreto para las deliberaciones conducentes al acuerdo de la sentencia, la Ley de Amparo (art. 182), en el tramite de la Facul tad de Atraccién, se anuncia piblicamente el proyecto de resolu: cién, votindose ésta en audiencia piblica, previa discusién del asunto por los ministros, © Regutstros. Tradicionalmente se ha venido exigiendo para la redaccién de las sentencias (y aun para los autos) determinados equisitos, no dejando la estructura de ellas al arbitrio del juez, TPORIA. GENERAL DEL PROCESO Bi Aunque algunos Cédigos de Procedimientos como cl nuestro han suprimido las antiguas formulas de las sentencias, no han eli- minado totalmente los requisitos formales de esta resolucién. Ade- mas de los requisitos comunes a las actuaciones procesales antes cstudiadas, en particular la sentencia, debe Hlenar los requisitos de forma o extemos siguientes: Por escrito y como todos los docu- ‘mentos y resoluciones judiciales, en espafiol; Iuego un apartado denominado por algunos como predmbulo (0 encabezado), debe contener la indicacién de lugar y fecha donde se dicte, los nom- bres de las partes contendientes y el carécter con que litigaron, el tipo de sentencia, la clase de proceso, nimero del mismo; un ca- pitulo Hamado de resultandos, que contiene una relacién sucinta ¥y cronolégica de las cuestiones planteadas y de las pruebas rendi- das. Otro capitulo denominado considerandos, que conticne las consideraciones juridicas aplicables, tanto legales como doctrinales, ‘comprendiendo en ellas los razonamientos (motivacién) con base cen Ia ley (fundamentacién) para condenar 0 absolver; finalmente el apartado de proposiciones en donde de manera precisa resuelve los puntos sujetos la decisién del tribunal, es decir, concretamente establece en qué términos condena o absuelve resolviendo los pun- tos controvertidos (art. 86) 4 Los requisitos de fondo o internos son los siguientes: a) Con- gruencia; 5) Fundamentacién y motivacién; c) Exhaustividad, y d) Firma del titular del érgano jurisdiccional y el secretario de acuerdos. 4) El requisito de congruencia (aludido en el articulo 87 del Cédigo de Procedimientos Civiles Estatal), dispone que las senten- cias deben ser claras, precisas y congruentes con la demanda y la contestacién, con las demés pretensiones deducidas oportunamente, y con las pruebas recibidas en el pleito. La congruencia es un requisito impuesto, a la vez, por el derecho y la légica. Significa la congruencia, Ia conformidad en cuanto a la extensién, concepto yy aleance entre lo resuelto por el érgano jurisdiccional y las pre- tensiones que los litigantes han formulado en el juicio, que inte- ran la litis procesal. Pate requsio dela senlencia impone al jucz Ta bligacin de tener al mismo tiempo en cuenta, en el momento de la decision. los dictados del derecho y los de la logica, 258 J0St. VIZCARRA DAVALOS 2) La fundamentacién y motivacién permite “a garantia reat y eficaz de legalidad para los ltigantes y una necesidad para | pueblo, es uno de los medios de evitar la arbitrariedad”’ El objeto de Ia fundamentacién y motivacidn es el de “mante- ner la confianza de los ciudadanos en la justicia y al mismo tiem. po, facilitar la fiscalizacién por el tribunal superior de la via de Jas instancias y recursos ordinarios”. Este requisito de Ia sentencia constituye, practicamente, un cobsticulo casi insuperable opnesto a la arbtrariedad judicial En el derecho mexicano es innegable la necesidad legal de la fandamentacién y motivacién de 1a sentencia, que en la practica se cuida con celo verdaderamente ejemplar por los funcionarios ju- diciales; exigencia fundada en el mandato constitucional, establece que en los juicios del orden civil la sentencia definitiva debera ser conforme a Ia letra, 0 a la interpretacién juridica de la ley, y a falta de ésta, se fundaré en los principios generales del derecho (art. 14 de la Constitucién General). (En nuestra Ley Procesal Civil se reitera este imperativo en los articulos 83 iiltimo pérrafo y 88) c) La exhaustividad (la encontramos reglamentada, en los articulos 87 y 89-A del Cédigo de Procedimientos Civiles Local), dispone que las sentencias deben condenar o absolver al demanda- do y decidir todos los puntos litigiosos que hayan sido objeto de! debate, debe agotarse el anilisis y definir todas las cuestiones lle- vvadas al proceso, los jueces y tribunales no podrén bajo ningii pretexto, aplazar, dilatar ni negar 1a resolucién de las cuestiones que hayan sido discutidas en el proceso. 4) Firma del titular del érgano jurisdiccional y del secretario de acuerdos. Todas las resoluciones (sentencias, autos y decretos) ronunciadas por los jueces y magistrados, serdn autorizadas con su firma entera y la de los secretarios. Lo que evidencia inexis tencia de la resolucién, sin la firma del titular del tribunal, ante esta omisién juridicamente no existe sentencia (articulos $4, 83 ul- timo parrafo, 89-D y 89-G de nuestra Ley Procesal Civil). D) CLasiFicaciOn, Las sentencias han sido objeto de diferen- tes clasificaciones. Todas ellas coinciden, sin embargo, en lo esen- cial, La clasificacién mas aceptada es Ia siguiente: segin absuel van 0 condenen al demandado: Absolutorias (desestimatorias) y condenatorias (estimatorias). Segiin recaigan sobre un incidente Pongan término a la relacién procesal, en interlocutorias y defini- T?ORIA GENERAL, DEL, PROCESO 259 tivas (Art, 83-III del citado C.P.C. de J.). Por el juez o tribunal (instancia) que las dicta, en de primera y segunda instancia. En atencién a sus efectos sustanciales, en de condena, declarativa, constitutiva, preservadora, ejecutivas y precautoria.’ Por la natura- Teza de la decisién, en de fondo (0 material) que resuelven la cucs- tion o controversia planteada y de rito (0 forma) que pone fin al proceso sin entrar en la resolucién de la cuestién planteada. Tam- bign se clasifican considerando la demanda como un proyecto de sentencia formulado por el actor, ésta serd principal ¢ incidental 2.4. LA SENTENCIA EJECUTORIADA, Cuando Ja sentencia es emitida por el juzgador, las partes no podrin impugnarla porque la ley lo ordena (en razon de 1a poca tuantia, tc.) y entonces el fallo se transforma en sentencia ejecuto- riada por ministerio de ley. En el supuesto que pudiera impugnarse por un recurso ordinario (apelacién), una vez sustanciado ante el superior y emitido el fallo de segunda instancia, éste es también sentencia ejecutoriada por ministerio de ley, al no admitir en su contra un medio ordinario de impugnacién. Por Io tanto, una for- ma por la cual la sentencia definitiva adquicre la categoria de jecutoriada es por mandato legal, o ministerio de ley. También existe otro medio por el cual se obtiene Ia ejecutoriedad de la sentencia, es mediante una resolucién del propio juzgador, cuando habiéndose intentado el recurso (apelacién), el recurrente se desis- te del mismo o abandona su tramitacién provocando la ejecuto- riedad, mediante una resolucién judicial. En ambos casos estamos ante Ta presencia de “la resoucién definitive que no puede se impugnada por un recurso ordinario pero si por uno extraordinari ° ne a a (Nuestra Ley Procesal, articulos 420 y 420 bis, reglamenta estas formas mediante las cuales la sentencia cau sa ejecutoria. ht algunos hacia el interior del proceso y otros que trascienden al exterior del mismo, Los principales son los siguientes: a) Pone fin al proceso, extinguiendo la jurisdiccién del juez en cuanto al li- > ta clasifiocin ticnen una estrecha vinculacisn, con la de la accin en cuanto au cbjetvo, «ota expeasion nos Femtimos, widad 3, punte 7.1 cae eT hme on fu ia ter vcad, tomo TV. e110. 260 JOSE VIZCARRA. DAVALOS {igio; 4) Declara el derecho y restablece el orden juridico violado, ©) Su retroactividad, y d) La cosa juzgada, 4) Al referimos la relacién juridica procesal y al proceso, establecimos que la forma normal de extincién de ambas era la sentencia, porque es el objetivo de las partes y el juez. Si el oje cicio de la accién tiene como finalidad el acto jutisdiccional me- diante el cual se declara el derecho, aplicando la norma general al caso conereto y la satisfaccion del interés particular de las partes, con la sentencia firme (ejecutoriada) se agota el proceso: juzgados los hechos mediante el fallo, el juzgador agota su jurisdiccién, se cextingue su facultad para conocer nuevamente de ese asunto. La sentencia no podré variar 0 modificarse, si acaso alguna aclaracién (mediante la aclaracién de sentencia) sin alterar lo substancial. 