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pulares y Porgy and Bess” Ab irse el incipit?, y oigo esos 4 >mpeta hasta los heroieos agi de las euerdas y dex densa ego cantante del piano (en la ver. phony Orchestra, dirigida y acom- pdné Previn, disco EMI 7 47161 2, elaterra).Y,sin dejar de ofr una de = musicales de culto, interrumpo 20 en la laptop y tomo otro libro de poems, y encuentro el comienz0 e parece escrito sobre el fondo mu nin Blue on que pucblas el aire la brisa por wces por la ciudad devuelta sntado a mi lado y esenchando Blue, se vuelve hacia mi, ruboriza. nal nu rapsodia... Eeeeh... Esté muy dosé de Ia Colina A MANERA DE PROLOGO La casi totalidad de los libros sobre im » bien de divulgacién 0 histéricos o téenicos o biogeaticos 0 bien, en 3s reeientes, polémicos. Algunos analizan géneros. otvos escuelas, otros mas obras individuales. Todos tienen algo dle catedra o de tesis. Yo he buscado durante muchos aiios alg roque me conversara acerca de mniisica, tal como lo haria un amigo, Le 10 lo he hecho a lo largo «le mi vida, con uuchos amigos. Encontré algo en Roland Manuel, algo igo en Wilfred Mell Zopand o en Constant Lamber escritos de Stravins! la, enconteé bastan- te en Colin Wilso: Pero siempre faltal nal. un nivel més fami 1, Entonces recordé lo que me dijo Mirquez (otro gran adieto a la acerea de uno de sus libros: que como e1 él huh rib Dije antes adicto, Si, este es el libro de um adieto a ka nicho en Bal y Gay. go: im cierto tono eonversacio aur © cercano, mayor eelectieisino tun libro que bia, de ra querido leer y nadie se lo ese 9 AY lo mismo decid ntisica que, alo largo de mas de cuarenta afios, ha recibi. do de ella mucho placer, Como todo adieto, quiero ahora compartir ese placer con otros. Y diseutir un poco, sit afin de disputa, sobre cosas que han ido surgiendo en mi cabeza a lo largo de esos afios. Charlar de misica, eso Claro esti que toda charla es arbitraria y subjetiva, Este libro no pretende ser otra c MUSIC © cosas « Je esos ails. charla es arbitraria y subjetiva. nde ser otra cosa IGA MUSICA CLASICA DE ESPACIO Y TIEMPO El fenémeno més importante de la miisica moderna y pordniea es su espacializactin. Lo cual equivale decir su destemporalidad. Esto se debe por un lado a fa ruptara de su pulso, debida a la fragmentacién de sus ele mientos ritmicos de continuidad, y, por el otro, a fa eon centracién de lo estdtico debida a la intensificacidn de eier- tos elementos melédicos y arménicos. El resultado es una nisiea que, en el sentido temporal, no va a ninguna parte, y puesta alli” de ir naciendo de sf misma, Laexplicavion podria encontrarse en lo observado acer ca de la deshumanizaeion del arte por Ortega y Gasse Porque si hay una dimensi6n especifieamente humana es la del tiempo. ¥ el art alejarse de lo humnano y crear su propio dmbito, se aleja necesariamente de esta dimension. Cabria observar que, en el siglo XX, la literatura y el pen: samiento producen grandes meditaciones sobre el tiem po: Proust, Bergson, Heidegger, Borges. Quizas existis el decir del ocaso presentimiento de su ocaso en el arte —es el deseo de | Je pensamiento y diseurso para s super vivencia, En todo caso estas med jones sobre el tiempo hubieran debido ser una advertencia Advertencia tardia para la mtisica. Porque ett el eroma. tisino wagneriano comienza el tiempo a perderse. Wagner Jo hizo maerosedpico, Es demasiado. ¥ los serialistas lo vuel ven mieroscépico. Es también demasiado. El tiempo exten: didoo concentrade a tal grado ya no es pereeptible como tal (como durce hergsoniana Quizé la gran evalucidn que la intisica espera sea nada mds ésta: la reintegracién de su temporalidad Parece mentira «jue evernos tan poce tiempo (poco mas de medio siglo] de espacializacién de la umisica. ¥ ya re sulla intolerable SOBRE LA GRACIA La gracia es una dimensién especial del talen sico, un don independiente de su categoria o su impor tancia, Utilizando una terminologia reaeuitada por Lorea podriamos dividirla en duende, dngel y encanto Ninguno de Jos tres es una constante de la obra: som formas de una gracia especial q co, Ademés no son diferentes matices, ni diferentes gra dos, sino exencizts diferentes. Y como tales, imposibles de definir, Sélo con la intuicién — que es otra forma de gra- cia. se las puede percibir y delimitar: Como hablar de ellos? Aragén, incapaz de definie e lnumor, lo cered adiirablemente dando ejemplos, Vayan pues unos ejemplos, necesasiamente arbitrarios, para es tablecer un intento de elasifieacidn de algunos muisicos, de acuerdo con estas tres categorins Miisicos con encanto serian entre otros: Mendelssohn, Chausson. Borodin, Bizet, Delius, Granados, Copland, Prokdtiev, Haendel az y Barber a veces, Muisicos con éngal Debussy. Schubert, 4 Monteverdi, Fauré, @ Tchaikovski y Rachiy gel ~ le cdlfnes Miisicos con duenme Soler, Roussel, Stravijskia Algunos de estos, abarean en distintas: ra (Beethoven por ejeng Pero hay también tits sieos— que carece! cos que no se caraelerizam duende y a-veces caremen toes otro, sus euslidades nnisicos “para mnisiege Sam Bruckner, Berlioz, Silla! Schinberg, Nielsen, St Williams, Honegger, Kise De TRADER En defensa del “evoluciel que es verdad que una i vacia cuando solamente Ambos extremos cancelaty Bi posible encontrar satisfies problema es que mas misieg ars la mnisica, Porque en el eroma- enza el tiempo a perderse. Wagner s demasiado. Y los serialistas lo vuel- mbién de 9 grado ya piana) Jado. El tiempo exten: > es perceptible como poralidad. Jeremvos tan poco tiempo poco mis ecializacion de lam AY ya re- RE LA GRACIA sién especial del talento de un mi jente de su categoria o su impor- yerminologia reacuiiada por Lorea duende, dngel y encanto. de la obra: s aposibles de que es otra forma de gra y delimitar. ? Aragén, incapar de definir ef sblemente dando ejemplos. Vayan rbitrarios, para es- lasificacidn de algunos misicos, de tros: Mendelssohn, dos, Copland, Prokofiew, Haendel, Saint-5: y Barber a veces Miisicos con angel serian por ejemplo Bach, C! Debussy. Schubert, Mozart, Schumann, Brabus. Berg, Monteverdi, Fauré, el iltimo Beethoven y —a veces. ns, Britten, Dvorak, Vivaldi kkovski y Rachmaninov. Un tipo especial de angel angel ~ le corresponderia a Wagner. icos con duende podrian ser Ravel, Satie, Falla, Roussel, Stravinski, Bartok, Janacek 0 Musorgski Algunos de estos nniisicos saltan a veces las fronteras y abarcan en di bras o en distintas etapas de su e 9 (Beethoven por ejemplo) diferentes formas de Pero hay también misicos — y entre ellos grand sicos que carecen de estas tres formas de la gracia. M cos que no se caracterizan por el encanto, el angel o el duende ya yeces carecen por completo de ellos. Su tale to es otro, sus cualidades diferentes, mtisicos “para miisicos”, Son — zest usted de acuerd Bruckner, Berlioz, Sibelius, Walton, Mabler, Hindemith, Sehiinberg, Nielsen, Stockhausen, Bloch, Haydn, Vaughan- Williams, Honege Paganini, Rimsky-Korsakov. . DE TRADICION ¥ NOVEDAD 9” musical debo re es verdad que tna miisica acaba por vac ya no nos trae ninguna sorpresa, Pero resulta igualmente vacia euando