4) Recordando el cuarto elemento de la jurisdiccién que se materializa en la sentencia, el juzgador declara (aplica) el derecho, es decir, aplica la norma general al caso particular materia de la controversia; y cuando el fallo es condenatorio, obliga al senten- ciado al cumplimiento de la norma juridica traseredida, es decir, ‘ordena el restablecimiento del orden juridico violado. ©) De Ia fecha del planteamiento de la controversia procesal a la de Sentenciar, normalmente transcurre cierto lapso (corto o lar- 20), lo que obligaria a pensar que el juez.juzgaria los hechos como se presenten al momento de fallar. Esto no es asi, porque el juz- gador debe analizar y juzgar los hechos litigiosos como quedaron precisados al fijarse la controversia procesal, el juez. debe retro- traerse en el tiempo y emitir su decision ubicdndose en la época del planteamiento. Por ello se considera que la sentencia tiene el tos retroactivos. @ Sin duda alguna, uno de los efectos mas importantes pro- ducidos por la sentencia ejecutoriada, es la cosa juzgada, que nifica “juicio dado sobre la litis”. (H. Alsina.) Observando los fines que persiguen las partes en el proceso, ntre otros, obtener del juez una resolucién que decida definitiva- mente la cuestién litigiosa, que no pueda ser discutida de nuevo en el mismo proceso y en ningiin otro y pueda ejecutarse sin nue- vas revisiones, De este efecto se desprenden dos consecuencias Précticas: una, el condenado 0 cuya demanda se declard improce- dente, no puede nuevamente plantear la cuestién decidida; y la otra, la parte beneficiada cuyo derecho fue reconocido en la sentencia, TEORIA GENERAL DEL PROCESO 261 puede hacerlo valer en justicia, sin que ningin juez se rehuse a tenerla en cuenta é Es necesario distinguir entre la cosa juzgada formal (0 pro cesal) y la cosa juzgada material (0 sustancial), La primera se refiere a Ia imposibilidad de reabrir Ia discusién en el mismo pro- cees0, sea porque las partes han consentido el promunciamicnto de primera instancia, sea por haberse agotado los recursos ordinarios yy extraordinarios cuando procedan. La segunda, en cambio, se pro- duce cuando @ la irrecurribilidad de la sentencia se agrega la inmutabilidad de la decisién, que se produce como consecuencia de que la sentencia no puede recurrirse por medio de impug- nacién y en consccuencia 1a decisién serd inmutable. Por lo tanto puede darse la cosa juzgada formal sin la material, pero no a la inversa, porque la cosa juzgada material tiene como presupuesto Ja formal. La cosa juzgada también puede ser analizada desde dos pun- tos de vista: por los efectos trascendentales de la sentencia y on ‘cuanto a la impugnacién I. Por los efectos de Ia sentencia puede ser: Formal y consis- te en la fuerza y autoridad que tiene una sentencia ejecutoriada tinicamente en el juicio en que se pronuncié sin que trasciendan sus efectos a otros procesos; y material, que consiste en la fuerza yy autoridad que tiene la sentencia ejecutoriada, no s6lo en el jui- cio en que se pronuncid, sino que sus efectos trascienden a toda clase de. provesos. TL En cuanto a la impugnacién: es en sentido formal y resul- ta de Ia sentencia ejecutoriada, que no puede ser impugnada por ningiin recurso ordinario, pero sf por uno extraordinario © juicio dde amparo; y en sentido material, es 1a autoridad que la ley otor- ga a la sentencia gjecutoriada, que no puede ser (impugnada) mo- dificada 0 revocada por ningiin medio juridico de impugnacion (ordinario, extraordinario 0 juicio de amparo). La cosa juzgada en el pensamento de los procsaits esta blece la presuncion juris et de jure de que la ejecutoria, segiin 1a expresién tadcionlmente consagrada,s0 ene por verdad legal inalterable (es decir, que contiene la verdadera y exacta aplicacién de la norma legal a un caso conereto) y no puede, por tanto, impugnarse, modificarse, por motivo, autoridad 0 tribunal alguno, JOs#: VIZCARRA DAVALOS (Recordando el Cédigo Federal de Procedimientos Civiles, en ol articulo 354 establece que, la cosa juzgada “es la verdad legal ‘Advierte, sin embargo Chiovenda ’ que cuando se define 1a cosa juzgada como ficcién de verdad, como una verdad formal como una presuncién de verdad, se dice na cosa s6lo exacta en el sentido de que para la mayor parte de las personas extraias al pleito 1a sentencia del juez aparece como cosa conforme a la ver- dad; pero que ésta no es més que la justficacién social de la sen tencia, puesto que juridicamente la cosa juzgada no hace referen. cia a la afirmacién de la verdad de los hechos, sino a la existencia de una voluntad de la ley en el caso conereto. : Para afirmar la fuerza y la autoridad de la cosa juzgada y hacerla practica y afectiva, conceden las Jeyes una accién y una excepcién. Compete la accién a la parte que obtuvo la resolucién favorable para pedir la ejecucién de la sentencia contra el vencido © para reclamar la cosa ganada en el pleito a cualquiera en cuyo Poder se halla, siempre que no haya prescrito la accion La excepcién que puede invocarse para estos efectos es Ia “de cosa juzgada”, que tiene el cardcter de perentoria y compete aquellos que han sido parte en un juicio anterior, consistiendo en Ja facultad de alegar y probar la existencia de 1a cosa juzgada, es decir, a facultad de alegar y probar la existencia de aquella cau. sa especial de extincién del derecho de accién. De acuerdo con el derecho positive, no todas las sentencias producen la excepcién de cosa juzgada, las resoluciones judiciales firmes dictadas en un negocio de alimentos, ejecicio y suspension de a patria protestad, intediccién, jurisdccién voluntaria y las demés que prevengan las leyes, puede alterarse y modificarse Posteriormente cuando cambicn las circunstancias que afectan cl sjercicio de la accién que se dedujo en el juicio correspondiente. 3. LOS MEDIOS DE COMUNICACION EN EL PROCESO 3.1. Concerto La actividad comunicativa que en el proceso se realiza entre los que intervienen en él: del érgano jurisdiccional con las partes, fontre éstas, para con personas extraiias al proceso (peritos, testi- Citado por R. de Pin y JC. Larafaga en su obra anes invocada, pg. 331 TEORIA GENERAL DEL PROCESO 263 05, etc.), que intervienen en su desarrollo; el auxilio que en oca- siones, se precisa de otros érganos jurisdiccionales (nacionales 0 cextranjeros), asi como de autoridades no jurisdiccionales, exige cestablecer una regulacién eficaz de los medios de comunicacién en el proceso, adecuados para servir esta necesidad. Las leyes procesales nacionales y los tratados de carécter in- temacional atienden a esta exigencia de la administracién de justi cia, que se presenta en sus diferentes esferas. En via de concepto podemos decir, que son “las comunicaciones del 6rgano jurisdiccional para con las partes, terceros, auxiliares ‘con otras autoridades jurisdiccionales (nacionales 0 extranjeras); con autoridades no jurisdiccionales; y de las partes entre si 3.2. DIFERENTES CLASES DE MEDIOS DE COMUNICACION PROCESAL Hay que distinguir entre los medios de comunicarse de los jueces y tribunales con los que intervienen en el proceso, para hacerles saber las resoluciones que dicten; y los medios de comu- nicacién de los jueces y tribunales entre si, con los poderes y autoridades de oiro orden y con los jueces y tribunales extranje- ros; asi como los que se dan entre las partes 33. LOS PRIMEROS SE DENOMINAN NOTIFICACIONES. “La notificacién es el acto procesal por el cual el érgano jurisdiccional, hace saber cen forma legal al destinatario el contenido de una resolucién jurisdiccional. A su vez se clasifiean en cuanto a su especie 0 tipo en a) El emplazamiento: es el llamado que se hace a una perso- na para que, dentro del plazo sefialado, comparezca a juicio ante el tribunal a contestar la demanda, so pena de suftir el perjuico. 3) La citacién: es el acto de poner en conocimiento de alguna persona un mandato del juez o tribunal para que concurra a la prictica de alguna diligencia ‘) El requerimiento es el acto de intimar, en virtud de resolu- cién jurisdiccional, a una persona para que haga o se abstenga de hacer alguna cosa, ‘d) La notificacién propiamente dicha, son por exclusion, todas las demés, incluso son la mayoria, 264 JOSE VIZCARRA DAVALOS ‘También se clasifican las notificaciones, por la forma de pr ticarlas, las mas importantes y conocidas, son las siguientes 4) Personales. b) Por cédula (rotulén). ¢) Por lista. d) Por boletin judicial. e) Por edictos. ) Por correo. g) Por telegrama. h) Por i; ) Por medios elecirénicos, como: correos, fax, teléfono, etc, su sola enunciacién considero no requiere de mayor explicacién Para la sustanciacién del proceso, en multiples ocasiones re sulta indispensable 1 mutuo auxilio de los érganos jurisdicciona- les, bien para llamar a juicio al demandado que tiene su domicilig fuera del mbito competencial del juzgador 0 para el desahogo de pruebas en otros partidos judiciaies, etc., ante el respeto de su soberania jurisdiccional, cuando se requiere de su ayuda, se util zan como medios de comunicacién los siguientes: 4a) El suplicatorio o carta rogatoria, es el medio de comunic: ccién de un juez nacional con otro extranjero, sin importar la re- lacién jerérquica entre ambas autoridades. b) La requisitoria, es la comunicacién de un tribunal federal para con otro de igual 0 menor jerarquia, o bien para con autori dades locales, ©) El exhorto es la comunicacién entre autoridades de igual Jerarquia, de la misma o diferente jurisdiccién, 0 bien de un juez hacia otro de mayor categoria de la misma o diferente jurisdiccién, © a uno de menor jerarquia pero de diferente jurisdiccién, 4) El despacho es la comunicacién de un tribunal hacia otro de menor jerarquia, de la misma jurisdiccién local Es caracteristica de estos medios de comunicacién, que se puede delegar facultades jurisdiccionales, propias de quien tiene la aptitud para conocer del asunto, otorgéndolas parcialmente a otra autoridad, para que realice las actuaciones encomendadas. @) BI oficio es el medio de comunicacién de un juez. para con cualesquier otro tribunal, sin importar su relacién jerirquica, o bien para con otras autoridades carentes de jurisdiccién, Lo distintivo de este medio es que no existe delegacién de facultades jurisdiccionales. Los medios de comunicacién también existen entre las partes y son: Vista, traslado, junta de avenimiento y audiencia de coneiliacién. Los dos primeros consisten en hacer saber a una de las partes la peticién formulada por fa contraria. La diferencia entre ambas de caricter formal y estriba en que en la segunda se entrega * Formas de notficacién previstas en Jos aniculos 106 y 123 del CPC. de J ‘TeORIA GENERAL: DEL PROCESO 265 copia del escrito que contiene Ia peticién. El tercero, consiste en Ja convocatoria que hace el titular del érgano jurisdiccional, para el avenimiento (conciliacién) entre las partes, a Ia que son convo~ ceados por el juez, 0 para enclarecer algiin punto controvertido, en uso de las facultades discrecionales que le otorga la ley 0 a peti- cién de parte. El iiltimo resulta obligatorio en materia laboral y en algunos procesos civiles como el nuestro, local, cuando se pro- duce la contestacién de demanda (articulo 282 bis). Lo particular de estos medios de comunicacién, es el contacto © comunicacién directa entre las partes, originada unilateralmente por éstas, por el juez 0 en cumplimiento de un mandato legal LOS MEDIOS DE COMUNICACION EN EL PROCESO { Las partes, terceros, | Modiante: las auxiliares de justicia } potificaciones ¥y autoridades Mediate: suplicatorio © Del érgano Otros | jjurisdiccional: con | tribunales }) -requisitoria ~exhorto | | —despacho ~offcio | | Otras autoridades Mediante (no jurisdiccionales oficio l El traslado La vista Be ie a Junta de avenimiento | Audiencia de conciliacién 266 JOsf: VIZCARRA DAVALOS 4. LOS TERMINOS PROCESALES 4.1, Concerro El tiempo en el proceso es un factor de importancia decisivg La eficacia de sus efectos se nos muestra, por ejemplo al refer, nos a los dias y horas habiles, a los términos, a la caducidad vis instancia 0 de ia accién, la prescripciin, etectera, La relacién procesal es una relacién en movimiento, corre a través del tiempo, y éste es un factor que no puede por menos de dejar sentir su influencia en el desarrollo de las actividades jurs diccionales, factor cuya administracién consttuye uno de los. mas delicados problemas del. proceso. La influencia del tiempo en el proceso es indudable y debe ser tenida muy en cuenta al regular las actividades en que Ta funcion jurisdiccional se desenvuelv Por término podemos entender “el espacio de tiempo en el cual debe realizarse una actuacién procesal, a cargo de quienes inter vienen en el proceso” Para E, Pallares,* el término judicial “es el tiempo en que un acto procesal debe levarse a cabo para tener eficacia y valides legales”. Agrega, que en su acepcién més amplia, la palabra es sinénima de “plazo”, pero algunos jurisconsultos modemnos estable cen entre ellas la diferencia de que, mientras el “término” propia. mente dicho, expresa el dia y la hora (yo diria) a partir del cx debe efectuarse un acto procesal, el “plazo” consiste en un con- junto de dias, dentro del cual pueden realizarse validamente deter. ‘minadas actos. 4.2. CLastmicacion Sogiin sea el punto de vista que se le quiera ver, el término procesal, puede clasificarse de la siguiente forma 4 Refiriéndose a quién fija los términos, tenemos: los legales (stablecidos en la ley), los judiciales (que seitala discrecionalmente cl juez) y los convencionales (establecidos de comiin acuerdo por las partes, por ejemplo, en un convenio judicial) 4) Por su ampliacién: pueden ser prorrogables, aquellos cuya duracion puede ser aumentada por el juez, y los improrrogables (Contrarios a los anteriores), Hamados también fatale. a TEORIA GENERAL DEL PROCESC 267 Bia l deccnmt, heat eis pes Pic seca uae anil ete oat Ie teres, aloo aurilares de Ia juicy as asordads ip rasa cl lal canal hay Jes (apcticament para wea persons, eto, demmndade trig, pars is) commes Qos que occ a las dos pers) 4.3, FUNCIONES DE Los TERMINOS Tracu erin dn tio pros, si esd de acusar rebeldia, el proceso contimuara su curso, pasar a la si- guiente fase o etapa, y se tendr por perdido el derecho que debié eee gear eee q Los términos en el proceso le dan orden, impiden su er: Ilo anarquico, obligando a los que en él intervienen a cumplir con tas eagle (Clgatons) process en el lopen conctpontions Los efectos procesales o funcién de los términos, fundamen talmente son dos: 1° Tienden a la secucla del proceso, regulando ‘el impulso procesal; y 2° Opera la preclusion oe ae al Sse nla frie & on deco ald por no hao val Sportaun at las teraiasde (at THT el Cty Bs Procedimiento Civil Local). UNIDA\ MEDIOS DE IMPUGNACION DE LAS RESOLUCIONES JURISDICCIONALES Sumanio: 1—Los negp10s DE IMPUGNACION. 1.1.—Generalidades, 2.--Los RBcURSOS. 2.1.—Concepto. 22.—Clasficacion. 23.—Re- ‘cursos en particular. 23.1.—Reeursos ordinatios. 2.3.2—Recur- sos extriondinarot, 3.—INCIDENTES DE NULIDAD DE ACTUACIONES. 4—Tuteio De AMPARO, Ossenivos Al concluir esta unidad el alumno podra: Identificar los medios para impugnar las resoluciones jurisdic~ cionales Proporcionar un concepto de cada uno de los medios de im- pugnacién Explicar la clasificacién de los medios de impugnacién. Establecer cudndo los recursos 1o son técnicamente. Explicar la clasificacién de los recursos. Proporcionar el concepto de los recursos en particular 1, LOS MEDIOS DE IMPUGNACION 11, GeNERALIDADES Al estudiar 1a actuacién de los sujetos de la relacién juridica pprocesal, vimos que ella no se desarrolla arbitrariamente, sino con sujecién a normas permisivas o prohibitivas que determinan las facultades y las cargas que a cada uno corresponde, El proceso se mueve dentro de un juego de posibilidades bajo el control recipro- cco de los sujetos que integran la relacién procesal, y asi como cada, parte sigue atenta la actuacién del adversario, para contenerla mediante la intervencién del juez dentro del limite que correspon- 269 270 Jost. VIZCARRA DAVALOS de, ambas tienen también la de controlar la actuacién del juez, impugnando sus resoluciones, cuando no se ajusten a las normas prescritas para cada caso, haciendo uso de tres medios de impug- nacién fundamentales, que son: los recursos (que permiten un nue- vo examen de la resolucién), el incidente de nulidad de actus nes (que priva de eficacia a las actuaciones y resoluciones), y cl juicio de amparo, (a través del cual se analiza la legalidad de los actos del juzgador), 2. LOS RECURSOS 2.1, ConcePTo Llamase recursos! “a los medios que la ley concede a las partes para obtener que una providencia judicial sea modificada o dejada sin efecto”. Su fundamento reside en una aspiracion de jus- ticia, porque el principio de inmutabilidad de la sentencia, que tituye a su vez el fundamento de Ia cosa juzgada, derivado de la nocesidad de certeza para Ia estabilidad de las relaciones juridi- cas, cede ante ta posibilidad de una sentencia injusta. ‘También