solamente esté constituida por sorpresas. Ambos exiremos cancelan Ia dialéctica. Y no me parece musical fuera de ella, EL aye uno y menos sorpresas posible contrar satist lemasiado bien encuentra. En la tradicional, por conocer suis estructurass y en la de vangy ardia, porque todas sus innovaciones dejan automiticamente de serlo, La desgra cia de Ia vanguardia es que se basa en la virginidad, ¥ ka pierde en cada primera audicién. La gran mtisiea, como el verdadero amor, se basa en el conocimiento y den tro de ese conocimiento— en fa eapacidid de novedad. Todavia es capaz de sorprenderme miis Debussy que Stockhausen 0 Cage. Entre ir a un concierto ‘casi todos, en México, muy con- vencionales y ne demasiado convineentes) o escuchar la obra en diseo, prefiero cien yeces lo segundo, A cambio de uma muy ocasional catarsis de verdad (recuerdo ape has tres © cuatro en diez aiios) puedo tener la obra justa para el énimo correspondiente. ¥ la versién de mi gusto. Y la nepeticion a mi antojo, Ademxis, un buen lugar en un concierto « tanto como un LP, lo cual no es un factor desde Hay mnisieas para escuchar en las mafianas y misieas para escuchar en las tardes y las noches, oss, precisas, bien dibujadas, ands ritmieas y menos sen. timentales (Stravinski, Prokefiex; Roussel, Jinacek. Bach En su mayoria, obras modemas y contemporineas. Las segundas mds de penumbra, divayantes, imprecisas, mis melédicas y sentimentales (Chopin, Brahms, Schumann, Delius...), En su mayorfa obras romiaticas y postomnnt cas, Mafiana y tarde, veces, surge ese estado de dnimo en que uno quiere oir a Berg 0 a Bloch, Cuando se mezela el gusto con cierto cosquilleo de la inteligencia Reescucho al primer Shostécovich. (Qué gran miisico! Léstimsa, LA MADUREZ La ami poesia no lo es necesariamente. ica es, como la pintura, un arte de madures. La Quizas esto se deba a que los dos primeros lenguajes son de aprendizaje posteriog largo y dificil yal eabo es una extension EL idioma eserito {que al f del hablado y del pensado} es de aprendizaje muy anterion, mucho mas cotidiane y viene mds dado, Por eso, @ veces desde kis primeras obras, un poeta lo domina casi por completo, Hay en Ia historia muchos poetas mny jévenes Rimbaud, Keats, Hak res y miisiens. ¥,en el easo de haberlos (Picasso, Modigtia in, Shelley...)s hay pocos pinto: ni Bizet, Mendelsselin, Mozart, Schubert), su obra primera 5 casi indefectiblemente muy inferior a la de su madurez, cosa que no sucede necesariamente cop los poctas, ni si: quiem con Jos eseritores en general (aunque es evidente que mientras nas complejo es el género literario es tardio su florecer dentro de la cronologia de cada aut asi, la novela requicre también una especial madurer En la intisica madurar es fundamental. Porque repre: senta necesariamente un dominio de su lenguaje y una 8 aE yor Siiavinery— Ne ado que las obras pri posibilidad mayor de expresin. Al mmeras son « veces eseasamente dignas de las dltimas del compositor. En Mozart, por ejemplo, las obras infer res al K. 300 ya no soportan Ficilmente la audieién. En Beethoven, la primera etapa tampoco, siendo la tercer y tltima, con mucho, la mejor (especialmente las tiltimas smo ocurre con Wagner: Sonatas ydltimos cuartetos).