podemos definir los recursos, como “los medios de impugnacién que la ley establece en favor de las partes 0 terce- 10s, cua finalidad es obtener la revocacién o modificacién total 0 parcial de una resolucién jurisdiccional” (J. Vizcarra) La historia confirma esta funcién de los recursos. Entre los germanos el recurso de apelacién era desconocido, porque siendo Ja sentencia una expresién de la voluntad divina, aquélla no podia ser injusta, porque la divinidad no podia equivocarse, En la legi lacién espaiiola de los primero tiempos, por el contrario, los re- cursos eran tanto més numerosos cuanto més se desconfiaba de los Jueves; afirmacién que se comprucba con sélo examinar las Leyes de Indias, cuyas disposiciones establecian varias instancias y con- cedian recursos que luego fueron desaparcciendo. La tendencia actual es hacia 1a supresién de los recursos, en la misma medida ue se fortalecen fas facultades del juez y halla su expresin mixi- ma en el establecimiento de la instancia tinica. De lo expuesto se deduce que Ia consecuencia inicial de la interposicién de un recurso, es impedir que Ia resolucién produzca sus efectos normales. De ahi la necesidad de establecer un limite Segin H. Alsin, en su obra citada, tomo 1Y, pig, 184, THORIA. GENERAL DEL PROCESO in ‘en el tiempo para su ejercicio, pues en caso contrario, ni las interlocutorias adquiririan cardcter preclusivo, ni las definitivas el de cosa juzgada; es decir que el avance del proceso no seria po ble, ni la liris lograria solucién definitiva. El vencimiento del tér- ‘mino produce por eso Ia caducidad del derecho a interponer los recursos, y en cambio, su interposicién en tiempo produce la sus- pensidn de Ios efectos de la sentencia La coneesién 0 denegacién de un recurso no puede quedar li- brada a la voluntad del juez, pues éste podria negarlo, incluso por ‘amor propio, cuando considerase que su. pronunciamiento estuviese apegado a derecho, © por temor a que el superior dictase un pro- ‘unciamiento contrario; o podria concederlo por exceso de delica- deza en el desco de que las partes adquieran la conviccién, me- diante una sentencia confirmatoria, de la justicia de su fallo. Por otra parte, no es posible dejar librada 1a admisibilidad del recurso 1 a voluntad de los litigantes, porque frente a la aspiracién de justicia esta Ia necesidad social de poner término a los litigios. De ahi la necesidad de una regulacién legal que limite los recursos, fije la oportunidad de su interposicién y establezca sus efectos. Los recursos son costosos por la pérdida de tiempo que supo- nen, por Ia imposibilidad de reproducir a veces el acto declarado nulo, y por la intervencién de un tribunal distinto en la apelacién, Es en consideracion a estas circunstancias por lo que la ley auto- riza otros recursos, los cuales permiten al juez. que dict6 la provi- dencia enmendar su propio error (revocacién), o fijar el alcance de su pronunciamicnto (aclaracién), o reparar el agravio (apelacién), 2.2. CLAsIFICAciOn No todos los recursos se interponen de igual manera, ni den- tro de los mismos términos, ni proceden en. anélogas circunstan- cias; surgiendo de aqui una primer division fundamental: 1®) Son los recursos ordinarios, (en materia civil), los que la Ley Procesal concede en situaciones normales, contra resoluciones dictadas durante la tramitacién del proceso, incluso en ejecucién de sentencia y son (Jos. més usuales); Revocacién, apelacién, queja y la revisi6n oficiosa. En el punto siguiente nos referimos a cada uno. El mal Iamado recurso de responsabilidad (referido en algu- nas leyes procesales como la nuestra local civil, articulos 469 al m s08# VIZCARRA DAVALOS 476) téenicamente no es un medio de impugnacis aunque el legislador (siguiendo tm criterio general, yore Gea eee do a hacer efectiva la responsabilidad civil en que pueden jueces y magistrados cuando en el desempefio de’ sus fare infkinjan las leyes, por negligencia o ignorancia inexcusabia sy hecho de que la sentencia que recaiga en ese procedimicane: co reaca de efiacia para alleat la sentencia firme cn gue vs hob cometido el agravio, es en este sentido, bien significative. Taree co puede atribuirse la naturaleza de recurso, al llamado por alge nos autores como de acaacién de sentenci,en vrtud ont a pate puede obtener del ue alara lginconcao © me nla cuales que contnga una rescacon de cota clase, sobre um punto disco ex al liga (at. 89 B dol ley citada), scacino cami gu tain pds ral defi, Tas cas nose ala de impugar I seca, sin do ea recerla 0 completara; cl sentido del fallo (condenatar la torio) no cambiar A ae at cance orinis Los ue a ey eancde en esos ex cecil yen enicnes expres demi ven AelacinExtardnaa,Revisn ye Sonia notice ex otene I atlacn de lo acto en prensa sin efecto toto parciament, aun euando ya ens sentenca ees tora Estos recursos no ls cantemplan fda as leslaciones a. nuestra), porque sus objtivas se eumplen més ampl mente a través del juicio de amparo. Cae Para Aguilera de Paz. y Rives Marti? son ordinarios los cursos que pueden ser interpuestos en todos los casos ¥ durante el Ino, extaordinaris, pore contarn, los que slope ser ulizados en cass eons y determina y despa de fens cl juicio, siendo nota caracteristica 6 si se quiere determinante ellos, el que s6lo deban intentarse cuando no exista ning recurs $0 ordinario que pueda ejrcitarse conta el agravio oinjusticia cometido, En los ordnaros se somete Ia cuestion iigiosa integra, mental jez 0 wba (ad qm), ante guen pode er trtada scutida en toda amplitud y extensin, sea ol mismo tribunal o erréneo) destin, * Citado por R. de Pina y J. C, Lan aga en s oben cit, pg. 352. TEORIA GENERAL. DEL. PROCESO. 2 distinto que el que dict6 la resolucién recurrida; en tanto que en fos extraordinarios no se ventila la cuestin litigiosa integramente, Ieee yesuelve sobre la justicia o injusticia de la resolucién reeu- ida, sino que se limita y circunscribe a determinar si hay 0 no Infraccién de la ley sustantiva 0 adjetiva alegada como fundamen- to del recurso, o existe el error manifiesto de hecho que lo mot Me, dado que estos recursos deben fundarse en causas taxativamente Sehaladas por la ley, derivadas del error de derecho 0 de hecho. ‘Alcald Zamora? entiende que la clasificacién de los recursos judiciales debe ser tipartita y no bipartita. En su opinion, los re- Uirsos judiciales pueden clasificarse en: ordinarios que se presen- fan como medios normales de impugnacién; extraordinarios, que han de basarse necesariamente en motivos especificos sefialados por €l legislador, y excepcionales. Para el reconacimiento de los re- ursos excepcionales tiene en cuenta “la linea divisoria marcada por la institucién ante Ia que se detienen las otras categorias, 0 fea, 1a cosa juzgada”, y el que “al existir recursos extraordinarios, distintos de la revision, hay que caracterizar a ésta como excep- ional”. ‘Una segunda clasificacién de los recursos, es en razén de la autoridad que conoce del mismo y to resuelve: 1” El Organo juris diccional emite una resolucién, causando agravio a una de las partes, quien buscando remediarlo, hard valer un medio de impus- Facién ante el mismo tribunal que ta dictd, la Tey le concede la facultad de revisar su propia resolucién con base en los motivos de inconformidad del recurrente y resolverd si procede 0 no revo- carla 0 modificarla (ejem.: el de revocacién). 2* Otras resoluciones {de mayor transcendencia en la marcha o decisién de Ia controver- sia, requieren la intervencién de una autoridad jurisdiccional de mayor jerarquia, generalmente la inmediata, quien a través de los medios de inconformidad 0 de oficio revisard la resolucién impug- hada y resolver sobre la procedencia de revocarla o modificarla (ejem: apelacién, revision de oficio). Todos presuponen un per- juicio y en todos los casos se busca repararlo, en algunos el peru io se produce por errores que puede remediar el mismo organo jurisdiccional que pronuncié la resolucion impugnada, es deci, son ecursos que conoce y resuelve el mismo tribunal que 1a dict; 7 Giado por H. Alsina en a obra referida en la nota anterior. 24 THORIA GENERAL DEL PROCESO FE JOSE. VIZCARRA. DAVALOS transcurrido no puede perjudicar @ la parte, a menos que tm comprobarse que tivo conocimiont de fa providecia ants de su presentacion. ‘mientras que en otros, el recurrente que busca reparacion en oir tribunal supeie,e8 decir, que eames, hablando de recursos que conoce y resuelve una autoridad inme diata superior a la que pronuncia la resolucién recurrida. REOLAS COMUNES: No obstante sus diferencias especificas, los eee recursos estin sometides a diversas reglas comes, las que enun. 2:1. Recursos ordinarios. Los auténticos recursos ordinari ciaremos ahora, sin perjuicio de ocuparnos muevamente de elas al e considera agraviado, 2.3, RECURSOS EN PARTICULAR. regulados por nuestro Codigo de Procedimientos Civiles), La cuestién de saber quién puede interponer un recurso, cons- siin de Oficio, y d) Oueja tituye un aspecto de Iegitimacién procesal. Como regia general, puede decirse que los recursos tienen la caracteristica de que fun 4g) REVOCACION. ConcErTO: Tiene por objeto que el mismo tri- cionan por iniciativa de las partes, y que, en consecucncia, a clas fn su caso, 46 la resolucién impugnada, la revise y en su corresponde su deduccién, Pero hay casos en que el recurso se Faro qoe 0 miodifique total 0. percialmente niega a las partes, y otros en que se concede a terceros. Asi como Me ale conra toda ls fesolucions clasificadas como decre el interés es la medida de la accién, el agravio es la medida en el tos y von es abo cfs nepcis en gue por 20 ser apelbe Tecurso, y por eso se concede aun a los que no siendo parte en ncia definitiva no pueden ser apelados et el proceso, suften un perjuicio como consceuencia de la resolucién. eae cacti debe sre af case a eee Se explica entonces que el recurso no proceda cuando la sentencia escrito dentro de cierto término (veinticuatro horas 0 tres dias sea favorable a a pretensién de la parte, 0 cuando ésta se ha alla- Bisemce ‘a Ia notificacién), por excepcién y a criterio del a nado a la pretension del adversario y la sentencia se funda en esa dor se da vist acorn por temo jaa, el er de coocaated ber proms de plan don del tc i Esta crluin eee ee aa are Sete no admits mis recur, slo ie La responsabii ‘que no intervengan, pero acerlo des incorporan Behe cael a la relacién procesal, porque en ese momento asumen la calidad p33 ee eda ieee seas comprende varios de partes. No obstante permanecer en su situacién de terceros ex- we es eonveniente analizar, dada su importancia emi pet te eee lacién cuando se pretende ejecutar contra ellos una sentencia dic- ales ordinarios. Medinte este recurso, la parte vencida en la Fe ga a2 am itrvenib.ce egrets Pemaristancia oben wn nuevo exaren fall de i evestin ia jue en Ia organiza- de las parts pueden ea as conecsoes dias au se Sebati pr um rao json dino, qu os nia tuscan iin leo ge ieee ee ieee rostre (baal de agua otc). ion; , del. auto que mente un tucién recurrida (tribunal de segunda ins 4 Ia que se ha negado a contestar por improcedente, 0 respecto de Be ni) dares cekaris) Sie pe epee la cual so ampara en el secreto profesional, etcétera segunda instancia, sin que después de ésta (en a Los términos fijados para la interposicién de los recursos no apd "ina otra, si bien Ia sentencia recaida en apela- comienzan a correr mientras 1a providencia respectiva no sea vili- Caro) aoe inpugnada, ulizando el juicio de amparo, Lamen- damente notificada. A ese efecto, deberin tenerse en cuenta las icles ‘que se haga del amparo, no sélo el eee 7 dita forma de oaieackn, sain a staleza dela provi Ingram ee ecomtnent tad a cia; si la notificacién adoleciese de un vicio de nulidad, demos- Beet tee tado en trada ésta al interponerse el recurso, debe ser admitido, porque el yet procesales 276 Jost VIZcARRA DAvaLos Principio del doble grado de jurisdiccién. La. a liccién, La apelacién, es, pues, un recurso judicial ordinario admitdo en todas las legislaciones, Sin embargo, no han dejado de formularse objeciones contra ella Concepto. La apelacién tiene por objeto que un tribunal supe- rior al que dicté la resolucién impugnada, la revise y en su caso Ia revoque 0 medifique (Jl. Vizcara, i 8 pricticos espaiioles han considerado siemy siderado siempre la apelacién omo un recurso neccsrio para gaantzar la buco admingtocon de Ia justicia, La experiencia abona esta opinion actividad del juez de apelacién, recae tambi mn, recae también sobre I materia objeto del proceso, y n0 sobre Ia senencia de primera instancia excusivament, Esta actividad, no obstante, tiene la li icin impuesta por la pretensién del apelante, porque no per- ite al ibunal sul agavios no forulado, ni a defcenia de los que lo hayan sido, esto como regla general, salvo contadi lees) regla general, salvo contadisimas La naturaleza de la sentencia 6 ntencia pendiente de apelacién ha si anaizads por ls tats, ganda conse coat tias. En Ia literatura procesal italiana el tema ha sido objeto de cconsideracién especial Sie Para Chiovenda, la sentencia st , a sentencia sujeta a recurso no es una ver~ dadera propia sentencia, sino un simple elemento que con el concurso de otro (término, caducidad o renuncia de la apelacién) Hogaria a ser la declaracién de derecho; 0, dicho de otro modo, ai omen sujeta a recurso constituye s6lo una situacién ju. ridica que, al concurrir hechos particulares, v sii us al erm 10s particulares, se convertiré en una Rocco frente a esta opinién inion que acabamos de citar, afirma Ia sentencia de primer grado es un acto pr sl mismo parece y ue subsiste como acto de declaracién hasta que se revoque 0 se modifique 0 se sustiuya por una nueva sentencia (a de segundo srado) 0 sea por otro acto de declaracién de derecho Nicga Rocco) que el estado de dependencia dela resolucién de primer tado respect Ta de segundo se derive, como han dicho algu- thos, de_una condicién suspensiva 0 resolutoria, porque la condi. Cionalidad se refiere a 1a no existencia (condicin suspensiva) 0 a Ia falta de persistencia de los efectos juridicos de un acto anterior * Sobre este punto noe epoyamos en la of ae Poy a obra ya citada de R. de Pina y J.C. THORIA GENERAL DEL PROCESO am La sentencia sujeta a recurso (en opinién de Roceo) es, “un acto juridico perfecto con fuerza obligatoria, propia, pero dada la posibilidad de los dos grados de jurisdiccién, tiene efectos lis dos y parciales mientras sea posible otra diversa declaracién del derecho (sentencia de segundo grado), ya que los érganos jurisdic ccionales competentes para conocer en segunda instancia tienen facultad de revocar ef acto de declaracién de los érganos.infe- riores, sometidos a su revisién, y de pronunciar una nueva y di- versa declaracién mediante otra sentencia’’ La sentencia defintiva de primera instancia, pendiente de re- ‘curso no cambia de naturaleza al alcanzar la calidad de sentencia firme. El transcurso del tiempo colabora, sin duda, en la produc cién de la totalidad de los efectos que Ia ley atribuye a Ia senten- cia definitiva, pero en su calidad de acto procesal del juez no experimenta ninguna transformacién. Los autores que han dedica~ do atencién a este problema no han conseguido en la mayor parte de los casos, legar a conclusiones aceptables, principalmente, por- que han aplicado a un acto juridico procesal eriterios que no pue~ den tener validez. més que para los actos juridicos civiles Clasificacién. Se reconoce por algunas legislaciones, dos cla- ses de apelacién: la ordinaria y la extraordinaria. La diferencia entre la apelacién ordinaria y 1a extraordinaria esti claramente determinada por el objeto de cada una de ellas. La primera aunque no se limita a las cuestiones de fondo las tiene ‘como su principal objeto; en cambio ta segunda tiene siempre como finalidad la correecién de violaciones a las reglas del procedimiento (imitada taxativamente a ciertas causas) Procedencia y efectos de Ia apelacién ordinaria, Los cédigos procesales suelen establecer respecto-a la procedencia de los re- ‘cursos, un principio general, y ademés los casos particulares. Regla: La apelacién procede, en términos generales (de acuer- do con el articulo 434 del Cédigo de Procedimientos Civiles Lo- cal) en materia contenciosa, contra las sentencias pronunciadas en juicio cuyo interés rebase cierta cuantia (setecientos veinte dias dde salario minimo diario general en la zona econémica). También procede en contra de autos definitivos y sentencias interlocutorias (art. 435). ‘Tratindose de providencias de jurisdiccién voluntaria seran apelables, en ambos efectos, si el recurso lo interpusiere el promo- 278 JOSH VIZCARRA DAVALOS vente de las diligencias, y slo en el devolutivo cuando el que Fecurre hubiere venido al expediente voluntariamente o llamado por el juez, © para oponerse a la solicitud que haya dado motivo a su formacién (art. 961 del cédigo citado) El estudio de los diferentes casos particulares de procedencia, de Ia apelacién queda reservada a