¥ 101 que diferencia abismal entre £7 Bugue fantasia y Parsfa No conozeo exeepeidn a la regla. Si pudiéramos hacer de calidad-madurez ve- nina especie de grifiea prome ‘amos que, indefectiblemente, a mayor mimero de opus y de aftos, mejor obra. Es obvio que éte no es un abso Into: en el curso de su maduracién un compositor cre muchas veces inna gran obra gue destaca entre las de st pe rind y puede ser muy superior a algunas creaciones pos teriores. Pero, ann en este caso. este to de obras ex slempre ands numeraso en Te madures que en tas primeras ekapas Joinen ustedes enalquice misico: Braluns, Schumann R. Strauss, Chopin, Haydn, Falla 0 Smo se apliea el mismo principio Saint-Saéns, Debus Tchaikovski y ver No conozco mas que dos claras exeepeiones: Stravinski y Shosticovich. Da la impresidn de que Stravinski se see rane obras progresivamente después de sus primeras hasta la Sinfone de los Salnnas — 1930 — aproxiniadamens Sinfonia en © eon ain breve renacer hacia 1940-1945 en su ddoy su Sinfonia en tres movimnientos. Bu. cuanto a Shostico: vieh, cuyas primeras obras fueron tan brillantes (La Sir ' fonia no. 1 ex de 1925 y el Concierto para piano y tronipeta de 193%), su problema es otzo: fue “eomprimido” y de- formnado por las antoridades soviétieas hasta convertirse en Srmulas grandilocuentes. K 1 compositor de tra todavia un justo bakance entre la presion interna y la externa con su totalmente, com ile para cello, por jetties Quiza valgelfierwe la regla Ene No puedo realletite nica, que descolldizsa de la mnisica, quie mae El juicio deat mente tautolégivns € en un juicio existent son). Una obraiiie un ser humane qe =e ese ser hnumano de viene la tantologige ie lo hace, La biografin mde conocida. La obese dice “me gusta Biiiliesst do la obra por el High! expresién ni un “ti profunds y esencigd a Al juzgar la obtat humano. El amoral amor por e} hombige De lo contrarios -expresin. Al grado que las obras pri nte dignas de ejemplo, las ob ficilmente la audie ra etapa tampoco, siendo pecialmente las ismo oeurre cor Wa Bugue famtasma y Parsifatt cin a la regla, Si pudiéramos hacer -4 promedio de ealidad-n ihiemente, is tiltimas del En tereera \lurez ve- yor miners de opus que 6 Es obvi su maduracién un compositor erca n obra que destaca entre y superior este caso, este tipo de obras ex siempre durex queen las primers etapas. imupresion de que Stravinski se se és de sus primeras grandes obras Salmos —1930~ aproximadamen- er hacia 1940-1945 en su Sinfonia en ovinnientes. Ean cuanto a Shostic bras fueron tan brillantes ‘La Sia el Concierto para piano y trompeta mes otre fue ‘comprimido” y de- les sovidticas hasta convertirse Srmulas grandilocuentes. Enewen: lance entre la presién interna y la extema con st 3" sinfonia (1937) y Inego se derrumba easi totalmente, con algunos logros aislaulos (el Concierto no. 1 para cello, por ejemplo} Quiza valga decir que dos excepeiones confirman la regla EL JUICIO EXIS' CIAL No puedo realmente jucgar una obra musical por su té nica, que deseonazco, o por su importancia en la h de la mtisica, que me deja tivo, nado como yo resulta curiosa- tor El juieio de un a nte tautoldgico, Creo que, fundamentalinente, se basa en un juicio existencial (como el que defiende Colin Wil son), Una obra me gusta porque e transmite algo de tun ser humano que me gusta. Ahora bien, : jose yo qu ese ser humano me interesa, me atrae 0 me se Viene la tautologia: lo sé precisamente porque su obra lo hace. ce? Y aqui a biografia no sélo es seeun 's muchas veces des- aje comatin -sustituyens dad de idad timos do la obra por el auton No e expresién ni un “modo de hablar”: revela profimda y esencial que, aun sin formularla, s Al jugar la obra cualquier obra juzga nano. El amor al arte es, en definitiva y sobre todo, an wos aun ser nor por el hombre, De lo com n

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