la materia de procesal civil, en ulterior curso, En Ia legislacién civil y mercantil las sentencias interlocutorias son apelables cuando lo sean las definitivas del juicio en que recaigan y, con la misma condicién lo son los autos cuando cau. sen un gravamen que no pueda ser reparado en la definitiva o si la ley lo dispone expresamente EI recurso de apelacién procede en un sélo efecto (devoluti- Yo) 0 en ambos (suspensivo y devolutivo). En el primer caso no se suspende la ejecucién del auto 0 de la sentencia, y si ésta es definitiva se dejard en el juzgado, para ejecutarla, copia certfica. da de ella y de las demés constancias que el jucz estime necesa. Hias, remitiéndose desde luego los autos originales al tribunal su. perior. La apelacién admitida en ambos efectos suspende desde luego el proceso y 1a ejecucién de la sentencia 0 auto, hasta que sta cause ejecutoria (articulos 440 y 441 del c&digo local). ¢) REVISION DE OFICiO. Este mal llamado recurso procede, (se- sgiin el articulo 457 del Cédigo de Procedimientos Civiles), en con. tra de las sentencias que se dicten, sobre nulidad, anotacion, rec. tificacién, convalidacién o reposicién de las actas del estado civil nulidad de matrimonio y divorcio necesario, propiciando se abra de oficio la segunda instancia, con intervencién del Ministerio Pabli. £2, ¥ aunque las partes no expresen agravios, ni promovieren pruc- bas, el tribunal examinard oficiosamente la sentencia de primera instancia, quedando entre tanto sin ejecutar. Los objetivos de este “recurso” son modificar 0 revocar Ia sentencia, incluso ordenar la Teposicion del proceso parcial totalmente, A manera de concepto Podemos definir este recurso, como “aquel que tiene por objeto que 'un tribunal superior al que: dicté la resolucién 1a revise oficiosa mente, en su caso la revoque, modifique o mande reponer el pro- cedimiento. d Queia. Vicente y Caravantes definié el recurso de queja Como “aquel que se interpone cuando el juez deniega la admision de una apelacién w otro recurso ordinario, que proceda con arre. ‘TEORIA GENERAL DEL. PROCESO 279 mete fallas 0 abusos en la Jo a derecho, o cuando el mismo comet ls fcininistracign dela justici, denogando las petcionesjustas dl partes, para que ante su superior, haciendo presente las arbitari~ dades del inferior, a fin de que las evite, obligindole a proceder conforme a la ley"’ i, [a naturaleza del recurso de queja, es, no obstante la dif cia que existe en cuanto a su ambito de aplicacién, 1a misma en Se en @ Derecho mexicano que en el Derecho espa ‘ De acer con ef Derecho nacional segin R de Pinay J. Larrafiaga, el recurso de queja debe ser definido como “el medio de impugscin tical ee a Tes ats juiies us quan fea dl aleanse de los dems recursos, pra dar al buna su petior la oportunidad de corregi los efectos de las decisiones del jee inferior, en Tos casos expresamentedeterminaos,yutlizable igulnete fete alos ais de los jectres y sett, ant el titular det Srgano a que pertenezcan, en condiciones anilogas y con idéntico objeto que el interpuesto ante el superior El recurso de queja ha sido calificado de extraordinario, por algaostratastas. Demetri Sol (Gado pr De Pinay Laraiaga) ¢ dicho caricter lo confirma rantiene esta opinidn, afirmando que dic 2 Ta negativa a la procedencia de la queja si hubiere un recurso oF dino cn cata de Ia sesauion reclamada, en cio caso srs desechada por el tribunal, con imposicién de una multa a la parte ue lo haya utlizado oe N° Bn opinion de Rafael de Pina y C, Larraaga, el seco de ave, mas exactamente que como cxtracrdinaro, pues consid rarse como especial o supletorio, dada la circunstancia esencial o ha de recurrir para que pueda ser interpucsto por los litgantes: la de que no haya otro recurso utilizable as En algunas legisacons pocesales chiles (como mies arial 452 al 486) la qusj es considerado como un recurso ordnari. Tene por objeto “que el superior jeirmico revise Ta reson (actin) dl inf ye su cin It revoque 0 mo- ifique, cuando considere que hbo exceso 0 defecto en su Sido jecuin™ Se ence por exes, cndo dns do i Tizar todos los actos necesarios para que una resolucién resulte c a referida obra, pig. 355, * iad por R. de Pina y J. C, Laraiaga, en su rferida obra, pi, © Op. clts pi, 355. 280, Jost VIZCARRA DAVALOS integramente cumplida, se ejecuten u ordenen otros actos que no obliga la resolucién; y defecto, cuando hay abstencién de to- dos los actos necesarios para que la resolucién quede cabalmente ccurmplida. El recurso de queja, se interpondra ante el superior inmediato del funcionario contra el que se promueva (dentro de los cinco dias siguientes de la notificacién del acto reclamado), haciéndolo saber dentro del mismo al juez contra quien va el recurso, acompaiién- dole copia del escrito correspondiente Este recurso puede ser interpuesto no solamente por el actor y 1 demandado, sino también por cualquier tercero que salga al jui- cio, © por los imteresados que por algunas circunstancias hayan intervenido en la relacién procesal, siempre que les afecten las de- terminaciones que se dicten Dentro de los cinco dias siguientes a la recepcién del escrito 1 juez de los autos Jo remitiré al superior con un informe con jjustificacién. El superior decidiré lo que corresponda, Si la queja no esté apoyada por hecho cierto, no estuviere fun- dada en derecho 0 procedicre recurso ordinario contra la resolu- cin reclamada, seré desechada por la sala o el juez, imponiendo a la parte quejosa y a su abogado, solidariamente, una multa (hasta dd ciento ochenta dias de salario minimo). La que resulte fundada dejard sin efecto el acto procesal o resolucién impugnada. 2.3.2. Recursos extraordinarios. Se diferencian de los ordinarios, como hemos dicho anterior- mente, no sélo por el objeto sobre el que versan y por la finali- dad que con ellos se persigue, sino también por la calidad del rgano jurisdiccional competente para resolverlos, que es siempre un tribunal supremo o corte suprema. Los més importantes. y co- nocidos son los siguientes: @) La CASACION CIVIL, Rafael de Pina y J, C. Larrafiaga cita la definicién del recurso de casacién civil, como “un remedio su- ppremo y extraordinario contra las sentencias ejecutorias de los 7 Bn su obra Derecho Procesal Civil pig. 364, ivoea los conceptos de Vie ete y Caravantes TEORIA GENERAL DEL PROCESO 281 ‘tribunales superiores dictadas contra ley 0 doctrina admitida por la jjurisprudencia o faltando a los tramites esenciales del juicio, y su ‘objeto no es principalmente el perjuicio 0 agravio inferido a los particulares con las sentencias ejecutoriadas, o el remediar la vul- nneracion del interés privado, sino el atender a la recta, verdadera {general y uniforme aplicacién e interpretacién de las leyes o doc- trinas, que no se introduzcan practicas abusivas, ni el derecho consuetudinario por olvido del derecho escrito, declarando nulas, ppara estos efectos las sentencias que violan aquéllas y que por cconstituir ejecutorias no pueden revocarse por medio de apelaciones y demas recursos ordinarios”. De esta definicién se desprenden las caracteristicas esenciales del recurso: extraordinario, predomi- nantemente piblico y dirigido a mantener la recta interpretacion de la ley, El contenido politico de la casacién se pone de manifiesto en la finalidad que se le atribuye. Pero si esto no basta, su génesis histérica podria mostrarnos por si sola este aspecto de la institu: ccién, No ya entre los modemos procesalistas, que miran de espe- cial manera el aspecto piiblico de la relacién procesal sino entre los de aquel tiempo, no lejano, para quienes el proceso civil pre- sentaba un aspecto meramente, privado, el recurso de casacion se ‘considera como una institucién que tiende a garantizar el interés de Ia ley tanto como el de las partes Encareciendo la importancia de este recurso se ha dicho que en realidad “el mecanismo judicial de un pais no es perfecto mien- tras no existe el recurso de casacién”. La casacién como cualquier otra institucién procesal, tiene antecedentes remotos, pero realmente cuando aparece es con el decreto del 27 de noviembre y 1 de di- ciembre de 1790, que cre6 la Corte de Casacién Francesa. El recurso de casacién ha de fundarse en motivos previamente seftalados en la ley. Puede interponerse por infraccién de la ley 0 por quebrantamiento de forma. Los motivos de la casacién por infraccién de la ley se refieren a la violacién en el fallo de leyes que debieron aplicarse al caso, a la falta de congruencia de la resolucién judicial con las pretensiones deducidas por las partes, a Ia falta de competencia, etc., los motivos de la casacién por que- brantamiento de forma afectan, como su nombre indica, a infrac- ciones en el procedimiento. 282 Ost VIZCARRA DAVALOS El recurso de casacién, en algunas legislaciones (Francia, Ita- lia, Espafia) puede interponerse por el Ministerio Piiblico en interés de la ley, cuando las partes no hagan uso de él; pero las senten, cias que recaen en este caso sirven tinicamente para formar jutis. Prudencia sobre las cuestiones discutidas y resueltas en cl pleito, sin que puedan alterar la ejecutoria ni afectar al derecho de lac partes. Chiovenda * advierte que la querella nultatis, antecedente re- moto de la casacién, tuvo en todo tiempo un elemento politico asociando Ia defensa del particular a la del interés general y que este carécter se acentiia en las legislaciones particulares més proxi- mas a nosotros, y en fin, en la organizacién de la casacién fran. cesa y en Ia italiana, donde este elemento politico se coordiné con el principio de la divisién de los poderes del Estado, El recurso de casacién es desconocido por nuestra legislacién procesal nacional vigente, pero no por su derecho historico. Encon- {ramos antecedentes en los Cédigos de Procedimientos Civiles para al Distrito y Terrtorios de 1a Baja California, del 15 de mayo de 1884, regulaba ol recurso de casacién (en su libro 1, titulo VII) declarando su procedencia (art. 698) contra las sentencias detiniti, yas dictadas en la iiltima Tnstancia de cualquier juicio que no hu- bieran pasado en autoridad de cosa juzgada. Podia interponerse en cuanto al fondo del negocio, por violacién de las leyes de proce- dimientos (art. 699), sometiendo su conocimiento a la primera Sala del Tribunal Superior del Distrito (art. 700). El anterior eédigo del 15 de mayo de 1880, admitia igual recurso (art. 1059) también contra las sentencias definitivas dictadas en wihima instancia de un Jisio que no hubiera pasado en autoridad de cosa juzgada, salvo én los casos en que hubiera recaido en negocios que hubieren te- nido tercera instancia (art. 1511). Disposiciones andlogas a las expuestas sobre el recurso de casacién contiene el cédigo anterior 4 este iltimo del 15 de agosto de 1872 (arts, 1593 a 1644). El Cédigo de Comercio vigente desde 1889 (aunque en gran Parte derogado), también regulaba el recurso de casacién, aunque hoy no tiene aplicacién. En nuestra Ley Procesal Civil Local, ‘no encontramos antecedentes vigentes de este recurso, ni de otros extraordinarios "Tnvocado por los mismos autores dela cits anterior TEORIA GENERAL, DEL PROCESO 283 8) La EvIsION,? La revisin ha sido considerada tradicional- mente como un recurso extraordinario, que tiene por objeto la “resci- sién de una sentencia dictada con error de hecho para hacer posi- ble la resolucién justa, en un nuevo examen de la cuestién a que | fallo anulado se reficre” La presmeion de que In cosa juzgada es verdad, no puede mantenerse de un modo absoluto, aunque frente a ella se alcen circunstancias de hecho que Ia desvirtien, La cosa juzgada produ- ce sus efesos por exigencis de carter social, desde luego muy 0 idénticas consideraciones imponen la “revisin’ Sa etree eoieiecnaceecoaeaets ata cia, tanto en el orden penal como en el civil, La autoridad de la cosa juzgada, como ha dicho Chiovenda, no es absoluta y necesa- ria, sino establecida por consideraciones de utilidad y oportunidad, de tal manera que estas mismas consideraciones pueden, a veces, aconsejar su sacrifcio para evitar el desorden y el mayor daiio que se derivaria de Ia conservacién de una sentencia intolerablemente injusta En esta insiucién, como en la mayor parte de las que el derecho procesal estudia, existen elementos de orden ético, politi- co y social que contribuyen de una manera directa a darle sus peculiares caracteristicas, que los logisladores recogen y desenvuel- ven en las leyes de procedimicntos. Podritexistir una contradiccién centre el concepio de la cosa juzgada, concebido de una manera rigurosa, y el de la revisién, pero la justicia, que esta por encima de las concepeiones doctrinales, impone Ia persistencia de este re- curso como garantia suprema de que los fallos injustos s6lo pue- den prosperar por circunstancias que escapan a las posibilidades de Ia prevsin bumana ireheeoaeretiae motivos especifices que Imente se sefalan como Pee ciate onto taal epost después de pronunciada Ia sentencia, documentos decisivos deteni- dos por fuerza mayor o por obra de Ia parte en eyo favor se hubiere dictado la resolucién judicial; haber recaido ésta en virtu de documentos que al tiempo de dictarse ignoraba una de las par- tes haber sido reconocidos y declarados falsos 0 cuya falsedad se Segin R. de Pina y J.C. Larraaga, en su obra citada, pg. 366 definen y explican este recurso. 284 30st. VIZCARRA DAVALOS. econociere o declarase después; ser condenados por falsotestimoe tio dado en las declaraciones que sirvieron de fundamento 4" fg Sentencia los testigos que las hubiesen formulado, y las circuns. tancias de haberse ganado 1a sentencia en virtud de cohecho, vis. Jencia w otra maquinacién fraudulenta, ©) La APELACION EXTRAORDINARIA. De acuerdo con Eduardo Pallares” este medio de impugnacién, no es un recurso porque no tiene por objeto revacar 0 modificar una sentencia, sino mulficw ‘una instancia. Equivalente en parte, al recurso de casacién y al de nulidad de las leyes espafiolas. Se inicia mediante, una autentica demanda de nulidad, en Ia que Ia pretensién es la declaracién de nulidad de las actuaciones practicadas en el juicio. Presupone un juicio fallado por sentencia definitiva Buscando en la Historia Juridica Nacional, la apelacién extraor- dinaria tiene como antecedente cl antiguo incidente de nulidad, que Se convirti, posteriormente, en el incidente de mulidad por vicios en el procedimiento (del que tratan las leyes procesales de 23 de marzo de 1837 y 4 de mayo de 1857), estableciendo que los que no litigasen © no hubiesen estado legitimamente representados es- taban facultados para pretender, por via de excepcién que la sen- tencia no les perjudicare, que més tarde se transformé en el re. curso de casacion (establecido por el Cédigo de Procedimientos de 1872), que refundié on él la nulidad por vicios de! consenti- miento (en su articulo 1600, disposicién suprimida en el Cédigo de 1880 y restablecido en el de 1884, cuyo articulo 97 disponia ue las notificaciones que se hicieran en forma distinta de la pro- venida legalmente, seria nulas y que la parte agraviada podria pro- ‘mover, ante el propio juez que conociera del negocio, el respect Yo incidente de nulidad de 1o actuado, desde-la notificacién hecha indebidamente). Los tratadistas que han dedicado atencién a esta forma de apelacién entienden que sélo ha introducido, en relacisn con los incidentes a que hemos hecho referencia, como modalida. des, la de que se pueda interponer el recurso aun después de dic. fada 1a sentencia, siempre que concurran ciertas circunstancias Este recurso procedia en toda clase de juicios, siempre que se trate de sentencia definitiva, dentro de los tres meses que sigan al dia de la notificacién: a) Cuando se hubiere notfieado el empla- ™ Diccionario de Derecho Procesal Chl, pig, 96, TBORIA. GENERAL DEL PROCESO 28s zamiento al reo, por edictos, y el juicio se hubiere seguido en re- beldia. 4) Cuando no estuvieren representados legitimamente cl actor 0 el demandado, 0 siendo, incapaces, las diligencias se hu- biesen entendido con ellos. ¢) Cuando no hubiese sido emplazado cl demandado conforme a la ley. d) Cuando el juicio se hubiere seguido ante un juez. incompetente, no siendo prorrogable ta juris- diceién Este recurso como los demas extraordinarios que hemos expues- to someramente, no figuran en la legislacién mexicana actual. Son parte del derecho histérico de México, figurando como institucio- nes de su pasado. R. de Pina y C. Larrafiaga," consideran sin embargo que la supresién de esios recursos no ha constituido, un acierto. Ni la casacién ni la revisién son incompatibles, con la cexistencia del juicio de amparo, No existe obsticulo alguno, desde cl punto de vista procesal, que pueda dificultar el funcionamicnto del juicio de amparo junto a los recursos extraordinarios de casa cin y revisién, La creacién de salas de revisién y casacién podra ser, por el contrario, 1a formula adecuada para impedir en lo su- cesivo “el rezago”, enfermedad crénica de la justicia en su mani- festacién suprema, La revisién de que hablamos es un recurso que no tiene semejanza alguna con el de revisién que regula la Ley de Amparo, ni con la revisién fiscal, 3, INCIDENTE DE NULIDAD DE ACTUACIONES Para impugnar las actuaciones procesales, en las que ocasi nalmente estin involucradas algunas resoluciones (autos 0 decre- tos), por adolecer de vicios 0 defectos en su realizacién, en la mayoria de leyes procesales, se reglamenta un procedimiento para impugnar su validez y obtener su anulacién, normalmente conoci- do como iincidente de nulidad de actuaciones (nuestro Cédigo Lo- cal Civil lo reglamenta en los articulos 63 al 66 y el 80). Se plantea mediante una demanda (incidental), sefialando los vicios 0 defectos de la actuacién, debiendo acompafiar 0 scflalar las documentales, una vez. admitida, $e ordena emplazar a la parte contraria para que conteste en el término de tres dias, transcurri- do, con o sin contestacién, se citaré a una audiencia en la que "Op. eit, Derecho Procesal Civ 286 Ost VIZCARRA. DAVALOs ofrecerin y desahogarin las prucbas, se formulariin alegatos y se pronunciaré la sentencia interlocutoria correspondiente, Si al con. {estar Ia contraria se allana a la nulidad, ésta se declarara de plano, Planteado el incidente puede suspender el proceso hasta la deci. sién bien no se suspendera y se resolvera hasta la sentencia definitiva (como ocurre en nuestra Ley Procesal Civil Local) 4. EL JUICIO DE AMPARO En nuestro sistema juridico nacional, el juicio de amparo es igualmente un medio de impugnacién de las resoluciones jurisd cionales dictadas en el proceso, generalmente las de caricter defi- nitivo, cuando implican una violacién de garantias de las partes 0 de un tercero. El amparo es proteccién 0 defensa contra una imposicién o exigencia que restringe 0 desconoce nuestros derechos constitucio- nales. En la legislacion mexicana el juicio de amparo es el proc: 0 instituido en 1a Constitucién (arts. 103 y 107) con el caricter de controversia judicial, para que las personas puedan obtener que las autoridades de todo orden, con las excepciones que la ley con. signa, respeten y hagan respetar la efectividad de las. garantias constitucionales. Por lo tanto, “el juicio de amparo es el medio especifico y concreto de evitar 0 corregir los abusos 0 las equivo- caciones del poder piblico (autoridad) que afecten los derechos del hombre”. Expliquemos en detalle esta doble definicién Es una controversia, porque enfrenta a una autoridad determi- nada, con la persona que reclama contra esa autoridad que viola 0 intenta violar las garantias constitucionales. Es judicial, porque se desarrolla ante una autoridad de esa cla- se, en forma de juicio, o sea mediante la demanda del promovente, la resolucién judicial que la admite y manda tramitarla, la contesta- cién de la autoridad responsable, Ia citacién de la contraparte del actor, que se designa como el tercero perjudicado, la audiencia fn que los interesados exhiben sus prucbas y producen sus alega- ciones, y la sentencia, Los jueces y tribunales que deben conocer del juicio de amparo estin especificamente designados en la Consti- tucién (arts. 103 y 107, fracciones V, VI, VIL, VIII y XII) " Citando a Luis Basdrech y su obta EI jucio de amparo, pig. 12. ‘TEORIA GENERAL, DEL PROCESO 287 En general, todas las personas tienen ol derecho de pedir am- aro contra los actos de una autoridad que viola o intenta violar sus garantias constitucionales; consiguientemente, el juicio de an paro puede ser promovido por cualquier individu o persona fi a, cualquiera que sea su edad, su sexo 0 su estado civil, aunque no sea mexicano, sino extranjero, de cualquier macionalidad, por- que las garantias constitucionales abarcan sin disincién alguna a todos los hombres y a todas las mujeres que comsideren violadas sus garantias dentro del terrtorio nacional. Asi Se desprende cla- ramente del articulo 1° de la Constitucién, en lay parte que dice “En los Estados Unidos Mexicanos todo individhig gozara de las garantias que otorga esta Constitucién.” El ampsaro esta también al alcance de tas personas morales (de toda clase), que pretendan proteccién en el disfrute de sus derechos, pues aunque el precepto constitucional acabado de invocar alude expresameente a individuos ‘como seres humanos, 1a evolucién del amparo ha llevado a ta ley reglamentaria a extenderlo a las personas morales, tanto a las pri- vadas como a las oficiales 0 pliblicas (arts. 8° ¥-'90 de la Ley de Amparo). Segin el texto constitucional (art. 103), el juicio de amparo comprende a las autoridades mexicanas, sin ninguma distincién, por consiguiente, todas estén obligadas a someter sus actos a dicho inicio, cuando una persona reclame que han vieslado pretender violar sus garantias constitucionales. Sin embargx, la Ley Regla- mentaria, excluye expresamente del amparo tod0% Jos actos de la Suprema Corte de Justicia (art. 73, fraccién 1) y- algunos especifi- cos de otras autoridades (art. 73, fracciones Vil y ‘Viti El iimico objeto del juicio de amparo es conseretamente impo- ner a la autoridad el respeto de la garantia 0 de. Jas garantias del quejoso, dentro del marco de su reclamacién, a in de restablecer, por derecho y de hecho, el orden juridico, segiim, ¢| régimen esta- blecido en a Constitucién, a ese efecto, en el juiicio de amparo se diucida y decide st Ia autoridad responsable ha justado 0 no ss actos al procepto o a los preceptos constitucionaless referentes a las garantias individuales que sean aplicables en © caso que haya motivado la promocién de dicho juicio, aun cuanso no sean preci- samente los invocados en a demanda. Si la scntencia reconoce y declara Ia existencia de la violacién, la intervengeién del juez. del amparo se extiende hasta obligar a la autoridad Responsable a que 288 JOst. VIZCARRA AVALOS restituya al promovente ol uso y disfrute de su garantia, con total Independencia de la legitimidad de sus respectivos derechos civi- les, que perfectamente pueden serle disputados por cualquier inte. resado, ante la autoridad competente El juicio de amparo no es el medio exclusive y ‘nico, para obtener que sean respetados los derechos del hombre, pues perfec tamente cualquier autoridad puede reparar la violacién de garan. tias en que han incurrido, cuando la ley permite que el afectado la reclame ante la propia autoridad, mediante una reconsideracisn en el orden administrativo 0 una revocacién en el judicial, o que Promueva su correccién ante el superior respectivo, mediante la revisin en los asuntos administrativos y la apelacién o Ia queja cn los judiciales; por eso el amparo procede solamente contra las violaciones que ya no pueden ser reparadas por la autoridad responsable ni por su superior. Es enteramente humano que en el ejercicio de sus funciones, ‘cualquiera autoridad incurra en exceso 0 defecto, ya por error, ya Por ignorancia, ya por interés y precisamente para corregir esa equivocacién 0 ese abuso, cuando afecta los derechos protegidos Por las garantias constitucionales, nuestra ley: suprema ha insttui- do el juicio de amparo, que en principio proporciona a todo inte- resado la manera fécil y répida de conseguir que sus derechos sean respetados por la autoridad, que de buena o de mala fe los afecta itegalmente.* Como consecuencia de la resolucién que concede el amparo al uejoso, cuando es parte o tercero en el juicio donde emanan los actos reclamadas, se revoca(n) la(s) resolucién(es) que lo motivs, incluso en ocasiones se anula lo actuado en el proceso natural. De acuerdo con esta conclusin, el juicio de amparo es también un medio de impugnacién de las resoluciones jurisdiccionales Luis Basdrech, de su obra citada, pig. 14 INDICE UNIDAD 1 PRINCIPIOS GENERALES DEL DERECHO PROCESAL Sumazio Osrerivos 1. La FUNCION JURISDICCIONAL. DEL ESTADO 1.1. Concepto 1.2. Supuestos de su ejercicio 1.3. Contenido Teoria General del Proceso y Derecho Procesal 2.1, Concepto 22. La norma procesal ‘AuroNoMia DEL DERECHO PROCESAL LAS FUENTES DEL DERECHO PROCESAL 4.1. Generalidades 4.2. Fuentes histéricas 4.2.1, Referencias histrieas 4.2.2. Los magistrados 4.23. Derecho romano 42.4. Enire los germanos 4.2.5. Romano canénico 4.2.6. Legislacion espafiola 42.7. Derecho colonial Fucntes legislativas Fuentes constitucionales 4.4.1. Igualdad ante Ta ley 4.4.2. Supresion de titulos de nobleza y privilegios 4.43, Juez natural 4.44, Garantia de audiencia y defensa 4.4.5, Inviolabilidad de Derecho y defensa Fuentes subsidiarias 45.1, La jurisprudencia 289

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